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1. EL CRÉDITO.
1- CONCEPTO ECONÓMICO Y JURÍDICO DEL CRÉDITO.
2- LA OPERACIÓN DE CRÉDITO: A) CONCEPTO. B) FUNCIÓN ECONÓMICA. C) EFECTOS D) RELACIÓN CON
LAS FIGURAS CONTRACTUALES AFINES.
1. EL CRÉDITO.
1- CONCEPTO ECONÓMICO Y JURÍDICO DEL CRÉDITO:
·Concepto económico del crédito: cambio de bien o servicio presente por un bien o servicio futuro.
estamos intercambiando bienes en forma contemporánea o difiriendo uno a futuro, esto se expresa en
dinero, se mide en tiempo y el precio del tiempo es el interés.
· Concepto jurídico del crédito: La palabra crédito deriva del latín “credere” que significa confianza.
El crédito es el cambio de un bien presente por un bien futuro. Los elementos del mismo son:
- implica la transferencia temporal de poder adquisitivo, de un sujeto acreedor a otro deudor.
- promesa de reembolso de capital más sus intereses, esto exhibe el elemento confianza, puesto que el
deudor recibe el poder adquisitivo de su acreedor y le promete la devolución de ese capital monetario con
más el interés pactado.
- plazo determinado, aquí aparece el factor tiempo, que es intrínseco al crédito y que crea un elemento
que está consustanciado con él: el riesgo.
- unidad monetaria convenida, este elemento destaca el aspecto monetario o financiero del crédito.
2- LA OPERACIÓN DE CRÉDITO:
A) CONCEPTO: es la entrega de cosas fungibles en propiedad o la creación de una disponibilidad
de dinero, estamos rodeados de operaciones activas y pasivas. ej. un plazo fijo es pasivo;
siempre hay que pensar en qué posición está el banco, cuando es deudor es pasiva y cuando es
acreedor es activa. La operación de crédito tiene una obligación de restitución, tiene un plazo e
intereses. El objeto del contrato es el crédito, es la disponibilidad del dinero o la entrega de cosas
fungibles en propiedad. Todas estas operaciones tienen un riesgo, el incumplimiento y se traduce
en el interés a mayor riesgo en la operación mayor interés se va a aplicar.
La definición de intereses es la suma de dinero que se pacta en proporción al capital que se usa y al
tiempo que dura. Al fijar los intereses se toman en cuenta la capacidad de pago, si una persona tiene un
loteo enorme de terrenos es menor el interés.
INTERESES
Suma de dinero que se pacta en proporción al capital que se usa y al tiempo que dura ( costo por el paso del tiempo y
siempre se hace en proporción al capital).
TIPOS DE INTERESES
- Compensatorios
- Moratorios
- Punitorios
¿Cómo se pactan?; porque algunos son convencionales (lo pactan las partes) y legales (estipulados en la
ley)?
¿Cómo se devengan? (desde cuándo empiezan a correr)
INTERES COMPENSATORIO
Retribución por el uso del capital en el tiempo - el costo. Desde que nace la obligación hasta que vence.
La naturaleza jurídica (el origen) es generalmente convencional, las partes lo pactan que se devengue un interés
compensatorio. Y si no hay pacto de las partes, no corresponde que se adiciones (no se puede agregar)
Art. 776 C.C.C.N.: INTERESES COMPENSATORIOS. La obligación puede llevar intereses y son válidos los que se han convenido entre el
deudor y el acreedor, como también la tasa fijada para su liquidación.
Si no fue acordada por las partes, ni por las leyes, ni resulta de los usos, la tasa de interés compensatorio puede ser fijada por los jueces.
Puede pasar que las partes hayan puesto que la obligación devengue intereses compensatorio y no poner en base a qué se va a devengar – sólo
se hace mención de que se devenguen intereses. En este caso, que está pactado, el juez puede fijar la tasa de interés.
Art. 770 C.C.C.N.: ANATOCISMO. No se deben intereses de los intereses, excepto que:
a) una cláusula expresa autorice la acumulación de los intereses al capital con una periodicidad no inferior a seis meses;
b) la obligación se demande judicialmente; en este caso, la acumulación opera desde la fecha de la notificación de la demanda;
c) la obligación se liquide judicialmente; en este caso, la capitalización se produce desde que el juez manda pagar la suma resultante y el
deudor es moroso en hacerlo;
ART. 771 C.C.C.N.: FACULTADES JUDICIALES. Los jueces pueden reducir los intereses cuando la tasa fijada o el resultado que provoque la
capitalización de intereses excede, sin justificación y desproporcionadamente, el costo medio del dinero para deudores y operaciones similares
en el lugar donde se contrajo la obligación.
Los intereses pagados en exceso se imputan al capital y, una vez extinguido éste, pueden ser repetidos.
Facultad judicial de morigerar los intereses. Facultad del juez, si ellos resultan excesivos. ¿Cuándo sabemos que son
excesivos los intereses? Con la ejecución de la sentencia. Cuando se hace la liquidación sabemos si son excesivos los
intereses o no.
La cosa juzgada – la sentencia – ¿El juez puede reformar lo que se dijo en esa sentencia? El profesor dice que sí.
Aunque algunos dicen que, si ya se dictó sentencia, y pasó a cosa juzgada, no se puede volver a tratar el tema de los
intereses, en este caso que el juez los pueda morigerar.
INTERES MORATORIO
Retribución por el retardo imputable en el incumplimiento de la obligación. Ejemplo, vence hoy la obligación y a
partir de hoy empiezo a deber intereses moratorios, porque hay un retardo imputable a mi nombre.
Su función es reparar el daño que provoca ese retardo. Compensar el daño que provoca el retardo.
Art. 768 C.C.C.N.: INTERESES MORATORIOS. A partir de su mora el deudor debe los intereses correspondientes. La tasa se determina:
c) en subsidio, por tasas que se fijen según las reglamentaciones del Banco Central.
El inciso C es un invento que no tiene solución. Aquí, antes, en el Código de Velez, decía “ lo que disponga el juez”, y
se le sacó la facultad al juez y se la dio al Banco Central. De hace 5 años de esto, el Banco Central, jamás fijó intereses
para obligaciones judicializables. En la práctica lo siguen haciendo los jueces.
INTERES PUNITORIOS
Buscan compeler el cumplimiento. No buscan resarcir, sino busca que la obligación se cumpla.
Tienen siempre origen convencional y se regulan, de acuerdo a lo similar que es la cláusula penal
B) FUNCIÓN ECONÓMICA:
C) EFECTOS:
–Oferta pública secundaria: se produce cuando un inversor transfiere su valor negociable a otro inversor.
Esta alternativa permite satisfacer las necesidades de liquidez, exigencia natural de toda inversión, y al
mismo tiempo en menor medida, la de la financiación del tenedor del valor negociable y también la de
especulación.
La transacción de valores negociables se da la intermediación de los mercados de valores donde interviene
la especulación. Las acciones se cotizan y los ahorrista adquieren las mismas por el mercado de bolsa.
La primera operación es la que canaliza el ahorro hacia la inversión, las demás operaciones se realizan sin
el ingreso de esos fondos a la sociedad. Se dan entre los distintos tenedores las operaciones y los que
quieran adquirirlos.
Las transacciones se realizan por medio de la oferta con la supervisión de organismos estatales (Comisión
Nacional de Valores, en adelante CNV)
Mercado de capital: financiación a mediano y a largo plazo. El estado debe garantizar los 3 requisitos de
las transacciones debido a que interviene le ahorro público y se tiene que defender al inversor.
En argentina a partir del siglo XIX como un negocio privado y mercantil sobre la bolsa de Buenos Aires. Se
crea la Comisión Nacional de Valores como ente autárquico del estado encargado de controlar todo el
mercado de capital. En el año 1969 la ley 17.811 estructuró un mercado de capital controlado por la CNV
con autarquía suficiente para regular la oferta pública
Comisión Nacional de Valores: entidad autárquica que depende del Poder ejecutivo nacional y tiene
jurisdicción en toda la república. Sus funciones son ejercidas por el directorio compuesto por 5 miembros
designados por el Poder ejecutivo nacional. No puede tratarse de personas que hayan estado relacionadas
con el mercado de valores con anterioridad. Duran 5 años y pueden reelegidos por períodos sucesivos y
también pueden ser removidos por el Poder Ejecutivo Nacional. Necesitan la totalidad de los miembros
para funcionar pero las reuniones pueden ser adoptadas si falta quórum por cualquiera de los directores. Si
alguien se encuentra en licencia el ministerio de economía designa alguno. Sus funciones están
enumeradas en el artículo 6 de la ley 17.811 y alguna de ellas son:
–Llevar el registro de las personas físicas y jurídicas autorizadas para efectuar la oferta pública de valores
negociables y establece las normas que deben ejecutarse aquellas y quienes actúan por cuenta de ellas.
Y entre sus atribuciones podemos mencionar alguna de las del artículo 7 de dicha ley:
a) requerir informes y realizar inspecciones e investigaciones en las personas sometidas a su fiscalización;
b) recabar el auxilio de la fuerza pública.
c) promover las acciones judiciales entre otras.
d) proteger a los pequeños inversores y deben facilitar su ingreso.
La federalización de la Comisión Nacional de Valores hace referencia a la apertura de agencias en todo el
interior de la república. Debe contar con un comité de auditoría con facultad de opinar de los estados
contables (pudiendo si lo tienen prescindir de la sindicatura) solo para los que hacen oferta pública.
Existe la llamada desnaturalización del mercado que cualquiera aún con un mínimo de ahorro puede
acceder al mercado de capitales. Antes había que tener una acción del mercado de valores (hasta la ley
17.811 se tenía que tener una para poder ser intermediario, con la ley 26.831 como aporte registrado en la
Comisión Nacional de Valores no es necesario, cualquiera persona podrá ser un agente registrado si
cumple con los requisitos y rinde el examen)
Intermediarios: son los que operan en la oferta pública secundaria y que tiene por función dar liquidez a
los valores negociables. En el decreto 677/01 en su artículo 2. Hace referencia a la “entidad autorregulada”
y acto seguido individualiza como tales:
a) a las bolsas de comercio autorizadas a cotizar valores negociables
b) a los mercados de valores adheridos a ellas en los términos de la ley 17.811 y sus modificaciones.
c) a los mercados a término, futuros y opciones.
d) a las demás entidades no bursátiles autorizadas a funcionar como autorreguladas por la comisión de
valores
Entre las entidades bursátiles mencionadas por la ley 17.811 cabe mencionar:
a) las bolsas de comercio. Para desarrollar las funciones que la ley le asigna a estas entidades deben
solicitar autorización del Poder Ejecutivo Nacional, por intermedio de la Comisión Nacional de Valores.
Están facultadas para aprobar, suspender y cancelar la cotización de los valores negociables dentro de sus
entidades adheridas. Controlan a las sociedades que cotizan. Autorizar, suspender o retirar la cotizaciones,
reglamentación de las operaciones entre otras.
b) los mercados de valores adheridos a las bolsas de comercio deben constituirse como sociedades
anónimas. Son entidades autorreguladas bursátiles llamadas también mercados autorizados. Sus funciones
naturales son organizar los agentes que intervienen en los mercados secundarios, quienes operan
comprando y vendiendo valores por cuenta propia o de terceros. Deben estar adheridos a una bolsa de
comercio y solo pueden permitir la cotización de valores que hayan sido permitidos por la bolsa de
comercio a la cual están adheridos. Deben dictar las normas que aseguren la realidad de las operaciones
que se efectúan en su ámbito. Realizar la transacción de títulos valores. Organizar a los agentes bursátiles
(operadores del mercado autorregulado y autorizado para ejercer las funciones de agentes o sociedades
de bolsa se deben cumplir ciertos requisitos. Alguno de esos son:
a) ser socio de la bolsa de comercio a la cual está adherido el mercado donde pretenden actuar.
b) ser accionista del mercado donde operará. Pueden actuar de manera individual o bajo una forma
asociativa que denominan sociedad de bolsa.
Mercado de valores de Buenos Aires (MERVAL): entidad monetaria para los mercados bursátiles argentinos,
los agentes cuentan con dos sistemas para operar
a) el denominado de concurrencia: se negocian títulos públicos y privados por el cual los agentes
conciertan sus operaciones con garantía del MERVAL.
b) sesión continua de negociación en el que se negocian operaciones con títulos públicos u obligaciones
negociables que pueden o no tener garantía MERVAL.
Entidades autorreguladas no bursátiles, ha sido autorizada como tal al Mercado Abierto Electrónico SA,
creado por los bancos para realizar las operaciones de título, donde no haya concentración física-
informática o telefónica. La ganancia está dada no por una comisión sino por la diferencia del $ de compra
y del de venta. Se caracterizan porque no es necesario que se encuentren adheridas a una bolsa de
comercio cuyos estatutos prevén la cotización de valores. En nuestro país el Mercado Abierto Económico
fue creado por los bancos aunque participan otras entidades no bancarias. Se opera de manera diferente
que en las instituciones bursátiles. Las diferencias más importantes son: a) no hay concentración física sino
que las operaciones se celebran por vía informática o telefónica.
b) sus operadores no actúan como comisionistas sino que se limitan simplemente a comprar o vender y su
retribución es la diferencia entre el precio de compra y el precio de venta.
Caja de valores: creada por la ley 20.643. Registra cada operación realizada con valores negociables del
mercado bursátil y del extrabursátil. Lleva un libro de compra y venta. Generalmente títulos escriturales sin
representación externa por lo que se pide un certificado para comprobar su existencia.
Esta entidad, verifica por única vez (para valores cautelares) la cantidad de valores depositados, su
autenticad que estén completos y la legitimación de su tenedor. Si el depositante original transfiere los
valores negociables a un tercero, la caja de valores procede a solicitud a registrar la operación. Es una
sociedad depositaria que tiene como función recibir depósitos colectivos de valores públicos o privados
debe constituirse como una Sociedad Anónima y estar autorizado por la Comisión Nacional de Valores. Los
valores cartulares, escriturales o estén representados en un certificado global, en la práctica la creación, la
emisión, la transmisión o constitución de derechos reales, los gravámenes las medidas precautorias y
cualquier otra afectación se llevará a cabo en, nuestro régimen, lo hace Caja de Valores.
Sociedades calificadoras de riesgo: los inversores comunes o pequeños normalmente carecen de la
capacidad profesional necesaria para evaluar correctamente el riesgo de los valores negociables que se
ofrecen públicamente, circunstancia que lo aleja de la participación de esta actividad. Surgen así los
agentes catalizadores de riesgo que deben merituar la solvencia y la capacidad de pago de las empresas
emisoras como también su rentabilidad y su calidad gerencial (recursos humanos que se tienen). Analiza el
contexto económico, condiciones del instrumento a emitir las garantías que brindan.
Normativa:
*Año 2001:
– LGS en el artículo 69 establece: obrar con diligencia y lealtad de un buen hombre de negocios.
*Año 2012: La ley 26.831 busca proteger las instituciones de la oferta pública, conservar la transparencia,
darle supervisión, darle facultades a la Comisión Nacional de Valores, reestructurar el funcionamiento de
las bolsas y mercados (no pueden más ser sociedades civiles). Todas las empresas que deseen cotizar
deberán pasar el filtro de los agentes catalizadores de riesgo (SA previamente autorizada o universidades
públicas). A partir de esta ley interviene la justicia en lo contencioso y administrativo de la ciudad de
buenos aires. Se levantó el secreto bursatil frente a los requerimiento de la UIF o de la AFIP,
superintendencia de seguros, BC. La Comisión Nacional de Valores puede designar veedores con derecho
de veto en la administración por las decisiones que tomen, por sí mismo sin consulta. Tienen facultades
para intervenir administrativamente por 180 días a una emisora sin recurrir al juez. Un funcionario de la
Comisión Nacional de Valores o un tercero, la decisión de intervenirla es recurrible exclusivamente ante el
ministerio de economía de la nación. So si lo rechaza puede recurrir a la justicia.
Tiene un tribunal arbitral permanente para dirimir controversias no solo en el mercado sino también en la
comunidad.
Fondos de inversión: está en el mercado de capitales y consiste en poner al alcance de los inversores los
activos financieros para obtener una rentabilidad a un menor riesgo. No son sociedades, ni son sujetos de
derecho, son patrimonios que se forman con los aportes que realizan los inversores suscribiendo un
porcentaje de la inversión llamada cuota parte, realizada por el cuotapartista (inversores se convierten)
Patrimonio: constituido con similares objeto de inversión un profesional de inversión administra esos
fondos invirtiendo los fondos en una cartera diversificada de activos financieros.
Hay capitales bursátil y extrabursatiles.
Frente a la situación de desconocer sobre materia bursátil o inversión no se tiene idea, se recurre a un
fondo común de inversión, el fondo recepta la inversión y compran una cartera diversificada de mercados
financieros.
No se pierde nunca la rentabilidad porque si bajan las inversiones, bajan las acciones de ese producto que
quieren comprar por ejemplo si invirtiéramos en mercado libre.
Diversificar el riesgo de mi inversión ese es el objetivo principal del fondo de inversión, se canaliza el
ahorro en un porfolio de inversión.
En la organización interna podemos ver que hay dos sociedades:
– Sociedad depositaria (banco de títulos). Tiene un objeto excluso y actividad única. Deben estar
autorizados con un doble control: el de la Comisión Nacional de Valores y el de Banco central. Guarda y
custodia y conservación de los valores representa las inversores. Tienen limitado su funcionamiento. Lleva
un registro de cuota partistas. Titularidad de las cuota partistas titularidad y transferencia.
– Sociedad gerente: administrar. Adopta la forma de una Sociedad Anónima. Tiene un objeto único,
función propia de la sociedad: es la administración, captar los fondos, su administración y liquidación.
Decide donde invertir los fondos, donde destinar los ahorro. Representa los intereses de los cuota
partistas. Llevar la contabilidad púbica diariamente para los ahorristas tengan conocimiento.
Ambas sociedades tienen incompetencia económica y jurídica entre sí.
Los fondos de inversión son un instrumento muy utilizado en estados unidos, representa y es titular de la
mayor cantidad de activos.
En nuestro país actualmente se encuentra regido por la ley 24.781.
Clasificación:
– Cerrados: las cuota partes cotizan en bolsa en el mercado y su liquidez depende de la oferta y demanda
lo que se realiza en el mercado bursátil. Es a un plazo determinado.
– Abiertos: inversor puede suscribir cuota partes y puede venderlas directamente en la sociedad gerente
con la característica que los fondos comunes son abiertas donde el inversor puede suscribir en cualquier
momento o lugar por cualquier medio habilitado (sucursales, página de Internet, etcétera.)
Invierten en divisas, etc. El plazo de duración es indeterminado. Este fondo es líquido porque en cualquier
momento puedo hacerme de dinero, cancelar la cuota parte a cambio de que me reintegre la cuota parte.
Objetivo:
– Mantener el ahorro.
– Optimizar la inversión, a corto, mediano y largo plazo dependiendo de cuando lo quiera recuperar.
– Diversificar el riesgo de mi inversión. Se puede invertir en títulos de deuda pública o privada, ahorrar en
una cartera a plazo fijo.
3. Transparencia: en cualquier momento puede tomar conocimiento del valor de la cuota parte, porque se
publica en medios especializados todos los días y su evolución del precio.
4. Seguridad: fondos comunes de inversión están controladas por la comisión nacional de valores que tiene
a su cargo el control de ambos sociedad y necesita de su autorización para funcionar. Para reforzar deben
estar sujetos a la evaluación de una calificadora de riesgo.
Valor de la cuota parte: (se puede verificar todos los días hábiles) Se divide el patrimonio (al valor del
cierre de cada día) del fondo por la cantidad de cuotas partes existentes.
Moneda: peso argentino, dólar y el euro.
· Autorización y Fiscalización:
BOLILLA II
1. EL DERECHO CONCURSAL.
1- NOCIÓN DE LOS CONCURSOS.
2- PRESUPUESTOS ECONÓMICOS: A) EL CRÉDITO DE LOS ACREEDORES, B) SU DEFENSA; C) LA
CONSERVACIÓN DE LA EMPRESA, D) LA CELERIDAD EN LA FINALIZACIÓN DE LA CRISIS.
1. EL DERECHO CONCURSAL: .El Derecho Concursal es una de las ramas derecho privado patrimonial)aplicable a las
relaciones emergentes del patrimonio de las personas físicas o jurídicas en estado de crisis patrimonial, insolvencia o
cesación de pagos, que intenta procurar las herramientas que permitan superar dichas situaciones, tratando de armonizar
los distintos intereses en juego, del Estado, de los acreedores, de los trabajadores, del deudor, de los proveedores, de los
consumidores y el interés general.Se pretende generar un ámbito que permita pagar la mayor cantidad de lo adeudado a
través de un proceso único que desplace las acciones individuales, devengue menores gastos y permita un tratamiento
igualitario de los acreedores.
Existen dos clases de concursos en nuestra legislación (el concurso preventivo y la quiebra).
Cuando el deudor no cumple con la obligación contraída, el acreedor puede iniciar una acción individual. El
problema surge cuando hay varios acreedores y el patrimonio del deudor es insuficiente para satisfacer
todos los créditos; la solución es la utilización de procesos concursales porque protegen los intereses de
todos los acreedores asegurando el cobro de sus créditos en igualdad de condiciones. La ejecución puede
ser:
– Individual: el acreedor actúa sólo y en su propio interés (ejemplo con título ejecutivo).
– Colectiva: (quiebra) es cuando quien actúa contra el deudor es el conjunto de los acreedores. Además
del incumplimiento la ejecución procederá si el deudor se encuentra en estado de cesación de pagos.
Artículo 1 LCQ “…El concurso produce sus efectos sobre la totalidad del patrimonio del deudor, salvo las
exclusiones legalmente establecidas respecto de bienes determinados.”
– Colectividad: todos los acreedores del deudor de causa o título anterior a la presentación en concurso
preventivo o declaración de quiebra quedan sometidos al proceso. Y quedan excluidos los acreedores de
causa o título posterior del proceso.
– Concurrencia: todos los acreedores deben concurrir a la sede concursal para poder participar del
acuerdo si se trata de un procedimiento preventivo o de recibir su dividendo si se trata de la quiebra. Esta
concurrencia se hace para la verificación de los créditos al que están constreñidos todos los acreedores de
causa o título anterior al concurso. Proceso de verificación (artículo 32 LCQ).
– Igualdad: todos los acreedores concurrirán al proceso en igualdad de condiciones, lo que no significa una
igualdad absoluta sino “igualdad entre iguales”. Por ejemplo, igualdad entre acreedores quirografarios,
igualdad entre acreedores privilegiados.
– Inquisitoriedad (u oficiosidad): no son impulsados por las partes sino que el juez tiene la carga de
hacerlo.
La oficiosidad es la atribución del juez de impulsar de oficio el trámite iniciado por el deudor o acreedor
(según el caso) ARTICULO 274 LCQ.- Facultades del Juez. “El juez tiene la dirección del proceso, pudiendo
dictar todas las medidas de impulso de la causa y de investigación que resulten necesarias. A tales fines
puede disponer, entre otras cosas:
1) La comparencia del concursado en los casos de los Artículos 17 y 102 y de las demás personas que
puedan contribuir a los fines señalados. Puede ordenar el auxilio de la fuerza pública en caso de ausencia
injustificada;
2) La presentación de documentos que el concursado o terceros tengan en su poder, los que deben
devolverse cuando no se vinculan a hechos controvertidos respecto de los cuales sean parte litigante”.
– Unicidad: no pueden existir dentro del territorio argentino dos procesos concursales sobre el patrimonio
de una misma persona. El concurso preventivo y la quiebra son considerados uno solo en este caso.
PRESUPUESTOS ECONOMICOS
B) CONSERVACIÓN DE LA EMPRESA:
fue una constante del derecho procesal que se preserve la actividad empresaria del deudor cesante, lo que
se proyectó en mayor facilidad de acceso a las soluciones preventivas y, en la quiebra, en la priorización de
la liquidación de la empresa como unidad y en funcionamiento.
Concebida la quiebra como una solución al fenómeno de insolvencia se la entendió como una mera
ejecución cuya finalidad era satisfacer los intereses de los acreedores mediante la liquidación de los bienes
del deudor común, para ser repartido su producido entre aquellos a prorrata de sus acreencias.
Esta concepción fue criticada por la doctrina concursalista influenciada por ideas económicas y políticas
que dieron lugar a la salvación o conservación de la empresa, a la protección de las relaciones laborales, al
interés general y dejaron para lo último los intereses de los acreedores.
Se argumenta que la figura del comerciante individual ya no es el centro de atención del derecho mercantil
porque este es remplazado por la empresa, donde se conjugan intereses que exceden los privados, como
el interés público.
La empresa se convierte en un motor de actividad de la comunidad. De allí que importe el mantenimiento
de ciertas actividades empresarias y de la empresa en general por el interés social, calificado por Ángel
Rojo por las relaciones laborales que genera la empresa a través de puestos de trabajo. El interés de la
comunidad, como interés general se privilegia por encima de los acreedores y por ello se tiende a la
preservación de la empresa como fuente de puestos de empleo y de producción de bienes y servicios
útiles.
Un sistema concursal ordenado y eficaz se vincula actualmente con la solidez del sistema económico y
financiero de los países, como lo señala un informe del FMI (fondo monetario internacional) que se llama
“por procedimientos de insolvencia ordenados y eficaces del 2000”.
· La quiebra como medio de satisfacción de los intereses de los acreedores:
En los orígenes del derecho concursal los derechos de los acreedores predominaban sobre la dignidad del
deudor. Eran característicos de los ordenamientos medievales la muerte, el destierro, la prisión, la sanción
infamante y el desapoderamiento de todos sus bienes. Es decir, en el derecho romano cuando el deudor
estaba obligado y no cumplía, éste podía pagar hasta con su cuerpo, el acreedor podía privarlo de su
libertad, pasarlo del otro lado del Tiber (nexum). Con la aparición de la ley Poetilia Papiria en vez de
responder con la persona, el deudor responde con sus bienes, su patrimonio.
Aunque el panorama no varío mucho durante varios siglos, por ejemplo, el código de comercio de 1859
seguía manteniendo la prisión del fallido que no podía garantizar el pago de su pasivo.
Por su parte, constituye una legislación sustantiva, sin perjuicio de la presencia de una gran cantidad de
normas de forma o procedimiento que se requieren a los efectos de su regulación.
EL INTERÉS COMPROMETIDO POR EL SISTEMA ELGAL VIGENTE: ENTENDEMOS QUE ES POR EL ARTÍCULO 17
Constitución Nacional (LA PROPIEDAD) Y POR EL TEMA DE QUE UNA LEY FEDERAL COMO ES LA LEY DE
CONCURSOS Y QUIEBRAS REGULA CUESTIONES PROCESALES CUANDO EN REALIDAD ESE TEMA LO
REGULAN LAS PROVINCIAS.
· Derecho de los pueblos bárbaros: pese a la invasión bárbara, el derecho romano siguió teniendo
aplicación a los ciudadanos romanos pero las instituciones bárbaras infiltraron en el procedimiento
romano. Se generó la idea de ejecución patrimonial por la cual si el deudor no pagaba el acreedor podía
tomar las cosas muebles de su propiedad. La idea de la prenda era inseparable de la obligación. También
había graves sanciones como la servidumbre y la muerte. Esto recién cambia en el Siglo XIII cuando la
ejecución sólo está en manos de la autoridad pública.
·Derecho estatutario: son las ciudades italianas las que desarrollaron el comercio (Génova, Pisa, Venecia,
Florencia, otras). Con ellas nacen instituciones propias del derecho comercial: letra de cambio, seguro,
libros de comercia, etcétera y también las primeras regulaciones orgánicas de comerciantes que son los
estatutos que regulaban la vida mercantil, apareciendo: la cesación de pagos, el desapoderamiento y el
período de sospecha. Esto determina la apertura del procedimiento por insolvencia y no por
incumplimiento. Se llevó a cabo un procedimiento que consistía en la toma de posición de los bienes del
deudor por autoridad pública para satisfacer los créditos por la venta. La administración era llevada por el
curador o síndico. La autoridad reclamaba la entrega de todos los bienes de fallido, incluso los enajenados
en un período inmediatamente anterior a la declaración de la quiebra (período de sospecha).
También había sanciones penales como arresto, tortura, pena de muerte, etcétera.
· Francia hasta el código de comercio de 1807: a partir de la actividad mercantil de los italianos surgen las
ferias en toda Europa, incluso Francia aunque de manera tardía e insuficiente. Sus primeras ordenanzas del
Siglo XVI eran de índole penal y rigurosa, hasta que fue adoptando un sistema parecido al Italiano.
· Alemania: la quiebra estuvo regulada por mucho tiempo por la ley del 10 de febrero de 1877 modificada
por la de 1898, se puntualizan los siguientes aspectos: la finalidad del procedimiento de insolvencia es
satisfacer colectivamente a los acreedores del deudor pero dirigido a la conservación de la empresa.
El presupuesto para abrir los procedimientos concursales es la insolvencia que se define como
imposibilidad de cumplir las obligaciones exigibles. También constituyen presupuestos especiales la
amenaza de insolvencia y el sobreendeudamiento. El procedimiento se abre a pedido del deudor o
acreedor que demuestra existencia de su crédito e interés legítimo, abierto el procedimiento el juez
designa un administrador de la insolvencia, pero igual hay un comité de acreedores que define si la
empresa sigue o se paraliza. El administrador liquida los bienes con un plan que puede ser rechazado por el
Juez. También el plan requiere la aprobación por la mayoría de los acreedores.
· La Constitución de 1853: El artículo 67 inciso 11 autorizaba al Congreso a dictar los códigos de fondo, lo
que hoy es el artículo 75 inciso 12 y habla del Código Comercial y de Minería. Lo que trajo diferentes
interpretaciones. Alcorta sostenía que sólo se debían dictar leyes para falencias comerciales y no de
quiebras para los no comerciantes, que sería bancarrota. Aunque de todos modos la insolvencia de los no
comerciantes también debe regularla el Congreso porque dicta el Código Civil, aunque este código no
terminó regulándolo, por lo que los juicios de concurso civil quedaron sometidos a las leyes procesales.
Hasta la ley 19511 de 1972 los textos legislativos contemplaron exclusivamente la situación de los
comerciantes pero a partir de dicha ley se reguló el concurso de los no comerciantes conjuntamente con el
concurso de los comerciantes. Y a partir de la ley 22917 de 1983 su régimen es uniforme sin que quede
duda de la constitucionalidad de las reglas. Esa política legislativa se sigue manteniendo en la ley 24.522
del año 1995.
· El Código de Comercio de 1859/62: Siendo Vélez Sarfield ministro de gobierno del Estado de Buenos
Aires concierta con el jurista Eduardo Acevedo la redacción de un Código de Comercio que fue aprobado
en 1856 gracias a que Sarmiento estaba en el senado. Reincorporada Buenos Aires a la Nación el Código
fue aceptado en por todo el País en 1862.
En materia de quiebras los juristas intentaron mejorar la situación de los fallidos porque el Código tenía
subsistente la presunción de fraude y el arresto. Otros aspectos fueron bien legislados como los procesos
de fondo y forma y, la organización de los funcionarios.
El problema más radical es que la moratoria era aprobada con el voto de la minoría de los acreedores. Y
por otra parte las homologaciones fueron concedidas con excesiva generosidad.
· La reforma de 1889: Una vez sancionado el Código Civil se sintió la necesidad de reformar el mercantil
para que no se contradigan. Luego de diversos proyectos en 1889 fue aprobado uno elaborado por La
Comisión de Códigos de la Cámara de Diputados. Mantuvo el arresto del fallido pero no hasta que termine
el juicio sino, hasta la presentación del informe del síndico acerca de las causas de la quiebra, donde si no
había presunción de fraude se liberaba. También mantuvo la moratoria. En síntesis esta reforma no mejoró
las cosas y las quiebras siguieron siendo un campo propicio para el fraude y el abuso. Su reforma fue breve
porque ya en 1902 se sancionó la ley 4156 que la sustituyó por completo.
· Ley 4156: Rigió desde 1902 hasta 1933. Adoptó un sistema marcadamente voluntarista en virtud del cual
los acreedores quedaban dueños de decisiones fundamentales y el Juez era reducido a un mero
fiscalizador de las formas, por ello se dio lugar a abusos y fue reemplazada por la ley 11.077.
· Ley 11.077: Ya se ha señalado que el Código Civil no contenía reglas relativas a la insolvencia del deudor y
que las leyes de quiebras regulaban solo el problema cuando el deudor era comerciante. En ese caso, de
caer en cesación de pagos un obligado no comerciante no existía legislación de forma ni de fondo. Esto
llevó a la sanción de la ley 11.077 de 1920. Por ella la extinción de las obligaciones del concursado civil,
siempre que no hubiese delito, se producía por:
- la aprobación judicial de la adjudicación de bienes.
- el transcurso de tres años de iniciado el trámite.
- si mediaba dolo o fraude, a los cinco años de cumplimiento de la sentencia condenatoria.
Esta ley rigió hasta 1972, es decir, que fue el régimen concursal Argentino más extenso en vigencia y la
deroga la ley 19.551.
· La ley 11.719: ante la insuficiente ley 4516 se presentaron 20 proyectos para reformarla y en 1932 el
congreso aprobó esta ley que fue un significativo avance y un sólido instrumento jurídico aunque, muchas
veces mal aplicado.
Restringió el voluntarismo de los acreedores dando importantes atribuciones al Juez, entre ellas la de
homologar o no los concordatos aprobados. Elimino la adjudicación de bienes. Pero tuvo erradas
aplicaciones judiciales donde se pedían sucesivas presentaciones del comerciante y se paralizaban los
pedidos de quiebras.
· Ley 19.551: En 1966 se integró una comisión por Isaac, con Halperin y otros que confeccionaron un
anteproyecto que se convirtió en la ley 19.551 del año 1972. Esta ley a su vez fue modificada en 1983 por
la ley 22.917 que trajo tres novedades fundamentales:
1. Unificación absoluta del régimen de comerciante y no comerciante.
2. La reglamentación de los acuerdos pre concursales.
3. Una nueva disciplina de la extensión de quiebras. Otra cuestión muy importante, la verificación y el pago
de los créditos laborales en la quiebra, fue frustrada por la obra de la comisión de asesoramiento
legislativo.
EVOLUCIÓN HISTÓRICA DEL DERECHO CONCURSAL ARGENTINO DESDE 1972. CARACTERIZACIÓN DE LOS
SUCESIVOS Y MÁS RECIENTES SISTEMAS VIGENTES. TENDENCIAS ACTUALES. OBJETIVOS DE LA ÚLTIMA
REFORMA (La ley 25.589).
La ley 19.551 rigió desde 1972 con su reforma parcial de 1983. En 1995 se sancionó la ley 24.522 que
impone un nuevo régimen concursal. Es necesario entender los principios que orientaron la ley 19.551 y
estos son:
la protección adecuada al crédito, la conservación de la empresa, la mayor amplitud de los medios de
solución, la elaboración de normas que protejan el comercio y la extensión de la responsabilidad
patrimonial a quienes actuaron por el deudor y realizaron actos dolosos.
También son importantes las circunstancias en las que las normas se llevan a cabo. El profesor Alegría dice
que en ese momento había que mejorar los mecanismos de la ley 11.719, había variado la realidad político
económico del país y también la realidad científica, considerándose ya no al comerciante individual sino a
las empresas, al orden público y al interés general.
· La necesidad de reforma: En 1995 la ley 19.551, a pesar de ser un enorme avance en el derecho
Argentino tuvo dificultades como por ejemplo que la continuidad de las empresas fracaso totalmente. Se
requería una modificación ya que habían cambiado también las circunstancias económicas:
- avance de un Estado empresario con política de privatizaciones.
- marcada libertad de las leyes del mercado.
- cuestionamiento del derecho laboral.
- ley de convertibilidad que redujo la inflación a niveles equivalentes a los de los países desarrollados.
· Análisis de la ley de concursos 24.522: La ley ha respetado la estructura de la ley 19.551. Contiene
normas generales sobre los sujetos, las reglas del concurso preventivo y de la quiebra, los acuerdos pre
concursales o acuerdo preventivo extrajudicial, así como las disposiciones generales de ambos
procedimientos.
En la ley 24.522 se da un rol más activo de los acreedores y paralelamente se reducen los poderes del Juez;
la continuación de la empresa en el concurso preventivo se persigue por otros mecanismos y la quiebra
pasa a ser excepcional, se prevé el acuerdo extrajudicial, etcétera.
Se cambió la concepción del concurso preventivo que ya no es el modo de diferir los pasivos sino un
momento en el cual la ley le brinda al deudor la posibilidad de reestructurar la empresa, también el
concurso preventivo puede terminar en la cesión de la empresa a un tercero mediante el procedimiento de
salvataje.
· Reformas de la ley 24.522:
- SUSPENSIÓN DE LOS EFECTOS DEL CONVENIO COLECTIVO Y LA POSIBILIDAD DE REDEFINIR LAS
RELACIONES DE TRABAJO.
- PROPUESTAS DE ACUERDO POR CATEGORIAS Y CON ALTERNATIVAS QUE PERMITEN AL DEUDOR OFRECER
REORGANIZACIÓN EMPRESARIA (CAPITALIZACIÓN DE CRÉDITOS, FUSIONES) A CIERTOS ACREEDORES QUE
PUEDAN ESTAR INTERESADOS.
- RENUNCIABILIDAD DEL PRIVILEGIO DE LOS TRABAJADORES QUE TAMBIÉN PUEDEN PARTICIPAR EN
PROGRAMAS DE CAPITALIZACIÓN.
- NOVACIÓN DE CRÉDITOS POR HOMOLOGACIÓN DEL ACUERDO.
- EL ACUERDO DE GRUPOS QUE PERMITE EL TRATAMIENTO DEL PATRIMONIO DE LOS DISTINTOS SUJETOS
COMO SI FUERA ÚNICO O COMO SI FUERAN DISTINTOS, PARA DETERMINAR EL CONTENIDO DE LA
PROPUESTA QUE FACILITA PROCESOS DE REORGANIZACIÓN COMO FUSIONES O CONSTITUCIÓN DE LA
SOCIEDAD CON LOS ACREEDORES.
En general la mayor parte de las reformas se dirigieron a autorizar, viabilizar y facilitar reformas
estructurales de la empresa para que ésta pueda superar las causas que la han llevado a la cesación de
pagos, y en caso de fracaso a posibilitar la cesión de la empresa a un tercero.
Se mantiene la cesación de pago como presupuesto del concurso preventivo y de la quiebra.
A partir de la sanción de la ley 22.917 de 1983 que reforma parcialmente la ley 19.551 el sistema concursal
Argentino es único tanto para comerciantes como para no comerciantes, personas humanas y jurídicas,
personas jurídicas regularmente constituidas y de hecho. Todos los sujetos quedan sometidos al mismo
régimen legal.
En la ley 19.551 no eran susceptibles de concursamiento las sociedades en que el Estado formaba parte, ni
siquiera la Sociedad Anónima con participación mayoritaria del Estado. En cambio en la ley vigente se
incluyen las sociedades en que el Estado Nacional, Provincial y Municipal sea parte. Estas sociedades
podrán presentarse pidiendo la apertura del concurso preventivo o ser declaradas en quiebra, acabándose
los privilegios que tenían. Esta reforma se inspira en la idea de que el Estado debe ser un empresario
eficiente o no serlo porque sino distorsiona el mercado, medida vinculada a las privatizaciones.
No obstante siguieron excluidos algunos sujetos como mutuales, compañías de seguro, bancos y
administradores de fondos de pensión o jubilaciones.
· El rol de los acreedores en el concurso: la ley 24.522 pretende revitalizar el rol de los acreedores tanto en
el concurso preventivo como en la quiebra.
- Comités de acreedores: Desde el momento de apertura del concurso preventivo comienza a funcionar el
comité de acreedores, compuesto inicialmente por los tres acreedores quirografarios de mayor monto
denunciados por el deudor y por un acreedor por cada categoría (Artículo 42, segundo párrafo LCQ).
ARTICULO 42.- Resolución de categorización. “Dentro de los diez (10) días siguientes a la finalización del
plazo fijado en el artículo 40, el juez dictará resolución fijando definitivamente las categorías y los
acreedores comprendidos en ellas.
Constitución del comité de control. En dicha resolución el juez designará a los nuevos integrantes del comité
de control, el cual quedará conformado como mínimo por un (1) acreedor por cada categoría de las
establecidas, debiendo integrar el mismo necesariamente el acreedor de mayor monto dentro de la
categoría y por dos (2) nuevos representantes de los trabajadores de la concursada, elegidos por los
trabajadores, que se incorporarán al ya electo conforme el artículo 14, inciso 13. El juez podrá reducir la
cantidad de representantes de los trabajadores cuando la nómina de empleados así lo justifique. A partir de
ese momento cesarán las funciones de los anteriores integrantes del comité que representan a los
acreedores”.
En la realidad estos comités funcionaron sólo en concursos de gran significación económica (Super canal
S.A, Comercial del Plata S.A). Rivera sostiene que los acreedores Argentinos le suelen temer a eventos de
responsabilidades.
- Categorización de los acreedores: Se funda una idea de igualdad de los acreedores, con la solución legal
según la cual el deudor debe ofrecer a sus acreedores una propuesta idéntica para todos. No obstante no
escapa la realidad de que no todos los acreedores son iguales (laborales, financieros, proveedores de
materia prima, proveedores de servicios, etcétera). Lo que se quiere evitar es que el deudor cree categoría
cenicienta.
- Propuestas de acuerdo preventivo por terceros: La innovación más importante de la ley estuvo dada por
la posibilidad de que terceros o los mismos acreedores hagan propuestas de acuerdo preventivo, una vez
que el deudor hubiera fracasado en obtener la conformidad de los acreedores a su oferta.
La ley Argentina vigente ha optado por dar al deudor un período de exclusividad y si no obtiene la mayoría,
en vez de decretarse la quiebra se abre un período en el cual otros (acreedores o deudores) puedan hacer
propuestas de acuerdo preventivo en vez de decretarse la quiebra. Esto es a partir de la ley 25.589 del
2002.
- Enajenaciones en la quiebra: La ley 24.522 pretende que la liquidación de los activos se haga de manera
inmediata y expedita ya que considera que la subsistencia de la quiebra constituye un mal social porque
genera gastos con el deterioro de los bienes abandonados a su suerte. Por eso la ley manda que la orden
de enajenación se incluya en el mismo auto de quiebra (Artículo 88 inciso 9 LCQ). ARTICULO 88.-
Contenido. “La sentencia que declare la quiebra debe contener: 9) Orden de realización de los bienes del
deudor y la designación de quien efectuará las enajenaciones”.
- Continuación de la empresa en la quiebra: la continuación de la empresa constituyó una fuente de
dilaciones del proceso de la quiebra así como de postergación de los intereses de los acreedores. Ahora
esta ley atribuye la continuación de la empresa o establecimiento en carácter excepcional. Así, la
continuación inmediata por decisión del síndico puede adoptarse cuando de la interrupción pudiera
resultar un daño grave al interés de los acreedores y a la conservación del patrimonio (Artículo 189 LCQ).
ARTICULO 189.- Continuación inmediata. “El síndico puede continuar de inmediato con la explotación de la
empresa o alguno de sus establecimientos, si de la interrupción pudiera resultar con evidencia un daño
grave al interés de los acreedores y a la conservación del patrimonio, si se interrumpiera un ciclo de
producción que puede concluirse o entiende que el emprendimiento resulta económicamente viable.
También la conservación de la fuente de trabajo habilita la continuación inmediata de la explotación de la
empresa o de alguno de sus establecimientos, si las dos terceras partes del personal en actividad o de los
acreedores laborales, organizados en cooperativa, incluso en formación, la soliciten al síndico o al juez, si
aquél todavía no se hubiera hecho cargo, a partir de la sentencia de quiebra y hasta cinco (5) días luego de
la última publicación de edictos en el diario oficial que corresponda a la jurisdicción del establecimiento. El
síndico debe ponerlo en conocimiento del juez dentro de las veinticuatro (24) horas. El juez puede adoptar
las medidas que estime pertinentes, incluso la cesación de la explotación, con reserva de lo expuesto en los
párrafos siguientes. Para el caso que la solicitud a que refiere el segundo párrafo el presente, sea una
cooperativa en formación, la misma deberá regularizar su situación en un plazo de cuarenta (40) días, plazo
que podría extenderse si existiesen razones acreditadas de origen ajeno a su esfera de responsabilidad que
impidan tal cometido. (Párrafo sustituido por art. 16 de la Ley Nº 26.684 B.O. 30/06/2011)
Empresas que prestan servicios públicos. Las disposiciones del párrafo precedente y las demás de esta
sección se aplican a la quiebra de empresas que explotan servicios públicos imprescindibles con las
siguientes normas particulares:
1) Debe comunicarse la sentencia de quiebra a la autoridad que ha otorgado la concesión o a la que sea
pertinente;
2) Si el juez decide en los términos del Artículo 191 que la continuación de la explotación de la empresa no
es posible, debe comunicarlo a la autoridad pertinente;
3) La autoridad competente puede disponer lo que estime conveniente para asegurar la prestación del
servicio, las obligaciones que resulten de esa prestación son ajenas a la quiebra;
4) La cesación efectiva de la explotación no puede producirse antes de pasados TREINTA (30) días de la
comunicación prevista en el inciso 2)”.
- Reducción de los privilegios: la ley 19.551 fracasó en su pretensión de unificar el régimen de privilegios
aplicando privilegios especiales de otras leyes, por ello la ley 24.522 cierra este régimen y sólo admite la
eficacia de los reconocidos por la ley de concursos, con la salvedad de: ley de entidades financieras, ley de
seguros, ley de navegación y código aeronáutico. También se ha reducido el asiento de los privilegios
laborales, lo que ha recibido fuertes críticas.
- Reducción de los costos causídicos: La ley 24.522 reduce las alícuotas fijadas para determinar los
honorarios de síndicos y otros profesionales. En el concurso preventivo evita que los honorarios de la
sindicatura se conviertan en un problema para el deudor y en la quiebra pretende que los acreedores
quirografarios no vean frustrada su expectativa de cobro por la incidencia de honorarios.
· Limitación de las atribuciones del Juez en el concurso preventivo: Se reduce su función de control de
legalidad y se excluye el de mérito del acuerdo preventivo votado favorablemente por los acreedores. En la
ley 24.522 la decisión de los acreedores de aprobar una propuesta tiene un carácter decisivo y el Juez no
tiene atribuciones para desechar la homologación. La función del juez en el concurso preventivo se limita a
la mera comprobación del cumplimiento de formalidades legales. Este criterio fue sustancialmente
cambiado por la ley 25.589 en el artículo 52 que establece que el Juez no ha de homologar propuestas de
acuerdo preventivo que sean fraudulentas o abusivas.
· Relaciones laborales: El derecho laboral Argentino se originó con los modelos garantistas Europeos y la
ley 19.551 adhería a ellos. Pero hoy el garantismo absoluto está siendo desterrado y en particular cuando
se trata de las crisis empresarias. Las legislaciones están adoptando soluciones que autorizan a las
empresas a restructuración laboral.
- Admisión al pasivo del pronto pago: los acreedores de causa laboral gozan del derecho de pronto pago
como lo establece el artículo 266 de la LCT. En el concurso preventivo se trata de una autorización para
pagar y en la quiebra de la disposición de que los créditos así admitidos serán satisfechos con los primeros
fondos que se recauden. Los créditos admitidos por el pronto pago quedan incorporados al pasivo y, por
ende no tienen que ser verificados porque ya están reconocidos. Se elimina la opción para que ellos inicien
un juicio ante los tribunales laborales, incluso se aplica el fuero de atracción al juicio concursal. Rivera
considera que nada obsta que los trabajadores puedan continuar el proceso y no debería negársele a los
acreedores laborales porque sería consagrar una irrazonable desigualdad en perjuicio de los trabajadores.
· La novación: El artículo 55 de la LCQ dispone que en todos los casos el acuerdo homologado importa la
novación de todas las obligaciones con origen o causa anterior al concurso. Esta disposición es un cambio a
lo que decía la ley 19.551 en la cual los acreedores recobraban sus derechos originales.
ARTICULO 55.- Novación. “En todos los casos, el acuerdo homologado importa la novación de todas las
obligaciones con origen o causa anterior al concurso. Esta novación no causa la extinción de las
obligaciones del fiador ni de los codeudores solidarios”.
· El acuerdo extrajudicial: La ley 24.522 creó un procedimiento destinado a homologar judicialmente los
acuerdos privados celebrados con acreedores que representen una mayoría de capital. Esa homologación
no hacía el acuerdo obligatorio para los acreedores que no lo hubieren suscripto, quienes conservaban sus
acciones individuales.
Se señalo que con esta institución la ley enviaba un mensaje a deudores y acreedores que era el de la
conveniencia de recurrir al procedimiento extrajudicial. Sin embargo no existen prácticamente casos de
acuerdos extrajudiciales homologados.
La ley 25.589 modificó el régimen de acuerdos extrajudiciales, acercándolo al del derecho americano que
autoriza la homologación de acuerdos extrajudiciales con la sola comprobación de haberse obtenido la
doble mayoría legal. Ese acuerdo tiene todos los efectos del acuerdo preventivo judicial por lo que es
oponible a acreedores disidentes y a quienes no participaron del procedimiento.
· El concursamiento de grupos: Concursos de dos o más sociedades que constituyen un grupo económico.
La ley 19.551 sólo admitía el concursamiento individual y, el grupal sólo en la hipótesis de extensión de
quiebra. En cambio, la ley vigente lo contempla.
· La ley 25.563: Fue sancionada en el año 2002 por el Congreso de la Nación y en un contexto histórico de
crisis y de situación de emergencia de la Argentina que venía desde el 2001. Se deroga el artículo 48 LCQ,
durante el concurso no era posible un take over. Además los acreedores estaban obligados a aceptar
cualquier acuerdo preventivo, incluso debajo del tope del 40%, también eliminado y a soportar los efectos
de la quiebra. Por otro lado mientras duraba el concurso tampoco se podría ejecutar la prenda de las
acciones.
· La ley 25.589: la ley 25.563 recibió fuertes críticas, sobre todo de los empresarios que tuvieron
dificultades para el acceso al crédito, aunque no fue por la ley sino por la situación del país.
La ley 25.589 deroga las reglas de emergencia de la ley 25.563 (artículos 8, 9, 11 y 15), restablece reglas
derogadas de la 24.522 y realiza reformas.
El artículo 8 de la ley 25.563 extendía por 180 días el período de exclusividad de los juicios de concurso
preventivo en trámite, el artículo 9 establecía un período de gracia.
Por otro lado se restablecen el artículo 55 de la ley 24.522 y el 48.
En cuanto a las innovaciones son:
- el régimen de verificación y voto de representantes colectivos: pretende abarcar la situación de los
fiduciarios que tienen legitimación en el derecho argentino ya que este se rige por créditos representados
BOLILLA III
1. LA QUIEBRA.
1- CONCEPTO. EVOLUCIÓN DEL INSTITUTO.
2- QUIEBRA DE HECHO Y QUIEBRA DE DERECHO; QUIEBRA VIRTUAL; LA BANCARROTA (SIGNIFICADO DE
LA EXPRESIÓN EN EL DERECHO COMPARADO Y EN EL DERECHO VIGENTE). QUIEBRA DE SOCIEDADES.
3- LOS FINES DE LA QUIEBRA; LOS INTERESES COMPROMETIDOS.
4-LA EXTENSIÓN DE LA QUIEBRA.GRUPOS ECONÓMICOS.
1. LA QUIEBRA.
1- CONCEPTO. EVOLUCIÓN DEL INSTITUTO: La quiebra es considerada como una ejecución colectiva a
través de un mecanismo de reestructuración del pasivo de un deudor en estado de cesación de pagos, que
importa la liquidación de todos sus bienes con el objeto de pagar a todos sus acreedores a través del
producido de dicha liquidación. Es un juicio de carácter universal, ya que afecta todos los bienes del deudor
(universalidad activa) y convoca a todos los acreedores que pretender cobrar a participar en él (universalidad pasiva o
colectividad).
Como consecuencia lógica del agotamiento del activo a liquidar y repartir, la liquidación de todos los
bienes sujetos a desapoderamiento, produce la extinción de todas las obligaciones del deudor concursado,
de causa o título anterior a la sentencia de quiebra. Ello a diferencia de la ejecución individual, donde el
agotamiento del activo no produce tales efectos.
La ejecución individual cuando hay pluralidad de acreedores que concurren sobre bienes escasos resulta
insatisfactoria. Se muestra como más apropiada otra forma de tutela judicial de los créditos, a la que
llamamos ejecución forzada colectiva, liquidación concursal o, simplemente, quiebra (como proceso).
A diferencia de la ejecución individual, en la ejecución colectiva el deudor debe enfrentarse con todos los
acreedores, los cuales persiguen el cobro de sus créditos o del mayor porcentaje posible de ellos,
liquidando todos los bienes dentro de un procedimiento universal.
La prioridad temporal que asigna mejor derecho en las ejecuciones individuales, no se aplica en la
ejecución forzada colectiva o proceso de quiebra. Es más, las cautelas obtenidas en las ejecuciones
individuales no asignan prioridad alguna en el proceso de quiebra.
La concurrencia en la quiebra se resuelve de la siguiente manera:
· En primer lugar, ha de estarse a la jerarquía de los créditos derivada de la existencia de privilegios.
·Luego, salvado el orden de los privilegios, en caso de insuficiencia de activo para satisfacer la totalidad de
sus acreencias, el reparto del producto escaso se hace proporcionalmente o a prorrata.
Así, se efectiviza de manera real un principio que es propio de la concursalidad y que es conocido como
“pars condijo creditorum” (igualdad o paridad de tratamiento de los créditos). Ello no significa que todos
los acreedores sean iguales, sino que a quienes son iguales se los trata de igual modo, compartiéndose las
pérdidas de manera proporcional.
El presupuesto objetivo de apertura de la quiebra es el estado de cesación de pagos o insolvencia del
patrimonio del deudor. Se configura ese presupuesto cuando el patrimonio del deudor resulta impotente
para afrontar, con medios regulares de pago, las deudas o exigibilidades corrientes.
La ejecución o liquidación colectiva es un proceso único, signado por los principios de concentración,
celeridad y economía. Dentro del territorio nacional no pueden coexistir, contemporáneamente y con
relación al mismo patrimonio del mismo sujeto, dos quiebras.
Mientras en las ejecuciones individuales de créditos solo entran en juego los intereses privados de
acreedor demandante y deudor demandado, en la quiebra se ponen en juego intereses de mayor
generalidad. Cuando el patrimonio quebrado está afectado a actividades empresariales, resultan
comprometidos intereses que exceden los del deudor y sus acreedores. Ello explica la restricción del
principio dispositivo en la ejecución colectiva, y la vigencia de ciertos aspectos del principio inquisitivo.
La ejecución colectiva tiene mayor intensidad cautelar sobre la persona y sobre los bienes del deudor
quebrado. Todos los bienes del patrimonio resultan incautados y entregados al síndico para su custodia y
administración hasta la liquidación judicial. El quebrado pierde las facultades de administración y
disposición de los bienes. Por un cierto período, el deudor quebrado es inhabilitado personalmente, lo cual
le impone numerosas restricciones a sus actividades.
LA BANCARROTA:
· Significado en el derecho comparado: La palabra bancarrota viene del italiano del siglo XVI banca rotta,
literalmente "banca rota", por la antigua costumbre de Italia de romper las sillas de los prestamistas que
caían en insolvencia financiera.
· En el derecho vigente: Una quiebra o bancarrota es una situación jurídica en la que una persona (persona
humana), empresa o institución (personas jurídicas) no puede hacer frente a los pagos que debe realizar
(pasivo exigible), porque estos son superiores a sus recursos económicos disponibles (activos).
LOS INTERESES COMPROMETIDOS: Hay dos, uno es el interés de los acreedores que buscan el cobro de sus
créditos y el otro es el interés del deudor que busca pagar sus obligaciones sin verse tan afectado, es decir,
no perdiendo todo su activo.
Otro interés se da cuando en el supuesto de que una empresa quiebre. Desde su nacimiento y hasta hace
relativamente pocos años tanto en el concurso preventivo como en la quiebra se buscaba prioritariamente
la satisfacción de los acreedores, sin embargo, tal eje de prioridades ha cambiado y prima la idea de salvar
la empresa incluso a costa de ciertos sacrificios de los acreedores. Hoy en día la enajenación de la empresa
como unidad (en funcionamiento) es la primera alternativa legal a la que deberá acudir el juez concursal
(porque se encuentra comprometido el interés de la sociedad en su conjunto –por ejemplo, los
trabajadores, etcétera… todo el circuito del mercado).
4- LA EXTENSIÓN DE LA QUIEBRA: Es otro medio de incrementar el activo liquidable para su reparto entre
los acreedores. La ley contempla diversos supuestos en los cuales la quiebra preexistente se propaga o
extiende a otro sujeto, a quien se declara en quiebra “refleja” o “por extensión –SE REFIERE MÁS A LOS
GRUPOS ECONÓMICOS-”.
El interés legalmente tutelado es el de los acreedores de la quebrada principal.
Es un instituto que funciona sólo en las quiebras liquidativas. Inaplicable cuando la quiebra principal
concluye de modo no liquidativo. Inaplicable, asimismo, si no hay daño para los acreedores de la quebrada
principal. Tampoco rige en el concurso preventivo.
El ámbito de aplicación más frecuente e importante es el campo de las falencias societarias.
La extensión de quiebra es, también, un modo de declarar la quiebra, que se caracteriza porque sus
presupuestos son diferentes de los demás casos. La principal distinción radica en la indiferencia del estado
de cesación de pagos del patrimonio del sujeto a quien se declara en quiebra por extensión.
Los presupuestos de la quiebra por extensión son: la existencia de una quiebra principal y la configuración
entre el quebrado principal y el sujeto a quien se pretende extender esa quiebra, de una relación tipificada
legalmente como caso de extensión.
Al ser una excepción al principio general concursal, es de interpretación restrictiva.
ARTÍCULO 161.- Actuación en interés personal. Controlantes. Confusión patrimonial. “La quiebra se
extiende:
1) A toda persona que, bajo la apariencia de la actuación de la fallida, ha efectuado los actos en su interés
personal y dispuesto de los bienes como si fueran propios, en fraude a sus acreedores;
2) A toda persona controlante de la sociedad fallida, cuando ha desviado indebidamente el interés social
de la controlada, sometiéndola a una dirección unificada en interés de la controlante o del grupo
económico del que forma parte.
A los fines de esta sección, se entiende por persona controlante:
a) aquella que en forma directa o por intermedio de una sociedad a su vez controlada, posee participación
por cualquier título, que otorgue los votos necesarios para formar la voluntad social;
b) cada una de las personas que, actuando conjuntamente, poseen participación en la proporción indicada
en el párrafo a) precedente y sean responsables de la conducta descrita en el primer párrafo de este inciso.
3) A toda persona respecto de la cual existe confusión patrimonial inescindible, que impida la clara
delimitación de sus activos y pasivos o de la mayor parte de ellos”.
2. EL CONCURSO PREVENTIVO.
1- CONCEPTO. EVOLUCIÓN DEL INSTITUTO. LOS FINES DEL CONCURSO PREVENTIVO, LOS INTERESES
COMPROMETIDOS. EL CONCURSO PREVENTIVO Y LA FINANCIACIÓN DE LA ACTIVIDAD EMPRESARIA.
EL CONCURSO PREVENTIVO. CONCEPTO: Concurso es una voz genérica que tiene dos especies: la quiebra,
que es el proceso concursal enderezado a la liquidación; y el concurso preventivo que es el proceso
concursal de prevención o reorganización. El concurso preventivo judicial tiene por finalidad recomponer el
patrimonio del deudor en cesación de pagos, mediante un acuerdo con sus acreedores, que si es
homologado y cumplido, le permitirá superar la crisis patrimonial y volver “in bonis” al mercado.
Además, posibilita que el deudor continúe con su actividad mientras tramita el concurso -sin perjuicio de
ciertas limitaciones- y permite la generación de ingresos genuinos para hacer frente al acuerdo -a través de
la prohibición de pagar a los acreedores concursales, suspensión de intereses y actos de ejecución
forzada-, lo cual le dará oxígeno para hacer frente al acuerdo que eventualmente se homologue.
EVOLUCIÓN DEL INSTITUTO: Históricamente, la quiebra es muy anterior al concurso preventivo, y nació
como forma especial de tutela de los derechos de los acreedores, ante los resultados insatisfactorios a que
conducía la ejecución individual de activos insuficientes en el patrimonio del deudor. La liquidación de los
bienes del patrimonio del deudor insolvente es el propósito que alienta a este proceso.
Con el correr de muchos siglos fueron elaborándose ciertos mecanismos jurisdiccionales tendientes a dar
solución a los conflictos del deudor insolvente con los acreedores, pero sin liquidar los bienes o, al menos,
sin liquidarlos de manera forzada, masiva, y con todas las gravosas consecuencias personales que la
quiebra siempre tuvo para los fallidos. Estos procedimientos procuraban evitar la quiebra, poner fin a la
insolvencia antes de llegar a esa etapa. En los últimos años, una corriente doctrinal cada vez más difundida,
pone de resalto que estos mecanismos se instituyen legalmente como oportunidad para que el deudor
insolvente reorganice la estructura financiera de su pasivo, y que, si tiene actividad empresarial, lo haga de
modo de prevenir la declaración de quiebra, y, principalmente, solucionar las verdaderas causas de la crisis
empresaria o del estado de cesación de pagos. Por eso, los que tradicionalmente fueron llamados procesos
concursales preventivos o de prevención, actualmente se los denomina procesos concursales de
reorganización. Nuestra ley concursal, sin embargo, sigue utilizando la más tradicional nomenclatura de
concurso preventivo.
Finalmente, puede señalarse que, junto a los procesos concursales clásicos, existen otros mecanismos más
informales de solución de la insolvencia y de las crisis económicas o financieras de carácter general,
denominados acuerdos preconcursales o paraconcursales. No son estrictamente concursos, sino métodos
alternativos de prevención o de solución de las crisis económicas y financieras generales o del mismo
estado de cesación de pagos. En principio, se rigen por la legislación común. De ahí que los acuerdos pre
concursales puramente extrajudiciales, celebrados por el deudor con acreedores son verdaderos contratos.
Sin embargo, dichos acuerdos pueden ser sometidos a un procedimiento concursal abreviado para
convertirlos en verdaderos acuerdos preventivos con fuerza obligatoria.
LOS FINES DEL CONCURSO PREVENTIVO: La finalidad del concurso preventivo es que el deudor supere el
estado de cesacion de pagos a traves de un acuerdo con sus acreedores, que si es homologado y cumplido,
le permitira seguir con su actividad y conservar la empresa.
LOS INTERESES COMPROMETIDOS: Los intereses comprometidos son múltiples. No sólo le interesa al
deudor en cesación de pagos como mecanismo para recomponer su patrimonio y superar la crisis
patrimonial en la que está envuelto, sino también a sus acreedores, quienes no sólo tendrán en sus manos
un mecanismo para percibir sus créditos (tutela del crédito), sino que podrán participar en el trámite
tendiente a reestructurar el pasivo del deudor. También está interesado el trabajador, quien no sólo puede
revestir la condición de acreedor, sino que va a estar interesado en mantener su fuente de trabajo (que
perdería en una eventual quiebra); el proveedor, interesado en colocar sus productos en la empresa
concursada; el consumidor, interesado en consumir los bienes y servicios que la empresa brinda; el Estado,
interesado en un mayor empleo y productividad, en el cobro de impuestos y generación de riqueza que
origina la producción. Todo ello hace que se encuentre comprometido el interés general, máxime cuando
la cesación de pagos de un sujeto puede repercutir en otros.
La verificación produce cosa juzgada, salvo dolo (arts. 37 y 38, L.C.); la exageración fraudulenta del pasivo y
la ocultación o exageración fraudulenta del activo, son causales que impiden homologar el acuerdo (art.
