Está en la página 1de 32

CoRTE JUICIO: "NICOIAS FIGUEREDO

SupRruR MARTINEZ Y OTRA C/ AIICIA


,,,',JUSTICIA TERESA NUñEZ ESPTNoLA s/
usucAPróN'.

,zfa cual'ro
St9*a AcuERDo
'ENTENCTA
Y N úMERo..

t Ñ".)i:$n ra ciudad de Asunci ón, ca pitaL de .la Repúb1ica de1


eSie3i,"y, rc. d,r€t'¡ttttl,t [, aras, del mes de tPn*em2ú
^
de1 año dos mi1 die¿lnueve, estando reunidos en sala de
Acuerdos 10s señores Ministros de Ia Corte
/ExceIeYisima
suprema de Justicia EUGENIO JrMÉNEZ ROLÓN,'CÉSAR ANIONIO GARAY
y ALBERTo .ToAQUÍN MARrfN", srud¡¡, bajo Ia presidencia del
prinero de .los nombrados, por Ante mi 1a secretaria
autorizante, se t¡ajo a estudi.o ef expediente intitulado:
"NICOLAS EIGUEREDO MAR?INEZ Y OTRA C,/ ALICIA TERESA NUÑEZ
EsPfNoLA s/ usucAPlÓN", a fin de resolver 1os Recursos de
Apelación y Nulidad interpuestos por e1 Abog¿do Gerónirno David
Lambiase, en representación de 1a larte actora, contr:a e1
Acuerdo y sentencia ¡¡u¡nero a1 de re cha 1f'de Abril det 2.ó15,
dictado por eI Tribuna.I de Apelación en 10 Civil, Comercial¡
Penal y Laboral, cixcunscripción ,fudicial eara(uari. -----------
Previo éstudio de fos antecedentes del caso, 1a
Excelentisima Corte Suprema de Justicia, Sala Civit y
c omer cia1, resolvió plantear Ias siguientes
CUESTIONES
¿Es nula 1a Sentencia apelada?.
Eo caso contrarj.o, se halla ajustada a Derecho?.
Practi.cado eI sorteo de Ley, para determinar el orden de
otac ión¡ dio el siguiente resultado: JIMÉNEZ RoLÓN, MARTÍNEz
S IMÓN y GARAY.

A LA EL sEÑoR MfNISTRo EUGENIO


PRIMERA CUESTIÓN PLANTEADA,
,l rMÉN Ez RoLÓN DrJo: El recurrente no fundamentó el presente

so; por tanto, como no se advierten vicio defectos q¡le


autor icen a decl La ulidad ex art. 113 d Có o Procesal
Civif cotres nde declar rlo desierto. ------
SU URNO, EL SE R MINISTRo ALBERTO JOAQUfN RT ÍNEZ

S IMÓN DI e adhi ero l voto del señor minÍstro preo narte


por rt i J i dént i- ca s mot.i va ones. ---------

I i i:
!t^, linéntz 9u Alber ttinez tion
V,*"
c.5.t
A SU TURNO, EL SEÑOR MINISTRO CESAR ANTONIO GARAY DIJO: EI
recurrente no fundó el Recurso, Y al no advertirse vicios que
autoricen pronuncianiento de nulidad, en 1os términos del
Articulo 113 del Código Procesal Civil, corresponde declararlo
Desierto. seqún eI Articulo 419 de dicha normativa. Es mi voto.
A I,A SEGUNDA CUESTIÓN PLANTEADA, EL SEÑOR MINISTRO EUGENIO
JIMÉNEZ ROLÓN Df,rO: Po! S.D. No 1O de fecha 4 de febrero de
2016, e1 Juzgado de Primera Instancia en 10 Civil, Comercial y
Laboraf, Sequndo Turno, de Ia Cilcunsclipción JudiciaL de
Paraguari, dispuso: ,HACER LUGAR a ).a demanda promovida por los
§C¡IOTC§ NTCO¿A S ETGÜEREDO MARTfNEZ, RAIMONDO FIGUEREDO MARTINEZ
y FELICIA MARTfNEZ WA. DE EIGÜEREDO contTa 7a señora ALICIA
TERESA NÚÑEZ ESPtNOLA sobre Usucapión con reTación a¿ in&ue-b,ie
inscripto en 7a Dirección ceneraf de ¿os .Réqristros Púbiicos
corno MatricuTa N' J11/1L23 del Distrlta de 5á¡ Roque conzáfez
de Santacruz, PadÍón N" 683, inscripto e¡ -los fiegrisrros
PúbJ-icos bajo e.i N' 3 aL fofio I y sgtes de7 aña 2012/ confodne
a fas consideracjores expuestas en e-l exotdjo de -la presente
resoLución y ejecutoriada que fuere L¡BRAR OFlClO, a 7a
Dj-teccióD General de .los Regjst-ros PúbTicos disponiendo la
inscripción de -¿a presente neso-lucjón y fa cancefación def que
obta actuaitieñte sabre ef referido i¡¡rué-bJe,- EXONERA.R de fas
costas ¿ ]a parte accionada.- ANOTAR, ..." (sic.) (fs. 300
vIto./301)
Recurrida ]-a mencionada sentencia, ef Tlibunal de
Ape.lación en lo Civil, coroercial, Penal y Laboraf,
Circunscripción Judicial Paraguarí, por Acuerdo y Sentencia
Numero 4, de fecha 11 de Abrit de1 2.015, resolvió: "1)
DECLARAR DESIERTO e-l Recurso de i,lterpuesto en cantta
^Iu.¿jdad
de .la s.D. N' 010 de fecha 04 de febrero de 2016, de
caDformidad a los fundamentos expuestos precedentenente, - 2)
A CoRTE
(fltu]B)
JUICIO: 'NICOLAS FIGUEREDO
SuPnrmn MARTINEZ Y OTRA Cl ALICIA
\Y DT,USTICIA TERESA NUÑEZ ESPINoLA s/
USUCAPIÓN..

t§\s
g al Recurso de Apeiación interpuesta en cantra de 7a
LUGAR

9i :D. N" 0L0 de fecha 04 de febrero de 2016, dictada por la


J\eza de PÍinera fnstancia en fo civi7, conerciaT, LaboraT deL
Segundo Turno de Paragúari, ¡tbogada LIDWINA OTAZÚ DE MERELES,
deb)endo en consecuencja,. REVACAR fa tuisna, en todas su§
.¡?artes/ de confofinidad a los fü¡dañe¡rtos expüestos. - 3)
IMPaNER, .¿as costas a 1a parte acto¡á é¡ anbas instancias.- 4)
DEvaLvER es¿os a¡¡tos af Juzgado de origen, a sus efectos.-
ANATAR, .. . " (sic. ) (f. 366)
EI representante convencional de Ia parte actora expresó
aqravios en los ténni¡os del escrito oblante a fs. 380/385.
Manifestó que sus representados rerlnen todos los requisito
previstos en el art. 1989 de1 Código civil para que proceda la
presente acción. Expresó haber identlficado precisamente eI
inmueble pretendido con Ia amp.Iiación de demanda y .Las
distintas plobanzas obrantes en autos- Sostuvo que Ia ejecución
hipotecaria invocada por el fribunal de Apelación en nada turba
ni afecta 1a 1egíti-ma posesión del lnmueble perseguido por
haber sido posterior a1 cump.Liniento deI plazo de prescrj-pción
adquisitiva y sustanciada entre terce¡os, Seña1ó que La plopia
demandada reconoce Ia posesión en cabeza de los acto¡és,
Terminó solicitando 1a revocación de la recurrida con expresa
i mposición de costas - -----
La adversa contestó el traslado de rigor mediante escrito
de fs. 388/409. Negó que eI inmueble haya sido correctamenté
delimitado mediante 1as probanzas técnicas de rigor, Seña1ó que
la posesión de Ios actores fue turbada a través de1 desalojo
ejecutado en e-I año 1998. sostuvo que el cúnulo p! or 10 fue
c.)lirectamente (]on ra po¡ ef Tribunal de Ape ac10 a Ios
efectos de irunf 110 ajustado a delecho. Fina nte,
eti 10no confirmació de la recurrida, con costas.-----
Se de det erm nar 1a procedencia de una demanda
usu p

AI ber tinez Slmo


,,uqJ, linétuz R,
i !l - c.s-l.

