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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular Para Relaciones Interiores, Justicia y Paz

Universidad Nacional Experimental de la Seguridad (UNES)

Barquisimeto, Estado Lara

INFOGRAFIA SOBRE LA CIENCIA

Estudiante: Lázaro Rodríguez

C.I. 9610541

Profesora: Dilcia Duran


1). Según Rutinel Domínguez (1986): “La ciencia es un conjunto de conocimientos ciertos,
ordenados y probables que obtenidos de manera metódica y verificados en su contratación con la
realidad se sistematizan orgánicamente haciendo referencia a objetos de una misma naturaleza cuyos
contenidos son susceptibles de ser transmitidos”.

2). La ciencia como actividad y como resultado

La ciencia es el resultado del conocimiento de los hombres sobre el mundo que les rodea; surge en la
actividad conjunta de los individuos en la sociedad. La ciencia, a su vez, es un factor de influencia
sociocultural que se encuentra condicionada por las demandas del desarrollo histórico, económico y
cultural de la sociedad.Dra. C Haydée Damiana Rionda-Sánchez.†* Profesora Titular. Profesora
Consultante. Universidad de Ciencias Pedagógicas "Enrique José Varona". La Habana, Cuba. Recibido
abril de 2013 Aceptado junio de 2013.

4). Sus elementos son: La comprobación, la certeza, la objetividad, la razón, lo sistemático, y demostrativa.

5). Lo específico de la ciencia es que es:

A). Neutral y objetiva. Se basa en hechos concretos, no en opiniones ni en conjeturas.


B). Metódica y sistemática. Se establece un procedimiento a través de una serie de pasos ordenados para explorar.
C). Verificable. Es precisa y exacta en su desarrollo e hipótesis.
D). Comprobable. Se constata mediante la experimentación y la demostración.
F). Abierta a nuevos escenarios. Es susceptible a cambios y lo que hoy es una limitación puede no serlo en el futuro.
G). Acumulativa. Se construyen nuevos conocimientos partiendo de investigaciones y experimentos anteriores.

6). Objetivo de la ciencia:

El primer objetivo de la ciencia es saber cómo es la realidad, que elementos la forman y cuáles son sus rasgos. Después de conocer cómo
es la realidad, su segundo objetivo es explicarla, llegar a establecer cómo se relacionan sus distintas partes. El objetivo de la ciencia es
develar verdades generales para establecer leyes fundamentales e hipótesis.

7). Fuente del conocimiento científico: En términos generales, podemos


distinguir entre un conocimiento adquirido por la experiencia y un conocimiento adquirido por la razón. Experiencia. La
experiencia es la adquisición de conocimiento a partir de la percepción sensorial. La información obtenida se almacena en la
memoria y se enriquece con nuevas experiencias que amplían el conocimiento. Razón. La razón es la adquisición de conocimiento
como resultado de procesos mentales como la deducción y la inducción. Tanto la experiencia como la razón pueden ser pensadas a
partir de la intuición. Esta es la comprensión de algo de manera directa, sin pasos medios. El sujeto capta o percibe un fenómeno
como evidente en sí mismo. Para el racionalismo, la intuición es racional y se da por el contacto directo con la idea de un objeto.
Para el empirismo, la intuición es empírica, y se da por el contacto directo con el objeto real.
8). Clases de ciencia y tecnología.

La ciencia posmoderna
Por Cuadrivio | diciembre 16, 20121 Comentario

EL NUEVO BESTIARIO
ANTROPOLÓGICO DE LA
EPISTEMOLOGÍA

No hay ciencia sin interés, ni saber sin moral. En este ensayo, Javier
Domínguez reflexiona sobre los bestiarios que el hombre ha construido en
sus modelos de conocimiento; la ciencia moderna se revela teología
secularizada, y su verdad, dogma ético de poder; hoy, la nueva
epistemología señala a los autores del discurso mítico. Quizá es tiempo de
contar otra historia y hacer otra ciencia desde los márgenes del desastre en
que culminó la modernidad occidental.