50, incs. 3 y 4, L.C.); en ningún caso el juez homologará una propuesta abusiva o en fraude a la ley (art. 52,
inc. 4, L.C.); y en caso de dolo empleado para exagerar el pasivo, reconocer o aparentar privilegios
inexistentes o constituidos ilícitamente, y ocultar o exagerar el activo, son causales para la nulidad del
acuerdo homologado (art. 60, L.C.).
ARTICULO 37.- Efectos de la resolución. La resolución que declara verificado el crédito y, en su caso, el privilegio, produce los efectos de la cosa
juzgada, salvo dolo.La que lo declara admisible o inadmisible puede ser revisada a petición del interesado, formulada dentro de los VEINTE (20)
días siguientes a la fecha de la resolución prevista en el artículo 36. Vencido este plazo, sin haber sido cuestionada, queda firme y produce
también los efectos de la cosa juzgada, salvo dolo.
ARTICULO 38.- Invocación de dolo. Efectos. Las acciones por dolo a que se refiere el artículo precedente tramitan por vía ordinaria ante el
juzgado del concurso, y caducan a los NOVENTA (90) días de la fecha en que se dictó la resolución judicial prevista en el artículo 36. La
deducción de esta acción no impide el derecho del acreedor a obtener el cumplimiento del acuerdo, sin perjuicio de las medidas precautorias
que puedan dictarse.
ARTICULO 50. Impugnación. Los acreedores con derecho a voto, y quienes hubieren deducido incidente, por no haberse presentado en
término, o por no haber sido admitidos sus créditos quirografarios, pueden impugnar el acuerdo, dentro del plazo de cinco (5) días siguientes a
que quede notificada por ministerio de la ley la resolución del artículo 49.
ARTICULO 52.- Homologación. No deducidas impugnaciones en término, o al rechazar las interpuestas, el juez debe pronunciarse
sobre la homologación del acuerdo.
ARTICULO 60.- Sujetos y término. El acuerdo homologado puede ser declarado nulo, a pedido de cualquier acreedor comprendido en él,
dentro del plazo de caducidad de SEIS (6) meses, contados a partir del auto que dispone la homologación del acuerdo.
Causal. La nulidad sólo puede fundarse en el dolo empleado para exagerar el pasivo, reconocer o aparentar privilegios inexistentes o
constituidos ilícitamente, y ocultar o exagerar el activo, descubiertos después de vencido el plazo del Artículo 50.
DIFERENCIAS: Las ventajas prácticas de estos medios no judiciales de solución de las dificultades
empresariales son la informalidad, rapidez, economía y discreción, frente a la mayor lentitud, formalismo,
repercusión pública y onerosidad de los procedimientos judiciales. El incumplimiento de estos acuerdos se
rige por la legislación contractual y, en consecuencia, no da lugar a la automática declaración de quiebra
del deudor.
Nada impide que el deudor en dificultades financieras o económicas, o en estado de cesación de pagos,
celebre con todos o parte de los acreedores acuerdos preconcursales. Ello es lícito y posible mientras la
quiebra no se hubiera declarado. La Constitución nacional permite hacer lo que no está legalmente
prohibido, el principio de autonomía de la voluntad en materia negocial es regla en el derecho privado, y
en la ley concursal ya no existen plazos para solicitar el propio concurso o quiebra, ni hay sanciones a la
demora en hacerlo.
EFECTOS: Si estos acuerdos consiguen éxito en la superación de la crisis o la insolvencia habrán cumplido
su función de instrumentos de reorganización informal. Si estos acuerdos fallan y se declara la quiebra del
deudor, los actos otorgados como consecuencia de esta clase de acuerdos preconcursales serán apreciados
con las normas comunes de la ineficacia falencial y podrán ser declarados inoponibles en la quiebra.
OPONIBILIDAD EN LA QUIEBRA:
Los actos concluidos entre el deudor en dificultades y un número significativo de sus acreedores, en un
acuerdo global y homologado judicialmente, no pueden ser declarados ineficaces en una quiebra posterior
del deudor.
ARTICULO 69: Legitimado. El deudor que se encontrare en cesación de pagos o en dificultades económicas o financieras de carácter general,
puede celebrar un acuerdo con sus acreedores y someterlo a homologación judicial.
ARTICULO 70: Forma. El acuerdo puede ser otorgado en instrumento privado, debiendo la firma de las partes y las representaciones invocadas
estar certificadas por escribano público. Los documentos habilitantes de los firmantes, o copia autenticada de ellos, deberán agregarse al
instrumento.
ARTICULO 71: Libertad de contenido. Las partes pueden dar al acuerdo el contenido que consideren conveniente a sus intereses y es obligatorio
para ellas aun cuando no obtenga homologación judicial, salvo convención expresa en contrario.
ARTICULO 72: Requisitos para la homologación. Para la homologación del acuerdo deben presentarse al juez competente, conforme lo
dispuesto en el artículo 3º, junto con dicho acuerdo, los siguientes documentos debidamente certificados por contador público nacional:
1. Un estado de activo y pasivo actualizado a la fecha, del instrumento con indicación precisa de las normas seguidas para su
valuación;
2. Un listado de acreedores con mención de sus domicilios, monto de los créditos, causas, vencimientos, codeudores, fiadores o
terceros obligados y responsables; la certificación del contador debe expresar que no existen otros acreedores registrados y
detallar el respaldo contable y documental de su afirmación;
3. Un listado de juicios o procesos administrativos en trámite o con condena no cumplida, precisando su radicación;
4. Enumerar precisamente los libros de comercio y de otra naturaleza que lleve el deudor, con expresión del último folio
utilizado a la fecha del instrumento;
5. El monto de capital que representan los acreedores que han firmado el acuerdo, y el porcentaje que representan respecto de
la totalidad de los acreedores registrados del deudor.
Ordenada la publicación de los edictos del artículo 74, quedan suspendidas todas las acciones de contenido patrimonial contra
el deudor, con las exclusiones dispuestas por el artículo 21
ARTICULO 73: Mayorías. Para que se dé homologación judicial al acuerdo es necesario que hayan prestado su conformidad la
mayoría absoluta de acreedores quirografarios que representen las dos terceras partes del pasivo quirografario total,
excluyéndose del cómputo a los acreedores comprendidos en las previsiones del artículo 45.
ARTICULO 74: Publicidad. La presentación del acuerdo para su homologación debe ser hecha conocer mediante edictos que se
publican por cinco (5) días en el diario de publicaciones legales de la jurisdicción del tribunal y un (1) diario de gran circulación
del lugar. Si el deudor tuviere establecimientos en otra jurisdicción judicial debe publicar los edictos por el mismo plazo en el
lugar de ubicación de cada uno de ellos y en su caso en el diario de publicaciones oficiales respectivo.
ARTICULO 75: Oposición. Podrán oponerse al acuerdo los acreedores denunciados y aquellos que demuestren sumariamente
haber sido omitidos en el listado previsto en el inciso 2 del artículo 72. La oposición deberá presentarse dentro de los diez
(10) días posteriores a la última publicación de edictos, y podrá fundarse solamente en omisiones o exageraciones del activo
o pasivo o la inexistencia de la mayoría exigida por el artículo 73. De ser necesario se abrirá a prueba por diez (10) días y el
juez resolverá dentro de los diez (10) días posteriores a la finalización del período probatorio.
Si estuvieren cumplidos los requisitos legales y no mediaran oposiciones, el juez homologará el acuerdo.
La regulación de honorarios, en caso de existir impugnaciones, será efectuada por el juez teniendo en cuenta exclusivamente la
magnitud y entidad de los trabajos realizados por los profesionales en el expediente, sin tomar en cuenta el valor económico o
comprometido en el acuerdo, ni el monto del crédito del impugnante.
ARTICULO 76: Efectos de la homologación. El acuerdo homologado conforme a las disposiciones de esta sección produce los
efectos previstos en el artículo 56, y queda sometido a las previsiones de las Secciones III, IV y V del Capítulo V del Título II de
esta ley.
La ley de concursos y quiebras excluye de los concursos tanto a las compañías de seguro como las
administradoras de fondo de jubilaciones y pensiones. Además de ellos hay otros sujetos excluidos por
leyes especiales, tales como las entidades financieras, las sociedades accidentales y el patrimonio
fiduciario, que según la ley de fideicomiso tiene una manera especial de liquidación.
En cuanto a las entidades financieras, están reguladas por el marco legal de la ley Nº 21.526. La insolvencia
de las mismas no es tratada como la de las empresas o personas físicas. Los bancos inseguros ponen en
riesgo a todo el sistema financiero y la confianza pública en el sistema así como el peligro de las corridas
bancarias. Además, en caso de quiebra hay que asegurar la protección de los depositantes que son sujetos
superprivilegiados. La legislación bancaria contiene, por ende, normas especiales para la reestructuración
y la liquidación forzosa.
Según la ley de entidades financieras (21.526), para funcionar como banco es necesaria la autorización del
BCRA, el cual también puede resolver esa autorización para funcionar:
o Por afectación de la solvencia y/o liquidez de la entidad que, a juicio del BCRA, no pudiera
resolverse por medio de un plan de regularización y saneamiento.
La resolución que dispone la revocación es apelable al solo efecto devolutivo ante la Cámara Federal en lo
Contencioso Administrativo (artículo 47). El juez puede pedir que cese la liquidación o liquidación judicial
cuando haya insolvencia (salvo que corresponda quiebra). Además, si el BCRA no pide la quiebra, el juez
puede pedirla.
ARTICULO 44. — “El Banco Central de la República Argentina podrá resolver la revocación de la autorización para funcionar de las entidades
financieras:
a) A pedido de las autoridades legales o estatutarias de la entidad;
b) En los casos de disolución previstos en el Código de Comercio o en las leyes que rijan su existencia como persona jurídica;
c) Por afectación de la solvencia y/o liquidez de la entidad que, a juicio del Banco Central de la República Argentina, no pudiera resolverse por
medio de un plan de regularización y saneamiento;
d) En los demás casos previstos en la presente ley.
Al resolver la revocación de la autorización para funcionar o durante el período de suspensión transitoria de una Entidad Financiera, el BANCO
CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA podrá ordenar que se efectivice el pago de los acreedores laborales previstos en el inciso b) del Artículo
53, y a los depositantes del privilegio general previsto en los apartados i) e ii) del inciso e) del artículo 49, respetando el orden de prelación
respectivo y distribuyendo los fondos de que disponga la entidad a prorrata entre los acreedores de igual rango, cuando fueren insuficientes.”
ARTICULO 45. — “El Banco Central de la República Argentina deberá notificar de inmediato y de manera fehaciente la resolución adoptada a
las autoridades legales o estatutarias de la ex entidad y al y al juzgado comercial competente, en su caso.
En los casos previstos en los incisos a) y b) del artículo 44 de la presente ley, si las autoridades legales o estatutarias de la entidad lo solicitaren
al juez de la causa, y éste considerare que existen garantías suficientes podrá, previa conformidad del Banco Central de la República Argentina,
el que deberá expedirse en el plazo de cinco (5) días autorizarlas o disponer a que ellas mismas administren el proceso de cese de la actividad
reglada o de liquidación de la entidad. En cualquier estado del proceso de autoliquidación de la Entidad o de la persona jurídica, el juez podrá
disponer la continuidad de las mismas por la vía judicial si se dieran los presupuestos de la legislación societaria o concursal para adoptar tal
determinación.
Cuando se verifique la causal prevista en el inciso c) del artículo 44 de la presente ley, aunque concurra con cualquier otra, o cuando se trate del
supuesto previsto en el inciso d) del mismo artículo, sólo procederá la liquidación judicial de la ex entidad, salvo que correspondiere su quiebra y
sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 35 bis de la presente ley.
Cuando las autoridades legales o estatutarias de una entidad soliciten su liquidación directamente al Juez, previo a todo trámite éste notificará
al Banco Central de la República Argentina para que tome la intervención que le corresponde conforme a esta ley.
Si la resolución de revocación de la autorización para funcionar dispusiere el pedido de quiebra de la ex entidad, el juez interviniente
deberá expedirse de inmediato. No mediando petición de quiebra por el Banco Central de la República Argentina el Juez podrá decretarla en
cualquier estado del proceso cuando estime que se hayan configurado los presupuestos necesarios.
Los honorarios de los peritos o auxiliares que el Juez Interviniente designare a los fines de la presente ley, deberán fijarse en función de la tarea
efectivamente realizada por aquéllos, con absoluta independencia de la cuantía de los activos, pasivos o patrimonio de la entidad”.
ARTICULO 46. — “A partir de la notificación de la resolución que dispone la revocación de la autorización para funcionar y hasta tanto el Juez
competente resuelva el modo del cese de la actividad reglada o de la liquidación de la ex entidad, serán nulos cualquier tipo de compromisos
que aumenten los pasivos de la misma y cesará su exigibilidad y el devengamiento de sus intereses.
La autoliquidación, la liquidación judicial y/o la quiebra de las entidades financieras quedarán sometidas a lo prescripto por las Leyes N. 19.550
y N. 24.522 en todo aquello que no se oponga a lo dispuesto en la presente ley.
En los procesos de autoliquidación, liquidación o quiebra al requerimiento del Juzgado Interviniente, el Banco Central de la República Argentina
deberá informar y prestar asistencia técnica sobre los asuntos de su conocimiento en virtud del ejercicio de sus funciones de superintendencia
cumplidas con anterioridad a la revocación de la autorización para funcionar”.
ARTICULO 47. — “La resolución que disponga la revocación de la autorización para funcionar será apelable, al solo efecto devolutivo, por ante
la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal de la Capital Federal. El recurso deberá interponerse y fundarse
ante el Banco Central de la República Argentina dentro de los quince (15) días hábiles siguientes”.
En cuanto a la autoliquidación, la misma se tramita por la ley 19. 550 y la quiebra por la ley de concursos y
quiebras 24.522.
La ley de entidades financieras también regula el caso de liquidación judicial y quiebra de las entidades
financieras. La liquidación judicial en el artículo 49 y la quiebra en el artículo 50 de la siguiente manera:
ARTICULO 49. —“La liquidación judicial se realizará de acuerdo a las siguientes disposiciones y con aplicación de las normas sobre liquidación
de sociedades, en lo que no queda expresamente contemplado a continuación:
a) Desde la resolución de revocación de la autorización para funcionar, ningún acreedor por causa o título anterior a la revocación podrá iniciar
o proseguir actos de ejecución forzada sobre los bienes de la ex entidad, salvo que tuvieren por objeto el cobro de un crédito hipotecario,
prendario o derivado de una relación laboral.
Los embargos y/o inhibiciones generales trabados, no podrán impedir la realización de los bienes de la ex entidad y deberán recaer sobre el
producido de su realización, por hasta los montos origninalmente constituidos;
b) La resolución que disponga la liquidación judicial tendrá la misma publicidad que la establecida por la Ley de Concursos para la declaración
de quiebra, aplicándose de igual modo, en forma analógica, la publicidad y procedimiento para la insinuación y verificación de los créditos que
componen el pasivo. Los pagos a los acreedores deberán efectuarse con la previa conformidad del juez interviniente, en concordancia con el
inciso g), y aplicándose igualmente en forma analógica lo dispuesto por la Ley de Concursos y Quiebras para la liquidación de los bienes y
proyecto de distribución y pago a los acreedores. (Inciso sustituido por el Art. 3º de la Ley Nº 24.485 B.O. 18/4/1995)
c) El liquidador judicial determinará la totalidad de obligaciones exigibles provenientes de depósitos de sumas de dinero, estableciendo la
procedencia del pago y genuinidad de los instrumentos;
d) (Inciso derogado por art. 8°de la Ley N° 25.780 B.O. 8/9/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial, ver aplicación
art. 20 de la misma norma).
e) Con el orden de prelación que resulta de los apartados siguientes tendrán privilegio general para el cobro de sus acreencias por sobre todos
los demás créditos, con excepción de los créditos con privilegio especial de prenda e hipoteca y los acreedores laborales enunciados en los
incisos a) y b) del Artículo 53, los siguientes:
i) Los depósitos de las personas físicas y/o jurídicas hasta la suma de CINCUENTA MIL PESOS ($ 50.000), o su equivalente en moneda
extranjera, gozando de este privilegio una sola persona por depósito. Habiendo más de un titular la suma se prorrateará entre los titulares de
la imposición privilegiada. A los fines de la determinación del privilegio, se computará la totalidad de los depósitos que una misma persona
registre en la entidad.
ii) Los depósitos constituidos por importes mayores, por las sumas que excedan la indicada en el apartado anterior.
iii) Los pasivos originados en líneas comerciales otorgadas a la entidad y que afecten directamente al comercio internacional.
Los privilegios establecidos en los apartados i) e ii) precedentes no alcanzarán a los depósitos constituidos por las personas vinculadas, directa
o indirectamente, a la entidad, según las pautas establecidas o que establezca en el futuro el BANCO CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA.
f) El liquidador judicial realizará informes mensuales a partir del previsto en el quinto párrafo del artículo 48 sobre el estado de la liquidación,
los que permanecerán a disposición de los interesados en el juzgado interviniente en la liquidación.
g) Concluidas las operaciones de liquidación judicial, el liquidador presentará al juez interviniente el balance final con una memoria explicativa
de sus resultados y con un proyecto de distribución de fondos, previa deducción de los importes necesarios para cancelar las deudas que no
hubieren podido ser satisfechas.
De la presentación se dará cuenta por edictos publicados por tres (3) días, en dos (2) diarios del lugar en que la ex entidad haya tenido su sede
social, uno de los cuales será el de anuncios legales.
Los socios y acreedores reconocidos sólo podrán formular impugnaciones al balance final de la liquidación y al proyecto de distribución de
fondos dentro de los treinta (30) días hábiles siguientes al de la última publicación y ellas serán resueltas por el juez en el expediente de la
liquidación, donde los impugnantes tendrán derecho a intervenir en calidad de parte. La sentencia que se dicte tendrá efecto aun con respecto
a quienes no hubieran formulado impugnaciones. Transcurrido el plazo de treinta (30) días hábiles sin que se hubieran producido
impugnaciones, o resueltas éstas judicialmente, tanto el balance como el proyecto de distribución se tendrán por aprobados con las
modificaciones que puedan resultar de la sentencia y se procederá a la distribución;
h) Las sumas de dinero no reclamadas por sus titulares serán depositadas en el juzgado interviniente por el plazo de un (1) año, a contar de la
publicación de la declaración judicial de finalización de la liquidación. Dichos fondos podrán ser invertidos a propuesta del liquidador judicial.
El derecho de los acreedores a percibir los importes que les correspondiere en la distribución prescribirá en el plazo indicado. La prescripción
operará de pleno derecho, destinándose los importes no cobrados al Instituto Nacional de Previsión Social para Jubilados y Pensionados;
i) Distribuidos los fondos o, en su caso, efectuada la entrega indicada precedentemente, el juez, mediante resolución que será publicada por
un (1) día en dos (2) diarios del lugar en que la entidad haya tenido su sede social, uno de los cuales será el de anuncios legales, declarará
finalizada la liquidación.
Los acreedores de la ex entidad sólo podrán accionar contra ella en tanto no haya sido pronunciada la declaración de finalización de la
liquidación y únicamente hasta la concurrencia de los bienes no realizados, fondos no distribuidos o importes no depositados, sin perjuicio de
las acciones que les correspondiere contra los socios en forma individual;
j) Los libros y documentación de la entidad liquidada serán depositadas en el lugar que el juez designe, por el plazo de diez (10) años, a contar
de la fecha de publicación de declaración judicial de finalización de la liquidación, a cuyo vencimiento serán destruidos.
k) Todos los juicios de contenido patrimonial iniciados o a iniciarse en contra de la ex entidad o que afectaren sus activos tramitarán ante el
juez que entienda en la liquidación judicial, sin perjuicio de lo establecido en el primer párrafo del artículo 56 de la presente ley”.
ARTICULO 50. — “Las entidades financieras no podrán solicitar la formación de concurso preventivo ni su propia quiebra. No podrá decretarse
la quiebra de las entidades financieras hasta tanto les sea revocada la autorización para funcionar por el BANCO CENTRAL DE LA REPUBLICA
ARGENTINA. A partir de esa revocación regirá lo dispuesto en el artículo 52 de la presente ley.
Cuando la quiebra sea pedida por circunstancias que la harían procedente según la legislación común, los jueces rechazarán de oficio el pedido
y darán intervención al BANCO CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA para que, si así correspondiere, se formalice la petición de quiebra.
Si la resolución del BANCO CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA que dispone la revocación de la autorización para funcionar, comprendiere
la decisión de peticionar la quiebra de la ex entidad, dicho pedido deberá formalizarse inmediatamente ante el juez competente.
Ante un pedido de quiebra formulado por el liquidador judicial el juez podrá dictarla sin más trámite, conforme lo establecido en el párrafo
anterior o de considerarlo necesario, emplazar al deudor en los términos y plazos que la Ley de Concursos y Quiebras establece, para que
invoque y pruebe cuanto estime conveniente a su derecho”.
Las ex entidades financieras y el acuerdo preventivo extrajudicial: Rivera dice que no hay razón para negarles este tipo de acuerdo a las ex
entidades financieras (aquellas a las que se les ha retirado la autorización para funcionar).
Compañías de seguro: se las excluye del concurso, aun cuando fueran ex compañías de seguros. Rivera
está en contra de esta postura, que es la adoptada por la Cámara Comercial de Nación en el fallo “IAB
Compañía de Seguros s/ Concurso preventivo”. La Cámara dijo que el concurso es una acto vedado por ley,
se evita la solución arbitral para ellas y el estado de cesación de pagos debe llevar a la disolución forzosa
por la autoridad de control.
Sociedades accidentales o en participación, ya que no son personas jurídicas: no pueden ser concursadas,
sino que serán sus integrantes los que respondan por las deudas y no la sociedad como persona diferente a
ellos.
Patrimonio Fiduciario: la ley 24.441 que regula el fideicomiso establece de manera específica que los
bienes fideicomitidos constituyen un patrimonio separado del fiduciario y no pueden ser agredidos por los
acreedores del fiduciante ni del fiduciario. Pero ello no excluye la posibilidad de que el patrimonio
fideicomitido sea insuficiente para atender las obligaciones que pesan sobre él. En tal caso se procederá a
su liquidación a cargo del fiduciario, quien deberá enajenar los bienes que lo integran y entregará su
producido a los acreedores conforme al orden de privilegios previsto en la quiebra (art. 16 de la ley
24.441). Si es fideicomiso financiero se debe convocar a una asamblea de tenedores.
Art. 1 L.C.Q.: CESACIÓN DE PAGOS. El estado de cesación de pagos, cualquiera sea su causa y la naturaleza de las obligaciones a
las que afecte, es presupuesto para la apertura de los concursos regulados en esta ley, sin perjuicio de lo dispuesto por los
artículos 66 y 69.
Universalidad. El concurso produce sus efectos sobre la totalidad del patrimonio del deudor, salvo las exclusiones
legalmente establecidas respecto de bienes determinados.
La cesación de pagos es el estado de impotencia patrimonial. Sin cesación de pagos, no hay proceso concursal.
¿Existe la posibilidad de que haya concurso sin cesación de pagos? PREGUNTA DE EXAMEN.
Sí, hay posibilidad. Por ejemplo, la extensión de quiebra. Quiebra una sociedad de responsabilidad ilimitada,
automáticamente lleva a la quiebra a los socios, los cuales pueden NO estar en cesación de pagos.
Puede darse la situación en que se presente en concurso un garante, el deudor principal que se va a ver afectado por
el concurso de su garante, se presenta en concurso sin estar en cesación de pago conjuntamente. Lo que pase con
ese proceso concursal va a afectar mi patrimonio (concurso en caso de garante – art. 68 L.C.Q.). Lo mismo pasa con
los grupos económicos.
La sociedad conyugal, se tienen que quebrar por separado – porque no son una sociedad en los términos de la ley de
Sociedades. Por economía procesal es útil que tramiten por el mismo juzgado.CONCURSO EN CASO DE GARANTE /
CONCURSO EN CASO DE AGRUPAMIENTO
Art. 2 L.C.Q.: SUJETOS COMPRENDIDOS. Pueden ser declaradas en concurso las personas de existencia visible, las de existencia ideal de
carácter privado y aquellas sociedades en las que el Estado Nacional, Provincial o Municipal sea parte, cualquiera sea el porcentaje de su
participación.
Se consideran comprendidos:
1) El patrimonio del fallecido, mientras se mantenga separado del patrimonio de los sucesores.
No son susceptibles de ser declaradas en concurso, las personas reguladas por Leyes Nros. 20.091, 20.321 y 24.241, así como las excluidas por
leyes especiales
Con la reforma del Código Civil se pasaron a llamar personas humanas y jurídicas, incluyo en aquellas en las que el
Estado sea parte, cualquiera fuera su participación (la Municipalidad NO puede quebrar)
Ley 20.091: Ley de Aseguradoras; Ley 20.321: Ley de Mutuales y Ley 24.241: Ley de AFJP (no existen más)
Sí, puede quebrar. Antes de ello, el banco Central les quita la autorización para poder operar y entra en un proceso
liquidativo. Las aseguradoras tienen un procedimiento especial.
NO. Porque es un contrato, no es una persona. Como sujeto comprendido la ley concursal no incluye un contrato.
NO, aunque se le haya reconocido cierta personalidad jurídica. Se podría, pero el problema aparecería en el caso de
que el concurso fracase.
La apertura de los procesos concursales exige la comprobación de que se den ciertos presupuestos. El
presupuesto subjetivo establece que se verifique si el deudor no es uno de los sujetos expresamente
excluidos por la ley; y en cuando al presupuesto objetivo refiere a la verificación del estado de cesación de
pagos.
CONCEPTO: está en cesación de pagos el deudor que se encuentra imposibilitado de cumplir regularmente
sus obligaciones cualquiera que sea el carácter de ellas y las causas que las generan.
El verdadero estado de cesación de pagos se caracteriza por las notas de generalidad y permanencia. La
primera se refiere a la extensión patrimonial, no quiere caracterizar el número de incumplimientos, que es
indiferente, sino la afectación de toda la situación económica del deudor como una verdadera impotencia
patrimonial.
La segunda se refiere a la extensión temporal, ya que si bien la cesación de pagos no es necesariamente un
estado perpetuo del patrimonio, tampoco es una situación pasajera.
· Hechos reveladores: La LCQ enumera en el artículo 79 ciertos hechos que pueden ser considerados
“reveladores” del estado de cesación de pagos. El juez deberá determinar si dichos hechos revelan o no un
estado de cesación de pagos. LA ENUMERACIÓN DEL ARTÍCULO NO ES TAXATIVA.
ARTÍCULO 78.- Prueba de cesación de pagos. “El estado de cesación de pagos debe ser demostrado por cualquier hecho que
exteriorice que el deudor se encuentra imposibilitado de cumplir regularmente sus obligaciones, cualquiera sea el carácter de
ellas y las causas que lo generan.
Pluralidad de acreedores. No es necesaria la pluralidad de acreedores”.
ARTÍCULO 79.- Hechos reveladores. “Pueden ser considerados hechos reveladores del estado de cesación de pagos, entro otros:
1) Reconocimiento judicial o extrajudicial del mismo, efectuado por el deudor.
2) Mora en el cumplimiento de una obligación.
3) Ocultación o ausencia del deudor o de los administradores de la sociedad, en su caso, sin dejar representante con facultades y
medios suficientes para cumplir sus obligaciones.
4) Clausura de la sede de la administración o del establecimiento donde el deudor desarrolle su actividad.
5) Venta a precio vil, ocultación o entrega de bienes en pago.
6) Revocación judicial de actos realizados en fraude de los acreedores.
7) Cualquier medio ruinoso o fraudulento empleado para obtener recursos”.
ARTÍCULO 78.- Prueba de cesación de pagos. “El estado de cesación de pagos debe ser demostrado por cualquier hecho que
exteriorice que el deudor se encuentra imposibilitado de cumplir regularmente sus obligaciones, cualquiera sea el carácter de
ellas y las causas que lo generan.
Pluralidad de acreedores. No es necesaria la pluralidad de acreedores”.
ARTÍCULO 79.- Hechos reveladores. “Pueden ser considerados hechos reveladores del estado de cesación de pagos, entro otros:
1) Reconocimiento judicial o extrajudicial del mismo, efectuado por el deudor.
2) Mora en el cumplimiento de una obligación.
3) Ocultación o ausencia del deudor o de los administradores de la sociedad, en su caso, sin dejar representante con facultades y
medios suficientes para cumplir sus obligaciones.
4) Clausura de la sede de la administración o del establecimiento donde el deudor desarrolle su actividad.
5) Venta a precio vil, ocultación o entrega de bienes en pago.
6) Revocación judicial de actos realizados en fraude de los acreedores.
7) Cualquier medio ruinoso o fraudulento empleado para obtener recursos”.
ARTÍCULO 80.- Petición del acreedor. “Todo acreedor cuyo crédito sea exigible, cualquiera sea su
naturaleza y privilegio, puede pedir la quiebra.
Si, según las disposiciones de esta ley, su crédito tiene privilegio especial, debe demostrar sumariamente
que los bienes afectados son insuficientes para cubrirlo. Esta prueba no será necesaria, si se tratare de un
crédito de causa laboral”.
Presupuestos de este proceso de reorganización acelerada y flexible son tanto los estados de crisis o pre
insolvencia como el estado de cesación de pagos.
· Ley 11.077: Ya se ha señalado que el Código Civil no contenía reglas relativas a la insolvencia del deudor y
que las leyes de quiebras regulaban solo el problema cuando el deudor era comerciante. En ese caso, de
caer en cesación de pagos un obligado no comerciante no existía legislación de forma ni de fondo. Esto
llevó a la sanción de la ley 11.077 de 1920. Por ella la extinción de las obligaciones del concursado civil,
siempre que no hubiese delito, se producía por:
- la aprobación judicial de la adjudicación de bienes.
- el transcurso de tres años de iniciado el trámite.
- si mediaba dolo o fraude, a los cinco años de cumplimiento de la sentencia condenatoria.
Esta ley rigió hasta 1972, es decir, que fue el régimen concursal Argentino más extenso en vigencia y la
deroga la ley 19.551.
· Ley 19.551: En 1966 se integró una comisión por Isaac, con Halperin y otros que confeccionaron un
anteproyecto que se convirtió en la ley 19.551 del año 1972. Esta ley a su vez fue modificada en 1983 por
la ley 22.917 que trajo tres novedades fundamentales:
1. Unificación absoluta del régimen de comerciante y no comerciante.
2. La reglamentación de los acuerdos pre concursales.
3. Una nueva disciplina de la extensión de quiebras. Otra cuestión muy importante, la verificación y el pago
de los créditos laborales en la quiebra, fue frustrada por la obra de la comisión de asesoramiento
legislativo.
A partir de la sanción de la ley 22.917 de 1983 que reforma parcialmente la ley 19.551 el sistema concursal
Argentino es único tanto para comerciantes como para no comerciantes, personas humanas y jurídicas,
personas jurídicas regularmente constituidas y de hecho. Todos los sujetos quedan sometidos al mismo
régimen legal.
EN EL DERECHO COMPARADO:
La Corte Suprema ha dicho que el Juez que debe intervenir en el juicio concursal de una sociedad regular
es el del lugar donde la autoridad le otorgo personería o en cuyo registro público esta regularmente
inscripta, salvo los casos en que el domicilio sea ficticio o haya sido constituido para dificultar la acción de
los acreedores.
· Competencia en el concurso del patrimonio del fallido: La doctrina mayoritaria excluye la acumulación
de los procesos de juicio sucesorio y de los concursos. Pero si tramita en la misma jurisdicción no hay
obstáculo para que proceda la acumulación ante el juez donde tramita el sucesorio porque se trata del
mismo fuero. La complicación está en Capital Federal y en las provincias donde hay tribunales especiales
en la materia de concursos –Córdoba y Mendoza-.
· Sucesión concursal:
ARTÍCULO 105.- Muerte o incapacidad del fallido. “La muerte del fallido no afecta el trámite ni los efectos
del concurso. Los herederos sustituyen al causante, debiendo unificar personería.
En el juicio sucesorio no se realiza trámite alguno sobre los bienes objeto de desapoderamiento y se decide
sobre la persona que represente a los herederos en la quiebra.
La incapacidad o inhabilitación del fallido, aun sobreviniente, tampoco afecta el trámite ni los efectos de la
quiebra. Su representante necesario lo sustituye en el concurso”.
EL INTERÉS COMPROMETIDO: ENTENDEMOS QUE ES POR EL ART. 17 (LA PROPIEDAD) Y POR EL TEMA DE
QUE UNA LEY FEDERAL COMO ES LA LEY DE CONCURSOS Y QUIEBRAS REGULA CUESTIONES PROCESALES
CUANDO EN REALIDAD ESE TEMA LO REGULAN LAS PROVINCIAS.
4. LOS SUJETOS DEL DERECHO CONCURSAL.
1- CONCEPTOS SOBRE SUJETO DEL PROCESO Y PARTE EN EL PROCESO.
2- LOS ÓRGANOS DEL PROCESO COMO SUJETOS, CONCEPTO SOBRE SUS FUNCIONES Y
CORRESPONDENCIA ENTRE LAS MISMAS.
3- LAS SOCIEDADES DEL ESTADO COMO SUJETOS SUSCEPTIBLES DE SER DECLARADOS EN CONCURSO.
4- LOS SUJETOS EN EL CONCURSO PREVENTIVO EN CASO DE AGRUPAMIENTO Y EN LA EXTESIÓN DE LA
QUIEBRA.
UNIFICACIÓN DEL RÉGIMEN CONCURSAL EN LA LEGISLACIÓN ARGENTINA: Desde la sanción del Código de
Comercio para el Estado de Buenos Aires (1859) la legislación mercantil Argentina circunscribió los
procedimientos concursales para la insolvencia de los comerciantes y, por su lado el Código Civil no
reglamentó el concurso Civil, es decir, para los no comerciantes. Esa dicotomía de la legislación nacional
llevó un largo camino para determinar que sujetos estaban comprendidos en las leyes de quiebras y que
sujetos estaban en el Código Procesal.
Finalmente la ley 19.551 comprendió un régimen para todos los deudores, ya sean comerciantes o no
comerciantes.
La ley 22.917 que reformó a la 19.551 en 1983 derogó el artículo 310 que establecía una remisión a todo el
ordenamiento en caso de los no comerciantes, estableciendo definitivamente un régimen único de
concursos. La única diferencia era la especialidad profesional de quien ejercía la sindicatura. Si era el
concurso de una persona no comerciante era desempeñado por un abogado de la matrícula.
La actual ley conserva el mismo punto de unificación del régimen concursal, habiendo incluso desaparecido
la diferencia de sindicatura y amplía los sujetos susceptibles de concursamiento al agregar a las sociedades
del Estado Nacional, Provincial y Municipal, cualquiera sea su porcentaje de participación.
LOS SUJETOS DEL DERECHO CONCURSAL. CONCEPTO SOBRE SUJETO DEL PROCESO Y PARTE EN EL
PROCESO:
ARTICULO 2°.- Sujetos comprendidos. “Pueden ser declaradas en concurso las personas de existencia
visible, las de existencia ideal de carácter privado y aquellas sociedades en las que el Estado Nacional,
Provincial o municipal sea parte, cualquiera sea el porcentaje de su participación.
Se consideran comprendidos:
1) El patrimonio del fallecido, mientras se mantenga separado del patrimonio de sucesores.
2) Los deudores domiciliados en el extranjero respecto de bienes existentes en el país.
No son susceptibles de ser declaradas en concurso, las personas reguladas por Leyes Nros. 20.091 -LEY DE
ENTIDADES DE SEGUROS-, 20.321 –ASOCIACIONES MUTUALES- y 24.241–JUBILACIONES Y PENSIONES,
AFJP-, así como las excluidas por leyes especiales”.
· Personas físicas –humanas-: Antes se cuestionaba si los incapaces podían o no ser concursados pero hoy
en día ello está superado ya que el eje dilucidador de la controversia no pasa por la capacidad del sujeto
para ser considerado comerciante sino en su solvencia o insolvencia. Por lo tanto, tanto incapaces como
inhabilitados pueden ser concursados y declarados en quiebra.
· Persona de existencia ideal de carácter privado (asociaciones, fundaciones, sociedades civiles y
comerciales):
Puede apuntarse tanto a las sociedades irregulares como a las de hecho. Se discutía si las simples
asociaciones podían serlo, y para Rivera sí.
· Sociedades en que el Estado Nacional, Provincial y Municipal tenga participación: La ley 24.522 agregó
este tipo de sociedades con la finalidad de imponer a las sociedades estatales la misma responsabilidad
patrimonial que tienen los particulares y consagrar así la igualdad jurídica. Quedan comprendidas las
sociedades de economía mixta, las sociedades del Estado, las sociedades anónimas con participación
estatal mayoritaria, sociedades civiles o comerciales en que el Estado sea socio y las empresas públicas.
· El patrimonio del fallido: La única condición para concursar el patrimonio de una persona muerta es que
se mantenga separado del patrimonio de sus herederos. Si es por concurso preventivo pueden pedirlo los
herederos y si es quiebra pueden pedirlo tanto los herederos del causante como los acreedores de éste.
Por último no es necesario que a la fecha de su muerte existiese estado de cesación de pagos sino que
basta con que se compruebe la insuficiencia de los bienes transmitidos para afrontar las obligaciones que
graven ese patrimonio.
· Deudores domiciliados en el extranjero: Aún cuando existe el principio de universalidad, si el deudor
tiene bienes en el país eso es suficiente para abrir un concurso aún cuando se domicilie en el extranjero. Se
trata de una pluralidad de concursos que constituye una excepción a la universalidad, ya que importa un
fraccionamiento del patrimonio del deudor.
· Sociedades constituidas en el extranjero: Las sociedades constituidas en el extranjero son un deudor
“domiciliado en el extranjero” por lo que no hay inconveniente alguno para abrir un concurso preventivo o
que sean declarados en quiebra si tienen bienes en el país.
También la sociedad extranjera que tiene participación en una sociedad Argentina cuyo único activo son
acciones de sociedades Argentinas.
· Mutuales: Las asociaciones mutuales dieron lugar a polémicas pero finalmente la ley 20.321 de
asociaciones mutuales fue reformada y su artículo 37 las somete expresamente al régimen concursal por lo
que pueden solicitar concurso preventivo como ser declaradas en quiebra.
Art. 37 LEY -N° 20.321, LEY ORGÁNICA PARA LAS ASOCIACIONES MUTUALES-.— Las asociaciones
mutualistas no podrán ser concursadas civilmente.
“En caso de solicitarse su concurso civil, los jueces deberán dar intervención al Instituto Nacional de Acción
Mutual para que resuelva, si así correspondiere, la intervención y/o liquidación social. En consecuencia no
será de aplicación a las entidades mutuales las disposiciones de la Ley de Concursos Nº 19.551”.
· Obras sociales y sindicatos: ambas pueden solicitar el concursamiento preventivo o ser declarados en
quiebra más allá de su encuadramiento como personas jurídicas para estatales.
· Sociedad conyugal: no son personas jurídicas, por lo tanto la solución es desechar la presentación del
concurso preventivo de una sociedad conyugal como sujeto distinto de los cónyuges. La solución es acudir
al artículo 65 LCQ, no porque la sociedad conyugal se asimile a un grupo económico sino porque los
cónyuges son fiadores o garantes aplicándose el artículo 68 de LCQ.
ARTÍCULO 65.- Petición. “Cuando dos o más personas físicas o jurídicas integren en forma permanente un
conjunto económico, pueden solicitar en conjunto su concurso preventivo exponiendo los hechos en que
fundan la existencia del agrupamiento y su exteriorización.
La solicitud debe comprender a todos los integrantes del agrupamiento sin exclusiones. El juez podrá
desestimar la petición si estimara que no ha sido acreditada la existencia del agrupamiento. La resolución
es apelable”.
ARTICULO 68.- Garantes. “Quienes por cualquier acto jurídico garantizasen las obligaciones de un
concursado, exista o no agrupamiento pueden solicitar su concurso preventivo para que tramite en
conjunto con el de su garantizado. La petición debe ser formulada dentro de los TREINTA (30) días contados
a partir de la última publicación de edictos, por ante la sede del mismo juzgado.
Se aplican las demás disposiciones de esta sección”.
· Consorcio de la ley 13.512 –consorcio de copropietarios-: Para algunos autores es una persona jurídica y
para otros una mera comunidad de derechos. Quienes niegan la personalidad argumentan que el consorcio
carece de patrimonio.
· Entidades bursátiles: Están comprendidas en la ley 17.811 y, como no son entidades financieras puede
solicitarse su concurso y quiebra.
· Sociedades en liquidación:
SUJETOS EXCLUIDOS: Artículo 2 LCQ último párrafo establece “No son susceptibles de ser declaradas en
concurso, las personas reguladas por Leyes Nros. 20.091 -LEY DE ENTIDADES DE SEGUROS-, 20.321 –
ASOCIACIONES MUTUALES- y 24.241–JUBILACIONES Y PENSIONES, AFJP-, así como las excluidas por leyes
especiales”.
BOLILLA V
1. EL PRINCIPIO DE UNIVERSALIDAD.
1- SIGNIFICACIÓN DEL MISMO. CONTENIDO. NORMAS LEGALES.
2- EFECTOS: A) PATRIMONIALES, B) PROCESALES (TERRITORIALIDAD, COMPETENCIA Y FUERO DE
ATRACCIÓN).
1. EL PRINCIPIO DE UNIVERSALIDAD.
1-SIGNIFICACIÓN DEL MISMO.CONTENIDO. NORMAS LEGALES:
El principio de universalidad aparece expresado en el segundo párrafo del artículo 1 de la LCQ
ARTICULO 1°.- Cesación de pagos. “El estado de cesación de pagos, cualquiera sea su causa y la naturaleza
de las obligaciones a las que afecto, es presupuesto para la apertura de los concursos regulados en esta ley,
sin perjuicio de lo dispuesto por los artículos 66 y 69.
Universalidad. El concurso produce sus efectos sobre la totalidad del patrimonio del deudor, salvo las
exclusiones legalmente establecidas respecto de bienes determinados”.
En un concurso preventivo, lo que busco (intentar) es lograr mediante mecanismos establecidos en la ley un acuerdo
con los acreedores, homologarlos para poder cumplir con las obligaciones según con lo que se negocia.
La quiebra es un proceso netamente liquidativo.
En el concurso preventivo, como lo que busco es llegar a un acuerdo, NO HAY DESAPODERAMIENTO. No pierdo la
capacidad de administrar y disponer de mis bienes. Lo que voy a tener es un régimen de administración vigilada.
En ambos procesos se ve la figura del SÍNDICO (si o si tienen que ser contadores), el cual, en el concurso
preventivo, lo que va a hacer es controlar la administración de la persona jurídica o humana, bajo
parámetros normales (art. 15, 16 y 17 L.C.Q.). Se entra en un régimen de control para poder llegar a un
acuerdo.
En la quiebra se pierde la capacidad de disponer de los bienes. Van a ser incautados, inventariados y vendidos para
posteriormente pagarle a los acreedores.
El DESAPODERAMIENTO, implica que la quiebra desapodera de TODOS los bienes que tenga y los que adquiera
hasta la rehabilitación. Tiene un efecto para atrás de la sentencia de quiebra y un efecto para adelante – en el caso
de las personas jurídicas, la quiebra es el fin de la persona jurídica, por lo cual no aplica este efecto posterior. En el
caso de la persona humana va a poder desarrollar su actividad.
Ejemplo: Si yo adquirí un auto al año y un día, va a estar por fuera del desapoderamiento. Sólo va a ingresar si se me
extiende.
El desapoderamiento, cuando se hable de bienes gananciales, para entenderlos hay que pararse sobre la
titularidad del bien; porque puede ser ganancial (adquirido en matrimonio), pero la titularidad del bien es
de uno de ellos. Por lo tanto, si se decreta la quiebra sobre este cónyuge, entra en desapoderamiento el
100 % del bien (en la quiebra no hay disolución de sociedad conyugal)
BIENES EXCLUIDOS
- Los inembargables
- Sueldos, salarios y honorarios profesionales (se afecta el 20 %. Hay que ver en cada situación en particular
cuanto se puede embargar)
- bien de familia
Art. 244 C.C. y C. N.: BIEN DE FAMILIA. AFECTACIÓN. Puede afectarse al régimen previsto en este Capítulo, un inmueble destinado a
vivienda, por su totalidad o hasta una parte de su valor. Esta protección no excluye la concedida por otras disposiciones legales.
La afectación se inscribe en el registro de la propiedad inmueble según las formas previstas en las reglas locales, y la prioridad temporal se rige
por las normas contenidas en la ley nacional del registro inmobiliario.
No puede afectarse más de un inmueble. Si alguien resulta ser propietario único de dos o más inmuebles afectados, debe optar por la
subsistencia de uno solo en ese carácter dentro del plazo que fije la autoridad de aplicación, bajo apercibimiento de considerarse afectado el
constituido en primer término.
Art. 456 C.C. y C.N.: ACTOS QUE REQUIEREN ASENTIMIENTO. Ninguno de los cónyuges puede, sin el asentimiento del otro, disponer de los
derechos sobre la vivienda familiar, ni de los muebles indispensables de ésta, ni transportarlos fuera de ella. El que no ha dado su asentimiento
puede demandar la nulidad del acto o la restitución de los muebles dentro del plazo de caducidad de seis meses de haberlo conocido, pero no
más allá de seis meses de la extinción del régimen matrimonial.
La vivienda familiar no puede ser ejecutada por deudas contraídas después de la celebración del matrimonio, excepto que lo hayan sido por
ambos cónyuges conjuntamente o por uno de ellos con el asentimiento del otro.
Art. 522 C.C. y C.N.: PROTECCIÓN DE LA VIVIENDA FAMILIAR. Si la unión convivencial ha sido inscripta, ninguno de los convivientes puede,
sin el asentimiento del otro, disponer de los derechos sobre la vivienda familiar, ni de los muebles indispensables de ésta, ni transportarlos fuera
de la vivienda. El juez puede autorizar la disposición del bien si es prescindible y el interés familiar no resulta comprometido.
Si no media esa autorización, el que no ha dado su asentimiento puede demandar la nulidad del acto dentro del plazo de caducidad de seis
meses de haberlo conocido, y siempre que continuase la convivencia.
La vivienda familiar no puede ser ejecutada por deudas contraídas después de la inscripción de la unión convivencial, excepto que hayan sido
contraídas por ambos convivientes o por uno de ellos con el asentimiento del otro.
Estos 3 supuestos quedan protegidos por la ley y no se pueden vender. En el art. 244 CCCN no se exige vivir ahí.
BIENES INCLUIDOS
- Todos los ejercicios de derechos que tiene el fallido. art. 109 y 182
- Revocación de actos art. 118 y 119 – posibilidades de retrotraer actos llevados durante el período de
sospecha
- Posibilidad de hacer acciones de responsabilidad – art. 173 y ssgte. Acciones contra quienes tienen
responsabilidad de
- Sociedad de hechos – antes respondían de forma ilimitada, pero ahora responden de forma ilimitada, pero
por la porción de participación. Con la reforma de la sección IV de la Ley de Sociedades.
- Integración de aportes del art. 150 – Con todo lo que falta integrar del aporte cuando se diera la quiebra.
2- EFECTOS:
A) PATRIMONIALES:
El principal efecto patrimonial es el desapoderamiento atenuado, es decir el concursado continúa en
posesión de sus bienes pero limitado en las facultades de administración y disposición.
– actos permitidos bajo la vigilancia del síndico:
ARTÍCULO 15 LCQ.- Administración del concursado. “El concursado conserva la administración de su
patrimonio bajo la vigilancia del síndico”.
Los actos bajo vigilancia del síndico son los actos conservatorios como por ejemplo, inscribir un inmueble o
interrumpir una prescripción, etcétera y los actos de administración ordinaria como por ejemplo, ventas
que hace el concursado de cosas que pertenecen a su giro comercial, percepción y pago de rentas,
etcétera.
Si bien el síndico no puede interferir en la ejecución de estos actos deberá denunciar ante el Juez cualquier
acto que perjudique evidentemente a los acreedores o aquellas irregularidades grabes que puedan
ocasionar la separación del concursado de la administración
– actos sujetos a autorización judicial:
ARTICULO 16 LCQ ÚLTIMO PÁRRAFO.- “Actos sujetos a autorización. Debe requerir previa autorización
judicial para realizar cualquiera de los siguientes actos: los relacionados con bienes registrables; los de
disposición o locación de fondos de comercio; los de emisión de debentures con garantía especial o flotante;
los de emisión de obligaciones negociables con garantía especial o flotante; los de constitución de prenda y
los que excedan de la administración ordinaria de su giro comercial.
La autorización se tramita con audiencia del síndico y del comité de control; para su otorgamiento el juez
ha de ponderar la conveniencia para la continuación de las actividades del concursado y la protección de los
intereses de los acreedores”.
Son en general todos aquellos actos que sin estar prohibidos exceden la administración ordinaria del giro
comercial del concursado: actos relacionados con bienes registrables; actos de disposición o locación de
fondos de comercio; emisión de debentures con garantía especial o flotante; ventas que hace el
concursado de cosas que no pertenecen a su giro comercial (venta de las máquinas utilizadas para la
producción); emisión de obligaciones negociables con garantía especial o flotante; constitución de prenda,
etcétera.
Para llevar a cabo estos actos el concursado deberá pedir autorización al Juez quien decidirá luego de
escuchar al síndico y al comité de control evaluando la conveniencia de tales actos y tratando de proteger
los intereses de los acreedores, la resolución del Juez es inapelable.
– actos prohibidos:
ARTICULO 16 LCQ PRIMER PÁRRAFO: Actos prohibidos. “El concursado no puede realizar actos a título
gratuito o que importen alterar la situación de los acreedores por causa o título anterior a la presentación”.
Por ejemplo, no podrá pagarle a un acreedor y a los otros no porque violaría el principio de igualdad SALVO
el pronto pago de créditos laborales.
2. LA COLECTIVIDAD DE ACREEDORES.
1- CONCEPTO. SU ORGANIZACIÓN EN LAS LEYES RECIENTES.
2- ACREEDORES CONCURSALES Y CONCURRENTES: CONCEPTO. CONSECUENCIAS DEL DISTINGO.
3- PRINCIPIO DEL TRATAMIENTO IGUALITARIO A LOS ACREEDORES: A) CONCEPTO. B) SU RELACIÓN CON
EL DISTINTO RANGO DE LOS CRÉDITOS. C) LA PROPUESTA DE CATEGORIZACIÓN DE LOS ACREEDORES. D)
RELATIVIDAD DEL PRINCIPIO EN EL ACUERDO PREVENTIVO EXTRAJUDICIAL Y EN EL AVENIMIENTO.
4- COMITÉ DE ACREEDORES EN EL CONCURSO PREVENTIVO Y EN LA QUIEBRA. CONSTITUCIÓN.
FUNCIONES. ETAPAS DE ACTUACIÓN.
2. LA COLECTIVIDAD DE ACREEDORES.
1- CONCEPTO:Tiene dos fases; procesal y sustancial – que es cuestiones de forma y de fondo que afectan a
los dos procesos.
La COLECTIVIDAD es, cuando hablamos de que el proceso concursal afecta a todos los acreedores (sujetos activos)
que sean de causa o título anterior – aquí se distingue el momento temporal, de causa o título anterior a la
declaración de quiebra o de causa o título anterior a la presentación del concurso preventivo.
Hay una pequeña diferencia en plazos – temporal – Se presenta la demanda de concurso preventivo y ahí es la fecha
de presentación, no necesito del acto jurisdiccional, basta con la presentación de la demanda para que surtan los
efectos. En cambio, con la quiebra yo presento el escrito pidiendo mi propia quiebra y NO HAY NINGUN TIPO DE
EFECTO hasta que el juez dictamine la quiebra en la sentencia.
No obstante, hay posibilidades de que ese concurso que se presentó sea rechazado y que la mera presentación no
implique que empiecen a correr los efectos. Hay algunos efectos en el concurso preventivo que corren desde la
presentación, pero que necesariamente requieren de la apertura, porque si no hay proceso no hay efectos.
Quienes van a participar de los procesos universales previstos en la ley concursal, son todos los acreedores de causa
o título anterior a la presentación del concurso o a la declaración de quiebra.
Ejemplo:
- Si yo hago hoy un pagaré para pagarle a Irene. Ella me va a venir a cobrar y yo me presenté en quiebra
mañana. Ella es acreedora del concurso, porque es acreedora. Lo que tiene ella es un TÍTULO (el pagaré).
- Un colectivo choca un auto. El auto cruzó bien. A la semana la empresa de colectivos se presenta en
concurso. La víctima del auto tiene CAUSA (daños patrimoniales), con el juicio de daños y perjuicios va a
tener una sentencia, la cual le va a valer TÍTULO, pero va a ser acreedor concursal porque va a ser acreedor
concursal porque va a tener causa o título anterior a la presentación del concurso o declaración de quiebra.
Como en la universalidad que se refiere a los bienes que van a quedar incluidos en estos procesos, la COLECTIVIDAD
refiere a todos los acreedores incluidos hacia atrás desde los momentos mencionados en el proceso.
Colectividad procesal
Existe LA SUSPENSIÓN DE ACCIONES (art. 21 concurso preventivos / art. 122 quiebras), el cual refiere que no se
puede iniciar juicio patrimonial contra el demandado o deudor salvo las exclusiones legales.
Hay una SUSPENSIÓN DE ACTOS DE EJECUCIÓN FORZADA. En los dos procesos de manera inmediata, genera esta
suspensión, con sus distintas alternativas a posteriori.
También está el FUERO DE ATRACCIÓN, el cual implica este juicio, por su entidad de juicio universal va a hacer que
se desplace la competencia de juez natural, sin violar el principio de juez natural y se va a trasladar al juez de donde
esté el concurso preventivo o la quiebra. Hay exclusiones en el art. 21 y art 122 L.C.Q.
Finalmente está la VERIFICACIÓN DE CRÉDITO, el cual refiere a que todos los acreedores deben presentarse para
verificar sus créditos para que luego le permita participar de la votación dentro del proceso. Hay distintas instancias
para poder verificar; en la parte de concurso tenemos la posibilidad de caer en el art. 14 y el art. 32 L.C.Q.
verificación de créditos común a través de la sindicatura, y por vía incidental – por llegar más tarde. Depende del
momento en que se presente incidirá si tendrá o no voto – no significa que no tenga derecho a cobrar.
Puede ser la verificación tempestiva, que es ante el síndico; o la verificación tardía, que se hace por un
expediente ante el organismo jurisdiccional (Incidente de verificación tardía – juicio sumario – se puede
aportar prueba). En el art. 14 L.C.Q. habla de los requisitos que se necesitan para participar de un
concurso, entre ellas fijar las fechas para poder verificar, las cuales se publican en edictos.
Colectividad sustancial
Una de las reglas de esta colectividad sustancias es la SUSPENSIÓN DE INTERESES.
Suspensión de intereses: Implica que se le “saca una foto”, “frenar”, de la deuda. Este dato delimita el voto que va a
tener cada acreedor. Todo esto se hace para poder cuantificar la deuda.
La quiebra tiene otro efecto respecto a la suspensión de los intereses. Llegado el caso se vende todo el patrimonio,
se paga todo el capital adeudado, sobrando dinero; ese sobrante se utiliza para pagar los intereses suspendidos,
previo recalcularlos a fecha de hoy y volver a pagar a cada uno de los acreedores según su crédito. De todo eso, si
hay remanente, se devuelve al fallido.
Quiebra indirecta: Se da cuanto un concurso anterior fracasó, por ejemplo, por no llegar a un acuerdo con todos los
acreedores. Art. 202 L.C.Q.
Art. 202 L.C.Q.: QUIEBRA INDIRECTA. En los casos de quiebra declarada por aplicación del Artículo 81, inciso 1, los acreedores posteriores a
la presentación pueden requerir la verificación por vía incidental, en la que no se aplican costas sino en casos de pedido u oposición
manifiestamente improcedente.
Los acreedores que hubieran obtenido verificación de sus créditos en el concurso preventivo no tendrán necesidad de verificar nuevamente. El
síndico procederá a recalcular los créditos según su estado.
CONVERSIÓN DE OBLIGACIONES
No todas las obligaciones son dinerarias.
Por ejemplo, si yo tengo una obligación de escriturar, es no dineraria, es una obligación de hacer. Uno de los efectos
es de CONVERTIR LAS OBLIGACIONES A DINERARIAS.
Hay que tener una cuantificación de cuanto se le debe a cada acreedor para saber que incidencia tiene.
La conversión de obligaciones se hace a dineraria. Lo mismo para obligaciones que no sean de monedas de curso
legal, como dólares o cripto monedas. Todas esas “monedas”, se van a transformar a moneda de curso legal.
En principio, en el CONCURSO PREVENTIVO al solo efecto se convierte para cristalizar el pasivo (foto). Aquí se puede
tener la mitad de las obligaciones en pesos y la otra mitad en dólares (estos se los convierte a moneda de curso legal.
No cobran en pesos, cobran en dólares. Sólo se los convierte para saber que incidencia van a tener en el voto. Pero se
va a poder negociar libremente con ellos – relacionado con la categorización de acreedores)
En la QUIEBRA, esta conversión de obligaciones, se hace a moneda de curso legal para todos sus efectos; es decir, el
que vino como acreedor en dólares se le van a convertir a pesos (entra en discusión el tipo de cambio que se usa)
Otro efecto de la colectividad sustancial es el decaimiento de los PLAZOS, si una obligación vencía más adelante el
propio efecto de la colectividad hace que no haya que esperar a su vencimiento y el efecto extintivo de las
obligaciones lo tiene la quiebra, porque el pago que se haga cancela (extingue) el crédito en total. Por ejemplo: si
Maxi tenía $ 10, Ailen $ 15 y Azul $ 2 de crédito; y si a Maxi le pago 5 pesos cancela los 10 que él tenía, porque no
hay más nada con qué pagar. ESE ES EL EFECTO EXTINTIVO DE LA QUIEBRA. Lo que se paga cancela el 100 % de la
obligación.
En el concurso preventivo este efecto extintivo NO ESTÁ PRESENTE, porque el efecto principal del acuerdo homologado en el concurso es la
NOVACIÓN, y no la extinción. La obligación verificada queda novada, por los términos de acuerdo, y no extinta. En este caso, si a Maxi le debía
$ 10, y en el acuerdo hubo un acuerdo del 50 %, y fue aceptada por el conjunto de los acreedores, le voy a deber $ 5. No se produjo una
extinción, sino que una novación.
Teorías:
· Según una doctrina largamente desarrollada, la masa de acreedores es una persona jurídica que en la
quiebra y como consecuencia del desapoderamiento se hace titular del patrimonio del fallido.
· La doctrina nacional más moderna sigue la tesis de Chiovenda, que niega la calidad de persona jurídica de
la masa, y sostiene que el desapoderamiento consiste únicamente en la pérdida de la posesión y del poder
de disposición de los bienes pero no de su titularidad.
· Podría ser calificada la masa como un centro de interés en tanto actúa como el mecanismo destinado a
encauzar los intereses comunes de ciertos sujetos que no tienen relación entre sí sino que la tienen todos
con otro vértice común que es el deudor del cual todos son acreedores.
ARTÍCULO 132.- Fuero de atracción. “La declaración de quiebra atrae al juzgado en el que ella tramita,
todas las acciones judiciales iniciadas contra el fallido por las que se reclamen derechos patrimoniales.
Salvo las ejecuciones de créditos con garantías reales, quedan exceptuados de este principio los casos
indicados en el artículo 21 inciso 1) a 3) bajo el régimen allí previsto.
El trámite de los juicios atraídos se suspende cuando la sentencia de quiebra del demandado se halle firme;
hasta entonces se prosigue con el síndico, sin que puedan realizarse actos de ejecución forzada”.
IGUALDAD
Más allá de la igualdad, hay distintas preferencias, existiendo privilegios haciendo que algunos cobren antes que
otros y preferencias temporales, que hacen que algunos cobren antes, lo que no significa que unos estén mejor que
otros.
Este principio refiere a que todos los acreedores merecen un trato igualitario, pero hay excepciones, que son legales.
El principio general es que hay que tratar a todos por igual, y hacerles a todos la misma propuesta.
- La ley dispone de excepciones a la ley de igualdad, que son los PRIVILEGIOS, donde se da a unos acreedores
otro rango que a otro. Hay 3 tipos de acreedores:
- Otra excepción al principio de igualdad es el PAGO ANTERIOR (el pronto pago – Art. 14 L.C.Q.), se relaciona a
una preferencia temporal en el tiempo. Hay un acreedor que, por sus cualidades particulares, en general son
los laborales.
- Otra excepción al principio de igualdad es la NO VERIFICACIÓN. Hay acreedores que se van a ver
posibilitados la no verificación de sus créditos, como, por ejemplo:
o Acreedores concursales:
Acreedores concursales: Son aquellos de la colectividad. Anterior a la presentación del concurso o de la declaración
de quiebra, los que tienen que verificar. Pero también son concursales los que se generen con posterioridad en
virtud del concurso (sindico, tasa de justicia, abogados, algún otro profesional - costas); estos últimos no requieren
verificación, son posteriores y lo va a cuantificar el juez.
Acreedores concurrentes: Son los que terminaron presentándose en el proceso. Porque puede haber acreedores
concursales, pero que no tienen la condición de concurrentes (porque no se presentaron al proceso)
Se pueden proponer propuestas diferenciadas, donde a un grupo se le ofrece pagar el 100 % ahora, a otra
porción el 50 % dentro de 6 meses, a otra porción el 20 % en 1 año – esto no viola el principio de igualdad,
porque la ley permite hacer propuestas diferenciadas entre categorías.
La única obligación que tiene el deudor es tratar de llegar a un acuerdo con los acreedores quirografarios.
Si se firmó el acuerdo, y por fuera un acreedor recibe un pago mayor, porque se arregló de esa manera con
el deudor, en caso de que salga a la luz la situación, esos pagos son ineficaces y al deudor se le cae el
principio de igualdad.
2- ACREEDORES CONCURSALES Y CONCURRENTES:
CONCEPTO:
· Concursal: Concursal es todo acreedor cuyo crédito es exigible dentro del periodo anterior al tiempo que
se establece ya sea como cesación de pago (concurso) o sentencia de quiebra.
· Concurrente: Concurrente es cualquier acreedor que se presento a verificar espontáneamente, o bien se
incorporo mediante incidente de verificación tardía.
CONSECUENCIAS DEL DISTINGO: Para la incorporación del acreedor en el pasivo concursal, todos los
acreedores insinuantes deben concurrir sin diferenciación alguna; es necesario que el acreedor concursal
manifieste su voluntad de acceder a la calidad de acreedor concurrente; debe introducirse en el proceso
verificatorio, que es la única vía legal para contar con un titulo hábil sobre el patrimonio del deudor. Para
tal fin no basta con la presentación de los títulos de crédito, sino también es necesario que el crédito sea
judicialmente reconocido.
B) SU RELACIÓN CON EL DISTINTO RANGO DE LOS CRÉDITOS: El principio de igualdad de los acreedores no
es absoluto, pues ciertos acreedores están excluidos de su efecto nivelador, son aquellos cuyos créditos
están muñidos de privilegios, entendiendo este concepto en su sentido más amplio, o sea, comprendiendo
en sí al derecho dado por la ley a ciertos créditos para ser satisfechos con preferencia frente a otros, y al
complejo de ventajas que emana de los derechos reales de garantías.
2- Definitivo: actúa después de la homologación con la finalidad de controlar el cumplimiento del acuerdo.
La ley exige que la propuesta de acuerdo preventivo que haga el concursado contemple la formación de
ese comité definitivo.
El comité definitivo, que controla el cumplimiento del acuerdo preventivo, es designado a propuesta del
concursado y con el voto favorable de los acreedores que representen la mayoría del capital.
