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DIAGNOSTICO ETIOLOGICO:

En la etiología, hay que destacar que los microorganismos causantes de un proceso infeccioso
como neumonía, meningitis, enteritis y otros pueden variar según la edad del paciente, la
época del año, la profesión, el área geográfica y en las infecciones oportunistas dependiendo
de los factores predisponentes.

SOLICITUD DE ANALISIS:

Entre los factores cruciales de esta etapa, hay que señalar la obtención de la muestra en las
condiciones apropiadas según las especificaciones del laboratorio, la exposición a agentes
infecciosos o viajes a áreas endémicas.

 Además, es importante que la muestra esté correctamente etiquetada para evitar


errores de identificación.

 Una vez obtenida la muestra, es fundamental su transporte y conservación adecuada


para garantizar la integridad de la misma.

 La muestra debe ser transportada en condiciones óptimas para evitar su deterioro o


contaminación. Esto implica utilizar recipientes adecuados, como tubos estériles, y
mantener la muestra a la temperatura adecuada, ya sea refrigerada o congelada, según
las indicaciones del laboratorio.

 Asimismo, la información clínica sobre el paciente es fundamental para el diagnóstico,


En la solicitud debe figurar claramente el nombre del médico que la ha efectuado y su
teléfono para poder consultarle o informarle personalmente cuando sea necesario.

 Por último, es necesario tener en cuenta que la toma de muestras debe seguir
principios específicos.

 La muestra debe ser representativa del tejido infectado, preferiblemente del margen
activo de la lesión, para obtener resultados más precisos.

 Además, la cantidad de muestra debe ser suficiente para realizar todas las pruebas
necesarias.

 Es importante minimizar la contaminación por flora comensal, utilizando técnicas


adecuadas de recolección (como el uso de escobillones) y tomando medidas para
reducir al mínimo la exposición al aire y a otros contaminantes.
 Finalmente, es esencial que la muestra llegue al laboratorio lo más rápido posible y en
condiciones adecuadas, siguiendo las indicaciones de transporte establecidas.

 En resumen, la fase previa en un proceso analítico es fundamental para obtener


resultados de calidad. Es necesario prestar atención a la obtención de la muestra,
asegurándose de que sea representativa y suficiente, así como de su correcta
rotulación. Además, es crucial garantizar el transporte y conservación adecuada de la
muestra, utilizando recipientes adecuados y manteniéndola a la temperatura correcta.
Por último, es importante seguir principios específicos durante la toma de muestras,
minimizando la contaminación y asegurando un transporte rápido y adecuado al
laboratorio.

TOMA DE MUESTRAS:

Fundamental que la persona que efectúa la toma de la muestra conozca el método de


recogida, el volumen recomendable y la necesidad o no de introducir el material obtenido en
un medio de transporte.

 Los frascos y tubos utilizados para recolectar material fluido, como orina, heces,
exudado pleural o líquido ascítico, deben ser adecuados para asegurar la integridad y
conservación de la muestra.
 Los escobillones de dacrón, rayón o alginato de calcio son los más recomendados para
este propósito. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los escobillones de
alginato de calcio no son adecuados para muestras que contienen gonococo,
ureaplasma y virus, para los cuales se deben usar escobillones de dacrón o rayón. Estos
últimos también son útiles para muestras que serán sometidas a técnicas de cultivo.
 Es esencial que el mango de los escobillones no sea de madera, sino de plástico o
metal. Esto se debe a que la madera puede contaminar la muestra y afectar los
resultados. Especialmente para muestras tomadas de la nasofaringe, uretra o cuello
uterino, se utilizan escobillones con un mango metálico fino y flexible. Estos
escobillones también vienen con una funda que contiene los medios de transporte
adecuados para bacterias, como el medio de transporte de Stuart.
 El medio de transporte de Stuart es una solución compuesta por fosfato de glicerol,
que mantiene la humedad de la muestra y actúa como tampón. También contiene
tioglicolato sódico para crear una atmósfera reductora, azul de metileno como
indicador de oxidación-reducción, y una pequeña cantidad de carbón activado para
neutralizar los posibles agentes tóxicos presentes en la muestra. Este medio de
transporte es especialmente útil para mantener la viabilidad de las bacterias durante el
transporte y garantizar resultados precisos en los cultivos.
 En resumen, es importante utilizar frascos y tubos adecuados para recolectar material
fluido, y escobillones de dacrón, rayón o alginato de calcio para asegurar la integridad
de la muestra. El mango de los escobillones debe ser de plástico o metal, y los
escobillones deben venir con una funda que contenga los medios de transporte
adecuados, como el medio de transporte de Stuart, que garantiza la viabilidad de las
bacterias durante el transporte. Al seguir estas recomendaciones, se pueden obtener
resultados precisos en los análisis de laboratorio.
RECOGIDAS DE MUESTRAS

