Está en la página 1de 161

COMO

AMAR A OTROS
SIN PERDERSE A
UNO MISMO

Cinco Poderosos Pasos para Salir del Dolor,


Reencontrarte y Construir Relaciones Exitosas

Analay Souza Campos


Copyright © 2019 by Analay Souza Campos.

Derechos Reservados.

Todo el contenido de este libro tiene derechos de reproducción y está


amparado bajo leyes y acuerdos internacionales de derechos de reproducción.

Ilustraciones: Aura Ilustrada © 2019

Traducción: Mingo Scordo

Edición: Mariela Cordero


A mi madre,

Mamá, el dolor tiene final.

Y lo encontré.

Te amaré por siempre.


MI REGALO PARA TI

Descarga una versión de Los Cinco Pasos Recordatorio Diario

www.analaysouzacampos.com/gift
Contenido

Prólogo
Lo que aprenderás
Paso Uno: Liberándote de Tu Dolor

Aceptando y Liberando
Encontrando a tu Verdadero Yo
Paso Dos: Perdonándote por lo que hiciste y no por quien eres
Las Cosas que el Monstruo Ha Hecho
Haciendo las Paces Con El Monstruo
Tu Verdadera Identidad
Paso Tres: Viendo a los demás por lo que son y no por lo que han hecho
El Error del Principiante
Relaciones: Tú y tu Reflejo

Paso Cuatro: Aprendiendo a Amarte Completamente


Un Mundo Libre de Expectativas
El Amor Propio y su Esencia
Paso Cinco: Descubriendo la Abundancia Interior
Dar es Ser
Contribución y Evolución
Palabras Finales
Aplicando los Cinco Pasos

Diariamente
Agradecimientos
Aura Ilustrada
Prólogo

Este libro representa la primera cosa en mi vida a la que puedo considerar


como una contribución. Es uno de los primeros actos que realizo que
definitivamente no es un intento de recibir o de obtener amor y aceptación de
los demás. Por el contrario, este libro expresa mi deseo de compartir mi
naturaleza original, la que es perfectamente imperfecta y espero que mi
realización pueda inspirarte a hacer lo mismo.

Soy una codependiente en recuperación.

La codependencia se trata de depender en exceso emocional o


psicológicamente de una pareja o compañero, que por lo general es alguien
que necesita apoyo, pues padece una enfermedad o adicción.

Me estoy divorciando después de haber estado casada por siete largos años.
Los años más duros y reveladores de mi vida hasta ahora. Pese al intenso
dolor que experimenté, agradezco profundamente lo que viví durante estos
años. Más allá del sufrimiento, logré por fin despertar y encontrar la puerta
que anduve buscando durante mucho tiempo: la puerta que se abría hacia mi
pleno desarrollo espiritual. Este período de mi vida ha sido un ciclo completo
del alma, dedicado a redescubrirme y a conocer los caminos más profundos e
intrincados de mi corazón.

Con total sinceridad comparto contigo los pormenores de mi intenso proceso,


con la intención de que puedas aprovechar todo lo que he aprendido. Espero
que puedas aplicar algo de lo que he vivido durante el viaje más impactante
de mi vida. Después de asistir a un evento que transformó mi existencia, Cita
con el Destino con Tony Robbins, hace apenas un mes, he re-escrito mi
destino, mi misión y he recuperado el poder de mi alma. Le pido al poder
universal que mi experiencia y mis avances te ayuden a alcanzar el siguiente
nivel en tu vida, sea cual sea para ti. Y espero que mi testimonio te inspire a
liberarte de tu pasado y a visualizar y manifestar tu futuro.

Muchos hombres y mujeres tienen una pareja cariñosa y son capaces de


relacionarse con ella de una forma saludable. Yo tuve el compañero perfecto,
acorde a los propósitos de mi evolución, pongámoslo de esa manera. Y le
agradezco al cielo por ello. Pues he podido conocer los lugares más oscuros
de mi alma, mi mente y mi cuerpo. A través este sentimiento tan profundo, he
podido conectarme con una energía universal transformadora y acceder a
conocimientos y principios de una forma contundente y clara. Tengo la
esperanza de que las palabras aquí plasmadas puedan transformar tu corazón,
inspirarte e impulsarte a conquistar tu máxima realización. Mi mayor deseo
es que verdaderamente puedas amar y ser amado como siempre lo soñaste.
Tengo la firme convicción de que al escribir este libro fui guiada por un
propósito muy elevado. Después de atravesar el camino del dolor he recibido
luz, y mi misión es compartirla contigo.

Es por eso que he escrito este libro en 27 días. He canalizado el amor


verdadero para todos aquellos que desean experimentar un despertar en sus
relaciones personales, y anhelan encontrarse a sí mismos.

Si deseas obtener el mayor provecho de este libro, y experimentar en tu


interior una transformación radical, asume que no te conoces totalmente
cuando leas estas palabras.

Libérate de tener que preguntarte a cada segundo si estos principios aplican o


no a ti. Es tu mente interviniendo. Ríndete. Permite que la experiencia de
lectura sea profunda. Como si nadie estuviera mirando. Como si ni siquiera tú
mismo estuvieras mirando.

Yo me he convertido en este libro. Me he convertido en una mujer que se


ama y se acepta a sí misma. Ahora puedo ofrecer mi contribución al mundo,
desde un lugar de abundancia y amor infinito.

Es al filo de tu egoísmo, que finalmente encuentras a los demás.

Tanto mi naturaleza humana como mi naturaleza divina se han liberado al


escribir estos pensamientos. Algunas partes de este libro fueron escritas desde
estados emocionales profundos de comprensión y plenitud. He sido tan pura
y auténtica como mis limitaciones humanas me lo han permitido.

La dualidad del ser se expresa a través de todo el libro. Existe una creencia de
que si prestas atención, y escuchas bien en tu interior, hallarás dos versiones
de ti mismo. Quizás de niño lo escuchaste, "el angelito y el diablito" -
seguramente viste esto en muchos dibujos animados. Exactamente eso somos.
La guerra entre el cuerpo y el alma. Lo que vamos a descubrir es que existe
un lugar en intermedio, que se llama corazón. Y que duele vivir allí. Pero es
precisamente en el corazón donde la magia de la vida se experimenta. Eso
vamos a aprender en este libro. Que para amar desde la libertad es necesario
saber permanecer en el lugar correcto de nuestra realidad, que es el corazón.
Siempre que lo comenzamos a sentir, duele. Y oscilamos de derecha a
izquierda en una frecuencia tan alta que se nos escapa el presente. Sufrimos
por el pasado y soñamos con el futuro. Pero nos perdemos la vida evadiendo
el dolor del momento presente.

Cada capítulo contiene fragmentos de mi experiencia personal, pensamientos,


sentimientos y batallas que he librado. Voy a hablar abiertamente del viaje de
regreso hacia mi corazón, y de todo lo que se necesitó de mí y de otros para
finalmente obtener el éxito en esta transcendental búsqueda. Profundizaré en
las experiencias dolorosas que fueron relevantes en mi camino, en sus causas
y describiré cómo me llevaron al auto-descubrimiento.

De esta misma manera, los capítulos también tienen un contenido y


principios más elevados. Estos principios te ayudarán a despedirte y a
liberarte de tu antiguo yo. Los reuní en una sección llamada: Palabras de
Sabiduría, que localizarás a lo largo del libro. En cada capítulo vas a
encontrar dos voces hablando: hablará el ser humano y el ser divino en un
viaje rumbo a la reintegración.

Además de la experiencia personal, y las Palabras de Sabiduría, encontrarás


una tercera sección llamada: Afirmaciones de Poder. Estas afirmaciones me
mantuvieron en pie durante los días de incredulidad. Estas son las palabras
que me dieron confianza, que me empoderaron y que me repetía a mí misma
a diario para mantener mi dualidad integrada y en constante renovación.

Este libro no es acerca de mí, sino acerca de lo que puedes llegar a conquistar
por ti mismo. Espero que puedas aprovechar todas las ideas que he
canalizado aquí. Y sería maravilloso que repases este contenido de vez en
cuando. Me honra profundamente la posibilidad de que encuentres el
consuelo que tu alma necesita en las Palabras de Sabiduría, y que tu mente y
corazón se integren con las Afirmaciones de Poder que hallarás en el
transcurso de este viaje.

Gracias por confiar en mí, por regalarme tu atención y por compartir conmigo
la parte más vulnerable de ti mismo.

Te invito a acompañarme en este sendero hacia el amor propio y la sanación.


Ha sido un largo y tortuoso camino para mí, pero ha valido la pena cada
segundo.
Lo que aprenderás

Tras vivir mi propio proceso y reconectarme con mi ser interno, pude


identificar con claridad Cinco Pasos que pueden ayudarnos a aprender a
amar desde la plenitud, y no desde la esclavitud. Amar desde la abundancia y
desde la libertad es algo que todos podemos aprender y alcanzar. Ven,
exploremos juntos cada uno de estos pasos y profundicemos en ellos, para
descubrir los secretos que nos ayudarán a amarnos y amar a los demás de una
forma sana.
Cinco Pasos para Recuperar tu Propia Identidad y
Aprender a Amarte ti Mismo y a los demás desde la
Abundancia y no desde la Desesperación.
PASO #1: Libérate del dolor. Aprende cómo salir de la prisión en la cual tú
mismo te has recluido, creyéndote una víctima de las circunstancias, para así
inconscientemente obtener atención, compasión, y aceptación de los demás.
Libérate de ese estado que te hace volver a un lugar de carencia y de miseria.
Creer que eres víctima de las circunstancias es un pensamiento que necesitas
para justificar el no comprender el propósito de las lecciones y situaciones
que se presentan en tu vida. Tú puedes liberarte de ellas.

PASO #2: Perdónate por lo que has hecho, no por quien eres. Aunque te
arrepientas profundamente de las decisiones que hayas tomado en tu pasado y
de los hechos que hayan ocurrido en tu vida, es importante que dejes todo
este sentimiento de culpa atrás. Descubrirás tu verdadera identidad y que no
estás atado a tu historia o a tu comportamiento.

PASO #3: Aprende a ver y a percibir a los otros por quien realmente son,
y no por lo que han hecho. En tus pasadas relaciones, en las presentes o en
las futuras, es importante que puedas ver a otros tal como te ves a ti mismo.
Debes aprender ver a otros con compasión, y perdonar a los demás así como
has aprendido a perdonarte a ti mismo, con la comprensión y la tolerancia
que el verdadero amor realmente requiere.

PASO #4: Aprende a amarte completamente. Desarrolla una autoimagen


positiva, permítete identificar las partes de ti que crees que te hacen humano,
resalta tus virtudes y lo que te hace sentir orgulloso de ti mismo. Nada ni
nadie va a poder borrar la forma en que te ves a ti mismo. Así como te ves,
así serás amado. La integración y la realización solamente pueden provenir
desde un lugar de amor y de aceptación propia. Debes materializar un amor
propio imperecedero, que no te cause dolor.

PASO #5: Descubre la Abundancia que llevas dentro. La abundancia que


todos llevamos dentro y que a veces no encontramos se localiza en un lugar
recóndito de nuestro interior, que no puede ser creado o destruido, solo
descubierto. Vamos a aprender a despertar esa abundancia y a invocarla con
simplemente pensar en ella. Solamente sabiendo que existe vamos a poder
tenerla a nuestro alcance. También aprenderemos a conectarnos con esa
fuente de amor y plenitud para así comprendernos a nosotros mismos de una
forma amorosa y compasiva, sin criticarnos como normalmente hacemos.

Después de profundizar en estos pasos podrás alcanzar un nivel de


comprensión más profunda acerca de lo que realmente significa cambiar tu
vida. Obtendrás una maestría en el arte de amar a otros, sin perder lo más
valioso que tienes, que eres tú mismo. Serás libre para amar, y el amor hacia
los demás ya nunca más será tu prisión.
Exhala toda la negatividad

~ e inhala la emoción que deseas experimentar ~


Es difícil ceder el control.

Es difícil decir, basta, se acabó. Especialmente cuando sentimos dolor. Es


muy difícil. Dejar de pelear, no reaccionar, no querer tener la última palabra.
Es muy difícil darse por vencido y desistir en la búsqueda eterna del amor.

Y quizás hay una razón por la cual es difícil. Porque después de todo
teníamos buenas intenciones. Queríamos experimentar el amor, queríamos
amar y ser amados, deseábamos hacer a esa otra persona feliz, construir
nuestras vidas. ¿Puedes pensar en algo que hubiera sido mejor que eso?

Ceder el control puede tomar años, décadas. Sin embargo, a veces llega un
momento en que la vida nos obliga a retirarnos de la carrera. Y las razones
que la vida nos da para retirarnos, son a veces más fuertes y dolorosas que las
situaciones con las que estábamos lidiando inicialmente.

Un accidente, la muerte de un hijo, de un familiar, un acto de violencia, y


muchas otras cosas que no vale la pena mencionar. Son señales que
deberíamos tomar en cuenta, para evaluar realmente el estado actual de
nuestra vida, y la vida de los demás. Esta evaluación nos indicará si
necesitamos una extrema transformación existencial.

A veces pensamos que nuestra vida es pacífica. Que no genera ningún daño
porque no es violenta. Y te cuento, el peor de los daños es el silencioso,
porque ese daño no conduce a cambios. Se acumula y se expande hasta que
estalla.

Incluso, si tu vida no es así en todas sus facetas, es muy probable que siga un
patrón similar en las áreas que más difíciles te resultan manejar. Quizás es
hora de separarte de la tensión que te genera la búsqueda de la perfección Tal
vez es hora de hacerte a un lado por un momento y considerar que podría
existir una forma de evitar el gran sufrimiento que experimentas cuando la
vida te empuja a aprender una lección. Quizás existe una manera de soltar las
situaciones tóxicas y de encontrarte a ti mismo antes de que la vida te obligue
a hacerlo.

Yo pienso que sí podemos. Mi objetivo, sin embargo, no es que aprendas de


mis lecciones, porque eso sería imposible. Pero mi deseo es compartir
contigo algunos de los pensamientos que han sido útiles para mí y que me
han ayudado a alcanzar la plenitud y que me guiaron a la sanación de intensas
y trascendentales situaciones. Espero que mi experiencia te pueda servir y
ayudar, y que puedas aplicar los principios universales que se encuentran
detrás de cada lección.

Baja la guardia por un momento. Pídete permiso para comenzar este viaje.
Considera por un instante que podrías descubrir una forma de liberar tus
emociones. Y que logrando esa libertad, seguramente podrías alcanzar lo que
has perseguido por tanto tiempo: El amor verdadero.

Enfrentándose a uno Mismo


Querías ser feliz ¿verdad? Amar, ser amado y que eso simplemente se
manifestara en una dicha perenne. Si me hubieras preguntado lo que era la
felicidad cuando tenía cinco años, esa hubiera sido mi respuesta. Amar y
sentirse amado por los demás. ¿Qué es lo que sucede con nosotros los adultos
que nos gusta tanto complicarlo todo? Muchas veces observamos todo con
tanta objetividad que terminamos menoscabando nuestras propias
experiencias ¿Por qué contaminamos nuestras relaciones e interacciones con
palabras grandilocuentes carentes de significado?
Las palabras tienen un fuerte impacto en la forma en que percibimos el
mundo exterior. Lo que nos decimos a nosotros mismos acerca de una
determinada experiencia es lo que determinará cómo reviviremos esa
experiencia en el futuro. Piensa en eso por un segundo. Quizás recuerdes
alguna experiencia en tu vida que te hizo sentir en las nubes, y sin embargo,
¿te dijiste algo a ti mismo acerca de esa experiencia, y ahora no puedes evitar
recordar esas palabras cada vez que accedes a esa memoria?

Sí. Y así es como vivimos. Vivimos con una visión del mundo que no
necesariamente hemos experimentado, pero que nos hemos narrado a
nosotros mismos. Una visión del mundo adulterada por la forma en que lo
vemos. Cuando nos damos cuenta de eso, sentimos alivio. Pues si podemos
aclarar nuestra visión, nuestro mundo puede cambiar. Interpretamos todo a
cada segundo. Sin cesar. Contrastamos nuestras experiencias reales con
nuestros valores, creencias, y con las reglas de nuestra vida.

Si el resultado de esta superposición de nuestras experiencias y valores,


coinciden, sentimos lo que llamamos felicidad. Sentimos que estamos bien, y
que la vida nos sonríe. Cuando no coinciden experimentamos momentos de
frustración y a veces sentimos que la vida es injusta, o que otras personas son
injustas. Y ese sentimiento de injusticia nos lleva a mostrar al mundo una
actitud que muchas veces no está en consonancia con quien realmente somos.

No hay nada malo en mí, ni en ti, ni en los demás. Los humanos que han
alcanzado la realización se han tomado el tiempo de entender a profundidad
su dualidad interna. Se han perdonado y han emprendido el viaje de retorno
hacia su unidad, su reintegración. La reintegración de su lado humano con su
lado divino. Todos poseemos ambos lados, aunque muchas veces no estamos
conscientes de esto.

¿Alguna vez has escuchado dos voces hablándote al unísono? Estoy segura
que te ha sucedido, como me ha sucedido a mí y a muchos otros. ¿Cuántas
veces has elegido escuchar una e ignorar la otra? ¿Cuántas veces
conscientemente has pretendido no escuchar a esa otra voz? ¿Cuántas veces
hemos realmente tomado decisiones inconscientes? ¿Será que nos engañamos
a nosotros mismos creyendo que las cosas simplemente nos pasan y que
desconocemos el por qué?

Por muy difícil que nuestras vidas humanas se tornen, ¿Realmente podemos
decir que somos víctimas de nuestro destino?

Lo que he descubierto en el trayecto de este camino, es que solemos escuchar


a la voz egoísta que llevamos dentro. Y digo egoísta no para ser dura, u
ofensiva, o para que cierres el libro y te levantes de la silla. No. Digo egoísta
porque me refiero a que es la voz de nuestro ego. Esta voz responde a
nuestras necesidades viscerales y humanas. A nuestros caprichos y
propensiones. Y escuchamos a esta voz, porque es parte de nosotros también.
Nos hace creer que si actuamos acorde a ella vamos a satisfacer las
necesidades por las que emocionalmente venimos sufriendo desde hace
mucho. Y sacrificaríamos cualquier cosa para sentirnos completos, y lo
apostamos todo esperando que las decisiones tomadas nos lleven a un lugar
de plena felicidad. Sin embargo, lo que normalmente sucede es que incluso
cuando la necesidad es cubierta, y experimentamos la plenitud, es una
plenitud efímera. Es como una probadita del destino que tanto anhelamos,
pero esta breve muestra proviene de los medios equivocados. Entonces se
desvanece, se marchita ante nuestros ojos. Y así como una música que se va
apagando en la lejanía poco a poco la dejamos de sentir.

Entonces, ¿Qué hace un alma divina bien intencionada, queriendo amar y ser
amada, en este mundo? ¿Por qué se experimentan tantas dificultades para
amar y sentirse amado? ¿Por qué encontramos tanta oposición para lograr lo
que realmente anhelamos?

Me hice esta pregunta durante muchos años.

Recomencé mi vida muchas veces, y pensaba en cada intento, que ahora sí,
me encontraba en el camino correcto. Me dije muchas veces: ahora sí. Este es
mi destino, el que anhelaba. Me dije a mi misma que ya tenía lo que antes me
faltaba. Y que ahora que lo tenía, nunca más lo dejaría escapar. Tenía
entonces la certeza de que por fin la vida sería diferente, y que ahora
finalmente el amor aparecería. De verdad.

¿Conoces a alguien así? ¿Alguna vez te has sentido así? Si te has sentido así,
probablemente también habrás experimentado el vacío inmenso que llega
cuando, después de mover cielo y tierra, no solamente no te sientes pleno, si
no que los que te rodean tampoco lo están.

A estas alturas quizás ya hayas formado una familia. Y si has tenido suerte,
un hogar. Y desbaratar el circo que has creado en nombre del amor y la
realización no es una tarea fácil. A menudo vivimos sumidos en la tristeza y
la depresión y creemos que merecemos vivir así. Y nos llevamos este dolor a
la tumba. Sin saber que todos estos problemas no resueltos pueden llegar a
tener un serio impacto en nuestros hijos, nuestras parejas y familias.

Y desde ese lugar, la bola seguirá rodando, y esa forma de ser, pensar y vivir
que te mantiene esclavo de ti mismo, no morirá contigo. Tus hijos adoptaran
ciertos patrones que a ti te sirvieron de protección, pensando
inconscientemente que al igual que a ti, los protegerá a ellos. Desconociendo
el dolor que esa aparente protección lleva consigo. Y, solo momentos como
esos en la vida, que provocan una sacudida en el alma, esos que nos definen,
serán capaces de restaurar el orden que necesitamos para comenzar a vivir la
vida a plenitud.
Vaya, esto es abrumador ¿no? Pero sé sincero contigo mismo, abrumador
¿por qué? ¿Porque te cuesta decir tanto estas palabras? Porque sabes que si
actúas en base a ellas, tu vida tendría que cambiar y entonces, surgirán
aquellas preguntas que son muy difíciles de responder.

Te comprendo. Profundamente. Y no solo te comprendo, si no que te amo.


Pero he aquí la pregunta más difícil: ¿Te amas a ti mismo? ¿Te aceptas tal
como eres? ¿Dónde estás en tu vida? Suena egoísta ¿verdad? Amarse a sí
mismo por sobre todas las cosas. Te comprendo. Sé dónde estás, y sé lo que
sientes. Y si me das una oportunidad, te llevaré de la mano y te haré
comprender que si te amas a ti mismo encontrarás lo que siempre has
querido, que es amar y sentirte realmente identificado con los demás, como
siempre lo has deseado. ¿Sabías que amarte a ti mismo, es el acto menos
egoísta que existe?

