Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
En la antigua Grecia, el pedagogo era el esclavo que se encargaba de conducir a los hijos de los
amos al lugar donde recibían la educación (palestra14, teatro, etc.), pero también se ocupaba de
otras facetas de su formación, como que en la calle o en los lugares públicos los hijos de los amos
se comportasen con urbanidad según los cánones clásicos.
Camino Ortiz de Barrón, I. y Murúa Cartón, H. (2011). Teoría e historia de la educación. Madrid,
Delta Publicaciones. Recuperado de https://elibro.net/es/ereader/semsaltillo/170183?page=38.
En cuanto a la evolución histórica de la Pedagogía fue Manganiello la que en 1978 estableció dos
períodos para diferenciar el recorrido histórico de la misma: uno precientífico y otro propiamente
científico que tuvo sus inicios allá por el siglo XVII. Es precisamente durante el período científico
cuando la Pedagogía se desvinculó definitivamente de la Filosofía y adquirió su condición de
Ciencia. Esta condición de Ciencia Manganiello la justificó desde dos perspectivas diferentes: una
teórica en la que se reflexiona sobre el proceso educativo y se sientan unos principios reguladores
del mismo, y otra técnica en la que se ponen en práctica los aspectos teóricos. El período científico
estaba dividido en tres etapas:
Camino Ortiz de Barrón, I. y Murúa Cartón, H. (2011). Teoría e historia de la educación. Madrid,
Delta Publicaciones. Recuperado de https://elibro.net/es/ereader/semsaltillo/170183?page=39.
Camino Ortiz de Barrón, I. y Murúa Cartón, H. (2011). Teoría e historia de la educación. Madrid,
Delta Publicaciones. Recuperado de https://elibro.net/es/ereader/semsaltillo/170183?page=51.
Camino Ortiz de Barrón, I. y Murúa Cartón, H. (2011). Teoría e historia de la educación. Madrid,
Delta Publicaciones. Recuperado de https://elibro.net/es/ereader/semsaltillo/170183?page=38.
Descripción
Es muy importante precisar cómo la Pedagogía es una ciencia influenciada por las más altas
expresiones culturales que se han dado a lo largo de los siglos, como la Filosofía y la Historia.
Objeto de estudio
Su fin último, según Pellerey [5], no es crear teorías generales de la educación (las otras ciencias
de la educación y la formación servirían en esta interpretación), sino construir modelos de
intervención educativa que puedan ser utilizados en la práctica educativa inmediata. Para ello, la
pedagogía revisa y reelabora modelos de intervención ya propuestos y/o implementados, y
examina y evalúa recursos, herramientas y contextos ya disponibles para planificar e implementar
una intervención educativa; hecho esto, la pedagogía -según Pellerey- organiza estratégicamente
su conocimiento para identificar un posible camino educativo a realizar y elabora un proyecto que
es la base de la intervención educativa a implementar.
A partir del discurso único sostenido por la Pedagogía General, la ciencia pedagógica especializa
este discurso en diversas articulaciones:
En pedagogía se podrían contrastar dos modelos pedagógicos, uno basado en el individuo (en
referencia a Immanuel Kant y Rousseau) y otro en la sociedad (en referencia a Émile Durkheim).
Los dos modelos de pedagogía no pueden juzgarse unívocamente, ya que en cada uno se pueden
encontrar elementos positivos y negativos.
• La teoría kantiana se basa en un fuerte impulso positivo hacia el hombre: la confianza en el ser
humano lleva al pensador a verlo como artífice de una mejora en el ámbito social. Educar al niño
evitando por completo cualquier relación con la realidad lo conducirá a una educación que podrá
cambiar a mejor la sociedad de acogida.
