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Más allá de si misma.

En un día como cualquiera en el reino de las acacias, la bella y cándida Eliana, una solitaria
elfo que nunca tuvo una familia y toda la gente de su pueblo la despreciaba porque
pensaban que estaba maldita, por su soledad y falta de comunicación con otras personas,
a pesar de que su belleza dijera lo contrario. Eliana escuchó entre los alrededores del
pueblo una noticia que impactó inexplicablemente su ser, pues en ella vio la solución a su
inefable vida

Esta noticia decía que el primer elfo del reino de las acacias que se atreva a llegar al otro
lado del arcoíris recibiría un deseo pero que deberá jugársela entre la vida y la muerte,
Eliana candorosa decidió salir en búsqueda de ese deseo, aunque le cueste su vida, pues
se sentía tan sola que no le importaba desaparecer. Empezó su búsqueda el primer día
que apareció el arcoíris, pues era el único mapa que la llevaría a su final y encontrar el
tesoro; En el camino llegó a un pequeño pero paradójico bosque, ahí se encontró con
criaturas que gozaban de felicidad, jugando, cantando y bailando, Eliana ante esto sintió
mucho tedio e ira y solo quería que las criaturas no la fastidiaran con su felicidad y unión,
y preguntándose con ira el por qué ella nunca puedo serlo , lo que no esperaba es que
este bosque reflejaba los sentimientos de quienes pasaban por ahí, entonces se vio en
graves problemas,  pasaría por una verdadera pesadilla ya que las criaturas le harían sentir
todo lo que ella les deseo, ante esto Eliana tenía una capacidad lerda para cambiar sus
sentimientos y que la pesadilla pasara, estas criaturas por la magia del bosque cambiaron
su personalidad y empezaron a atacarla con todo tipo de objetos y ofensas, lastimándole
su cuerpo y mente; aun así, acostumbrada a la desdicha logró salir del bosque pero lo
peor estaba por venir...
Subiendo una gran montaña se encontró un lugar inhóspito dónde miro un pequeño cartel
de muy mal aspecto advirtiendo que cualquiera que siga el arcoíris solo tenía dos
opciones, alcanzar su deseo anhelado o morir en el intento. Pero Eliana decidió seguir
adelante pase lo que pase, luego de caminar algunos minutos, entre tinieblas miro un
macilento anciano que le dijo: bella muchacha, para una elfo débil y delicada como tu va
ser imposible regresar con vida a su pueblo, a lo que ella le respondió: querido anciano
agradezco por su preocupación, pero mi vida no tiene sentido y para seguirla viviendo así,
prefiero desaparecer. El anciano expresando en su rostro asombro le dijo: muchacha, te
ayudare porque si solo sigues el arcoíris jamás llegaras a tu destino, el camino correcto
será buscar un gran roble y seguir hacia abajo hasta encontrar un gran rio y que para
alcanzar la victoria debía pelear contra el río, donde tenía que ir el contra de la corriente y
en el fondo encontraría la luz del deseo, pues era la única forma de poder lograr mirar la
luz resplandeciente del deseo. Eliana con una sonrisa en su cara agradeció al anciano
macilento y le dio un abrazo, pues sin sus indicaciones jamás hubiera llegado siguiendo el
arcoíris. Eliana siguió el camino indicado y se encontró con el viejo roble, siguió montaña
abajo y después de un poco tiempo escucho el sonido del rio, corrió hacia él y se lanzó al
río y empezó a nadaren contra de su corriente, sufrió varios golpes, pensó que sus fuerzas
no iban a ser suficientes, pero lucho y lucho contra el agua y los obstáculos que venían con
él, de repente miro que a la orilla del río un pequeño bebé tigre luchaba por su vida
aunque aún no podía nadar, Eliana decidió ir a ayudarlo pues su corazón no le permitiría
abandonarlo y dejarlo a su suerte, pero entonces de camino al tigre al fondo miro una luz
muy resplandeciente que se iba moviendo, estuvo tan feliz, había encontrado la llave de
su felicidad, pues era la luz de la que el anciano le había platicado, pero debía tomar una
decisión, salvar al pequeño bebé tigre o ir por el deseo, Eliana pensó que debía ir por su
deseo porque era lo que más quería pero su corazón y la única forma de solucionar todos
los malos que había sentido desde hace años pero se arrepintió y no iba a dejar que el
Tigre muriera ahogado, así que decidió dejar ir la luz y salvar al cachorro. Siguió nadando
con todas sus fuerzas y cuando al fin llegó a donde estaba el pequeño, logró impulsarlo a
la tierra salvándole la vida, pero Eliana quedo atrapada en una rama y la corriente del río
la llevo consigo, se golpeó la cabeza y quedó inconsciente unos segundos, a punto de
morir ahogada Eliana saco fuerzas y despertó, hizo su último esfuerzo y casi en su último
aliento alcanzó a liberarse de la rama y salió a la orilla. Por un lado, estaba muy triste,
pues había perdido su deseo, pero sintió un alivio al recordar que salvó al pequeño bebé
tigre. Mientas Eliana descansaba, pero cabizbaja con desesperanza pequeño mamífero
llegó a su lado y se sentó junto a ella trayendo consigo una pequeña bola dorada y la dejo
a sus pies, el pequeño se fue y Eliana de pronto miro que la bola dorada empezó a brillar y
se dio cuenta de este pequeño tigre le dio el mejor regalo de agradecimiento, pues no se
trataba de que ella tomara su deseo, sino de pensar en otros primero y no siempre solo en
ella.

Eliana feliz con el deseo en sus manos, pensó en toda su vida y casi al punto de la muerte
logró salir de esa prueba con un acto de consideración, amor y humildad, entonces deseo
con todas sus fuerzas, volver a tener una familia para ser feliz como la gente del pueblo, y
de repente solo sintió que se quedó dormida a la orilla del río. Al día siguiente Eliana abrió
los ojos y se encontraba en una linda y humilde casa, con madre, padre y hermanos como
si lo hubiesen sido desde siempre, empezando a llorar de felicidad por haber podido
alcanzar su deseo.

Fin.

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