Es claro que cuando el deudor tiene el consentimiento de los acreedores a la propuesta puede manipular la
designación y que “acreedores amigos” formen ese comité. Para evitar eso, en el caso “Aerolineas
Argentinas S.A s/ Concurso Preventivo (2002)” la Jueza dispuso actuar oficiosamente sobre la integración
del comité y excluyó a uno de los integrantes y puso a otro, por lo cual el comité en definitiva integrado
por la decisión judicial.
Este artículo atribuye a ambos comités amplias facultades de información y consejo, enuncia sus
atribuciones para requerir información al síndico y al concursado, exigir la exhibición de libros, registros
legales y contables, proponer planes de custodia y conservación del patrimonio del concursado, solicitar
audiencias ante el juez interviniente, etcétera.
El Juez debe oír al comité pero no está obligado de manera alguna a seguir sus consejos.
En cuanto al comité definitivo tiene además la función de contralor del cumplimiento del acuerdo y las que
se hayan fijado en el acuerdo preventivo.
FUNCIONES DEL COMITÉ DE QUIEBRA: Conforme el artículo 260 LCQ en la etapa de liquidación el comité
puede proponer medidas que normalmente están vinculadas a la liquidación de bienes y eventualmente a
su conservación o administración. También puede requerir información a los funcionarios del concurso,
solicitar audiencia, etcétera.
INFORME TANTO DEL COMITÉ DEL CONCURSO PREVENTIVO COMO DE LA QUIEBRA –ES DECIR, EN
GENERAL-:
Los comités deben informar de su gestión a los acreedores conforme el artículo 260 LCQ y con la
periodicidad que se indique en el acuerdo, la que no podrá ser inferior a 4 meses y en la quiebra debe
hacerse mensualmente. El artículo 260 LCQ dice que el informe debe quedar a disposición de los
acreedores en el domicilio que constituyeron en el expediente. Lo que se quiso decir acá es que no se
excluye la exteriorización del informe en el expediente sino que se exime de presentar copias para cada
acreedor porque el acreedor que lo quiera lo puede requerir en ese domicilio del comité.
RETRIBUCIÓN: La actividad del comité provisorio no es retribuible porque la ley no fija honorarios. El
comité definitivo tendrá retribución si así se prevé en el acuerdo preventivo. En cambio, para la quiebra la
ley determina la retribución del comité que se fija teniendo en cuenta la naturaleza y extensión de las
funciones cumplidas.
REMOCIÓN: Los integrantes de los comités podrán ser removidos en cualquier oportunidad por los
acreedores bajo el régimen de mayoría de su designación. El último párrafo del artículo 260 LCQ dice que
la remoción se rige por lo dispuesto en el artículo 255 LCQ.
ARTICULO 255.- Irrenunciabilidad. “El profesional o el estudio incluido en la lista a que se refiere el Artículo
253 no puede renunciar a las designaciones que le correspondan, salvo causa grave que impida su
desempeño.
La renuncia comprende la totalidad de las sindicaturas en que el funcionario actúe y debe ser juzgada por la
Cámara de Apelaciones con criterio restrictivo. El renunciante debe seguir en sus funciones hasta la
aceptación del cargo por el reemplazante.
Remoción. Son causas de remoción del síndico la negligencia, falta grave o mal desempeño de sus
funciones. La remoción compete al juez, con apelación ante la Cámara. Consentido o ejecutoriado el auto,
el síndico cesa en sus funciones en todos los concursos en que intervenga. La remoción causa la
inhabilitación para desempeñar el cargo de síndico durante un término no inferior a CUATRO (4) años ni
superior a DIEZ (10), que es fijado en la resolución respectiva. La remoción puede importar la reducción
para el síndico de entre un TREINTA POR CIENTO (30%) y CINCUENTA POR CIENTO (50%) de los honorarios a
regularse por su desempeño salvo en caso de dolo, en cuyo caso la reducción podrá superar dicho límite.
Puede aplicarse también, según las circunstancias, apercibimiento o multa hasta el equivalente a la
remuneración mensual del juez de Primera Instancia.
Licencia. Las licencias se conceden sólo por motivos que impidan temporariamente el ejercicio del cargo y
no pueden ser superiores a DOS (2) meses por año corrido. Las otorga el juez con apelación en caso de
denegación”.
EVALUACIÓN: Rivera dice que los comités han tenido una actuación poco eficaz en la mayor parte de los
concursos preventivos y se usaron únicamente para concursos de empresas de grandes patrimonios.
BOLILLA VI
1. LA MATERIA PROCESAL.
1- CONCEPTO. MÉTODOS LEGISLATIVOS. EL CARÁCTER CONTENCIOSO Y SU APLICACIÓN EN LOS
PROCEDIMIENTOS CONCURSALES.
2- PRESUPUESTOS, OBJETO Y RELACIÓN FUNCIONAL DE LAS FASES DE LOS CONCURSOS.
3-LOS PRINCIPIOS PROCESALES EN REALCIÓN AL DERECHO CONCURSAL.
4- DISCIPLINA LEGAL DE LA INSTANCIA ÚNICA; LA PERENCIÓN DE LA INSTANCIA; RÉGIMEN DE LOS
INCIDENTES; FORMACIÓN DEL LEGAJO DE COPIAS; OPORTUNIDAD DE PRACTICAR REGULACIÓN DE
HONORARIOS Y SU RÉGIMEN LEGAL; SUPLETORIEDAD DE LAS LEYES PROVINCIALES.
1. LA MATERIA PROCESAL.
1- CONCEPTO; MÉTODOS LEGISLATIVOS:
El concurso, sea preventivo o quiebra, es un proceso judicial, con características propias que exigen ciertas
reglas procesales especiales que están contenidas en la ley concursal, ya que ésta es tanto de forma como
de fondo. Las reglas procesales se encuentras a partir del artículo 273 de la ley 24.522.
Presupuesto subjetivo: toda persona humana y jurídica de carácter privado es sujeto de los
procedimientos concursales, de la misma manera que las sociedades en que el Estado Nacional,
Provincial o Municipal fueren parte. También lo es el patrimonio del fallido en tanto sea separado
del de sus sucesores; y los deudores domiciliados en el extranjero. Y también las sociedades
mutuales, que originalmente estaban excluidas pero ya no. No son susceptibles de concurso:
entidades de seguros y del sistema integrado de jubilaciones y pensiones.
Presupuesto objetivo: el estado de cesación de pagos es fundamental y necesario para que se abra
el proceso de concurso o así como también el de quiebra. No obstante existen modalidades del
concurso en las que no se precisa la cesación de pagos. Dasso, Ariel menciona las siguientes:
o En el Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE) del artículo 69, puede acudir el deudor que se
encontrase en cesación de pagos así como el que “tenga dificultades económicas o
financieras de carácter general”. Aquí se dan meras dificultades sin necesidad del estado de
cesación de pagos.
o El concurso del garante (artículo 68), en el orden liquidativo la quiebra refleja del socio
ilimitadamente responsable (artículo 160) y la de los sujetos alcanzados por extensión de la
quiebra principal (artículo 161).
Para la apertura el deudor debe cumplir los requisitos de admisibilidad, denominados requisitos formales,
que son fundamentalmente de información y se agudizan cuando se trata de deudores matriculados o
personas de existencia ideal regularmente constituidas, en cuyo caso deben acreditar la regularidad de la
inscripción y de su contabilidad (artículo 11).
Explicarán las causas concretas de su situación patrimonial y la época en que se produjo la cesación de
pagos, circunstancia que tendrá relevancia en orden a la determinación, en hipótesis de quiebra ulterior
por alguna de las cuestiones derivadas de la frustración de la prevención; debe adjuntar un detallado
estado de su activo y pasivo y los balances o estados contables de los tres últimos ejercicios, como así
también nómina de acreedores con todos los detalles destinados a su individualización y el crédito.
Hasta después de un año a partir de la fecha de la declaración judicial de cumplimiento de un acuerdo
preventivo anterior, el deudor no puede solicitar un nuevo concurso preventivo; esto es el período de
inhibición del artículo 59 in fine.
Cumplidos los requisitos, el juez debe dictar la resolución de apertura individualizando al concursado y a
los socios con responsabilidad limitada, deberá fijar audiencia para el sorteo del síndico (funcionario del
concurso que tendrá un rol gravitante en el procedimiento), ordenará publicar edictos con fechas para que
los acreedores presenten sus pedidos de reconocimiento de créditos al síndico; ordenará también que el
deudor presente los libros de contabilidad cuando hubiere de llevarlos; dispone la inscripción de la
apertura en el registro de concursos. En la misma resolución se fijan fechas que constituyen la base del
cronograma sobre el cual se desarrolla el procedimiento, para que el síndico presente dos informes,
denominados individual y general, y designe un Comité provisorio de acreedores integrado por los tres
quirografarios de mayor monto.
ARTICULO 274.- Facultades del Juez. “El juez tiene la dirección del proceso, pudiendo dictar todas las
medidas de impulso de la causa y de investigación que resulten necesarias. A tales fines puede disponer,
entre otras cosas:
1) La comparencia del concursado en los casos de los Artículos 17 y 102 y de las demás personas que
puedan contribuir a los fines señalados. Puede ordenar el auxilio de la fuerza pública en caso de ausencia
injustificada;
2) La presentación de documentos que el concursado o terceros tengan en su poder, los que deben
devolverse cuando no se vinculan a hechos controvertidos respecto de los cuales sean parte litigante”.
RÉGIMEN DE LOS INCIDENTES: El procedimiento de los incidentes se aplica a toda cuestión que tenga
relación con el objeto principal del concurso y no se halle sometida a un procedimiento especial.
La aplicación del trámite del incidente concursal es residual y ha quedado muy limitada con la sanción de la
ley 24.522. El trámite del incidente queda reservado a los de revisión, a las verificaciones tardías y a otras
cuestiones que puedan plantearse. Pero también después de la ley 24.522 se abre toda una gama de
acciones que deben tramitar por las reglas de los incidentes. El artículo 21 de la ley 24.522 dispone la
radicación ante el Juez del concurso de todos los juicios de contenido patrimonial contra el concursado, el
actor en esos juicios tiene una opción: verificar su crédito conforme al sistema ordinario y general de
verificación, o continuar el trámite de los procesos de conocimiento hasta el dictado de la sentencia. Rivera
entiende que todos los procesos de conocimiento que se continúen conforme a esta opción deben ajustar
su trámite al de los incidentes concursales. Ello así por cuanto es imposible que el Juez del concurso siga
los Juicios de acuerdo a su procedimiento original que puede ser muy diverso según la provincia de donde
vengan.
Toda la Doctrina y Jurisprudencia ha entendido que estos incidentes constituyen procesos de conocimiento
pleno, por lo que la decisión que en el recaiga tiene efecto de cosa juzgada material.
En los incidentes concursales no procede la interposición de excepciones previas.
ARTÍCULO 21.- Juicios contra el concursado. “La apertura del concurso produce, a partir de la publicación
de edictos, la suspensión del trámite de los juicios de contenido patrimonial contra el concursado por causa
o título anterior a su presentación, y su radicación en el juzgado del concurso. No podrán deducirse nuevas
acciones con fundamento en tales causas o títulos.
Quedan excluidos de los efectos antes mencionados:
1. Los procesos de expropiación, los que se funden en las relaciones de familia y las ejecuciones de
garantías reales;
2. Los procesos de conocimiento en trámite y los juicios laborales, salvo que el actor opte por suspender el
procedimiento y verificar su crédito conforme lo dispuesto por los artículos 32 y concordantes;
3. Los procesos en los que el concursado sea parte de un litis consorcio pasivo necesario.
En estos casos los juicios proseguirán ante el tribunal de su radicación originaria o ante el que resulte
competente si se trata de acciones laborales nuevas. El síndico será parte necesaria en tales juicios, excepto
en los que se funden en relaciones de familia, a cuyo efecto podrá otorgar poder a favor de abogados cuya
regulación de honorarios estará a cargo del juez del concurso, cuando el concursado resultare condenado
en costas, y se regirá por las pautas previstas en la presente ley.
En los procesos indicados en los incisos 2) y 3) no procederá el dictado de medidas cautelares. Las que se
hubieren ordenado, serán levantadas por el juez del concurso, previa vista a los interesados. La sentencia
que se dicte en los mismos valdrá como título verificatorio en el concurso.
En las ejecuciones de garantías reales no se admitirá el remate de la cosa gravada ni la adopción de
medidas precautorias que impidan su uso por el deudor, si no se acredita haber presentado el pedido de
verificación del crédito y su privilegio”.
(Articulo sustituido por art. 4° de la Ley N° 26.086 B.O. 11/4/2006)
(Nota Infoleg: por art. 9° de la Ley N° 26.086 B.O. 11/4/2006 se establece la aplicación de las
modificaciones introducidas por dicha ley a los juicios excluidos del presente artículo).
Incidentes
ARTICULO 280.- Casos. “Toda cuestión que tenga relación con el objeto principal del concurso y no se halle
sometida a un procedimiento especial, debe tramitar en pieza separada, en la forma prevista por las
disposiciones de este Capítulo”.
ARTICULO 281.-Trámite. “En el escrito en el que se plantee el incidente debe ofrecerse toda la prueba y
agregarse la documental. Si el juez estima manifiestamente improcedente la petición, debe rechazarla sin
más trámite. La resolución es apelable al solo efecto devolutivo.
Si admite formalmente el incidente, corre traslado por DIEZ (10) días, el que se notifica por cédula. Con la
contestación se debe ofrecer también la prueba y agregarse los documentos”.
ARTICULO 282.- Prueba. “La prueba debe diligenciarse en el término que el juez señale, dentro del máximo
de VEINTE (20) días. Si fuere necesario fijar audiencia, se la designa dentro del término indicado, para que
se produzca toda la prueba que la exija.
Corresponde a las partes urgir para que la prueba se reciba en los términos fijados; el juez puede declarar
de oficio la negligencia producida y también dictar resolución una vez vencido el plazo, aun cuando la
prueba no esté totalmente diligenciada, si estima que no es necesaria su producción”.
ARTÍCULO 283.- Prueba pericial. “La prueba pericial se practica por UN (1) solo perito designado de oficio,
salvo que por la naturaleza del asunto el juez estime pertinente designar TRES (3). En este último caso,
dentro de los DOS (2) días posteriores a la designación, las partes pueden proponer en escrito conjunto DOS
(2) peritos. Estos actúan con el primero de los designados por el juez, quedando sin efecto la designación de
los restante”.
ARTÍCULO 284.- Testigos. “No se admiten más de CINCO (5) testigos por cada parte.
Cuando por la complejidad de la causa o de los hechos controvertidos resulte necesario mayor número, se
deben proponer con la restante prueba. Si no se admite la ampliación comparecen solamente los CINCO (5)
ofrecidos en primer término”.
ARTÍCULO 285.- Apelación. “Sólo es apelable la resolución que pone fin al incidente.
Respecto de las resoluciones que deciden artículo o que niegan alguna medida de prueba, la parte
interesada puede solicitar al tribunal de alzada su revocación cuando lo solicite fundadamente en el recurso
previsto en el párrafo precedente”.
ARTÍCULO 286.- Simultaneidad de incidentes. “Todas las cuestiones incidentales cuyas causas existieran
simultáneamente y sean conocidas por quien los promueve deben ser planteadas conjuntamente.
Se deben desestimar sin más trámite las que se entablen con posterioridad”.
ARTÍCULO 287.- Honorarios de incidentes. “En los procesos de revisión de verificaciones de créditos y en
los de verificación tardía, se regularán honorarios de acuerdo a lo previsto para los incidentes en las leyes
arancelarias locales, tomándose como monto del proceso principal el del propio crédito insinuado y
verificado”.
FORMACIÓN DEL LEGAJO DE COPIAS: Se obliga al tribunal a llevar un legajo de copias firmadas de las
actuaciones sustanciales del juicio y de aquellas previstas expresamente en la ley. La finalidad es posibilitar
la consulta del juicio aún cuando el expediente principal esté en trámite.
ARTÍCULO 279.- Legajo de copias. “Con copia de todas las actuaciones fundamentales del juicio y las
previstas especialmente por esta ley, se forma un legajo que debe estar permanentemente a disposición de
los interesados en secretaría. Constituye falta grave del secretario la omisión de mantenerlo actualizado.
Todas las copias glosadas en él deben llevar la firma de las personas que intervinieron. Cuando se trate de
actuaciones judiciales, consisten en testimonios extendidos por el secretario.
Las citas, remisiones y constancias que deban hacerse de piezas del juicio, deben corresponder siempre a
las del original”.
OPORTUNIDAD DE PRACTICAR REGULACIÓN DE HONORARIOS Y SU RÉGIMEN LEGAL:
El régimen de regulación de honorarios concursales tiene algunas particularidades, entre las que cabe
señalar las siguientes:
- Existe una oportunidad para la justipreciación de honorarios fuera de la cual no pueden efectuarse
regulaciones parciales o fragmentarias. Porque fuera de las oportunidades señaladas resulta difícil valorar
el quantum base sobre el que se aplican los porcentuales y para evitar que por la segmentación retributiva
puedan llegar a alterarse los topes arancelarios máximos.
- Los porcentuales para fijar las retribuciones son máximos y en conjunto. Esto es, no puede la suma de las
retribuciones concursales superar el porcentaje máximo aplicable y, a la vez el porcentaje total debe
distribuirse entre los distintos acreedores del estipendio.
- No existen normas expresas sobre la proporción que a los funcionarios y letrados corresponde dentro del
bloque total de honorarios.
Regulación de honorarios
ARTICULO 265.- Oportunidad. “Los honorarios de los funcionarios deben ser regulados por el juez en las
siguientes oportunidades:
1) Al homologar el acuerdo preventivo.
2) Al sobreseer los procedimientos por avenimiento.
3) Al aprobar cada estado de distribución complementaria por el monto que corresponda a lo liquidado en
ella.
4) Al finalizar la realización de bienes en la oportunidad del Artículo 218.
5) Al concluir por cualquier causa el procedimiento del concurso preventivo o de la quiebra”.
ARTÍCULO 271.- Leyes locales. “Para el cálculo de las regulaciones previstas en esta sección no se aplican
las disposiciones de leyes locales.
Los jueces deberán regular honorarios sin atender a los mínimos fijados en esta ley, cuando la naturaleza,
alcance, calidad o resultado de la labor profesional o el valor de los bienes que se consideren indicaren que
la aplicación lisa y llana de aquéllos conduce a una desproporción entre la importancia del trabajo realizado
y la retribución resultante. En este caso, el pronunciamiento judicial deberá contener fundamento explícito
de las razones que justifican esa decisión, bajo pena de nulidad”.
Las leyes arancelarias locales no pueden aplicarse para regular honorarios cuya determinación estuviese
prevista por la ley concursal. Ésta, por su especificidad y jerarquía nacional prevalece sobre cualquier
disposición local.
Los casos no previstos por la ley concursal deben ser resueltos acudiendo en primer lugar, a la aplicación
analógica de sus disposiciones para casos similares, y solamente luego a la supletoria aplicación de leyes
locales cuando fuesen compatibles con los principios que rigen el proceso colectivo, en especial el de
economía del trámite concursal.
Cualquier honorario regulado por el Juez del concurso puede ser inferior a cualquiera de los mínimos que
pudiesen corresponder cuando se configurase desproporción entre la regulación que resultaría y la
importancia del trabajo realizado por el acreedor del estipendio (Funcionario o Profesional). La norma es
excepcional, pues en los hechos implica regular sobre el trabajo efectivamente realizado, desatendiendo
las bases de cálculo de índole patrimonial. Su aplicación corresponde en casos en que la desproporción
aludida fuese manifiesta e injusta.
La Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires dictó en el año 2007 la acordada 3317/07 en
la que se estableció el honorario mínimo para el concurso preventivo homologado y para todos los
profesionales que tengan derecho, de $8250.
2. LA JURISDICCIÓN CONCURSAL.
1- NOCIÓN. LA COMPETENCIA EN MATERIA CONCURSAL: REGLAS QUE LA DETERMINAN; LOS
CONCURSOS DECLARADOS EN EL EXTRANJERO.
2- LA ACTUACIÓN DEL JUEZ EN EL CONCURSO: EL PRINCIPIO DE OFICIOSIDAD; LOS PODERES Y
FACULTADES DEL JUEZ EN LA LEY VIGENTE; LA DELEGACIÓN DE LA EJECUCIÓN DE MEDIDAS.
3- LA ACTUACIÓN DE LOS MINISTERIOS PÚBLICOS.
LA JURISIDICCIÓN CONCURSAL.
1- NOCIÓN: Las disposiciones referidas a la jurisdicción concursal se encuentran contenidas en el artículo 3
LCQ que expresa:
ARTÍCULO 3.- Juez competente. “Corresponde intervenir en los concursos al juez con competencia
ordinaria, de acuerdo a las siguientes reglas:
1) Si se trata de personas de existencia visible, al del lugar de la sede de la administración de sus negocios;
a falta de éste, al del lugar del domicilio.
2) Si el deudor tuviere varias administraciones es competente el juez del lugar de la sede de la
administración del establecimiento principal; si no pudiere determinarse esta calidad, lo que es el juez que
hubiere prevenido.
3) En caso de concurso de personas de existencia ideal de carácter privado regularmente constituidas, y las
sociedades en que el Estado Nacional, Provincial o Municipal sea parte -con las exclusiones previstas en el
Artículo 2 - entiende el juez del lugar del domicilio.
4) En el caso de sociedades no constituidas regularmente, entiende el juez del lugar de la sede; en su
defecto, el del lugar del establecimiento o explotación principal.
5) Tratándose de deudores domiciliados en el exterior, el juez del lugar de la administración en el país; a
falta de éste, entiende el del lugar del establecimiento, explotación o actividad principal, según el caso”.
ARTÍCULO 3°.- Juez competente. “Corresponde intervenir en los concursos al juez con competencia
ordinaria, de acuerdo a las siguientes reglas:
1) Si se trata de personas de existencia visible, al del lugar de la sede de la administración de sus negocios;
a falta de éste, al del lugar del domicilio.
2) Si el deudor tuviere varias administraciones es competente el juez del lugar de la sede de la
administración del establecimiento principal; si no pudiere determinarse esta calidad, lo que es el juez que
hubiere prevenido.
3) En caso de concurso de personas de existencia ideal de carácter privado regularmente constituidas, y las
sociedades en que el Estado Nacional, Provincial o Municipal sea parte -con las exclusiones previstas en el
Artículo 2 - entiende el juez del lugar del domicilio.
4) En el caso de sociedades no constituidas regularmente, entiende el juez del lugar de la sede; en su
defecto, el del lugar del establecimiento o explotación principal.
5) Tratándose de deudores domiciliados en el exterior, el juez del lugar de la administración en el país; a
falta de éste, entiende el del lugar del establecimiento, explotación o actividad principal, según el caso”.
ARTICULO 274.- Facultades del Juez. “El juez tiene la dirección del proceso, pudiendo dictar todas las
medidas de impulso de la causa y de investigación que resulten necesarias. A tales fines puede disponer,
entre otras cosas:
1) La comparencia del concursado en los casos de los Artículos 17 y 102 y de las demás personas que
puedan contribuir a los fines señalados. Puede ordenar el auxilio de la fuerza pública en caso de ausencia
injustificada;
2) La presentación de documentos que el concursado o terceros tengan en su poder, los que deben
devolverse cuando no se vinculan a hechos controvertidos respecto de los cuales sean parte litigante”.
ARTÍCULO 276.- Ministerio Público. Actuación. “El ministerio fiscal es parte en la alzada en los supuestos
del Artículo 51.
En la alzada deberá dársela vista en las quiebras cuando se hubiere concedido recurso en que sea parte el
síndico”.
ARTÍCULO 51: Resolución. “Tramitada la impugnación, si el juez la estima procedente, en la resolución que
dicte debe declarar la quiebra. Si se tratara de sociedad de responsabilidad limitada, sociedad por acciones
y aquellas en que tenga participación el Estado nacional, provincial o municipal, se aplicará el
procedimiento previsto en el artículo 48, salvo que la impugnación se hubiere deducido contra una
propuesta hecha por aplicación de este procedimiento.
Si la juzga improcedente, debe proceder a la homologación del acuerdo.
Ambas decisiones son apelables, al solo efecto devolutivo; en el primer caso, por el concursado y en el
segundo por el acreedor impugnante”.
En el proceso concursal intervienen, además del juez, el concursado y los acreedores, algunos funcionarios:
el síndico, los enajenadores, los estimadores, los coadministradores en la extensión de la quiebra (art. 261,
262, 259 de la LCQ) y los comités de acreedores (art. 260 LCQ).
Pero el funcionario por excelencia es el síndico concursal. El ámbito de actuación de éste es en el concurso
preventivo hasta la homologación del acuerdo, salvo en los pequeños concursos en que interviene también
durante la etapa de cumplimiento del acuerdo. Y en la quiebra durante todo el proceso.
¿A quién se designa Síndico? Antes había listas de abogados y contadores. En los casos de no comerciantes
se aceptaba que no fueran contadores. Actualmente el art. 253 expresa lo siguiente:
ARTÍCULO 253. Síndico. Designación. “La designación del síndico se realiza según el siguiente
procedimiento:
1) Podrán inscribirse para aspirar a actuar como síndicos concursales los contadores públicos, con una
antigüedad mínima en la matrícula de CINCO (5) años; y estudios de contadores que cuenten entre sus
miembros con mayoría de profesionales con un mínimo de CINCO (5) años de antigüedad en la matrícula.
Los integrantes de los estudios al tiempo de la inscripción no pueden a su vez inscribirse como profesionales
independientes. Se tomarán en cuenta los antecedentes profesionales y académicos, experiencia en el
ejercicio de la sindicatura, y se otorgará preferencia a quienes posean títulos universitarios de
especialización en sindicatura concursal, agrupando a los candidatos de acuerdo a todo estos
antecedentes.
2) Cada 4 años la Cámara de Apelación correspondiente forma DOS (2) listas, la primera de ellas
correspondientes a la categoría A, integrada por estudios, y la segunda, categoría B, integrada
exclusivamente por profesionales; en conjunto deben contener una cantidad no inferior a QUINCE (15)
síndicos por Juzgado, con DIEZ (10) suplentes, los que pueden ser reinscriptos indefinidamente. Para
integrar las categorías se tendrán en cuenta los antecedentes y experiencia, otorgando prioridad a quienes
acrediten haber cursado carreras universitarias de especialización de postgrado. Para integrar las
categorías se tomarán en cuenta las pautas indicadas en el último párrafo del inciso anterior.
3) La Cámara puede prescindir de las categorías a que se refiere el inciso anterior en los juzgados con
competencia sobre territorio cuya población fuere inferior a DOSCIENTOS MIL (200.000) habitantes de
acuerdo al último censo nacional de población y vivienda.
También puede ampliar o reducir el número de síndicos titulares por juzgado.
4) Las designaciones a realizar dentro los CUATRO (4) años referidos se efectúan por el juez, por sorteo,
computándose separadamente los concursos preventivos y las quiebras.
5) El sorteo será público y se hará entre los integrantes de una de las listas, de acuerdo a la complejidad y
magnitud del concurso de que se trate, clasificando los procesos en A y B. La decisión la adopta el juez en el
auto de apertura del concurso o de declaración de quiebra. La decisión es inapelable.
6) El designado sale de la lista hasta tanto hayan actuado todos los candidatos.
7) El síndico designado en un concurso preventivo actúa en la quiebra que se decrete como consecuencia de
la frustración del concurso, pero no en la que se decrete como consecuencia del incumplimiento del acuerdo
preventivo.
8) Los suplentes se incorporan a la lista de titulares cuando uno de éstos cesa en sus funciones.
9) Los suplentes actúan también durante las licencias. En este supuesto cesan cuando éstas concluyen.
Sindicatura plural. El juez puede designar más de UN (1) síndico cuando lo requiera el volumen y
complejidad del proceso, mediante resolución fundada que también contenga el régimen de coordinación
de la sindicatura. Igualmente podrá integrar pluralmente una sindicatura originariamente individual,
incorporando síndicos de la misma u otra categoría, cuando por el conocimiento posterior relativo a la
complejidad o magnitud del proceso, advirtiera que el mismo debía ser calificado en otra categoría de
mayor complejidad”.
Sindicatura en caso de frustración del concurso preventivo e incumplimiento del acuerdo: el inciso 7 del
art. 253 establece: “7) El síndico designado en un concurso preventivo actúa en la quiebra que se decrete
como consecuencia de la frustración del concurso, pero no en la que se decrete como consecuencia del
incumplimiento del acuerdo preventivo”. Pero el art. 64 establece que cuando se declare la quiebra
estando en cumplimiento del acuerdo preventivo, actúa “el mismo síndico”, Es una contradicción entre
ambas normas pero se considera que el art. 64 sólo es para pequeños concursos, que son aquellos en los
que el síndico no cesa su función al concluir el acuerdo preventivo, sino que actúa también como
controlador del cumplimiento del acuerdo.
Sindicatura Plural: está establecido en el último párrafo del art. 253: “…Sindicatura plural. El juez puede
designar más de UN (1) síndico cuando lo requiera el volumen y complejidad del proceso, mediante
resolución fundada que también contenga el régimen de coordinación de la sindicatura. Igualmente podrá
integrar pluralmente una sindicatura originariamente individual, incorporando síndicos de la misma u otra
categoría, cuando por el conocimiento posterior relativo a la complejidad o magnitud del proceso,
advirtiera que el mismo debía ser calificado en otra categoría de mayor complejidad”.
Se autoriza así al juez a designar más de un síndico cuando así lo requiera el volumen y complejidad del
proceso. Esta previsión debe entenderse referida a las jurisdicciones en que no exista lista de estudios.
Pero en realidad no excluye que en procesos de gran complejidad el juez pueda designar más de un
estudio incorporar estudios y contadores individuales. En los últimos años se hizo para Super Canal S.A. y
en Correo Argentino donde el juez designó tres estudios y seis síndicos individuales, atribuyendo distintas
funciones a cada uno.
Funciones de la Sindicatura: de los antiguos antecedentes de esta institución ha quedado la idea de que el
síndico es un representante, pero lo singular es que según la postura de los autores o las distintas
funciones que le son encomendadas, se ha dicho que es representante de los acreedores del fallido, de la
masa. Actualmente, según Rivera, se sostiene que hay que descartar la idea de que el síndico es un
representante; ya que no recibe sus facultades ni de los acreedores ni del deudor sino directamente de la
ley; y no actúa en interés directo de una u otra parte sino del cumplimiento de las finalidades del proceso
concursal. Tampoco es parte del proceso. La sindicatura es un órgano del concurso cuyas atribuciones,
legitimación, responsabilidades, vienen dadas por ley. Está individualizado en una persona física o en una
asociación de profesionales integrada por personas físicas.
¿Es un funcionario público o no? Rivera sostiene la tesis negativa, originada por Maffía, aunque hay
quienes sostienen que sí.
Atribuciones del Síndico: Maffía señala dos grandes clases: Administración, ya que en la quiebra tiene a su
cargo la incautación, conservación y administración de los bienes del fallido (art. 177 y 179 LCQ) y de
contradictor, ya que debe aconsejar o desaconsejar la verificación de los créditos que le han presentado.
Segal alude a: funciones de administración, gestión empresaria, orden procesal y de liquidación.
Principales funciones del Síndico: a lo largo de los procesos concursales su rol es permanente, tanto en el
concurso preventivo como en la quiebra, es figura esencial en la determinación del pasivo, ya que recibe,
examina y aconseja sobre las pretensiones de verificación de créditos y esa tarea concluye en el
denominado informe individual (arts. 35 y 200 de la LCQ):
ARTÍCULO 35.- Informe individual. “Vencido el plazo para la formulación de observaciones por parte del
deudor y los acreedores, en el plazo de VEINTE (20) días, el síndico deberá redactar un informe sobre cada
solicitud de verificación en particular, el que deberá ser presentado al juzgado.
Se debe consignar el nombre completo de cada acreedor, su domicilio real y el constituido, monto y causa
del crédito, privilegio y garantías invocados; además, debe reseñar la información obtenida, las
observaciones que hubieran recibido las solicitudes, por parte del deudor y de los acreedores, y expresar
respecto de cada crédito, opinión fundada sobre la procedencia de la verificación del crédito y el privilegio.
También debe acompañar una copia, que se glosa al legajo a que se refiere el artículo 279, la cual debe
quedar a disposición permanente de los interesados para su examen, y copia de los legajos”.
ARTÍCULO 200.- “Todos los acreedores por causa o título anterior a la declaración de quiebra y sus
garantes, deben formular al síndico el pedido de verificación de sus créditos, indicando monto, causa y
privilegios. La petición debe hacerse por escrito, en duplicado acompañando los títulos justificativos con dos
(2) copias firmadas; debe expresar el domicilio, que constituya a todos los efectos del juicio. El síndico
devuelve los títulos originales, dejando en ellos constancia del pedido de verificación y su fecha. Puede
requerir la presentación de los originales, cuando lo estime conveniente. La omisión de presentarlos obsta a
la verificación.
Efectos: El pedido de verificación produce los efectos de la demanda judicial, interrumpe la prescripción e
impide la caducidad del derecho y de la instancia.
Por cada solicitud de verificación de crédito que se presente, el acreedor, sea tempestivo, incidental o
tardío, pagará al síndico un arancel equivalente al diez por ciento (10%) del salario mínimo vital y móvil que
se sumará a dicho crédito. El síndico afectará la suma recibida a los gastos que le demande el proceso de
verificación y confección de los informes, con cargo de oportuna rendición de cuentas al juzgado, quedando
el remanente como suma a cuenta de honorarios a regularse por su actuación. Exclúyase del arancel a los
créditos de causa laboral, y a los equivalentes a menos de tres (3) salarios mínimos vitales y móviles, sin
necesidad de declaración judicial.
Facultades de información: El síndico debe realizar todas las compulsas necesarias en los libros y
documentos del fallido y, en cuanto corresponda, en los del acreedor. Puede asimismo valerse de todos los
elementos de juicio que estimule útiles y, en caso de negativa a suministrarlos, solicitar del juez de la causa
las medidas pertinentes.
Debe formar y conservar los legajos correspondientes a los acreedores que soliciten la verificación de sus
créditos. En dichos legajos el síndico deberá dejar la constancia de las medidas realizadas.
Período de observación de créditos: Vencido el plazo para solicitar la verificación de los créditos ante el
síndico por parte de los acreedores durante el plazo de diez (10) días, contados a partir de la fecha de
vencimiento, el deudor y los acreedores que hubieren solicitado verificación podrán concurrir al domicilio
del síndico a efectos de revisar los legajos y formular por escrito las impugnaciones y observaciones
respecto de las solicitudes formuladas, bajo el régimen previsto en el artículo 35. Dichas impugnaciones
deberán ser acompañadas de dos (2) copias y se agregarán el legajo correspondiente, entregando el síndico
al interesado constancia que acredite la recepción, indicando día y hora de la presentación.
Dentro de las cuarenta y ocho (48) horas de vencido el plazo previsto en el párrafo anterior, el síndico
presentará al juzgado un (1) juego de copias de las impugnaciones recibidas para su incorporación al legajo
previsto por el artículo 279.
El síndico debe presentar los informes a que se refieren los artículos 35 y 39 en forma separada respecto de
cada uno de los quebrados.”
También está a su cargo el informe general del artículo 39 de la LCQ: Oportunidad y contenido.
“Treinta (30) días después de presentado el informe individual de los créditos, el síndico debe presentar un
informe general, el que contiene:
1) El análisis de las causas del desequilibrio económico del deudor.
2) La composición actualizada y detallada del activo, con la estimación de los valores probables de
realización de cada rubro, incluyendo intangibles.
3) La composición del pasivo, que incluye también, como previsión, detalle de los créditos que el deudor
denunciara en su presentación y que no se hubieren presentado a verificar, así como los demás que resulten
de la contabilidad o de otros elementos de juicio verosímiles.
4) Enumeración de los libros de contabilidad, con dictamen sobre la regularidad, las deficiencias que se
hubieran observado, y el cumplimiento de los artículos 43, 44 y 51 del Código de Comercio.
5) La referencia sobre las inscripciones del deudor en los registros correspondientes y, en caso de
sociedades, sobre las del contrato social y sus modificaciones, indicando el nombre y domicilio de los
administradores y socios con responsabilidad ilimitada.
6) La expresión de la época en que se produjo la cesación de pagos, hechos y circunstancias que
fundamenten el dictamen.
7) En caso de sociedades, debe informar si los socios realizaron regularmente sus aportes, y si existe
responsabilidad patrimonial que se les pueda imputar por su actuación en tal carácter.
8) La enumeración concreta de los actos que se consideren susceptibles de ser revocados, según lo disponen
los artículos 118 y 119.
9) Opinión fundada respecto del agrupamiento y clasificación que el deudor hubiere efectuado respecto de
los acreedores.
10) Deberá informar, si el deudor resulta pasible del trámite legal prevenido por el Capítulo III de la ley
25.156, por encontrarse comprendido en el artículo 8° de dicha norma”.
E interviene en los incidentes de revisión de las resoluciones que declararon admisibles o inadmisibles los
créditos:
ARTÍCULO 37.- Efectos de la resolución. “La resolución que declara verificado el crédito y, en su caso, el
privilegio, produce los efectos de la cosa juzgada, salvo dolo.
La que lo declara admisible o inadmisible puede ser revisada a petición del interesado, formulada dentro de
los VEINTE (20) días siguientes a la fecha de la resolución prevista en el artículo 36. Vencido este plazo, sin
haber sido cuestionada, queda firme y produce también los efectos de la cosa juzgada, salvo dolo”.
Cuando el crédito está verificado se constituye como cosa juzgada.
En los pequeños concursos tiene a su cargo el contralor del cumplimiento del acuerdo preventivo. Artículo
289 LCQ: Régimen aplicable. “En los presentes procesos no serán necesarios los dictámenes previstos en el
artículo 11, incisos 3 y 5, la constitución de los comités de acreedores y no regirá el régimen de supuestos
especiales previstos en el artículo 48 de la presente ley. El controlador del cumplimiento del acuerdo estará
a cargo del síndico en caso de no haberse constituido comité de acreedores. Los honorarios por su labor en
esta etapa serán del 1% (uno por ciento) de lo pagado a los acreedores”.
Deberes y Facultades:
ARTICULO 275.- Deberes y facultades del síndico. “Compete al síndico efectuar las peticiones necesarias
para la rápida tramitación de la causa, la averiguación de la situación patrimonial del concursado, los
hechos que puedan haber incidido en ella y la determinación de sus responsables. A tal fin tiene, entre
otras, las siguientes facultades:
1) Librar toda cédula y oficios ordenados, excepto los que se dirijan al presidente de la Nación,
gobernadores, ministros y secretarios de Estado, funcionarios de análoga jerarquía y magistrados
judiciales;
2) Solicitar directamente informes a entidades públicas y privadas.
En caso que el requerido entienda improcedente la solicitud, debe pedir al juez se la deje sin efecto, dentro
del quinto día de recibida;
3) Requerir del concursado o terceros las explicaciones que estime pertinentes. En caso de negativa o
resistencia de los interpelados, puede solicitar al juez la aplicación de los Artículos 17, 103 y 274, inciso 1;
4) Examinar, sin necesidad de autorización judicial alguna, los expedientes judiciales o extrajudiciales donde
se ventile una cuestión patrimonial del concursado o vinculada directamente con ella;
5) Expedir certificados de prestación servicios de los dependientes, destinados a la presentación ante los
organismos de seguridad social, según constancias de la contabilidad;
6) En general, solicitar todas las medidas dispuestas por esta ley y otras que sean procedentes a los fines
indicados.
7) Durante el período de verificación de créditos y hasta la presentación del informe individual, debe tener
oficina abierta al público en los horarios que determine la reglamentación que al efecto dictará la Cámara
de Apelaciones respectiva.
8) El síndico debe dar recibo con fecha y hora bajo su firma o de la persona autorizada expresamente en el
expediente, de todo escrito que le sea presentado en su oficina durante el período de verificación de
créditos y hasta la presentación del informe individual, el que se extenderá en una copia del mismo escrito.
El síndico es parte en el proceso principal, en todos sus incidentes y en los demás juicios de carácter
patrimonial en los que sea parte el concursado, salvo los que deriven de relaciones de familia en la medida
dispuesta por esta ley”.
El síndico como parte: así lo dispone el artículo 275 en su último apartado. Ya en la ley 19.551 fue criticado
que se de al síndico el carácter de parte. Es que en realidad actúa como funcionario del concurso que
ejerce un mandato legal necesario que no surge de la voluntad de las partes sino de la ley, de modo que no
actúa como parte ya que no le incumbe ser parcial sino imparcial, velando por el interés general.
En cuanto al artículo 110 que dispone que el síndico sustituye la legitimación procesal del quebrado, es
sólo en los procesos relativos a los bienes desapoderados, e integra la relación procesal en los juicios
patrimoniales en que actúe el concursado preventivamente.
B) INDELEGABILIDAD DE SUS FUNCIONES: la función del síndico es indelegable, por lo que el artículo 258
dispone que debe actuar personalmente. Cuando se trate de estudios, se deberá indicar cuáles son los
profesionales integrantes que asumen el deber de actuar personalmente.
La delegación no autorizada de funciones constituye un grave incumplimiento de los deberes del síndico.
Retribución del síndico: el síndico tiene derecho, como los demás funcionarios, a una retribución que el
juez fija en las oportunidades previstas en el artículo 265, o sea, al homologar el acuerdo preventivo, al
resolverse sobre la distribución final o las complementarias, al sobreseer los procedimientos por
avenimientos o al concluir por cualquier otra causa el proceso concursal.
Monto de honorarios: la ley prevé escalas para determinar el monto total de los honorarios en favor de
todos los profesionales intervinientes:
-Para el concurso preventivo del 1% al 4% del activo estimado
-En la quiebra del 4% al 12% del activo realizada.
La ley prevé ahora montos mínimos vinculados a los sueldos judiciales, lo que en consecuencia autoriza a
superar los porcentajes aludidos. Cuando no alcancen a cubrir la retribución mínima. La pauta son tres
sueldos mínimos del secretario, inspirado en un plenario de Rosario. No obstante se ha resuelto que puede
prescindirse de dicho mínimo de tres sueldos del secretario cuando signifique desproporción con las tareas
realizadas y la retribución obtenida.
Carácter del crédito: el crédito por honorarios, tanto de los síndicos como de otros profesionales, es un
gasto de justicia (artículo 249 LCQ) por lo que debe satisfacerse cuando resulta exigible
La exigibilidad del crédito difiere en la quiebra y en el concurso preventivo. En la quiebra los honorarios
deben satisfacerse cuando la regulación esté firme y en el concurso preventivo los honorarios deben
pagarse a los 90 días contados a partir de la homologación o simultáneamente con el pago de la primera
cuota a alguna de las categorías de acreedores que venciere antes de ese plazo (artículo 54 de LCQ).
Los honorarios regulados en el concurso preventivo que no hubieren sigo pagados, conservan el carácter
de gasto de justicia en la quiebra posterior (artículo 239, segundo párrafo).
o Renuncia: en principio la función del síndico es irrenunciable, por lo que la renuncia sólo es
admisible cuando exista causa grave que impida su desempeño, hipótesis en la cual la renuncia ha
de comprender todos los asuntos en que el funcionario actúe. Lo mismo para los profesionales. La
renuncia debe ser aceptada por la Cámara de Apelaciones y apreciada con criterio restrictivo
(artículo 255, primer y segundo párrafo LCQ).
o Remoción: puede ser dispuesta por: negligencia, falta grave o mal desempeño de sus funciones. En
la jurisprudencia se consideraron como causas de remoción del síndico: percepción de honorarios
antes de la regulación, delegación de funciones, grave desconocimiento de la ley, incumplimiento
sistemático de deberes procesales, la negativa a contestar los requerimientos del Tribunal, la
omisión de omitir inscripciones registrales que están a su cargo, inversión de dinero de la masa en
circuitos financiero no institucional (ejemplo una mesa de dinero), la inactividad procesal durante
largo tiempo, entre otras.
Los tribunales determinaron que la apreciación de remover al síndico debe hacerse considerando la
totalidad de su desempeño.
La remoción corresponde al juez del concurso y la decisión que él adopte es apelable por el síndico, sea
que disponga la remoción u otras sanciones menores. La resolución que rechaza la remoción es inapelable.
También el juez puede imponer sanciones al síndico. Las sanciones pueden ser pedidas por el concursado o
los acreedores.
No se prevé por ley la suspensión provisional del síndico.
Efectos de la remoción: causa la inhabilitación para desempeñar el cargo de síndico durante un plazo no
inferior a 4 años ni superior a 10 años, el que es fijado en la resolución respectiva. La ley vigente dispone
que la remoción puede importar la reducción de los honorarios a regularse entre un 30 o 50%, y esa
reducción puede ser superior si está basada en dolo del funcionario.
Por último, si la falta es excesivamente grave, el juez puede aplicar apercibimiento o multa hasta un
importe equivalente al sueldo mensual del juez de primera instancia de la jurisdicción. La imposición de
esas sanciones son apelables, pero el mero llamado de atención no es sanción, por lo que no es susceptible
de apelación.
Artículo 255: Irrenunciabilidad. “El profesional o el estudio incluido en la lista a que se refiere el Artículo
253 no pueden renunciar a las designaciones que le correspondan, salvo causa grave que impida su
desempeño.
La renuncia comprende la totalidad de las sindicaturas en que el funcionario actúe y debe ser juzgada por la
Cámara de Apelaciones con criterio restrictivo. El renunciante debe seguir en sus funciones hasta la
aceptación del cargo por el reemplazante.
Remoción. Son causas de remoción del síndico la negligencia, falta grave o mal desempeño de sus
funciones. La remoción compete al juez, con apelación ante la Cámara. Consentido o ejecutoriado el auto,
el síndico cesa en sus funciones en todos los concursos en que intervenga. La remoción causa la
inhabilitación para desempeñar el cargo de síndico durante un término no inferior a CUATRO (4) años ni
superior a DIEZ (10), que es fijado en la resolución respectiva. La remoción puede importar la reducción
para el síndico de entre un TREINTA POR CIENTO (30%) y CINCUENTA POR CIENTO (50%) de los honorarios a
regularse por su desempeño salvo en caso de dolo, en cuyo caso la reducción podrá superar dicho límite.
Puede aplicarse también, según las circunstancias, apercibimiento o multa hasta el equivalente a la
remuneración mensual del juez de Primera Instancia.
Licencia. Las licencias se conceden sólo por motivos que impidan temporariamente el ejercicio del cargo y
no pueden ser superiores a DOS (2) meses por año corrido. Las otorga el juez con apelación en caso de
denegación”.
2- Definitivo: actúa después de la homologación con la finalidad de controlar el cumplimiento del acuerdo.
La ley exige que la propuesta de acuerdo preventivo que haga el concursado contemple la formación de
ese comité definitivo.
El comité definitivo, que controla el cumplimiento del acuerdo preventivo, es designado a propuesta del
concursado y con el voto favorable de los acreedores que representen la mayoría del capital.
Es claro que cuando el deudor tiene el consentimiento de los acreedores a la propuesta puede manipular la
designación y que “acreedores amigos” formen ese comité. Para evitar eso, en el caso “Aerolineas
Argentinas S.A s/ Concurso Preventivo (2002)” la Jueza dispuso actuar oficiosamente sobre la integración
del comité y excluyó a uno de los integrantes y puso a otro, por lo cual el comité en definitiva integrado
por la decisión judicial.
Este artículo atribuye a ambos comités amplias facultades de información y consejo, enuncia sus
atribuciones para requerir información al síndico y al concursado, exigir la exhibición de libros, registros
legales y contables, proponer planes de custodia y conservación del patrimonio del concursado, solicitar
audiencias ante el juez interviniente, etcétera.
El Juez debe oír al comité pero no está obligado de manera alguna a seguir sus consejos.
En cuanto al comité definitivo tiene además la función de contralor del cumplimiento del acuerdo y las que
se hayan fijado en el acuerdo preventivo.
MARTILLEROS O ENAJENADORES: La ley 19.551 atribuía la función de vender los bienes de la quiebra sólo a
los martilleros actualmente el artículo 261 LCQ establece…
ARTICULO 261.- Enajenadores. “La tarea de enajenación de los activos de la quiebra puede recaer en
martilleros, bancos comerciales o de inversión, intermediarios profesionales en la enajenación de empresas,
o cualquier otro experto o entidad especializada.
El martillero es designado por el juez, debe tener casa abierta al público y SEIS (6) años de antigüedad en la
matrícula. Cobra comisión solamente del comprador y puede realizar los gastos impuestos por esta ley, los
que sean de costumbre y los demás expresamente autorizados por el juez antes de la enajenación.
Cuando la tarea de enajenación de los activos de la quiebra recaiga en bancos, intermediarios profesionales
en la enajenación de empresas, o cualquier otro experto o entidad especializada, su retribución se rige por
lo establecido en el párrafo anterior”.
Para el martillero la ley exige que tenga casa abierta al público y antigüedad de 6 años en la matrícula.
La retribución de los enajenadores se cobra del comprador.
EMPLEADOS:
ARTÍCULO 263 LCQ.- Empleados. “El síndico puede pedir al juez autorización para contratar empleados en
el número y por el tiempo que sean requeridos para la eficaz y económica realización de sus tareas.
La decisión debe determinar, en su caso, el tiempo y emolumentos que se autorice”.
ARTÍCULO 264 LCQ.- Pago de servicios: reglas. “Salvo los casos de servicios que deban retribuirse
mensualmente o de operaciones contratadas por una cantidad determinada, no puede autorizarse la
extracción de suma alguna de los fondos del concurso, con destino a pagos a cuenta por servicios
continuados cuya remuneración dependa de estimación judicial.
Las disposiciones de este artículo y del precedente han de entenderse sin perjuicio de las facultades del
síndico de disponer de las sumas recibidas en concepto de arancel conforme lo previsto en el Artículo 32,
párrafo 3, y de sus facultades en caso de continuación de la explotación y lo dispuesto por los Artículos 269
y 270”.
BOLILLA VII
-Ley 22.917: introdujo el artículo 125, incisos 1 y 2. Que regularon los acuerdos pre-concursales. El primero
regulaba los efectos de los acuerdos no sometidos a homologación y los segundos de los que sí se hacía
homologación. Los segundos no fueron utilizados y los primeros sí.
-Ley 24.522: mejoró el procedimiento y sólo había homologación en caso de que si los acuerdos eran
excluidos del alcance de eficacia. Pero en la práctica casi no hubo casos de homologación.
-Ley 25.589: la tendencia de esta ley fue privilegiar las negociaciones directas entre acreedores y deudor,
limitando la intervención judicial. El concurso judicial es largo y dificulta el acceso a nuevo financiamiento.
Se inspiró esta ley en el derecho comparado de Inglaterra y EEUU. La principal característica del acuerdo
extrajudicial es que es un acuerdo oponible a todos los acreedores de causa anterior a la presentación, por
lo que sus efectos son equiparados por la ley a los de un acuerdo preventivo resultado de un proceso
ordinario.
Crítica al acuerdo preventivo: la nueva doctrina recibió esta institución como un instrumento práctico, ágil
y menos costoso. Pero una crítica fuerte vino de Heredia que dice que no es un acuerdo de 2masa2 porque
no existe masa de acreedores creada por la sentencia de apertura de un concurso; afirma que el acuerdo
preventivo extrajudicial no es más que un contrato y que no puede ser obligatorio para quienes no lo han
suscripto. Pero Rivera dice que para que haya comunidad de intereses no es necesario la sentencia de
apertura a concurso sino en un dato fáctico de las varias personas que son acreedoras del mismo deudor.
2- DISCIPLINA LEGAL: La ley estructura el acuerdo preventivo extrajudicial a partir del artículo 69 de la LCQ
y sobre la base de los siguientes puntos:
-Pueden intentar un acuerdo preventivo extrajudicial los deudores capacitados para concursarse que se
encuentren en estado de cesación de pagos o en dificultades económicas o financieras de carácter general.
B) PARTES: todos los que pueden solicitar su concurso preventivo judicial pueden requerir la homologación
de un acuerdo preventivo extrajudicial. Por otro lado, los sujetos excluidos son todos aquellos que no
pueden pedir concurso preventivo judicial. Una aclaración es que no están excluidos quienes no lleven
contabilidad regular.
ACUERDO POR ACREEDORES PRIVILEGIADOS: la ley no se refiere a acreedores privilegiados, por lo que
parecería que está pensado sólo para acreedores quirografarios. Pero Truffat basándose en una
interpretación sistemática de la LCQ sostiene que es admisible el acuerdo preventivo extrajudicial para
acreedores privilegiados, el que queda sometido a las mayorías previstas en el artículo 47.
C) CONTENIDO: Las partes pueden incluir en el acuerdo el contenido que consideren conveniente a sus
intereses.
ARTÍCULO 71 LCQ: Libertad de contenido. “Las partes pueden dar al acuerdo el contenido que consideren
conveniente a sus intereses y es obligatorio para ellas aun cuando no obtenga homologación judicial, salvo
convención expresa en contrario”.
D) FORMA: el acuerdo destinado a ser homologado en los términos de la LCQ es un acto jurídico formal,
pues exige el instrumento privado como forma mínima. ARTICULO 70: Forma. “El acuerdo puede ser
otorgado en instrumento privado, debiendo la firma de las partes y las representaciones invocadas estar
certificadas por escribano público. Los documentos habilitantes de los firmantes, o copia autenticada de
ellos, deberán agregarse al instrumento. No es necesario que la firma de los acreedores sea puesta el
mismo día”.
Por supuesto que las partes pueden extenderlo por escritura pública y así deben hacerlo si la naturaleza de
la institución lo requiere, por ejemplo: casos de hipoteca.
En cuanto al contenido, existe libertad del mismo:
ARTICULO 71: “Libertad de contenido. Las partes pueden dar al acuerdo el contenido que consideren
conveniente a sus intereses y es obligatorio para ellas aun cuando no obtenga homologación judicial, salvo
convención expresa en contrario”.
E) REQUISITOS PARA LA HOMOLOGACIÓN: Los recaudos formales se encuentran en el artículo 72 LCQ que
expresa lo siguiente: Requisitos para la homologación. “Para la homologación del acuerdo deben
presentarse al juez competente, conforme lo dispuesto en el artículo 3º, junto con dicho acuerdo, los
siguientes documentos debidamente certificados por contador público nacional:
1. Un estado de activo y pasivo actualizado a la fecha, del instrumento con indicación precisa de las normas
seguidas para su valuación;
2. Un listado de acreedores con mención de sus domicilios, monto de los créditos, causas, vencimientos,
codeudores, fiadores o terceros obligados y responsables; la certificación del contador debe expresar que
no existen otros acreedores registrados y detallar el respaldo contable y documental de su afirmación;
3. Un listado de juicios o procesos administrativos en trámite o con condena no cumplida, precisando su
radicación;
4. Enumerar precisamente los libros de comercio y de otra naturaleza que lleve el deudor, con expresión del
último folio utilizado a la fecha del instrumento;
5. El monto de capital que representan los acreedores que han firmado el acuerdo, y el porcentaje que
representan respecto de la totalidad de los acreedores registrados del deudor.
Ordenada la publicación de los edictos del artículo 74, quedan suspendidas todas las acciones de contenido
patrimonial contra el deudor, con las exclusiones dispuestas por el artículo 21”.
Para los incapaces, inhabilitados y el patrimonio de personas fallecidas, rigen iguales requisitos que en el
concurso preventivo.
F) RÉGIMEN DE MAYORÍAS: el artículo 73 LCQ dispone que Mayorías. “Para que se dé homologación
judicial al acuerdo es necesario que hayan prestado su conformidad la mayoría absoluta de acreedores
quirografarios que representen las dos terceras partes del pasivo quirografario total, excluyéndose del
cómputo a los acreedores comprendidos en las previsiones del artículo 45”.
Estas mayorías son las mismas que se exigen para la aprobación de un acuerdo preventivo en el marco del
concurso judicial.
G) TRÁMITE DE LA HOMOLOGACIÓN:
PUBLICIDAD: ARTÍCULO 74: Publicidad. “La presentación del acuerdo para su homologación debe ser hecha
conocer mediante edictos que se publican por cinco (5) días en el diario de publicaciones legales de la
jurisdicción del tribunal y un (1) diario de gran circulación del lugar. Si el deudor tuviere establecimientos
en otra jurisdicción judicial debe publicar los edictos por el mismo plazo en el lugar de ubicación de cada
uno de ellos y en su caso en el diario de publicaciones oficiales respectivo”.
H) OPOSICIONES:
ARTÍCULO 75: Oposición. “Podrán oponerse al acuerdo los acreedores denunciados y aquellos que
demuestren sumariamente haber sido omitidos en el listado previsto en el inciso 2 del artículo 72. La
oposición deberá presentarse dentro de los diez (10) días posteriores a la última publicación de edictos, y
podrá fundarse solamente en omisiones o exageraciones del activo o pasivo o la inexistencia de la
mayoría exigida por el artículo 73. De ser necesario se abrirá a prueba por diez (10) días y el juez
resolverá dentro de los diez (10) días posteriores a la finalización del período probatorio.
Si estuvieren cumplidos los requisitos legales y no mediaran oposiciones, el juez homologará el acuerdo.
La regulación de honorarios, en caso de existir impugnaciones, será efectuada por el juez teniendo en
cuenta exclusivamente la magnitud y entidad de los trabajos realizados por los profesionales en el
expediente, sin tomar en cuenta el valor económico o comprometido en el acuerdo, ni el monto del crédito
del impugnante”.
EFECTOS DE LA HOMOLOGACIÓN: se impone a todos los acreedores quirografarios por causar anterior a la
presentación y aunque no hayan participado del procedimiento, según el artículo 56. También de los
privilegiados que hayan renunciado a su situación de privilegio. La ley no atribuye al acuerdo extrajudicial
homologado el efecto novatorio que sí le atribuye al acuerdo preventivo homologado (artículo 55).
Rechazo de la homologación: si el acuerdo no se homologa no se pasa a la quiebra del deudor porque este
efecto no está legalmente previsto. El deudor podrá:
A. Intentar un nuevo acuerdo preventivo extrajudicial, con la salvedad de que los jueces deberán estar
atentos a que no se reiteren presentaciones sucesivas que perturben acciones judiciales de los acreedores.
I) OPONIBILIDAD: El acuerdo homologado es oponible a todos los acreedores quirografarios del deudor de
causa o título anterior a la presentación aunque hayan prestado su conformidad para el acuerdo. De esta
manera se le otorga al acuerdo homologado los mismos efectos que el acuerdo preventivo obtenido en un
concurso.
ARTÍCULO 76 LCQ: Efectos de la homologación. “El acuerdo homologado conforme a las disposiciones de
esta sección produce los efectos previstos en el artículo 56, y queda sometido a las previsiones de las
Secciones III, IV y V del Capítulo V del Título II de esta ley”.
INTERÉS GENERAL.LA CALIDAD DEL DEUDOR Y LA BUENA FE EN LOS SISTEMAS ANTERIORES Y EN LA LEY
VIGENTE: 2- FINES DEL CONCURSO EN CORRELACIÓN CON LOS INTERESES ALCANZADOS POR EL PROCESO,
SU CONSIDERACIÓN POR EL JUEZ EN LOS PROCEDIMIENTOS DE HOMOLOGACIÓN: EVOLUCIÓN
LEGISLATIVA.
En los concursos fundados en la insolvencia del deudor entran en juego: los derechos de los acreedores, la
dignidad de la persona del deudor y la protección de la empresa como entidad social y económicamente
significativa. En la misma orientación se dice que el derecho de la insolvencia requiere la consideración de
la posición y los problemas del deudor, de sus acreedores y de la comunidad en general.
– Los derechos de los acreedores: el derecho de las obligaciones, desde sus albores en el derecho romano
estuvo dirigido a identificar los medios de que dispone el acreedor para constreñir al deudor al pago de la
obligación asumida.
Ello se conserva en el derecho contemporáneo ya que el efecto normal de las obligaciones es el pago,
están destinadas a extinguirse como consecuencias de la satisfacción del interés del acreedor. Esta
necesaria satisfacción del acreedor se sintetiza en las facultades que acuerda el Código Civil y Comercial y
en el ordenamiento de acciones judiciales (a cada derecho corresponde una acción) para agredir el
patrimonio del deudor.
Cuando los bienes singulares que conforman el patrimonio del deudor son insuficientes para responder a
las obligaciones se produce el fenómeno de la quiebra, cuya finalidad es el desapoderamiento que autoriza
y viabiliza la liquidación de esos bienes para con su producido satisfacer a los acreedores.
– Dignidad del deudor: antiguamente la primera versión del concepto de obligatio era un vínculo, ligamen,
ligadura, una atadura con la que el acreedor sujeta al deudor. El acreedor tenía el derecho de actuar sobre
el cuerpo del deudor incumpliente.
Del contrato aparecía el nexi que en un momento posterior con la sanción de la ley poetilia papiria año 420
de roma esta noción muta a la de relación jurídica atenuándose así los alcances del nexi y prohibiendo que
los deudores pudieran entregarse en servidumbre a su acreedor en pago de la deuda.
A partir de allí la obligación nacida del contrato sólo pudo ejecutarse en los bienes del deudor.
De otro lado, constituye un prius del derecho contemporáneo el reconocimiento en cada hombre,
precisamente porque es persona de un sentido ético, de un valor en si mismo, en ese sentido, una
dignidad. Esta dignidad exige la preservación de un mínimo de bienes que permitan al deudor conservar lo
necesario para vivir dignamente, él y su familia. Esto ha tenido una antigua expresión en la legislación y en
la jurisprudencia que han elaborado un catalogo de bienes excluidos del poder de agresión de los
acreedores.
En otro plano, la dignidad de la persona se vincula con su aptitud para insertarse en la vida de relación
laboral o profesional. Por lo que en el derecho actual se propicia una rápida reincorporación del fallido a
actividades que permitan ganar su sustento y participar activamente en la producción de bienes y servicios.
– La conservación de la empresa: finalmente ha sido una constante del derecho concursal la preservación
de la actividad empresaria del deudor cesante.
Ello se ha proyectado en la mayor facilidad de acceso a las soluciones preventivas, y en la quiebra, en la
priorización de la liquidación de la empresa como unidad y en funcionamiento.
– Evolución: la evolución del derecho concursal demuestra que el balance entre los tres elementos
mencionados no es sencillo de alcanzar y que en muchos períodos alguno ha prevalecido sobre los otros.
a) la quiebra como medio de satisfacción de los intereses de los acreedores: en una primera etapa (los
orígenes del derecho concursal) los derechos de los acreedores predominaron abiertamente sobre la
dignidad personal del deudor. De allí que la muerte, el destierro, la prisión, las sanciones infamantes y por
supuesto el desapoderamiento de todos los bienes casi sin exclusión, eran característicos de los
ordenamientos medievales.
La conservación de la empresa aparecía tímidamente con las primeras manifestaciones de las soluciones
preventivas.
No varió mucho el panorama durante varios siglos, prueba de ello es que el Código de Comercio de
1859/62 seguía manteniendo la prisión del fallido que no podía garantizar el pago de su pasivo.
b) la preservación de la empresa: concebida la quiebra como una solución virtualmente única al fenómeno
de la insolvencia, por ser excepcionales las soluciones preventivas se la entendió como una mera ejecución
cuya finalidad era la de satisfacer los intereses de los acreedores mediante la liquidación de los bienes del
deudor común, para ser repartido su producido entre aquellos a prorrata de sus acreencias.
La doctrina contractualista dio un lugar preeminente a la salvación o conservación de la empresa, a la
protección de las relaciones laborales, al interés general y dejaron para el último a los intereses de los
acreedores.
En la empresa se dice se conjugan intereses que exceden los meramente privados de los acreedores, por
cierto a veces en la empresa aparece comprometido el interés público, pues ella atiende a la producción de
insumos o prestación de servicios esenciales para la vida comunitaria.
