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Universidad Autónoma de Santo Domingo

Facultad de Ingeniería y Arquitectura


Escuela de Arquitectura
UASD

Asignatura:
Teoría de la Arquitectura II
Sección:
07
Profesor:
Engelbert Eduardo Peña Medina
Tema:
Enseñanza-aprendizaje de la arquitectura a lo largo de la historia
Estudiante:
Arianny Luciano De La Rosa
Matricula:
100634332
Fecha de entrega:
21/09/2023
- ¿Qué es la Arquitectura?
La arquitectura es el arte y la técnica de diseñar, proyectar y construir
edificios y espacios públicos.
El grado de arquitectura es una carrera fascinante que integra
conocimientos de arte, ingeniería, diseño, paisajista y urbanismo. Es un
grado creativo, que te enseña a diseñar espacios.
La arquitectura es el arte o disciplina en el que a través de distintas
técnicas se pueden planear, proyectar, diseñar y realizar edificios y
monumentos. A través de ella se puede llegar a una organización del
espacio dándole a este su valor pleno; se trata de otorgarle forma, utilidad
y belleza al ambiente físico para poder cubrir y satisfacer ciertas
necesidades que experimentan los seres humanos. Al encargado del
diseño de las edificaciones se le denomina “arquitecto”.
El saber del arquitecto es, en tal sentido, técnica. La palabra arquitecto
originalmente designa una posición y una relación: el primero entre los
constructores. En la antigua Grecia no existía la palabra arquitectura, y lo
que hoy entendemos por eso formaba parte de la tekné. En su libro
Cuatro definiciones históricas de la arquitectura, Stephen Parcell revisa
cómo el concepto de arquitectura y varios de sus elementos —quien
diseña, con qué material, quién construye, quién habita, qué es una
construcción o edificio, qué es un dibujo, qué es una obra de
arquitectura— cambiaron en cuatro periodos distintos: la antigüedad
grecolatina, la edad media, el Renacimiento —que inventó al diseño y al
arquitecto modernos— y la Ilustración con sus Bellas Artes. Sobra decir
que tres cuartas partes del mundo y miles de años de su historia y su
arquitectura no están incluidos ahí ni en la idea de arquitectura de una
disciplina que, aunque se sueñe universal, es parcial y local.
No está de más recordar aquí cómo, en su Historia de la arquitectura
según el método comparativo, libro canónico de la enseñanza
arquitectónica anglosajona, Banister Fletcher, padre e hijo, dibujan “el
árbol de la arquitectura”, a la manera del “pedigrí del hombre” de Ernst
Haeckel, dejando fuera a las arquitecturas de China, la India, México y
Perú aduciendo que se desarrollaron por su propia cuenta y ejercieron
poca influencia directa en la evolución de la arquitectura histórica
europea, la única de su interés. Hay que anotar, de paso, que hoy la
biología imagina y dibuja el desarrollo y cambio de los seres vivos de una
manera muy distinta al árbol teleológico de Haekel, pues un virus, un
orangután y un ser humano han “evolucionado” de igual manera a lo
largo de sus propias historias biológicas y en relación a sus contextos.

- Enseñanza-aprendizaje de la arquitectura a lo largo de


la historia.
Las historias de la arquitectura tradicionales se pueden abreviar en 3
tendencias los enfoques predominantes, hasta la actualidad, en los
estudios de la Historia de la Arquitectura tradicional, el primero ligado a
criterios evolucionistas, donde ha nacido la noción de estilo, que se ocupa
especialmente de los aspectos formales de la obra arquitectónica, por lo
tanto, únicamente de la evolución de las formas y donde la exploración
del objeto como conjunto de piezas o partes que deben ser analizadas en
detalle para poder recomponer el objeto en cuanto fenómeno plástico.
Sobre todo, predomina lo formal y estético ya que la arquitectura queda
reducida a una cuestión epidérmica-decorativa.
Otro enfoque es aquel donde el estudio del fenómeno arquitectónico
exige una gran recopilación de información, un cúmulo de
documentación sobre el objeto de estudio, sin embargo, no se acompaña
con la interpretación que permita explicar el sentido de esa arquitectura.
La arquitectura como construcción de espacio, se fundamenta en la
habitabilidad, la cual, a su vez, se sustenta básicamente en un concepto
que rige los principios espaciales. De esta forma, la arquitectura, en su
materialización, dio a la sociedad en el pasado metáforas lingüísticas;
mientras que, en la actualidad, se rige bajo parámetros estándares
ceñidos a una rigurosidad técnica, funcional, económica y mercantilista.
La arquitectura no es una ciencia, es una disciplina, no exacta, sino
mutable, cambiante, que se transforma y no está sujeta a estereotipos o
patrones formales o sociales; una disciplina que comparte raíces con las
humanidades, por cuanto son productos que se basan en los
comportamientos humanos como elementos de estudio.
La arquitectura se erige primero como refugio de los hombres en la
naturaleza contra las inclemencias del tiempo y el rigor cotidiano de la
vida misma. Con el Renacimiento surge un nuevo sentido, acompañado
del mismo espíritu de la época. Aparece el palacio señorial, la casa del
hombre preeminente, demarcado fundamentalmente por unas
condiciones económicas que definían las diferencias habitacionales de los
espacios diseñados por los arquitectos de la época sometidos o
condicionados al poder de un rey, de la nobleza, o posteriormente de la
burguesía, que determinaba el tipo y el estilo de las construcciones
elaboradas.
El suceso, es la base sobre la cual se debe consolidar la arquitectura; ésta
no se puede seguir considerando como un hecho físico, material y
tangible, ni mucho menos como un organismo pétreo o inmutable. Es el
acontecimiento producido en ella y por ella, sobre el cual se desarrollan
todos los ámbitos de la cotidianidad, el que le devuelve el sentido de su
formación, la capacidad para albergar una multiplicidad de
circunstancias dentro de un mismo espacio físico.
Aparece, finalmente en la Modernidad, como un tema nuevo, antes jamás
tratado y como resultado de la serie de determinantes y componentes
históricas -como la Revolución Industrial entre otros- la casa para todos
los hombres: la vivienda seriada y la planificación sistémica de las
ciudades. En este último período, se les dio una gran importancia a las
ciudades, debido sobre todo a los procesos de transformación urbana y de
desarrollo tecnológico,
La historia de tipo recopilativo reduce la información a simples datos
desvinculados de sus contextos histórico, social y urbano, bloqueando el
estudio al objeto en su materialidad y reduciéndolo a mera recopilación
sin llegar a una etapa de análisis de los datos recabados. Otro enfoque es
aquel donde la Historia como biografía de arquitectos sobresalientes, esta
aproximación asume los datos biográficos con pretensión de ser una
historia de la arquitectura. Es evidente que este tipo de trabajos está muy
lejos de ser lo que pretenden. Se dedica a la vida de los arquitectos y a
mencionar sus obras, siendo de carácter informativo. La biografía como
historia se inspira en la interpretación basarían de la historia,
encontrando inspiración en el enfoque de las vidas de grandes artistas
publicada por Vasari en 1550.

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