Carátula: SUCESORES DE CONTRERAS ADOLFO Y OTRO/A C/ ALEN REINALDO FABIAN Y OTRO/A S/ DAÑOS Y PERJ.

DEL/C
Fecha inicio: 01/02/2010 Nº de Receptoría: LM - 39236 - 2009
Estado: A Despacho
Pasos procesales:
Fecha: 31/05/2021 - Trámite: SENTENCIA DEFINITIVA - ( FIRMADO )

Anterior 31/05/2021 18:27:39 - SENTENCIA DEFINITIVA

Referencias
Cargo del Firmante SECRETARIO DE JUZGADO DE PAZ
Domicilio Electrónico 20134066327@notificaciones.scba.gov.ar
Domicilio Electrónico 23260382934@notificaciones.scba.gov.ar
Domicilio Electrónico 23147512384@notificaciones.scba.gov.ar
Fecha de Libramiento: 31/05/2021 18:30:05
Fecha de Notificación 31/05/2021 18:30:05
Funcionario Firmante 31/05/2021 18:27:32 - SOHANER Mariano Gaston - JUEZ
Notificado por BONDONNO VALERIA MARIA
Observación SENTENCIA DEFINITIVA
Sentencia - Folio: 309
Sentencia - Nro. de Registro: 16
Texto del Proveído
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En la ciudad de San Justo,

Autos y vistos:
Estos actuados caratulados “Contreras Adolfo y otra c. Alen Reinaldo Fabian y otro s. Daños y Pe
Primera Instancia en lo Civil y Comercial nº 5 Departamental, venidos a mi público despacho a los efecto
Resulta:
I.- A fs. 4 se presentaron Adolfo Contreras y Carmen Concepción Galeano, con el patrocinio letr
término de prescripción liberatoria por las consecuencias del accidente por el que perdiera la vida su hijo
II.- A fs. 35/41, se presentaron nuevamente los actores a los efectos de promover formal dema
Antonio Barcala y contra quien resulte civilmente responsable por el hecho que ocasionara la muerte d
En cuanto a la plataforma fáctica de la presente acción, relataron en lo sustancial que José Anton
Lartigau 1557 suscribió un contrato de locación de obra con Reinaldo Fabián Alen, de profesión arquite
remodelación en su vivienda.-
Dicen que el profesional convocó al hijo de los accionantes, Cristian Daniel Contreras, para efectu
En tales circunstancias, el día 8 de enero de 2008 siendo aproximadamente las 10.00 horas, el
encomendadas por el arquitecto en el inmueble referenciado con anterioridad, momento en el cual se
de Contreras al suelo y sobre él, un fragmento de concreto lo que le ocasionó de manera inmediata su m
cráneo.-
Añadieron los accionantes que ante la ocurrencia de este hecho, tomó intervención la UFI Nro.
investigación, derivó en la condena del profesional interviniente, Reinaldo Fabian Alen, por encontrarlo c
Seguidamente, imputaron la responsabilidad al arquitecto responsable de la obra en los térm
entender que el hecho generador del daño fue consecuencia del estado de peligro en que se encont
contando con las medidas mínimas de seguridad.-
Con relación a José Antonio Barcala, entendieron los accionantes que el mismo resulta respons
inmueble donde el menor se encontraba laborando y encontró su muerte.-
A continuación, individualizaron y cuantificaron los rubros reclamados, practicaron liquidación, o
demanda en todas sus partes con costas.-
III.- Corrido el traslado de ley, a fs. 52/55 se presentó Reinaldo Fabián Alen con el patrocinio le
tiempo y forma la demanda incoada en su contra.-
En primer término, opuso al progreso de la presente acción excepción de prescripción.-
En tal sentido, entiende el emplazado que atento que el hecho ventilado en autos acaeció el 8
“septiembre de 2011”, se encuentra ampliamente prescripto el plazo que otorga la ley para entab
jurisprudencia al respecto.-
Seguidamente, indicó que el plazo de prescripción, se suspende por el término de un año por “la
consecuencia de una intimación por medio fehaciente reclamando el cumplimiento de la prestación.-
Agregó que el joven víctima de este accidente se encontraba trabajando en el lugar del accid
precaria y lo que comunmente se denomina en negro, el reclamo de sus causahabientes debió realizarse
aun cuando se elija la vía civil, siendo la obligación del demandado de carácter contractual.-
En esta inteligencia, entiende el accionado que el plazo de prescripción a aplicar en los presentes
Trabajo, y que al momento de la interposición de la demanda se encontraba transcurrido.-
A continuación, contestó demanda en subsidio.-
En tal dirección, indicó que contrató los servicios del contratista de obra José Luis Celiz, quien
Carlos Darío Ortiz.-
Expresó que ambos debían realizar el retiro de escombros donde se efectuaba la remodelación
mismo a esa fecha.-
Enunció que con fecha 7 de enero de 2008, dio expresas instrucciones al contratista para que re
fin de tres volquetes. El día 8 de enero, Céliz no se presentó y dejó solo a los obreros, sin dar aviso alguno
Agregó que una vez acaecido el siniestro, tomó conocimiento de parte del único testigo prese
víctima no se había dedicado a sacar los escombros como debía hacer, sino que picó una columna sin
subirse sobre una loza que cayó al piso girando sobre su cuerpo, lo cual le ocasionó lesiones de tal magn
Dijo que a diferencia de lo sostenido en la demanda, no fue la falta de planos o andamios lo que
quien dirigía las tareas y la negligencia de la propia víctima.-
Por otro lado, hizo hincapie en que es injusto demandar al propietario del lugar, José Antonio
momento del evento dañoso y no poseer ninguna relación con el obrero, siendo relevante que se
encontraba a su cargo, y no del Sr. Barcala, motivo por el cual solicita se rechace la demanda contra él.-
Añadió que el Sr. Carlos Darío Ortiz lo demandó en sede laboral por los daños emocionales su
entiende porque los padres del fallecido instan la acción ante el fuero civil y comercial.-
Seguidamente ofreció prueba, solicitó se rechace la demanda en todas sus partes.-
IV.- A fs. 64, en los términos del art. 331 del CPCC, los accionantes ampliaron demanda contra Lui
V.- Corrido el traslado de ley, a fs. 89/95 se presentó José Antonio Barcala, con el patrocinio le
legal tiempo y forma la demanda incoada en su contra.-
En primer término y por imperativo legal, realizó una negativa genérica de los hechos alegados en
 Seguidamente pasó a realizar su relato de los hechos. En tal sentido indicó que el día 18 de novie
Reinaldo Fabian Alen en representación de “Real Construcciones” un contrato de locación de obra por
unifamiliar sito en la calle Lartigau 1557, de la localidad de Ramos Mejía, partido de La Matanza.-
Indicó que en el punto “D” de las condiciones generales del contrato, el arquitecto garantizó so
correcta ejecución de los trabajos, 3) La mano de obra sería espcializada, los materiales de primera mar
de los materiales provistos por el propietario, 5) El personal afectado por obra contaría con seguro de vid
Continuidad de las tareas”.-
Agregó que entregó al arquitecto Alen la suma de dieciocho mil pesos en concepto de seña
contrato.-
Señaló que la obra comenzó los primeros días del mes de diciembre de 2007, realizando las prime
Señaló que el día 8 de enero de 2008, en horas del mediodía, en circunstancias en que el m
desempeñaba bajo dependencia y orden del codemandado Alen, sufrió un accidente del que derivó su m
Expresó que con motivo del lamentable suceso, se instruyó causa penal contra el arquitecto prof
seguido de muerte”.-
Producto de esta situación y otras tantas irregularidades, el contrato de locación de obra fue res
de contrato” los que tramitaron ante esta dependencia.-
Finalmente, fundó su conteste en derecho, ofreció prueba y solicitó se rechace la demanda contr
VI.- A fs. 119, atento no haber comparecido al llamado jurisdiccional se decretó la rebeldía en
Celiz.-
VII.- Atento la existencia de hechos controvertidos que debía ser materia de comprobación, co
actuaciones a prueba (Fs. 144). Con fecha 9 de marzo de 2020, se certificó la producción de los medios p
VIII.- Finalmente, con fecha 26 de marzo de 2021 se dictó el llamamiento de autos para sentencia
Y considerando:
Primero: El llamamiento de autos para dictar sentencia.
Que constituye un efecto del firme llamado de "autos para sentencia", aquél que da cuenta
actuaciones realizadas en el proceso hasta esa ocasión, por lo que puede considerarse purgado todo
tiempo, por imperio de la preclusión. (artículos 482 y 170 del C.P.C.C. y su doctrina).
Segundo: El ordenamiento jurídico a aplicar.
De acuerdo con lo dispuesto por el artículo 1° de la ley 27.077 (B.O n° 33.034 del 19/12/2014), qu
decreto 1795/2014 (B.O. n° 32.985 del 08/10/2014), el Código Civil y Comercial de la Nación aprobado p
por lo que antes de ingresar en la consideración de las cuestiones ventiladas en autos, y ante la vi
determinar los alcances del nuevo texto legal en el presente caso.
Al respecto, el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación fija en su artículo 7° las reglas a segui
vigencia, las leyes se aplican a las consecuencias de las relaciones y situaciones jurídicas existentes. Las l
excepto disposición en contrario. La retroactividad establecida por la ley no puede afectar derechos
supletorias no son aplicables a los contratos en curso de ejecución, con excepción de las normas más fav
El citado art. 7 alude a situación y relación jurídica, al igual que lo hacía el art. 3 del Código Civil.
ley nueva fue desarrollada por el jurista francés Roubier en 1929, fecha en que publicó su artículo sobre
la base de las ideas de irretroactividad de la ley respecto de los hechos cumplidos y efecto inmediato d
posición que ocupa un individuo frente a una norma de derecho o a una institución jurídica determinad
cuanto está desprovisto de todo subjetivismo y carácter patrimonial. La situación jurídica se puede en
momento de producir sus efectos.
Roubier recurrió a la idea de "situación jurídica" estableciendo que ésta tiene una faz estática y u
inmediato de la ley nueva. Para esta teoría los aspectos dinámicos son los de la creación o constitución
un hecho cumplido y la ley nueva no puede volver sobre ella. Pero la situación jurídica no se agota en su
cual ella produce sus efectos: los efectos posteriores a la entrada en vigor de la nueva ley son regula
(Roubier, Paul, "Le Droit transitoire (conflits des loisdans le temps)", Paris, 1960, citado por Medina, Gr
de Código”, LA LEY 2012E, 1302 DFyP 2013 (marzo), 01/03/2013, 3, Cita Online: AR/DOC/5150/2012).
Como se aprecia, en materia de derecho intertemporal, con excepción de las normas más favor
hecha de la evidente omisión incurrida en el primer párrafo del adverbio “aún”, el nuevo cuerpo legal ha
art. 3° del Código Civil, según reforma de la ley 17.711.
De este modo, con las aclaraciones ya realizadas, el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación e
existentes a la fecha de su entrada en vigencia, tomándolas en el estado en que se encuentren -en
también a las consecuencias no agotadas de relaciones y situaciones jurídicas constituidas bajo el ampar
Pues bien, al ser el daño un presupuesto constitutivo de la responsabilidad (cfr. arts. 1716 y 1
anterior Código Civil), aquel supuesto daño que diera origen a este proceso, constituyó, en el mismo inst
En consecuencia, dicha relación jurídica, al haberse consumado antes del advenimiento del actu
sus elementos constitutivos y con excepción de sus consecuencias no agotadas-, de acuerdo a los sistem
de Espanes, “Irretroactividad de la ley”, Universidad de Córdoba, 1975, en especial p. 22 y 42/43, p. IV, a
Tercero: La excepción de prescripción.