Se ha subrayado también la existencia de un interés social, que está dado por las relaciones laborales que
genera la actividad empresaria, de por sí creadora de puestos de trabajo. Por estas razones se sostenía que
la ecuación insolvencia–quiebra–interés privado de los acreedores se encontraba manifiestamente
superada.
En síntesis lo que se ha calificado como quiebra de la quiebra no fue sino el reflejo de una tendencia a la
adecuación de los procedimientos concursales en orden a la solución de las crisis de las empresas, evitando
llegar a su liquidación. Pues se entendía que cuando ellas tuvieran cierta significación, su desaparición
vulnerarían otros intereses tanto o más importantes que los intereses privados de los acreedores. De este
modo se amplió considerablemente el punto de mira del derecho concursal, en tanto aparece un capítulo
que es el de la prevención de la crisis, y se expanden las soluciones preventivas facilitándose notablemente
el acceso a ellas y su resolución favorable.
c) el empalidecimiento de los derechos de los acreedores: el nuevo prisma de privilegiar los intereses de la
comunidad sobre los particulares de los acreedores se identifico como INTERÉS GENERAL.
En la ley argentina de 1972 numerosas cuestiones relevantes (acciones de integración del patrimonio,
acciones de responsabilidad, continuación de la actividad de la empresa fallida, modos de liquidación,
etcétera) se regularon sin tener en consideración la opinión ni el interés de los acreedores; lo cual condujo
a resultados a veces muy negativos como por ejemplo la postergación sine die de los derechos de los
acreedores en la masa, generación de pasivos por la continuación de la actividad de la empresa fallida,
promoción de acciones con resultado negativa con imposición de costas a la masa.
d) la situación del fallido: correlativamente la situación del fallido no mejoraba en orden al reconocimiento
de su dignidad. Es que poco se había avanzado más allá de enumerar algunos bienes excluidos del
desapoderamiento, el cual se extendía por todo el extenso plazo de la inhabilitación. De donde se
dificultaba seriamente la reinserción del fallido al mercado y por ende las posibilidades de ganarse su
sustento y participar de la producción de bienes y servicios. La calificación de conducta era un resabio de
las penas infamantes.
e) un análisis actual: la pretensión de tener un sistema concursal ordenado y eficaz se vincula hoy
estrechamente con la solidez del sistema económico y financiero de los países. Así lo señala el informe del
Fondo Monetario Internacional en donde se señala como primer objetivo de un régimen de insolvencia la
repartición previsible, equitativa y transparente de los riesgos entre los actores de una economía de
mercado.
Y como segundo proteger y maximizar el valor de la empresa en el interés de todas las partes
comprometidas en la economía en general.
1-OPORTUNIDAD DE LA PRESENTACIÓN:
ARTÍCULO 10 LCQ.- Oportunidad de la presentación. “El concurso preventivo puede ser solicitado mientras
la quiebra no haya sido declarada”.
- Todas las personas jurídicas privadas y en las que el Estado forme parte: el artículo 6 de la LCQ dice que
lo debe solicitar el representante legal, previa resolución del órgano de administración y debe ratificarse
dentro de los 30 días hábiles contados desde la presentación del concurso como constancia de la
resolución de continuar el trámite. Si es sociedad anónima lo firma el presidente del directorio con
autorización de éste, en las sociedades de personas las presenta el administrador y en las SRL el gerente. Es
decir, la presentación la hace el órgano de administración y la ratificación posterior la debe hacer el órgano
de gobierno.
Si el órgano de gobierno no ratifica la decisión del órgano de administración o si directamente no se
presenta constancia de la ratificación en el plazo establecido por ley (30 días) se produce la cesación del
procedimiento con los efectos del artículo 31 LCQ in fine conforme el cual “…Rechazada, desistida o no
ratificada una petición de concurso preventivo, las que se presenten dentro del año posterior no deben ser
admitidas, si existen pedidos de quiebra pendientes.”
No es necesaria la ratificación si es una sociedad de sólo dos socios o de uno, las cuales firmaron la
presentación en concurso.
- El patrimonio del fallecido: Puede ser hecha por cualquier heredera y debe ser aceptada por los demás
herederos dentro de los 30 días.
ARTÍCULO 8°.- Personas fallecidas. “Mientras se mantenga la separación patrimonial, cualquiera de los
herederos puede solicitar el concurso preventivo en relación al patrimonio del fallecido. La petición debe ser
ratificada por los demás herederos, dentro de los TREINTA (30) días. Omitida la ratificación, se aplica el
último párrafo del Artículo 6”.
· FORMALES: El único que puede solicitar el concurso preventivo es el deudor. Los requisitos se encuentran
en el artículo 11 de la LCQ.
El juez interviniente no podrá exigir otros requisitos formales que no sean los enumerados en el artículo
11, PUES LA ENUMERACIÓN DEL ARTÍCULO ES TAXATIVA. TAMPOCO PODRÁ DISPENSAR AL DEUDOR DEL
CUMPLIMIENTO DE LOS MISMOS.
ARTÍCULO 11.- Requisitos del pedido. “Son requisitos formales de la petición de concurso preventivo:
1) Para los deudores matriculados y las personas de existencia ideal regularmente constituidas, acreditar la
inscripción en los registros respectivos. Las últimas acompañarán, además, el instrumento constitutivo y sus
modificaciones y constancia de las inscripciones pertinentes.
Para las demás personas de existencia ideal, acompañar, en su caso, los instrumentos constitutivos y sus
modificaciones, aun cuando no estuvieron inscriptos.
2) Explicar las causas concretas de su situación patrimonial con expresión de la época en que se produjo la
cesación de pagos y de los hechos por los cuales ésta se hubiera manifestado.
3) Acompañar un estado detallado y valorado del activo y pasivo actualizado a la fecha de presentación,
con indicación precisa de su composición, las normas seguidas para su valuación, la ubicación, estado y
gravámenes de los bienes y demás datos necesarios para conocer debidamente el patrimonio. Este estado
de situación patrimonial debe ser acompañado de dictamen suscripto por contador público nacional.
4) Acompañar copia de los balances u otros estados contables exigidos al deudor por las disposiciones
legales que rijan su actividad, o bien los previstos en sus estatutos o realizados voluntariamente por el
concursado, correspondientes a los TRES (3) últimos ejercicios. En su caso, se deben agregar las memorias y
los informes del órgano fiscalizador.
5) Acompañar nómina de acreedores, con indicación de sus domicilios, montos de los créditos, causas,
vencimientos, codeudores, fiadores o terceros obligados o responsables y privilegios. Asimismo, debe
acompañar un legajo por cada acreedor, en el cual conste copia de la documenta sustentatoria de la deuda
denunciada, con dictamen de contador público sobre la correspondencia existente entre la denuncia del
deudor y sus registros contables o documentación existente y la inexistencia de otros acreedores en
registros o documentación existente. Debe agregar el detalle de los procesos judiciales o administrativos de
carácter patrimonial en trámite o con condena no cumplida, precisando su radicación.
6) Enumerar precisamente los libros de comercio y los de otra naturaleza que lleve el deudor, con expresión
del último folio utilizado, en cada caso, y ponerlos a disposición del juez, junto con la documentación
respectiva.
7) Denunciar la existencia de un concurso anterior y justificar, en su caso, que no se encuentra dentro del
período de inhibición que establece el artículo 59, o el desistimiento del concurso si lo hubiere habido.
8) Acompañar nómina de empleados, con detalle de domicilio, categoría, antigüedad y última
remuneración recibida. Deberá acompañarse también declaración sobre la existencia de deuda laboral y de
deuda con los organismos de la seguridad social certificada por contador público. (Inciso incorporado por
art. 1º de la Ley Nº 26.684 B.O. 30/06/2011)
El escrito y la documentación agregada deben acompañarse con DOS (2) copias firmadas.
Cuando se invoque causal debida y válidamente fundada, el juez debe conceder un plazo improrrogable de
DIEZ (10) días, a partir de la fecha de la presentación, para que el interesado dé cumplimiento total a las
disposiciones del presente artículo”.
3- LEGITIMACIÓN ACTIVA: Solo el deudor puede solicitar la apertura del concurso preventivo. La apertura
de concurso preventivo se puede solicitar mientras no se haya decretado la quiebra.
SUJETOS EXCLUIDOS:
4- TRÁMITE:
2. PROCEDENCIA DE LA PRESENTACIÓN.
1- APERTURA DE LOS PROCEDIMIENTOS: A) EL AUTO DE APERTURA (CONCEPTO; ESENCIA JURÍDICA). B)
CONTENIDO DEL AUTO DE APERTURA (ANÁLISIS DE CADA RUBRO LEGAL). C) CONSTITUCIÓN DEL COMITÉ
PROVISORIO DE ACREEDORES; D) COMUNICACIÓN DE LA APERTURA: NOTIFICACIONES Y EDICTOS.
2- DESISTIMIENTO DE LOS PROCEDIMIENTOS: CONCEPTO, REQUISITOS; MAYORÍAS. CASO DE
INADMISIBILIDAD DE NUEVA PRESENTACIÓN.
3- NUEVA PRESENTACIÓN EN CONCURSO PREVENTIVO: FUNDAMENTOS, DISPOSICIONES LEGALES;
PERIODO DE INHIBICIÓN.
2. PROCEDENCIA DE LA PRESENTACIÓN.
1-APERTURA DE LOS PROCEDIMIENTOS:
A)EL AUTO DE APERTURA (CONCEPTO; ESENCIA JURÍDICA):
La resolución de apertura debe ser dictada dentro de los 5 días de hecha la presentación o vencido el plazo
acordado por el Juez de conformidad al último párrafo del artículo 11 LCQ (plazo para que se completen
los recaudos).
ARTICULO 13.- Término. “Presentado el pedido o, en su caso, vencido el plazo que acuerde el juez, éste se
debe pronunciar dentro del término de CINCO (5) días.
Rechazo. Debe rechazar la petición, cuando el deudor no sea sujeto susceptible de concurso preventivo, si
no se ha dado cumplimiento al artículo 11, si se encuentra dentro del período de inhibición que establece el
artículo 59, o cuando la causa no sea de su competencia. La resolución es apelable”.
El análisis que el juez hace para decidir la apertura o el rechazo de la petición se funda en la apreciación de
los elementos brindados por el deudor y está limitado, además, por el brevísimo plazo de cinco días para
emitir el pronunciamiento. De ahí que pueda sostenerse que la tarea judicial consiste en una investigación
prima facie del cumplimiento de los requisitos formales, enderezada a obtener convencimiento sólo sobre
la admisibilidad formal de la apertura peticionada.
C) CONSTITUCIÓN DEL COMITÉ PROVISORIO DE ACREEDORES: Opera durante el trámite del concurso
preventivo. Conforme al artículo 14 inciso 13 de la LCQ, en la resolución de apertura a concurso preventivo
el juez debe disponer la constitución de un Comité provisorio de acreedores, integrado por tres acreedores
quirografarios de mayor monto, denunciados por el deudor.
ARTÍCULO 14.- Resolución de apertura. Contenido. “Cumplidos en debido tiempo los requisitos legales, el
juez debe dictar resolución que disponga:
13) La constitución de un comité de control, integrado por los tres (3) acreedores quirografarios de mayor
monto, denunciados por el deudor y un (1) representante de los trabajadores de la concursada, elegido por
los trabajadores”.
Avanzado el proceso de modo que se tenga ya el informe individual y presentado la propuesta de
categorización de los acreedores, el juez procede a designar un nuevo comité provisorio que sustituye al
anterior, lo que hace en la resolución que aprueba la categorización. Este nuevo comité estará integrado
como mínimo por un acreedor de cada categoría, entre los que tiene que estar el acreedor de mayor
monto. En este comité las facultades del Juez son mayores porque tiene elementos que le permitan
formarse un juicio: el informe individual, el informe general, la categorización, los informes que le pudo
haber dado el comité precedente.
D) COMUNICACIÓN DE LA APERTURA.
NOTIFICACIONES: La resolución de apertura del concurso preventivo se notifica de manera automática el
primer día de nota posterior a ella.
Notificaciones ARTÍCULO 26.- Regla general. “Desde la presentación del pedido de formación de concurso
preventivo, el deudor o sus representantes deben comparecer en secretaría los días de notificaciones. Todas
las providencias se consideran notificadas por ministerio de la ley, salvo que el compareciente deje
constancia de su presencia y de no haber podido revisar el expediente, en el correspondiente libro de
secretaria”.
EDICTOS: El concursado queda notificado automáticamente por día de nota (martes o viernes). Pero es
necesario que la sentencia llegue a conocimiento de los terceros y en particular de los acreedores del
concursado, que estarán sometidos a la carga de reclamar la verificación de sus créditos. Para ello la LCQ
dispone la publicidad de edictos.
Carga: la publicación está a cargo exclusivamente del concursado.
Tiempo: los edictos se publican por 5 días.
Lugar: diario de publicaciones legales (boletín oficial) de la jurisdicción del juzgado y en otro diario de
amplia circulación en el lugar del domicilio del concursado. Si el establecimiento es en otra jurisdicción, en
el diario de dicha jurisdicción o lugar donde estén los establecimientos del concursado.
Contenido:
- Identificación del deudor y de los socios ilimitadamente responsables.
- Juicio y su radicación (juzgado y secretaría).
- Nombre y domicilio del síndico.
- Intimación a los acreedores para que verifiquen sus créditos.
- Plazo y domicilio para la verificación.
Prueba de la publicación: En los plazos que se indicaron (5 días) el concursado debe acompañar recibo de
pago de las publicaciones y/o las publicaciones.
Sanción: El artículo 30 LCQ dice que si el concursado no cumple con la publicación se lo tiene por desistido
del período de concurso.
ARTÍCULO 30.- Sanción. “En caso de que el deudor no cumpla lo dispuesto en los incisos 5 y 8 del artículo 14
y en los artículos 27 y 28 primer párrafo, se lo tiene por desistido”.
Carta a los acreedores: Sin perjuicio de la publicación de los edictos la ley impone al síndico el deber de
enviar a cada acreedor denunciado carta certificada en la cual le haga conocer la apertura del concurso. La
correspondencia debe ser remitida dentro de los 5 días de la primera publicación de edictos.
ARTÍCULO 27.- Edictos. “La resolución de apertura, del concurso preventivo se hace conocer mediante
edictos que deben publicarse durante CINCO (5) días en el diario de publicaciones legales de la jurisdicción
del juzgado, y en otro diario de amplia circulación en el lugar del domicilio del deudor, que el juez designe.
Los edictos deben contener los datos referentes a la identificación del deudor y de los socios ilimitadamente
responsables; los del juicio y su radicación; el nombre y domicilio del síndico, la intimación a los acreedores
para que formulen sus pedidos de verificación y el plazo y domicilio para hacerlo.
Esta publicación está a cargo del deudor y debe realizarse dentro de los CINCO (5) días de haberse
notificado la resolución”.
ARTÍCULO 28.- Establecimientos en otra jurisdicción. “Cuando el deudor tuviere establecimientos en otra
jurisdicción judicial, también se deben publicar edictos por CINCO (5) días, en el lugar de ubicación de cada
uno de ellos y, en su caso, en el diario de publicaciones legales respectivo. El juez debe fijar el plazo para
que el deudor efectúe estas publicaciones, el cual no puede exceder de VEINTE (20) días, desde la
notificación del auto de apertura.
Justificación. En todos los casos, el deudor debe justificar el cumplimiento de las publicaciones, mediante la
presentación de los recibos, dentro de los plazos indicados; también debe probar la efectiva publicación de
los edictos, dentro del quinto día posterior a su primera aparición”.
- voluntario: puede ocurrir que el propio concursado solicite al juez el desistimiento de su pedido de
concurso pero no puede hacerlo en cualquier momento sino hasta el día en que comienza el período de
exclusividad (período donde el concursado presenta las propuestas para llegar a un acuerdo con los
acreedores). A partir de allí el abandono del concurso será indirecto.
ARTÍCULO 31 LCQ.- Desistimiento voluntario. “El deudor puede desistir de su petición hasta la primera
publicación de edictos, sin requerir conformidad de sus acreedores.
Puede desistir, igualmente, hasta el día indicado para el comienzo del período de exclusividad previsto en el
artículo 43 si, con su petición, agrega constancia de la conformidad de la mayoría de los acreedores
quirografarios que representen el SETENTA Y CINCO POR CIENTO (75%) del capital quirografario. Para el
cálculo de estas mayorías se tienen en cuenta, según el estado de la causa: a los acreedores denunciados
con más los presentados a verificar, si el desistimiento ocurre antes de la -presentación del informe del
artículo 35; después de presentado dicho informe, se consideran los aconsejados a verificar por el síndico;
una vez dictada la sentencia prevista en el artículo 36, deberán reunirse las mayorías sobre los créditos de
los acreedores verificados o declarados admisibles por el juez. Si el juez desestima una petición de
desistimiento por no contar con suficiente conformidad de acreedores, pero después ésta resultare reunida,
sea por efecto de las decisiones sobre la verificación o por nuevas adhesiones, hará lugar al desistimiento, y
declarará concluido el concurso preventivo.
Inadmisibilidad. Rechazada, desistida o no ratificada una petición de concurso preventivo, las que se
presenten dentro del año posterior no deben ser admitidas, si existen pedidos de quiebra pendientes”.
DISPOSICIONES LEGALES:
3. RECHAZO DE LA PRESENTACIÓN.
1- FUNDAMENTOS.
2- RECURRIBILIDAD. EFECTOS.
3. RECHAZO DE LA PRESENTACIÓN.
FUNDAMENTOS: El juez puede rechazar la apertura del concurso si el sujeto no está legitimado para
solicitar la formación de su concurso preventivo, si no ha cumplido con los recaudos legales o si se
encuentra dentro del período de inhibición o el tribunal es incompetente.
RECURRIBILIDAD. EFECTOS: La sentencia que rechaza la apertura del concurso es apelable por quien la ha
solicitado. El recurso se concede en relación y con efecto suspensivo, por lo que mientras que la apelación
está en trámite se producen los efectos del concurso por lo que no podrá ser decretada la quiebra ni seguir
actos de ejecución forzada (remate).
LÍMITES DE LA RESTRICCIÓN: Esta prohibición de salir del país sin autorización dura hasta la presentación
del informe general del síndico. Sin embargo, el juez podrá extender dicha prohibición sobre personas
determinadas sobre un plazo máximo de 6 meses contados a partir de la fecha fijada para la presentación
del informe general del síndico. La resolución es apelable por los afectados con efecto devolutivo.
CONSTITUCIONALIDAD: Los autores más reconocidos, como Rivera, entienden que la autorización judicial
para salir del país debe ser la regla, y su negativa la excepción, protegiéndose así el derecho a entrar,
permanecer, transitar y salir del país que surge de la CN (Artículo 14), y de Tratados Internacionales con
jerarquía constitucional (Pacto de San José de Costa Rica y Declaración Universal de Derechos Humanos).
ARTÍCULO 25.- Viaje al exterior. “El concursado y, en su caso, los administradores y socios con
responsabilidad ilimitada de la sociedad concursada, no pueden viajar al exterior sin previa comunicación al
juez del concurso, haciendo saber el plazo de la ausencia, el que no podrá ser superior a CUARENTA (40)
días corridos. En caso de ausencia por plazos mayores, deberá requerir autorización judicial.”
ARTÍCULO 102.- Cooperación del fallido. “El fallido y sus representantes y los administradores de la
sociedad, en su caso, están obligados a prestar toda colaboración que el juez o el síndico le requieran para
el esclarecimiento de la situación patrimonial y la determinación de los créditos.
Deben comparecer cada vez que el juez los cite para dar explicaciones y puede ordenarse su concurrencia
por la fuerza pública si mediare inasistencia”.
FINALIDAD:
EFECTO DE SU INCUMPLIMIENTO:
ARTÍCULO 275.- Deberes y facultades del síndico. “Compete al síndico efectuar las peticiones necesarias
para la rápida tramitación de la causa, la averiguación de la situación patrimonial del concursado, los
hechos que puedan haber incidido en ella y la determinación de sus responsables. A tal fin tiene, entre
otras, las siguientes facultades:
3) Requerir del concursado o terceros las explicaciones que estime pertinentes. En caso de negativa o
resistencia de los interpelados, puede solicitar al juez la aplicación de los Artículos 17, 103 y 274, inciso
1.”
ARTÍCULO 18.- Socio con responsabilidad ilimitada. Efectos. “Las disposiciones de los artículos 16 y 17 se
aplican respecto del patrimonio de los socios con responsabilidad ilimitada de las sociedades concursadas.”
ADMINISTRADORES DE LA SOCIEDAD:
Si bien el concurso preventivo queda concluido con la homologación del acuerdo que haya obtenido las
mayorías legales, y en principio cesan las limitaciones impuestas por los artículos 15 y 16 lo cierto es que
subsisten:
-El comité de acreedores que controla el cumplimiento;
-La inhibición general de bienes;
-El régimen de administración que se haya estipulado en el acuerdo preventivo.
Por lo que el régimen de administración queda deferido en gran medida a lo que acuerden los acreedores y
el deudor en el acuerdo preventivo.
B) ACTOS JURÍDICOS:
ACTOS PROHIBIDOS: La ley prohíbe al concursado realizar actos a título gratuito o que importen alterar la
situación de los acreedores por causa o título anterior a la presentación.
Por causa o título anterior a la presentación se entiende que el crédito haya nacido de una fuente que se
haya celebrado, haya acaecido o haya producido su efecto antes de la presentación en concurso.
Los actos que alteran la situación de los acreedores son, normalmente, el pago o la constitución de
garantías.
EL PRONTO PAGO: uno de los efectos principales del concurso preventivo, y que rige desde la
presentación, lo constituye la prohibición de alterar la situación de los acreedores de causa pre concursal.
Esta regla se excepciona expresamente en favor de los créditos de causa laboral que se enuncian en el
artículo 16, que tienen derecho al pronto pago.
Los créditos comprendidos, enumerados en la ley son: remuneraciones, indemnizaciones por accidentes de
trabajo, sustitutiva del preaviso, integración del mes de despido, y las previstas en los artículos 245 a 254
de la ley de concursos y quiebras que son las que corresponden al trabajador en los distintos casos de
extinción de la relación laboral. Se otorga a todos estos créditos que tengan privilegio general o especial.
Son quirografarios aquellos que exceden de límites temporales impuestos por la ley: salarios más allá del
sexto mes e intereses más allá de dos años. Estos, por lo tanto, estarían excluidos del pronto pago.
Del pedido de pronto pago que haga el trabajador, se corre vista al síndico y al concursado por 10 días. La
ley omite mencionar al concursado, pero es obvio que debe dársele intervención, habida cuenta de que
conserva legitimación procesal y tiene derecho a comprobar quién ingresa al pasivo concursal, pues, el
procedimiento del pronto pago constituye el sistema básico de ingreso del trabajador al pasivo concursal.
Nada obsta tampoco a que la iniciativa la tome el mismo empleador concursado. Bien puede suceder que
con motivo de la presentación en concurso, salarios adeudados con anterioridad a esa presentación tengan
la calidad de créditos pre concursales, en ese caso el empleador puede solicitar lo que en definitiva es una
autorización para pagar ciertos créditos pre concursales en función de su carácter alimentario.
El juez puede denegar total o parcialmente el pronto pago, mediante resolución fundada, si los créditos no
surgen de documentación legal y contable del empleador, está controvertidos, existen dudas sobre su
origen o legitimidad o sospecha de connivencia dolosa entre el trabajador y el concursado.
La ley dispone que el pronto pago se haga efectivo prioritariamente con el resultado de la explotación, lo
que ha de ser entendido como las ganancias que deja la actividad empresarial.
Ferrer plantea que para que proceda el pronto pago es necesario que los fondos con que se van a
satisfacer existan efectivamente, afirmando en consecuencia que el juez no puede dictar una resolución de
pronto pago en abstracto.
Rivera entiende que el pronto pago es también un medio de admisión al pasivo concursal. De donde el juez
puede dictar esta resolución y si no se paga por no existir fondos, el acreedor ya está incorporado al pasivo
y podrán renunciar al privilegio para incorporarse a una de las categorías de acreedores, participar del
acuerdo que se le ofrezca o eventualmente ejercer sus derechos como acreedor privilegiado no
comprendido en el acuerdo una vez concluido el concurso.
Por lo demás, no puede saberse si existen o no los fondos hasta que el síndico y el concursado se
pronuncien, es decir que habrá que sustanciar el pedido del acreedor, y las únicas causas de rechazo del
pronto pago son las previstas por el artículo 16 de la LCQ que no incluyen a la falta de fondos.
Una vez determinados los créditos o pretensiones de pronto pago, corresponde su atención en la medida
en que son reclamados, aun de existir acreedores de igual rango cuyas acreencias se encuentran
pendientes de decisión.
Si el pronto pago no es admitido, sea total o parcialmente, el trabajador debe verificar su crédito conforme
al procedimiento concursal ordinario.
Los honorarios del letrado que patrocinó al trabajador en el juicio laboral que precedió al procedimiento
de pronto pago, si bien gozan de privilegio general, no están amparados por el beneficio del pronto pago.
En principio la sentencia dictada en el pronto pago es inapelable. En particular tampoco el síndico tiene
legitimación para recurrir el pronunciamiento.
La declaración de procedencia del pronto pago no genera costas.
ARTÍCULO 16.-Actos prohibidos. “El concursado no puede realizar actos a título gratuito o que importen
alterar la situación de los acreedores por causa o título anterior a la presentación.
Pronto pago de créditos laborales. Dentro del plazo de diez (10) días de emitido el informe que establece el
artículo 14 inciso 11), el juez del concurso autorizará el pago de las remuneraciones debidas al trabajador,
las indemnizaciones por accidentes de trabajo o enfermedades laborales y las previstas en los artículos 132
bis, 212, 232, 233 y 245 a 254, 178, 180 y 182 del Régimen de Contrato de Trabajo aprobado por la ley
20.744; las indemnizaciones previstas en la ley 25.877, en los artículos 1º y 2º de la ley 25.323; en los
artículos 8º, 9º, 10, 11 y 15 de la ley 24.013; en el artículo 44 y 45 de la ley 25.345; en el artículo 52 de la ley
23.551; y las previstas en los estatutos especiales, convenios colectivos o contratos individuales, que gocen
de privilegio general o especial y que surjan del informe mencionado en el inciso 11 del artículo 14.
Para que proceda el pronto pago de crédito no incluido en el listado que establece el artículo 14 inciso 11),
no es necesaria la verificación del crédito en el concurso ni sentencia en juicio laboral previo.
Previa vista al síndico y al concursado, el juez podrá denegar total o parcialmente el pedido de pronto pago
mediante resolución fundada, sólo cuando existiere duda sobre su origen o legitimidad, se encontraren
controvertidos o existiere sospecha de connivencia entre el peticionario y el concursado.
En todos los casos la decisión será apelable.
La resolución judicial que admite el pronto pago tendrá efectos de cosa juzgada material e importará la
verificación del crédito en el pasivo concursal.
La que lo deniegue, habilitará al acreedor para iniciar o continuar el juicio de conocimiento laboral ante el
juez natural.
No se impondrán costas al trabajador en la solicitud de pronto pago, excepto en el caso de connivencia,
temeridad o malicia.
Los créditos serán abonados en su totalidad, si existieran fondos líquidos disponibles. En caso contrario y
hasta que se detecte la existencia de los mismos por parte del síndico se deberá afectar el tres por ciento
(3%) mensual del ingreso bruto de la concursada.
El síndico efectuará un plan de pago proporcional a los créditos y sus privilegios, no pudiendo exceder cada
pago individual en cada distribución un monto equivalente a cuatro (4) salarios mínimos vitales y móviles.
Excepcionalmente el juez podrá autorizar, dentro del régimen de pronto pago, el pago de aquellos créditos
amparados por el beneficio y que, por su naturaleza o circunstancias particulares de sus titulares, deban ser
afectados a cubrir contingencias de salud, alimentarias u otras que no admitieran demoras.
En el control e informe mensual, que la sindicatura deberá realizar, incluirá las modificaciones necesarias, si
existen fondos líquidos disponibles, a los efectos de abonar la totalidad de los prontos pagos o modificar el
plan presentado.
Actos sujetos a autorización. Debe requerir previa autorización judicial para realizar cualquiera de los
siguientes actos: los relacionados con bienes registrables; los de disposición o locación de fondos de
comercio; los de emisión de debentures con garantía especial o flotante; los de emisión de obligaciones
negociables con garantía especial o flotante; los de constitución de prenda y los que excedan de la
administración ordinaria de su giro comercial.
La autorización se tramita con audiencia del síndico y del comité de control; para su otorgamiento el juez
ha de ponderar la conveniencia para la continuación de las actividades del concursado y la protección de los
intereses de los acreedores.”
El acreedor laboral tiene distintas alternativas para obtener reconocimiento de su crédito, y para cobrarlo,
en el concurso:
-Pronto pago automático: es el más sencillo, porque es sin instancia ni trámite. Para ello, es preciso que el
crédito aboral:
- Sea uno de los enunciados por el artículo 16;
- Goce de privilegio general o especial;
- Esté incluido en la lista que el síndico debe elaborar de acuerdo con el artículo 14 inciso 11;
- el juez haya autorizado el pago de los créditos incluidos en aquella lista.
Si reúne esas condiciones, el crédito puede ser pagado directamente por el empleador concursado al
acreedor laboral, sin que sea necesaria actividad adicional alguna. El acreedor laboral estará en
condiciones de percibir un pago así luego de transcurridos diez días hábiles judiciales de emitido el informe
del artículo 14 inciso 11, ya que ese es el plazo máximo que el juez tiene para dictar la resolución de
autorización de estos pagos laborales que no requieren instancia de parte. Si transcurrido ese plazo la
resolución judicial no se hubiera dictado, el acreedor laboral puede instar su dictado.
- Pronto pago a instancia de parte interesada: cuando el crédito laboral reúne los recaudos de ser uno de
los enumerados por el artículo 16, y gozar de privilegio especial o general, pero no está incluido en la lista
elaborada por el síndico o el juez no autoriza el pago, entonces, el acreedor laboral debe solicitarlo
formalmente, por escrito, en el concurso.
A la petición de acreedor se le da sustanciación mínima, que no llega a constituir un incidente concursal en
sentido propio. Simplemente se corre vista al síndico y al concursado, por un plazo de cinco días hábiles
judiciales, luego de lo cual el juez estará en condiciones de resolver. Este debe resolver con fundamentos,
admitiendo o desestimando (total o parcialmente) la solicitud de pronto pago. La desestimación debe
responder a una o más de las siguientes causales:
- que las constancias de los libros que estuviera obligado a llevar el concursado no permitan tener por
cierta la existencia del crédito;
-Que el origen o la legitimidad del crédito resulten dudosos;
- Que el crédito se encuentre controvertido;
- Que exista sospecha de connivencia entre el peticionario del pronto pago y el concursado.
En cualquier caso, la resolución es apelable en relación y con efecto suspensivo.
El trabajador peticionario está exento de cargar con costas en el pronto pago con trámite, a menos que
actuara con temeridad o malicia, o en connivencia con el concursado o el síndico.
- Verificación tardía del crédito: el acreedor laboral, en su caso, puede acudir a la verificación tardía
reglada por el artículo 56.
Los créditos laborales reconocidos por el pronto pago automático, o luego de finalizado el respectivo
trámite, en su caso, deben pagarse en su totalidad con los fondos líquidos existentes.
Si el concursado niega la existencia o la suficiencia de esos fondos, corresponderá al juez ordenar que el
síndico ratifique o rectifique la afirmación del concursado luego de efectuar la correspondiente
investigación. Si el síndico concluye que los fondos líquidos alcanzan para el pago total de todos los
créditos pendientes de pronto pago, al estar cumplidas las mencionadas condiciones, la pretensión de
pago deviene ejecutoria. Si el deudor aún persiste en la negativa de pago voluntario, el juez puede ordenar
la incautación de los fondos para pagar en el expediente.
Si los fondos líquidos son insuficientes para cubrir la totalidad de los créditos pendientes de pronto pago, el
síndico debe efectuar un proyecto de distribución de los fondos existentes, prorrateándolos según la
cuantía y privilegios de los créditos respectivos.
Sin perjuicio de la distribución prorrateada de los fondos líquidos habidos, cuando ellos son insuficientes o
inexistentes, y hasta tanto se compruebe que existen fondos líquidos suficientes para otra distribución
parcial o total, se deberá ir formando un fondo para satisfacer los créditos laborales de pronto pago,
mediante la afectación del 1% mensual bruto de la concursada.
CASOS DE INEFICACIA DE LOS ACTOS: La realización de actos prohibidos o de actos sujetos a autorización
sin requerirla o después de denegada, acarrea como sanción la ineficacia ipso iure. El acto continúa siendo
válido entre partes, pero es inoponible a los acreedores concurrentes.
Como sanción por la comisión de alguno de esos actos, es que puede intervenirse judicialmente la
administración del concursado, graduándose tal intervención desde la designación de un mero veedor
hasta llegar a la separación del deudor con el nombramiento de un administrador judicial e reemplazo de
aquél.
D) SANCIONES:
B) LOS INTERESES: La presentación en concurso produce la suspensión de los intereses que devengue todo
crédito de causa o título anterior a ella, que no esté garantizado con prenda o hipoteca.
La suspensión de intereses afecta a los créditos quirografarios y también a los créditos privilegiados.
Los intereses no se extinguen sino que solo se suspenden y ello hasta que el acuerdo preventivo disponga
su suerte. Es decir que el acuerdo podrá disponer que esos intereses se devenguen o no y podrá fijar una
tasa uniforme o distintas tasas para cada categoría de acreedores o, en propuestas alternativas podrá
determinar que se capitalicen.
Los intereses de deudas garantizadas con hipoteca o prenda no se suspenden pero ellos solo pueden ser
reclamados sobre las sumas de dinero provenientes de bienes afectados a la hipoteca, o sea, el bien sobre
el cual reposa la garantía.
Como menciona este segundo párrafo del artículo 19, las deudas no dinerarias son convertibles a su valor
en moneda de curso legal.
Se trata en principio, de todas las obligaciones de dar algo que no sea dinero (dar cosa cierta, cosa incierta,
cantidades de cosas) y de hacer. Las obligaciones de no hacer no quedan comprendidas, porque si hubo
incumplimiento se transforman en la obligación de destruir lo hecho o de pagar los daños del
incumplimiento. Tampoco se incluyen las obligaciones de restituir cosas a su dueño.
Momento en que se hace la conversión: a la presentación en concurso o a la fecha de vencimiento de la
obligación si esta ha sido anterior
La conversión se hace, en algunos casos, de manera simple, por ejemplo, si el deudor tenía que entregar
cosas que tienen cotización en el mercado o de no ser así, se recurre al precio pagado por el acreedor por
la cosa o cosas que deben entregarse.
D) LA OBLIGACIÓN EN MONEDA EXTRANJERA: El artículo 19 LCQ in fine dice que las deudas en moneda
extranjera se calculan en moneda de curso legal a la fecha de la presentación del informe del síndico.
Se advierten dos diferencias muy claras con las obligaciones no dinerarias:
-La conversión se hace al tipo de cambio vigente en la fecha de presentación del informe individual
(Artículo 35).
-La conversión no es definitiva sino sólo a los efectos de la participación en el acuerdo y los cómputos del
capital y mayorías.
ARTÍCULO 19.- Intereses. “La presentación del concurso produce la suspensión de los intereses que
devengue todo crédito de causa o título anterior a ella, que no esté garantizado con prenda o hipoteca. Los
intereses de los créditos así garantizados, posteriores a la presentación, sólo pueden ser reclamados sobre
las cantidades provenientes de los bienes afectado a la hipoteca o a la prenda.
Deudas no dinerarias. Las deudas no dinerarias son convertidas, a todos los fines del concurso, a su valor en
moneda de curso legal, al día de la presentación o al del vencimiento, si fuere anterior, a opción del
acreedor. Las deudas en moneda extranjera se calculan en moneda de curso legal, a la fecha de la
presentación del informe del síndico previsto en el artículo 35, al solo efecto del cómputo del pasivo y de las
mayorías.
Quedan excluidos de la disposición precedente los créditos laborales correspondientes a la falta de pago de
salarios y toda indemnización derivada de la relación laboral.”
ARTÍCULO 20.- Contratos con prestación recíproca pendiente. “El deudor puede continuar con el
cumplimiento de los contratos en curso de ejecución, cuando hubiere prestaciones recíprocas pendientes.
Para ello debe requerir autorización del juez, quien resuelve previa vista al síndico. La continuación del
contrato autoriza al cocontratante a exigir el cumplimiento de las prestaciones adeudadas a la fecha de
presentación en concurso bajo apercibimiento de resolución.
Las prestaciones que el tercero cumpla después de la presentación en concurso preventivo, y previo
cumplimiento de lo dispuesto en este precepto, gozan del privilegio previsto por el artículo 240. La tradición
simbólica anterior a la presentación, no importa cumplimiento de la prestación a los fines de este artículo.
Sin perjuicio de la aplicación del artículo 753 del Código Civil, el tercero puede resolver el contrato cuando
no se le hubiere comunicado la decisión de continuarlo, luego de los treinta (30) días de abierto el concurso.
Debe notificar al deudor y al síndico.
Servicios públicos. No pueden suspenderse los servicios públicos que se presten al deudor por deudas con
origen en fecha anterior a la de la apertura del concurso. Los servicios prestados con posterioridad a la
apertura del concurso deben abonarse a sus respectivos vencimientos y pueden suspenderse en caso de
incumplimiento mediante el procedimiento previsto en las normas que rigen sus respectivas prestaciones.
En caso de liquidación en la quiebra, los créditos que se generen por las prestaciones mencionadas en el
párrafo anterior gozan de la preferencia establecida por el artículo 240”.
El artículo 21 regula los efectos de la apertura concursal preventiva relacionados con los juicios contra el
concursado.
Los principios liminares del artículo 21 son la suspensión de los juicios de contenido patrimonial ya
iniciados, la radicación de ellos ante el tribunal del concurso y la prohibición de deducir nuevas acciones de
contenido patrimonial.
Las reglas o principios generales del artículo rigen en tanto exista el concurso preventivo, porque si este
termina por alguna de las causales de desistimiento, los acreedores recuperan la posibilidad de seguir
ejecutando los bienes del deudor y el fuero de atracción cesa de operar.
Cuando fracasa el concurso preventivo y se da la quiebra indirecta, el fuero de atracción continúa con
similar alcance al del concurso preventivo, por aplicación del artículo 132.
Si el concurso se lleva adelante y se homologa el acuerdo preventivo, es preciso distinguir la situación de
los acreedores comprendidos y los excluídos:
a) los acreedores privilegiados no alcanzados por el acuerdo preventivo pueden ejecutar la sentencia de
verificación sobre bienes del concursado y ante el juez que corresponda;
b) los acreedores comprendidos en el acuerdo preventivo homologado deben cobrar en los términos del
concordato, pero si el deudor no cumple y no se declara la quiebra indirecta, aquellos pueden ejecutar
individualmente los bienes de este.
Después de homologado el acuerdo preventivo, el juez debe dar por finalizado el concurso (artículo 59).
Pero esta finalización no hace desaparecer todos los efectos concursales, ya que hasta el cumplimiento
definitivo del acuerdo puede llegar a declararse su nulidad o la quiebra por incumplimiento.
Excepciones a las reglas generales: las pretensiones de contenido patrimonial que se sustentan en causa o
título anterior a la presentación del deudor en concurso preventivo, luego de la apertura y publicación de
éste, pueden continuar ejerciéndose mediante los trámites de procesos de conocimientos existentes o
deducirse en juicio de conocimiento nuevo, sin que opere el fuero de atracción del juzgado del concurso.
La ley ejemplifica los casos:
-Los procesos en que el Estado hace valer una pretensión de expropiación de un bien del concursado;
-Los procesos de contenido patrimonial contra el concursado en los cuales una relación familiar es
condición sine qua non del reclamo;
-Los procesos en los que se reclamen prestaciones de contenido patrimonial con sustento en normas de
índole laboral, a raíz de una relación de dependencia existente o pasada entre el actor y el demandado en
concurso.
LIMITACIONES:
REMATES Y SUBASTAS:
ARTÍCULO 21.- Juicios contra el concursado. “La apertura del concurso produce, a partir de la publicación
de edictos, la suspensión del trámite de los juicios de contenido patrimonial contra el concursado por causa
o título anterior a su presentación, y su radicación en el juzgado del concurso. No podrán deducirse nuevas
acciones con fundamento en tales causas o títulos.
Quedan excluidos de los efectos antes mencionados:
1. Los procesos de expropiación, los que se funden en las relaciones de familia y las ejecuciones de
garantías reales;
2. Los procesos de conocimiento en trámite y los juicios laborales, salvo que el actor opte por suspender el
procedimiento y verificar su crédito conforme lo dispuesto por los artículos 32 y concordantes;
3. Los procesos en los que el concursado sea parte de un litis consorcio pasivo necesario.
En estos casos los juicios proseguirán ante el tribunal de su radicación originaria o ante el que resulte
competente si se trata de acciones laborales nuevas. El síndico será parte necesaria en tales juicios, excepto
en los que se funden en relaciones de familia, a cuyo efecto podrá otorgar poder a favor de abogados cuya
regulación de honorarios estará a cargo del juez del concurso, cuando el concursado resultare condenado
en costas, y se regirá por las pautas previstas en la presente ley.
En los procesos indicados en los incisos 2) y 3) no procederá el dictado de medidas cautelares. Las que se
hubieren ordenado, serán levantadas por el juez del concurso, previa vista a los interesados. La sentencia
que se dicte en los mismos valdrá como título verificatorio en el concurso.
En las ejecuciones de garantías reales no se admitirá el remate de la cosa gravada ni la adopción de
medidas precautorias que impidan su uso por el deudor, si no se acredita haber presentado el pedido de
verificación del crédito y su privilegio.”
ARTÍCULO 22.- Estipulaciones nulas. “Son nulas las estipulaciones contrarias a lo dispuesto en los artículos
20 y 21.”
ARTÍCULO 23.- Ejecuciones por remate no judicial. “Los acreedores titulares de créditos con garantía real
que tengan derecho a ejecutar mediante remate no judicial bienes de la concursada o, en su caso, de los
socios con responsabilidad ilimitada, deben rendir cuentas en el concurso acompañando los títulos de sus
créditos y los comprobantes respectivos, dentro de los VEINTE (20) días de haberse realizado el remate. El
acreedor pierde a favor del concurso, el UNO POR CIENTO (1%) del monto de su crédito, por cada día de
retardo, si ha mediado intimación judicial anterior. El remanente debe ser depositado, una vez cubiertos los
créditos, en el plazo que el juez fije.
Si hubiera comenzado la publicación de los edictos que determina el artículo 27, antes de la publicación de
los avisos del remate no judicial, el acreedor debe presentarse al juez del concurso comunicando la fecha,
lugar, día y hora fijados para el remate, y el bien a rematar, acompañando, además, el título de su crédito.
La omisión de esta comunicación previa vicia de nulidad al remate.
La rendición de cuentas debe sustanciarse por incidentes con intervención del concursado y del síndico.”
ARTICULO 24.- Suspensión de remates y medidas precautorias. “En caso de necesidad y urgencia
evidentes para el concurso, y con el criterio del artículo 16, párrafo final, el juez puede ordenar la
suspensión temporaria de la subasta y de las medidas precautorias que impidan el uso por el deudor de la
cosa gravada, en la ejecución de créditos con garantía prendaria o hipotecaria. Los servicios de intereses
posteriores a la suspensión son pagados como los gastos del concurso, si resultare insuficiente el producido
del bien gravado. Esta suspensión no puede exceder de NOVENTA (90) días.
La resolución es apelable al solo efecto devolutivo por el acreedor, el deudor y el síndico.”
1. VERIFICACIÓN DE CRÉDITOS.
1- CONCEPTO; FUNDAMENTO: CARACTERES DEL PROCESO: NECESARIO, TÍPICO, ÚNICO,
CONTRADICTORIO Y CASUAL.
2- VERIFICACIÓN EN TÉRMINO: A) NOCIÓN; OPORTUNIDAD. B) LA PETICIÓN (FORMAS, CNTENIDO,
TRÁMITE, EFECTOS); LOS CRÉDITOS DOCUMENTADOS EN PAPELES DE COMERCIO. C) PERÍODO DE
OBSERVACIONES E IMPUGNACIONES RESPECTO DE LAS SOLICITUDES DE VERIFICACIÓN; LEGITIMADOS,
TRÁMITE. D) INFORME INDIVIDUAL DEL SÍNDICO: CONCEPTO, NATURALEZA JURÍDICA; FACULTADES
PREPARATORIAS; OPORTUNIDADES DE SU PRESENTACIÓN; CONTENIDO. E) RESOLUCIÓN JUDICIAL:
OPORTUNIDAD; EFECTOS, REVISIÓN (TRÁMITE, PLAZOS); ACCIONES POR DOLO.
3- VERIFICACIÓN TARDÍA: PETICIÓN, PLAZO; TRÁMITE, REVISIÓN. PRESCRIPCIÓN; PLAZO.
4- VERIFICACIÓN DE LOS CRÉDITOS LABORALES. EL PRONTO PAGO.
ACLARACIÓN PREVIA: El “período informativo” abarca desde el proceso de verificación de créditos hasta el
informe general del síndico inclusive.
La verificación de créditos tiene por objeto determinar cuáles son los acreedores que constituyen el pasivo
concursal, por qué monto y con qué privilegio.
El informe general del síndico, en que el síndico ha de poner en conocimiento de los acreedores y del Juez
toda una serie de datos relativos al concursado; en orden a la decisión que los acreedores deben tomar de
apoyar o rechazar la propuesta de acuerdo preventivo que ofrezca el concursado.
En este período, los intervinientes se encargan de aportar al proceso la información necesaria para que el
concursado, posteriormente, pueda presentar a los acreedores las propuestas de acuerdo –período de
exclusividad–.
1. VERIFICACIÓN DE CRÉDITOS.
1- CONCEPTO: Se llama proceso de verificación de créditos a la etapa del concurso preventivo que tiene la
finalidad de comprobar la existencia, el monto y el privilegio –quirografario o privilegiado– de los créditos.
2- VERIFICACIÓN EN TÉRMINO:
En el proceso de “verificación de créditos” hay 4 momentos fundamentales:
la verificación de créditos, la observación de créditos, el informe individual del síndico y la resolución
judicial sobre los créditos.
A) NOCIÓN: El Dr. Vitolo define a la verificación de créditos como el procedimiento a través de cual los
pretensos ARTICULO 32 LCQ.- Solicitud de verificación. “Todos los acreedores por causa o título anterior a
la presentación y sus garantes, deben formular al síndico el pedido de verificación de sus créditos, indicando
monto, causa y privilegios. La petición debe hacerse por escrito, en duplicado, acompañando los títulos
justificativos, con dos (2) copias firmadas y debe expresar el domicilio que constituya a todos los efectos del
juicio. El síndico devuelve los títulos originales, dejando en ellos constancia del pedido de verificación y su
fecha. Puede requerir la presentación de los originales cuando lo estime conveniente. La omisión de
presentarlos obsta a la verificación.
Efectos: El pedido de verificación produce los efectos de la demanda judicial, interrumpe la prescripción e
impide la caducidad del derecho y de la instancia.
Arancel: Por cada solicitud de verificación de crédito que se presente, el acreedor, sea tempestivo,
incidental o tardío, pagará al síndico un arancel equivalente al diez por ciento (10%) del salario mínimo vital
y móvil que se sumará a dicho crédito. El síndico afectará la suma recibida a los gastos que le demande el
proceso de verificación y confección de los informes, con cargo de oportuna rendición de cuentas al juzgado
quedando el remanente como suma a cuenta de honorarios a regularse por su actuación. Exclúyase del
arancel a los créditos de causa laboral, y a los equivalentes a menos de tres (3) salarios mínimos vitales y
móviles, sin necesidad de declaración judicial.acreedores del deudor se insinúan en el pasivo concursal”.
OPORTUNIDAD: Dentro del plazo establecido por el Juez en la resolución de apertura el concurso, todos los
acreedores y sus garantes –de causa o título anterior a la presentación– deberán solicitar al síndico la
verificación de sus créditos, indicando monto, causa y privilegio.
TRÁMITE:
EFECTOS: La ley le atribuye al pedido de verificación los mismos efectos que la demanda judicial, es decir,
el pedido interrumpe la prescripción e impide la caducidad del derecho y de la instancia. Además otorga la
posibilidad de participar plenamente del concurso. Roullión dice que solicitar la verificación es,
técnicamente, una carga procesal.
ARANCEL: Artículo 32 LCQ último párrafo. “…Arancel: Por cada solicitud de verificación de crédito que se
presente, el acreedor, sea tempestivo, incidental o tardío, pagará al síndico un arancel equivalente al diez
por ciento (10%) del salario mínimo vital y móvil que se sumará a dicho crédito. El síndico afectará la suma
recibida a los gastos que le demande el proceso de verificación y confección de los informes, con cargo de
oportuna rendición de cuentas al juzgado quedando el remanente como suma a cuenta de honorarios a
regularse por su actuación. Exclúyase del arancel a los créditos de causa laboral, y a los equivalentes a
menos de tres (3) salarios mínimos vitales y móviles, sin necesidad de declaración judicial.acreedores del
deudor se insinúan en el pasivo concursal”.
Por cada solicitud de verificación que presente, el acreedor deberá pagar al síndico un arancel equivalente
al 10% del salario mínimo vital y móvil que se agregará a su crédito. El síndico destinará lo recaudado a los
gastos que le demande el proceso de verificación y confección de los informes, debiendo rendir cuentas al
Juzgado. El remanente se aplicará como pago a cuota de honorarios del síndico. Quedarán excluidos del
pago de aranceles los acreedores de créditos laborales o inferiores menos de tres (3) salarios mínimos
vitales y móviles, sin necesidad de declaración judicial.
TRÁMITE: La impugnación u observación de los créditos deberá cumplir con las siguientes formalidades:
presentarse en el domicilio del síndico y hacerse por escrito con dos copias.
¿Qué hace el síndico con los tres ejemplares? El original deberá agregarlo al legajo del acreedor cuyo
crédito es observado; una copia deberá entregarla al interesado colocándole día y hora de la recepción
como constancia de la impugnación presentada; y la otra copia deberá presentarla en el juzgado –dentro
de las 48 hs de vencido el plazo de observación– para ser incorporada al legajo de copias (del artículo 279
LCQ).
ARTÍCULO 34.- Período de observación de créditos. “Durante los DIEZ (10) días siguientes al vencimiento
del plazo para solicitar la verificación, el deudor y los acreedores que lo hubieren hecho podrán concurrir al
domicilio del síndico, a efectos de revisar los legajos y formular por escrito las impugnaciones y
observaciones respecto de las solicitudes formuladas. Dichas impugnaciones deberán ser acompañadas de
DOS (2) copias y se agregarán al legajo correspondiente, entregando el síndico al interesado constancia que
acredite la recepción, indicando día y hora de la presentación.
Dentro de las CUARENTA Y OCHO (48) horas de vencido el plazo previsto en el párrafo anterior, el síndico
presentará al juzgado un juego de copias de las impugnaciones recibidas para su incorporación al legajo
previsto en el artículo 279.
Los trabajadores de la concursada que no tuvieren el carácter de acreedores tendrán derecho a revisar los
legajos y ser informados por el síndico acerca de los créditos insinuados. (Párrafo incorporado por art. 9º de
la Ley Nº 26.684 B.O. 30/06/2011)”.
NATURALEZA JURÍDICA: En cuanto la naturaleza jurídica del síndico mucho se ha dicho y debatido
existiendo diferentes teorías que lo han considerado desde un mandatario del concurso hasta un órgano
del mismo.
Sin embargo, en la actualidad es ésta última teoría la que ha prosperado. La jurisprudencia así lo sostiene
al decir que “el síndico de la Quiebra no es un representante del fallido ni tampoco de la masa de
acreedores –masa cuya existencia misma es cuanto menos dudosa- sino un funcionario de la Quiebra (…),
más concretamente ante la pérdida de la legitimación procesal del fallido, el funcionario actúan en los
procesos, no como su representante sino como órgano de la Quiebra y actúa con exclusión del fallido.
(FIORINA, MARTA S. C/ ADMICON S.A. S/ SIMULACIÓN. CNCOM, SALA D. 30/10/87. ERREPAR CONCUROS
Y QUIEBRAS II. 130.000).”
OPORTUNIDADES DE SU PRESENTACIÓN:
La ley dispone en el artículo 35 LCQ que el informe ha de ser presentado en el plazo de 20 días de vencido
el plazo para formular observaciones. Sin embargo, ha de recordarse que la sentencia de apertura debe
fijar con precisión la fecha en que ha de presentarse el informe.
En principio no procede el plazo de gracia; pero si de todos modos el informe es presentado tardíamente,
no corresponde su devolución –lo que acarrearía una notable demora al proceso– sino imponer una
sanción al síndico.
ARTÍCULO 35.- Informe individual. “Vencido el plazo para la formulación de observaciones por parte del
deudor y los acreedores, en el plazo de VEINTE (20) días, el síndico deberá redactar un informe sobre cada
solicitud de verificación en particular, el que deberá ser presentado al juzgado.
Se debe consignar el nombre completo de cada acreedor, su domicilio real y el constituido, monto y causa
del crédito, privilegio y garantías invocados; además, debe reseñar la información obtenida, las
observaciones que hubieran recibido las solicitudes, por parte del deudor y de los acreedores, y expresar
respecto de cada crédito, opinión fundada sobre la procedencia de la verificación del crédito y el privilegio.
También debe acompañar una copia, que se glosa al legajo a que se refiere el artículo 279, la cual debe
quedar a disposición permanente de los interesados para su examen, y copia de los legajos”.
E) RESOLUCIÓN JUDICIAL:
Dentro de los 10 días de presentado el “informe individual” por el síndico, el Juez deberá dictar una
resolución expresando la verificación, no verificación, admisibilidad o inadmisibilidad de cada uno de los
créditos y privilegios reclamados.
¿De qué depende que el Juez declara la verificación, no verificación, admisibilidad o inadmisibilidad de
un crédito o privilegio? Depende de si el crédito –o privilegio– fue impugnado u observado (ya sea por el
concursado, los acreedores o el síndico –cuando dictamina desfavorablemente–.
· Si el crédito no fue impugnado y observado, podrá ser declarado verificado o no verificado por el Juez,
según lo estime o no procedente.
· Si el crédito fue impugnado u observado, podrá ser declarado admisible o inadmisible por el Juez, según
lo estime o no procedente.
OPORTUNIDAD: Las resoluciones que el Juez adopta con relación a los créditos y privilegios, son definitivas
a los efectos del cómputo de las mayorías necesarias para considerar aceptado el acuerdo preventivo que
ofrezca el concursado.
Para los efectos se completan con la primera parte del artículo 37 LCQ que dispone Efectos de la
resolución. “La resolución que declara verificado el crédito y, en su caso, el privilegio, produce los efectos
de la cosa juzgada, salvo dolo.
La que lo declara admisible o inadmisible puede ser revisada a petición del interesado, formulada dentro de
los VEINTE (20) días siguientes a la fecha de la resolución prevista en el artículo 36. Vencido este plazo, sin
haber sido cuestionada, queda firme y produce también los efectos de la cosa juzgada, salvo dolo”.
La resolución que produce efecto de cosas juzgada es la que se adopta de conformidad al informe del
síndico, cuando éste ha aconsejado verificar lo que el acreedor pidió y no han mediado observaciones del
deudor ni de otros acreedores.
Del mismo modo, la resolución del artículo 36 LCQ que declaró admisible o inadmisible un crédito o
privilegio, adquiere efectos de cosa juzgada cuando no se intenta la revisión del artículo 37 LCQ dentro del
plazo que éste fija, también salvo dolo.
ARTÍCULO 36.- Resolución judicial. “Dentro de los DIEZ (10) días de presentado el informe por parte del
síndico, el juez decidirá sobre la procedencia y alcances de las solicitudes formuladas por los acreedores. El
crédito o privilegio no observados por el síndico, el deudor o los acreedores es declarado verificado, si el
juez lo estima procedente.
Cuando existan observaciones, el juez debe decidir declarando admisible o inadmisible el crédito o el
privilegio.
Estas resoluciones son definitivas a los fines del cómputo en la evaluación de mayorías y base del acuerdo,
sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo siguiente”.
EFECTOS:
· Verificado: El acreedor podrá decidir sobre la propuesta de acuerdo. La verificación del crédito es
irrecurrible –salvo dolo-.
· No verificado: El acreedor no podrá decidir sobre la propuesta de acuerdo. La “no verificación” del
crédito es recurrible por revisión. Aclaración: si bien la resolución de “no verificación” no está contemplada
en el texto de la LCQ, creemos, siguiendo a Roullion- que es la que corresponde declarar cuando el crédito
no haya sido observado o impugnado pero el Juez considere que no es procedente. Otros autores –Rivera,
Vitolo, etcétera– consideran conveniente declarar en el supuesto la inadmisibilidad del crédito.
· Admisible: El acreedor podrá decidir sobre la propuesta de acuerdo. La admisibilidad del crédito es
recurrible por revisión.
· Inadmisible: El acreedor no podrá decidir sobre la propuesta de acuerdo. La “inadmisibilidad” del crédito
es recurrible por revisión.
Resoluciones que son susceptibles de esta revisión: Pueden ser objeto de revisión con fundamento en el
dolo, las resoluciones verificatorias del artículo 36 LCQ y las de declaración de admisibilidad o no
admisibilidad respecto de las cuales no se hubiera intentado la revisión del artículo 37 LCQ.
Cuando quien solicitara la revisión alegare dolo, aunque se hubiesen producido sobre el crédito los efectos
de la cosa juzgada, se permitirá la revisión de la resolución. Por lo tanto, podrá ser objeto de revisión por
dolo la resolución que declara la “verificación” del crédito; y la resolución que declara la “no verificación”,
la “admisibilidad” o la “inadmisibilidad” del crédito luego de haber quedado firme.
· Trámite y competencia: Dicha acción por dolo tramita por vía ordinaria ante el Juez del concurso, y su
plazo de caducidad es de 90 días contados desde la fecha en que se dictó la resolución judicial sobre el
crédito.
Para Rivera el término dolo aquí identifica a las causales de revisión de la cosa juzgada fraudulenta, es
decir, que se trata del dolo procesal, consistente en utilizar las formas procesales para lograr un
pronunciamiento judicial.
· Legitimados activos y partes: Ante el silencio de la ley, la doctrina ha entendido que pueden promover
esta acción el concursado y cualquier acreedor con tal de que hubiesen conocido el vicio después de la
verificación. Si lo hubiesen conocido antes deberían haber ejercido la revisión del artículo 37 LCQ. El
síndico carece de legitimación.
3- VERIFICACIÓN TARDÍA:
PETICIÓN: La no concurrencia en los términos del artículo 32 LCQ no causa la pérdida del crédito, pudiendo
el acreedor promover un pedido de verificación que se califica de tardío, y que la ley regula en el artículo
56 LCQ segunda parte.
Es decir, si algún acreedor no se presentó a solicitar la verificación en el plazo establecido en la resolución
de apertura podrá hacerlo luego por alguna de estas dos vías:
* Si el concurso no hubiera concluido: a través del incidente de verificación tardía.
* Si el concurso hubiera concluido: por la acción individual que corresponda.
En ambos casos, el acreedor deberá presentarse dentro de los dos años de la presentación en concurso, ya
que vencido ese plazo las acciones prescriben (incluso podría prescribir antes si la acción individual tuviera
un plazo de prescripción menor).
En principio, las costas que genera la verificación tardía son a cargo del acreedor.
ARTÍCULO 56.- Aplicación a todos los acreedores. “El acuerdo homologado produce efectos respecto de
todos los acreedores quirografarios cuyos créditos se hayan originado por causa anterior a la presentación,
aunque no hayan participado en el procedimiento.
También produce iguales efectos respecto de los acreedores privilegiados verificados, en la medida en que
hayan renunciado al privilegio.
Son absolutamente nulos los beneficios otorgados a los acreedores que excedan de lo establecido en el
acuerdo para cada categoría.
Socios solidarios. El acuerdo se extiende a los socios ilimitadamente responsables, salvo que, como
condición del mismo, se estableciera mantener su responsabilidad en forma más amplia respecto de todos
los acreedores comprendidos en él.
Verificación tardía. Los efectos del acuerdo homologado se aplican también a los acreedores que no
hubieran solicitado verificación, una vez que hayan sido verificados.
El pedido de verificación tardía debe deducirse por incidentes mientras tramite el concurso o, concluido
éste, por la acción individual que corresponda, dentro de los dos años de la presentación en concurso.
Si el título verificatorio fuera una sentencia de un juicio tramitado ante un tribunal distinto que el del
concurso, por tratarse de una de las excepciones previstas en el artículo 21, el pedido de verificación no
se considerará tardío, si, no obstante haberse excedido el plazo de dos años previsto en el párrafo
anterior, aquél se dedujere dentro de los seis meses de haber quedado firme la sentencia.
Vencidos esos plazos prescriben las acciones del acreedor, tanto respecto de los otros acreedores como
del concursado, o terceros vinculados al acuerdo, salvo que el plazo de prescripción sea menor.
Cuando la verificación tardía tramite como incidente durante el concurso, serán parte en dicho incidente
el acreedor y el deudor, debiendo el síndico emitir un informe una vez concluido el período de prueba.
Los acreedores verificados tardíamente no pueden reclamar de sus coacreedores lo que hubieren
percibido con arreglo al acuerdo, y el juez fijará la forma en que se aplicarán los efectos ya ocurridos,
teniendo en cuenta la naturaleza de las prestaciones”.
PLAZO: En ambos casos el acreedor deberá presentarse dentro de los 2 años de la presentación del
concurso ya que vencido ese plazo las acciones prescriben.
TRÁMITE: La ley 24.522 dispone que las verificaciones tardías pueden promoverse:
- pendiente el concurso (es decir entre el vencimiento del plazo para presentarse al síndico hasta la
resolución del artículo 59 primera parte de la LCQ) hipótesis en la cual tramitan por las reglas del incidente
concursal.
-después de la resolución del artículo 59 primera parte de la LCQ, hipótesis en que lo que se ejerce es la
acción individual de que es titular el acreedor. ¿Cuál es la acción individual? Es la que corresponde a la
naturaleza del título con que se acciona o crédito que se pretende hacer valer.
En principio, las costas que genera la verificación tardía son a cargo del acreedor.
PARTES: La ley prevé que en el caso de incidente tramitado durante el concurso son partes el deudor y el
acreedor. El síndico se limita a presentar un informe una vez concluido el período de prueba. En caso de
quiebra el fallido puede hacerse parte (artículo 110 LCQ), mientras que el síndico será necesariamente
parte del proceso.
En cambio, en la acción individual son partes sólo el deudor y el acreedor, pues concluido el concurso el
síndico ha dejado de actuar; tampoco actúa el síndico en las verificaciones tardías que se propongan en los
pequeños concursos, pues en ese caso su función se limita al control del cumplimiento del acuerdo.
Tampoco intervienen los demás acreedores, la ley considera que la sentencia dictada en la acción
individual es oponible a los demás acreedores.
EXCEPCIONES –Juicios en que no se aplica el fuero de atracción-: Ciertos procesos quedan excluidos del
fuero de atracción continuado -o iniciándose- ante un tribunal distinto al del concurso. El acreedor que
obtuviera una sentencia firme en dichos procesos no estará sujeto al plazo de prescripción de dos años, ni
deberá soportar las costas del proceso, pero para ello deberá presentar su pedido de verificación de
crédito dentro de los 6 meses de haber quedado firme la sentencia.
REVISIÓN:
INFORME GENERAL.
CONCEPTO: El informe general es una suerte de radiografía de la empresa o actividad del concursado, o
bien de su patrimonio más estáticamente concebido si el concursado no lleva ninguna actividad
empresaria.