Javier Domínguez Moros

Miraba yo en mi visión de noche, y he aquí que los cuatro vientos del cielo
combatían en el gran mar. Y cuatro bestias grandes, diferentes la una de la
otra, subían del mar.
Libro de Daniel, Cap. VII, vv. 2 y 3

Los bestiarios son colecciones librescas dedicadas a temas


mitológicos; tratan sobre bestias, seres fantásticos, dioses y demonios.
Fueron muy populares durante la edad oscura (Edad Media), antes de que
apareciera la ciencia moderna, y quizás ello se deba a que el hombre siempre
ha monstrificado la otredad, es decir, lo desconocido, creando sus propios
dioses y demonios mucho antes de poder atisbar una respuesta racional en el
mundo físico-natural.
Sin embargo, los bestiarios estaban destinados a desaparecer. El sociólogo
alemán Max Weber ha señalado en alguno de sus escritos que la ciencia
moderna ha desmitificado el mundo para los hombres. La ciencia, que
aparece incipientemente en el Renacimiento y que se perfecciona a partir del
siglo dieciocho bajo la sombra del proyecto pretendidamente progresista de
la Ilustración, trajo consigo la consigna inequívoca de que la diosa Razón era
la única que garantizaba la posibilidad segura del conocimiento.

No obstante, luego de la Segunda Guerra Mundial, que significó en gran


medida la destrucción de Europa, el Holocausto genocida, el lanzamiento de
la bomba atómica en Hiroshima y Nagasaki, el pretendido proyecto
moderno-ilustrado, el camino espiritual que supuestamente conducía al
hombre hacia su perfeccionamiento, cae en la más horrible fosa existencial.
No hay nada que pueda salvar semejante ideal civilizatorio que en la misma
historia se ha evidenciado como utopía.
Los primeros científicos en hacer un estudio crítico de la racionalidad
moderna, los teóricos judío-alemanes de la Escuela de Fráncfort, llegaban a
la conclusión de que la Razón occidental había sido sólo una herramienta
para el exterminio y el usufructo del poder con fines ilegítimos; la definieron
como «razón instrumental». Después aparecerán teóricos como Lyotard,
Foucault, Feyerabend, entre otros, que encuentran inclusive, antes de que se
llegara a tal catástrofe, un antecedente primordial de la crisis de la Razón
occidental en Nietzsche, quien tan duramente criticara y descalificara toda
pretensión hegemónica de una ciencia universal a fines del siglo XIX.
Siguiendo al filósofo de Así hablaba Zaratustra, Foucault no sólo se atreve a
criticar dicho absolutismo de la ciencia, sino que apunta a que la ciencia está
confiscada y monopolizada por el ejercicio del poder desde el Estado (surge
así la categoría foucaultiana del «poder-saber»). Feyerabend no dudaría
asimismo en denominar toda ciencia como etnosaber, puesto que cada
comunidad científica está subsumida en una comunidad mayor a sí misma,
con unos valores civilizatorios que no pueden ser soslayados del todo.

Ahora bien, para tener una idea más exacta de este proceso de decadencia de
la epistemología occidental, se precisa definir previamente dos modelos de
ciencia en cierto detalle, el de la ciencia moderna y el de la ciencia
posmoderna. Mientras la religión establecía a Dios como origen del
conocimiento y de la verdad absoluta, la ciencia moderna, que desde un
principio se proponía derribar el edificio teórico metafísico que había erigido
el escolasticismo medieval, no obstante que tomara de sus adversarios
clericales las categorías básicas de sus postulados, aunque desprovistas de
sentido teológico, sustituyó el concepto de Dios por el de Razón y el de la
verdad absoluta teológica por el de la verdad absoluta de la ciencia. Así pues,
las categorías han de ser necesariamente las mismas, aunque valoradas
ahora desde una perspectiva humanista, secular y laica.