Jean-Jacques Rousseau, en Emilio o sobre la educación, también trata de una educación del niño
fuera de la sociedad, teniendo muchas similitudes con la teoría kantiana. Sin embargo, se puede
contradecir que la completa abstención del niño de la sociedad conduce a una falta de
conocimiento directo de la sociedad misma. El educador puede enseñar a Emilio todo lo
concerniente a costumbres, leyes, etc., pero esto queda sólo en el ámbito teórico. La práctica es
otra cosa completamente distinta, que sin una experiencia directa de lo que significa vivir inmerso
en sociedad, no puede conducir al éxito. Durkheim, en este punto, habla con razón de una
educación dentro de la sociedad misma. Después de la Revolución Industrial, las características de
la sociedad sufrieron un cambio enorme y sin una relación directa con ellas no se podía vivir
conforme a estos usos o costumbres modernas.
Lo cuestionable de Durkheim es que le da más peso a la educación impartida por la sociedad que a
la que pueden dar los maestros.
Al imaginar en abstracto a un niño que vive totalmente inmerso en la sociedad (y por lo tanto
educado por la sociedad misma) y privado de la presencia de los padres, que podrían tener el
papel de maestros, no tendría la capacidad de comprender la sociedad misma y por lo tanto no
sería capaz de captar la enseñanza que esto le ofrece. La relación que un alumno tiene con su
educador no es comparable a la que tiene con el ámbito civil en el que está inmerso. Es una
relación estable, protegida de posibles traumas que la sociedad pueda ocasionar, pero sobre todo
es una relación directa entre dos personas, una de las cuales, desde lo alto de su experiencia,
aporta a la otra los conocimientos teóricos que le serán útiles en su práctica. vida. Hay una
relación más violenta y turbulenta con la esfera social, que es de poca utilidad para el crecimiento
interior del alumno. Además, la educación impuesta por la sociedad puede tener muchos caminos
y es el niño quien tiene que elegir cuál tomar, teniendo posibilidades de tomar el equivocado. Esto
no puede ocurrir en la relación personal con el maestro, ya que es el propio educador quien indica
al alumno el camino a seguir.
También existe un lineamiento teórico-moral que articula la teoría pedagógica en dos direcciones:
Entre finales del siglo XIX y principios del XX se establece un estrecho vínculo entre la psicología y
la pedagogía, antes vistas sólo como ramas de la filosofía. Wilhelm Wundt, considerado el
fundador de la Psicología Experimental, fue el primero en estudiar el aprendizaje a través de los
sentidos. Ivan Pavlov demostró que el aprendizaje puede vincularse a estímulos secundarios.
Johann Friedrich Herbart fue uno de los últimos pensadores en asimilar la pedagogía a la filosofía y
sus valores, buscando una mediación con la investigación psicológica que entonces daba sus
primeros pasos y proponiendo estos dos componentes para construir una ciencia de la educación.
Sus filósofos de referencia fueron Johann Heinrich Pestalozzi, en cuanto a la percepción sensible y
Kant por su moralidad.
Stanley Hall se acercó a la obra de Wilhelm Wundt y los herbartianos para luego dedicarse a la
obra Adolescencia, una revolución en el campo de la educación ya que proponía por primera vez la
investigación pedagógica. Hall estudió los dibujos de los niños, su anamnesis y formuló algunas
teorías que aún considera interesantes.
Simon y Binet fueron los primeros en superar la idea de que la inteligencia de un niño se podía
medir por el tamaño del cráneo y diseñaron una escala y un cuestionario para medir sus
habilidades.
Seguin e Itard se ocupaban de los discapacitados, el primero asociaba la imagen del educador con
la del médico, ya que debía ocuparse de transmitir las prácticas necesarias para la higiene, el
mantenimiento del cuerpo a través de la actividad motriz y la educación de los discapacitados.
La relación entre pedagogía y filosofía es un tanto compleja y contradictoria, abre un debate que
desde el positivismo investiga la naturaleza incierta de la pedagogía si es ciencia o parte de la
filosofía metafísica.