Para recoger muestras de exudado o pus de infecciones en las que habitualmente no


participan bacterias anaerobias, como el exudado faríngeo, el pus ótico, el pus de una
herida, de una piodermitis y otros, se deben utilizar jeringas e inocular en un vial
específico con atmósfera anaerobia. Estos recipientes se encuentran disponibles en el
mercado. En caso de no contar con este recipiente, se puede utilizar una jeringa Lapada
para el transporte de bacterias anaerobias. Algunas compañías también ofrecen
escobillones con medios de transporte adaptados para anaerobios.

Para los exudados de origen cervical y vaginal (tricomonas, gonococo y otras), es


mejor observarlos con el microscopio y sembrarlos a la cabecera del paciente. Se
recomienda utilizar un tubo con medio de cultivo para tricomonas y realizar una
extensión en un portaobjetos convenientemente teñida en el laboratorio para
diagnosticar vaginosis. En el caso de muestras de orina, se debe recolectar 10-20 ml de
orina después de dos horas de no haber orinado y ponerla de inmediato en la nevera.

En el caso de líquido ascítico, se debe recolectar en tubos o frascos estériles y de cierre


hermético. Para el análisis bacteriológico y micológico convencional de algunos
productos fluidos que se pueden obtener en cantidad abundante, como el líquido
pleural o ascítico, se recomienda utilizar los recipientes adecuados.

Para realizar hemocultivos cuantitativos, es necesario introducir las puntas de los


catéteres cortados en condiciones de asepsia en tubos estériles con EDTA. Se pueden
utilizar equipos de extracción alternativos a la jeringa, como el BD Safety-Lok, que
aumenta la seguridad al reducir el riesgo de pinchazos durante la extracción de
muestras de sangre o médula ósea. Es importante recordar que el material obtenido
por biopsia que se envía al laboratorio de microbiología no debe introducirse en un
recipiente con fijador, como el formol, ya que se requiere para otros estudios. En su
lugar, se debe cerrar herméticamente con unas gotas de suero fisiológico estéril para
evitar la desecación del material. También es fundamental conocer la temperatura de
conservación de las muestras (ambiente o refrigeración) y el tiempo que se pueden
mantener en esas condiciones.

El control de la contaminación de las superficies, como las poyatas, las superficies de


quirófanos, las salas de aislamiento, los suelos o las paredes, se realiza mediante placas
con medios de cultivo adecuados. Para evaluar la carga microbiana del aire en una
habitación o recinto, se utilizan aspiradores que contienen una placa con un medio de
cultivo específico. El chorro de aire se dirige hacia esta placa, lo que permite conocer el
volumen muestreado y, por lo tanto, la cantidad de microorganismos por volumen.