El ego cogito cartesiano reemplazó la idea de Dios como punto de partida del
conocimiento para fundarlo en el principio «pienso, luego existo». Así, la
racionalidad estuvo asociada desde el principio a la potencialidad del
pensamiento humano en sí mismo. Más adelante esta idea llegaría al
absurdo de confundir en un mismo plano razón y realidad cuando el filósofo
alemán Hegel concluía que «lo real es racional y lo racional es lo real»,
queriendo con ello significar que la realidad es el producto inmediato del
pensamiento abstracto. Ahora la idea de Libertad se objetivaba
diacrónicamente en cada etapa de la Historia: la realidad en un momento
dado era así, para Hegel, la manifestación de cada estadio del Espíritu
Absoluto coincidiendo en el tiempo contemporáneo. En el devenir hegeliano
de la Historia, el Espíritu Absoluto se proyectaba a sí y para sí en el mundo
real, se transformaba en la realidad misma.
Estos dos teóricos, Descartes y Hegel, cada uno por su parte, fueron la
máxima representación del racionalismo francés y el idealismo alemán. El
problema, sin embargo, no radicaba en lo inverosímil de sus afirmaciones –
como la hegeliana arriba expuesta–, sino en la obstinada pretensión de
verdad absoluta, objetividad, perfección, progreso, civilización que penetró
toda la epistemología ilustrada e incluso decimonónica. A través de una
lógica deductiva se pretendió conocer el mundo en su totalidad. Conceptos
como tiempo, espacio, masa se aceptaron como inmutables, absolutos, y
como valores constantes, en fin, axiomas indemostrables pero necesarios
desde una retórica del poder-saber eurocéntrico. En esa pretendida
capacidad de certeza, de fixismo (determinismo inherente a las categorías
científicas), se construyó el edifico de la ciencia sobre las ruinas del edificio
de la fe. Una especie de dialéctica se presenta en el proceso: se eliminaba
aparentemente a la teología, pero se pretendían sus mismos fines a partir de
la ciencia moderna.

Bajo la hipnótica era de la Ilustración y en medio de un rechazo decisivo a


todo lo viejo, se deduce que la ciencia ilustrada por sí sola puede llevar al
hombre a una era mesiánica jamás lograda por la religión y la
metafísica. Orden y progreso se definieron entonces como los pilares de un
nuevo orden secular que duraría para siempre.
La ciencia física irrumpió en la persona de Newton como la primera y más
certera de todas las ciencias. Desde entonces, todo lo medible y cuantificable
sería digno objeto de estudio de la ciencia. Todo cuanto es propio de las
matemáticas y la estadística tendría paso seguro al ámbito científico, ya que
era considerado objetivo y verificable dentro de los parámetros de la
existencia.
El concepto de hombre que se desprende de esta episteme moderna había de
ser necesariamente excluyente. Han sido los europeos y no otros pueblos los
que han logrado este nivel positivo de desarrollo científico-tecnológico.
Los otros, las alteridades, es decir, el incivilizado, el salvaje, el indígena, el
afrocaribeño, quedaban relegados a los lugares sociales más bajos según los
designios del iusnaturalismo dieciochesco.
El hombre de raza aria, europeo, blanco, heterosexual, cristiano y burgués
era el único autorizado por la Razón a edificar la complicada estructura del
mundo del conocimiento científico. La ciencia moderna apuntaba
claramente, según sus forjadores, hacia una cultura universal única, una
geocultura (con división del trabajo de acuerdo a calidades raciales) de la
dominación del hombre blanco sobre el orbe, de la subyugación a través de
sofisticados tejidos teóricos que la justificaban: la gubernamentalidad
ejercida como multiculturalismo, donde todas las subjetividades y
etnosaberes locales del espacio poscolonial eran invisibilizadas en esa manía
por «blanquear» todas las otredades; al eliminarse la cosmovisión del no-
europeo, las culturas se daban por entendidas, pero no sin ser tachadas de
paso de arcaicas. Occidente ocupaba, desde luego, el estadio positivo como
máximo exponente de la realización civilizatoria planetaria.

