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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE DURANGO

CAMPUS CDMX

Síndrome de Miembro Fantasma en Amputación


del Dedo Pulgar y sus repercusiones en el ámbito
laboral.

Presenta:

Cruz Sánchez Nancy | 4021024030


García Pérez José María | 4021024047
Ramirez Ramirez Victor Manuel | 4021024017

Profesora:

Lic. Acevedo Arellano Martha Caterine

Licenciatura Ejecutiva en Fisioterapia

BIOESTADÍSTICA

1
ÍNDICE
SINDROME DE MIEMBRO FANTASMA................................................................3

ETIOLOGÍA ..................................................................................................... 4

EPIDEMIOLOGÍA DE LAS AMPUTACIONES ................................................ 4

Características epidemiológicas del DMF ................................................... 5

OBJETIVO GENERAL .................................................................................... 5

OBJETIVOS ESPECIFICOS ........................................................................... 5

JUSTIFICACIÓN ..............................................................................................6

ACERCA DE LA AMPUTACIÓN POR TRAUMATISMO ................................ 6

Amputación de dedo pulgar: ........................................................................ 8

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA: ........................................................... 8

TEORIAS PARA ENTENDER EL SDMF.........................................................9

FISIOPATOLOGIA.........................................................................................11

REHABILITACIÓN GENERAL.................................................................................12

REPERCUSIONESDE SOCIO-INDIVIDUALES DE LA AMPUTACIÓN ......14

USO DE PROTESIS.......................................................................................15

HIPOTESIS ....................................................................................................16

MATERIAL DE CONSULTA..........................................................................18
SINDROME DE MIEMBRO FANTASMA

El Síndrome de Miembro Fantasma consiste en la sensación anómala de un


miembro corporal que ha sido amputado, del cual el cerebro sigue recibiendo
estímulos.

Son muy diversas las sensaciones que una persona puede percibir tras la
amputación de una extremidad y es importante diferenciarlas, ya que, el tratamiento
para cada una de ellas es distinto. Al conjunto de todas estas percepciones
dolorosas y no dolorosas que con frecuencia coexisten en estos pacientes se le
denomina síndrome del miembro fantasma:

 Dolor de muñón o dolor del miembro residual (DMR): Sensación dolorosa que
se origina en la porción que queda de la extremidad amputada y que se puede
deber al propio dolor de la cirugía, problemas en la piel o de la estructura del
muñón, a neuromas, infecciones, complicaciones vasculares, o dolor muscular.
 Sensación de miembro fantasma (SMF): Percepción no dolorosa en la parte del
miembro faltante. Existen diferentes categorías: sensaciones cinéticas de
movimientos voluntarios o espontáneos del miembro, sensaciones cenestésicas
cambios de tamaño, forma o posición de la extremidad y percepciones
exteroceptivas de temperatura, presión, picazón o vibración.
 Dolor de miembro fantasma: Como se ha mencionado anteriormente, hace
referencia a la sensación dolorosa en la porción que ha sido amputada. Dichas
sensaciones no corresponden a la cicatriz ni al muñón y pueden aparecer por
cambios ambientales, emocionales o físicos.

El dolor y la sensación de miembro fantasma son las primeras entidades que con
frecuencia coexisten en el paciente.

Estas sensaciones aparecen generalmente tras 24 de la amputación y en la mayoría


de los casos suele presentarse en la parte corporal distal del miembro amputado. La
sensación no dolorosa consisten seguir percibiendo la extremidad con un grado
elevado de realidad de forma sensorial como motora. Presente desde el 90% hasta
el 100% de los pacientes tras un mes de la amputación.

La sensación dolorosa (Dolor del miembro fantasma), la cual presenta una alta
incidencia de hasta el 80% de los caso, transcurre en el momento desde que se
realiza la amputación. La gravedad del dolor puede verse afectada cuanto más
proximal es el nivel de amputación.

La primer descripción médica de sensación de miembro fantasma posamputación


fue dada por Ambrosio Paré (1510-1590). Paré caracterizó el síndrome
posamputación y propuso diferentes modelos para explicar el dolor.

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ETIOLOGÍA
El origen de esta condición puede derivarse según:

Quirúrgico: procedimiento que consiste en la extirpación de un miembro que se ha


visto afectado por una lesión, enfermedad, tumoraciones, vasculopatias diabéticas,
deformidades congénitas o infección.

Niveles estándar de amputación.


El cirujano ha de eliminar todos los tejidos no viables y, a la vez, intentar preservar
una longitud de la extremidad suficiente como para mantener una funcionalidad
adecuada tras la cirugía.

Los niveles de amputación habituales son:

Miembro superior:
 Dedos de la mano.
 Parcial de la mano.
 Desarticulación de la muñeca.
 Transradial.
 Desarticulación del codo.
 Supracondílea.
 Del cuello del húmero.
 Desarticulación del hombro.
 Interescápulo-torácica.

