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CONTRATO DE ARRENDAMIENTO PARA VIVIENDA URBANA

Lugar y fecha del contrato: Villavicencio-meta 29/11/2022


Arrendador: GLORIA MARINA HERNÁNDEZ ROJAS
Arrendatario: SANDRA MILENA ROMERO
Objeto: Conceder el goce de un inmueble que consta de 3 habitaciones, sala, comedor cocina, patio, garaje para moto.
Dirección: calle 22 sur 37-52 Nuevo Horizonte en Villavicencio
Canon: Seiscientos mil Pesos ($ 600.000) m/cte. mensuales, pagaderos dentro de los 30 a 5 días de cada período mensual, al arrendador o a su orden
(Leyes 14 de 1983 y 56 de 1985).
Término de duración: 3 meses desde la Fecha de iniciación:29/11/2022 Servicios de: energía. Agua, gas y aseo Por cuenta de: el arrendatario, Además de
las anteriores estipulaciones, el arrendador y el arrendatario convienen las siguientes: Primera. Pago, oportunidad y sitio. El arrendatario se obliga a pagar el
canon acordado dentro de los plazos previstos en 30 y 5 días de cada mes desde el inicio de este contrato, El canon se reajustará anualmente en la
proporción máxima que autorice el gobierno, en principio en el 90% del incremento del índice de precios al consumidor en el año calendario inmediatamente
anterior (2). Segunda. Mora. —La mora por falta de pago de la renta mensual en la oportunidad y forma acordada facultará al arrendador para hacer cesar el
arriendo y exigir judicial o extrajudicialmente la restitución del bien. Tercera. Destinación. —El arrendatario se obliga a usar el inmueble para la vivienda de
él y de su familia y no podrá darle otro uso, ni ceder o transferir el arrendamiento sin la autorización escrita del arrendador. El incumplimiento de esta cláusula
dará derecho al arrendador para dar por terminado el contrato y exigir la entrega del inmueble o, en caso de cesión o subarriendo, celebrar un nuevo contrato
con los usuarios reales, sin necesidad de requerimientos judiciales o privados, a los cuales renuncia el arrendatario. Cuarta. Recibo y estado. —El
arrendatario declara que ha recibido el inmueble objeto de este contrato en buen estado, conforme al inventario que se adjunta, el cual hace parte de este
contrato; en el mismo se determinan los servicios, cosas y usos conexos y adicionales (3). El arrendatario, a la terminación del contrato, deberá devolver al
arrendador el inmueble en el mismo estado, salvo el deterioro proveniente del tiempo y uso legítimos. Quinta. Mejoras. —El arrendatario tendrá a su cargo
las reparaciones locativas a que se refiere la ley (C.C., arts. 2028, 2029 y 2030) y no podrá realizar otras sin el consentimiento escrito del arrendador. Sexta.
Obligaciones de las partes. —Son obligaciones de las partes las siguientes: a) Del arrendador: 1. Entregar al arrendatario en la fecha convenida el
inmueble dado en arrendamiento en buen estado de servicio, seguridad y sanidad y poner a su disposición los servicios, cosas o usos conexos y los
adicionales aquí convenidos. 2. Mantener en el inmueble los servicios, las cosas y los usos conexos y adicionales en buen estado de servir para el fin
convenido en el contrato. 3. Las demás obligaciones consagradas para los arrendadores en el capítulo II, título XXVI, libro 4º del Código Civil (L. 56/85, art.
11). b) Del arrendatario: 1. Pagar al arrendador en el lugar convenido en la cláusula primera del presente contrato, el precio del arrendamiento. En el evento
que el arrendador rehúse recibir en las condiciones y lugar aquí acordados, el arrendatario podrá efectuarlo mediante consignación a favor del arrendador en
las instituciones autorizadas por el Gobierno Nacional para tal efecto de acuerdo con el procedimiento legal vigente (§ 0291-3). 2. Cuidar el inmueble y las
cosas recibidas en arrendamiento. En caso de daños o deterioros distintos derivados del uso normal o de la acción del tiempo y que fueren imputables al mal
uso del inmueble o a su propia culpa, efectuar oportunamente y por su cuenta las reparaciones o sustituciones necesarias. 3. Cumplir con las normas
consagradas en el reglamento de propiedad horizontal al que se encuentra sometido el inmueble arrendado (ello cuando el mismo esté sometido a dicho
régimen), así como con las demás disposiciones que dicte el Gobierno Nacional dirigidas a la protección de los derechos de todos los vecinos. 4. Las demás
obligaciones consagradas para los arrendatarios el capítulo III, título XXVI, libro 4º del Código Civil (L. 56/85, art. 12). Séptima. Terminación del contrato.
