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Solo una llamada... solo una... o unas cuantas...

(01)

Trước Sau

¡Hey! Dejame decirte sobre Taehyung antes de que creas que es una puta...
bueno, puta, puta; lo que se dijo puta, no.

Más bien le encantaba salir, reírse, joder, beber... era hot, lo sabía, era
consciente y le encantaba.

Su lista de conquistas que terminaban en folladas era in.ter.mi.na.ble y lo digo


porque realmente tenía una lista en cuaderno con fecha y lugar. Nada de
nombres ni nada de eso, Taehyung nunca pedía nombres.

En realidad, sus nombres eran "bebé, dulzura, ricura, hermosa/o" porque sí, era
bisexual.
¡Doble de posibilidad, hermana!

Asi que bueno, Taehyung trabajaba y estudiaba a la vez. Su mejor amigo le


llevaba dos años. Asi que si Taehyung tenía 25, su maps tenía 27.

¡JungKook era su cable a tierra!

Y con que con esas estamos, Taehyung estaba con una terrible erección
(creada por-que-el-viento-llegó y si; no es "lo que el viento se llevó" si no lo que
trajo), viendo porno (sin éxito) y teniendo la cabeza muy caliente para pensar
siquiera en corregir los examenes de sus alumnos.

Asi estaba la cosa: dos de la mañana, sus auriculares reproduciendo los


gemidos, su pepino parecía salame por metro (de los largos) ¡¿Y cómo mierda
se podía bajar la pinche erección?!

¡Respuesta automática!

Apagó su laptop y se acomodó en la cama, tomó su telefono y marcó... un pitido,


dos pitidos...

-Ho... hola...- estando tan caliente, su voz adormilada le parecía caliente.


-Sé que es tarde.

-Muy, mañana tengo turno mañanero. ¿Qué sucede TaeTae?

-Estoy caliente.

-¿Y?

-Puedes... es decir... ¿puedes tener sexo conmigo por aquí?

Se escuchó a JungKook ahogarse con su saliva.

-Tengo que cortar.

-¡Es que eres con el único que tengo confianza!- silencio- JungKook... me duele
mucho... y sé que te pone incomodo y es raro pero... por favor... ¿Kookie?

Cuando Taehyung iba a cortar, pensando en pedirle disculpas a la próxima,


escuchó un suspiró.
-¿Estás acostado, ya?

-Sí, y de verdad me duele mucho.

-¿Y por qué estás duro?

-Solo tuve una erección y ya- suspiró y se lamió los labios.

-¿Por qué no buscas a una de tus cogidas?

-Porque... ¿puedo contar contigo?

-¿O porque solo te gusta imaginarte conmigo?

Eso envió un pinchazo de placer a su pene.

-¿Contigo?

-Una vez hablamos sobre sexo... estabamos bebidos y te dije que me gusta
hacerlo duro- se escuchó su risa ronca- Tal vez lo estás poniendo de excusa
para sacarte la comezón.
Taehyung cerró sus ojos y se lo imaginó, el peso de su amigo encima.

-¿Excusa?

-Tal vez desees que te bese... que muerda tus labios... ¿saben tan bien como
lucen? Tienes una boca sexy, Taehyung...

-No lo creo...- murmuró Taehyung, llevando su mano libre a su pecho.

-¿No? ¿Tampoco crees que te prendería que baje mi boca a tu cuello y te quite
la camiseta que llevas puesta? Seguramente sabes que te tiraría a mi cama sin
dudarlo un segundo.

A Taehyung se le escapó una respiración pesada

-¿Y qué si te digo que no?

-¿Me lo dirías mientras te abro de piernas o cuando te gire y quiera comerte tu


trasero? ¡Dios! Hasta puedo imaginarme entrando en tí... tienes que estar
apretado ¿no? Siempre follas pero con papi serás follado.
La mano de Taehyung bajo por su abdomen, tirando de sus pantalones y
calzoncillos para liberar su erección, su boca poco a poco quedandose seca.

-Creo que... yo... no te podría decir que no...

-Y menos si estás caliente ¿verdad? Ya sabes... cuando quieres que baje mi


boca y comience a mamar... que acaricie tus piernas... ¿si entro tres dedos lo
aguantarías? Apuesto a que si te clavo contra el colchón con mi polla llorarías
de placer.

Taehyung se tomó su verga y comenzó a acariciarse despacio.

-¿Y?- suspiró- ¿Solo eso hace el gran JungKook?

-¡Oh no!- escuchó otra risa ronca- Te tendría de rodillas... ¿tu boquita es capaz
de tomarme entero? Porque siempre que te imagino me pongo muy duro...

Taehyung liberó un jadeo y su mano comenzó a moverse un poco más rápido.

-Siempre que te encuentro en la cama me pones duro, largo... ahora mismo lo


estoy por tí... la tengo dura de pensarte en cuatro... o en mi consultorio abierto
de piernas invitandome a entrar... sonrojado... jadeando mientras te hago
esperar...
La voz de JungKook ya se escuchaba como la suya, agitada... ¿también se
había empezado a tocar?

-No me harías esperar ¿verdad?

-Sí... si significaría comerte despacio y tocarte hasta dejarte marcas...

-¿Me las dejarías?

-Si no lo hago soy un imbécil... puedo escucharte pedirme más... más... hasta
que te duela y no tengas más salida que llorar por el placer...

-¿Me harías todo eso? ¿Joderme hasta que me duela?

-Cariño, soy grande... confío en eso... confío en que tus piernas estarán sobre
mis hombros mientras que te como la boca... eres muy elastico, Tae...

A esas alturas la mano de Taehyung ya estaba moviendose rápido, apretando


un poco, intercalando sus caricias entre su polla y sus testiculos.

-Oh JungKook...
-Que sexy que gimes... me encantaría que lo hicieras mientras me montas...
apuesto a que haces maravillas con tus caderas... el imaginarte se me hace tan
claro...- las últimas palabras, JungKook las dijo gimiendo.

-Me gusta dar saltos...- gimió Taehyung cuando masajeó su erección, estaba
abierto de piernas.

-¡Dios! Amaría que lo hagas sobre mi polla... ya sabes... mis manos en ese
bonito culo que tienes, apretando... te ataría a la cama... cumple un deseo y
entra dos dedos...

Taehyung gimoteó ante la petición. Inmediatamente lo hizo después de


ensalivarlos, imaginando que era la polla de JungKook.

Cuando se quejó por la intromisión, escuchó un gemido de JungKook.

-Despacio... a papi no le sirve que estés adolorido por hacerlo mal...

-Oh por favor... JungKook...

Los ojos de Taehyung se llenaron de lágrimas.


-¿Y bien? ¿Te duele, amor?

-Sí...- gimoteó, sus ojos llenandose de lágrimas, su erección a punto de


liberarse.

-Despacio dulzura... despacio... deja lo duro para cuando te tenga en cuatro...

Taehyung se imaginó a JungKook entrando despacio a su cuerpo y sus dedos


fueron apretados por sus musculos.

-Me quiero correr... papi...

-Oh no... me despertaste, estoy... ah... estoy duro y quiero follarte contra una
pared... llora si quieres pero te quedas hasta que me corra...

-Te puedo ayudar... mi boca te está deseando...- comenzó a embestir su cuerpo


con sus dedos.

-¿Solo tu boca? ¿No te gustaría que te jale el cabello mientras te hago gritar?
-Sí...- Taehyung se arqueó en la cama, sus dedos le estaban haciendo arder su
interior.

-Oh mierda... ¿sabes cuantas veces te he imaginado en mi ducha, mojado, duro,


pidiendome que te joda profundo?

Taehyung se mordió el labio y lloriqueó un poco por la sobrecarga de placer.

-Eso es, bebé... llora... amo que llores de placer...

-JungKook ya quiero correrme... por favor...

-¿Ah sí?... pidemelo por favor, bonito...

-JungKook...- gimió y, cuando no pudo controlar su orgasmo, se arqueó en la


cama- Por favor papi, por favor...

Y entonces escuchó el gemido ronco y duro, seña que JungKook se corrió


también.
1.

(02)

Trước Sau

Taehyung era un excelente maestro de artes. Daba clases en colegios primarios,


secundarios y tenía su propio instituto.

Asi que digamos que después de haber una celufollada nocturna lo hacía sentir
como un pervertido de mierda mientras le daba clases a los niños de primaria.

-¡Muy bien! Vamos a ver ahora si adivinan ésta: es una señora que no sonríe ni
está seria, que sus colores son oscuros al igual que su pelo es largo. ¿De qué
pintura estoy hablando?

-¡Monalisa!- gritaron los niños y Taehyung sonrió cuadrado.

-¡Muy inteligentes, muy inteligentes!

El timbre sonó y los niños salieron al recreo. Él tomó todas sus carpetas y las
colocó en su bolso para cerrarlo y cargarselo al hombro.

Su hora había terminado, llevaba un guardapolvo a cuadros pequeños entre


blancos, celestes y azules... uniforme propio que siempre usaba en la primaria.
Su celular sonó y vio la pantalla. Era un mensaje de whatssap.

Chat: JungKook:

Sabado 13 de julio

Y... yo opino que sí

22:30

Hoy

¿Recuerdas de la cena?

10:30

Ssssssiiiiiii

10:31

Lleva pizzas!!

10:32
Lo bueno que tenía JungKook es que no se enredaba con nada. Te follé, te hice
correr, correcto... como dijo Ariana: thank u, next!

Ahora a Taehyung le tocaba los de secundaria. Mientras se subía a su auto


pensaba que anoche durmió como un bebé.

JungKook si servía para darse una buena sesión de sexo telefonico.

Papi... no sabía que su amigo tenía esos gustos, o sea, eran amigos ¡dah!
Sabían todo el umo del otro, era regla general.

Pero esa voz... si anoche había estado caliente, JungKook lo había puesto el
doble.

Si, bueno, como sea. Ya estuvo, en su agenda memorial estaba esa llamada
que planeaba, en algún momento, repetirla de nuevo.

Se lamió los labios.

-JungKook también se corrió- rió, girando el coche- Eso es bueno ¿no? Que se
corra solo con sexo por celular... debe ser bueno- murmuró.
Durante toda la clase, estuvo de un super humor. Sus alumnos se contagiaron
de ello y las horas se pasaron muy rápido.

Cuando fue al baño, a arreglarse, se miró su boca... ¿JungKook lo habrá dicho


de verdad?

Otro mensaje llegó, éste decía que lo pasaría a buscar.

Como eran mejores amigos, Taehyung no experimentó nada. Es más, los


juguetes que tenía; JungKook se los había pedido y habían llegado a su nombre
de adolescentes.

Era tal grado de confianza que no le parecía incómodo casi nada hasta ahora.

La cosa era que... algunas veces no podía quitarse esa imagen de estar en
cuatro y que JungKook lo esté follando duro. Como sea, suspiró y se acomodó
el pelo.

Para la tarde, Taehyung estaba en su instituto de artes, ayudando con las


planificaciones, viendo papeles referente al establecimiento y demás.

A veces hechaba de menos esos días donde se podía ver con su maps y con
sus otros amigos... cuando no era profesor/director de arte y JungKook no era
medico cardiologo.
Hizo un mohín mientras le tiraba ojo a los papeles. Se quejó y se pasó las
manos por su rostro.

Taehyung tenía la manía de lamerse los labios cada dos segundos y a veces los
partía asi que siempre cargaba con un lip balm.

Una llamada entró: JungKook. Parecía que desde anoche todo se refería a
JungKook.

-Dime- canturreó.

-¿Paso por tí a las nueve? ¿A las diez?

-Diez. Dame tiempo para descanzar y bañarme.

Escuchó la risa de JungKook y no pudo evitar llevar una mano a acariciar el


interior de uno de sus muslos.

-Aunque estas invitado a bañarte conmigo si gustas.

-No trates de hacer lo de anoche. Estoy en el trabajo y... solo friendship ¿ok?
-Claro, solo decía- se mordió el labio- Nos vemos esta noche entonces.

-Nos vemos.

Toda la tarde se acabó a las ocho, la hora cual aprovechó a tirarse en su cama
para descanzar hasta las nueve.

¡Dios, ya sus piernas le dolían!

Suspiró y miró a su almohada con gusto.

-¿Y si me masturbo?- le preguntó y entonces hizo una mueca- Nah... debo


bañarme y los juguetes están lejos...

Se quejó y se giró para levantarse, caminó al baño, se duchó a consciencia y


decidió que unos pantalones, algo como un buzo y zapatillas eran comodos y
buenos.

Se miró la espalda baja cuando se secó con el toallón y se quedó desnudo.


Había un tatuaje allí: la Torre Eiffel en medio de tres explosiones de los colores
primarios. Fue allí cuando JungKook se hizo los suyos.

Se miró y se sacó la lengua antes de vestirse, su puerta se abrió después del


ruido de llaves y, el tema que estaba en el equipo de música (Like a river) estaba
en su parte más sexy.

-¿JungKook eres tú?

-¿Quién más tiene tu llave?

-¡Buen punto!- Taehyung rió y salió de su habitación para ir al baño y comenzar


a peinarse.

JungKook clavó su mirada en aquel culo cuando pasó. O sea... eran maps pero
tenía ojos y Taehyung estaba re partible.

Pero bueno, maps... ¡Maps wey!

Se tiró en el sofá y entendió sus brazos en el espaldar del mismo. Su cabeza,


después de que anoche le dijo todas esas cosas, solo le mandaba algunas
cuantas imagenes.
Como en ese momento, con ese tema, facilmente Taehyung podía venir a su
regazo y hacerle un lap dance como solo ese culo podía.

Cerró los ojos y facilmente podía imaginarlo caminar hasta él, sentarse a
horcajas, girar sus caderas, ondular su cuerpo, morderse el labio antes de
sonreirle picaro y levantarse para dejar a la altura de su rostro su culo que se
movería cuando sus caderas giraran al ritmo de la musica.

¡Wao! La sexllamada si que había afectado a su imaginación.

Cuando escuchó la voz de Taehyung hablarle, abrió sus ojos, tomando una
honda respiración.

-¿Y bien?- preguntó Taehyung.

-Si van a ir, descuida.

JungKook se llevó una mano y se acomodó el paquete en su pantalón.

Eran maps... eran maps...

Una cosa era sexo telefonico y otra era jodidamente empotrar a Taehyung
contra aquella pared, toquetearle aquel rico culo, bajarse los pantalones y ¡pum!
¡Ah-ah-ah si-si-si más-más!!
Y con esa boquita que se cargaba su amigo...

-Ya estoy, vamos- habló Taehyung, venia poniendose lip balm.

JungKook se levantó y se acercó para limpiarle los restos del balsamo que
estaba por fuera de su labio inferior.

Se lo llevó a la boca y elevó una ceja.

-¿Cereza?

Taehyung asintió mientras reía.

¡Oh Jebus ayuda a JungKook de comerle la boca y hacerle todo lo qie le dijo por
aquella llamada la noche anterior!

(03)

Trước Sau
Las risas jamás faltaron en el cine casero que Kim NamJoon se había armado
en su sala de estar.

¡Estaba genial! Todo oscuro, palomitas caseras, la pelicula Brujas pirateada,


¡eh!, quiero decir, descargada a modo de prestamo...

Es que no querían esperar el cine.

-¡Nam! ¡Palomitas!- gritó Jimin.

-¡Mueve tu trasero!- respondió NamJoon y todos rieron tirandole palomitas.

Jimin abrió la boca y pudo comer dos palomitas antes de levantarse para buscar
más, siendo acompañado por Taehyung.

JungKook miró de reojo hacia Taehyung cuando pasó por su lado, cerró su
mano sobre su muslo y frunció un poco su ceño para concentrarse en la
pelicula.

¡Ya! Tenía que olvidarse de aquello. Eran amigos, y prefería poner en primer
lugar a Taehyung como amigo.
-¡Trae para mí, Tae!- habló y Taehyung asintió con la cabeza.