Miembro inferior:
 Dedos del pie.
 Parcial del pie.
 Desarticulación del tobillo o de Syme.
 Transtibial.
 Desarticulación de rodilla.
 Transfemoral.
 Desarticulación de cadera.
 Hemipelvectomía.

Traumático: cuando se ha sufrido una amputación traumáica resultado de accidentes


con herramientas eléctricas, de fabrica, de granja, accidentes automovilísticos,
desastres naturales, de guerra, etc. En este caso se presentan complicaciones como
lo son shocks, hemorragias e infecciones lo que requiere de atención de emergencia
para dar un origen adecuado a un muñón.

EPIDEMIOLOGÍA DE LAS AMPUTACIONES

Se calcula que a nivel mundial se producen 2.800 amputaciones a diario.


Actualmente debido al envejecimiento de la población y al aumento de las
enfermedades crónicas no transmisibles, el número de amputados en los países de
occidente no deja de incrementar anualmente. En EE. UU se llevan a cabo unas

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185.0000 amputaciones cada año. Solamente en este país viven cerca de 1,9
millones de amputados, cifra que se prevé su duplicación para el año 2050.

En lo que respecta al motivo de amputación, este difiere según la edad, siendo en la


población joven los accidentes y traumatismos la principal causa de pérdida de una
extremidad, mientras que en los adultos mayores de 50 años se debe a la
enfermedad vascular y al síndrome de pie diabético (consecuencia de la Diabetes).
Debido a esta causa, la tasa de amputaciones de miembro inferior en EE. UU llega a
36 por cada 100.000 habitantes y en España a 26 por cada 100.000 habitantes, lo
que hace que este último sea el segundo país del mundo, por detrás de EE. UU, con
mayor número de amputaciones de extremidad inferior debido a la Diabetes Mellitus
tipo 2.

Características epidemiológicas del DMF

La intensidad, frecuencia y duración de este es muy variable entre todas las


personas que lo presentan. Suele manifestarse dentro del primer día o incluso la
primera semana tras la amputación y, aunque en la mayoría tiende a disminuir
durante los primeros meses, posteriormente no suele variar mucho, a menudo
cronifica y puede llegar a persistir en forma de dolor severo entre el 5-10% de los
casos. Según estudios actuales, un 50% de los pacientes refiere DMF después de
las primeras 24 horas tras la amputación y un 85% dentro de la primera semana,
aunque en otros casos puede tardar semanas o incluso meses en aparecer. La
prevalencia del dolor es más común en amputaciones de miembro superior. Aunque
su aparición en adultos es más habitual, en niños también puede darse, siendo
prácticamente inexistente en amputados congénitos.

En cuanto a la intensidad del dolor, se presenta con un valor medio de 5 y 5.5 en la


Escala Visual Analógica (EVA). Esta escala es ampliamente utilizada para medir
dicha intensidad en los pacientes, se trata de una línea de 10 cm en la que 0
significa “no dolor” y 10 “el peor dolor imaginable” Según un estudio realizado por
Münger, otros factores de riesgo relacionados con padecer mayor DMF y DMR
además de los ya expuestos son:
sufrir dolor previo a la amputación, la edad avanzada y nivel alto de amputación. Por
otro lado, la amputación traumática puede influir en el desarrollo de mayor DMF en
comparación con la amputación programada quirúrgicamente.

OBJETIVO GENERAL
Describir el impacto que genera el SDMF en paciente amputado del dedo pulgar en
su ámbito laboral.

OBJETIVOS ESPECIFICOS
Recolectar las teorías más acertadas para tomarlas como base.

Analizar los distintos tipos de tratamiento para esta condición.

Describir la manera en cómo puede adaptarse en sus AVD.

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Integrar aspectos psicologicos resaltando su importancia como factor de origen y de
tratamiento, así como la integración de un equipo multidiciplinario.

JUSTIFICACIÓN

El SDMF supone una condición desafiante para el paciente que lo sufre, debido a las
limitaciones y el impacto negativo que causan en la CV. La alta prevalencia entre las
personas amputadas, la falta de comprensión de su etiología y la escasa respuesta
a los tratamientos hace que el manejo de estos pacientes sea todo un reto para los
profesionales sanitarios.

La atención de estos pacientes debe realizarse desde un enfoque multidisciplinario e


individualizado. Para poder llevarlo a cabo, es necesario poseer información
científica contrastada, demostrada y actual sobre la fisiopatología y etiología de este
fenómeno. Los profesionales sanitarios deben comprender cómo afecta la
amputación y el dolor a la vida de estos pacientes, y conocer las terapias y
tratamientos que actualmente son más efectivos para disminuirlo o paliarlo, con la
finalidad de mejorar la CV de estas personas.

