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Tema 6: Área de producción

1 Producción y proceso productivo

1.1 Concepto de producción


En sentido económico, producir es crear utilidad o aumentar la utilidad de los bienes para satisfacer
necesidades humanas. De acuerdo con esta definición, todas las empresas producen,
independientemente del sector al que pertenezcan, ya sea un bien o un servicio.

Desde una perspectiva menos genérica, se entiende la producción como una etapa concreta en la
actividad corriente de una empresa que supone la transformación, mediante un proceso, de unos
recursos básicos en un resultado final capaz de satisfacer necesidades.

En ocasiones, también nos referimos a la producción como la cantidad final de bienes que obtiene una
empresa en un periodo.

Podemos definir la producción desde diferentes puntos de vista:

-Producción en sentido genérico, económico o amplio. Es la actividad económica global que realiza
un agente económico (empresa), mediante la cual crea un valor susceptible de ser transferido
(vendido).
-Producción en sentido específico, técnico-económico o estricto. Es una etapa concreta de la actividad
de la empresa que consiste en el proceso de transformación de unos elementos o factores de entrada
(inputs) en un conjunto de salidas (outputs).
-Producción como resultado del proceso productivo de la empresa. Es la cantidad de outputs o salidas
obtenidas en un proceso de producción durante un periodo de tiempo determinado.

1.2 El proceso productivo


El proceso productivo es la secuencia de actividades necesarias para la elaboración de un producto.
Para conseguir un producto es necesario que la empresa cuente con unos factores de producción:
recursos naturales, capital y recursos humanos, denominados inputs o entradas. El resultado final del
proceso productivo son los productos, también denominados outputs o salidas.
En la fabricación de un producto se acostumbra a obtener diferentes productos semielaborados que,
unidos y transformados, darán lugar al producto final. Además, se producen residuos, que deben ser
eliminados siguiendo la normativa existente en cada caso.

Los procesos productivos se pueden agrupar en función de diferentes criterios de clasificación, como
la intensidad de la mano de obra, la extensión temporal del proceso, el grado de diferenciación del
producto obtenido, la configuración del proceso o la forma de satisfacer la demanda.
2 La tecnología y la innovación tecnológica (I+D+i)

Para producir es necesario poner en práctica unos conocimientos y unos procedimientos o formas de
producir.

La tecnología es el conjunto de conocimientos y procedimientos (o formas de producir) que


contribuyen a alcanzar un resultado (producto).

En la producción de un bien se pueden utilizar diversas tecnologías. Veámoslo con un ejemplo:

Las empresas innovadoras destinan una parte de sus recursos a realizar (I+D+i) para conseguir una
innovación tecnológica.
Las siglas I+D+i corresponden a los términos Investigación, desarrollo e innovación.

La investigación es la indagación que se planifica para obtener nuevos conocimientos científicos y


tecnológicos. El desarrollo es la aplicación de los resultados de la investigación para la fabricación de
nuevos productos o materiales, o para el diseño de nuevos procesos de producción. La innovación
tecnológica se consigue cuando los productos, materiales o procesos nuevos que se obtienen difieren
tecnológicamente, de forma apreciable, de los que existían anteriormente.

3 La función de producción: productividad y eficiencia

3.1 La función de producción


La función de producción relaciona los recursos utilizados en la producción (unidades de factores
productivos) con el producto total conseguido por el sistema productivo. Sintéticamente, esta relación
se expresa mediante la función (F), que da la producción (Q) asociada a cada nivel de utilización de
los factores productivos, trabajo (L) y capital (K).

Es decir, Q = F (L, K), donde las unidades en que se expresa esta relación funcional son unidades
físicas.
La función de producción relaciona la cantidad producida de un bien con los factores de producción
que han sido utilizados para ello.
En el ejemplo que se muestra en la tabla siguiente se estudia una empresa que fabrica zapatos a partir
de una tecnología que posibilita, para cada combinación de capital y de trabajo, una producción
específica.

En este ejemplo podemos comprobar que se puede conseguir un mismo nivel de producción con
diferentes combinaciones de trabajo y de capital: para producir 500 pares de zapatos diarios se puede
hacer uso de 5 trabajadores y 3 máquinas, o bien de 7 trabajadores y 2 máquinas. Esto muestra que
hay un cierto grado de sustitución técnica entre trabajo y capital, es decir, entre trabajadores y
máquinas.

