Está en la página 1de 4

AUTOESTIMA Y COMUNICACIÓN

La comunicación: La comunicación es la acción de intercambiar información, ya sea


entre dos o más personas, teniendo como fin la transmisión y la recepción de
informaciones que puede ser de manera verbal o no verbal o también se puede
presentar de manera escrita. La persona (o personas) que envía la información es el
emisor, y el que la recibe es el receptor.

La autoestima: La autoestima es el sentimiento valorativo de nuestro ser, de nuestra


manera de ser, de quienes somos nosotros, del conjunto de rasgos corporales mentales,
físicos y espirituales que configuran nuestra personalidad. La autoestima básicamente
es un estado mental. Es el sentimiento positivo negativo de nuestro ser. La cuál se
aprende cambia y la podemos mejorar y se basa en todos los pensamientos,
sentimientos, sensaciones y experiencias que sobretodo nosotros mismos hemos ido
recogiendo, asimilando e interiorizando durante nuestra vida.

Cada persona en su interior crea un reflejo o una imagen de sí misma, donde se refleja
la idea de cómo nos vemos nosotros mismos, de quienes somos como persona y cuan
valiosos somos respecto a otros.

Esta imagen que hemos creado puede corresponder o no con nuestra realidad, si no
que va a ser un punto de referencia con respecto a cómo nosotros nos vemos o nos
relacionamos en la sociedad; va a ser como nuestra base para tomar nuestras
decisiones, y nuestra guía para comunicarnos y relacionarnos con los demás.

La autoestima y la comunicación: Estos dos temas están muy relacionados. Porque


cuando nos comunicamos debemos tener autoconfianza para saber comunicar de una
buena manera lo que realmente queremos transmitir. La forma en que nos expresamos
y la manera de comunicarnos que utilizamos están determinada por nuestra
autoestima. Porque dependiendo de si nos sentimos bien o mal con nosotros
mismos nos comunicaremos con mayor o menor confianza respectivamente.

Como ya se sabe el ser humano es un ser social por naturaleza. En este sentido, para
conseguir el éxito en cualquier ámbito de la vida, bien sea relacionado con el ámbito
personal, laboral, académico o con el profesional, una de las principales claves reside
en la comunicación. Ya que las relaciones humanas tienen mucho que ver con la
felicidad y la personalidad de cada persona. Nuestra forma de ser influye de manera
significativa a la hora de conectar con otras personas, y es acá donde la
autoestima juega un papel fundamental. Porque esto influye en prácticamente cada
aspecto de la vida o toma de decisión que realizamos y, por supuesto, en la forma en
la que nos relacionamos e interactuamos con el resto de individuos de la sociedad. Ya
que el querernos a nosotros mismos, aprender a amar nuestro cuerpo, reconocer
nuestros defectos; así como nuestras virtudes, que debemos potenciar y fortalecer
para mejorar cada día, pues todo esto es necesario para prosperar en el ámbito social.

Los problemas de comunicación entre las personas son a menudo considerados como
la fuente de los problemas de autoestima. El autoestima inicia en una persona desde su
infancia y pues acá influye mucho la familia, porque los que son criados en familias que
se comunican las emociones y las expresan de una manera saludable se cree que son
más seguros de sí mismos y más independiente en el mundo cotidiano, estas personas
pueden mantener relaciones valiosas con amigos, familiares, compañeros de trabajo;
debido a su sólida fluidez de comunicación y confianza en sí mismos.

El nivel de autoestima es variable a lo largo de nuestra vida. La autoestima es uno de


los factores más importante de nuestro crecimiento personal y bienestar emocional.

Según tengas la autoestima alta o baja te comunicaras de una u otra manera con el
mundo:

Comunicación con autoestima baja:

Una persona con autoestima baja piensa que no es importante, piensan que no pueden,
que no saben nada, que no lo van a conseguir y tienen dificultades para comunicarse.
Las personas con baja autoestima no se atreven a manifestar sus verdaderos
pensamientos, sentimientos o deseos. Suelen utilizar una comunicación poco directa,
porque no son capaces de transmitir lo que piensan realmente. La comunicación con
ellos suele ser complicada porque no se obtiene un feedback adecuado. (Es la
capacidad que tiene una persona para dar una respuesta a algo de una forma analizada
o evaluada, de acuerdo a la información recogida).