La Fisioterapia juega un papel primordial en el abordaje del paciente con DMF, tanto
en la prevención, como en el tratamiento y rehabilitación, apoyando al paciente en
todo momento a lo largo del proceso.

ACERCA DE LA AMPUTACIÓN POR TRAUMATISMO

Las amputaciones por origen traumatica, se ven reflejadas en personas que sen
encuentran en la edad productiva, siendo común en grupos que van desde los 15
hasta los 40 años de edad, siendo más prominente el sexo masculino, siendo 5:1, es
decir que de cada 5 hombres, una mujer sufre una amputación de origen traumático.

En este origen se ve involucrado el uso de maquinaria pesada, medios de transporte,


materiales peligrosos o partes de edificios o mobiliario. Este tipo de lesiones son
comunes de ver en áreas como el hogar, áreas de construcción e industriales.
Las lesiones de esta índole predominan en zonas del cuerpo como la muñeca y la
mano, siendo más especifica en esta ultima los dedos, de los cuales el dedo gordo
suele ser el más popular, estas incidencias corresponden al atrapamiento,
aplastamiento, trabamiento o apretamiento en o entre objetos.

Del mismo grupo también derivan aquellas que son ocasionadas por objetos o
instrumentos cortantes en las que, la mayoría de las veces, solo se ve un dedo
comprometido, siendo el agente principal causal objetos como cuchillos o navajas de
alto filo.

En el caso del uso de la maquinaria se ve ocasionado por el mal uso del material o
equipo de trabajo, así como la falta de mantenimiento del mismo y el hacer caso
omiso de las medidas de seguridad correspondientes al área de trabajo.

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Las extremidades superiores, como ya se mencionó, llegan a ser las más afectadas,
seguidas por las extremidades inferiores, continuando por un grupo no especificado,
seguido del grupo amputado de la cabeza y terminando con el grupo afectado por
tórax y abdomen.

Se ha encontrado que hay ocupaciones en las cuales se sufren mayor número de


amputaciones debido a las actividades que se realizan y el riesgo de las mismas,
mencionándose a continuación de manera descendente:

1. Ayudante general
2. Operador
3. Mecánico
4. Minero
5. Militar
6. Obrero
7. Empleado
8. Encargado de sección o Supervisor
9. Limpieza
10. Electricista
11. Carpintero

La amputación traumática del pulgar es la lesión digital más impactante de la mano,


reduciéndose en un 50% la funcionalidad de la misma, de tal forma que hay
impedimento para realizar movimientos de oposición, pinza de precisión y prensión
cilíndrica estable que son muestra prominente de la evolución del ser humano.

Los dedos son la zona más frecuentemente lesionada y los mecanismos por los que
se producen las amputaciones son muy variados, pero las vemos con frecuencia en
el contexto de accidentes laborales (máquinas, corta fiambré, sierras radiales, etc.)
Las técnicas quirúrgicas son múltiples y la elección viene condicionada
fundamentalmente por el nivel de amputación y por el tejido remanente, entre otros
factores (enfermedad vascular, tabaco, etc).
¿Cuánto paga la ART (Aseguradora de riesgos del trabajo) por la amputación de un
dedo?

El Decreto 659/96, también conocido como Baremo, contiene la “Tabla de


Evaluación de Incapacidades Laborales”. Allí es donde debemos remitirnos para
determinar la incapacidad por cada dedo amputado.
La pérdida de las falanges de los dedos será indemnizada sólo si se hubiera
producido por amputación total o rigidez y la indemnización será igual a la mitad de
la que correspondería por la pérdida del dedo entero si se tratare de pulgar y a la
tercera parte por cada falange si se tratare de otros dedos.

Respecto a la Tabla de Valuación de Incapacidades Permanentes, que también


inició su vigencia en 1970, a continuación, se exponen las siguientes
consideraciones y pretensiones de la reforma aprobada en octubre de 2016:
 Incorporar los baremos (valuaciones) de las enfermedades de trabajo y
sustentarlas en evidencia científica, para hacer más objetiva la dictaminación
 Hacer más precisa la valuación
 Modificar la nomenclatura técnica para los casos que fuera necesaria
 Ajustar los porcentajes reduciendo el factor discrecional por parte de los
dictaminadores –donde sea posible-; y, con ello, disminuir los litigios en la
materia

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 Ampliar y precisar textos enunciados de manera genérica
 Fortalecer el espíritu de justicia sin perjuicio del trabajador o del empleador
 Incorporar criterios de evidencia científica, con la utilización de los recursos
tecnológicos existentes y el avance de la medicina
 Capacitar en la utilización de la tabla a los médicos dictaminadores.