Corresponde en este estadío dar tratamiento a la excepción de prescripción interpuesta por el co
En tal sentido, entiende que atento que el hecho ventilado en autos acaeció el 8 de enero de 2
2011”, se encuentra ampliamente prescripto el plazo que otorga la ley para entablar la acción. Par
respecto.-
Seguidamente, indicó que el plazo de prescripción, se suspende por el término de un año por “la
consecuencia de una intimación por medio fehaciente reclamando el cumplimiento de la prestación.-
Agregó además que entre él y Cristian Daniel Contreras existía una relación laboral precaria y que
marco contractual de la ley de contrato de trabajo.-
En esta inteligencia, entiende el accionado que el plazo de prescripción a aplicar en los presentes
Trabajo, y que al momento de la interposición de la demanda se encontraba transcurrido.-
Dicho planteo fue contestado por la parte actora a fs. 130/131, al que remito en honor al principio
Sentado ello, cabe destacar que la excepción de prescripción se erige como un instituto jurídico por el c
transcurso de los plazos legalmente fijados, se esteriliza la acción ínsita en toda prerrogativa subjetiva; d
(arg. arts. 3949, 515 y su nota y concs. del Código Civil, su doc.)
Dicho ello, y sólo a los efectos de dar respuesta a los planteos argüidos por el demandado, debo
que “Las acciones provenientes de la responsabilidad por accidente de trabajo y enfermedades prof
determinación de la incapacidad o el fallecimiento de la víctima”.-
Por otro lado, el Código Civil, en su artículo 4037 establecía que: “Prescríbese por dos años, la acc
Sentado ello, debo adelantar que tanto de aplicarse la normativa de derecho laboral como el o
interponer la demanda, la acción promovida por los demandantes se encontraba prescripta.-
Veamos porque.-
El artículo 3986 del Código Civil dispone que “La prescripción se interrumpe por demanda con
incompetente o fuere defectuosa y aunque el demandante no haya tenido capacidad legal para presenta
La casuística me revela que cada una de las partes intervinientes reconoció la existencia de
accionantes ocurrido con fecha 8 de enero de 2008. También de dicha data dan cuenta las actuaciones p
Entonces, de tomar dicha fecha como punto de partida del comienzo del plazo de prescripción l
ley de contrato de trabajo) como el Código velezano (art. 4037), los requirentes contaban con plazo p
2010.-
En consonancia con ello, con fecha 30 de diciembre de 2009, los padres del menor fallecido
demanda interruptiva de prescripción, cobrando plena vigencia el instituto normado por el artículo 3986
Tomando ello en consideración, no cabe mas que concluir que el plazo para que opere la
transcurrido.-
Por lo tanto, habré de rechazar la excepción de prescripción interpuesta por el codemandado R
(arts. 3986, 4037 del Código Civil y art. 69 y 70 del CPCC).-
Cuarto: La prejudicialidad penal.
Señalo que conforme se desprende a fs. 386/392 de la causa penal recepcionada “ad effectum v
Estrago Culposo”, en trámite por ante el Juzgado en lo Correccional nro. 1 Departamental, con fecha 2
pena de 8 meses de prisión, y costas del proceso, en orden al delito de “Estrago Culposo seguido de m
resolución de fs. 454/460 de la Sala I de la Excelentísima Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal.-
Por lo tanto, existiendo sentencia condenatoria firme, ha cesado el impedimento de pendenci
definitiva en esta sede civil. (art. 1.101 del Código Civil).
Asimismo, se han recibido las siguientes causas relacionadas con la causa principal: Carpeta d
Culposo”; Carpeta de la causa 9674 caratulada “Alen Reinaldo Fabián s. Incidente de Excarcelación”,
Solicitud de Embargo e Inhibición General de Bienes; y causa nro. 5973 caratulada “Alen Reinaldo Fabiá
Ejecución Nro. 1 Departamental.
En consecuencia, estos obrados se encuentran en condiciones de dictar sentencia.
Cuarto: Los hechos.
Se demanda en autos el resarcimiento por los daños y perjuicios que tuvieran su origen en la m
enero de 2008, aproximadamente a las 10:00 horas, en condiciones en que se encontraba desarrolland
Alen en el inmueble sito en Lartigau 1557, de la localidad de Ramos Mejía, partido de La Matanza, propie
Por su parte, al momento de contestar demanda, Reinaldo Fabian Alen, reconoció la existencia
óbito. En cuanto a la forma en que ocurrió el lamentable suceso, postuló que el accidente se produjo por
propio accionar de la víctima.-
Al momento de comparecer al llamado jurisdiccional, José Antonio Barcala, indicó que había cel
Reinaldo Fabián Alen, donde el profesional se haría cargo de la realización de la obra encomendada y con
de la ley. Agregó que con motivo del accidente se vio suspendida la realización de la obra, lo que m
Contrato” (Exp. Nro. 11.517), donde fue resuelto el contrato de locación de obra.-
Finalmente, atento la rebeldía de Luis Angel Celiz, no cuento con una versión de los hechos por él
Asi las cosas, contestes como se encuentran las partes respecto a la ocurrencia del hecho y a l
genera la responsabilidad penal atribuída al codemandado Alen en sede represiva, deberé determinar s
los codemandados Barcala y Céliz, como así también si existió parcial culpa de la víctima en la ocurre
codemandado Alen.-
Delimitada de este modo la base fáctica, corresponde me expida respecto a la responsabilidad atr
 Quinto: La causa penal y la causa civil.
Si en sede penal se tiene resuelto con sentencia definitiva y firme que el hecho principal, motivo
y se definen y se precisan las circunstancias fácticas que rodean y entornan al hecho principal que consti
sede civil, en el sentido de que el juez en lo civil no podrá nunca afirmar que el hecho ocurrió de una man
Significa que en el proceso civil no puede el juez apartarse de la calificación de “culpable” que hic
derecho civil argentino. Fuentes de las obligaciones”, 2º ed., 1958, t. IV, p.274, nº2952; Bustamante Al
p.522, nº1655).
Ello, exime al actor en el juicio civil de cargar con la prueba de la culpa del demandado, con lo qu
fines de la determinación del quantum indemnizatorio. (Trigo Represas - Compagnucci de Caso, “Respon
Ed. Hammurabi, 2008, pág.477).
Las dos contingencias que no son capaces de ser cuestionadas en sede civil son pues: a) La existen
b) La culpa del agente, si fue condenado.
Es más, la sentencia recaída en sede penal de conformidad con lo normado por el art. 1.102,
respecto del culpable, sino también respecto de los terceros que responden por él en virtud de lo dispu
2/3/1988, “Barra, Rodolfo C. C/ T.A.T.A.S.A. S/sumario).
Lo dicho precedentemente no implica (tal como lo reitera pacífica jurisprudencia) que no pueda
fin de mitigar el reclamo resarcitorio, aun cuando en el proceso penal no se hubiere tomado en con
demandado el demostrar este extremo. (Llambías, “Límite de la cosa juzgada penal en materia de resp
Obligaciones”, ed. 1980, t.IV-B, p.80, nº2770; Brebbia, “Problemática jurídica de los automotore
Caso, “Responsabilidad civil por accidentes de Autmotores”, tomo 2, 2º ed., Ed. Hammurabi, 2008, pág. 4
Así entonces, mediando condena penal del demandado, en virtud de la regla del artículo 1102 del
total de responsabilidad previsto en el artículo 1.113, 2º párrafo, 2º parte, del Código Civil. No obstante
ello puede gravitar para eximir parcialmente de responsabilidad al demandado, siempre, además, que a
Civ. y Com., San Isidro, sala I, 23-11-2004, “Gorlero c/ De la Puente s/Ds. y ps.”, www.casi.com.ar).-
Sexto: La responsabilidad civil.
Sentado ello, y teniendo en consideración que con fecha con fecha 2 de julio de 2010, se ha cond
y costas del proceso, -con cumplimiento en suspenso-, por resultar autor material del delito de estrag
(número 53/09, “Alen Reinaldo Fabian s. Estrago Culposo”, en trámite por ante el Juzgado en lo Corre
delictivo y la culpabilidad del demando.-
Ahora bien, sin perjuicio de la existencia del hecho y la culpabilidad establecida, cabe realizar las
en materia civil, en tanto no debe confundirse la culpabilidad con la causa efectiva entre el hecho y el da
Puede existir vínculo causal entre un acto y su resultante, sin que exista responsabilidad jurí
culpabilidad, pero ser ésta irrelevante a los fines de la responsabilidad civil, por falta de relación causa
hecho y el daño debe mediar un nexo efectivo, siendo necesario que el daño sea consecuencia real de
Daños y perjuicios”, LLBA 2004, 620).-
Es así, que podemos afirmar que en materia civil, existe causación del daño generado, aún cuand
sede penal, ya que debemos tener por cierto, que existen casos en los que no hubo intención de produ
y por ende no le es imputable), y sin embargo el mismo fue causado por el accionado.-
La causalidad, como señala Isidoro H. Goldenberg (“La relación de causalidad en la responsabilida
proviene de la relación acto-mundo exterior y se traduce en un resultado, a diferencia de la aut
antijuridicidad, que encuentra su génesis en la relación acto-ordenamiento. Por lo cual la investigació
hecho antecedente y un hecho consecuente, en tanto la idea de “autoría” se centra en la imputación sub
 Es decir, que en materia civil, la relación causal o el denominado “nexo causal”, consiste en la co
es decir, el efecto dañoso.-
La relación de causalidad, encuentra su antecedente en el método filosófico científico de la caus
las cosas o de las “verdades” a través del estudio y análisis de las causas.-
En nuestro sistema jurídico, la relación de causalidad tiene una importancia de primer plano, no
para establecer la medida de la responsabilidad.-
Giovanna Visintini ha explicado magistralmente la investigación causal y sus pasos; de su pensam
relación de causalidad entre el daño resarcible y el hecho que es fuente de la responsabilidad, debe p
natural” o “de hecho”; b) Esta comprobación es preliminar o necesariamente previa al a indagación rela
(la causalidad jurídica); c) A esta investigación preliminar se le debe agregar otra estrechamente ligada
aun en ausencia del hecho que constituye la fuente de la responsabilidad; d) la indagación establec
habitualmente sintetizado con el concepto de la “condictio sine qua non”, que sirve para excluir que la r
una postura mejor a la que tendría si el hecho ilícito no hubiese acaecido; e)Finalmente, cuando se tra
venimos reseñando, debe sumarse un nuevo examen: si junto al nexo de causalidad natural, existe un ne
parte del agente; f) Este último paso se explica fácilmente: la culpa consiste en una imprudencia y n
consecuencias dañosas de la propia acción-; ello así, la culpa contiene en sí la previsión del total desarro
la existencia de un nexo causal entre su conducta y el daño.- (Visintini, Giovanna, “Tratado de la respons
En la especie, encuentro que se evidencia la relación de causalidad entre el hecho -estrago culpos
y la muerte del hijo de los accionantes, cuestión que ya fue juzgada en sede penal. (art. 901, 903 y 904 d
Sentado ello, debo abocarme a la responsabilidad civil que emerge del delito determinado en sed
En primer término, habré de aclarar la cuestión introducida por el codemandado Reinaldo Fabián
acción intentada por los accionados debía tramitar por ante el fuero laboral, por haber ocurrido la muert
Hace largo tiempo, cuando Jorge Joaquín Llambías analizaba la cuestión de quiénes pueden opta
la antigua -y derogada- ley de trabajo nro. 9688 (conf. su trabajo "La acción de derecho común origina
ss.), y señalaba que la opción sólo correspondía al obrero accidentado, sin aludir a los causahabientes de
la indemnización por causa del fallecimiento del trabajador, concluye que se trata de una omisión enter
resarcitoria que puede ejercer la víctima del accidente o los terceros damnificados por la muerte del acc
Por lo demás, agregaba, que el art. 17 de la referenciada ley no impedía a quien fuera damnificad
de beneficiario de la indemnización especial de dicha norma, para atenerse exclusivamente a su calidad
Civil). Como corolario concluye que cuando son los terceros damnificados los que intentan hacer valer co
fallecimiento les ha causado, la naturaleza de tal acción es extracontractual, pues con anterioridad
empleador, con quien no estaban ligados por ningún vínculo obligacional; es sólo a partir del hecho
ligados desde entonces con el empleador, como responsable del daño proveniente de un hecho ilícito.
