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TEMA 1: SOMOS ADOLESCENTES

2do “A, B, C,D” Secundaria Profesor: Jorge Huamán Tello


29/03/23
COMPETENCIA CAPACIDAD DESEMPEÑO
Construye su identidad Se valora así mismo Utiliza estrategias de autorregulación emocional de acuerdo con la
situación que se presenta, y explica la importancia de expresar
y autorregular sus emociones
PROPOSITO: Consolidar su identidad personal y desarrollar valores y criterios propios para orientar su vida y
actuar con autonomía y responsabilidad respecto a su sexualidad y al cuidado de su integridad personal.

CONFLICTO COGNITIVO: ¿Consideras que te conoces bien? ¿Por qué? ¿Qué aspectos de tu personalidad quisieras
entender mejor?

SABERES PREVIOS:

¿Qué entienden por Adolescencia? ¿Cuáles son las etapas de la adolescencia? ¿Cómo es el estrés en la
adolescencia?

DESARROLLO
El Docente presenta el tema y explica acerca de “Los adolescentes y el desarrollo cognitivo, el desarrollo
emocional y como se da el estrés”, lo presenta a través de un organizador visual.

El desarrollo cognitivo en la adolescencia


El desarrollo cognitivo se refiere a la evolución de la capacidad de razonar. En la infancia, los niños desarrollan la
capacidad de pensar en forma concreta. Por ello, pueden combinar (sumar), separar (restar o dividir), ordenar
alfabéticamente y establecer equivalencias entre cantidades. Este tipo de pensamiento es concreto porque los
objetos y hechos sobre los que se está pensando están físicamente frente al niño.

En la adolescencia, en cambio, se originan procesos de pensamiento complejos, también llamados formales, entre
los que se encuentran el pensamiento abstracto (emplear símbolos y hacer generalizaciones), la capacidad de
razonar a partir de principios conocidos (construir nuevas ideas o elaborar preguntas), la capacidad de considerar
diferentes puntos de vista según criterios variables (comparar ideas u opiniones) y la capacidad de reflexionar
acerca de su proceso de pensamiento. En la mayoría de los casos, el desarrollo cognitivo en la adolescencia se
produce con mayor lentitud (siete a ocho años) que el desarrollo físico (tres a cuatro años).

El desarrollo del pensamiento formal le permite al adolescente:


• Pensar en sí mismo y en la sociedad.
• Elaborar su propia escala de valores y orientar su conducta y sus decisiones sobre esa base.
• Evaluar sus decisiones según los efectos que puedan tener.
• Considerar diferentes soluciones a un problema.
• Desarrollar su propia identidad e iniciar la construcción de su proyecto de vida.

El pensamiento en la adolescencia
La evolución del pensamiento formal en la adolescencia se manifiesta a través del logro de diversas capacidades.
La capacidad de reflexión
El pensamiento abstracto de los adolescentes se caracteriza por el desarrollo de su capacidad de reflexión. La
reflexión implica analizar racionalmente un tema o situación, inferir causas y consecuencias, establecer
relaciones, distinguir aspectos positivos y negativos y elaborar una opinión propia.

El desarrollo cognitivo les permite a los adolescentes realizar un análisis reflexivo de su propia persona,
capacidad que se conoce como introspección. A través de ella, tratan de conocerse a sí mismos, evalúan sus
propios pensamientos y realizan una autocrítica de sus acciones. La capacidad de reflexión también hace posible
que el adolescente comprenda el entorno en que se desenvuelve.

Desarrollo cognitivo y relaciones familiares


El desarrollo cognitivo de los adolescentes está relacionado también con su capacidad para encontrar defectos o
errores en sus padres –a los que antes idealizaba– y en poner en tela de juicio sus valores cuando parece haber
incongruencia entre estos y su comportamiento.