Con respecto a la mano, en aquellos casos en que se ven afectados los 10 dedos, el
Baremo establece un porcentaje de incapacidad del 100%. En aquellos casos en
que sean 5, entre el 40 y 60%. Y por la amputación de los cuatro dedos menos el
pulgar corresponde el 40%. A partir de allí, hay que ir analizando cada caso en
particular, ya que se establecen distintos porcentajes según dedo y nivel de
amputación:

Amputación de dedo pulgar:

Si se amputa el dedo pulgar, el porcentaje puede variar entre 30 y 8% según si es a


nivel metacarpo falángica (30%), 1° falange (25%), a nivel de la interfalángica (15%),
amputación distal de la última porción falángica (8%). Los otros factores son la edad
del trabajador al momento del accidente, y su ingreso base el cual se ajustará.

Zurdos

En caso de constar en la solicitud que el Asegurado ha declarado ser zurdo, se


invertirán los porcentajes de la indemnización fijados por la pérdida de los miembros
superiores.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA:

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1.- Impacto del síndrome de miembro fantasma en el desempeño laboral de
trabajadores que han sufrido la amputación de un pulgar de la mano.

La amputación de un segmento del miembro superior es una lesión que puede


ocurrir en el ámbito laboral, especialmente en industrias que involucran maquinaria
pesada y peligrosa. El síndrome de miembro fantasma puede tener efectos
significativos en la calidad de vida y el desempeño laboral de los trabajadores
afectados. Estas personas pueden experimentar sensaciones incómodas, como
picazón, dolor y movimientos involuntarios en el miembro que ya no está presente
físicamente. Estos síntomas pueden interferir con las actividades diarias y afectar la
capacidad de realizar tareas laborales de manera eficiente y segura.

A pesar de que se han realizado avances en la investigación y tratamiento del


síndrome de miembro fantasma, todavía existen desafíos significativos para
comprender completamente sus mecanismos subyacentes y encontrar estrategias
efectivas de manejo. La falta de información y recursos específicos para ayudar a los
trabajadores que han perdido un dedo y experimentan este síndrome puede limitar
su capacidad para reintegrarse plenamente en el entorno laboral y recuperar su
calidad de vida previa al accidente.

Por lo tanto, surge la necesidad de investigar y abordar el impacto del síndrome de


miembro fantasma en los trabajadores que han sufrido la amputación de un
segmento significativo que compone la mano, en este caso siendo el dedo pulgar.
Esto permitirá desarrollar intervenciones y terapias personalizadas que ayuden a
mitigar los síntomas del síndrome, mejorar la adaptación a la discapacidad y
promover una reintegración exitosa en el entorno laboral.

TEORIAS PARA ENTENDER EL SDMF

Esquema e Imagen Corporal:


Haciendo alusión a ambas para tener en cuenta la representación consciente,
conceptual y verbalizada, e inconsciente de los diferentes componentes del cuerpo.

La representación propia del cuerpo es necesaria para mantener una interacción con
el entorno que se basa en 3 sistemas interdependientes:

1. La conciencia: a través de estímulos táctiles, y el uso de los sentidos proporciona


información que al ser integrada y procesada aporta conocimiento sobre la
configuración y posición corporal.
2. Conocimiento general del cuerpo: Por una parte el conocimiento lexical y
semántico que define nombres, las categorías y funciones de cada componente
corporal.
Por otro lado el conocimiento topográfico que se traduce en la distribución espacial
de las partes del cuerpo proporciona información sobre la posición concreta del
cuerpo y la proximidad y limites que existen entres los componentes.
3. Información sobre la situación actual y la configuración corporal: Información que
se usa como referencia para planear y ejecutar movimientos dirigidos a objetos
externos.

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Aunado a lo anterior se toma como referencia el Homúnculo de Penfield, el cual
funciona como un mapa corporal en el cual se representan áreas motoras y
sensitivas del cuerpo, este mapeo contribuye a entender la organización de entrada
sensorial y motora a nivel de corteza cerebral.

El fragmento motor corresponde a regulación y control de movimientos corporales,


situados en el centro de la corteza frontal incluyendo lóbulo frontal del cerebro. Se
recibe y envía de manera simultanea la información sensorial que se utilizar para la
planificación y ejecución de movimientos.
Esta representación gráfica incluye diversas zonas del cuerpo como lo son la cara,
los dedos de las manos y brazos por ser los mas destacados.

Por otro lado, la parte sensitiva es la encargada de representar la sensibilidad del


cuerpo al tacto, a la presión y al dolor que puede experimentar una persona.
Ubicada en el lóbulo parietal, envía y recibe información que en gran parte, a través
del tálamo, se responsabiliza de la integración de sensaciones que se perciben por
distintos estímulos. De esta forma se obtiene información que puede ser
decodificada en el cuerpo debido a la gran cantidad de conexiones neuronales
situadas en este espacio del cerebro.