Y, durante el tiempo que estaban rellenando los tupers con palomitas y miel;
Jimin le estaba hablando de su cita frustrada.

-No sé, solo le di una oportunidad porque me cansé y fue lo peor que hice- Jimin
negó con la cabeza- Lo peor es que Nam ya me lo había dicho y no le hice
caso... me siento hasta ridiculo.

Taehyung golpeó el interior de su mejilla con su lengua, culpen a JungKook.

-No tienes que forzarlo, Jim.

-Es que no fuerzo nada, solo voy a donde se me presente la oportunidad.

-Deberías tener cuidado, cielo- suspiró Taehyung- Eres virgen, se te van a


acercar un millón de idiotas.

Jimin se encogió de hombros antes de regresar a la sala de estar. Taehyung se


sentó al lado de JungKook y le dio el tupper.
-¿Me puedes tirar en la casa?- lo vio ahogarse y el infeliz solo se rió antes de
darle dos golpes en su espalda- Ya sabes a lo que me refiero.

-Sí, puedo, puedo- respondió JungKook y colocó las palomitas en el medio de


ambos.

Cuando la pelicula terminó, NamJoon colocó un mix de temas que él hizo esa
mañana. Hoseok estaba allí, ellos dos últimos se unieron a JungKook y
Taehyung en la universidad.

Asi que... JungKook estaba viendo como Hoseok le enseñaba unos pasos a
Taehyung.

-¿Qué tal la clínica?

-Ahí vamos- suspiró- Hago lo que puedo, tengo una cirugía la semana próxima-
se encogió de hombros.

-Taehyung ha cambiado- Nam señaló con la cabeza hacia el susodicho.

-Empezó funcional en un lugar cerca de su depa- el ruido de una botella de


cerveza abriendose se conjugó con la música- Además...- no le podía decir que
se... estimularon por telefono- No sé, parece que tiene novio o conoce a alguien,
no lo sé.
-Eres su amigo, deberías saberlo- NamJoon se alejó para llevar los chops o
vasos cerveceros.

Llegadas las tres de la mañana, JungKook estaba conduciendo despacio y


seguro debido al alcohol que tenía encima.

Resulta ser que esa cerveza llevó a otra, a vodka con soda, a unos shots de
wisky que se metieron al jugar al UNO drink ver. y... bueno... dos botellas más.

-Puedes quedarte a fermentar en el sofá- le habló Taehyung, que lo único que


delataba su ebriedad era lo rojizo de su rostro ya que era raro cuando no estaba
de buen ánimo- Hasta mañana, ninguno de los dos trabaja.

-Estoy pensando seriamente en eso- JungKook frunció el ceño para


concentrarse en el camino- Pero cierra esas malditas cortinas que tienes ¿a
quién se le ocurre abrirlas cuando más pega el sol?

-¿A mí?- preguntó Taehyung riendose.

-¡Sí, a tí! Solo... no lo hagas.

-Sí, papi- Taehyung blanqueó los ojos y jugó con el cinturón.


¡Ay Dios! ¡Ay Jebús! ¡Ay buda! ¡Ay Jeová! ¡Ay quien fuera! ¡Que sexy se
escuchó eso!

JungKook obligó a su borracha cabeza a tirar aquello a la zona de


no-me-importa mientras entraba el coche en el estacionamiento.

-¿Puedes caminar?

-¡Sí!- asintió casi eufórico.

La cosa es que la respuesta debió ser no porque Taehyung tropezó con sus pies
antes de caminar demasiado derecho al elevador.

-Ya vas a llevarte la columna a tu depa- bromeó JungKook guardando la llave en


uno de sus bolsillos.

-Necesito una nueva- habló Taehyung, acomodando su cabello.

JungKook rió y se afirmó en una de las paredes mientras relojeaba la ropa que
se había puesto.
Camiseta, jeans, zapatillas.

-¿Te ha crecido el trasero?- preguntó pasandose un dedo por debajo de su


nariz.

-Funcional funciona- Taehyung subió y bajó las cejas divertido- Y en tí las pesas
funcionan.

JungKook se miró su camiseta negra apretar su biceps al tener los brazos


cruzados.

-No, solo es la genetica.

Taehyung hizo una cara antes de que las puertas se abrieran. Caminaron
"normal" hasta llegar hacia la puerta y que Taehyung la abriera.

-Dejé el celular en el coche- habló JungKook y Taehyung carcajeó.

-¡Buscalo Firulais!

-¡Tu madre!
-¡No te metas con mi madre, pendejo!- respondió Taehyung desde la cocina-
¿Quieres agua?

-Por favor- Jeon se quitó las zapatillas y se tiró en el sofá antes de ver a
Taehyung con un vaso con agua.

Dejó el mismo sobre una mesa ratona y se le tiró encima.

-¡La chancha!- gritó y se dejó caer sobre él.

-¡Auch! ¡Infeliz; salte!- gruñó JungKook entre risas y tratando de empujarlo.

Taehyung se removió, tratando de aplastarlo más solo hasta que JungKook le


dio una nalgada que causó (además de un sonoro ruido) que Taehyung tomara
una bocanada de aire.

-¡Que hijo de perra!- suspiró Taehyung tocandose su trasero antes de volverse a


tirar encina con más fuerza- ¡Eso me dolió! ¡Mide tu fuerza!

Entre lucha y lucha, JungKook giró y ambos cayeron sobre la alfombra,


Taehyung golpeandose la cabeza.
-¡Auch!- hizo un mohín.

-Perdon... perdon...- rió JungKook mientras le tomaba la cabeza y sobaba la


zona golpeada.

Taehyung se removió y entonces se miraron.

-Papi...- rió al decirlo y entonces JungKook chocó sus bocas.

Un beso que fue hambriento, ebrio, deseoso, cargado de todo menos cosas
buenas.

Se toquerearon por todos lados en los que sus manos se dejaron antes de que
JungKook se separara.

-Yo...

-Voy a dormir ya- aceptó Taehyung, parandose y teniendo un jodido problema


entre las piernas... un problema que era compartido con su amigo en el sillón.
(04)

Trước Sau

Debería haberse devuelto y obligarlo a sacarlo de ese estado... o por lo menos


eso se estaba diciendo Taehyung mientras se quitaba la ropa.

O sea... ¿no que papi no lo iba a soltar? ¿no que todo lo que dijo por telefono
solo...? O sea...

Estás ebrio, acuestate.

Taehyung se quitó la camiseta y trató, trató con toda la fuerza (de solo dos
pasos) irse a dormir pero estaba tan ebrio... es decir, no iba a vomitar ni nada de
eso pero... o sea...

Ya dijo muchas veces "o sea" ¿no?

Se giró y abrió la puerta justo a tiempo para chocar contra JungKook, su mirada
oscura, sus pupilas dilatadas.

-¿Papi?- preguntó Taehyung y solo eso bastó para que JungKook le devorara la
boca.
El gusto a brandy estaba presente en sus bocas a pesar de haber tomado agua
y las manos de JungKook lo empujaron hacia atrás. La puerta quedó abierta,
¿quién los miraría?

-Papi despacio...- susurró Taehyung cuando lo tiró a la cama.

JungKook se subió sobre él quitandose la camiseta, se agachó para besar su


cuello y la mano de Taehyung bajó a apretar su polla dura.

-Mierda... me prendes demasiado...- gruñó JungKook antes de marcarle duro el


cuello.

-¡Auch!- chilló antes de separarse de piernas- Me duele... JungKook...

Y su amigo rió antes de arrancarle el pantalón.

-No hay condón- JungKook hizo una mueca de ¿Por-qué-jodidos-no-traes?

-Yo sí...- suspiró Taehyung y giró en la cama para bajar y caminar hasta su
closet- Ah...- jadeó cerrando los ojos cuando sintió a JungKook por detrás,
abrazandolo desde la cintura, besando su cuello, sintiendolo duro en su trasero.
-El condón...- murmuró JungKook en su oído y Taehyung se obligó a buscarlo.

Cuando lo encontró junto con una botellita de lubricante, se giró y los movió
antes de dar un salto y treparse en JungKook.

-Estamos muy ebrios... todo se mueve...- rió Taehyung y JungKook sonrió


ladino.

-Es el mejor momento...- se giró y caminó un par de pasos antes de caer sobre
la cama.

JungKook le quitó el condón y lo abrió.

-Quería hacerlo con los dientes...- Taehyung hizo un mohín mientras tomaba el
lubricante.

-No es efectivo- JungKook negó con la cabeza y retuvo la respiración mientras


se colocaba el condón.

Taehyung jadeó cuando ingresó un dedo seguido de dos más en su entrada.


-¿Es...?- miró la erección de JungKook y gimoteó, trabajando rápido con sus
dedos- Ya... entra... y hazmelo como solo tú lo haces...

JungKook gruñó y se acomodó entre sus piernas, comenzando a ingresar en su


cuerpo.

-Mierda... ¿Desde cuando no tienes sexo?- jadeó JungKook, sintiendolo tan


apretado y caliente.

Taehyung se mordió el labio inferior tirando la cabeza hacia atrás.

-Joder...- gimió Taehyung, sus uñas enterradas en las sabanas- Un año... los
juguetes...

-Al carajo los juguetes- gruñó JungKook antes de embestirlo profundo y duro.

-¡A-auch joder...!- gimió alto, casi gritando cuando las sensaciones placenteras
invadieron todo su cuerpo.

Sus musculos apretando aquella polla, sintiendo la sensación del látex ser
arrastrada por cada embestida que JungKook le estaba dando, entrando toda su
polla hasta el final.
-Mmh...- jadeó JungKook, colocandose de rodillas para tomarle sus caderas y
ahí comenzaron aquellas embestidas que hizo al cuerpo de Taehyung temblar.

-Que...- Taehyung se quejó entre el placer y dolor cuando JungKook clavó sus
uñas a medida que lo embestía rápido, perdido en el placer.

Los ojos de Taehyung se aguaron por el dolor de las uñas pero el placer era
más grande que cualquier cosa.

Taehyung se intentó alejar un poco para poder siquiera volver en sí. Todo le
giraba, estaba ebrio, el dolor, el placer, los gemidos de JungKook y su pene
grande clavandolo contra él era demasiado para su cuerpo.

Las manos de JungKook en su trasero le ayudó a sentarse sobre él, Jeon


girando para apoyarse en el centro cama por si el alcohol jode su equilibrio.

Taehyung se abrazó a su cuerpo duro, el sudor haciendo ambas pieles ser


resfaladizas.

-JungKook...- jadeó Taehyung, rasguñando sus hombros- Oh por Dios...

-¿Qué?- gimió JungKook, ayudandolo a subir y bajar por su verga- ¿Mucho


para... tí...?
-Papi...- gimió Taehyung y escuchó el gruñido de JungKook antes que su
espalda fuera estampada en el espaldar de la cama.

Taehyung se quejó al sentir el golpe antes de gemir.

El resto de la hora fue borrosa para Taehyung, solo volvió a ser consciente
cuando ya se había corrido y JungKook se estaba corriendo en su boca.

¡Jodida ebriedad que no lo dejó ser consciente!

1.

(05)

Trước Sau

-Buenos días- saludó JungKook, saliendo descalzo, con ropa deportiva y el pelo
mojado por la ducha.

Taehyung elevó dos dedos en forma de saludo: se estaba atragantando con


fresas y crema.

-¿Quieiesh?- hablando y tragando al mismo tiempo.


-Quiero café y algo para mí cabeza, gracias por el silencio, supongo- murmuró
JungKook, sus ojos achicados- No vuelvo a beber más.

-El hada de la mentira te dice hola- habló Taehyung mientras preparaba el


desayuno y lo acomadaba para que ambos pudieran tener la primera comida.

-Ya... dame ese café.

-En realidad es un té de carqueja, funciona a las mil maravillas.

Taehyung tomó la taza y caminó hasta el sofá donde supuestamente JungKook


tendría que haber dormido.

-Debo planificar ésto o el Lunes estoy en pelotas... y no quiero- murmuró,


tomando una carpeta de arriba de un mueble y comenzando a abrirla para
buscar entre las hojas el bolígrafo.

-Prefiero quedarme con mi café, no confío mucho en lo naturista- JungKook


elevó una ceja y se levantó para preparar su café mañanero.

-Como quieras... ¿almuerzas?


-Sí, hoy no quiero ir a mi departamento y tener que planchar ropa. Es una jodida
mierda.

-Ya te dije que contrates a alguien para eso- Taehyung frunció el ceño y escribió
algo en las hojas- ¿Violín o guitarra?

-¿Primaria o secundaria?

-Primaria.

-Guitarra.

Ambos se enfrascaron en sus cosas durante una hora y media antea de volver a
hablar.

-¿Pizza?

-¿Tienes ganas de cocinar?

-No, ¿tú?
-No- se quejó JungKook y amboa rieron antes de quejarse por la resaca.

-Correcto, pizza será.

-¿Qué tal tacos?

-Tú los pagas.

-Hecho- JungKook tomó su celular y marcó para dejar encargado la comida.

-¿Cómo te va con la pediatra?- preguntó Taehyung, guardando las hojas.

-No resultó. Salimos tres o cuatro veces pero no resultó.

-¿Por qué no?

JungKook se encogió de hombros y se sentó a su lado.

-Ya te la cogiste.
-Si fue o no, no se cuenta, Tae.

-Ya te la cogiste- Taehyung asintió con la cabeza, dando por sentado.

JungKook lo miró antes de reír.

-Es que eres imposible.

-Soy tu mejor amigo, Kook, sé leer entre líneas, ahora cierra la boca y masajea
mis hombros... me están matando.

-No soy masajista.

-Eres médico, sabes donde apretar.

-La última vez que alguien me dijo eso, terminamos follando como conejos-
habló JungKook, comenzando a masajear.

El fantasma de lo que pasó la noche anterior quiso asentarse entre ellos sin
éxito.
-¿Quién no termina follando contigo, Jeon?- Taehyung hizo una mueca.

-Es una excelente pregunta- respondió JungKook sonriente.

Luego de eso, simplemente Taehyung comenzó a platicar sobre uno de sus


alumnos que era bastante talentoso y le veía futuro. El almuerzo llegó y fue
acompañado por "Hasta el último hombre" en la televisión.

El cielo comenzó a nublarse hasta terminar completamente gris, algunos


destellos apareciendo por aquí y por allá.

-¿Lloverá?- preguntó Taehyung mientraa tiraba los descartables de los tacos.

-No lo...- JungKook miró a la ventana- Olvidalo, lloverá, en efecto mi querido


Kim.

-Elemental, Jeon.

Taehyung sonrió y su boca se movió sola, sin intenciones de buscar nada.

-Nunca te lo conté pero una vez me iba a encontrar con un compañero de


trabajo y pasar el rato y ¿qué crees? Comenzó esa tormenta electrica que causó
tantos destrozos. El tipo ni siquiera pudo salir de su casa. Amo los días así y ni
que se diga de coger en días nublados pero solo...- liberó una carcajada- Ese
día lo odié.

Taehyung escuchó una respiración pesada, de esas que JungKook daba cuando
estaba realmente concentrado en algo.

-¿Y te consolaste solo?

-Fue el único plan que hice para ese día.

Taehyung se giró y vio como JungKook se estaba lamiendo los labios.

-Que pena- lamentó su amigo y Taehyung se encogió se hombros.

-Cuando no está escrito, siempre pasará algo.

Kim caminó hasta la sala y se tiró en el sofá comenzando a cambiar los canales.

-Pues... ¿te irás?- preguntó Taehyung, rompiendo la tensión.


-¿Ya me estás echando? Siento mucho ser una carga- respondió JungKook, su
tono bromista.

-¡No!- rió Taehyung- Lo digo para buscar unas frasadas y dejartelas aquí- y la
lluvia realmente comenzó- No creo que quieras conducir con este clima.