— Son causales de terminación del contrato en forma unilateral, por parte del arrendador las previstas por el artículo 16 de la Ley 56 de 1985 (§ 0291-1); y
por parte del arrendatario las consagradas en el artículo 17 de la misma ley. Parágrafo. —No obstante, las partes en cualquier tiempo y de común acuerdo
podrán dar por terminado el presente contrato (L. 56/85, art. 15). Octava. Preaviso. —El arrendador podrá dar por terminado el contrato de arrendamiento
durante cualquiera de sus prórrogas, mediante preaviso dado al arrendatario con tres meses de anticipación y el pago de la indemnización que prevé la ley
(L. 56/85, art. 16, inc. final) (4). Así mismo, el arrendatario podrá dar por terminado unilateralmente el contrato de arrendamiento dentro del término inicial o el
de sus prórrogas previo aviso escrito al arrendador, con un plazo no menor de tres (3) meses y el pago de una indemnización equivalente al precio de tres (3)
meses de arrendamiento. Cumplidas estas condiciones el arrendador estará obligado a recibir el inmueble; si no lo hiciere, el arrendatario podrá hacer
entrega provisional mediante la intervención de la autoridad administrativa competente, sin perjuicio de acudir a la acción judicial correspondiente. Parágrafo.
—No habrá lugar a la indemnización si el aviso de terminación por parte del arrendatario se refiere al término estipulado en este contrato (L. 56/85, art. 17,
inc. final). Novena. Cláusula penal. —El incumplimiento por cualquiera de las partes de las obligaciones derivadas de este contrato la constituirá en deudora
de la otra por la suma de 600.000 pesos a título de pena sin menos cabo del canon y de los perjuicios que pudieren ocasionarse como consecuencia del
incumplimiento (5). Décima. Linderos. —El arrendador podrá llenar el espacio correspondiente a la determinación de los linderos del inmueble objeto del
presente contrato. Décima primera. Gastos. —Los gastos que cause este instrumento serán a cargo del arrendatario (6). Décima segunda.
Coarrendatario(s).— Para garantizar al arrendador el cumplimiento de sus obligaciones, el arrendatario tiene como coarrendatario (o como sus
coarrendatarios) a xxxxx mayor(es) y vecino(s) de xxxx identificado(s) con xxxx de xxxxx quien(es) declaran que se obligan solidariamente con el arrendador
durante el término de duración del contrato y el de sus prórrogas y portando el tiempo que permanezca el inmueble en poder de éste . Décima tercera.
Cláusula compromisoria. —Las partes convienen que en el evento en que surja alguna diferencia entre las mismas, por razón o con ocasión del presente
contrato, será resuelta por un tribunal de arbitramento cuyo domicilio será Villavicencio- meta (lugar de ejecución del contrato), integrado por árbitros
designados conforme a la ley. Los arbitramentos que ocurrieren se regirán por lo dispuesto en el Decreto 2279 de 1991, en la Ley 23 de 1991 y en las demás
normas que modifiquen o adicionen la materia. En constancia de lo anterior se firma por las partes el día 29/11/2022, Cláusulas adicionales: Arrendador:
GLORIA MARINA HERNÁNDEZ ROJAS C.C. Nº 40.385.163 Arrendatario: SANDRA MILENA ROMERO C.C. Nº 40.187.159 NOTAS GENERALES:
Descripción. —El arrendamiento de cosas es un contrato en que las dos partes se obligan recíprocamente, la una a conceder el goce de una cosa y la otra
a pagar por este goce un precio determinado, durante cierto tiempo (C.C., art. 1973). Quien confiere el goce se llama arrendador y quien da el precio
arrendatario. Por su importancia práctica y social y la incidencia de la vivienda en la estabilidad social es un contrato en el que la intervención estatal se ha
ejercido con frecuencia para proteger a los arrendatarios de inmuebles urbanos. De allí, que actualmente el arrendamiento de vivienda urbana esté regulado,
entre otras, por las siguientes disposiciones: Ley 56 de 1985, decretos 063 y 2923 de 1977, 2813 de 1978, 1919 de 1986, 2282 de 1989 (CPC.) y 1816 de
1990. Cabe precisar que el contrato de arrendamiento de vivienda urbana se regirá, en primer lugar, por las disposiciones especiales de la Ley 56 de 1985 y
en segundo lugar por las disposiciones del Código Civil (L. 56/85, art. 27). Requisitos formales. —Es un contrato bilateral que se perfecciona por el acuerdo
de las partes sobre la cosa y el precio. Se realiza periódicamente y las obligaciones se cumplen sucesivamente. No está revestido de ninguna solemnidad
especial. Se requiere la capacidad plena de los contratantes. Se acostumbra expresar el contrato en un escrito. Es una manera de probar el vínculo
contractual pero no un requisito. Se deben autenticar las firmas de los contratantes o extenderlo ante dos testigos. Algunos suelen celebrarlo por escritura
pública porque así puede serle opuesto a terceros (C.C., art. 2020). En relación con el precio del arrendamiento, se ha de estar a las prescripciones de la Ley
56 de 1985, las que deben ser apreciadas en conjunto con la Ley 14 de 1983. De acuerdo con las leyes citadas, el precio del arrendamiento se determina