Neuroplasticidad:

Se entiende como la capacidad que posee el tejido neuronal para poder


reorganizarse, asimilar y modificar sus mecanismos biológicos, bioquímicos y
fisiológicos en los que participa la comunicación intracelular para adaptarse a una
respuesta del medio ambiente o a una combinación de diferentes estímulos.

Después de acontecida una amputación de un miembro o la perdida de sus vías


aferentes, se produce una modificación de la representación topográfica en la
corteza sensorial primaria, por lo cual debería realizarse una traslación de la zona
dedicada al miembro amputado hasta una zona adyacente del Homúnculo de
Penifield.

El cambio en las aferencia nerviosas provocadas por la amputación produce


cambios anatómicos y fisiológicos que además de afectar a los axones de neuronas
sensoriales primarias, también afecta a las zonas distales de las mismas como los
cuerpo celulares y la sinapsis en la espina dorsal.

Es necesaria, aunque no suficiente, la preservación de una corteza sensorial


primaria, en la que se ha producido un error en el proceso de plasticidad topográfica
tras la pérdida o desaferentización de un miembro. La re modificación en la
representación de las diferentes partes corporales se realiza de forma errónea.

En vez de suprimirse las áreas donde está representado corticalmente el miembro


amputado, estas se siguen conservando o simplemente se trasladan, lo que da lugar
a una interpretación errónea de esa información. Esta interpretación se lleva a cabo
en áreas de asociación más posteriores, en el lóbulo parietal donde residiría el
supuesto esquema corporal mental.

La existencia del SDMF da pie a la existencia de un esquema corporal mental


adquirido, ya que no se puede sentir algo que ni si quiera se sabia que existía o de
lo cual no se tiene información registrada mediante su observación o su uso como
una parte funcional del cuerpo.

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En el paciente se sugiere que ocurre una Neuromodulación, que refiere a la
capacidad de neuronas de alterar las propiedades eléctricas en respuesta a cambios
bioquímicos. Se manifiesta que el dolor incluye ciertas características y centrales,
por lo que produce cambios a nivel cortical que se produce cuando los pacientes
sufren dolor crónico. Es necesario realizar estudios específicos para estudiar la
reorganización somatosensorial cerebral funciona y estructural para comparar los
casos en los que existe y en los que no existe dolor.

FISIOPATOLOGIA:

Los mecanismos que subyacen al DMF continúan sin estar claros. Se cree que su
etiología es multi factorial y que depende de factores periféricos, centrales y
psicológicos, por lo que se han descrito además distintas teorías para intentar
explicar este fenómeno.

Los factores periféricos, las estructuras periféricas que se ven alteradas en el DMF
son, fundamentalmente los nervios periféricos seccionados y el ganglio de la raíz
dorsal. Tras una sección nerviosa, se generan conexiones no funcionales de los
nervios segmentados y se produce degeneración retrógrada y acortamiento de las
neuronas aferentes, lo que lleva a la formación de neuromas en la zona residual del
miembro amputado.

Los neuromas son un engrosamiento o crecimiento anormal de tejido nervioso y,


cuando se produce un estímulo mecánico o químico, generan una descarga ectópica
anormal que puede provocar la aparición de DMF. Estos cambios también afectan a
las células del ganglio de la raíz dorsal, que se vuelven más sensibles y activas ante
estos estímulos y provocan plasticidad en el asta posterior de la médula espinal.

Además, se produce una sobre excitación en los canales de sodio que se


encuentran en el neuroma, lo que genera alteraciones en la transducción de señales
e incrementa la sensibilidad a los estímulos y la actividad aferente hacia la corteza
cerebral que los interpreta de manera errónea como estímulos procedentes del
segmento amputado.

Según las investigaciones más recientes sobre las causas periféricas del DMF se
centran en el intento frustrado de los nervios seccionados de reparar las conexiones
previas (con o sin formación de neuroma), en el papel del ganglio de la raíz dorsal y
en el dolor previo a la amputación. Sin embargo, los factores periféricos por sí solos
no son capaces de generar DMF; es necesario el concurso del sistema nervioso
central (SNC) en la génesis y persistencia del DMF.

Los factores centrales Las estructuras que se encuentran alteradas en este caso son:
La médula espinal, la corteza cerebral y el tálamo. En la médula espinal se produce
una reorganización anatómica debido a que los axones proximales de los nervios
que han sido segmentados forman brotes y conexiones anormales con neuronas
contiguas. Esto conlleva a un aumento de la sustancia P y las bradicininas
provocando el fenómeno de sensibilización central de las células que se encuentran
en el cuerno dorsal. Dicho fenómeno genera un aumento de la señalización de
estímulos e hiperexcitabilidad de la médula espinal. En su aparición, participan
aminoácidos excitadores como el Ácido Glutámico y el Ácido Aspártico, mediados
por los receptores N- Metil-D – Aspartato (NMDA). En el DMF la actividad de estos
aminoácidos se encuentra aumentada.

