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MANIFIESTO
1) Regreso masivo a clase. Proponemos el regreso masivo porque sencillamente las escuelas son los
espacios naturales de encuentro de los trabajadores de la educación y quedarse en la casa significa
quedar aislado y sin la capacidad de agrupar fuerzas para luchar por los derechos laborales.
2) Demandar del gobierno nacional presidido por Nicolás Maduro Moros, decretar, el aumento de
380$ de sueldo básico indexado (Artículo 91. CRBV). Proponemos esta cantidad porque combinada
con los beneficios contractuales que serán conseguidos por la nueva Convención Colectiva, SIEMPRE Y
CUANDO, sea elaborada por los propios trabajadores de la educación, alcance a convertirse en un
salario acorde con las necesidades básicas del educador y su familia, nivelándose así, como reza el
artículo 91 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, cada vez que aumente la tasa
de inflación.
3) La nueva Convención Colectiva tiene que surgir, necesariamente, del seno del debate protagónico y
participativo de los trabajadores de la educación situados en cada escuela del territorio nacional. Este
proceso sería la única garantía de lograr la recuperación y la defensa de los derechos laborales de las
maestras y maestros, derechos que están establecidos claramente en la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela.
Por lo tanto, el llamado es, a todos los trabajadores de la educación: activos, jubilados y pensionados,
pero también a las madres, padres y representantes, a la familia venezolana en general, y a todo el
movimiento de los trabajadores venezolanos, para que unamos, articulemos y hallemos una fórmula
entre todos de demandar un aumento salarial que cubra y beneficie a todo el pueblo trabajador. De
esta forma, estaremos defendiendo la continuidad de nuestros modelo público de educación frente a
los planes de privatización del aparato de producción de conocimiento más importante con el que
contamos; la educación republicana. Por consiguiente, la defensa de un salario digno y justo, como
está consagrado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, significa , al fin y al cabo,
el cuidado y la tranquilidad de la familia venezolana, que en síntesis se traduce en el cuidado, la
tranquilidad y el desarrollo de toda la nación.