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Tarta casita de Navidad

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23 de noviembre de 2021

Esta tarta casita de Navidad es una cucada la mires por donde la mires: bizcocho de
chocolate relleno de crema de mascarpone y caramelo salado, adornado con ganache de
chocolate y galletas de jengibre, éxito seguro estas Navidades.

Inspirada en esta idea, consta de base y paredes de bizcocho de chocolate que hemos
preparado en forma de plancha con un excelente molde rectangular profesional. Pero
exceptuando este molde, casi toda la casita se puede hacer sin utensilios muy especiales,
salvo el cortador de corazón para adornar.

Como siempre os aconsejamos, esta tarta es laboriosa porque lleva varias elaboraciones
diferentes, además de la decoración final, pero todo se hace mucho más llevadero si te
planificas y divides la preparación en varias fases; los bizcochos los puedes tener
preparados, cortados y congelados, bien envueltos. La crema interior se puede preparar y
montar la casita en primera fase y congelar igualmente, para acabar poniendo la cobertura y
las decoraciones el último día.

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Receta de tarta casita de Navidad

Ingredientes:

Bizcocho de chocolate

210 g de azúcar blanquilla


130 g de harina de repostería
60 g de cacao en polvo
3/4 cdta. de levadura química
1/2 cdta. de sal
175 g de mantequilla ablandada
3 huevos L a tª ambiente
150 g de yogur griego

Galleta de jengibre para detalles de la casita

220 g de harina de repostería


80 g de mantequilla ablandada
80 g de miel
60 g de azúcar moreno
1 cdta. de especias para speculoos
1 pizca de sal
1-2 cdtas. de leche

Glasa real para las galletas

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1 clara de huevo (unos 35 g)
200 g de azúcar glas
Un poco de leche

Relleno de crema de mascarpone y caramelo salado

500 g de queso mascarpone


200 g de azúcar
80 g de mantequilla
120 g de nata líquida (mínimo 35% m.g.)
1/2 cdta. de sal
1/2 cdta. de especias para speculoos
200 g de nata líquida para montar
Estabilizante para nata

Ganache de chocolate para cobertura

250 g de cobertura de chocolate negro


180 g de nata líquida (mínimo 35% m.g.)

Acabado

Sprinkles de Navidad
Perlas rojas
Azúcar glas

Elaboración:

Bizcocho de chocolate

Pesamos todos los ingredientes en la báscula. Tamizamos en un bol la harina de


repostería con la levadura química y el cacao en polvo. Añadimos el azúcar, la
sal y las especias. Mezclamos.
Añadimos la mantequilla ablandada y mezclamos con pala en el robot hasta
obtener una mezcla arenosa. Con la máquina en marcha, agregamos los huevos
a temperatura ambiente de uno en uno, hasta homogeneizar.
Agregamos el yogur griego y batimos unos segundos hasta homogeneizar.

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Vertemos la masa en el molde forrado con papel de horno, nivelamos la
superficie y cocemos en el horno 25 minutos, hasta que esté hecho en el
centro, lo que comprobaremos introduciendo una brocheta.
Sacamos el molde, desmoldamos levantando el papel y pasamos el bizcocho a
una rejilla. Dejamos enfriar por completo. En este punto podemos envolver bien
los bizcochos en plástico y continuar al día siguiente o incluso congelarlos
para más adelante,
Para montar la casita tenemos que cortar este bizcocho correctamente. Primero
afeitamos un poco los bordes para dejarlos rectos, si no estuvieran perfectos.
Medimos el ancho, que con nuestro molde ronda los 21 cm, y cortamos un
cuadrado. Nos quedará un rectángulo de 21 cm de largo que nos servirá como
base de la casita.

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El cuadrado lo cortamos en diagonal, obteniendo dos triángulos iguales, que
serán la fachada y la trasera de la casita. Cortamos los picos de los triángulos
para dejar las porciones de bizcocho a la medida de la base, como se ve en la
foto anterior. Reservamos los tres pedazos de bizcocho, tapados con plástico.

Relleno de mascarpone y caramelo salado

Pesamos en la báscula todos los ingredientes del relleno.


Ponemos el azúcar en un cazo o sartén. Calentamos a fuego fuerte hasta que
empiece a caramelizar; giramos el cazo para que se mezclen las porciones
caramelizadas con las que aún están blancas, hasta que todo esté homogéneo.
Cuando tenga todo un color ámbar oscuro, agregamos la mantequilla y
mezclamos hasta que la grasa se combine con el caramelo.

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Añadimos la nata con cuidado, porque la salsa chisporroteará. Removemos con
una espátula hasta obtener una salsa de caramelo suave, en aproximadamente
un minuto. Apagamos el fuego y agregamos la sal. Dejamos enfriar por
completo; espesará bastante. Mezclamos con el queso mascarpone hasta
obtener una crema suave y agregamos las especias.
En otro bol, montamos los 200 g de nata líquida hasta que esté semimontada;
añadimos un poco de estabilizante para nata, acabamos de batir y mezclamos
esta nata con la crema de mascarpone y caramelo, con una espátula y
movimientos envolventes.