Por eso se presenta después de la verificación de los créditos y del informe individual; la ley establece que
ha de ser llevado al proceso 30 días después de presentado el informe individual.
Es decir, a los 30 días de haber presentado el “informe individual”, el síndico deberá presentar el “informe
general”. En este informe el síndico expone su visión sobre el estado del concurso y del concursado de
manera objetiva e imparcial. No se trata de una simple opinión, sino del resultado de una investigación.
FINES (FINALIDAD): La finalidad del informe general del síndico es aportar a los acreedores datos objetivos
para que evalúen las propuestas de acuerdo que posteriormente les presentará el concursado, y su
eventual cumplimiento.
ESENCIA JURÍDICA:
3- OBSERVACIONES AL INFORME:
ARTÍCULO 40.- Observaciones al informe. “Dentro de los DIEZ (10) días de presentado el informe previsto
en el artículo anterior, el deudor y quienes hayan solicitado verificación pueden presentar observaciones al
informe; son agregadas sin sustanciación y quedan a disposición de los interesados para su consulta”.
Dentro de los 10 días de presentado el informe, el concursado y los acreedores que hayan solicitado
verificación, podrán presentar observaciones al informe. El Juez no deberá dictar ninguna resolución al
respecto. Las observaciones sólo sirven para aportar más información al concurso para que los acreedores
puedan decidir mejor sobre las propuestas de acuerdo que les presentará el concursado.
BOLILLA XI
ARTÍCULO 41.- Clasificación y agrupamiento de acreedores en categorías. “Dentro de los DIEZ (10) días
contados a partir de la fecha en que debe ser dictada la resolución prevista en el artículo 36, el deudor debe
presentar a la sindicatura y al juzgado una propuesta fundada de agrupamiento y clasificación en
categorías de los acreedores verificados y declarados admisibles, la naturaleza de las prestaciones
correspondientes a los créditos, el carácter de privilegiados o quirografarios, o cualquier otro elemento que
razonablemente, pueda determinar su agrupamiento o categorización, a efectos de poder ofrecerles
propuestas diferenciadas de acuerdo preventivo.
La categorización deberá contener, como mínimo, el agrupamiento de los acreedores en TRES (3)
categorías: quirografarios, quirografarios laborales -si existieren- y privilegiados, pudiendo -incluso-
contemplar categorías dentro de estos últimos.
Créditos subordinados. Los acreedores verificados que hubiesen convenido con el deudor la postergación de
sus derechos respecto de otras deudas, integrarán en relación con dichos créditos una categoría”.
ARTÍCULO 42.- Resolución de categorización. “Dentro de los diez (10) días siguientes a la finalización del
plazo fijado en el artículo 40, el juez dictará resolución fijando definitivamente las categorías y los
acreedores comprendidos en ellas.
Constitución del comité de control. En dicha resolución el juez designará a los nuevos integrantes del
comité de control, el cual quedará conformado como mínimo por un (1) acreedor por cada categoría de las
establecidas, debiendo integrar el mismo necesariamente el acreedor de mayor monto dentro de la
categoría y por dos (2) nuevos representantes de los trabajadores de la concursada, elegidos por los
trabajadores, que se incorporarán al ya electo conforme el artículo 14, inciso 13. El juez podrá reducir la
cantidad de representantes de los trabajadores cuando la nómina de empleados así lo justifique. A partir
de ese momento cesarán las funciones de los anteriores integrantes del comité que representan a los
acreedores”.
En la misma resolución el juez debe integrar un nuevo comité de acreedores, compuesto como mínimo por
un acreedor de cada categoría y necesariamente debe participar el acreedor de mayor monto de cada
categoría.
El juez tiene atribuciones como para modificar la propuesta de categorización si considera a la misma
irrazonable.
La resolución es irrecurrible, no obstante en la causa “Correo Argentino s/ Concurso preventivo” se apeló y
el recurso fue concedido.
3- PERÍODO DE EXCLUSIVIDAD:
A) CONCEPTO, EFECTOS Y PLAZO:
Dado que la ley elimina la junta de acreedores y admite propuestas de terceros, llama período de
exclusividad al espacio de tiempo en el cual sólo el concursado puede hacer ofertas de acuerdo preventivo
a los acreedores y debe obtener las mayorías legales para que el acuerdo se considere aprobado (artículo
43). Aunque hay que aclarar que no en todos los concursos existe un período posterior, si se trata de un
pequeño concurso no hay ofertas de acuerdo de terceros (artículo 289).
La duración del período de exclusividad es de 90 días contados a partir de la notificación automática de la
resolución de categorización del artículo 42. El juez puede extender ese plazo en 30 días más si se justifica
por razón de cantidad de acreedores o de categorías.
El plazo de duración del período de exclusividad surge de la ley 25.589 que modifica la 24.552.
ARTÍCULO 43.- Período de exclusividad. “Propuestas de acuerdo. Dentro de los noventa (90) días desde
que quede notificada por ministerio de la ley la resolución prevista en el artículo anterior, o dentro del
mayor plazo que el juez determine en función al número de acreedores o categorías, el que no podrá
exceder los treinta (30) días del plazo ordinario, el deudor gozará de un período de exclusividad para
formular propuestas de acuerdo preventivo por categorías a sus acreedores y obtener de éstos la
conformidad según el régimen previsto en el artículo 45.
Las propuestas pueden consistir en quita, espera o ambas; entrega de bienes a los acreedores; constitución
de sociedad con los acreedores quirografarios, en la que éstos tengan calidad de socios; reorganización de
la sociedad deudora; administración de todos o parte de los bienes en interés de los acreedores; emisión de
obligaciones negociables o debentures; emisión de bonos convertibles en acciones; constitución de
garantías sobre bienes de terceros; cesión de acciones de otras sociedades; capitalización de créditos,
inclusive de acreedores laborales, en acciones o en un programa de propiedad participada, o en cualquier
otro acuerdo que se obtenga con conformidad suficiente dentro de cada categoría, y en relación con el total
de los acreedores a los cuales se les formulará propuesta.
Las propuestas deben contener cláusulas iguales para los acreedores dentro de cada categoría, pudiendo
diferir entre ellas.
El deudor puede efectuar más de una propuesta respecto de cada categoría, entre las que podrán optar los
acreedores comprendidos en ellas.
El acreedor deberá optar en el momento de dar su adhesión a la propuesta.
La propuesta no puede consistir en prestación que dependa de la voluntad del deudor.
Cuando no consiste en una quita o espera, debe expresar la forma y tiempo en que serán definitivamente
calculadas las deudas en moneda extranjera que existiesen, con relación a las prestaciones que se
estipulen.
Los acreedores privilegiados que renuncien expresamente al privilegio, deben quedar comprendidos dentro
de alguna categoría de acreedores quirografarios.
La renuncia no puede ser inferior al treinta por ciento (30%) de su crédito.
A estos efectos, el privilegio que proviene de la relación laboral es renunciable, debiendo ser ratificada en
audiencia ante el juez del concurso, con citación a la asociación gremial legitimada. Si el trabajador no se
encontrare alcanzado por el régimen de Convenio Colectivo, no será necesaria la citación de la asociación
gremial. La renuncia del privilegio laboral no podrá ser inferior al veinte por ciento (20%) del crédito, y los
acreedores laborales que hubieran renunciado a su privilegio se incorporarán a la categoría de
quirografarios laborales por el monto del crédito a cuyo privilegio hubieran renunciado. El privilegio a que
hubiere renunciado el trabajador que hubiere votado favorablemente el acuerdo renace en caso de quiebra
posterior con origen en la falta de existencia de acuerdo preventivo, o en el caso de no homologarse el
acuerdo.
El deudor deberá hacer pública su propuesta presentando la misma en el expediente con una anticipación
no menor a veinte días (20) del vencimiento del plazo de exclusividad. Si no lo hiciere será declarado en
quiebra, excepto en el caso de los supuestos especiales contemplados en el artículo 48.
El deudor podrá presentar modificaciones a su propuesta original hasta el momento de celebrarse la Junta
Informativa prevista en el artículo 45, penúltimo párrafo”.
PROPUESTAS ALTERNATIVAS: Las propuestas se hacen a cada categoría de acreedores y dentro de cada
categoría pueden existir alternativas entre las que pueden optar los acreedores. Por ejemplo: a la categoría
de acreedores financieros tienen la alternativa de conversión de obligaciones a dólares o mantenimiento
de la deuda en moneda nacional.
No pueden ofrecerse propuestas que consistan en una prestación que dependa de la voluntad del deudor.
Además son inadmisibles las propuestas que contengan clausulas discriminatorias.
Además la ley 24.522, siguiendo a sus antecedentes, establece que si la propuesta contiene quita, ella no
podía significar un pago inferior al 40% del capital quirografario verificado. Pero no regía en casos de
supuestos de propuestas por terceros. El mínimo del 40% fue puesto en discusión, se discutía que si su
naturaleza era la libre negociación entre deudor y acreedores no debía haber pisos. La ley 25.589 eliminó
este piso. De todos modos el juez tiene facultad de no homologar acuerdos que constituyan expoliación de
ciertos acreedores.
EL PRINCIPIO DE IGUALDAD: La ley 19.551concibió la igualdad de una manera estricta, lo que imponía que
la propuesta de acuerdo preventivo fuera única para todos los acreedores. Pero este sistema era
permanente y vulnerado dado que todos los acreedores no son iguales (algunos prestaron dinero, otros
insumos, otros aportaron su fuerza de trabajo, entre otros). Entonces, las propuestas de acuerdos eran
iguales sólo en su apariencia, pero en realidad los acreedores tenían acuerdos diferenciados. Por ello una
de las mayores novedades de la ley 24.522 fue la introducción de los artículos 40 y 41.
C) LA PROPUESTA Y LOS ACREEDORES PRIVILEGIADOS : El acuerdo preventivo se dirige sustancialmente a
los acreedores quirografarios, que con su aprobación, por las mayorías legales, obtiene homologación
judicial. Pero la ley contempla también la situación de los créditos muñidos de privilegios legales o con
causa en garantías convencionales. Y prevé dos situaciones:
· La renuncia del privilegio del artículo 43: los privilegios legales o causados en garantías, son renunciables.
La ley prevé dos cuestiones: 1) la renuncia al privilegio puede ser parcial, pero en ese caso no ha de ser
inferior al 30% del crédito. 2) el acreedor renunciante al privilegio pasa a integrar alguna de las categorías
de acreedores. Por ejemplo: un acreedor prendario tiene un crédito de $100, puede renunciar por $30,
monto por el cual se incorpora a una categoría de quirografarios y por el monto de $70 continúa como
acreedor privilegiado. Estas renuncias suelen tener como finalidad la de facilitar al concursado obtener las
mayorías legales.
Renuncia al privilegio de los acreedores laborales: la LCT preveía la irrenunciabilidad del privilegio laboral
pero al ley 24.522 admite expresamente la renuncia al privilegio laboral. El límite de la renuncia es el 20%.
¿Hasta cuándo puede renunciarse al privilegio? La ley no ha establecido límite temporal pero Rivera dice
que lo razonable es interpretar que, atento a que las categorías quedan determinadas con la resolución el
artículo 42, sólo serían admisibles las renuncias que se presenten antes de dicha resolución.
· La propuesta de acuerdo para acreedores privilegiados que trata en el artículo 44. “Acreedores
privilegiados. El deudor puede ofrecer propuesta de acuerdo que comprenda a los acreedores privilegiados
o a alguna categoría de éstos. Este último acuerdo requiere las mayorías previstas en el artículo 46, pero
debe contar con la aprobación de la totalidad de los acreedores con privilegio especial a los que alcance”.
Por este artículo, el concursado puede ofrecer propuestas a creedores privilegiados o a alguna categoría de
éstos.
Artículo 45: Plazo y mayorías para la obtención del acuerdo para acreedores quirografarios. “Para
obtener la aprobación de la propuesta de acuerdo preventivo, el deudor deberá acompañar al juzgado,
hasta el día del vencimiento del período de exclusividad, el texto de la propuesta con la conformidad
acreditada por declaración escrita con firma certificada por ante escribano público, autoridad judicial, o
administrativa en el caso de entes públicos nacionales, provinciales o municipales, de la mayoría absoluta
de los acreedores dentro de todas y cada una de las categorías, que representen las dos terceras partes del
capital computable dentro de cada categoría. Sólo resultarán válidas y computables las conformidades que
lleven fecha posterior a la última propuesta o su última modificación presentada por el deudor en el
expediente.
La mayoría de capital dentro de cada categoría se computa teniendo en consideración la suma total de los
siguientes créditos:
a) Quirografarios verificados y declarados admisibles comprendidos en la categoría;
b) Privilegiados cuyos titulares hayan renunciado al privilegio y que se hayan incorporado a esa categoría
de quirografarios;
c) El acreedor admitido como quirografario, por habérsele rechazado el privilegio invocado, será excluido de
integrar la categoría, a los efectos del cómputo, si hubiese promovido incidente de revisión, en los términos
del artículo 37.
Se excluye del cómputo al cónyuge, los parientes del deudor dentro del cuarto grado de consanguinidad,
segundo de afinidad o adoptivos, y sus cesionarios dentro del año anterior a la presentación. Tratándose de
sociedades no se computan los socios, administradores y acreedores que se encuentren respecto de ellos en
la situación del párrafo anterior, la prohibición no se aplica a los acreedores que sean accionistas de la
concursada, salvo que se trate de controlantes de la misma.
El deudor deberá acompañar, asimismo, como parte integrante de la propuesta, un régimen de
administración y de limitaciones a actos de disposición aplicable a la etapa de cumplimiento, y la
conformación de un comité de control que actuará como controlador del acuerdo, que sustituirá al comité
constituido por el artículo 42, segundo párrafo. La integración del comité deberá estar conformada por
acreedores que representen la mayoría del capital, y permanecerán en su cargo los representantes de los
trabajadores de la concursada.
Con cinco (5) días de anticipación al vencimiento del plazo del período de exclusividad, se llevará a cabo la
audiencia informativa con la presencia del juez, el secretario, el deudor, el comité provisorio de control y los
acreedores que deseen concurrir. En dicha audiencia el deudor dará explicaciones respecto de la
negociación que lleva a cabo con sus acreedores, y los asistentes podrán formular preguntas sobre las
propuestas.
Si con anterioridad a la fecha señalada para la audiencia informativa, el deudor hubiera obtenido las
conformidades previstas por el artículo 45, y hubiera comunicado dicha circunstancia al juzgado,
acompañando las constancias, la audiencia no se llevará a cabo”.
El artículo 45 bis reglamenta el procedimiento que deberán efectuar quienes sean titulares de debentures,
bonos convertibles, obligaciones negociables u otros títulos emitidos en serie que representen créditos
contra el concursado (artículo 32 bis). Para la obtención de conformidades los acreedores se ajustan al
siguiente régimen:
-En una asamblea (convocada por el fiduciario o el juez) los participantes expresan su conformidad o
rechazo a la propuesta.
-Las conformidades se computan como si fuera otorgada por una sola persona para las respuestas positivas
y por una sola persona para las negativas.
-Estas votaciones se plasman en un acta notarial que es acompañada al juzgado por el fiduciario.
El plazo para las conformidades es: hasta el día en que vence el período de exclusividad y Rivera entiende
que también debe contemplarse el plazo de gracia procesal. Se computan por categorías, es decir que, el
concursado debe obtener la conformidad de acreedores que representen la mayoría de personas y de
capital en todas y cada una de las categorías.
· Mayoría de personas: Por la ley también se exige una segunda mayoría, que se computa por cabeza, de
modo que los acreedores que hayan dado su conformidad con la propuesta representen la mayoría
absoluta. Por mayoría absoluta se entiende que hayan votado favorablemente más de la mitad del total de
los acreedores verificados o declarados admisibles en la categoría.
CÓMPUTO DE CAPITAL: Para establecer las mayorías de capital se computan los créditos quirografarios
verificados y los declarados admisibles según el artículo 36, y los créditos de los privilegios que hayan
renunciado al privilegio, en la medida de esa renuncia. Quedando excluidos todos los mencionados en el
artículo 45.
NO OBTENCIÓN DE CONFORMIDAD:
RÉGIMEN DE ADMINISTRACIÓN:
LA AUDIENCIA INFORMATIVA: En el artículo 45 la ley prevé que 5 días antes del vencimiento del período de
exclusividad se llevará a cabo una audiencia con la presencia del juez, el secretario, el concursado el comité
provisorio de acreedores y los acreedores que deseen concurrir. El objetivo de esta audiencia es que el
concursado de explicaciones de negociaciones que ha llevado a cabo con sus acreedores, y los asistentes
puedan formular preguntas sobre las respuestas. Si la audiencia no se lleva a cabo la ley no prevé ninguna
sanción.
Ahora bien ¿cómo se obtienen las conformidades de los créditos? La ley 25.589 ha incorporado el
artículo 45 bis que las regla:
Artículo 45 bis. Régimen de voto en el caso de títulos emitidos en serie. “Los titulares de debentures,
bonos convertibles, obligaciones negociables u otros títulos emitidos en serie que representen créditos
contra el concursado, participarán de la obtención de conformidades con el siguiente régimen:
1) Se reunirán en asamblea convocada por el fiduciario o por el juez en su caso.
2) En ella los participantes expresarán su conformidad o rechazo de la propuesta de acuerdo preventivo que
les corresponda; y manifestarán a qué alternativa adhieren para el caso que la propuesta fuere aprobada.
3) La conformidad se computará por el capital que representen todos los que hayan dado su aceptación a la
propuesta, y como si fuera otorgada por una sola persona; las negativas también serán computadas como
una sola persona.
4) La conformidad será exteriorizada por el fiduciario o por quien haya designado la asamblea, sirviendo el
acta de la asamblea como instrumento suficiente a todos los efectos.
5) Podrá prescindirse de la asamblea cuando el fideicomiso o las normas aplicables a él prevean otro
método de obtención de aceptaciones de los titulares de créditos que el juez estime suficiente.
6) En los casos en que sea el fiduciario quien haya resultado verificado o declarado admisible como titular
de los créditos, de conformidad a lo previsto en el artículo 32 bis, podrá desdoblar su voto; se computará
como aceptación por el capital de los beneficiarios que hayan expresado su conformidad con la propuesta
de acuerdo al método previsto en el fideicomiso o en la ley que le resulte aplicable; y como rechazo por el
resto. Se computará en la mayoría de personas como una aceptación y una negativa.
7) En el caso de legitimados o representantes colectivos verificados o declarados admisibles en los términos
del artículo 32 bis, en el régimen de voto se aplicará el inciso 6.
8) En todos los casos el juez podrá disponer las medidas pertinentes para asegurar la participación de los
acreedores y la regularidad de la obtención de las conformidades o rechazos”.
No obtención de mayorías: el deudor que no presenta en el expediente, dentro del plazo previsto, las
conformidades correspondientes, es declarado en quiebra, salvo que corresponda un procedimiento de
salvataje de la empresa (artículo 48). En la práctica se autorizó varios casos de subsanación de eventuales
errores con posterioridad al vencimiento del plazo máximo. Eso sólo en caso de quirografarios, en caso de
los privilegiados no se va a quiebra, salvo que el concursado lo haya dejado expresado.
B) ACREEDORES PRIVILEGIADOS: En la práctica las propuestas de acuerdo son sólo para los acreedores
quirografarios, pero la ley prevé el caso excepcional en que el concursado ofrezca un acuerdo preventivo a
sus acreedores privilegiados, tanto sea con privilegio general como con privilegio especial.
La falta de propuesta o no obtención de mayorías respecto de acreedores privilegiados, no determina la
quiebra, como sí pasaba con los quirografarios. Sólo la decreta en caso de que el propio concursado se
halla sometido a esta condición de manera voluntario.
La mayoría requerida en caso de existir propuesta es la absoluta de acreedores y los dos tercios del
capital computable en el caso de acreedores privilegiados generales y unanimidad en caso de acreedores
privilegiados especiales.
Artículo 47: Acuerdo para acreedores privilegiados. “Si el deudor hubiere formulado propuesta para
acreedores privilegiados o para alguna categoría de éstos y no hubiere obtenido, antes del vencimiento del
período de exclusividad, la conformidad de la mayoría absoluta de acreedores y las dos terceras partes del
capital computable y la unanimidad de los acreedores privilegiados con privilegio especial a los que alcance
la propuesta, sólo será declarado en quiebra si hubiese manifestado en el expediente, en algún momento,
que condicionaba la propuesta a acreedores quirografarios a la aprobación de las propuestas formuladas a
acreedores privilegiados”.
2. SUPUESTOS ESPECIALES:
REGISTROS DE ACREEDORES Y TERCEROS PARA ADQUISICIÓN DE LOS DERECHOS DE PARTICIPACIÓN
SOCIETARIOS:
1- LA VENTA FORZOSA DEL PAQUETE ACCIONARIO O DE LAS CUOTAS DE LA SRL. CONCEPTO. SUJETOS
COMPRENDIDOS EN EL RÉGIMEN LEGAL. OPORTUNIDAD EN QUE PROCEDE:
Algunos autores discutieron a cerca de la inconstitucionalidad de la compraventa forzosa que implica la
enajenación de las participaciones societarias a favor del tercero cuya falta de acuerdo ha sido aceptada
por los acreedores, por violentar el artículo 17 CN. Pero Rivera plantea que no es inconstitucional debido a
que la apertura del concurso preventivo es un acto voluntario del deudor que se somete voluntariamente.
Por otro lado, la sociedad, es la que se somete al concurso y los socios son los desapropiados por vía del
artículo 48, pero los cierto es que la voluntad social debió haberse completado con la ratificación de la
asamblea o reunión de socios.
Y aunque haya habido disidentes, es sabido que las sociedades forman su voluntad por mayoría y la
minoría debe acatar. En el derecho civil existen compraventas forzosas que nadie tacha de
inconstitucionales porque son necesarias para la satisfacción de los acreedores, para cumplir un contrato o
por finalidad de utilidad pública.
Por último, los socios desapropiados no sufren ningún daño patrimonial ya que recién un precio fijado por
un procedimiento legal, mientras que si no existirá la institución, la sociedad seria declarada en quiebra,
teniendo derecho solo al remante que existe después de pagados todos los acreedores más los gastos del
concurso y la tasa de justicia.
Sujetos: únicamente procederé el salvataje de la empresa cuando la concursada sea:
- SRL
- Sociedad cooperativa.
- Las personas reguladas por las leyes de compañía de seguro, asociaciones mutuales y AFJP.
G) EFECTOS DE LA VENTA DEL PAQUETE ACCIONARIO SOBRE: LOS CONTRATOS DE TRABAJO Y LAS
GARANTIAS OTORGADAS POR LOS SOCIOS SALIENTES:
Al homologarse la propuesta del tercero, la misma sentencia dispondrá la transferencia de las
participaciones societarias o accionarias de la sociedad deudora al oferente, debiendo éste depositar
judicialmente a la orden del juzgado interviniente el precio de la adquisición, dentro de los 3 días de
notificada la homologación por ministerio de la ley.
La entrega de las participaciones societarias se ordena en la sentencia homologatoria. Es muy frecuente
que las acciones o cuotas a transferir estén o prendadas. En este caso: las acciones se transmiten con la
prenda o el embargo al que deberá responder el adquiriente o, por el contrario el gravamen se traslada al
precio que se pague por ellas.
La ley nada dice acerca de las garantías dadas por los ex accionista a terceros (fianzas, prendas, hipotecas,
avales). Y lo cierto es que la homologación del acuerdo, si bien causa novación de las obligaciones del
concursado, no modifica las obligaciones de los garantes (artículo 55) La situación de los accionistas
garantes es sumamente comprometida en el caso del artículo 48, pues transmitirán sus acciones con lo
cual pierden la propiedad de la compañía, pero además siguen estando obligados por las garantías que han
dado en seguridad de las obligaciones de la misma compañía.
Dasso ha propuesto como condición que se imponga como requisito para la transmisión de las acciones
que se liberen esas garantías, pero ello no fue recogido por la ley, por lo que actualmente los ex accionistas
garantes siguen estando obligados por esas garantías.
Art. 48: Supuestos especiales. “En el caso de sociedades de responsabilidad limitada, sociedades por
acciones, sociedades cooperativas, y aquellas sociedades en que el Estado nacional, provincial o municipal
sea parte, con
exclusión de las personas reguladas por las leyes 20.091, 20.321, 24.241 y las excluidas por leyes especiales,
vencido el período de exclusividad sin que el deudor hubiera obtenido las conformidades previstas para el
acuerdo preventivo, no se declarará la quiebra, sino que:
1) Apertura de un registro. Dentro de los dos (2) días el juez dispondrá la apertura de un registro en el
expediente para que dentro del plazo de cinco (5) días se inscriban los acreedores, la cooperativa de trabajo
conformada por trabajadores de la misma empresa —incluida la cooperativa en formación— y otros
terceros interesados en la adquisición de las acciones o cuotas representativas del capital social de la
concursada, a efectos de formular propuesta de acuerdo preventivo. Al disponer la apertura del registro el
juez determinará un importe para afrontar el pago de los edictos. Al inscribirse en el registro, dicho importe
deberá ser depositado por los interesados en formular propuestas de acuerdo. (Inciso sustituido por art. 12
de la Ley Nº 26.684 B.O. 30/06/2011)
2) Inexistencia de inscriptos. Si transcurrido el plazo previsto en el inciso anterior no hubiera ningún
inscripto el juez declarará la quiebra.
3) Valuación de las cuotas o acciones sociales.
Si hubiera inscriptos en el registro previsto en el primer inciso de este artículo, el juez designará el
evaluador a que refiere el artículo 262, quien deberá aceptar el cargo ante el actuario. La valuación deberá
presentarse en el expediente dentro de los treinta (30) días siguientes.
La valuación establecerá el real valor de mercado, a cuyo efecto, y sin perjuicio de otros elementos que se
consideren apropiados, ponderará:
a) El informe del artículo 39, incisos 2 y,3, sin que esto resulte vinculante para el evaluador;
b) Altas, bajas y modificaciones sustanciales de los activos;
c) Incidencia de los pasivos postconcursales.
La valuación puede ser observada en el plazo de cinco (5) días, sin que ello dé lugar a sustanciación alguna.
Teniendo en cuenta la valuación, sus eventuales observaciones, y un pasivo adicional estimado para gastos
del concurso equivalente al cuatro por ciento (4%) del activo, el juez fijará el valor de las cuotas o acciones
representativas del capital social de la concursada. La resolución judicial es inapelable.
4) Negociación y presentación de propuestas de acuerdo preventivo. Si dentro del plazo previsto en el
primer inciso se inscribieran interesados, estos quedarán habilitados para presentar propuestas de acuerdo
a los acreedores, a cuyo efecto podrán mantener o modificar la clasificación del período de exclusividad. El
deudor recobra la posibilidad de procurar adhesiones a su anterior propuesta o a las nuevas que formulase,
en los mismos plazos y compitiendo sin ninguna preferencia con el resto de los interesados oferentes.
Todos los interesados, incluido el deudor, tienen como plazo máximo para obtener las necesarias
conformidades de los acreedores el de veinte (20) días posteriores a la fijación judicial del valor de las
cuotas o acciones representativas del capital social de la concursada. Los acreedores verificados y
declarados admisibles podrán otorgar conformidad a la propuesta de más de un interesado y/o a la del
deudor. Rigen iguales mayorías y requisitos de forma que para el acuerdo preventivo del período de
exclusividad.
5) Audiencia informativa. Cinco (5) días antes del vencimiento del plazo para presentar propuestas, se
llevará a cabo una audiencia informativa, cuya fecha, hora y lugar de realización serán fijados por el juez al
dictar la resolución que fija el valor de las cuotas o acciones representativas del capital social de la
concursada. La audiencia informativa constituye la última oportunidad para exteriorizar la propuesta de
acuerdo a los acreedores, la que no podrá modificarse a partir de entonces.
6) Comunicación de la existencia de conformidades suficientes. Quien hubiera obtenido las conformidades
suficientes para la aprobación del acuerdo, debe hacerlo saber en el expediente antes del vencimiento del
plazo legal previsto en el inciso 4. Si el primero que obtuviera esas conformidades fuese el deudor, se
aplican las reglas previstas para el acuerdo preventivo obtenido en el período de exclusividad. Si el primero
que obtuviera esas conformidades fuese un tercero, se procederá de acuerdo al inciso 7.
7) Acuerdo obtenido por un tercero. Si el primero en obtener y comunicar las conformidades de los
acreedores fuera un tercero:
a) Cuando como resultado de la valuación el juez hubiera determinado la inexistencia de valor positivo de
las cuotas o acciones representativas del capital social, el tercero adquiere el derecho a que se le transfiera
la titularidad de ellas junto con la homologación del acuerdo y sin otro trámite, pago o exigencia
adicionales.
b) En caso de valuación positiva de las cuotas o acciones representativas del capital social, el importe
judicialmente determinado se reducirá en la misma proporción en que el juez estime —previo dictamen del
evaluador— que se reduce el pasivo quirografario a valor presente y como consecuencia del acuerdo
alcanzado por el tercero.
A fin de determinar el referido valor presente, se tomará en consideración la tasa de interés contractual de
los créditos, la tasa de interés vigente en el mercado argentino y en el mercado internacional si
correspondiera, y la posición relativa de riesgo de la empresa concursada teniendo en cuenta su situación
específica. La estimación judicial resultante es irrecurrible.
c) Una vez determinado judicialmente el valor indicado en el precedente párrafo, el tercero puede:
i) Manifestar que pagará el importe respectivo a los socios, depositando en esa oportunidad el veinticinco
por ciento (25%) con carácter de garantía y a cuenta del saldo que deberá efectivizar mediante depósito
judicial, dentro de los diez (10) días posteriores a la homologación judicial del acuerdo, oportunidad ésta en
la cual se practicará la transferencia definitiva de la titularidad del capital social; o,
ii) Dentro de los veinte (20) días siguientes, acordar la adquisición de la participación societaria por un valor
inferior al determinado por el juez, a cuyo efecto deberá obtener la conformidad de socios o accionistas que
representen las dos terceras partes del capital social de la concursada. Obtenidas esas conformidades, el
tercero deberá comunicarlo al juzgado y, en su caso, efectuar depósito judicial y/o ulterior pago del saldo
que pudiera resultar, de la manera y en las oportunidades indicadas en el precedente párrafo (i), cumplido
lo cual adquirirá definitivamente la titularidad de la totalidad del capital social.
8) Quiebra. Cuando en esta etapa no se obtuviera acuerdo preventivo, por tercero o por el deudor, o el
acuerdo no fuese judicialmente homologado, el juez declarará la quiebra sin más trámite”.
Artículo 48 bis.- “En caso que, conforme el inciso 1 del artículo anterior, se inscriba la cooperativa de
trabajo —incluida la cooperativa en formación—, el juez ordenará al síndico que practique liquidación de
todos los créditos que corresponderían a los trabajadores inscriptos por las indemnizaciones previstas en los
artículos 232, 233 y 245 del Régimen de Contrato de Trabajo aprobado por ley 20.744, los estatutos
especiales, convenios colectivos o la que hayan acordado las partes. Los créditos así calculados podrán
hacerse valer para intervenir en el procedimiento previsto en el artículo anterior.
Homologado el acuerdo correspondiente, se producirá la disolución del contrato de trabajo de los
trabajadores inscriptos y los créditos laborales se transferirán a favor de la cooperativa de trabajo
convirtiéndose en cuotas de capital social de la misma. El juez fijará el plazo para la inscripción definitiva de
la cooperativa bajo apercibimiento de no proceder a la homologación. La cooperativa asumirá todas las
obligaciones que surjan de las conformidades presentadas.
El Banco de la Nación Argentina y la Administración Federal de Ingresos Públicos, cuando fueren acreedores
de la concursada, deberán otorgar las respectivas conformidades a las cooperativas, y las facilidades de
refinanciación de deudas en las condiciones más favorables vigentes en sus respectivas carteras.
Queda exceptuada la cooperativa de trabajadores de efectuar el depósito del veinticinco por ciento (25%)
del valor de la oferta prevista en el punto i), inciso 7 del artículo 48 y, por el plazo que determine la
autoridad de aplicación de la ley 20.337, del depósito del cinco por ciento (5%) del capital suscripto previsto
en el artículo 90 de la ley 20.337. En el trámite de constitución de la cooperativa la autoridad de aplicación
encargada de su inscripción acordará primera prioridad al trámite de la misma debiéndose concluir dentro
de los diez (10) días hábiles”.
1. EL ACUERDO. IMPUGNACIÓN.
1- LA AUSENCIA DE ACUERDO PREVENTIVO, RESOLUCIÓN JUDICIAL: PLAZO, CONTENIDO.
2- IMPUGNACIÓN DEL ACUERDO. A) Legitimación para impugnar; B) plazo; C) causales; D)
procedimientos; E) resolución judicial: recurribilidad.
1. EL ACUERDO. IMPUGNACIÓN.
1- LA AUSENCIA DEL ACUERDO PREVENTIVO:
ARTÍCULO 46 LCQ.- No obtención de la conformidad. “Si el deudor no presentara en el expediente, en el
plazo previsto, las conformidades de los acreedores quirografarios bajo el régimen de categorías y
mayorías previstos en el artículo anterior, será declarado en quiebra, con excepción de lo previsto en el
Artículo 48 para determinados sujetos”.
La finalización del período de exclusividad sin obtener las conformidades requeridas significa el
agotamiento definitivo de la chance del concursado. El mismo se encuentra entonces inhabilitado para
proponer otro acuerdo con posterioridad, atento a su fracaso.
La falta de presentación de las conformidades, en tiempo y forma, importa la declaración en quiebra del
deudor, con la excepción de que al concursado, por condiciones subjetivas, le sea posible recurrir al
régimen de salvataje contemplado en el artículo 48 LCQ.
ARTÍCULO 45 PRIMER PÁRRAFO LCQ.- Plazo y mayorías para la obtención del acuerdo para acreedores
quirografarios. “Para obtener la aprobación de la propuesta de acuerdo preventivo, el deudor deberá
acompañar al juzgado, hasta el día del vencimiento del período de exclusividad, el texto de la propuesta
con la conformidad acreditada por declaración escrita con firma certificada por ante escribano público,
autoridad judicial, o administrativa en el caso de entes públicos nacionales, provinciales o municipales, de
la mayoría absoluta de los acreedores dentro de todas y cada una de las categorías, que representen las
dos terceras partes del capital computable dentro de cada categoría. Sólo resultarán válidas y computables
las conformidades que lleven fecha posterior a la última propuesta o su última modificación presentada por
el deudor en el expediente”.
ARTICULO 50. Impugnación. “Los acreedores con derecho a voto, y quienes hubieren deducido incidente,
por no haberse presentado en término, o por no haber sido admitidos sus créditos quirografarios, pueden
impugnar el acuerdo, dentro del plazo de cinco (5) días siguiente a que quede notificada por ministerio de la
ley la resolución del artículo 49.
Causales. La impugnación solamente puede fundarse en:
1) Error en cómputo de la mayoría necesaria.
2) Falta de representación de acreedores que concurran a formar mayoría en las categorías.
3) Exageración fraudulenta del pasivo.
4) Ocultación o exageración fraudulenta del activo.
5) Inobservancia de formas esenciales para la celebración del acuerdo.
Esta causal sólo puede invocarse por parte de acreedores que no hubieren presentado conformidad a las
propuestas del deudor, de los acreedores o de terceros. (Inciso 5, restablecido por art. 3 Ley N°
25.589 B.O.16/5/2002. Ver vigencia art. 20”.
A) LEGITIMACIÓN PARA IMPUGNAR: son los acreedores quirografarios verificados, los declarados
admisibles, los inadmisibles que hubiesen promovido incidente de revisión y los no concurrentes
oportunamente que hubiesen promovido incidente de verificación tardía, siempre que hubiesen tenido
derecho a voto, lo cual excluye de la impugnación a los excluidos de concurrir a formar mayorías.
Los privilegiados sólo pueden impugnar si el acuerdo los comprendiese.
No es necesario que el derecho a voto haya sido ejército efectivamente. Tampoco que el acreedor haya
votado en contra de la aprobación del acuerdo, pues la naturaleza de algunas causales de impugnación
justamente implican que los acreedores pueden haber votado engañados sobre la composición del activo o
del pasivo.
B) PLAZO: el término para impugnar es de 5 días contados a partir de la notificación de la resolución del
artículo 49 LCQ (declaración de existencia de acuerdo) por ministerio de la ley.
Este plazo es de caducidad, por lo que no es susceptible de interrupción ni suspensión.
D) PROCEDIMIENTOS: La ley no atribuye trámite específico a la impugnación, por lo que debe sustanciarse
por las reglas del incidente concursal. De modo que es admisible la apertura a prueba, la que debe
ofrecerse íntegramente al promover el incidente. Sin embargo el tribunal puede prescindir de la prueba
cuando ella es superflua o indica la sobre intención de dilatar el proceso.
ARTÍCULO 52.- Homologación. “No deducidas impugnaciones en término, o al rechazar las interpuestas, el
juez debe pronunciarse sobre la homologación del acuerdo.
1. Si considera una propuesta única, aprobada por las mayorías de ley, debe homologarla.
2. Si considera un acuerdo en el cual hubo categorización de acreedores quirografarios y consiguiente
pluralidad de propuestas a las respectivas categorías:
a) Debe homologar el acuerdo cuando se hubieran obtenido las mayorías del artículo 45 o, en su caso, las
del artículo 67;
b) Si no se hubieran logrado las mayorías necesarias en todas las categorías, el juez puede homologar el
acuerdo, e imponerlo a la totalidad de los acreedores quirografarios, siempre que resulte reunida la
totalidad de los siguientes requisitos:
i) Aprobación por al menos una de las categorías de acreedores quirografarios;
ii) Conformidad de por lo menos las tres cuartas partes del capital quirografario;
iii) No discriminación en contra de la categoría o categorías disidentes. Entiéndese como discriminación el
impedir que los acreedores comprendidos en dicha categoría o categorías disidentes puedan elegir —
después de la imposición judicial del acuerdo— cualquiera de las propuestas, únicas o alternativas,
acordadas con la categoría o categorías que las aprobaron expresamente. En defecto de elección expresa,
los disidentes nunca recibirán un pago o un valor inferior al mejor que se hubiera acordado con la categoría
o con cualquiera de las categorías que prestaron expresa conformidad a la propuesta;
iv) Que el pago resultante del acuerdo impuesto equivalga a un dividendo no menor al que obtendrían en la
quiebra los acreedores disidentes.
3. El acuerdo no puede ser impuesto a los acreedores con privilegio especial que no lo hubieran aceptado.
4. En ningún caso el juez homologará una propuesta abusiva o en fraude a la ley.
(Artículo sustituido por art. 17 de la Ley N° 25.589 B.O. 16/5/2002. Ver vigencia art. 20)”.
OPORTUNIDAD: El Juez debe pronunciarse sobre la homologación del acuerdo una vez transcurridos los 5
días del plazo para deducir impugnaciones, o una vez rechazadas las impugnaciones interpuestas (son
improcedentes).
FACULTADES DEL TRIBUNAL: Tiene facultad de imponer el acuerdo preventivo a alguna clase disidente,
siempre que se diesen ciertas condiciones que asegurasen a esa clase un trato equitativo. Los recaudos
para la aplicación de este remedio excepcional son:
- Que se haya obtenido la doble mayoría en por lo menos una categoría de acreedores.
- Que hayan dado consentimiento a la propuesta de acuerdo a acreedores que representen el 75% del
capital total con derecho a voto.
Se requiere además que la propuesta no sea discriminatoria, la misma ley define como tal el impedir que
los acreedores comprendidos en dicha categoría o categorías disidentes puedan elegir cualquiera de las
propuestas, únicas o alternativas acordadas con la categoría o categorías que las aprobaron expresamente.
En defecto de elección expresa, los disidentes nunca recibirán un pago o un valor inferior al mejor que se
hubiera acordado con la categoría o con cualquiera de las categorías que prestaron expresa conformidad a
la propuesta.
Este requisito es simple: tan solo la propuesta no debe decir que los acreedores que integran una categoría
no pueden elegir otra en caso de imposición judicial del acuerdo.
2- RESOLUCIÓN HOMOLOGATORIA:
CARACTERIZACION. CONTENIDO: Para la homologación el Juez deberá tener en cuenta:
- Si el acuerdo contuviera la misma propuesta para todos los acreedores, una vez obtenidas las
conformidades exigidas, deberá homologar el acuerdo.
- Si el acuerdo contuviera diferentes propuestas según las categorías de acreedores, una vez obtenidas las
conformidades exigidas en cada una de las categorías, deberá homologar el acuerdo. Si no se hubiesen
logrado las conformidades exigidas en cada una de las categorías, el Juez no podrá homologar.
CASOS ESPECIALES: La excepción a esto último es que el Juez podrá homologar el acuerdo cuando lo
considere conveniente, y siempre que se cumpla la totalidad de los siguientes requisitos 1. Haber obtenido
las conformidades exigidas en al menos una de las categorías de acreedores quirografarios; 2. Haber
obtenido la conformidad de por lo menos las tres cuartas partes del total del capital quirografario. 3. Que
se les permita a los acreedores de las categorías disidentes adoptar cualquiera de las propuestas
presentadas a las categorías que lograron la conformidad; 4. Que por el acuerdo impuesto, los acreedores
de categorías disidentes no reciban menos de lo que recibirían en la quiebra.
La resolución que homologue el acuerdo debe disponer las medidas judiciales necesarias para su
cumplimiento (artículo 53 LCQ).
ARTÍCULO 53.- Medidas para la ejecución. “La resolución que homologue el acuerdo debe disponer las
medidas judiciales necesarias para su cumplimiento.
Si consistiese en la reorganización de la sociedad deudora o en la constitución de sociedad con los
acreedores, o con alguno de ellos, el juez debe disponer las medidas conducentes a su formalización y fijar
plazo para su ejecución, salvo lo dispuesto en el acuerdo.
En el caso previsto en el artículo 48, inciso 4, la resolución homologatoria dispondrá la transferencia de las
participaciones societarias o accionarías de la sociedad deudora al ofertante, debiendo éste depositar
judicialmente a la orden del juzgado interviniente el precio de la adquisición, dentro de los tres (3) días de
notificada la homologación por ministerio de la ley. A tal efecto, la suma depositada en garantía en los
términos del artículo 48, inciso 4, se computará como suma integrante del precio. Dicho depósito quedará a
disposición de los socios o accionistas, quienes deberán solicitar la emisión de cheque por parte del juzgado.
Si el acreedor o tercero no depositare el precio de la adquisición en el plazo previsto, el juez declarará la
quiebra, perdiendo el acreedor o tercero el depósito efectuado, el cual se afectará como parte integrante
del activo del concurso.
(Artículo restablecido por art. 5 Ley N° 25.589 B.O. 16/5/2002. Ver vigencia art. 20)”.
DEPÓSITOS:
EXIGIBILIDAD DE LOS HONORARIOS A CARGO DEL DEUDOR: CONSECUENCIA POR OMISIÓN DE SU PAGO.
Los honorarios de los síndicos, abogados y demás profesionales que hayan intervenido en el concurso
preventivo, deben ser pagados a los 90 días de la homologación, o simultáneamente con el pago de la
primera cuota a alguna de las categorías si venciese antes de ese término.
La regulación hecha por el Juez de la primera instancia en la sentencia homologatoria es apelable, por lo
que para que los honorarios sean exigibles es preciso que estén firmes.
La falta de pago de los honorarios firmes, habilita a la declaración de la quiebra. Para ello es preciso que el
acreedor de los honorarios reclame su pago en el expediente o denuncie la falta de pago y se corra vista al
concursado por el término de 5 días. Si vencido ese término no se han satisfechos los estipendios
regulados, el Juez va a declarar la quiebra.
3. EFECTOS DEL ACUERDO HOMOLOGADO.
1- A) SOBRE LAS OBLIGACIONES; B) SOBRE LOS SUJETOS; C) SOBRE LOS ACTOS; D) SOBRE LOS
ACREEDORES; E) SOCIOS SOLIDARIOS.
A) SOBRE LAS OBLIGACIONES: Efecto novatorio: la novación es una causa de extinción de las obligaciones,
las que son sustituidas por un nuevo vínculo obligacional que reemplaza al extinguido, es la transformación
de una obligación en otra.
De modo que a partir de la homologación, la obligación del concursado respecto a sus acreedores
comprendidos en el acuerdo, es la que nace del acuerdo.
La razón de ser de esta disposición es la de facilitar al deudor concursado la obtención de crédito después
de homologado el acuerdo. Quien da crédito al concursado sabe cual es definitivamente el monto del
pasivo de su deudor.
Esta novación es de carácter legal, pero no es imperativa. El acuerdo preventivo podría disponer una regla
distinta.
ARTÍCULO 55.- Novación. “En todos los casos, el acuerdo homologado importa la novación de todas las
obligaciones con origen o causa anterior al concurso. Esta novación no causa la extinción de las
obligaciones del fiador ni de los codeudores solidarios.
(Artículo restablecido por art. 6 Ley N° 25.589 B.O. 16/5/2002. Ver vigencia art. 20)”.
D) SOBRE LOS ACREEDORES: Desde el momento de la homologación, el acuerdo se hace obligatorio para
todos los acreedores quirografarios (y para los privilegiados que hubieran renunciado al privilegio) cuyos
créditos se hayan originado por causa anterior a la presentación en concurso, tanto para los que votaron
positivamente como para los que lo rechazaron.
El acuerdo también es obligatorio para los acreedores que verifiquen tardíamente, una vez que hayan sido
verificados. Los acreedores que verifiquen tardíamente no podrán reclamar a sus coacreedores lo que
estos últimos ya hubieran percibido por el acuerdo, pero el Juez fijará la forma de compensar de ahí en
más los efectos ya ocurridos, teniendo en cuenta la naturaleza de las prestaciones.
Es nulo cualquier beneficio otorgado a los acreedores que no surja del acuerdo homologado.
Si el concursado hubiese presentado una propuesta para los acreedores con privilegio general obteniendo
las conformidades exigidas, al homologarse el acuerdo se producirá la novación sobre los créditos de todos
aquellos acreedores con privilegio general que integraron dicha categoría.
En cuanto a los acreedores con privilegio especial, no pueden ser sometidos a la decisión de una mayoría,
porque para que el acuerdo les fuera impuesto deben haber otorgado su conformidad todos los
acreedores con privilegio especial. Por lo tanto únicamente deberá cumplir con el acuerdo homologado
aquel que lo haya aceptado.
Los acreedores privilegiados que no estuviesen comprendidos en el acuerdo preventivo homologado
podrán:
- ejecutar la sentencia de verificación: algunos autores consideran que la sentencia sólo puede ejecutarse
luego de la homologación del acuerdo, mientras que otros creen que no hace falta esperar a la
homologación.
- pedir la quiebra del concursado: el acreedor privilegiado podrá pedir la quiebra directa del concursado,
debiendo cumplir con los requisitos exigidos para su procedencia. Además, si el privilegio fuera especial el
acreedor deberá demostrar sumariamente que los bienes afectados son insuficientes para cubrir su
crédito.
ARTÍCULO 56.- Aplicación a todos los acreedores. “El acuerdo homologado produce efectos respecto de
todos los acreedores quirografarios cuyos créditos se hayan originado por causa anterior a la presentación,
aunque no hayan participado en el procedimiento.
También produce iguales efectos respecto de los acreedores privilegiados verificados, en la medida en que
hayan renunciado al privilegio.
Son absolutamente nulos los beneficios otorgados a los acreedores que excedan de lo establecido en el
acuerdo para cada categoría.
Socios solidarios. El acuerdo se extiende a los socios ilimitadamente responsables, salvo que, como
condición del mismo, se estableciera mantener su responsabilidad en forma más amplia respecto de todos
los acreedores comprendidos en él.
Verificación tardía. Los efectos del acuerdo homologado se aplican también a los acreedores que no
hubieran solicitado verificación, una vez que hayan sido verificados.
El pedido de verificación tardía debe deducirse por incidentes mientras tramite el concurso o, concluido
éste, por la acción individual que corresponda, dentro de los dos años de la presentación en concurso.
Si el título verificatorio fuera una sentencia de un juicio tramitado ante un tribunal distinto que el del
concurso, por tratarse de una de las excepciones previstas en el artículo 21, el pedido de verificación no se
considerará tardío, si, no obstante haberse excedido el plazo de dos años previsto en el párrafo anterior,
aquél se dedujere dentro de los seis meses de haber quedado firme la sentencia.
Vencidos esos plazos prescriben las acciones del acreedor, tanto respecto de los otros acreedores como del
concursado, o terceros vinculados al acuerdo, salvo que el plazo de prescripción sea menor.
Cuando la verificación tardía tramite como incidente durante el concurso, serán parte en dicho incidente el
acreedor y el deudor, debiendo el síndico emitir un informe una vez concluido el período de prueba.
Los acreedores verificados tardíamente no pueden reclamar de sus coacreedores lo que hubieren percibido
con arreglo al acuerdo, y el juez fijará la forma en que se aplicarán los efectos ya ocurridos, teniendo en
cuenta la naturaleza de las prestaciones”.
ARTÍCULO 57.- Acuerdos para acreedores privilegiados. “Los efectos de las cláusulas que comprenden a los
acreedores privilegiados se producen, únicamente, si el acuerdo homologado. Los acreedores privilegiados
que no estuviesen comprendidos en el acuerdo preventivo podrán ejecutar la sentencia de verificación ante
el Juez que corresponda, de acuerdo con la naturaleza de sus créditos. También podrán pedir la quiebra del
deudor de conformidad a lo previsto en el artículo 80, segundo párrafo”.
ARTÍCULO 58.- Reclamación contra créditos admitidos: efectos. “La reclamación contra la declaración de
admisibilidad de un crédito o privilegio no impide el cumplimiento del acuerdo u obligación respectiva,
debiendo el concursado poner a disposición del juzgado la prestación a que tenga derecho el acreedor, si
éste lo solicita.
El juez puede ordenar la entrega al acreedor o disponer la forma de conservación del bien que el
concursado deba entregar. En el primer caso, fijará una caución que el acreedor deberá constituir antes de
procederse a la entrega. En el segundo, determinará si el bien debe permanecer en poder del deudor o ser
depositado en el lugar y forma que disponga. La resolución que se dicte sobre lo regulado por el apartado
precedente es apelable”.
E) SOBRE LOS SOCIOS SOLIDARIOS: Cuando la concursada es una sociedad con socios ilimitada y
solidariamente responsables, éstos se benefician igual que aquella por el logro del acuerdo preventivo
social. O sea, la responsabilidad de los socios se extiende respecto del pasivo pre concursal de la sociedad,
hasta el importe novado por efecto del acuerdo; salvo que como condición expresa de éste se hubieran
estipulado responsabilidades más gravosas para los socios.
ARTÍCULO 59.- Conclusión del concurso. “Una vez homologado el acuerdo, y tomadas y ejecutadas las
medidas tendientes a su cumplimiento, el juez debe declarar finalizado el concurso, dando por concluida la
intervención del síndico.
Con carácter previo a la declaración de conclusión del concurso del concurso, se constituirán las garantías
pertinentes, y se dispondrá mantener la inhibición general de bienes respecto del deudor por el plazo de
cumplimiento del acuerdo, salvo conformidad expresa de los acreedores, las previsiones que el acuerdo
previera al respecto, o las facultades que se hubieren otorgado al comité de acreedores como controlador
del acuerdo.
El juez, a pedido del deudor y con vista a los controladores del acuerdo, podrá autorizar la realización de
actos que importen exceder las limitaciones impuestas por la inhibición general.
Con la conclusión del concurso cesan respecto del deudor las limitaciones previstas en los Artículos 15 y 16,
con excepción de lo dispuesto en el presente artículo.
La resolución debe publicarse por UN (1) día, en el diario de publicaciones legales y UN (1) diario de amplia
circulación; siendo la misma apelable.
Declaración de cumplimiento del acuerdo. Inhibición para nuevo concurso. El cumplimiento del acuerdo
será declarado por resolución judicial emanada del juez que hubiese intervenido en el concurso, a instancias
del deudor, y previa vista a los controladores del cumplimiento del acuerdo.
El deudor no podrá presentar una nueva petición de concurso preventivo hasta después de transcurrido el
plazo de UN (1) año contado a partir de la fecha de la declaración judicial de cumplimiento del acuerdo
preventivo, ni podrá convertir la declaración de quiebra en concurso preventivo”.
CASO DE LOS PEQUEÑOS CONCURSOS: El síndico continúa en funciones cuando se trata de los pequeños
concursos en los que no se haya previsto la designación de controladores del acuerdo.
Incumplimiento
ARTÍCULO 63.- Pedido y trámite. “Cuando el deudor no cumpla el acuerdo total o parcialmente, incluso en
cuanto a las garantías, el juez debe declarar la quiebra a instancia de acreedor interesado, o de los
controladores del acuerdo. Debe darse vista al deudor y a los controladores del acuerdo. La quiebra debe
declararse también, sin necesidad de petición, cuando el deudor manifieste en el juicio su imposibilidad de
cumplir el acuerdo, en lo futuro.
La resolución es apelable; pero el recurso no suspende el cumplimiento de las medidas impuestas por los
Artículos 177 a 199”.
ARTÍCULO 64.- Quiebra pendiente de cumplimiento del acuerdo. “En todos los casos en que se declare la
quiebra, estando pendiente de cumplimiento un acuerdo preventivo, se aplican los incisos 6 y 7 del Artículo
62. Es competente el Juez que intervino en el concurso preventivo y actúa el mismo síndico”.
- quedan sin efecto las medidas adoptadas para la ejecución del acuerdo.
La nulidad debe causar las restituciones recíprocas, pero ello no se aplica al caso de los acreedores que han
cobrado dividendos concursales. Si hubiesen recibido pagos a cuenta del cumplimiento del acuerdo, tienen
derecho a cobrar en la quiebra en proporción a la parte no cumplida.
Y si el acreedor hubiese cobrado la totalidad de lo estipulado en el acuerdo queda excluido de la quiebra,
adviértase que es la totalidad según lo estipulado en el acuerdo, con lo cual si el acreedor hubiese
aceptado cobrar a los 30 días de la homologación, con una quita del 50%, y así lo hubiese hecho, no
recupera su crédito en la medida original ni participa de la quiebra posterior.
Declarada la nulidad y por ende la quiebra, se abre un nuevo período informativo y los bienes deben ser
realizados sin más trámite.
Nulidad
ARTÍCULO 60.- Sujetos y término. “El acuerdo homologado puede ser declarado nulo, a pedido de
cualquier acreedor comprendido en él, dentro del plazo de caducidad de SEIS (6) meses, contados a partir
del auto que dispone la homologación del acuerdo.
Causal. La nulidad sólo puede fundarse en el dolo empleado para exagerar el pasivo, reconocer o aparentar
privilegios inexistentes o constituidos ilícitamente, y ocultar o exagerar el activo, descubiertos después de
vencido el plazo del Artículo 50”.
ARTÍCULO 61.- Sentencia: quiebra. “La sentencia que decrete la nulidad del acuerdo debe contener la
declaración de quiebra del deudor y las medidas del Articulo 177. Es apelable, sin perjuicio del inmediato
cumplimiento de las medidas de los Artículos 177 a 199”.
ARTÍCULO 62.- Otros efectos. “La nulidad del acuerdo produce, además, los siguientes efectos:
1) Libera al fiador que garantizó su cumplimiento.
2) Los acreedores recuperan los derechos que tenían antes de la apertura del concurso. Si hubieren recibido
pagos a cuenta del cumplimiento del acuerdo, tienen derecho a cobrar en proporción igual a la parte no
cumplida. El acreedor que haya recibido el pago total de lo estipulado en el acuerdo excluido de la quiebra.
3) Son nulas las demás medidas adoptadas en cumplimiento del acuerdo, en cuanto satisfagan los créditos
comprendidos en él.
4) Los acreedores recuperan el privilegio al que han renunciado para votar el acuerdo.
5) Los acreedores cuyos créditos fueron dolosamente exagerados, quedan excluidos.
6) Abre un nuevo período de información, correspondiendo aplicar los Artículos 200 a 202.
7) Los bienes deben ser realizados, sin más trámite”.
ARTÍCULO 65.- Petición. “Cuando dos o más personas físicas o jurídicas integren en forma permanente un
conjunto económico, pueden solicitar en conjunto su concurso preventivo exponiendo los hechos en que
fundan la existencia del agrupamiento y su exteriorización.
La solicitud debe comprender a todos los integrantes del agrupamiento sin exclusiones. El juez podrá
desestimar la petición si estimara que no ha sido acreditada la existencia del agrupamiento. La resolución
es apelable”.
ARTÍCULO 66.- Cesación de pagos. “Para la apertura de concurso resultará suficiente con que uno de los
integrantes del agrupamiento se encuentre en estado de cesación de pagos, con la condición de que dicho
estado pueda afectar a los demás integrantes del grupo económico”.
2- EL PROCESO:
DISPOSICIONES LEGALES. JUEZ COMPETENTE:
La ley le atribuye la competencia al Juez a quien correspondiera entender en el concurso de la sociedad
que tenga el activo más importante. Se toma en cuenta el balance individual de cada una, y no el
consolidado.
ARTÍCULO 67.- Competencia. “Es competente el juez al que correspondiera entender en el concurso de la
persona con activo más importante según los valores que surjan del último balance.
Sindicatura. La Sindicatura es única para todo el agrupamiento, sin perjuicio de que el juez pueda designar
una sindicatura plural en los términos del Artículo 253, último párrafo.
Trámite. Existirá un proceso por cada persona física o jurídica concursada. El informe general será único y
se complementará con un estado de activos y pasivos consolidado del agrupamiento.
Los acreedores de cualquiera de los concursados podrán formular impugnaciones y observaciones a las
solicitudes de verificación formuladas por los acreedores en los demás.
Propuestas unificada. Los concursados podrán proponer categorías de acreedores y ofrecer propuestas
tratando unificadamente su pasivo.
La aprobación de estas propuestas requiere las mayorías del artículo 45. Sin embargo, también se
considerarán aprobadas si las hubieran votado favorablemente no menos del SETENTA Y CINCO POR
CIENTO (75 %) del total del capital con derecho a voto computado sobre todos los concursados, y no menos
del CINCUENTA POR CIENTO (50%) del capital dentro de cada una de las categorías.
La falta de obtención de las mayorías importará la declaración en quiebra de todos los concursados. El
mismo efecto produce la declaración de quiebra de uno de los concursados durante la etapa de
cumplimiento del acuerdo preventivo.
Propuestas Individuales. Si las propuestas se refieren a cada concursado individualmente, la aprobación
requiere la mayoría del artículo 45 en cada concurso. No se aplica a este caso lo previsto en el último
párrafo del apartado precedente.
Créditos entre concursados. Los créditos entre integrantes del agrupamiento o sus cesionarios dentro de los
DOS (2) años anteriores a la presentación no tendrán derecho a voto. El acuerdo puede prever la extinción
total o parcial de estos créditos, su subordinación u otra forma de tratamiento particular”.
SINDICATURA: Se designa a la misma para todos los procesos, la cual puede ser individual o plural.
INFORME GENERAL DEL SÍNDICO: El síndico debe presentar un único informe general, y ha de
complementarse con un estado consolidado de activo y pasivo que comprenda a todos los integrantes del
agrupamiento.
3- CONCURSO DE GARANTES.
DISTINCIÓN CON EL CONCURSO DE GRUPOS: El concurso de los garantes es una hipótesis distinta del
concurso de agrupamientos, lo que no excluye que los garantes se presenten en los términos del artículo
65 LCQ si forman parte del grupo, lo cual sucede con los accionistas controlantes que sean a la vez fiadores
o avalistas de obligaciones de las sociedades que controlan.
No supone tampoco que haya un concurso de grupos. Puede concursarse una sociedad o persona física
conforme al procedimiento ordinario, y a la vez hacerlo, dentro del plazo legal, quienes sean garantes de
sus obligaciones.
SUJETOS: Pueden ser personas físicas o jurídicas, y están incluidos quienes hayan asumido las siguientes
calidades:
fiador, liso, llano y principal pagador, codeudor solidario, avalista, tercero constituyente de hipoteca o
prenda, fiduciante en garantía, etcétera.
COMPETENCIA: En este caso NO rige la regla de competencia del artículo 67 LCQ (es siempre competente
el tribunal que entiende en el concurso del deudor principal).
La ley desplaza la regulación general de la competencia concursal, y no son aplicables las disposiciones
contenidas en el artículo tercero que se aplican a los supuestos ordinarios de competencia en materia de
concursos. Se trata de una norma especial que deroga, en este punto, a la normativa general. Por lo tanto,
es competente el juez del lugar donde se está tramitando el concurso del garantizado.
ARTÍCULO 68.- Garantes. “Quienes por cualquier acto jurídico garantizasen las obligaciones de un
concursado, exista o no agrupamiento pueden solicitar su concurso preventivo para que tramite en
conjunto con el de su garantizado. La petición debe ser formulada dentro de los TREINTA (30) días contados
a partir de la última publicación de edictos, por ante la sede del mismo juzgado.
Se aplican las demás disposiciones de esta sección”.
ARTÍCULO 3.- Juez competente. “Corresponde intervenir en los concursos al juez con competencia
ordinaria, de acuerdo a las siguientes reglas:
1) Si se trata de personas de existencia visible, al del lugar de la sede de la administración de sus negocios;
a falta de éste, al del lugar del domicilio.
2) Si el deudor tuviere varias administraciones es competente el juez del lugar de la sede de la
administración del establecimiento principal; si no pudiere determinarse esta calidad, lo que es el juez que
hubiere prevenido.
3) En caso de concurso de personas de existencia ideal de carácter privado regularmente constituidas, y las
sociedades en que el Estado Nacional, Provincial o Municipal sea parte -con las exclusiones previstas en el
Artículo 2 - entiende el juez del lugar del domicilio.
4) En el caso de sociedades no constituidas regularmente, entiende el juez del lugar de la sede; en su
defecto, el del lugar del establecimiento o explotación principal.
5) Tratándose de deudores domiciliados en el exterior, el juez del lugar de la administración en el país; a
falta de éste, entiende el del lugar del establecimiento, explotación o actividad principal, según el caso”.
EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
2. PEDIDO DE QUIEBRA.
1-PRESUPUESTOS: SUJETOS DEL JUICIO; CESACIÓN DE PAGOS; TRIBUNAL COMPETENTE. LA PLURALIDAD
DE ACREEDORES.
2- LEGITIMACIÓN ACTIVA; A) presentación del deudor. Caso de las pequeñas quiebras. B) la presentación
del acreedor; exigibilidad del crédito; acreedor privilegiado; casos: acreedores excluidos; supuesto de las
entidades financieras. C) quiebra de oficio.
3- TRAMITE: FACULTADES DEL JUEZ; MEDIDAS CAUTELARES; EL PROCESO DE ANTE QUIEBRA.
DESISTIMIENTO DEL DEUDOR O DEL ACREEDOR. RECAUDOS LEGALES.
2. PEDIDO DE QUIEBRA.
1-PRESUPUESTOS: SUJETOS DEL JUICIO; CESACIÓN DE PAGOS; TRIBUNAL COMPETENTE. LA PLURALIDAD DE
ACREEDORES:
Quiebra indirecta: Se da cuando fracasa el concurso preventivo, es decir, en los siguientes casos:
Quiebra directa: cuando la quiebra no es originada por el fracaso del concurso preventivo. Puede
ser solicitada a pedido del deudor (quiebra directa voluntaria) o de un acreedor (quiebra directa
necesaria).
TRIBUNAL COMPETENTE:
En cuanto al tribunal competente, se aplica el artículo 3 de la LCQ (VER ARRIBA QUE ESTÁ).
LA PLURALIDAD DE ACREEDORES:
Pluralidad de acreedores: el artículo 78 in fine establece que para que una quiebra sea decretada no se
exige la pluralidad de acreedores, con lo cual el estado de cesación de pagos puede configurarse ante la
existencia de un único acreedor cuyo crédito no puede ser satisfecho por el deudor con medios regulares
de pago.
