Buenos Aires, viernes 28 de junio de 2002 |ELDER]BCHO| 11
Procedimiento Administrativo:
Amparo por mora-, procedencia.
/ — Puesto que no se observa que en el sub lite se pretenda ur­
gir el pago de una suma de dinero, sino que el demandante
pidió que se dictara una resolución respecto de la admisibili­
dad o inadm isibilidad de su derecho a percibir los salarios
devengados durante el tiempo en que estuvo suspendido pre­
ventivamente po r la instrucción de un sumario administrati­
vo, cabe concluir que no existen óbices para encuadrar a la
situación bajo examen en las previsiones del art. 28 de la ley
19.549. En consecuencia corresponde ordenar a la adminis­
tración que reconstruya el expediente administrativo en el
plazo de diez días y luego resuelva el reclamo efectuado en el
plana de cinco días.
2 — No se observa que en el sub lile se pretenda urgir el pago
d é una suma de dinero, sino que el demandante pidió que se
dictara una resolución respecto de la admisibilidad de su pe­
dido, p o r to cual, no existen óbices para encuadrar a la si­
tuación bajo examen en las previsiones del art. 28 de la ley
19.549; En consecuencia, dado que el Estado no ha acom­
pañado documentó alguno que demuestren los actos que in­
voca —Ja o r d e n ' de reconstrucción d el expediente adminis­
trativo y la intimación (fia parte a presentar toda la docu­
mental que estuviera en su poder—, procede hacer lugür a la
pretensión y 'disponer que dentro del plazo de cinco días s t‘
.emita’el'prvnunciamiento respectivo (del voto de la doctora:
. J e a n n e r e t d b 'P é re z C ojstés). R .C ..
190 — CNCont.-3dm.Feil., sala IV, mayo 7-2002. — Pombar, Luis
Marta c. E.N. M ' del Interior - DNM-e»pjdm. 215.645/99 s/amparo
por mora,
Buenos Aires, mayo 7 de 2002. — Y Vistos: Para resol­
ver el recurso de apelación interpuesto a fs. 41/42 vta.,
contra la sentencia de fs. 39/40; y
Considerando: I. Que el señor juez de primera instancia
rechazó la acción de amparo promovida por el señor Luis
Marta Pombar contra el Estado Nacional, Ministerio del
Interior, Dirección Nacional de Migraciones.
Pnra decidir de ese modo entendió que la petición efec­
tuada por el recurrente consistía en el pago de una suma de
dinero, por lo que se estaba fuera del marco cognoscitivo,
de aplicación de la normativa invocada (art. 28, ley 19.549
|ED. 42-917]).
Señaló, además, que —en casos análogos— la Cámara
había sostenido que decisiones como la indicada no impli­
caban alterar la salvaguarda de los derechos del peticiona­
rio. átenlo a que a éste le asistía la posibilidad de utilizar
otras vías idóneas para exigir el pago del dinero reclama­
do. tanto en sede administrativa como judicial.
ii. Que. contra esa sentencia, la parte actora dedujo y
fundó su recurso de apelación (confr. fs. 41/42 vta.).
Señaló, en primer lugar, que lo que se pedfa en la ac­
ción de amparo pnr mora era que el a quo ordenara a la
Dirección Nacional de Migraciones que resolviera el re­
clamo administrativo formulado por su parte el 27 de
g i m v t n <j£ 1QQQ
Agregó que en la referida acción no había urgido el pa­
go de una suma de dinero, sino que había solicitado el dic­
tado de un acto administrativo que negara o reconociera ei
derecho a percibir la suma reclamada.
III. Que en el art. 28 de la ley 19.549 se establece que el
que fuere parte en un expediente administrativo podrá ini­
ciar una acción de amparo por mora cuando una autoridad
administrativa hubiera dejado vencer los plazos fijados, o
los razonables, según el caso, sin emitir et dictamen o la
resolución de mero trámite o de fondo que requiera el inte­
resado. Asimismo se dispone que, si lo estima pertinente
el juez requerirá a la autoridad administrativa que informe
sobre las causas de la demora aducida, y que, de conside­
rar procedente el pedido, librará la orden correspondiente
para que la autoridad administrativa responsable despache
las actuaciones en el plazo prudencial que establezca.
En consecuencia, se posibilita que quien es parte en el
procedimiento administrativo acuda a la vía judicial para
que íc emplace a la Administración a ¡os fines de que se
eVfflSTvn forma expresa con respecto a su solicitud.