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Ponemos las tres porciones de bizcocho sobre una bandeja con papel de horno
y aplicamos la crema sobre uno de los laterales de la casita, siguiendo la misma
forma. Colocamos en perpendicular, de pie, la base de la casita, que se pegará a
la crema.
Alisamos la crema con una espátula acodada por los laterales, siguiendo el perfil
de la casita, y colocamos encima el otro lateral, como se ve en la foto siguiente.

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Alisamos de nuevo la crema por los laterales. Si nos ha sobrado un poco de
espesor de la base, la cortamos a ras del lateral. Tapamos la casita con plástico
y la llevamos a la nevera para que la crema se ponga firme.

Galletas de jengibre

Una vez que sabemos la medida exacta de la base de bizcocho de la casita,


podemos preparar las galletas de jengibre, pues haremos una base de galleta a
esa misma medida. Pesamos todos los ingredientes en la báscula. En un bol,
montamos la mantequilla ablandada con el azúcar moreno (con la pala si
usamos robot) hasta que esponje y blanquee. Agregamos la miel y mezclamos.
En otro bol ponemos la harina de repostería con las especias y la sal, y
mezclamos con varillas. Agregamos a la mezcla de mantequilla y mezclamos
hasta obtener una masa blanda, pero manejable. Si estuviera demasiado seca
podemos agregar un poco de leche.

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Dividimos la masa obtenida en dos porciones; ponemos una porción sobre un
papel de horno, colocamos otra hoja de papel encima para que no se pegue la
masa y estiramos la masa con rodillo hasta un grosor de unos 3 mm, mejor con
un rodillo graduado. Ponemos la lámina sobre una bandeja de horno y la
metemos en la nevera para que adquiera firmeza, por lo menos una hora.
Hacemos lo propio con la otra mitad de la masa.
Cuando la masa esté firme, cortamos en una de las porciones de masa estirada
una base para la casita, de la misma medida que el bizcocho de base (en
nuestro caso, de unos 21 cm x 9 cm), más varias tiras que cortaremos en
rectángulos para el tejado. En la segunda porción de masa cortaremos más
rectángulos para el tejado, dos ventanitas, una puerta y varios corazoncitos de
adorno con este cortador.

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Retiramos la masa sobrante y cocemos en el horno 10 minutos a 175 ºC.
Sacamos a una rejilla sobre el papel de horno y dejamos enfriar.

Cobertura de ganache

Pesamos en la báscula los ingredientes de la ganache. Ponemos el chocolate en


un bol y calentamos la nata aparte, hasta que casi hierva. La vertemos sobre el
chocolate y dejamos reposar dos minutos. Después, removemos con cuidado
con unas varillas y mezclamos hasta que el conjunto emulsione. Dejamos
templar un poco, hasta que esté suficientemente espesa para aplicarla a la
casita.

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Montaje final de la casita

En primer lugar, recuperamos la casita de la nevera. Untamos algo de ganache


en el rectángulo grande de galleta, colocado sobre papel de horno, y ubicamos
encima la casita, centrándola bien.

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Con espátula, vamos aplicando una capa de ganache al tejado y a los laterales
de la casita, cubriendo bien. Antes de que se solidifique la ganache,
colocamos las tejas de galleta en el tejado y las ventanas, la puerta y el
corazoncito en la fachada, apretando ligeramente para que se peguen a la
ganache. Podemos pasar el conjunto a un cake drum para manejar mejor el
pastel, usando una pala de tartas. Devolvemos la tarta a la nevera un ratito.

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Decoración con glasa

Ponemos la clara en un bol y agregamos el azúcar glas pasado por un colador o


tamiz. Mezclamos a velocidad baja, rebañando las paredes con la espátula, y
después subimos la velocidad para batir hasta que la glasa blanquee y adquiera
una consistencia similar a pasta de dientes. Si queda muy dura, añadimos algo
de leche.
Pasamos la glasa real a una manga pastelera desechable y cerramos. Cortamos
el pico de la manga dejando un agujero pequeño y decoramos las ventanas y la
puerta como se ve en las fotos. Dejamos que la glasa se endurezca del todo.

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Hacemos cordones de glasa bajo el alero del tejado, sobre la cumbrera y sobre
el dintel de la puerta y las ventanas. Decoramos con sprinkles en forma de bolas
rojas y hojitas de acebo, si es necesario, usando unas pinzas, antes de que la
glasa se seque por completo.

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Untamos un poco de la ganache sobrante en la parte baja de la fachada
(podemos templar una porción en el microondas) y aplicamos sprinkles de
Navidad. Dejamos que se solidifiquen la ganache y la glasa.
Para servir la tarta, espolvoreamos el tejadillo con azúcar glas, como si fuera
nieve. Y listo.

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Fijaos en qué mesa de lujo podéis montar con esta tarta casita de Navidad con su
lindísima decoración navideña y servida sobre un stand color mostaza con nuestros platos y
tazas.

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