Si la física newtoniana logró medir y pesar el mundo físico, la biología, la


sociología y la historia lograron clasificar al hombre de acuerdo a los estadios
evolutivos definidos por Augusto Comte: estadio teológico, estadio
metafísico y estadio positivo. La biología definía por primera vez en la
historia al hombre como un animal que había evolucionado biológicamente
desde organismos menos complejos, pasando por el desarrollo de varios
tipos de homos primitivos, hasta llegar al actual homo sapiens sapiens. El
positivismo histórico argumentaba que unas razas habrían tenido mejores
condiciones evolutivas que otras, de las cuales, la raza aria era
indiscutiblemente la más apta y superior a todas las demás.

El problema comienza precisamente en el hecho de que la ciencia moderna


siguió siendo una doctrina del poder y para el poder. Si durante la Edad
Media los clérigos habían creado todo un mundo de monstruos y demonios
para someter a los feligreses, la ciencia moderna, pretendiendo ahora la
certeza absoluta de sus postulados basados en una sofisticada armazón
teórica, caía aún más bajo con argumentos tales que indudablemente la
convertían en la nueva religión del Estado: la ciencia como teología
secularizada.

Los crímenes horribles basados en las verdades dogmáticas de la ciencia


moderna hicieron exactamente todo lo contrario a lo que se había predicado
desde la Ilustración; si la visión bíblica del profeta Daniel es la de bestias
destruyendo a los judíos de la Antigüedad, los monstruos de la ciencia
moderna le hubiesen parecido más feroces al verlos exterminar a sus
compatriotas judíos en nombre de la ciencia y la razón.
A los que una vez definieran a la otredad como bestial, salvaje, monstruosa,
les tocó beber de su propia copa de la ira. Así, en cierto modo, se inicia la
ciencia posmoderna. El europeo se reconocía a sí mismo como una máquina
monstruosa de la razón técnica e instrumental, aquella que utilizó para la
destrucción de la otredad. El tiempo y el espacio ya no se veían
autocomplacientemente en vías hacia ningún destino providencial del
progreso humano.

Las sensibilidades tomaron mayor relevancia, el homo


sentimentalis sustituía así al homo rationalis en vista de una razón
deshumanizada. La subjetividad cobró valor frente a la objetividad.
Proliferaron los cultos, las sectas y las ansias por el saber esotérico, ahora en
boga. La verdad quedó reducida a relatividades más o menos ciertas según se
las adopte o no. La intersubjetividad se volvió la norma del quehacer
científico. En cuanto a la epistemología, aparece la célebre frase «todo vale»
del epistemólogo austríaco Feyerabend.
Así, en el nuevo bestiario antropológico quedó evidenciado que quienes
detentan el poder y la ciencia, en vez de ser los ejecutores de un plan
civilizador y progresista, podrían esconder detrás de sus discursos ilustrados,
filosóficos y civilizatorios las más atroces intenciones y propósitos.

El pionero del nihilismo, Nietzsche, para quien ya no existe ninguna verdad,


ni dios, ni religión, ni ciencia, señalaba que el mundo cultural en su totalidad
fue el producto del quehacer humano y, por lo tanto, el reflejo de sus
intenciones. El humano ha creado un mundo a su imagen y semejanza, y no
a imagen y semejanza del mundo mismo. Los mitos que crearon los antiguos
griegos y romanos, así como las leyendas medievales, en nada se
diferenciaban de los mitos de la ciencia moderna.

El concepto antropológico del bestiario ha cambiado desde entonces al ritmo


de una nueva epistemología, pasando del de la modernidad conservadora y
burguesa hasta el de la posmodernidad esquiva y diversa, donde las bestias
son ahora los que una vez fueron los victimarios.