Este libro es un viaje en el que aprenderás lo que verdaderamente es el amor


propio. Parece fácil ¿Pero sabes lo que eso significa realmente? No nos
estamos refiriendo a tener un día de spa, y mimarnos a nosotros mismos.
Hablo de hallar en ti una profunda comprensión de lo que una versión
emocionalmente saludable de ti mismo haría por ti y tus relaciones. Una
versión de ti que se sienta realizada, plena. Entendí después de muchos años,
que si comienzas o te mantienes en una relación con el objetivo de llenar un
vacío en tu interior, estarás cometiendo la mayor equivocación de tu vida. Las
relaciones excepcionales ocurren entre dos seres humanos que han alcanzado
cierta plenitud individualmente, y que se unen para compartir y expandir esa
luz propia. Una buena relación jamás podrá estar formada por dos humanos
desesperados tratando de encontrar algo que no existe dentro de ellos
mismos.

Pero ¿por qué? ¿Por qué buscaríamos en otros lo que no podemos encontrar
en nosotros mismos? ¿Y por qué nos sentimos atraídos por personas que no
se sienten plenos y realizados? Estas son preguntas fuertes.

A menudo, en una relación, donde existe culpa emocional, vergüenza e


irresponsabilidad, es probable que uno de los dos posea estas características.
Si encuentras que una relación de este tipo ha durado por más de tres años,
entonces es casi seguro que ambos presenten el patrón de falta de amor
propio, de lo contrario no habrían permanecido juntos por tanto tiempo.

Este patrón tiene un propósito significativo. Está sirviendo a la parte de ellos


mismos que siente tanta "carencia" en primer lugar. La parte que duele. Al
corazón que no se siente realizado y que les hace sentir que no son
merecedores de un amor verdadero y pleno.

No soy experta en la psicología humana, o la mente. Pero en lo que sí soy


experta, con toda seguridad, es en la ilusión del dolor y el fracaso que una
persona sin realización propia puede infundir hacia los demás y hacia sí
mismo.

He estado en los lugares más oscuros del corazón, la mente y el alma. Los he
visto a los tres, mirándose confundidos, sin saber cómo alinearse y coexistir.
Y he estado allí con los ojos abiertos. He visto lo que pasa. He visto al
conflicto expandirse, y al dolor que se esconde detrás de cada ataque.

He visto al atacante sufrir, incluso más que aquel que recibe la


agresión.

Este libro, como ya de seguro sabes, no es acerca de ti, o de tu pareja. Sí, ya


sé, te hirió. Sí, ya sé, tu historia es dolorosa. La mía también lo fue. Pero yo
dejé atrás los antiguos patrones que me ataban al dolor. Tú también lo puedes
hacer. Esos patrones de aquellos que también tuvieron una vida difícil pero lo
único que hicieron fue lamentarse al respecto. Que no se empoderaron y no
se nombraron dueños y responsables de su felicidad y de su vida. A ellos los
amo también, porque comprendo su enraizado dolor. Por ellos también
emprenderemos este viaje hacia nuestra realización interior.

Para ser dueño de tu felicidad, debes tomar responsabilidad por tu


dolor.

Es vital que sepas, que los que sufren y hacen poco o nada para detener este
sufrimiento, continúan viviendo la misma experiencia dolorosa por el resto de
sus vidas. Las mismas que los han herido tanto.

Incluso después de la separación, o después de desengancharse del agente


que ellos denominan "el problema" todavía pueden sentir los "ataques".
¿Comprendes lo que te digo? ¿Por qué sigues sintiéndote tan miserable si la
persona que te causaba todo este "dolor" ya no está cerca de ti? ¡Ah! ¿De
dónde entonces provienen esos ataques? ¿Cómo se manifiestan una y otra vez
a tu vida?

Si quieres descubrir las respuestas a estas interrogantes, este libro es para ti.
Si verdaderamente crees que puedes llegar a ser el propio creador de tu
destino, lo primero que debes reconocer es que has sido el co-creador de tu
vida hasta este mismo instante.

Si te adueñas de lo que fuiste, poseerás lo que serás.


Te amo. ¿Y tú?
PASO UNO
Liberándote de
Tu Dolor

~ Fui prisionera de mi misma hasta que me atreví a romper mis propias


cadenas, entonces me di cuenta que estaban hechas de hojas secas. ~
¿Que significa liberarse del dolor?

Liberarse presupone que de alguna forma somos esclavos o prisioneros de un


sentimiento o situación que nos hiere y hace sufrir.

El dolor se manifiesta de muchas formas. El dolor es sufrimiento, tristeza,


frustración. El dolor se puede disfrazar de innumerables sentimientos
humanos. Algunos los justificamos, otros los juzgamos. Pero el dolor, es
dolor. Y nos arrastra a un estado de miseria emocional muy agudo. Y nos
seguirá arrastrando hacia una espiral progresiva de sufrimiento, hasta que
ocurra algo que nos haga elevar la consciencia.

La noción de que somos esclavos de este dolor es una noción humana. Un


pensamiento limitante que nos controla. De alguna forma hemos encontrado
cierto tipo de alivio permaneciendo en esta posición. De alguna forma
quedarnos inmóviles en medio del dolor, tiene su razón de ser. ¿Por qué
permaneceríamos en una situación dolorosa, si no fuera así? Los humanos
estamos programados para huir del dolor. Si acercas tu mano al fuego,
automáticamente tu sistema nervioso alejará la mano del peligro. El ser
humano, tanto físico como emocional tiene instintos fuertes de conservación.
Es muy difícil asumir la idea de que permanecemos en el dolor porque así lo
deseamos, porque silenciosamente experimentar este dolor satisface otra
necesidad humana. Yo sé que para una persona que sufre, es muy duro, e
incluso ofensivo, enfrentar esta idea.

La esclavitud radica en la necesidad de permanecer atado a una


situación dolorosa.
Todos nos hemos sentido así en algún momento de nuestras vidas. Todos
hemos vivido situaciones que sabemos que jamás debimos haber tolerado, y
sin embargo, dejamos que pasaran una y otra vez. Mientras tanto
esperábamos que surgiera una solución externa a nuestros conflictos.

Todos tenemos una vieja historia. Esta historia es la que nos creemos y nos
repetimos una y otra vez, cuando nuestras mentes quieren hacer algo con lo
que el alma no está completamente de acuerdo.

Esta historia es también la que le contamos a otros para obtener su simpatía, o


para justificar nuestras vidas y situaciones. Al final, esta es la historia que
odiamos más de nosotros mismos. Una historia de autocompasión que a
nuestro ser divino le cuesta trabajo creer.

Vamos a llamar a esta historia: vieja, porque vamos a descubrir mientras


avanzamos, que está obsoleta, que ya no nos sirve más. Vamos a reconocer
que hemos usado esta historia para justificarnos ante nosotros mismos por
todo lo que no hemos podido lograr, y por todo el amor que no hemos
recibido. La vamos a llamar vieja, porque si estás leyendo este libro, ya sé
que puedes vislumbrar una nueva historia para ti, una nueva forma de verte,
proyectarte y definirte. Vamos a descubrir al final, que tu historia te hería
porque no te estaba llevando a cumplir tus sueños.

Vamos a sumergirnos en la vieja historia y lo que nos sucede cuando nos


aferramos a ella. Notemos cómo puede atraparnos de nuevo, incluso cuando
creemos que nos hemos liberado de ella. Observemos también, esos
momentos en que nosotros mismos volvemos a ella porque simplemente no
sabemos cómo proceder de otra manera.
La Vieja Historia
Mi vieja historia no es importante, tampoco la tuya. Hay una parte de mí que
teme que todo esté perdido. Hay una parte de mí que, que mientras escribo
ahora, está saboteando el plan divino para el que fue creada mi alma. Esa
parte de mí misma se está resistiendo a manifestar mi propósito. Esta parte de
ti también existe, y debes comprenderla completamente. Cuanto más intentes
silenciarla y pretender que simplemente no existe, más grande y fuerte se
tornará.

Comencemos de una vez, no hay que esperar a que tu monstruo te ceda el


paso. Siempre estará allí. No se trata de asesinar a tu monstruo sino de darle
el amor que ansía. Enamórate de tu monstruo. Enamórate de esa parte de ti
que sufre. Está demandando sentirse amada y aceptada.

Por favor, no lo mates. No huyas de ti mismo por amar a otra persona. Te


estás saboteando y no te estás amando del todo. Lo sé, el monstruo que hay
en ti probablemente está haciendo un espectáculo bastante bochornoso en
este momento.

Tómate un minuto de silencio, concéntrate en tu respiración. Míralo. Siéntelo.


¿Qué te dice? ¿Qué te dices a ti mismo cuando te sientes triste y derrotado?
¿Qué te estás haciendo a ti mismo? Bien sea de manera sutil, o en algunos
casos, de manera agresiva, ¿por qué te dices esas cosas? ¿Y qué estás
haciendo para modificar este comportamiento auto-destructivo?

El punto es que si miras más de cerca, encontrarás patrones que son extremos
en su propia acción. Y luego otro patrón extremo de inmediato para intentar
corregirlo. Intentas alimentar al pequeño y pobre monstruo no amado, en
algún momento, antes de que termine el día. Y haces eso porque, después de
todo, has estado luchando contigo mismo para no ceder en todo el día. Lo
haces de una manera negativa y luego retrocedes para corregirlo con una
medida bastante dura. Una bastante costosa.

Me ha llevado mucho tiempo descubrir la importancia de amarse a uno


mismo. Sabía lo que significaba pero lo más difícil era realmente ponerlo en
práctica, no sabía cómo amarme de una manera que se alineara con mi
propósito.

Ama cada milímetro de ti.

Hemos sido condicionados a odiar a la parte de nosotros que busca


desesperadamente amor y aceptación. Tratamos de rechazarla, tratamos de
ignorarla. Y la dolorosa verdad es que jamás dejaremos de ansiar el amor.
Estamos innatamente creados para necesitarlo. Vamos a perseguir al amor
siempre. Haremos lo que sea necesario para encontrarlo de manera positiva,
con hábitos positivos. Pero si no lo conseguimos, adoptaremos patrones auto-
destructivos para obtenerlo.

Tal vez esto se aplica a ti y eres consciente de ello. Tal vez sientas que no se
aplica a ti en absoluto y te molesta un poco leer esto. Te invito a observarte
con detenimiento y a considerar la idea de quizás no te amas completamente.
Pues si te amaras no experimentarías el sufrimiento. Existe una parte de ti que
se encuentra totalmente abandonada y que está suplicando amor
desesperadamente. Te haces mucho daño cuando permites que una parte de ti
se entregue a la auto-compasión.

¿Cómo conseguimos que esa parte de nosotros mismos se incorpore a nuestro


nuevo plan de vida? ¿Cómo le decimos a esa parte de nosotros que habrá
satisfacción, amor y aceptación en el futuro? Esa parte desea sentir el amor
ahora, quiere sentirse aceptada ahora. Y, por cierto, debes saber que al
momento de escribir esto, me encuentro exactamente en este punto de mi
propio viaje. Estoy resolviendo esto sobre la marcha, desde mi corazón, y
tengo un profundo anhelo de encontrarme a mí misma.

Mi vieja historia no es importante porque no me ha llevado a


donde quiero llegar.

Mi historia no es importante porque, incluso si una pequeña parte de mí la


cree, esto me conducirá a comportamientos auto-destructivos que me alejan
del camino hacia mi nueva vida.

Tu historia no es tan importante, porque no se trata de quien


realmente eres, si no de lo que te ha ocurrido.

Y mientras continúas repasando los hechos, solo te llevarán de vuelta a tu


pasado, para alimentar el miedo de tu niño interior.

Asumir la responsabilidad de tu pasado no significa que debas continuar


viviéndolo. Ser dueño de tus decisiones hasta ahora no significa que debas
seguir con una vida que no coincide con tu nuevo plan.

Detente por un momento, toma un vaso de agua aunque hayas tomado algo
recientemente. Hazlo y confía en lo mucho que amo al ser humano que eres
hoy, ahora mismo. Confía en mí, porque estamos en el buen camino para
permitirnos recibir el amor que merecemos, y no solo el amor que anhelamos.
Aceptando y Liberando

¡Increíble! Esa vieja historia fue mi mayor arma. La construía cada vez más
grande, la amplificaba; para parecer más amable ante los demás. Para poder
amarme, a través de la aceptación y validación de los demás. Estaba
convencida de que al ser una mujer súper generosa con alguien que realmente
no me valoraba, mi valía aumentaría de alguna manera. Estos fueron los
pensamientos que controlaron y definieron mi vida hasta ahora.

Vaya. Increíble, ¿verdad? ¿Qué tan loco es eso? ¿Puedes comenzar a captar el
nivel de complejidad con el que estamos tratando aquí? Esta no es una
carencia típica de amor propio. Esta es la carencia de amor propio combinada
con una necesidad desesperada de encontrar amor verdadero. Solo había una
forma de llegar allí. Primero, total honestidad y autenticidad conmigo misma.

Apegarme a mi vieja historia a veces me hacía sentir miserable. Sí, me regaló


algunos momentos de compasión aquí y allá, ninguno de los cuales disfruté.
No estaba feliz conmigo misma. O bien estaba maximizando un problema
para obtener más amor, o minimizaba un problema para ser la heroína. Pero
me repetía a misma que al menos tenía la suerte de tener la oportunidad de
ser amada aunque sea de esta forma. Creía que el sacrificio y el dolor
emocional auto-infligido eran los únicos medios para llegar a ser amada.

Tal fue el dolor y la ansiedad con los que viví la mayor parte de mi vida hasta
ahora. Mi vieja historia era la siguiente: He sido muy generosa con los demás
pero, peso a ello, no me valoraban.

También era una excusa inconsciente de no hacer más por mí misma. Me


consideraba realmente generosa y dedicada a los demás, de los que quería
obtener amor. Y luego, cuando no obtenía el amor y la respuesta que deseaba,
me autocompadecía y gritaba desesperada. Una madre que se sacrifica, una
esposa que se sacrifica, una trabajadora incansable, que ni siquiera tiene
tiempo para ir a la pedicura. ¿Te suena familiar?

Una esclava a tiempo completo de mi profunda necesidad de amor, viviendo


en la ignorancia de no saber cómo obtenerlo.

Palabras de Sabiduría
Cuando quieres hacer algo, ¿Te enfocas en cómo no puedes hacerlo? o por el
contrario ¿en cómo encontrarás la manera de hacerlo? ¿Piensas en lo horrible
que ha sido tu vida en este punto y todas las cosas que te impidieron lograr
tus sueños? ¿O te preguntas si este es tu momento, después de todo, y vas a
buscarlo?

Déjame compartir un secreto contigo. Nunca es tu tiempo, y siempre es tu


tiempo. Solo se necesita que cambies el enfoque. Sé que es más fácil decirlo
que hacerlo. Me quedé en la autocompasión durante mucho tiempo. ¿Y sabes
qué? Era una autocompasión tan refinada y sutil que era muy difícil de
detectar, y por ende era también muy difícil salir de ella. Nunca me hubiera
visto mí misma como una de esas mujeres autocompasivas, sin embargo,
durante años hubo poco o ningún progreso en mi vida. Sentí que me estaba
alejando cada vez más de mi luz interior en nombre de amar a los demás.

Confía en mí, la autocompasión te lleva a un lugar de culpa y


arrepentimiento, a un lugar de proyección y destrucción. Así es como nos
aferramos a la vieja historia y la repetimos. Así es como atacamos a los
demás y los hacemos responsables de nuestra desgracia. El dolor es tan
profundo, pero las intenciones son tan buenas, tan amorosas. ¿Qué podría
estar mal en esto? ¿Cómo podrías culpar a los demás y, al mismo tiempo,
exonerarte en nombre del amor?

Este conflicto se hizo cada vez más claro. Uno de los dos extremos era
imperfecto. O el dolor es real o el amor es real. Estaba suponiendo que uno
de esos dos extremos era el verdadero cuando no lo era. O el dolor es real y
alguien más lo está infligiendo, y si ese es el caso, ¿cómo puedo amarlo? O el
amor es real, lo amo desde un lugar de abundancia, y si ese es el caso, ¿cómo
puede lastimarme?

La búsqueda de esta respuesta terminó siendo lo que ahora llamo mi misión.


Mi visión se aclaró y pude resolver esta incógnita al leer un fragmento de Un
Curso de Milagros, de Helen Schucman.

Nada real puede ser amenazado. Nada irreal existe, aquí yace la
paz de Dios.
~ Helen Schucman

Si en realidad no existe nada irreal, entonces lo que existe es real. Tanto el


dolor como el amor deben ser reales. Se pueden sentir en nuestra piel. Ambos
se materializan en acciones. Incluso los sentimientos existen y se hacen reales
en el reino físico.

Entonces comencé a aceptar que ambos eran reales en su propia esencia.


Entonces, si ambos son reales, ¿pueden ser amenazados? ¿Puede el amor real
ser amenazado? Después de experimentar una vida oscilante entre estas ideas
de sentimientos y realidad, una chispa se encendió en mi mente.
El amor real no puede ser amenazado, pero el amor que viene del
miedo, sí.

Sí, es duro descubrir que lo que pensabas que era amor, en realidad no lo es.
Nos sentimos avergonzados y decepcionados con nosotros mismos al
percatarnos que todo el amor que creíamos que estábamos dando, era un
amor falso.

Para eludir la idea de que nunca hemos amado verdaderamente, haríamos


cualquier cosa. Incluso, repetir viejos patrones con la esperanza de que ese
amor falso pueda transformarse en amor verdadero. ¿Puedes imaginar la
ansiedad que esto crearía en un ser humano con un alma divina?

Así que, sí. Yo no era realmente amorosa.

Hoy puedo decir que estaba aterrorizada por el hecho de no ser amada, yo
amaba desde el miedo. Y el amor que di a los demás, aun teniendo hermosas
intenciones, fue un amor falso. Este es un punto crucial. Acepto esto. Me
encanta. Amo y acepto a la niña asustada que busca amor y aceptación. No
quiero silenciarla, no quiero condenarla con una sentencia de muerte.

Simplemente quiero amarla.

Este es el niño del que nunca podremos deshacernos. Nadie puede. En


ocasiones, se sentirá como un pequeño monstruo de carne y hueso colmado
de sentimientos irracionales. Y está bien. Se nos permite experimentar este
estado de carencia como seres humanos. ¡Y gracias a Dios por eso! Esta
experiencia de carencia y sufrimiento es lo que enciende nuestra alma para
comenzar nuestro viaje en busca de algo más elevado.
Mujeres, esta es la niña que a veces queremos que nuestro compañero
sostenga y abrace. Y es tan frustrante cuando no lo hacen, ¿verdad? Confíen
en mí, amen a su niña interior. Porque cuanto más amor le brinden a ella, más
dulce se volverá. Todo hombre ama a una dulce niña amada por una mujer
auténtica.

Este libro no muestra la luz al final del túnel ¡Sé que sabes que la luz está ahí!
Este libro es para que dirijas tus ojos al centro de tu corazón, para que puedas
ver un reflejo muy tenue de esa luz que vive dentro de ti. Nunca podrás
encontrar esa luz fuera de ti.

Volver a contar la vieja historia de quién eras te mantiene alejado de tu


camino de plenitud y luz. Te arrastra de nuevo al país de la culpa. Para hacer
brillar tu luz, debes amar tu oscuridad y agradecer por ella. Agradécelo todo.

Haz las paces con el pasado, y déjalo ir.


Afirmaciones de Poder

Yo amo y aprecio la parte de mí que implora desesperadamente amor y


aceptación.

Yo libero a quien he sido hasta hoy y estoy listo para descubrir mi verdadera
identidad.

Me perdono a mí mismo por el dolor que he causado a los demás mientras


buscaba a mi verdadero yo.
Encontrando a tu Verdadero Yo

Nos apegamos a nuestro pasado porque lo hemos confundido con nuestra


identidad.

A menudo pensamos que somos lo que hemos hecho o lo que hemos dejado
de hacer. Lo que hemos podido lograr o no. Vemos una imagen de nosotros
mismos que nuestra mente ha creado, y luego la odiamos, la atacamos, la
despreciamos. Luego, presentamos esta imagen ante los demás de la mejor
manera para que sea amada y aceptada. Si es amada y validada por una fuente
externa, entonces pensamos que nos sentiremos finalmente amados, relajados
y libres de miedo.

Puede que no estés de acuerdo con esto, pero somos amados por los demás la
mayoría de las veces. Mucha gente busca afecto para complacer a los demás.
Confía en mí, ser amado y aceptado por otros puede ser bastante fácil. Pese a
ello, no logramos sentirnos amados de verdad.

En la profundidad de nuestra alma todavía no nos sentimos satisfechos, y


ansiamos mucho más. Entonces, creemos que necesitamos más aceptación.
Entonces comenzamos a revelar detalles sobre nuestra historia, nuestro
camino, lo que hemos hecho, lo que queremos hacer. Hacemos esto para
obtener más atención, aceptación y relevancia ante los ojos de los demás. Por
otra parte, disfrutamos de sus elogios como si fuesen el postre más delicioso.
Este placer se disipa poco después, y nos deja de nuevo en el país de la
desesperación.

Esta desesperación, si la has sentido antes, no es la misma desesperación que


te hace llorar a mares. Es la desesperación disfrazada. A menudo se disfraza
de deseos de encontrar una conexión real, anhelos de amar de y sentirse
amado por alguien más. Alguien que desconozca la parte de nosotros que
tanto rechazamos.

A menudo, en esta situación, las personas sienten la necesidad de


recomenzar. Empezar desde cero. Ir a un lugar donde nadie los conozca,
donde puedan borrar su pasado. Si estás intentando suprimir tu pasado para
no tener que lidiar con tu verdad, entonces debes renunciar por el resto de tu
vida a sentirte amado por los demás. No te permitirás el placer de recibir ese
regalo. Aunque te amen por lo que eres y no por lo que has hecho, en realidad
tú eres quien no se ama. ¿Cómo podemos sentirnos amados si no nos amamos
completamente a nosotros mismos?

Palabra de Sabiduría
Es más fácil decirlo que hacerlo. La mayoría de nosotros oscilamos entre
querer ser abiertos y sinceros y querer ocultar solo una minúscula parte, que
después de todo es, ¡oh! tan irrelevante.