-Sí, voy a quedarme.

Taehyung asintió y le lanzó el control.

-Busco otra almohada entonces.

JungKook vio a Taehyung caminar y se quedó prendido de su culo.

-Uf...- suspiró bajo.

Cuando Kim entró a la habitación, abrió su closet y lo primero que apareció fue
la caja de condones.

Se aclaró la garganta y bajó la mirada hacia la ropa de invierno, buscando las


sabanas y frazadas, su mente arrojandole de vez en vez imagenes cortadas de
la noche anterior.
Se lamió los labios y solo quitó las sabanas. Iba a... es decir... sus hormonas...

Hizo una mueca con su boca y buscó una almohada. Ya estaba, tenía que
respirar hondo, tenía que poner en orden su cabeza, su cuerpo también.

Salió de la habitación y caminó hasta el sofá para dejar todo allí.

-Listo- habló, controlando su voz para que no saliera torcida.

-Sí... yo... tengo una duda...- le habló JungKook, recargado en una pared para
verlo mejor.

-Dime- Taehyung sonrió, restandole importancia.

-No quiero dormir solo hoy... mucho menos dormir...

(06)

Trước Sau

-Espera... mierda... espera JungKook...


Taehyung sentía como JungKook estaba jalando sus pantalones, toqueteando
su abdomen, una mano subió para pellizcar su pezón.

-JungKook...- jadeó y entonces Taehyung fue empujado a la cama, Kook se


quitó el cinto que quitó de uno de los cajones de Taehyung.

-Date vuelta, bebé...- habló y Taehyung se lamió los labios.

-Obligame- suspiró, riendo.

Taehyung jadeó cuando JungKook lo obligó a girarse. Si había algo que siempre
excitó a Taehyung, era que su pareja sea más fuerte que él, que sea capaz de
manipularlo justo como JungKook lo estaba haciendo.

-Ah...- gimió y cerró los ojos cuando JungKook le tomó los brazos y los ató con
el cinto- Kookie... ¿qué vas a hacer?

-Desde siempre he tenido muchas fantasías contigo- murmuró JungKook,


tomando dos corbatas.

Una cubrió los ojos y otra su boca.


-Solo que ahora, después de la llamada- habló mientras le abría las piernas
después de quitarle el pantalón- Se me hacen muy recurrentes...

Le dio una nalgada y Taehyung elevó su trasero, masajeó sus nalgas y llevó una
mano a jugar en el borde de su entrada.

JungKook lo giró y levantó su camiseta para lamer su abdomen, mordiendo uno


de sus pezones y después otro.

-Tengo muchas ideas y tu lindo trasero solo me dan nuevas...- volvió a separarle
las piernas y lamió su polla, haciendo que se endurezca, viendo como su polla
se curvaba hacia arriba.

Lamió sus testiculos y Taehyung se arqueó en la cama, moviendo sus caderas.

-Mmh... mgh...- gimió Taehyung, removiendose, tirando su cabeza hacia atrás.

-Eres muy sexy...- gruñó JungKook y pasó sus labios por el costado de su pene
duro- Quiero marcarte por todos lados.

Raspó con sus dientes su cabeza y llevó sus manos a pellizcar sus pezones
duros.
-Mmh... mmh...- Taehyung movió un poco su cabeza y levantó sus caderas.

-Yo lo hago...- suspiró JungKook, soplando la punta de su polla.

-¡Mmh!- jadeó Taehyung, agudo.

JungKook lo giró boca abajo, Taehyung giró su rostro hacia la izquierda para
poder respirar y JungKook lo tomó de las caderas para dejarlo en las rodillas.

-Que bien te ves...- murmuró y entonces Taehyung escuchó el ruido húmedo del
lubricante, sintió el frio en su entrada y... Taehyung sentía su cuerpo a flor de
piel.

Chilló cuando sintió la cabeza de aquel pene entrar en su cuerpo, poco a poco
enterrandose hasta el final, sintiendo aquella piel chocando con su trasero.

-Me apretas tan bien, cariño...- jadeó JungKook, tomando su cabello de la nuca;
colocando su mano libre en aquellas caderas.

Y comenzó a moverse. Taehyung chilló a través de la improvisada mordaza


mientras sentía aquel largor entrar y salir de su cuerpo una y otra vez.
-Ah... ah...- la voz ronca de los gemidos de JungKook causaba que Taehyung
quisiera que lo jodiera más y fue cuando movió sus caderas.

¡Mierda!

JungKook comprendió lo que quería y fue cuando liberó su cabello y tomó con
ambas manos sus caderas. Comenzó a embestirlo duro y rápido, la fricción
dentro de su cuerpo, entrando y saliendo, los musculos de Taehyung apretando
su pene.

El cuerpo de Taehyung se arrastraba por el colchón, subiendo y bajando, el


ruido de pieles chocando, JungKook le dio dos nalgadas y entonces comenzó a
moverlo más rápido desde sus caderas.

-Mmh... mmh...- Taehyung quiso liberar sus manos y el cuero del cinto causó
ardor en la piel de sus muñecas.

-¿Te gusta que te tome así?- JungKook lo movió contra su cuerpo, empalandolo
contra su falo- Ah... sí... te gusta como sea que me guste...

Taehyung asintió con la cabeza, su frente perlandose por el sudor.


Sus piernas se rindieron y se dejó caer contra el colchón, sintió el colchón a
cada lado de su rostro hundirse y entonces JungKook lo estaba clavando contra
el colchón.

-Mierda... sí que te gusta que te joda...- JungKook le mordió en la curva del


cuello y el hombro y Taehyung lloriqueó.

JungKook subía y bajaba las caderas una y otra vez, los resortes del colchón
subiendo y bajando, Taehyung removiendose y chillando; frotando su polla
contra el colchón a medida que sentía y escuchaba las caderas de JungKook
chocar contra su culo.

-Mierda Tae... quiero ese culo todo el tiempo...- gimió JungKook en su oído y el
placer explotó completamente, haciendo que ambos llegaran al orgasmo.

(07)

Trước Sau

Para el día siguiente, Taehyung sentía su cuerpo adolorido, ardiendo.

No se molestó en ver si JungKook estaba a su lado en la cama, seguramente


durmió en el sofá otra vez.

Su piel ardía y estaba algo rosada, sus piernas pesaban al igual que el resto de
su cuerpo, se sentía de un excelente humor y estaba muy saciado.
Con todo el ritmo lento del mundo, se sentó en la cama, buscó su ropa por algún
lado y la vio doblada sobre los pies de la cama. No quiso darle importancia a
aquello.

Se levantó y caminó hasta el baño, preparó la ducha, buscó su pijama más


cómodo y se bañó.

No quiso cubrir algunas pecas con maquillaje, tampoco quiso peinarse y ni


siquiera pensó en su almuerzo.

Caminó a la cocina, preparando su desayuno a las nueve de la mañana.


Observó una nota escrita a mano de JungKook.

-Medico tenías que ser, hijo de mil...- suspiró con una sonrisa, esas líneas de
por ahí que nadie entendía; Taehyung sí lo hacía.

Le había escrito que hoy tenía un día bastante agitado y que le hizo el favor de
pedir su desayuno, llegaría a las nueve y quince de la mañana y esperaba que
esté despierto a esa hora.

Taehyung apagó la hornalla de la cocina y esperó entonces a que el desayuno


llegara.
Estuvo en el sofá quince minutos antes que su puerta sonara y un chico
estuviera detrás de ésta.

-Desayuno para Kim Taehyung- sonrió y le tendió una caja alargada y cuadrada-
Ya está pago, que lo disfrute.

Taehyung sonrió, agradeció y cerró la puerta. Caminó hasta el sillón, ingresó a


su cuenta de Netflix; buscó alguna película de aventura y abrió la caja.

Donas, chocolates, masitas dulces, un pequeño potecito de jalea y otro de


mantequilla, sobrecitos de tés; leche, café... Taehyung se levantó y buscó agua
caliente.

Los chocolates lo dejaría para después.

Y, mientras bebía su café; unos diez minutos después, su celular sonó con una
llamada.

-¿Hola?- preguntó mientras comía una masita dulce.

-¿Cómo amaneciste?- la voz de JungKook del otro lado hizo a Taehyung


recordar toda la noche anterior.
-Increíblemente bien- sonrió y continuó en la tarea de vaciar su taza- Gracias
por el desayuno, la pereza me lleva arrastrando desde que me levanté.

-Me lo imaginaba, ¿cómo están tus muñecas?- preguntó el médico.

Taehyung las vio y se mordió el labio inferior.

-Algo rosas, ya se va a pasar. ¿Cómo va tu mañana?

-Agitada. Tengo que estar en tres análisis pre-operatorios y tengo dos cirugías
en la tarde. Cada una me va a llevar unas... dos horas si todo sale bien.

-Eso de especializarte en operaciones no es tan bonito ahora ¿eh?

-En realidad sí, es solo que me siento demasiado relajado como para recargar
las baterias.

-Lo de anoche fue increíble- Taehyung cerró los ojos y se mordió los labios
cuando aquello se escapó de su boca.

La línea quedó en silencio durante un par de segundos.


-Sí... la verdad es que sí. Esta mañana no me quería despegar del sofá.

-No tendrías que haberte ido de la cama, por empezar.

-Dormir juntos complicaría las cosas, más de lo que ya están.

-Buen punto- suspiró Taehyung, terminando una masita y empezando por la


otra- Tengo mucho hambre.

-Dimelo a mí, estoy en la cafetería comiendome el tercer muffin con un café


cargado y tres cucharadas de azúcar. Si ésto no levanta al muerto, no sé qué.

-Yo si sé- respondió Taehyung y ambos rieron.

-Ya, tengo que volver, se acabó mi descanzo. Nos vemos después, Taehyung.

-Nos vemos y gracias otra vez por el desayuno- habló.

La llamada se cortó y él suspiró. Dejó la masita y se abrió el chocolate. Aunque


no necesitaba mucha oxitocina esa mañana, la hormona estaba haciendo un
viaje turistico por sus venas.
-¿Más complicado?- murmuró mientras que mordía la tableta- No siento que..
fuera complicado.

Aunque si lo pensaba bien, Taehyung ni siquiera sabía si JungKook estaba


saliendo con alguien. Aunque conociendolo, si hubiera estado con alguien
entonces no habría aceptado aquello en un principio.

Hacía un año que había roto con su ex y esa persona ya estaba casada y con
hijos... un problema menos.

¿Pero se refería al hecho de que fueran amigos? Taehyung conocía a varias


personas que tenían sexo con sus amigos y nunca se complicó... blanqueó los
ojos cuando se dio cuenta que sus amigos no eran Jeon JungKook.

No quería agrandarse ni nada por el estilo pero JungKook era un amante digno
de morir por él... y hablando de eso... deberían hablar sobre cómo iba a aquello.

Recién conenzaban, era la segunda vez que se acostaban y era bueno dejar en
claro absolutamente todo antes de que se vuelva más duradero.

Decidió que esperaría a la noche. Podría ir y hablarle en la clínica pero no


quería levantarse de su sillón y si había algo que pudiera más que JungKook era
el chocolate que tenía en sus dedos... el chocolate era toda su vida.
(08)

Trước Sau

Cuando la noche llegó y el reloj marcó las once de la noche, JungKook estaba
bajo la ducha.

El agua caliente caía por su cuerpo y cada gota resvalaba por su piel y caían
hasta el suelo.

Un baño así le hacía bien. No pudo ir al gimnasio a quitarse el estrés que le


causaban las cirugías y su cabeza solo giraba y giraba en torno a nada en
particular.

El frío se había apoderado mal de todo. Cuando cortó el agua y salió del baño
con una toalla en sus caderas, la calefacción ya había hecho su trabajo en toda
la casa.

Se secó el cuerpo y el pelo que se rizó cuando alejó la toalla.

Su celular sonó y entonces el tema que había escogido para Taehyung hacía un
año atrás invadió el cuarto.

-Hola- respondió después de ponerlo en altavoz.


-¿Estás saliendo con alguien?- escuchó la voz de Taehyung y JungKook
blanqueó sus ojos.

-Hola- repitió.

Escuchó su suspiro y sonrió divertido.

-Hola, Kook ¿Cómo estás? ¿Cómo estuvieron las cirugías? ¿Todo está bien?
¿Estás saliendo con alguien?

-Eso estuvo mejor y no, no estoy saliendo con nadie ¿por qué? ¿Quieres
asegurarte?

Lo conocía tan profundo que sabía por qué hacía las cosas. Taehyung era una
masita tierna.

-Sí... ya sabes que no me gusta ser la tercera rueda y sí... lo pregunto un


poquiiito tarde pero igual quería saberlo.

-No, no fue así. Hace un año que no estoy con nadie.


-Solo rollos como los míos ¿no?

-La diferencia es que yo no tengo un cuaderno donde los escribo con fecha.

Sabía que había blanqueado sus ojos.

-Ya, olvidate de eso- escuchó una risa y luego, a lo lejos, escuchó un quejido.

-¿Te duele algo?- preguntó JungKook mientras buscaba su pantalón del pijama
y se lo colocaba.

-No...

-¿Entonces?

-Nada... solo quería dejar las cosas claras.

-¿Tienes un nuevo juguete entre las piernas?- preguntó, deteniendo sus manos
de ir por la camisa del pijama.

-Tal vez...- se escuchó su respiración pesada.


-¿Lo de anoche no te bastó?- elevó una ceja.

-Es que eso pasó hace 24 horas... soy muy exigente...

-No comiences ese juego, bebé.

-Estoy seguro que quieres verme, JungKook.

-Solo... duerme, ¿sí?- JungKook ya estaba sintiendo ese familiar cosquilleo, esa
incomodidad que surgía siempre que su pene tenía una erección.

-¿Y si te vienes aquí? Mañana es domingo, el vibrador no me está funcionando


para bajarme la calentura.

-Taehyung no te atrevas a hacerlo.

-Te apuesto a que puedo quitarte todo el maldito estrés que liberas en el
gimnasio... ¿puedo lamer tus abdominales? ¿O tu V?

JungKook se tiró de espaldas a la cama y cerró sus ojos, su respiración pesada.


-Es que eres tan bueno conmigo que yo quiero serlo contigo.

-No es así como funcionan las cosas, Tae.

-¿Ya no soy "vida" o "cariño"?- se escuchó un gemido- Ven y dimelo al oído


mientras me jodes... es que no puedo tener suficiente de tí. Correte otra vez
dentro mío... eso es tan rico...

Y JungKook cortó la llamada, se cambió como pudo de ropa por la primera que
vio y entonces salió a buscar su coche.

No supo cuanto duró el viaje de una casa a otra, solo supo que cuando
Taehyung le abrió la puerta, ni siquiera se molestó en saludar.

Lo tomó en la cocina, como si nada. Taehyung apoyó sus manos en la isla y


cerró sus ojos cuando lo sintió entrar y embestirlo.

JungKook no sabía hasta qué punto podía llegar a ser adictivo el estar con
Taehyung hasta ese momento.
Lo vio levantar las caderas, su trasero tan hipnotizante por cada vez que sus
caderas chocaban contra él. Los dedos de Taehyung arrastrandose por la isla,
los pantalones por los tobillos.

-¡Ah!- gritó Taehyung cuando tocó su prostata.

-¿Qué pasa, cielo?- preguntó JungKook en su oído, hablando bajo, no se


reservó las ganas de morderle suave el lobulo y jugar con su lengua en aquella
piel- ¿Te gusta?

-Sí...- gimió Taehyung, JungKook lo pegó a su pecho y el ruido de pieles


chocando llenó la cocina.

-¿Lo quieres más lento?- susurró, su tono de voz no subió... vio a la piel de
Taehyung erizarse por cada vez que le hablaba.

Comenzó a embestirlo lento, girando sus caderas... y entonces se deleitó viendo


como su amigo se mordía los labios de puro placer.