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Además, se produce una disminución de las neuronas que liberan ácido gamma
aminobutírico (GABA), principal neurotransmisor inhibitorio del cerebro. Todo ello
provoca el desarrollo de alodinia e hiperalgesia, por lo que un ligero toque en el
miembro residual puede ocasionar gran dolor.
Según la teoría sobre la reorganización cortical, que es la más aceptada en la
actualidad, tras la amputación, la región de la corteza cerebral que recibía
proyecciones sensoriales o motoras de la extremidad amputada puede comenzar a
recibir información de las regiones corticales vecinas que se expanden para hacerse
cargo de esta zona.

Por ello, las neuronas que recibieron información de, por ejemplo, un brazo antes de
su amputación, responden posteriormente a nuevas señales de la cara que invaden
la región somato sensorial asociada a ese brazo, correspondiendo a cambios en la
neuro plasticidad sobre la corteza motora primaria y la corteza
somatosensorial primaria.
Todo ello se basa en el modelo del Homúnculo de Penfield, que consiste en la
representación de la superficie corporal en el lóbulo parietal del cerebro. En esta, el
área de la cara es adyacente al área de la mano, por ello un golpe en la cara puede
producir sensación simultánea en los dedos de la extremidad superior.

Entre el 60-95% de los amputados refieren SMF al estimular partes del cuerpo
neuronalmente adyacentes a la extremidad perdida. Esta plasticidad desadaptativa
es ampliamente considerada como la base neural de la
aparición y cronicidad del DMF. Además, existe
bastante relación entre la intensidad del DMF y la
cantidad de reorganización cortical que se produce.

Por otro lado, a nivel subcortical como consecuencia de


la amputación, las neuronas del tálamo también
pueden reorganizarse, aunque las investigaciones han
demostrado que, tras una lesión en la médula espinal,
la hiperexcitabilidad de las neuronas talámicas es independiente del impulso
sináptico de las neuronas espinales, lo que sugiere que el tálamo puede
transformarse en un generador autónomo de estímulos de dolor.

Otro posible mecanismo subyacente del DMF lo explica la teoría de la memoria


propioceptiva dolorosa. Según esta teoría, los amputados siguen teniendo la
propiocepción de las extremidades faltantes, incluso de los movimientos voluntarios
e involuntarios de estas y el recuerdo de percepciones dolorosas previos a la
amputación. Por ello, ciertos movimientos con la extremidad fantasma pueden
desencadenar recuerdos propioceptivos dolorosos. Esta teoría podría explicar el
hecho de que los pacientes que sufren dolor antes de la amputación, tras esta
tienden a informar DMF más intenso.

REHABILITACIÓN GENERAL

El vendaje:

Reduce el edema, facilita el retorno venoso, tonificar el tejido y


acostumbrar al muñón a una cobertura constante y a una
presión local. Además se puede utilizar el vendaje para lograr
una posición correcta del muñón.

1.- Colocar un extremo de la venda en la parte delantera del

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muñón y dar dos vueltas de adelante hacia atrás.
2.- Hacer el anclaje, es decir, sujetar las dos primeras vueltas con otras dos vueltas
alrededor del muñón en la parte superior, en donde se
inició el vendaje para mantener la base firme.
3.- Desplazar la venda hasta la parte final del muñón en
donde se inicia la espiga de abajo hacia arriba hasta
terminar con la venda y dar sujeción al extremo final de
la misma.
Es importante no dejar huecos de piel sin vendar y
preguntar al paciente si la presión es adecuada. El
objetivo final de la enseñanza es que el paciente
aprenda a vendarse por sí solo o con la ayuda de un
familiar. El vendaje debe permanecer durante el descanso nocturno y se cambia 3
veces al día (no llevarlo más de 8 horas), realizando un masaje en el muñón en cada
cambio de vendaje.

Potenciación del muñón:

A partir de las 48 h de la amputación se efectuarán movilizaciones pasivas del


muñón y contracciones isométricas de este, motivando al paciente a repetirlas varias
veces al día. Despues de la cicatrización del muñon se haran contracción
isométricas y dinámicas de forma manual, potenciando flexores, extensores,
aductores y abductores.

Entrenamiento de la lateralidad (Imaginería motora graduada):

Las neuronas espejos (NE) son un tipo especial de células del cerebro que procesan
la información de forma secuencial para producir el movimiento motor. La IMG es un
programa de rehabilitación integral diseñado para activar de forma secuencial las
redes corticales motoras.

