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Viceministerio de Riego
Manual
de supervisión
de construcción
de obras de riego
SIRIC
Subprograma de Inversiones en
Riego Intercomunal
“Ni una obra requiere mayor cuidado que
aquella que debe soportar la acción del agua; por esta
razón todas las partes del trabajo deben hacerse de
acuerdo con las reglas del arte, que todos los obreros
saben, pero pocos cumplen”
Sixto Frontino,
Año 97 a.c.
Subprograma de Inversiones en Riego Intercomunal – SIRIC Manual de supervisión de obras de Riego
Índice
1 Introducción................................................................................................................................... 1
2 Organización de la supervisión ................................................................................................... 2
2.1 Marco general de un proyecto de riego .................................................................................... 2
2.2 Conformación de la Consultora de Supervisión y Acompañamiento ....................................... 3
2.3 Organigrama del Grupo de Supervisión de Obras ................................................................... 5
2.4 Perfil del personal de la supervisión ......................................................................................... 7
2.5 Atribuciones de la supervisión .................................................................................................. 7
2.6 Ética profesional de la supervisión ........................................................................................... 7
2.7 Relaciones de trabajo ............................................................................................................... 8
2.8 Límites de actuación ................................................................................................................. 8
3 Aspectos generales de la supervisión ........................................................................................ 9
3.1 Definición .................................................................................................................................. 9
3.2 Aspectos preparatorios ............................................................................................................. 9
4 El contrato de construcción de obra......................................................................................... 12
4.1 Componentes del contrato...................................................................................................... 12
4.2 Análisis de responsabilidades del contratista ......................................................................... 12
5 Actividades de supervisión durante la construcción.............................................................. 13
5.1 Actividades de control ............................................................................................................. 13
5.2 Actividades de Información..................................................................................................... 21
5.3 Actividades de administración interna .................................................................................... 23
6 Revisiones, verificaciones y comprobaciones ........................................................................ 24
6.1 Tipos de revisión ..................................................................................................................... 24
6.2 Verificaciones.......................................................................................................................... 25
6.3 Comprobaciones ..................................................................................................................... 25
7 Tareas y procedimientos para la supervisión de construcción de obra ............................... 26
7.1 Tareas de la supervisión antes del arranque de los trabajos de campo ................................ 27
7.2 Funciones de la supervisión al principio de la obra ................................................................ 31
7.3 Funciones de la supervisión durante el proceso constructivo ................................................ 32
7.4 Funciones de la supervisión para la terminación y entrega de la obra .................................. 37
8 Órdenes de Cambio .................................................................................................................... 40
8.1 Generalidades......................................................................................................................... 40
8.2 Procedimiento para la ampliación de plazos .......................................................................... 40
8.3 Procedimiento para trabajos adicionales ................................................................................ 41
9 Libro de órdenes ......................................................................................................................... 42
9.1 Introducción............................................................................................................................. 42
9.2 Definición ................................................................................................................................ 42
9.3 Uso del libro de órdenes ......................................................................................................... 42
GLOSARIO
Fiscal, fiscalización de obra, fiscaliza- Personal del contratante en obra, específicamente de la Unidad
ción del proyecto Departamental de Riego y del SIRIC.
Director, gerente, superintendente, Responsable por parte del contratista para la dirección de la obra,
residente de obra también es el representante legal de la empresa en la obra.
Certificado de pago, planilla de avan- Documento de solicitud de pago elaborado por el contratista y a
ce ser aprobado por la supervisión por avance de obra ejecutada.
Nota, carta, oficio, misiva Se denomina a toda comunicación escrita dirigida entre las partes
con acuse de recibo.
1 Introducción
El desarrollo de un proyecto de riego pasa por una serie de fases consecutivas, llegando desde la
identificación, preinversión y el diseño final hasta la construcción de las obras. En el Programa SIRIC
esta secuencia de fases se presenta de la siguiente manera:
2 Organización de la supervisión
Antes de detallar las actividades de la supervisión, es necesario sentar las bases de su organización
y su interrelación con los diferentes actores de un proyecto de riego.
ción en estas actividades, es necesario que la organización de regantes cree algo así como un Comi-
té de Obras, en el que participen representantes de las comunidades. Este Comité tendrá el rol de
representar a los beneficiarios en el control de las obras y a la vez funcionará como canal de comuni-
cación hacia los beneficiarios sobre las actividades por desarrollarse y hacia los profesionales del
Grupo de Apoyo a los Usuarios sobre las observaciones y actividades de los usuarios.
Es importante aclarar a los beneficiarios que el Comité de Obras es la instancia formal para todo tipo
de reclamo o solicitud con relación a las obras. Así se evitará que beneficiarios individualmente tomen
contacto con el contratista o la supervisión, lo que fácilmente puede generar confusiones y socavar la
buena coordinación entre las partes.
Obviamente, el Comité de Obras debe trabajar intensivamente con el Grupo de Apoyo a los Usuarios,
que les apoya en la ejecución de sus funciones. En algunos temas, el Grupo de Apoyo a los Usuarios
tendrá que capacitar a los miembros del Comité de Obras para que adquieran el criterio suficiente
para controlar y fiscalizar la ejecución de las obras de manera efectiva.
Gerente de supervisión
La Jefatura de la supervisión debe estar a cargo de un profesional Ingeniero Civil o de una rama afín
con amplia experiencia en la supervisión de obras, principalmente de riego.
La especialidad o experiencia del Gerente de supervisión estará orientada a la característica principal
del proyecto. Por ejemplo, si un proyecto contempla una presa de tierra o de hormigón es necesario
que el gerente tenga experiencia probada en ese campo, además de la experiencia en supervisión de
otros proyectos y manejo de personal.
A la vez debe tener una gran sensibilidad para las actividades de acompañamiento, porque también
es responsable de la dirección del Grupo de Apoyo a los Usuarios. En muchos casos contará con un
especialista, quien se encarga de las actividades en este tema, con él que debe mantener excelentes
relaciones de coordinación.
En sus actividades de gerencia de supervisión, el Gerente de supervisión coordina permanentemente
con los diferentes frentes de trabajo y las brigadas de topografía, de tal manera que las labores tanto
del contratista como de la supervisión técnica se hallen armonizadas con las actividades de los usua-
rios.
El Gerente de supervisión tendrá estrecha relación con el contratante y con la Consultora SA del SI-
RIC que coadyuva al contratante en las labores de fiscalización. También estará directamente vincu-
lado con su casa matriz y con todo el equipo de supervisión.
Jefes de frente
Los jefes de frente, preferentemente ingenieros civiles, también deben ser profesionales con expe-
riencia en las áreas que contemple las actividades del frente. Tendrán a su cargo la tarea de dirigir la
supervisión y ejecutar actividades de control en su respectivo frente. En algunos casos puede tratarse
inclusive de toda la obra, en otros, solo parte de la obra.
Especialistas
Como en un proyecto de riego pueden presentarse varios tipos de obras especiales, como túneles,
presas, compuertas, tuberías de presión, etc., es recomendable complementar el equipo con los es-
pecialistas necesarios con la debida experiencia, especialmente en las áreas de geología (túneles y
presas), estructuras, hidráulica y mecánica. La tarea de los especialistas será el control de la obra en
el área de su competencia. Sus intervenciones podrán ser perentorias y serán programadas de
acuerdo al requerimiento de la obra.
Inspectores
Los inspectores de obra también deben ser profesionales (ingenieros civiles o técnicos superiores)
aunque con menor experiencia que los jefes de frente. Su tarea principal será la de controlar los tra-
bajos efectivos del contratista, tomar muestras, informar al jefe de frente, etc. El número de inspecto-
res estará en función del volumen de trabajo.
Topógrafos
Los topógrafos también deben ser profesionales experimentados, porque su trabajo es el de controlar
la calidad del trabajo del topógrafo del contratista, dar su visto bueno para continuar con los trabajos y
sobre todo de detectar errores de alineamiento o nivel. Por la importancia de estas labores, es nece-
sario que se trate de personal con por lo menos 5 años de experiencia.
Laboratoristas
En caso que el contrato de supervisión lo prevea, la supervisión también contará con un laboratorio
de control, que deberá estar dirigido por un profesional con experiencia, principalmente en mecánica
de rocas y suelos y hormigones.
Personal de apoyo
Se prevé que habrá personal de apoyo como alarifes y ayudantes. Este personal es importante en la
supervisión, por cuanto hay un sinnúmero de tareas que requieren de apoyo al supervisor, como con-
trolar el número de bolsas de cemento que se está empleando, controlar el número de partida de ma-
teriales ingresado en almacenes, etc. Son labores menores, pero siguen siendo importantes para una
supervisión efectiva.
Congruente con el dinamismo propio de la rama de la construcción, los supervisores deben ser tan
laboriosos como sea necesario para colaborar en el cumplimiento de la programación del proyecto.
El fracaso de un proyecto atribuido a una deficiente supervisión no únicamente se da por incompe-
tencia técnica o por fallas en la interacción humana, sino también por el desapego a la ética profesio-
nal.