-No... rápido... dame más... JungKook... quedate adentro...

Jeon rió y entonces lo giró para llevarlo hasta la mesada de la cocina. JungKook
descubrió que le encantaba cada que Taehyung le mordía los labios de aquella
forma tan traviesa.
Lo vio subirse a la mesada y abrirse de piernas, apoyandose en sus manos, su
cabello despeinado.

-Vamos cariño... enseñame lo que puede hacer un hombre como tú...

¡Oh! Ahora comprendía por qué Taehyung siempre tenía a personas detrás para
joder con él.

Dio un par de pasos y entonces entró a su cuerpo así.

-Ah... Taehyung...- gimió y es que con él cada posición le hacía volar la cabeza.

Sentía como el cuerpo de su amigo lo apretó duro y fuerte y moverse fue la


tortura más deliciosa del día. Joder... que bien que lo sentía.

Taehyung gimió agudo y lo miró entre sus pestañas. JungKook le sonrió y


entonces se avalanzó un poco hacia delante para comenzar a lamer y chupar
uno de sus pezones.

Sintió una mano de Taehyung en su nuca pegandolo a su pecho y sus caderas


lo embestieron rápido y duro, quedandose dentro para girarlas mientras
mordisqueaba suave.
-Que bueno... mierda... más... sí...- los gemidos de Taehyung no eran para nada
bajos y JungKook lo estaba disfrutando tanto.

El placer volvía a Taehyung alguien tan desnhibido que volvía loco a JungKook...
y eso que no era ningún santo.

Y, cuando llegaron al orgasmo, JungKook sintió el ardor de las uñas de


Taehyung clavarse en sus hombros al sentir su semen llenarlo.

(09)

Trước Sau

-... ta... no...

Taehyung se removió en la cama, anoche se había bañado antes de acostarse y


entonces eso llevaba a que su cabello tenga frizz a cantidades exageradas.

-...e...

Su cuerpo se removió y entonces le quitaron las sabanas. Sus ojos se abrieron


perezosamente antes de ver como su cuaderno de free-sex estaba abierto ante
sus ojos.
-¿JungKook?- su voz ronca de recién despertado se escuchó.

-¿Por qué no estoy anotado en tu lista?

-Porque no eres uno más- respondió y se giró sobre su lado izquierdo- ¿Puedo
seguir durmiendo?

-¿Por qué tengo que desayunar solo?

-Ya eres grandecito.

-Esta noche tengo guardia, Tae. Desayuna conmigo- y entonces Taehyung fue
alzado entre aquellos brazos fuertes.

-¿Ya me quieres poner de nuevo?- bromeó Taehyung.

-¡Por Dios! Me haces pensar que jamás te lo han hecho bien.

-¿Y tú sí?- Taehyung vio la puerta del baño ser abierta.

-Por algo me pides más.


Taehyung carcajeó y entonces se bajó de sus brazos para lavarse.

-Voy a tardar- habló mientras se secaba la cara- Tengo que plancharme el pelo.

-Ya hasta pareces un león- bromeó y Taehyung jadeó dolido antes de lanzarle
agua y que JungKook aaliera corriendo de allí.

Después de unos quince minutos, Taehyung vio a JungKook sentado en uno de


los taburetes, afirmado en la isla con su celular en la mano.

Afuera estaba helando, estaba nublado. JungKook se veía muy bien


concentrado en su celular.

-¿Sabías que este año tiene el mismo calendario que en 1993?

-¿Ah si?

-Sep, ¿café?

-Sep.
Pasó un rato antes de que terminaran de desayunar. Ambos se movieron hacia
el sofá, viendo un poco de tele para disfrutar el domingo casi libre que tenían.

-¿JungKook?

-¿Mmh?

Taehyung suspiró antes de girarse y sentarse a horcajas en él, jugando con su


cabello.

-¿Cómo aprendiste a moverte así cuando tienes sexo?- preguntó y JungKook


suspiró, haciendo una mueca mientras veía su boca.

-Si me das un beso te lo digo.

Taehyung rió y entonces le tomó el rostro para besarlo profundo y lento. Sintió
las manos de JungKook por sus muslos antes de morderle su labio inferior.

-Siempre quise hacer eso- suspiró JungKook. Taehyung rió y llevó sus dedos a
jugar con sus lobulos.
-Espero mi respuesta...

JungKook suspiró y se encogió de hombros.

-Salí con personas, Tae... a una persona le gusta una cosa, a otra algo diferente,
a mí otra cosa. Había veces en las que veíamos algo nuevo y queríamos
intentarlo.

JungKook cerró sus ojos y apoyó su cabeza en el espaldar del sofá. Taehyung
bajó su boca y lamió su garganta, cerrando sus labios en su manzana de Adán.
Kook sonrió y le dio una nalgada.

-No- respondió y escuchó la risa de Taehyung

-Solo bromeaba... no puedes culparme.

-¿No? Te conozco, sé lo que haces para buscar que te follen.

-A tí te gusta tambien, no te quejes- rió Taehyung.

JungKook elevó una ceja cuando lo vió.


-¿Y me dices que nadie te ha lo ha hecho como yo?

Taehyung se encogió de hombros y bajó sus manos a su cuello, pasando a sus


hombros y bajando hacia su pecho, dibujando cosas invisibles.

-No sé, me lo han hecho bien pero no... muy bien. ¿Me entiendes?

-Nop.

Taehyung hizo una mueca antes de sonreír.

-Nadie me ha dejado con lágrimas en los ojos mientras está en mí, o sea, ya
sabes; jadeando, necesitando y pensando en todo momento en la próxima vez.

-¿Eso provoco en tí?

-Tengo confianza y después de la primera vez... aún más, sabes mis fetiches y
mis cosas vergonzosas... asi que... no me parece raro.

JungKook sonrió y se acomodó para volver a morderle el labio, viendo como


Taehyung cerraba sus ojos.
-No tengo idea cómo lo haces- murmuró JungKook cuando le soltó el labio- Pero
necesito ver cada expresión que tienes.

Taehyung sonrió y sus dedos siguieron bajando a la cinturilla de aquellos


pantalones de deportes.

-Ya sabes, soy irrestible...- ambos se quedaron jugando con la ropa del otro
mientras que la voz de la tele que estaba encendida- Por cierto... tengo una
fantasía... pero no sé si quieres cumplirme eso.

-¿Tan raro es?- murmuró JungKook antes de mirarlo a los ojos.

-Quiero hacerlo en tu consultorio, contigo en tu bata y esa ropa verde que tienes
por uniforme. En la camilla esa que tienes allí.

Taehyung vio aquellos ojos oscuros turbarse un poco antes de aclararse la voz.

- Estoy a favor de eso- respondió JungKook y Taehyung rió cuando sintió


aquella dureza debajo de él.

-Yo diría que estás completamente a favor. Te gusta la idea tanto como a mí.
-No puedo negarlo, mi cuerpo me delata.

Tae se aclaró la garganta y se removió en su regazo.

-¿Cuándo?

-Creo que te llamaré, estos días son complicados asi que te avisaré apenas
pueda.

-¿Y si me haces una consulta privada?- preguntó Taehyung, pasando sus


brazos por sus hombros y dejando a la vista su cuello.

No hubieron muchos segundos antes de que sintiera la boca de JungKook en su


piel.

Todas las sensaciones en él se encendieron mientras sentía sus labios, lengua y


dientes.

-Me encanta que me beses en el cuello...- murmuró- Desde que lo hiciste esa
vez en la fiesta...

-¿En la oscuridad?- preguntó JungKook en un susurro.


-Sí...

-Me arrepentí de no habertelo hecho aquella vez...

(10)

Trước Sau

-Ya, ya... Me toca...

Tener diecisiete, al borde de terminar la secundaria, hormonas revueltas, siendo


los más hot de la pre-universidad, eran cosas que no deberían juntarse.

Y el ego alto peor.

Taehyung veía como JungKook estaba tirando el dado. Era la primera vez que
estaban ebrios, tomaron los dados eróticos de la prima de Jeon y el reto era que
quien se separaba perdía, Gay Chiken en otras palabras.

El dado cayó en Lamer y Entrepierna y ambos se miraron.

-Otra- repitieron los dos y JungKook volvió a tirar.


Esta vez cayó en Lamer otra vez junto a Cuello.

Esa noche, la tormenta que había causó que el suministro electrónico de aquel
barrio tuviera problemas y por lo tanto, la luz estuviera cortada y las linternas y
velas estuvieran por la mayoría de las casas.

Así que bien, Taehyung apoyó su espalda contra la cama (ya que estaban
sentados en el piso) y tiró su cabeza contra el colchón.

-¡Pam, pam, paaaaaammmm!- tarareó Taehyung como si fuera el final de alguna


telenovela que veía su madre- No vas a... Hacerlo...

Lo bueno de aquella amistad, además de tener una mente muy abierta, era que
desde los quince; ambos aceptaron sin problemas su bisexualidad. Así que,
cuando JungKook se le subió encima y lamió lentamente su piel, Taehyung no
se avergonzó del gemido que salió de su boca.

Alcohol y estar caliente no era una buena combinación. Para ninguno.

Taehyung, ignorantemente, levantó sus caderas y chocó con las de su amigo


que sonrió borracho y sexy mientras comenzó a morder aquel cuello, de a
pequeñas y suaves partes, subiendo a su mandíbula mientras llevaba sus
manos a jugar con su bragueta y detenerse en su boca.
-¿Te vas a alejar?- murmuró contra aquellos labios y entonces Taehyung se
lamió los labios- Mierda...- jadeó JungKook antes de chocar su boca.

Llevó una mano a su nuca para jalar de su cabello y Taehyung jadeó tan agudo
que a JungKook solo lo provocó más. Lo besó tan profundo y jodidamente bien
que Taehyung comenzó a removerse.

Terminaron acostados en la cama de Tae, con JungKook intentando arrancarle


la ropa sin éxito. Estaba caliente... Mucho... Y eso era lo malo.

Fue allí cuando su cabeza le regaló el click que tanto necesitaba para volver en
sí a pesar de la bruma de alcohol.

No sabía qué era lo que había ocurrido por su cabeza pero era la tercera vez
que tuvo que regalarse mentalmente por no prestarle atención a los estudios.

Tenía un paciente de 49 años allí mismo para una futura y posible operación y
su cabeza solo le daba hermosas imágenes de lo que había sido la noche
anterior.
La manera en la que Taehyung se arqueó hacía él y el hecho de que sus ojos se
llenaran de lágrimas de vez en vez era un detalle tan caliente para él.

Si no dejaba de pensarlo, entonces tendría una jod... ¡ah, bien! No tendría, tiene,
amigos... ya tiene una jodida erección en sus pantalones.

Se iba a tener que quedar sentado lo que restara la consulta.

Cuando los minutos pasaron, JungKook despachó con gentileza al hombre, la


puerta apenas si se cerró y buscó su jodido teléfono para marcarle a Taehyung.

-...sol, la, si, do... De nuevo, dulzuras- la voz de su amigo se escuchó entre
cantos de infantes- Buen día ¿cómo estás?

-No dejo de pensarte, ¿estás en clase?

-Si, hoy tengo hasta las ocho en mi Instituto. Vas a tener que esperar- podía
escuchar aquella risa que se estaba tragando.

-¿En serio vas a hacerme esperar?


-No voy a tener sexo entre clases, JungKook- susurró y Kook supo que había
salido fuera del aula.

-¿De verdad vas a hacer esperar a papi?

Lo escuchó aclararse la garganta. Ok... Se iría al infierno por ésto, ¿quién lo


acompaña?

-Porque puedes caber muy bajo mi escritorio y nadie te vería entre mis piernas.
Hace mucho que no me la chupas, bebé. ¿Por qué no vienes y ayudas a papi a
bajar la calentura?

-JungKook, estoy en clases- la voz de Taehyung sonó algo baja y tímida.

-Hay muchas probabilidades que pueda hacerte una de esas consultas que
tanto quieres... Tengo camilla nueva y te veo perfecto abierto de piernas arriba
mientras tu doc favorito te hace revisiones.

-Ok, no. Basta.

JungKook no supo si gruñir o reír: le había cortado la llamada. Así, como estaba,
le cortó la llamada.
Unos segundos después, le llegó un mensaje de Taehyung: Tal vez salga más
temprano del instituto y vaya por esa consulta.

Y de solo leerlo, sus hormonas explotaron, su respiración pasó a ser controlada


y la necesidad de entrar en aquel apretado cuerpo rebalsó su tolerancia.

Toda la tarde estuvo jodidamente viendo el reloj, controlando los minutos, los
segundos para verlo de nuevo.

¿Es que cómo olvidarse de su mejor amante? Sí, sabía que tendría que decir
otra palabra pero; para la ocasión en la que estaba, amante era la mejor
palabra. No iba a perder el tiempo tratando de engañarse.

Siendo las diez de la noche, en su computadora figuró el último paciente: Kim


Taehyung.

Apenas lo vio entrar por la puerta, supo que afuera el clima estaba helado. Sus
labios estaban algo rojos, su cabello estaba húmedo seguramente por la lluvia
porque su ropa estaba igual.

Jungkook sonrió y se despegó de su silla, al fin, viendo como Taehyung sonrió


travieso y caminó hasta la camilla para apoyar sus manos allí.
-Tienes un problema por lo que veo... Ah...- suspiró cuando lo recibió entre sus
brazos y sintió sus labios en su cuello.

Jungkook lo abrazó por la cintura antes de bajar sus manos a su trasero y


apretarlo mientras que lo pegaba a él... Esperaba que la camilla fuera cómoda.

1.

(11)

Trước Sau

-Sí... JungKook... Sí...

Verlo sin nada de ropa, con su cabello enredado en sus dedos, apoyado con sus
antebrazos en la camilla, su culo parado...

-¡Auch!- gimió Taehyung, sus uñas clavándose en la camilla, mierda... era arte
puro.

Jungkook estaba extasiado viendo como el trasero de Taehyung era penetrado


por su polla una y otra y otra vez, sus caderas chocando contra sus nalgas y
¡Uf... Uf! El sudor por sus cuerpos.

Jungkook salió de él y lo tomó de la cintura.


-¿Que harás...?- preguntó Taehyung sin aliento, dejándose guiar.

-No pensarás que te iba a hacer acabar así, ¿No?- murmuró Jungkook mientras
llevaba una mano a pellizcarle sus pezones.

-¿Sí?- la duda hizo a Kook reírse antes de sentarse en su silla y girar a


Taehyung.

-Sabes lo que tienes que hacer, cariño...- murmuró mientras se tomaba su


erección con su mano.

Taehyung se lamió los labios y se colocó a horcajas sobre él.

-Despacio... ¿Si?- susurró con una sonrisa.

La puerta tenía llave, Jungkook se encargaba de cerrar la clínica, ya no había


nadie... Podía...

-Ah...- Taehyung se aferró a sus hombros, tiró la cabeza hacia atrás y cerró sus
ojos mientras que bajaba por su pene poco a poco- Jungkook...
El nombrado lo pegó un poco más a su pecho antes de lamer su cuello y
mordisquear suave la piel de su pulso. Taehyung tenía la punta de su erección
brillante, la tenía casi roja.

Y entonces lo logró entrar completo, tenía la boca abierta y respiraba por ella.
JungKook le tomó de la mandíbula y dejó su rostro frente al propio.

Sacó su lengua para lamer aquellos labios llenos, ingresarla a su boca y sentir
como Taehyung comenzó a moverse.

-Oh papi como me gusta ésto...- susurró Taehyung cuando tenía la boca libre.

Taehyung era tan sucio a veces...

-Muevete...- Jungkook le dió una nalgada fuerte que resonó por toda la
habitación- Sé que sabes cómo...

Y escuchó la risita de Taehyung antes de que comenzará a dar saltitos.