Hoy sabemos que el fin principal de la pedagogía es la educación del hombre, a cualquier edad, en
su complejidad, es decir, en preservar la integridad de la personalidad del individuo, potenciando
sus talentos y colmando sus lagunas. También podemos definir educar como promover y
potencializar la "naturaleza" de la persona desde la infancia.
El problema es: "¿Qué se entiende por naturaleza humana?". Unos la definen como "constitución
psíquica" atribuyéndole un carácter anatómico y biológico puramente científico, otros la definen
como "esencia espiritual" atribuyéndole en cambio una connotación filosófica y espiritual ligada a
la ética y la metafísica. De este dualismo surge la idea, compartida por unos pocos, de que no hay
una sola pedagogía sino varias pedagogías.
En la antigua Grecia la pedagogía no existía como una auténtica disciplina real, era esencialmente
una rama importante de la filosofía, de hecho, se pueden definir como los más grandes pedagogos
de la pedagogía "antigua" Sócrates, Platón y Aristóteles. Además de ser filósofos extraordinarios,
estas tres grandes personalidades dieron origen a la pedagogía tal como la entendemos hoy.
Sócrates con su mayéutica y la famosa frase "Conócete a ti mismo", Platón en los escritos de
Sócrates y sobre todo en la República ha ideologizado una educación perfecta en el pleno respeto
de la naturaleza del individuo, Aristóteles con su lógica y sobre todo con el Liceo. En la antigua
Roma, muchos intelectuales hicieron una importante contribución a la pedagogía: Cicerón,
Séneca, Quintiliano, Agustín. Incluso Epicuro con su Tetrafarmaco llevó una línea pedagógica en su
pensamiento filosófico.
De esto podemos deducir que el origen pedagógico es claramente filosófico, tanto que la palabra
pedagogía proviene del griego antiguo, pero ¿es la pedagogía pura filosofía o es en efecto una
ciencia? Si estas grandes personalidades intelectuales fueron principalmente filósofos, ¿se puede
identificar la pedagogía como ética en una investigación filosófica? Por supuesto, las prácticas
educativas sólo pueden ser hipotetizadas a nivel teórico sin nunca llevarlas a la práctica como en
realidad lo hicieron estos filósofos y como lo hizo Rousseau en su Emilio, reiterando en varias
ocasiones que nunca educó a un niño y también que no fue un filósofo en toda la extensión de la
palabra.
¿Se puede definir filosóficamente la educación como una labor pedagógica? Ciertamente no. Las
teorías y propósitos educativos no son suficientes para definirse como educadores o pedagogos,
las teorías pedagógicas deben encontrar una confirmación en la realidad social.
Y aquí con el positivismo nace una verdadera ciencia pedagógica sobre la educación. La pedagogía
es puesta en práctica y científicamente analizada por personalidades como Piaget, Vygotsky,
Bruner, James, Montessori, Decroly y Dewey. Pero estos “pedagogos” nacen de corrientes
filosóficas como el pragmatismo, el conductismo, el positivismo, etc… por lo que nuevamente
surge el problema de la filosofía como fuente originaria de la pedagogía que en la edad moderna
utiliza el método científico y encuentra confirmación en el social y la realidad cultural. Incluso el
psicoanálisis, en su consideración de la relación entre madre e hijo, hipotetiza algunas ideas
pedagógicas. Incluso los filósofos modernos: Hegel, Marx, Gramsci (de particular mención en las
Cartas desde la cárcel) y Gentile contribuyeron a formar ideas sobre el pensamiento pedagógico.
Un detalle importante en la reforma de Gentile es que, en los institutos de enseñanza, la
pedagogía y la filosofía se unen como una sola materia. Probablemente Gentile quiso hacernos
entender que un buen maestro es ante todo un filósofo.
Hay muchos ejemplos de cómo la relación entre pedagogía y filosofía siempre ha sido incierta,
algunos estudiosos hablan de "filosofía de la educación", aunque en el diccionario pedagogía se
define como "ciencia de la educación".
