Principio 4: Nivele la carga de trabajo (heijunka)
Siguiendo la estela de Dell Computer y de otras empresas de éxito, muchas empresas en
América se apresuran hacia un modelo de producción de fabricación bajo pedido. Por desgracia, muchos clientes son impredecibles y los pedidos reales cambian mucho de semana a semana o de mes a mes. Es imposible gestionar una operación lean de esta manera. Un modelo estricto de fabricación bajo pedido crea montañas de inventarios, problemas ocultos y al final una menor calidad y los tiempos de entrega finales puede que aumenten a medida que la fábrica se haga desordenada y caótica. Toyota ha descubierto cómo crear la operación más lean y como resultado les da a sus clientes un mejor servicio y una mejor calidad equilibrando el programa de producción y no fabricando siempre bajo pedido. Los directivos y empleados de Toyota usan el término japonés muda cuando hablan sobre el despilfarro y la eliminación del muda es el foco de la mayoría de iniciativas de producción lean. Pero hay otras dos M igual de importantes para hacer que un trabajo sea lean, y estas tres M encajan como un único sistema. El documento del modelo Toyota se refiere a la “eliminación de Muda, Muri, Mura”. MUDA: Sin valor añadido. La M más familiar incluye los ocho tipos de despilfarro previamente vistos. Estás son actividades que generan despilfarros al alargar los tiempos de entrega, causar movimientos extras para conseguir piezas o útiles, crear inventarios en exceso o resultar en cualquier tipo de espera, MURI: Sobrecarga de trabajo del personal o de las máquinas. El Muri fuerza a una máquina o una persona más allá de sus límites naturales. La sobrecarga del personal resulta en problemas de seguridad y de calidad. La sobrecarga de las máquinas resulta en averías y defectos. MURA: Desnivelado. El desnivelado resulta como resultado de un programa de producción irregular o de volúmenes de producción fluctuantes debido a problemas internos, como averías, falta de materiales o defectos. El Muda será un resultado del Mura. Es interesante que el enfoque en el Muda sea el método más común de “implementar las herramientas lean” porque el despilfarro es fácil de identificar y de eliminar. Pero en lo que muchas empresas fallan es en el proceso más difícil de estabilizar el sistema y crear un “nivelado”, unos flujos de trabajo lean verdaderamente equilibrado. Éste es el concepto de heijunka en Toyota, nivelar el programa de trabajo. Es quizás el principio del modelo Toyota menos intuitivo. Conseguir el heijunka es fundamental para eliminar el mura, que a su vez es fundamental para eliminar el muri y el muda. Empezar y parar la producción, una sobreocupación y luego una subocupación es un problema porque eso no nos conduce a la calidad, a la estandarización del trabajo, a la productividad o a la mejora continua. Muchos líderes de Toyota piensan de la siguiente manera: “Preferimos ser lentos y constantes como una tortuga que rápidos pero avanzado a saltos como una liebre”. Heijunka: nivelando la producción y los programas El heijunka es el nivelado de la producción tanto por volumen como por mezcla de productos. No fabrica los productos según el flujo real de los pedidos de los clientes, que pueden subir y bajar rápidamente, sino que coge el volumen total de pedidos en un período dado y los nivela de modo que cada día se haga la misma cantidad y la misma mezcla de productos. El enfoque del TPS desde el principio fue mantener pequeño el tamaño del lote y fabricar lo que el cliente (externo o interno) quiere. Errores en programas sin nivelar: 1. Normalmente los clientes no compran productos de un modo predecible. 2. Hay un riesgo de productos sin vender. 3. El uso de recursos no está equilibrado. 4. Se transmite una demanda desnivelada en procesos agua arriba. En el modo de proceso por lotes, el objetivo es lograr economías de escala para cada máquina individual. Beneficios al nivelar la programación: 1. Flexibilidad para hacer lo que los clientes quieren cuando lo quieren. 2. Riesgo reducido de productos sin vender. 3. Uso equilibrado de personal y máquinas. 4. La demanda se transmite suavizada a los procesos aguas arriba y a los proveedores. Aunque parezca poco realista poder aplicar la nivelación en todas las circunstancias, hace varias décadas Shigeo Shingo demostró en su estudio de tiempos que eso es exactamente lo que uno debe hacer. Al estilo de Toyota analizó con profundidad el proceso de cambio de útiles en grandes prensas de estampación y descubrió que la mayor parte del trabajo realizado caía en dos categorías: era muda o algo que podía hacerse mientras la prensa estaba aún fabricando piezas. A lo largo de los años, el cambio rápido de útiles se ha convertido en una especie de deporte en Japón, como si fuera el equivalente del rodeo norteamericano. Nivelando el programa: el rol del inventario El nivelado del programa tiene grandes beneficios en todo el flujo de valor, además de darle la habilidad de planificar meticulosamente todo detalle de la producción y de estandarizar los métodos de trabajo. Los mejores proveedores de Toyota también trabajan bajo la hipótesis de que la demanda de Toyota de sus piezas estará nivelada. Eso es un