Podrás recibir el abrazo más deseado de alguien que te importa, pero luego
vendrá a tu mente un pensamiento vergonzoso acerca de ti mismo

Tu mente y tu corazón estarán en constante pugna para decidir si eres digno


de ese abrazo. Te quedarás atrapado entre el pasado y el presente y el
momento se habrá desvanecido.

De la misma manera en que a veces nos sinceramos con alguien más,


deberíamos hacerlo con nosotros mismos. Así podremos comprender la lucha
interna que experimentamos a diario.
¡No juzgues ni desprecies a tu ser interno como como juzgas a los demás!
Alguien dijo: De la forma en que juzgas a otros, serás juzgado. No tenemos
que ir demasiado lejos para encontrar a alguien que nos juzgue de esa
manera. Somos nosotros mismos Y de hecho, es por eso que juzgamos a los
demás en primer lugar. Porque así nos tratamos.

Entonces me pregunto. Si juzgamos a los demás con dureza, ¿por qué


hacemos lo mismo con nosotros?, ¿podemos amar a los demás si no nos
amamos y nos aceptamos plenamente?

Hemos escuchado tantas frases como “Ámate a ti mismo antes de amar a


otros” de muchas maneras, formas y matices. Pero, ¿cómo diablos podemos
hacer eso? No es como poseer un botón en nuestro interior que podamos
presionar para despertarnos. No es algo automático, y ¡voilá! Súbitamente
nos amamos a nosotros mismos.

No es un botón, pero espera, ¿podría serlo?

Un botón es un disparador que activa una serie de comandos a ejecutar. En el


caso del amor propio, el botón es la decisión que tomas, es el detonante, el
deseo y la creencia que necesitas amarte a ti mismo. Esto pone en
movimiento los comandos para lograr lo que quieres.

¿Pero espera? ¿Cuántas veces hemos pulsado ese interruptor? ¿Cuántas veces
hemos presionado ese botón? Mañana empiezo a amarme. O, espera, ahora
me amo a mi mismo. Sin embargo, no ha funcionado.

Todavía esperas. Aún esperas que los demás te acepten para así, poder amarte
realmente a ti mismo. Y en este caso, estoy hablando de un amor supremo y
elevado.

Me refiero, a amarte a ti mismo con tanta profundidad que puedas amar a los
demás, desde tu verdadera identidad. No desde la sombra que tu identidad ha
creado, guiada por tu mente. Estoy hablando de un amor desde el cual puedes
compartir con otros la identidad que proviene de tu corazón.

Entonces, hemos estado presionando ese botón, el botón del amor propio
ahora, y no ocurre nada. No pasa nada nuevo. Es una acción nula y vacía.
¿Qué está pasando? Presiono el botón y sin embargo ¡nada cambia!

Somos seres divinos ¡Nada nos puede faltar! ¡Los gurus juran que estamos
completos! ¿Qué está pasando? Después de muchos intentos, algunos de
nosotros nos damos por vencidos y tenemos ganas de reclamarle a Dios:
¡Amigo, este botón no sirve! O seguimos probando y nuestros intentos son en
vano.

¿Qué pasa si estamos presionando el botón correcto pero en el lugar


equivocado? ¿Qué pasa si hemos estado presionando el botón de amor propio
desde la mente y no desde el corazón? Espera, ¿podría ser que presionar el
botón de amor propio del corazón pueda brindarnos un resultado diferente?

¡Vaya! no sabía nada de esto del corazón y la mente. ¡Esto es fascinante!


¿Quieres decirme que si presiono el botón de amor propio desde el corazón
encontraré las instrucciones reales que me llevarán a amarme y aceptarme por
completo?

Bueno, sí. Eso es lo que te sugiero que hagas. Deja de presionar tu mente y de
exigirle que haga cosas que no sabe cómo hacer. Esta cosa del amor no es un
negocio, no es un asunto científico medible que podamos cuantificar,
planificar o racionar. La mente no puede controlar aquellos asuntos que se
encuentran fuera de su dominio. Y el amor, ciertamente es asunto del
corazón.

Entonces, ¿qué pasaría si decidiéramos presionar el botón de amor propio


desde el corazón? En principio, la mente se volvería loca, quizás en este
instante a la tuya también le esté ocurriendo lo mismo. Identificará todas
aquellas bien justificadas razones por la cuales hacer esto es una mala idea.
¿Y por qué? Bueno, verás, la mente no sólo controla tu amor propio, sino
también muchas otras cosas. Descubrirás que la mente es responsable de
muchas otras cosas del corazón. Si pudiéramos devolver dichas cosas a su
verdadero dueño, experimentaríamos una sensación de paz y equilibrio.

El verdadero tú que existe en tu interior es un ser humano increíble y un alma


divina. He descubierto que no hay nada malo en ti, o en mí. Fuimos
perfectamente creados, solo tenemos algunos detalles que afinar. Existen
algunas responsabilidades que deben ser reasignadas, algunas reglas deben
ser re escritas, y eso es todo.

Piénsalo, tenemos mucha suerte de que sea así. Los animales y los humanos
de mente simple por lo general viven felices, pero no saben del todo que son
felices. No son conscientes de gran la bendición que tienen. Si has leído hasta
aquí, te felicito. Estás en el camino de regreso a ti mismo, y te amo por eso.

Pero la mente enloquece. Eso es lo que hace, y lo hace bien. Ese es su trabajo
después de todo. La mente fue creada para sobrevivir, mediante instintos
reactivos.

¿Sabes por qué la mente se siente amenazada cuando se trata de cosas del
corazón?

Porque para la mente, el algoritmo que el corazón posee para amar no es


confiable. La mente está guiada por un conjunto de ideas y reglas que cree
que nos llevarán a un lugar seguro donde podremos evitar el dolor.
La mente procura seguridad, no realización.

El sistema primitivo de nuestra mente fue instalado con un propósito. Así,


podremos descubrir el verdadero amor desde nuestros corazones y ser los
dueños de nuestro destino.

Está bien si la mente enloquece. Obsérvala enloquecer. Toma conciencia y


permanece en tu dualidad. ¡La mente se ve amenazada! Pues, si le quitas una
de las cosas que controla, ¡Simplemente colapsa! ¡Imagina eso! Si quitas el
amor de la mente, ¿qué pasaría con la felicidad? La mente también posee
algunas reglas para la felicidad que te atrasan y que te impiden llegar a la
cima del amor.

Nunca podrás extinguir el miedo a morir que tiene la mente. Siempre estará
presente en tu realidad física. Y tampoco puedes vivir diariamente en un
estado alfa. Entonces, ¿Qué queda? Lidiar con eso.

Vamos a hacer las paces con eso primero. ¡Después de todo, la perfección es
tan aburrida! Significaría que alguien te amaría por ser perfecto y no por lo
que eres, sino por tener la etiqueta de perfecto. Aceptar nuestra mente
humana, cometer errores, nos lleva a sentir el amor de una manera
completamente nueva. No somos perfectos, pero somos amados. Así que
abraza tu imperfección, tu mente humana, y tratemos con eso.

¿Cuál es el mayor temor de la mente?

El miedo más grande que tiene la mente es que si reordenas la


forma en que ha sido cableada para encontrar el Amor y la
Dignidad, colapsará el algoritmo y nunca podrá alcanzarlos.
La mente piensa que al forzar el algoritmo actual alcanzará el amor algún día.
¿Lo ves? Por eso, en primer lugar, no podemos deshacernos de ella.

La mente está trabajando por el mismo propósito que el corazón.


Y ese propósito es el amor.

Sin embargo, por lo general cuando nos encontramos con una persona hosca
solemos decir: él o ella no tiene corazón.

¿Y esto qué significa? Piénsalo. La persona literalmente tiene un corazón, en


el sentido puramente orgánico. Lo que significa es que esa persona no se está
comportando conforme a su corazón. Esa persona está tratando de lograr un
propósito amoroso a través de medios no amorosos. ¡Ah! ¿Y por qué? ¿Por
qué una persona amorosa intentaría dañar emocional o físicamente a otro ser
humano en nombre del amor?

Sé que esta podría ser una pregunta delicada. Muchos de los que están
leyendo esto pueden pensar que son o han sido víctimas de abuso. Para el
propósito del tema del amor propio que estamos discutiendo, quiero decir que
un humano a menudo reaccionará desde su instinto de supervivencia cuando
teme a la muerte.

Para esas personas que intentan recibir o sentir amor, es una cuestión de vida
o muerte. No conocen ningún otro medio para obtener el amor que anhelan, y
cuando esos medios se vuelven infructuosos, no queda ninguna salida para
ellos. En ese instante, son ellos o su supervivencia. Porque morirán si no
pueden experimentar el sentimiento que están buscando desesperadamente.
Ellos son incapaces de generar tal amor por sí mismos. Están en la búsqueda
de la persona que asumirá la responsabilidad de sus emociones y que les
brindará amor incondicional.

Esto podría darte una pista, si es tu caso, acerca del motivo por el cual has
atraído a tu vida a personas que carecen de amor propio. Probablemente
tampoco te ames a ti mismo.

Probablemente también estés buscando el amor para sentirte pleno y sentirte


validado desde una fuente externa. Estás esperando que alguien te catalogue
como adorable, para que puedas relajarte, aceptarte y amarte a ti mismo.

La mente está absolutamente segura de que si deja ir la esperanza


de sentir el amor, la necesidad desesperada se desvanecerá.

La mayoría de las veces le pedimos a la mente que se haga a un lado. Le


decimos que no sabe amar, la culpamos por haber tomado las decisiones
equivocadas en el pasado y solo queremos deshacernos de ella. ¿Te imaginas
lo que es decirle a Dios que deje de amarte? Bueno, esto es similar.

Intentas decirle a tu mente que deje de protegerte. Al contrario, ¿Qué pasaría


si nos acercamos a nuestras mentes de manera diferente? ¿Y si le brindamos
seguridad, comodidad? ¿Qué pasaría si le decimos a esa parte no amada de
nosotros mismos que no necesita buscar su supervivencia? ¿Y si le decimos
que aceptamos su naturaleza?

¿Qué pasaría si agradecemos a la mente por todas las veces que hizo el
trabajo del perezoso corazón, incluso cuando no sabía cómo?

Después de todo, te mantuvo fuerte durante mucho tiempo. Te sostuvo


mientras descubrías esa cosa llamada conciencia.

Te protegió de tu primer desamor. Te protegió de esos horribles comentarios


que una vez escuchaste sobre ti mismo. La mente no tenía más remedio que
reaccionar como lo hacía. Instaló esos viejos decretos que mezclaron sus
valores y sus reglas. Tu corazón no fue lo suficientemente maduro como para
responder en ese entonces. Pero tu mente lo hizo. ¡Alguien tenía que hacerlo!
¿Y adivina qué? Hizo su trabajo. Y lo hizo bien.

Siéntete bendecido. Es hora de entender cuán bendecidos somos. Mira a tu


alrededor. Mira la inmensa energía que ha emanado del universo, de los
demás y de ti mismo, para estar aquí ahora mismo. Estás en el umbral de tu
ser real, que es, después de todo, puro amor incondicional.

Hoy te encuentras con tu yo vulnerable sin sentirte apenado por


ello.

Hoy, te das cuenta de que tu mente nunca fue dañada, sino que ella te ha
cuidado. Hoy, te das cuenta de que has sido guiado y protegido por tu propia
sabiduría interna. Y hoy es el día en que la sabiduría te ha sido devuelta,
intacta y lista para recuperar tu verdadero estado natural de comunión contigo
mismo.

Hoy te das cuenta de que los sentimientos de culpa y vergüenza acerca de ti


mismo ya no tienen cabida en tu nueva comprensión del universo y su
propósito.

Todas las almas deben regresar a casa.


Estás en el camino de regreso.

¿Puedes empezar a notar lo increíble que se siente? No hay vergüenza, no


hay culpa. No existe la ansiedad de ser elegido, no existe el miedo de ser
culpable. Sólo una comprensión absoluta del propósito de tu viaje. Una
certeza absoluta de lo bendecidos que somos todos y cada uno de nosotros.

Si las lágrimas corren por tu rostro, está bien. En este momento me pasa lo
mismo. Tal vez algunas imágenes del pasado emergerán en tu mente. Tu
mente se precipita para reescribirlas, con rapidez, para protegerte y evitar que
sufras. ¿Ahora puedes entender mejor a la mente?

Pero antes de que la mente tenga una oportunidad, tu corazón interviene y


dice:
Te amo,
Lo siento,
Por favor perdóname,
Gracias,
Te amo,
Lo siento,
Por favor perdóname,
Gracias,
Te amo,
Lo siento,
Por favor perdóname,
Gracias.
Tu hermosa mente ahora se aleja, mientras la última lágrima recorre tu rostro.
Ha cumplido su misión. Te ha entregado sano y salvo a tu corazón. Lo
hiciste. Tu mente puede descansar ahora. Puede ir a ocuparse de las cosas de
la supervivencia y crecer en su propia sabiduría. Como resultado, vivirás una
vida mucho más saludable. No vivirás en emociones dañinas que te
deterioren físicamente. Tu ansiedad desaparecerá.

Quizás podrás vivir momentos estresantes, pero no una vida


estresante.
Vivirás momentos de duda, pero no una vida de inseguridad.

Esto es lo que realmente eres. Tu corazón en pleno florecimiento. Eres mucho


más que un cúmulo de acciones regidas por un plan de supervivencia. Eres la
buena fe de tus intenciones alineadas con un plan inteligente que te llevará a
alcanzar la grandeza.
Afirmaciones de Poder

Soy un ser superior y poseo un conjunto infinito de dones y poderes.

Tengo la capacidad de encontrarme a mí mismo.

Mi mente se hace a un lado para que mi corazón pueda tomar el control de mi


destino.
PASO DOS
Perdonándote por lo que hiciste
y
no por quien eres

~ Y sobreviví el intenso día en que me miré al espejo, y más allá, enfrenté mi


lado oscuro y encontré una flor que brotaba de mi reflejo. ~
He sido mi peor enemiga.

La idea de culpar a otros se siente tan lejana ahora. Cada persona a la que he
culpado en mi vida fue una víctima inmediata de mis propias frustraciones y
limitaciones. Nadie me ha tratado peor que yo.

La idea de que mi pareja me hirió, es debatible. Me dejé lastimar. Sus


palabras ofensivas y sus acciones hirientes me confirmaron emocionalmente
una y otra vez el maltrato al cual me sometía. Es cierto que otra persona no se
habría comportado de la misma manera. Pero también es cierto que no habría
tenido esta increíble oportunidad de transformarme radicalmente.

Nadie me maltrató más que yo. De esa manera, fui mi propia abusadora.
Aquellos que caminan por la vida hiriendo a otros están al borde de la muerte
emocional. Si no actúan con rapidez estarán cerca de perder la conexión con
su verdadero yo. Perdónalos.

Lo que me salvó fue mi profundo deseo de curarme. Mi naturaleza categórica


y carente de amor propio fue la combinación que atrajo a los verdugos de mi
vida. Necesitaba esas experiencias para despertarme, ya que yo misma me
estaba convirtiendo en una verdugo. Fue la prueba definitiva.

O lo superas
O te conviertes en eso.

¿Quién eliges ser? Este es el momento en el que descubres de qué estás hecho
en realidad. Ya sea que asumas el dolor y lo superes, o sucumbas a la lección
de la polaridad.
Ahí es cuando surge tu verdadera identidad.

Ahí es cuando puedes dejar atrás tu antiguo comportamiento. Ahí es cuando


la sombra no tiene más remedio que apartarse y dejar que la luz brille a través
de ti.

Palabras de Sabiduría
La forma en que reaccionamos ante un estímulo, ya sea físico o emocional,
habla sobre nuestro comportamiento, cómo nos conducimos hacia los demás.
A menudo juzgamos a los demás según su comportamiento. Si nunca dice
buenos días, es un "antisocial". Si ella siempre está coqueteando, es una
"mujer fácil". Es muy difícil para nuestra mente no juzgar cada interacción,
cada conversación.

Esta compilación silenciosa de pensamientos automáticos se encuentra a


nuestra disposición cuando necesitamos utilizarla. Estas críticas son fáciles de
retomar y la mente no duda en acceder a ellas para protegerse de lo que cree
que es un daño emocional perjudicial.

Es muy difícil cambiar el hecho de que nos juzgamos a nosotros mismos y a


los demás. Pero es aún más difícil vivir con la creencia de que somos lo que
pensamos de nosotros mismos.

Este es un pensamiento poderoso. Piénsalo: ¿y si no somos lo que pensamos


que somos? ¿Qué pasa si la imagen que tienes de ti mismo y que juzgas en
silencio de forma inconsciente día y noche, no eres tú?

Sé que has pensado en esto y has escuchado esta idea liberadora antes. Puede
que incluso hayas pensado en ello, lo meditaste o tuviste un sueño al
respecto. Es posible que ya te hayas perdonado muchas veces por tu propio
pasado. Pero, de alguna manera, este juicio silencioso sigue ahí. Siempre
regresa, te acecha en las noches de soledad.

Pensé detenidamente en esto. Y me di cuenta de que tal vez la razón por la


que no podemos dejar de lado esos juicios es la creencia que alguien debe
haber infligido el dolor. ¿Quién se hará responsable del viejo tú? ¿Cómo
puedes explicar que te has comportado de cierta manera hasta hoy, y que
simplemente no eres tú? Si bien la idea suena bastante liberadora, ¿Podemos
dejar que eso suceda sin ninguna explicación?

La mente tiene problemas con la magia. La mente necesita una explicación


lógica. Y en este caso, la hay.

No eres quien has estado siendo hasta hoy. Tú eres tú, más un sistema de
creencias, una serie de valores y reglas que te inducen a comportarte y actuar
como lo has hecho hasta hoy. Tienes una historia, una educación, una
programación. Esto está instalado en ti, y te ha convertido en quien eres hoy
en día.

Tu comportamiento no es tu identidad.
~ Tony Robbins

Tus acciones pasadas son la ropa que tenías puesta ayer. Tus acciones de hoy
son lo que llevas puesto. Sí. Algunos optan por vivir con la misma ropa vieja
toda su vida. Pero la mayoría de ellos nunca supieron que podían cambiarse
de vestidura. Y otros, ni siquiera supieron que llevaban ropa. Puedes
cambiarte de ropa. Sería difícil conseguir un nuevo cuerpo, pero puedes
cambiarte de ropa.
Es extremadamente difícil cambiar los sentimientos de tu corazón acerca de
algo. Pero si cambias tu percepción de ello, la forma en que lo interpretas, te
sentirás diferente al respecto.

Tú eres tu corazón.

Tu identidad es más profunda que tus pensamientos y tu mente. Puedes


cambiar tus ideas, tu razonamiento. Esto se traducirá automáticamente en un
cambio de visión, entendimiento y, en última instancia, de sentimientos. Por
lo tanto, cambiar un comportamiento por condicionamiento puede ser un
proceso doloroso. Pero cambiarte a ti mismo cambiando el modelo de tu
mundo, dará como resultado un automático resultado favorable.

Es difícil cambiarte a ti mismo, pero es fácil cambiar tus patrones,


pensamientos y la programación con la que has estado viviendo.

Tú eres libre. Puedes guardar la ropa que te guste y descartar el resto. No


estás atado a tus comportamientos y tus pensamientos, pese a que sientas que
están adheridos a ti en este momento.

Dale un chance a este pensamiento loco.

¿Y si pudieras separarlos de ti?


Afirmaciones de Poder

Me perdono a mí mismo.

Yo estoy bendecido y guiado en todo momento de mi vida.

Cada vez que cierro mis ojos, tengo el poder de reclamar mi verdadera
identidad.
Las Cosas que el Monstruo Ha Hecho

Desprenderse de las consecuencias de nuestro pasado, y del presente que


nuestras viejas decisiones han creado, duele muchísimo. La mayoría de las
personas quieren cambiar y están listas para sanar. Sueñan con moverse de
una situación en concreto, pero lo que los detiene quizás no sea el pasado en
sí, sino su presente. Cómo ven sus vidas en el momento presente cuando ellos
más desean cambiar.

Y así es como funciona el universo, ¿no es así? De lo contrario, no sería una


prueba, ¿verdad? ¿Cómo podríamos demostrarnos a nosotros mismos que
hemos sanado? ¿Cómo podríamos demostrarnos que podemos perdonarnos a
nosotros mismos y a los demás?

Me divorcié por segunda vez, después de siete años de horror. Entré y


permanecí en esta relación enfermiza, estaba desesperada por sentir el amor
que no sabía cómo darme a mí misma. Estaba huyendo de la curación que
necesitaba hace varios años y elegí esconderme del dolor que todavía tengo
que enfrentar hoy. Ahora esté dolor se ha multiplicado.

Ahora tengo que enfrentar el sufrimiento de ver a mis hijos salir de casa por
largas horas. Tengo que lidiar con el dolor insoportable de saber que no
disfrutaré de la familia de mis sueños. Dios sabe cuánto quería ser madre
junto con el padre de mis bebés. Sin embargo, yo era una esclava de mí
misma. Y entré en una relación dolorosa y destructiva que me brindó las
lecciones que necesitaba para salir de este patrón y, al final del camino,
aprendí a amarme a mí misma.
Para obtener ese resultado, necesitas una persona que pueda impartir ese tipo
de lección. Las personas hirientes no se aman a sí mismas, las personas
hirientes pasan sus vidas tratando de obtener el amor que les falta, en el
interior de alguien más. Algunos provocan ese amor al infligir dolor a los
demás. Otros provocan el mismo amor siendo extremadamente agradables y
generosos. Los codependientes, por ejemplo, lo hacen venerando y dando
excesivamente a la otra persona. Permitiendo y autorizando los
comportamientos dañinos de sus compañeros.

Me hice responsable del viaje de otra persona sin darme cuenta de que
únicamente soy responsable de mi propio viaje, mis propios sentimientos, mi
propia vida. Dependía de mi compañero para decirme que era una persona
amable, para sentirme como tal. Ansiaba su gratitud, para poder sentirme
necesitada y amada. Confié en él para hacerme creer estas cosas, así que me
volví dependiente de él.