Por último, las muestras de agua u otros fluidos se estudian después de concentrar los
microorganismos mediante filtración. Para remitir las muestras o los microorganismos a
otros centros deben atenderse las normas de seguridad legisladas a este respecto. Estas
normas se fundamentan en la introducción de la muestra en un conjunto de recipientes
especiales homologados y su transporte por una compañía autorizada legalmente
REFLEXION PRACTICA

La ortodoxia de la recogida y conservación de las muestras es compleja .Algunos


aspectos fáciles de seguir son muy importantes y reportan grandes beneficios, como
tomar las muestras de sangre para hemocultivo o las de orina para urinocultivo con las
normas adecuadas, revisar la calidad de los esputos y procesar solo las de buena
calidad, evitar que se sequen los escobillones durante su transporte, procesar
inmediatamente las muestras o mantener los períodos de tiempo breves en la nevera o
en el ambiente cuando está indicado .La bondad de algunas recomendaciones es muy
difícil de objetivar y en algún caso no existe experiencia sobre ellas, en particular
cuando las muestras deben compartir procesos muy heterogéneos como cultivo y PCR,
fijación para estudio de parásitos y detección de emergencia, etc. Los laboratorios de
diagnóstico no siempre pueden poner sistemáticamente en marcha aquellos
procedimientos cuya eficacia sólo se ha objetivado en estudios de investigación
complejos y de carácter excepcional.
 Figura 12.1. Recipientes para toma de muestras. Las muestras pueden
recogerse en recipientes de diversos tipos: frascos convencionales, frascos con
cucharilla para recogida de heces, viales con atmósfera anaerobia y tubos de
diversos tipos. Todos deben estar estériles y cerrar herméticamente.
 Figura 12.2. Escobillones con medio de transporte. Los escobillones (torunda y
tubo con el medio de transporte) se suministran en un envoltorio de plástico.
Una vez se ha tomado la muestra con la torunda, esta se introduce en el tubo
con el medio de transporte semisólido adecuado.
 Figura 12.3. Fijación de muestras fecales con MIF. Si las muestras de heces para
estudio parasitológico no pueden procesarse antes de dos horas, deben
recogerse en un fijador como el MIF (mertiolato, yodo, formol) u otro. Las
heces deben introducirse y homogeneizarse con la espátula en el frasco grande
al que después se añade el yodo (tubo pequeño).
 Figura 12.4. Cepillo protegido. Las muestras pulmonares se toman mediante un
cepillo protegido para evitar contaminaciones de las vías respiratorias altas. Se
introduce el fibroscopio (A), a través de la vía respiratoria hasta el lugar
próximo a la zona afectada. En su interior se ha colocado otro catéter (catéter
interno) con un largo filamento en cuyo extremo hay un pequeño cepillo (B). Al
llegar a la zona afectada se hace salir el catéter interno y luego el cepillo para
tomar la muestra. Después se reintroduce en el catéter, procediendo a extraer
el fibroscopio del paciente. El cepillo se corta y se introduce en un tubo con 1
mi de suero fisiológico estéril, llevándose al laboratorio para su procesamiento.
EVALUACION Y PROCESAMIENTO DE LAS MUESTRAS

De acuerdo a las características de la muestra. Por ejemplo, si se sospecha de una


infección bacteriana, se pueden utilizar medios de cultivo selectivos para identificar y
aislar las bacterias causantes.

Además, es importante tener en cuenta el tiempo de incubación necesario para cada


tipo de muestra y el tipo de microorganismos que se espera encontrar. Una vez que las
muestras se han procesado adecuadamente, se lleva a cabo el análisis microbiológico.
Esto implica la identificación de los microorganismos presentes en la muestra, ya sea
mediante pruebas bioquímicas, serológicas o moleculares. También se pueden realizar
pruebas de sensibilidad a los antibióticos para determinar qué medicamentos son
efectivos contra los microorganismos encontrados.

Finalmente, los resultados del análisis microbiológico se interpretan y se informan al


médico responsable del paciente. Es importante proporcionar información detallada
sobre los microorganismos identificados, su cantidad y su sensibilidad a los
antibióticos. Esto ayudará al médico a tomar decisiones adecuadas sobre el tratamiento
del paciente y a prevenir la propagación de infecciones.

En resumen, el proceso de análisis microbiológico de una muestra clínica involucra la


observación y descripción de las características de la muestra, el procesamiento
adecuado de la misma, el análisis de los microorganismos presentes y la interpretación
de los resultados. Es importante seguir los protocolos establecidos y comunicarse con
el médico responsable en caso de muestras inaceptables o resultados significativos.

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