(¿ (a
J'ry
Y es al principia! dicho análisis que cónviene hacer 1a
siguiente salvedad. Conforme fue sostenido en eI escrito de
promoción de denanda. y en su arnpliación, el inicio de 1a
posesión tuvo lugar en l-os años 1968 y 1973, como consecuencia
de la celebración de 1as Esc¡ituras Públicas de Cesión de
Derechos y Acciones Hereditaxlas celebradas entre 1os hoy
fallecidos Leónido Figueredo y María Dominga F-igueredo,
cedentes, y el también hoy fallecido José Dolores Eigue¡edo,
cesionario respecto de quien los usucapientes fuelon declarados
helede¡os. En virtud de dichos actos, los usucapientes alegan
tener justo titulo sobxe 4 de las t hectáreas que posee e1
inmueble objeto de litigio.
Ahora bien, 1os accionantes ref.ieren indistintarnente
ct¡npLir los requisitos previstos para ambos tipos de usucapión,
a saber, Ia co¡ta y la larga -si bien hacen la saLvedad de que
la acción La promueven en virtud de la úItina de las citadas. En
efecto, hacen alusión tanto a Ia existencia de justo titulo y
buena fe, p¡opias de 1a usucaplón corta, como a la posesj.óñ
orj.ginaria con aDj¡nus doni]1 j, propia de ta usucapión laxga, to
que const.ituye¡ de por s1. un contradictorio, cooforme se
expondrá a conl inuac i ón.
Es sabido que para usucaplr en virtud de 1a adquisi.ción
piescr.ipcional veinteñal, Ia posesión debe ser aoinus do.?¡j¡i y
exclusiva; vale deci¡, excfuyendo toda otra posesión sobre 1a
misma cosa. Asi Io ha entendido Ia doctrina: "¿a poses¿ór't de.be
se.r no so.lo una posesión ejercida a titú70 de duéño, sino
tanbién en car:ácter de exc-lusjvo ptapietatia de fa cosa..."
( SALVAT, Ra]¡mundo. 1962. Tratado de Derécho Civil ArgentiDo,
Derechas Rea-le,s. Tomo II. 5' Edición. Buenos Ai¡es, Tipográfica
Edito¡a Argentina. p. 226J, y 10 ha consaqrado la
jurisprudencia. En efecto, e1 usucapiente debe comporta!se con
CoRTE .IUICIO: "NICOLAS FIGUEREDO
SupRrrr,tR MARTTNEZ Y OTRA C/ ALICIA
rNl.USTlClA IERESA NUñEZ ESPTNoLA 5/
usucAPróN"

si fuelá dueño; este requisito 6urge claramente de Ia


como;
tu ra conjunta de 1os arts. 1989 y 1911 déI Código Civi.l, e1
último de 1os cuales establece perfectamente 1a di.ferencia
entre posesión originarj"a y derivada. As1, quien posee a titulo
de propietario tiene la posesión originaria. 10 cual no impide
que quien Ia ostenta en calj.dad de derivada pueda tanüién
hacerlo, pero pala elfo debe .intervertir e1 titulo de su
posesión de forma j.nequívoca. Por ende, debe establecelse si en
el presente caso estamos frente a unos poseedores a¡i¡¡us dor¡i¡j.
o frente a unos meros detentadores o poseedores in¡nediatos o
derivados y, por tanto, excluidos, en principio, de Ia facultad
de usucapi r.
En dicho afán, cabe resa]tár que el hecho que fo§
usucapientes alegueo tene¡ 1a posesión orlginaria con aninus
daínini y seña1enr a1 mismo tiempo, poseer justo t1tu1o,
constituye a priori un elemento obstativo para 1a consideración
de los i¡lismos co¡no poseedores aninús datuini, exclusivos y
excfuyentes de la ¡es -l-1tis. En efecto, eI reconocimiento de }a
propiedad en otro importa necesariamente e1 recoñociniento de 1a
calidad de propietario en alguna persona física o juridica, de
guien se obtuvo el titulo -cesión de derechos y acciones
hereditarios, en este caso- que se leputa justo, y to¡na
,t
erivada la posesión en estos términos obteñida. Asl pues, una
a, us!capión intentada en estas condiciones, necesaliamente irñpone
{ quF Los usucapientes deban intervertir eI carácter de su
posesión derivada. ac!edilaodo fehacientemente su a,ljmus domj¡j
y, por ende, excluyendo aI poseedor originario derecho
dominia] sobre el inmueble, a fin de determina el ti empo
preciso que resu d o para comenzar el cómpu o de1 aza
prescrlpclona de veinte años. Ello, por supuesto, debe I
demostrádo, atendiendo Ia naturaleza de este nod

t
.r.igu!
de ad .r ao l domin
Alberto
u,, linln¿z K
ez §imon

I I -c.5.1

@
9--,
No olvidemos que, como 10 hemos señalado en falLos
plecedentes, es fundamental en juicios de usucapión, en que
razones de orden público se anteponen aI interés particular
cornprometido e .imponen un criterio restlictivo en lo que refiere
a 1a apreciación de la prueba sobre 1a posesión en sf, que l-as
pruebas aportadas sean de tal precisión y claridad que permitán
1levar una plena certeza a1 juzgador sobre la existencla y
entidad de Ia posesión pietendida sobre el inmueble o porción
del mismo, Igualmente, 1a jurisprudencia comparada ha sentado
una jurisprudencia paclfica y constante en dicho sentido, a1
establecer que "...en -los procesos por usucapión -Ia p¡ueba de¡e
reunir condiciones sustancja-les dé exactitud. precisión y
c).aridad." (Cám. 2' Civ. y Com. La P1ata, Sala l, 31,/70/'12, ED,
49-168. cit. por Beatrlz Areán, ,J»icio de Usucapión, Edit.
Hamnurabi S.R.L., Bs. As., 2005, pá9. 320) i "En raateÍia de
prescripción adquisitiva, es precjso producir prueba clata y
convincente paia deúostrar qúe en reafidad .la posesjó¡ nateríaf
se ¡a te¡jdo de nodo efectivo, qüieta y pacifica, ininterrumpida
y con ánino de dueña y -¿as pautas pata apteciar l-as pruebas
prodlcidas deben ser estrictas, por cuanto se prete¡de revertir
un titufo de doninio, y por efl,o, es dabfé exigir fa
denastración de hec¡os concretos qúe na dejen dudas acerca de fa
posesión aninus dom.i¡¡j. . , " (sic. ) (CCiv. y com., Palaná (o,R. ),
sala 2n, 3f/8/8'7, Zeus, t. 4'1 , R-96, cit. por Portiflo-
Eiscella, Proceditúiento Ptobatoriot Edit. ,Juris, Rosario, Arg.,
1995, t. I, páq- 2'13). La duda en eI ánimo de1 juzgador en torno
de1 cabal cumplimiento de alguno de los presupuestos exiqidos
por la 1ey aI usucapiente para la viabilidad de Ia acción. torna
a ésta improcedente.
De 1as constancias de autos surge que dicha circunstancla
no fue minimámente demostrada, ya que en todo nomento se sostuvo
CoRTE .TU ICIO:
"NICOLAS EIGUEREDO
Supn¡ue MARTINEZ Y OTRA C/ AIICIA
,,,JUSTlClA TERESA NUÑEZ ESPINoLA s/
D USUCAPIÓN..

tt\q
s )
posesión derivada, ostentadá en virtud de las cesioneg
e feridas. Por tanto, e1 carácter de 1a posesión esgrimj-da por

I os ap eLantes resulta inhábil para la usucapión larga


- Si bien 10 a¡riba esbozado devl"ene aplicable xespecto de
fas cuatro hectáreas de Ias nueve que posee el- inmueble
reclamado, su ubicación precisa dentro de1 inmueble de mayor
porción no fue correctamente delimitada, por 10 que resuLta
imposible hacer el cor¡espondiente análisis del ca!ácter de la
posesión respecto de1 resto del poligono reclanado. Luego, no
lesta sino rechazar Ia acción intentada. -----
Meramente o-bj¿er, debemos señalar que se adujo que el justo
titulo Io constituyen Los contratos onerosos de cesión de
delechos y acciones he¡edita¡ios refelidos ab j¡jtjo, Empero,
la cesión de derechos y acciones hereditarios 't,..es u¡ contrato
por e] cua.l e-l titular def todo o una pa¡te al"lcuota de Ja
herencia, transfiere a otro e] cantenlda patrinanial de
aquéffa/ sin consideración a7 canteaido particuLar de los
bfe¡es que fa integran, " (ZANNONI, Eduardo A. \999. I"lanuaf de
derec¡o de -Ia.s sucesjones. 4". Edición, actualizada y ampliada.
Buenos Aires. Astrea. p. 302), cuyo objeto "...no so¡¡ .los bienes
o derechos a titúfo singuLar contenidos eñ fa hereacia cedida,
aino el todo o úna parte aficuota en su consideración a titufo
universaL. / (ZANNONI, Eduaxdo A. Op. Cit- p- 303). Por tanto,
+J ",..su co¡¿enido es variable e incierto, en concÍeto, .hasta el
nonento de fa partición." (ZANNONI, Eduardo A. Op. Cit. p.
303) . Dicha transmisión a.Ieatoria y universal explica por qué

A0 "...e.1 cederte responde de su lTananienta a fa hetencia (su


SECI] :T
calidad de ¡eredero dice la norna) , pero no -safva supues t
gue exprésamente haya pactado [...] - de fa conp lc70¡
F
pat inonia l- la . " (ZANNONI, Eduardo A. cit.
307 304) . Por los mo ivos expuestos, "La cesión só1o pu
hac rs t '"\ a pa rtir la ¿pertura de -la sueesió¡ y hasta lá
¿on los bi que eqran el caudaf te
.1 o- Antes
Alberto Ma st
Jinl¿Ma
g[i¡istro
x, 1u