También hemos de señalar que una función de producción representa una tecnología concreta; si
cambiamos de tecnología, la función de producción sería otra.

3.2 Productividad
La productividad mide el rendimiento de la producción. Podemos distinguir entre la productividad de
un factor de producción y la productividad global o total de la empresa.

La productividad de un factor de producción es la cantidad de producción de un bien que se le imputa


a una unidad de factor de producción (trabajo, capital).

La productividad del factor trabajo se obtiene dividiendo el volumen de producción entre una medida
del trabajo empleado (número de trabajadores o cantidad de horas de trabajo):

La productividad global de la empresa es la relación que hay entre la cantidad total producida y la
cantidad total de factores empleados.

La productividad global se obtiene dividiendo el valor de la producción (cantidad producida por


precio de venta) entre el coste total de los factores productivos utilizados:
Para calcular la tasa de productividad global se debe eliminar el efecto de la inflación, para lo cual es
preciso trabajar con precios constantes. Se toma como año base el año 0, es decir, la productividad del
año 1 se calcula con los precios de productos y factores del año 0.

3.3 Eficiencia de la producción


Como hemos visto anteriormente, la función de producción expresa la producción máxima que se
puede obtener con una combinación específica de factores de producción. Observemos el siguiente
ejemplo que muestra la producción de zapatos con cuatro tecnologías diferentes:

En los procesos B y C no se está actuando con eficiencia técnica. La tecnología D no se puede


comparar teniendo en cuenta solo factores técnicos, ya que utiliza más de un factor productivo y
menos del otro para conseguir la misma producción.

La eficiencia productiva es el concepto con el cual se califican o se valoran las tecnologías


productivas. Esto se lleva a cabo utilizando dos indicadores, la eficiencia técnica y la eficiencia
económica.

En el caso de las tecnologías A y D del ejemplo anterior,


y considerando los costes de los factores capital y trabajo
que se muestran a continuación, observamos que la
tecnología más eficiente económicamente es la D:
4 Los costes de la empresa

La producción implica la utilización de una serie de factores productivos que tienen un valor
económico cuantificable. El coste de la producción es el valor de los factores productivos utilizados
para la producción de un bien o un servicio.

La estructura de los costes de una empresa se relaciona directamente con la función de producción de
esa empresa. Por esta razón, hay que determinar los componentes de sus costes y analizarlos. El
estudio de los costes de la empresa se puede hacer según diferentes criterios, en función de lo que se
quiera analizar.

4.1 Costes fijos y costes variables


Si clasificamos los costes según su relación con la cantidad producida, vemos que hay costes fijos y
costes variables.

-Costes fijos son aquellos costes independientes del nivel de producción, es decir, que no varían si
cambia la cantidad producida. Es el valor de aquellos factores que a corto plazo son fijos en la
empresa (el alquiler del local, la amortización de maquinaria o la amortización de los edificios y
locales donde se realiza la actividad productiva).
- Costes variables son aquellos costes que varían en relación directa con el nivel de producción, es
decir, los costes de los factores que cambian con la producción (materias primas, trabajo, consumo de
energía).

A corto plazo, diferenciamos entre factores fijos y factores variables. Un cambio en las instalaciones
de la empresa o la adquisición de una determinada maquinaria, por ejemplo, son factores que no se
pueden ejecutar en un periodo corto de tiempo y, por tanto, se convierten en factores fijos. Sin
embargo, a largo plazo todos los factores se pueden cambiar y, por tanto, todos los costes son
variables.

-Los costes totales son la suma de los costes fijos y los costes variables: CT = CF + CV
-Se considera el coste medio como el coste unitario, el cociente entre el coste total (CT) y el nivel de
producción (Q): CM = CT / Q
-Los costes medios variables y fijos son, respectivamente, el resultado de dividir el coste variable
(CV) y el coste fijo (CF) entre el nivel de producción (Q): CMV = CV / Q CMF = CF / Q
-De todo ello podemos deducir otra fórmula para los costes medios: CM = CMF + CMV
-Otro tipo de coste es el coste marginal, el incremento del coste total
cuando aumenta la producción en una unidad: CMg = ∆CT / ∆Q

4.2. Costes directos y costes indirectos


Esta clasificación se utiliza cuando la empresa fabrica diversos productos y no resulta fácil asignar a
cada tipo de producto sus costes asociados.