Un acercamiento antropológico y ontológico desde el sentir y el pensar


latinoamericano evidencia que la ciencia no es del todo absoluta y que los
saberes más útiles a las ciencias sociales no se edifican sobre un punto cero,
sino sobre el propio ethos del hombre dentro de los límites y múltiples
interrelaciones de su ser con la realidad concreta que lo invade y
circunscribe.
Es por ello que este nuevo bestiario, editado desde nuestramericanidad,
puede proveernos de una nueva alternativa hermenéutica; al interpretar a
Occidente, no desde sus logros materiales, sino a partir de sus intenciones de
poder soslayadas en sus discursos científicos, podemos observar en esencia,
no el idílico mensaje soteriológico que nos ofrece para salvarnos, sino por el
contrario, históricamente, para dominarnos. Es decir, quienes van a decidir
quién o quiénes son las bestias, los enemigos, los villanos de esta historia no
serán otros sino nosotros mismos.
Asimismo, debería quedar lo bastante claro para nosotros que este nuevo
bestiario antropológico de la epistemología nos invita a ser ahora, a nosotros
los latinoamericanos, la nueva humanidad, el nuevo hombre que vence
bestias y dragones, el nuevo David que lapida al oso y al león. La subjetividad
que éste se propone forjar es la de repensar lo humano desde
un nosotros que asertivamente hará posibles nuevos horizontes no
explorados que antes, en la exclusión perenne de la episteme moderna
eurocéntrica, eran inconcebibles.

_______________

Javier Domínguez (1977) es profesor en la especialidad de Geografía e


Historia (UPEL-IPB, 2004). Es maestro en Historia con mención Summa
cum laude (UCLA, 2012). Es docente en la UPEL-IPB en los cursos
«Geografía económica de Venezuela», «Lectura e interpretación de mapas» y
«Ética y docencia». Su teoría del fin del mundo forma parte del mosaico que
aparece en el presente número de Cuadrivio.

Cuadros comparativos sobre


modernidad y postmodernidad
¿Qué es la a Modernidad ?

Cuando se habla de modernidad nos referimos a los procesos istóricos y sociales


que se originaron en Europa Occidental luego del Renacimiento, período donde la
razón es más importante que la religión. Donde la Constutución rige el control
social, donde la lógica y la razón se imponen. Durante la Modernidad se protegen
las libertades y los derechos de los ciudadanos.

Durante la Modernidad surgen las clases sociales nuevas donde algunos grupos
serán más prósperos mientras que otros caen en lo marginal.

¿Qué es la posmodernidad?
Se habla de Posmodernidad a un conjunto de movimientos artísticos, literarios,
cuturales y filosóficos del siglo XX. Para la sociología se aplica el término a el
proceso cultural de los últimos veinte años en muchos países.
¿Cuáles son las características del pensamiento post
moderno?
Entre las principales características del pensamiento post moderno podemos
enumerar:

• Antidualista: Se asegura que la filosofía occidental creó dualismos.

• Cuestiona textos: Los textos reflejan la cultura y pensamiento dele escritor

• Giro lingüistico: El lenguaje crea realidad porque moldea al pensamiento

• Verdad como perspectiva: La verda es la que nos parece

Cuadros comparativos entre modernidad y post


modernidad
e4

[pic 2][pic 3]

[pic 4][pic 5]

Se habla de dos posturas: Modernismo y Posmodernismo.

MODERNISMO:

1. REALISMO.
2. EMPIRISMO.
3. POSITIVISMO.

POSMODERNISMO:

1. RELATIVISMO.
2. CONSTRUCCIONISMO SOCIAL.
3. SUBJETIVISMO.

Los métodos de investigación son:

1. CUALITATIVO.
2. CUANTITATIVO.
3. MIXTO.

Características y Principales exponentes de estos paradigmas.

Realismo:

Leopoldo Alas “Clarín” (1852-1901).- Era articulista temido por críticas


literarias acertadas, hablaba sobre el ambiente ideológico y político que vivía la
sociedad.

José maría pereda (1833-1906).- Escribió sobre el ambiente rural, se enfrentó


a progresistas y defendía a la iglesia, los valores tradicionales y el conservadurismo
político.
Empirismo:

David humes (1971).- Era historiador y economista, las ideas son copias sin
vida de sus impresiones directas. Todos sus contenidos provienen de la experiencia.

Jhon lucke.- Fue filósofo y estudio medicina, el origen del conocimiento se


basa en la experiencia, es todo aquello que se percibe y se piensa.