Así como no puede dudarse del carácter de damnificados indirectos invocado por la madre y p
igualmente indiscutible que la situación prevista por el art. 1079 del Código Civil se aplica también a los
riesgosa o peligrosa, habida cuenta que nada en contrario menciona el art. 1113 de dicho ord
invariablemente reconocido por la interpretación, y el deber de seguridad que concierne al empleador,
damnificados indirectos a valerse de aquella normativa, con total independencia funcional de la relació
plena.-
Otro factor preponderante que contribuye a encuadrar la presente acción dentro de la órbita ext
Dicha norma establece que “Los hechos o las omisiones en el cumplimiento de las obligaciones c
título si no degeneran en delitos de derecho criminal”.-
 Al respecto, a diferencia de lo que ocurre en el derecho francés, español e italiano, y en genera
una norma específicamente referida a la posibilidad de optar por uno u otro de estos sistemas.-
Es así, que Vélez Sarsfield adopta una postura llamada por la doctrina nacional como “opción re
incumplimiento que, al mismo tiempo configure un delito criminal. Para que la opción sea posible, se re
de tres calificaciones distintas: incumplimiento obligacional, acto ilícito extracontractual y delito crim
doloso como el culposo.-
En cuanto a quien debe cometer el delito para posibilitar la opción, destaco que, como corolario
su vez de delito criminal debe ser obrado en principio por el propio deudor. Pero en los casos en los cua
tercero en el cual el deudor delega su ejecución, basta con que el delito penal sea cometido por di
constitutiva en infracción al deber obligacional.-
Una vez reunidos los requisitos antes establecidos se abre para el acreedor damnificado la opción
las normas que regulan el incumplimiento contractual, o bien las que regulan los ilícitos aquilianos.-
Finalmente, y como corolario de esta cuestión, traeré a colación un caso análogo, el cual no con
encuadrado dentro de la órbita de la responsabilidad contractual: "... de acuerdo a lo dispuesto en el a
criminal... el caso no debe ser examinado a la luz del artículo 1113 del Código Civil sino en función de las
no corresponde indagar si el hecho se produjo por el riesgo o vicio de la cosa o si ésta fue utilizada en c
sala I, 04/04/2000, "Chianetta, Vito c. Valleja, Claudio", en La Ley, Revista de Responsabilidad Civil y Seg
del locatario de obra en la jurisprudencia", en Revista de Derecho Privado y Comunitario. Asociaciones
especial pto. III.2, pág. 297).-
Por ello, interpretando el fallo traído a colación contrario sensu, mediando en autos un incu
seguridad), un acto ilícito extracontractual (la muerte de Cristian Daniel Contreras) y la condena en sed
meses por la comisión del delito de estrago doloso seguido de muerte), corresponde encuadrar la presen
Resulta fundamental señalar que a la fecha del evento los pretensores no tenían ninguna vincula
que la presente acción fue interpuesta -tal como dijera anteriormente- obrando iure proprio, como dam
occiso.-
Aclarado ello y ubicado el caso en la esfera extracontractual, adelanto que con relación a Re
entiendo aplicable el 2° párrafo, último supuesto, del art. 1113 del Código Civil, que consagra un sup
imputación “riesgo de la cosa”, expresión que comprende los detrimentos generados por cosas que son
su utilización o empleo, supuesto este último en el cual “el riesgo no está tanto en la cos
(Pizarro, “Responsabilidad civil por el riesgo o vicio de la cosa”, Universidad, Buenos Aires,1983).
De este modo, surge el riesgo como noción expansiva y omnicomprensiva con prescindencia de
Dicho en otros términos, “basta el riesgo como tal, sin interesar los rostros con que se presente”. Porqu
culpa (negligencia, imprudencia, impericia en el arte o profesión o incumplimientos de los deberes de
modo el riesgo asume análoga significación totalizadora (cualquier modalidad de riesgo, con tal qu
excluyentes sus particularidades o modalidades eventuales. De tal suerte que más allá de la aptitud
cualquier actividad peligrosa, ensanchándose así la responsabilidad civil hasta abarcar los supuestos de d
tal como ahora así lo prevé el art. 1757 del CCyC.
En este contexto, resulta admitido por la doctrina y la jurisprudencia que el art. 1113, 2° párrafo
daños causados “por actividades riesgosas por su naturaleza o por las circunstancias de su realizaci
riesgosas”, La Ley, 1989-C-941; Mosset Iturraspe, “Caída de un andamio. Daños producidos por quienes
522; Kemelmajer de Carlucci, Código Civil...; Belluscio - Zannoni, Código Civil…, T. V, entre otros).
Y ése es precisamente el criterio adoptado por el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación
responsabilidad por actividades riesgosas, cerrando de este modo el largo debate que se inició en derr
Vélez.
Bajo tales premisas y en procura de fundamentar la aplicación de la normativa citada, resulta pre
El hecho fuente y las circunstancias en que éste se produjo, se encuentran plenamente acreditad
Es así que en el decisorio de fs. 394/400 dictado en sede represiva, se tuvo por acreditado que “
horas, en el interior de la finca en la calle Lartigau nro. 1557 de la localidad de San Justo, partido de La M
que debían ser dirigidas y supervisadas por el arquitecto Reinaldo Fabian Alen, quien no recabó l
correspondiente, y omitió el deber de cuidado que exigen los stándares minimos de seguridad, provocó
tales tareas, en el techo que pretendía demole, siendo soterrado por los materiales que tras su caída se p
Siendo ello así, no tengo dudas de que una obra en demolición es por sí misma una cosa peli
aumenta cuando se las desarrolla en altura sin respetarse las normas mínimas de seguridad que impone
el presente-. Suficiente resulta ello para atribuir responsabilidad al empleador de la víctima y guardador
el art. 1113 del C.Civil.-
Al respecto vale recordar que una actividad es riesgosa cuando por su propia naturaleza (esto es,
medios empleados o por las circunstancias de su realización genera una significativa probabilidad de r
regularmente sucede según el curso normal y ordinario de las cosas (Pizarro, “Responsabilidad
Código”, publicado en La Ley 12/08/2015, 1, La Ley 2015-D , 993).-
Las actividades riesgosas por su naturaleza son aquellas que conforme al curso normal y ordi
mismas, cualesquiera sean las circunstancias bajo las cuáles se realizan (v.gr., explotación o transporte d
que las actividades peligrosas por las circunstancias de su realización son aquellas que pese a no
modalidades de tiempo, modo y lugar la tornan especialmente peligrosa. Por ejemplo, el trabajo en la co
La ponderación de esas circunstancias y su incidencia en el riesgo de la actividad debe re
reprochabilidad que podría merecer la conducta del sindicado como responsable en concreto. Desde
puede ser un posterius sino un prius, aunque se indique retrospectivamente luego de producido el daño”
Proyecto de Código Civil", JA, 1988-I, pág. 901; ídem, “Responsabilidad por riesgo. El nuevo art. 1113”,
funciones del derecho de daños”, t. 4, n. 132, p. 610, citado en Pizarro, ob. cit.).-
En este orden de ideas y cuando el carácter riesgoso o peligroso se predica respecto de una acti
ocupa únicamente a la actividad riesgosa por su propia naturaleza o por la naturaleza peligrosa
circunstancial".-
Sobre este punto, comparto lo señalado por Pizarro en el sentido de que se trata de una concep
permitan formular esa limitación conceptual. Es decir, la asociación del carácter de peligroso de una a
afuera variadas situaciones en las que, por la forma o circunstancias de su realización, también son pelig
De este modo, y por las razones expuestas, entiendo que una obra en demolición -y sobre to
máxime cuando no se cumplen con los estándares mínimos de seguridad.-
En consecuencia, y por tratarse de un supuesto de responsabilidad objetiva, deviene aplicable l
Código Civil. En tal caso, y a los efectos de liberarse total -en el caso de Céliz y Barcala- o parcialment
sindicados como responsables la carga de acreditar la concurrencia de una causa ajena consistente en e
responder o el caso fortuito o fuerza mayor.-
Tal como dije precedentemente, la presente acción fue interpuesta obrando iure proprio, como
fallecido, por lo que el caso queda ubicado en la esfera extracontractual, aplicándose en este supuesto -p
1113 del Código Civil que consagra un supuesto de responsabilidad objetiva sobre la base del factor de im
Por una cuestión de orden metodológico, comenzaré por referirme a los demandados Reinaldo F
 Bajo tal óptica, me avocaré a examinar las pruebas arrimadas al proceso -de conformidad con la
Comercial), dejando aclarado que para decidir no estoy obligado a analizar todas y cada una de las a
agregadas, sino sólo las consideradas decisivas para la resolución de la contienda.-
De la lectura de la causa punitoria, se desprenden elementos que a mi modo de ver, excluyen a
sea parcialmente, de la responsabilidad civil por el hecho de autos.-
En tal sentido, en la causa punitoria obra testimonio del arquitecto Walter Fernández, quien a la
de la Secretaría de Control Comunal, expresando que fue convocado al lugar del hecho, tratándose
permitiera presumir que en su interior se estaban llevando a cabo tareas de demolición, acotando a
impone ese tipo de trabajo, exigiendo la previa denuncia de esa actividad, impulsando ello el posterior c
domicilio observó que el lugar se encontraba en un estado de peligro, y que por las características del mi
saber o prever lo que podía suceder, y que por lo menos tendría que haber estado” -ver fs. 82 de la causa
En oportunidad de ampliar su declaración y consultado que fuera en cuanto a si observó algun
andamio del lado exterior se hubiese evitado el hecho porque cayó la losa sobre si misma haciendo camp
Seguidamente, a fs. 83 de la instrucción penal, obra testimonio de Verónica Quiroga, quien osten
Obras y Regularización Catastral municipal, donde indicó “en el lugar no se observóningún elemen
andamios”.-
En oportunidad de declarar la agente municipal, arquitecta Myriam Roxana Gonzalez, ratificó lo d
que “cuando ingresó al interior de la vivienda no observó medidas de seguridad, ya que en las demolicio
vio que los operarios tengan puestos cascos de seguridad, notando además gran desprolijidad en la dem
escasos metros se estaba poniendo una pileta de fibrocemento” -ver fs. 126-.
En oportunidad de ampliar su declaración, expresó que “de haberse tomado las medidas de s
ocurrido”.-
Seguidamente, declaró el compañero del occiso, Carlos Darío Ortiz, quien manifestó que al mo
para la que fue contratado junto a Contreras. Que este último lo hacía en el techo, demoliendo un secto
Que en un momento determinado presagió el peligro, advirtiéndole a su compañero de tareas que e
importancia a sus palabras y siguió trabajando. También describió los últimos instantes en que vio con v
sobre una pared lateral, que en un instante cedió parcialmente, esto es la parte superior de dicha pared
para salvarse, la que también cedió dando una vuelta” - ver fs. 10/11-.
Destacó también que para ingresar a la propiedad se valía de una llave que le facilitó el encargad
obra de forma esporádica y que jamás recibió él ni Contreras instrucción alguna de cómo llevar a cabo el
A ello, cabe sumar que el informe técnico pericial producido por el ingeniero Roberto A. Mozzoc
demolición y la forma indicada, es decir derribando primeramente y en forma completa el techo; 2) La
características era conveniente apuntalarla previamente a la demolición como medida de seguridad, no
La demolición se realizó desde adentro de la edificación hacia fuera según la ubicación respecto de la con
mas seguro demoler desde el exterior de la misma, trabajando sobre andamios independientes de la estr
Corolario de todo ello, ninguna duda cabe que la inobservancia de las elementales normas de s
Christian Daniel Contreras, por cuanto ha quedado demostrado tanto en sede civil como penal, que
evitado el fatal desenlace de la vida del hijo de los accionantes, máxime teniendo en consideración que
con la debida experiencia y no eran supervisados por el personal idóneo.-
Ha quedado demostrado que ni Contreras ni Ortiz conocían el oficio ni su riesgo, a su vez qu
mínimas medidas protectorias y de seguridad que dicha actividad exige.-
Lejos esta de haberse probado la parcial culpa de la víctima.-
 A tal efecto, teniendo en cuenta que el arquitecto demandado alegó como eximente de respons
debe responder, y siendo que no ha desplegado esfuerzo probatorio alguno a los fines de liberarse -nót
no se desprende actividad probatoria alguna-, al menos, parcialmente de la responsabilidad enrostrada,
se mantiene la presunción legal de responsabilidad (art. 1113, párr. 2°, “in fine”, Cód. Civil).