Los gemidos se escuchaban desde fuera del consultorio y cada vez iban más
alto, el ruido de pieles chocando, el ruido húmedo y chicloso... las bocas se
juntaron y el ruido húmedo no fue solo de la penetración.
Taehyung estaba extasiado mientras sentía a Jungkook acompañar con sus
caderas sus saltitos, era grande, le gustaba esa sensación llena en su interior,
esa que lo hacía liberar el aire de sus pulmones por cada parte que entraba en
su cuerpo.

Giró sus caderas, sintiendo claramente como raspaba sus paredes y tuvo que
respirar por la boca porque su nariz ya no era suficiente.

Jungkook le pellizcó un pezón antes de morderle el labio. Bajó sus manos a su


trasero y lo apretó y masajeó y la cabeza de ambos estaba más allá del cielo.
Mucho más allá...

Y, cuando el borde del orgasmo los empujó a la punta del placer, Jungkook
apretó la base del pene de Taehyung.

-No te vas a correr todavía...

-J-Jung... Kook...- Taehyung se quejó y empezó a moverse rápido, dispar, nada


elegante pero si muy caliente.

La punta de sus dedos estaban acariciando ese orgasmo pero no podía


abrazarlo...¡Mierda!

-¡JungKook!- chilló, alto, sus ojos aguandose- Déjame...


JungKook rió y lo levantó, Taehyung estaba un poco bastante confundido.

-A la camilla, tú querías la camilla...

Taehyung se quejó pero sin embargo caminó y subió hasta ella, gimió cuando
sintió el peso de Jungkook encima y pero cuando entró en su cuerpo.

Cuando las embestidas empezaron, Taehyung gimió agudo y alto, disfrutando


de la sensación de asfixia y al mismo tiempo de estar atrapado entre la camilla y
las caderas de Jungkook.

Pero ¡Joder! ¡Que bien que lo estaba gozando! Elevó un poco su trasero y,
cuando Jungkook tocó su próstata, el orgasmo los sorprendió a ambos.

Quedaron tendidos allí con la respiración acelerada, los ojos cerrados, desnudos
y sudados...

-Que bueno...- suspiró Taehyung con una sonrisa mientras sentía los labios de
JungKook arrastrarse vagamente por sus hombros.

-Solo tú me puedes hacer gozar así...- confesó Jungkook y Taehyung liberó una
risa.
-Lo sé... Si hubiera sabido esto... No pierdo el tiempo con nadie más.

-¿Qué quieres decir?

-Que me lo haces muchísimo mejor que cualquiera que busque... Y quiero


disfrutar ésto un poco más... ¿Es malo?

JungKook sonrió y negó con la cabeza.

-Para nada... También pienso lo mismo.

Y ambos supieron que irían al departamento de Jungkook a bañarse y dormir un


rato, hasta el otro día que tendrían que volver a sus trabajos.

(12)

Trước Sau

Despertar en una cama que no era la suya pero con un perfume que era
increíblemente sexy era lo que Taehyung llamaba: libro de revolcones.

Ésto si no hubiera sido la cama de JungKook, por supuesto. Se estiró y escuchó


la voz de Jungkook desde fuera de la habitación.
-JiEun, después podemos reprogramar la salida- se escuchó su risa- Lo sé, lo
sé, reina pero hoy tuve un imprevisto...

Taehyung conocía a JiEun, era ginecóloga. Cabello castaño largo, cara


angelical, dulce, divertida, bonito cuerpo, coqueta, buena... suspiró... era muy
buena mañana para arruinarla ¿No?

Pero era bonita, era paciente y pasaba más tiempo con él en el trabajo que era
casi todo el día.

Se sentó y la puerta del dormitorio se abrió, Jungkook entró con una bandeja
con el desayuno.

-Buen día, ¿Te duelen las piernas?

-Bastante- Taehyung le sonrió y se acomodó entre las almohadas- No quiero


levantarme.

-No te levantes- Jungkook se tiró a su lado de costado y comenzó a acariciarle


el brazo- No me molesta que te quedes.
-Yo creo que interrumpí algo- Taehyung comenzó a revolver la taza con
chocolate, el frío congelando todo lo que estaba fuera y empañando las
ventanas.

-No interrumpes nada, nunca lo has hecho- JungKook sonrió y le tomó una
mano para besar su dorso.

-Yo creo que si, digo... ¿JiEun?

-Ella- suspiró JungKook y se aclaró la garganta, sentándose con los tobillos


cruzados- Escucha... Necesitamos hablar.

Taehyung sonrió mientras bebió un poco del chocolate. Lo miró por debajo de
sus pestañas mientras bebía un par de sorbos.

-No me mires así- suspiró JungKook- Sabes que no resisto si me miras así.

-Ya... Habla- Taehyung mordió una tostada con jalea.

-Exclusividad o no.

Taehyung se encogió de hombros.


-No estoy muy seguro.

-¿Sobre qué?

-No quiero limitarte pero tampoco atarte a mí. Es enredado, Kook.

-¿Crees que puedas soportar verme con una mujer u hombre que no eres tú?

-Mientras que no dejes de tocarme, me siento bien.

-Sabes que lo mío no es infidelidad, Tae...- JungKook suspiró y se pasó una


mano por su cabello.

-Lo sé... Creo que estás abriendo la puerta a nada.

-Creo lo mismo pero necesitamos ponerlo sobre la mesa.

-¿Por qué?
-Porque me hiciste hacer lo que me tengo negado.

-¿Acostarte en tu zona de trabajo?

-Estar con alguien en mi zona de trabajo- corrigió- Lo tenía prohibido pero me


dijiste que querías eso y lo hice.

-No te obligué.

-No, y precisamente por eso es peligroso- JungKook le pasó una mano por
aquel cabello húmedo y revuelto- ¿Me entiendes, verdad?

Taehyung terminó su chocolate y suspiró. Se estiró en la cama, corrió la bandeja


y se quitó las sábanas y edredones de encima.

-Te digo después- suspiró y entonces fue sobre Jungkook.

No le sorprendió para nada que Kook lo tirara a la cama de espaldas con él


encima, tocando sus muslos, su cadera, mordiendo y bajando sus besos de su
boca a la piel de su cuello.

-Tae quiero una respuesta...- murmuró contra su pulso.


-Después- suspiró Taehyung, enganchando sus pies en sus caderas y
acariciando a manos abiertas su espalda- Ahora quiero amanecer bien...

-No lo haré hasta que me lo digas- respondió JungKook, apoyándose en sus


manos y separándose de su piel.

Taehyung hizo un mohín y usó el dedo índice y medio para hacerlos caminar por
aquel pecho enfundado en la camiseta del pijama.

-¿Estás seguro?

-Me has puesto más duro y lo he soportado. Pruebame si quieres.

Taehyung suspiró y dejó caer su mano sobre su pecho, rindiendose.

-Es que no lo sé, estoy confundido. Quiero seguir con ésto pero al mismo tiempo
quiero que sigas tu vida porque lo mío no es seguro.

-Entonces ayúdame a saber. Es mejor limpiar las dudas ya.


Taehyung le quitó la camiseta. Había una necesidad imponente dentro de él que
necesitaba sentir a Jungkook dentro, moviéndose, raspando, escucharlo gemir
en su oído por su culpa... Y necesitaba saciarla, en ese momento

-Está bien, probemos... Nada exclusivo. Lidiarás con tu consciencia después de


que lo hayamos hecho.

-Siempre tan posesivo- susurró JungKook, sin que Taehyung llegase a escuchar.

Media hora después, Taehyung estaba aferrándose al cabezal de la cama, sus


piernas abrazadas a aquellas caderas que se estaban moviendo una y otra y
otra vez, aquella boca marcando su piel, dejando un rastro brillante por dónde
pasaba.

-¿Eres mío?- gimió Taehyung, con sus ojos cerrados, idos por el placer, idos por
la necesidad tan dulce y pecadora como estar en el cuerpo del otro- Dime si
eres mío... Dime si eres mío... Ah... Sí...

JungKook lo embistió tan duro que Taehyung se removió en la cama y liberó un


grito. Sus nudillos de volvieron blancos cuando se aferró más fuerte al cabezal y
entonces Jungkook aprovechó a besarlo cuando abrió su boca.

Tan húmedo, ansioso, rápido...


-No lo preguntes... Por favor no lo preguntes...- murmuró contra su boca
mientras sus caderas subían y bajaban.

Taehyung se mordió el labio inferior y apretó sus párpados justo cuando tocó
aquel punto que le voló la cabeza y lo hizo ver miles de colores... Ni cuenta tenía
que Jungkook había subido sus piernas a sus hombros.

-Ah... Kook... Me encanta así...- y, a juzgar por como Jungkook apretó fuerte sus
muslos, le encantó a él también que se lo dijera.

¡Dios! Taehyung no tenía filtro cuando lo hacía, mucho menos se silenciaba, era
ruidoso, era sincero, se entregaba en todas las formas que fueran necesarias.

Y eso a Jungkook lo atrapaba, lo manejaba, lo volvía loco y explotaba... Y por


eso es que pensaba que en su amigo, que en Kim Taehyung, estaba el peligro.

(13)

Trước Sau

Dos semanas después...

Decir que Taehyung estaba saciado sexualmente, era poco. ¡Es que Jungkook
lo veía todos los días!
Mañana, tarde o noche, lo estampaba contra lo más cercano y solo... Y solo...

-Mmh...- su espalda se arqueó y sus manos se hicieron puños en las sábanas


mientras se corría- Jungkook...- suspiró al fin, sintiendo los espasmos y efectos
del orgasmo invadirlo.

Tenía el cuerpo de Jeon sobre el suyo experimentando lo mismo que él,


temblando mientras su respiración pesada chocaba contra la curva entre su
hombro y su cuello.

-No creo que alguien pueda superarte en ésto- susurró Taehyung mientras
quitaba las piernas de su cintura y acariciaba la piel que tenía rasguños.

Escuchó la risa de JungKook antes de que éste se separara.

-Ya... Solo estás delirando en voz alta- respondió antes de caminar al baño.

Taehyung separó sus labios para decir algo pero recordó por qué había ido ahí.

Hace unos días atrás, Jungkook le había dicho que saldría a una cena con
JiEun para ese mismo día. Y, últimamente, estaba juntandose de más con ella.
A Taehyung no le agradaba en lo absoluto, la idea de que lo que estaba
pasando entre Jungkook y ella fuera el proceso de conocerse antes de poder
iniciar una relación, lo molestaba.

Así que decidió, ese mismo día, a la tarde, llegar al departamento de JungKook
con la excusa de ayudarlo con la ropa de la salida. Pero, al contrario de lo que
JungKook hubiera imaginado, terminó desvistiendose antes de vestirse.

Taehyung festejó por dentro cuando el celular de JungKook sonó con el número
de esa y su amigo no la atendió porque estaba bastante ocupado con su boca
entre sus piernas.

Así que así terminó, siendo las cinco de la mañana, desnudo y enredado entre
las sábanas de JungKook con el invierno recién comenzando su etapa de
congelamiento de narices.

Escuchó la ducha por un rato antes de que su amigo apareciera en boxers y se


acostara rápido a su lado, cubriéndose con las sábanas y frazadas que volvió a
acomodar nuevamente.

Taehyung se abrazó a él y apoyó su cabeza en su pecho. Enredó sus piernas


con las de él y suspiró.

-¿Crees que no me doy cuenta, Tae?- murmuró JungKook mientras ambos


comenzaban a cerrar sus ojos.
-No sé de qué hablas, amor- susurró Taehyung, quedándose ambos dormidos.

Cuando sus ojos se abrieron, el reloj marcaba las diez de la mañana, el viento y
la lluvia azotando afuera.

JungKook no estaba en su cama pero sí podía oler algo riquísimo que venía
desde la cocina.

Salió de allí, se bañó y lavó sus dientes antes de incursionar en el Placard de


JungKook y sacarle unos pantalones de deportes y su buzo. Y ya que estaba
allí... hora de ser curioso.

Su amigo tenía gran cantidad de ropa allí, de la cual solo la mitad había visto.
Otra estaba deseando vérselas puesta.

Su estómago se hizo un nudo al imaginarlo vestido de negro, despeinado,


desesperado por arrancarle la ropa mientras no lo dejaba ir.

Sip... había algo mal con él. Algo definitivamente mal pero...

-¿Es entretenido?- la voz de JungKook se escuchó a las claras detrás de él.


Taehyung se giró y rió un poco.

-¿Qué vamos a almorzar?- preguntó, sonriéndole.

Y para JungKook, Taehyung se veía tan saciado y tan bien follado que solo
aumentaba su ego.

-Cerdo.

-Genial- Taehyung comenzó a caminar hacia la sala de estar para cuando


JungKook lo detuvo por la muñeca.

-¿Ayer?

-Nunca dijiste que no, Kook. Aparte fue extraordinario- Taehyung se devolvió en
sus pasos y; sin vergüenza alguna, le tomó el rostro y estampó su boca con la
de él, apretando su cuerpo.

-No puedo decirte que no- susurró contra su boca, mordiendo sus labios,
llevando sus manos a su trasero; apretando, juntando sus caderas- Eres
peligroso para mí, Taehyung. Voy a decírtelo siempre.
(14)

Trước Sau

Taehyung estaba sentado mientras bebía de su sorbete, estaba reclinado en su


silla con el vaso con tapa de capuchino.

Hizo una muñeca mientras veía la montaña de exámenes a corregir. Nivel


primario y secundario y juraba por Dios que estaba cansado; ¿No podía
delegarselo a alguien más?

Lo bueno es que se acercaban las vacaciones y al menos tendría un par de


semanas para descanzar y viajar y dormir y... otras cosas...

Pero no iba a engañarse, lo que lo molestaba era que justo en esos momentos,
Jungkook estaba cenando con esa doctorcita. Definitivamente la idea le
desagradaba.

No eran celos.... No, no, no, no... Solo que sabía que ella no era para él.

Pensando así, los exámenes no se iban a corregir solos... pero si querían


hacerlo, la idea estaba bastante buena.
Se levantó de la silla y caminó hasta su habitación, buscando aquel famoso
cuaderno. Lo tomó y se sentó en la cama, abriéndolo y tomando un bolígrafo
entre sus dedos.

La punta de detuvo sobre la hoja y aunque su cabeza le decía que escribiera la


fecha de sus encuentros para dejarlo sellado y finalizado, su cuerpo no
respondía.

Sinceramente no podía... ¿Por qué?

Tiró el cuaderno a la cama y cayó de espaldas al colchón. ¿Por qué estaba con
ella cuando podrían estar follando?

Y, a kilómetros de distancia, Jungkook estaba riendo mientras envolvía la pasta


entre sus palillos.

Ambos decidieron que lo mejor era no ir a algo lujoso que los obligaría a ser...
rectos. A cambio, un puesto callejero, una película, mirar escaparates les
pareció más accesible a estar sin ataduras.

-Jamás me había pasado, pero ahí estaba, con la soda saliendo por mis orificios
nasales. Tenía soda de coca saliendo de mi nariz- contó ella mientras que comía
su ramen- El hombre no me volvió a hablar más, pero basta de mí, ¿Qué hay de
ti?
JungKook miró a JiEun, estaba en el borde para mantener a Taehyung oculto
pero no tenía la necesidad.

-Tengo amigos, unos más especiales que otros, ya sabes; siempre existe uno
que es más cercano que los otros.

-Tu mejor amigo- respondió ella, comiendo los fideos del ramen.

-Sí... Somos cercanos- Jungkook apoyó una mano en la mesa y su mentón en la


palma.

No quería pensar a qué grado de cercanos eran. Jamás había estado tan
profundo con alguien.

-Pero ya sabes. Años de amistad- rió Jungkook y ella tomó su Sprite y tomó de
ella.

-Te entiendo. Mi mejor amiga está en Daegu actualmente, es periodista.

Pero te aseguro que con ella no te acuestas.


-Es horrible tener a tus seres queridos lejos- habló, cambiando de tema.