Salí de la codependencia y me encontré. Comencé el viaje de regreso al amor


propio, a la aceptación y a la realización. Pero es difícil. Mi presente es un
dibujo perfecto de mi antigua vida.

Lo que quiero decir aquí, es que es muy difícil avanzar con las consecuencias
de nuestro pasado a cuestas, pese a que conozcamos el camino.

Palabras de Sabiduría
Trazar una línea entre tu nuevo y viejo yo podría resultar aterrador. Después
de todo, todo el amor que has experimentado hasta ahora lo recibió tu antiguo
yo. Pero recuerda, todo el dolor también. Esto es difícil de recordar, porque
es más fácil para el ser humano recibir algo (pese a que no sea tan bueno) en
lugar de recibir nada.
Piensa en esto por un minuto. A veces no prestamos tanta atención a lo que
estamos recibiendo, lo que nos importa es que recibamos algo. Esta es una
gran señal de falta de amor propio. Cuando renunciamos a nuestros propios
deseos, torcemos nuestros propios valores y reglas para satisfacer una
necesidad más profunda.

Más tarde, nos damos cuenta de que cuando perseguimos nuestro destino
sacrificando nuestra propia identidad, finalmente no encontramos
satisfacción. Somos incapaces de sentirnos amados y aceptados. Piénsalo,
¿quién perseguía el sentimiento después de todo? No eras tú, era la versión
que creaste para poder alcanzar el propósito.

Decirte a ti mismo que este viejo ser está obsoleto representa un paso
aterrador. Seguramente ese ser podría haberse acostumbrado a obtener el
amor a partir de sus propios errores y defectos. Si abandonas para siempre a
tu antiguo yo, no solo encontrarás una forma distinta de evitar el dolor, sino
también una nueva forma de obtener el amor.

Esta es la forma en que el viejo-yo piensa y razona. Es hora de darse cuenta.


Tu antigua creencia es que la vida se trata de evitar el dolor y de inducir el
amor. Lo que vamos a descubrir es que el nuevo-tú puede acceder a un
conocimiento muy diferente. Un secreto sagrado de los viejos maestros.

En presencia del amor real, no existe el dolor.

Verdaderamente la vida se trata de encontrar y encender esa fuente de


abundancia. Esa fuente está dentro de nosotros. Aprovechar esa energía abrirá
tu corazón para canalizar un amor que es tan inmenso, que no se crea, sino
que se transforma y se comparte.
El amor real nunca es encontrado fuera de nosotros mismos.

Tu viejo-yo piensa que no eres digno de ese tipo de amor. Después de todo,
mira lo que has hecho hasta hoy. Cuánto has perdido, cuánto has dejado atrás.
Tus acciones y omisiones. Las cosas que has dicho, tus arrepentimientos, tu
pasado. La vieja historia viene a recordarte el daño. Además de todo, mira
cuánto trabajo tienes que hacer para mantener este nuevo-yo el tiempo
suficiente para que otros lo crean y lo acepten.

Es hora de darse cuenta.

Otra vez.

Tu antiguo yo quiere que creas que el nuevo-yo también buscará la


aprobación y el amor en los demás primero. Esa es la historia que debe
continuar para que renuncies a esta búsqueda. ¿Cómo la gente de tu pasado
amaría y aceptaría al nuevo yo, después de todo?

Una transformación real nunca será inicialmente por una persona


externa.

Ocurre desde una profunda comprensión de que nunca alcanzarás tu


realización desde un estado de autocompasión o de odio hacia ti mismo.

El pasado es tu maestro. Si quieres hacer este viaje, abrázalo. Habla de ello


desde la perspectiva del aprendizaje. Haz algo hermoso con el dolor del
pasado. Estas experiencias te fueron dadas como regalos.
Tu gran problema es que piensas que no deberías tener problemas.
~Tony Robbins

Si no hubiera pasado por el dolor más profundo de no amarme a mí misma,


nunca hubiera escrito este libro. Si no me hubiera atrevido a expresar mis
más oscuros sentimientos y pensamientos de miseria frente a otros 5000 seres
humanos, nunca habría recibido el regalo del verdadero amor.

El día que sentí el amor más profundo en mi alma, fue el día en que me
mostré al mundo como un ser sin amor. Ese día, después de despreciarme por
horas, finalmente acepté quién era. Acepté mi humanidad y el papel que jugó
el dolor en mi vida. Me pregunto, ¿cómo podría ese momento ser una
bendición en lugar de una pesadilla? Me hice una pregunta que Tony Robbins
incrustó en nuestro nuevo ser, ¿cómo podría estar sucediendo la vida por mí y
no para mí?

La vida no te sucede a ti,


La vida sucede para ti.
~ Tony Robbins

Justo en ese segundo, miré hacia el cielo, con el rostro cubierto de lágrimas, y
dije que no lo entendía en ese momento, pero sabía que en lo más profundo
de mi ser, se estaba gestando un propósito más grande. Mi alma estaba
desgarrada. Podía sentir la carne de mi corazón estirándose y
reconstituyéndose. Me sentí amada por primera vez, por extraños. Y lloré, tan
fuerte. Porque nunca me había amado antes así, como ellos me estaban
amando.

Entonces experimenté un sentimiento que nunca antes había sentido. Me


encontré a mí misma en el espacio intermedio de mi viejo-yo y nuevo-yo.
Conocí la verdadera esencia de mi alma.

Tu pasado es tu clave para reencontrarte.

Cúbrete con todo tu pasado y déjate amar vestida con él.

Te lo mereces totalmente.
Afirmaciones de Poder

Yo no soy mi pasado.

Yo puedo redefinir mi vida redefiniéndome a mí mismo.

Acepto mi anterior comportamiento, de esta manera puedo abrazar mi


verdadera identidad.
Haciendo las Paces Con El Monstruo

Noté que varias veces en mi vida había decidido cambiar. Cambia esto,
cambia aquello. Recuerdo tantos momentos en los que diseñé
cuidadosamente lo que quería modificar sobre mí. Trabajé duro para llegar a
una versión de mí misma que fuera más aceptable para los demás. Ah, y eso
de alguna manera no violó totalmente mis principios.

Vaya. ¿Qué hay de malo con eso?

Ahora siento que he cambiado de una manera diferente. Porque no es un


cambio orquestado con el fin de obtener de otros algo que me hacía falta. Es
el cambio que ocurre cuando te encuentras y decides decir SÍ para descubrir
quién eres realmente.

Enfrenté la pregunta y decidí abandonar el confort de la seguridad. En esta


exploración de mí misma, pude aceptar que no sé cómo me veo en mi propio
espejo, y que no puedo proyectar una imagen sólo para ser aceptada por los
demás.

Basta ya de esa esclavitud!

Este patrón estaba oculto ante mis ojos. No podía verlo. Podía sentirlo, pero
no podía comprender el peligro que representaba para mí y para quienes me
rodeaban.

A veces me pregunto qué podría haber pasado si me hubiera sanado antes.


Pero ahora entiendo que es una pregunta que pertenece al viejo patrón.
Después de todo, estoy sanada ahora.
Estoy viva, curada y centrada. Sin embargo, eso es algo que tenía que hacer
sin expectativas de cómo los demás reaccionarían ante mi verdadero yo. Ellos
están en su propio camino. Dejé de ser una fuente de suministro narcisista al
desactivar mi viejo patrón. Pero eso no garantiza que los patrones de los
demás también van a desactivarse.

Él le hará un favor a otra persona al impartirle las lecciones que necesita, para
que así finalmente logre amarse a sí mismo. Y esa persona a su vez, le
brindará a él la oportunidad de salir de su propio enfoque narcisista y
arriesgarse a vivir el verdadero amor. Otra vez. En cualquier caso, son la
tormentosa perfecta pareja hasta que uno de ellos por elección propia, decida
salir de este círculo vicioso.

Palabras de Sabiduría
Lo hecho, hecho está. Lo que hiciste y lo que te hicieron. Hoy, tal vez quieras
adoptar un enfoque diferente y considerar que todo lo que te sucedió tuvo un
propósito.

Sí. Tal vez.

¿Estarías aquí de otra manera? ¿Cuánto te costó llevarte al filo de ti mismo?


¿Cuánta energía y cuánto esfuerzo hacen tantas personas en tu vida para
alinear tu destino hasta este punto?

Es por eso que a veces solo digo: sí, gracias. Cuando recuerdo lo que he
pasado y todas esas almas generosas que estaban dispuestas a interceptar mi
singular destino para ayudarme a cumplir mi propósito. Y el de ellos.

No me malinterpretes El universo es un buen administrador. Confía en lo que


te digo. De la misma manera en que estamos cumpliendo con nuestros
propósitos, ellos están cumpliendo los suyos y somos una pieza de ajedrez en
su juego.

La vida es tan hermosa. Tan inesperada y cuidadosamente diseñada. Hay


lecciones para todos. Es difícil y dulce a la vez. Nos perdona y al mismo
tiempo nos desafía.

La vida es eso. Una serie de lecciones esmeradamente planeadas, elegidas


para nosotros.

Lo que sucedió fue necesario. La mayoría de las veces tenemos serios


problemas para avanzar debido a la cantidad de daño que hubo en nuestro
pasado. Daño que nos causamos a nosotros mismos, y a los demás.

Está bien. Mira. La mayoría de nosotros, los humanos, ni siquiera podemos


fusionar nuestra propia historia con nuestro verdadero ser. Nunca.
Terminamos este pasaje terrenal y regresamos sin nombre. Solo el alma
prevalecerá.

¿Qué podría ser más triste que esto? No darnos cuenta mientras estamos
vivos que nos hemos podido, o al menos intentado cumplir nuestro propósito.

Así que ahí tienes. Dos opciones. Enfrentarte a tu pasado, que no es tan
oscuro, confía en mí. Y caminar hacia la luz de la auto-contemplación. O
esconderte de ello, hasta que puedas. Y nunca descubrir tu verdadero yo.

Si has leído hasta aquí, es probable que hayas decidido enfrentar tus victorias
y tus derrotas. Eres un alma sabia, pues entrarás ahora en un nuevo reino de
comprensión y percepción.

De la aceptación de tu pasado proviene la disposición de abrazar


la incertidumbre de tu futuro.

Esto es tan hermoso. Significa que ahora confías y crees en una parte
completamente nueva de ti mismo.

La calidad de tu vida es directamente proporcional a la cantidad


de incertidumbre con la que puedas vivir.
~ Tony Robbins

Me tomó mucho tiempo hacer las paces conmigo misma. Ahora que miro
hacia atrás, me pregunto cuál fue el rasgo más difícil de aceptar. ¿Cuál fue el
rasgo que más me esforcé en esconder ante los demás y, sobre todo ante mí
misma?

Era el hecho de que no podía sentir el amor de los demás. No era capaz de
sentirme amada como de alguna manera ansiaba sentir. Trabajé duro para
ocultar ese hecho. Solo podía pensar en la decepción y la frustración de
quienes me rodeaban si expresaba que no podía sentirme amada por ellos a
pesar de sus esfuerzos. Sabía que de alguna manera tenía que ver conmigo.

Cargar con este sentimiento se volvió una tarea muy pesada. Creó una
separación interna de aquellos que estaban más cerca de mí. A pesar de mi
intención de conectarme y fusionarme, no pude alcanzar esto. Siempre pensé
que mi enfoque era el adecuado.

Después me di cuenta de que mi enfoque era encantador y poco amoroso al


mismo tiempo. Dar amor se convirtió en un ritual de placer artificial.
Esperaba que la otra persona se sintiera amada y satisfecha primero. Para que
luego pudieran amarme, de una manera que pudiera llenarme, y así
finalmente lograr sentirme amada.

Ahora miro hacia atrás y apenas puedo creer que esta fue mi vida. Que en
realidad viví con este patrón de apego durante tanto tiempo. Dos
matrimonios, 3 hijos y tantos años de intentos bien intencionados, pero
basados en un programa defectuoso.

Me costó mucho llegar hasta aquí. Encuentro la paz en este segundo cuando
me doy cuenta de que realmente estoy aquí. Que estoy al otro lado de ese
viaje milenario en búsqueda de mi propio ser.

Siento mucha paz aquí.

También te sentirás tranquilo al otro lado de tu viaje.

Tú vales lo que sea necesario para llegar allí. Conocer tu centro te devolverá
a ti mismo un sentimiento de paz que no se puede medir. No se puede
cuantificar en términos de amor. Pero seguramente hará tu vida más
productiva. Alcanzarás y superarás tus metas y expectativas.

Es por eso que deberías considerar soltar. Pedirle a la mente que se aleje por
un momento de su pasado y de lo que le ha pasado a su antiguo yo. Al menos
hasta que puedas avanzar lo suficiente para poder ver tu pasado bajo una
óptica diferente.

Soltar puede ser muy fácil o puede ser muy difícil. Depende del resultado que
desees obtener. Atrévete a despojarte de tu pasado. Todavía serás tú. Un tú
que puede pensar y sentir de una manera responsable. Es auténtico y está
alineado con tu corazón. Esto te llevará lejos.

Date una oportunidad.


Afirmaciones de Poder

Yo me perdono a mí mismo por todas aquellas acciones pasadas que me


alejaron de mi verdadero ser.

Yo estoy agradecido con todos aquellos que intervinieron en mi camino.

Yo dejo atrás mi comportamiento pasado y comprendo que lo me servía antes


ya no sirve al nuevo modelo de mi mundo.
Tu Verdadera Identidad

Todos sabemos realmente quiénes somos en lo profundo de nuestro ser, si no


lo supiéramos no habría ningún conflicto. La batalla entre nuestras dualidades
tiene que ver precisamente con la absoluta certeza de que sabemos quiénes
somos realmente. Incluso si no podemos manifestarlo, incluso si no podemos
actuar desde ese lugar divino. Sabemos que lo hemos sentido antes, e
inevitablemente sentimos la necesidad de volver a ese lugar.

Es el centro de nuestro propio equilibrio de mente y corazón. Un lugar que


sabe actuar en lugar de reaccionar. Forma pensamientos centrados en el
corazón. Mente y corazón alineados.

Hemos experimentado ese sentimiento en algún lugar y en algún momento,


antes de nuestra existencia milenaria. Está dentro de nosotros. Sabemos
quiénes somos.

Recuerdo el día en que me conecté por primera vez con mi alma. Tenía
alrededor de seis años. Era una mañana lluviosa, y por alguna razón, no podía
irme a jugar como lo hacía normalmente. Estaba incómoda como si algo
quisiera salir de mí. Se estaba gestando una comprensión, un sentimiento que
yo misma no podía entender a una edad tan temprana. Luché hasta que decidí
rendirme y simplemente experimentarlo.

Recuerdo que pensé que el sentimiento quería que cantara en voz alta sobre
algún tipo de Dios, un ser celestial. Quería que expresara gratitud y cantara
en voz alta los sentimientos que estaba despertando en mí. Recuerdo que mi
corazón se llenó de luz y sabiduría. ¡Solo tenía seis años! No tenía idea de lo
que me estaba pasando. No tenía idea de donde procedían las palabras que
salían de mi boca.

Pero el sentimiento fue tan genuino que decidí expresarlo a través de un canto
muy peculiar. Recuerdo que me sentía avergonzada, pues estaba cantando
una canción que ni siquiera existía. ¡En voz alta! Acerca de un Dios sobre el
que nadie me había hablado antes. Ciertamente, no cantaba sobre el Dios del
que escuché hablar a mi abuela. El dios que castiga. Era otra fuerza
totalmente pura, compasiva y benevolente. Una fuerza más allá de cualquier
razonamiento o juicio.

Entonces, comencé a llorar cuando las palabras y la melodía salieron de mi


boca. Me recosté en la cama y apoyé los pies contra la pared, mirando hacia
el techo, y había un cuadro en la pared. Era una foto de un extenso campo
abierto de verdes y hermosos pastos y pequeños arbustos. Más adelante en la
vida, oí a alguien decir que mi nombre significaba: pradera abierta. Tal vez
estaba cantando para mí misma. Tal vez estaba creando un remanso al que
podía volver inconscientemente en momentos de desesperación e
incredulidad.

En ese momento supe que había algo más grande que se identificaba con algo
que llevaba dentro. Ese día me di cuenta de que tenía un pedazo de esa
belleza dentro de mí. También descubrí que podía encenderlo cada vez que
cerraba los ojos y me veía de pie en un campo verde de hierba infinita y
pacífica.

Lo hago a menudo. En realidad, cada vez que entro en un estado meditativo.


Primero voy y me siento en una posición entrecruzada en la pradera. Y allí,
me relajo y espero ser recibida por los maestros que me llevan a los mundos
desconocidos.
Ese sentimiento es tan profundo dentro de mí, que nunca me permitió
perderme por completo. Me mantuvo completa incluso cuando permití que
otros agitaran mi mundo.

Fui sacudida pero nunca olvidé que era inquebrantable.

Palabras de Sabiduría
Nuestra identidad estaba destinada a permanecer en silencio durante mucho
tiempo. Los valores y las reglas que has estado siguiendo son, en esencia, un
mecanismo de defensa que has creado para proteger a tu corazón del daño.
Daño que creías que existía. Daño que es una ilusión de la principal fuente de
energía de la mente: el miedo.

No nos dimos cuenta de nuestra propia divinidad, por lo que podríamos tener
la oportunidad de allanar el camino hacia la autoconciencia. Ahora que estás
aquí, y te estás dando cuenta de que no estás consciente de tu verdadera
identidad; ¿Puedes recordar un momento de tu vida en el que sentiste a tu
alma plenamente?

Regresa a ese momento, vívelo, amplifícalo, experiméntalo. ¿Qué sentiste


entonces? ¿Cómo respiraste? ¿Qué tan abierto estaba tu corazón a estos
sentimientos? Ahora. Intenta recordar el primer instante justo después de esta
experiencia. ¿Cómo te saliste desde este estado de divinidad?

Es decir, en pocas palabras, esta es tu programación. ¿Qué te dijiste a ti


mismo para salir de este estado? Cuando tu mente entró en acción, ¿qué te
dijo?

Las palabras exactas no son importantes. Lo que es relevante, es el hecho de


que ahora sabes que la mente intervino para entrometerse y proteger la
vulnerabilidad de tu corazón en ese momento. Y reforzó su necesidad de
protección. Es en los momentos más sensibles de nuestras vidas (los que
importan) cuando se expande el tamaño de nuestra alma y nos vemos
empujados a amar "aún más", y a dar el máximo. Más allá de lo que nuestra
mente pensaba que nuestro corazón era capaz de dar.

El límite siempre está en la mente.

Imagina que corres diariamente cinco millas. Un día pasarás de las cinco y
correrás un poco más. Te sentirás genial, increíble, seguirás hasta que, de
repente, empezarás a darte cuenta de que en realidad has superado las cinco
millas normales y te sientes genial, puedes hacer más.

Pero, ¿qué suele pasar? La mente intenta decirte que sólo puedes correr cinco
millas. Comienza a buscar lo que podría salir mal o te pones ansioso al pensar
que si recorres más de cinco millas hoy, ahora todos los días tendrás que
cumplir con el nuevo estándar.

Quédate en tu cabeza y estarás muerto.


~ Tony Robbins

Exactamente lo mismo sucede cuando el corazón se estira para crecer. La


mente se asusta. Es su trabajo hacerlo. Y está bien. Nos han dicho de alguna
manera que tenemos una mente que se equivoca, que interfiere en los
procesos, y mezcla y malinterpreta las cosas.
Comprendiendo el trabajo de la mente te liberas de ser un esclavo
de sus reacciones.

La mente se volverá loca por un momento, y eso está bien. Esa es la voz de la
mente. Solo asegúrate de que tu corazón también tenga voz. Deja que el
corazón también haga su trabajo. Necesitas que ambos confluyan en armonía.
Si eres un corazón sin mente o una mente sin corazón, y eliminas el conflicto,
también eliminas la belleza y la magia que proviene de la danza perfecta
entre los dos.

Es en el equilibrio donde está la felicidad.

Ahora sabes que nunca dejaste de ser quien realmente eres. Siempre lo has
sido y ese conocimiento interno es lo que te ha llevado a contactarte con tu
propio ser divino.

Abrázalo.
Afirmaciones de Poder

Soy tan entero y completo como el universo intencionadamente me creó.

Mi mente es el caballo, pero mi corazón es el jinete.

El poder de mi alma es inquebrantable.


PASO TRES
Viendo a los demás por lo que son
Y no por lo que han hecho

~ Toca sus corazones, no sus mentes. ~


Hacer las paces con nosotros mismos, nuestro pasado y aceptar nuestro
presente fue bastante difícil. Sin embargo, todavía no hemos ganado la
guerra. Tenemos una batalla en nuestras manos, debemos seguir algunos
pasos más si queremos poner en práctica el amor real.

Exonerarnos y perdonarnos a nosotros mismos de verdad no sería un acto


sincero ni completo si no nos tomamos un instante para ver a los demás de la
misma manera que nos vemos a nosotros mismos, y el papel que su dolor y
su sacrificio han tenido en nuestras vidas.

Cuando hacemos las paces con nosotros mismos, entramos en un nuevo


mundo de posibilidades, pero perdonar a los demás y verlos por lo que
realmente son es lo que hace que ese nuevo mundo en el que ahora vivimos
se complete.

De repente vemos a los demás de una manera completamente nueva, y surgen


posibilidades. Como por arte de magia ahora las relaciones fluyen y es más
fácil interactuar con amigos y compañeros de trabajo. Lo que vas
descubriendo mientras transitamos este viaje es que a medida que te trates
mejor y te muestras amable contigo mismo, esto se refleja en los demás.
Hagamos una pausa y revisemos nuestro pasado desde esta perspectiva.

Realmente, No Hubo Daño


Me he divorciado por segunda vez. Tengo tres hijos hermosos y amorosos,
pero nunca podré compartir un hogar con sus padres.

