LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA LX

CAMPUS: TOLUCA

ANÁLISIS DE LIBRO:
“DISRUPCIÓN, MÁS ALLÁ DE LA INNOVACIÓN”

ALUMNAS:
ALINE DANIELA ORTIZ RANGEL
CINDY VALERIA HERNÁNDEZ HERRERA

MATERIA:
INNOVACIÓN

PROFESOR:
CESAR JUÁREZ CHÁVEZ

FECHA
09/JUNIO/2023
En un mundo en constante evolución, donde el mundo digital y la innovación son
los principales impulsores del cambio, mantenerse actualizado y abrazar la
disrupción se ha vuelto esencial para el éxito empresarial. La capacidad de
adaptarse a las nuevas tendencias, aprovechar las oportunidades emergentes y
salir de la zona de confort se ha convertido en un factor determinante para el
crecimiento y la supervivencia de las organizaciones. En este trabajo, exploraremos
en mayor profundidad la importancia de la disrupción en los emprendedores y cómo
mantenerse en este proceso de evolución, integrando la tecnología en los productos
y en la gestión del negocio que nos permite no solo mejorar, sino transformar el
negocio.
En primer lugar, es crucial comprender qué significa la disrupción en el contexto
empresarial. La disrupción implica un cambio radical en la forma en que se
desarrollan y entregan los productos y servicios, alterando los modelos de negocio
existentes; Empresas como Uber, Airbnb y Netflix son ejemplos claros de
disrupción, ya que revolucionaron los sectores del transporte, la hospitalidad y el
entretenimiento, respectivamente. Estas empresas desafiaron las normas
establecidas y aprovecharon la tecnología para crear un cambio repentino con
nuevos modelos de negocio que transformaron por completo sus respectivas
industrias y reinventaron el mercado.
La disrupción no solo cambia las reglas del juego, es un conjunto de la combinación
de varios descubrimientos, que también genera nuevas oportunidades para
aquellos que están dispuestos a arriesgarse. En un entorno altamente competitivo,
las empresas que se resisten al cambio corren el riesgo de volverse obsoletas y
perder relevancia en el mercado. Por otro lado, las organizaciones que buscan
activamente nuevas formas de hacer las cosas y se mantienen actualizadas en
innovación, digital y tecnología tienen la capacidad de identificar y aprovechar
nuevas oportunidades antes que sus competidores. Estas empresas se anticipan a
las necesidades cambiantes de los consumidores y ofrecen soluciones innovadoras
que les permiten destacarse en el mercado y mantener una ventaja competitiva.
Oliver Wendell Holmes, "Cuando la mente se abre a una nueva idea, nunca más
regresará a su estado anterior", resume perfectamente la mentalidad que las
empresas deben adoptar para prosperar en un mundo disruptivo. Mantener una
mentalidad abierta hacia nuevas ideas y tecnologías es fundamental para impulsar
la innovación dentro de una organización. Lo que refiere estar siempre alerta a los
cambios, poder anticiparse, visualizar nuevos escenarios, tendencias, salir de la
zona de confort, cuestionar el status quo y estar dispuesto a experimentar y
aprender de los fracasos. Las empresas que se aferran a viejas formas de hacer las
cosas y se resisten a la disrupción corren el riesgo de perder oportunidades valiosas
y quedar en el olvido.
Como empresario y/o emprendedor se debe apropiar este rol y resolver los
problemas que el consumidor hoy en día no sabe que tiene, es decir que
desconocen que podrían adquirir algo mejor. Por eso es de suma importancia perder
el miedo a equivocarse, arriesgarse, cuestionar las creencias viejas que se tienen,
romper con los paradigmas tradicionales, enfrentar la incertidumbre y observar las
nuevas posibilidades.
Tenemos el ejemplo con el ferrocarril, antes de su invención un caballo era lo más
veloz que existía en el mundo. Pasamos del caballo, que corre a 48 km en promedio,
al ferrocarril, a 140 km. Ésa sí fue una gran disrupción. Fue una nueva forma de
viajar y un nuevo modelo de negocio.
Además de salir de la zona de confort y mantener una mentalidad abierta, las
empresas también deben invertir en la adquisición de conocimientos y habilidades
relevantes. La capacitación continua y el desarrollo de talento son aspectos clave
para mantenerse actualizado en los avances tecnológicos y las mejores prácticas
empresariales. Esto puede implicar la contratación de expertos en tecnología, la
participación en programas de educación ejecutiva o la colaboración con startups y