tlt
ll'
,r .,i I
V.. 9'"r
de fa apertura de -la sucesión, rige fa prohibición de ceder
derechos hereditarios futuros (at:t. 7449), por fo cvaL, de
hacérsefa, §eriá nu-la y de noTidad absofúta (art. 1047, Cód.
Civif) pot constituir un pacto sucesoria proscripto por nuestro
derecho positjvo [,,,] Después de )a pattición tanpoco cabe fa
ceslón de derechos heredita¡jos cono ta7, pues por efecta de 7a
adjudicación se han asignado a cada heredero bjere,s
sjnqu]arnente co¡siderados. ¡s decl¡, a partir de e¡tonces e-l
heredero hace suyos .los bie¡es qüe se -lé han adjudicado (art.
i503) , y e¡to¡ces podtá transferitfos seqún 7os nadas tipicoÉ
de disponer .las cosas o 7os derechos a titufa singuiar."
(zANNoNl, Edualdo A. Op. Cit.. pp. 303/304)
De la doctrina trasciipta, surge que e-I contrato de cesj.ón
de delechos hereditarios no goza del efecto directo de Ia
traslación de1 do¡ninio de un bien en particu.Lar que conforna el
ácervo hereditario, sino que se limita a transferir eL contenido
patrinonial total o pa¡cial de la alicuota que 1e corlesponde aI
heledelo cesionario. En virtud de e1lo, el dominio de 1os bienes
singulares que conforman dicho acervo se transmiten recién con
la partición y adjudicación -e inscripción en caso de 1os bienes
que asÍ 10 xequielan-¡ cosa que no ha ocurrido en autos.--------
Las consideraciones vertidas ponen de maoifj"esto que, en
e.l caso de autos, no se han dado fos presupuestos esenciales
para La plocedencia de 1a adquislción pori usucápióñ. En efecto,
en Los térrninos analizados¿ Ia ausencia dé posesión con ani¡¡us
danini, exclusiva y excluyente, impide 1a declaración de
usucapión larga sobre cuatro de 1as nueve hectáreas ¡eclamadas;
aientras que Ia falta de correcta individualización impj.de
igual¡nente su declaración respecto de 1as restantes cinco
hectáreas que 1o conforman. -------------
Por todo Lo expuesto, no cabe sino confirma¡ la resolución
Conru JUICIO: "NICOLAS EIGUEREDO
SUPREMA MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
,,,JusTlclA TERESA NUÑEZ ESPINoLA s/
usucAPróN-.
l§i$
t r1
En cuanto a las costas, las misr0as deben ser impuestas en
esta instancia a 1a perdidosa de conformidad con 10 establecido
en los arts. 245 y 203 de1 Códlgo Procesal civil
A SU TURNo, EL SEÑoR MINISTRo ALBERTo JoAQUfN MARTfNEZ
SIMÓN Dr,fol Nos encont-ramos ante una demanda de usucapión que
fuera planteada por .Los sres. NicoIás Figueledo Martinez,
Raimundo Eiqueredo Martinez y Feficj-ta ¡{artinez Vda. de
Pigueredo respecto al innueble individualizado como finca No
1123, con Padrón No 683 (9 ha. ), ubicado en la Conpañ1a
Potrero, del Distrito de san Roque González de santa cluz,
propiedad de la demandada, señora Alicia Teresa Núñez Espinola.
La prescripción adquisitiva -usucapión lalga- se contenpla en
eI art. 1989 de1 Código CiviL y es definida de l-a siguiente
nanera: "E-1 que poseyere j¡ jrl te¡rumpidar¡en te un jnnueb.¿e
durante veinte años sj¡ oposición y sjn distinción entre
prese¡tes y áúsentes, adquiete ef doninio dé é-l sin necesidad
de titufo ni de buena fe, fa que e¡ este caso se presume. Podrá
pedir eL juez que asi Lo decLare poÍ sentencia, 7a que servirá
de titufo de propiedad pata su inscripción en e7 Registto de
lnnuebfes".
La usucapión deriva de1 latin usus y capere que sj"gnifica
adquirir por el uso. Es decir, que es un modo de adquilj.r eI
J domlnio por 1a posesión de un bien por ur,t determinado plazo
') establ-ecido en 1a 1ey. Algunos autores sostienen que e1
r fundamento de 1a prescripción adquisitiva -a1 igual que eI de
1a liberatoria- es consolida¡ situaciones fáctj-cas, como medio
de favorecer la seguridad juridica, puesto que a m,lsmas,
dando certeza a Ios derechos, ponen fin a situac ede
alguna manera con de¡adas inestables, con 1o cu
c ont buye Ia paz y el orden social (¡4ARIANI DE VI Ll
Marin .)o Derechos e¿-l es. Séptima Edición. uenos Aire
Edito I Z alia. p. 24). A este funda$ento 1e agreg
Alberto héz Sl mon

Jir,úfl¿z 9\'
tu[inistro

..t it 9""' 9*?


tarnblén un plofundo contenido socia-I, puesto que, frente aI no
uso de las cosas por parte de1 propietario, se 1e hace perdel
el delecho, conf iriéndosel.o af que realmente Ias hace
producir.------
Dentro de 1a prescripción adquisitlva pueden señalarse dos
clases: la corta y]a 1arga, desigoaciones que al.uden aI rnenor
tiempo que se requiere pará su cunplimiento en Ia primela (art.
1990), frente al más prolongado necesario a Ia segunda (axt-
1989). En auto9, la pretendj.da por 10s apelaotes en esta
instancia-es esta úItima-¡ por expresa alégácj-ón real-izada por
la misma. Sin embargo, corlesponde hacer una salvedad, ya que
1a parte actora alega tener justo titulo sobre 4 de 1as 9
hectáreas de1 inmueble. Sobre este e¡<treno, cabrán unas
palabras más adelante. --
As1 pues, hemos de recordar que fos presupuestos de
procedencla de una demanda de usucapión larga, a diferenc-ia de
Ia prescripción decenal que requiere justo titulo y buena fe,
son cuatro: 1) La individualizacióo clara y concreta de1
innueble, 2) Que e1 accionante haya sido poseedor el .innueble
durante 20 años de forma lnintérrumpida, por Io que este debe
denostra! e1 cumplimiento del tiempo requelido por la .Iey, 3)
Que 1á posesión haya sido de forna ininterrumpida, y 4) que,
durante dicho tiempo no haya existido oposición a la posesión
que detente e1 usucapiente.
Respecto al primer punto, si bien en el esclj.to de
promoción de Ia de¡nanda (fs. 23) se establece simplenente que
se pretende usucapir 4 de las t ha. de]" inmuebLe en cuestión,
sin indicar específi.camente sus dimensiones, po! 1a anpliáción
de Ia denanda (fs. 109)i se infiere que finalmente se pretende
usucap.ir Ia totalidad de1 irunueble, individuálizado como finca
N" 1123, con Padrón N" 683 (9 ha.), ubicado en Ia Compañfa
A CORTE JUICIO: "NICOLAS FIGUEREDO
(fl(*#) SUpn ¡m¡ MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
\V r,¡fUSTlClA TERESA NUÑEZ ESPINoLA s/
usucAPróN".

l§\s
ro, de1 Distrito de San Roque González de Santa Cruz ¿
)
I
stiendo, a su vez, los planos !eferenciales respectivos ( Es .
92 y 200) y ef actá de constitución del Juzgado en e1 inmueble
en cuestión (Es. 59).
En consecuencia, no gfrece mayor dificultad 1a
individuall zación de 1a cosa, debiendo reputarse vá.1-idamente
-individua I i zada
En segundo lugar, la ley exige requisito esencial Ia
como
existencla de una ¡ror€alóa in j.ntellu¡npida por 20 años, que
otolgarian aI acto¡ -no propietario- el derecho de adquirir e1
doninio del i.nnueble por prescripción adquisitiva legal. No se
pla¡ltean rnayores inconvenientes pa!a determina! 1a naturaleza
de la ocupación cuando eI que detenta el bien es el titular del
derecho -esto es, su propietario- pues, en este caso, el poder
de] que esta investido fe otorga, de por s1, ef derecho de
propiedad correspond.iente (art. 1954). La discusión se abre,
empero, cuando quien se encuentra en contacto directo con e-I
bien es persona distinta a su titular.--
Como es fógico, planteada asl la cuestión, es inevitable
abordar -en brevisimo resumen- e] histórico debate entre
Savj"gny e fherinqt respecto deI concepto asurnido po¡ cada uno
de e]-los con relación a Ia posesión para asi pode! determinar,
posteriorroente, el carácter del podex de hecho ejercido por los
accionantes sobre e1 innueble en cuestión. La teoria subjetiva
.! de Savigny parte de Ia idea romana de que Ia posesión se
adquiére nedi.ante la conjunción de dos elementos: a) eI corpus
elemento malerial consistente en e1 poder fisico ejercido
obre .Ia cosa o posibilidad de disponex de eLla; y b) ll.¿m us

onini o elemento espiritual, que es l"a voluotad de t ene 1a


osa para si y d u o. "... E¡ efecto, cuaTquier tentac n
-l-i para pader s nodi fi ca e,l posesión, debe ejercerse co
int ncfoA. esto es¿ gu para set poseedor ea prec o no saTo
que ayd e.lcl on 5_t tar.'bién voluntad de que -l ya. Esta

Alb€rto Mar ñ Simon


a MIni
Plcrinl
,l
%. -ú,¿ 9,q
vofuntad debe ir acow)añada de 7a retención..." (VON SAVIGNY,
Eriedrich K. 1845. Tratado de -¿a Posés-ión seErú¡¡ .los Principios
def Derecho Ro¡¡¡a¡o, Madrid. fmprenta de fa Sociedad titeraria y
topográfica. p. 56) . Asl, este autor considera esta vo-Iuntad
co¡no Ia .intención de hacer con la cosa aquello que podria
legahoente hacer su propietario, y sin reconoce! positivamente
en otro eL carácter de plopietario. De esta forma, más para que
esa detentación se convie¡ta en posesión¡ no basta con querer
detentar -Ia cosa, sino que es pleciso quererlo de una rnanera
deterroinada (de ahl que au teoría haya sido calificada como
subj etiva ) .