La primera vez que me casé estaba muy segura de que sería de por vida. Hice
alarde de mi matrimonio, diciendo que nunca me separaría. Tomé las
fotografías perfectas en las vacaciones perfectas. Vacaciones que armé yo
sola. Vendiendo la idea perfecta de la experiencia que quería, esperando
siempre que mi esposo dijera que sí al descubrir que todo ya estaba planeado
en mi cabeza y listo para ejecutarse.

Tenía el marido perfecto. Él siempre diría que sí, nos tomaríamos las
vacaciones, las mejores fotografías y nos divertiríamos, tal cual se esperaba
para luego regresar felices a casa.

Volver al hogar. Sin dar ningún paso afuera, en la jungla de la vida que nos
acecha.

No hubo mucho crecimiento ni progreso. Jugué ese juego conmigo misma


hasta que mi inconsciente recibió el mensaje. A ese ritmo, nunca alcanzaría
mis propósitos más elevados, tendría que esperar hasta mi próxima vida en la
Tierra.

Lo amaba, de acuerdo con mi concepto infantil de amor de aquel entonces,


pero no me amaba a mí misma. Me perdí en la búsqueda desesperada de
realización, que creía estaba en otra parte.

Nací con un impulso muy acentuado que me empuja a buscar una verdad
superior. Nada en mi vida ha sido más poderoso que esto. Ni los principios en
los cuales fui criada. Ni las reglas de la sociedad. Ni las reglas acerca del
matrimonio o el divorcio. Nada. Ni siquiera mi propia vida. Porque creo que
el propósito de la vida misma es alcanzar la verdad más alta a la que se pueda
aspirar.

En realidad creí en algún momento que estaba sufriendo. Y probablemente


era así. Pero ahora no hay tiempo para rememorar sufrimientos pasados.
El dolor, como el tiempo, es relativo para nuestra conciencia.

Pero claro, dolía demasiado. Se sentía en carne propia. Mi dolor; y cómo


otros eran causantes de ese dolor, los hacía los responsables por lo que yo
sentía. Esa ilusión se sentía muy real. Y me perseguía una y otra vez.

Sin embargo, una parte de mí realmente cree que no hay daño. ¿Estoy loca?
¿Cómo es eso posible? ¿Qué parte trastornada de mí puede hacer las paces
con esto? ¿Por qué no estoy temblando? ¿Por qué no estoy perdiendo el
control o deprimida? ¿Cómo puedo estar llena de vida, criar a mis hijos y
comprender la vida?

Con la certeza absoluta que me permite caminar la vida orgullosa de mi


misma, y más allá de eso, con un entendimiento completo del camino en que
aún están, aquellos que juzguen. Eso es libertad.

Palabras de Sabiduría
En un estado de abundancia, no hace falta nada. Todo está en paz. A pesar de
todo.

La carencia es totalmente diferente. La carencia significa que algunos tienen,


y otros carecen. Quienes carecen quieren tener, y quieren avanzar hacia tener.
Esta es la historia del desarrollo y la evolución. Una forma de crear carencia
emocional es creer que ha habido daños causados por el dolor y la falta de
conciencia de los demás.

Percibir el daño en las acciones de otros es una ilusión necesaria. Es


inevitable crear el estado de carencia para iniciar el movimiento hacia la
evolución y el cambio.
Si no te hubieran mostrado lo que no quieres sentir o lo que te duele, ¿cómo
sabrías qué es lo que si deseas sentir? Si no te hubieran humillado, ¿cómo
podrías tener la oportunidad de no volver a cometer el mismo error? Tal vez
para hacer una elección consciente, necesitamos conocer la contraparte de las
situaciones.

Entonces, ¿qué pasa si, en la vida, tomamos un enfoque diferente en los


momentos difíciles?

¿Y si tu peor día fuera tu mejor día?


~ Tony Robbins

¿Qué pasaría si el momento más oscuro de tu vida fuera puesto ante ti para
hacerte fuerte? ¿Para hacer que te transformes en quién necesitas ser para
cumplir tu propósito y misión? ¿Qué pasaría si la lucha más grande de tu vida
es el impulso final que necesitas para comenzar tu viaje hacia la plenitud?

¡Sé feliz!

El universo no malgasta este tipo de energía si no estás listo. Debes confiar


en el proceso. Después de todo, ¿cuánto control tienes sobre tu vida y la de
los demás? ¿Y cuánta felicidad generas al controlar las circunstancias
externas? ¿Destellos de satisfacción? Quizás, pero no de realización duradera.

Incluso cuando te sientes seguro, nunca es por mucho tiempo. Esta seguridad
siempre está condicionada a otra circunstancia que no puedes controlar. Por
ejemplo un período de tiempo o el comportamiento y las decisiones que otros
puedan tomar. ¿Qué tal si pones tu energía en activos emocionales y no en
pasivos? ¿Qué tal si cambias y te enfocas en crear un estado emocional que te
lleve hacia la realización?

Cuando gastamos, sacamos de un lugar para poner en otro. Para comprar una
comida, tú deduces de su valor en efectivo y transfieres la diferencia al
proveedor. Ese dinero no crecerá. Fue un gasto. Tú comiste. Horas después
volverás a comer. Es una necesidad vital, por lo que debes gastar para
satisfacerla. Si tus recursos no se reponen, no podrás cubrir esa necesidad
básica que te mantiene vivo. Debes reponer esa fuente.

Entonces, ¿qué sucede con las necesidades emocionales y espirituales?

¿Con qué se paga la felicidad?

¿Estamos intercambiando algo por sentimientos? Si sentimos que nuestros


estados emocionales no son completos y satisfactorios, ¿significa que nos
comprometemos con débitos y no con créditos?

El daño y el dolor provienen de un lugar de carencia y escasez. Tal vez


estamos sacando recursos de un área y los movemos hacia otra donde
creemos que obtendremos más placer. ¡Luego nos involucramos en este gran
juego de Aplasta al Topo donde cada persona involucrada tiene un martillo!

Como un lunar, el dolor aparece en nuestras vidas súbitamente. Surge cada


vez más rápido, y lo golpeamos una y otra vez, tratando de evitarlo hasta que
estallamos. Nos enfrentamos al dolor con un martillo enorme. Es la
herramienta que hemos construido para poder sobrellevarlo. Hemos sido
condicionados a responder de esta manera. Observamos que el topo aparece
para atacarnos y respondemos también con otro ataque.

¿Qué pasaría si nos damos cuenta de que no se trata de golpearlos a todos,


sino de que es hora de dejar de jugar? ¿Qué pasaría si pudiéramos elegir
nuevamente y descubrir que podemos sobrevivir al "dolor" al redefinirlo?
Si has abandonado este juego, tómate un momento para felicitarte. Observa la
imagen desde el exterior antes de salir de este lugar. Mira más de cerca.
Observa los rostros de esas personas, sosteniendo sus martillos para salvar
sus vidas. Siente por ellos.

¡Agradécelo! Ellos te ayudaron a salir de este juego ilusorio.

Alguien tenía que estar ciego para que tú pudieras ver la luz.

Agradéceles, porque todos somos jugadores de nuestros propios destinos y al


mismo tiempo agentes del destino alguien más. Mira cómo se enfurecen
cuando un lunar aparece de repente. Observa sus reacciones, cómo las
etiquetan como problemas. Sin embargo, un día descubriste que los
problemas eran tus mayores bendiciones. Una señal del cielo para que
despiertes. Tu propio mensaje en la botella para ti mismo, entregado por una
ola enviada por los demás.

¡Oh, daño! Tan necesario, tan doloroso…Hasta que un día lo desnudamos y


vemos el diamante que hay dentro.

¡Oh! Antes de dejar todo esto atrás, recuerda que abandonarás este círculo. Y
seguirás avanzando, pero habrá paradas en la vida en las que te encontrarás
de nuevo con el juego loco.

Los jugadores te dirán que no sobrevivirás si no tienes un martillo. ¡Incluso te


entregarán uno! Casi te convencerán de que te están haciendo un favor y te
criticaran por no querer aferrarte a uno. Querrán tentarte para que
reconstruyas el mecanismo de autoprotección que te protege del dolor, pero
también del amor.
Podrían intentar hacerte daño e incluso tener éxito. Podrían hacerte sentir que
eres diferente a ellos, porque en realidad lo eres.

No eres mejor que ellos, solo estás en una etapa evolutiva diferente
de la vida.

Será difícil caminar y resistirte a participar en estos juegos por un tiempo.


Deberás mantenerte firme, hasta que no necesites la validación y aprobación
de los demás para seguir adelante. Hasta que aprendas completamente a
amarte y apreciarte a ti mismo como un ser superior.

Hasta que ya no te sientas tentado a agarrar un martillo, te


ofrecerán uno.

Entonces serás un tipo diferente de agente en la vida de los demás. Todavía


con la misión de ayudar a otros pero desde una perspectiva de contribución;
dharmática, y no karmática. Aquí es donde empezamos a retribuir. Aquí es
donde termina el trabajo y comienza la misión.

Éstas un paso más cerca del hogar.


Afirmaciones de Poder

El camino en el que me encuentro está diseñado cuidadosamente para


ayudarme a cumplir mi propósito divino.

Con lo que más lucho en mi vida es justo la siguiente lección que debo
aprender.

Mi sanación es el propósito final del universo, y la vida funciona a mi favor.


El Error del Principiante

Viví mi primera experiencia de despertar consciente, apenas comencé en mi


vida adulta. Experimenté una sensación fuera del cuerpo que disminuyó mi
miedo a la muerte.

Todo comenzó cuando conocí a una persona muy querida en mi vida. Este
encuentro me hizo comprender mejor el concepto de la conexión de almas y
su propósito.

Nos tropezamos el uno con el otro en un pasillo, y sentimos como si dos olas
de energía se hubieran enfrentado. En algún mundo, ese choque produjo
ruido. Pude sentirlo.

Nos miramos confundidos, con una sonrisa noble, como si nos hubiéramos
encontrado después de mucho tiempo. Milenios. Ambos podríamos decir que
nuestras almas se reconocieron mutuamente. Nuestros espíritus se saludaron.
Podía sentir el honor, el vínculo. Algo que ambos respetábamos. Como si
cada uno de nosotros hubiese salido de nuestros cuerpos para saludarnos. Si
has sido iniciado en una orden mística antigua, sabes a qué tipo de conexión
me refiero. Pronto empezamos a acercarnos el uno al otro. Compartimos
nuestro día a día y nutrimos nuestro vínculo espiritual.

Nuestro ser físico no sabía cómo manejar ese sentimiento. Confundiendo la


sensación con una extraña e inexplicable atracción. Poco después, empecé a
investigar y leer libros relativos al mundo espiritual. Este fue el comienzo del
viaje consciente al reencuentro conmigo misma.

¡Pero no tenía idea de que estaba comenzando!


Cuando comencé a transitar por el camino de la evolución consciente, cometí
el error más frecuente de los principiantes entusiastas. Creía que, con un poco
de información, ya sabía todo sobre mí y sobre los demás. Actué rápidamente
poniendo en práctica lo que creía haber aprendido.

Me mataba la ansiedad por sentir el verdadero amor, la identificación y la


conexión que buscaba. No sabía que no me amaba. No pude percibir mi
ansiedad destructiva y el efecto que tuvo en mí y en los demás. Luego
encontré una explicación para mi insatisfacción: mi vida y las decisiones que
había tomado hasta ese día.

Entonces creí que todos los demás tenían un problema. Que las personas que
no estaban en el camino no eran lo suficientemente buenas, ni lo
suficientemente inteligentes, ni mucho menos evolucionadas. Llegué a creer
que esa era la fuente de mi descontento. Mis relaciones y no yo.

Claramente no pude ver cómo todo esto me estaba preparando para la lección
más importante de todas: ¿qué hace a una persona espiritualmente avanzada?

Cometí el enorme error de hacer alarde de mis nuevos descubrimientos y


sentirme superior. Menosprecié a los demás con comentarios, miradas y mi
conducta. Todavía me siento realmente avergonzada de ello, aunque
finalmente pude ver la grandeza del dolor y las lecciones para encontrarme a
mí misma.

También cometí el gran error de querer arreglar la vida de otros. Y eso no fue
lo peor. Lo hice sabiendo totalmente que no había nada que pudiera hacer por
ellos. No podría haber hecho nada para que nuestras relaciones funcionaran.
Ya había llegado demasiado lejos. Pensaba que yo era, de alguna manera,
elegida o especial.

Después de todo, la vida tenía un plan más grande para mostrarme lo que
realmente era el desarrollo espiritual. Y así lo hizo.

Palabras de Sabiduría
Somos los dueños de nuestros propios destinos. Eso vale para construir, pero
también para destruir. ¿Por qué nos damos el crédito cuando construimos y
culpamos a los demás cuando destruimos? ¿Podríamos estar evitando
encontrarnos con la parte nuestra que más debemos amar? ¿Somos nuestro
mayor enemigo?

Piensa en eso por un minuto. Cuando se trata de asuntos del corazón,


esperamos el amor de los demás, pero nos despreciamos en secreto.

Desde ese lugar nos enfrentamos al mundo de quienes nos rodean.


Pretendemos sanarlos una vez que creemos haber encontrado la fórmula para
llegar al cielo. Queremos que estén con nosotros, porque sabemos que si se
van, también nos sentiremos inducidos a hacerlo. Queremos ser nosotros,
pero no sabemos cómo hacerlo solo con nosotros mismos.

Queremos que otros nos enseñen. Así que los presionamos pese que aún no
estén listos para dar el paso. Y lo hacemos en nombre del amor, la
comprensión y la compasión.

El crecimiento es un viaje muy personal. El momento más precioso en la


existencia de una persona es el momento en que internaliza la respuesta a una
pregunta que se ha formulado conscientemente. Ahí es cuando te das cuenta
de la respuesta con todo tu ser, se fusiona con tu mente consciente. Surge de
tu inconsciente y se convierte ahora en parte de tu ser consciente. Este es tu
crecimiento. Una transferencia de tu cofre del tesoro escondido a tus manos,
donde puedes ver tu propio valor.
Esos diamantes no provienen de ningún otro lugar sino de ti mismo. Este
tesoro que tienes dentro de ti, nadie te lo puede arrebatar, del mismo modo
que no puedes extraerlo de los demás. Siempre ha estado ahí. Al descubrir lo
que vales también podrás ayudar a otros a descubrir su valor.

Ese momento en el que te das cuenta de que tus mejores respuestas se


encuentran en tu interior es mágico. No se puede explicar o falsificar. Por lo
tanto, no se puede infundir en los demás. Si les damos respuestas a preguntas
que no se han formulado, sus corazones escucharán su respuesta, pero sus
mentes no estarán preparadas para procesarla e interiorizarla. Así, generamos
sufrimiento para los demás que a menudo los aleja del camino resentidos por
el viaje evolutivo para el que aún no estaban todavía listos.

Además, los invito a revisar el propósito de por qué haríamos tal cosa como
intentar arreglar a los demás.

Esperamos que otros lean el libro que leemos y nos decepcionamos cuando
no encuentran el mismo entretenimiento que nosotros. Por nuestra parte es un
acto noble querer compartir nuestras lecciones. Pero ¿cuál es el verdadero
propósito detrás de eso?

¿Cuál es la verdadera razón por la que nos molesta tratar con alguien que no
ha aprendido lo mismo que nosotros? ¿Podría ser que no podamos manejar
quiénes éramos antes de que ocurriera este cambio?

Si es así, sólo has trabajado a medias. Descubriste quién puedes ser, pero para
alcanzar la plenitud, debes amar y apreciar quién fuiste, por lo que pasaste,
porque eso te trajo hasta aquí.

Entonces, ¿es la falta de aceptación de otros que no están en el mismo punto


de nuestro camino una señal de que no nos aceptamos y nos amamos a
nosotros mismos? Si sentimos que hemos aprendido lecciones y es hora de
comenzar de nuevo, con una hoja en blanco, ¿estamos realmente enfrentando
y abarcando todo el espectro del proceso mágico que es el crecimiento
espiritual?

Acelerar el crecimiento en otros, cuando no lo buscan, es una forma de


retrasar su evolución. La persona generalmente rechaza a la lección impuesta
con sus mentes, en lugar de con su corazón. No están abiertos a ello. Su
mente no se ha dado permiso para dejar que esa respuesta entre. Se percibe
como un ataque en lugar de una bendición. Después de todo, ¿no es eso lo
que el universo hace con nosotros mismos?

¿Cuántas oportunidades de aprendizaje se presentan para nosotros todos los


días? Un estante lleno de archivos de lecciones. Y caminamos, los miramos,
leemos sus títulos, y algunos días sacamos algunos. Otros días caminamos
junto a ellos y hacemos de cuenta que no están allí. Después de haber evadido
las lecciones por un buen rato, el universo decide dejar caer una carpeta a
nuestros pies.

Miramos a nuestro alrededor. Verificamos que otros estén buscando nuestro


camino e intentamos volver a colocarlo en el estante. A veces lo logramos,
sin darnos cuenta de que devolverlo tiene un precio muy alto. Se nos cobrará
una tarifa por retrasar esa lección. El universo está interconectado. El hecho
de que posponga el aprendizaje de la lección ahora significa que los demás
deben quedarse ahí hasta cuando decida abrir ese archivo.

Otras veces es imposible posponer el aprendizaje. Algunos de los agentes de


cambio involucrados están listos para seguir adelante. Necesitan servirte
ahora. Verá las fotos de todas estas personas dentro de su carpeta, y se
sumará el precio que se pagará al no abordarlas.

Cada una de estas personas en tu carpeta desempeña el papel de mostrar el


conjunto de circunstancias en las que puede recrear una situación que debe
superar. Cada vez que dejas ir una de estas lecciones y no obtiene el
reconocimiento, se vuelve más explícita, más clara y más dolorosa. Es una
llamada del universo que tú mismo has pedido.

Cuando finalmente decidas abrir una carpeta y abrazar su contenido, es hora


de celebrar. ¡Estarás superando un milenio de errores! Acepta tu pasado, para
bien tuyo y de los demás.

Bríndales a los otros la comprensión y el espacio que necesitan para


encontrar su propio momento de despertar. Bendícelos con la oportunidad de
elegir su propio tiempo. Para levantarse y recoger su siguiente archivo de la
estantería.
Afirmaciones de Poder

Solo tengo control sobre mi propio destino y propósito.

Sirvo a otros en su camino evolutivo cuando les permito enfrentar sus


lecciones en su propio momento.

Celebro a quienes entran y salen de mi vida en el momento exacto en que lo


hacen.
Relaciones: Tú y tu Reflejo

Por muchos años me pregunté a mi misma ¿Estoy en la relación correcta?


¿Esta relación es buena para mí? ¿Soy buena para mi compañero? En este
punto de mi vida donde ya he alcanzado la realización, me pregunto: ¿Cómo
me veía a mí misma separada de mi relación?

No estaba consciente de cómo había sido en el pasado mi conducta en las


relaciones. Si me hubieses preguntado sobre mis creencias respecto a las
relaciones, te habría dado un concepto realmente fantástico sobre las mismas.
Sin embargo, mi mente no actuaba acorde a este concepto, si hubiese sido así,
sentiría el amor a plenitud dentro de mí. Era incapaz de ver cómo mi
comportamiento me hacía miserable a mí y a los demás.

Estaba esperando que la relación me definiera, y así fue. Constantemente. Eso


significa que el estado de la relación definió mi estado de ánimo y mi estado
emocional. Cuando la relación no se encuentra en su mejor momento, si los
involucrados no están ahí para sostenerla, ¿cómo podría sobrevivir?

Luché por hacerme notar. Lo hice, o al menos di cada pedazo de lo que no


tenía, para hacerlo. Creo que me expuse muchas veces, sin embargo, no lo
disfruté mucho. Si yo daba algo, necesitaba inmediatamente una respuesta y
una retroalimentación. Necesitaba un reembolso. Y rápido. Servir a los demás
se convirtió en un proceso doloroso. Cuando lo hacía, me sentía vacía al
instante. Me quedaba esperando a que otros se ocuparan de llenar mi propio
vacío.

Puedo identificar claramente el dolor ahora mismo. Puedo, con absoluta


certeza, identificar lo que realmente me hirió en esos momentos.

Me dolía no sentirme emocionalmente capaz de dar amor a la persona que


amaba, cuando era lo que más deseaba. Luchaba por amar. Quería amar y
dar, pero a costa de destruir la superficie de un corazón que se sentía vacío.

Normalmente, una persona emocionalmente apta en esta situación sabría que


primero debería llenar su propio vacío antes de dar amor a los demás. Pero
aquí está la esencia del asunto. No reconocía la carencia como un problema
dentro de mí misma, sino que pensaba que era un problema en los demás.

Haz de la abundancia en tu interior un prerrequisito para tus


relaciones.
Tu carencia no puede ser llenada por una fuente externa.

No era nadie sin la aceptación y validación de mi pareja. No podía quedarme


quieta. Estaba ansiosa. Estaba aterrorizada de mi propio estado, de estar sola
con mis pensamientos. Estos pensamientos que me hablaban de lo que había
vivido y no de quién era yo por dentro. Me aterraba no ser quien
supuestamente debería ser, y me estaba olvidando de un pequeño detalle:

Debí haberme propuesto lograr cosas en la vida, y no ser alguien en la vida,


porque ya lo era. Siempre había estado completa y no me faltaba nada.

Este patrón estuvo presente toda mi vida, en todas mis relaciones, amistosas o
románticas. En algunos casos, el patrón se hacía sentir con más fuerza. Pero
definitivamente está situación se fue acentuando hasta arrastrarme a un estado
de absoluta falta de amor propio.

Mi matrimonio me puso en el camino para que esta transformación tuviera


lugar. Me dio las herramientas necesarias para experimentar mi falta de amor
propio y sus consecuencias, una y otra vez. Si hubiera tenido un marido
comprensivo y cariñoso, aún estaría a años luz de la realización más grande
de mi vida.