Asimismo, el estado de contumacia de Luís Ángel Céliz, también convierte a éste responsable civi
de los demandantes, por ser el contratista y encargado de la obra -ver en tal sentido acta de procedimie
10/11 de la causa penal-.
En torno a esta cuestión, si bien no resulta aplicable al caso, es dable traer a colación de maner
Nación, el cual mejora el artículo 1647 del código velezano, estableciendo que “El constructor, lo
construcción están obligados a observar las normas administrativas y son responsables, incluso frente a
de tales disposiciones”.-
Debo destacar que la norma del Código derogado hacia referencia al daño “que causen a los
producido por el incumplimiento de tales disposiciones”, superando la equivoca referencia limitativa “a l
decía interpretarse como una expresión de la época y no en forma literal.-
Además, la responsabilidad que establece el art. 1277 rige a favor del comitente y de cualquiera
lugar a las responsabilidades administrativas aplicables. La legitimación pasiva de la responsabilidad
profesionales o dependientes interviniente en la construcción en forma de obligaciones concurren
constructor, pues el contratista, en cualquier caso “conserva la dirección y responsabilidad de la ejecució
Vale decir, que no es un tercero por el que no deba responder.-
Corolario de todo ello, se desprende que los demandados Céliz y especialmente Alen, de quien s
902 del Código Civil), han flagrantemente incumplido con todo tipo de normativa administrativa como
les imponía, derivando dicho incumplimiento en la lamentable muerte del hijo de los accionantes. En v
expuestos y examinado la prueba producida en autos considero que tanto Luis Angel Celiz como Reinald
de Christian Daniel Contreras y deberán responder por las consecuencias dañosas que la muerte del m
fine”, conf. arts. 168 y 171 de la Const. Provincial y arts. 34 inc. 4to., 163, 354, 375, 384 y cc. del Cód. Pro
Diferente ha de ser la situación respecto a José Antonio Barcala.
No caben dudas que el mismo resultaba ser titular del inmueble donde se produjo el lamentable
con la guarda sobre el mismo.-
En tal sentido, de la lectura del contrato de locación de obra celebrado entre el Sr. Barcala y
agregado a fs. 22/26 de los autos “Barcala José Antonio c. Alen Reinaldo Fabián s. Resolución de Contra
que “La contratista garantiza sobre la totalidad de los trabajos: 1.- Supervisión técnica; 2.- La cor
especializada, los materiales de primera marca y calidad con Dirección Técnica profesional, lo que nos pe
provistos por el propietario; 5.- El personal afectado por la obra contará con seguro de vida y accidentes
de las tareas”.-
A todo ello, debo tener en cuenta también lo manifestado por el codemandado Alen, quien al m
injusto y arbitrario demandar al propietario del lugar Sr. José Antoni Barcala, cuando saben y les consta
guarda de la vivienda en el momento del evento dañoso y no lo unía ninguna relación con el obrero po
trabajo, cuya tutela se encontraba a mi cargo y no del Sr. Barcala, por lo que desde y solicitó se tenga po
ver fs. 54 vuelta-.
Con esta declaración no tengo dudas que toma vigencia la máxima del derecho “a confesión de pa
Teniendo ello en consideración, es pacífica la doctrina al entender que “Durante la ejecució
guardianes y es en tal calidad que responden por los perjuicios derivados de su riesgo o vicio -art.
responsables en su condición de “principales” por los daños ocasionados por personas bajo su dependen
Represas, “Derecho de las Obligaciones”, cit., TV, pág. 688).-
El propietario de un inmueble que contrata la construcción de un edificio o su refacción parcial o
las labores por realizar y que, en la mayoría de los casos, el dueño ejerce una vigilancia casi nula. Es por
son quienes deben responder en su calidad de guardianes de la cosa, por los daños que ella cause a terc
Código Civil y leyes complementarias comentando, anotado y concordado, t. 5 pág. 474).-
La jurisprudencia mayoritaria, también sostiene dicha posición. En tal sentido, se ha entendido q
caso, casa en etapa de parcial demolición-, éste se encuentra bajo la guarda de quien está a cargo de la
responsabilidad del dueño, por lo que tanto el locatario como el director, responden por los perjuicios
en la emergencia medió alguna de las eximentes contempladas por el citado art. 1113 del Código
mencionado por Garrido y Andorno, «El artículo 1113 del Código Civil Comentado, Anotado», ed. 1983, p
Es que la condición de director de obra -a despecho de que coincida o no con la condición de «e
calidad de «guardián», si se parte de la idea que la guarda «intelectual» es el poder de mando o contro
39.476, «in re» «Fazzio Roberto D. y otro c. Deirmendjian Juan Carlos y otros s/ daños y perjuicios», del 2
Así, la empresa constructora y el director de obra no sólo son responsables derivados de la ino
todo daño que con motivo de los trabajos pertinentes ocasionen a los vecinos, aun cuando no mediare
lado, acá sí medió. (cfr. CNCiv, Sala E, voto del Dr. Calatayud en «Balaguer de Verge, María A. y otros
S.A.C.I. y Domínguez Rufino c. Bouza H. y Cía. S.A.C.I. del 24/08/2000, publicado en LA LEY 2001-A , 179 D
Lorenzetti, por su parte, entiende que el empresario de obra actúa a su propio riesgo econ
dependiente. Como consecuencia de ello, es también a su cargo el costo de la previsión contra los r
empresario de obra responde por los daños que sufran sus empleados y auxiliares puesto que son depen
Asimismo, que cuando hay cosas riesgosas que son propiedad del dueño y causan daños a
empresario ya que entran dentro de la regla ya descripta, y porque es un profesional que debe prev
emplea o sobre las que trabaja, aún cuando no sean de su propiedad.
Finalmente sostiene que: "... La solución es imputar al empresario los daños que él mismo o sus d
del dueño. Los argumentos son varios: a) En primer lugar, el empresario es un profesional que debe con
condiciones de prevenir el daño; el dueño habitualmente no conoce los riesgos y los vicios que presenta
cosa bajo su control, ya que es depositario de ella, de modo que no puede afirmarse que pese sobre el pro
c) la economía del contrato, al establecer un precio suficiente para pagar la realización de un trabajo a
costo del aseguramiento; de lo contrario se utilizaría un trabajo dependiente que es más económico al
riesgos del daño sufrido por el dependiente..." (Lorenzetti, Ricardo L., "Tratado de los contratos", T. II, Ed
Por todo ello, y teniendo especial consideración que el codemandado José Antonio Barcala no co
hecho, la acción contra él promovida no puede prosperar, por lo que corresponde su rechazo (art. 1113
y arts. 34 inc. 4to., 163, 354, 375, 384 y cc. del Cód. Proc., y Dec. Ley 6582/58).-
No quisiera concluir la presente parcela atinente a la responsabilidad civil analizada, sin antes co
contestación de demanda, como así también en su asistencia a todas las audiencias celebradas, y lo po
colaboración en su rol de demandado.-
Ello así, porque considero que la parte demandada no debe limitarse a negar los hechos afirm
propia versión. Couture se refirió al deber de decir la verdad en el proceso en los siguientes términos: En
deber de no decir, a sabiendas, cosas contrarias a la verdad. La parte debe, en la primera ocasión qu
adversario son, según su convicción, conformes a la verdad. Con relación a los hechos que no le son p
declarar que no sabe si son ciertos. El distinguido procesalista cita, entre otros antecedentes, la Ordenan
exposiciones, alegar íntegra y detalladamente todas las circunstancias efectivas necesarias para fun
verdad, ofrecer los medios de prueba idóneos de sus alegaciones, pronunciarse con claridad sobre las
resultados de las pruebas recogidas y pronunciarse con claridad sobre las observaciones de su adver
sanciones que puedan surgir del resultado del proceso, la pena de multa para la transgresión del deber d
También menciona Couture los Proyectos de Chiovenda y de Carnelutti; en este último leemos
afirmar al juez los hechos según la verdad y de no plantear pretensiones, defensas o excepciones, sin hab
decir la verdad en el juicio civil”, L.L. tº 9, pág. 30, Suplemento Especial, “Páginas de Eduardo J. Couture”
Séptimo: Los daños y perjuicios reclamados.
Establecida de tal guisa la responsabilidad, corresponde ahora determinar su contenido, recordan
de una adecuada acreditación de la existencia y extensión del perjuicio que se dice haber experimentado
Y aquí la tarea del juzgador es sumamente compleja. Disponer un quantum indemnizatorio ma
enriquecimiento sin causa que no puede convalidarse. Por el contrario, otorgar una suma dineraria me
del que ha dado cuenta numerosa doctrina y jurisprudencia, y que a mayor abundamiento hoy se en
Código Civil y Comercial.-
Asimismo, el artículo 165 del Código Procesal Civil y Comercial, autoriza al juez a fijar el importe
pero nunca a tener por demostrado un perjuicio acerca del cual no se rindieron las pruebas pertinentes
En dicho orden de ideas, de la pericia psicológica efectuada sobre los demandantes, por la per
respecto a la coaccionante Carmen Concepción Galeano que:
“A partir de la evaluación psicológica efectuada a la Sra. Galeano Carmen, se infiere que se trata de una per
se considera de magnitud suficiente como para incidir negativamente en su vida de relación social, y familiar. El mism
psicológica denominada Duelo Patológico. La afección psicológica tiene características incapacitantes, y no ha podido
mecanismos defensivos inoperantes o ineficaces, por lo que se sugiere la realización de un tratamiento de psi
interconsultas con psiquiatría. El costo por sesión en el ámbito privado es de alrededor de $300 (trescientos).
El accidente en el que falleciera su hijo, tiene relación causal directa con el cuadro que se observa, hallándose
y permanente.
La poli sintomatología que presenta, se resume en los siguientes puntos:
- Inseguridad e inadecuación-
- Alteraciones del sueño
- Aislamiento social
- Acusado malestar
Para determinar el grado de incapacidad, se toma como referencia el baremo desarrollado por los profesores
y el 25% del V.P.G, asignándole a la Sra. Galeano el 10% ya que la magnitud es Moderada…” (ver fs. 215).-
En relación al aspecto psicológico de Adolfo Contreras, la experta dictaminó que:
“A partir del análisis del material obtenido en el proceso psicodiagnóstico realizado al Sr. Contreras se infiere
depresivo. El tono discursivo se vuelve monocorde y reiterativo, por momentos confuso, refiriendo sentimientos de culp
Los signos hallados se corresponden con un DUELO PATOLOGICO compatible con la figura de daño psíquico.
ventilan en autos, produciendo un agravamiento del cuadro. Es decir que confluyen una causa exógena (accidente) c
reunión de dos o más causas en la producción de un estado mórbido, la propia del daño psíquico surgido a partir de la
Dicho cuadro podría agravarse de no contar con la ayuda de un tratamiento psicológico adecuado, ya que
estimado es de alrededor de un año, con frecuencia semanal. El costo promedio en el ámbito privado es de alrededor d
Para determinar la incapacidad sobreviniente, se ha tomado en cuenta el baremo desarrollado por los profeso
 25% del V.P.G. estableciendo para el Sr. Contreras el 15%, siendo de magnitud Moderado” (Ver fs. 216 vta).
