Está en la página 1de 1

Mantenimiento preventivo

El mantenimiento preventivo se refiere a realizar acciones de forma planificada y regular para


evitar posibles fallos o averías en equipos, maquinarias o sistemas. Algunas de las características
del mantenimiento preventivo son:

1. Programación: Se establece un calendario o programa para realizar las tareas de mantenimiento


de manera regular y periódica.

2. Inspecciones periódicas: Se llevan a cabo inspecciones visuales y técnicas para identificar


posibles problemas o desgastes en los equipos.

3. Mantenimiento planificado: Se realizan actividades como limpieza, lubricación, ajustes y


reemplazo de componentes según las recomendaciones del fabricante.

4. Reducción de riesgos: El objetivo es anticiparse a posibles fallos o averías, minimizando los


riesgos de paradas no planificadas y pérdida de productividad.

5. Prolongación de la vida útil: El mantenimiento preventivo ayuda a prolongar la vida útil de los
activos al mantenerlos en buen estado y funcionando correctamente.

6. Costos controlados: Aunque requiere una inversión inicial, el mantenimiento preventivo tiende a
ser más económico a largo plazo, ya que evita costos mayores de reparación y tiempo de
inactividad.

En resumen, el mantenimiento preventivo busca prevenir fallos y averías mediante la aplicación


regular de tareas de inspección y mantenimiento programadas, lo que ayuda a maximizar la
disponibilidad y eficiencia de los equipos.

También podría gustarte