En el trabajo las personas con autoestima baja suelen tener problemas de comunicación
con sus compañeros o jefes. Se suelen sentir frustrados porque no son capaces de
mantener una comunicación fluida y se culpan por ello. Tanto que pueden adoptar un
tipo de comunicación pasiva, como también pueden optar por una comunicación
agresiva, porque les cuesta hacer valer su opinión. Entonces pueden tanto ceder en
algo como que otras veces lo pretenden ganar por la fuerza. No confían en ellos mismos,
se rinden rápidamente y no afrontan los problemas que pueden surgir en una
conversación y se callan, como, al contrario, se enfrentan de manera excesiva y sin
concordancia.
Se cree que los que sufren de baja autoestima, desde una edad temprana, no tuvieron
relaciones o interacciones enriquecedoras en la sociedad a través de su medio ambiente
y las interacciones que tenían con los demás. Porque si no podemos controlar o manejar
nuestra autoestima para poder comunicarnos, vamos a tener problemas, ya que un ser
humano al no poder liberar completamente sus cargas emocionales, le va a afectar y
todo esto le puede conducir a la ansiedad y el estrés, así como el deseo de retirarse de
las interacciones sociales.

Comunicación con autoestima alta: Las personas con autoestima alta son capaces
de afrontar con mayor facilidad cualquier tipo de adversidad que se les presente.

Las personas con alta autoestima utilizan una comunicación fluida, con un lenguaje
amplio y seguro, que busca la participación del resto de personas presentes que están
interactuando. Les gusta participar de las conversaciones mostrando lo que piensan y
sienten porque valoran su opinión y consideran que sus palabras y opiniones son
importantes. Utilizan un lenguaje directo y dirigen la conversación hacia los aspectos de
los que quieren hablar, sin dejarse llevar por la opinión de los demás. Tienen fe en sus
palabras y las saben transmitir.

La seguridad en uno mismo, las emociones equilibradas y el saber gestionar las


relaciones de forma asertiva parten de la propia valoración y del autoconcepto. Nos
influyen en cómo sabemos expresar nuestras necesidades o si somos coherentes
al hablar desde nuestros valores. Esto engloba un tipo de comunicación específica
que diferencia a personas con alta autoestima de aquellas que la tienen baja.

Por lo tanto, seamos consciente del valor de la autoestima, debemos reconocer y


aceptar nuestras fortalezas, capacidades, debilidades y defectos, pues esto nos ayuda
a confiar en nosotros mismos y saber que somos capaces de lo que nos propongamos.
Porque si yo me siento bien conmigo misma me voy a relacionar y comunicar bien
con los demás.

La autoestima en los niños: Los niños con autoestima alta se sienten confiados
y capaces de lograr lo que quieren. Se valoran a sí mismos y a sus habilidades. Se
sienten orgullosos de las cosas que pueden hacer y quieren dar lo mejor de sí.
También al tener una autoestima alta ellos se comunicaran mejor, porque se les
hará más fácil expresar lo que sienten y lo que quieren transmitir a los demás.

Recomendaciones para fomentar la autoestima en los niños:

1. Poner atención al ambiente que rodea al niño o niña.


2. Mantener la calma cuando sea necesario corregirlo y no utilizar un lenguaje
descalificador y agresivo.
3. Cuando el niño o niña logre algunas de sus metas, se debe expresar orgullo de él
de lo que ha logrado.
4. Servirles de ejemplo. Por qué los niños aprenden más de lo que ven que de lo que
se les dice.
5. Debemos cuidar la autoestima del niño o niña. Mostrarle que es valorado.
6. Se debe dar la oportunidad de acuerdo a la edad y capacidades a los niños y niñas
de hacer cosas solos, como dejar que tomen sus propias decisiones, que asuman
equivocaciones y se perciban responsables de sus logros.
7. Los padres generalmente son fuente de seguridad y confianza para sus hijos, por
eso es necesario que en todo momento lo transmitamos para que los niños se
perciban seguros y confiables.

También podría gustarte