Por supuesto, la pedagogía puede seguir un cierto orden, primero con la reflexión filosófica y luego
con la teorización de las ideas educativas y luego con el aspecto práctico de la filosofía en el que se
implementa y se prueba en las personas (en particular en los niños), encontrando así éxito o el
fracaso de una teoría pedagógica. Si esta secuencia de acciones es correcta, uno se pregunta si las
todas las ciencias tienen o no un origen filosófico.
En conclusión, se puede decir que la pedagogía es en efecto una ciencia que utiliza el método
científico basado en la observación, la recolección de datos, la formulación de hipótesis, el
experimento práctico sobre temas y finalmente la conclusión y formulación de una teoría, pero
fundamentalmente nunca debemos olvidar el origen filosófico de esta particular ciencia humana.
Funcionamiento de la pedagogía
Pueden ser muchos los factores que configuran un problema pedagógico: las dificultades de las
relaciones padres-hijos, las desventajas socioculturales, la integración de las personas con
discapacidad, la reinserción de los presos, la rehabilitación de los drogodependientes, etc., son
todos factores que pueden ser objeto de intervenciones educativas específicas o pueden formar
parte de un conjunto de elementos problemáticos relevantes para la acción pedagógica.
Educare significa "alimentar" (crecer); educere significa "sacar" (dejar salir). La potencialidad
humana, por tanto, hace al hombre de sujeto inmaduro a maduro: es decir, significa aprovechar lo
mejor que potencialmente hay en un hombre para que sea tal. La educación consiste en una
relación entre dos personas: un educador y un alumno. El educador debe adaptarse (y en
consecuencia adecuar la intervención educativa) al nivel del alumno, comprendiendo sus
necesidades y potenciando sus habilidades.
El Pedagogo
El estudioso y especialista de los procesos educativos y de formación y aprendizaje (investigación y
aplicación) se define como pedagogo. El pedagogo es un profesional de primer nivel con una
titulación habilitante para la profesión que trabaja, en contextos formales informales y no
formales junto con el socio- educador profesional pedagógico, en servicios y en equipamientos
socioeducativos y socio-asistenciales, hacia personas de todas las edades, principalmente en las
siguientes áreas: educación y formación; colegio; la asistencia social, limitada a los aspectos
socioeducativos; paternidad y familia; cultural; judicial; ambiental; deportes y motricidad;
integración y cooperación internacional.
Criticas
Don Lorenzo Milani y su escuela de Barbiana denunciaron con la "Carta a un maestro" (mayo de
1967) el sistema escolar y el método de enseñanza italiano, que favorecía la educación de las
clases más ricas (los llamados "Pierini") y penalizaba los sectores más pobres de la población,
condenándolos a menudo al analfabetismo.
Un enfoque particularmente crítico con las instituciones educativas es el de Ivan Illich, expuesto en
su Descolarising society, de 1971, en el que argumenta, entre otras cosas, que las situaciones de
desventaja en el aprendizaje no pueden remediarse apoyándose en la instrucción impartida en el
ámbito escolar.
Aún más cáustico es Raoul Vaneigem con su Aviso a los estudiantes de 1995.
En 1894 el pediatra neoyorquino Emmett Holt publicó con gran éxito el libro "El cuidado y la
alimentación de los niños", donde aconsejaba eliminar el uso de cunas, no levantar a los bebés
cuando lloraban, alimentarlos a horas fijas y no acostumbrarlos a las caricias, hasta que quedó
claro después de algunas décadas que era precisamente la falta de contactos físicos lo que
causaba casi el 100% de la mortalidad de los niños menores de un año en los orfanatos
estadounidenses.
Libro
Camino Ortiz de Barrón, I. y Murúa Cartón, H. (2011). Teoría e historia de la educación. Madrid,
Delta Publicaciones. Recuperado de https://elibro.net/es/ereader/semsaltillo/170183?page=37.