ARTÍCULO 79.-Hechos reveladores. “Pueden ser considerados hechos reveladores del estado de cesación
de pagos, entro otros:
1) Reconocimiento judicial o extrajudicial del mismo, efectuado por el deudor.
2) Mora en el cumplimiento de una obligación.
3) Ocultación o ausencia del deudor o de los administradores de la sociedad, en su caso, sin dejar
representante con facultades y medios suficientes para cumplir sus obligaciones.
4) Clausura de la sede de la administración o del establecimiento donde el deudor desarrolle su actividad.
5) Venta a precio vil, ocultación o entrega de bienes en pago.
6) Revocación judicial de actos realizados en fraude de los acreedores.
7) Cualquier medio ruinoso o fraudulento empleado para obtener recursos”.
2- LEGITIMACIÓN ACTIVA;
A) PRESENTACIÓN DEL DEUDOR:
Cuando la quiebra es pedida por el deudor, éste debe cumplir los requisitos del artículo 11 LCQ que son:
“…Son requisitos formales de la petición de concurso preventivo:
1) Para los deudores matriculados y las personas de existencia ideal regularmente constituidas, acreditar la
inscripción en los registros respectivos. Las últimas acompañarán, además, el instrumento constitutivo y sus
modificaciones y constancia de las inscripciones pertinentes. (Acreditar la inscripción en registros
respectivos en caso de comerciantes matriculados).
Para las demás personas de existencia ideal, acompañar, en su caso, los instrumentos constitutivos y sus
modificaciones, aun cuando no estuvieron inscriptos.
2) Explicar las causas concretas de su situación patrimonial con expresión de la época en que se produjo la
cesación de pagos y de los hechos por los cuales ésta se hubiera manifestado.
3) Acompañar un estado detallado y valorado del activo y pasivo actualizado a la fecha de presentación,
con indicación precisa de su composición, las normas seguidas para su valuación, la ubicación, estado y
gravámenes de los bienes y demás datos necesarios para conocer debidamente el patrimonio. Este estado
de situación patrimonial debe ser acompañado de dictamen suscripto por contador público nacional.
4) Acompañar copia de los balances u otros estados contables exigidos al deudor por las disposiciones
legales que rijan su actividad, o bien los previstos en sus estatutos o realizados voluntariamente por el
concursado, correspondientes a los TRES (3) últimos ejercicios. En su caso, se deben agregar las memorias
y los informes del órgano fiscalizador.
5) Acompañar nómina de acreedores, con indicación de sus domicilios, montos de los créditos, causas,
vencimientos, codeudores, fiadores o terceros obligados o responsables y privilegios. Asimismo, debe
acompañar un legajo por cada acreedor, en el cual conste copia de la documenta sustentatoria de la deuda
denunciada, con dictamen de contador público sobre la correspondencia existente entre la denuncia del
deudor y sus registros contables o documentación existente y la inexistencia de otros acreedores en
registros o documentación existente. Debe agregar el detalle de los procesos judiciales o administrativos de
carácter patrimonial en trámite o con condena no cumplida, precisando su radicación.
6) Enumerar precisamente los libros de comercio y los de otra naturaleza que lleve el deudor, con
expresión del último folio utilizado, en cada caso, y ponerlos a disposición del juez, junto con la
documentación respectiva.
7) Denunciar la existencia de un concurso anterior y justificar, en su caso, que no se encuentra dentro del
período de inhibición que establece el artículo 59, o el desistimiento del concurso si lo hubiere habido…”
ARTÍCULO 82.- Petición del deudor. “La solicitud del deudor de su propia quiebra prevalece sobre el pedido
de los acreedores, cualquiera sea su estado, mientras no haya sido declarada. En caso de personas de
existencia ideal, se aplica lo dispuesto por el Artículo 6. Tratándose de incapaces se debe acreditar la previa
autorización judicial”.
ARTÍCULO 86.- Pedido del deudor. Requisitos. “La solicitud de quiebra por el deudor se debe acompañar
con los requisitos indicados en el Artículo 11 incisos 2, 3, 4 y 5 y, en su caso, los previstos en los incisos 1, 6 y
7 del mismo, sin que su omisión obste a la declaración de quiebra.
El deudor queda obligado a poner todos sus bienes a disposición del juzgado en forma apta para que los
funcionarios del concurso puedan tomar inmediata y segura posesión de los mismos.
En caso de sociedades, las disposiciones de este artículo se aplican a los socios ilimitadamente responsables
que hayan decidido o suscriban la petición, sin perjuicio de que el juez intime a los restantes su
cumplimiento, luego de decretada la quiebra”.
Algún hecho revelador de la cesación de pagos del deudor (ejemplo: la presentación de varios
pagarés del deudor no abonados a su vencimiento).
ARTÍCULO 80.- Petición del acreedor. “Todo acreedor cuyo crédito sea exigible, cualquiera sea su
naturaleza y privilegio, puede pedir la quiebra.
Si, según las disposiciones de esta ley, su crédito tiene privilegio especial, debe demostrar sumariamente
que los bienes afectados son insuficientes para cubrirlo. Esta prueba no será necesaria, si se tratare de un
crédito de causa laboral”.
ACREEDOR PRIVILEGIADO: El acreedor cuyo crédito goza de un privilegio especial conforme a la ley
concursal, debe mostrar que el asiento del privilegio es insuficiente para atender al crédito. La solución se
funda en que el privilegio, y en general las garantías reales, importan la individualización de un bien en el
patrimonio del deudor que puede ser excluido por el acreedor excluyendo a los demás acreedores del
producido de ese bien. De donde sólo queda legitimado si prueba que el producido de ese bien, a obtener
en la ejecución individual, será insuficiente para atender al crédito y sus accesorios.
3- TRAMITE:
FACULTADES DEL JUEZ:
Si procede la quiebra a pedido del acreedor, éstos deben reunir determinados requisitos (existencia de
crédito y su exigibilidad; que el deudor sea una sujeto concursable; algún hecho revelador de la cesación
de pago). Si se acreditan dichos requisitos, el juez deberá citar al deudor para que, dentro del quinto (5) día
de notificado, invoque y pruebe cuanto estime conveniente para que el pedido de quiebra sea rechazado
(ejemplo: puede probar que no está en cesación de pagos, que el juez no es competente, que no es sujeto
concursable). La ley establece que no hay período “ante quiebra”, lo que significa que no puede haber
etapa probatoria muy extensa para saber si hay o no que decretarse la quiebra, por eso, luego de oír al
deudor, el juez oirá al acreedor y resolverá admitiendo o rechazando la quiebra.
ARTÍCULO 83.- Pedido de acreedores. “Si la quiebra es pedida por acreedor, debe probar sumariamente su
crédito, los hechos reveladores de la cesación de pagos, y que el deudor está comprendido en el Artículo 2.
El juez puede disponer de oficio las medidas sumarias que estime pertinentes para tales fines y, tratándose
de sociedad, para determinar si está registrada y, en su caso, quiénes son sus socios ilimitadamente
responsables”.
ARTÍCULO 84.- Citación al deudor. “Acreditados dichos extremos, el juez debe emplazar al deudor para
que, dentro del quinto día de notificado, invoque y pruebe cuanto estime conveniente a su derecho.
Vencido el plazo y oído el acreedor, el juez resuelve sin más trámite, admitiendo o rechazando el pedido de
quiebra.
No existe juicio de ante quiebra”.
MEDIDAS CAUTELARES: Antes de declarar la quiebra, a pedido y bajo la responsabilidad del acreedor, el
juez podrá decretar medidas precautorias para proteger la integridad del patrimonio del deudor (por
ejemplo: inhibición general de bienes). Debiendo el juez verificar: verosimilitud en el derecho, pedido en la
demora y, si es necesario, una contracautela.
ARTÍCULO 85.- Medidas precautorias. “En cualquier estado de los trámites anteriores a la declaración de
quiebra, a pedido y bajo la responsabilidad del acreedor, el juez puede decretar medidas precautorias de
protección de la integridad del patrimonio del deudor, cuando considere acreditado prima facie lo invocado
por el acreedor y se demuestre peligro en la demora.
Las medidas pueden consistir en la inhibición general de bienes del deudor, intervención controlada de sus
negocios, u otra adecuada a los fines perseguidos”.
3. SENTENCIA
1- CONCEPTO. ESENCIA JURÍDICO-PROCESAL.
2- CONTENIDO. NOTIFICACIÓN.
3- RECURSOS: REPOSICIÓN; TRÁMITE; LEVANTAMIENTO SIN TRÁMITE DE LA QUIEBRA; EFECTOS.
APELACIÓN. ADMISIBILIDAD, DAÑOS Y PERJUICIOS. INCOMPETENCIA. PETICIÓN. PARTES. ADMISIÓN.
EFECTOS.
3. SENTENCIA.
1- CONCEPTO. ESENCIA JURÍDICO-PROCESAL: Como se mencionó anteriormente, el proceso de quiebra se
abre con una sentencia (artículo 88) dictada por el juez con competencia en lo concursal atribuida de
acuerdo a lo previsto en el artículo 3 (juez competente) de la LCQ.
En nuestro Derecho no existe estado de quiebra si no hay un juez que la declare mediante el dictado de
una sentencia respectiva (o decreto de quiebra). Se trata de una sentencia compleja por ser al mismo
tiempo: sentencia declarativa y sentencia constitutiva de derechos y obligaciones.
2- CONTENIDO. NOTIFICACIÓN:
· Contenido: El contenido de la sentencia que debe dictar el juez se encuentra legislado en el artículo 88
de la LCQ. El mismo señala: ARTÍCULO 88.- Contenido. “La sentencia que declare la quiebra debe contener:
1) Individualización del fallido (o deudor) y, en caso de sociedad la de los socios ilimitadamente
responsables; (DNI Y CUIT SI ES PERSONA HUMANA O NÚMERO DE REGISTRO SI ES PERSONA JURÍDICA).
2) Orden de anotar la quiebra y la inhibición general de bienes en los registros correspondientes;
3) Orden al fallido y a terceros para que entreguen al síndico los bienes de aquél;
4) Intimación al deudor para que cumpla los requisitos a los que se refiere el Artículo 86 si no lo hubiera
efectuado hasta entonces y para que entregue al síndico dentro de las VEINTICUATRO (24) horas los
libros de comercio y demás documentación relacionada con la contabilidad;
5) La prohibición de hacer pagos al fallido, los que serán ineficaces; (ESTE INCISO INTIMA A LOS TERCEROS
QUE TENGAN EN SU PODER BIENES DEL FALLIDO PARA QUE LO ENTREGUEN AL SÍNDICO Y LES ADVIERTE
QUE ESTÁ PROHIBIDO HACER PAGOS AL FALLIDO, PORQUE SERÁN INEFICACES).
6) Orden de interceptar la correspondencia y de entregarla al síndico;
7) Intimación al fallido o administradores de la sociedad concursada, para que dentro de las CUARENTA Y
OCHO (48) horas constituyan domicilio procesal en el lugar de tramitación del juicio, con apercibimiento
de tenerlo por constituido en los estrados del juzgado;
8) Orden de efectuar las comunicaciones necesarias para asegurar el cumplimiento del Artículo 103.
9) Orden de realización de los bienes del deudor y la designación de quien efectuará las enajenaciones.
10) Designación de un funcionario que realice el inventario correspondiente en el término de TREINTA
(30) días, el cual comprenderá sólo rubros generales.
11) La designación de audiencia para el sorteo del síndico.
Supuestos especiales. En caso de quiebra directa o cuando se la declare como consecuencia del
incumplimiento del acuerdo o la nulidad, la sentencia debe fijar la fecha hasta la cual se pueden presentar
las solicitudes de verificación de los créditos ante el síndico, la que será establecida dentro de los VEINTE
(20) días contados desde la fecha en que se estime concluida la publicación de los edictos, y para la
presentación de los informes individual y general, respectivamente”.
ARTÍCULO 89.- Publicidad. “Dentro de las VEINTICUATRO (24) horas de dictado el auto, el secretario del
juzgado debe proceder a hacer publicar edictos durante CINCO (5) días en el diario de publicaciones
legales, por los que haga conocer el estado de quiebra y las disposiciones del Artículo 88, y incisos 1, 3, 4, 5
y parte final, en su caso, y nombre y domicilio del síndico.
Igual publicación se ordena en cada jurisdicción en la que el fallido tenga establecimiento o en la que se
domicilie un socio solidario. Los exhortos pertinentes se deben diligenciar de oficio y ser librados dentro de
las VEINTICUATRO (24) horas de la sentencia de quiebra.
La publicación es realizada sin necesidad de previo pago y sin perjuicio de asignarse los fondos cuando los
hubiere.
Si al momento de la quiebra existieren fondos suficientes en el expediente, el juez puede ordenar las
publicaciones de edictos similares en otros diarios de amplia circulación que designe, a lo que se debe dar
cumplimiento en la forma y términos dispuestos”.
Sujetos legitimados: el fallido, cuando la quiebra es declarada a pedido del acreedor y la Sociedad en que
haya socios solidarios.
ARTÍCULO 94.- Reposición. “El fallido puede interponer recurso de reposición cuando la quiebra sea
declarada como consecuencia de pedido de acreedor. De igual derecho puede hacer uso el socio
ilimitadamente responsable, incluso cuando la quiebra de la sociedad de la que forma parte hubiera sido
solicitada por ésta sin su conformidad.
El recurso debe deducirse dentro de los CINCO (5) días de conocida la sentencia de quiebra o, en defecto de
ese conocimiento anterior, hasta el QUINTO día posterior a la última publicación de edictos en el diario
oficial que corresponda a la jurisdicción del juzgado.
Se entiende conocimiento del fallido, el acto de clausura o el de incautación de sus bienes”.
ARTÍCULO 95.- Causal. “El recurso sólo puede fundarse en la inexistencia de los presupuestos sustanciales
para la formación del concurso.
Partes. Al resolver, el juez debe valorar todas las circunstancias de la causa principal y sus incidentes.
Son parte en el trámite de reposición el fallido, el síndico y el acreedor peticionante. El juez dictará
resolución en un plazo máximo de DIEZ (10) días desde que el incidente se encontrare en condiciones de
resolver”.
LEVANTAMIENTO SIN TRÁMITE DE LA QUIEBRA:
En el artículo 96 la ley organiza también lo que se denomina “levantamiento sin trámite”, procedimiento
por el cual la quiebra se levanta con el depósito del importe de todos los pedidos de quiebra que existiesen
contra el fallido y sin sustanciación.
ARTÍCULO 96.- Levantamiento sin trámite. “El juez puede revocar la declaración de quiebra sin sustanciar
el incidente si el recurso de reposición se interpone por el fallido con depósito en pago, o a embargo, del
importe de los créditos con cuyo cumplimiento se acreditó la cesación de pagos y sus accesorios.
Pedidos en trámite. Debe depositar también los importes suficientes para atender a los restantes créditos
invocados en pedidos de quiebra en trámite a la fecha de la declaración, con sus accesorios, salvo que
respecto de ellos se demuestre prima facie, a criterio del juez, la ilegitimidad del reclamo y sin perjuicio de
los derechos del acreedor cuyo crédito no fue impedimento para revocar la quiebra.
Depósito de gastos. La resolución se supedita en su ejecución al depósito por el deudor, dentro de los CINCO
(5) días, de la suma que se fije para responder a los gastos causídicos.
Apelación. La resolución que deniegue la revocación inmediata es apelable únicamente por el deudor al
solo efecto devolutivo y se debe resolver por la alzada sin sustanciación”.
EFECTOS:
ARTICULO 97.- Efectos de la interposición. “La interposición del recurso no impide la prosecución del
proceso, salvo en cuanto importe disposición de bienes y sin perjuicio de la aplicación del Artículo 184”.
ARTICULO 98.- Efecto de la revocación. “La revocación de la sentencia de quiebra hace cesar los efectos del
concurso.
No obstante, los actos legalmente realizados por el síndico y la resolución producida de los contratos en
curso de ejecución son oponibles al deudor, aun cuando los primeros consistieren en disposiciones de bienes
en las condiciones del Artículo 184”.
APELACIÓN:
La ley organiza los recursos contra la sentencia de quiebra, y entre ellos no se prevé la apelación directa
por el fallido contra la misma, por lo cual ella es inapelable, debiendo deducirse el recurso de reposición, el
levantamiento sin trámite o el cuestionamiento de la competencia. Las resoluciones que se dicten en esas
cuestiones, sí son susceptibles de recurso de apelación.
ADMISIBILIDAD:
DAÑOS Y PERJUICIOS:
ARTICULO 99.- Daños y perjuicios contra el peticionario. “Revocada la sentencia de quiebra, quien la
peticionó con dolo o culpa grave es responsable por los daños y perjuicios causados al recurrente. La
acción tramita por ante el juez del concurso”.
INCOMPETENCIA:
El deudor o cualquier acreedor, excepto el que pidió la quiebra, pueden solicitar al juez que declare la
incompetencia del juzgado para entender en la causa.
Plazo para solicitar la incompetencia: para que proceda el planteo el peticionante deberá cumplir los
siguientes requisitos:
Si se trata del deudor: deberá solicitar la incompetencia dentro de los 5 días contados desde que
tomó conocimiento de la sentencia de quiebra: ¿en qué momento se considera que el deudor tomó
conocimiento de la sentencia? Desde la clausura o desde la incautación de sus bienes. Si el deudor
no hubiese tomado conocimiento de la sentencia de quiebra, el plazo para solicitar la
incompetencia se extenderá hasta el quinto (5) día posterior a la última publicación de edictos, art.
89, en el diario oficial que corresponda a la jurisdicción del juzgado.
Si se trata del acreedor: deberá solicitar la incompetencia dentro de los 5 días posteriores a la
última publicación de edictos, art. 89, en el diario oficial que corresponda a la jurisdicción.
¿Quiénes son parte del trámite de incompetencia? El deudor, el acreedor, el síndico y el acreedor
peticionante de la quiebra. Aunque algunos autores, como Vitolo no lo consideren a este último.
ARTÍCULO 100.- Incompetencia. “En igual término que el indicado en el Artículo 94, el deudor y cualquier
acreedor, excepto el que pidió la quiebra, pueden solicitar se declare la incompetencia del juzgado para
entender en la causa.
Son parte los indicados en el Artículo 95 y, en su caso, el acreedor que planteo la incompetencia”.
PETICIÓN:
ARTÍCULO 101.- Petición y admisión efectos. “Esta petición no suspende el trámite del concurso si el
deudor está inscrito en el Registro Público de Comercio de la jurisdicción del juzgado. En ningún caso cesa la
aplicación de los efectos de la quiebra.
La resolución que admite la incompetencia del juzgado ordena el pase del expediente a que corresponda,
siendo válidas las actuaciones que se hubieren cumplido hasta entonces”.
ADMISIÓN:
EFECTOS:
REQUISITOS:
Para obtener la conversión en concurso preventivo, el deudor deberá:
Solicitarla dentro de los 10 días contados desde la última publicación de edictos exigida por el art.
89 (publicidad de la sentencia de quiebra)
Ser un sujeto concursable según el art. 5; también los socios de responsabilidad ilimitada.
Sólo cuando la quiebra fue declarada a pedido del acreedor, aunque en el fallo “Pujol, Juan s/
propia quiebra” se acepta igualmente la conversión.
Cuando el deudor se encuentre en el “período de inhibición” (de 1 año desde el cumplimiento del
último concurso preventivo).
PLAZO:
conforme el artículo 90 LCQ el deudor puede pedir la conversión dentro de los 10 días hábiles contados
desde la última publicación de edictos a que se refiere el artículo 89.
REQUISITOS LEGALES:
ARTÍCULO 92.- Requisitos. “El deudor debe cumplir los requisitos previstos en el Artículo 11 al hacer su
pedido de conversión o dentro del plazo que el juez fije conforme a lo previsto en el Artículo 11, último
párrafo”.
ARTÍCULO 91.- Efectos del pedido de conversión. “Presentado el pedido de conversión el deudor no podrá
interponer recurso de reposición contra la sentencia de quiebra; si ya lo hubiese interpuesto, se lo tiene por
desistido sin necesidad de declaración judicial.
El pedido de conversión no impide la continuación del planteo de incompetencia formulado conforme a los
Artículos 100 y 101”.
RESOLUCIÓN JUDICIAL:
EFECTOS:
ARTÍCULO 93.- Efectos del cumplimiento de los requisitos. “Vencido el plazo fijado según el Artículo
anterior, el juez deja sin efecto la sentencia de quiebra y dicta sentencia conforme lo dispuesto en los
Artículos 13 y 14. Sólo puede rechazar la conversión en concurso preventivo por no haberse cumplido los
requisitos del Artículo 11”.
5. EXTENSIÓN DE LA QUIEBRA.
1- CONCEPTO; EVOLUCIÓN JURISPRUDENCIAL. ESENCIA JURÍDICA.
2- SUPUESTOS LEGALES DE PROCEDENCIA; CASOS DE PLENO DERECHO.
3- TRÁMITE PARA JUZGAR LA EXTENSIÓN DE LA QUIEBRA: PARTES, FACULTADES DEL JUEZ, MEDIDAS
PRECAUTORIAS, COORDINACIÓN DE PROCEDIMIENTOS. CASO DE GRUPOS ECONÓMICOS.
4- EFECTOS PROCESALES Y SUBSTANCIALES.
5. EXTENSIÓN DE LA QUIEBRA.
1- CONCEPTO; EVOLUCIÓN JURISPRUDENCIAL. ESENCIA JURÍDICA:
Consiste en extender la quiebra de una persona (quiebra principal) a otra (quiebra accesoria) aunque ésta
última no se encuentre en estado de cesación de pagos, si es que se da alguno de los supuestos legales
para poder extender la quiebra. La extensión de quiebras tiene por objetivo responsabilizar a aquellas
personas que tuvieron incidencia en la quiebra principal, ampliando las expectativas de cobro de los
acreedores de la quebrada principal. Por lo que en la quiebra principal el requisito era la cesación de
pagos, en la accesoria serán:
- La declaración de una quiebra anterior (quiebra principal) y;
- La existencia de alguna causal de extensión de la quiebra.
ARTÍCULO 160.- Socios con responsabilidad ilimitada. “La quiebra de la sociedad importa la quiebra de sus
socios con responsabilidad ilimitada. También implica la de los socios con igual responsabilidad que se
hubiesen retirado o hubieren sido excluidos después de producida la cesación de pagos, por las deudas
existentes a la fecha en la que el retiro fuera inscrito en el Registro Público de Comercio, justificadas en el
concurso.
Cada vez que la ley se refiere al fallido o deudor, se entiende que la disposición se aplica también a los
socios indicados en este artículo”.
En general la extensión de la quiebra es una cuestión grave, por lo que los requisitos, del art. 161 de la LCQ
deberán ser acreditados por prueba positiva y precisa. No bastan meras sospechas. Las causales se
encuentran en sus tres incisos y son:
o Que otra persona haya actuado bajo la apariencia de la fallida en su interés personal
o Que dicha persona haya dispuesto de los bienes como si fueran propios
Abuso de control: (inciso 2) desviando el interés social de la controlada. Aquí deberán existir:
ARTÍCULO 161.- Actuación en interés personal. Controlantes. Confusión patrimonial. “La quiebra se
extiende:
1) A toda persona que, bajo la apariencia de la actuación de la fallida, ha efectuado los actos en su
interés personal y dispuesto de los bienes como si fueran propios, en fraude a sus acreedores;
2) A toda persona controlante de la sociedad fallida, cuando ha desviado indebidamente el interés social
de la controlada, sometiéndola a una dirección unificada en interés de la controlante o del grupo
económico del que forma parte”.
A los fines de esta sección, se entiende por persona controlante:
1) aquella que en forma directa o por intermedio de una sociedad a su vez controlada, posee participación
por cualquier título, que otorgue los votos necesarios para formar la voluntad social;
2) cada una de las personas que, actuando conjuntamente, poseen participación en la proporción indicada
en el párrafo a) precedente y sean responsables de la conducta descrita en el primer párrafo de este inciso.
3) A toda persona respecto de la cual existe confusión patrimonial inescindible, que impida la clara
delimitación de sus activos y pasivos o de la mayor parte de ellos”.
MEDIDAS PRECAUTORIAS:
ARTÍCULO 164.- Trámite. Medidas precautorias. “La petición de extensión tramita por las reglas del juicio
ordinario con participación del síndico y de todas las personas a las cuales se pretenda extender la quiebra.
Si alguna de estas se encuentra en concurso preventivo o quiebra, es también parte el síndico de ese
proceso. La instancia perime a los SEIS (6) meses.
El juez puede dictar las medidas del Artículo 85 respecto de los imputados, bajo la responsabilidad del
concurso”.
ARTÍCULO 165.- Coexistencia con otros trámites concursales. “Los recursos contra la sentencia de quiebra
no obstan al trámite de extensión. La sentencia sólo puede dictarse cuando se desestimen los recursos”.
COORDINACIÓN DE PROCEDIMIENTOS:
ARTÍCULO 166.- Coordinación de procedimientos. Sindicatura. “Al decretar la extensión, el juez debe
disponer las medidas de coordinación de procedimientos de todas las falencias.
El síndico ya designado interviene en los concursos de las personas alcanzadas por la extensión, sin perjuicio
de la aplicación del Artículo 253, parte final”.
Formación de las masas: al extenderse la quiebra puede ocurrir que el patrimonio de la quebrada principal
se confunda con el de la quebrada por extensión (formación de una masa única) o que puedan
diferenciarse fácilmente uno del otro (masas separadas). Se encuentran legisladas en los art. 167 y 168:
ARTÍCULO 167.- Masa única. “La sentencia que decrete la extensión fundada en el Artículo 161, inciso 3,
dispondrá la formación de masa única.
También se forma masa única cuando la extensión ha sido declarada por aplicación del Artículo 161, incisos
1 y 2 y se comprueba que existe confusión patrimonial inescindible. En este caso, la formación de masa
única puede requerirla el síndico o cualquiera de los síndicos al presentar el informe indicado en el Artículo
41. Son parte en la articulación los fallidos y síndicos exclusivamente.
El crédito a cargo de más de uno de los fallidos concurrirá una sola vez por el importe mayor verificado”.
ARTÍCULO 168.- Masas separadas. Remanentes. “En los casos no previstos en el artículo anterior, se
consideran separadamente los bienes y crédito pertenecientes a cada fallido.
Los remanentes de cada masa separada, constituyen un fondo común, para ser distribuido entre los
acreedores no satisfechos por la liquidación de la masa en la que participaron, sin atender a privilegios.
Sin embargo, los créditos de quien ha actuado en su interés personal, en el caso del Artículo 161, inciso 1 o
de la persona controlante en el caso del Artículo 161, inciso 2 no participan en la distribución del
mencionado fondo común”.
ARTÍCULO 169.- Casación de pagos. “En caso de masa única, la fecha de iniciación del estado de cesación
de pagos que se determine a los efectos de los Artículos 118 y siguientes, es la misma respecto de todos los
fallidos. Se la determina al decretarse la formación de masa única o posteriormente.
Cuando existan masas separadas, se determina la fecha de iniciación de la cesación de pagos respecto de
cada fallido”.
ARTÍCULO 170.- Créditos entre fallidos. “Los créditos entre fallidos se verifican mediante informe del
síndico, o en su caso mediante un informe conjunto de los síndicos actuantes en las diversas quiebras, en la
oportunidad prevista en el Artículo 35, sin necesidad de pedido de verificación.
Dichos créditos no participan del fondo común previsto en el Artículo 168.
No son considerados los créditos entre los fallidos, comprendidos entre la masa única”.
ARTÍCULO 163.- Petición de la extensión. “La extensión de la quiebra puede pedirse por el síndico o por
cualquier acreedor.
La petición puede efectuarse en cualquier tiempo después de la declaración de la quiebra y hasta los SEIS
(6) meses posteriores a la fecha en que se presentó el informe general del síndico.
Este plazo de caducidad se extiende:
1) En caso de haberse producido votación negativa de un acuerdo preventivo hasta SEIS (6) meses después
del vencimiento del período de exclusividad previsto en el Artículo 43 o del vencimiento del plazo previsto
en el Artículo 48 inciso 4) según sea el caso.
2) En caso de no homologación, incumplimiento o nulidad de un acuerdo preventivo o resolutorio, hasta los
SEIS (6) meses posteriores a la fecha en que quedó firme la sentencia respectiva”.
ARTÍCULO 103.- Autorización para viajar al exterior. “Hasta la presentación del informe general, el fallido
y sus administradores no pueden ausentarse del país sin autorización judicial concedida en cada caso, la
que deberá ser otorgada cuando su presencia no sea requerida a los efectos del Artículo 102, o en caso de
necesidad y urgencia evidentes. Esa autorización no impide la prosecución del juicio y subsisten los efectos
del domicilio procesal.
Por resolución fundada el juez puede extender la interdicción de salida del país respecto de personas
determinadas, por un plazo que no puede exceder de SEIS (6) meses contados a partir de la fecha fijada
para la presentación del informe. La resolución es apelable en efecto devolutivo por las personas a quienes
afecte”.
RESTRICCIONES A LA CAPACIDAD.
A) Civil y profesional: La quiebra causa la inhabilitación del fallido, lo cual importa que está privado de
ejercer el comercio, ser administrador, gerente, liquidador o fundador de sociedades, asociaciones,
mutuales y fundaciones, así como no podrá integrar sociedades o ser factor con facultades generales de
ella.
Pero el fallido no es un muerto civil ni siquiera un incapaz, y además debe poder ganarse sustento, por lo
que sin perjuicio de los efectos del desapoderamiento y de la inhabilitación, el fallido conserva la facultad
de desempeñar tareas artesanales, profesionales, o en relación de dependencia.
Lo que el sujeto gane como consecuencia del desarrollo de actividades autorizadas, está sometido al
desapoderamiento; este encontrará el límite en las previsiones legales que establecen topes a la
embargabilidad de los salarios.
Si se abriera un nuevo concurso como consecuencia de las deudas posteriores a la quiebra pero anteriores
al cese de la inhabilitación, el desapoderamiento comprendería sólo los bienes que resten después de
liquidada la primera quiebra y, naturalmente, los que adquiera luego del cese de la inhabilitación de la
primera.
ARTICULO 104.- Desempeño de empleo, profesión y oficio. “El fallido conserva la facultad de desempeñar
tareas artesanales, profesionales o en relación de dependencia, sin perjuicio de lo dispuesto por los
Artículos 107 y 108, inciso 2.
Deudas posteriores. Las deudas contraídas mientras no esté rehabilitado, pueden dar lugar a nuevo
concurso, que sólo comprenderá los bienes remanentes una vez liquidada la quiebra y cumplida la
distribución y los adquiridos luego de la rehabilitación”.
Deben comparecer cada vez que el juez los cite para dar explicaciones y puede ordenarse su concurrencia
por la fuerza pública si mediare inasistencia”.
C) Efecto disolutorio de las sociedades comerciales: La sociedad se disuelve por la declaración de quiebra,
quedando la disolución sin efecto si se celebra avenimiento o acuerdo resolutorio. Cabe tener en cuenta
que la ley concursal vigente no contempla el acuerdo resolutorio.
Según la mayor parte de los autores, la disolución de la sociedad se produce ipso iure como un mero efecto
de la declaración de la quiebra, sin que sea necesaria la declaración de la disolución por los
administradores.
La sociedad subsiste como sujeto de derecho, conservando su personalidad hasta que termine la
liquidación.
Si la sociedad conserva su personalidad, es natural admitir:
- su resurrección si la quiebra concluye por avenimiento o aún por pago total.
- la subsistencia de los órganos sociales durante el trámite de la quiebra para que la sociedad esté
representada durante el mismo, pueda pedir la conversión de la quiebra en concurso preventivo, requerir
su conclusión por avenimiento o por pago total, observar los pedidos de verificación de créditos, observar
el informe general, interponer recursos contra la sentencia de quiebra y, ejercer la legitimación que la ley
reconoce al fallido.
Los socios o accionistas no pueden actuar por sí, sino a través de los órganos sociales, por lo que aquellos
pueden convocar a asambleas de la sociedad fallida para elegir directorio.
3- INHABILITACIÓN.
A) Fundamento:
ARTÍCULO 234.- Inhabilitación. “El fallido queda inhabilitado desde la fecha de la quiebra”.
ARTÍCULO 235.- Personas jurídicas. “En el caso de quiebra de personas jurídicas, la inhabilitación se
extiende a las personas físicas que hubieren integrado sus órganos de administración desde la fecha de
cesación de pagos. A este efecto, no rige el límite temporal previsto en el Artículo 116.
Comienzo de la inhabilitación. La inhabilitación de quienes son integrantes del órgano de administración o
administradores a la fecha de la quiebra, tiene efecto a partir de esa fecha. La de quienes se hubiesen
desempeñado como tales desde la fecha de cesación de pagos pero no lo hicieron a la fecha de la quiebra,
comenzará a tener efecto a partir de que quede firme la fecha de cesación de pagos en los términos del
artículo 117”.
Plazo:
- Si se trata de una persona física, estará inhabilitada durante un año a partir de la sentencia de quiebra.
- Si se trata de una persona jurídica, la inhabilitación será definitiva a partir de la sentencia de quiebra y se
extenderá a las personas físicas que, desde la fecha de cesación de pagos hubiesen integrado los órganos
de administración.
El año de inhabilitación para los integrantes del órgano de administración de la persona jurídica fallida se
contabiliza:
- Integrantes del órgano de administración al momento de la sentencia de quiebra: el año se contabiliza
desde la sentencia de quiebra.
- Integrantes del órgano de administración entre la cesación de pagos y la sentencia: el año de
inhabilitación se contabiliza desde el día que el Juez fija como comienzo del estado de cesación de pagos.
Reducción y prorroga del mismo. Supuestos legales: Las inhabilitaciones, como regla, duran 1 año contado
a partir de la entrada en operatividad de las mismas según fuera el caso. Excepcionalmente, el plazo puede
ser considerado de las dos maneras siguientes:
- Menor: cuando lo solicitare el interesado y, con vista al síndico, así lo decidiere el Juez luego de una
apreciación de la verosimilitud de que la persona inhabilitada no estuviera incursa en delito penal.
- Mayor: en el caso de procesamiento penal de la persona inhabilitada, supuesto en que la inhabilitación se
restablece si hubiese cesado antes o se prorroga si no hubiese vencido, y extiendese hasta el
sobreseimiento o absolución o, de mediar condena penal, hasta terminar la inhabilitación accesoria
impuesta en sede penal.
ARTÍCULO 236.- Duración de la inhabilitación. “La inhabilitación del fallido y de los integrantes del órgano
de administración o administradores de la persona de existencia ideal, cesa de pleno derecho, al año de la
fecha de la sentencia de quiebra, o de que fuere fijada la fecha de cesación de pagos conforme lo previsto
en el artículo 235, segundo párrafo, salvo que se de alguno de los supuestos de reducción o prórroga a que
aluden los párrafos siguientes.
Ese plazo puede ser reducido o dejado sin efecto por el juez, a pedido de parte, y previa vista al síndico si,
verosímilmente, el inhabilitado -a criterio del Magistrado- no estuviere prima facie incurso en delito penal.
La inhabilitación se prorroga o retoma su vigencia si el inhabilitado es sometido a proceso penal, supuesto
en el cual dura hasta el dictado de sobreseimiento o absolución. Si mediare condena, dura hasta el
cumplimiento de la accesoria de inhabilitación que imponga el juez penal”.
Trámite: El plazo puede ser reducido o dejado sin efecto a pedido de parte si el Juez prima facie entiende
que el inhabilitado no cometió delito penal.
El plazo se extiende o vuelve a tener vigencia si el inhabilitado es procesado penalmente, debiendo
entenderse que el acto que marca el comienzo del proceso es el auto de procesamiento. Se ha sostenido
que el llamado a prestar declaración indagatoria constituye el acto inicial del sometimiento a proceso que
requiere la Ley de Concursos y permite en consecuencia decidir la prolongación del plazo de inhabilitación
hasta que se resuelva el sobreseimiento del sujeto o su absolución.
Si es condenado, dura hasta el cumplimiento de la pena de inhabilitación especial.
Inhabilitación definitiva de personas jurídicas: La rehabilitación de la persona jurídica fallida sólo es posible
en caso de conversión de la quiebra o de conclusión no liquidativa de la misma. En caso de conclusión de
quiebra por liquidación del activo falencia, la disolución de la persona jurídica es irreversible por lo que no
hay rehabilitación posible.
ARTÍCULO 237.- Duración de la inhabilitación. “La inhabilitación de las personas jurídicas es definitiva,
salvo que medie conversión en los términos del Artículo 90 admitida por el juez, o conclusión de la quiebra”.
C) efectos:
La inhabilitación que opera de pleno derecho como consecuencia de la quiebra tiene naturaleza
sancionatoria.
La inhabilitación rige desde la fecha de la sentencia que declara la quiebra.
Al interrogante de si la sentencia de quiebra debe encontrarse firme parte de la doctrina entiende que no
se requiere que tal sentencia lo esté, aunque en sentido contrario también se ha postulado que es
menester que la sentencia reúna tal condición.
La inhabilitación es un instituto que evoca ecos penales, y el artículo 238 de la LCQ que trata sus efectos,
no enumera de modo completo las incapacidades personales o patrimoniales que acarrea y que se
encuentran dispersas en diversas leyes:
- No puede ser tutor ni curador (Código CyC).
- No puede ser testigo en instrumentos públicos (Código CyC).
- No puede ser albacea (Código CyC).
- No puede ser director, síndico o integrante del consejo de vigilancia de sociedades anónimas (ley 19.550,
ley de sociedades).
- No están habilitados para ser escribanos (ley 12.990).
- Entre otros.
ARTICULO 238.- Efectos. “Además de los efectos previsto en esta ley o en leyes especiales, el inhabilitado
no puede ejercer el comercio por sí o por interpósita persona, ser administrador, gerente, síndico,
liquidador, o fundador de sociedades, asociaciones, mutuales y fundaciones. Tampoco podrá integrar
sociedades o ser factor o apoderado con facultades generales de ellas”.
Forma en que opera: Cesa de pleno derecho, sin embargo es necesario una resolución judicial para probar
dicho cese ante quien corresponda.
DESAPODERAMIENTO:
A) Concepto: El desapoderamiento es el principal efecto patrimonial de la quiebra pues, los bienes objeto
del desapoderamiento serán enajenados y el dinero obtenido como precio de las enajenaciones será
distribuido entre los acreedores.
De modo que entre la declaración de quiebra y la realización de las enajenaciones de los bienes que
integran el patrimonio del fallido es necesario asegurar que no se modifique el contenido del patrimonio.
De allí que el desapoderamiento implica:
- La ocupación de los bienes que integran el patrimonio del fallido, lo que se logra a través de la
incautación que hace el síndico.
- La privación de la legitimación del fallido para otorgar actos de administración o disposición sobre tales
bienes, de modo que los actos celebrados después de la quiebra son inoponible de pleno derecho a los
acreedores.
Desapoderamiento
ARTÍCULO 106.- Fecha de aplicación. “La sentencia de quiebra importa la aplicación inmediata de las
medidas contenidas en esta sección”.
ARTÍCULO 107.- Concepto y extensión. “El fallido queda desapoderado de pleno derecho de sus bienes
existentes a la fecha de la declaración de la quiebra y de los que adquiriera hasta su rehabilitación. El
desapoderamiento impide que ejercite los derechos de disposición y administración”.
B) Esencia jurídica. Teorías: Las tesis sobre la naturaleza del desapoderamiento son innumerables, por lo
que hoy existe coincidencia en algunos puntos importantes:
- El desapoderamiento no importa la privación de la propiedad, la transmisión de la propiedad al
adquirente la hace el fallido al tiempo de la enajenación forzada.
- El desapoderamiento no importa privación de la posesión, sino solamente del corpus posesorio.
- El síndico tiene los bienes bajo su poder con finalidad de administración y para participar de los actos de
enajenación.
- El fallido no es un incapaz, la ineficacia de los actos que el otorgue sobre bienes materia del
desapoderamiento es sólo una consecuencia de ese desapoderamiento.
Las teorías que se encuentran, entre otras, son:
·Teoría del secuestro. El desapoderamiento no puede ser asimilado al secuestro; así como no puede
parangonarse al síndico con un depositario judicial, los efectos y fines de la quiebra son tan graves y
complejos que sería imposible receptar esta teoría.
·Teoría de la prenda. Se formularía una communio incidens pignoraticia entre los acreedores. Crítica: a) la
formulación histórica, como se ha visto, no corresponde al instituto prendario; b)
el concepto de garantía común va en sentido genérico, no técnico; c) en caso activo insuficiente,
los acreedores deben soportar una pérdida proporcional, lo que es incompatible con la prenda.
·Teoría de la expropiación. Se ha querido ver en el desapoderamiento una
verdadera expropiación del deudor, una pérdida de la propiedad que pasaría un nuevo ente, persona
jurídica, si bien temporaria, que sería procesalmente la quiebra. Crítica: no hay necesidad alguna para
los acreedores de quitar al deudor una propiedad con la cual no sabrían que hacer. El deudor puede
siempre disponer de sus bienes si con su producido satisface a sus acreedores, correspondiéndole además
el excedente que pudiera producirse respecto de las deudas.
·Teoría del embargo. La posición doctrinaria mas aceptada actualmente es la que asimila
el desapoderamiento al concepto de embargo extendido al patrimonio en su totalidad.
El embargo tanto se adapta a un fin preventivo como ejecutivo. Debe tenerse presente, asimismo, la
noción de sustitución en el sentido de explicar la inserción del órgano de la quiebra en la disponibilidad de
las relaciones que se entroncan con el patrimonio del quebrado.
- Bienes excluidos: El artículo primero consagra el principio de universalidad objetiva: el concurso produce
sus efectos sobre la totalidad del patrimonio del deudor. En el artículo 108 LCQ se determinan las
excepciones a ese principio, enumerándose los bienes excluidos del desapoderamiento. La interpretación
de estas exclusiones debe ser restrictiva por ser excepciones a una norma básica concursal (la
universalidad), y por ser también excepciones al principio general del derecho privado consistente en
reconocer al patrimonio del deudor como la garantía común de sus acreedores.
La ley excluye del desapoderamiento a los derechos no patrimoniales, lo que comprende a los derechos de
la personalidad y los derechos de familia.
Esta disposición debe integrarse con el inciso 6 que impide la agresión de los acreedores sobre las
indemnizaciones que correspondan al fallido por daños materiales o morales a su persona. Por lo tanto, el
fallido conserva la legitimación para iniciar o continuar la acción destinada a obtener una indemnización
por un daño material o moral a la persona. Esta última solución surge explícita del inciso 5 del mismo
artículo 108, pues también está excluida del desapoderamiento la facultad de actuar en justicia, en
defensa de bienes y derechos que no caen en el desapoderamiento y en cuanto por la ley se admite su
intervención en particular. Es indiferente que el acto lesivo de los derechos del fallido sea anterior o
posterior a la quiebra.
Con relación a los derechos emanados de las relaciones de familia, el crédito por alimentos es
inembargable y por ello excluido del desapoderamiento.
Los incisos 2 y 7 del artículo 108 eximen del desapoderamiento a los bienes inembargables y a los
excluidos por otras leyes.
Entre los bienes inembargables se encuentran:
- el lecho cotidiano del deudor, su familia y sus hijos, las ropas y muebles de su indispensable uso, los
instrumentos necesarios para su profesión, arte u oficio.
- los sueldos y salarios que sólo son embargables hasta un 20%, salvo cuando lo sean por obligación
alimentaria.
- las jubilaciones y pensiones son totalmente inembargables.
- las indemnizaciones por accidentes de trabajo, despido y falta de preaviso.
- los muebles y útiles domésticos dela agricultor, y sus instrumentos, útiles y animales de labranza.
El código procesal dispone la inembargabilidad de los bienes de indispensable uso del deudor. La
jurisprudencia ha sostenido que el carácter de indispensable está determinado por el destino del bien de
que se trate en conjugación con el nivel medio de vida alcanzado por la comunidad.
El inciso 4 del artículo 108 excluye del desapoderamiento la administración de los bienes propios del
cónyuge. En nuestro ordenamiento cada cónyuge tiene la administración de sus bienes propios y de los
gananciales que adquiere. En función de lo cual, para que uno de los cónyuges pueda administrar los
bienes propios del otro, es necesario que exista un mandato expreso o tácito. La solución de la ley
concursal significa entonces que ese mandato, de existir, no se extingue por la quiebra.
Quien responde por las deudas es el cónyuge que las ha contraído, pues el acreedor contrató con una
persona y no con la sociedad conyugal, la cual no es una persona jurídica.
La excepción es que un cónyuge sólo responde con los frutos de sus bienes propios y con los frutos de los
bienes gananciales que administre, por las obligaciones contraídas por el otro, cuando sean contraídas
para atender las necesidades del hogar, para la educación de los hijos, o para la conservación de los bienes
comunes.
· Los actos conservatorios: El síndico será quien reciba los bienes tras la incautación. Luego de tomar
posesión de los bienes deberá encargarse de la conservación, administración y, en ciertos casos, de la
disposición de los mismos.
Facultades y deberes del síndico:
- cuando los bienes se encuentren en locales que no ofrezcan seguridad para la conservación y custodia, el
síndico deberá peticionar al Juez todas las medidas necesarias para lograr esos fines. Incluso deberá
practicar directamente las medidas que sean más urgentes.
- deberá procurar el cobro de los créditos adeudados al fallido e iniciar los juicios necesarios para su
percepción, como así también requerir las medidas conservatorias judiciales y practicar las extrajudiciales.
- podrá otorgar quitas, esperas, novaciones y someter cuestiones a árbitros, pero para ello deberá contar
con la autorización del Juez.
- deberá pedir al Juez la venta inmediata de los bienes perecederos, de los que estén expuestos a una gran
disminución del precio, y de los que resulte muy cara su conservación.
- deberá pedir al Juez la venta de bienes para obtener fondos cuando los existentes no alcanzaren para
cubrir los gastos del juicio.
-podrá realizar los contratos que resulten necesarios para la conservación y administración de los bienes,
previa autorización judicial. Incluso podrá realizar contratos sin autorización judicial cuando se trate de una
situación de urgencia.
-podrá realizar contratos de locación o cualquier otro contrato sobre bienes con el fin de obtener frutos,
previa autorización del Juez.
Las sumas de dinero que se perciban deberán ser depositadas a la orden del Juez en el banco de depósitos
judiciales correspondiente dentro de los tres días.
· La legitimación procesal: La regla general es que el fallido pierde la legitimación procesal en todo litigio
referido a los bienes desapoderados, debiendo actuar en ellos el síndico.
El inciso 5 del artículo 108 reconoce que el fallido conserva la titularidad de las acciones judiciales que
correspondan a bienes y derechos que no caen en el desapoderamiento.
Se ha ampliado la legitimación del fallido, al admitir su participación en el proceso de verificación de los
créditos, con lo cual puede formular observaciones a las insinuaciones hechas por los acreedores, así como
hacerse parte en los incidentes de verificación tardía y en los de revisión. No es necesario correr traslado al
fallido de todos estos incidentes, sino que es facultad de él hacerse parte en ellos. El fallido tiene además
legitimación para:
- cuestionar la fecha de cesación de pagos propuesta por el síndico y apelar la resolución que la fija
(artículo 117 LCQ).
- para recurrir la sentencia que declara la imponibilidad (artículo 118 LCQ).
- ser parte necesaria en las acciones de declaración de ineficacia, y por lo tanto puede recurrir la sentencia
que se dicte (artículo 119 LCQ).
- participar en el trámite de restitución de bienes de terceros (artículo 188 LCQ).
- participar de la decisión de transmitir a entidades de bien público los bienes invendibles (artículo 214
LCQ).
- observar el informe final (artículo 218 LCQ).
- requerir la conclusión de la quiebra por avenimiento o pago total (artículo 225, 228 y 229 LCQ).
ARTÍCULO 109.- Administración y disposición de los bienes. “El síndico tiene la administración de los
bienes y participa de su disposición en la medida fijada en esta ley.
Los actos realizados por el fallido sobre los bienes desapoderados, así como los pagos que hiciere o
recibiere, son ineficaces. La declaración de ineficacia es declarada de conformidad a lo dispuesto en el
Artículo 119, penúltimo párrafo”.
ARTÍCULO 110.- Legitimación procesal del fallido. “El fallido pierde la legitimación procesal en todo litigio
referido a los bienes desapoderados, debiendo actuar en ellos el síndico. Puede, sin embargo, solicitar
medidas conservatorias judiciales hasta tanto el síndico se apersone, y realizar las extrajudiciales en
omisión del síndico.
Puede también formular observaciones en los términos del Artículo 35 respecto de los créditos que
pretendan verificarse, hacerse parte en los incidentes de revisión y de verificación tardía, y hacer
presentaciones relativas a la actuación de los órganos del concurso”.
ARTÍCULO 111.- Herencia y legados: aceptación o repudiación. “El fallido puede aceptar o repudiar
herencia o legados.
En caso de aceptación, los acreedores del causante sólo pueden proceder sobre los bienes desapoderados,
después de pagados los del fallido y los gastos del concurso.
La repudiación sólo produce sus efectos en lo que exceda del interés de los acreedores y los gastos íntegros
del concurso. En todos los casos actúa el síndico en los trámites del sucesorio en que esté comprometido el
interés del concurso”.
ARTÍCULO 112.- Legados y donaciones: condiciones. “La condición de que los bienes legados o donados no
queden comprendidos en el desapoderamiento es ineficaz respecto de los acreedores, sin perjuicio de la
subsistencia de la donación o legado, de las otras cargas o condiciones y de la aplicación del artículo
anterior”.
ARTÍCULO 113.- Donación posterior a la quiebra. “Los bienes donados al fallido con posterioridad a la
declaración en quiebra y hasta su rehabilitación, ingresan al concurso y quedan sometido al
desapoderamiento.
Si la donación fuera con cargo, el síndico puede rechazar la donación; si la admite debe cumplir el cargo por
cuenta del concurso. En ambos casos debe requerir previa autorización judicial.
Si el síndico rechaza la donación, el fallido puede aceptarla para sí mismo, en cuyo caso el donante no tiene
derecho alguno respecto del concurso”.
Si el fallido no rehabilitado hereda el eventual beneficio económico derivado de la adquisición mortis causa
de bienes, tiene como destinatarios a los acreedores en primer lugar. De ahí que si bien el fallido puede
aceptar o repudiar herencias o legados, ello tiene como límite el interés de los acreedores concurrentes en
la quiebra. Si la repudiación perjudicase ese interés, ella sería de ningún efecto e inoponible a los
acreedores.
Los acreedores del fallido y los gastos de conservación y de justicia de su quiebra sólo pueden aspirar a
haber incrementado el activo falencial, con el importe o la cantidad de bienes del causante que quedasen
después de atendidos sus créditos y los gastos de la sucesión. En otras palabras, sobre los bienes del
causante no se establece una concurrencia entre sus acreedores y los del heredero fallido. Primero, como
efecto propio del beneficio de inventario, se atienden las deudas del causante y las cargas del sucesorio y
luego, el remanente es lo que ingresa al activo desapoderable.
En cuanto pudiera estar comprometido el interés de los acreedores del fallido heredero, el síndico de su
quiebra tiene legitimación procesal para intervenir en el juicio sucesorio del causante del quebrado.
Cualquier cláusula incluida en una donación o en un legado, por la cual el donante o causante
condicionasen la efectivización de aquellos a que no existiera quiebra del donatario o legatario, o
pretendiese excluir del desapoderamiento al objeto de la liberalidad, resulta inoponible a los acreedores
del fallido.
Los bienes adquiridos por el fallido, después de la quiebra y antes de su rehabilitación, son desapoderables
con miras a su liquidación a fin de satisfacer el pasivo falencial. Entre esos bienes cabe computar los
adquiridos por donación. Esta, tiene que favorecer y no perjudicar a los acreedores concurrentes.
Si la donación es con cargo, el síndico debe evaluar la incidencia económica de cumplir éste a fin de decidir
la conveniencia o no, de la aceptación de aquella. Cualquiera que fuese la opinión del síndico, debe pedir
autorización judicial.
Si la donación con cargo es rechazada por el síndico, el fallido igualmente podría aceptarla, pero el
cumplimiento del cargo es por cuenta de éste.
ARTÍCULO 2289.- Intimación a aceptar o renunciar. “Cualquier interesado puede solicitar judicialmente
que el heredero sea intimado a aceptar o renunciar la herencia en un plazo no menor de un mes ni mayor
de tres meses, renovable una sola vez por justa causa. Transcurrido el plazo sin haber respondido la
intimación, se lo tiene por aceptante.
La intimación no puede ser hecha hasta pasados nueve días de la muerte del causante, sin perjuicio de que
los interesados soliciten las medidas necesarias para resguardar sus derechos.
Si el heredero ha sido instituido bajo condición suspensiva, la intimación sólo puede hacerse una vez
cumplida la condición”.
ARTÍCULO 2292.- Acción de los acreedores del heredero. “Si el heredero renuncia a la herencia en perjuicio
de sus acreedores, éstos pueden hacerse autorizar judicialmente para aceptarla en su nombre.
En tal caso, la aceptación sólo tiene lugar a favor de los acreedores que la formulan y hasta la concurrencia
del monto de sus créditos”.
La correspondencia dirigida al fallido: Al decretar la quiebra, el Juez libra un oficio a la empresa de correos
para que la correspondencia dirigida al fallido sea remitida al síndico. Este deberá abrirla en presencia del
fallido o del Juez, entregando al interesado la que fuere estrictamente personal. Esto tiene como fin
detectar bienes del fallido, por ejemplo, resúmenes de cuentas bancarias, boletas de impuestos de
inmuebles, etcétera.
Si bien el respeto a la inviolabilidad de la correspondencia encuentra sustento en el artículo 18 de la
Constitución Nacional, que protege la correspondencia epistolar y los papeles privados, esta misma
disposición establece que por ley podrá determinarse en qué casos y con qué justificativos podrá proceder
a su allanamiento y ocupación.
ARTÍCULO 114 LCQ.- Correspondencia. “La correspondencia y las comunicaciones dirigidas al fallido deben
ser entregadas al síndico. Este debe abrirlas en presencia del concursado o en la del juez en su defecto,
entregándose al interesado la que fuere estrictamente personal”.
· Waldemar Ferreyra dice: no hay sociedad sin affectio societatis. Los acreedores no se asocian. No tienen
patrimonio, éste es del deudor fallido. Tampoco es una asociación, debido a que la misma no nace de la
libre voluntad de los acreedores.
· Carvalho Mendoca dice: no es una asociación libre y voluntaria, sino que es fortuita, creada por la
necesidad, protegida, organizada y disciplinada por la ley.
· Para Delamarre y Lepoitvin no es sociedad, sino un consortium legal y accidental. Sostiene que se trata
“de una comunidad forzada y fortuita que tiene por doble fin la disminución de la pérdida de todos y la
contribución de todos “pro modo crediti cujusque” a la prenda común que se presume segura”.
· En nuestro derecho Rivarola opina que la masa es una entidad colectiva formada por el ministerio de la
ley y regulada por ésta en su constitución y funcionamiento.
· Dentro de la misma tendencia Ripert afirma que la agrupación de los acreedores es obligatoria y tiene
una organización legal. Está administrada, no por un representante de los acreedores, sino por un
mandatario de la justicia, que es el síndico; las juntas generales, el cálculo de la mayoría, la homologación
de las decisiones, todo ello está regulado por la ley.
· La Comisión del Senado de 1902 adoptó el criterio de una sociedad legal accidental.
Al referirse a la naturaleza jurídica del concordato sostuvo que el juicio de quiebra crea para los
acreedores, una sociedad legal accidental, cuyo capital es el activo del deudor y cuyos socios son los
acreedores comunes por el valor de sus créditos respectivos.
BOLILLA XV
1- EL PERÍODO DE SOSPECHA:
A) CONCEPTO: Se denomina tal al periodo de tiempo que transcurre entre la fecha en que se ha
exteriorizado la cesación de pagos y la sentencia de quiebra.
En el derecho argentino la fecha inicial de la cesación de pagos la fija el juez de acuerdo un procedimiento
legalmente establecido. El juez determina como fecha inicial de cesación de pagos aquella en que se
constate un acontecimiento que exterioriza el estado de impotencia patrimonial, no teniendo para ello
límite temporal alguno. Pero el periodo de sospecha no puede exceder de dos años contados desde la
fecha de la sentencia de quiebra o desde la presentación del concurso preventivo si este la ha precedido.
TRÁMITES: Quien solicita la apertura de su concurso preventivo o la declaración de su propia quiebra, debe
denunciar la fecha aproximada de la cesación de pagos.
El síndico debe expresar en el informe general la época en que se produjo la cesación de pagos, precisando
hechos y circunstancias que fundamentan el dictamen.
El artículo 40 fija en diez días el plazo para efectuar observaciones al informe general previsto en el
artículo 39, ese plazo se extiende a treinta días para lo que se refiere a la exteriorización de la cesación de
pagos. De todos modos, si algún interesado hubiese hecho observaciones al informe general y en ellas
incluyese cuestiones relativas a la fecha de cesación de pagos, aquellas son parte del incidente que debe
formarse con traslado al síndico.
Los interesados en efectuar las observaciones son los acreedores de cualquier tipo (quirografarios o
privilegiados, verificados, admisibles, inadmisibles que tengan interpuesta revisión, verificantes tardíos), el
fallido, los administradores del fallido y los terceros que pudieran verse afectados por la retroacción.
El juez puede ordenar la prueba. El “puede” no implica una potestad que el tribunal este autorizado para
ejercer discrecionalmente, sino que es una atribución que ha de utilizar cuando existan hechos
controvertidos relevantes.
PARTES:
EFECTOS: La fecha que se fije hace cosa juzgada respecto del fallido, de los acreedores y de los terceros
que intervinieron en su determinación, y es presunción que admite prueba en contrario para los terceros
que no intervinieron.
ARTÍCULO 115.- Fecha de cesación de pagos: efectos. “La fecha que se determine por resolución firme
como de iniciación de la cesación de pagos, hace cosa juzgada respecto del fallido, de los acreedores y de
los terceros que intervinieron en el trámite para su determinación y es presunción admite prueba contraria
respecto de los terceros que no intervinieron.
Cuando la quiebra se declare por alguna de las causas es del Artículo 77, inciso 1, o estando pendiente el
cumplimiento de un acuerdo preventivo, la fecha a determinar es la que corresponda a la iniciación de la
cesación de pagos, anterior a la presentación indicada en el Artículo 11.”
ARTÍCULO 116.- Fecha de cesación de pagos: retroacción. “La fijación de la fecha de iniciación de la
cesación de pagos no puede retrotraerse a los efectos previstos por esta sección, más allá de los DOS (2)
años de la fecha del auto de quiebra o de presentación en concurso preventivo.
Período de sospecha. Denomínase período de sospecha al que transcurre entre la fecha que se determine
como iniciación de la cesación de pagos y la sentencia de quiebra.”
ARTÍCULO 117.-Cesación de pagos: determinación de su fecha inicial. “Dentro de los TREINTA (30) días
posteriores a la presentación del informe general, los interesados pueden observar la fecha inicial del
estado de cesación de pagos propuesta por el síndico.
Los escritos se presentan por triplicado y de ellos se da traslado al síndico, junto con los que sobre el
particular se hubieren presentado de acuerdo con el Artículo 40.
El juez puede ordenar la prueba que estime necesaria.
La resolución que fija la fecha de iniciación de la cesación de pagos es apelables por quienes hayan
intervenido en la articulación y por el fallido”.
2. NULIDADES E INEFICACIA.
1- CONCEPTO. DIFERENCIAS. RÉGIMEN DE LA LEY VIGENTE: MODIFICACIONES.
2- ACTOS DE ADMINISTRACIÓN ORDINARIA REALIZADOS DURANTE EL CONCURSO PREVENTIVO.
2. NULIDADES E INEFICACIA.
1- CONCEPTO: La ley alude a la declaración de ineficacia de los actos otorgados en los periodos de
sospecha.
En sentido amplio la ineficacia comprende todo supuesto en que un acto jurídico es privado de efectos,
sea total o parcialmente, sea entre las partes que lo han otorgado, sea frente a todos o ciertos terceros. Así
se incluyen en esta noción la invalides (nulidad, anulabilidad), la inexistencia (para quienes consideran que
esta es una categoría admitida en el derecho patrimonial), la inoponibilidad así como la revocación, la
resolución y la recisión.
En cambio la ineficacia en sentido estricto comprende solo a los actos validos que por otras razones no
producen algunos efectos que les son propios.
Es claro que la ineficacia concursal no se compadece con la invalides (nulidad).
De modo que la ineficacia concursal es un supuesto de ineficacia en sentido estricto y dentro de esta idea
pertenece a la categoría de la inoponibilidad, de donde la sentencia que se dicte no anula el acto sino que
dispone la ineficacia frente a los acreedores exclusivamente, conservando valides entre partes.
En general, son susceptibles de ser declarados ineficaces:
- Válidos, por lo que si el acto es nulo la inoponibilidad queda absorbida por la nulidad.
- Positivos o de actuación: por regla general las conductas omisivas del deudor generan la posibilidad
del ejercicio de la acción subrogatoria y no de la pauliana o la ineficacia concursal.
- De enajenación.
- Aunque los derechos o intereses sean perfectos o no, por lo cual puede ser declarado ineficaz el no
haber ejercido un derecho de tanteo u opción.
- Los actos otorgados en el periodo de sospecha, son susceptibles de ser declarados ineficaces de
puro derecho.
- Los actos perjudiciales para los acreedores, otorgados en el periodo de sospecha, mediando
conocimiento del sujeto in bonis del esta de cesación de pagos de la contraparte, cuya declaración
se persigue por proceso de conocimiento para el cual halla legitimado el síndico y los acreedores
individualmente en caso de inacción del funcionario.
- Todos los actos de administración o disposición otorgados por el fallido después de la declaración
de quiebra.
- Los pagos hechos al acreedor peticionante de la quiebra, que la ley presume hechos en beneficio de
la masa.
Pero el acto que normalmente queda sancionado por la ineficacia es la constitución, en período de
sospecha, de garantías reales en favor de créditos originariamente quirografarios. No quedan
comprendidos en la hipótesis legal:
- El derecho real constituido antes del periodo de sospecha, aunque haya sido inscripto después.
- El derecho real que ha sido prometido en el acto de otorgamiento del crédito, aunque haya sido
constituido después.
- Las hipotecas o prendas constituidas en garantías de deudas que estuvieren vencidas al tiempo de
la constitución del derecho real.
- El juez debe contar con elementos de juicio suficientes para reputar acreditada la existencia de
alguno de los actos susceptibles de ser declarados ineficaces.
- La ineficacia tiende a proteger a los acreedores, por lo que el acto se declara inoponible en interés
de aquellos.
- El agraviado por la decisión sobre ineficacia puede recurrir ante el mismo juez del concurso por vía
incidental, o directamente apelar ante el superior sin interponer recurso de reposición previa.
FUNDAMENTO: En los actos a título gratuito es palmario el perjuicio para los acreedores en razón del
empobrecimiento del patrimonio del deudor.
En el pago anticipado y en la constitución de garantías, el fundamento está en la violación del principio de
igualdad de los acreedores.
ACTOS INEFICACES DE PURO DERECHO:
- Actos a título gratuito: la expresión “actos a título gratuito” debe ser entendida en forma lata, pues
lo relevante es el hecho de conferir a un tercero un derecho patrimonial sin recibir el correlativo
valor pecuniario o sin que esa concesión este fundad en un deber legal.
- Pago anticipado de deudas: la ley contempla el pago anticipado de deuda en el supuesto de que el
vencimiento debiese haber ocurrido con posterioridad a la fecha de la quiebra, hecho que debe ser
probado por el síndico o quien pretenda la declaración de ineficacia.