El personal de la supervisión no puede recibir favores personales, obsequios o invitaciones de las
personas a las cuales les debe revisar su trabajo y debe mantener la relación en un plano estricta-
mente profesional. También, está obligado a actuar con honestidad y justicia con los trabajadores y
especialmente el contratista.
3.1 Definición
La supervisión se define como la vigilancia y coordinación de actividades desarrolladas para el cum-
plimiento a tiempo de las condiciones técnicas y económicas pactadas entre quien ordena y financia
la obra y quien la ejecuta a cambio de un beneficio económico.
El objetivo básico en la supervisión de una obra es garantizar que ésta se ejecute de acuerdo con los
planos, especificaciones, presupuestos y cronogramas aprobados en conformidad a lo estipulado en
los contratos celebrados para su construcción. En resumen, los objetivos básicos de la supervisión
son: controlar calidad, tiempo y costo. Es un hecho probado que la atención a la supervisión de
una obra se refleja en la calidad, el costo y el tiempo de ejecución de los trabajos.
Un supervisor necesita poseer conocimientos teóricos de la actividad que debe observar y de la solu-
ción de los problemas que se plantean. Un supervisor tiene la tarea de orientar indicando lo que “se
debe hacer”, por tanto es una persona lógica y ordenada en el pensamiento, claro y sencillo en la ex-
posición o demostración y un modelo en la conducta y los modales.
Eclímetro de mano.
Brújula óptica o de mano.
Calculadora de bolsillo, de preferencia tipo científica.
Libreta de apuntes.
Carpeta o tablero con prensa papel, para portar seguros los formularios de reporte de supervisión.
Este Manual de supervisión.
Cámara fotográfica.
Cualquier otro instrumento útil para la actividad, como altímetro.
Casco y ropa de agua con el distintivo de la Supervisión.
Los topógrafos deben contar con equipo completo, que entre otros pueden ser: una estación total,
taquímetro, nivel de precisión y miras, independientemente de las obligaciones del contratista de
proporcionar la disponibilidad de dicho equipo, según el contrato de ejecución de la obra.
Adicionalmente, los supervisores deben tener a su disposición, eventualmente otros instrumentos ne-
cesarios para el cumplimiento de su trabajo.
de órdenes. Una vez lograda, se dialoga con el representante para determinar las causas verda-
deras, así como las soluciones factibles y se obliga al establecimiento de un compromiso formal
para la rectificación del desvío detectado en el cronograma. Este compromiso es preciso anotarlo
en el libro de órdenes para constancia. Por último habrá que darle seguimiento a las medidas
adoptadas hasta la corrección total. En caso de que el retraso persista, repetir el procedimiento.
Actuando conforme a lo descrito, se protege los intereses del cliente o contratante.
Cuando las causas de desviación en tiempo no son imputables al contratista y si se tratara de
condiciones climatológicas, se debe verificar la magnitud del problema obteniendo información de
las entidades encargadas como el SENAHMI, AASANA u otras. El resultado de las investigaciones
y observaciones debe ser debidamente registrado. La documentación del contrato debe especifi-
car los límites cuando se determina que una condición climatológica se toma en cuenta como una
justificación de retraso.
Si las causas de desviación no son por condiciones climatológicas pero tampoco imputables al
contratista (paros, bloqueos, desabastecimiento de combustibles o materiales, etc.), se debe in-
vestigar los motivos, dimensionar el problema e inclusive medir posibles consecuencias o persis-
tencia del problema y con estos elementos proceder conforme a como se describió en el párrafo
anterior.
También puede haber casos referidos a oposición de los afectados, que no permiten la ejecución
de los trabajos. En este caso el Grupo de Apoyo a los Usuarios deberá actuar rápidamente para
conocer las causas y coordinar las acciones con los involucrados (por ejemplo HAM, Asociación
de Regantes, contratista), para impedir perjuicios en los trabajos.
En el caso cuando el contratista solicita una ampliación de plazo, se debe exigir que adjunte a la
misma los respaldos que justifiquen su solicitud. Estos respaldos deberán ser cotejados con la in-
formación investigada por el mismo supervisor.
La posición del supervisor debe ser firme y al contratista se le permitirá exponer sus motivos, aten-
diéndolos con toda seriedad y desde luego si llegarán a ser válidos, se debe considerar una am-
pliación de plazo apoyándose en argumentos reales y amparados en el contrato.
En cada caso el supervisor enviará un informe detallado con su evaluación correspondiente al
contratante, para que éste apruebe o desestime la ampliación de plazo. Este informe contendrá
los detalles de los acontecimientos, los efectos en el desarrollo de la obra, sus implicaciones con-
tractuales, las comprobaciones realizadas por el supervisor y sus recomendaciones. En anexo al
mismo se deberán adjuntar tanto la solicitud del contratista, como la información recabada por el
supervisor al respecto. Esta ampliación de plazo consiste de una adenda al contrato que debe
elaborar el asesor jurídico del contratante, en base al informe del supervisor.
Es importante tomar todas las acciones necesarias en cuanto ocurran los sucesos, llevando una do-
cumentación adecuada con las anotaciones correspondientes tanto en el libro de órdenes como en el
cuaderno de obra de la supervisión, para evitar que cuando lleguen reclamos del contratista aparez-
can aspectos dudosos, pues las decisiones respecto al tiempo tienen efectos irreversibles, ya que los
atrasos representan sobrecostos.
“pro forma” de los proveedores, fechas de entrega en depósito, fechas de transporte, etc., de tal ma-
nera que la supervisión mediante comunicación directa pueda establecer la veracidad de tal planifica-
ción y pueda controlar su proceso.
Esta documentación también pudo ya haber sido solicitada antes de emitir el anticipo, por lo que la
función de la Supervisión se simplificará a su control.
En caso de detectarse falta de cumplimiento en los compromisos asumidos para el uso del anticipo, la
supervisión realizará la llamada de atención al contratista y comunicará la contratante para tomar las
acciones necesarias previstas en el contrato.
A INSTALACIONES GENERALES
A-1 Movilizaci—n e Instalaci—n de Faenas glb 1,0 3.600,00 3.600,00
A-2 Campamento, Instalaci—n y adecuaci—n glb 1,0 2.400,00 2.400,00
A-3 Camino de acceso por los usuarios km p/usuarios
con los avances aceptados. En caso de demoras excesivas del contratista en las correcciones, se
harán las notificaciones correspondientes sobre las implicancias del caso, descargando a la supervi-
sión y al contratante respecto a cualquier responsabilidad debido a la falta de pago.
Si el contrato no lo prevé expresamente, no se aceptarán pagos porcentuales por material en bode-
gas o en tránsito a la obra.
diente de ellas oportunamente en diferentes momentos del desarrollo de los trabajos de construc-
ción.
En el caso de plantas de producción de hormigón y similares, se deben realizar controles diarios de
los rendimientos y llevar las estadísticas correspondientes, haciendo énfasis en las fallas y sus cau-
sas y su implicancia en los avances.
Por otra parte, especial atención en este aspecto merecen los rendimientos de los trabajos realizados
por los usuarios como parte de su aporte a la obra, éstos pueden participar en el acopio de materiales
(piedra, agregados, etc.). Conjuntamente el equipo de Apoyo a Usuarios, se debe llevar un control
pormenorizado de los trabajos realizados, debiendo anotarse diariamente los rendimientos obtenidos,
los sectores a que corresponden, la nómina de los usuarios participantes, etc.
6.2 Verificaciones
Con esta denominación se consideran las revisiones que tienen un carácter de certificación. Como
ejemplo se puede mencionar la revisión de un ítem de obra que en una ocasión anterior se rechazó
por estar inconvenientemente realizada.
6.3 Comprobaciones
La comprobación más clásica que se pretende en el proceso de construcción es la del resultado de
los reportes de laboratorio sobre los cilindros de muestra tomados de la mezcla utilizada para hormi-
gonar una losa, un muro u otro objeto. De esta manera se comprueba y se asegura que la resistencia
de la obra es la adecuada.
Otro ejemplo es el del grado de compactación de una plataforma que queda comprobado por medio
de la correspondiente prueba de laboratorio.
Primera etapa. Actividades de la supervisión antes del arranque de los trabajos de campo (precons-
trucción):
A) Revisión conceptual y estructural del diseño.
B) Revisión de especificaciones y métodos constructivos. Recomendaciones a la ingeniería.
C) Comentarios, conclusiones y cuantificaciones del proyecto a diseño final.
D) Revisión, verificación e informe del presupuesto base.
E) Revisión e informe detallado del cronograma de obra.
F) Revisión del cronograma de desembolsos.
G) Reconocimiento del lugar de la obra.
H) Verificación de la entrega al contratista de toda la documentación necesaria parra la ejecución de
la obra.
I) Control de planos.
J) Informe del contrato de obra.
K) Integración y control de archivos.
Segunda etapa. Funciones de la supervisión que sólo se realizan al principio de la obra (para puesta
en marcha):
A) Coordinar y exponer el proyecto al contratista.
B) Entrega al contratista del terreno donde se ejecutará la obra y de la ubicación de BMs.
