La oración del Señor

Por Thomas Watson

Tabla de contenido

Prefacio del Padre Nuestro: "Padre nuestro que estás en

los cielos".
La primera petición en el Padrenuestro
"Santificado sea tu nombre".
La segunda petición del Padre Nuestro "Venga
tu reino".
Primero, el reino de los cielos implica una
bendita libertad de todo mal.
En segundo lugar, el reino de los cielos
implica un glorioso fruto de todo bien.
En tercer lugar, ¿qué MEDIOS debemos
usar para no estar destituidos del reino de
los cielos?
La tercera petición en el Padre Nuestro "Hágase
tu voluntad en la tierra como en el cielo".
La cuarta petición del Padre Nuestro "Danos
hoy nuestro pan de cada día".
La quinta petición del Padrenuestro "Perdónanos
nuestras deudas, como nosotros perdonamos a
nuestros deudores".
La sexta petición en el Padre Nuestro "
No nos metas en tentación ". Mateo 6:13 &

"Líbranos del mal." Mateo 6:13

 EL PREFACIO al Padre Nuestro
Habiendo repasado los fundamentos y fundamentos
principales de la religión verdadera, y extendido
sobre el decálogo, o los diez mandamientos, hablaré
ahora sobre la oración del Señor.
"Así pues, debes orar: Padre nuestro que estás en
los cielos ". Mateo 6: 9
En esta Escritura hay dos cosas observables: la
introducción a la oración y la oración misma.
La introducción a la oración del Señor es: "Así es
como debes orar". Nuestro Señor Jesús, con estas
palabras, nos dio a sus discípulos ya nosotros un
directorio para la oración . Los diez mandamientos
son la regla de nuestra vida y la suma de nuestra
fe, y la oración del Señor es el modelo de nuestra
oración. Así como Dios le prescribió a Moisés un
modelo del tabernáculo (Éxodo 25: 9), Cristo nos ha
prescrito aquí un modelo de oración. “Entonces, así
es como debes orar”, etc. El significado es, deja que
esta sea la regla y el modelo según el cual encuadres
tus oraciones. [Debemos examinar nuestras
oraciones según esta regla.] Calvino. No es que
estemos atados a las palabras exactas de la oración
del Señor. Cristo dice: "Este es, entonces, cómo se
debe orar", es decir, dejar que todas sus peticiones
están de acuerdo y en armonía con lo que es de la
oración del Señor; y bien hagamos todas nuestras
oraciones en consonancia y agradables con esta
oración. Tertuliano llama a esta oración "¡un
breviario y compendio del evangelio!" Es como un
montón de oro macizo.
La preciosidad de esta oración se manifiesta en la
dignidad del Autor. Esta oración tiene el elogio de su
Autor; es la oración del Señor . Así como la ley moral
fue escrita con el dedo de Dios, así esta oración salió
de los labios del Hijo de Dios. [La voz no es la de un
hombre, ¡sino la de Dios!] La preciosidad de la
oración se manifiesta en la excelencia del

importar. Es "como plata refinada en un horno,

purificada siete veces". Salmo 12: 6. Nunca la oración
fue tan admirable e intrincadamente compuesta
como esta. Como el Cantar de Salomón , por su
excelencia, se llama "Cantar de los cánticos", así
puede llamarse bien "Oración de las oraciones". El
asunto es admirable:
1. Por su amplitud . Es breve y conciso, mucho
dicho en pocas palabras. Requiere mucho arte
dibujar meticulosamente la tierra en un pequeño
mapa. Esta breve oración es un sistema o cuerpo de
divinidad.
2. Por su claridad . Es simple e inteligible para
todos. La claridad es la gracia del habla.
3. Por su integridad . Contiene las cosas principales
que tenemos que pedir, o Dios tiene que otorgar.
Utilizar. Tengamos una gran estima de la oración del
Señor; que sea el modelo y modelo de todas nuestras
oraciones. Hay un doble beneficio que surge de
enmarcar nuestras peticiones adecuadamente en
esta oración. De este modo se evita el error en la
oración. Es fácil escribir correctamente después de
esta copia. No podemos equivocarnos fácilmente
cuando tenemos nuestro modelo ante nosotros. Por
la presente se obtienen las misericordias solicitadas;
porque el apóstol nos asegura que Dios nos
escuchará cuando oremos "según su voluntad". 1
Juan 5:14. Y seguro que oramos de acuerdo con su
voluntad, cuando oramos de acuerdo con el modelo
que Él nos ha establecido. Hasta aquí la introducción
a la oración del Señor: "Así es como debes orar".
La oración en sí consta de tres partes:
1. Un prefacio.
2. Peticiones.
3. La Conclusión.
1. El prefacio de la oración incluye: "Padre
nuestro"; y "Quién está en el cielo".
I. La primera parte del prefacio es "Padre
Nuestro". A veces se toma al Padre como algo
personal: " Mi Padre es mayor que yo" (Juan 14:28);
pero Padre en el texto se toma esencialmente por la
Deidad completa . Este título