Estas neuronas espejo se activan a través de la observación y las imágenes, así


como en la ejecución de movimientos En esta primera fase es fundamental activar la
corteza premotora, reducida debido a la amputación, y trabajar el esquema corporal
con los pacientes, concepto de vital importancia para reconocer las partes del
cuerpo y localizar el dolor. Se presentarán diferentes imágenes y vídeos de
extremidades en diversas posiciones y movimientos, los cuales deberán ser
identificados como derecha e izquierda por los pacientes.

Terapia espejo:

Esta alternativa de tratamiento fue propuesta por


Ramachandran y su grupo en 1996. Se basa en el uso
de un espejo que crea una ilusión reflectante de la
extremidad afectada. Se trata de situar la extremidad
afectada detrás de un espejo, y realizar movimientos
con el brazo sano, mientras observa su reflejo en el
espejo. (abducción, aducción, flexión, extension,
digitación…) con el miembro no afectado, los cuales
crearán una ilusión de movimiento bilateral en el cerebro

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del paciente.

REPERCUSIONESDE SOCIO-INDIVIDUALES DE LA AMPUTACIÓN

Suponen únicamente un 14% del total, pero las amputaciones del miembro superior
tienen grandes repercusiones socio-individuales debido a las funciones tan
específicas que realiza, que son diferentes a las del miembro inferior:

Repercusiones funcionales:

Una de las funciones principales del miembro superior es la de agarrar y


alcanzar objetos desde cualquier lugar en el espacio, fundamentalmente
en el entorno del propio cuerpo. Para ello es necesario que la mano
desarrolle, no sólo funciones motoras, sino también táctiles (exteroceptivas,
propioceptivas) y reflejas. La función de alcanzar un objeto se realiza en la
siguiente secuencia:

1. En primer lugar, el alcance del objeto.


2. Después la prensión del mismo.
3. Posteriormente el transporte del objeto.
4. Por último, la liberación.

Otra de las funciones que se ven afectadas es la motricidad fina que forma
parte de las tareas que implican movimientos precisos, como puede ser
peinarse, comer, atarse los cordones, etc.
 La simetría corporal y el centro de gravedad también se ven afectados,
produciéndose estrategias automáticas de compensación que conllevan una
marcha y una postura anómala.
 La mano está dotada de sensibilidad térmica y presora que nos permite
realizar un gran número de funciones.
 Se pierde la integración sensitivo-motora de las funciones y destrezas
corporales previamente desarrolladas
 A través de las manos desarrollamos funciones de comunicación,
expresividad y manifestación de nuestro estado emocional y psicológico.

Repercusiones psicológicas y estéticas:

 Las consecuencias psicológicas se deben, sobre todo, a lo inesperado de la


situación (causa traumática) y al cambio estructural y funcional que supone,
además del periodo de adaptación posterior. Tras la amputación aparecen
sentimientos de tristeza, sorpresa, no aceptación de la situación, ira y pensamientos
suicidas. El cambio en la imagen corporal es vivido como un estigma y una perdida
de independencia, lo que genera sentimientos de inferioridad, negativismo ante su
vida, y sus roles social y profesional. También se aprecia un descenso en la calidad
de vida percibida, en comparación con la población general.
 Dependen de la personalidad del amputado.
 A nivel estético, hay que tener en cuenta la importancia de la imagen, sobre
todo en etapas como la adolescencia.

Repercusiones socio-laborales:

 La amputación modifica el desempeño ocupacional de los trabajadores y


reduce sus posibilidades dentro del ámbito laboral.

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 Deben hacer algunas modificaciones para su correcto desempeño
 Deben integrarse de nuevo socialmente aceptando su nueva situación

USO DE PROTESIS

El uso de este accesorio ha sido considero, debido a la necesidad de los pacientes


por reincorporarse a sus actividades laborales, ya que en su mayoria dependen de
ello para subsistir, además de la optimización en el desarrollo de sus actividades
diarias y de ocio.

La Protesis es definida como un dispositivo que sirve para sustituir un segmento


corporal que ha sido perdida, ya sea por motivos cosméticos, o en este caso,
funcionales.

La importancia para la sustitución recae en la necesidad de manipular objetos que


permitan lograr autosuficiencia al paciente, se busca en lo mayor de lo posible lograr
los movimientos que el pulgar permite como la Abducción, la Flexión, la Pronación,
Contraposición y la Oposición.

Esto permite volver a desarrollar, entre otras cosas los distintos tipos de prensión,
dentro de los cuales podemos encontrar:

 P Por oposición terminal: Ocupada para sujetar objetos pequeños.