-Costes directos son aquellos costes asociados directamente a la producción y que se pueden asignar
concretamente a cada producto, al ser fácilmente medible el número de unidades aplicadas. Por
ejemplo, la cantidad de materias primas que se utiliza o el número de horas de mano de obra que
trabaja una persona directamente en cada producto.
-Costes indirectos son aquellos costes que afectan al proceso productivo en general o que son
comunes a diversos productos y, por tanto, no se pueden asignar directamente a un producto, sino que
se han de utilizar criterios de asignación. Por ejemplo, el alquiler del local o el salario del personal
administrativo y directivo.

4.3. Estructura del coste de la empresa


La estructura del coste total de la empresa se considera como un diagrama de asignación consecutiva
de costes. En la Figura 6.4 se muestra esta estructura, en la que se diferencian los conceptos de costes
directos y costes indirectos.

El punto de partida son los costes directos de la producción (materias primas, trabajo y energía), que
configuran los costes primarios.

A partir de aquí se añaden los diferentes costes indirectos de la empresa: los costes generales
industriales (costes comunes al departamento de producción), que forman el coste industrial; los
costes de comercialización y del departamento de administración, que forman el coste de la actividad
o de explotación; y finalmente, los costes financieros (coste de la financiación de las inversiones de la
empresa) y los costes generales de la empresa (costes de dirección, de promoción o de mantenimiento
de los espacios físicos comunes). Todos juntos forman el coste total de la empresa.

5. Umbral de rentabilidad o punto muerto


¿Cuál es la cantidad mínima de producto que ha de fabricar y vender una empresa para no perder
dinero? El nivel de producción mínimo que debemos alcanzar para ello se conoce como umbral de
rentabilidad o punto muerto.

El umbral de rentabilidad o punto muerto de la empresa es la cantidad de producción vendida (Q*) a


partir de la cual la empresa comienza a obtener beneficios. También recibe el nombre de punto de
equilibrio. Los costes totales cuando se fabrica Q* son exactamente iguales que los ingresos que se
obtienen al vender la cantidad Q*.

Supongamos, para simplificar y poder calcular el punto muerto de manera sencilla, una empresa que
fabrica un solo producto y que conoce perfectamente el coste fijo (CF) y los costes variables unitarios
(Cvu) que implica su producción, así como el precio (p) al que puede venderlo una vez fabricado. En
este caso, el punto muerto se determina del siguiente modo:

Decisión de comprar o producir: umbral de producción


Hay empresas que venden los productos que fabrican y otras que compran el producto y solo se
dedican a distribuirlo. ¿A partir de qué cantidad de producto es mejor fabricarlo en la empresa que
comprarlo a otra empresa suministradora?

El umbral de producción es la cantidad Q* de producto para la cual el coste de producirlo en la


empresa es exactamente igual que el coste de comprarlo a otra empresa.

Teniendo en cuenta la estructura y composición de los productos que se fabrican en una empresa,
suele ocurrir que un producto o uno de sus componentes (envases, pieza del producto principal, etc.)
pueda tanto producirse en la misma empresa como comprarse a otra que lo fabrique; la decisión
dependerá de la aplicación de uno de los principios fundamentales de la gestión de la empresa: la
minimización de costes.

Supongamos, para realizar el cálculo del umbral de producción de manera sencilla, que producir el
producto o componente del producto en la empresa supone unos costes fijos (CF), iguales para
cualquier nivel de producción, y un coste variable por unidad (Cvu); el precio de compra del
componente a un proveedor es p, y Q son las unidades que la empresa necesita. En este caso, el
umbral de producción se determina del siguiente modo:
6. La gestión de la producción

La dirección del departamento de producción es la encargada de planificar, organizar, gestionar y


controlar la transformación de los factores productivos en productos. Al tomar decisiones, la dirección
de la producción debe tener en cuenta una serie de factores limitadores o determinantes sobre la
producción:

-Capacidad productiva. Es la cantidad máxima de producción que se puede realizar de un producto, en


función de elementos como el número de máquinas o la disponibilidad de mano de obra (recursos
humanos). En general, se trata de los recursos limitados que una empresa tiene a su disposición para
dirigir la producción.
-Demanda del producto. El nivel de la demanda de mercado determina la cantidad de producto que la
empresa puede vender.
-Diseño del sistema productivo. La estructura de los procesos que integran el sistema productivo y la
forma de producir determinan la capacidad de la dirección de la producción para adaptarse de forma
flexible a las situaciones del entorno.
-Entorno económico. Son situaciones externas a la empresa pero que se relacionan con ella. Estas
situaciones determinan un conjunto de oportunidades que se pueden aprovechar, así como amenazas
que hay que considerar.