Por otra parte, la teoria objetiva de Ihering rechaza los


catáIogos de actos posesorios de Savigny y se funda,
principalnente, en las exigencias de 1a práctica juridica,
sob-.e todo en el aspecto de Ia prueba. Así. sostiene eI jurista
a]emán: "Cuando las dos condiciones que, en qeneral, se
teqüieÍen para fa exi'tencia de 7a posesión, esto es/ ei corpus
y ef animús, coñcirren, se t-ié¡re s-iempre poses-ión, a nenos que
Dna disposició!1 Legal !1o prescriba excepcionafmente, que só)o
hay sinpTe tenencia. ¿.1 gue sostiene fa exiatencia de senejante
fDndanento de exc-lusjó¡ de .7a posesión, canpete probarla. Para
der¡ostrar que hay posesién baata mostrar -la exrste¡cia extetiot
de 7a tefación posesaria (el carpus), que¡ cono taf, inpLica el
aDinus, incunbiendo al advétsario fiosttar -lá existe¡cja de-l
nativa especiaf de excl,usión de 7a posesión; coma, ai .se trata
de te¡enc-ia absaLuta, la circuÍlstancia de gue .¿á cosá I)o es
susceptj¡le de ser po,seída. y sj se tratá de te¡encia relatival
-la exjsterci¿ de una de 1as c¿usas detentionis, tan conocidas
de7 derecho ronano, Para fa cüestión de si hay posesjó¡ o
teDencia, fa cafificación patticuTar de la voLuntad de poseer
nada importa. Ef denandante no necesixa sostenér fa existencia
CoRTE JUICIO: 'NÍCOLAS FIGUEREDO
SupRe ¡,tl MARTINEZ Y OTRA C/ ALICfA
,,f UStlcl,t TERESA NUÑEZ ESPINoLA s/
usucAPróN".
>
a vol,üntad juridica de poseet, y sú adversario no púede
\ 19 lenet 7a no exjste¡c-iá... según ni teoria, 7a posesión es un¿
I )ación dexermindda, qüe exjste dande qujera y siemp¡e
njent.ras ef adversarj.a no pruebe )"o cantrario, invocanda aJ
efecto un ptincipia de detecho que cansidere éxcepcj o¡a.lme¡ te
cono sinple tenencia fa reJación djcha" (VoN IHERING. Rudolf.
\896. La Vaiuntad e¡ -lá Posesión. Con 7a Critica del Método
,luridico -Reina¡rte- Versión Españo1a de Adolfo Posada. Madrid.
Imprenta de Ia Revista de Legj.slación. p.24 y 31). De esta
manera, en principio todo corpus hace presumi! la posesión;
sóIo 1a prueba de una causá detentionis (es decir, una relación
juridica excluyeñte de La posesión) destruye dicha presunción.
La plueba entonces, confo¡me 1a postura desarrollada por
Iheling, compete a1 que niega 1a posesión quien debe probar Ia
existenciá de una causa jurldj.ca que descarte la aludida
posesión, puesto que en dicho escenalio solo existirá tenencia.
811o, debido a que basta acreditar eI corpus para que se
presuma 1a posesión. En una palabla: no nieqa Ihering que
muchos poseedores tengan aninus donini, simplenente niega que
esta cilcunstancia subjetiva pueda tener relevancia directa
para decidir, por ejemplo, en un juicio de usucapión como e1
que se planteé en ¿uLos.----
La distinción realizada entre ambas teorias no p¡etende
J¿
ser una mera discusión doctrinal. Al contrario, xesulta
ndispensable reafizarla a 1os efectos de estáblecer Ia base y
os fundamentós que motivan cada una de el]as, ante Ia
rf ircunstancj-a de que nuestlo ordenamiento jurídico adopta Ia
l¡ .TA F',,1
ría objétj.va de Ia pos€sión, esta es, 1a desarrollada por
Iheriog: "¡{a de bastar -iá me¡a -¿ectura del p¡e.5er] icu fo
¡.t r' par a conp render ndonamos fa té.ori á s,b;é iva la
pos síón de vfqny, en gue se inspirai Los arts.2351,2i
237 del Códiqo A gentino; -, y qúe optanos por ]a teoti
obie iv Iherinq, aracteri da fundanentafn por 1a
Alberto
jtmituÁ*" M

filirLisLro
t,
.-¡ ll - c.
'éL" 9,q
r:edúcción def concepta jurldica de -la posesjó¡ d so-¿o ef
señoria efectiva a de hecha sabre la casa" \DE GASPERI, Luis.
1964. Anteproyecto de Códiqo C1vi1. Asunción. Editorial E1
Gráf1co, Comentario al art. 2516. p. 786) ,-------
En efectoT eI art. 1909 del Códrgo Civil establece:
"Poseedor es quie, tie¡e so¡re una cosa ef poder fisico
i¡¡ere¡te af prapietaria, a al titülar de atra derecho real que
lo canfiera". De eflo destacamos dos elementos esenciales para
determ.inar si una pe¡sona puede ser o no considerada como
poseedor de un bien conforme a 1a ley, cuales son: 1) el poder
fisico sobre la cosa, se refier:e aL vínculo fáctico entre la
persona y la cosa, y 2) tal poder debe ser: inseparable al de1
propietarlo (o a1 titular de otro derecho real, en su caso) .---
E1 segundo pLrnto resulta ser contrcversial en los lurcros
de usucapión dado que a la 1uz de fa teorja abjetiva la
expresión "i¡hererte af prapietaria" refiere a la relación
fislca o exteriorizada del sujeto con fas cosas bajo su
posesión y, conforme a dicho comportamiento, comúnmente se fe
otorgaría la t rtlllaridad de1 derecho sobre ellas. Esta
confusión sobre la definicr,óo de La posesión se debe a una
parte de 1a doctri-na y jurisprudencia que, como resablo def
Código de Vélez -que nos rigió anteriormente- siguen
requiriendo eI aninus domiri como elemento para declarar
procedente fa acclón de prescripción adquisltiva siendo que,
atendienclo fo ya desarrolLado, esta exigencia ya no forma parte
de la 1ey y por Io mismo no debe considerarse como elemento
constitutivo de la usucapión (SEGURA R., Francisco. 2474.
IÍanüa7 de Derechos Rea-¿es. Marbel Editorial y Giráfica. p. 94).
Me pe¡mito reiterar e insistir, de alguna manera- en este
punto, puesto que para examinar 1a recurrlda desde 1a
per:spectiva de fa teoria objetiva, debe entenderse que fa
A CORTT JUfCfO: "NICOLAS FIGUEREDO
{fl{*-}14) Supne¡¡n MARTfNEZ Y OTRA C/ ALTCIA
\V,,,lusrtctn TERESA NUÑEZ ESPINoLA s/
usucAPróN".

l§\s
inción entre posesión y tenencia no se funda en la voluntad
.)
\ posee¡, no nace de efla, pues es exactamente la hisma en eI
tenedor y en e1 poseedox. En uno y otro existe el corpus y el
ani&us, y si el primelo tiene, no Ia posesión. sino l-a simple
tenencia, e1 fundanento de esto está, segrln la teoria objetlva,
en e.L hecho de que movido po! notivos prácticos, el derecho, en
ciertas relaciones ha quj-tado los efectos de 1a posesión aI
qoncu!so, pe!fectanente lea1j.zado, de 1as condicj"onea de esta
ú1tima (IHERING, op. cit., p. 61).
Realizadas estas considexaciones, corresponde abocarnos a
los hechos de1 caso que motivan la acción que es objeto de
revisión en alzada. Como henos dejado asentado, para determinar
su procedencia -o no- es necesario conocer 1a situación
juridica de fondo a fin de determinar si la detentación fisica
ejercida por los actores es hábi1 pára usucapir.
Tenemos entonces que, en un primer término, e1 señor José
Dolores Eigueledo, y tras su fallecimiento, sus herederos
forzosos, 1os sres. Nicofás Figueredo Martinez¿ Raimundo
Eigueledo Ma!ti¡ez y 1a Sra, Felicita Maltioez vda, De
Eigueredg sostienen que son poseedores desde e1 año 1968 del
inmueble, ublcado en ]a ciudad de San Roque González de Santa
Cruz. Los recur¡entes alegan tener justo título de 4 hectáreas
de 1a superficie total deI ¡nismo (9 has . ) , debido a 1a
Jl celebración de escrituras públicas de cesión de derechos y
''/ acciones heredita!ias ent!e 1os señores Leónj.do Eiguereda y
Maria Doninga Figueredo (ambos fallecidoa), cedentes, y a favor
del, señor .losé Dolores Figueredo (también fallecido, quien fuera
'jfAfila Q e1 actor de1 presente juicio, que prosigue por subr a on de
sus derechos por p de sus he¡ederos forzosos, menci dos
a precedent emente
n rel I onaeS e extremo, se habia expuesto
Dt er e la pa! e actola ha indicado ex amente qu
rete AC .[' vaLer s preten ón por .la via ipcional

er
F ,aimétez K
Alberto Ma ri
Nli n
,Sinro n

,v{inkfio
_.i!¡
(-¿)
9.*,
larga, por 10 que/ no procede examen exhaustivo sobre el justo
título aducido. Sin embaigo, solanente se expresará que por
.inperio de l"a 1ey (Art. 1995 del cPc) y po¡ reconocida doctrina
("...Por titulo debe entendersé a estos efectos Do e7 instruñe!1ta
dande consta ).a adquisiclón de u, derec¡o, siao ef acto
juridico que ha sida causa de esa adquiaición. Asi, por
ejenpfo, una cotnptaventa, una donación, aporte en sociedad,
dación en pago, Tegado, etcétera. E-l acto debe, en
consecuencia, tener por objeto transferir fa propiedad. No
revestitán -la caLidad de justo titulo, 7a Tocación, e.¿
comodato, el- depósito, porque goLa tienen por objeto tr:ansferir
7a tenenaia, la particiót1 en ef condoninio o de fa heréncia..."
MARIONI DE VIDAI,, MARTNA. DERECHOS REALES. ZAVALIA. BUENOS

