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El deber también es con las palabras

Muchos habremos escuchado esta popular frase «Un gran poder conllevar una gran
responsabilidad» que los más probable que la recuerden de la famosa película de Marvel el
Hombre Araña, pero en realidad fue dicha por el abogado Franklin D Roosevelt.

Un líder es una persona que encabeza y dirige un grupo o movimiento social, político, religioso, etc.
Esto según la definición de la real academia española. Pero este concepto nos describe lo que es un
líder, pero no nos especifica el tipo de impacto o poder que se obtiene cuando se asume el liderazgo.

La historia mundial ha sido testigo y protagonista de eventos que tuvieron consecuencias sin
precedentes tanto positivas como negativas

El líder alemán Adolf Hitler logro poner países en disputa, iniciando la segunda guerra mundial.
Usando un discurso elocuente atrajo masas que se sumaron a un movimiento que termino en una
masacre para la humanidad.

Frases como “Ante Dios y el mundo, el más fuerte tiene el derecho de hacer prevalecer su
voluntad” o “Cuando se inicia y desencadena una guerra lo que importa no es tener la razón,
sino conseguir la victoria". Se convirtieron las manos en el gatillo que dispararon las armas.

Mientras que el activista por los Derechos Humanos Martin Luther King, uso su poder de liderazgo
para luchar por la igualdad y acabar con la segregación. Sus discursos son emblemáticos y son
motivo de inspiración para el mundo entero “I have a dream- Tengo un sueño” “He decidido
apostar por el amor. El odio es una carga demasiado pesada” “Si supiera que en el mundo se
acaba mañana, yo, hoy, todavía plantaría un árbol” fueron desencadenantes de un movimiento
hacia la libertad y la igualdad y que en la actualidad se siguen usando por su poderoso significado.

Todas las palabras expresadas en los discursos llevaban carga de persuasión emocional con la
intención de que quien las escuchara no tuviera otra opción que seguirla. O sembrarse en la
conciencia, creando dudas o generando ideas. Nuestra manera de hablar y transmitimos es un deber
muy grande para un líder, porque sus discursos generan ecos, sus frases quedan para la posteridad y
tienen un impacto directo en los individuos.

La forma en la que hablamos (la cantidad de palabras positivas o negativas que emitimos, nuestras
quejas, nuestras alabanzas, nuestras muestras de gratitud, nuestros reproches…) afecta la percepción
que los demás tienen sobre nosotros y tiene el potencial de incidir en nuestro comportamiento y
nuestro estado de ánimo.
Cuando iniciamos un movimiento y las personas no siguen, nuestras palabras y acciones determinan
el rumbo de nuestra organización, institución, Estado y Gobierno.

Pero ¿Cómo saber si somos buenos lideres y si nuestro proyecto va a generar un cambio positivo?

Según el instituto de Postgrado Europeo podemos guiarnos por 8 premisas claves Capacidad de
marcar objetivos, Humildad y tolerancia, El aprendizaje constante, la Responsabilidad,
Carisma, Compromiso, Habilidades Sociales y ser una Persona Comunicativa. Yo le
agregaría empatía y agradecimiento porque hace que haya un acercamiento y es un valor
agregado.

Liderar en un deber que todos debemos asumir, pero no simplemente para dar ordenes y ser la cara
visible de un proyecto. Sino impulsar a otros a alcanzar su máximo potencial, porque en tanto las
personas tenga mas conciencia del mundo en que viven, pueden cuidarlo y preservarlo. Utilizando
la unión como una fuerza mayor para lograr un bien común hacia nuestro propio bienestar.

El cofundador de Apple Steve Jobs dijo, “La innovación es lo que distingue a los lideres de los
seguidores”

Pero, ¿cómo somos capaces de innovar en un mundo que cambia a la velocidad de la luz.?

Yo digo que, manteniéndonos en constante movimiento, sin importar que tan largos sean nuestros
pasos o que tan rápido vayamos. Solo importa que sigamos adelante.

Marquemos la diferencia en el mundo, paso a paso, creando, sirviendo, ayudando y apoyando.


Dejemos de preguntarnos que recibiremos cambio, porque mientras más entreguemos más
aprenderemos.

Mi nombre es Eileen Medina y hoy decidí innovar y cumplir como mi deber de liderar.

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