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–¡Oh, Dios mío! –dijo el niño–. ¡Qué susto me has da-do! Pensé que • ¿Por qué motivo el niño consiguió salir bien librado de
eras la bruja que ha causado la tor-menta. sus aventuras?
El loro ladeó la cabeza y se rascó la oreja con la pata, lanzando de nuevo Porque recibió buenos consejos.
una larga y perversa carcajada. Entonces, para sorpresa suya, el niño
vio que el loro comenzaba a transformarse. Sus alas se convirtie-ron en Porque era rico.
brazos largos y escuálidos; su pico, en una gran nariz aguileña; y sus Porque intervinieron hechos mágicos.
brillantes plumas, en ha-rapos chillones y andrajosos.
–Eso es lo que tú te crees –dijo una voz enérgica desde las escaleras 24 de septiembre de 1990
del camarote. Y para sorpre-sa de ambos, la badila apareció y El mar ha amanecido hoy en calma, pero a las doce del
arremetió contra la bruja.
mediodía he notado
–¡Bien! –decía el niño complacido–. ¡Dale duro! ¡Échala fuera!
El niño estaba muy emocionado al ver las maravillas del fondo del mar. GALEÓN
Entre ellas, vio los restos de un viejo galeón español cubierto de algas y
percebes. Enseguida descendió por un costado de su barco y corrió por
la arena a explorar el buque naufragado. Estaba lleno de cofres de oro y
alhajas.
El niño cogió algunos cofres y los almacenó en la bo-dega de su velero.
Pero una vez hecho esto, comen-zó a preocuparse. ¿Cómo saldría de
allí? ¿Cómo iba a navegar si no había mar por donde hacerlo?
Volvió al galeón y continuó explorando; entonces en-contró un extraño 5. Completa.
martillo con una inscripción mágica:
El niño cogió el martillo y golpeó la roca. De repente, el agua comenzó a • encubrir • descubrir • recubrir • cobertizo
brotar del suelo a borbollones, como si todas las tuberías de la Tierra
hubieran es-tallado. No había tiempo que perder, así que corrió hacia • cubierta • cobertura • cobertor
su barco, y antes de que el agua le llegara has-ta la barbilla, consiguió
subir a bordo. • La badila persiguió a la bruja hasta
.
Mientras tanto, el agua rugía, se arremolinaba y su-bía más y más
• El niño maravillas en el fondo del mar.
deprisa. Al poco rato, el niño notó que su barco comenzaba a
bambolearse, se elevaba y quedaba flotando. • Con su barco, los navegantes grandes distancias.
Cuando el barco estuvo flotando de nuevo, el niño colocó las velas de • Se hizo cómplice cuando al autor del delito.
repuesto y puso rumbo hacia las playas de su tierra natal; allí • Una delgada capa de hielo la antena de televisión.
desembarcó finalmente con todas las alhajas y el oro que había sacado
del galeón español. • El coche está aparcado bajo el del jardín.
• Cuando haga frío, pondremos un nuevo en la cama.