UNIVERSIDAD CESAR VALLEJO

ESCUELA DE POSTGRADO
FACULTAD DE DERECHO

MAESTRÍA EN DERECHO PENAL

Y PROCESAL PENAL

TEMA:

LA FINALIDAD TELEOLÓGICA DE LAS MEDIDAS CAUTELARES

AUTORA:

ENCINAS CHÁVEZ, Maricielo

CURSO:

Medidas Ciercitivas

ASESOR:

Edhin Campos Barranzuela

NUEVO CHIMBOTE
PERÚ - 2023
I. INTRODUCCIÓN

En el presente trabajo de investigación, se pretende analizar las medidas

cautelares y sobre todo desarrollar su finalidad teleológica, la cual radica

asegurar el cumplimiento de la pena, la ejecución de la sentencia y la

reparación del daño.

Sin embargo es importante destacar que en nuestro ordenamiento legal, las

medidas cautelares se encuentran dispersas en diversas normas, sin que

exista una preceptiva que se encargue de regularlas en su conjunto, esta

dispersión ha generado que sean aplicadas algunas veces de manera

arbitraria y desproporcionada, lo cual vulnera los derechos de los

imputados.

Por tanto, es necesario que el Código Procesal Penal del Perú contemple una

normativa específica para regular las medidas cautelares, de forma que sean

aplicadas de manera proporcional, y que estas cumplan cabalmente con su

finalidad teleológica.

Finalmente, es importante destacar que el Código Procesal Penal del Perú

debe contar con una normativa específica para la aplicación de medidas

cautelares, con el fin de garantizar que sean aplicadas de manera

proporcional y adecuada, y de acuerdo con los principios y criterios

generales establecidos. Esto es de vital importancia para asegurar el debido

proceso y los derechos humanos de los imputados.

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II. DESARROLLO

1. LAS MEDIDAS CAUTELARES EN EL PROCESO PENAL Y SU FINALIDAD

TELEOLÓGICA

1.1. MEDIDAS CAUTELARES

Las medidas cautelares en nuestra legislación se encuentra tipificado tanto en el Código

Procesal Civil y en el Código procesal Penal, siendo en este que se le denomina medidas de

coerción procesal.

En cuanto a una definición, no existe solo una de esta figura jurídica, para uno de los

principales juristas desarrolladores de la figura jurídica de las medidas cautelares, Calamdrei

(1945) las medidas cautelares son la anticipación provisoria de ciertos efectos de la

providencia definitiva, encaminada a prevenir el daño que se podría derivar del resultado de

la misma.

Por su parte, Jorquera (1997) manifiesta que las medidas cautelares son actos tendientes a

garantizar el cumplimiento de los fines planteados por la demanda, en otras palabras, las

medidas cautelares son los actos procesales que establece el tribunal para garantizar que se

tomen las medidas necesarias para proteger los intereses de las partes involucradas en un

proceso legal o para asegurar el resultado de una acción judicial.

Velásquez (2019) asevera que se las medidas cautelares dictadas son las dictadas por las

autoridades judiciales competentes para asegurar la efectividad de las sentencias o decisiones

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que se profieran en un proceso, sean éstos cognitorios, de ejecución no contencioso o penal.

Estas medidas persiguen la protección de los derechos que se reconocerán en el proceso, y

varían según el ámbito jurisdiccional en el que se dicten, teniendo, además, la cualidad de

servir como mecanismo de prueba en casos concretos.

Ahora bien, en materia penal, las medidas cautelares son aquellas decididas por resoluciones

judiciales con miras a asegurar, proteger y anticipar la eficacia de la sentencia estimatoria que

pueda dictarse en el procedimiento principal, para que el derecho en cuestión pueda ser hecho

efectivo en un litigio en el que se constate su existencia y válidez. Estas medidas cautelares

no suponen una sentencia previa, pero sí la imposición de medidas judiciales con el fin de

hacer efectivo dicho derecho una vez que sea reconocido por el proceso.

Es por ello que el profesor Vélez (1946) consideró que la coerción personal del imputado, es

la restricción o limitación que se impone a su libertad para asegurar la consecución de los

fines del proceso: la averiguación de la verdad y la actuación de la ley penal.

1.2. PRESUPUESTOS PARA SU PROCEDENCIA

Para Velásquez (2019) estos presupuestos son dos:

1) EL FUMUS DELICTI COMISSI

Consiste en la existencia de indicios racionales de criminalidad, lo que comúnmente

conocemos como la apariencia y justificación del derecho subjetivo, que en el proceso penal

significa “una razonada atribución del hecho punible a una persona determinada”, el cual es

concordante con el artículo 303.3 del NCPP, aun cuando se refiere solo al embargo y, por

extensión expresa, a la orden de inhibición. (Velásquez, 2019).