Tomando en consideración que la referida experticia se encuentra debidamente fundada, no correspon
y eficacia probatoria en los términos del artículo 474 del CPCC.-
También a fs. 21, tengo probado que el hijo de los accionantes estudiaba en la Escuela de Educa
se encontraba cursando su 9no. año.-
Por otro lado, a fs. 22/31, se encuentra acreditado que por el fallecimiento de su hijo, Nancy N
descansen en paz los restos de Christian Daniel Contreras, por la suma de $600.-
Finalmente valoro que Carmen Concepción Galeano, al momento del hecho convía con el otro c
48 años de edad y se desarrollaba laboralmente como ama de casa (ver fs. 15 del Beneficio de litiga
momento del lamentable suceso, convivía con Carmen Concepción Galeano y con Christian Daniel
desarrollaba laboralmente como changarin, desde el año 2009 comenzó a percibir una pensión por inva
y fs. 32/24).-
Octavo: La cuantificación de los daños.
El concepto jurídico del daño no se identifica con el concepto natural del daño mismo. De aná
criterios autónomos, razón por la cual puede ser distinto el quantum del daño sufrido efectivamente por
Las exigencias de equidad y conveniencia, a las que es sensible el ordenamiento jurídico, pueden pro
todo, en función de la relación de causalidad entre el hecho productor del daño y el daño, es de
jurídicamente, se requiere, en primer lugar, establecer los límites dentro de los que el daño pueda
atributos exigidos por la ley con fines de responsabilidad. (De Cupis, Adriano, “El daño. Teoría general
Martínez Sarrión, Bosch, Barcelona, 1975, N°28).-
En función de todos estos datos y tomando en consideración que la referida experticia con sus
no corresponde apartarme de ella otorgándole en consecuencia pleno valor y eficacia probatoria en los
seguidamente el perjuicio experimentado, dando respuesta a cada uno de los reclamos esbozados en el
1.739, 1.740, 1.741, 1.744 y 1.746 del Código Civil; arts. 163, inc.5°, 165 y cctes. del CPCC).-
1. Daño patrimonial a la persona:
1.1. Incapacidad sobreviniente. Daño psicológico: La incapacidad sobreviniente, es la secue
completado el período de recuperación o restablecimiento, que debe ser compensado atendiendo a las a
infortunio tiene o puede tener sobre la personalidad integral de aquél. Cause o no un daño económico
visto privado, aun cuando no ejerciere ninguna actividad lucrativa, pues su reparación no comprende sol
afectan la relación psico-física detentada antes del accidente.-
Sobre el particular, el daño psicológico, es la lesión incapacitante que afecta la psiquis del indi
disminución de sus aptitudes para obtener ganancias.-
Reviste connotaciones de índole patológica, pues se resiente la salud mental del sujeto (de ma
través de síntomas, inhibiciones, depresiones, bloqueos, etcétera.-
Pueden reclamar la indemnización del daño patrimonial derivado de lesiones -tanto físicas com
damnificados indirectos que experimenten un daño propio a raíz del hecho lesivo que ha tenido por vícti
En efecto, la muerte de un hijo, especialmente cuando se está unido por lazos de intenso afe
integran un grupo estable que evidencia una interdependencia, no sólo económica sino afectiva que r
cualquier eventualidad, tal el caso de autos-, posee entidad para representar en los damnificados sobr
generar un daño psicológico desencadenante en cada uno de ellos, con una patología que necesite el c
agravamiento si éste es de carácter permanente o bien su remisión en caso de que aquel sea temporal.-
En sentido concordante, la literatura autorizada ha expresado que "una pérdida de esa natural
(Iribarne, Héctor Pedro, "De los daños a la persona", Ediar, Buenos Aires 1995, pág. 464, con cita de Ban
310/311; citado en fallo de la Cámara Civil y Comercial Departamental, sala I de fecha 19/02/2008, “G
otro”, LLBA2008 (mayo), 422 - DJ05/08/2009, 2143; ver asimismo, Cám. Civ. y Com., Sala 2, Mar del Pla
c/Schneider Diana y otra s/ Daños”, LLBA 1999, 351).-
Aclarado ello, señálese que para determinar la indemnización del daño generado a raíz de
psicológica de los demandantes, nada obsta considerar las pautas que al efecto brinda el art. 1.746 del C
Dicho precepto, debe ser ponderado con realismo económico en este momento de la sentencia
una deuda de valor (arts. 1, 2, 3, 7 y 772 del CCC), e impone, como primer paso, acudir a un criterio objeti
En efecto, el artículo 1.746 del CCC ha traído una innovación sustancial, pues prescribe que corr
valor presente de una renta futura no perpetua. A fines de cuantificar el daño patrimonial por incap
parámetro orientativo que no puede ser omitido por la judicatura a la hora de cuantificar los daños perso
Empero, es necesario puntualizar que la utilización obligatoria de las denominadas fórmulas ma
resultado numérico al que se arribe; por ende, cabe concluir que el referido imperativo legal debe ser i
para el juez, pero que en modo alguno excluye la valoración de otros parámetros aconsejados por la s
caso.-
Es que para la determinación del monto en estos casos, debe considerarse -con relación al damn
económico-social, etc., pero sin sujetarse a pautas rígidas ni efectuar cálculos matemáticos exactos, sino
Lo que ninguna duda cabe, es que las fórmulas matemáticas, con la flexibilidad dicha anterio
ciertos colegas Magistrados a aceptar la utilización de dichas fórmulas matemáticas, pero no se puede d
respecto.-
Nótese al respecto, que el doctor Jorge Galdós -Juez de la Cámara Civil y Comercial del Depa
Reforma del Código Civil y Comercial de La Nación, encomendándosele específicamente el Capítulo 1 d
Bueno, dicho juez, aplica actualmente en sus votos, fórmulas matemáticas. Ver con respecto al doctor G
Sala II, “Espil, María I. y otro c. Apilar SA y otro s/ daños y perjuicios”, C. 2-60647-2015, de fecha 17/11/2
Poco trecho resta recorrer para concluir que el nuevo Código Civil y Comercial de La Nación cond
evaluar la cuantía del resarcimiento por incapacidad.-
Reitero, no debiendo sujetarse a pautas rígidas ni efectuarse cálculos matemáticos exactos, sino m
Como dicen Pizarro y Vallespinos, no se trata de alcanzar predicciones o vaticinios absolutos en
riesgosa y nada permite asegurar, con certidumbre, qué podría haber sucedido en caso de no haber oc
que se procura es algo distinto: efectuar una proyección razonable, sin visos de exactitud absoluta, que
de los casos, conforme el curso ordinario de las cosas. Desde esta perspectiva, las matemáticas y la esta
modo alguno puede desdeñar.-
Es que no debe olvidarse que el principio de reparación integral -que, como lo ha declarado rei
estatus constitucional (Fallos: 321:487 y 327:3753, entre otros)- importa, como lógica consecuencia, q
situación que tenía antes del hecho dañoso. Así las cosas, y teniendo en cuenta que el resarcimiento se
nada resulta más adecuado que el empleo de cálculos matemáticos para tratar de reflejar de la manera
aquel.-
Resulta aconsejable, entonces, la utilización de criterios matemáticos que, partiendo de los ingre
tareas no remuneradas, pero económicamente mensurables, que ella llevaba a cabo y se vio total o
futuro), y computando asimismo sus posibilidades de incrementos futuros, lleguen a una suma tal que, i
obtener mensualmente (entre ese margen de beneficios y el retiro de una porción del capital) una can
ilícito, de modo tal que ese capital se agote al término del período de vida económicamente activa que l
del capital y la renta que puede producir, y, por el otro, que el capital se agote o extinga al finalizar el la
bien los fallos y los autores emplean distintas denominaciones (fórmulas “Vuotto”, “Marshall”, “Las Her
la misma fórmula, que es la conocida y usual ecuación para obtener el valor presente de una renta cons
utilidad, significado y componentes de las fórmulas para cuantificar indemnizaciones por incapacidad y m
Este es el criterio que ahora sigue expresamente el art. 1.746 del Cód. Civil y Comercial de la Naci
No cabe ninguna duda de que esa redacción conduce necesariamente al empleo de fórmula
incapacidad (y, por analogía, también por muerte conforme más adelante se expone), pues únicamente
que alude la norma (en esa línea interpretativa López Herrera, Edgardo, comentario al art. 1746 en R
(coord.), "Código Civil y Comercial de la Nación comentado", LA LEY, Buenos Aires, 2014, t. IV, p. 1088/10
Asimismo, dice el doctor Galdós en el referenciado fallo, quien en un primer momento había sost
art. 1746 Código Civil y Comercial ha traído una innovación sustancial pues prescribe que correspond
presente de una renta futura no perpetua. A fines de cuantificar el daño patrimonial por incapacidad p
art. 1.745 Cód. Civ. y Com. de la Nación) las referidas fórmulas se erigen como un parámetro orienta
cuantificar los daños personales por lesiones o incapacidad física o psíquica o por muerte (...) Por consig
la Nación, resulta ineludible identificar la fórmula empleada y las variables consideradas para su ap
justiciable y a las instancias judiciales superiores verificar la existencia de una decisión jurisdiccional sust
en los arts. 3 y 1.746, Cód. Civil y Comercial (arts. 1, 2, 3, 7 y concs. Cod. Civil y Comercial)”.-
No desconozco a quienes objetan la aplicación de fórmulas matemáticas. Dichas objeciones suele
como la razonabilidad, la prudencia y el sentido común- entienden que es preferible que el magistrado s
víctima y consignar directamente un número final representativo de la indemnización debida al acreedo
de qué manera se han sopesado esas variables ni de qué forma el resultado numérico final se infiere
prudencia como virtud y parámetro rector de la decisión judicial para que automáticamente el razonam
menos hasta hace un par de meses atrás, los jueces hemos aplicado para la cuantificación dineraria del
nos da un punto de partida inicial y objetivo que se debe adecuar a las cambiantes circunstancias de
concreto por cada punto de incapacidad; el "calcul au point" implica fijar un valor dinerario por cada pu
variar conforme a las circunstancias de cada caso sujeto a juzgamiento. Pero el problema no sería tanto
casos análogos, fija el punto en 25.000 pesos, otro en 30.000 pesos, otro en 35.000 pesos y otro en 40
pasiva digital, dependiendo del Juzgado. Y es así.-
Como bien dice el colega de la Alzada Marplatense, doctor Monterisi, en causa "Paco Beltrán Ro
¿cómo puedo saber -o cómo pueden saber las partes- si $150.000 es una suma adecuada para indemn
acuerdo con las circunstancias verificadas en autos y no lo es $175.000 o $130.000? ¿Cómo puede la
suma es baja o las demandadas y sus citadas alegar que alta si el juez no explica cómo valoró, sopesó
cuenta a la hora de arribar a ese resultado?.-
El problema lógico de atingencia que subyace a este margen de discrecionalidad es evidente: hay
que es lo mismo- una conexión arbitraria entre las circunstancias de la víctima que el juez dice haber con
Ese salto o vacío argumental (y que hace que el razonamiento falle como tal dado que no es pos
precisamente lo que el uso de las fórmulas pretende evitar dándole a las partes una justificación comple
que en última instancia el deudor deberá pagar al acreedor.-
Así entonces, si de "juzgar realmente las conductas de los hombres" se trata y se pretende "
razonable intentar brindar algún tipo de explicación que dé cuenta realmente de qué manera los magis
específicas que el caso presenta. Parece preferible buscar mecanismos de justificación y motivación
virtudes que creemos deben satisfacer las decisiones adoptadas en cada litigio.-
En la medida en que no se presente un modelo de razonamiento superador, la prudencia judicial
más que como un mero eufemismo con el cual se denomina una forma particular de concebir a una d
dificultades metodológicas para evaluar las múltiples dimensiones que componen la realidad humana y
monto resarcitorio manu militari sin explicar el razonamiento -fáctico, jurídico, moral, económico o d
resultado y no otro.-
Existe un problema metodológico insalvable en el denominado método de la "prudencia judicia
modelo de decisión y de motivación mediante el cual no es posible verificar de qué manera el resultado
modalidad- con las circunstancias que el juzgador dice haber ponderado. Ello significa que no es pos
prudencia o al sentido común acaso satisface las virtudes que ese método o ese parámetro dice promov
efectivamente razonable o adecuado a la prudencia o al sentido común -cuales quiera sean las premisas