libremente por los contratantes, sin que pueda exceder, en ningún caso, el uno (1) por ciento del valor comercial del inmueble; a su vez, éste corresponde “a
dos veces el avalúo catastral fijado de acuerdo a lo establecido en los artículos 4º, 5º, 6º, 12 y 13 de la Ley 14 de 1983” (L. 56/85, art. 9º). Es de anotar que
las normas generales sobre control de arrendamientos no operan tratándose de contratos regulados por el Código de Comercio (D. 2221/83, art. 2º) tal como
ocurre con los locales destinados al funcionamiento de establecimientos de comercio y el arrendamiento de naves y aeronaves. El contrato de arrendamiento
para vivienda urbana, así sea verbal o escrito, debe contener conforme a lo dispuesto por el artículo 3º de la Ley 56 de 1985, por lo menos los siguientes
puntos: — Nombre e identificación de los contratantes. — Identificación del inmueble objeto del contrato. — Identificación de la parte del inmueble que se
arrienda, cuando sea el caso, así como de las zonas y los servicios compartidos con los demás ocupantes del inmueble. — Precio y forma de pago. —
Relación de los servicios o usos conexos y adicionales. — Término de duración del contrato. — Designación de la parte contratante a cuyo cargo esté el
pago de los servicios públicos del inmueble objeto del contrato. Si el contrato de arrendamiento consta por escrito, el arrendador deberá suministrar al
arrendatario copia del mismo, autenticada o con firmas originales, so pena de que pueda ser sancionado con tres mensualidades del arrendamiento (D.
1816/90, art. 2º y D. 2923/77, art. 3º). Terminación del contrato por parte del arrendador. —Son causales para que el arrendador pueda pedir
unilateralmente la terminación del contrato, las siguientes: 1. La no cancelación por parte del arrendatario de los cánones y reajustes dentro del término
estipulado en el contrato. 2. La no cancelación de los servicios públicos, que cause la desconexión o pérdida del servicio cuando su pago estuviere a cargo
del arrendatario. 3. El subarriendo total o parcial del inmueble, la cesión del contrato o del goce del inmueble o el cambio de destinación del mismo por parte
del arrendatario, sin expresa autorización del arrendador. 4. La incursión reiterada del arrendatario en procederes que afecten la tranquilidad ciudadana de
los vecinos, o la destinación del inmueble para actos delictivos o que impliquen contravención, debidamente comprobados ante la autoridad policiva. 5. La
realización de mejoras, cambios o ampliaciones del inmueble, sin expresa autorización del arrendador o la destrucción total o parcial del inmueble o área
arrendada por parte del arrendatario. 6. La violación por el arrendatario a las normas del respectivo reglamento interno de propiedad horizontal cuando se
trate de viviendas sometidas a ese régimen. Además, el arrendador podrá darlo por terminado unilateralmente durante las prórrogas mediante preaviso dado
con tres (3) meses de anticipación y el pago de una indemnización equivalente al precio de tres (3) meses de arrendamiento. Cumplidas estas condiciones el
arrendatario estará obligado a restituir el inmueble (L. 56/85, art. 16). Terminación del contrato por parte del arrendatario. —Son causales para que el
arrendatario pueda pedir unilateralmente la terminación del contrato, las siguientes: 1. La suspensión de la prestación de los servicios públicos al inmueble,
por acción premeditada del arrendador o porque incurra en mora en pagos que estuvieren a su cargo. En estos casos el arrendatario podrá optar por asumir
el costo del restablecimiento del servicio y descontarlo de los pagos que le corresponda hacer como arrendatario. 2. La incursión reiterada del arrendador en
procederes que afecten gravemente el disfrute cabal por el arrendatario del inmueble arrendado, debidamente comprobada ante la autoridad policiva. 3. El
desconocimiento por parte del arrendador de derechos reconocidos al arrendatario por la ley o contractualmente. Además, el arrendatario podrá dar por
terminado unilateralmente el contrato de arrendamiento dentro del término inicial o el de sus prórrogas previo aviso escrito al arrendador, con un plazo no
menor de tres (3) meses y el pago de una indemnización equivalente al precio de tres (3) meses de arrendamiento. Cumplidas estas condiciones el
arrendador, estará obligado a recibir el inmueble; si no lo hiciere, el arrendatario podrá hacer entrega provisional mediante la intervención de la autoridad
administrativa competente sin perjuicio de acudir a la acción judicial correspondiente. No habrá lugar a la indemnización si el aviso de terminación por parte
del arrendatario se refiere al término estipulado en el contrato (L. 56/85, art. 17). Pago por consignación.—En caso de que el arrendador, dentro del período
pactado se niegue a recibir el pago del precio del arrendamiento que legalmente deba efectuar el arrendatario, éste podrá cumplir su obligación, consignando
las respectivas sumas, dentro de los cinco días siguientes al vencimiento de tal período, en el Banco Popular del lugar de la ubicación del inmueble (D.
