Está en la página 1de 2

5 pasos previos para que te puedas relajar

Si quieres aprender a relajarte, hay un fenómeno central de tu cuerpo que es importante


que conozcas, el cual te permitirá hacerte aliado de tu cuerpo y realmente ayudarle a
soltar y relajar.

5 pasos para darle paso a la relajación


Si quieres aprender a relajarte, hay un fenómeno central de tu cuerpo que es importante que conozcas, el
cual te permitirá hacerte aliado de tu cuerpo y realmente ayudarle a soltar y relajar.

En mi experiencia personal, y al observar a tantas personas con ansiedad, he podido descubrir que existe
una etapa previa a la relajación, la cual incluye, la liberación de tensión.

Físicamente me parece difícil relajar algo que está tenso, sin pasar por un momento de liberar esa tensión, o
sea, no es tan fácil aplicar relajación sobre la tensión, más bien, se libera la tensión, y eso da pie a la
relajación.

Sabiendo esto, podemos estar más dispuesto a atravesar por esos momentos depurativos, “crisis sanadoras”
como algunos terapeutas les llaman, o momento pico de intensidad difícil, pero necesario de atravesar.

Ahora, para poder atravesar ese momento difícil, antes hay que tener la actitud correcta de estar dispuesto a
atravesarlo, y antes de eso, darnos el espacio y el tiempo para conectar con nosotros.

Es a través de la conexión con nuestro cuerpo, con alguna sensación, que si nos dejamos llevar y sumergir
a través de aquello que nos sea más fácil y accesible sentir en un momento determinado, entonces...
podremos llegar o acceder a la liberación de tensión física o emocional, atravesarla, y dar pie a la
relajación.

Así me pasó el día de ayer, te doy mi ejemplo:


Antier, aguanté o contuve mis emociones porque fui de apoyo emocional para otra persona, pero la realidad
fue que me removió mucho mis propias emociones y en su momento no las expresé.

Al día siguiente, antes de irme a dormir, (o sea, ayer), eempecé a sentir inquietud y malestar en el pecho,
como esa mini sensación de vacío raro inexplicable.
Entonces... me di cuenta que estaba ante un momento de liberación de tensión, puse mi atención en esa
sensación, abrí mi pecho, me dispuse a sentir... y me quedé ahí, sintiendo esa sensación, en menos de 1
minuto ya estaba llorando, y sin meterle cabeza.. permití que mi cuerpo liberara esa emoción.

A los dos o tres minutos... sentí que mi cuerpo ya no necesitaba seguir llorando... y empecé a sentir mi
respiración, me abracé, sentí el contacto de mis manos sobre mi pecho, y poco a poco fui sintiendo que mi
respiración se iba relajando... hasta que sentí mucha paz, y me quedé dormida.

Es así, que si bien los siguientes pasos que te comparto no son así como tan lineales, sí son esos requisitos
o momentos que se van dando para poder dar pie a la relajación.

Ponlo en práctica, espero te ayude.

Paso 1:
Disponte a relajarte, toma la decisión, y vete a un espacio donde puedas sentarte o recostarte

Paso 2:
Activa la actitud de estar dispuesto a atravesar por el malestar sabiendo que al final llegarás a la relajación.

Paso 3:
Empieza a sentir lo que aparezca ante ti, ya sea una sensación o tu respiración, conecta con tu cuerpo,
ubícate en tus sensaciones.

Paso 4:
Permite la liberación de tensión, si te dan ganas de llorar, o si sientes que el malestar aumenta, permite que
tu cuerpo lo libere a través de un movimiento, una expresión, un llanto o un temblor, haciendo a un lado la
interpretación mental.

Paso 5:
Permítete descansar, suelta la tensión de tus músculos, deja caer el peso de tu cuerpo, permite que tu
respiración se vaya calmando, abrázate, agradécete y tómate el tiempo que necesitas para descansar.

También podría gustarte