De acuerdo con estas consideraciones, la dirección de la producción debe estar en contacto


permanente con el departamento comercial y con el departamento financiero, para colaborar y
participar conjuntamente en la consecución de los objetivos finales de la empresa.

La planificación de la producción
La planificación de la producción se estructura en un conjunto de fases que comienzan a largo plazo y
finalizan a corto plazo con especificaciones concretas y que implican un control complementario en
dos niveles:
7. La gestión de la calidad y la protección del medio ambiente

La calidad, su mejora continuada y la protección del medio ambiente son unos de los objetivos
prioritarios de la dirección de la producción.

7.1. La calidad en la empresa


Un sistema de producción bien gestionado, en continuo funcionamiento y revisión, evita que se
produzcan fallos. Los errores en la producción pueden provocar pérdidas de tiempo o defectos en el
producto final que acaban en reclamaciones de los clientes y afectan negativamente a la imagen de la
empresa.

Para conseguir que el producto final contenga todas las características previstas que satisfarán al
cliente es necesario que todos los procesos, y todos los agentes que intervienen en ellos, actúen sin
fallos. La calidad es una tarea de todos.

La gestión de la calidad
La lucha por la calidad en una empresa no significa obtener la calidad máxima, sino la calidad justa
que necesita el producto, ya que tanto el exceso como la falta de calidad repercuten en los costes. Por
esto se habla de gestión de la calidad.

Esta gestión se puede realizar de diversas maneras:


-Técnicas de inspección. Utilizar instrumentos de medición para asegurar que se obtiene la calidad
prevista.
-Control de procesos. Diseñar adecuadamente los sistemas de producción y de trabajo para prevenir
errores. Analizar y evaluar constantemente los procesos, fomentando el trabajo en equipo, para
mejorar continuamente la calidad.
-Gestión integral de la calidad. Participación de todas las áreas de la empresa en la calidad del
producto.
-Calidad total. Ampliar el alcance de la calidad del producto a la calidad de la organización en
general, es decir, a los procesos productivos y a las diversas actividades de la empresa, concediendo
importancia al factor humano.

El sistema de calidad en la empresa ha de estar reconocido o regulado, con el fin de asegurar y de


especificar la calidad de los productos. Así, los clientes pueden identificar más fácilmente si el
producto o servicio tiene la calidad requerida.
Hay una institución denominada ISO (International Standard Organization: Organización
Internacional de Estandarización) que regula y determina las condiciones que ha de cumplir el sistema
de calidad de una empresa para que sea reconocido. Esta regulación está formada por un manual de
calidad que recoge la actividad de la empresa y el conjunto de procedimientos y normas que aseguran
la calidad.

La protección del medio ambiente


La relación entre el medio ambiente y la actividad productora es muy estrecha: el medio ambiente
proporciona los recursos para la producción de bienes y asimila los residuos. Por ello, es importante
que este intercambio (empresa-medio ambiente) sea regulado dentro de un marco general que
promueva el sostenimiento de la actividad productiva y reduzca los costes externos o costes sociales
de la producción.

La empresa ha de integrar de forma sistemática la gestión medioambiental en su estrategia y en su


organización.

Algunos de los factores que estimulan la incorporación de la gestión medioambiental en la empresa


son los siguientes:

La actividad en el ámbito de la protección del medio ambiente ha generado un nuevo mercado y ha


potenciado el nacimiento de nuevas actividades económicas. Las industrias del medio ambiente
actúan por dos vías:

-Tratamiento de los residuos que se producen. Mediante la instalación de equipamientos que permiten
el control y tratamiento de la contaminación (como las depuradoras).
-Prevención del impacto ecológico. Mediante la transformación de los procesos productivos, de la
tecnología y de la organización de operaciones se actúa sobre el origen: se limita la producción de
contaminantes y se reduce el consumo de recursos. En este caso, se trata de sustituir cierta tecnología
y ciertos recursos por otros con un menor impacto medioambiental.

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