2813/78, art. 4º); en los lugares donde no exista sucursales o agencias del Banco Popular la consignación se podrá efectuar en la Caja de Crédito Agrario
Industrial y Minero y en su defecto en cualquiera de los bancos comerciales del lugar de la ubicación del inmueble. En su defecto, en el lugar más cercano,
observando el orden de prelación aquí descrito (D. 1816/90, arts. 8º y 9º). Es de anotar que el plazo para consignar el pago por arrendamientos es el
establecido en la norma anterior (cinco días siguientes al vencimiento del período pactado) y no el previsto por el artículo 8º, inciso primero, del Decreto 1816
de 1990, el cual lo había reducido al día hábil siguiente al vencimiento del período contractual pactado. Tal disposición fue anulada por la Sala de lo
Contencioso Administrativo, Sección Primera, del Consejo de Estado, mediante sentencia del 3 de abril de 1992, toda vez que al ser meramente
reglamentaria no podía reducir los términos previstos por una norma de carácter legal. Vigilancia y control.—En relación con este aspecto, la entidad
encargada de la vigilancia y control del contrato de arrendamiento de vivienda urbana conforme a las normas anteriormente expuestas ya no corresponde a
la Superintendencia de Industria y Comercio sino a distintos organismos a saber: Alcaldía municipal de Villavicencio, la Gobernación del meta, En efecto, la
Superintendencia de Industria y Comercio haciendo uso de las facultades de delegación que le confirieron los artículos 26 de la Ley 56 de 1985; 5º, 12, 13 y
26 del Decreto 1919 de 1986; y 11 y 12 del Decreto 1816 de 1990 delegó, por medio de la Resolución 2186 del 18 de diciembre de 1992, en cabeza de las
anteriores autoridades públicas lo relacionado con el control, la inspección, la vigilancia y las sanciones administrativas en materia de vivienda urbana. Por
tanto, a estas autoridades, conforme al artículo 1º de la resolución mencionada, les corresponde ejercer las siguientes atribuciones: 1. El conocimiento de los
procesos de regulación del valor comercial de los inmuebles destinados a vivienda urbana de que tratan los artículos 5º y siguientes del Decreto 1919 de
1986. 2. El otorgamiento, la suspensión, la cancelación y la negación de la personería jurídica de las asociaciones de que trata el artículo 21 de la Ley 56/85,
así como la inspección y vigilancia de éstas. En lo atinente al otorgamiento de personería jurídica, debe tenerse en cuenta que mediante el Decreto 2150 de
1995 se suprimió el acto de otorgamiento, y que se obtiene la personería con la sola inscripción del documento respectivo ante la Cámara de Comercio del
domicilio principal de la Asociación. 3. El conocimiento de la terminación unilateral del contrato de arrendamiento por parte del arrendador o arrendatario,
conforme lo establecen los artículos 16 inciso final, 17 inciso 2º de la Ley 56 de 1985; 11 y 12 del Decreto 1816 de 1990, y 23 del Decreto 1919 de 1986. 4.