Quedan comprendidos los pagos de obligaciones sometidas a condición suspensiva que se hubieren hecho
antes del cumplimiento de la condición, lo mismo que el pago de obligaciones naturales. No excusa la
sanción legal el hecho de haber recibido descuentos o bonificaciones como consecuencia del pago
anticipado.
No quedan comprendidos los pagos de obligaciones muñidas de garantías reales, pues de declararse la
ineficacia renacería el gravamen real. Tampoco son inoponibles los pagos hechos en razón de sentencias
judiciales ni los que son consecuencia de previsiones contractuales que imponen la caducidad de plazo.
Tampoco cuando el plazo ha sido concebido en beneficio del acreedor y este lo renuncia.
El acto que normalmente queda sancionado por la ineficacia es la constitución, en periodo de sospecha, de
garantías reales en favor de créditos originariamente quirografarios.
DISCIPLINA LEGAL:
ARTÍCULO 118.- Actos ineficaces de pleno derecho. “Son ineficaces respecto de los acreedores los actos
realizados por el deudor en el período de sospecha, que consistan en:
1) Actos a título gratuito;
2) Pago anticipado de deudas cuyo vencimiento según el título debía producirse en el día de la quiebra o
con posterioridad;
3) Constitución de hipoteca o prenda o cualquier otra preferencia, respecto de obligación no vencida que
originariamente no tenía esa garantía.
La declaración de ineficacia se pronuncia sin necesidad de acción o petición o expresa y sin tramitación. La
resolución es apelable y recurrible por vía incidental.”
Los actos a título oneroso realizados por el fallido en el período de sospecha, también pueden ser
declarados ineficaces. Se aplican las siguientes consideraciones:
REGULACIÓN LEGAL:
ARTICULO 119.-Actos ineficaces por conocimiento de la cesación de pagos. “Los demás actos perjudiciales
para los acreedores, otorgados en el período de sospecha pueden ser declarados ineficaces respecto de los
acreedores, si quien celebro el acto con el fallido tenía conocimiento del estado de cesación de pagos del
deudor. El tercero debe probar que el acto no causó perjuicio.
Esta declaración debe reclamarse por acción que se deduce ante el juez de la quiebra y tramita por vía
ordinaria, salvo que por acuerdo de partes se opte por hacerlo por incidente.
La acción es ejercida por el síndico; está sujeta a autorización previa de la mayoría simple del capital
quirografario verificado y declarado admisible y no está sometida a tributo previo, sin perjuicio de su pago
por quien resulte vencido; en su caso el crédito por la tasa de justicia tendrá la preferencia del Artículo 240.
La acción perime a los SEIS (6) meses.”
NATURALEZA:
AUTORIZACIÓN PREVIA: La legitimación debe integrarse con la autorización que debe ser otorgada por los
acreedores que representen la mayoría simple del capital quirografario y declarado admisible. Se excluye
del cómputo al acreedor que pudiera ser demandado por vía de esta acción.
RECAUDOS DE PROCEDENCIA:
-Que el acto haya sido otorgado en período de sospecha;
-Que el co-contratante del fallido hubiera tenido conocimiento de la cesación de pagos de éste al tiempo
de contratar;
TRÁMITE: es competente el juez de la quiebra y la acción tramita por vía ordinaria, salvo acuerdo de partes
para hacerlo por incidente.
SUJETOS:
PLAZOS:
PRUEBA: mantiene pleno vigor la jurisprudencia elaborada durante la vigencia de la ley anterior, en el
sentido de que la prueba del conocimiento de la cesación de pagos incumbe al síndico, la que puede
producirse por cualquier medio, incluso presunciones, pues normalmente será muy difícil la prueba
directa.
RESOLUCIÓN JUDICIAL:
EFECTOS:
DERECHO DE LOS ACREEDORES: la exigencia de autorización previa de los acreedores requerida tanto por
el artículo 119, como por el artículo 174 precisa, para dar pleno cumplimiento al recaudo de
proponibilidad de dichas acciones, que los acreedores sean notificados por un medio que garantice que
han tomado real conocimiento de la pretensión del síndico. Por ende, no basta para ello la mera
notificación ministerio legis del auto que dispone hacer saber la existencia de la pretensión del síndico, ya
que de este modo, no se asegura que sean los propios acreedores quienes juzguen sobre la conveniencia
de promover la acción de responsabilidad, en función del mayor o menor riesgo de soportar las costas. El
silencio de los acreedores no puede ser interpretado como consentimiento o autorización, a menos que el
tribunal así lo hubiere establecido en el auto respectivo.
ARTÍCULO 120.- Acción por los acreedores. “Sin perjuicio de la responsabilidad del síndico, cualquier
acreedor interesado puede deducir a su costa esta acción, después de transcurridos TREINTA (30) días
desde que haya intimado judicialmente a aquél para que la inicie.
El acreedor que promueve esta acción no puede requerir beneficio de litigar sin gastos y, a pedido de parte
y en cualquier estado del juicio, el juez puede ordenar que el tercero afiance las eventuales costas del
proceso a cuyo efecto las estimará provisionalmente. No prestada la caución, el juicio se tiene por desistido
con costas al accionante.
Revocatoria ordinaria. La acción regulada por los Artículos 961 a 972 del Código Civil, sólo puede ser
intentada o continuada por los acreedores después de haber intimado al síndico para que la inicie o
prosiga, sustituyendo al actor, en el término de TREINTA (30) días.
Efectos. En ambos casos si se declara la ineficacia, el acreedor tiene derecho al resarcimiento de sus gastos
y a una preferencia especial sobre los bienes recuperados, que determina el juez entre la tercera y la
décima parte del producido de éstos, con limite en el monto de su crédito.”
EFECTOS:
COSTAS:
El fundamento de la conformidad previa para las acciones promovidas por la sindicatura es el riesgo de
costas, distinto es el caso de la acción intentada por el acreedor donde los riesgos son a su costa; por lo
tanto, desaparece la exigencia de autorización previa en esta hipótesis y bastara que luego de la intimación
el síndico no obtenga la conformidad que requiere el artículo 119 LCQ para que el acreedor esté habilitado
a promover la acción soportando gastos y riesgos.
El acreedor asume en estos casos los riesgos del proceso, por lo que a fin de evitar que la acción sea
ejercida por acreedores insolventes que puedan intentar verdaderas aventuras procesales, es que se le
impone la restricción de no poder recurrir al beneficio de litigar sin gastos, así como se faculta al juez a que
pueda exigir en cualquier momento del proceso el afianzamiento de las costas que éste pueda generar,
bajo apercibimiento de tenerlo por desistido.
PREFERENCIAS:
- Probar el perjuicio para los acreedores, y que éste resulta del acto atacado;
- Probar que el crédito del acreedor que intenta la acción es anterior al acto del deudor;
ARTÍCULO 340.- Efectos frente a terceros. Deber de indemnizar. “El fraude no puede oponerse a los
acreedores del adquirente que de buena fe hayan ejecutado los bienes comprendidos en el acto.
La acción del acreedor contra el subadquirente de los derechos obtenidos por el acto impugnado sólo
procede si adquirió por título gratuito, o si es cómplice en el fraude; la complicidad se presume si, al
momento de contratar, conocía el estado de insolvencia.
El subadquirente de mala fe y quien contrató de mala fe con el deudor responden solidariamente por los
daños causados al acreedor que ejerció la acción, si los derechos se transmitieron a un adquirente de buena
fe y a título oneroso, o de otro modo se perdieron para el acreedor. El que contrató de buena fe y a título
gratuito con el deudor, responde en la medida de su enriquecimiento.”
ARTÍCULO 341.- Extinción de la acción. “Cesa la acción de los acreedores si el adquirente de los bienes
transmitidos por el deudor los desinteresa o da garantía suficiente.”
PLAZO:
APLICABILIDAD A LA QUIEBRA:
CADUCIDAD:
INEFICACIA:
FORMA DE SU DECLARACIÓN:
· PRINCIPIO GENERAL: En el proceso de quiebra la ley dispone que decretada la falencia, todos los
acreedores quedan sometidos a las disposiciones de esta ley y sólo pueden ejercitar sus derechos sobre los
bienes desapoderados en la forma prevista en la misma (Artículo 125 LCQ).
La ley es clara entonces, están comprendidos todos los acreedores, es decir:
- los acreedores condicionales; por ejemplo, el crédito de regreso, esto es, el de quien tiene derecho a
repetir contra el fallido las sumas que ha pagado a un tercero; en ese caso debe presentarse a verificar su
acreencia aunque la acción contra él no haya sido todavía ejercida.
-aquellos cuya acción respecto del fallido está sujeta a cualquier acto previo contra el deudor principal
(artículo 125 LCQ), como puede ser el protesto para el ejercicio de la acción cambiaria de regreso.
- los acreedores muñidos de garantías reales (artículo 126, segundo párrafo LCQ), sin perjuicio de las
ventajas que la ley reconoce a estos créditos que serán examinadas en su momento.
-los acreedores que ejercen el derecho de retención (Artículo 131 LCQ).
Por lo tanto, no podrán actuar en forma individual, es decir, ellos no podrán agredir directamente el
patrimonio de su deudor quebrado, sino que han de hacerlo de conformidad con la ley concursal
(debiendo presentarse a verificar sus créditos y privilegios en la quiebra) –a excepción de los créditos con
garantía real-.
Ello supone entonces que:
- todos los bienes quedan sometidos al desapoderamiento y serán liquidados conforme a alguno de los
procedimientos que la LCQ organiza en los artículos 203 y siguientes (realización de bienes).
- los acreedores quirografarios no actúan por sí sobre el patrimonio del deudor. Sino que lo hacen a través
del síndico, salvo las hipótesis excepcionales en que la ley los legitima para el ejercicio de ciertas acciones,
como la de declaración de ineficacia concursal.
- los acreedores titulares de derechos que se ejercen sobre cosas del deudor –titulares de derechos reales
de garantía y del derecho de retención- han de ajustarse a las reglas que la LCQ prevé para ellos.
ARTÍCULO 126.- Verificación: obligatoriedad. “Todos los acreedores deben solicitar la verificación de sus
créditos y preferencias en la forma prevista por Artículo 200, salvo disposición expresa de esta ley.
Créditos prendarios o hipotecarios. Sin perjuicio del cumplimiento oportuno de esa carga, los acreedores
con hipoteca, prenda o garantizados con wuarrant, pueden reclamar en cualquier tiempo el pago mediante
la realización de la cosa sobre la que recae el privilegio, previa comprobación de sus títulos en la forma
indicada por el Artículo 209 y fianza de acreedor de mejor derecho.
Los síndicos pueden requerir autorización al juez para pagar íntegramente el crédito prendario o
hipotecario ejecutado por el acreedor con fondos líquidos existentes en expediente, cuando la conservación
del bien importe un beneficio evidente para los acreedores. A tales fines puede autorizársele a constituir
otra garantía o disponer la venta de otros bienes”.
ARTÍCULO 131.- Derecho de retención. “La quiebra suspende el ejercicio del derecho de retención sobre
bienes susceptibles de desapoderamiento, los que deben entregarse al síndico, sin perjuicio del privilegio
dispuesto por el Artículo 241, inciso 5.
Cesada la quiebra antes de la enajenación del bien continúa el ejercicio del derecho de retención,
debiéndose restituir los bienes al acreedor, a costa del deudor”.
VERIFICACIÓN, PRINCIPIO: todos los acreedores están sometidos a la carga de solicitar la verificación de sus
créditos y preferencias en la forma prevista por el artículo 200 LCQ, salvo disposición expresa de la ley
(artículo 126 LCQ).
VENCIMIENTO DE PLAZOS: La quiebra produce el vencimiento de todos los plazos de las obligaciones del
fallido, a la fecha de la sentencia.
· Fundamento: a la fecha de la quiebra se cristaliza el patrimonio del deudor y por ello todos los créditos
han de ser exigibles y se han de mesurar a esa fecha.
· Créditos comprendidos: Esto se aplica incluso a los créditos con garantía real, la LCQ no hace ninguna
salvedad; en esto se diferencia según Rivera del régimen del concurso preventivo.
Esta regla se excepciona en caso de continuación de la empresa, si el crédito no estaba vencido a la época
de la quiebra y el síndico satisface las obligaciones posteriores en tiempo debido (artículo 195 LCQ).
· Descuento de intereses: El segundo párrafo del artículo 128 de la LCQ establece “Si el crédito que no
devenga intereses es pagado total o parcialmente antes del plazo fijado según título, deben deducirse los
intereses legales por el lapso que anticipa su pago”.
La ley se refiere a créditos que según su título no devengan intereses, como sucede con los pagares. En
este caso la ley presume que los intereses están incluidos en el monto del capital, por lo que si el crédito es
pagado –total o parcialmente- antes de la fecha del vencimiento, deben descontarse los intereses que, se
presumen incorporados al capital.
La disposición debe ser correctamente aprehendida: la deducción corresponde sólo si el crédito es
EFECTIVAMENTE PAGADO –total o parcialmente- ANTES DEL PLAZO CONVENCIONAL. De donde el solo
hecho del vencimiento del plazo, legalmente anticipado a la fecha de la quiebra, no es suficiente para
causar la deducción.
(La expresión intereses legales es ambigua dado que en nuestro derecho en principio no los hay; de modo
que cabría estar a los intereses que percibe el Banco de la Nación Argentina en sus operaciones de
descuento.
· Codeudores y fiadores: El vencimiento anticipado del plazo de las obligaciones del quebrado no perjudica
a los codeudores o fiadores, aún cuando sean solidarios.
ARTÍCULO 128.- Vencimiento de plazos. “Las obligaciones del fallido pendientes de plazo se consideran
vencidas de pleno derecho en la fecha de la sentencia de quiebra.
Descuentos de intereses. Si el crédito que no devenga intereses es pagado total o parcialmente antes del
plazo fijado según título, deben deducirse los intereses legales por el lapso que anticipa su pago”.
REGLAS CONCURSALES:
ARTÍCULO 130.- Compensación. “La compensación sólo se produce cuando se ha operado antes de la
declaración de la quiebra”.
· Regulación legal:
ARTÍCULO 132.- Fuero de atracción. “La declaración de quiebra atrae al juzgado en el que ella tramita,
todas las acciones judiciales iniciadas contra el fallido por las que se reclamen derechos patrimoniales.
Salvo las ejecuciones de créditos con garantías reales, quedan exceptuados de este principio los casos
indicados en el artículo 21 inciso 1) a 3) bajo el régimen allí previsto.
El trámite de los juicios atraídos se suspende cuando la sentencia de quiebra del demandado se halle firme;
hasta entonces se prosigue con el síndico, sin que puedan realizarse actos de ejecución forzada”.
ARTÍCULO 133.- Fallido codemandado. “Cuando el fallido sea codemandado, el actor puede optar por
continuar el juicio ante el tribunal de su radicación originaria, desistiendo de la demanda contra aquél sin
que quede obligado por costas y sin perjuicio de solicitar la verificación de su crédito.
Existiendo un litisconsorcio pasivo necesario en el que el fallido sea demandado, el juicio debe proseguir
ante el tribunal originario, continuando el trámite con intervención del síndico a cuyo efecto podrá extender
poder a letrados que lo representen y cuya remuneración se regirá por lo establecido en el artículo 21. El
acreedor debe requerir verificación después de obtenida sentencia.
Si una entidad aseguradora hubiera sido citada en garantía y se hubiera dispuesto su liquidación de
conformidad a lo establecido en la Ley Nº 20.091, el proceso continuará ante el tribunal originario, con
intervención del liquidador de la entidad o de un apoderado designado al efecto. La sentencia podrá
ejecutarse contra las otras partes intervinientes en el proceso que resultaren condenadas a su
cumplimiento, sin perjuicio de solicitarse la verificación del crédito ante el juez que intervenga en el proceso
de liquidación”.
1- RÉGIMEN APLICABLE A LOS JUICIOS LABORALES: Los juicios laborales en etapa de conocimiento serán
remitidos al Juzgado de la quiebra para ser acumulados al pedido de verificación de los créditos.
Esto se aplica a aquellos créditos que no hayan sido reconocidos por el procedimiento de pronto pago
previsto en el artículo 16 de la LCQ al cual remite el artículo 183, segundo párrafo, de la LCQ.
2- FALLIDO CODEMANDADO: OPCIÓN.
Cuando el fallido es codemandado, la ley diferencia si se trata de un litisconsorcio pasivo voluntario o
necesario:
- litisconsorcio pasivo voluntario: el actor podrá optar por: a) continuar el juicio ante el tribunal de origen,
desistiendo de la demanda contra el fallido –y continuándola sólo contra el otro codemandado-, y sin
perjuicio de solicitar la verificación de su crédito; o b) someterse al fuero de atracción, o sea ante el
tribunal de la quiebra.
- litisconsorcio pasivo necesario: el actor deberá proseguir el juicio ante el tribunal originario, con la
intervención del síndico de la quiebra. El acreedor deberá solicitar la verificación de su crédito después de
obtenida una sentencia firme ante el tribunal originario.
OBLIGADOS SOLIDARIOS: En los artículos 135 a 137 la LCQ trata distintos casos de obligaciones con
solidaridad pasiva.
ARTÍCULO 135.- Obligados solidarios. “El acreedor varios obligados solidarios puede concurrir a la quiebra
de los que estén fallidos, figurando en cada una por el valor nominal de sus títulos hasta el íntegro pago.
El coobligado o garante no fallido que paga después de la quiebra queda subrogado en los derechos del
acreedor, hasta el monto del crédito cancelado y accesorios derivados del derecho de repetición”.
ARTÍCULO 136.- Repetición entre concursos. “No existe acción entre los concursos de los coobligados
solidarios por los dividendos pagados al acreedor, salvo si el monto total pagado excede del crédito.
El acreedor debe restituir el excedente en la quiebra del que hubiere sido garantizado por los otros o
conforme con la regla del Artículo 689 del Código Civil en los demás supuestos”.
ARTÍCULO 137.- Coobligado o fiador garantido. “El coobligado o fiador del fallido garantizado con prenda
e hipoteca sobre bienes de éste, para asegurar su derecho de repetir, concurre a la quiebra por la suma
pagada antes de su declaración o por la que tuviese privilegio si ésta fuere mayor.
Del producto del bien y hasta el monto del privilegio se satisface en primer lugar al acreedor del fallido y del
coobligado o fiador; después al que ejerce la repetición, por la suma de su pago. En todos los casos se
deben respetar las preferencias que correspondan”.
a) Obligados solidarios todos fallidos: En este supuesto el acreedor puede solicitar la verificación de su
crédito en todos los concursos, por el monto total de su acreencia (artículo 135 LCQ).
Puede percibir los dividendos en todos los concursos hasta el monto íntegro de su crédito, no existiendo
repetición entre los concursos, salvo si el monto total pagado excede del crédito (artículo 136 LCQ).
b) Uno o algunos de los coobligados fallidos: En el caso de que alguno de los coobligados no fallido pague
al acreedor, total o parcialmente, después de la quiebra, queda subrogado en los derechos de aquél hasta
el monto del crédito cancelado y accesorios derivados del derecho de repetición (artículo 135 LCQ
segundo párrafo).
Esto debe ser interpretad en el sentido de que el coobligado que pagó podrá verificar el crédito y sus
accesorios con el alcance de los artículos 914 a 920 del Nuevo Código Civil y Comercial (pago por
subrogación) o sea por el monto efectivamente pagado.
ARTÍCULO 914.- Pago por subrogación. “El pago por subrogación transmite al tercero que paga todos los
derechos y acciones del acreedor. La subrogación puede ser legal o convencional”.
ARTÍCULO 915.- Subrogación legal. “La subrogación legal tiene lugar a favor:
a) del que paga una deuda a la que estaba obligado con otros, o por otros;
b) del tercero, interesado o no, que paga con asentimiento del deudor o en su ignorancia;
c) del tercero interesado que paga aun con la oposición del deudor;
d) del heredero con responsabilidad limitada que paga con fondos propios una deuda del causante”.
ARTÍCULO 916.- Subrogación convencional por el acreedor. “El acreedor puede subrogar en sus derechos
al tercero que paga”.
ARTÍCULO 917.- Subrogación convencional por el deudor. “El deudor que paga al acreedor con fondos de
terceros puede subrogar al prestamista. Para que tenga los efectos previstos en estas normas es necesario
que:
a) tanto el préstamo como el pago consten en instrumentos con fecha cierta anterior;
b) en el recibo conste que los fondos pertenecen al subrogado;
c) en el instrumento del préstamo conste que con ese dinero se cumplirá la obligación del deudor”.
ARTÍCULO 918.- Efectos. “El pago por subrogación transmite al tercero todos los derechos y acciones del
acreedor, y los accesorios del crédito. El tercero subrogante mantiene las acciones contra los coobligados,
fiadores, y garantes personales y reales, y los privilegios y el derecho de retención si lo hay”.
ARTÍCULO 919.- Límites. “La transmisión del crédito tiene las siguientes limitaciones:
a) el subrogado sólo puede ejercer el derecho transferido hasta el valor de lo pagado;
b) el codeudor de una obligación de sujeto plural solamente puede reclamar a los demás codeudores la
parte que a cada uno de ellos les corresponde cumplir;
c) la subrogación convencional puede quedar limitada a ciertos derechos o acciones”.
ARTÍCULO 920.- Subrogación parcial. “Si el pago es parcial, el tercero y el acreedor concurren frente al
deudor de manera proporcional”.
REPETICIÓN ENTRE CONCURSOS: La regla general es que no existe tal repetición, aunque alguno haya
pagado un importe mayor que los otros, o uno sea el concursado del garante y el otro el del garantido.
Pero si el monto total excede del crédito, entonces el acreedor debe restituir el excedente, para lo cual la
ley da una opción:
- si entre coobligados hubiese un garantizado y otros garantes, todos fallidos, la restitución del excedente
debe hacerse en la quiebra del garantizado.
- si no se diese esa hipótesis de concursos de garante y garantizado, la restitución del excedente debe
hacerse de conformidad con la regla del artículo 689 del Código Civil de Vélez (NO ENCONTRE EL DEL
NUEVO CÓDIGO).
“Las relaciones de los acreedores conjuntos entre sí, o de los deudores conjuntos entre sí, después que uno
de ellos hubiese cumplido una obligación divisible o indivisible, se reglarán de la manera siguiente:
1° Cada uno de los acreedores conjuntos debe pagar una cuota igual o desigual, designada en los títulos de
la obligación, o en los contratos que entre sí hubiesen celebrado;
2° Si no hubiere títulos, o si nada se hubiese prevenido sobre la división del crédito o de la deuda entre los
acreedores y deudores conjuntos, se atenderá a la causa de haberse contraído la obligación
conjuntamente, a las relaciones de los interesados entre sí, y a las circunstancias de cada uno de los casos;
3° Si no fuese posible reglar las relaciones de los acreedores o deudores conjuntos entre sí, se entenderá
que son interesados en partes iguales, y que cada persona constituye un acreedor o un deudor”.
4. BIENES DE TERCEROS.
1- BIENES ENTREGADOS AL DEUDOR POR UN TÍTULO NO DESTINADO A TRANSMITIR LA PROPIEDAD.
2- READQUISICIÓN DE LA POSESIÓN EN LA QUIEBRA: A) CONCPETO; B) CONDICIONES DE PROCEDENCIA;
C) PRESUPUESTO DE EJERCICIO DEL DERECHO DEL REMITENTE; D) TRANSFERENCIA A TERCEROS: CESIÓN
O PRIVILEGIO. INDEMNIZACIÓN. LEGITIMACIÓN DE LOS SÍNDICOS.
BIENES DE TERCEROS.
1- BIENES ENTREGADOS AL DEUDOR POR UN TÍTULO NO DESTINADO A TRANSMITIR LA PROPIEDAD:
La norma del artículo 138 LCQ se refiere a todos los casos en que el fallido tiene en su poder bienes que le
han sido entregados por título no destinado a transmitir el dominio.
De modo que están incluidas las transmisiones a título de comodato, depósito, locación, leasing, usufructo,
uso, habitación, prenda y aquellas que se corresponden con la celebración de un contrato cuya prestación
no puede cumplirse si no es mediante la entrega de la cosa; por ejemplo, la reparación de una plancha o de
un televisor.
Las soluciones no son idénticas para todos los casos:
· Bienes a los que se refiere: La ley se refiere a cualquier bien, pero obviamente debe tratarse de cosas que
sean susceptibles de identificación como de propiedad del tercero. En principio no procedería la restitución
de cosas fungibles.
El tercero que haya entregado un bien al fallido por título no destinado a transferirle el dominio puede
pedir al Juez la restitución del mismo, previa acreditación de su derecho (por ejemplo, Guillermo deja la
computadora para reparar y, acto seguido la casa de computación se declara en quiebra, deberá solicitar al
Juez la restitución de la computadora presentando el comprobante que le hubiesen entregado para retirar
la máquina y pagando el importa correspondiente al servicio).
Mientras tramite el pedido, puede solicitar medidas de conservación del bien y el Juez puede entregárselo
en depósito.
El derecho de restitución del bien no podrá ejercitarse, si de acuerdo al título por el que fue transmitido, el
fallido conservara la facultad de mantener el bien en su poder y el Juez decidiera continuar en esa relación
a cargo del concurso. En este supuesto, el tercero pasaría a tener un crédito contra el concurso.
ARTÍCULO 138.- Bienes de terceros. “Cuando existan en poder del fallido bienes que le hubieren sido
entregados por título no destinado a trasferirle el dominio, los terceros que tuvieren derecho a la restitución
pueden solicitarla, previa acreditación de su derecho conforme con el Artículo 188. Se incluyen en esta
norma los bienes obtenidos de la transformación de productos elaborados por los sistemas denominados 'a
maquila', cuando la contratación conste en registros públicos. (Oración "Se incluyen en esta norma los
bienes obtenidos de la transformación de productos elaborados por los sistemas denominados 'a maquila',
cuando la contratación conste en registros públicos" incorporada por art. 8° de la Ley N° 25.113 B.O.
21/7/1999)
El reclamante puede requerir medidas de conservación del bien a su costa y el juez puede disponer
entregárselo en depósito mientras tramita su pedido.
El derecho a que se refiere este artículo no puede ejercitarse si de acuerdo con el título de transmisión el
fallido conservaría la facultad de mantener el bien su poder y el juez decide, a pedido del síndico o de oficio,
continuar en esa relación a cargo del concurso”.
ARTÍCULO 139.- Readquisición de la posesión. “El enajenante puede recobrar la posesión de los bienes
remitidos al fallido por título destinado a trasferir el dominio, cuando concurran las siguientes
circunstancias:
1) Que el fallido o sus representantes no hayan tomado posesión efectiva de los bienes antes de la
sentencia de quiebra;
2) Que el fallido no haya cumplido íntegramente con su prestación;
3) Que un tercero no haya adquirido derechos reales sobre las cosas de la quiebra, sin perjuicio de lo
dispuesto en el Artículo 141”.
B) CONDICIONES DE PROCEDENCIA:
- Que el fallido –o sus representantes- no haya tomado posesión efectiva del bien.
- Que el fallido no haya cumplido íntegramente con su prestación.
- que un tercero no haya adquirido derechos reales sobre la cosa.
El artículo 140 LCQ describe detalladamente el procedimiento que deberá llevar a cabo el enajenante para
ejerver el derecho de readquisición e la posesión del bien enajenado.
ARTÍCULO 140.- Presupuesto de ejercicio del derecho del remitente. “El derecho acordado en el artículo
anterior se aplica aunque hubiere tradición simbólica y su ejercicio se sujeta a la siguiente regulación:
1) El enajenante debe hacer la petición en el juicio de quiebra dentro de los TREINTA (30) días siguientes a
la última publicación de edictos en la jurisdicción donde debieran entregarse los bienes o de la última
publicación en la sede del juzgado si aquéllos no correspondieren.
2) El síndico puede optar por cumplir la contraprestación y mantener los bienes en el activo del concurso.
Esta opción debe manifestarse dentro de los QUINCE (15) días de notificada la petición del enajenante y
requiere autorización judicial.
3) Para recobrar los efectos, el enajenante debe desinteresar al acreedor prendario de buena fe, que se
hubiere constituido antes de la quiebra.
4) El enajenante que pretenda recobrar la posesión de los bienes debe hacerla efectiva dentro de los
TREINTA (30) días posteriores a la notificación de la admisión de su pedido y debe satisfacer previamente
todos los gastos originados por los bienes, incluso los de transporte, seguros, impuestos, guarda y
conservación y depositar a la orden del juzgado la contraprestación que hubiere recibido del fallido. No
cumplidos en término tales requisitos y los del inciso 1, o en el caso del inciso 2, los bienes quedan
definitivamente en el activo del concurso.
5) El enajenante carece de derecho a reclamar daños o intereses”.
D) TRANSFERENCIA A TERCEROS: CESIÓN O PRIVILEGIO. INDEMNIZACIÓN.
Cuando los bienes cuya readquisición pretende el enajenante (artículos 139 y 140 LCQ):
a) han perecido o desaparecido, el derecho del enajenante se traslada a la indemnización que pudiera
adeudarse (por el responsable de la pérdida o desaparecido, o por la aseguradora correspondiente), y
b) han sido transferidos a un tercero, el derecho del enajenante se traslada sobre la prestación que ese
tercero pudiera adeudar al fallido -hasta la concurrencia del crédito de éste-, y puede requerir la cesión del
crédito cuando es de igual naturaleza que el suyo originario, o adquiere privilegio especial sobre la
contraprestación pendiente cuando ella es de distinta naturaleza.
ARTÍCULO 141.- Transferencia a terceros: cesión o privilegio. “Si un tercero ha adquirido derecho real
sobre los bienes enajenados, mediando las circunstancias del Artículo 139, incisos 1 y 2, y adeuda su
contraprestación, el enajenante puede requerir la cesión del crédito, siempre que sea de igual naturaleza
que el suyo.
Si es de distinta naturaleza, tiene privilegio especial sobre la contraprestación pendiente hasta la
concurrencia de su crédito.
Indemnizaciones. Igual derecho asiste al enajenante sobre la indemnización debida por el asegurador o por
cualquier otro tercero responsable, cuando los objetos hubieren desaparecido o perecido total o
parcialmente encontrándose en las condiciones del párrafo precedente o en las de los Artículos 139 y 140”.
ARTÍCULO 142.- Legitimación de los síndicos. “A los efectos previstos en esta sección el síndico está
legitimado para el ejercicio de los derechos emergentes de las relaciones jurídicas patrimoniales
establecidas por el deudor, antes de su quiebra.
Son nulos los pactos por los cuales se impide al síndico al ejercicio de los derechos patrimoniales de los
fallidos.
La quiebra no da derecho a los terceros al resarcimiento de daños por aplicación de esta ley”.
ARTÍCULO 143.- Contratos en curso de ejecución. “En los contratos en los que al tiempo de la sentencia de
quiebra no se encuentran cumplidas íntegramente las prestaciones de las partes, se aplican las normas
siguientes:
1) Si está totalmente cumplida la prestación a cargo del fallido, el otro contratante debe cumplir la suya.
2) Si está íntegramente cumplida la prestación a cargo del contratante no fallido, éste debe requerir la
verificación en el concurso por la prestación que le es debida.
3) Si hubiera prestaciones recíprocamente pendientes, el contratante no fallido tiene derecho a requerir la
resolución del contrato”.
ARTÍCULO 145.- Resolución por incumplimiento: inaplicabilidad. “La sentencia de quiebra hace
inaplicables las normas legales o contractuales que autoricen la resolución por incumplimiento, cuando esa
resolución no se produjo efectivamente o demandó judicialmente antes de dicha sentencia”.
2- PROMESA DE CONTRATO:
El artículo 146 se refiere a las promesas de contratos en general y a los boletos de compra-venta en
particular.
La ley refiere a las promesas de contrato y a los contratos celebrados sin la forma exigida por el
ordenamiento para la figura de que se trate. Con la promesa de contrato se hace referencia a contratos
(precontratos) que obligan a celebrar otro contrato. Pero los contratos celebrados sin la forma exigida por
la ley tienen el mismo tratamiento que las promesas.
Principio: las promesas de contrato y los otorgados sin la forma exigida por ley, NO son exigibles al
concurso. Ejemplo: la compra-venta de automotor no inscripta en el registro, no causa obligación de
proceder a esa inscripción, debiendo el comprador verificar su crédito en la quiebra.
Excepción: el contrato puede cumplirse siempre que lo decida el juez si se dan estos recaudos:
-lo pidan el tercero y el síndico, dentro de los 30 días de la última o publicación de edictos en la jurisdicción
del juzgado.
-el contrato, una vez concluida, puede ser cumplido por la quiebra.
En este caso el juez ordenará el otorgamiento de la escritura traslativa de dominio contra el pago del resto
del precio, cualquiera sea el destino del inmueble, ya que la ley 19.551 lo limitaba a inmuebles con destino
de viviendas. La ley alude a los inmuebles pero según interpreta Rivera, no habría inconveniente en
aplicarlo a otros contratos, por ejemplo, permuta.
No se exige que el boleto tenga fecha cierta. Pero el contratante in bonis debe ser de buena fe, es decir,
que si entregó en período de sospecha el comprador no debía de haber conocido del estado de cesación
de pagos del fallido.
Procedimiento: el adquirente debe perseguir el reconocimiento de su crédito a la escrituración de
conformidad con el procedimiento del artículo 32 de la LCQ.
ARTÍCULO 146.- Promesas de contrato. “Las promesas de contrato o los contratos celebrados sin la forma
requerida por la ley no son exigibles al concurso, salvo cuando el contrato puede continuarse por éste y
media autorización judicial, ante el expreso pedido del síndico y del tercero, manifestado dentro de los
TREINTA (30) días de la publicación de la quiebra en la jurisdicción del juzgado.
Los boletos de compraventa de inmuebles otorgados a favor de adquirentes de buena fe, serán oponibles
al concurso o quiebra si el comprador hubiera abonado el VEINTICINCO POR CIENTO (25 %) del precio. El
juez deberá disponer en estos casos, cualquiera sea el destino del inmueble, que se otorgue al comprador la
escritura traslativa de dominio contra el cumplimiento de la prestación correspondiente al adquirente. El
comprador podrá cumplir sus obligaciones en el plazo convenido. En caso de que la prestación a cargo del
comprador fuere a plazo deberá constituirse hipoteca en primer grado sobre el bien, en garantía del saldo
de precio”.
3. EFECTO DE LA QUIEBRA SOBRE LOS CONTRATOS DE: COMISIÓN; SOCIEDAD (APORTES, RECESO,
CONCURSO DE LOS SOCIOS, SOCIEDAD ACCIDENTAL); DEBENTURES Y OBLIGACIONES NEGOCIABLES.
EFECTO DE LA QUIEBRA SOBRE LOS CONTRATOS DE:
COMISIÓN: El legislador procura, a través del artículo 148, que en la quiebra del comisionista no se
confunda en la masa activa el dinero perteneciente a terceros. Ante la quiebra se producen los dos efectos
siguientes:
I. Cuando el deudor ha vendido bienes, el comitente puede reclamar el precio impago directamente
del comprador hasta la concurrencia de lo que se le debiere.
II. Cuando el deudor ha comprado bienes, el tercero vendedor puede cobrar directamente del
comitente la suma adeudada al fallido, hasta la concurrencia del precio impago.
En cualquier supuesto debe conferirse vista al síndico y obtenerse autorización judicial. Las reglas de este
artículo son aplicables al caso de agente de bolsa.
SOCIEDAD:
La LCQ impone al socio la restitución e lo percibido por el ejercicio del receso producido estando la
sociedad en cesación de pagos. Además la regla hace exigible los aportes no integrados por los socios, con
el límite del interés de los acreedores y los gastos del concurso.
RECESO:
ARTÍCULO 149.- Sociedad. Derecho de receso. “Si el receso se ejercita estando la sociedad en cesación de
pagos, los recedentes deben reintegrar al concurso todo lo que han percibido por ese motivo. El reintegro
puede requerirse en la forma y condiciones establecidas por el artículo siguiente, párrafo segundo”.
SOCIEDAD ACCIDENTAL:
Es sabido que la sociedad accidental no es una persona jurídica, siendo entonces un mero contrato. De allí
que no es sujeto de los juicios concursales, pero sí pueden serlo sus integrantes. Si la quiebra es del socio
gestor sí se produce la disolución de la sociedad accidental; los demás socios son postergados por los
acreedores del socio y por los gastos del concurso.
ARTÍCULO 151.- Sociedad accidental. “La declaración de quiebra del socio gestor produce la disolución de
la sociedad accidental o en participación. Los demás socios no tienen derecho sobre los bienes sujetos a
desapoderamiento, sino después que se haya pagado totalmente a los acreedores y los gastos del
concurso”.
ARTÍCULO 153.- Contrato a término. “La quiebra de una de las partes de un contrato a término, producida
antes de su vencimiento, acuerda derecho a la otra a requerir la verificación de su crédito por la diferencia
a su favor que exista a la fecha de la sentencia de quiebra.
Si a esa época existe diferencia a favor del concurso, el contratante no fallido sólo está obligado si a la
fecha del vencimiento del contrato existe diferencia en su contra. En este caso debe ingresar el monto de la
diferencia menor, optando entre la ocurrida al término de la quiebra o al término contractual.
Si no existen diferencias al momento de la quiebra, el contrato se resuelve de pleno derecho sin adeudarse
prestaciones”.
PROTESTO DE TÍTULOS: El protesto es un acto jurídico solemne que permite probar la presentación de la
letra por el portador en tiempo, forma y lugar oportunos, y la falta de aceptación o de pago por el
obligado, a fin de conservar las acciones de regreso. La quiebra exime al acreedor de la carga de realizar el
protesto de los títulos de crédito, por lo tanto desde la declaración de la quiebra el acreedor podrá iniciar
la acción de regreso presentando el instrumento que acredite la falencia.
ARTÍCULO 155.- Protesto de títulos. “En los casos en que la declaración de quiebra exime de la obligación
de realizar el protesto de títulos, el cese posterior del concurso, cualquiera fuere su causa, no altera los
efectos de la dispensa producida. La ineficacia y consecuente restitución de lo pagado respecto de estos
documentos, en las condiciones de los Artículos 118 a 122, produce los efectos del protesto a los fines de las
acciones contra los demás obligados”.
ALIMENTOS: sólo se pueden reclamar en la quiebra los créditos alimentarios adeudados por el fallido antes
de la sentencia de quiebra. Como menciona Rivera, la obligación alimentaria es ajena al concurso. El
quebrado sigue obligado a pagar alimentos que se devenguen después de la quiebra y el beneficiario
puede verificar el crédito por los alimentos devengados con anterioridad que estuviesen impagos a la fecha
de la falencia.
ARTÍCULO 156.- Alimentos. “Sólo corresponde reclamar en el concurso el crédito por alimentos adeudados
por el fallido antes de la sentencia de quiebra”.
LOCACIÓN DE INMUEBLES:
se encuentra legislado en el artículo 157 que enuncia las distintas hipótesis:
ARTÍCULO 157.- Locación de inmuebles. “Respecto del contrato de locación de inmuebles rigen las
siguientes normas:
1) Si el fallido es locador, la locación continúa produciendo todos sus efectos legales. (Se trata de la quiebra
del locador, según el cual el contrato no se ve afectado, por lo que el locatario deberá pagar el alquiler al
síndico mientras duren los efectos del desapoderamiento, y en casa de venta de la cosa alquilada, el
contrato de locación seguirá vigente por el plazo convenido).
2) Si es locatario y utiliza lo arrendado para explotación comercial, rigen las normas de los Artículos 144 ó
197 según el caso. (Quiebra del locatario con destino a explotación comercial: en los casos de continuación
de la empresa o cuando el síndico exprese la conveniencia de la enajenación en bloque de los bienes, los
contratos se mantienen en condiciones preexistentes y el concurso responde directamente por los
arrendamientos)
3) Si es locatario y utiliza lo locado exclusivamente para su vivienda y la de su familia, el contrato es ajeno
al concurso. No pueden reclamarse en éste los alquileres adeudados antes o después de la quiebra.
(Quiebra del locatario con destino a familia: el contrato es ajeno al concurso).
4) Si el quebrado es locatario y utiliza lo locado para explotación comercial y vivienda al mismo tiempo, se
debe decidir atendiendo a las demás circunstancias del contrato, especialmente lo pactado con el locador,
el destino principal del inmueble y de la locación y la divisibilidad material del bien sin necesidad de
reformas que no sean de detalle.
En caso de duda se debe estar por la indivisibilidad del contrato y se aplica lo dispuesto en el inciso 2.
Si se decide la divisibilidad del contrato, se fija la suma que por alquiler corresponde aportar en lo sucesivo
al fallido por la parte destinada a vivienda, que queda sujeta a lo dispuesto en el inciso 3”. (Quiebra del
locatario en locación mixta)
RENTA VITALICIA: si el contrato de renta vitalicia es oneroso, y el obligado a cumplirla cae en quiebra, el
contrato se resuelve y el beneficiario debe presentarse a verificar en la quiebra. En cambio, si la renta fuera
gratuita, el contrato también se resuelve, pero el beneficiario no tendrá derecho a reclamar nada en la
quiebra.
ARTÍCULO 158.- Renta vitalicia. “La declaración de quiebra del deudor del contrato oneroso de renta
vitalicia, produce su resolución; el acreedor debe pedir la verificación de su crédito por lo adeudado, según
lo establecido en el Artículo 2087 del Código Civil.
Si la renta es prometida gratuitamente, el contrato queda resuelto, sin indemnización y obligación alguna
respecto del concurso para lo futuro”.
ARTÍCULO 159.- Casos no contemplados: reglas. “En las relaciones patrimoniales no contempladas
expresamente, el juez debe decidir aplicando las normas de las que sean análogas, atendiendo a la debida
protección del crédito, la integridad del patrimonio del deudor y de su empresa, el estado de concurso y el
interés general”.
-si decide la no continuación, el contrato de trabajo se considera disuelto desde la fecha de la sentencia de
quiebra.
Continuación del contrato de trabajo: dentro de los 10 días corridos, contados desde la resolución judicial
que decide la continuación, el síndico deberá elegir el personal que continuará trabajando. La continuación
del contrato de trabajo no priva a los trabajadores del derecho a verificar los importes adeudados
anteriores a la quiebra.
Los sueldos y demás retribuciones, que se devenguen a partir de la sentencia de quiebra serán pagados
con la preferencia del artículo 240 y sin necesidad de verificar dichos créditos.
2. Cierre de la empresa
Al extinguirse el contrato de trabajo, los trabajadores deberán tener reconocimiento de los créditos de
casusa anterior a la quiebra, ya sea mediante la verificación ordinaria en la quiebra, con su privilegio
correspondiente, o a través del procedimiento del “pronto pago laboral”.
En cuanto al adquirente de la empresa, el mismo no tiene obligación de los vínculos laborales existentes,
pudiendo los trabajadores reclamar sus indemnizaciones en la quiebra. Esto lo estableció la ley 24.522,
cambiando la idea de la ley 19.551 que sí preservaba la relación laboral.
Indemnización: si el contrato de trabajo se extingue por quiebra, la indemnización será la del artículo 247
de la Ley de Contrato de Trabajo: “el trabajador tendrá derecho a percibir una indemnización equivalente
a la mitad de la prevista en el artículo 245) Sería despido parcialmente justificado.
BOLILLA XVIII
ARTÍCULO 178.- Ausencia del síndico. “Si el síndico no hubiere aceptado el cargos, se realizan igualmente
las diligencias previstas y se debe ordenar la vigilancia policial necesaria para la custodia”.
ARTÍCULO 180.- Incautación de los libros y documentos. “En las oportunidades mencionadas, el síndico
debe incautarse de los libros de comercio y papeles del deudor, cerrando los blancos que hubiere y
colocando, después de la última atestación, nota que exprese las hojas escritas que tenga, que debe firmar
junto con el funcionario o notario interviniente”.
· Facultades y deberes del síndico: el síndico debe adoptar todas las medidas necesarias para la custodia
de los bienes, inclusive de manera directa cuando sean urgentes. Además el síndico puede otorgar los
contratos necesarios para la conservación y administración de los bienes.
ARTÍCULO 185.- Facultades para conservación y administración de bienes. “El síndico puede realizar los
contratos que resulten necesarios, incluso los de seguro, para la conservación y administración de los
bienes, previa autorización judicial. Para otorgársela debe tenerse en cuenta la economía de los gastos y el
valor corriente de esos servicios.
Si la urgencia lo hiciere imprescindible puede disponer directamente la contratación, poniendo
inmediatamente el hecho en conocimiento del juez”.
3- MEDIDAS URGENTES DE SEGURIDAD. BIENES PERECEDEROS: Cuando los bienes se encuentren en locales
que no ofrezcan seguridad sobre la conservación y custodia, el síndico debe solicitar todas las medidas
necesarias para esos fines y practicar directamente las que sean más urgente para evitar sustracciones,
pérdidas o deterioros, comunicándolo de inmediato al Juez.
ARTÍCULO 181.- Medidas urgentes de seguridad. “Cuando los bienes se encuentren en locales que no
ofrezcan seguridad para la conservación y custodia, el síndico debe peticionar todas las medidas necesarias
para lograr esos fines y practicar directamente las que sean más urgentes para evitar sustracciones,
pérdidas o deterioros, comunicándolas de inmediato al juez”.
· Venta de bienes perecederos y otros: En cualquier estado del proceso, el síndico debe pedir la venta
inmediata de los bienes perecederos, de los que están expuestos a una grave disminución del precio y de
los que sean de conservación dispendiosa. Por ejemplo, bienes que tengan fecha de vencimiento, como
medicamentos o alimentos y también aquellos cuyo precio puede variar, por ejemplo, ropa de temporada.
En cuanto a la enajenación de estos bienes ha de realizarse conforme a los modos ordinarios previstos en
la ley, pero el Juez puede autorizar al síndico la venta en la forma más conveniente para los intereses del
concurso, con lo cual se puede proceder a la venta directa o intervención de un comerciante del ramo de
los bienes de que se trate, etcétera.
ARTÍCULO 184.- Bienes perecederos. “En cualquier estado de la causa, el síndico debe pedir la venta
inmediata de los bienes perecederos, de los que estén expuestos a una grave disminución del precio y de los
que sean de conservación dispendiosa.
La enajenación se debe hacer por cualquiera de las formas previstas en la Sección I del Capítulo VI de este
título, pero si la urgencia del caso lo requiere el juez puede autorizar al síndico la venta de los bienes
perecederos en la forma más conveniente al concurso.
También se aplican estas disposiciones respecto de los bienes que sea necesario realizar para poder
afrontar los gastos que demanden el trámite del juicio y las demás medidas previstas en esta ley”.
2. Promoción de juicios: el síndico debe iniciar los procesos judiciales necesarios para la percepción de los
créditos y la defensa de los intereses del concurso (artículo 182 LCQ primer párrafo in fine).
3. Actos para los cuales se requiere autorización judicial: El segundo párrafo del artículo 182 LCQ sostiene
que el síndico necesita autorización judicial para transigir (consentir, permitir), otorgar quitas, esperas,
novaciones o comprender en árbitros. También parece que se requiere autorización judicial para dar
consentimiento a una propuesta de acuerdo preventivo formulada por el deudor del fallido.
4. Depósito de los fondos: los fondos que el síndico obtenga por la percepción de los créditos son
depositados en el banco de depósitos judiciales dentro de los tres días. Pero también puede el Juez
disponer el depósito de los fondos en cuentas que devenguen intereses en bancos o instituciones de
crédito. También puede el Juez disponer la inversión en títulos públicos o en cuentas en moneda
extranjera.
ARTÍCULO 183.- Fondos del concurso. “Las sumas de dinero que se perciban deben ser depositadas a la
orden del juez en el banco de depósitos judiciales correspondiente, dentro de los TRES (3) días.
Las deudas comprendidas en los Artículos 241, inciso 4 y 246, inciso 1, se pagarán de inmediato con los
primeros fondos que se recauden o con el producido de los bienes sobre los cuales recae el privilegio
especial, con reserva de las sumas para atender créditos preferentes. Se aplican las normas del Artículo 16
segundo párrafo.
El juez puede autorizar al síndico para que conserve en su poder los fondos que sean necesarios para los
gastos ordinarios o extraordinarios que autorice.
También puede disponer el depósito de los fondos en cuentas que puedan devengar intereses en bancos o
instituciones de crédito oficiales o privadas de primera línea. Puede autorizarse el depósito de documentos
al cobro, en bancos oficiales o privados de primera línea”.
5. Fondos necesarios para los gastos del concurso: El Juez puede autorizar al síndico para que conserve en
su poder los fondos necesarios para los gastos ordinarios y extraordinarios que autorice (tercer párrafo del
artículo 183 LCQ).
6. Venta de bienes perecederos y otros: En cualquier estado del proceso, el síndico debe pedir la venta
inmediata de los bienes perecederos, de los que están expuestos a una grave disminución del precio y de
los que sean de conservación dispendiosa. Por ejemplo, bienes que tengan fecha de vencimiento, como
medicamentos o alimentos y también aquellos cuyo precio puede variar, por ejemplo, ropa de temporada.
En cuanto a la enajenación de estos bienes ha de realizarse conforme a los modos ordinarios previstos en
la ley, pero el Juez puede autorizar al síndico la venta en la forma más conveniente para los intereses del
concurso, con lo cual se puede proceder a la venta directa o intervención de un comerciante del ramo de
los bienes de que se trate, etcétera.
ARTÍCULO 184.- Bienes perecederos. “En cualquier estado de la causa, el síndico debe pedir la venta
inmediata de los bienes perecederos, de los que estén expuestos a una grave disminución del precio y de los
que sean de conservación dispendiosa.
La enajenación se debe hacer por cualquiera de las formas previstas en la Sección I del Capítulo VI de este
título, pero si la urgencia del caso lo requiere el juez puede autorizar al síndico la venta de los bienes
perecederos en la forma más conveniente al concurso.
También se aplican estas disposiciones respecto de los bienes que sea necesario realizar para poder
afrontar los gastos que demanden el trámite del juicio y las demás medidas previstas en esta ley”.
7. Venta de bienes para afrontar los gastos del juicio concursal (venta anticipada):
El artículo 184 LCQ último párrafo aplica las reglas de los bienes perecederos a la de la venta de bienes
que sea necesario realizar para afrontar los gastos que demande el trámite del Juicio. Se trata de una venta
anticipada para atender los gastos del concurso.
8. Explotación de los bienes incautados: Algunos bienes del fallido pueden generar frutos civiles, por lo
que el síndico puede celebrar contratos que tienen un límite temporal. No pueden exceder de los términos
necesarios para la enajenación de la empresa como unidad. El contrato requiere la previa autorización
judicial, pudiendo el tribunal requerir que se presenten diversas medidas y elegir el procedimiento más
seguro.
ARTÍCULO 186.- Facultades sobre bienes desapoderados. “Con el fin de obtener frutos, el síndico puede
convenir locación o cualquier otro contrato sobre bienes, siempre que no importen su disposición total o
parcial, ni exceder los plazos previstos en el Artículo 205, sin perjuicio de lo dispuesto en los Artículos 192 a
199. Se requiere previa autorización del juez”.
ARTÍCULO 187.- Propuestas y condiciones del contrato. “De acuerdo con las circunstancias el juez puede
requerir que se presenten diversas propuestas mediante el procedimiento que estime más seguro y eficiente
y que se ofrezcan garantías.
La cooperativa de trabajo de trabajadores del mismo establecimiento podrá proponer contrato. En este
caso se admitirá que garantice el contrato en todo o en parte con los créditos laborales de sus asociados
pendientes de cobro en la quiebra que éstos voluntariamente afecten a tal propósito, con consentimiento
prestado en audiencia ante el juez de la quiebra y con intervención de la asociación sindical legitimada.
La sindicatura fiscalizará el cumplimiento de las obligaciones contractuales. A estos fines, está autorizada
para ingresar al establecimiento para controlar la conservación de los bienes y fiscalizar la contabilidad en
lo pertinente al interés del concurso.
Los términos en que el tercero deba efectuar sus prestaciones se consideran esenciales, y el incumplimiento
produce de pleno derecho la resolución del contrato.
Al vencer el plazo o resolverse el contrato, el juez debe disponer la inmediata restitución del bien sin trámite
ni recurso alguno”.
9. Diferencia con la continuación de la explotación del fallido: Hay una diferencia entre la locación de
bienes del fallido respecto a la continuación de la explotación de la empresa. En la locación de bienes la
quiebra es la locadora y percibirá el alquiler sin asumir ningún riesgo empresario ni responsabilidades, por
ejemplo pagar los sueldos. En cambio, en la continuación de la explotación de la empresa deben asumirse
esas responsabilidades.
1- CONCEPTO: Entre que se produce la incautación y se liquidan los bienes media un período de tiempo en
el que debe procederse a custodiarlos. Y en ciertos casos deben adoptarse medidas de administración,
como el cobro de alquileres, contratos de seguro, etcétera.
El sujeto legitimado para conservar y administrar los bienes es el síndico.
ARTÍCULO 179.- Conservación y administración por el síndico. “El síndico debe adoptar y realizar las
medidas necesarias para la conservación y administración de los bienes a su cargo.
Toma posesión de ellos bajo inventario con los requisitos del Artículo 177, inciso 2, pudiendo hacerlo por un
tercero que lo represente”.
B) FINALIDAD DE LA LEY VIGENTE: En la ley 24.551la quiebra tiene una clara y definida finalidad liquidativa.
La reorganización de la empresa, la reestructuración de los pasivos, el salvataje, tienen su cauce en las
distintas oportunidades que la ley brinda: acuerdo extrajudicial , concurso preventivo, salvataje (artículo
48 LCQ), conversión de la quiebra en concurso preventivo. Pero una vez agotadas esas posibilidades y
declarada la quiebra, ésta no da más oportunidades y los activos del deudor deben liquidarse de la manera
más expedita posible para distribuir el producido entre los acreedores. Pero la ley 25.589 incorporó un
dispositivo que es la continuación de la explotación de la empresa por cooperativas de trabajo.
ARTÍCULO 189.- Continuación inmediata. “El síndico puede continuar de inmediato con la explotación de la
empresa o alguno de sus establecimientos, si de la interrupción pudiera resultar con evidencia un daño
grave al interés de los acreedores y a la conservación del patrimonio, si se interrumpiera un ciclo de
producción que puede concluirse o entiende que el emprendimiento resulta económicamente viable.
También la conservación de la fuente de trabajo habilita la continuación inmediata de la explotación de la
empresa o de alguno de sus establecimientos, si las dos terceras partes del personal en actividad o de los
acreedores laborales, organizados en cooperativa, incluso en formación, la soliciten al síndico o al juez, si
aquél todavía no se hubiera hecho cargo, a partir de la sentencia de quiebra y hasta cinco (5) días luego de
la última publicación de edictos en el diario oficial que corresponda a la jurisdicción del establecimiento. El
síndico debe ponerlo en conocimiento del juez dentro de las veinticuatro (24) horas. El juez puede adoptar
las medidas que estime pertinentes, incluso la cesación de la explotación, con reserva de lo expuesto en los
párrafos siguientes. Para el caso que la solicitud a que refiere el segundo párrafo el presente, sea una
cooperativa en formación, la misma deberá regularizar su situación en un plazo de cuarenta (40) días, plazo
que podría extenderse si existiesen razones acreditadas de origen ajeno a su esfera de responsabilidad que
impidan tal cometido. (Párrafo sustituido por art. 16 de la Ley Nº 26.684 B.O. 30/06/2011)
Empresas que prestan servicios públicos. Las disposiciones del párrafo precedente y las demás de esta
sección se aplican a la quiebra de empresas que explotan servicios públicos imprescindibles con las
siguientes normas particulares:
1) Debe comunicarse la sentencia de quiebra a la autoridad que ha otorgado la concesión o a la que sea
pertinente;
2) Si el juez decide en los términos del Artículo 191 que la continuación de la explotación de la empresa no
es posible, debe comunicarlo a la autoridad pertinente;
3) La autoridad competente puede disponer lo que estime conveniente para asegurar la prestación del
servicio, las obligaciones que resulten de esa prestación son ajenas a la quiebra;
4) La cesación efectiva de la explotación no puede producirse antes de pasados TREINTA (30) días de la
comunicación prevista en el inciso 2)”.
ARTICULO 190.- Trámite común para todos los procesos. “En toda quiebra, aun las comprendidas en el
artículo precedente, el síndico debe informar al juez dentro de los veinte (20) días corridos contados a partir
de la aceptación del cargo, sobre la posibilidad de continuar con la explotación de la empresa del fallido o
de alguno de sus establecimientos y la conveniencia de enajenarlos en marcha. En la continuidad de la
empresa se tomará en consideración el pedido formal de los trabajadores en relación de dependencia que
representen las dos terceras partes del personal en actividad o de los acreedores laborales quienes deberán
actuar en el período de continuidad bajo la forma de una cooperativa de trabajo. A tales fines deberá
presentar en el plazo de veinte (20) días, a partir del pedido formal, un proyecto de explotación conteniendo
las proyecciones referentes a la actividad económica que desarrollará, del que se dará traslado al síndico
para que en plazo de cinco (5) días emita opinión al respecto.
El término de la continuidad de la empresa, cualquiera sea su causa, no hace nacer el derecho a nuevas
indemnizaciones laborales. El informe del síndico debe expedirse concretamente sobre los siguientes
aspectos:
1) La posibilidad de mantener la explotación sin contraer nuevos pasivos, salvo los mínimos necesarios para
el giro de la explotación de la empresa o establecimiento;
2) La ventaja que resultaría para los acreedores de la enajenación de la empresa en marcha;
3) La ventaja que pudiere resultar para terceros del mantenimiento de la actividad;
4) El plan de explotación acompañado de un presupuesto de recursos, debidamente fundado;
5) Los contratos en curso de ejecución que deben mantenerse;
6) En su caso, las reorganizaciones o modificaciones que deben realizarse en la empresa para hacer
económicamente viable su explotación;
7) Los colaboradores que necesitará para la administración de la explotación;
8) Explicar el modo en que se pretende cancelar el pasivo preexistente.
En caso de disidencias o duda respecto de la continuación de la explotación por parte de los trabajadores, el
juez, si lo estima necesario, puede convocar a una audiencia a los intervinientes en la articulación y al
síndico, para que comparezcan a ella, con toda la prueba de que intenten valerse.
El juez, a los efectos del presente artículo y en el marco de las facultades del artículo 274, podrá de manera
fundada extender los plazos que se prevén en la ley para la continuidad de la empresa, en la medida que
ello fuere razonable para garantizar la liquidación de cada establecimiento como unidad de negocio y con
la explotación en marcha”.
· Facultades del síndico: el síndico, o coadministrador, de acuerdo a lo que haya resuelto el juez, tiene
atribución para realizar todos los actos de administración ordinaria, para lo que excedan de ella debe
requerir autorización judicial.
ARTÍCULO 192.- Régimen aplicable. “De acuerdo a lo que haya resuelto el juez, el síndico, el
coadministrador o la cooperativa de trabajo, según fuera el caso, actuarán de acuerdo al siguiente
régimen:
1) Se consideran autorizados para realizar todos los actos de administración ordinaria que correspondan a
la continuación de la explotación;
2) Para los actos que excedan dicha administración, necesitan autorización judicial, la que sólo será
otorgada en caso de necesidad y urgencia evidentes;
En dicho caso el juez puede autorizar la constitución de garantías especiales cuando resulte indispensable
para asegurar la continuidad de la explotación.
3) Las obligaciones legalmente contraídas por el responsable de la explotación gozan de la preferencia de
los acreedores del concurso;
4) En caso de revocación o extinción de la quiebra, el deudor asume de pleno derecho las obligaciones
contraídas legalmente por el responsable de la explotación;
5) Sólo podrá disponerse de los bienes afectados con privilegio especial desinteresando al acreedor
preferente o sustituyendo dichos bienes por otros de valor equivalente.
En caso que la explotación de la empresa o de alguno de los establecimientos se encuentre a cargo de la
cooperativa de trabajo será aplicable el presente artículo, con excepción del inciso 3).
Conclusión anticipada. El juez puede poner fin a la continuación de la explotación antes del vencimiento del
plazo fijado, por resolución fundada, si ella resultare deficitaria o, de cualquier otro modo, ocasionare
perjuicio para los acreedores”.
D) RESOLUCIÓN JUDICIAL: PRESUPUESTOS; PLAZO, CONTENIDO, CASO DE CONCLUSIÓN ANTICIPADA:
La decisión de continuación de la explotación de la empresa recae en el juez, teniendo en cuenta el
carácter excepcional de esta figura.
PLAZO: la resolución debe ser dictada dentro de los 10 días posteriores a la presentación del informe del
síndico y en ella el juez debe pronunciarse sobre:
CONTENIDO: Artículo 191 LCQ.
1) El plan de la explotación, para lo cual podrá hacerse asesorar por expertos o entidades especializadas;
2) El plazo por el que continuará la explotación; a estos fines se tomará en cuenta el ciclo y el tiempo
necesario para la enajenación de la empresa; este plazo podrá ser prorrogado por una sola vez, por
resolución fundada;
3) La cantidad y calificación profesional del personal que continuará afectado a la explotación;
4) Los bienes que pueden emplearse;
5) La designación o no de uno o más coadministradores; y la autorización al síndico para contratar
colaboradores de la administración;
6) Los contratos en curso de ejecución que se mantendrán; los demás quedarán resueltos;
7) El tipo y periodicidad de la información que deberá suministrar el síndico y, en su caso, el
coadministrador o la cooperativa de trabajo.
ARTICULO 191.- “La autorización para continuar con la actividad de la empresa del fallido o de alguno de
sus establecimientos será dada por el juez en caso de que de su interrupción pudiera emanar una grave
disminución del valor de realización, se interrumpiera un ciclo de producción que puede concluirse, en
aquellos casos que lo estime viable económicamente o en resguardo de la conservación de la fuente laboral
de los trabajadores de la empresa declarada en quiebra.
En su autorización el juez debe pronunciarse explícitamente por lo menos sobre:
1) El plan de la explotación, para lo cual podrá hacerse asesorar por expertos o entidades especializadas;
2) El plazo por el que continuará la explotación; a estos fines se tomará en cuenta el ciclo y el tiempo
necesario para la enajenación de la empresa; este plazo podrá ser prorrogado por una sola vez, por
resolución fundada;
3) La cantidad y calificación profesional del personal que continuará afectado a la explotación;
4) Los bienes que pueden emplearse;
5) La designación o no de uno o más coadministradores; y la autorización al síndico para contratar
colaboradores de la administración;
6) Los contratos en curso de ejecución que se mantendrán; los demás quedarán resueltos;
7) El tipo y periodicidad de la información que deberá suministrar el síndico y, en su caso, el
coadministrador o la cooperativa de trabajo.
Esta resolución deberá ser dictada dentro de los diez (10) días posteriores a la presentación del informe de
la sindicatura previsto en el artículo 190. La resolución que rechace la continuación de la explotación es
apelable por el síndico y la cooperativa de trabajo”.
· Recursos: la resolución que no autoriza la continuación de la empresa es apelable por el síndico al solo
efecto devolutivo.
CONTRATACIONES- EMPRESAS QUE PRESTAN SERVICIOS PÚBLICOS: La ley otorga especial atención a las
empresas que explotan servicios públicos imprescindibles, ya que muchos son prestados por empresas
privadas que, como tal, pueden ser declaradas en quiebra. El segundo párrafo del art. 189 lo legisla
estableciendo lo siguiente: “…Empresas que prestan servicios públicos. Las disposiciones del párrafo
precedente y las demás de esta sección se aplican a la quiebra de empresas que explotan servicios públicos
imprescindibles con las siguientes normas particulares:
1) Debe comunicarse la sentencia de quiebra a la autoridad que ha otorgado la concesión o a la que sea
pertinente;
2) Si el juez decide en los términos del Artículo 191 que la continuación de la explotación de la empresa no
es posible, debe comunicarlo a la autoridad pertinente;
3) La autoridad competente puede disponer lo que estime conveniente para asegurar la prestación del
servicio, las obligaciones que resulten de esa prestación son ajenas a la quiebra;
4) La cesación efectiva de la explotación no puede producirse antes de pasados TREINTA (30) días de la
comunicación prevista en el inciso 2)”.