JiEun entonces enganchó la presa. Pocas horas después, cerca de las dos de la
madrugada, Jungkook la estaba dejando en casa.

-Me divertí bastante. Al fin no pospusimos nada- rió ella.

-Sabía que en algún momento iba a llegar- Jungkook le quitó el seguro a las
puertas y ella dejó la mano apoyada en la manilla de apertura- ¿Pasa algo?

-No me quiero bajar aún.

-¿Quieres vam...?- cerró los ojos cuando sintió sus labios sobre los propios, tan
suaves.

-Quiero ésto antes de bajar- susurró antes de morder suave y tímida su labio
inferior.

Y a Jungkook le resultó agradable, le resultó dulce... Pero sabía que ella no lo


hacía con aquella finalidad. ¿Por qué su cuerpo no reaccionaba?
Supuestamente ya debería al menos haber bajado a su cuello, esa noche quería
estar con ella. Quería algo suave y cariñoso, con JiEun lo conseguiría pero
entonces ¿por qué solo le respondía el beso y era todo?

No estaba tratando de llevarlo más profundo a pesar que una de aquellas


femeninas manos estaban sobre su pecho y la otra en su hombro antes de que
se separaran.

-¿Quieres pasar?- murmuró ella y Jungkook abrió sus labios, sin saber
exactamente qué decir.

Gracias a un golpe de suerte, el celular de JiEun sonó y ella miró el número


antes de suspirar.

-Es mi papá, tengo que contestar- suspiró- ¿Nos vemos después?

-Sí.

JungKook le sonrió, se despidió dándole un beso más y la vio salir... ahí iba su
oportunidad de poder estar en una cama sin las garras de la lujuria sobre él.

Porque desde que estaba con Taehyung, pensaba mientras comenzaba a


conducir otra vez, todo era rápido, duro, pasional, gemidos de lujuria... Altos,
agudos, acompañados de uñas arrastrándose por su espalda... Puro sexo.
Y Jungkook no era completamente romántico pero...

-La puta madre- gruñó y golpeó el volante cuando se dió cuenta que estaba
frente al edificio donde vivía Taehyung.

¿Es que acaso estaban en contra de que tenga un día sin que esté
involucrado...?

-Hola- respondió cuando atendió su celular que comenzaba a sonar.

-Kook, ¿Puedes venir?- la voz de Taehyung encendió la testosterona que había


en su cuerpo- Es que tengo insomnio.

-¿Cómo te ayudaría a que vaya?

-Ya sabes...

-Estoy con Eunji, Tae- mentira, era claro que lo dicho por Jungkook era mentira.

-Disculpate y ven conmigo.


-Taehyung, por favor, no...

-Sabes que quieres...

JungKook cerró sus ojos y apoyó su cabeza en el volante.

-Hoy no quiero sexo, Tae... Quiero hacer el amor, quiero algo dulce.

-Y me parece perfecto, si eso quieres, eso conseguirás.

(15)

Trước Sau

Bastaba mirar el techo de la habitación para saber que las cosas se estaban
saliendo un poco de su control.

¿Solo un poco? Le tiraba su cabeza cada cinco segundos.

Tenía a Taehyung moviendo sus caderas sobre él, con los ojos cerrados y sus
manos en su pecho. Las sensaciones siempre fueron a tocar el cielo cada que
estaban juntos pero esta vez... Esta vez para Jungkook no era así.
Apretó sus dientes y gimió bajo cuando de liberó al tiempo en que Taehyung
cayó sobre él. Estaba respirando agitado, los espasmos estaban causando que
su cuerpo tiemble.

Taehyung sonrió y besó el cuello propio, Jungkook se aclaró la garganta y giró


para que ambos quedaran de costado.

-¿Sabes que simplemente no puedes hacer ésto, no?

-JungKook...

-No, no comiences con Jungkook... Sabes que no puedes hacer ésto.

-Pero tú vas a estar para mí...- Taehyung frunció su ceño.

-Siempre que me necesites pero simplemente no puedes pedir que cada vez
que esté con JiEun, vaya contigo. O venga, en todos los casos.

-¿Entonces yo tengo la culpa?

-Taehyung- Jungkook suspiró y se pasó las manos por su rostro.


-¿Qué?

-Te ofrecí exclusividad, cariño. No la elegiste, dijiste que querías libertad para mí
y para tí. Acepto que en algún momento querrás estar con otras personas, por lo
mismo, espero que tú lo hagas también. Acepta que necesito tener otro tipo de
relaciones. No escogiste exclusividad... Ésto es lo que pasa.

Taehyung frunció el ceño y se sentó en la cama, suspirando.

-¿O sea que quieres cortar?

-Quiero que te decidas sobre qué tipo de relación quieras tener y aceptar las
consecuencias.

JungKook se sentó a su lado y le giró el rostro para juntar sus labios. Taehyung
suspiró y acarició su mandíbula para llevarlo sobre él.

-Duerme conmigo, mañana hablaremos de ésto.

-Tae...
-Vamos corazón, sabes que quieres dormir.

Y la cabeza de JungKook dió tantas vueltas esa noche... No pudo dormir bien,
las dudas lo atacaban sin cesar y quería respuestas.

Si Taehyung seguía igual, entonces aquello dejaría de ser sano a pesar de que
era solo una relación de sexo-amigos.

Cuando despertó, estaba solo, se escuchaba a Mozart bajito desde la sala de


estar pequeña de Taehyung.

Se levantó, duchó, encontró ropa suya entre la de Taehyung y caminó a la sala.


Taehyung estaba despeinado, con sus lentes que muy rara vez usaba, dos tazas
de café sobre la mesa ratona y montaña de exámenes.

-Buen día- saludó y Taehyung alejó el bolígrafo de sus dientes.

-Buen día dormilón, preparé café. Puedes desayunar.

JungKook se sentó a su lado después de que Taehyung le hiciera un lugar.


-¿Todo está bien?- preguntó Taehyung- Anoche creo que estabas algo ebrio
porque...

-Lo decía de verdad. Necesito que me des una respuesta, Tae.

Taehyung dejó los papeles y lo miró desde detrás de los cristales de sus lentes.
Se veía tan sexy así... despeinado, con lentes, serio...

-Por Dios, Jungkook ¿Por qué insistes?

-Porque así como estamos no me dejarás hacer mi vida, y lo sabes.

Vio a Taehyung abrir y cerrar su boca, pestañeando seguido, incrédulo.

-¿Estás jodiendo, verdad? Te dejo hacer tu vida.

-Tae, no me dejas estar con JiEun.

-Es que yo llegué primero.


-Pero solo somos amigos, Taehyung. No puedes imponer que yo no pueda
hacer mi vida mientras tú tienes todo el derecho, no me parece justo ni para mí
ni para JiEun.

-¿Desde cuándo está ella en nuestras platicas?

-Desde que también está afectada por ésto.

-¿Por qué ella?

-No he podido darle lo que quería anoche.

-¿Y cuál es el maldito problema?- Taehyung se levantó del sofá.

-Que yo también quería darle lo que quería y no pude.

-¿Y yo tengo la culpa?

-Ambos la tenemos, Taehyung. Ordenemos esto ya antes de que sea peor. Por
eso necesito que me aclares todo lo que va a pasar.
Taehyung se detuvo a pensar un momento. JungKook tenía razón, la tenía, no
era ciego para no verlo pero no sabía si quería tener una relación seria. No
sabía si estaba listo.

¿Por qué se preocupaba cuando lo único que Jungkook le pedía era


exclusividad?

Lo miró a los ojos y suspiró, Jungkook estaba en lo cierto.

-¿Si escojo exclusividad la dejaras de ver?

-Sí.

-Entonces sí, seamos exclusivos pero sin etiquetas.

(16)

Trước Sau

Para esa mañana, JungKook estaba saliendo de una cirugía. Sus ayudantes le
ayudaron a sacar la ropa descartable mientras que al paciente se lo llevaron a la
sala.

No había nada más bonito, para JungKook, que salir fuera de la sala de
operaciones y darles las buenas noticias al familiar.
Todo estaba bien, salió todo bien.

Al medio día, JungKook recibió un mensaje de Taehyung.

¿Cómo estás, bebé?

JungKook suspiró y dejó el celular sobre su escritorio. Estaba cansado, hacían


más de doce horas que estaba en operación.

Su cuerpo estaba tan agotado que estaba a punto de dormirse en ese momento.

¿Estás ocupado?

11:30

Tae:

En 10 salgo, ¿Xq?

11:31

Estoy cansado, necesito un aventón.


11:34

Tae:

Espérame y salgo.

Y allí sabía que Taehyung era muy buen amigo.

Tal vez se quedó dormido más de la cuenta porque cuando abrió sus ojos, vio a
Tae con sus manos en sus hombros.

-Despierta, vamos.

JungKook se reacomodó, ya que tenía los pies sobre su escritorio. Se levantó y


tomó sus cosas.

-Perdón, vamos- tomó una honda respiración, se levantó y caminó al lado de él,
algunas luces apagadas- Lo siento por hacerte perder el tiempo.

-No es perder el tiempo, lo sabes. Somos amigos.


JungKook sonrió y negó con la cabeza, esperó a llegar al estacionamiento y
abrió la puerta. Lo primero que hizo fue tirarse al asiento y acomodarse para
dormir.

-Estás muy cansado- murmuró Tae y suspiró, todavía tenía el guardapolvo de la


escuela primaria.

-Un... Poco... Sí...

A Taehyung le pareció tierno ver a su amigo dormir. Era tan... Tan... rió bajo
mientras que negaba con la cabeza, ¿se estaba poniendo coladito?

No importaba... metió tercera...

Casi dos horas después, JungKook despertó en su cama; con otra ropa, tapado.
Escuchaba el ruido de la televisión a nivel bajo antes de levantarse.

-¿Me has traído hasta aquí?

-Si- aceptó Taehyung mientras estaba controlando un par de cuadernos,


corrigiendo las tareas de la primaria- No quería despertarte.
-No quería causarte inconvenientes.

-No es así- Taehyung dejó los cuadernos para verlo y sonreírle- Te traje en el
auto, ahí tengo todo.

JungKook asintió y fue a tirarse a su sofá.

-Sigo cansado.

-Es que no es fácil pasar tantas horas en una operación.

-Cielo, es la más corta que he tenido. ¿Recuerdas cuando viajé a Estados


Unidos? ¿Cuántas horas fueron?

-Cuarenta y ocho horas- Tae dejó todo y caminó hasta estar a su lado,
masajeando uno de sus hombros- Deberías pensarlo mejor, la próxima vez que
quieras especializarte en algo.

JungKook rió y negó con la cabeza, pasando un brazo por encima de sus
hombros.

-¿Cómo fue tu día?


-Hoy los niños estuvieron terribles- suspiró Taehyung, haciendo una mueca- Y ni
hablar de los adolescentes. MinA engañó a HyungJi con MinHo y todos estaban
tomando bandos incluso en clase.

-Debió ser catastrófico- rió JungKook y se ganó un golpe leve en su abdomen.

-No te burles. Así como lo tuyo es horrible, lo mío también.

-Todo trabajo que involucra trato con personas es complicado, Tae. Recuérdalo.

Taehyung hizo una muñeca y entonces le desvió la cara para besarlo. JungKook
le colocó una mano en la mejilla y profundizó el beso.

Sonrieron un poco cuando JungKook le mordió el labio y lo estiró apenas un


poco.

-Hola bebé- murmuró Jungkook contra tus labios.

-Hola bebé- respondió Taehyung, sintiendo una mano del contrario acariciando
su muslo- ¿No que estabas cansado?
-Lo estoy.

-¿Entonces?

-No me impide besarte- murmuró bajando sus labios a su cuello y comenzar a


besar allí.

JungKook sintió la respiración de Taehyung pesada mientras sonreía y se le


escapaban un par de risillas nerviosas.

-Ya... Estás cansado, Kook- ríe Tae y liberó un jadeo súper bajo cuando sintió
los dedos de JungKook masajear el interior de sus muñecas- Kook...

JungKook rió, alejándose apenas un centímetro de su piel.

-¿No me digas que ya estás caliente?

-JungKook, es una pregunta tonta- Taehyung se mordió los labios antes de


desviar su rostro y volver a besarlo.
Terminaron tirados en el sillón, Taehyung arriba mientras reían y las manos
recorrían de arriba a abajo el cuerpo contrario antes de que el timbre sonará dos
veces, un papel se extiende por debajo de la puerta siendo ignorado.

Era cómico... ninguno se estaba percatado que poco a poco su mundo estaba
volviéndose una burbuja cada que estaban juntos, sin importar su estado de
ánimo, su lugar... Solo importaba que estuvieran juntos y el mundo se podía ir a
la mierda.

(17)

Trước Sau

-¿JungKook?

-¿Mmh?

Taehyung caminó hasta el baño donde JungKook estaba lavandose los dientes
después de haberle hecho un oral... JungKook tenía una boca privilegiada.

Subiendo y bajando por su pene, chupando la punta, lamiendo desde arriba


hasta abajo hasta que solo quedaba escuchando los gemidos de decir si y más.

-Viene tu mamá- habló Taehyung, viendo el papel otra vez.


JungKook se ahogó con el agua y la pasta de dientes, Taehyung tuvo que ir a
ayudarlo y; cuando todo pasó; ambos se miraron.

-¿Cómo que mi mamá viene?

-Viene tu mamá, aquí lo dice.

-Oh... mierda...- suspiró y se aclaró la garganta.

-¿Cuál es el problema?

-¿Cómo le digo a mi mamá que la chica que le conté con quién estaba saliendo
la dejé porque te estoy follando?

Taehyung medio frunció el ceño y miró hacia un costado.

-Dile que no funcionó.

-Tae... Conoces a mi madre, ella es muy inteligente.

-Y es por eso que lo entenderá todo.


-Ella quiere nietos, Taehyung.

-¿Y eso en qué influye?- Taehyung rió y salió del baño.

JungKook chasqueó su lengua y suspiró. ¿Qué carajos pasó?

Caminó hasta allí, dónde Taehyung estaba en la cocina, abrazándolo por atrás.

-¿Estás enfadado?- murmuró, apoyando su mentón en aquel hombro.

-Es que lo complicas todo- Taehyung apoyó sus manos en la mesada- ¿Qué es
difícil de explicar? Somos grandes, sabemos lo que hacemos.

-¿Cómo se lo explicarás a una mujer de cincuenta y cuatro años que toda su


vida soñó con estar hasta para la prueba del vestido de su nuera aún cuando
tenía tres años?

Taehyung se giró y lo miró. Por Dios... es la señora Jeon era una mujer especial.

-Amor...- murmuró JungKook- Solo quiero que me entiendas.


-Te entiendo pero... es complicado.

Taehyung estaba acostumbrado a lo simple, directo y crudo. JungKook, al


contrario, siempre el tipo de hombre que le gustaba marcar todo como Plan A,
Plan B, Plan C, etc.

-Pensaremos en algo, lo prometo- JungKook acarició sus brazos y Taehyung se


inquietó un poco... ¿por qué se sentía tan bien?

-¿Cuándo dice que llega?

-Mañana, a las diez. Hay que recogerla- Taehyung miró la hora y suspiró- Es
mejor que me vaya, ya es tarde y debes descansar.

-Tú te quedas, te presto un pijama. Vamos a dormir- JungKook le tomó la mano


y lo guió hacia el dormitorio.

Y, minutos después; mientras se acurrucaban bajo las frazadas, Taehyung


sonrió al sentir como JungKook lo abrazaba por la cintura y lo pegaba a él.

-¿Cómodo?- murmuró JungKook y entonces Taehyung rió bajo.


-Mucho- susurró, apretándose a su cuerpo- Me gusta así.

-Es que eres como un maldito misterio.

Taehyung elevó la cabeza y sus miradas se encontraron.