Positivismo:

August Comte (1798-4857).-Utilizaba el método científico, se basaba en varios


estados; teológico, metafísico, positivo y abstracto. Se basa en la autoridad que le
da la experiencia cuando se aplican las leyes físicas.

Stuart mille.- Se basaba en varios métodos; concordancia, diferencias,


variaciones y residuos. Se define por las causas sin antecedentes y después, causa
de fenómeno y aquellas causas no eliminadas por experimentación.

Relativismo:

Oswaldo spengler (1880-1936).- fue un historiador y filósofo y era objetivo en


sus historias.

Construccionismo Social:

Jean Piaget, Lev Vygotsky, Jerome Bruner y Joseph D. Novak.

Cualitativos:

Pérez Serrano (1994ª: 465), define "la investigación cualitativa se considera


como un proceso activo, sistemático

Cuadro comparativo.

PARADIGMAS
CARACTERISTICAS
DEL MODERNISMO

Realismo El conocimiento se basa en los hechos reales, en lo que existe a


nuestra percepción, observa la realidad, nuestra vida diaria. Habla
sobre el mundo exterior.

El conocimiento se adquiere con ideas innatas y por nuestros


Empirismo sentidos. Mediante experiencias y razonamientos. Es lo que podemos
percibir con nuestros sentidos. Es el más común.

El conocimiento que es verdadero probándolo científicamente.


Tenía filósofos iluministas y de enciclopedia. Se basaba mediante la
Positivismo experimentación. Utiliza el método cuantitativo.

Cuestionarios y experimentación.

PARADIGMAS DEL
CARACTERISTICAS
POSMODERNISMO

Relativismo Esta hecho por realidades que se construyen socialmente.

Teoría crítica y con muchas realidades, se va construyendo


Construccionismo
por las diversas formas de percibirla, se basa en el conocimiento
social
de la naturaleza humana.

Existe una sola realidad, es válido y verdadero en unidad, se


Subjetivismo
basa en los valores.

...
REALISMO
CUANTITATIVO

MODERNISMO EMPIRISMO

POSITIVISMO

CIENCIA
PARADIGMAS
Porqué La Criminalística No Es Una
Ciencia Y Si Una Disciplina Técnica
Por Rubén Guerrero Abundis
Publicado en 13 julio, 2021 por Criminociencia en Criminalística, Revista
Criminociencia // 0 Comentarios

Introducción
Uno de los problemas actuales que debería de preocupar a la comunidad
académica y científica sobre la criminalística, es el llamarla ciencia, sugiriendo que
sea así con fundamentos subjetivos, aberrantes, ambiguos o tergiversantes, tal es
el caso de llamarla “ciencia pura”, “ciencia natural”, “ciencia formal”, “ciencia
fáctica”, “ciencia forense” entre otras.

La criminalística es una disciplina técnica interdisciplinaria y multidisciplinaria,


comprendiendo que se complementa de conocimientos de otras ciencias,
disciplinas, artes, oficios o técnicas forenses, siendo entendido como
interdisciplinariedad el combinar o involucrar dos o más ramas del conocimiento
(Oxford Advanced Learner’s Dictionary of Current English, 1974), y como
multidisciplinariedad aquello compuesto o hecho de varias ramas especializadas
del conocimiento, en la búsqueda de un objetivo común (The Random House
College Dictionary, 1975), es decir, la criminalística juega un papel
interdisciplinario en las actividades tanto de procesamiento del lugar de
investigación, así como las actividades de reconstrucción, haciendo también un
papel multidisciplinario acudiendo a los resultados de otras especialidades
periciales para sumarlos a las actividades de reconstrucción.

Por lo tanto, debe entenderse que su objeto de estudio son los indicios materiales
de un hecho presuntamente antisocial, que, mediante ellos, los resultados o
conclusiones de otros peritajes realizados a estos indicios y otras fuentes de
información, se determina una reconstrucción total o parcial del hecho o
fenómeno.

¿Por qué la criminalística no es ciencia?