Por eso escribí este libro. Muchas personas ya tienen una pareja increíble. Yo
tuve el compañero perfecto, para el bien de mi propia evolución, digámoslo
así. Estoy compartiendo mi lección con la esperanza de que se encienda una
chispa en tu corazón que te lleve a buscar tu plenitud. Me llevó mucho
tiempo darme cuenta de mis carencias. Mi mente, que todavía lucha por
aceptar la perfección del universo, cree que si hubiera sabido
conscientemente lo que me faltaba, entonces podría haber cubierto estas
carencias antes.

Habría construido normas para llenar mis carencias de manera diferente, de


una manera amorosa, o para evitar la mayor cantidad posible de daño. Sin
embargo, siento que no se desperdició ni un segundo. Cada experiencia tuvo
un propósito. Todas esas experiencias acumuladas me impulsaron a tomar
una decisión que cambió mi destino.

Sin embargo, no sabía que no me amaba a mí misma hasta el momento en


que hice el cambio, justo en frente de otros 5000 amorosos seres humanos.
Allí pude experimentar el amor de otros, al mismo tiempo sentía que me
despreciaba a mí misma. Fue en ese instante, cuando me di cuenta de lo que
me impedía vivir: mi propia desconexión con mi verdadero ser.

¿Cómo cambiarían nuestras relaciones si pudiéramos verlas como


catalizadores de nuestra integridad y como una forma de contribuir al
mundo?

La pregunta dominante cuando me enfrentaba a un desafío era dudar de mi


compañero, o de la relación en sí misma ¿Esta relación es buena para mí?
¿Qué tal si cambiamos esta pregunta? Y nos preguntamos: ¿Cómo puedo
compartir el amor y la abundancia que siento en mi corazón, en este
momento?

Palabras de Sabiduría
Haz una pausa por un momento.

Observa las relaciones que existen en tu vida. ¿Hay alguna relación que te
traiga dolor? ¿Tal vez incomodidad? ¿Existen relaciones que quisieras
cambiar, mejorar o transformar?

Mejorar nuestras relaciones sería genial. Pero considera que cualquier cambio
fuera de tu núcleo y de tu estado emocional sería un cambio que sumaría
ansiedad a tu vida. Controlar cualquier cosa externa a ti, solamente
aumentaría tu nivel de stress y distorsionaría la forma en que piensas de ti
mismo y de los demás.

Si asociamos nuestra realización a agentes externos, podríamos experimentar


éxitos instantáneos y momentos de placer, pero ¿experimentaríamos la
realización?

Te comprendo.

No dudo que tu concepto del amor es muy hermoso y generoso. Podemos


amar e incluso dar nuestra vida por alguien que amamos, pero esto no nos
haría felices a nosotros mismos. Como resultado, aquellos que nos aman,
también sufrirían. Es un juego donde nadie gana.

Te invito a que veas cómo defines las relaciones y cuánto sinceramente


disfrutas actuando de acuerdo con esa definición. ¿Te sientes bien? ¿O luchas
por mantenerte al día con la definición de amor que has creado? Si sólo tienes
control sobre ti mismo (¡y parcialmente!), ¿Puedes realmente depositar toda
tu energía en tu pareja? Tal vez sólo existimos en el universo por nosotros
mismos. Y desde cada una de nuestras perspectivas individuales podemos ser
un agente de cambio en la vida de los demás.

Agradece a las personas en tu vida por ser como son. Ellos sanarán a medida
que tú sanes, a su tiempo vivirán sus propias lecciones. También llegarán
otros que te desafiarán con nuevas lecciones de vida.

Si pierdes la perspectiva por un minuto, mira a tu alrededor. ¿Quién te rodea?


¿Quiénes son ellos? ¿Cuáles son los desafíos que estás enfrentando? Las
relaciones representan oportunidades para crecer.

Si amas a otros, crece, para que puedas liberarlos.

El mayor regalo de amor que puedes dar a los demás es actuar desde tu
centro, desde tu autenticidad. Es una señal que le envías al universo, le
informas de que estás preparado para entrar en el mundo de otra persona y
hacer que valga la pena. El universo elige la interacción y será la adecuada
para ti mismo y para los demás. Si no te amas a ti mismo, y estás en la
búsqueda de tu verdadero ser, el universo te proporcionará interacciones que
reflejan tu propio estado de carencia. Te pondrá frente a un espejo grande y
nítido.

¿Alguna vez has ido al optometrista? Allí te muestran signos y números y te


preguntan si puedes verlos ¿No puedes? Y cambian la lente y repiten la
pregunta: ¿Puedes verlo ahora?
Las lentes son nuestras experiencias. Se hacen cada vez más difíciles para
que podamos entender la imagen que necesitamos ver de nosotros mismos,
sólo así seremos capaces de descifrar, leerla, comprenderla.

Es curioso, acabo de hacerme nuevos lentes graduados. Físicos y


emocionales.

Consigue los tuyos. Póntelos.

Comparte con otros que también llevan unas puestas. Compartir lo que
realmente eres es interactuar desde una visión y un concepto de los demás
que a veces no pueden ver. Es posible que observes la dualidad en las
personas con que interactúas. Podrías al mismo tiempo ver en alguien a su
monstruo y a su ser superior. Su naturaleza humana, sus lecciones y su ser
divino. Tu rol es interactuar con sus seres superiores, y amar y apreciar su
humanidad.

No te involucres negativamente con la parte de ellos mismos que


no aman.

Aprécialos, perdónalos y aléjate de esa puerta.

Toca la otra puerta, la de su corazón.

Si ellos no ven su divinidad, debes comprender que el camino más corto


hacia su despertar es tu sola presencia. Espera con gracia en la puerta, con
todo el corazón. Arrojar piedras contra esa puerta sólo la hará más sólida,
sólo activará un mecanismo de defensa. Dentro, hay un ser débil y vulnerable
que tiene miedo de salir.
Sólo la paz y el amor harán que se sienta seguro de salir de su caparazón.
Espera su florecimiento, con los brazos abiertos y una rosa en tu corazón.
Afirmaciones de Poder

Estoy contento de servir a aquellos con los que me cruzo en mi camino sin
esperar ninguna apreciación a cambio.

Cada persona que entra en mi vida es una bendición que he pedido consciente
o inconscientemente.

Abro mi mente y mi corazón a las interacciones que coinciden con mi nuevo


nivel de crecimiento.
PASO CUATRO
Aprendiendo a
Amarte
Completamente

~ En el mismo instante en que decidí no esconderme más de mi misma, en ese


divino momento me re-encontré. ~
Exploramos el mundo de los demás y cómo interactuar con ellos de una
manera verdaderamente amorosa. Sin embargo, me pregunto, ¿Dónde está el
límite entre nosotros y los demás? ¿En qué punto confundimos el amor con el
placer excesivo?

Es muy importante aprender que amar y dar no significa pasar por alto y
recompensar los comportamientos negativos y perjudiciales de los demás.
Eso no sería amarlos a largo plazo. Tampoco es amarte a ti mismo. No
beneficia a nadie, pero a veces puede ser muy difícil decir no.

Exploremos la idea de que nuestros límites están ahí no solo para nosotros,
sino también para el beneficio de los demás. Y que cuando abandonamos
nuestros estándares divinos, no estamos sirviendo a los demás como ejemplo.

Vamos a explorar a un poco más sobre el amor propio, y cómo amarte a ti


mismo es lo mejor que puedes hacer por los demás.

El Amor Propio No Es Egoísmo


Me equivoqué desde el principio. No recuerdo cuándo ni cómo. Pero tenía la
absoluta certeza de que amarme a mí misma era perjudicial para los demás.

Al crecer, en cada relación de mi vida, surgió este patrón. Con mis amigos y
mis relaciones sentimentales. Todo impregnado por la misma creencia
limitante: el amor propio es egoísta. Y como todas las creencias limitantes, la
mía fue seguida por su correspondiente cláusula de amenaza. Si pasas tiempo
contigo mismo, estarás alejándote de los demás.

Sorteé mi camino a través de la vida y el amor llevando este patrón. ¡Qué


carga tan pesada! Noté más tarde que llevar esta creencia me costó mucho
más que fracasar en las relaciones. En realidad creía que llevarla era
obligatorio y eso me ha costado mi autenticidad. Y a pesar de ser una
buscadora de la verdad, me convertí en una mentirosa compulsiva. ¿Sabes
quién fue la persona a la que más le mentí? ¿A quién crees que fue? Sí. Lo
adivinaste.

A mí misma.

Me mentía todo el tiempo. Mi mentira más grande fue convencerme de que


estaba plena y llena de amor. Que tenía mucho que dar y compartir con los
que más amaba.

Creía que mientras solo me mintiera a mí misma, todos los demás serían
felices.

Esta falta de autenticidad se manifestó en mi cuerpo. Piénsalo, una persona


que busca y valora la verdad más que nada. Una persona que usa frases como
"Prefiero morir antes que mentir". ¿Qué crees que precipitó este
comportamiento de mentirme a mí misma?

La muerte misma.

Cuando tenía veintitrés años de edad, me enfrenté a un cáncer de tiroides,


ubicado en la glándula física que corresponde al chakra de la garganta, que
implica la capacidad de comunicar la verdad, el arte de la autoexpresión y la
claridad.

Después de recibir ese diagnóstico, viví días difíciles. Cuestioné a Dios y el


propósito de la vida. Esto sucedió tres años antes de mi despertar espiritual
consciente. Yo era joven y todavía estaba lidiando con el temor de Dios,
espiritualmente me encontraba en algún lugar entre la oración y el castigo,
toda mi existencia estaba colgando de un hilo. Fue entonces cuando me
pregunté: Si tengo que irme ahora, ¿Qué voy a dejar detrás de mí?

Noté que no había empezado a vivir. Ni siquiera sabía quién era y nunca lo
sabría. La idea de morir joven me hizo ver la vida de manera diferente. Y
tomé decisiones que pensé nunca tomaría. Después de todo, el sentimiento
que me impulsaba hacia adelante seguía siendo el miedo.

Para ir a lo seguro opté por una extirpación radical de la glándula. Estaba


aterrada. Pero al menos, por su grado de gravedad, era uno de los cánceres
que hubiese elegido si no me quedaba otra opción que tener uno.

El hecho de que apareciera a una edad tan temprana me hizo sentir que había
sido una gran señal, un tremendo llamado de atención.

Durante años me pregunté si realmente me había curado. Sabía que había


eliminado la manifestación física de la causa desconocida de mi cuerpo, pero
no estaba segura de estar totalmente a salvo. ¿Todavía me estaba
comportando de la misma manera que produjo esa enfermedad? ¿Estaba
repitiendo los mismos errores otra vez?

Nunca pude realmente saber qué significaba haber enfrentado este desafío.
Lo dejé abierto y nunca me sentí completamente curada.

Hasta ahora.

Hoy, cierro un capítulo en mi vida mientras escribo esto. Es uno de los pocos
capítulos que he cerrado en mi existencia. Hoy, sé que encontré la respuesta y
abordé internamente la causa de esa manifestación física de dolor y
desesperación.

Estoy curada, me siento sanada.


Palabras de Sabiduría
No más mentiras. No más edulcorantes artificiales. No más pretender ser
comestible y agradable para los demás. Adéntrate en la hermosa sensación de
la absoluta certeza de que tú eres el mayor regalo que le puedes ofrecer al
mundo.

Amarte completamente es el regalo más grande que puedes darte a


ti mismo y a los que amas.

Hay belleza incluso en nuestros errores más horrendos. ¿No puedes ver cómo
protegías a los demás del dolor que más temías? Si es de vida o muerte para
ti, ¿Desearías que tus seres queridos experimenten el dolor que estás tratando
de evitar? La respuesta es no, ¡por supuesto que no!

Así que los proteges. Los proteges del dolor de no sentirse plenos. ¡Pero ese
dolor es tu dolor! ¡No necesariamente de ellos!

Es común atraer a una persona que tiene que aprender las mismas lecciones
que tú. Si creen que carecen de algo, tomarán lo que les das. Intentarán tomar
lo que tú tampoco tienes. Este es el clásico patrón empático-narcisista.

Ambos están sufriendo. Al final, los opuestos son muy similares en esencia.
Ambos carecen de amor propio y de la auto-aceptación que necesitan. Y eso
es esencial para ver a la otra persona completa, entera y libre de carencias.

¿Puedes ver cómo creer que es posible alejarse de los demás, es encerrarlos
en la misma cárcel emocional en la que te encuentras?
¡Libertad!
~ Tony Robbins

¿Puedes ver la proyección? Proyectamos en los demás lo que sentimos. Si te


sientes vacío, los ves vacíos. Y, si tienes miedo de darte a ti mismo porque no
tienes suficiente para dar a los demás, ¿Puedes realmente recibir?

Esto es lo que eventualmente nos hace desagradables, incluso cuando somos


amados los demás. No logramos sentir el amor, y terminamos pidiendo más,
y más, esperando que algún día sintamos como soñábamos que se sentiría. Si
nunca podemos recibir de quienes nos aman, ¿Podemos ser parte de una
relación saludable?

Amar es generar un impacto positivo en la vida de otra persona. ¿Qué tipo de


impacto podemos generar si estamos en esta espiral infinita de miseria?

Recibir agradecidos y disfrutar es el mejor regalo que podemos dar a los


demás.

Saber recibir, es la mejor manera de corresponder al amor.

Valorar lo que se comparte con nosotros es una forma de escuchar


emocionalmente a quienes están más cerca de nuestro corazón.

Ámate, acéptate y perdónate por cómo te has comportado hasta hoy. Eso es lo
que has hecho, pero no quién eres.

Amarte a ti mismo es una forma de liberar a otros de tener que


cuidar las emociones que no has podido controlar.

Cuando finalmente sientes amor por ti mismo, tus emociones caen en su


lugar. Estás dotado de un entendimiento divino que te liberará para siempre.
Afirmaciones de Poder

Todos los días me permito cuidar y atender al ser humano que soy.

Mi propia curación y realización es la mejor contribución que puedo darle a


este Mundo.

Soy digno de amor, aceptación y comprensión.


Un Mundo Libre de Expectativas

Crecí con un conjunto de expectativas y de miedos acerca de mí misma. Me


vestí con ellos en algún momento del camino. ¡Y gracias a Dios por eso!
Estas expectativas me mantuvieron bajo control durante mis primeros veinte
años, mientras vivía sola en un país extranjero. Me guiaron a buscar cosas
buenas en la vida. Me mantuvieron luchando por la excelencia en mi vida
personal y profesional.

Tuve una familia muy comprensiva que apoyó mi crecimiento. ¡Y todavía lo


hacen! Mis padres siempre estuvieron allí guiándome y confiando en mí, pero
nunca obligándome a nada. Yo me obligué a mí misma. Entré a la edad de
trece años en buenas escuelas que requieren exámenes rigurosos y altos
estándares académicos. Fui a un internado cuando tenía quince años y viví
sola desde los dieciocho años. Desde temprana edad estaba decidida a
alcanzar toda la grandeza posible.

Antes de que me diagnosticaran el tumor, no había considerado seriamente el


matrimonio. De hecho, yo era una de esas mujeres que cuestionaban el
matrimonio. Nunca me vi teniendo un matrimonio feliz en ninguno de mis
sueños. Estuve en un punto de mi vida en el que quería explorar quién era y
ser auténtica sobre mis verdaderos deseos y metas. Sin embargo, era muy
joven, por lo que ahora, cuando miro hacia atrás, puedo ver el potencial de
los problemas. Mi inocencia estaba casi intacta y mi corazón era inflamable.

Este incendio se extinguió el día que recibí mi diagnóstico. Ese día, cualquier
búsqueda perdió sentido. De repente, no se trataba de explorar sentimientos y
tener conversaciones largas y profundas. De repente la realidad se me vino
encima. Mi mente se volvió loca y me aseguré de cumplir todas las metas que
tenía a mano de forma urgente.

Comencé a construir la vida perfecta que había ideado en mi inconsciente. Lo


que debería hacer, la forma en que debería ser. De repente quería un marido,
no necesariamente una relación significativa. Quería un hogar funcional, no
necesariamente feliz, y niños. Busqué todo esto, creyendo en la ilusión de que
esta nueva vida perfecta que estaba construyendo disiparía mis luchas
internas y el miedo a la muerte.

Seguramente pensarás, bueno, ¿Qué hay de malo en querer algo así? ¿Qué
hay de malo en construir ese tipo de vida para ti mismo?

Absolutamente nada. Dónde me equivoqué fue en diseñar esa vida dentro de


mí y sin tener en cuenta a nadie más. Mi desesperación era intensa. No tuve
tiempo de explicar y no podía permitir que otros no estuvieran de acuerdo
con mi visión. Se me ocurrió la vida que quería y encontré a los jugadores
que aceptaron reproducir la película que había creado en mi cabeza. Y
probablemente puedas adivinar lo qué pasó después.

Proyecté casarme a los veinticinco años, y lo logré. Esperaba tener una casa y
tener una familia, y la tuve. Quise ser madre a los veintiséis años, y nació mi
hermoso hijo. Pero también deseaba ser feliz, y no lo era. ¿Cómo podría no
estar feliz si cumplí con todas mis expectativas?

¿Podría ser que esas expectativas y ese modelo de vida feliz no fueran míos?
¿Acabaría por construirme la vida de otra persona pensando que me haría
feliz?

Más tarde descubrí que había dejado de buscar e indagar sobre los deseos
más profundos de mi alma. Había dejado de buscar el amor, la conexión y la
relación que había anhelado. Esto ocurrió cuando mi vida física estaba
amenazada. Fue ahí que regresé al disco grabado que tenía en mi inconsciente
acerca de lo que realmente era la vida para mí.

Retomé esos pensamientos que nos impiden crecer. Los limitantes, los que te
inmovilizan y hacen que dejes de buscar profundamente, aquellos que te
impiden encontrar tu verdad. Comienzas entonces, a vivir para el exterior y
no para el interior.

Después de todo, siempre se necesita complacer a alguien. Claro que ese


alguien no eres tú, y ya no es tu vida. Por lo tanto, hacemos un buen trabajo
asegurándonos de que otros sueñen y deseen la vida que hemos construido
para nosotros mismos.

Un día advertí que muchas de mis expectativas se habían materializado, pero


de alguna manera, no las sentía mías.

Palabras de Sabiduría
Las expectativas te llevan al desencanto. Incluso si la cumples.

El desencanto vive en la expectativa en sí misma, no en su


resultado.

Detengámonos a pensar en eso. Tener expectativas significa que algunos


estímulos externos generarán un cambio. Puede ser físico o emocional.
Visible o invisible. Las expectativas están por todas partes en nuestra mente
consciente, pero también se encuentran enterradas profundamente en nuestra
programación interna.
¿Te has dado cuenta de que el sufrimiento está unido a la espera? Suceda o
no, lo que esperamos. Sufres a priori. Sufres porque te preguntas qué pasará
si las cosas no salen como quieres. Sufres, porque quien espera, se topará con
el desencanto.

Si vives en la expectativa, transfieres parte del poder de creación que posees a


circunstancias externas. Entonces, no obtienes los resultados deseados. Parte
de la creación y la energía de manifestación se transfirieron, del proceso de
creación al miedo. Y a veces el desequilibrio energético no es suficiente para
materializar tus sueños.

En ausencia del miedo, no hay expectativas, hay metas.

Soñar no tiene nada de malo. No hay nada malo en orar. Solo tengamos en
cuenta que las áreas de nuestras vidas que aún se encuentran en el nivel de la
oración y los sueños serán nuestro futuro desafío a vencer.

Cuando soñamos, estamos sacando del universo el deseo que necesitamos


para ponernos en movimiento. Cuando oramos, estamos pidiendo la fuerza
necesaria para enfrentar nuestras propias limitaciones.

Es muy posible que de esta manera acumulemos la energía que nos impulsará
a seguir adelante. Esos sueños se convierten en metas. Podemos dominar la
creación de nuestro destino al conscientemente transformar nuestros sueños
en metas. Desarrollamos la conciencia del don y las bendiciones que tenemos
antes de que se materialice el resultado y de tal modo la grandeza se
manifestará en nuestras vidas.

Intensificar el potencial de un sueño con gratitud magnifica la transformación


de la energía hacia la manifestación de una meta.

La gratitud es el catalizador de la transformación.


Ese es el secreto para encender la reacción.

El acto de estar agradecido por la oportunidad de crear tu propio destino de


manera consciente es la acción que convierte tu sueño en una meta.

Reemplaza al miedo. Supera las dificultades de la mente. Abre tu corazón


para derrotar al fracaso. Esta es la diferencia entre la esperanza motivacional
y confiar en quién debo ser. Aquí es donde tomas conscientemente tu vida y
la haces tuya, donde te recuperas para siempre.

Para cambiar tu vida tienes que cambiar tus expectativas por


apreciación.
~ Tony Robbins

La próxima vez que tengas un sueño, analiza por qué sigue siendo un sueño y
no un objetivo en tu vida.

Cuando estés listo, algo mágico sucederá. Experimentarás tu verdadero yo,


desplegando su poder de creación y encontrarás un camino totalmente
despejado que te conducirá hacia una nueva realidad.
Afirmaciones de Poder

Cada uno de mis sueños es una meta en estado de gestación.

Es agradeciendo que yo manifiesto conscientemente cada bendición en mi


vida.

Reclamo el poder que la creación me ha otorgado para convertir mis sueños


en realidad.
El Amor Propio y su Esencia

¿Te imaginas lo que es mirar hacia atrás y no recordar una experiencia


amándote lo suficiente como para disfrutarla por completo? Esto es lo que
estoy enfrentando ahora en mi vida. Recuerdo haber amado mucho. Recuerdo
haberme entregado por completo. Pero solo recuerdo el dolor y no el placer
de hacerlo. Esto se debe a que di todo lo que me quedaba, con la silenciosa
expectativa de convertirme en mí misma.

Cuando miro hacia atrás, con sinceridad, que es la única forma en que sé
mirar ahora, mi lado humano desearía haberse relacionado con esas almas
desde una versión completa de mí misma. Si bien es muy posible que no me
hubiera enredado con las mismas personas, estoy segura que me hubiese
amado y respetado a mí misma. La mente siempre quiere volver al pasado e
idealizar un futuro alternativo.