-¿Cómo está eso?- Taehyung medio frunció su ceño.

-Es que eres una mezcla que cualquiera mataría por tener. Eres tierno, dulce,
mimado, aniñado algunas veces y ni siquiera te dan ganas de regalarte pero
cuando estamos solos... entonces aparece esa persona malvada, sexy y egoísta
que me hace arañar el cielo y que juega con mi mente... ¿ahora entiendes?

Taehyung sonrió y entonces lo acercó para besarlo profundo. Sus lenguas


jugando lento entre sus bocas.

-Mañana te despertaré de una manera especial- susurró Taehyung contra su


boca y JungKook sonrió, rozando la punta de sus narices.

-Confío en que lo harás.


Y, cuando la noche pasó, las horas avanzaron y entonces el reloj marcó las
ocho; solo que el sonido no lo despertó sino que fue la boca de Taehyung.

JungKook tomó una honda respiración cuando sintió la boca de Taehyung desde
su cuello y más abajo... Más abajo...

-Tae...- murmuró con la voz ronca, intentando encontrar donde estuviera en su


cabeza.

-Shh... Vas a levantarte de esta cama súper feliz- susurró, acercándose y


comenzando a bajar el pantalón del pijama plateado que el médico llevaba.

-Mmh...- jadeó cuando sintió la lengua subir y bajar por su miembro- Taehyung...

Aquella lengua siguió una vena que estaba marcada antes de lamer la cabeza y
que JungKook liberará un gemido largo y ronco.

Taehyung rió y se lo llevó a la boca. Un par de minutos después, tenía la mano


de JungKook en su cabello y su cabeza subiendo y bajando al ritmo que
aquellas caderas subían y bajaban.

Los gemidos de JungKook llenaban la habitación de "Sí que sabes...", "Me


gusta... Me gusta así" y del "Ah, mi amor..." Sí... A Taehyung le encantaba recibir
cumplidos de ese tipo.
Así que, cuando llegó al orgasmo, Taehyung bebió todo lo que le daba. Lamió
para quitar algo de semen que quedó en la punta y gateó hasta estar cara a
cara.

-Buen día- susurró, sonriendo antes de lamerse los labios.

-Buen... Día...- JungKook estaba agitado y sonriente- Excelente buen... día...

Taehyung rió y lo besó.

-¿Cómo haces para saber tan bien?- preguntó antes de morderle su labio
inferior y jalarlo solo un poco.

-La comida... Lo que comes ayuda...

-Entonces debo saber riquísimo si te como a tí- bromeó el maestro y ambos


rieron, JungKook se giró en la cama, llevando a Taehyung debajo.

Kim enganchó una pierna en aquella cadera y entonces se besaron profundo y


lento mientras sentía la mano abierta de JungKook sobre su muslo.
(18)

Trước Sau

-¡JungKook!

El grito de una voz femenina hizo al doctor subirse los lentes de sol y abrir sus
brazos para recibir a su madre entre ellos.

Taehyung volvía de comprar Coca Cola cuando vio aquello y sonrió suave...
Aunque odiaba a aquella mujer que se interponía entre él y su fabuloso hijo que
daba noches duras.

-Hola señora Jeon- sonrió Taehyung y la mujer lo abrazó.

-Hola Tae, tanto tiempo, dulzura.

Taehyung le sonrió suave antes lamerse los labios. Miró a JungKook, Jeon se
estaba poniendo los lentes en la cabeza y lo miraba, rogando que no dijera
nada.

-Estabamos ansiosos por verla- habló mientras que blanqueaba sus ojos ante
JungKook- ¿Vamos a comer juntos?
-¡Si!- rió la mujer y JungKook pasó un brazo por los hombros de su madre-
Comeremos juntos.

Taehyung festejó con un "Sí" algo imposible y suspiró.

Poco tiempo después, alrededor de una hora, Taehyung y JungKook estaban


esperando que la mujer saliera del baño.

-Tienes que decirle- susurró Taehyung.

-Voy a pensarlo, de verdad.

-JungKook, es mejor decirle la verdad, te lo juro.

-Todavía no.

-¡JungKook!- gruñó Taehyung entre dientes.

Poco tiempo después, mientras terminaban el almuerzo, Taehyung miró su


celular antes de suspirar.
-Tengo que irme, me llamaron del colegio. Es obligatorio- Taehyung sonrió y
suspiró- Nos vemos después.

-¿Tae?- preguntó JungKook y el nombrado se despidió de los dos antes de salir


y tomarse un taxi ya que habían ido en el auto de JungKook.

Taehyung guardó su celular y suspiró, quedando sobre el asiento derrotado.


Estaba cansado mentalmente mientras que JungKook no estaba reconociendo
que estaban cojiendo.

No pedía que se lo dijera explicitamente, solo que había terminado con esa
doctora y que estaba buscando otros rumbos.

Y no lo hizo... Ahora bien... ¿Por qué se preocupaba por ello?

Es decir, no hay mucho problema si fuera otro, ¿Por qué era tan importante
ahora que lo aclarara?

Miró por la ventanilla e hizo una mueca con la boca. Tal vez debería anotar el
nombre y ya. Dejarlo pasar, ya se divirtió lo suficiente y ahora estaba afectando
su amistad.

Tragó saliva y suspiró.


Esa noche, mientras se tiraba en la cama después de bañarse, tenía en sus
manos su cuaderno y un bolígrafo.

Para su cabeza, tenía que hacerlo. Tenía que escribir ese nombre en esa hoja,
con fecha y ya... Y terminaba todo.

Si JungKook no podía decirlo, entonces lo iba a dejar en aquella hoja.

Tomó una respiración, la retuvo en sus pulmones y entonces escribió el nombre


con la fecha, soltó el aire y guardó el cuaderno.

Para él, todo había terminado. Se acabó en el momento en que escribió la J en


aquella hoja.

Tragó un nudo en su garganta y solo guardó todo para acostarse. Estaba


cansado y se sentía raro.

Al inicio del día siguiente, Taehyung no se sentía con tantas ganas de hacer
cosas. Así que solamente se dedicó a escribir en la pizarra, explicar los temas
de la manera más divertida y ya.
Recibió un par de llamadas de JungKook que no respondió y solo dejó que
sonara.

Cuando le tocó ir a la escuela de música solo quería volver a su cama. Así que
esperó unas dos horas y como era el director; solo salió sin dar muchas
explicaciones.

No sabía cómo era que le había afectado. ¿Había entregado algo más que solo
su cuerpo con él? ¡Nah! O eso esperaba...

Eran las cinco de la tarde y Taehyung estaba tirado en su cama, con una barra
de chocolate en la mano mientras veía una película que logró mejorarle el
ánimo... solo hasta que JungKook le mandó un mensaje por KaoKao.

Te llamé en la mañana, no me contestaste. Quieres ir a cenar y beber algo???

17:10

No me siento muy bien, lo siento. Hoy no puedo.

17:12

Estás bien??? Quieres que te cuide???

17:13
No, no. Con que haga reposo se va a pasar.

17:15

Que está pasando???

17:16

Taehyung simplemente no le contestó. Lo dejó en visto y lanzó el celular por


algún lado.

Suspiró y se lamió los labios, tenía que terminar de ver la película y luego
corregir las carpetas de sus alumnos de primaria.

Tal vez así terminaría de mejorar su humor.

(19)

Trước Sau

Habían pasado varios días ya desde que Taehyung había anotado el nombre de
JungKook en el cuaderno y parecía una mala versión de Death Note.

Lo había estado evitando tantas veces que, después de una semana y media, le
pareció que estaba más que bien el no verlo.
Pero, mientras que salía de la escuela de música, lo vio parado frente a la salida
y quiso retroceder; esconderse por algún lado de la escuela. Cuando dió unos
pasos hacia atrás, fue cuando JungKook lo vio.

Por un segundo se sintió como un cordero arrepentido.

-Tae- habló alto y el nombrado solo suspiró.

-¡Kook!- respondió con una sonrisa súper practicada mientras el contrario se


acercaba hasta donde estaba.

-¿Qué pasó?- Jeon frunció el ceño mientras lo veía con curiosidad.

Taehyung se sentía raro por dentro.

-Nada, ¿Por qué la pregunta?

-Porque, por lo general, ya estaríamos atrapados en el auto y yo tratando de


decirte buenos días.
-Me haces quedar como un Sátiro- Taehyung blanqueó los ojos antes de negar
con la cabeza- Pero no, no pasa nada.

-¿No? ¿Estás seguro de eso?

-¿Estás intentando hacerme dudar?

-No pero...-JungKook abrió y cerró sus labios- Besame.

Taehyung besó su mejilla.

-Eso no, tú sabes a lo que me refiero- JungKook frunció su ceño y vio como
Taehyung solo miró hacia otro lado.

-Después.

Y, apenas si Taehyung terminaba esas palabras, JungKook ya lo había tomado


de la muñeca y arrastrado hacia su coche.

-JungKook, mi auto- se quejó Kim.


-Le pediré a un amigo que te lo lleve.

-¿A dónde vamos?

-A tu casa.

Taehyung no retuvo toda la letanía de palabras que vino después de aquella


oración. No se silenció en todo el maldito viaje y cuando llegaron, se cruzó de
brazos.

-No pienso bajarme.

-¿No?

JungKook lo miró con el ceño fruncido y golpeó el interior de su mejilla con su


lengua antes de bajarse, caminar hasta la puerta del acompañante y abrirla.

Cargó a Taehyung como saco de patatas mientras llegaban al departamento y


este último odió que JungKook tuviera un excelente estado físico.

¿Cuántas veces le habría arañado aquella espalda mientras lo sentía tan


profundo al tiempo que lo hacía sentir en el mayor éxtasis de su vida?
Cuando lo bajó, Taehyung recién pudo captar que Kook estaba de jeans y un
sweater ancho... Con nada debajo del mismo.

Su cabello algo largo estaba medio despeinado.

-Necesito que me expliques qué te pasa.

-No me pasa nada, estás metiendo ideas en tu cabeza, JungKook.

Y entonces, cuando su amigo avanzó a besarlo, Taehyung desvió su cabeza.


JungKook buscó su boca; haciendo evidente la contraria del maestro.

-¿Ves que sí sucede algo que no me dices?- murmuró JungKook, sus labios
pegados a su mejilla. Los mismos que se deslizaron delicadamente hasta su
oído- No es justo para mí, Tae. Dime qué es, cariño.

Taehyung se intentó remover pero JungKook lo tomó de la cintura y lo pegó a su


cuerpo.

-Vamos, dulce...- susurró Kook, su voz tornándose grave y ronca- O sigue


ignorandome...- una risa que escaló hasta los huesos de JungKook- Dame
motivos para desnudarte y hacerte el amor como te gusta...
Y, viendo cómo su cuerpo comenzó a reaccionar, Taehyung lo empujó y tomó
una honda respiración.

-Somos amigos... Se acabó, JungKook...

-¿Cómo que se acabó?- Jeon sonrió ladino, confundido.

-Anote tu nombre en mi cuaderno- Taehyung soltó el aire que no sabía que


retenía en sus pulmones- Yo... Ya no quiero tener sexo contigo.

Y entonces vio como el rostro de JungKook se transformó a uno de ira.

-¿Ya no quieres? ¿Se acabó?

-Sí- Taehyung se cruzó de brazos- No quiero más nada.

-Taehyung... Hiciste que rompiera mi futura relación estable, me pediste


exclusividad, te dí cada puto minuto de mi tiempo, arriesgué nuestra amistad,
estuve pendiente a tí y ahora, justo ahora, cuando yo necesito que me
entiendas, ¿no quieres más? ¡No es justo!- JungKook gruñó las últimas
palabras.
Taehyung tragó saliva y se puso firme en su postura.

-Y no me vengas a decir que no me lo pediste, porque lo hiciste- respondió


Jungkook.

-Te lo pedí, no te obligué- Kim casi se abraza a sí mismo- Tú lo hiciste.

-O te ibas a alejar de mí.

-Pero lo hiciste por tu libre albedrío- Taehyung comenzó a caminar hacia su


habitación para cambiarse- ¡Ya está, supéralo!- habló desde más adentro de la
casa.

Cuando se giró, JungKook estaba detrás suyo.

-No voy a poder encontrar a nadie como tú, no me hagas ésto.

Taehyung miró sus ojos y su boca, ya... sabía que era el mejor resultado...
(20)

Trước Sau

Un mes después...

Después de aquella discusión, toda su relación se limitó a lo que fue antes de la


llamada. Solo que se sentía tan forzado que Taehyung quería arrancarle la
garganta.

Pero, lo que era una tortura para sí, era ver a JungKook volver a retomar un
intento con EunJi. Y... ¡Agh! Los celos se lo comía.

Estaba... estaba...

Esa era cerca de la quinta copa de vino rosa que se estaba tomando mientras
veía como JungKook se susurraba cosas con ella.

NamJoon hizo otra reunión de cena y cine, a la misma en la que JungKook llegó
acompañado y Taehyung solo.
Se mordía por dentro mientras que pensaba que eso se lo buscó él solo, no
había otra manera de decirlo. Él terminó todo, él rechazó todo y... ¡La odiaba!
¡La odiaba!

Si tan solo JungKook le diera una pista que todavía lo siguiera deseando,
entonces todo cambiaría y se iba a sentir mejor... pero JungKook solo lo miraba
como amigo, ni siquiera se le escapaba un "cariño" y sus días se volvían
tediosos.

Estaban en las vacaciones de fin de año y sus días se limitaban solo a sus
juguetes y a salir como amigos.

Se lamió los labios cuando escuchó a EunJi reír. ¡Quería arrancarle esos
cabellos! Le estaba tirando la culpa al alcohol.

-¡Ooohhhh! ¡Pensé que era el único borracho en el grupo!- gritó Jimin mientras
que reían y rellenaban las copas.

-No lo embriagues, yo tengo que llevarlo a casa después- habló JungKook


mientras tenía la punta de su nariz ocupada en acariciar la piel de aquel rostro
femenino.

¿Era tan malo desear sentir otra vez sus manos? Nunca lamió su tatuaje que
tenía en la espalda y pensarlo, hizo que hiciera un mohín.
-Ow... ¿Recordaste algo malo?- habló Hoseok y Taehyung lo miró antes de
reírse.

-Pésimo, pero ya encontraré a alguien que me ayude- respondió, ilusionandose


con que JungKook haría algo o hiciera algún gesto de celos, sin éxito.

Ok... ¿De verdad lo había perdido?

Tal vez si, tal vez no... Se sentía pésimo con algunas copas de más.

Al final de la noche, después de las horas de cine y un par de tragos


post-pelicula, JungKook se había ofrecido a llevarse a Taehyung a su casa...
para desgracia del último, también estaba llevando a EunJi.

Las náuseas estaban superandolo cuando vio que JungKook la besó... a ella,
frente a él, besándola profundo...

Desvió su rostro y miró por la ventanilla... ¿cuántos años le darían de pena si


quemaba la casa de la doctorcita esa?

-Ya... Vamos a incomodar a tu amigo- habló ella y juntó sus labios una última
vez- Buenas noches, y que comiences bien tus vacaciones
-Gracias, Eun. Espero que mañana te sea leve.

Ella se bajó del coche y Taehyung pasó adelante después de despedirla. Se


acomodó en el asiento y vio como el coche arrancó.

-No sabía que tenías buen aguante- le comentó JungKook, riendo- Casi dos
botellas han sido tuyas.

-El rosa es delicioso, no me culpes- rió Taehyung.

-SeokJin va a odiarte- respondió JungKook, riéndose con él- Es su vino favorito.

-Favorito mi culo, a él le gusta el color solamente...- aprovechó a bailar el tema


pegadizo que pasaban por la radio- No sabía que mañana empezabas tus
vacaciones.

-Bueno... Mamá se fue hace dos semanas y prefiero relajarme en las fiestas.
¿Tú? ¿Qué has planeado?