empresas innovadoras. Al cultivar una cultura de aprendizaje y desarrollo, las
empresas fomentan la innovación y preparan a su personal para enfrentar los
desafíos de la disrupción.
También implica incorporar la innovación abierta dentro de la empresa, esto
refiere invitar a personas que no son parte de la empresa para que contribuyan con
nuevas ideas; pueden ser estudiantes, creativos, investigadores o inventores.
Muchas veces las disrupciones emergen de quienes no están involucrados en el
negocio.
La innovación disruptiva se consigue cuando se instaura una cultura colaborativa
en las áreas de la empresa. La historia nos ha comprobado que la
complementariedad de distintas habilidades y el compromiso por un mismo objetivo
construye resultados revolucionarios.
El principal detonador ha sido el gran avance tecnológico y el internet es otro
componente fundamental para generar nuevas ideas disruptivas. La adopción de
tecnologías digitales puede mejorar la eficiencia operativa, agilizar los procesos
empresariales, transformar la infraestructura de las organizaciones, puestos y
funciones y ofrecer mejores experiencias a los clientes. La automatización, el
análisis de datos, la inteligencia artificial y el aprendizaje automático son solo
algunas de las tecnologías que están transformando la forma en que se hacen los
negocios. Ignorar o subestimar el poder de la tecnología digital puede ser perjudicial
para una empresa en el largo plazo. Aquellas organizaciones que se mantienen
actualizadas en las últimas tendencias tecnológicas y las aplican de manera
estratégica pueden obtener una ventaja competitiva significativa y mejorar su
capacidad para adaptarse a un entorno empresarial en constante cambio.
La clave está en modificar la mente e integrarse lo antes posible para comprender
cómo los productos y servicios se fusionan y logran una disrupción para dar al
consumidor algo que nunca antes había probado. Se necesita crear lo que no existe,
estimulando la creatividad con la capacidad de asociación y capacidad de síntesis
teniendo pensamientos divergentes que nos permitan ver todos los puntos y percibir
de distinta forma la realidad integrando las tendencias del mercado, las necesidades
de los consumidores, las nuevas tecnologías para así crear algo relevante y distinto.
Existen elementos que generan ideas disruptivas, como son los problemas que se
redefinen todo el tiempo y son oportunidades ocultas para presentar al mercado un
producto atractivo, se debe pensar cómo hacer más fácil la compra, su pago, tener
el servicio para los clientes y generar una estrategia disruptiva que elevará la
motivación de compra y las probabilidades de éxito serán mayores. Otro elemento
que genera disrupción es en lo que no existe, se busca un nuevo producto o servicio
revolucionario que a nadie antes se le había ocurrido. Al igual que cuando cambias
algo ya existente, estas ampliando los márgenes del producto y por lo tanto del
mercado.
Debemos recordar que innovar es un acto de fe, y cuando inicias una idea obtienes
una ventaja competitiva y una imagen de marca. Steve Jobs: “las condiciones se
crean, no se te dan”
En resumen, la importancia de la disrupción en los negocios radica en la capacidad
de adaptarse y transformarse a un entorno en constante cambio y aprovechar las
oportunidades emergentes. Mantenerse actualizado en innovación, digital y
tecnología, y salir de la zona de confort, son requisitos indispensables para alcanzar
nuevas y mejores oportunidades. Para ser un disruptor y que una empresa tenga
un crecimiento exponencial, se debe tener una mente de abundancia y pensar en
ambientes que complementen tu estrategia.
El objetivo es hacer la vida de los consumidores más fácil, diseñando productos y/o
servicios que mejoren su vida, implementando la tecnología no sólo para el producto
que lanzan, sino para la gestión del negocio en todas sus áreas. Por lo tanto, las
empresas deben fomentar una cultura de innovación, invertir en el desarrollo de
talento y abrazar la transformación digital para posicionarse en la vanguardia de la
disrupción y asegurar su éxito a largo plazo. Solo aquellos dispuestos a adaptarse
y evolucionar pueden navegar exitosamente en el mundo empresarial cambiante de
hoy.
Bibliografía
Borghino, M. (2018). Disrupción más allá de la innovación. Grijalbo.