RELACIONES LABORALES: el artículo 190 LCQ ha sido modificado con la ley 25.589 y sostiene que
“En la continuidad de la empresa se tomará en consideración el pedido formal de los trabajadores en
relación de dependencia que representen las dos terceras partes del personal en actividad o de los
acreedores laborales quienes deberán actuar en el período de continuidad bajo la forma de una
cooperativa de trabajo. A tales fines deberá presentar en el plazo de veinte (20) días, a partir del pedido
formal, un proyecto de explotación conteniendo las proyecciones referentes a la actividad económica que
desarrollará, del que se dará traslado al síndico para que en plazo de cinco (5) días emita opinión al
respecto.
El término de la continuidad de la empresa, cualquiera sea su causa, no hace nacer el derecho a nuevas
indemnizaciones laborales”. Su vez el último párrafo del mismo artículo establece que: “El juez, a los efectos
del presente artículo y en el marco de las facultades del artículo 274, podrá de manera fundada extender
los plazos que se prevén en la ley para la continuidad de la empresa, en la medida que ello fuere razonable
para garantizar la liquidación de cada establecimiento como unidad de negocio y con la explotación en
marcha”.
Esta normativa establece que debe tenerse en cuenta el pedido que hagan los trabajadores o acreedores
laborales, quienes actuaran bajo la forma de cooperativa. Pero, según Rivera esto lleva a malas
aplicaciones, puesto que el legislador no la concibió como continuación de la explotación. De modo que
estas cooperativas administrarán los establecimientos de otros, en beneficio propio, sin pagar nada ni
asumir responsabilidades y generando pasivos que soportaran los acreedores del quebrado. Nadie pensó
los efectos que ello puede causar. Rivera dice que es disparate demagógico.
En caso de la continuidad de la empresa haya sido atribuida como cooperativa de trabajo, el síndico tiene
una tarea de contralor de los resultados de la gestión de la cooperativa.
LOCACIÓN: La ley dispone que cuando se resuelva la continuación de la empresa, y el síndico aconseje la
enajenación en bloque de los bienes, se mantiene los contratos de locación en las condiciones
preexistentes y el concurso responde por los arrendamientos y demás consecuencias futuras. Esto significa
que el crédito por los arrendamientos, y demás que surjan de la relación locativa, será considerado como
gasto de conservación y justicia.
ARTÍCULO 193.- Contratos de locación. “En los casos de continuación de la empresa y en los que el síndico
exprese dentro de los TREINTA (30) días de la quiebra la conveniencia de la realización en bloque de los
bienes se mantienen los contratos de locación en las condiciones preexistentes y el concurso responde
directamente por los arrendamientos y demás consecuencias futuras. Son nulos los pactos que establezcan
la resolución del contrato por la declaración de quiebra”.
ARTÍCULO 194.- Cuestiones sobre locación. “Las cuestiones que respecto de la locación promueva el
locador, no impiden el curso de la explotación de la empresa del fallido o la enajenación prevista por el
Artículo 205, debiéndose considerar esas circunstancias en las bases pertinentes”.
HIPOTECA Y PRENDA: El artículo 195 de la LCQ dispone que en caso de continuación de la empresa, los
acreedores hipotecarios y prendarios no podrán hacer uso del derecho a liquidar los bienes en concurso
especial, cuando los créditos no se hallen vencidos y el síndico satisfaga las obligaciones posteriores en
tiempo debido; declara además la nulidad de los pactos contrarios a esta disposición. La norma constituye
una excepción a la regla del artículo 128 de la LCQ que dispone el vencimiento de todos los plazos por la
quiebra. En efecto, en este caso, si los plazos no estaban vencidos, subsisten en beneficio de la
continuación de la explotación de la empresa del fallido, por lo que el síndico podrá pagar en los plazos
establecidos.
COMPETENCIA:
INCIDENTES:
Incidentes
ARTICULO 280 LCQ.- Casos. “Toda cuestión que tenga relación con el objeto principal del concurso y no se
halle sometida a un procedimiento especial, debe tramitar en pieza separada, en la forma prevista por las
disposiciones de este Capítulo”.
ARTÍCULO 281 LCQ.-Trámite. “En el escrito en el que se plantee el incidente debe ofrecerse toda la prueba y
agregarse la documental. Si el juez estima manifiestamente improcedente la petición, debe rechazarla sin
más trámite. La resolución es apelable al solo efecto devolutivo.
Si admite formalmente el incidente, corre traslado por DIEZ (10) días, el que se notifica por cédula. Con la
contestación se debe ofrecer también la prueba y agregarse los documentos”.
ARTÍCULO 282 LCQ.- Prueba. “La prueba debe diligenciarse en el término que el juez señale, dentro del
máximo de VEINTE (20) días. Si fuere necesario fijar audiencia, se la designa dentro del término indicado,
para que se produzca toda la prueba que la exija.
Corresponde a las partes urgir para que la prueba se reciba en los términos fijados; el juez puede declarar
de oficio la negligencia producida y también dictar resolución una vez vencido el plazo, aun cuando la
prueba no esté totalmente diligenciada, si estima que no es necesaria su producción”.
ARTÍCULO 283 LCQ.- Prueba pericial. “La prueba pericial se practica por UN (1) solo perito designado de
oficio, salvo que por la naturaleza del asunto el juez estime pertinente designar TRES (3). En este último
caso, dentro de los DOS (2) días posteriores a la designación, las partes pueden proponer en escrito
conjunto DOS (2) peritos. Estos actúan con el primero de los designados por el juez, quedando sin efecto la
designación de los restante”.
ARTÍCULO 284 LCQ.- Testigos. “No se admiten más de CINCO (5) testigos por cada parte.
Cuando por la complejidad de la causa o de los hechos controvertidos resulte necesario mayor número, se
deben proponer con la restante prueba. Si no se admite la ampliación comparecen solamente los CINCO (5)
ofrecidos en primer término”.
ARTÍCULO 285 LCQ.- Apelación. “Sólo es apelable la resolución que pone fin al incidente.
Respecto de las resoluciones que deciden artículo o que niegan alguna medida de prueba, la parte
interesada puede solicitar al tribunal de alzada su revocación cuando lo solicite fundadamente en el recurso
previsto en el párrafo precedente”.
ARTÍCULO 286 LCQ.- Simultaneidad de incidentes. “Todas las cuestiones incidentales cuyas causas
existieran simultáneamente y sean conocidas por quien los promueve deben ser planteadas conjuntamente.
Se deben desestimar sin más trámite las que se entablen con posterioridad”.
ARTÍCULO 287 LCQ.- Honorarios de incidentes. “En los procesos de revisión de verificaciones de créditos y
en los de verificación tardía, se regularán honorarios de acuerdo a lo previsto para los incidentes en las
leyes arancelarias locales, tomándose como monto del proceso principal el del propio crédito insinuado y
verificado”.
JUICIOS EN TRÁMITE:
JUICIOS POSTERIORES:
LEGITIMACIÓN PROCESAL: El síndico es quien debe deducir la acción, previa autorización de los
acreedores que representen la mayoría simple del capital quirografario verificado y declarado admisible. Si
el síndico no deduce la acción, cualquier acreedor interesado podrá promoverla.
· Procedimiento: la acción tramitará por las reglas del juicio ordinario
· Prescripción: a los 2 años contados desde la fecha de sentencia de quiebra. La instancia perime a los 6
meses.
· Medidas precautorias: el juez puede disponer, a pedido del síndico y bajo responsabilidad del concurso la
adopción de medidas precautorias, aun antes de iniciada la acción. Se requiere que se acredite la
responsabilidad que se imputa.
ARTÍCULO 174.- Extensión, trámite y prescripción. “La responsabilidad prevista en el artículo anterior se
extiende a los actos practicados hasta UN (1) año antes de la fecha inicial de la cesación de pagos y se
declara y determina en proceso que corresponde deducir al síndico. La acción tramitará por las reglas del
juicio ordinario, prescribe a los DOS (2) años contados desde la fecha de sentencia de quiebra y la instancia
perime a los SEIS (6) meses. A los efectos de la promoción de la acción rige el régimen de autorización
previa del Artículo 119 tercer párrafo”.
ARTÍULO 175.- Socios y otros responsables. “El ejercicio de las acciones de responsabilidad contra socios
limitadamente responsables, administradores, síndicos y liquidadores, corresponde al síndico.
Acciones en trámite. Si existen acciones de responsabilidad iniciadas con anterioridad, continúan por ante
el Juzgado del concurso. El síndico puede optar entre hacerse parte coadyuvante en los procesos en el
estado en que se encuentren o bien mantenerse fuera de ellos y deducir las acciones que corresponden al
concurso por separado”.
ARTÍCULO 176.- “Medidas precautorias. En los casos de los artículos precedentes, bajo la responsabilidad
del concurso y a pedido del síndico, el juez puede adoptar las medidas precautorias por el monto que
determine, aun antes de iniciada la acción.
Para disponerlo se requiere que sumaria y verosímilmente se acredite la responsabilidad que se imputa.
Las acciones reguladas en esta sección se tramitan por ante el juez del concurso y son aplicables los
Artículos 119 y 120, en lo pertinente”.
EXTENSIÓN: Las acciones de responsabilidad previstas en el artículo 173 LCQ pueden promoverse en
relación a actos llevados a cabo hasta un año antes de la fecha inicial de la cesación de pagos. A los fines de
la responsabilidad de representantes y de terceros, no rige el plazo máximo de retroacción (dos años). De
este modo, los actos que generan la responsabilidad patrimonial de terceros y representantes en caso de
quiebra, pueden haber sido efectuado mucho tiempo atrás de la declaración judicial de la respectiva
falencia.
PRESCRIPCIÓN: Las acciones del artículo 173 LCQ tienen un plazo de prescripción de dos años. Tal plazo
arranca desde la fecha del dictado de la sentencia de quiebra, independientemente de que mediaran o no
recursos contra ella.
ARTÍCULO 176.- “Medidas precautorias. En los casos de los artículos precedentes, bajo la responsabilidad
del concurso y a pedido del síndico, el juez puede adoptar las medidas precautorias por el monto que
determine, aun antes de iniciada la acción.
Para disponerlo se requiere que sumaria y verosímilmente se acredite la responsabilidad que se imputa.
Las acciones reguladas en esta sección se tramitan por ante el juez del concurso y son aplicables los
Artículos 119 y 120, en lo pertinente”.
ARTICULO 200.- “Todos los acreedores por causa o título anterior a la declaración de quiebra y sus
garantes, deben formular al síndico el pedido de verificación de sus créditos, indicando monto, causa y
privilegios. La petición debe hacerse por escrito, en duplicado acompañando los títulos justificativos con dos
(2) copias firmadas; debe expresar el domicilio, que constituya a todos los efectos del juicio. El síndico
devuelve los títulos originales, dejando en ellos constancia del pedido de verificación y su fecha. Puede
requerir la presentación de los originales, cuando lo estime conveniente. La omisión de presentarlos obsta a
la verificación.
Efectos: El pedido de verificación produce los efectos de la demanda judicial, interrumpe la prescripción e
impide la caducidad del derecho y de la instancia.
Por cada solicitud de verificación de crédito que se presente, el acreedor, sea tempestivo, incidental o
tardío, pagará al síndico un arancel equivalente al diez por ciento (10%) del salario mínimo vital y móvil que
se sumará a dicho crédito. El síndico afectará la suma recibida a los gastos que le demande el proceso de
verificación y confección de los informes, con cargo de oportuna rendición de cuentas al juzgado, quedando
el remanente como suma a cuenta de honorarios a regularse por su actuación. Exclúyase del arancel a los
créditos de causa laboral, y a los equivalentes a menos de tres (3) salarios mínimos vitales y móviles, sin
necesidad de declaración judicial.
Facultades de información: El síndico debe realizar todas las compulsas necesarias en los libros y
documentos del fallido y, en cuanto corresponda, en los del acreedor. Puede asimismo valerse de todos los
elementos de juicio que estimule útiles y, en caso de negativa a suministrarlos, solicitar del juez de la causa
las medidas pertinentes.
Debe formar y conservar los legajos correspondientes a los acreedores que soliciten la verificación de sus
créditos. En dichos legajos el síndico deberá dejar la constancia de las medidas realizadas.
Período de observación de créditos: Vencido el plazo para solicitar la verificación de los créditos ante el
síndico por parte de los acreedores durante el plazo de diez (10) días, contados a partir de la fecha de
vencimiento, el deudor y los acreedores que hubieren solicitado verificación podrán concurrir al domicilio
del síndico a efectos de revisar los legajos y formular por escrito las impugnaciones y observaciones
respecto de las solicitudes formuladas, bajo el régimen previsto en el artículo 35. Dichas impugnaciones
deberán ser acompañadas de dos (2) copias y se agregarán el legajo correspondiente, entregando el síndico
al interesado constancia que acredite la recepción, indicando día y hora de la presentación.
Dentro de las cuarenta y ocho (48) horas de vencido el plazo previsto en el párrafo anterior, el síndico
presentará al juzgado un (1) juego de copias de las impugnaciones recibidas para su incorporación al legajo
previsto por el artículo 279.
El síndico debe presentar los informes a que se refieren los artículos 35 y 39 en forma separada respecto de
cada uno de los quebrados.
Resultan aplicables al presente capítulo las disposiciones contenidas en los artículos 36, 37, 38 y 40”.
ARTÍCULO 201.- Comité de control. “Dentro de los diez (10) días contados a partir de la resolución del
artículo 36, el síndico debe promover la constitución del comité de control que actuará como controlador de
la etapa liquidatoria. A tal efecto cursará comunicación escrita a la totalidad de los trabajadores que
integren la planta de personal de la empresa y a los acreedores verificados y declarados admisibles, con el
objeto que, por mayoría de capital designen los integrantes del comité”.
3. Informe individual del síndico (se aplica el artículo 35 del concurso preventivo).
ARTÍCULO 35.- Informe individual. “Vencido el plazo para la formulación de observaciones por parte del
deudor y los acreedores, en el plazo de VEINTE (20) días, el síndico deberá redactar un informe sobre cada
solicitud de verificación en particular, el que deberá ser presentado al juzgado.
Se debe consignar el nombre completo de cada acreedor, su domicilio real y el constituido, monto y causa
del crédito, privilegio y garantías invocados; además, debe reseñar la información obtenida, las
observaciones que hubieran recibido las solicitudes, por parte del deudor y de los acreedores, y expresar
respecto de cada crédito, opinión fundada sobre la procedencia de la verificación del crédito y el privilegio.
También debe acompañar una copia, que se glosa al legajo a que se refiere el artículo 279, la cual debe
quedar a disposición permanente de los interesados para su examen, y copia de los legajos”.
4. Resolución judicial sobre los créditos: se aplican los artículos 36, 37 y 38 del concurso preventivo.
ARTÍCULO 36.- Resolución judicial. “Dentro de los DIEZ (10) días de presentado el informe por parte del
síndico, el juez decidirá sobre la procedencia y alcances de las solicitudes formuladas por los acreedores. El
crédito o privilegio no observados por el síndico, el deudor o los acreedores es declarado verificado, si el
juez lo estima procedente.
Cuando existan observaciones, el juez debe decidir declarando admisible o inadmisible el crédito o el
privilegio.
Estas resoluciones son definitivas a los fines del cómputo en la evaluación de mayorías y base del acuerdo,
sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo siguiente”.
ARTÍCULO 37.- Efectos de la resolución. “La resolución que declara verificado el crédito y, en su caso, el
privilegio, produce los efectos de la cosa juzgada, salvo dolo.
La que lo declara admisible o inadmisible puede ser revisada a petición del interesado, formulada dentro de
los VEINTE (20) días siguientes a la fecha de la resolución prevista en el artículo 36. Vencido este plazo, sin
haber sido cuestionada, queda firme y produce también los efectos de la cosa juzgada, salvo dolo”.
ARTÍCULO 38.- Invocación de dolo. Efectos. “Las acciones por dolo a que se refiere el artículo precedente
tramitan por vía ordinaria ante el juzgado del concurso, y caducan a los NOVENTA (90) días del la fecha en
que se dictó la resolución judicial previstaen el artículo 36. La deducción de esta acción no impide el
derecho del acreedor a obtener el cumplimiento del acuerdo, sin perjuicio de las medidas precautorias que
puedan dictarse”.
Según el artículo 202 debe requerir la verificación por vía incidental, en la que no se aplican las costas,
salvo pedido u oposición manifiestamente improcedente.
Si la quiebra se decreta por nulidad de un acuerdo preventivo o por incumplimiento, se abre un nuevo
periodo informativo para los acreedores posconcurso preventivo. Por lo que la verificación por incidente
procede en los casos de quiebra por frustración del acuerdo siempre que esa frustración no sea causada
por nulidad o incumplimiento del acuerdo preventivo
ARTÍCULO 202.- Quiebra indirecta. “En los casos de quiebra declarada por aplicación del Artículo 81, inciso
1, los acreedores posteriores a la presentación pueden requerir la verificación por vía incidental, en la que
no se aplican costas sino en casos de pedido u oposición manifiestamente improcedente. Los acreedores
que hubieran obtenido verificación de sus créditos en el concurso preventivo no tendrán necesidad de
verificar nuevamente. El síndico procederá a recalcular los créditos según su estado”.
II. Se disponía que estos nuevos acreedores quedaban equiparados a los terceros en cuanto a la
determinación de la fecha inicial de la cesación de pagos.
Ambas reglas han desaparecido en la ley vigente. En primer caso porque ya no hay régimen de
impugnación como el que preveía la ley 19.551. Entonces ¿tienen algún mecanismo impugnativo los
acreedores nuevos contra las verificaciones anteriores? Rivera plantea que los acreedores que se
incorporan al pasivo deben soportar el efecto de cosa juzgada que tiene la sentencia verificadora ya
dictada, pero podrían cuestionar la eficacia de tal sentencia por vía de una acción declarativa de ineficacia
por cosa juzgada fraudulenta.
En cuanto a la fecha de cesación de pagos, ante el silencio de la ley actual, la fijación de la fecha de
cesación de pagos hará cosa juzgada solo respecto de aquellos que tuvieron oportunidad de hacer
observaciones en los términos del artículo 40 de la LCQ, mientras que admitirá una mera presunción que
admite prueba en contrario respecto de los demás.
TRÁMITE:
En la quiebra es posible que ocurran verificaciones tardías. El artículo 223 LCQ establece:
ARTÍCULO 223.- “Presentación tardía de acreedores. Los acreedores que comparezcan en el concurso,
reclamando verificación de créditos o preferencias, después de haberse presentado el proyecto de
distribución final, sólo tienen derecho a participar de los dividendos de las futuras distribuciones
complementarias, en la proporción que corresponda al crédito total no percibido”.
ARTÍCULO 224.- Dividendo concursal. Caducidad. “El derecho de los acreedores a percibir los importes que
les correspondan en la distribución caduca al año contado desde la fecha de su aprobación.
La caducidad se produce de pleno derecho, y es declarada de oficio, destinándose los importes no cobrados
al patrimonio estatal, para el fomento de la educación común”.
BOLILLA XXI
- Si hay recurso de reposición pendiente contra la sentencia de quiebra directa a solicitud del
acreedor.
- Si hay recurso de apelación pendiente contra la sentencia de quiebra indirecta cuando esta fuese
apelable.
ARTÍCULO 88.- Contenido. “La sentencia que declare la quiebra debe contener:
9) Orden de realización de los bienes del deudor y la designación de quien efectuará las enajenaciones”.
OPORTUNIDAD:
ARTÍCULO 203.- Oportunidad. “La realización de los bienes se hace por el síndico y debe comenzar de
inmediato salvo que se haya interpuesto recurso de reposición contra la sentencia de quiebra, haya sido
admitida por el juez la conversión en los términos del artículo 90, o se haya resuelto la continuación de la
explotación según lo normado por los artículos 189, 190 y 191.
La ley dispone que la realización de los bienes se hace por el síndico. Pero esto es equivocado, pues lo único
que ella significa es que el síndico está encargado de instar el procedimiento para que quien haya sido
designado enajenador (martillero) proceda a la venta de los bienes en algunos de los modos autorizados
por la ley”.
2) En todos los casos comprendidos en el presente artículo la cooperativa de trabajo podrá realizar oferta y
requerir la adjudicación de la empresa al valor de tasación de acuerdo al inciso anterior;
3) La venta debe ser ordenada por el juez y puede ser efectuada en subasta pública. En ese caso deben
cumplirse las formalidades del artículo 206 y las establecidas en los incisos 4), 5) y 6) del presente artículo,
en lo pertinente;
4) Si el juez ordena la venta, sin recurrir a subasta pública, corresponde al síndico, con asistencia de quien
haya sido designado para la enajenación, proyectar un pliego de condiciones en el que debe expresar la
base del precio, que será la de la tasación efectuada o la que surja del artículo 206, la que sea mayor,
descripción sucinta de los bienes, circunstancias referidas a la locación en el caso en que el fallido fuere
locatario, y las demás que considere de interés.
La base propuesta no puede ser inferior a la tasación prevista en el inciso 1). Pueden incluirse los créditos
pendientes de realización, vinculados con la empresa o establecimiento a venderse, en cuyo caso debe
incrementarse prudencialmente la base. La condición de venta debe ser al contado, y el precio deberá ser
íntegramente pagado con anterioridad a la toma de posesión, la que no podrá exceder de veinte (20) días
desde la notificación de la resolución que apruebe la adjudicación.
El juez debe decidir el contenido definitivo del pliego, mediante resolución fundada. A tal efecto puede
requerir el asesoramiento de especialistas, bancos de inversión, firmas consultoras, u otras entidades
calificadas en aspectos técnicos, económicos, financieros y del mercado.
Esta resolución debe ser dictada dentro de los veinte (20) días posteriores a la presentación del proyecto del
síndico;
5) Una vez redactado el pliego, se deben publicar edictos por dos (2) días, en el diario de publicaciones
legales y en otro de gran circulación en jurisdicción del tribunal y, además, en su caso, en el que tenga
iguales características en los lugares donde se encuentren ubicados los establecimientos.
Los edictos deben indicar sucintamente la ubicación y destino del establecimiento, base de venta y demás
condiciones de la operación; debe expresarse el plazo dentro del cual pueden formularse ofertas dirigidas
en sobre cerrado al tribunal y el día y hora en que se procederá a su apertura. El juez puede disponer una
mayor publicidad, en el país o en el extranjero, si lo estima conveniente;
6) Las ofertas deben presentarse en sobre cerrado, y contener el nombre, domicilio real y especial
constituido dentro de la jurisdicción del tribunal, profesión, edad y estado civil. Deben expresar el precio
ofrecido. Tratándose de sociedades, debe acompañarse copia auténtica de su contrato social y de los
documentos que acrediten la personería del firmante.
El oferente debe acompañar garantía de mantenimiento de oferta equivalente al diez por ciento (10%) del
precio ofrecido, en efectivo, en títulos públicos, o fianza bancaria exigible a primera demanda;
7) Los sobres conteniendo las ofertas deben ser abiertos por el juez, en la oportunidad fijada, en presencia
del síndico, oferentes y acreedores que concurran. Cada oferta debe ser firmada por el secretario para su
individualización, labrándose acta. En caso de empate el juez puede llamar a mejorar ofertas.
Las diligencias indicadas en los incisos 1) a 7) de este artículo deben ser cumplidas dentro de los cuatro (4)
meses de la fecha de la quiebra, o desde que ella quede firme, si se interpuso recurso de reposición o desde
que haya finalizado la continuación según corresponda para cada caso. El juez puede, por resolución
fundada, ampliar el plazo en noventa (90) días;
9) Dentro del plazo de veinte (20) días, desde la notificación de la resolución definitiva que apruebe la
adjudicación, el oferente debe pagar el precio, depositando el importe. Cumplida esta exigencia, el juez
debe ordenar que se practiquen las inscripciones pertinentes, y que se otorgue la posesión de lo vendido. Si
vencido el plazo el adjudicatario no deposita el precio, pierde su derecho y la garantía de mantenimiento de
oferta. En ese caso el juez adjudica a la segunda mejor oferta que supere la base;
10) Fracasada la primera licitación, en el mismo acto el juez, convocará a una segunda licitación, la que se
llamará sin base”.
La noción de empresa está referida a los elementos comprendidos en ella. La empresa está constituida
por el establecimiento y por los derechos inmateriales que permiten su operación, el nombre comercial,
la denominación social, etc.
- La enajenación debe ser hecha, en principio, con base. La base no puede ser inferior a la tasación ni al
importe que surja de sumar todos los créditos afectados con hipoteca, prenda o privilegio especial.
- La venta puede ser hecha en subasta pública, con cumplimiento de los recaudos de tasación, base y
fijación de condiciones de la venta. O puede prescindirse de la subasta pública, en cuyo caso se utiliza un
sistema licitario, en base a un pliego que confecciona el síndico y que debe ser aprobado por el juez, en
resolución fundada, pudiendo requerir el asesoramiento de especialistas.
- La enajenación debe estar precedida de una adecuada publicidad, para lo cual se publican edictos por
dos días. Además el juez puede ordenar publicidad adicional.
- La venta debe ser siempre al contado, por lo que la adjudicación se hace a quien haya ofrecido mejor
precio, y el precio debe ser pagado íntegramente antes de la entrega de la posesión.
- Si el adjudicatario no deposita el precio en el plazo legal, se adjudica a la segunda mejor oferta que
supere la base.
3. CONCURSO ESPECIAL DE BIENES GRAVADOS; EJECUCIÓN SEPARADA Y SUBROGACIÓN; EJECUCIÓN POR
REMATE NO JUDICIAL; COMPENSACIÓN DEL PRECIO; OFERTAS BAJO SOBRE (FINALIDAD, RÉGIMEN
LEGAL).
ARTÍCULO 206.- Bienes gravados. “Si en la enajenación a que se refiere el artículo anterior, se incluyen
bienes afectados a hipoteca, prenda o privilegio especial, estas preferencias se trasladan de pleno derecho
al precio obtenido, el que, en ese caso, no puede ser inferior a la suma de los mencionados créditos, que el
síndico debe hacer constar en planilla especial. El acreedor preferente omitido que no requiera su inclusión
dentro de los DIEZ (10) días de publicado el primer edicto, no tiene preferencia sino después de los
mencionados en la planilla, y hasta el producido líquido de la enajenación.
Si la enajenación a que se refiere el artículo anterior se realizara en los términos del Art. 205, inc. 9, el
síndico practicará un informe haciendo constar la participación proporcional que cada uno de los bienes con
privilegio especial han tenido en relación con el precio obtenido, y el valor probable de realización de los
mismos en forma individual en condiciones de mercado. De dicho informe se correrá vista a los interesados
por el término de CINCO (5) días a fin de que formulen las oposiciones u observaciones que éste le merezca,
pudiendo ofrecer prueba documental, pericial y de informes respecto del valor de realización de los bienes
asiento de la hipoteca, prenda o privilegio especial. Vencido dicho plazo y sustanciada la prueba si la
hubiere el juez resolverá asignando valor a la participación de los bienes asiento del privilegio en el precio
obtenido. La resolución es apelable; el recurso en ningún caso obstará a la adjudicación y entrega de los
bienes vendidos”.
Los bienes afectados a hipoteca o prenda pueden, en principio, ser ejecutados separadamente de la
liquidación general del activo falencial, mediante el concurso especial. Sin embargo, en algunos casos, el
acreedor hipotecario o prendario no postula la efectivización del concurso especial, o está impedido
legalmente de hacerlo, debiendo someterse a la liquidación general o común.
El artículo 206 LCQ fija una regla que establece una suerte de base no inferior a la suma de los créditos
con privilegio especial, debajo de la cual no puede enajenarse la empresa o el establecimiento. Si esa suma
se obtiene, a ella se traslada el ejercicio de los susodichos privilegios, que quedan íntegramente cubiertos.
Para el caso de venta de bienes integrando un conjunto o unidad, comprensivo de algunos afectados a
privilegios especiales, prenda o hipoteca, el fracaso de la licitación con base autoriza a ordenar otra sin
base. Esto hace posible que se obtenga un precio inferior a la suma de las acreencias con privilegio
especial. El reparto, en tal caso, se hace siguiendo las reglas propias de la concurrencia de los acreedores
privilegiados especiales. Sin embargo, al venderse los bienes en conjunto, resulta problemático esclarecer
sobre cual cantidad de dinero ha de ejercerse la subrogación real de cada acreedor privilegiado especial. A
fin de salvar esta dificultad, antes de la venta por licitación sin base, se debe establecer la proporción que
ha de ser asignada, a cada bien afectado a privilegio especial, sobre el precio total que se obtuviese.
Escaso valor del bien en cuestión, que no justificare incurrir en los gastos propios de los
mecanismos de venta por medio de licitación y subasta
En ese caso, determina la forma de enajenación, que puede confiar al síndico o a un intermediario,
institución o mercado especializado. La venta que realicen requiere aprobación judicial posterior”.
En principio, el síndico puede y debe cobrar los créditos del fallido. Sin autorización judicial, el síndico
puede llevar a efecto la cobranza directamente. En caso de que por la cantidad y complejidad de los
créditos que se le adeuden al fallido, es posible que el juez autorice la gestión de cobro a bancos oficiales o
privados de primera línea, o bien, recurrir a la forma que sea la acostumbrada en la plaza y brinde
suficiente garantía.
En circunstancias especiales, el juez puede disponer la enajenación de créditos, en forma individual o como
cartera crediticia, privadamente de manera directa, por licitación o por subasta. Debe darse audiencia al
deudor y vista al síndico.
ARTÍCULO 216.- Créditos. “Los créditos deben ser realizados en la forma prevista por el Artículo 182.
El síndico puede encomendar a bancos oficiales o privados de primera línea, la gestión de cobro o, con
autorización judicial, recurrir a otra forma que sea costumbre en la plaza y brinde suficiente garantía.
Sin embargo, cuando circunstancias especiales lo hagan aconsejable, el juez puede autorizar la subasta de
créditos o su enajenación privada, en forma individual o por cartera, previa conformidad del síndico y vista
al deudor, pudiendo utilizar el procedimiento del Artículo 205, inclusive, en lo pertinente”.
AMPLIACIÓN: Las enajenaciones deben ser efectuadas dentro de los 4 meses contados desde la fecha de
quiebra, pudiendo el juez ampliar por 90 días.
Antes de la reforma de la ley 25.684, la norma preveía graves sanciones, tanto para el juez como para la
sindicatura, las que fueron suprimidas por completo. Si bien es deseable que una quiebra sea rápida y
eficazmente tramitada y concluida, en la práctica el plazo de 4 meses no es alcanzado casi nunca.
Distinto es el supuesto de continuación de explotación de la empresa, en cuyo caso se aplican los plazos
del artículo 191.
ARTÍCULO 217.- Plazos. “Las enajenaciones previstas en los artículos 205 a 213 y 214, parte final, deben ser
efectuadas dentro de los cuatro (4) meses contados desde la fecha de la quiebra, o desde que ella queda
firme, si se interpuso recurso de reposición. El juez puede ampliar ese plazo en noventa (90) días, por
resolución fundada. En caso de continuación se aplicará el plazo establecido en el artículo 191, in. 2.
Sanción. El incumplimiento de los plazos previstos en este Capítulo para la enajenación de los bienes o
cumplimiento de las diligencias necesarias para ello da lugar a la remoción automática del síndico y del
martillero o la persona designada para la enajenación. Asimismo, respecto del juez, dicho incumplimiento
podrá ser considerado causal de mal desempeño del cargo”.
1. PREFERENCIAS Y PRIVILEGIOS.
1- CONCEPTO. DISTINGO; RÉGIMEN LEGAL. CONFRONTACIÓN CON EL RÉGIMEN CIVIL.
2- PRINCIPIOS QUE REGULAN EL SISTEMA DE LOS PRIVILEGIOS EN MATERIA CONCURSAL. EXTENSIÓN Y
PRELACIÓN.
1. PREFERENCIAS Y PRIVILEGIOS.
· Nociones básicas: La distribución del dinero obtenido de la venta de los bienes desapoderados debe
hacerse tomando en consideración la graduación de los créditos, esto es, los privilegios que han sido
reconocidos en el proceso de verificación y graduación.
ARTÍCULO 239 LCQ.- Régimen. “Existiendo concurso, sólo gozarán de privilegio los créditos enumerados en
este capítulo, y conforme a sus disposiciones.
Conservación del privilegio. Los créditos privilegiados en el concurso preventivo mantienen su graduación
en la quiebra que, posteriormente, pudiere decretarse. Igual regla se aplica a los créditos previstos en el
Artículo 240.
Acumulación. Los créditos a los que sólo se reconoce privilegio por un período anterior a la presentación en
concurso, pueden acumular la preferencia por el período correspondiente al concurso preventivo y la
quiebra”.
1- CONCEPTO:
La definición legal dice que privilegio es el derecho a ser pagado con preferencia a otro acreedor.
Por ejemplo, al venderse una cosa del deudor para pagar a los acreedores, si sobre ese producido de la
venta se ejerce un privilegio, este crédito privilegiado excluye a los otros créditos hasta el límite de su
satisfacción.
El privilegio, autoriza a excluir otros créditos de la posibilidad de concurrir a cobrar sobre el asiento del
privilegio.
El CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL lo define en el artículo 2573.
ARTÍCULO 2573.- Definición. Asiento. “Privilegio es la calidad que corresponde a un crédito de ser pagado
con preferencia a otro. Puede ejercitarse mientras la cosa afectada al privilegio permanece en el patrimonio
del deudor, excepto disposición legal en contrario y el supuesto de subrogación real en los casos que la ley
admite. El privilegio no puede ser ejercido sobre cosas inembargables declaradas tales por la ley”.
·Otras ventajas que no son privilegios: Ciertos créditos gozan de ventajas temporales. Por ejemplo, los
acreedores de origen laboral tienen derecho al pronto pago, y los créditos muñidos de garantías reales
tienen derecho al pago anticipado. ESTAS VENTAJAS NO SON PRIVILEGIOS, aunque aparecen generalmente
vinculadas a créditos privilegiados.
¿Cuándo funcionan los privilegios? Los privilegios son eficaces cuando concurren varios acreedores de un
deudor común.
Los privilegios especiales pueden hacerse valer tanto en una ejecución individual cuanto en el concurso o
quiebra del deudor. Cuando se ejercen en una ejecución especial se aplica la regulación establecida en el
Código Civil y Comercial y a veces en leyes especiales; pero si hay concurso o quiebra la única regulación
aplicable es la de la LCQ.
En cambio, los privilegios generales sólo funcionan en el supuesto de concurso o quiebra del deudor, pues
suponen la liquidación de todo el patrimonio de éste. Por lo tanto, siempre se aplica la LCQ.
¿Cuál es el fundamento del privilegio? Molinario afirma que el fundamento radica en que la ley protege a
todos aquellos que, mereciendo una garantía para el cobro del crédito, no están en condiciones de exigir la
constitución de un derecho real. El médico que asiste en la última enfermedad, el dependiente, el
funebrero y el asalariado no pueden exigir la constitución de una prenda o hipoteca de seguridad del pago
de sus servicios y por ello la ley les asigna preferencia.
· Asiento del privilegio: Es la suma de dinero que resulta e la venta de una cosa del deudor (privilegio
especial), o de todas las que componen el patrimonio del deudor (privilegio general).
· Asientos subordinados: Están constituidos por las sumas de dinero que el deudor recibe en reemplazo de
la cosa; por ejemplo, indemnización debida por el seguro cuando la cosa se incendia o es destruida.
ARTÍCULO 245 LCQ.- Subrogación real. “El privilegio especial se traslada de pleno derecho sobre los
importes que sustituyan los bienes sobre los que recaía, sea por indemnización, precio o cualquier otro
concepto que permita la subrogación real. En cuanto exceda de dichos importes los créditos se consideran
comunes o quirografarios para todos sus efectos, salvo lo dispuesto en el Artículo 246 inciso 1”.
· Jerarquía: Alude, en primer término, a los distintos tipos de créditos, y en este sentido podemos aludir a
los créditos muñidos de una causa legítima de preferencia (privilegio o preferencia nacida de una garantía
real) y los créditos quirografarios o comunes.
En segundo sentido, se puede referir a los distintos tipos de créditos privilegiados: créditos con privilegio
especial y créditos con privilegio general.
· Rango, graduación o concurrencia: Se indica el orden entre los créditos que tienen privilegio, de distinta
o de la misma jerarquía. Así se habla del orden de los privilegios, y del orden o rango de los privilegios
especiales o generales.
En la LCQ se trata unificadamente los privilegios y las preferencias causadas por derechos reales de
garantía, pero a éstas les acuerda una extensión distinta (artículo 242 inciso 2 LCQ).
ARTÍCULO 242.- Los privilegios se extienden exclusivamente al capital del crédito, salvo en los casos que
a continuación se enumeran en que quedan amparados por el privilegio:
“1) Los intereses por DOS (2) años contados a partir de la mora de los créditos enumerados en el inciso 2 del
Artículo 241;
2) Las costas, todos los intereses por DOS (2) años anteriores a la quiebra y los compensatorios posteriores
a ella hasta el efectivo pago con la limitación establecida en el Artículo 126, cuando se trate de los créditos
enumerados en el inciso 4 del Artículo 241. En este caso se percibirán las costas, los intereses anteriores a la
quiebra, el capital y los intereses compensatorios posteriores a la quiebra, en ese orden.
El privilegio reconocido a los créditos previstos en el inciso 6 del Artículo 241 tienen la extensión prevista en
los respectivos ordenamientos”.
EJEMPLO: En la quiebra había $2.000 para repartir; $500 se aplicaron a créditos con privilegio especial;
$250 a honorarios (créditos de conservación y de justicia); con lo que quedan $1.350. Con ello se pagan
$250 en concepto de salarios privilegiados conforme al inciso 1 del artículo 246 LCQ. Quedan $1.100, de los
cuales $550 se reparten entre los créditos con privilegio general, y $550 quedan para los privilegiados
generales en la parte no satisfecha y los quirografarios a prorrata de sus créditos.
PRORRATA = Deriva de la expresión “pro rata parte”, que significa “de acuerdo a la parte calculada”.
Es la cuota o porción que debe pagar, o toca recibir, a cada uno de los participantes en un reparto, no
igualitario, sino relativo, que está sujeto a determinados cálculos, referentes o reglas proporcionales, con
las cuales se alcanza justicia distributiva.
EXTENSIÓN Y PRELACIÓN: Se refiere a cuáles rubros del crédito están amparados por el privilegio de que
goza. Por regla general el privilegio ampara sólo el capital, extendiéndose a los intereses para los créditos
laborales y los amparados con garantías reales.
Sin embargo la ley vigente ha ampliado la extensión de los privilegios, si existe remanente deben ser
pagados los intereses suspendidos por la quiebra, considerando los privilegios (artículo 228 LCQ segundo
párrafo: “Remanente. Si existe remanente, deben pagarse los intereses suspendidos a raíz de la declaración
de quiebra, considerando los privilegios. El síndico propone esta distribución, la que el juez considerará,
previa vista al deudor, debiendo pronunciarse dentro de los DIEZ (10) días”).
Es decir que si se ha pagado íntegramente el capital de todos los créditos verificados, al distribuir el
remanente y pagarse con él los intereses debe comenzarse por los créditos con privilegio especial, seguir
con los privilegios generales y concluir con los quirografarios.
CASOS LEGALES:
La ley vigente ha eliminado la enumeración que hacía la ley 19.551. De todos modos esta enumeración
sigue siendo útil para identificar los créditos comprendidos en esta categoría:
Honorarios del síndico, del abogado del deudor en el concurso preventivo o en la petición de su propia
quiebra, del abogado de quien peticionó la quiebra y la hizo declarar, los de los integrantes de los comités
de acreedores, los de los coadministradores en la continuación de la empresa; las deudas por costas
impuestas por la actuación del síndico, la obligación de reparar daños y perjuicios causados por los bienes
del fallido o los funcionarios del concurso; los alquileres devengados después de la declaración de quiebra
cuando se siga usando el bien locado; los impuestos, tasas y contribuciones y multas y recargos que
recaigan sobre bienes determinados del fallido, posteriores a la quiebra.
Además existen casos de créditos prededucibles que surgen de la misma ley:
– Las prestaciones que el cocontrante in bonis cumple después de la presentación en concurso preventivo,
cuando se ha solicitado la continuación de los contratos con prestaciones recíprocas pendientes (artículo
20 LCQ).
– Los intereses posteriores a la suspensión de la subasta dispuesta en los términos del artículo 24 LCQ.
– El crédito por la restitución de los gastos en que ha incurrido el acreedor triunfante en la acción de
ineficacia concursal (artículo 120 LCQ).
– Más dudosa es la preferencia especial sobre bienes recuperados, establecida por el mismo artículo 120,
que para algunos autores es un privilegio especial mientras que para otros es un crédito postconcursal,
nacido de la gestión concursal iniciada por el acreedor.
– El crédito por la publicación de los edictos que notician la declaración de quiebra (artículo 89 LCQ).
– La tasa de justicia de los créditos iniciados por el síndico para el cobro de los créditos del fallido (artículo
189 LCQ).
– Los aranceles, tasas, gastos, que sean necesarios para las transcripciones y anotaciones registrales y de
otro carácter que resulten imprescindibles para la protección de la integridad del patrimonio del deudor
(artículo 273 inciso 8 LCQ).
– Las obligaciones nacidas durante la continuación de la explotación de la empresa del fallido (artículo 192
tercer párrafo).
– Los sueldos, jornales y demás retribuciones que se devenguen con motivo del contrato de trabajo en la
etapa de continuación de la explotación de la empresa (artículo 189).
No necesita transitar un procedimiento de verificación y su pago se hace cuando resulten exigibles, aunque
si no hay fondos suficientes debe practicarse prorrata entre ellos.
LIMITACIÓN: ARTÍCULO 242 LCQ.- “Los privilegios se extienden exclusivamente al capital del crédito,
salvo en los casos que a continuación se enumeran en que quedan amparados por el privilegio:
1) Los intereses por DOS (2) años contados a partir de la mora de los créditos enumerados en el inciso 2 del
Artículo 241;
2) Las costas, todos los intereses por DOS (2) años anteriores a la quiebra y los compensatorios posteriores
a ella hasta el efectivo pago con la limitación establecida en el Artículo 126, cuando se trate de los créditos
enumerados en el inciso 4 del Artículo 241. En este caso se percibirán las costas, los intereses anteriores a la
quiebra, el capital y los intereses compensatorios posteriores a la quiebra, en ese orden.
El privilegio reconocido a los créditos previstos en el inciso 6 del Artículo 241 tienen la extensión prevista en
los respectivos ordenamientos”.
ARTÍCULO 247.- Extensión de los créditos con privilegio general. “Los créditos con privilegio general sólo
pueden afectar la mitad del producto líquido de los bienes, una vez satisfechos los créditos con privilegio
especial, los créditos del Artículo 240 y el capital emergente de sueldos, salarios y remuneraciones
mencionados en el inciso 1 del Artículo 246.
En lo que excedan de esa proporción, los demás créditos enumerados en el Artículo 246 participan a
prorrata con los comunes o quirografarios, por la parte que no perciban como privilegiados”.
Los créditos con privilegio general se dan cuando la preferencia en el cobro recae sobre el producido de la
venta de todos los bienes del concursado. Diferente es la situación del privilegio especial que recae de lo
producido en la venta de un bien determinado.
Los créditos amparados por el privilegio general son:
1. Créditos laborales: créditos por remuneraciones y subsidios familiares debidos al trabajador por 6
meses y los provenientes de accidentes de trabajo, antigüedad o despido y por falta de preaviso,
vacaciones y sueldo anual complementario, importes por fondo de desempleo, otros.
2. Créditos de la seguridad social: se acuerda privilegio general al capital por prestaciones adeudadas a
organismos de la seguridad social, subsidio familiar y fondo de desempleo. Se refiere a organismos de los
sistemas oficiales, por lo que no están amparadas por el privilegio las administradoras de fondos de
jubilaciones y pensiones (AFJP).
3. Créditos contra personas físicas: ellos son los gastos funerarios, de enfermedad por los últimos 6 meses
de vida y los gastos por necesidad de alojamiento, alimentación y vestimenta del deudor y su familia
durante los 6 meses anteriores a la presentación en concurso o declaración de quiebra.
4. Créditos del fisco: todo tipo de impuesto y tasa que no recaiga sobre bienes determinados y se hallan
devengado antes del concurso o quiebra.
5. Crédito instrumentado en factura de crédito: la factura de crédito es un título valor que debe ser
creado en todo contrato en el que alguna de las partes este obligada a emitir factura. Esta exigencia se
aplica a contratos de compraventa y locación de cosas muebles y a las locaciones de servicio y obra,
siempre que ambas partes se domicilien en Argentina.
5. ACREEDORES COMUNES Y QUIROGRAFARIOS: CARACTERIZACIÓN. PRORRATEO. RÉGIMEN LEGAL DE
LOS ACREEDORES SUBORDINADOS.
CARACTERIZACIÓN:
Son todos aquellos créditos que no tienen privilegio ni preferencia de cobro. O sea, se definen por
exclusión.
ARTÍCULO 248.- Créditos comunes o quirografarios. “Los créditos a los que no se reconocen privilegios son
comunes o quirografarios”.
PRORRATEO:
Se distribuye a cada crédito un porcentaje igual y se determina mediante la división del producto repartible
por la suma de los créditos.
No alcanzado los fondos correspondientes a satisfacer los créditos la distribución se hace de esta manera
(a prorrata).
ARTÍCULO 249.- Prorrateo. “No alcanzando los fondos correspondientes, a satisfacer íntegramente los
créditos con privilegio general, la distribución se hace a prorrata entre ellos. Igual norma se aplica a los
quirografarios”.
6. INFORME FINAL Y DISTRIBUCIÓN: La quiebra causa el desapoderamiento de los bienes que integran el
patrimonio del deudor, para vender esos bienes en el proceso de liquidación y con ello obtener una masa
de dinero que se reparte entre los acreedores. Entonces se declara la quiebra, se verifican los créditos y se
liquidan los bienes.
En este informe el síndico da a conocer todo lo relativo a la enajenación de los bienes y presenta un
proyecto para llevar a cabo la distribución entre los acreedores del dinero obtenido con dichas ventas.
1- INFORME FINAL:
PLAZO DE PRESENTACIÓN POR EL SÍNDICO: 10 DÍAS DESPUÉS DE APROBADA LA ÚLTIMA ENAJENACIÓN Y
EN DOBLE EJEMPLAR.
ARTÍCULO 218.- Informe final. “DIEZ (10) días después de aprobada la ultima enajenación, el síndico debe
presentar un informe en DOS (2) ejemplares, que contenga:
1) rendición de cuentas de las operaciones efectuadas, acompañando los comprobantes.
2) resultado de la realización de los bienes, con detalle del producido de cada uno.
3) enumeración de los bienes que no se hayan podido enajenar, de los créditos no cobrados y de los que se
encuentran pendientes de demanda judicial, con explicación sucinta de sus causas.
4) el proyecto de distribución final, con arreglo a la verificación y graduación de los créditos, previendo las
reservas necesarias.
Honorarios. Presentado el informe, el juez regula los honorarios, de conformidad con lo dispuesto por los
Artículos 265 a 272.
Publicidad. Se publican edictos por DOS (2) días, en el diario de publicaciones legales, haciendo conocer la
presentación del informe, el proyecto de distribución final y la regulación de honorarios de primera
instancia. Si se estima conveniente, y el haber de la causa lo permite, puede ordenarse la publicación en
otro diario.
Observaciones. El fallido y los acreedores pueden formular observaciones dentro los DIEZ (10) días
siguientes, debiendo acompañar TRES (3) ejemplares. Son admisibles solamente aquellas que se refieran a
omisiones, errores o falsedades del informe, en cualquiera de sus puntos.
Si el juez lo estima necesario, puede convocar a audiencia a los intervinientes en la articulación y al síndico,
para que comparezcan a ella, con toda la prueba de que intenten valerse.
Formuladas las observaciones o realizada la audiencia, en su caso, el juez resolverá en un plazo máximo de
DIEZ (10) días contados a partir de que queden firmes las regulaciones de honorarios. La resolución que se
dicte causa ejecutoria, salvo que se refiera a la preferencia que se asigne al impugnante, o a errores
materiales de cálculo.
La distribución final se modificará proporcionalmente y a prorrata de las acreencias, incorporando el
incremento registrado en los fondos en concepto de acrecidos, y deduciendo proporcionalmente y a
prorrata el importe correspondiente a las regulaciones de honorarios firmes”.
CARACTERES:
2- PUBLICIDAD:
Según el artículo 218 LCQ se deben publicar edictos, por dos días, en el diario de publicaciones legales
haciendo conocer la presentación del informe, el proyecto de regulación final y la regulación de
honorarios. También puede ordenarse la publicación en otro diario si los fondos de la causa lo permiten y,
como expresa el artículo 219 LCQ estas notificaciones pueden ser sustituidas por notificación personal o
por cédula a los acreedores, cuando el número de éstos o la economía de gastos así lo aconsejen.
ARTÍCULO 218: (VER ARRIBA).
ARTÍCULO 219.- Notificaciones. “Las publicaciones ordenadas en el Artículo 218 pueden ser sustituidas por
notificación personal o por cédula a los acreedores, cuando el número de éstos o la economía de gastos así
lo aconsejen”.
3- OBSERVACIONES AL INFORME:
LEGITIMADOS: Tanto el fallido como los acreedores, lo que comprende también a titulares de créditos de
conservación y justicia, pueden formular observaciones.
FACULTAD DEL JUEZ: Si el Juez lo estima necesario puede convocar a audiencia a los intervinientes en la
articulación y al síndico, para que comparezcan a ella con toda la prueba de que intenten valerse.
4- REGULACIÓN DE HONORARIOS: Una vez presentado el informe el Juez regula honorarios y debe hacerlo
sobre el activo liquidado.
5- DISTRIBUCIONES COMPLEMENTARIAS: Puede ocurrir que luego del pago a los acreedores haya que
realizar distribuciones complementarias, en los siguientes casos:
- Cuando se vendan los bienes que no se han podido vender al momento de la presentación del informe
final.
- Cuando se desafecten reservas.
- Cuando ingresen nuevos bienes al activo de la quiebra.
El dinero obtenido en estos supuestos debe distribuirse mediante propuesta del síndico aprobada por el
Juez.
ARTÍCULO 222.- Distribuciones complementarias. “El producto de bienes no realizados, a la fecha de
presentación del informe final, como también los provenientes de desafectación de reservas o de los
ingresados con posterioridad al activo del concurso debe distribuirse, directamente, sin necesidad de
trámite previo, según propuesta del síndico, aprobada por el juez”.
VERIFICACIONES TARDIAS:
ARTÍCULO 223.- Presentación tardía de acreedores. “Los acreedores que comparezcan en el concurso,
reclamando verificación de créditos o preferencias, después de haberse presentado el proyecto de
distribución final, sólo tienen derecho a participar de los dividendos de las futuras distribuciones
complementarias, en la proporción que corresponda al crédito total no percibido”.
BOLILLA XXIII
Luego de la incautación de los bienes se procede a la liquidación y distribución de lo producido entre los
acreedores tomando en consideración los privilegios. Luego la quiebra concluye o se clausura el
procedimiento.
B) PRESUPUESTOS: La clausura por distribución final procede cuando, habiendo liquidado todo el activo y
presentado y aprobado el proyecto de distribución, los fondos existentes no alcanzan para pagar la
totalidad del capital de los créditos verificados.
ARTÍCULO 230.- Presupuestos. “Realizado totalmente el activo, y practicada la distribución final, el juez
resuelve la clausura del procedimiento. La resolución no impide que se produzcan todos los efectos de la
quiebra”.
EFECTOS:
La clausura implica un concepto provisional, de manera que el procedimiento puede reabrirse cuando se
conozca la existencia de bienes susceptibles de desapoderamiento.
Es decir, se procede a la reapertura del procedimiento falencial cuando se conozca de la existencia de
bienes que sujetos a desapoderamiento, puedan realizarse y distribuirse luego en la forma que fije el Juez.
La denuncia sobre la existencia de bienes es de fundamental importancia porque significa activar
nuevamente el trámite en procura de conclusión definitiva.
Durante el período de clausura, los acreedores no insinuados todavía no pueden presentarse a verificar sus
créditos.
A partir de la información de nuevos bienes en el activo concursal, los acreedores no presentados a
verificar en forma intempestiva podrán solicitar verificación de sus créditos, con la expectativa de
participar en lo producido luego de la liquidación de dichos bienes.
B) FACULTADES JUDICIALES:
2. CONCLUSIÓN DE LA QUIEBRA.
1- AVENIMIENTO: A) CONCEPTO; B) PRESUPUESTOS, C) APROBACIÓN JUDICIAL; E) EFECTOS.
INSTRUMENTACION.
2- PAGO TOTAL: DISTINTOS SUPUESTOS, CONCEPTO.RÉGIMEN LEGAL: REQUISITOS, EFECTOS.
REMANENTE.
3- OTROS SUPUESTOS DE CONCLUSIÓN. ANÁLISIS.
2. CONCLUSIÓN DE LA QUIEBRA.
La conclusión de la quiebra importa que la quiebra termina, es decir, que el sujeto deja de estar en
quiebra, levantándose la inhibición a la que estaba sujeto y quedando sin efecto el apoderamiento.
Modos de conclusión de la quiebra:
1- AVENIMIENTO:
A) CONCEPTO:
Es un modo de conclusión de la quiebra que resulta del acuerdo entre el fallido y sus acreedores, por el
cual la unanimidad de éstos consiente en la conclusión de la quiebra. Normalmente los acreedores dan su
consentimiento a cambio de un acuerdo por el cual el fallido se obliga a cumplir alguna prestación, por
ejemplo un pago en dinero.
B) PRESUPUESTOS:
· Requisitos de procedencia: el consentimiento deben darlo los acreedores verificados, tanto
quirografarios como privilegiados, incluyendo los titulares de crédito con garantía real. En cuanto a la
forma, esta expresión de consentimiento debe ser hecha por escrito, con firma certificada por notario o
ratificada ante el secretario. Es un acto formal pero no solemne.
· Unanimidad: la regla es que el avenimiento debe ser consentido por todos los acreedores.
¿Qué pasa con los acreedores ausentes y los pendientes de resolución judicial? Para estos casos el Juez
puede requerir al deudor el depósito de una suma para pagar a los acreedores verificados que no pudieron
ser hallados (ausentes y a los pendientes de resolución judicial).
Rivera hace una diferencia entre estas dos situaciones: cuando existen acreedores verificados ausentes el
Juez tiene la obligación de requerir al deudor el depósito, en cambio cuando se trate de acreedores
pendientes de resolución judicial el Juez tiene la facultad de requerir al deudor el depósito.
ARTÍCULO 225.- Presupuesto y petición. “El deudor puede solicitar la conclusión de su quiebra, cuando
consientan en ello todos los acreedores verificados, expresándolo mediante escrito cuyas firmas deben ser
autenticadas por notario o ratificadas ante el secretario.
La petición puede ser formulada en cualquier momento, después de la verificación, y hasta que se realice la
última enajenación de los bienes del activo, exceptuados los créditos”.
ARTÍCULO 226.- Efectos del pedido. “La petición sólo interrumpe el trámite del concurso, cuando se
cumplen los requisitos exigidos. El juez puede requerir el depósito de una suma, para satisfacer el crédito de
los acreedores verificados que, razonablemente, no puedan ser hallados, y de los pendientes de resolución
judicial.
Al disponer la conclusión de la quiebra, el juez determina la garantía que debe otorgar el deudor para
asegurar los gastos y costas del juicio, fijando el plazo pertinente. Vencido éste, siguen sin más los trámites
del concurso”.
C) APROBACIÓN JUDICIAL:
El acuerdo que realiza el deudor individualmente con sus acreedores verificados o admitidos requiere la
unanimidad de los mismos porque éste, en definitiva, es el fundamento de la conclusión de la quiebra.
La decisión se alcanza por la sola voluntad de los acreedores, constituyendo un virtual desistimiento,
exento de control judicial atento a la unanimidad.
La mera oposición de uno de los acreedores del acuerdo celebrado por el deudor, realizada sin causa
fundada y de manera arbitraria, no implica el fracaso del avenimiento, superándose este obstáculo con el
depósito de la suma total que integra el crédito de aquél que manifestó su desacuerdo.
E) EFECTOS. INSTRUMENTACION:
El avenimiento hace cesar todos los efectos patrimoniales y personales provocados por la quiebra
(desapoderamiento, incautación de bienes, inhabilitación del deudor, etcétera). Sin embargo los actos
realizados por el síndico o los coadministradores conservan su validez.
De estos efectos se deriva que el sujeto es re apoderado, es decir, que se le restituyen los bienes y papeles
incautados por el síndico. El fallido recupera su legitimación procesal y la sociedad fallida deja de estar en
disolución. Con el avenimiento cesa la inhabilitación causada por la quiebra, tanto si el fallido es persona
física como si es persona jurídica.
La quiebra que concluye por avenimiento no renace y en todo caso, si se incumple el acuerdo con los
acreedores se podrá abrir una nueva quiebra que implica un nuevo procedimiento y no la reapertura.
ARTÍCULO 227.- Efectos del avenimiento. “El avenimiento hace cesar todos los efectos patrimoniales de la
quiebra. No obstante, mantienen su validez los actos cumplidos hasta entonces por el síndico o los
coadministradores.
La falta de cumplimiento de los acuerdos que el deudor haya realizado para obtener las conformidades, no
autoriza la reapertura del concurso, sin perjuicio de que el interesado pueda requerir la formación de uno
nuevo”.
2- PAGO TOTAL.
DISTINTOS SUPUESTOS. CONCEPTO:
La ley concursal llama pago total al modo de conclusión de la quiebra que opera por el hecho de que el
producido de la liquidación de todos los bienes alcanza para pagar la totalidad del capital de los créditos
verificados, los endientes de resolución y los gastos y costas del concurso. El juez podrá declarar la
conclusión por pago total una vez aprobada la distribución final, ya que de allí surja si alcanza para pagar
los créditos y costas del proceso.
Remanente: si luego de pagar los créditos verificados, los pendientes de resolución y los gastos y costas de
la quiebra, existe remanente, deberán pagarse los intereses suspendidos a raíz de la declaración de la
quiebra, dando prioridad a los surgidos de créditos con privilegio. Si luego de pagar los intereses
suspendidos aún queda remanente, será entregado al deudor.
ARTÍCULO 228.- Requisitos. “Alcanzando los bienes para el pago a los acreedores verificados, los
pendientes de resolución y los gastos y costas del concurso, debe declararse la conclusión de la quiebra por
pago total, una vez aprobado el estado de distribución definitiva.
Remanente. Si existe remanente, deben pagarse los intereses suspendidos a raíz de la declaración de
quiebra, considerando los privilegios. El síndico propone esta distribución, la que el juez considerará, previa
vista al deudor, debiendo pronunciarse dentro de los DIEZ (10) días.
El saldo debe entregarse al deudor”.
III. Desistimiento por el deudor de la quiebra pedida por él, lo que incluye la no ratificación por el
órgano de gobierno de la petición de propia quiebra de una persona jurídica.
IV. Cartas de pago otorgadas por todos los acreedores: Carta de Pago: es un comprobante que
emite el acreedor del fallido en el que consta que ha percibido la totalidad de su crédito
verificado. Por lo tanto, este modo de conclusión de la quiebra se produce cuando todos los
acreedores de crédito verificado presentan dichos comprobantes autenticados en el
expediente. Para que concluya, deben haberse pagado los gastos y honorarios de la quiebra.
ARTÍULO 229.- Carta de pago. “El artículo precedente se aplica cuando se agregue al expediente
carta de pago de todos los acreedores, debidamente autenticada, y se satisfagan los gastos
íntegros del concurso.
También se aplica cuando, a la época en que el juez debe decidir sobre la verificación o
admisibilidad de los créditos, no exista presentación de ningún acreedor, y se satisfagan los
gastos íntegros del concurso”.
VI. Transcurso del plazo de dos años desde la clausura del procedimiento sin que haya reapertura.
La ley se refiere a los honorarios que revisten la categoría de gastos de conservación y de justicia (artículo
240 LCQ) donde se incluyen: Emolumentos del síndico por sus trabajos en el proceso concursal, del letrado
del acreedor a cuya instancia se decretó la quiebra y los del abogado del concursado. La ley prescribe
porcentajes máximos y mínimos, así como pisos fijos mínimos (artículo 266 y 267 LCQ) para el conjunto de
funcionarios y profesionales actuantes.
El juez debe utilizar el criterio de proporcionalidad para justipreciar cada uno de los trabajos.
El Juez está obligado a regular los honorarios de funcionarios y profesionales intervinientes en las
ocasiones taxativas que enumera el artículo 265 LCQ. La excepción es la del artículo 270 LCQ para los casos
de la continuación de la explotación de la empresa.
Regulación de honorarios
ARTICULO 265.- Oportunidad. “Los honorarios de los funcionarios deben ser regulados por el juez en las
siguientes oportunidades:
1) Al homologar el acuerdo preventivo.
2) Al sobreseer los procedimientos por avenimiento.
3) Al aprobar cada estado de distribución complementaria por el monto que corresponda a lo liquidado en
ella.
4) Al finalizar la realización de bienes en la oportunidad del Artículo 218.
5) Al concluir por cualquier causa el procedimiento del concurso preventivo o de la quiebra”.
Sólo el primer párrafo e este artículo habla de la quiebra liquidada (clausura por distribución final de los
artículos 218, 222 y 230) ya que, el segundo párrafo se dedica al supuesto de conclusión por avenimiento
(artículo 225 al 227).
La ley prescribe que la regulación de honorarios, en caso de quiebra liquidada, debe efectuarse sobre el
activo realizado. El patrimonio ya está enajenado y se conoce el valor de liquidación, lo que descarta que
sea prudencialmente estimado por el Juez. Distinto en el caso de avenimiento o pago total que sí es
estimado por el Juez.
Los honorarios en la quiebra se fijan en un mínimo de 4% o 3 salarios de los secretarios de primera
instancia y un máximo del 12%.
En el marco de las disposiciones que el Juez debe tomar a los fines de autorizar, por resolución fundada, la
continuación de la explotación de la empresa, también puede decidir el sistema de retribución de la
sindicatura y la coadministración que habrá de desempañarse durante el período. Puede optar entre:
- el pago de cantidad determinada, sin depender del resultado neto o concurriendo con éste luego de
superada la suma fijada.
- el pago por períodos. Aquí el coadministrador sólo tiene derecho a honorarios sin participar del producto
de los bienes.
ARTÍCULO 270 LCQ.- Continuación de la empresa: otras alternativas. “Por auto fundado puede resolverse,
en los casos del artículo anterior:
1) El pago de una cantidad determinada al coadministrador, sin depender del resultado neto o
concurriendo con éste luego de superada la suma fijada;
2) El pago por períodos de la retribución del síndico y coadministrador, según las pautas de este precepto.
El coadministrador sólo tiene derecho a honorarios de conformidad con este artículo y el precedente, sin
participar del producto de los bienes”.
ARTÍCULO 268.- Monto en caso de extinción o clausura. “En los casos del inciso 5 del Artículo 265, las
regulaciones se calculan:
1) Cuando concluya la quiebra por pago total se aplica el Artículo 267.
2) Cuando se clausure el procedimiento por falta de activo, o se concluya la quiebra por no existir
acreedores verificados, se regulan los honorarios de los funcionarios y profesionales teniendo en
consideración la labor realizada. Cuando sea necesario para una justa retribución, pueden consumir la
totalidad de los fondos existentes en autos, luego de atendidos los privilegios especiales, en su caso, y
demás gastos del concurso”.