La criminalística no es una ciencia porque es simple, su objeto de estudio, sus
principios y su método criminalístico lo indican, siendo su gran finalidad el
reconstruir total o parcialmente un hecho antisocial desde un enfoque material,
ocurrido de forma original en cierto espacio y tiempo determinado, lográndose
mediante los indicios materiales que hayan quedado, es decir, se centra en el
propósito de interpretar lo sucedido de hechos particulares con diferencias
materiales que concluirán en un informe pericial.

Aníbal Roque Bar menciona que la criminalística plasma sus resultados o


conclusiones en informes criminalísticos (dictámenes e informes) que no son de
circulación pública como un paper, sino, su circulación es restringida, por lo cual,
entre menos difundidos sean es mejor (Bar, 2003).

Por lo tanto, en la actualidad la criminalística no genera conocimiento científico


nuevo para el futuro, es decir, no genera avances científicos en la sociedad.
Cualquier ciencia genera conocimiento constantemente para el avance de la
humanidad, define direcciones o posibilidades y redefine viejas creencias
(Lazorko, 2013), lográndose descubrimientos, explicaciones sociales o inventos,
por mencionar algunos.

Tal es el ejemplo siguiente de la ciencia de la criminología, que en base a una


investigación científica podría concluir con sus conocimientos científicos que cierta
conducta humana es una conducta antisocial que se está presentando en la
actualidad (explicación social). Por otro lado, si mediante los conocimientos
científicos de la ciencia de la biología deciden estudiar científicamente si el virus
SARS-COV-2 proviene o no de los murciélagos, sus conclusiones generarían o
producirían conocimiento científico para el presente y futuro (descubrimiento).

Una ciencia debe tener dos aspectos fundamentales (Baena, 2017):

 Un sistema de ideas establecidas que puede aplicar (conocimiento


científico).
 Una actividad productora de nuevas ideas (investigación científica).

Diagrama 1. En el diagrama podemos apreciar que una ciencia debe producir


conocimiento científico nuevo (nuevas ideas) y que a partir de ese conocimiento habría
más investigación científica.
De tal forma que para que una disciplina tenga la categoría de ciencia, siempre
debe producir conocimiento científico nuevo, siendo su fundamental base la
investigación científica para generarlo y con este hacer otras investigaciones
científicas, generando más conocimiento científico.

Nos dice Tamayo (2009) que el método científico es por medio del cual
aseguramos la investigación científica y el conocimiento científico. Que los tres
son cíclicos y, por ende, una ciencia debe contar con ese ciclo.

Diagrama 2. En el diagrama se observa que la producción científica puede efectuarse a


partir de un conocimiento científico, del cual podría hacerse una nueva investigación
científica, que a través de la aplicación del método científico se obtendría un nuevo
conocimiento científico, y así sucesivamente.

Es de suma importancia destacar que el conocimiento científico puede seguir


generando conocimiento científico que sirva de avance y nutrición a la ciencia, lo
cual es una de sus características indudables.

¿Por qué la Criminalística es una disciplina técnica?


El objetivo de una técnica es satisfacer nuestras necesidades y, para hacerlo, por
medio de diversas técnicas creamos un producto, es entonces que le llamamos
intervención técnica en donde su producción se divide en dos: en artefactos y
servicios (Pineda, 2012; Punzó, 2012). Releyendo nuevamente a Tamayo (2009)
nos dice que las técnicas se refieren a la habilidad de hacer cosas, a la producción
de cosas o hacer algo que implica un conocimiento empírico de cómo hacerlo
(Tamayo, 2009). Lo anterior coincide con Stiegler (2002), quien señala que la
técnica debe entenderse como un saber-hacer-algo. Por otro lado, Gille (1999)
menciona lo conocido como sistema técnico, definiéndolo como un conjunto de
coherencias interdependientes, es decir, múltiples técnicas con dependencia
reciproca que tejen un sistema para poder llevarse a cabo (Gille, 1999).