Y no quiero decir con ello que el resultado al que se arriba con esa metodología sea per se incorr
cotejado o verificado, y allí radica su problema fundamental. No basta que el operador le achaque discu
(y al resultado que por su intermedio obtiene) sino que es menester analizar si éste último, en los hecho
características y las virtudes que se le adjudican.-
En suma, lo que quiero significar con todo lo anterior es que la utilización de las fórmulas matem
la calidad de la motivación de las decisiones judiciales, reduciendo lo máximo posible el [a veces inevita
cuantificar rubros indemnizatorios.-
No me atrevo a afirmar que efectuado el cálculo conforme las fórmulas matemáticas los resultad
se refleja en la decisión y en los fundamentos que la acompañan es que se han puesto todas las cart
totalidad de las premisas de hecho que han sido tenidas en cuenta (asignándoles su correspondiente val
de manera expresa mediante una operación matemática que se entiende ajustada a la definición concep
puede ser fácilmente verificado, criticado y eventualmente impugnado por las partes en instancias recur
Dicho ello, conforme lo prescribe el art. 1.746 CCC, resulta ineludible identificar la fórmula empl
constituye el mecanismo que permite al justiciable y a las instancias judiciales superiores verificar la exis
los términos de la exigencia consagrada en los arts. 3 y 1.746 del CCC.-
A los fines de descartar la alegación de que las sumas indemnizatorias son excesivas o escasas, y
3, 7, 1.746 y concs. del CCC) señalo que acudiré a las fórmulas polinómicas mediante las cuales pretende
se enuncian de la siguiente manera:
Donde “C” es el capital que se mandará pagar; "A" es la ganancia anual perdida, "n" el número de
"i" el interés anual que se presume devengará el capital mandado a pagar.-
Entre las fórmulas existentes para calcular el valor presente de una renta futura no perpetua
González, “Tratado de daños a las personas. Disminuciones psicofísicas”, Tomo 2, Astrea, 2009, págs. 233
C=a.b
Donde “C” es el monto que se mandará a pagar, “a” significa la disminución patrimonial periódic
resarcir, con las siguientes precisiones: “a” representa la disminución económica mensual x 12 meses (
presentes obrados no se configura en ninguno de los casos particulares de los demandantes), más una ta
Tomando dichos parámetros en consideración, en lo que a este apartado respecta, y a fin
razonabilidad, he de valorar que, tal como fuera previamente traído a colación, la totalidad de los deman
Post Traumatic Stress Disorder (PTSD o Desarrollo Psíquico Post Traumático) siendo en unos
demandante Carmen Concepción Galeano presenta un porcentual de 10% de incapacidad psíquica parc
porcentual de 15% de incapacidad psíquica parcial y permanente.-
Ahora bien, ha dicho la Suprema Corte de Justicia Provincial en causa 119.914, "Aguiar", del 2
recordado en un reciente pronunciamiento referido a la reparación de daños padecidos por una person
que "...tanto el derecho a una reparación integral [...] como el derecho a la integridad de la persona en
enlaza a los dos primeros, se encuentran reconocidos por el plexo convencional incorporado al art. 75 in
Americana de los Derechos y Deberes del Hombre; 3 de la Declaración Universal de Derechos Humano
Internacional de Derechos Civiles y Políticos; Fallos: 335:2333)..." (CSJN causa O.85.L. "Ontiveros, Stella
sent. de 10-VIII-2017, cons. 4°).-
También se precisó que "...el principio de la reparación integral es un principio basal del sist
Constitución Nacional...", y que "...dicha reparación no se logra si el resarcimiento -producto de utilizació
insignificantes en relación con la entidad del daño resarcible (Fallos: 314:729, considerando 40; 316:1949
En esa ocasión, el voto concurrente del doctor Lorenzetti añadió que "...la reparación debe se
ordenamiento, alcance el estándar de una tutela efectiva de la víctima frente al daño injustamente s
reparación, represente una extensión congruente con la entidad del perjuicio acreditado (doctrina de
335:2333, considerando 20, entre otros)...".-
El aludido voto precisó que "...este principio de la reparación plena -ahora recogido expresame
también tenía suficiente y consolidado reconocimiento al amparo del código derogado, aplicable a la esp
Advirtió por último que los criterios interpretativos expuestos "...han sido recogidos por el legisla
Nación, que aun cuando no se apliquen al caso de autos, condensan los parámetros ya aceptados por la
A su vez, nuestro Superior Tribunal Provincial, recientemente en causa 122.532, "Papalia”, del 29
luz de tales precisiones no es ocioso recordar que recogiendo una distinción con sólida raigambre en n
"deudas de valor" (CSJN causas "Agua y Energía Eléctrica S.E.", Fallos: 326:2329, "Adela de la Cruz de Ses
Ac. 58.663, "Díaz", sent. de 13-II-1996; Ac. 60.168, "Venialgo", sent. de 28-X-1997 y C. 59.337, "Quirog
Nación establece de manera expresa en el art. 772 las reglas aplicables a la justipreciación de estas últim
consiste en cierto valor, el monto resultante debe referirse al valor real al momento que corresponda
expresada en una moneda sin curso legal que sea usada habitualmente en el tráfico. Una vez que el valo
Sección".-
Al remitir al "valor real al momento que corresponda tomar en cuenta para la evaluación de la de
para la determinación de créditos como el debatido en la especie-, el criterio del "realismo económico",
jurisprudencial imperante (v.gr. arts. 1 de la ley 24.283; 8 del dec. 214/02 y 11 de la ley 25.561 -texto
"Segovia", Fallos: 317:836, "Román Benítez", Fallos: 317:989, "Escobar", Fallos: 319:2420).-
Es por ello, que a fin de no apartarme injustificadamente de los aludidos principios que informan
respetando el principio de "reparación plena", determinaré la base salarial a valores actuales para
naturaleza del crédito en cuestión -consistente en la contrafase de una deuda de valor- y a las reglas que
Por un lado, Carmen Concepción Galeano, contaba con 48 años de edad cuando acaeció el sinie
mensuales.-
Ahora bien, en este tópico, respecto a la labor de ama de casa desempeñada por la referida coa
ámbito laboral, en el sentido que permite obtener réditos dinerarios o a la que se despliega a cambio
genera bienes de consumo o los medios económicos para adquirirlos, sino también quien brinda servicio
su trascendencia social.-
Entiendo que tiene innegable valor económico la actividad doméstica que se cumple en interés
materiales que requieren atender al hogar, como por la organización familiar y de su economía.-
Dicha dedicación entraña un quehacer productivo, un trabajo como cualquier otro, y es instrum
remunere ni sea directamente traducible en específico ingreso dinerario. La administración del hogar y la
convivientes significan una verdadera empresa, cuyas ventajas –materiales y morales- son evidentes,
directo. En este sentido, se ha expedido la Sala M de la Excelentísima Cámara Nacional de Apelaciones e
la víctima no puede equipararse al supuesto del trabajador desocupado o en paro. Por el contrario, el tr
un valor económico propio, además de producir beneficios patrimoniales indirectamente, al permitir q
directa del salario del grupo familiar. Así, la privación o perturbación disvaliosa de tales aptitudes
ocasionando un perjuicio susceptible de apreciación pecuniaria, que debe computarse dentro de la inca
JA, 2001-543- n°432).-
La actividad de ama de casa representa un significativo plus por sobre la simple realización de t
ilimitado y sin períodos de descanso.-
Ahora bien, sentado ello, corresponde indemnizar a la ama de casa por la incapacidad laborativa
cuantificar, por lo que entiendo que corresponde tomar como parámetro para la indemnización, el S
asciende a la suma de veintiún mil seiscientos pesos -$ 24.408- (cfr. Consejo Nacional del Empleo, la P
4/2021).-
Finalmente, Adolfo Contreras al momento del hecho contaba con 44 años de edad, desempeñán
de su hijo, siendo pensionado desde el año 2009 por incapacidad (ver fs. 32/34).-
Debo dejar en claro que la pensión que percibe, no excluye la indemnización que pudiere cor
derecho que se adquiere por otra vía y por otra prestación y no funciona como sucedáneo de la indem
pues sería lo mismo una jubilada pensionada con plena salud, que una jubilada pensionada con incapa
sino a la razonable y posible obtención de bienes.-
Si bien ello constituye un dato a ponderar, no constituye motivo para desestimar la indemnizac
psicofísica de la persona, que debe tutelarse razonablemente (arts. 75 Inc. “22”, Constitución Nacional y
Ello así, no tomaré el monto de su jubilación y pensión para cuantificar su daño, sino como refere
fecha ($ 24.408, cfr. Res. N° 4/2021).-
Establecido todo ello, el período resarcitorio en el presente caso, para los reclamantes result
para Carmen Concepción Galeano cifra ésta que arroja un coeficiente computable de 10,477; y de 21
arroja un coeficiente de 11,764.- (cfr. la tabla de coeficientes de pág. 243/244, Zavala de González, ob. ci
En lo que respecta al componente “a” de la misma cabe efectuar dicho cálculo en base a lo siguie
Así pues, en lo que respecta a la demandante Carmen Concepción Galeano, éste da un ingreso c
el 10% -de incapacidad psicológica- x 12 meses -debido a que no trabaja en relación de dependencia y
aguinaldo- = $ 29.289,60) + el 6 % ($ 1757,37) = $ 31.046,97. De modo que la fórmula simple pa
325.061,83 de daño patrimonial a favor de dicha accionante por el presente rubro.-
Por su lado, Adolfo Contreras, da un ingreso de $ 46.570,46 (que surge de: $ 24.408 calculando
no trabaja en relación de dependencia- = $ 43.934,40) + el 6 % ($ 2.636,06) = $ 46.570,46). Por lo tant
11,764, lo que da $ 547.668,65 de daño patrimonial a su favor.-
También puede recurrirse a las ya clásicas fórmulas “Vuotto” y “Méndez”; fórmulas que, si bien
laboral, también son fórmulas de cálculo del valor actual de una renta futura no perpetua y en consecu
para calcular la presente indemnización.-
La denominada fórmula “Vuotto” (“Vuotto, D. y otro c/ A.E.G. Telefunken Argentina SAIC”, Cám
caracteriza por utilizar un ingreso anual constante, una tasa de descuento del 6% y fijar en 65 años la
ingresos (Para el caso de María Selva Ledesma, conforme ut supra fuere expuesto, la fijaré hasta los 80 a
Teniendo en cuenta dichas pautas, y efectuando un cálculo individualizado -acorde los paráme
conforme la fórmula Vuotto sería el siguiente: $ 306.874,75 a favor de la demandante María Concepción
La fórmula descripta anteriormente fue modificada por la denominada “Méndez” (“Méndez, A
Cámara Nacional del Trabajo, Sala III), que introdujo cambios: el ingreso se recompuso mediante del sig
de hecho se multiplica por el porcentaje de incapacidad psico-física sufrida y por un coeficiente de ajust
del hecho y se multiplica por trece meses, para obtener el ingreso anual (en el caso de autos, en am
motivos ya indicados); la tasa de descuento se fija en el 4% y la edad jubilatoria de la víctima se eleva a lo
Acorde la fórmula “Méndez”, la indemnización por daño patrimonial sería la siguiente: $ 383.59
704.792,25 a favor de Adolfo Contreras.-
Sin perjuicio de ello, conforme fuera previamente traído a colación, los criterios objetivos de cua
para compatibilizar los meros resultados matemáticos con el arbitrio y la ponderación de las circunstanci
En esta materia tiene dicho la Casación local mediante el voto del recordado maestro Dr. de Lázz
jueces deben individualizar y ponderar los elementos de juicio que sirven de base a su decisión, a
razonabilidad de lo resuelto” (SCBA, Ac.94556, 07/04/2010, “Schmidt, José Alberto c/ S.A.E.S. Línea 5 s/
B. c/ Durisotti Rodolfo. Daños y Perjuicios”).-
Observo que, al momento de demandar, los accionantes sujetaron la tasación de su reclamo resa
ofrecerse en autos (ver fs. 38/39). Y más allá de lo usual que resulta esta fórmula a efectos de prevenir f
que se plantea la pretensión, lo cierto es que las características de un rubro resarcitorio como el present
indemnizar sean elucidados a través de las diligencias probatorias que tendrán lugar en el expediente (ar
Agrégase a ello otro factor que no puede ser soslayado en el caso de autos. El reclamo objeto de
de 2011, esto es, casi 10 años antes de la presente sentencia, ello, bajo el contexto de la significativa m
en todo este lapso, las cuales resultan de público y notorio conocimiento. Por ello, resulta pertinente est