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El fumus commissi delicti es fundamento suficientemente fiable para desarrollar la actividad

judicial relacionada con el proceso penal, pues indica la existencia de razones suficientes para

llevar a cabo una investigación o actuación con respecto a la comisión de un presunto delito.

Estas razones deben ser razonables y creíbles ante la justicia. Estas razones pueden estar

basadas en indicios racionales tales como testimonios, documentación, recibos, comprobantes

y otros. Además, se deben considerar todos los elementos de prueba con el fin de acreditar

que hay motivo para sospechar de la comisión de un delito; también incluye la imputación, la

cual es el acto de atribuir el presunto delito a un sujeto determinado. Esta información debe

ser valorada por el tribunal al momento de dictar una sentencia condenatoria.

2) PERICULUM IN MORA

De conformidad con Rocco (1997), el periculum refiere no sólo a la amenaza de dilación en

la providencia definitiva, sino que implica la eventualidad de que se produzca, del transcurrir

del lapso de tiempo requerido para que los bienes tutelados por el derecho sean preservados

mediante la actuación jurisdiccional, una situación motivada tanto por actos naturales como

por actos de la voluntad humana la cual elimine o limite los referidos bienes, reduciendo así

al impracticable o dificultando su defensa a través de los órganos jurisdiccionales.

Asimismo, Velasquez (2019) señala que periculum in mora, es el peligro o daño jurídico

derivado del retardo del procedimiento. Se requiere demostrar el riesgo tangible de que

ocurran circunstancias que impidan o dificulten la plenitud de efectividad del procedimiento

penal y civil de condena encaminado a hacer efectiva la tutela judicial pedida en la causa

principal, generando una amenaza a la ineficacia del fallo, presunción de infructuosidad.

Esto ocurre cuando sucede una situación de amenaza a la integridad física o patrimonial del

afectado o directamente al sentenciado. Asimismo podría ocurrir también que, sin actos

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violatorios de una ley, la demora en el proceso pueda generar circunstancias que hacen

presumir que sea infructuosa la tutela penal, porque, poseyendo el afectado o el sentenciado

un bien jurídico de dinero, se lo hallare desvalorizado o haya desaparecido.

1.3. CLASES DE MEDIDAS CAUTELARES

1.3.1. MEDIDAS CAUTELARES PERSONALES

Flores (2013) sostiene que las medidas cautelares personales tienen por objeto asegurar la

presencia del inculpado en todas las fases del proceso y, singularmente, en la de juicio oral,

así como en la eventual de ejecución de la pena impuesta, lo que se logra mediante la

restricción, más o menos intensa, de su libertad

En el ámbito jurídico, las medidas cautelares de carácter personal son aquellas medidas

impuestas por la autoridad judicial con el propósito de asegurar la comparecencia del

imputado al juicio y evitar que obstaculice el avance de la instrucción, así como también

impedir que el procesado ejerza presión sobre la víctima o le cause más daño.

Es por ello, que para proteger los derechos de las víctimas, la limitación de ciertas libertades

del investigado están destinados para garantizar la obtención de pruebas en el proceso penal,

por lo que en la práctica es común limitar la libertad de tránsito mediante la imposición de

prisión preventiva o medidas cautelares sustitutivas a fin de preservar el resultado de la

investigación. Por lo tanto, el proceso penal establece mecanismos para restringir la libre

voluntad del investigado, limitando sus derechos para proteger los derechos de la víctima,

garantizando así el adecuado desarrollo del proceso judicial. Según el NCPP estas medidas

son:

a) La detención (artículo 261°)

b) La prisión preventiva (artículo 268°)

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 c) La comparecencia (artículo 286°)
d) La internación preventiva (artículo 293°)
e) El impedimento de salida (artículo 295°)
f) La suspensión preventiva de derechos. (artículo 297°)

1.3.2. MEDIDAS CAUTELARES REALES

Velásquez (2019) señala que la coerción procesal es real cuando el conjunto de medidas que

la integran recaen sobre objetos materiales (derechos reales de los involucrados en un

proceso penal, o sobre los objetos vinculados al proceso), afectan elementos probatorios

distintos de la persona misma, o bienes del imputado o de terceros, para asegurar la prueba

material o la responsabilidad pecuniaria (multa, reparación civil, costas, consecuencias

accesorias) ante la eventualidad de una condena.

La imposición de medidas coercitivas procesales es una forma de garantizar la eficacia de la

ejecución de la sentencia establecida en el marco legal. Esto se hace para garantizar que se

apliquen correctamente las sanciones establecidas y para prevenir la defraudación de los

sentenciados a cumplir con sus obligaciones con el Estado, asimismo, puede servir de medio

para la recuperación de bienes apropiados indebidamente y para aumentar la eficacia de la

recuperación de las sumas de dinero debidas a los acreedores afectados por estas violaciones.