Entiendan que yo era muy dura conmigo misma. ¡Y juzgaba a los demás
duramente también! Pensaba que merecía darme amor sólo si era capaz de
lograr algo fenomenal. Olvidé celebrar los pequeños logros y las bendiciones
del día a día. Un pequeño bache en el camino significaba un fracaso para mí,
seguido de un auto castigo, sentimientos de vergüenza y de culpa.

Y lo peor de todo era exhibir mis propios fracasos para tratar de obtener
atención y amor de los demás, esperaba obtener de otros lo que yo no podía
darme.

Vivía prisionera en una cárcel emocional. Una que construí para mí misma, o
en la que me permití estar, simplemente porque me servía vivir así. Obtuve
una buena cantidad de amor por comportarme de esta manera. Creo que todos
sentimos en algún momento u otro esa necesidad de mentirnos.

Son las mentiras que nos decimos a nosotros mismos las que determinan
cuánto tiempo permaneceremos en una posición cómoda y dolorosa a la vez.

¿Cómo me iba a ayudar esto a despertarme al día siguiente? Mis mañanas se


hicieron más difíciles, mi energía se agotó. A veces lloraba simplemente
viendo a mis hijos jugar y correr porque no sentía el gozo de compartir un
momento de alegría y felicidad con ellos.

Un día me di cuenta de que me estaba convirtiendo en parte de la misma


fuerza terrible a la que le había entregado mi poder interior. Ese día, el
mundo cambió dentro de mí; cuando recordé el amor que una vez había
sentido por mí misma, y lo más importante, el amor que podía dar a los
demás canalizando mi luz interior.

No era un amor que siempre estaba a punto de agotarse. No era un amor que
necesitaba aceptación y constante consuelo. Era un amor libre que me haría
volar hacia la cima de mi destino. Un amor que haría sentir a los demás la
presencia de mi alma. En pocas palabras: Un amor genuino.

No culpo a nadie por las cosas que perdí. Nadie me las quitó. Yo me entregué
ciegamente. Hice esto porque de alguna manera estaba cómoda. Creía que
existía un atajo para llegar al amor propio. Creía que no tenía que enfrentar
mis miedos más profundos y mis heridas del pasado.

La experiencia de asumir que no me amaba a mí misma, y tener que caminar


totalmente desnuda desde donde me encontraba hacia el territorio del amor
propio, es la experiencia más increíble que he vivido. Agradezco a los que se
cruzaron en mi camino y me enseñaron lo que puede ser la miseria
emocional.
Porque si no hubiera podido experimentarla, no habría podido superarla y
hoy no estaría escribiendo este libro.

¿Y si tu peor día en realidad fue tu mejor día?


~ Tony Robbins

Le agradezco eternamente a Tony por su intervención y por haberme


permitido experimentar mi propia miseria una vez más. Dejando expuesto
ante todos, pero fundamentalmente ante mi misma, mi juego sin sentido de
buscar la aceptación y el reconocimiento de otros para sólo así sentirme
valiosa.

¿Sabes qué es lo mejor de tocar fondo? Que ya sólo puedes subir. Pero Tony
hizo más que eso. Él me proporcionó un espacio lleno de amor donde pude
experimentar una gran lección. Durante muchos años tuve lecciones muy
duras en mi vida, pero nunca tuve un espacio amoroso donde pudiese
desnudar mi alma, donde pudiese recibir apoyo, amor y comprensión.

Fue como si hubiese estado conectada a un respirador artificial hasta que


pude dejar de lado mi antiguo yo y me convertí en un nuevo ser humano. Fue
una reconexión del cuerpo, la mente y el alma.

El amor que experimenté en Cita con el Destino fue inigualable. Fue real. En
ese instante pude sentir el amor de los demás, en ausencia del amor propio.
Sin duda alguna, me encontraba en un estado de total desprecio hacia mi
propia existencia hasta que sentí el amor de 5.000 almas que indicaron el
sendero correcto.

Pude ver el sufrimiento y la valentía de cada alma que se ama a sí misma y se


mantiene incólume pese a las dificultades. Observé que aun siendo
vulnerables, no reaccionaban a las opiniones de las personas. Cada alma
estaba asumiendo la responsabilidad total por sus propios sentimientos y
experiencias.

Aceptaron sus fracasos. Y finalmente los vi sonreír.

Comprendí la importancia de ser auténticos y cómo influye esto en las


relaciones y las personas que atraemos.

Tener algo real es mejor que tener más.

Así que cerré los ojos. Puse mi mano derecha en el corazón y caminé hacia
un lugar desconocido dentro de mí.

Y de alguna manera me gustó lo que encontré allí.

Palabras de Sabiduría
Sé auténtico contigo mismo. ¿Qué es lo que realmente se puede obtener no
siendo auténtico? ¿Qué podemos experimentar desde un lugar de duda y
juicio interno?

Los recuerdos que nos llevamos son los verdaderos sentimientos. Esos
verdaderos momentos que compartimos con nosotros mismos y con los
demás. Si no te entregas completamente, ¿Qué tipo de vida estás viviendo
realmente? ¿Qué tipo de pasado esperas recordar?
Atesora la autenticidad de cada momento

Algunos tienen que mentirse a sí mismos para recordar un pasado que nunca
existió. Esto los limita a conectarse profundamente en las relaciones. Si ni
pueden conectarse con ellos mismos. ¿Cómo pueden relacionarse sanamente
con alguien más?

Al exponer la versión nuestra que nos hace sentir cómodos, con nosotros y
con los demás, solemos pensar que estamos logrando una conexión
significativa. No es así,

ese placer, el de sentirse en sintonía, dura solo el tiempo que puedas mantener
una sonrisa falsa. La auténtica realización proviene del verdadero amor que
experimentamos después de haberte hecho vulnerable.

La calidad de tu vida es directamente proporcional a la cantidad


de incertidumbre con la que puedes vivir
~ Tony Robbins

Tu auto-evaluación es la validación que realmente importa y se registra


dentro de ti al finalizar el día. Independientemente del placer que puedas
sentir cuando los demás te elogian, te admiran o te aceptan, la única forma en
que experimentarás un sentido de satisfacción es cuando tu propia evaluación
coincida con la de ellos.

La evaluación de los otros nunca anula la propia solo puede hacerla invisible.
Pero tarde o temprano, tu propia evaluación llegará desde lo más recóndito de
tu mente y tendrás que hacer frente a tu monstruo interior.
La esencia del amor propio es definirte a ti mismo como un todo y
amarte completamente como un ser completo.

Somos el negro y el blanco, la luz y la oscuridad, el yin y el yang.

Despreciar tu lado oscuro no te hará digno de ser amado. Al contrario.


Atraerá a los que, como tú, se desprecian a sí mismos. La relación se centrará
en ocultar el lado oscuro de cada persona y proyectar una versión de ellos
mismos que crean que puede ser aceptada.

Por lo tanto, ninguna de las partes sentirá el amor del otro completamente, ya
que no expusieron su ser real para ser amados.

Ya que son incapaces de reconocerse, de aceptarse tal y como son.


Afirmaciones de Poder

El amor que recibo de los demás es absorbido por la totalidad de mí ser.

Me acepto y agradezco el viaje que me ha hecho ser quien soy.

Me amo y me entrego con la misma intensidad con que amo a los demás.
PASO CINCO
Descubriendo la Abundancia Interior

~ Miré hacia mi interior, y encontré un mundo nuevo ahí afuera. ~


Ahora que has explorado profundamente tu verdadera naturaleza, ¿No
desearías poder acceder más a menudo la luz que llevas dentro? ¿Cómo crees
que pudiera ser tu vida si encontraras la manera de mantener esa Luz divina
brillando dentro de ti?

Si pudiéramos encontrar una manera de mantenernos encendidos, los


periodos de oscuridad en nuestras vidas serán menos frecuentes. De la misma
manera, cuando nos encontremos perdidos en el camino, esa Luz nos guiara
más fácilmente de nuevo hacia el sendero correcto.

Lamentablemente nos creemos los creadores de la Luz, y así ponemos en


riesgo la bendición de acceder a ella, al definirla como propia. Esa
intervención humana, esa posesión generada por el miedo humano a perderla,
hace que la Luz se vuelva tenue, e incluso, se apague. Si descubrimos que
esta luz es tan abundante como eterna,

¿Cómo entonces puede apagarse?

Vamos a redescubrir la fuente de abundancia a la que todos tenemos acceso.


Entenderemos que no se trata de crear bendiciones en nuestras vidas, sino de
ubicar esa fuente divina de toda creación para crear canales donde la luz fluya
desde ellos, como un río de Amor. Entonces las bendiciones se materializarán
naturalmente.

Si somos capaces de redescubrir la Abundancia y establecer una conexión


verdadera con ella, naturalmente nos convertiremos en la fuente misma.

¿Dónde Diablos se Encuentra la Abundancia?


Ama a tu prójimo como a ti mismo.

En el papel se ve muy bonito ¿verdad?

Para los que buscan aceptación del mundo externo (cosa que yo solía hacer),
resulta altamente estresante asimilar la frase: Ama a los demás como te amas
a ti mismo.

¿Significa que debo tratar a los demás tan mal como lo hago con mi propia
persona? Porque yo no me amo. O sea, tampoco amo a los demás.

Las personas empáticas, que parecieran querer amar a todos y que se esmeran
por tener la solución a todos los problemas de los demás, en realidad carecen
de amor propio. Es un mecanismo tan sencillo como triste: servir para
sentirse amado. Si me esmero por ellos, ellos me amarán. Tienen el foco tan
puesto en ser aceptados por los demás, que terminan, en definitiva
olvidándose de su propia vida, hasta romperse por dentro.

Si hay algo de lo que me he dado cuenta a lo largo de este viaje es que


tenemos la tendencia a pensar de los demás lo que pensamos de nosotros
mismos.

Así como te ves a ti mismo, ves a los otros.

Comencé a prestar atención a este pensamiento y a la sutil idea de proyección


que se esconde detrás. Pronto me di cuenta de lo hábil que es la mente para
esconder los patrones de nuestras conductas.

El universo hace un esfuerzo para impartir lecciones todos los días a través de
los demás. Sin embargo, la mente se confunde y asociamos esta lección con
sufrimiento. Esto hace que terminemos más enfocados en nuestro dolor, y
solo veamos la proyección. No podemos ver el propósito de la lección que
está latente en la experiencia presentada.

La primera reacción cuando vemos nuestros propios defectos reflejados en


los demás, es el rechazo y la crítica hacia ellos, y no hacia su
comportamiento. Rechazamos su persona y no simplemente su conducta.

Esto sucede porque hemos internamente reconocido ese comportamiento en


nosotros. Entonces, en vez de ofrecer compasión, y pasar a ser un agente del
bien para ellos, atacamos a su persona. Esto tiene como objetivo
diferenciarnos automáticamente de ellos. Y sentirnos exonerados.

Así como nos asombramos como cuando vemos nuestro reflejo en alguna
vidriera al cruzar una calle y decimos, ¡ese no puedo ser yo! ¿Así soy? De esa
misma manera emitimos juicio, prejuzgamos a los demás, olvidándonos que
hay "copias" con nuestras propias características, transitando la vida, que
sirven a un propósito divino ulterior, del que debemos hacernos conscientes
para lograr nuestra plenitud.

Si te digo lo molesta que solía sentirme cuando la gente me decía: "Mira tú


interior", "Ama desde adentro", "Amate a ti primero" no lo creerías. La
molestia venía no por no querer hacerlo, si no por no saber cómo hacerlo, ni
por dónde comenzar. Simplemente no sabía cómo encontrar la abundancia en
mí.

El Amor propio debe ser un sentimiento de amor profundo y natural, que


brote sin necesidad de forzarlo. Una certeza que le ofrezca moderación a
nuestras interacciones. De la misma forma, amar a otros de verdad debe
provenir de una conciencia más profunda de ti mismo y de cómo ves,
percibes y sientes a las otras personas.
Yo tenía claro que era un ser divino, pero no sabía cómo acceder a todo mi
potencial. Corrí en sentido contrario a mi luz interior todo el tiempo que pude
hasta que me encontré viviendo el momento más vacío y oscuro de mi
existencia. Sin más puertas que abrir a mí alrededor, encerrada en mi falso
mundo, tuve que levantarme y enfrentar mi Verdad.

Y aunque quería seguir perteneciendo a ese mundo que había armado


alrededor de los demás, tuve que renunciar a mi reputación de persona
amorosa y servicial para aceptar que solo estaba dando porque quería Recibir.

Buscaba recibir el mismo sentimiento que se suponía debía venir


simplemente del Amor y no de mi clamor desesperado por obtenerlo. Ofrecía
gestos amorosos hacia el prójimo únicamente para obtener una migaja de
aceptación.

Esos gestos se repetían casi naturalmente mientras mi técnica funcionaba, y


yo me alimentaba de ese amor que tanto ansiaba. Pero al recibirlo, percibía el
gran vacío que se siente al recibir sólo cuando se pide, y mi desesperación
aumentaba.

Palabras de Sabiduría
Enfrentar tu propia verdad es el momento más poderoso que experimentarás.
Es un momento sagrado. Único. Irrepetible.

Es en ese momento reclamarás tu verdadero poder. En ese momento te darás


cuenta de todo lo que hay dentro de ti. De tu potencial aún intacto y listo para
ser redescubierto. Te encontrarás con un lugar vacío donde no existe nada
visible, donde puedes comenzar a crear lo que quieras. Allí puedes cambiar
tus viejos ropajes, o mejor aún, despojarte de todo y atreverte a caminar como
has venido al mundo: totalmente desnudo.

Enfrentarse a uno mismo, despojado de todo, es terrible pero necesario.


Deberás hacer frente al monstruo que ocultabas. Peor aún, deberás aprender a
amar a ese monstruo.

Aprende a amar a la parte de ti que más detestas.

Esa parte de ti jamás va a ceder el control. Si el monstruo es rechazado, se


vestirá de blanco para convencerte de que tienes la misión de salvar al mundo
en nombre del universo. Sabiendo internamente que existe un propósito
egoísta. El monstruo y tú tienen un acuerdo de convivencia difícil de romper.

Pero nada es imposible. Cuando conoces tu poder interno, todo cambia y te


ves de otra manera. Ahora estás conectado con un lugar que proporciona
recursos infinitos. Infinitos porque precisamente no vienen de ti, sino de un
poder universal.

Cuando convives con tu monstruo, y estás en estado egoísta te crees


autosuficiente, no hay proveedor que merezca tu respeto, si le dices hasta al
mismo Dios: “Gracias no necesito de tu ayuda, yo puedo solo con todo”. Es
la típica actitud de un niño mimado y malcriado. Después de aceptar que
estás en el fondo de la negación, es cuando debes armar el plan para
levantarte.

La vitalidad, la alegría y la gratitud son requisitos previos para


poder amar.
Tu energía, tu cuerpo, tu alegría y la real conciencia de las bendiciones que
posees, es lo que va a encender la fuente verdadera de amor infinito que hay
dentro de ti.

Si estás luchando para mantenerte pleno, si te cuesta sentirte lleno de amor


para dar, detente. Toma un descanso en tu vida, un descanso total, apartado
del bullicio.

Un descanso emocional que te permita reponer fuerzas para volver a


encontrar la fuente divina que vive en tu interior.

Necesitas de toda tu Energía para moverte, para asimilar los cambios y


mantenerte activo. Inventa tu propio plan acorde a tus necesidades. Piensa ¿A
qué me puedo comprometer hoy? ¿Qué debo fortalecer para alcanzar la forma
más placentera de compartir el amor que tengo dentro de mí?

La abundancia está al otro lado de la escasez.

El momento más oscuro de la noche, está justo antes del amanecer.

No hay un camino hacia la abundancia


Hay un cambio instantáneo de la escasez a la abundancia

Sabrás que encontraste la abundancia dentro ti porque el miedo desaparecerá,


porque sentirás que no hay vuelta atrás y porque la ansiedad a perder ese
sentimiento de plenitud simplemente no existirá en ti. Sonreirás desde un
lugar de certeza indescriptible.

La verdadera abundancia es inagotable.

La abundancia es la capacidad de canalizar tu propia Luz, la misma que


proviene del Universo. No te pertenece. Es la Energía la encuentras y
aprendes a canalizar hacia tu mundo interior y hacia los demás.

La abundancia es de donde proviene la verdadera realización, y


sólo puedes hallarla dentro ti.

El Universo siempre te devuelve lo que eres, refleja lo que hay en ti. Es por
eso que podrás conectarte con la abundancia una vez que te conviertas en
ella.

Podemos llegar a creer que dando todo desde nuestra abundancia nos
quedaremos sin nada, y en realidad, es todo lo contrario.

Convertirnos en un agente de luz, ilumina nuestras vidas. Prepárate para


experimentar un caudal de bendiciones, físicas, emocionales y espirituales,
apenas decidas dar el paso de enfrentar y amar a tus demonios.
Afirmaciones de Poder

Encontraré un universo de abundancia dentro de mí cuando decida Amarme y


Cuidarme.

Les daré amor verdadero a los demás cuando no necesite la aprobación de


ellos.

Ahora puedo amar desde la plenitud y no desde la carencia.


Dar es Ser

No recuerdo un momento de mi vida en el que no estuviera muy ocupada. He


estado tratando de lograr muchas cosas, mientras vivía a medias. Esto es algo
curioso. De hecho, acabo de darme cuenta de algo.

Desde que me tracé mi primera meta en la vida, estuve atrapada en una


vorágine de ansiedad, pasando de un objetivo a otro con urgencia. Durante
los primeros cinco años, lo hice bastante bien. Tenía mucha energía, me
sentía llena de adrenalina. Disfrutaba de la adrenalina extrema que me
causaba la agudeza intelectual. Cuando cumplí diez años, ya había
comenzado a hacerme daño. Y al cumplir los veinte años, ¡estaba muy
exhausta y agotada! Era obvio que necesitaba cambiar algo en mi vida para
mantenerme con vida.

Pero, ¿qué?

Seguí pensando y pensando. No hice nada más que proponerme nuevos


objetivos. Esperaba que al alcanzarlos, catapultaría mi vida hacia la felicidad
y al éxito.

Y esta es la promesa que me haría a mí misma cada vez. Pensaba que


alcanzando todas las metas que me había propuesto, me sentiría mucho mejor
conmigo misma y observaría todo de una manera más favorable. Pero nada
esto funcionó.

Trabajé demasiado en mis propias necesidades hasta llegar al punto de la


extenuación. Puse mi salud en juego muchas veces para ayudar a otros a tener
éxito. Manejé un negocio que no era mío. Trabajé en nuevos proyectos e
ideas para otros. Implementado, reimplementado. Probé esto, probé aquello.
Todo con el propósito de conseguir el amor y la atención que realmente
anhelaba. Todo lo que obtuve fueron ofensas y quejas. Nunca tuve el amor
que me urgía recibir.

Durante años no obtuve lo que tanto ansiaba. Sin embargo, seguí


satisfaciendo las exigencias de los demás y seguí trabajando por mi meta
imposible.

En aquel entonces no me di cuenta de que tenía que convertirme en mi


prioridad, antes de poder disfrutar del más pequeño de los éxitos.

Había olvidado cómo ser yo misma.

Al no ser yo misma, indudablemente no podría amar profundamente. No


podría expresar los deseos de mi alma. Me había perdido a mí misma. Me
había permitido alejarme de mi propósito trascendental. Dejé de ser la
persona que la gente realmente amaba. Auténtica.

Recordando el día en que volví a ser yo misma. ¡Fue un gran alivio darme la
bienvenida de nuevo! Sentirme amada por mí misma y sentir el verdadero
amor de los demás por primera vez.

Tan pronto como pude encontrarme a mí misma, la inspiración de este libro


vino a mí, de repente, mientras caminaba a mi habitación de hotel después de
la última sesión de Cita con el Destino. Todos se acercaban a mí para darme
un abrazo. Derramaron tanto amor en mi corazón, que simplemente me senté
y escribí un libro en aproximadamente veinte días.

¿Se imaginan cuánto tiempo me habría llevado escribir un libro si hubiera


decidido que quería ser escritora y hubiera empezado a buscar ideas para
libros? Podría haber sido rápido, seguro. Pero ciertamente, habría tenido que
esforzarme mucho para lograrlo.

Me elevé a través de este viaje porque me convertí en él antes de ejecutarlo.


Enfrenté las lecciones de vida que eran necesarias para que el resultado
cayera en mi regazo. Y ahí es donde ves la magia del universo desplegarse
ante tus ojos.

Así que me senté y miré. Miré al cielo y agradecí a mi propia alma por esta
increíble oportunidad que es estar consciente de la luz que se nos ha dado.

Palabras de Sabiduría
Piensa en alguna meta que tengas en tu vida ahora mismo. ¿Qué pasará
cuando la alcances? ¿Por qué es tan importante para ti esta meta? Es increíble
trabajar por las metas, pero, ¿celebras tu vida, tu éxito?

¿Qué harás cuando termine la carrera? ¿Estás presionándote para alcanzar tus
objetivos o estás fluyendo con tu destino mientras trabajas duro?

Necesitas un rápido cambio de enfoque. Un cambio que genere energía


ilimitada para ti y tus proyectos. No necesitarás forzar nada, todo irá fluyendo
naturalmente.

Incluso puede parecer que tienes que llevarte a ti mismo, de un lugar a otro.
Como si tuvieras que convencerte una y otra vez de las razones por las que
estás haciendo algo. Sé que a veces se siente así. Y tú lo afrontas diciéndote a
ti mismo que esta vez será diferente.

Te dices a ti mismo que esta vez pasará algo nuevo. Alguien finalmente
notará tu duro trabajo, y finalmente podrás relajarte. Entonces te ocuparás de
ti, ¡por fin! Pero eso nunca pasa, ¿verdad? Y tú estás siempre en el último
lugar.