cuanto a que el cálculo de los rubros a la fecha de la sentencia es el que mejor expresa la adecuación d
117.501, “Martínez, Hualter M. c/ González Urquet, Sergio y otros s/ Daños y perjuicios”, conf. doctrin
1998; Ac. 60.168, sent. del 28-X-1997; Ac. 92.667, sent. del 14-IX-2005; C. 99.152, sent. del 5-IV-2013).-
En esas condiciones, apreciando las fórmulas precedentemente aludidas como pauta orientadora
comprobada sufrida por los demandantes a raíz del hecho objeto de marras en conjunción con los da
puesto de manifiesto; y atendiendo a que los actores en su presentación inicial dejaron a salvo el "quan
resultara de la prueba a producirse, cuantifico el presente rubro en concepto de daño por incapacidad
380.000- en favor de Carmen Concepción Galeano; y de seiscientos noventa mil pesos - $ 690.000- en f
y cctes. Cód. Civ. y Comercial; arts. 163 inc. 5, 165, 375, 384, 474 y ccdtes. del CPCC).-
1. 2. Tratamiento psicológico: Habiendo justificado su necesidad la experta desinsaculada en a
cuenta la fecha de la pericia -enero de 2017-, tomando en consideración la suma $1.000 por sesión
profesional en la práctica privada en nuestro medio a valores actuales a la fecha y atendiendo a q
"quantum" de la indemnización sujeta a lo que en más o en menos resultara de la prueba a produci
decisorio, en la suma de cincuenta y dos mil pesos -$52.000- en favor de Carmen Concepcion Galeano
dos mil pesos -$52.000- en favor de Adolfo Contreras (Tratamiento de un año de frecuencia semanal)
Nación; 165, 375, 384, 474 y cdtes. CPCC).-
1.3 Pérdida de chance: Los accionantes incorporan a su pretensión resarcitoria, la pérdida de c
autos que se afirma que han padecido a raíz de la muerte de su hijo (ver fs. 37/39).-
Ahora bien, el hombre es eje y centro de todo el sistema jurídico y en tanto fin en sí mismo -más
constituye valor fundamental con respecto al cual los restantes valores tienen siempre carácter instrume
El principio alterum non laedere configura una regla constitucional de vasto alcance, entrañable
que, si bien constituye la base de la reglamentación que hace el Código Civil y Comercial de la Nación, e
no las arraiga con carácter exclusivo y excluyente en el derecho privado, sino que expresa un principio g
Dra. Highton de Nolasco, CSJN A 2652 XXXVIII “Aquino, Isacio c/ Cargo Servicios Industriales SA” del 21/9
La vida humana no tiene un valor económico en sí misma, sino respecto de terceros y en función
lo que el cese de esa vida puede significar, para ellos, en el área de los perjuicios patrimoniales (merma
aporte personal a emprendimientos personales o conjuntos, etc.) (Cám. Civ. y Com. San Martín, Sala 2, 2
otros s/ Daños y perjuicios”).-
En otras palabras, la supresión de una vida, aparte del desgarramiento del mundo afectivo
patrimonial como proyección secundaria de aquél hecho trascendental; y lo que se mide en signo
consecuencias que sobre otros patrimonios acarrea la brusca interrupción de una actividad creadora, pr
C/Buenos Aires, Provincia de, s/daños y perjuicios).-
Establecido ello, entiendo que los padres pueden reclamar indemnizaciones por la muerte de s
1.745 del Código Civil y Comercial de la Nación, que establece que en caso de muerte, la indemnización
de ayuda futura como consecuencia de la muerte de los hijos.-
Además, tal como reiteradamente ha sostenido el Superior Tribunal Provincial “probada la exis
puede válidamente ejercerse, correspondiendo a los Tribunales de grado, lo relativo a su aplicación" (S.C
Ahora bien, como se reseñara párrafos arriba, la vida humana no tiene por sí un valor pecuniario
un derecho de la personalidad, el más eminente de todos, empero, no obstante la importancia que tien
material o inmaterial susceptible de valor. Sólo tiene valor económico en consideración a lo que produc
de Carretoni, Zunilda Esther c/ Maciel, Mario Alberto s/ Daños y perjuicios”, JA 1992-III, 335 - DJBA
“Nequecaur, María Elida y ot. c/ Cuacci, Alicia Mabel s/ Daños y perjuicios”, A. y S., 1991-I-739; SCBA, A
Rubén Oscar y otros s/ Daños y perjuicios”, DJBA 146, 25).-
Tratándose de la muerte del hijo soltero sin descendientes, la misma implica para el legitimado ac
de contar con una probabilidad cierta de ayuda, al perder toda futura protección, razón por la cual no
desde que es innegable que la ley admite la existencia de un perjuicio cierto que está dentro del orden
1.737 y 671 del Código Civil y Comercial, según lo difunde la doctrina legal de la Suprema Corte Provincia
Así las cosas, la pérdida de un hijo, por sí misma, no importa para sus padres, por lo general, u
pérdida de "chance" o de expectativas de auxilio, más o menos cierta, en el futuro, según las circunsta
cabeza de quienes se dicen afectados por algunas de tales circunstancias (arts. 1.716, 1.737, 1.738, 1.739
y 375 del CPCC).-
Los hijos no son eventuales, sino concretos sostenes; tanto en orden económico, como person
padres; con mayor razón si se trata de gente de humilde condición social debiendo aplicarse el art. 1.745
Ello así, el daño por pérdida de chance u oportunidad de ganancia consiste en que el perjudicad
bien, material o inmaterial. Se trata de la llamada “perte d ‘un chance” definida por la doctrina fran
favorable” o “pérdida de la oportunidad de obtener una ganancia la cual tiene que contemplarse de un
los mismos términos que si el daño no se hubiera producido y el resultado hubiera sido favorable al pe
responsabilidad civil”, dirigido por Fernando Reglero Campos, Aranzadi, Navarra, 2002, p. 78, citado e
Civil, Cuantificación del Daño, 1º ed., La Ley, 2006, pág.85).-
En el reclamo por pérdida de chance el juez debe efectuar un balance de las perspectivas a favo
surgirá la proporción del resarcimiento (De Salvo Venosa, Silvio, Dirito civil, 5º edic., Ed. Atlas, Sâo Paul
de la Responsabilidad Civil, Cuantificación del Daño, 1º ed., La Ley, 2006, pág.85).-
De tal suerte, es la muerte de una persona la que origina el derecho a indemnización a sus hered
por la pérdida de la chance o posibilidad que tenía de percibirlos en un futuro.-
Sobre esta cuestión se ha decidido que es reparable la pérdida de “chance” derivada de la muert
de una legítima esperanza de ayuda, una “chance” cierta de ser apoyados en el futuro, que encuentra su
los hijos el deber de prestar servicios y alimentos a sus padres, ello sin dejar de tener presente la proba
propia persona y la de constituir la propia familia (cfr. arg. López Mesa-Trigo Represas, “Tratado de la
2006, pág. 94/95).-
La Sala Primera de la Excma. Cámara de Apelación del Fuero Departamental, ha tenido oportu
perspectiva económica, tanto preocupa a quienes carecen de un patrimonio solvente y temen, con fu
probabilidad cierta de un apoyo material. Algo así como la devolución a los padres de lo que los hijos re
vida humana”, Rubinzal Culzoni Editores, Santa Fe, 1991, pág.137; Cám. Civ. y Com., Sala I, La Matanza,
Causa Nº1101/1, 27 de marzo de 2008).-
Al respecto, la Sala Segunda de la Excma. Cámara de Apelación del Fuero Departamental, se ha
ocasiona indudablemente un daño material y moral a sus padres, pero su cuantía -según ley vigente y en
que se haya probado. Para establecer esa indemnización se debe entonces la profesión, oficio o empleo d
(edades, status, salud, escolaridad) y todos aquellos datos que sirvan para poder ponderar la ayuda (ac
(Cám. Civ. y Com., Sala II, La Matanza, C.748/2, RSD-6-5, S, 10-3-2005, “Velázquez, Elba Susana c/ Abaste
Ahora bien, tomando todos los parámetros ut supra expuestos en consideración, para cuantificar
Civil y Comercial de la Nación, indica los perjuicios que deben resarcirse. Sin embargo, a diferencia del
indemnizaciones por lesiones o incapacidad, no determina el modo en que deben cuantificarse esos
sistemática de las normas, cabe acudir a las pautas que al efecto brinda el último artículo traído a colació
se desprende de los apartados precedentes.-
Por consiguiente, conforme lo prescribe la mentada fuerte normativa, y en virtud de los fundam
ineludible en el presente rubro identificar la fórmula empleada y las variables consideradas para su apl
mecanismo que permite al justiciable y a las instancias judiciales superiores verificar la existencia de una
de la exigencia consagrada en el Código de fondo (cfr. arts. 3 y 1.746 de dicho cuerpo normativo).-
Por lo tanto, señalo que, tal como fuera efectuado previamente, acudiré a la fórmula polinómic
rubro. Esta es, la que se expresa en los siguientes términos: C = a . b, donde “C” es el monto que se man
sufrida, más un interés y “b” equivale al total de períodos a resarcir, con las siguientes precisiones: “a” re
meses si la víctima cobraba aguinaldo), más una tasa del 6% y “b” el coeficiente de edad.-
Así pues, analizada que fuera la prueba rendida en autos al respecto, surge que Christian Danie
edad y que convivía en una familia de condición humilde, tanto junto a su madre de 48 años de edad
resulta ser ama de casa; su padre quien al momento del hecho contaba con 44 años de edad, era c
invalidez; y sus 6 hermanos. Asimismo, la referida víctima se desempeñaba en tareas de albañilería y se e
Por otro lado, siendo que no se ha podido determinar los ingresos mensuales de Christian Danie
atento su condición de empleado en negro conforme lo indicara el demandado Alen-, a los efectos de de
rubro, tomaré como base al salario mínimo, vital y móvil vigente al día de la fecha, el cual asciende a la
Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil. Resolución N° 4/2021).-
Ahora bien, en base a los datos recientemente expuestos la fórmula simple previamente traída
padres de Christian Daniel Contreras quienes reclaman el presente rubro.-
Respecto a los demandantes, debo poner especial énfasis en la edad de los mismos. Como es sab
años (cfr. https://www.indec.gob.ar/indec/web/Institucional-Indec-IndicadoresDemograficos), y como
hecho contaban con 48 y 44 años.-
En efecto, en el presente caso Carmen Concepción Galeano contaba con 48 años al momento
años que arroja un coeficiente computable de 13,21 -cfr. la tabla de coeficientes de pág. 243/244, ob. c
“b” de la fórmula. Por su parte, Rodolfo Contreras, al momento del hecho contaba con 44 años, por lo
treinta y un años es de 13,92.-
En lo que respecta al ingreso, punto “a” de la referida fórmula, dada la fraternal convivencia
demandantes -madre y padre respectivamente- es lógico presuponer que existía en el ámbito domésti
servicios entre los convivientes que también se tradujera en que las necesidades de la progenitora, adem
de manera compartida por sus descendientes.-
En base a ello, el presente concepto referente al ingreso de la víctima, se conforma para el pres
sus ingresos a la asistencia de su madre y un 10% para la asistencia de su padre (cfr. art. 671 del Código
que se encontraría a la cobertura de sus necesidades personales y eventuales futuras a la constitución de
El ingreso se obtiene entonces restando a $ 24.408 (cfr. Consejo Nacional del Empleo, la Producti
el 80 % destinado a sus necesidades personales ($19.526,40), lo que arroja un disponible de $ 4.881,60
de su madre y otros $2.440 destinados a la asistencia de su padre.-
Por ende, el componente “a” de la fórmula para Carmen Concepción Galeano da un ingreso comp
que no se encuentra acreditado que la víctima trabajaba en relación de dependencia y por lo tanto no
29.280) + el 6% ($ 1.756,80) = $ 31.036,80. De modo que la fórmula simple para el caso de Carm
da $ 409.996,12 de daño patrimonial para la madre del fallecido.-
En relación al otro coaccionante, el componente “a” de la fórmula para Adolfo Contreras da un
meses -debido a que no se encuentra acreditado que la víctima trabajaba en relación de dependencia y
aguinaldo- = $ 29.280) + el 6% ($ 1.756,80) = $ 31.036,80. De modo que la fórmula simple para el
da $ 432.032,25 de daño patrimonial para el padre del fallecido.-
En esas condiciones, apreciando la fórmula precedentemente aludida como pauta orientadora,
de la víctima del accidente de marras, las de los reclamantes del presente rubro, la condición familiar de
y familiares reseñadas, que en todo caso se meritua en función también de éstos proveedores de asist
autos “De Sousa C/Provincia de Buenos Aires S/Daños y Perjuicios", Nº1101/1, del 27 de marzo de 2008)
mil pesos -$ 410.000- en favor de Carmen Concepción Galeano; y de cuatrocientos treinta y cinco mil p
671, 1.716, 1.727, 1.740, 1.746 y cctes. Cód. Civ. y Comercial; arts. 163 inc. 5, 165, 375, 384, 474 y ccdtes