Los adolescentes comienzan a darse cuenta de que ni sus padres ni los otros adultos tienen las respuestas a todas
sus preguntas ni las soluciones a sus problemas. En este contexto, las disputas familiares suelen hacerse más
intensas y la palabra negociación empieza a cobrar importancia, pues ellos necesitan que sus opiniones sean
escuchadas. Algunos, convencidos de que sus padres tienen muchas deficiencias, llegan a cuestionarse cómo ellos
–siendo tan “especiales”– pueden ser sus hijos. Este sentimiento empieza a desaparecer entre los 15 y 16 años.

Más allá de la relación con sus padres, los adolescentes suelen cuestionar los sistemas políticos, sociales y
culturales existentes, buscando construir otros que sustituyan a aquellos que consideran “defectuosos”.

El desarrollo emocional
Los cambios producidos por el desarrollo físico y cognitivo durante la adolescencia están acompañados por
cambios emocionales. En esta etapa, la vida parece sentirse con mayor intensidad: a veces, uno está
exaltadamente feliz (como si se estuviera en la cima del mundo); otras, triste o con miedo a fracasar. Con
frecuencia, el adolescente se aísla del grupo familiar, tiende a responder con monosílabos o encogiendo los
hombros y no se muestra dispuesto a dar demasiada información a los adultos. Sin embargo, en asuntos
realmente importantes, recurre a sus padres buscando guía y apoyo emocional.

Entre los 15 y 18 años, el joven alcanza una mayor estabilidad. Al presentarse menos cambios en su estado de
ánimo, está más predispuesto al optimismo y a la alegría que a la tristeza, sentimiento que a veces acompaña la
primera fase de la adolescencia.

El estrés en los adolescentes


Los cambios físicos (imagen corporal), cognitivos (pensamiento formal) y sociales (apertura a nuevos grupos)
hacen que el adolescente sea cada vez más consciente de lo que pasa a su alrededor y se sienta más responsable
de las consecuencias de sus actos. Todo esto genera, en ciertos casos, un estado de estrés que lo afecta de
diversa manera:
• A nivel personal, suelen presentarse pensamientos negativos sobre sí mismo debido a los cambios físicos
propios de la edad. El desarrollo de múltiples actividades también puede generarle una sensación de incapacidad
de adaptación.
• A nivel familiar, si existen relaciones disfuncionales entre los padres y conflictos en la convivencia, pueden
traerle trastornos emocionales, más aún si los padres se separan o divorcian. Otras situaciones extremas (muerte
de un familiar, mudanza, llegada de otro hijo, etc.) o problemas económicos pueden originar reacciones adversas
en los adolescentes.
• A nivel ambiental, las malas relaciones con sus compañeros de escuela o los pares del vecindario, así como un
mal desempeño académico son situaciones que afectan su estabilidad emocional.

Estrategias para manejar el estrés


Para que los adolescentes superen sus estados de estrés, es recomendable que apliquen estrategias como las
siguientes:
• Hacer ejercicios y comer en horarios regulares.
• Evitar el uso de drogas ilegales, alcohol y tabaco.
• Aprender determinadas habilidades para afrontar situaciones. Por ejemplo, dividir una tarea grande en
actividades pequeñas fáciles de realizar.
• Disminuir las expresiones negativas acerca de uno mismo o de su futuro.
• Aprender a sentirse bien haciendo un trabajo competente o suficientemente bueno, en lugar de demandar
perfección (suya o de otros).
• Realizar actividades relajantes: escuchar música, escribir, etc.

TRABAJO INDIVIDUAL: Analiza la siguiente situación y responde.

• ¿Crees que el grupo presiona a Marta? ¿De qué modo? Explica

• ¿En alguna ocasión tuviste que elegir entre actuar según tu criterio o por la presión de alguna persona o grupo?
¿Qué hiciste?
TRABAJO GRUPAL: Completa el siguiente organizador gráfico

METACOGNICIÓN:

1. ¿Qué aprendimos el día de hoy?


2. ¿Cómo lo aprendimos?
3. ¿Para que me sirve todo lo aprendido?

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