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Un cuento del mar COMPRENDO LO QUE LEO


1. Contesta.
Érase una vez un niño que tuvo la suerte de conse-guir un barco para
él solo. Era un velero enorme; pe-ro el niño era experto en cosas de • ¿Quién salvó al niño?
vela y lo podía manejar sin ayuda.
• ¿Por qué a la bruja no le importó saltar por la borda?
Durante algunos años, navegó de isla en isla. Pero un día el tiempo
empezó a empeorar. El cielo se lle-nó de nubes y el viento comenzó a • ¿Dónde guardaba el niño su badila mágica?
soplar con tanta fuerza que las velas quedaron hechas jirones. El ni-ño • ¿Cuándo flotó de nuevo el barco del niño?
se dio cuenta enseguida de que aquella tormenta estaba dirigida contra
él por algún enemigo que sa-bía magia negra; por eso bajó al camarote,
cerró la puerta y esperó a ver qué pasaba. 2. Marca en cada caso la respuesta correcta.
–¡Ja, ja! ¡No pienses que estás solo! –dijo una voz perversa y cruel a • ¿Cómo es la lectura «Un cuento del mar»?
sus espaldas.
• Realista. Científica. Fantástica.
El niño se volvió asustado y vio a un loro en la libre-ría del camarote.

–¡Oh, Dios mío! –dijo el niño–. ¡Qué susto me has da-do! Pensé que • ¿Por qué motivo el niño consiguió salir bien librado de
eras la bruja que ha causado la tor-menta. sus aventuras?
El loro ladeó la cabeza y se rascó la oreja con la pata, lanzando de nuevo Porque recibió buenos consejos.
una larga y perversa carcajada. Entonces, para sorpresa suya, el niño
vio que el loro comenzaba a transformarse. Sus alas se convirtie-ron en Porque era rico.
brazos largos y escuálidos; su pico, en una gran nariz aguileña; y sus Porque intervinieron hechos mágicos.
brillantes plumas, en ha-rapos chillones y andrajosos.

Cuando el niño vio que se trataba de una bruja, co-menzó a avanzar


3. Imagina lo que el niño escribiría en su diario de
navegación el día en que encontró a la bruja.
poco a poco hacia la estufa del ca-marote, donde guardaba su badila 1
mágica. Pero la bruja le dijo: Ponle fecha y redáctalo en primera persona.
–Sé lo que estás buscando. ¡Tu badila mágica! ¡Ja, ja! La he puesto en Puedes empezar así
un lugar seguro, donde tú no la encontrarás, jovencito.

–Eso es lo que tú te crees –dijo una voz enérgica desde las escaleras 24 de septiembre de 1990
del camarote. Y para sorpre-sa de ambos, la badila apareció y El mar ha amanecido hoy en calma, pero a las doce del
arremetió contra la bruja.
mediodía he notado
–¡Bien! –decía el niño complacido–. ¡Dale duro! ¡Échala fuera!

La pequeña y simpática badila persiguió a la bruja hasta cubierta. Una


vez allí, la bruja saltó al mar por la borda, pensando en que flotaría y
podría ponerse
4. CAMPOS SEMÁNTICOS
a salvo. Pero no contaba con que la badila mágica había realizado un
cambio maravilloso: había trans-formado el mar en dragones, que, tan El barco que descubrió el niño era un galeón.
pronto como vieron a la bruja, abrieron sus blancas y espumean-tes
mandíbulas y se la tragaron. Luego, los dragones comenzaron a alejarse
Escribe el nombre de diez tipos de embarcaciones que
en diferentes direcciones y el barco fue descendiendo, hasta que quedó conozcas. FAMILIA DE PALABRAS
sobre el arenoso fondo de lo que había sido el mar.

El niño estaba muy emocionado al ver las maravillas del fondo del mar. GALEÓN
Entre ellas, vio los restos de un viejo galeón español cubierto de algas y
percebes. Enseguida descendió por un costado de su barco y corrió por
la arena a explorar el buque naufragado. Estaba lleno de cofres de oro y
alhajas.
El niño cogió algunos cofres y los almacenó en la bo-dega de su velero.
Pero una vez hecho esto, comen-zó a preocuparse. ¿Cómo saldría de
allí? ¿Cómo iba a navegar si no había mar por donde hacerlo?
Volvió al galeón y continuó explorando; entonces en-contró un extraño 5. Completa.
martillo con una inscripción mágica:

Cuando las aguas desaparezcan, da tres mar-tillazos en el cubrir


fondo.

El niño cogió el martillo y golpeó la roca. De repente, el agua comenzó a • encubrir • descubrir • recubrir • cobertizo
brotar del suelo a borbollones, como si todas las tuberías de la Tierra
hubieran es-tallado. No había tiempo que perder, así que corrió hacia • cubierta • cobertura • cobertor
su barco, y antes de que el agua le llegara has-ta la barbilla, consiguió
subir a bordo. • La badila persiguió a la bruja hasta
.
Mientras tanto, el agua rugía, se arremolinaba y su-bía más y más
• El niño maravillas en el fondo del mar.
deprisa. Al poco rato, el niño notó que su barco comenzaba a
bambolearse, se elevaba y quedaba flotando. • Con su barco, los navegantes grandes distancias.

Cuando el barco estuvo flotando de nuevo, el niño colocó las velas de • Se hizo cómplice cuando al autor del delito.
repuesto y puso rumbo hacia las playas de su tierra natal; allí • Una delgada capa de hielo la antena de televisión.
desembarcó finalmente con todas las alhajas y el oro que había sacado
del galeón español. • El coche está aparcado bajo el del jardín.
• Cuando haga frío, pondremos un nuevo en la cama.

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