Pineda (2012) explica que un sistema técnico esta conformado por la participación
de una o más personas, medios técnicos (procedimientos) y acciones (procesos),
que en conjunto permiten transformar las materias primas y la energía aplicada en
un producto de interés individual y social (Pineda, 2012). La criminalística es una
disciplina que tiene un sistema técnico, puesto que, se conforma de muchas
técnicas en cada procedimiento, la cual produce servicios que se necesitan, es
decir, ofrece resultados o conclusiones a través de la practicidad técnica de su
método criminalístico para esclarecer ciertos hechos particulares.

La criminalística al ser técnica no significa que no pueda aplicar metodología de la


investigación, de hecho, cuenta con una propia metodología donde se aplican
diversos métodos y técnicas. Así mismo, considerarla como disciplina técnica y no
ciencia, no quiere decir que se demeritan sus conocimientos, que pierde valor o
que pertenece al derecho, al contrario, es una disciplina técnica muy completa e
independiente que tiene como objetivos trabajar mediante un complejo sistema
técnico de conocimiento especializado donde interactúan uno o más personas.
Está regida por normas o procedimientos tradicionales, formalizados y
globalizados, que permite llevar a cabo procesos productivos y de naturaleza
práctica, aplicando métodos, técnicas u ordenamientos propios.

Conclusión
En conclusión, la criminalística no es una ciencia porque no produce conocimiento
científico nuevo, es decir, no genera avances científicos que nutran
constantemente sus conocimientos como lo hacen las ciencias. Pero si es una
disciplina técnica porque genera servicios exclusivos a la sociedad, mediante lo
práctico de un sistema bien estructurado lleno de técnicas de campo y técnicas de
interpretación o análisis documental de resultados de otros peritajes.
Consideremos entonces que, la criminalística es un modo de llevar a cabo
diversas actividades encaminadas siempre a la reconstrucción total o parcial de
hechos presuntamente antisociales a través de indicios materiales y los resultados
de otras áreas periciales, es por eso que, es una disciplina técnica con una forma
de trabajar muy bien estructurada, pero no por eso es una ciencia.

¿Qué es ciencia?

Según Rutinel Domínguez (1986): “La ciencia es un conjunto de conocimientos


ciertos, ordenados y probables que obtenidos de manera metódica y verificados en su
contratación con la realidad se sistematizan orgánicamente haciendo referencia a objetos de
una misma naturaleza cuyos contenidos son susceptibles de ser transmitidos”. 2). La
ciencia como actividad y como resultado. La ciencia es el resultado del conocimiento de
los hombres sobre el mundo que les rodea; surge en la actividad conjunta de los individuos
en la sociedad. La ciencia, a su vez, es un factor de influencia sociocultural que se
encuentra condicionada por las demandas del desarrollo histórico, económico y cultural
de la sociedad. (Haydée Rionda. abril de 2013). 4). Sus elementos son: La comprobación,
la certeza, la objetividad, la razón, lo sistemático, y demostrativa. 5). Lo específico de la
ciencia es que es: A). Neutral y objetiva. Se basa en hechos concretos, no en opiniones ni
en conjeturas. B). Metódica y sistemática. Se establece un procedimiento a través de una
serie de pasos ordenados para explorar. C). Verificable. Es precisa y exacta en su
desarrollo e hipótesis. D). Comprobable. Se constata mediante la experimentación y la
demostración. F). Abierta a nuevos escenarios. Es susceptible a cambios y lo que hoy es
una limitación puede no serlo en el futuro. G). Acumulativa. Se construyen nuevos
conocimientos partiendo de investigaciones y experimentos anteriores. 6). Objetivo de la
ciencia: El primer objetivo de la ciencia es saber cómo es la realidad, que elementos la
forman y cuáles son sus rasgos. Después de conocer cómo es la realidad, su segundo
objetivo es explicarla, llegar a establecer cómo se relacionan sus distintas partes. El
objetivo de la ciencia es develar verdades generales para establecer leyes fundamentales e
hipótesis.

¿Qué es el conocimiento científico?


¿Qué es una disciplina científica?
¿Diferencia entre disciplina científica y ciencia?
¿Es la criminalística una ciencia?¿Por qué?

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