AIRES. 2004. PAc- 354) una cesión hereditaria no podria ser


considerada justo titufo a estos efectos, ya que 1a misma no
transnite eI doninio de una cosa determinada, sino de la
totalidad o de una parte de un acelvo hereditario, es decir,
una porción aún no individualizada respecto a los bienes
óé^6-ífi^^c

bien, respecto a 1a existencia o no de Ia posesión,


Pues
la parte actora aduce que su ocupación ha sido efectiva,
pacifica, y debe ser considerada "a titulo de dueño" por haber
realizado en e1 inmueble ef relfeno correspondiente a 1os
efectos de 1a nivelación del terreno¡ pLantaciones de áibo.les
frutales, construcción de un corral para aninales, entre otros

En este punto, resulta opoltuno recordar 10 dispuesto por


el arL. 249 del cód. Procesa-I Civil que establece, en cabeza de
quien afirma la existencia de un hecho controvertido, ef deber
de probar los nismos, Asimis¡¡o, quien pretende usucapir debe
probar los hechos que fundamentan su pretensión y que, en estos
,,4 CORTE
(H(*]B)
.IUICIO: "NICOLAS FIGUEREDO
Supnrmn MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
\V ,',, JUSTICIA TERESA NUñEZ ESPINoLA s/
usucAPróN" . ----
1$\T
s, se circunsclj.ben al cumplimiento de los cuatro
19
isitos ya mencionados que establece la fey para su
,.)

procedencia entre los que se destaca, lóqicamente, la posesión.


xn este sentido, si bien en las testificales (Es. 217,
218, 219) se afirma unánimemente que los actores se encuentran
viviendo en el inmueble hace mucho tj.empo, de autos resuftan
otlos elementos que deberán ser sopesados a fin de determinar
la comprobación fehaciente de la posesión
En contrapartida, a fs. 57. Ia propia palte actora explesa
cuanto sigue: "Pero últimanerte se prese¡¿ó 1a señora Aficia
?eresa Núñez Espinol.a juDto a otras person¿s, Daaífost !'do se,
p,¡oÍriétá'i. do 7a tot.lidad dal, tDa¡¡éb¡€ qué ás d. @!,oi
.xtcDaió,' . 7a poséeíén qaé éJaté.,d6a tr,úblic, y Pacífíéaeeata
déede hace uás d,. 45 .ño...." (Negritas son nuestras),
reconociendo así que solo se encuentra ejerciendo la posesión
de uoa porción del total del innueble, en otras palabras,
autoexcluyéndose como poseedor de Ia totalidad del nismo. En
este ¡nisno orden, la part.e demandada ha referido en su escrlto
de contestación de la demanda (Es. 166) que habia ofrecido al
acto¡ una po¡ción 17/4 de hectárea) entorno a.I luqar de
ocupación de éste como donacj.ón alegando razones de totaf
J c onsideración y espixitu humanj.tario- Por Io tanto, ta1 parece
o ue fa posesión efectiva existe por una sola porción del total
q,
r e1 inÍruebfe
Ahoxa bj-en, no se tiene con exactitud cuál es Ia porción
o §Ee,i§ra¡itA
71 n cuestión. y co¡flo taI no puede obviarse que esta
individualización resufta vital a los efectos de analizar la
viabilidad de ]a acción, ya que, sobre todo en jui L de esta
naturaleza, se iere expresa y fehacie EI ación
probatorj.a cons ide al viable a la misma.-----
Como emb¡o del ibunal de Apelacj-ón, ya habia sos ten
il c¡É u 19ú L1o ante r io que Ia usucapión es una v1a excepcaona
-pa qu ir la prop edad de r.l i.nmueble; es un
T ituto que
Alberto
llt
lbni;tnzfr'
tu[ittisro

?*. 9*q
apunta a otorgar la propiedad de un bien a una pelsona que se
ha comportado, con respecto al- mismo, como auténtico dueño, por
un tiempo establecldo en la Ley. No nos detendremos en Ios
muchos fundamentos filosóficos y hasta pollticos que tiene eI
instituto, ni haremos mayor alusió¡ a las cuestiones de interés
social gue 10 envuefven, por dartas por sabidas, pero si
debemos aludir que constituye -aI mismo tiempo que una forma de
adquiri¡ e1 domioio de una cosa- una suerte de sanción o
expropiación que se aplica a.I propietario registral de un bien,
precisamente, porque éste no ha tenido Ia vocación de cuidar
aquello que es suyo, nl- ha mostrado interés en e1lo.-----------
Po! otxa parte. Ia doctrina y la jurispludencia han sido
siempre muy exigentes en e1 tema p¡obatorio en Ias demandas de
prescripción adquj-siti.va de dominio, probablenente porque
constituye una alte¡ación a Las fornas naturales de transmisión
de la propiedad de un bien, y de modo tal a asegular que so-Io
aquel que se haya comportado cono auténtico propietario de.I
ntsmo, dulante un tiempo superior a1 indicado en la Ley. tenga
eI beneficio, e1 preroio, de hacelse con e1 derecho de dominio
de la cosa. De esta nanela, quien no demuestre fehacientemente
1a posesión por todo el transcurso de 1a ley y su
compo¡tamiento co¡ro 1o harla e1 plopietarlo. no reciba dicho
premio que -recordemos- constituye aI mismo tiempo una sanción
aI titular registral. a quien. ante Ia duda, deberiá
protegerse. pues nuestro sistema lega1 protege 1a propiedad
como un bien juridico de gran estima, só1o superado por la vida
en su acepción amplia que incluye 1a salud y la libeltad. De
esta forna, e1 análisis de la plocedencia de Ia usucapión debe
ser estricto, y 1a exigencia en materia probatoria aún mayor.--
En conaecuencia, realizando un anáIisis de autos no se
obtienen efementos con rj-gor probatori.o suficiente para
CoRrr JUICIO: "NICOLAS FIGUEREDO
SUPREMA MARTINEZ Y OTRA C/ AI]CIA
,,, f USTICIA TERESA NUÑEZ ESPINoIA S/
u sucAPr óN"

ra¡ que haya existido posesión ininterrumpida por 20


)

En este orden, debenos expresar que anterio¡ a 1a áctua1


titular del irürueble, las titulares def mismo eran 1as señoras
Lorenza y Bienvenida Eigueredo, palientes de los actores de la
p¡esente demanda
La cuestión de la exigencia probatoria en Ios juicios de
usucapj.ón, como 1o vimos, ya es qravosa cuando se trata de una
demanda entabláda ent!e extrañosi entre personas que no soo
par.ientes y que probablemente ni siquiera se conozcan, sube de
punto cuando debe delimitarse si la posesión ela válidamente
ejercida po! palientes entre si. En este sentido, cuando a esta
pre¡ensión se adiciona un elemento de suma relevancia, como 10
constituye la existencia de un vlnculo de pa¡entesco, 1a
pretendj.da usucapión es aún más delicada y debe ser eval"uada
con mayor ¡igurosidad que en aqueflas en donde tal vincuLo no
ex.iste, La razón. entendemos, es muy evidente: es más fácil
comportarse con auténtico propietario con una cosa que
pertenece a un extraño, con quien e1 detentador no gualda
vinculos afectivos y ni siquiera conoce, que con respecto a un
pariente a quien -normalmente- se le tiene afecto y a quien -
evidentemente- se conoce, se sabe quién es, donde vive, etc,, y
¡U cuyas cosas se respetan en mayor medida, pues median vinculos
de sangre que inhiben aquellag intenciones de usucapir en mayor
( medida que cua¡do Ia cuestión se da entre extraños que no
ienen vinculos ent.re si. ------
\
En atención a e11o, existiendo fuertes indic sde
existencia de relación de parentesco existente entr act s (A
t Fs, 110 la prop e acto¡a leputa 10 sigu ent e ,,,Mi

"'aá nte pri pal, ef señor José Do)otes Figúeréda, v


cido, bis ¡rieto La propietaria original def innueb]
é¡ ue5¿ señora Mau icia Figueredo..-") y Ias titulares deI
i nhu b h ta e1 año 2003 priroigenias dema as en eI
Alberto Mu
1lnúru2 9u Nlin
$[iaistro