riesgo, porque al no mantener inventario de producto acabado quedan totalmente expuestos a variaciones bruscas en el volumen y mezcla de productos de sus clientes. Ellos pueden hacer eso y estar tranquilos, porque Toyota es un cliente muy fiable y nivela su programa de fabricación. En caso de una demanda con demasiada fluctuación, los expertos en el TPS le recomendarán a menudo mantener como mínimo un inventario pequeño de producto acabado. Eso parece contradecir el pensamiento lean. Teóricamente, las soluciones más lean seria fabricar bajo pedido y expedir sólo lo que quiera el cliente. Muchas veces es necesario un pequeño inventario de producto acabado para proteger de subidas y bajadas el nivel del programa de producción de un proveedor debido a cambios bruscos en la demanda. Puede que nos parezca un despilfarro, pero gracias al despilfarro de tener algún inventario de producto acabado, uno puede eliminar mucho más despilfarro en todo el proceso de producción y de la cadena de suministros, si se mantiene el nivel de producción. “Fabricación bajo pedido”, sin embargo, Heijunka Una de las soluciones convencionales de fabricación bajo pedido es mantener un inventario de automóviles en muchos concesionarios cuando se cursan pedidos que encajan con esos modelos. En respuesta a ese desafío, Toyota ha diseñado una solución que le permitirá nivelar la producción y al mismo tiempo fabricar bajo pedido. El punto importante aquí es que la cultura Toyota no permite que sus directores e ingenieros digan: “Eso no se puede hacer aquí”. El principio rígido del heijunka no dura rígido mucho tiempo. Heijunka en las operaciones de servicios Nivelar un programa de producción es más fácil en una fabricación de gran volumen que en el mundo de los servicios, normalmente de bajo volumen. ¿Cómo se nivelan los programas de una operación de servicios en la que los proveedores responden a los clientes y en la que los tiempos de entrega del servicio varían mucho de un caso a otro? Las soluciones son similares a las soluciones en fabricación: 1. Encaje la demanda del cliente en una programación nivelada. El tiempo es dinero en las operaciones de servicios. 2. Establezca tiempos estándar para la entrega de los diferentes tipos de servicios. Toyota ha sido capaz nivelar el programa del desarrollo de nuevos productos, aunque los plazos don meses e incluso años. En la mayoría de los casos, Toyota hará modificaciones menores en un vehículo cada dos años, añadiendo prestaciones y cambiando su estética, y rediseñará el vehículo cada cuatro o cinco años. Planificar cuándo se rediseñarán los vehículos sería inútil si los tiempos de entrega requeridos para diseñar y desarrollar realmente un vehículo fuesen impredecibles. Ahí es donde Toyota tiene una gran ventaja sobre algunos de sus competidores. A diferencia de algunas empresas de automóviles que retrasan el inicio de producción por meses e incluso un año, Toyota es como un reloj. Los hitos del plan de desarrollo se cumplen prácticamente con un cien por cien de exactitud. De modo que el plan nivelado se hace realidad. Toyota ha estandarizado su sistema de desarrollo de producto y los mismísimos diseños de productos, hasta el punto de que los ingenieros pueden entrar y salir a la perfección en los proyectos de desarrollo, porque esos ingenieros tienen un conjunto de capacidades técnicas estandarizado similar al de otros ingenieros de Toyota y años de experiencia trabajando en el sistema de Toyota. Es posible nivelar la programación de las operaciones de servicios. Pero existen algunos requerimientos básicos. Para controlar los plazos de entrega debe seguir todo el resto de principios del proceso del modelo Toyota-flujo, pull, estandarización e incluso la gestión visual. La estandarización es crítica para controlar los plazos de entrega y también para colocar o sacar a gente de los proyectos a fin de atender las cargas de trabajo máximas. Debe también desarrollar asociaciones estables con empresas externas que sean capaces y en las que pueda confiar. Juntando el nivelado y el flujo: una venta difícil A cualquier empresa le gustaría tener un volumen constante a lo largo del tiempo de modo que su carga de trabajo fuese constante y predecible. Pero si el departamento de ventas no se comporta como la red de ventas de Toyota que coopera para evitar picos en la demanda, ¿qué se puede hacer? No podemos dejar de enfatizarlo. Para lograr los beneficios lean del flujo continuo, necesita el Principio 4: Nivelar la carga de trabajo (heijunka). Eliminar el muda es sólo un tercio de lo necesario para lograr el flujo. Son igualmente importantes eliminar el muri y suavizar el mura. El Principio 4 se centra en el muri y el mura nivelando su volumen y mezcla de productos y lo más importante, nivelando la demanda de su gente, equipos y proveedores. El trabajo estandarizado es más fácil, más barato y más rápido de gestionar. Sin nivelar el trabajo, los despilfarros tienden a aumentar de modo natural a medida que la gente y el equipo se ponen a trabajar como locos, para luego parar y esperar como una liebre. Trabajar según un programa nivelado se aplica a todas las áreas de Toyota, incluyendo ventas. Todo el mundo en la empresa trabaja para lograrlo.