V jV jíu e el "derecho de petición" no se agota con el he-
c h o 3 í que el ciudadano pueda pedir, sino que exige una
respuesta. Frente al derecho de petición se encuentra la
obligación de responder. Ha de recordarse que en el artícu­
lo XXIV de la Declaración Americana de los Derechos y
Deberes del Hombre —cuya jerarquía constitucional le fue
acordada en el art. 75. inc. 22 del nuevo texto de la Carta
Magna— al reiterarse el reconocimiento del derecho a peti­
cionar a las autoridades, se impone a éstas el deber de una
pronta resolución.
En síntesis, del derecho constitucional de “peticionar a
las autoridades" (ans. 14. 18 y 75. inc. 22 Constitución
Nacional) surge que la Administración tiene la obligación
de expedirse expresamente respecto de las peticiones for­
muladas por los particulares y. consecuentemente, que a
estos Ies asiste el derecho a que aquélla resuelva su peti­
ción. ya sea rechazando o reconociendo su pretensión.
V. Que. ello asentado, y a los efectos de tratar los agra­
vios de la actora, corresponde formular algunas precisio­
nes respecto de las cuestiones que originaron la presente
demanda.
En primer lugar cabe señalar que el 27 de agosto de
1999 el actor presentó un reclamo administrativo a los
efectos de que la Dirección Nacional de Migraciones le
abonara los salarios devengados durante el tiempo en que
estuvo suspendido preventivamente por la instrucción de
un sumario administrativo.
Con posterioridad efectuó pedidos de pronto despacho
los días 14 de agosto de 2000, 25 de octubre de 2000 y 7
de marzo de 2001 (conf. fs. 7/9).
El Io de junio de 2001 Pombar interpuso acción de am­
paro con el fin de que se le ordenase a la demandada resol­
ver el reclamo formulado.
A fs. 37, la autoridad administrativa —mediante apode­
rado— evacuó el informe previsto en el art. 28 de ¡a ley
19.549, haciendo saber que no había podido ser localizado
el expediente administrativo, y que habfa ordenado su re­
construcción. También manifestó que, a esos, efectos, se
había intimado al actor para que presentara toda la docu­
mental que tuviera en su poder.
 VI. Que, acorde a lo expuesto, no se observa que en el
sub examine se pretenda urgir el pago de una suma de di­
nero, sino que el demandante pidió que se dictara una re­
solución respecto de la admisibilidad de su pedido.
Por ello no existen óbices que impidan encuadrar a la
situación bajo examen en las previsiones del art. 28 de la
ley 19.549.
En consecuencia corresponde ordenar a la administra­
ción que reconstruya el expediente administrativo en el
plazo de 10 (diez) días y luego resuelva el reclamo efec­
tuado dentro del plazo de 5 (cinco) días.
Por lo expuesto se revoca la decisión apelada y se orde­
na a la demandada que proceda a la reconstrucción del ex­
pediente administrativo en el plazo de 10 días y que cum­
plido se expida respecto del reclamo efectuado por el
señor Luis María Pombar dentro del plazo de 5 (cinco)
días. Las costas de ambas instancias se imponen a la de­
mandada (art. 68, CPCyC). Regístrese, notifíquese y de­
vuélvase. — Alejandro J. Uslenghi. — María Jeanneret de
Pérez Cortés (por su voto). — Guillermo P Galli.
La doctora Jeanneret de Pérez Cortés dijo:
L Que por razones de brevedad doy por reproducidas
las consideraciones vertidas en los puntos I a V del voto
de mis estimados colegas.
Difiero en cuanto a la solución a la que se arriba,
II. Que, acorde a lo expuesto, no se observa que en el
sub examine se pretenda urgir el pago de una suma de di­
nero, sino que el demandante pidió que se dictara una re­
solución respecto de la admisibilidad de su pedido.
Por ello no existen óbices que impidan encuadrar a la
situación bajo examen en las previsiones del art. 28 de la
ley 19.549; y atento a que el Estado no ha acompañado do­
cumento que demuestren los actos que invoca —la orden
de reconstrucción y la intimación a la parte— procede ha­
cer lugar a la pretensión y disponer que —dentro del plazo
de 5 días— se notifique o, en su caso, se emita el pronun­
ciamiento respectivo.
Por lo expuesto se revoca la decisión apelada y se orde­
na a la demandada que se expida dentro del plazo de 5 días
respecto del reclamo efectuado por el señor Luis María
Pombar. Las costas de ambas instancias se imponen a la
demandada (art. 68, CPCyC). — María Jeanneret de Pé­
rez Cortés.