-Aún no lo sé- Taehyung sonrió y se lamió los labios- Tal vez viaje a Daegu.
-¿Vas a romper corazones en satoori?- bromeó JungKook y, antes de lo
esperado, estaba estacionando el coche.

-¿JungKook?

-¿Sí?

-Estoy ebrio.

-Lo sé.

-¿JungKook?

-¿Mmh?

-Mirame quiero decirte algo.

JungKook giró su rostro y entonces Taehyung se lanzó hacia él. Lo besó


profundo, separando los labios ingresando su lengua y una mano de él apoyada
en una de sus mejillas.
Un montón de placeres dormidos despertaron en ese instante cuando JungKook
le respondió el beso con la misma intensidad. Devorándose a cada segundo que
pasaba.

Había pasado solo un mes y se sentían como años. ¡Por favor! Taehyung se
movió en el coche y se subió encima, mordisqueando sus labios, pasando sus
brazos por sus hombros.

-Vamos arriba- jadeó Taehyung, comenzando a mover sus caderas suavemente-


Prometo dejarte muy bien saciado, papi...- rió bajo, lamiéndose sus propios
labios.

Y la respuesta que le dió Jungkook, a pesar de que el placer en su mirada era


real, mató las esperanzas que Kim tenía para esa noche.

Le acarició la cintura cuando aquellas palabras se escaparon de su boca.

-¿Recuerdas que fuiste tú el que dijiste que ya no querías acostarte conmigo?


Respeto tu desición, ahora ve y usa uno de tus consoladores para ver si te hace
sentir lo que este estúpido logro en su tiempo.
1.

(21)

Trước Sau

-¿Recuerdas que fuiste tú el que dijiste que ya no querías acostarte conmigo?


Respeto tu desición, ahora ve y usa uno de tus consoladores para ver si te hace
sentir lo que este estúpido logro en su tiempo.

Y Taehyung se terminó de quebrar.

JungKook cerró sus ojos fuertemente para no ver lo que estaba escuchando: a
Taehyung apoyando su frente en el hombro de Jeon mientras lloraba.

Pero es que Taehyung no podía hacer lo que quería cuando quería sin tener en
cuenta a los demás... Eso tenía que cambiar, él tenía que darse cuenta de lo
que sentía.

¡Lo estaba volviendo loco! Es que ya nada llenaba a JungKook, ni su novia, ni


sus noches de sexo, ni risas... Tenía que fingir estar bien pero es que Taehyung
le había dicho que ya lo había anotado en su cuaderno, clara señal que todo
había acabado.

-Taehyung me estás matando, no llores- sus manos temblaron poco a poco


antes de abrazarlo.
-Tú me estás matando... Con ella...- sollozó Taehyung como un niño de cinco
años y JungKook sintió sus ojos pinchar.

Quería llorar con él.

-Taehyung, tú me anotaste en aquel libro; me dijiste que querias que fueramos


solo amigos.

-¿Por qué no... no... no le dijiste a tu mamá?

-¿Te enojaste por eso?

-¡Es importante para mí!- el hombro de Taehyung fue golpeado- Pero tu mamá
es más importante que yo.

-Es mi madre, Taehyung...

-Pero soy tu mejor amigo.

-¿Mejor amigo? Después de todo lo que te hice, no somos amigos, Taehyung.


-¿Qué quieres decir?

-Que tienes que poner en orden lo que sientes.

-Besame, JungKook, te necesito dentro mío...

-Te dije que la infidelidad no es lo mío, Taehyung... Incluso si eres tú- susurró
JungKook y vio como un par de lágrimas cayeron por sus mejillas- Taehyung no
llores, no es fácil para mí, no como lo ves.

-¿No? ¡¿No?! ¡Te estabas besando con ella y seguramente ya cogieron y


borraste mis manos de tu piel y mis labios de tu boca y todo lo mío de tí!- lloraba
Taehyung, el alcohol estaba haciendo que soltara la lengua muy rápido.

-¡¿Qué quieres que haga?! ¡¿Que te ruegue, que llore, que me arrastre hasta
que tú decidas?!- JungKook se apoyó en el respaldo del asiento mientras
Taehyung lloraba en su pecho.

-No me borres... Por favor... Ámame... JungKook no quiero ésto, me cuesta estar
sin tí...
-¿Y después me dirás que no quieres atarte? Ya jugamos este juego una vez,
Taehyung y así nos dejó.

-Volvamos el tiempo atrás.

-No se puede.

Taehyung elevó la cabeza y miró a JungKook, el mismo que tenía sus ojos
aguados.

Era irónico porque JungKook, en ese momento, estaba pensando que todos
esos años que evitó que Taehyung llorara fue para la basura porque se estaban
lastimando.

-¿Qué mierda quieres?- jadeó JungKook cuando su voz salió quebrada y sus
ojos dejaron caer un par de lágrimas.

¿Estaba llorando? ¿De verdad?

-Te quiero a tí, solo a tí y que tú estés conmigo- murmuró Taehyung bajo,
secando sus lágrimas- Odio verte con alguien.
Y entonces JungKook lo empujó hacia su boca y lo besó profundo. Sintió el
jadeo de Taehyung y como lo abrazó por sus hombros.

JungKook necesitaba ese sabor de aquellos labios, necesitaba tener a


Taehyung acariciando su cuerpo, sentirse siendo apretado por Taehyung,
escucharlo volverse loco por placer.

-Mmh...- jadeó Taehyung y comenzó a girar sus caderas- Por favor... Necesito
verte...

-Me estás viendo...

-Sin ropa y encima mío... ¿Lo quieres? Si me dices que no, vas a matarme.

JungKook abrió la puerta del coche y lo bajó antes de bajarse él, cerrando la
puerta y tomándolo de la mano. Lo llevó hacia su departamento mientras lo
sentía abrazarlo por detrás, besando su espalda.

-¿Vas a ser infiel esta noche?- susurró Taehyung desde atrás.

JungKook no se sentía mal, no se sentía equivocado y mientras más se


acercaban al dormitorio, más emocionado estaba... parecía que no había hecho
el amor en años...
Apenas entraron a la habitación, Taehyung lo giró y dió un salto para terminar en
sus brazos.

Se quitó su camiseta y suspiró al sentir como JungKook se dedicó a lamer su


pecho lentamente.

Lo llevó a la cama y lo giró boca abajo, viendo aquella Torre Eiffel tatuada. Esos
tatuajes...

JungKook agachó su cabeza y comenzó a lamer aquel tatuaje, viendo como


Taehyung se removía y respiraba pesado.

Subió su boca por su columna y terminó sobre Taehyung, besando su nuca y su


cuello, sintiendo como Kim pegaba su trasero en su dura polla.

-Por favor... Transformame en tu excepción, JungKook... Me muero por serlo...


Me muero por quebrarte...

Y cada palabra que Taehyung decía, JungKook sentía que su cabeza volaba.

-Serás la excepción, Taehyung...- susurró, su voz salió ronca- Hoy seré infiel por
tí... Por todo lo que me imagino contigo..
(22)

Trước Sau

JungKook sintió el peso de Taehyung sobre su cuerpo cuando cayó sobre él


exhausto. Respiraciones agitadas, cuerpos sudorosos, despeinados.

Las sábanas estaban mitad sobre la cama y la otra mitad sobre el piso,
envueltas con la ropa de cada uno.

Taehyung sonrió cuando sintió el abrazo de JungKook contra sí.

-Ya... Estoy listo...- habló, controlando la respiración.

-¿Estás seguro, Tae?

-Sí, lo estoy. Es ahora.

JungKook se giró en la cama y quedaron de costado, viéndose las caras.

-Dime que quieres- susurró JungKook, acariciando su mejilla tan dulce que a
Taehyung solo le nació sonreír suave.
-A tí... Este mes ha sido un desastre sin tí. Te quiero a tí.

-¿Solo por momentos?

-No... Te quiero para siempre.

Vio a JungKook tomar una honda respiración y sonreírle. Se acercó y besó sus
labios, apenas rozandolos.

-¿Y qué sucede con lo otro?

-¿Con qué, Kook?

-Con la exclusividad.

-Solo mío y solo tuyo.

Taehyung se sentó en la cama, las sábanas cubriendo parte de su cuerpo,


JungKook disfrutando de la vista increíble que tenía.
-Fue horrible lo que causé- Taehyung hizo una mueca- Y además, ¿Por qué no
le dijiste a tu mamá que estábamos juntos?

-¿Estábamos juntos?- JungKook elevó una ceja- Cielo, en ese momento ni


siquiera sabía si hacíamos el amor o simplemente teníamos sexo. No estaba
seguro de nada... Todo lo que le pude decir es que me dí cuenta que me
gustaban los hombres también, fue demasiado para asumir rápido y mamá se
fue.

-¿O sea que sí le dijiste?

-Solo le dije que era bisexual, es todo.

-¡Pero es un comienzo igual!- rió Taehyung y lo abrazó, JungKook sonrió y besó


su cabeza.

-Dime que no rompí mis reglas por nada.

-No lo hiciste, de verdad quiero estar contigo. Me sentí demasiado mal al verte.

-Al verme...- suspiró JungKook- ¿Sabes cómo me sentí mientras estaba con ella
para olvidarte?
-¿La usaste?

-Te dije que eras peligroso para mí: rompí la ilusión de mi progenitora, usé a una
persona, rompí mis reglas, parecía un hormonal sin control... Cosas que jamás
hice.

Taehyung sonrió y solo asintió con la cabeza.

-Ayudame a hacer algo- respondió y se levantó para caminar hasta su closet.


Sacó algo de allí y caminó hasta la sala. JungKook tomó una bata y se vistió
rápido para ir tras él.

Al llegar, le colocó la bata sobre los hombros cuando lo vio frente a la chimenea
encendida y tenía su cuaderno en su regazo.

-¿Taehyung?

-Se acabó, dulce, quiero estar contigo sin pasado de por medio. Ven- dió dos
golpecitos con su mano en el suelo a su lado- Ayúdame a quemar ésto.

JungKook tragó saliva y lo siguió, sentandose a su lado.


-¿Estás seguro, Tae?

-Ya te lo dije, por tí, abandono todo.

Entonces el cuaderno se abrió y sus hojas comenzaron a ser arrancadas de


unos espirales negros.

El fuego comenzó a hacerse más fuerte cuando bolitas de papel fueron cayendo
una por una, el cuaderno comenzando a quedarse sin un par de hojas.

Cuando quedaron solo las hojas en blanco, se miraron a la cara y Taehyung


sonrió suave.

-¿Qué va a pasar contigo?

JungKook se sentó tipo indiecito y le tomó sus manos.

-Seremos los dos. Hablaré con EunJi, dejaremos todo atrás y empezaremos de
cero. Solos tu y yo, tranquilos... poniendo las cosas en orden. ¿Es justo?

Taehyung asintió con la cabeza y besó el dorso de las manos de JungKook.


-Para mí sí... Y ¿Con respecto a tu madre?

-Le diré, en su debido momento.

-No lo tomó muy bien ¿Ah?

-Para nada- JungKook rió, mezcla de diversión y tristeza- Pero ya lo sabía.

Taehyung caminó en cuatro hasta llegar a su regazo y sentarse en él, sintiendo


los brazos de JungKook a su alrededor, el calor del fuego y la luz iluminando
parte de su rostro.

-Lo lamento... Ahora estoy aquí para tí, vamos a enfrentar todo lo que venga
juntos.

JungKook apoyó tres dedos en el mentón de Taehyung y le giró suave el rostro.

-Sé que sí... Por eso ahora mismo me siento seguro.

Y entonces sus besos volvieron a regalarse uno al otro.

(23) (END)
Trước Sau

El cuaderno de Taehyung comenzó cuando Kim descubrió que tener relaciones


no significaba atarse a esa sola persona.

Así que a los 18 años, decidió comenzar a contar. Hasta los 25, ese cuaderno
llevaba cerca de cuarenta nombres escritos a mano, a veces con diferentes
colores, a veces dos en un mismo mes, otras veces escrito rápido antes de
olvidarse.

Taehyung se consideraba promiscuo y no le veía lo malo, es más, apoyaba el


hecho de vivir su sexualidad libremente.

Así que mientras más pasaba el tiempo, más experiencia adquiría y más podía
hablar con JungKook, el mismo que lo apoyaba aún sabiendo que a veces las
cosas las hacía mal.

Quemar ese cuaderno significaba dejar atrás todo su pasado de "fácil" y


empezar desde cero. Las personas tenían derecho a una segunda oportu...

-¿Qué estás viendo?


Taehyung sintió unos brazos por su cintura. Una mandíbula apoyándose en su
hombro y un perfume que causó que cerrará los ojos para disfrutarlo mejor.

-No recordaba que la granja de mi abuela fuera tan verde.

-A mí me gusta. Vacaciones lejos de la ciudad, de chismosos, de llamadas


laborales. Solo nosotros dos.

-Y cabras.

-Y cerdos.

-Y un par de caballos.

-Y gallinas...

Ambos rieron y Taehyung se recargó un su cuerpo.

-Pensé que no ibas a aceptar. Digo, no encajas en el cuadro de un granjero.

Escuchó la risa de JungKook y luego su respuesta.


-Todos lo que me trae paz mental es lo mío. Por eso vine hasta aquí, por eso tú
eres mío, por eso me gusta ésto.

-A pesar de... ¿Que me haya gastado tu Downey?

-A pesar de eso- JungKook suspiró y fingió un llanto, causando escuchar esa


hermosa risa.

Habían aprovechado sus vacaciones para volar hacia Daegu, lejos de todo. Iban
a aprovechar ese momento para estabilizar, lo que para ellos, era reciente.

Llegada la tarde, habían decidido sentarse en el hall para tomar algo y disfrutar
del anochecer lentamente.

-¿Lamentas estar con alguien que te hizo complicar la vida?- preguntó Taehyung
suavemente, sonriendo.

-No... Hemos sido amigos hace tiempo, ya sabía la tormenta que tenía enfrente.

-Pero yo no- Taehyung se apoyó en su hombro y suspiró- Jamás me había


topado a alguien como tú, ya sabes... explosivo...- abrió y cerró sus labios,
estaba sin palabras.
-Es que soy único- alardeó Jungkook y ambos rieron.

Era increíble para ambos todas las cosas que habían tenido que suceder solo
para llegar a ese punto... que, tal vez; si hubieran sido menos necios, no hubiera
sido falta.

Pero estaba bien, amaban la manera en que se hacían sentir a pesar de todo.
Amaban la manera que tenían de sostenerse entre sus brazos y darle ese toque
explosivo que su relación necesitaba cada día.

Se habían transformado en la musa del otro, en la inspiración y el motivo para


llegar a casa todos los días.

Y, aunque todo a su alrededor era un desastre la mayor parte del tiempo, ellos
se sentían en perfecto equilibrio.

-¿Te arrepientes de algo?- preguntó JungKook, pasando un brazo por los


hombros del contrario.

-No, si me arrepiento significa que no hubiera querido estar así contigo... y,


aunque tardé, no puedo desear otra cosa que me haga feliz que no seas tú. No
te necesito pero te quiero conmigo.
Y a JungKook le parecía perfecto eso último que dijo.

-No te necesito pero te quiero conmigo- repitió.

Ambos ladearon sus cabezas y juntaron sus labios.

El viento apenas perceptible les daba una sensación de tibieza típica de


primavera mientras que se sonreían cuando se separaron poco a poco.

-¿Ésto es lo que nos espera?- susurró Taehyung.

-Si tú quieres... ésto es lo que te espera el resto de nuestras vidas.

-¿A pesar de los futuros problemas?

-A pesar de cualquier problema, Tae, amor.

Taehyung se volvió a acomodar y vio como el pasto y los árboles se veían como
recortes negros mientras el sol se ponía.

Sí... La verdad es que sí...


Ambos esperaban momentos así por el resto de sus vidas.

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