C) Revisión del levantamiento topográfico ejecutado por el contratista.
D) Reunión de trabajo (entrega de documentación faltante si la hay).
E) Apertura de libro de órdenes.
Cuarta etapa. Funciones de la supervisión para la terminación y entrega de la obra (liquidación final),
comprendido por:
A) Verificación con personal del contratante que la obra quedó terminada.
B) Atender las reclamaciones e inconformidades del contratista.
C) Fijar multas y deducciones en el caso de que existan.
D) Certificación de la ejecución de detalles.
E) Fijar fechas reales de recepción.
F) Controlar la vigencia de las boletas de garantía
G) Realizar la recepción provisional y definitiva de la obra
H) Revisión de los planos “as built”, elaborados por el contratista.
I) Finiquito de los trabajos administrativos.
J) Manuales de mantenimiento y operación.
K) Finiquito supervisión.
la finalidad de que pueda ser utilizado coherentemente en el futuro para el caso de obras adiciona-
les o modificadas.
Cuando se detecten diferencias en precios unitarios, importes y cantidades parciales o totales, se
enviarán por escrito a la fiscalización del proyecto, indicando los ajustes necesarios que deberán
hacerse en el presupuesto.
Cuando se determine la existencia de ítems de obra adicionales, se informará a la fiscalización del
proyecto, proporcionándole una relación de estos, así como su volumen, costo estimado y justifi-
cación técnica. La fiscalización del proyecto revisará y/o aprobará.
Una vez autorizados los ítems y precios unitarios, la supervisión actualizará el presupuesto el cual
controlará durante el desarrollo de la obra.
I) Control de planos
La supervisión deberá contar en campo con una copia de todo el proyecto a diseño final, así como de
los planos de detalles constructivos que se vayan elaborando durante el proceso constructivo.
Para tal fin se deberá contar en obra con una planoteca en la que puedan agrupar todos aquellos pla-
nos que correspondan a un mismo diseño. Los planos deben tener de origen una clave o nomenclatu-
ra la cual puede ser dada por los proyectistas y servir para su identificación.
Independientemente de lo anterior se debe contar con un listado en el que estén referidos todos los
planos del proyecto a diseño final. En el caso de sustitución de planos por cambios importantes al
proyecto, al plano original se le deberá colocar en forma visible el letrero de anulado y fecha de anu-
lación así como la indicación de qué plano lo sustituye.
Se deberá llevar un control en planos de las modificaciones que se lleven a cabo y en forma aparte
una codificación de los cambios por plano, indicando en qué consistió la modificación, quién la ordenó
y la fecha de la misma, asimismo se deberá indicar en forma sintetizada las consecuencias de dicho
cambio (costo, incremento de precio y tiempo de ejecución).
D) Reuniones de trabajo
La supervisión y la dirección de obra acordarán la periodicidad y día en que se realizarán las reunio-
nes de trabajo en la obra. En la primera reunión establecerán las bases relativas a autoridad, siste-
mas de comunicación, responsabilidades y organigramas. Todo esto para el buen entendimiento y
apoyo de ambas partes.
Las reuniones serán dirigidas por la gerencia de la supervisión. La supervisión elaborará el orden del
día con los asuntos importantes a tratar y levantará el acta correspondiente, preferiblemente en el
mismo día.
F) Cómputos métricos
La supervisión verificará las medidas físicas exactas de los diferentes ítems de obra ejecutada, ce-
rrándolas al quedar terminada cada actividad, preferentemente los realizará al mismo tiempo con el
contratista, firmando ambos de común acuerdo.
Los volúmenes finales de la obra podrán variar con lo previsto, puesto que las cantidades de presu-
puesto son referenciales, especialmente en aquellos ítems cuya cuantificación exacta durante el di-
seño final no es posible de valorar, como el caso de excavaciones y tipo de excavación, que frecuen-
temente varían.
H) Verificación de calidad
Dentro de sus alcances de control de calidad, la supervisión llevará a cabo acciones preventivas que
tienen por objeto prever resultados negativos tanto en materiales como en procedimientos constructi-
vos. En la verificación deberá realizar lo siguiente:
Verificar los almacenes del contratista para certificar que los materiales se encuentren bien alma-
cenados y protegidos, inclusive según las normas de control ambiental.
Exigir la presentación de certificados de fábrica y cotejar que las notas de remisión correspondan
a las partidas certificadas por fábrica.
Seleccionar las muestras y la ejecución de pruebas en los materiales naturales, de fábrica o elabo-
rados por el contratista. A manera enunciativa pero no limitativa se relacionan los siguientes mate-
riales:
à Acero de refuerzo.
à Agregados para la elaboración de hormigón (cemento, arena, grava y agua).
I) Control de presupuesto
La supervisión llevará el control presupuestario de acuerdo a lo siguiente:
Supervisar y controlar los contratos establecidos.
Establecer y mantener un control presupuestario por contrato.
Elaborar cuadros informativos por partida del costo total de la obra actualizado de acuerdo a los
incrementos que se presenten, así como el concentrado de estimaciones de ítems.
Mantener actualizados el cronograma de desembolsos, el cronograma financiero y actualizar los
mismos periódicamente.
Estimar y controlar el posible cambio de los montos de contratos y órdenes de cambio, notificando
a la fiscalización del proyecto las variaciones. Evaluar y efectuar recomendaciones cuando existan
reclamaciones del contratista.
Supervisar, controlar y conciliar con los contratistas los precios unitarios extraordinarios conside-
rando la mano de obra, materiales, equipo y herramienta, conforme a lo que dispone el contrato.
Revisar, evaluar y dictaminar los estudios de reajustes (si están permitidos en el contrato) y pre-
cios unitarios.
Solicitar al contratista la presentación de planillas de avance con la periodicidad que indique el
contrato, de acuerdo al avance de la obra. Éstas irán acompañadas por una memoria fotográfica y
cómputos.
Si el contratista no presenta planillas, la supervisión las elaborará y enviará a la empresa construc-
tora con la correspondiente llamada de atención y a la fiscalización del proyecto para su proceso
de pago.
Elaboración de informe periódico en función de las actividades desarrolladas, así como también,
se entregarán las solicitudes ya evaluadas de ajuste de precios y obras complementarias en un
plazo no mayor a 10 días calendario después de su presentación.
J) Atención a reclamos
La supervisión atenderá cualquier reclamo del contratista que sea presentado en los tiempos estipu-
lados en el contrato y que esté debidamente justificado. Para estos casos deberá verificar que:
En el contrato esté previsto que las causas del reclamo son atendibles
Los hechos o causas que argumentan el reclamo del contratista realmente hayan ocurrido
Hayan sido presentadas las pruebas correspondientes y proceda a verificarlas
8 Órdenes de Cambio
8.1 Generalidades
Como se halla definido en la sección 5.1.4.2, una orden de cambio, es una orden emitida por la su-
pervisión que tiene una incidencia directa en el costo de la obra (aumento o disminución), o en la va-
riación del plazo con aprobación del contratante. La orden de cambio normalmente implica la ejecu-
ción de trabajos adicionales no previstos en el contrato, cuyo pago puede tener como efecto la varia-
ción de los costos o la negociación de nuevos precios no previstos en el contrato y/o la variación de
los plazos de ejecución de la obra.
Las órdenes de cambio requieren la elaboración de una adenda al contrato, mediante la cual el con-
tratista y el propietario acuerdan nuevas condiciones, que modifican parcialmente el contrato, ya sea
en el plazo, en el costo o en ambos.
La adenda al contrato se elabora en base al informe de la supervisión, que deberá contener los ante-
cedentes, la justificación, conclusión y recomendación al propietario de la obra. Una vez firmada la
adenda, ésta pasa a formar parte del contrato. Corresponde a la supervisión velar por su cumplimien-
to en el mismo grado de importancia que el contrato.
En los contratos de construcción generalmente se presentan dos tipos de órdenes de cambio:
Ampliación de plazos.
Trabajos adicionales.
Para ambas órdenes de cambio se presentan algunas recomendaciones específicas.
Luego de analizada la solicitud de plazos y definidos los tiempos justificados (comprobados y res-
paldados), la supervisión elabora un informe detallado para la fiscalización o el propietario, en el
que se incluye la justificación y recomendación, determinando el número de días aprobados y el
nuevo plazo para la conclusión de la obra.
Anexo al informe se deberá incluir la solicitud del contratista y los respaldos correspondientes, in-
cluyendo un nuevo cronograma de obra.
Con la documentación citada se iniciará el trámite de la adenda al contrato por parte de fiscaliza-
ción y propietario de la obra.
9 Libro de órdenes
9.1 Introducción
El libro de órdenes existe por la sencilla razón de que en una obra civil es imposible elaborar un dise-
ño final que prevea la construcción de una obra tal cual quedará en el terreno. Al no poder prever en
planos y/o especificaciones todo lo que habrá de resultar una vez construido, hay la necesidad de
complementar al contrato con una serie de documentos técnicos que permitan durante el desarrollo
de los trabajos, contar con un conducto legal a fin de controlar y modificar lo establecido inicialmente
para ajustarlo a la realidad. Este conducto legal es el libro de órdenes de la obra.