Puede que incluso te estés atacando a ti mismo y empieces a comportarte


como la persona que nunca quisiste ser. Sientes que debes detenerte, pero no
sabes cómo hacerlo.

Imagina que pudieras alinear tu mente y tu cuerpo, y actuar desde tu plan


interior.

¿Cuál es esa parte de nosotros que se resiste? De alguna manera en el camino


tratas de deshacerte de tu enemigo interno. Alguien te rechazó por un rasgo
humano que expusiste y lo clasificaste como malo.

Este es un proceso inconsciente que se desarrolla en nuestro interior. Hemos


estado buscando al enemigo interno y hemos intentado destruirlo. Este es el
lado que intentamos esconder de los demás. Ocultamos un lado de nosotros,
el que más odiamos. No te deshagas del enemigo interno, porque eso también
sería suicidio.

Conócelo, ámalo. Porque satisfacer sus necesidades es lo que te falta para


aceptarte a ti mismo. Entonces dejarás de buscar lo que has estado buscando
desesperadamente en el mundo exterior. En vez de eso, buscarás dentro de ti
para hallar la forma de satisfacer sus necesidades más profundas.

Cuando estás en tu centro, el conflicto termina.

Ahora, todo lo que haces, fluye. No importa cuán difícil pueda ser, o cuán
grandes puedan ser tus metas. Ahora vuelas con total libertad. Ahora las
metas te impulsan. Te sientes bien con tu propia vida, con tu familia y con los
demás.
Vas a sentir que la gravedad se ha vuelto más ligera, porque estarás flotando
en el éxtasis de la realización y la comprensión profunda.

Somos seres humanos y no haceres humanos. Tenemos valor


porque existimos y no por lo que hacemos.

Imagina que tienes que arrancar tu auto todos los días. Durante el primer mes
no es gran cosa, entonces empiezas a odiarlo mientras te dices a ti mismo lo
agradecido que deberías estar por tener un auto en primer lugar. Este es el
conflicto interno que nos estanca.

Esta sensación de tener que arrastrarse y al mismo tiempo, sentirse culpable


por querer más, se puede aplicar a muchas áreas de nuestras vidas. Incluso si
eres extremadamente rico. Si lograste el éxito presionándote a ti mismo,
debes haber luchado en la vida. Quizás te sientes orgulloso por ello, y así es
como te permitiste amarte, y tal vez otros te amen también.

Pero, ¿Te sientes satisfecho?

Confía en mí cuando te digo que podrías haber experimentado más amor y


más satisfacción que la que experimentaste hasta ahora. Y básicamente viene
de la libertad de no esperar amor, aceptación y aprecio como recompensa por
tus logros.

Tú mismo debes brindarte amor, aceptación y aprecio antes de ir en busca del


éxito.

Dar es ser
De ahora en adelante, caminarás hacia tus metas con el amor, la aceptación y
el aprecio que pensabas que recibirías al obtenerlas.

Esta es la razón por la que la visualización funciona. Las personas se


imaginan el resultado y te dicen: Siéntete como si ya hubieras alcanzado tu
meta. La palabra clave es sentir. Debes sentirte feliz ahora, celebrar tu meta.
Así suprimes los conflictos que le roban energía al proyecto antes de
comenzarlo. Te sientes completo y realizado sólo por tener la oportunidad de
perseguir el sueño.

Así que ahora ya lo sabes.

Si quieres hacer algo, conviértete en ese algo, y el universo conspirará para


que suceda.

Conviértete en tu deseo más preciado. Después, solo siéntate a observar cómo


la energía para alcanzar esos deseos fluye hacia tus metas.

Ven, vamos juntos a transformarnos en lo que deseamos.


Afirmaciones de Poder

Me amo a mí mismo totalmente.

Mi cuerpo, mente y alma se comprometen como uno solo en la búsqueda de


mis sueños.

Me transformo en lo que deseo para lograrlo.


Contribución y Evolución

Hace veinte días mi contribución al mundo parecía bastante lejana. Nunca


pensé que lo lograría. Se sentía como algo que la gente grandiosa haría para
verse bien, pero que en realidad no disfrutaría hacer. Tales eran las
limitaciones en mi cabeza. Ni siquiera pude aportarles nada a los que están
más cerca de mí, imagínense ¿qué podría aportar a los demás?

Obviamente, mis pensamientos estaban mezclados. Conceptual y


emocionalmente. Creía que estaba contribuyendo con otros, cuando en
realidad no lo estaba.

Estaba dando todo lo que tenía, que era muy poco, para recibir amor y
aprecio a cambio. Y no me interesaba recibir amor de gente que ni siquiera
conocía, así que, ¿Para qué contribuir? No conozco nada más egoísta que
esto.

Pero hoy no me avergüenzo de ello, porque así fue como me comporté, pero
no quién soy.

Es importante que nos quedemos aquí un minuto. Comprendamos lo que


realmente significa dar. Aceptar mi egoísmo me ha liberado y me ha hecho
asumir mi nuevo destino. El destino que silenciosamente me había estado
esperando.

Tuve una experiencia fenomenal anoche. No la esperaba ni la planeé. Me


invitaron a asistir a una cena de mujeres donde nos reunimos para hablar de
temas profundos. Amor, coraje, miedo, cosas de ese tipo. Y cómo las mujeres
enfrentan y superan dificultades en sus vidas.
En primer lugar, la vieja versión de mí nunca habría venido a esta cena. ¡Ni
siquiera habría hecho la reservación! Mi esposo habría considerado que este
tipo de evento era una forma de desperdiciar tiempo y malgastar energía fuera
del matrimonio. Y yo le habría obedecido felizmente, ya que para mí merecer
su amor definitivamente valía la pena.

Esta vez, no sólo hice la reservación, sino que coordiné felizmente el cuidado
de mis hijos para poder concentrarme esa tarde y asistir. En ese momento,
todavía no me había dado cuenta de que todo era diferente. Estaba feliz y
emocionada de asistir a una cena con otras personas que no conocía ¡y ser yo
misma! ¡Increíble! Conscientemente no me di cuenta de esto hasta que la
cena terminó y compartimos nuestros pensamientos finales.

De repente sentí que había creado un vínculo con otras mujeres, por primera
vez. Este fue un regalo que no esperaba. Fue una reafirmación de mi
curación.

Yo no propicié esta experiencia. Conscientemente, no. Pero le di la


bienvenida. Y ese fue uno de los regalos más grandes que he recibido
últimamente.

Todas hablamos durante la cena. Al final, me tocó a mí. Había escuchado la


historia de cada una de ellas. Y entonces, hablé de mí, y de mi viejo yo.

Les conté como antes creí que estaba siendo maltratada por otros, insultada y
no apreciada. Me abrí y compartí sobre cómo ser agraviada, maltratada y
despreciada de verdad fue algo que elegí yo misma porque así enmascaraba
mi falta de amor propio.

Y lo más importante, les dije que yo también me maltrataba a mí misma.

Hablé de mi deseo de dar a los demás, cuando en realidad era mi ego


disfrazado como una persona que da para obtener el amor que yo no me
estaba dando.

Sí, hablé y les dije a todas que a pesar del horrible trato de mi marido, yo
misma me puse en una situación en la que él podía maltratarme.

Hablé de mi codependencia.

Hablé de mi personalidad empática combinada con una extrema falta de amor


propio, y de lo perjudicial que era para mi vida.

Pero también hablé de cómo me levanté de las cenizas.

Les hablé de aquel increíble instante en el que volví a ser yo misma, y cómo
había encontrado mi equilibrio interno. Fue entonces cuando me di cuenta de
que finalmente estaba aportándoles algo a los demás. No siendo perfecta, sino
simplemente yo.

Lo real es mejor que lo perfecto porque eres tú.

Así que di lo que tenía. Y esta vez, cuando terminé, tenía más de lo que
inicialmente tenía para mí.

Esta es la sensación más increíble de todas.


Esta es la verdadera libertad.

Este libro es mi primer acto de darme a mí misma y a los demás sin esperar
nada a cambio.
Y se siente muy bien.

Palabras de Sabiduría
¿Qué se necesita para llegar al final? ¿Qué se necesita para llegar al límite de
uno mismo?

Al final de ti mismo finalmente encuentras a los demás.

Tristemente, sólo el dolor nos hace salir de nuestra propia miseria. Cuando
más duele, cuando hemos perdido algo muy querido para nosotros.

¿Dónde estás en tu vida ahora mismo? ¿Realmente has cruzado el límite del
dolor de no ser tú mismo? ¿Has vivido ya una noche oscura del alma? Si lo
has hecho, lo más probable es que también hayas vivenciado el hermoso
amanecer que le sigue.

Los antiguos maestros dijeron una vez que nuestra evolución en este mundo
se asemeja a una escalera de caracol. Dicen que crecemos y evolucionamos
como si estuviéramos subiendo las escaleras, paso a paso.

Cada paso es una lección a la que nos enfrentamos, y cada vez que damos el
siguiente paso, es un nuevo comienzo, un nuevo despertar.

Al final de cada paso, hay una noche oscura del alma, un momento de
profunda introspección y conexión.

Todo el esfuerzo se hace justo cuando estamos ascendiendo.

Cuando damos un solo paso, se nos presentan eventos paralelos y cosas que
nos brindan todas las herramientas que necesitaremos para la lección final.
Entonces nos enfrentamos a ella cuando se presenta, y tenemos que tomar
fuerzas para dar el siguiente paso hacia adelante.

El cambio ocurre en un instante.


~ Tony Robbins

Existe otro detalle muy interesante. ¿Qué significa la espiral? ¿Por qué ese
símbolo y cómo se relaciona con la evolución y el crecimiento? ¿Por qué en
espiral y por qué no ascender en una sola dirección?

La revelación detrás de esta analogía es el hecho de que no sólo superamos


las lecciones en un nivel de conciencia. Superamos estas lecciones en muchos
niveles del inconsciente.

¿Has notado también cómo a menudo se nos presenta la misma lección pero a
un nivel superior? ¿Un poco más dura, más profunda, más desafiante?

Sí. Estoy seguro de que también has experimentado esto. Y es realmente


importante reconocer cuando esto sucede, y no confundirlo con haber fallado
en una lección anterior.

A veces superamos una situación, y nos va mejor, y de repente, nos


golpeamos con lo que parece la misma piedra. En este momento, quédate
quieto. Repite la lección. Debes estar consciente de que te estás probando a ti
mismo una vez más. Tal vez para descubrir una nueva perspectiva, un nuevo
matiz que te ayude a expandir tu conciencia.
El crecimiento es repetitivo pero nunca redundante.

La importancia de permanecer quieto y confiar en los caminos del universo


para lograr las cosas es esencial para lograr una evolución constante.

Esto es lo que sucede cuando a veces interferimos en el orden divino de las


cosas. Al final, todo saldrá bien. El universo se reorganiza si arruinas su plan.
Sin embargo, esa energía que se gasta en la reorganización debe ser devuelta.
Es por eso que a veces añadimos sufrimiento innecesario a nuestras vidas.

Acerca de las causas y efectos


El conocimiento antiguo dice que las causas y los efectos bailan juntos bajo
una ley universal. Como todo lo demás. Tú, yo, tu vecino. Todo y todos. El
mar, los planetas, las estrellas. Todo lo que sucede en la vida, tiene una causa,
una fuerza en movimiento que lo inició.

Una causa siempre desencadena un efecto.

Eventualmente, eso es. Porque realmente no sabemos cuándo se


materializará. Ponemos en marcha una causa, a menudo sin darnos cuenta. Y
conseguimos que los efectos se reflejen en nosotros. A menudo nos
equivocamos al relacionar el efecto con la causa equivocada. Y si va en
contra de nuestros planes, llamamos al universo injusto, y nos desanimamos,
incluso nos enfadamos.
Entre causa y efecto hay un retraso.

Esta demora es la que nos da ese espacio vacío desconocido en el que las
causas se desenredan de sus efectos. A veces no sabemos qué desencadenó
qué.

Cuando recibes una recompensa asombrosa del universo, te has sorprendido a


ti mismo preguntándote ¿Qué hiciste que precipitó tal bendición?

Exactamente. De la misma manera, enviamos causas negativas, y a menudo


fallamos en emparejar los resultados desafortunados con la causa real que lo
desencadenó.

Pero, hay algo que nos sorprende. El universo lo garantiza.

Cada efecto tendrá la misma polaridad que su causa.

Esto significa que si ponemos en marcha una causa positiva, se garantiza un


efecto positivo que llegará hasta nosotros. No sabemos exactamente cuándo,
llegará. Lo mismo sucede con una causa negativa. Un efecto negativo llegará
a nuestras vidas, eventualmente, igualando su causa iniciadora.

Pero eso no es todo. La ley dice algo aún más interesante. El desfase entre
causa y efecto se llama manifestación.

La manifestación tendrá una polaridad opuesta a la causa y efecto.

¿Qué significa esto?


Simplemente significa lo que has oído toda tu vida en las calles.

A la gente buena le pasan cosas buenas, pero se esfuerzan mucho. Y, alguien


que hizo algo malo podría estar disfrutando ahora mismo, pero tarde o
temprano pagará por lo que hizo.

¿Eso tiene sentido? Alguien que trata de alcanzar una meta positiva que
beneficiará a muchas personas probablemente tendrá una manifestación
profunda y oscura. Muchos obstáculos, muchas pruebas, pero en la misma
magnitud, el efecto se presentará tan grande, si no más grande de lo previsto.

Siempre recuerda esto.

El Universo es riguroso con las lecciones, pero es generoso una


vez que se aprenden.

La manifestación es un momento de reflexión, de mirar hacia adentro. Es una


oportunidad para que se retire la causa.

Para las causas negativas, es una oportunidad de redimirte.

Decir: aunque actualmente estoy disfrutando de los beneficios de mi acción


equivocada, volveré y arreglaré la causa que puse en marcha en primer lugar.

Para las causas positivas, es una prueba de perseverancia.


¿Estás realmente comprometido a apoyar esta luz en el mundo? El universo
dice: Te enviaré batallas para probar tu determinación.

En ambos casos, a menudo nos desmoronamos y fracasamos. A veces nos


retractamos de las acciones negativas, y a veces nos retractamos de las
positivas. En cualquier caso, luchamos para que el efecto coincida con su
causa. Especialmente cuando la manifestación es larga.

Entonces, ¿qué hacemos? En el espíritu de arreglar las cosas, impulsamos


otra causa. Recuerda esto siempre,

Las causas no se pueden deshacer una vez impulsadas. Un intento


de deshacer es un rehacer.

¿Y que nos sucede? En medio de la manifestación, liberamos otra causa. Y la


espiral infinita es tan profunda a estas alturas, que saber por qué las cosas
están sucediendo de esa forma, es realmente un juego de adivinanzas.

Permanecer inmóvil durante la manifestación es una habilidad que


debes desarrollar.

Esta es una de las razones por las que me quedé quieta durante la
intervención de Tony. Fue dolorosamente hermoso. Golpeó el núcleo del
dolor acumulado durante siglos.

Pero sabía que mi corazón quería curarse. Verdadera curación. Amor


verdadero. Confié en eso con absoluta certeza.
Entonces supe que un efecto asombroso se desataría. Estaba segura. Nunca he
estado más segura en toda mi vida.

Mientras lloraba con el equipo de Tony a mi lado, levanté la vista y vi el cielo


lleno de estrellas. Estaba tan feliz que me sentía sin aliento.

Les dije a todos que sosteniendo mi mano en el círculo sagrado de la


bendición, era la persona más afortunada de la tierra.

No sabía por qué, ni cómo, pero ese momento, y pasar por ese momento fue
la mayor bendición de mi vida.

Y aquí estoy hoy.


Afirmaciones de Poder

Estoy pleno, por lo tanto, doy.

Acepto las lecciones que parecen repetirse en mi vida, y entiendo sólo están
ahí para fortalecer mi naturaleza divina.

Espero y confío en que el universo siempre devuelve un efecto con la misma


polaridad que mis intenciones.
Palabras Finales

Entrar en la sanación auténtica es sentirse en paz. Es una paz interesante. No


es una paz sin conflicto. Es la paz de tener un conflicto que se resuelve.

Manejar un conflicto de una forma amorosa y saludable y lograr su


resolución es una habilidad que debemos desarrollar, y eventualmente
dominar. Desde un lugar de amor propio, que se traduce en un lugar de amor
a los demás, la resolución de conflictos es perfectamente alcanzable.

La danza entre dos almas, dos seres humanos, es una danza sagrada. Toda
interacción es sagrada. Cuando alguien es capaz de ser tu espejo amoroso, tu
luz puede llegar a ser tan brillante, que podría hacerte resplandecer en una
faceta completamente nueva de ti mismo. Eso es amor.

La mayor lección que aprendí de este viaje hacia mi ser real, fue entender que
debemos funcionar como dos seres.

Debemos ser el maestro, y el discípulo al mismo tiempo.

Sólo necesitamos reconocer lo que estamos llamados a ser en cada situación


que la vida nos presenta. La mayor parte del tiempo, desperdiciamos una gran
cantidad de energía evaluando y tratando de encajar en una categoría, en un
nivel en nuestro camino. Y luchamos por permanecer siempre en una misma
posición.

Entonces viene la siguiente experiencia, y fallamos, no podemos


comportarnos como el maestro, así que reevaluamos... y perdemos el
enfoque... reevaluamos... preguntando quién somos... y el proceso se repite.
Por no hablar de las veces que tratamos de comportarnos de una manera
determinada según una auto-evaluación hecha a priori.

Juzgamos, sufrimos y no nos perdonamos. Nos alejamos cada vez más de la


lección misma, atrapados en un círculo vicioso.

La mayor ventaja de este increíble viaje fue aprender que la vida es eterna,
que no existe un estado actual de ser, sino un estado actual de circunstancias
que definen una lección. Y que en esa lección uno puede ser designado para
ser un maestro o un discípulo. Y que en ambos estoy sirviendo a mi divino
hermano o hermana, desde dos perspectivas diferentes. Esto me ha liberado
de un dolor que nunca supe que tenía.

En una meditación reciente, casi me quedé dormida debido al agotamiento


físico. Luego experimenté una fuerte sensación de despertar. Me sentí
obligada a respirar profundamente, mucho más profundo de lo que
normalmente puedo hacerlo. Sentí que ascendía, como si alguien me llevara
de la mano, más alto.

Las lágrimas llenaron mis ojos, porque muy rara vez he sentido algo tan
genuino como esto. Un toque de amor en el alma que no se puede describir.
Es un sentido de fraternidad que no puede ser igualado. He tenido muy pocas
experiencias como ésta en mi vida.

Conozco a los que han sentido esto, sé a qué me refiero. Esto fue
acompañado de una revelación muy clara.

Había una vela y un espejo en esta visión. Aprendí al recibir esta impresión
que el espejo no sólo recibe la luz sino que también refleja la luz que recibe.
Me di cuenta de que no somos la vela o el espejo, me di cuenta de que somos
ambos. La vela y el espejo.

Esta es la oscilación espiritual que permite la autocontemplación y la


autoevaluación real.

Me di cuenta de que conectar con otro ser humano requiere la sensibilidad


para saber lo que necesitas ser en cada momento en particular. Y que lo que
importa al universo es la luz reflejada en la interacción total ¡La energía de la
reacción!

Me di cuenta, con la ayuda divina de los maestros, que:

Dos espejos, no producen luz, y la luz de dos velas nunca se


refleja.
Aplicando los Cinco Pasos
Diariamente

Puedes practicar los cinco pasos, todos los días, cada vez que lo necesites.

Un pensamiento puede tener el poder de devolverte a la tierra de la


conciencia.

Cuando un sentimiento de no ser apreciado o no amado vuelva a acecharte,


recuerda que el primer rechazo puede haber venido de tu propio ser. Has
transferido el poder de tu propia felicidad a otros. A algo externo a ti mismo.
Recupera tu vida y mejora automáticamente tus interacciones con los demás
seres humanos que te rodean, liberándolos de la responsabilidad de tener que
"hacerte sentir" de cierta manera.

Libérate de la niebla mental que te mantiene en una posición de víctima. Lo


que sea que estés pasando, tiene un propósito.

Perdónate por haber llegado allí, por haber creído que otra persona es
responsable de lo que te ha ocurrido.

Observa a los demás por lo que realmente son. Comprende que tienen su
propio viaje. Que también son humanos, que sufren y que podrían tener
menos conciencia de la que tú tienes actualmente.

Ámate a ti mismo primero, aceptando completamente tu naturaleza humana.

Siente la Abundancia a la que el Universo te ha dado acceso.

Abre los ojos…


Y conectate con corazón y el alma de otros seres humanos a tu alrededor ¿Ya
los sientes?

Descarga una versión imprimible GRATUITA del Recordatorio


diario de los cinco pasos
www.anatheauthor.com/steps
Agradecimientos

Al increíble Tony Robbins, a su esposa por haber hecho posible Cita con el
Destino. A su equipo de extraordinarios y fantásticos agentes del cambio y de
la luz.

Los amo, gracias.

A las 5000 almas presentes en Cita con el Destino Florida, 2018. Gracias por
compartir luz y energía, así pude encontrar la sanación. Estoy asombrada con
la generosidad de ustedes. Gracias por todo el amor y el apoyo.

A mis tres niños, por mantenerme sana, centrada y enfocada. Por mostrarme
que la vida vale la pena a pesar del sufrimiento que podamos experimentar a
veces. Los adoro.

A mis compañeros del alma, y a mi padre.

Mingo Scordo, mi amigo eterno, que ocupa gran parte de mi corazón.

Gracias por sostenerme en los momentos de incredulidad durante 16 años y


por recordarme que siempre vale la pena crecer por amor.

A mi ex-esposo. Gracias por todo el dolor y por todas las lecciones, pues he
sido recompensada con mucha luz, conciencia y sabiduría. Finalmente pude
alcanzar la sanación real.
Aura Ilustrada

A la increíble Laura, que con mucho amor e intuición logró representar en


forma de imágenes un bello regalo para mí y para el resto del mundo. Gracias
@aura_ilustrada

También podría gustarte