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“INSTITUTO DE EDUCACIÓN SUPERIOR

PEDAGÓGICO PÚBLICO-HUARAZ”

Tema: El conferenciante u orador.

Docente: Roosevelt Tamara.

Alumna: Leiva Luciano, Nayeli

Curso: Electivo I

Ciclo: v

IESPP-H
EL CONFERENCIANTE U ORADOR

1. La capacidad de hablar en público ¿es innata o adquirida?

Después de tanta controversia sobre este tema, se llegó a la conclusión de que la


capacidad de hablar en público, es una combinación de lo innato y lo adquirido.

Lo vemos como don, porque la mayoría de las personas tenemos el don de hablar,
tenemos seguridad en nosotros mismos, rasgos más o menos simpáticos, el timbre o
potencia de la voz, la presencia del cuerpo y el entusiasmo son cualidades que ayudan
transformarse en un buen orador.

Y llega hacer una conquista, porque algunas cualidades por si son necesarias, no son por si
mismas suficientes: hay que hacerse orador. Por muy destacadas que sean esas
cualidades, siempre es necesario hacer un esfuerzo para prepararse.
Hablar bien en público tiene mucho de arte, si entendemos por arte una ‘manera de hacer
conforme con unas reglas’. Como todo arte, puede enseñarse y aprenderse,
beneficiándose de las cualidades naturales que se puedan tener.

Para forjarse un orador, para llegar a ser un buen conferenciante, hay dos condiciones
fundamentales:

- Tener una personalidad madura, activa y productiva, capaz de auto expresarse.


- Tener algo que decir acerca de un tema, con el cual se está compenetrado; mejor
todavía si se está implicando en él.
2. La preparación del orador: ¿Cómo aprender a hablar en público?

¿Cómo prepararse?, ¿Cómo cultivar y desarrollar las cualidades y condiciones que


permiten llegar a ser un buen orador o conferenciante?, ¿Cómo mejorar y desarrollar la
habilidad para hablar en público?

Como bien dijimos, no existe ninguna receta ni varitas mágicas, pero ciertas sugerencias
pueden ayudar. Cualquier persona dotada puede aprender a organizar un discurso y a
adquirir ciertas habilidades que le permitan hablar en público en forma útil, e incluso
agradable.

¿en qué consiste esa preparación? Lo esencial es saber reunir y ordenar los pensamientos,
ideas y convicciones propias, en relación con el tema. Una forma de presentación que sea
clara, precisa y atractiva, y luego aprender a expresarlos adecuadamente para que puedan
ser comprendidos por aquellos a quienes va destinado el mensaje.

Existen dos clases de preparación:

- La preparación remota
Consiste en disponer de una provisión de datos, información, conceptos, opiniones,
recuerdos e imágenes a fin de poder recurrir a ellos, tanto como para la preparación como
para el desarrollo de la conferencia. Esta preparación se llama remota, en el sentido de
que no se hace inmediatamente para preparar un discursó. Es la preparación que se va
adquiriendo a lo largo de toda la vida.

- Preparación inmediata (algunas reglas generales)


Esta preparación se lleva a cabo por:

- Los ojos: Esta forma de preparación se hace fundamental a través de la lectura, pero
no leyendo de cualquier forma.
- Los odios: Oyendo también se aprende a hablar en público. Para ello no hay que
perder la ocasión de oír a los buenos oradores y conferenciantes.
- La acción: PRACTICAR. He aquí el principal consejo y lo mejor que usted puede hacer,
esto es fundamental, ya que la capacidad de hablar se afirma y se desarrolla después
de cada experiencia.
3. Obstáculos psicológicos a la comunicación: el miedo y la timidez.

Normalmente la mayoría de personas sienten miedo o temor de hablar en público, pero se


debe pensar dos cosas:

- Se puede disminuir las incidencias del miedo y timidez a tal punto de no afecte la
calidad.
- Un poco de miedo o temor es saludable.

Existen dos tipos de miedo:

3.1 El normal, cuando se presenta ante un auditorio, se tiene cierta responsabilidad, por lo
tanto, ha de tener alguna ansiedad o temor.
3.2 El paralizante, cuando la ansiedad se transforma en miedo y temor con síntomas
paralizantes en lo físico y en lo psíquico, es necesario superarlo.

Sugerencias para superar el miedo frente a un auditorio:

- Saber bien el tema que uno va a desarrollar y estar compenetrado con él.
- Lograr una descentración/ relajación, combinada con una concentración.
- Controlar la mecánica corporal.
4. Obstáculos sociológicos a la comunicación: la organización autoritaria de la sociedad
y el no protagonismo de la gente.
Formarnos y capacitarnos para hablar en público es adquirir algo que tendría que ser
natural en las relaciones sociales dentro de una sociedad en donde cada uno tiene o
debería tener un rol protagónico en todo lo que le concierne. Una participación activa en
la vida social nos daría la capacidad de ‘saber decir la palabra’

5. ‘Aquello’ que distingue al orador.

Podemos decir que no es la buena voz que hacer ser un buen orador, ni la talla, ni la
perfección del gesto, ni la agudeza de la mirada, ni el tema que trata, ni el dominio de las
técnicas de expresión y comunicación, ni siquiera la brillantez de la oratoria. El orador que
más se comunica con el auditorio es aquel que lo que dice lo saca de su propia vida.

6. Condiciones y cualidades del orador.

Cualidades físicas:

-Aseo personal: debemos estar limpios y mostrar cuidado corporal.

-Ropa: una correcta combinación resalta nuestra personalidad.


-Actitud positiva: recomendamos técnicas de respiración y relajación.

-Salud física: no dudes en alimentarte bien, hacer ejercicio y llevar una vida sana.

-Salud mental: el estrés y los pensamientos negativos no ayudan.

Cualidades intelectuales:

-Memoria: recordar nombres y momentos ayuda a exponer con claridad.

-Imaginación: te ayudará a dar forma e ir construyendo tu discurso.

-Sensibilidad: mostrarla hace que nos ganemos el cariño de la persona.

-Iniciativa: genera motivación y ejemplo para empezar a actuar.

- Dominio de la temática: ayuda a tener confianza en nuestra presentación.

Cualidades morales:

-Honradez: muestra una forma recta y honesta de proceder.

-Puntualidad: ayuda a ganarnos la confianza del público.

- Sinceridad: mentir o hablar con doble sentido acabará con nuestra carrera como orador.

- Congruencia: actúa según tus palabras y hablarás menos.

-Lealtad: nunca traiciones la confianza que tus oyentes han puesto en ti. Sería el fin.

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