En el libro de órdenes los representantes de ambas partes se comunican en forma oficial y legal en
todo lo que afecta al desarrollo de la obra. El libro de órdenes es un instrumento de carácter jurídico
para establecer un orden y un equilibrio entre el contratante o su representante, la supervisión y el
contratista. Cuando se encuentra un libro de órdenes elaborado con propiedad, se tiene la seguridad
que refleja una obra limpia, ordenada y ejecutada conforme a un buen ejercicio del oficio de la cons-
trucción.
9.2 Definición
En construcción, el libro de órdenes es un libro notariado que forma parte del contrato. Se utiliza para
anotar en él cualquier situación que se presente durante el desarrollo de los trabajos de construcción
que sea diferente a lo establecido en los anexos técnicos de contratación.
El libro de órdenes tiene funciones que son diferentes para cada parte. En lo que se refiere al contra-
tante, éste podrá, por medio de la supervisión, dar fe del cumplimiento de eventos significativos en
tiempo, así como también respecto a situaciones causadas por motivos ajenos a la responsabilidad
del contratista, o para manifestar su inconformidad con la calidad de la obra, con el avance del crono-
grama de obra y en general con todo lo relativo a la aplicación de normas, planeación y costo de la
construcción.
Para el supervisor es el instrumento para el control del desarrollo de la obra. Éste permite mantener
las riendas que controlan el avance de la obra y obtener los resultados previstos. La supervisión de
obra se vale del libro de órdenes para ordenar la obra, regular su desarrollo y ejercer el control del
mismo.
El contratista se servirá del libro de órdenes para solicitar instrucciones que le sean indispensables
para realizar su trabajo. También lo usa para señalar cualquier inconformidad que tenga respecto a
las órdenes emitidas por la supervisión, en representación técnica del contratante. Para el residente
de obra, el libro de órdenes también debe servir para protegerse de órdenes verbales dadas por la
supervisión que con frecuencia se desconocen a la hora de presentar su costo.
que hacer el traspaso de una a otra, poniendo especial cuidado en asentar una nota final en el libro
de órdenes improvisado mediante la cual se realiza el traspaso e inutilizar el resto de las hojas.
En muchas ocasiones el libro de órdenes no recibe la debida importancia, empezando por un mani-
fiesto descuido el formato mismo. Por lo tanto se considera fundamental recalcar su importancia y
despertar conciencia al respecto, sobre todo por las consecuencias que traería el no aprovechar las
virtudes de este instrumento de trabajo.
nen a sus subordinados autorizados por ellos mismos. Únicamente falta mencionar que son
ellos – el Gerente de supervisión y el Superintendente de obra- quienes están autorizados por
los firmantes del contrato a representar los intereses del contratado y el contratante respecti-
vamente.
à Tercera: El supervisor y el residente de obra son quienes usarán cotidianamente el libro de ór-
denes y quienes se valdrán de ésta para controlar la obra en todos los sentidos. Serán los
guardianes del orden en la misma y todos sus superiores deben procurar abstenerse de inter-
venir directamente en el libro, pues si lo hacen atentan contra el orden establecido y desautori-
zan lo que ellos mismos autorizaron.
Cuando existen varios supervisores y/o residentes en una obra a cargo de un mismo contrato,
no es recomendable que todos firmen, ya que se presta a confusiones, repeticiones y contra-
dicciones. Llegado este caso, se recomienda que se nombre un responsable, y únicamente és-
te asiente notas en el libro de órdenes.
à Cuarta: la fiscalización tiene también facultad para intervenir en el libro de órdenes. Esta facul-
tad queda restringida a dar fe de sus visitas en determinada fecha y nada más. Cualquier ob-
servación o queja sobre la calidad de las obras la debe realizar a través de la supervisión.
Inutilización de espacios sobrantes. Al completarse el llenado de cada una de las hojas del libro
de órdenes, es indispensable cancelar todos los espacios sobrantes. Esto se logra cruzándolos
con rayas diagonales para inutilizarlos.
Retiro de copias. Inmediatamente que se ha llenado cada una de las hojas del libro de órdenes,
es menester retirar las copias y remitirlas a las oficinas centrales de la empresa responsable de la
supervisión y del contratista. Esta práctica evita que por un extravío por descuido o intencional del
libro de órdenes, se pierda el control de la obra. Por esto mismo es necesario que las copias sean
legibles y por tanto, el supervisor y el residente deben vigilar que así sea. Se hace hincapié en es-
to porque es muy frecuente encontrar libros de órdenes con hojas escritas y de las cuales no se
han retirado las copias, y no en pocos casos, la libreta se encuentra con todos los originales y co-
pias a pesar de estar ocupada en su mayor parte.
Validaciones. Es importante validar cualquiera mensaje u orden impartida por cualquier medio de
comunicación (carta, teléfono, correo electrónico, verbal) por medio de una nota de libro de órde-
nes en la cual se cita el medio utilizado y se convierte en parte integral del libro de órdenes. De
acuerdo a la importancia del tema y al propio criterio, se procede a mencionar únicamente el do-
cumento y su tema central, o bien a anexar copia por triplicado al original y a las copias del Libro,
o en caso extremo transcribir todo el documento en el libro de órdenes. En esta forma quedará
manejada apropiadamente toda la información generada en torno a la obra.
Notas apremiantes. Cuando sea necesario escribir una nota de particular importancia y que por
sus características es preciso dar conocimiento de ella a las autoridades de las oficinas centrales
de cualquiera de las empresas, se procederá a anular el resto de la hoja correspondiente para re-
mitirla con carácter de urgente.
Cantidad de notas. En el libro de órdenes se asentará todo lo necesario conforme a los principios
que le dan razón de existir-. Por lo tanto su extensión será determinada por las situaciones que re-
sulten distintas a las previstas originalmente en los anexos técnicos del contrato.
Frecuencia de las notas de libro de órdenes. A las consideraciones mencionadas en el punto
anterior se añade que es común encontrar libros de órdenes que casi no han sido utilizados. Es
seguro de que en estos casos solo se toma el libro de órdenes como un engorroso requerimiento y
no se ha descubierto su utilidad para el control efectivo de la obra.
Seriedad. Todos los puntos anteriores hacen comprender la seriedad que se requiere para mane-
jar un libro de órdenes, por consiguiente se recomienda que, antes de hacer un asiento se medite
sobre la necesidad de hacerlo. Si se decide hacerlo, se debe pensar cuidadosamente lo que se
quiere decir. No es apropiado escribir la nota directamente en el libro de órdenes. Se sugiere
hacer primero un borrador de ella, para asegurarnos que se está diciendo precisamente lo que se
quiere dejar asentado.
El libro de órdenes nunca debe utilizarse para asuntos intrascendentes, y mucho menos para ven-
tilar agravios o hacer agresiones. El libro de órdenes no es el sitio para desarrollar pleitos persona-
les.
Compromiso de uso del libro de órdenes. Tanto el residente como el supervisor están compro-
metidos a utilizar el libro de órdenes. De ninguna manera deberá permitirse que se evada la res-
ponsabilidad de realizar asientos para no comprometerse. Los encargados de hacer que se cum-
pla este ordenamiento son los coordinadores o gerentes de supervisión y los superintendentes o
gerentes de construcción, cada quien respecto a sus subordinados.
Si una de las partes observa que la contraparte elude el uso del libro de órdenes, es prudente no
hacer nada y dejar que ese hecho quede evidente por si mismo. Pero si el objetivo primordial es
hacer que la obra se ejecute lo mejor posible, será válido intentar por los debidos conductos que
esta actitud se modifique por el bien de la obra misma.
Redacción. La redacción es de capital importancia. Es común que existen confusiones o múltiples
interpretaciones de una nota en el libro de órdenes. Estas y otras por el estilo están motivadas por
errores de redacción, y todas dan como resultado afectaciones económicas a veces muy costosas
para cualquiera de las partes. En la mayoría de los casos es el contratista el que se ve beneficiado
en estas situaciones, aunque existen casos en que ocurre lo contrario. Por lo tanto es importante
redactar correctamente.
Ortografía. Un supervisor está obligado a manejar bien la ortografía. Aunque puede considerarse
que este asunto es de segunda importancia se hace especial énfasis en él pues significa mucho
para la imagen que proporciona de quien escribe con faltas ortográficas, y se recuerda que algu-
nos asientos serán leídos por mucha gente.
Cerrado de asientos en el libro de órdenes. Todas las notas que tratan temas por resolverse
deben quedar cerradas. Es también fundamental cerrarlas a la brevedad posible dejando resueltos
los problemas o situaciones que las motivaron.
A los supervisores, les afecta mucho de su tiempo y concentración el hecho de estar arrastrando
asuntos pendientes de resolver, una razón suficiente para que poner especial atención en cerrar
las notas lo más pronto posible.
El no atender a esto en forma eficiente da como resultado que con el tiempo es tal el número de
problemas no solucionados que se pierde de manera efectiva el control de los eventos y, en con-
secuencia, de la obra misma.