 P Por oposición subterminal: sirve para sujetar objetos relativamente más
gruesos que un cabello, como por ejemplo una hoja.
 P Por oposición subterminolateal: utilizada para tomar objetos como lo es una
moneda.
 P trigital: prensas en las que intervienen el pulgar, el indice y el medio. EJ:
destapar una botella:
 P tetradigitales: usada en objetos gruesos que requieren mayor firmeza.
 Prensa pentadigitales: usada como envolvimiento en lo que se usan todos los
dedos.

Como parte de la reincorporación y uso de la protesis, es imporante considerar que


esta debe llevar un cuidado especial para poder ser usada.
Al paciente se le hará una evaluación funcional para evaluar propiamente sus
capacidades actuales junto con los objetivos que desee lograr según la demanda
que requieran sus labores. En base a ello pude ser usado para la elaboración y
diseño de su protesis.

Al muñón se le debe de hacer una promoción de la curación y mantener un control


en el edema,además de considerar el mantenimiento o aumento de la fuerza, la
resistencia cardiovascular y considerar el aumento en el rango de movimiento de la
articulación residual.

Durante el proceso de adaptación el paciente debe aprender el cómo funciona su


mano con la protesis, debe ser trabajado el uso de la misma en actividades sencillas
para mejorar los niveles de comodidad y estabilidad.
Dependiendo al nivel en que halla sido afectado el dedo se trabajara en el uso de la
máxima capacidad funcional que involucre las actividades especificas que este
pueda realizar en su trabajo.

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Para esta ultima parte se consideran las actividades ocupacionales que son de
ayuda para que el paciente de manera progresiva pueda re acondicionarse en sus
AVD y por consecuente actividades laborales.

HIPOTESIS
La mala práctica de los procedimientos, uso inadecuado del equipo o no contar con
material protección carecer de capacitación previa pueden generar lesiones
traumáticas como amputación del dedo pulgar y generar la deficiencia en la
realización de actividades o el cese de estas.

Con base a lo anterior se toma en cuenta factores personales que pueden provocar
un traumatismo accidental en un área laboral:

1. - Falta de conocimiento: se produce cuando la persona se ha seleccionado mal


para el cargo a ejecutar, no es el trabajador adecuado, no se le ha enseñado o no ha
practicado lo suficiente.
2. - Falta de motivación o actitud indebida: se producen cuando la persona trata de
ahorrar tiempo, de evitar esfuerzos, haciendo sus actividades de mala manera.
3.- Falta de capacidad física o mental: se produce cuando la persona se ha
seleccionado mal para el cargo por ejecutar, no es el trabajador adecuado o la
persona ha visto disminuida su capacidad física o mental.

Por lo que creemos que la implementación de medidas de seguridad y prevención


en fábricas de manera estricta reduce la incidencia de amputación del dedo en los
trabajadores.

Si se aplican medidas efectivas de seguridad en las áreas de trabajo, se puede


reducir la incidencia de amputaciones de dedos en los trabajadores. Estas áreas
suelen ser entornos donde se utilizan maquinarias y herramientas peligrosas, lo que
aumenta el riesgo de accidentes laborales, incluyendo amputaciones de
extremidades.

Las medidas de seguridad pueden incluir:

1. Capacitación y entrenamiento: Proporcionar a los trabajadores la formación


necesaria sobre el manejo seguro de las maquinarias y herramientas, así como los
procedimientos adecuados para prevenir accidentes. Esto puede incluir el
aprendizaje de técnicas seguras de trabajo, el uso adecuado del equipo de
protección personal y la identificación de situaciones de riesgo.

2. Mantenimiento y revisión regular de maquinarias: Realizar inspecciones


periódicas de las maquinarias y herramientas utilizadas en la fábrica para
asegurarse de que estén en buen estado de funcionamiento y cumplan con los
estándares de seguridad. Esto incluye la reparación o reemplazo de componentes
defectuosos o desgastados que puedan representar un peligro.

3. Barreras físicas y dispositivos de seguridad: Instalar protecciones y dispositivos de


seguridad en las maquinarias para evitar el contacto directo con las partes
peligrosas. Esto puede incluir el uso de resguardos, sensores de proximidad,
sistemas de parada de emergencia y otros mecanismos de seguridad que minimicen
el riesgo de amputaciones.

4. Cumplimiento de normativas y regulaciones: Asegurar que la fábrica cumpla con


todas las normativas y regulaciones relacionadas con la seguridad en el lugar de

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trabajo. Esto implica seguir los estándares establecidos por las autoridades locales y
nacionales, así como implementar políticas internas de seguridad.

Si estas medidas de seguridad se aplican de manera efectiva y se fomenta una


cultura de seguridad en la fábrica, es plausible que se pueda reducir la incidencia de
amputaciones de dedos en los trabajadores. Sin embargo, es importante tener en
cuenta que cada situación es única y que otros factores, como el cumplimiento de
los trabajadores con las normas de seguridad, también pueden influir en los
resultados.

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MATERIAL DE CONSULTA

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