CD ^,./
Oüoe -'A/J¿)
.
:9-,
presente juicio, señoras Lorenza y Bienvenida Figueredo (A fs.
165 la parte demandada expresa que el inmuebfe en cuesii-ón
pertenecía a quien en vida fuere el Señor wencesfacio Figueredo,
obtenido por herencia, y que éste a su vez, traspasó a sus
hijas, Lore¡za y Bienvenida, también por herencia. Por otio
fado, por cuerda separada se ¡iene eI juiclo caratulado
"Mauricia Figueredo s/ Sucesión" en ef que se reconoce a1 Sr.
!'ienscesf ao como subrogatario de los derechos hereditarios e el.
juicio) es nuestro criterio- ser aún más exigentes a1 momento
cLe evaluar las pruebas de La poseslón de fos accionantes en
vinculación al in¡1ueble, ya qlre adenás de la demostración
i¡equivoca de fa posesión por ef tiempo que indica La 1ey, la
parte actora tendrá que despejar toda duda en lelación a Ia
causa real de su posesión de1 bien, pues tratándose de
familiares, dicho vinculo podria sugerir que 1a ocupación que
aquel hace de La cosa podria deberse a La aludida relación de
parentesco, con base en un auténtico acto dé tolerancia por
parte de Las señoras Lorenza Figueredo y Bienvenida Flguer.edo.
Ello consider:ando que, de no acreditar 1o contrario/ Ia
ocupación de La pa.te actora poclria no ser considerada comc
hábr1 para usucapir por eI periodo en el que las hermanas
Lorenza y Bienvenicla Eigueredo eran 1as titulares del inrnueble.
Partimos entcnces de la base cle que ef víncu1o familiar
entre las partes del proceso de usucapión hace presLrmir que 1a
ocupación respectiva pudo haber iniciado por Lin mero acto de
toferancia o co!-!cesión. Esta presünción, por 10 demás, se
encuentra fuertemente apuntalada por 1as mismas afirmacicnes
def demandante, quien sostuvo qLle ocupa e1 inmueble desde e1
año 1976, mismo añc en el que e1 Sr. Wenceslao Eigueredo
solici]-a la apertura oe la sucesiór de la señcra Mauricia
CoRTE JUICTO: "NICOLAS FIGUEREDO
SupRruR MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
,,,f USTIClA TERESA NUÑEZ ESPINoLA s/
usuc¿plól'¡". ----
,
t
t$s
\ s
do, bisabueta de1 primigenio actor del presente juicao
s. 6 deI expediente sucesorio antes aludido) .
A1 lespecto, considero que la actora no ha diligenciado
prueba aLguna que demuestre Io contlario (recordemos que es fa
actora quien debe acreditar e-I carácter de su ocupación o, en
este casor que su ocupación no se ha orlglnado en e1 vinculo
familiar) , En efecto, a1 analizar 1as pruebas diligenciadas en
autos -exiguas, debo decir- ni una permite concluir de forma
inequívoca que 1a causa de Ia ocupación de 1os accionantes es
otra
ha señaIado más arriba, es fundarnental en procesos
Co¡¡o se
de usucapión¡ en 1os que xazones de ordeo público se anteponen
a1 interés particular comprometido e i¡nponen un criterio
restrictivo en l-o que !efiere á la apleciación de 1a prueba
sobre 1a posesión en si, que 1as pruebas apoltadas sean de ta]
precisió¡r y claridad que permitan llevar una plena certeza al
juzgador sobre 1a existencj.a y entidad de fa posesión
pretendida sob¡e el inmueble o porción de1 mismo. Para que la
presente uaucapión fue¡a plocedente se debe¡ia haber probado,
sin resquicio de duda, que la actora no solo poseía e1 innueble
por un tiempo superior a1 .Iegal, sino que 1a cau6a de dicha
posesión no se hallaba en e1 víncufo de parentesco que tenLa.--
I
En ese orden, es necesario tener presente que la ocupación
de un inmueble derivada u originada en virtud de relaciones
amilia¡es, donde se permite e1 uso y goce de Ia cosa en
4 tención a dicha relación de palentesco, no configura
SE,CBEIANiA
ropiamente una relación posesoria de1 beneficiario de dicha
gratuidad respecto de 1a cosa. En efecto, los mi os de Ia
fanilia del due seedol de Lln inmueble car en de
.I+.1f u1áción onoma co la cosa y su situación se
t:'
lc'sl: a en a h ipótes is reglada por el art. 1910 del có 9a
avl I e t::\ a los SE idores o sirvieñtes de fa posesj.ón, a

os s les ni expres te 1a calidad esoria. E

Alberto nez
linéru2\
Mbistro

g*. 9v
servidor de Ia posesión ejerce soble 1a cosa e1 poder fisico o
de hecho para otro, eI señor de fa cosa o poseedo!, en e1 marco
previsto por este último cuando permitió o consintió 1a
vinculación entr:e la cosa y el ser:vidor: vale decir, aclúan
co¡¡o melos instrumentos de Ia posesión de otro, a cuyo nombre
se e aect.úa ocipación.--
.La
En eate caso, y ante Ia falta de prueba fehaciente en
autos, es ineludible presumir que 1a p¡esencia de los actoles
dentro de.I bien inmueble pudo haberse debido a un acto de
tolerancia motivado por eI vinculo de parentésco con quienes
fueran titulares del bien, fo que 1os excluye -po! dlsposición
de 1a misma ley- del !o1 de poseedores (art. 1910). Cabe
recordar que si bien 1a teolia objetiva descarta la necesidad
de probar fa existencia de anjmus domi¡i, no ellnina e1
requisito de que dicha posesión sea real-izada como 10 harla eI
nismo propietario de la cosa: debe ser con poder fisico y sin
que ésta esté condicionada a otra obligación o relación. En
otras palabras, sin que exista uná causa de dicha posesión que
se oriqine en una concesión deI p¡opietalio. -------------------
En este caso, los indicios aludidos respecto a la relación
de parentesco ¡ro permiten difucidar 1a duda éxistente sobre 1a
naturaleza de la ocupacióñ en el periodo comprendido desde e1
año 1976 hasta e] 17 de junio de 2003 (fecha en eI que e1
inmueble es adqulrido por 1á Sra. Alicia Núñez Espínola, fs.
135), por 10 que no se .Ia puede tener como válidamente
configurada a 1os efectos de la posesión.
A nodo conplenentario. se debe indicar que 10 afirmado no
quiere decir que Ia natu¡aleza de la ocupación en estos
términos no pueda mutar. Pero está claro que en eI narco de
!elaciones de familia, 1a posesi-ón debe sex coo6iderada con más
rigurosidad y ser objeto de prueba de mayor ponderación.
m
\V §8,h1',""nr.IUSTICIA
JUICIO: "NICOLAS FIGUEREoO
MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
TERESA NUÑEZ ESPINoLA 5/
usucAPróN"
1s$
s sado en otro giro, atentos justamente al origen de La
ses ión, Ia interversión del titulo sobre la cosa debe ser
indubitable, en efecto, para darse una vexdadera posesj.óo en
esto3 casos¡ que habilite Ia posibilidad de adquirir el dominio
via presclipción, deberla pr:oducirse y demostrarse una
interversión de1 titulo que excluyera en forma ef.icaz¿ completa
y pública al propietario o poseedor, sin que cupiera 1a más
mínima duda respecto del desplazamiento de Ia posesión -art.
1921- del códiqo civil. Este aserto encuentra asidero en e1
principio de inmutabilidad de 1a causa o titulo de adquisición
de 1a posesión o relación fácticá con Ia cosa, coosagrada en e1
art. l92l del Código Civi1, que en su parte pertinente dispone:
"... .8-¡ que ha comenzado a posee¡ por otro, se presume coDtinúa
poseyendo por e-l &isno titD).o, tuientras ¡1o se prqebe 70
cootrario.-.".
Por úftimo, tampoco queda escfarecida la cuestión de 1a
exc-¿usjvidad en la supuesta posesión desde eI 1l de junio de1
año 2003 (fecha en que el inmueble es adquirido por Ia señola
Alici.a Teresa Núñez Esplnola en subasta púb1j.ca) ya que de 1as
constancias de autos se desprende que en su escrito de
contestación. 1a demandada alega que en oportunidad de hacer
J¿ posesión de] inmueble en cuestión se encuentra con Ia no grata
sorp¡esa de que varias personas habian invadido e1 fundo de
forna clandestina, de mala fe y premeditadanente, cita entre
et1as, a 1as siguientes: ,José Dolores Eiguer:edo, Mirian
NCRE¡A8'A
o Samaniego, Heri berto Rodriguez y Leónida Rodas (Es. 166,
segundo párrafo )

De esta manera, alega que son varias pelso S las gue


^
ocupan el innueble y solo quien pretende Ia u5u i ón,
.:.ñ!"'F'o este qu ha si o refutado ni redargürdo de fals or
Plelitl:}/l} p¿r a. En este isroo sentido, a fs. 151 se encuen
ili_
copla a denuncia nal realizada por ]a demandada, qu
fuera nt como d umento junto a 1a conte clón de Ia
+" Alberlo
1\'l

|irl¿t K
hIiÍktro

€"* 9.q
demanda, en contra deI señor Heriberto Rodrigl¡ez, a quien fa
nisma se refiere como "...ocupa¡te precaÍio e iñvaaor de ,¡i
innúebfe,.," (Ps, 151 segundo párrafo), que tampoco fue atacado
por fa parte actora. quien en todo monento asegu!ó tener 1a
ocupación eféctiva, pacifica, sin interferencia o turbación
(Fs. 23, fs. 381).
Por ende, se reitera la escasez en materia probatolia que
permita dilucidar con exactitud y precisión este extremo, por
10 que se adiciona un componente ftás que hace improcedente 1a
presente demanda
En estas condiciones, podemos afirmar que Los propios
dichos de los usucapientes dan cuenta que no se ha acredltado
en estos autos la existencia de una posesión hábl1 para
usucaplr y no hay dato alguno que permita presumir que se haya
dado poste!iornente 1a interversión del t1tu1o, requerida en
los supuestos antes aludidos. Dicho de otra manera, "....1a
exactitud, cfaridad y precisión, cono condicioñe.s susta.r¡cja-les
dé -la posesión veinteñaf..." (C. Civi1, 1' Cap., 29/12/1939,
G.F., t. 144, p. 245), no se encuentran reunidas en autos. Lo
rnás prudente, y fo que manda la ley en casos como éstos, es
estar por 1a no transfolmación del derecho originali esto es,
por 1a conservación de1 dominio en cabeza de su actual titular
registral.
En consideración de todo 10 dicho, se ve que la pretensión
aludida no reúDe los lequisitos enunciados súpta,
especiflcamente las cualidades exigidas para 1a posesión hábi1
para usucapir, por todo el plazo que marca la 1ey. Se concluye,
así, que la usucapión debe ser rechazada.-----
Es mi voto-----
CoRrr JUICIO: 'NICOLAS EIGUEREDO
SupR¡rnn MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
,,,f uSTlClA TERESA NUñEZ ESPTNoLA s/
» USUCAPIÓN".