Custodia del libro de órdenes. Por su carácter de instrumento de control, el libro de órdenes de-
bería quedar bajo custodia del supervisor. En algunos casos esto está reglamentado para que el
responsable sea el residente. Si bien parece incorrecto, en última instancia no afecta substancial-
mente la labor del supervisor.
Independientemente de quien lo custodie, lo importante es que realmente esté disponible para
ambas partes. Es conveniente reglamentar en cada caso cómo, cuándo y dónde se encuentra el
libro, para tener el libre acceso a éste en horas de trabajo, desde luego en el mismo lugar en el
que se desarrolla la obra. Es absolutamente incorrecto sacar el libro de la obra, salvo en casos
excepcionales cuando no hay un lugar para guardarlo.
Se debe tener en cuenta que custodia no quiere decir propiedad, y que es un asunto muy grave
ocultar el libro, lo que afecta por igual a cualquiera de las partes que intervienen en el proceso de
construcción.
Libro de órdenes unitario por contrato. Solo está permitido un libro de órdenes por cada contra-
to. No podrá existir un libro utilizado por dos contratos, aunque se trate de la misma constructora o
del mismo frente.
Hábito de lectura. Debe hacerse una costumbre el leer cada día lo anotado en el libro de órde-
nes. Esta regla deberá seguirse siempre para evitar sorpresas desagradables. Se quiere aprove-
char la ocasión para hacerla extensiva a toda documentación que se maneje relacionada con la
obra durante el desarrollo de la misma.
Uno de los aspectos más significativos de este tema es el que se refiere a las especificaciones,
pues de nada servirá un excelente trabajo de integración de éstas, para que después no se lean y
por lo tanto no se apliquen en la realización de los trabajos de campo.
de su personal de campo, o bien actúen de total acuerdo con ellos. Indudablemente la presión
ejercida en la reunión motivará un cambio en la resistencia ofrecida.
En caso de que hubiera ignorancia de los hechos, se reclamará al residente su actitud inconve-
niente y tendrá que someterse al orden establecido en la obra. Además, para la supervisión, que-
dará el precedente en contra del residente y, en caso de repetirse un problema de esta naturaleza,
quedará expuesto a que se solicite su substitución, facultad que en la mayoría de los formatos de
contrato se otorga al supervisor.
La segunda alternativa consiste en el mismo procedimiento, pero por medio de oficios. Esta tiene
efectos más limitados y más lentos, pero es también útil y tiene la ventaja de dejar huella por escrito.
Si se maneja adecuadamente esto recurso, se puede estar seguro de que no será necesario asentar
más notas en el libro de órdenes exigiendo atención al problema cuyo desarrollo se ha analizado.
El uso correcto y aprovechamiento del control de obra por medio del libro de órdenes dependen del
conocimiento pleno de los procedimientos y recursos por parte del supervisor, así como su criterio
para emplear los citados recursos en la forma y en el momento más conveniente sin exagerar en nin-
gún sentido. Es necesario que el supervisor no sea ni ingenuo ni cándido. Lo complejo del control de
obra requiere destreza y experiencia, inteligencia y profesionalismo.
9.8.1 Órdenes
Los tipos de notas de libro de órdenes ya han sido clasificados en las reglas. En esta sección se hará
un análisis del contenido que deben tener cada una de las notas según su tipo. Se inicia este análisis
por la nota más compleja. Se trata de la orden de corrección de un elemento que ha sido ejecutado
con defectos. Primero se procede a presentar un desglose de las partes que imprescindiblemente
debe contener el asiento:
1. Clasificación de la nota. Las primeras palabras del asiento deben referirse a la finalidad de la no-
ta. En este caso se tratará de una orden. Entonces debe iniciarse diciendo: “se ordena”. En otros ca-
sos: “se informa”, o bien “se certifica”.
2. Descripción del asunto. A continuación se escribe el asunto que motivó la nota. La redacción tipo
sería, por ejemplo: “la reparación de la arista de la losa”, o “la substitución del relleno”. Se trata en
esta parte de expresar el motivo de la orden que se emite.
3. Ubicación. Consiste en mencionar la ubicación del elemento al que se refiere. Lo delicado de esto
aparece cuando se trata de un elemento repetido muchas veces, por ejemplo, muros y compuertas.
Por lo reiterativo de la mención de estos elementos es preciso mencionar su ubicación con datos sufi-
cientes para que se puedan localizar sin equívocos (en canales por ejemplo progresivas).
4. Causas del problema. A continuación de la ubicación se tiene que mencionar las causas del pro-
blema, en forma breve pero abarcando con precisión cuáles fueron las causas y refiriendo éstas a la
o a las especificaciones o planos que no fueron observados y cumplidos, por lo cual se motivó el error
o la deficiencia.
Desde luego que para emitir un dictamen es fundamental haber investigado todo lo necesario hasta
tener la plena y absoluta seguridad de escribir en el libro de órdenes lo que es absolutamente cierto.
Habrá ocasiones en que esta investigación obligue al supervisor a consultar al especialista externo, a
los fabricantes o a quienes sea necesario hasta conocer la verdadera causa de la deficiencia y poder
emitir el dictamen.
Estos casos extremos pueden presentarse, pero el proceso de investigación se inicia interrogando al
contratista al respecto y, de no encontrar respuesta satisfactoria, en segunda instancia se recurre al
responsable del proyecto y de las especificaciones, y por último a ayudas externas. Lo realmente im-
portante es encontrar las causas.
5. Solución exigida. El siguiente paso consiste en anotar la solución que debe efectuarse para sub-
sanar el problema. Para esa solución se debe proceder paralelamente y en forma idéntica a como se
indica en el párrafo anterior.
Es preciso anotar en el libro de órdenes todos los datos necesarios para su corrección. De hecho se
debe generar una especificación completa y particular y, si fuese necesario, se hará referencia a las
especificaciones generales de la obra.
6. Plazo para la solución. Inmediatamente después de la solución descriptiva, se establece un plazo
máximo para su ejecución. El plazo determinado debe de ser factible de cumplirse considerando to-
dos los pasos que implica el proceso.
Se recomienda anotarlo señalando una fecha fija. En esta forma se sabrá que para esa fecha el pro-
blema deberá estar resuelto. No se recomienda anotar cantidades al determinar los plazos, decir por
ejemplo: “en 72 horas” o “para la semana próxima”, ya que se obliga a hacer cuentas para saber
cuándo se vence el plazo.
7. Prevención. Se trata sin duda de la parte más importante de la nota de libro de órdenes. Desgra-
ciadamente es la parte que menos se acostumbra considerar al hacer los asientos.
El espíritu que predomina en la acción preventiva del supervisor se fundamenta en la siguiente re-
flexión: “Si se ha encontrado un error o defecto, se ha investigado las causas y determinado una so-
lución para subsanarlo, ¿Por qué no se aprovecha la experiencia y se toman las medidas necesarias
para que no vuelva a presentarse otro caso igual?”. Se ahorrará dinero, se evitarán pérdidas de tiem-
po, no se verá la necesidad de hacer remiendos y se trabajará menos, todo en beneficio directo de la
obra, del propietario, del contratista y del supervisor.
Como se puede constatar, todos los efectos son positivos y sanos. Asentar la parte preventiva de la
nota de libro de órdenes tiene cierto grado de dificultad, debido a que es necesario meditar la forma
en que es más conveniente realizar el trabajo. Esto requiere analizar todo el futuro proceso en busca
de elementos que permitan perfeccionarlo y racionalizarlo.
Asimismo es recomendable consultar al respecto con el residente de la obra. Es él quien finalmente
será el responsable de efectuar las modificaciones preventivas y nada sería mejor que él aceptara de
antemano y que participe en la elaboración de la solución que habrá de dictarse.
Si hubiese alguna falla menor se indicaría diciendo por ejemplo: “Antes de iniciar el vaciado deberán
colocarse tres puntales sobre el eje repartidos proporcionalmente”, o bien, “Antes de iniciar el vaciado
deberán complementar el armado en el cabezal de la pila central”.
Si la falla o carencia fuese mayor y requiriera una nueva revisión antes de autorizar el vaciado (por
ejemplo por faltarle distanciadores al armado de una viga o muro, o por estar incompleta la colocación
de tuberías, o por algún otro asunto de importancia que signifique riesgo sobre la calidad del produc-
to), simplemente no se autoriza por libro de órdenes, sino que se anota en el diario de obra como re-
cordatorio y una vez cumplidos todos los requisitos, entonces se autoriza.
En lo que respecta a las notas de información, el único requisito consiste en iniciar el texto con las
palabras “Se informa”, lo cual sirve para diferenciar e identificar las notas. En estos casos no existe
estructura formal, lo que se hace es simplemente anotar la información.
Disponibilidad. El libro de órdenes estará disponible en las oficinas de obra de la supervisión los
días hábiles de 8:00 a 18:00 horas, excepto los sábados, cuando el horario será de 8:00 a 12:00
horas. Cualquier cambio temporal o definitivo se comunicará por memorando, o en el mismo libro
de órdenes, con 24 horas de anticipación.
