Resumen sobre la sexualidad en la infancia

Existe muy poca información sobre la sexualidad infantil ya que es uno de los
aspectos menos estudiados en el ámbito psicológico, la información que se tiene
hasta ahora relacionada con la sexualidad infantil es la teoría de las pulsiones la
cual deduce las fases de evolución psicosexual siendo estas la oral, anal y genital.

Como ya se sabe los infantes nacen con un sistema de sensaciones placer-

displacer y este va generando paulatinamente la diferencia entre otros tipos de
sentimientos afectivos, la gran importancia de definir la sexualidad infantil es tomar
en cuenta que se trata de una dimensión entre lo sexual, lo afectivo y lo social y
esto se ira diferenciando a lo largo del desarrollo.

Las principales características de la sexualidad infantil son:

No existen específicamente sensaciones enfocadas a lo erótico que se

manifiesten en los infantes, la sexualidad infantil se caracteriza por ser
egocéntrica, ya que los infantes en esa etapa son el centro del universo y
autoerótica ya que las sensaciones de placer corporal son vividas propiamente sin
depender de circunstancias externas, en el caso de los infantes las zonas
erógenas no necesariamente son los genitales. Las principales motivaciones que
impulsan el comportamiento sexual infantil son: satisfacer la curiosidad, explorar
su cuerpo y el cuerpo de los demás, buscar placer e imitar a otros.

En la actualidad los infantes tienen mayor acceso a información y a estímulos con

valor erótico, por lo tanto, los infantes pueden manifestar un mayor interés por
experimentar experiencias eróticas propias de la edad, la educación sexual en
esta etapa es fundamental y consiste en conocer y reconocer las necesidades que
cada infante manifiesta respetándolas y contribuyendo a su desarrollo.

En esta etapa los infantes manifiestan una gran curiosidad por los temas sexuales
y por esta situación es que los infantes emiten diversas preguntas, la primera
pregunta suele ser en base a los genitales, la siguiente pregunta suele ser de
dónde vienen los bebes y a partir de ahí surgen más dudas como por ejemplo por
donde nacen los bebes y como se hacen los bebes, en varias ocasiones este tipo
de preguntas serán espontaneas y se realizaran con mayor frecuencia. Es muy
importante y fundamental que los padres contesten estas preguntas diciendo la
verdad para lograr mantener una educación sexual correcta.
En esta etapa los juegos sexuales de los infantes son de gran importancia para el
desarrollo sexual infantil y en esta ocasión los agruparemos en función de sus
finalidades, el primer grupo se caracteriza por la exploración corporal tanto del
propio como el de los demás, el segundo grupo se caracteriza por la imitación de
roles sociales, imitando también roles relacionados con la reproducción humana y
ensayos de penetración, el tercer grupo de juegos sexuales tiene la intención de
conocer sensaciones placenteras a través de la exploración del cuerpo, en
muchas ocasiones estos juegos suelen ser intersexuales, en síntesis se puede
decir que las manifestaciones sexuales infantiles son expresadas con conductas
explicitas a través de maneras autoeróticas o por medio de juegos sexuales, las
conductas sexuales se pueden agrupar como: conductas de auto estimulación,
conductas de exploración y conductas de imitación.

La masturbación infantil es un comportamiento muy característico de la infancia y

éste no debe confundirse con la masturbación adulta, como ya se ha mencionado
anteriormente la sexualidad infantil es autoerótica y la experiencia de placer es
intrínseca, los infantes logran explorar su cuerpo, descubriendo las ´partes más
sensibles y percibiendo sensaciones intensas, disfrutando de la sensaciones que
emanan sus propios cuerpos, a partir de la pubertad el deseo erótico cambia y se
proyecta a la búsqueda de satisfacción en otra persona, es por eso que la
masturbación infantil se transforma.

En la adolescencia continua el proceso de sexuación iniciando desde el momento

de la concepción manteniendo la integración de diversos niveles que conforman el
hecho sexual humano, cuya naturaleza es biológica, social y psicológica, cabe
mencionar que en esta etapa es particularmente intensa en el proceso del
desarrollo sexual, ya que en esta se producen transformaciones esenciales para el
fin del desarrollo sexual, estas transformaciones se pueden dividir en tres áreas: la
redefinición de la identidad sexual, la aparición y configuración del deseo sexual y
en la evolución de los afectos en relación con la sexualidad, a partir de la
adolescencia la experiencia erótica se convierte en un acto relacional, existen tres
factores que intervienen en el desarrollo personal y sexual de los adolescentes,
siendo estos: la identidad, el deseo erótico y el afecto que incide en la experiencia
afectivo-sexual por tanto estos factores son de gran interés para la psicología de la
sexualidad. A lo largo de la pubertad el deseo sexual genera un volumen de
fantasías orientadas hacia el erotismo, es importante mencionar que desde un
punto de vista biofisiológico en la pubertad ocurren cambios hormonales
tempranos teniendo una influencia directa en el interés y la motivación sexual,
podemos mencionar que un acontecimiento importante es el aumento de
testosterona ocasionando que en los hombres aumente la motivación sexual en
forma de fantasías eróticas, excitación espontánea y en comportamiento como la
masturbación, en las mujeres la testosterona incide en el aumento de su
motivación sexual.

Los primeros comportamientos sexuales en la adolescencia son autoeróticos, en

este momento evolutivo la masturbación es diferente a la infantil, ya que en la
adolescencia el autoerotismo tiene una clara vocación relacional, ya que la
masturbación va guiada por fantasías e incluye satisfacción sexual compartida, la
masturbación es una actividad que ayuda en el conocimiento del cuerpo y en el
conocimiento de la respuesta sexual, obteniendo satisfacción sexual y
construyendo fantasías con situaciones idealizadas o inalcanzables, ayudando
también a elevar el autoestima sexual, la masturbación puede ser el motor que
ayude a obtener y acceder la experiencia sexual compartida.

Bibliografía
Gómez, J. (2014b). Psicología de la sexualidad (1.a ed., Vol. 1). Alianza Editorial.