1.4. Gastos de Sepelio.
Los gastos de sepelio constituyen un gasto necesario producto del delito de homicidio (art.1084
mera acreditación de la muerte, como así también los gastos de servicio fúnebre e inhumación de los res
En este sentido, establece el artículo 1745 del Código Civil y Comercial que “En caso de muerte, la
asistencia y posterior funeral de la víctima. El derecho a repetirlos incumbe a quien los paga, aunque sea
Dicho ello, en autos se encuentra probado que por el fallecimiento de Christian Daniel Contrera
probatorias se desprende que las erogaciones dinerarias a tal fin fueron efectuadas por Nancy Contreras
23/31-. En mérito a todo ello, entiendo que corresponde el rechazo del presente rubro. (art. 1745 del Có
2. Daño a la persona extrapatrimonial:
El daño moral, en el Código Civil y Comercial está emparentado con los daños que tienen por ob
violación de las afecciones espirituales legítimas, violación de los derechos personalísimos, interferencia
colocan dentro de las consecuencias no patrimoniales (art. 1.741 del CCC) indemnizables en dinero y e
compensatorias que pueden otorgar esas sumas de dinero (art. 1.741 del CCC, última parte).-
Sabido es que tiene por objeto indemnizar el quebranto que supone la privación o disminución de
personas y que son la paz, la tranquilidad de espíritu, la libertad individual, la integridad física, el hon
específica alguna en cuanto ha de tenérselo por demostrado por el solo hecho de la acción antijurídica y
 La Corte Nacional en la causa “Baeza” receptó la posición doctrinal y jurisprudencial que califica
que para su cuantificación puede acudirse al dinero y a otros bienes materiales como medio para obten
extrapatrimonial o moral sufrido. (C.S., 12/04/2011 “Baeza, Silvia Ofelia c. Buenos Aires, Provincia de y
259). “Se trata -sostuvo- de compensar, en la medida posible, un daño consumado...El dinero es u
restablecer el equilibrio en los bienes extrapatrimoniales”. Este parámetro interpretativo es hoy recogido
Ello, considerando -conforme lo expone claramente Jorge Galdós al explicar que son las satisfa
Luis, Director; Código Civil y Comercial de La Nación, Comentado, Ed. Rubinzal Culzoni, 1°ed., 2015, Tom
consuelo” que procura “la mitigación del dolor de la víctima a través de bienes deleitables que co
proporcionarle a la víctima recursos aptos para menguar el detrimento causado”, de permitirle “acced
bienes idóneos para consolarlo, o sea para proporcionarle alegría, gozo, alivio, descanso de la pena.-
Esta modalidad de reparación del daño no patrimonial atiende a la idoneidad del dinero para c
patrimonial mediante cosas, bienes, distracciones, actividades, etcétera, que le permitan a la víctima “o
equilibrio en los bienes extrapatrimoniales”.-
El monto de la reparación por el daño moral debe medirse según los padecimientos psico-físi
molestias e inquietudes por él provocadas.-
Ahora bien, en lo que hace al caso de autos, conforme se hubiera expedido la Sala I de la Exma.
otra C/ Transportes Perretta Hnos. y otra S/ Daños y Perjuicios", Causa Nro.465/1, "a los fines de la c
ponderarse las amarguras, los sufrimientos por la desaparición irremediable, la desdicha por la muerte t
dinámica de los hechos, la frustración de su presencia diaria y de la compañía insustituible que para los
II, Morón, RSD-231-94 S 30-6-1994, "Constanzo del Vidio y otra c/ Empresa del Oeste S.A. s/ Daños y Perj
Más aún, se ha destacado que "cuando se trata de la muerte de un hijo, el daño moral no req
demostrado por el solo hecho de la acción antijurídica - prueba in re ipsa - y es al responsable del h
situación objetiva que excluya la posibilidad de un dolor moral" (SCBA, Ac. 67843 S 5-10-1999, voto Dr
Daños y Perjuicios").-
De manera que "es incuestionable la lesión que las legítimas afecciones y el consiguiente daño m
naturaleza crea un entrañable nexo biológico y espiritual entre padres e hijos y es también conforme a
progenitores y, por tanto, a acompañarlos moral y materialmente hasta el fin de sus días. Depositario
proyección espiritual de los padres, el centro de los más hondos afectos y lo mejor que no puede dejar e
S, 14-4-1998, "Rey, Jorge y otra c/ Cabrera, Alberto y otros s/ Daños y Perjuicios").-
Por otro lado, resulta prudente señalar que el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación, hac
doctrinarios y jurisprudenciales que calificaba a la legitimación acotada del artículo 1078 del Código dero
debida tutela resarcitoria a todas las afecciones legítimas conculcadas, que pudieran invocar los allegado
siempre y cuando se cumplieran los requisitos comunes a todo daño resarcible, en especial, su cer
Resarcimiento de daños, 2ª, Daños a las personas, Integridad sicofísica, 2da. Ed., Hammurabi, pág.658);
de autos- o de gran incapacidad, la legitimación a título personal, para reclamar la indemnización d
ascendientes, los descendientes, el cónyuge y quienes convivían con aquél recibiendo trato familiar
Nación).-
Ahora bien, la explicitación de las pautas fácticas apreciadas para cuantificar es primordial para a
revisión por las instancias superiores. Tiene dicho la Casación local mediante voto del doctor de Lázza
jueces deben individualizar y ponderar los elementos de juicio que sirven de base a su decisión, a
razonabilidad de lo resuelto”. (S.C.B.A., Ac.94556, 07/04/2010, “Schmidt, José Alberto c. S.A.E.S. Línea 5
“V., N.B. c. Durisotti Rodolfo. Daños y Perjuicios”).-
En autos está suficientemente corroborada y robustecida la presunción de daño moral de lo
provocados por el hecho ilícito y que afecta la estructura representada por sus pensamientos, emocione
En suma, el rubro daño no patrimonial indemnizable es el comprensivo de todos los detrim
aflicciones, los pensamientos y las emociones y sentimientos negativos o que provocan malestar grave; a
En efecto, por un lado, conforme se desprende de las constancias de autos que previamente fue
siniestro de marras, es evidente que ha producido una lesión en la esfera afectiva, espiritual y de relació
presencia, afecto, cariño, y compañía.-
En otras palabras, la familia experimenta una desorganización que atenta contra el deber recípro
Código Civil y Comercial de la Nación) y sus efectos también se proyectan a la esfera moral.-
Así las cosas, es evidente que el dolor de los progenitores no puede estimarse, motivo por el cua
las legítimas afecciones ya mencionadas, teniendo en cuenta la forma en que ha fallecido
mampostería-, considerando las satisfacciones sustitutivas y compensatorias que pueden procurar las s
consecuencia del evento dañoso; demás circunstancias sociales, económicas y familiares reseñadas; de
víctima ha alterado sensiblemente los valores comprendidos en la esfera moral para los reclamantes, y
CPCC, cuantifico el presente rubro en concepto de daño extrapatrimonial a la fecha de la presente sent
de Carmen Concepción Galeano y de un millón de pesos -$1.000.000- en favor de Adolfo Contreras (ar
Com.; arts. 163 inc. 5, 165, 375, 384, 474 y ccdtes. del CPCC).-
Noveno: El monto total de condena. Intereses.
En síntesis, la demanda prospera por el importe de un millón ochocientos cuarenta y dos mil p
por el de dos millones ciento setenta y siete mil pesos -$ 2.177.000- en favor de Adolfo Contreras; total
pesos -$ 4.019.000.-
En orden a la tasa de interés aplicable, siendo que el presente monto indemnizatorio ha sido
coeficientes para ello, corresponde aplicar el denominado interés puro a fin de evitar distorsiones en
cómputo de los intereses la alícuota del 6% anual, la que corresponderá sea impuesta al crédito indem
enero de 2008 -, momento en que nace la obligación de resarcir el perjuicio causado, (arts. 724, 726, 886
la fecha, momento tenido en cuenta para la evaluación de la deuda (art. 772 del CCC); (SCBA, causas “V
sent. de 03-05-2018); de allí en más y hasta el efectivo pago, a la tasa pasiva más alta fijada por el Ban
(30) días, -vigente al inicio de cada uno de los períodos comprendidos y, por aquellos días que no alcance
igual tasa-. (art. 768, Inc. “c”, 772 y 1.748 del Código Civil y Comercial de la Nación); (SCBA, “Cabrera”
2018; “Nidera”, C. 121.134, sent. de 03-05-2018).-
Por ello y tomando en cuenta asimismo el criterio de la SCBA los intereses deben calcularse de la
Décimo: Las costas.
La vigencia del principio objetivo de la derrota impone que las costas de la acción resarcito
perdidosos (arts. 68, 1º parte y 2º parte, y 163 inc. 8vo. del Cód. Proc.).-
Los honorarios de los profesionales intervinientes serán regulados a su debido momento, así com
justicia (art. 51 de la ley 14.967; art. 295 del Código Fiscal).-
En orden a lo reglado por el art. 163 inc.7º del ritual, entiendo adecuado fijar en diez días co
cumplimiento.-
En virtud de lo precedentemente expuesto, jurisprudencia y normativa citada;
FALLO:
Rechazar la excepción de prescripción interpuesta por Fabián Reinaldo Alen.-
Rechazar la demanda promovida por Adolfo Contreras y Carmen Concepción Galeano contra José
 Hacer lugar parcialmente a la demanda promovida por Adolfo Contreras y Carmen Concepción Ga
En consecuencia, condeno a Reinaldo Fabián Alen y Luís Ángel Celiz a abonar a Carmen Concepc
mil pesos -$1.842.000- y a Adolfo Contreras la suma de dos millones ciento setenta y siete mil pesos
precedentemente, dentro del plazo de diez días de quedar firme la liquidación que al efecto deberá pra
de cosa juzgada, bajo apercibimiento de ejecución.-
Imponer las costas de la excepción interpuesta al codemandado Fabián Reinaldo Alen; y las del
vencido, y respecto a los codemandados Alen y Celiz, a los mismos por resultar vencidos; ello, conforme
Diferir la regulación de honorarios de los letrados y demás profesionales intervinientes para el mo
Regístrese, notifíquese de oficio por medios electrónicos (conf. art. 1 acápite 3 “c”, resol. Presiden
20134066327@notificaciones.scba.gov.ar (ACTORES CONTRERAS y GALEANO)
23260382934@notificaciones.scba.gov.ar (CODEMANDADO ALEN)
23147512384@notificaciones.scba.gov.ar (CODEMANDADO BARCALA)

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SOHANER Mariano Gaston

JUEZ