Firmas. Todas las notas en el libro de órdenes deberán ser firmadas por ambas partes. La emiso-
ra (indistintamente cualquiera de las partes), como responsable del asiento, y la receptora de ente-
rada o conforme. En caso de inconformidad, se contestará en la siguiente nota. Por lo tanto, se
concede un plazo de 48 horas para firmar. Caso contrario se acepta automáticamente el contenido
del asiento en cuestión, perdiéndose el derecho a la inconformidad o a la aceptación bajo protesta.
Retiro de copias. Las hojas originales del libro de órdenes deberán estar siempre adheridas al
libro. Queda estrictamente prohibido desprenderlas. La primera copia será destinada para el con-
tratante y la segunda para el contratista (puede haber libro de órdenes con más copias, cada una
de las cuales lleva impreso al pie su destinatario).
Los interesados deberán retirarlas una vez que estén completas y firmadas si no se ha cumplido el
plazo de 48 horas (ver párrafo anterior). No se admitirán quejas de ninguna de las partes al no te-
ner en su poder las copias respectivas después de 48 horas de emitido el último asiento.
Inviolabilidad de los asientos. Está prohibido escribir en el libro de órdenes sobre cualquiera de
las notas ya firmadas, aún cuando éstas hayan sido emitidas por el mismo que las altera.
Claridad de las copias. Es responsabilidad de quien escribe una nota en el libro de órdenes cer-
ciorarse de que las hojas de papel carbónico están colocadas correctamente, así como de que
hasta en la última hoja pase con claridad lo asentado. La letra debe ser fácilmente legible.
Instrumentos de escritura. Los asientos en el libro de órdenes deberán hacerse obligatoriamente
con bolígrafo. No se deberá escribir con lápiz.
El hacer el reglamento de libro de órdenes con al menos estas reglas evitará problemas y discusiones
innecesarias. No hay razón para no aprovechar las ventajas que esto representa. Si se invierte un
poco de tiempo al inicio de la obra se pueden evitar dificultades y un ahorro de tiempo que puede su-
mar varias horas al finalizar la obra.
Recomendaciones prácticas para terminar: es conveniente encadenar de alguna manera un bolígrafo
negro al libro de órdenes, hay que destinar un lugar fijo en donde éste puede encontrarse durante el
día (puede mandarse construir una pequeña mesa para ello), y debe tenerse siempre a mano papel
carbónico.
variado de los tipos de obra, solo se citan algunos ejemplos aislados para ilustrar la manera en que
pueden realizarse:
Planillas mensuales. La medición conjunta de los avances se realizará el segundo día hábil de
cada mes, debiendo el contratista hasta 5 días después presentar los borradores de planilla de
avance acompañada de sus respectivos cómputos. La supervisión contará con un plazo de revi-
sión de 5 días hábiles para la devolución de la planilla aprobada, o con las correcciones corres-
pondientes en un memorando anexo. La residencia podrá optar por pasar en limpio la planilla con
las correcciones indicadas, o hacer las reclamaciones en ese mismo momento con objeto de llegar
a un acuerdo final y no retrasar el trámite.
Cómputos de obra extraordinaria. La elaboración de los cómputos que justifiquen obras extra-
ordinarias deberá hacerse en forma conjunta para acelerar su autorización y trámite de cobro. El
contratista se obliga a solicitar por libro de órdenes la revisión con 24 horas de anticipación, men-
cionando qué ítem desea cuantificar. La supervisión se obliga a efectuar la medición conjunta, de-
jando aprobado el ítem al término de la citada revisión. Se aclara que sólo se aceptarán trabajos
autorizados previamente para su ejecución por la propia supervisión.
Revisión de armaduras y hormigonados. Para poder vaciar losas, vigas canal, muros, pilas o
zapatas o cualquier otro elemento de hormigón armado, será necesaria la autorización de la su-
pervisión. Esta se otorgará previa revisión de encofrados y armaduras y la revisión se llevará a
cabo sólo por solicitud en el libro de órdenes, indicando la ubicación precisa del elemento por hor-
migonar. Esta solicitud deberá presentarse con un mínimo de 24 horas de anticipación. La super-
visión se obliga a revisar como mínimo dos horas antes del inicio del vaciado.
Prueba de instalaciones hidráulicas. Una vez terminado un tramo de instalación hidráulica, el
contratista deberá preparar lo necesario para su prueba y avisar con 24 horas de anticipación a la
supervisión, para que ésta asista al momento de cargar la instalación y colocar los manómetros
correspondientes, los cuales no podrán ser retirados hasta que la supervisión misma lo ordene y
certifique por libro de órdenes la aceptación del trabajo.
Se insiste en que estos puntos solo se proporcionan en calidad de ejemplos de la inmensa variedad
de casos que deben reglamentarse. Son las condiciones y las circunstancias de cada obra las que
determinan la extensión del reglamento.
10 Diario de obra
Existen diversas prácticas para implementar el control de la obra. Una de ellas es el diario de obra,
que es un documento interno de la supervisión. A pesar de que en nuestro medio su uso no es muy
común, se recomienda su implementación por la utilidad que puede significar en el control de la obra.
El diario de obra es un instrumento de trabajo de la supervisión en el que se concentra toda informa-
ción relevante referente al desarrollo de un proceso constructivo. En el diario de obra deben quedar
inscritos todos los datos útiles para aclaraciones posteriores.
El diario se utiliza para anotar todos los datos y eventos ocurridos en la obra que sean importantes,
iguales o distintos a los previstos en el proyecto ejecutivo. Lo anotado en el diario carece de carácter
oficial, porque sólo es de uso interno. No es parte del contrato ni sirve directamente para algún recla-
mo legal.
Para el diario de obra se debe utilizar de preferencia una libreta de pastas duras, ya que ésta deberá
resistir el trato duro a que se someterá durante el período de construcción. No necesariamente se
utilizará una sola libreta, su número variará de acuerdo con la complejidad y duración de la obra, así
como al número de supervisores que integren el equipo de trabajo. No es recomendable el uso de
carpetas de argollas con hojas desprendibles, que aunque tienen la ventaja de que se le puede añadir
el número de hojas necesarias, tienen la enorme desventaja de que las hojas pueden desprenderse y
no solo desordenarse, sino también perderse.
Es conveniente utilizar siempre letra clara para las anotaciones, sobre todo si son varios los miem-
bros del equipo de supervisión. No se debe olvidar que cualquier persona debe comprender sin difi-
cultad lo asentado sin necesidad de tener que recurrir al que hizo la anotación, quien bien puede
haber cambiado de puesto o hasta haber abandonado la empresa.
El diario deberá servir también como medio de comunicación entre el supervisor y su coordinador o
gerente de supervisión, otro motivo por lo que es preciso que todo lo anotado sea de fácil compren-
sión.
Los borradores de las notas del libro de órdenes y el seguimiento de todas las notas que no que-
den aún cerradas.
Constancia de actividades de la supervisión, en especial las actividades no regulares. Se habla
por ejemplo del inicio de revisiones encaminadas al establecimiento de un examen especial de los
hormigones debido a que los reportes del laboratorio revelan una tendencia a la baja, o del mo-
mento en que se procede a realizar un inventario del material suministrado por el fabricante. To-
das estas actividades deben quedar asentadas en su momento en el tiempo y en sus alcances.
Ocasionalmente será necesario mencionar la procedencia de orden de ejecución, quienes las lle-
varon a cabo y cuánto tiempo emplearon en hacerlo.
todavía más esporádicamente si los frentes de trabajo se encuentran alejados. Por lo tanto se requie-
re de un medio de comunicación en donde dejar instrucciones por escrito.
Esta práctica de anotar las órdenes tiene la ventaja de contribuir al control eficiente que debe tener el
coordinador con las obras y con el personal de supervisión a cargo de ellas. A los supervisores les
sirve como Manual de trabajo, como efectivo deslinde de responsabilidades sobre las instrucciones
recibidas y de referencia a las fechas en que éstas fueron dadas, lo cual les proporcionará datos para
defenderse si llegasen a requerir aclaraciones.
Cuando por algún motivo el supervisor no se encuentre durante la visita del coordinador, éste solo
necesitará anotar en el diario de obra sus órdenes para hacérselas saber al supervisor. Esta es la
razón por la que el diario de obra deberá estar siempre en la oficina de supervisión, al alcance del
coordinador, pero sin que esto signifique que cualquiera tenga acceso a él.
Por ese mismo conducto el supervisor podrá dejar constancia de su ausencia o de cualquier otro dato
importante del que deba enterarse el coordinador.
Todo aquel asunto que en un futuro pueda representar un tema de discusión, o que su olvido pueda
acarrear consecuencias para cualquiera de las partes o para el buen desempeño de la empresa a la
que se pertenece o los intereses de quien contrata o, más genéricamente, para la buena marcha del
desarrollo constructivo.
En caso de que no se haya realizado aún lo ordenado, se escribirá “Pendiente, pasa a nota número
…” y se pone el número correspondiente al siguiente asiento en que se reclama el incumplimiento.
Este seguimiento, llevado con orden, evita la posibilidad de olvidos cuyas consecuencias se habrán
de lamentar al término de la obra, cuando se esté elaborando la liquidación final.
