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Universidad Nacional Autónoma de Honduras

Facultad de Humanidades y Arte


Escuela de Pedagogía y Ciencias de la Educación

Asignatura: PA-217 Administración Educativa III


Docente: María Cristina Aguilar Martínez
Sección: En linea1500
Asignación:

Ensayo: Importancia de la buena dirección en los procesos educativos


y el papel del director(a) como motivador para el cumplimiento de los
objetivos institucionales.

Alumna: Reina María Baca Fúnez


Número de cuenta: 20191030482

Tegucigalpa M.D.C viernes 7 de abril del 2023


Ciudad Universitaria “José Trinidad Reyes”
Importancia de la buena dirección en los procesos educativos y el
papel del director(a) como motivador para el cumplimiento de los
objetivos institucionales.

La dirección es el proceso máximo dentro del centro educativo; y los demás


procesos, tales como la planificación, organización, evaluación, enseñanza-
aprendizaje, etc., estos son ejecutados por todos los autores, pero conducidos o
guiados por la dirección. La gestión educativa, o gestión escolar, busca fortalecer
el desempeño de las escuelas a través de diversas técnicas, instrumentos y
conocimientos para consolidar un buen desarrollo académico del estudiantado.

Dirigir es una de las tareas más importantes que la humanidad ha desarrollado


desde el mismo momento de su formación. La evolución histórica de la dirección
está estrechamente vinculada al propio desarrollo de la sociedad. Para algunos
la dirección implica diseñar y mantener un medio ambiente en el cual, grupos
de personas que trabajan en equipo, puedan lograr fines y objetivos
seleccionados.

Pero la dirección también es considerada una necesidad social en la que un grupo


de personas llamadas dirigentes, conducen en forma organizada, los recursos
humanos, materiales y financieros, puestos a su disposición para alcanzar un
estado deseado ya definido con anticipación. Múltiples son las definiciones de este
concepto y en cada una se encuentran rasgos esenciales aplicables a la
educación, pero hay algo que nos distingue y son sus características específicas.
En nuestro sector todo descansa sobre factores humanos: la materia prima es
persona, los medios de producción son personas, todos los procesos que se
realizan tienen lugar en el campo de las relaciones interpersonales, en el sector de
la educación todas las personas dirigen y son dirigidas. Todos son sujeto y objeto
de la dirección: los cuadros dirigentes y técnicos, los docentes, los alumnos, y los
padres.

El rol de un directivo en las instituciones educativas es de vital importancia porque


moviliza al personal, diseña e implementa las políticas institucionales, acompaña
el trabajo pedagógico de los docentes, motiva a todo el personal, y vela por el
buen funcionamiento de los recursos y la infraestructura para que sea acogedora y
saludable; todos estos aspectos con la única finalidad de mejorar los aprendizajes
en los estudiantes; en definitiva, un director es el líder pedagógico.

Nuestra sistema educativo actual requiere que los directores asuman un


verdadero rol de líderes pedagógicos, que no solo se ocupen de las funciones
administrativas o que esporádicamente visiten las aulas para llenar una ficha de
monitoreo, o que rara vez converse con los estudiantes sobre sus necesidades o
intereses, que muy poco integre a los padres de familia en el trabajo pedagógico;
se requiere un director que genere confianza e inspire a todos, que sea un
trabajador apasionado de lo que hace, que promueva el trabajo con los docentes ,
se requiere de un director que genere espacios pedagógicos para todos los
actores, que se involucre en el desarrollo de las sesiones de aprendizaje junto con
sus maestros, que promueva comunidades de enseñanza y aprendizaje entre
docentes y administrativos para revisar y evaluar los resultados de aprendizaje y
tomar decisiones pertinentes. Se necesita un director que no solo le interese la
bonita infraestructura del colegio, sino que priorice la mejora de la infraestructura
emocional de todos los actores. Tal como plantea el Minedu (2014), cuando el
director de una escuela enfoca las tareas con liderazgo pedagógico, es decir,
cuando orienta los objetivos hacia los aprendizajes, su actuar tiene un impacto
positivo en el rendimiento académico de los estudiantes.

En conclusión, nuestra actual educación requiere de un modelo de gestión escolar


centrado en los aprendizajes; a partir del liderazgo pedagógico del director, que
permita las condiciones necesarias para alcanzar los aprendizajes fundamentales,
deseables y necesarios en todos los estudiantes. Par tener mejores resultados se
requiere configurar el rol del director, que sea una persona apasionada, que
inspire y movilice a todos los miembros de la comunidad educativa hacia el
cumplimiento de las metas y objetivos. Necesitamos un director como líder
pedagógico y una comunidad educadora que vayan de la mano, preocupándose
por el bienestar educativo, es necesario una gestión educativa capaz de
encabezar una nueva visión que acerque al país a un sistema más inclusivo, de
mejor calidad y más participativo. 

Bibliografía
 Bazar Hernández Alindor (2021). La Importancia del director en el proceso
de cambio de gestión educativa. San Isidro, Lima – Perú. Grupo
Stakeholders. Recuperado de: https://stakeholders.com.pe/noticias-sh/la-
importancia-del-director-proceso-cambio-gestion-educativa-alindor-bazan-
hernandez/#:~:text=El%20rol%20de%20un%20directivo,la
%20infraestructura%20para%20que%20sea

 Bastida L. L. Del Carmen M.Q. Eugenia (2017). La dirección educacional y


la dirección en la escuela: sus especificidades. Revista Universidad y
Sociedad Vol.9 no.3. Instituto Central de Ciencias Pedagógicas. La
Habana. Cuba. Universidad de Cienfuegos, Cuba. Recuperado de:
http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2218-
36202017000300005

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