El control, la inspección, la vigilancia y las sanciones administrativas establecidas en la Ley 56 de 1985 y 13 del Decreto 1816 de 1990. Adicionalmente, el
acto administrativo en cita, el otorgamiento de la matrícula de arrendador de las personas de que tratan los artículos 20 de la Ley 56 de 1985 y 13 del
Decreto 1816 de 1990. A su vez, este acto delegó en estas mismas autoridades (art. 3º) lo relacionado con el control, la inspección, la vigilancia y las
sanciones administrativas de las personas a que se refiere el artículo 20 de la Ley 56 de 1985. Aclara la resolución en comento, que para efectos de lo
establecido en ella , Complementario a lo anterior es lo establecido por el Decreto 2153 del 30 de diciembre de 1992 (expedido con base en el artículo 20
transitorio de la Constitución Política) mediante el cual se restructuró la Superintendencia de Industria y Comercio. En efecto, el artículo 53 de la mencionada
disposición suprimió las funciones en materia de regulación de vivienda urbana que venía ejerciendo la Superintendencia de Industria y a su vez confirmó la
delegación efectuada por esta entidad en cabeza de las autoridades inicialmente mencionadas. Esta delegación tenía como condición indispensable el que
fuera realizada antes de la expedición del Decreto 2153 de 1992, aspecto fáctico que efectivamente ocurrió. LLAMADAS (1) Duración. —De acuerdo con el
artículo 7º de la Ley 56 de 1985, el término de duración de los contratos de arrendamiento de vivienda urbana es el que convengan las partes, si ellas no lo
definen, éste será igual a un año. Una vez se cumpla el plazo estipulado en el contrato, o en su defecto, transcurrido un año, el contrato de arrendamiento se
considera prorrogado por un término igual al inicialmente pactado, siempre y cuando el arrendatario se avenga a los reajustes del canon que sean permitidos
por ley. (2) Reajuste del canon.—El contrato de arrendamiento debe mantenerse inmodificable, en lo que respecta al precio o renta, durante períodos de
doce meses, transcurridos los cuales, por disposición legal (L. 56/85, art. 10), es facultativo para el arrendador incrementarlo, eso sí, ciñéndose a dos
cortapisas, a saber: una proporción máxima que no sea superior a la meta de inflación fijada por La Junta Directiva del Banco de la República y, de otro lado,
que no se supere nunca el uno por ciento del valor comercial del inmueble. Dicho porcentaje de reajuste fue establecido por la Ley 242 de 1995, que en su
artículo 7º modificó el artículo 10º de la Ley 56, y que además dispuso que cuando se presenten diferencias entre la meta de inflación y la registrada por el
DANE, que acumulen más de tres puntos porcentuales en un mismo año, el Gobierno Nacional puede autorizar un incremento adicional al canon de
arrendamiento, el cual se llevaría a cabo en la siguiente renovación del contrato posterior a dicha autorización. (3) Servicios, cosas y usos conexos y
adicionales. —La ley distingue entre los servicios, cosas y usos conexos de los adicionales. Los primeros son aquéllos inherentes al goce del inmueble,
tales como los servicios públicos domiciliarios y todos aquéllos sin los cuales se dificultaría el uso del bien para el fin arrendado. Los últimos, los adicionales,
no ostentan el carácter de indispensables; no es necesario que estén comprendidos en el contrato y, si eventualmente se arrendaren, junto con el inmueble,
el canon podrá incrementarse hasta en un cincuenta por ciento del valor autorizado por el bien principal individualmente considerado (L. 56/85, art. 2º, parte.
1º y 2º). (4) Terminación unilateral. —Tanto el arrendador, como el arrendatario, pueden dar por terminado el contrato de arrendamiento por decisión
unilateral, dando aviso en tal sentido a la otra parte con una antelación superior a los tres meses y pagando una indemnización equivalente a tres meses de
arrendamiento. El arrendador solamente puede hacer uso de esta facultad cuando el contrato haya sido prorrogado, significa esto que el arrendador debe
respetar siempre el término inicial del contrato. En cambio, el arrendatario está autorizado por la ley para recurrir a esta novedosa forma de terminación del
arrendamiento inclusive cuando se está ejecutando el contrato en su período inicial (L. 56/85). y siguientes. (5) Cláusula penal. —Tratándose de un contrato
civil la pena y la obligación en conjunto, no pueden exceder del doble de la segunda (C.C., art. 1601). En el evento de un contrato mercantil la pena no podrá
ser superior al monto de la prestación principal (C. Co., art. 867). (6) Gastos. —Sobre el particular las partes pueden estipular lo que a bien tengan, aun
cuando la costumbre indica que los gastos son compartidos por las partes en sumas iguales.

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ARRENDADOR ARRENDATARIA
GLORIA MARINA HERNÁNDEZ ROJAS SANDRA MILENA ROMERO
CC: CC:

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