Las nervaduras de las losas reticulares estén bien alineadas para permitir la colocación adecuada
de los casetones.
En el anclaje de vigas y losas, el acero remate hasta la cara exterior del elemento de borde, previ-
niendo el recubrimiento de hormigón especificado.
En los elementos que continúan de una losa a otra como columnas, muros, pilas, se dejen las es-
pigas suficientes.
Nota:
Si por fuerza mayor se dan instrucciones de parar una obra por tiempo indefinido y se tienen elemen-
tos armados que ya no se vaciarán y que quedarán expuestos a la intemperie, se debe proteger el
acero con pintura o cubrirlo con una lechada de cemento o cuando menos 1 m de distancia de donde
se haya interrumpido el vaciado. Al reiniciar la obra se desprenderá la pintura y en caso de haberse
aplicado la lechada, ésta puede dejarse adherida al acero y así continuar con el vaciado.
También se debe verificar que los remates de muros o columnas vaciadas parcialmente se constru-
yan chaflanes hacia las dos caras con la finalidad de que no se estanque el agua y oxide la base del
acero.
11.2 Encofrados
El supervisor debe verificar que:
El encofrado cumpla con las especificaciones requeridas para dar los acabados indicados en el
proyecto, de no ser así se debe exigir que éste material se cambie.
Se tenga en obra la cantidad necesaria de encofrado de contacto y obra falsa para cumplir con los
volúmenes programados por vaciar.
El material se almacene convenientemente en un sitio donde se proteja de la humedad y el intem-
perismo y donde no se interfiera con el proceso constructivo.
Se aplique desmoldante en cantidades adecuadas para lograr buenos resultados en la textura del
acabado, cuidándose que no se manche el acero de refuerzo. Se debe exigir limpiar el acero
cuando se presente el caso.
Se cuente con extinguidores si se almacenan volúmenes considerables de madera.
Previo al vaciado del elemento de que se trate, estén bien hechas las escuadras, plomadas y dis-
tancias a ejes de referencia, así como el alineamiento y hermeticidad de las juntas. No se deben
permitir “escalones” entre tableros, sobre todo si el acabado es visto.
Los moldes cumplan con las medidas requeridas, estén completos, bien clavados y con la rigidez
suficiente para evitar deformaciones.
Los puntales (obra falsa), se coloquen a plomada, contraventeados y apoyados en rastras sobre
superficie firme.
No se coloquen puntales inclinados ya que comúnmente se ocasionan fallas por flexión, pandeo o
deslizamiento.
No se vacíe ningún elemento estructural, si las holguras o huecos son tapados con bolsas de pa-
pel o algo similar.
En los muros vistos se coloquen los tableros del encofrado en forma modulada para que coincidan
los agujeros (de los separadores y cuñas) con los del siguiente vaciado, con objeto de cuidar el
aspecto y calidad del producto terminado.
Cuando se construyan elementos de luces importantes (por ejemplo puentes acueducto) y los pla-
nos no indiquen contraflechas, se den instrucciones para ello.
11.3 Hormigón
El supervisor debe verificar que:
El contratista proporcione el hormigón cumpliendo con las especificaciones del proyecto.
Se cuente en obra con las dosificaciones aprobadas que resulten de las probetas de prueba ela-
boradas y comprobadas antes de iniciar los vaciados en obra.
El contratista cuente con los servicios de un laboratorio especializado propio o externo (según lo
prevea el contrato), que se encargue del muestreo, curado y prueba de los cilindros.
Si el hormigón se elabora en obra, el contratista tenga un técnico que dirija la dosificación de los
agregados.
Se lleven registros de cada una de las muestras, en el formato preestablecido.
El contratista entregue los resultados de las pruebas de laboratorio en forma oportuna y si es ne-
cesario se tomen correctivos.
Si los resultados del laboratorio no son satisfactorios, se notifique a su jefe inmediato superior para
instruir al contratista los ajustes necesarios y las medidas a tomar con la estructura vaciada.
Cuando se utilice cemento puzolánico tipo IP se especifique en el proyecto el diseño de las mez-
clas, en caso contrario se consultará a gerencia de supervisión.
Si se almacena cemento en la obra, se proteja convenientemente de la lluvia y la humedad del
piso sobre tarimas de madera convenientemente preparadas por encima del piso a por lo menos
10cm de altura para que haya un buena circulación de aire.
Los diferentes tipos de cemento se aceptarán si no sobrepasan los 30 días de edad.
Se vayan utilizando los lotes de cemento, en el orden en el que se van surtiendo.
En los hormigones con acabado visto se utilice cemento de la misma marca y de ser posible del
mismo lote, para minimizar los cambios de color.
Si los agregados que se surten a la obra provienen de bancos de préstamo diferentes a los apro-
bados, se exigirá un estudio de laboratorio y no se utilizará ningún lote hasta obtener los resulta-
dos que definan su aceptación o rechazo.
Cuando los agregados se depositen sobre el terreno natural, no se utilice la capa de material que
esté contaminada con el suelo.
Se cumpla con el tamaño de los agregados y con la entrega de los volúmenes requeridos.
El agua para la elaboración de los hormigones debe ser certificada por un laboratorio externo an-
tes de autorizar su uso.
De ser posible no se autorice el uso de aditivos en el hormigón, a menos que por razones técnicas
se justifique, pero la vigilancia de su manejo será muy estrecha.
De haberse autorizado el uso de un aditivo en el hormigón, se registrará el tipo de aditivo y la can-
tidad usada, así como la ubicación del elemento vaciado y la fecha.
La cantidad de contenido de agua con que se fabricará el hormigón será rigurosamente controla-
da. Un hormigón elaborado con menos agua será más durable e impermeable. En el caso de hor-
migones vistos, una variación de contenido de agua entre bachada y bachada, no solo variará la
resistencia, sino también el color de acabado.
Cuando los hormigones se elaboren en obra en volúmenes considerables es conveniente solicitar
la intervención de un especialista para que defina la proporción de los agregados disponibles en la
localidad y se logre la resistencia de diseño.
Cuando se solicite hormigón premezclado, previo a su descarga en obra, se revisará que cumpla
con las características requeridas (resistencia, tamaño máximo de agregado, revenimiento y hora
en que salió la unidad de la planta, recordándose que no se aceptará un mixer después de 2 horas
de haber salido de la planta hormigonera).
No se elabore el hormigón en forma manual.
Se tomen cuando menos 3 cilindros, o cuantos esté especificado, de diferentes bachadas, para la
prueba a compresión.
Previo al vaciado de un elemento, se revisen las armaduras, el encofrado y las instalaciones que
irán embebidas o que atravesarán el elemento.
Previo al vaciado de algún elemento que aloje tuberías y cajas, se revisará que estén debidamen-
te sujetadas y protegidas para que no penetre el hormigón.
El contratista cumpla con los siguientes requisitos para vaciar:
à Disponga del número suficiente de obreros.
à Cuente con una mezcladora de suficiente capacidad, ya que, aunque se suministre hormigón
premezclado, es bastante probable que se requiera fabricar cantidades suplementarias de
hormigón.
à Se disponga de combustible necesario para los equipos con motor de gasolina.
à Se disponga de dos vibradores como mínimo. De preferencia uno eléctrico y otro de gasolina,
en prevención de alguna interrupción eléctrica al momento de vaciar.
à Si se recurre a hormigón bombeado, la bomba debe estar presente con suficiente anticipación
y haberse realizado el tendido de su tubería con sus respectivos apoyos, para proteger el enco-
frado y las armaduras. Esto no será necesario, cuando las bombas vengan integradas a los ca-
rros mixer.
à Se disponga de líneas provisionales de iluminación cuando se programe el vaciado fuera de las
horas de luz natural.
El curado de vapor se iniciará entre 3 y 5 horas después de vaciado el hormigón, teniendo que
alcanzar en 3 horas, una temperatura entre 66 y 82 ºC, esto es, a una velocidad de 22 a 33 ºC/h.
Es importante no rebasar estos límites ya que se producirían efectos negativos en la resistencia
del hormigón. Para su vigilancia, se tendrá acceso a los instrumentos de medición y a los registros
de la empresa que proporcione el servicio. Para decidir el momento del desencofrado, se basará
en los resultados de los cilindros ensayados paralelamente al curado. Por lo general se alcanza la
resistencia requerida a las 7 horas de iniciar el curado a vapor.
Al desencofrar con curado a vapor o con curado normal se dejen apuntaladas las vigas y losas
hasta que cumplan la edad en que alcancen la resistencia de diseño.
El contratista desencofre vigas y losas a los 14 días (dejándolas apuntaladas hasta los 28 días),
columnas y muros a los 2 días al utilizarse cemento normal. No se aceptará que se desencofre
prematuramente alegando que se frenaría el avance de obra. Nuevamente se hace hincapié en la
necesidad de revisar si el contratista está cumpliendo con la cantidad de encofrado que se requie-
re en obra de acuerdo con el programa de vaciado (movimiento y número de usos de encofrado).