ñ
DrJo: La
TURNo, EL sEñoR MrNrsrRo cÉsAR ANToNro GARAY
ón está en deter¡ninar si es o no plocedente la Acción de
usucapión de :nrnueble,---
José Dolores Eiguéredo p¡omovió demanda de usucapión
contra ¡orenza Figue¡edo y Bienvenj.da Figueredo Mosqueira¿
respecto af inmueble individualizado como Finca N: 1.123,
Padrón N9 683, cuenta corriente catastral N-1 00453-25-0400-
A2/A7, lugar denominado pot¡elo de la Ciudad San Roque
GonzáIez de Santa Cluz, E6grimió que era propietario de 4
hectáreas de las t hectá.eas de] inmueble, señaLando que dicha
porción de telreno la adquirló por cesión de Derechos y
acciones hereditarias otorgadas a su favo¡ por Leonido
Eigueredo (año 1.968) y Maria Dominga Figueredo (año 1.973),
Afilmó que poseia el dominlo en forma pacifica, púb1ica,
continua y de buena fe, como legitino propietario, desde hacia
más de 45 años. Sostuvo que 1a ocupación era efectiva, serena,
apacible y sin
interferencia o turbacj.ón, realizando
innumerables mejoras (vr. gr,: limp.ieza, plantación de árbofes
frutaLes, plantas or¡ameotales, equipar tatacua para
p¡eparación de chipa, construir un corral para sus anirnales.
ca var un pozo, construir una qasa para su Eanilia, etc. ) ,
¡ Af irrnó que la tarea de1 relleno fue Io más dificil. Esgrimj.ó
e su hogar confo¡maba un todo compuesto de fos i muebles
f riba lndividuali zados, siendo e1 inmueble !eclamado parte
encia.I de nuestras vidas, según expuso. Refiri.ó que ef patlo
SECFETIfiIA e querian usucapir ela e1 pulmón de su casa y de gran porción
e vecindad, siendo el. único terreno baldío y arbolado en más o
. menos trescientos metros a la redonda (fs 23/ 6
Pos teriormente r fal lecimieoto de José olores
Eigue¡edo tuvie lntéi nción su esposa Eelicia Martíne Vda.
i. i
eF i eredo sus hijos Raimundo Figueredo Martinez y Nii 1ás
gue edo ne z, decl rados herederos en la s sión de J e
Dolor 1g ue
\"o. . SoI citaron ampliación de dac n

li1fllrl¿z K I Alberto M
Mi
ez Simon


€-* Pq
reLación a 1a dimenslón de 1a Einca Nl 1.123, Padrón Na 683,
ubicadc en e1 lugar denomjnado Compañia Potrero de la Ciudad de
San Roque co¡záfez cie Santa Cruz, c,Jya extensión en el escrito
lnrciaL fue de 4 (cuatro) hectáreas de Las 9 (nueve) hecr-á!:eas
(2.144 ns.,1,929 cn2. ). Esqrrmleron que, en ia actuaLidad, ei
inmueble pertenecia a Alicia Teresa Núñez EspínoLa, señaLando
que José Dolores Eigueredo adqurrió parte def inmueble, en
virtud a los Contiatos de cesión de flerechos heredita¡los
realizados en fos años 1.968 y 1. 9?3. Afirnarcn que eLan
pcseedores de buena fe, aseverando que también habia
sobrepasado -en eaceso_ eL plazo para adquirir e1 inmueble por
usucapión, reiterando que 1a posesión era contlnua e
ininter:rumpida (f s. 10 9,/ 113 )
A]icia Teresa Núñez Espinola contestó demanda, en los
términos del escrito a fs. 164l?4. Esgrimió ser Legitima
propietaria de 1a res Iitls, con dimensión total de t has
2.800 mts. , aflrmando que lo adqulrió en remate
Judiclal. Seña1ó eue, posterior, a 1a aclq,rlsicion y et']
oportunidad de hacer posesrón de1 inmueble encontró en dicha
Heredao a José Dololres Figuereclo, Eelicra Martinez de
Figueredo, Raimundo Figueredo, Mirian samaniego, Herlberto
Rodriguez, Leónida Rodas y otros, quienes ingresaron a1 Fundo
en forma clandestina, de mafa fe y prenediladamente, según
expuso. Esgrimió que procuró e¡ varias ocariones que fos
ocLlpantes precarios abandonaran Ia prcpredad en forma pacífica,
recibiendo en 1'odo momento 1a negativa de fos mismos. Seña1ó
que mantuvieron negociaciones ccn La acto¡a y en especial
con José Dolores Figueredo, refiriendo que, en total
consideración y espiritu humaniterio, lejofreció una porción de
, de hectá¡ea en torno af lugar: ocupado por éste, en totaL
carácter de rlonación, con posibilLdad de escrituración púb1ica,
CoRrr JUICIO: 'NICOLAS FI GUERE DO
S U PREMA MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
USTICIA TERESA NUÑEZ ESP]NOLA S/
'.,,f
¡ usucAPróN".

g gestión quedó a cargo de José Dolores Eigueredo,


J

sl ue sta que fue aceptada por e1 mismo. Esgrimió que en


muestra de buena fe y en conslderación de 1a palabra empeñada,
constir:yó la alanbrada periñetral, demarcando suficientemente
la propo¡rción de superficie deI terreno acordado en su momento,
ya posterior a fa mue¡te de José DoLores Eigueredo. Cuestionó
ef origen y legalidad de los contr:atos de ceslón de Bdrechos
hereditarios, afi¡mando qire taf cesión fue reafizada sin
lndlvidualizar suficie¡temente eI inmueble. Asimismo, aseveró
qLre fa cesión de Aerechos no representaba títufo de
domlnio. Arguyó que en el momento de hacer posesión, año 2.003,
el inmueble estaba abandonado, esgrimlendo que para La linpieza
contrató a famlliares def finado José Dofo¡es Figueredo, e¡tre
e11os Raimundo Figueredo, Heriberto Rodriguez/ Faustlno
EigLleredo, Jo¡ge Eigueredo, qirienes r:ecibieron remuneraciones
por las fabores realizadas a sL1 carqo. Arguyó que, entre fos
años 1.998 y 2.003, José Dolores Figueredo y familiares, fueron
objeto de desahucio, ocasión en que se instalaron
precarlamente- en ef inmuebfe aledaño. Esgrimió que la res
Litis no estaba delimitada con exactitud y orre¡tación, pues se
) reclamó 4 has.de un total de t has..---------
En los términos como quedó trabada Ia 1itis, se aprecla
r¡; E. que 1os accionantes invocaron justo títu1o¿ en base a Contratos
de cesión de Eerechos hereditarios (usucaplón corta) . Además,
sostuvieron que ejercian la po sesión animus domini, paci fica,
púb1ica e ininterrumpida, por el tiempo legal establecido en eI
Articulo 1.989 del Códiqo Civll (usucapión larga)
Nuestio Código de Fondo hace referencia a1 jus títuf
regfando en ef Art -Lo 1. 990: "Ouie¡ hu.biere a 11r1 ur'l

{.iinmueble de bü fe y on jDsta titufot obtendrá e7 d oñ7 io


!: i'
c.del m lslno ar fa po sión contlnua de diez años...".
con ordanc a, e1 Articu 1.995 de dicha normat iv dispone:
"se a titüfa para a usuca ón aquéf que teni a par fin
1 Alberto M
M
lirfl¿fl ?\,
h!;nistro

C')
W*. J-ry
transmitir eL doninia o un detecho reaf, ¡evrste las
so]enn-¿dádes exigidas por fa )"ey para su vafidez". ¡llientras,
el. A¡ticulo 1.996 establece: "El tjtu-lo debe ser verdadero y
córrespander aL innueble paseido...".
Para dilucidar ef thema decidendun, cabe escudriñar
antecedentes domin.lales del inmueble individualizado como Finca
Na 1.123, de1 Distrito San Roque González de Santacruz. En sus
o¡lqénes, dj.cho inmueble colrespondió a Mau¡icia Eigueredo, por
tlaosferencia oto¡gada por el Eslado Paraguayo en el año 1.892,
anotándose en e1 Registro de 1a Propiedad bajo e1 N: 815, a1
folio 963 y sigtes. / de1 I de Junio de 1,892 (fs.
23'7 /40) . Posteriormente, fallecida ésta, fue declarado como

único y universal hexedero


/
su hijo José Tomás Figueredo, quien
subrogó todos sus áárechos hereditarios a favor de tr^Ienceslao
Figueredo, anotándosé eo la Einca N'- 1.123. del Dist¡ito San
Roque González de Santacruz. Asimismo, en éI ,Juicio sucesolio
de Wenceslao Figueredo fueron adjudicadas -por subrogación-
Lorenza Eiqueredo Mosqueira y Bienvenida Figueredo Mosqueira,
anotándose en 1a Einca Ng 1.123, bajo el- N:2 y aI Eolio 2 y
sigtes- , del año 1-988. Luego, dicho inmueble fue rematado
judicialnente. siendo adjudicada Al-icia Teresa Núñez Espíno1a,
anotándose en e1 Registro de Roque conzález, Mat¡lcu1a Jl:./Ll23 |
bajo eI Núnero 3 y aI PoLio 8 (ocho) y siqtes.. del 18 de Julj-o
deL 2.A72 lfs. L29 / 43) .
A fin de acreditar justo titulo, los accionantes agregaron
Esc¡iturá Pública N:- 104, de1 lede Junio de 1.968, autorizada
o) pox e1 .luez de Paz de San Roque GonzáIez de Santa Cruz, por
nedio d\ la cual Leónido Eigueredo, en su calidad de heredelo,
cedió y transfirió a favor de José Dofores Figueredo sus
lerechos y acciones que tenía respecto a la propiedad er')
Potrero. situada en la jurisdicción de Roque conzáIez,
ORTE JUfCIO: "NICOLAS FlGUEREDO
PREMA MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
I) USTICIA ?ERESA NUÑEZ ESPINOLA S/
USUCAPIÓN".