Por tanto, se entiende que las medidas cautelares reales son aquellas que el Estado establece

para asegurar la satisfacción de las potenciales obligaciones económicas derivadas de un

proceso penal, las mismas que consisten en la conservación de los instrumentos del delito y el

aseguramiento de las responsabilidades pecuniarias del sujeto investigado. Estas medidas

tienen como objetivo evitar el enriquecimiento ilícito del procesado y garantizar que en caso

de condena se cumpla la sentencia.

Es por ello que, el NCPP ha establecido cuales son las principales medidas cautelares reales:

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 a) El embargo (Artículos 302° al 309°)

b) La orden de inhibición (Artículo 310°)

c) El desalojo preventivo (Artículo 311°)

d) Medidas anticipadas (Artículo 312°)

e) Medidas preventivas contra personas jurídicas. (Artículo 313°)

f) Pensión anticipada de alimentos. (Artículos 314°)

g) La incautación. (Artículos 316° y 317°)

1.4. FINALIDAD TELEOLÓGICA

Marín (2005) manifiesta que la finalidad fundamental de las medidas cautelares es la de

asegurar en forma anticipada y en menor tiempo, la eficacia de la decisión final en la

sentencia.

Las medidas cautelares pueden limitar los derechos de una persona y se utilizan en diferentes

jurisdicciones para mantener intactos los casos y evitar la inseguridad jurídica, estas

restricciones se dan al acusado durante las audiencias públicas y tienen por objeto garantizar

que el acusado esté presente durante el juicio. Las medidas tomadas bajo circunstancias

especiales y entre las partes que, por cualquier motivo, no participarían voluntariamente en el

litigio, también se toman para asegurar que las partes tengan igualdad de oportunidades para

utilizar sus derechos y que el proceso de litigio transcurra sin contratiempos. Es decir que

objetivo final de las medidas se toman para asegurar el resultado final del caso y para evitar

cualquier inseguridad jurídica.

En conclusión, las medidas cautelares tienen la finalidad principal de asegurar, de forma

anticipada y rápida, la eficacia de la sentencia. Estas restricciones se toman para garantizar

que el acusado cumpla con todos los requerimientos establecidos en el proceso legal, así

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como para asegurar a las partes una igualdad de condiciones y oportunidades para utilizar sus

derechos para un desenlace exitoso del litigio.

III. CONCLUSIONES

En el Código Procesal Penal en materia de medidas cautelares carece de regulación clara para

la imposición de estas, debido a lo cual su eficacia como herramienta para el logro de la

sentencia penal queda bastante comprometida, es necesario que se regulen adecuadamente

estas medidas, así como los procedimientos específicos para su imposición, con el fin de

lograr una mayor eficacia en la imposición de las sentencias penales.

Sin embargo podemos sostener que las medidas cautelares son aquellas previsiones

establecidas con el fin de preservar el bien jurídico o de prevenir un daño o un perjuicio que

se pueden producir mediante la perpetración de un acto delictivo. Estas medidas pueden ser

dispuestas durante el proceso sin que medie procedimiento previo, o por resolución judicial

que aprecie los índices de peligrosidad que existen.

Su finalidad teleológica es el mantenimiento de la estabilidad jurídica, previniendo daños o

perjuicios, que se logra con la imposición de restricciones temporales al ejercicio de derechos

y libertades, de modo que el interés de la víctima sea preservado y que el efectivo

cumplimiento de la sentencia sea asegurado.

Por lo tanto, el Código Procesal Penal necesita que se regulen adecuadamente las medidas

cautelares, así como los procedimientos específicos para su imposición para lograr una mayor

eficacia en la imposición de la sentencia penal. Esto se debe a que las medidas cautelares

sirven como una herramienta para lograr una sentencia justa y efectiva al preservar el interés

de la víctima y evitar potenciales daños y perjuicios.

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BIBLIOGRAFÍA

Calamandrei, P. (1945) Introducción al estudio sistemático de las providencias cautelares.

Traducido por Sentís Melendo. Editorial Ad Hoc, Argentina.

Flores, J. (2013) Medidas cautelares personales, Tema 13, Procesal Penal. Tirant lo Blanch.

Jorquera, R. (1997) Síntesis de Derecho Procesal Civil, 1° Ed. Ediciones Jurídicas La Ley.

Marín, J. (2005) Las medidas cautelares personales en el nuevo código procesal penal

chileno. Editorial Jurídica de Chile, Santiago

Rocco, U. (1977) Tratado de Derecho Procesal Civil, Tomo V, Parte Especial, Proceso

Cautelar. Editorial Depalma, Bogota.

Velásquez, M. (2019) Las medidas cautelares reales civiles en el Código Procesal Penal del

Perú, Vol. 10, N° 12. Revista Oficial del Poder Judicial, Órgano de investigación

de la corte suprema de justicia de la república del Perú.

Vélez, A (1986) Derecho Procesal Penal, tomo II, Ed. Marcos Lerner Editora Córdoba SRL.