No se desencofre ningún elemento, sin que la supervisión autorice.
tos necesarios (no debe haber contacto entre piedra y piedra ni con el encofrado), luego una
capa de hormigón hasta que desparezca la piedra y se procede con el vibrado de la capa. Una
vez nivelada la capa proceder con una nueva, hasta llegar a la capa superior, donde la piedra
debe estar recubierta de hormigón. Las distancias entre piedra y piedra no debe ser menor a
25 mm.
à El encofrado debe mantenerse por lo menos 48 horas o según lo indiquen las especificaciones
técnicas.
à Después del desencofrado se debe proceder al curado del hormigón.
berá rellenar con material seleccionado y compactar en debida forma las demás capas hasta re-
llenar completamente la zanja.
Comprobar que los accesorios como Tees, Válvulas y Codos tengan sus correspondientes anclajes o
apoyos de hormigón.
11.6.2 Limpieza:
En los bancos de préstamo, en el emplazamiento de la presa y sus estructuras principales. El es-
pesor de esta capa será el indicado en los planos o será definido por el SUPERVISOR en función
del espesor de la capa vegetal. Al inicio de los trabajos propiamente de limpieza, es de importan-
cia como base de partida para referencia de futuros cómputos de actividades dependientes, efec-
tuar el levantamiento del terreno original incluyendo todos los detalles necesarios de tipo de cober-
tura vegetal, accidentes topográficos, tipo de suelo, etc.
11.6.3 Excavación:
El fondo de cimentación se limpiará removiendo todo cuerpo extraño, como ser raíces, hierbas,
piedras grandes o material lodoso hasta alcanzar una profundidad que reúna las condiciones por-
tantes asumidas en el diseño y será preparado acondicionándolo de tal forma que pueda estable-
cerse una unión perfecta entre la obra y el subsuelo.
En la superficie de cimentación todas las grietas y depresiones deben ser cuidadosamente limpia-
das.
11.6.4 Fundación:
Las presas pueden estar fundadas en diversos tipos de suelos ya sean éstos cauces de río (fon-
dos rocosos o con depósitos aluviales de mezclas de materiales granulares y finos) u otros.
En suelos no rocosos se debe verificar la capacidad portante del terreno de fundación, por ejemplo
mediante ensayos de SPT (Standard Penetration Test), si los resultados de capacidad portante no
cubren las demandas de soporte, con los factores de seguridad requeridos, se precompacta el
suelo de fundación.
La profundidad de excavación estará sujeta a las características encontradas en el subsuelo. de
fundación, se retiran todos los materiales no aptos, tales como bolsones de materiales orgánicos,
permeables, blandos y saturados y se procede al cambio de material.
11.6.5.2 Materiales
En la construcción de las presas se emplean materiales de suelos finos a granulares para el cuerpo
de presa, materiales de filtro para los elementos de drenaje ó transiciones de protección (taludes) y
pedraplenes para los recubrimientos de taludes.
Las cortinas de terraplenes compactados pueden ser de secciones homogéneas (un solo material)
o zonificadas en base a un núcleo de material impermeable y espaldones con materiales más
permeables.
Como medida de control de las filtraciones por el subsuelo, también se consideran aguas arriba
del pie de la presa tapices de material fino y delantales aguas abajo.
Verificación en laboratorio de las características de los materiales de los materiales suministrados
para la construcción del terraplenado del cuerpo de presa.
Todos los ensayos y controles deberán realizarse de acuerdo con las estipulaciones del Contrato y
según las instrucciones ó requerimientos del SUPERVISOR, quien aprobará o rechazará el resul-
tado de los mismos.
Compactación de taludes:
Es un aspecto muy delicado que no hay que descuidar, de no existir un equipo especial para compac-
tar superficies inclinadas, se debe controlar estrictamente de disponer sobre-anchos compactados y
efectuar los perfilados únicamente para un colocado inmediato de los recubrimientos de talud (p.e.
rip-rap).
Materiales filtrantes
Usado principalmente como elemento de drenaje en el dren basal en el pie de talud aguas abajo ó
como capa de transición entre materiales finos y gruesos, de este modo en este último caso se co-
loca este material en los taludes de la presa antes del revestimiento de piedra (rip-rap).
La granulometría de los materiales para filtros gruesos, finos, ó combinados deberá corresponder
a las exigencias establecidas en los planos de licitación correspondientes.
Estos suelos son inherentemente sueltos y permeables, el material se colocará en capas horizon-
tales uniformes de espesor no mayor a 30 cm y se acomodará con rodillos vibratorios el número
de veces que sea requerido, según los ensayos a realizar, manteniendo húmedo el material filtran-
te durante el proceso de compactación.
11.6.5.4 Rip-rap:
Es una alternativa de protección de los taludes de las presas de tierra, para evitar su deterioro ya sea
por efecto de las erosiones de las lluvias ó el oleaje de las aguas de embalse.
Las piedras son colocadas manualmente en forma de mampostería seca cuidando las trabazones y
calidad de acabado superficial, las juntas deben ser rellenadas completamente con piedras menores.
Se manejan espesores de 30 a 50 cm. Por otro lado se debe cuidar la calidad y forma de las piedras,
se recomiendan piedras sin grietas ni estructura laminar, duras y de formas cuboides.
Para el material de transición entre el rip-rap y los taludes de la presa, sí el material local disponible
(filtro) no cumple con las condiciones de filtros, se evalúa la alternativa de emplear membranas geo-
textiles.
11.6.6 Equipos
La capacidad, estado, condiciones de operación y cantidad de los equipos deben garantizar en todo
momento la buena ejecución de los diversos trabajos.
El número se define mediante pruebas de campo para cada actividad (excavación, transporte,
compactación, etc.) y en función a la disponibilidad del área de trabajo y los rendimientos que se
quieren lograr y garantizar los niveles de compactación requeridos.
Se determinarán: espesor de capas, número de pasadas, humedad óptima etc..
Se debe contar con equipo en stand-by.
A título de ilustración, la maquinaria y equipo mínimo requerido para la ejecución de los terraplenes
compactados de las Presas puede ser el siguiente:
Tractores de 200 a 285 HP
Cargadores frontales de.2.4 m3
Rodillos vibratorios de compactación tipos liso y pata de cabra (de 30 t)
Excavadores y retroexcavadoras de 62 HP, 0.34 m3
Volquetes de 8 a 12 m3
Camiones cisterna de 10.000 litros
Para reducir la pérdida de lechada al mínimo, preferiblemente habilitar como mínimo 5 packers
simples en una fila.
Los tramos por inyectar no deben pasar los 3 metros de longitud para permitir una impermeabili-
zación óptima.
Según las normas internacionales (europeas, americanas) el macizo rocoso es denominado como
“impermeable” si en todos los tramos de investigación del pozo de control, los valores Lugeon es-
tán por debajo de los 5 Lugeones para presas de hormigón y por debajo de 3 Lugeones para pre-
sas de tierra.
ANEXOS
ANEXO 5.1
PLANILLA TIPO
1/2
CONTRATANTE: Pág. 01 de nn
PROYECTO:
RESUMEN CERTIFICADO DE AVANCE N¼:
PERIODO del: a FECHA DE CONTRATO:
OBRA: PLAZO DE EJCUCION DE OBRAS (DIAS):
CONTRATISTA: FECHA DE INICIO:
LICITACION N¼ AMPLIACION PLAZO A LA FECHA (DIAS):
CONTRATO Nº FECHA DE CONCLUSION:
VALORES MONTOS EJECUTADOS
PARTIDA DESCRIPCION ANTERIOR ACTUAL ACUMULADO SALDO OBSERVACIONES
CONTRACTUALES
[USD] % [USD] % [USD] % [USD] %
SUMAS
CONTRATANTE: Pág. ii de nn
PROYECTO:
CERTIFICADO DE AVANCE N¼:
PERIODO del: a FECHA DE CONTRATO:
OBRA: PLAZO DE EJCUCION DE OBRAS (DIAS):
CONTRATISTA: FECHA DE INICIO:
LICITACION N¼ AMPLIACION PLAZO A LA FECHA (DIAS):
CONTRATO Nº FECHA DE CONCLUSION:
VALORES CONTRACTUALES VOLUMENES EJECUTADOS MONTOS EJECUTADOS EN USD AVANCE
ITEM DESCRIPCION UNIDAD P.U. TOTAL FISICO OBSERVACIONES
CANTIDAD ANTERIOR ACTUAL ACUMULADO ANTERIOR ACTUAL ACUMULADO
USD USD %
R bricas y sellos: V B
DIRECTOR DE OBRA SUPERVISION FISCALIZACION
Empresa Contratista Empresa Consultora Entidad Contratante
ANEXO 5.2
Hoja 1 de 1
OBRA: LOTE:
CONTRATISTA: SUPERVISOR:
INSPECTOR: FECHA:
FRENTE:
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
FRENTE:
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
REGISTRO DE ACTIVIDADES:
VOLUMEN MATERIALES EN
DESCRIPCION TRAMO
N¼ EJECUTADO OBRA UNIDAD CANTIDAD
DE A
FRENTE:
FRENTE:
FIRMA