I ripto en eI Regj-stro GenelaL de 1a Propiedad a1 folio


q )
ecientos sesenta y tres y siguientes del año mil ochocientos
noventa y dos (fs. 6). Asinisno, fue presentada Escritura N1
37. del- 6 de Septiernbre de 1.973, autorizada po! e1 Juez de Paz
de ]a Ciudad de san Roque GoÍrzáLez de santa Cruz, po! ¡nedio de
fa cual Doninga Figueredo cedló y transfirió a favo! de José
Dolores Figueredo, sus Aerechos y acciones que le co¡respondiao
o pudieran corresponder por el falleciniento de su abuela Doña
Maurj-cia Pigueredo y de su rnadre Doña Sixta Flgueredo, en
especial sobre el terreno ubicado en la Compañia Potrero de
esta Jurisdicción, empadronado bajo eI N:- 683, finca que se
hafla inscripta en el Registro General de .La Propiedad bajo e1
N"- 815 y al folio 953 y siguientesrdel I de Junio de 1.892 (fs.
8/91 .

si bien esas Escritulas Públicas de cesión de Aerechos


heredilarios no fueron impugnadas en .luicio, 1o cierto es que
no constituyen Actos ,Juridicos destinados a opera! Ia
transferencia de la propiedad. TaI como ilustra Salvat a1
deciri "Se co¡sider¿ justo titufo pata la presctipción, ef
titulo que reú¡a Jas dos condiciones que 7a 7ey enuncia: 7" que
.1¿
tenga por objeto transnitir Dn derecha de propiedad; 2" que
7F sté ¡evestjdo de .las so-¿em¡jdades exigridás pára su validez, En
terreno de La6 apficacianes, e] justa tituTo nás conún es eJ.
tráto de canpraventa.,. En todos fas casos, se t-rÉta
]RETAR'A
fectlvanente, de actos jurid)cos que pat su naturaleza ttLjsnd,
está¡ destj¡ados a opetar ]a transferencia de ]a propiedad. No
tie¡en ese carácter -lás promesas de venta, Tanpoco 7o es ef
titufo pravlsional de venta fjsca.l. Ni 1a cesión de echas y
acciones sob¡e un innueble..," (lratado de Der cho Civil
Arge tino - Der os Re es - Tomo ll, Págitor23g/44).
or:Lo emás, en ichos documentos no se estableció a
r-i.1

u rficie, rnedid
"'.w
iodi dua za\ión preci a de .1o que era objeto de ces ión 1vr
aun en de darse
Alberto ll¡ slmon
t\t in
Jitttétu¿ ¡D gü* -úa,"*'yb-,
,ttinistlo
fos p¡esupuestos pala transmitir: fa propiedad, dichas
Escrituras Públicas no fue!on presentadas en Juicio suceso.rio
de Mauricia Figueredo, confor¡ne a Ia priesc!j.pción establecida
en e.I Articulo 792 del Código CiviI que reza: "¡a venta de
here¡cja será honofogada por eL Júez de -la sucesjón, debiehdo
aotificatse a fos cohetederos, l-egatarios y acreedores de 7a

masa",
A1 referirse a 1os efectos de .La cesión de Aerechos
hereditarios¿ Borda explicita: "...¡l ct:iteria que hoy parece
prevalecer defin.itivanente en 7os tribuna-Zes de la Capital, es
que fa cesión sófo produce efectos desde fa agregación de 7a
escritura af expediente sucesorjo" (Tratado De Derecho Civil -
sucesiones - Tomo I, páq. 763)
A tenor de 10 expuesto. se concluye que esos documentos no
cgnstituyen justo títu.lo, por 1o que no comportan -en si
mismos- transferencia de Ia propiedad, si expectativa o
esperanza que puede o no concretarse, cilcunstanciá que no se
dicorén eI cáso, pues el cesionario no se presentó -en su
momento- en la sucesión
Ahora bien, para establecer si están dados los
plesupuestos para Ia usucapión larga, es menester acreditar: Ia
p osesión anirnus domini, paclfica, pública e ininterrunpida por
eI tiernpo legaI establecido en e1 Artículo 1.989 deI Código
Civil, Asimismo, constituye requisito esencial 1a precisa
individualización de1 in¡nueb1e. La carga probatoria de dichos
presupuestos incunbe aI usucapiente, según eI Altículo 249 del
código Procesal civil. ---------
José Dolores Figueredo pretendió usucapi! porción de la
supelficie de1 inmueble, correspoñdiente a 4 hectáreas de 1as 9
hectáreas que conforrnaban 1a Heredad, Asinismo, su viuda
Felicia Martinez de Figueredo, reconoció que fa posesión no era
A
(fl(.#)
CORTE JUICIO: 'NICOLAS FIGUEREDO
SuPneue MARTINEZ Y OTRA C/ ALICIA
V/ DTjUSTICIA TERESA NUÑEZ ESPINoLA s/
usucAPróN".

to a fa totalidad deI inmueble, según manifestaciones


\9
tidas en eI escrito de fs- 57. Es más, solicitó que sea
decretada medida cautelar de prohibición de innovar pero sólo
respecto a Ia supelficie de 4 hectáreas del inmueble, conforme
consta a fs. 59.--------
Si bien, posteriormente, fue ampliada .Ia denañda,
extendiendo 1a supe¡fic.ie de 4 hectáreas a t hectáreas,
ajuntando plano (fs. 97/2), el, xeclamo de los herederos no
resulta atendible par:a enervar 1a intención original de José
Dolores Figueredo y de su esposa Felicia Martínez Vda. de
Figueredo. esto es, de usucapir parte de1 inmueble, Por 1o
demás, dicho escrito de ampliación de demanda arroja confusión,
ambigüedad e imprecisión respecto a la extensión de Ia fracción
ocupada, esto es/ sus ñedidas y linderos. En efecto, por un
lado se afirmó que José Dol-ores Figueredo adquirió parte del
itunueble y, por otro, que se recla¡¡aba po¡ la totali.dad del
in¡iuebfe, Pelo 1o cierto y concreto es que la superficie
perlnetlal -supuestamente ocupada por ellos- no fue detexminada
¿j á través de trabajo técnico, defecto que conlleva el rechazo de
la demanda, pues no se puede usucapir cosa genérica e
lndeterminabfe
r| . Cabe rememorar que el A¡ticulo 109 de 1a constitución
E
Nacional gara ntiza 1a propiedad privada. estableciendo que es
.invioIab.le. E s por ello. que para ad¡nitir la demanda de
usucapión, 1 a prueba debe ser inequivoca e indubj.tada. A1
respecto¿ la más sólida y autorizada .lullsp¡udencia estableció:
"En nateria de julcios sobré prescripción isi tiva de
-Ur don)nia ha de procederse con criteria res tri ctjv
razonés de o co irteresadas" (CApel. Civ. Com
to a fas
Mo rón,
sál II, 4 /87, ED, 94-229) . "La usucapión es un edio
c5.!
cton de adqu] si ión del doninio y fa conprabación de
exX e\oidos r la ley debe efectua de ,¡ane
AlDerto

trinétuz fi.
insospechabfe, cTara y conviñcente" (CNCiv., Sala Et 28/71/A0,
ED, 93-353 ) .

Por las motivaciones explicitadas, corresponde en estricto


Derecho, rechazar la demanda por usucapión. Y, en cons encia,
confilnar e1 FalIo impugnado. con imposición de Co tas
per:didosa. de conformidad a 10 dispuesto en ]rJArticulos 192
205 del Códiq o Ritual . Asi voto
Con lo que dio r terminado eI acto firmando SS.EE.
do OI mÍ que o certifico, quedando ac da .La
nt en 1a inmediat ame te sigue:
Alberto M¡
l!¡,,"
Mir
J

'€t"",
SENTENCIA NÚMERO
'j. c.s.J

Asunción, t4 a"')ehomb(.a"t
Y VIS los méritos del Acuerdo que aotecede, 1a
Exce I
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
CIVIL Y COMERCIAL SAI.A
R E S U E ! V E:

DECLARAR DESIERTO el Recurso de Nul idad-


CONFIRMAR e.L Acuerdo y Sentencia Nunerc 4, de fecha 11 de
Abril deI 2.015, dictado por e1 Tribunal de Apel ió eit 1o
Civi1, Comercial, na y Laboral, Circunsc!ipción Ju cial
Pa ra gu r1. ----
C AS 1a apelante p e-rdidosa - ------
tificar y

Alber¡o ¡tinez Sintoo


¡¡ linéru2 4.' Mitri!Úo
9/-,¡.*Lro
Pi.r':r :r .-::* tglcd
,-

',.r.t%l.ú,1,,,,"

También podría gustarte