Padre , nos enseña que debemos dirigirnos en

oración solo a Dios. No hay tal cosa en la oración del
Señor, como, "Oh santos o ángeles , escúchennos";
sino "Padre nuestro que estás en los cielos".
¿En qué orden debemos dirigir nuestras oraciones a
Dios? Aquí solo se nombra al Padre. ¿No podemos
dirigir nuestras oraciones también al Hijo y al
Espíritu Santo?
Aunque el Padre solo es nombrado en la oración del
Señor, las otras dos Personas no están excluidas. Se
menciona al Padre porque es el primero en orden;
pero el Hijo y el Espíritu Santo están incluidos
porque son lo mismo en esencia. Como las tres
Personas subsisten en una Deidad. Entonces, en
nuestras oraciones, aunque mencionemos a una sola
Persona, debemos orar a todos.
Para acercarnos más a las primeras palabras del
prefacio, "Padre Nuestro". Los príncipes de la tierra
se otorgan a sí mismos títulos que expresan su
grandeza, como "Altos y poderosos". Dios podría
haberlo hecho , y expresarse así: "Nuestro Rey de
gloria, nuestro Juez", pero se da a sí mismo otro
título, "Padre Nuestro", una expresión de amor y
condescendencia. Para que nos anime a orarle , se
representa a sí mismo bajo la dulce noción de un
Padre . "Nuestro Padre." [Dulce es el nombre del
Padre .] El nombre de Jehová lleva majestad en que el
nombre del Padre lleva merced en ella!
¿En qué sentido es Dios Padre?
(1) Por creación ; es él quien nos hizo: "También
somos su descendencia". Hechos 17:28. "¿No tenemos
todos un solo Padre?" Mal 2:10. ¿No nos ha creado
un solo Dios? Pero hay poco consuelo en esto;
porque Dios es Padre de la misma manera para los
demonios por creación; pero el que los hizo no los
salvará .
(2) Dios es Padre por elección , habiendo escogido a
un cierto número para que sean sus hijos, sobre
quienes impondrá el cielo. "Él nos ha elegido en él".
Efesios 1: 4.
(3) Dios es Padre por gracia especial . Él consagra a
los elegidos por su Espíritu e infunde un principio
sobrenatural de santidad, por lo tanto, se dice que
son "nacidos de Dios". 1 Juan 3: 9. Sólo los
santificados pueden decir: "Padre nuestro que estás
en los cielos".

¿Cuál es la diferencia entre Dios que es el Padre de

Cristo y el Padre de los elegidos?
Él es el Padre de Cristo de una manera más gloriosa
y trascendente. Cristo tiene la primogenitura; es el
Hijo mayor, un Hijo por generación eterna; "Fui
creado desde la eternidad, desde el principio, antes
de que existiera la tierra". Proverbios 8:23. "¿Quién
contará su generación?" Isaías 53: 8. Cristo es un Hijo
del Padre, ya que es de la misma naturaleza que el
Padre, y tiene todas las propiedades incomunicables
de la Deidad que le pertenecen. Pero somos hijos de
Dios por adopción y gracia , "para que recibamos la
adopción de hijos. Gal 4: 5.
¿Qué es eso que hace a Dios nuestro Padre?
Fe. "Todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús".
Gálatas 3:26. Un incrédulo puede llamar a Dios su
Creador, y su Juez, pero no su Padre. La fe nos
legitima y nos convierte en la sangre real del cielo.
"Ustedes son hijos de Dios por la fe". El bautismo nos
convierte en miembros de la iglesia , pero la fe nos
hace hijos. Sin fe, el diablo puede mostrar el mejor
escudo de armas que podamos.
¿Cómo la fe hace que Dios sea nuestro Padre?
Como es una gracia unificadora. Por la fe tenemos
unión con Cristo, y así entran los parientes; unidos a
Cristo, el Hijo natural, nos convertimos en hijos
adoptivos. Dios es el Padre de Cristo; la fe nos hace
hermanos de Cristo, y así Dios viene a ser nuestro
Padre. Hebreos 2:11.
¿En qué parece que Dios es el mejor Padre?
(1) En que es muy ANTIGUO. "El Anciano de días se
sentó". Dan 7: 9. Una representación figurativa de
Dios, que fue antes de todos los tiempos, que puede
causar veneración.
(2) Dios es el mejor Padre, porque es PERFECTO.
"Su Padre que está en los cielos es perfecto"; es
perfectamente bueno. Mateo 5:48. Los padres
terrenales están sujetos a enfermedades; Elías,
aunque profeta, "era un hombre sujeto a pasiones
similares" (Santiago 5:17); pero Dios es
perfectamente bueno. Toda la perfección
a lo que podemos llegar en esta vida, es la sinceridad
. Podemos parecernos un poco a Dios, pero no
igualarlo; es infinitamente perfecto.
(3) Dios es el mejor Padre con respecto a la
SABIDURÍA. "El único Dios sabio". 1 Timoteo 1:17.
Tiene una idea perfecta de la sabiduría en sí mismo;
conoce los medios más adecuados para realizar sus
propios diseños. Los ángeles encienden su lámpara.
En particular, una de las ramas de su sabiduría es
que sabe lo que es mejor para nosotros. Un padre
terrenal no sabe, en algunos casos complicados,
cómo aconsejar a su hijo o qué es lo mejor para él;
pero Dios es un Padre sabio; sabe lo que es mejor
para nosotros; sabe cuál es el mejor consuelo para
nosotros: guarda sus cordiales para los desmayos.
"Dios que consuela a los abatidos". 2 Corintios 7: 6. Él
sabe cuándo es mejor para nosotros la aflicción y
cuándo conviene darnos una poción amarga. "Si es
necesario, estás en apuros". 1 Pedro 1: 6. Él es el
único Dios sabio; él sabe cómo hacer que las cosas
malas les hagan bien a sus hijos. Romanos 8:28.
Puede hacer un remedio soberano del veneno. Por
tanto, es el mejor Padre para la sabiduría.
(4) Él es el mejor Padre, porque el más
AMOROSO. "Dios es amor." 1 Juan 4:16. Quien causa
afecto en los demás, debe tener más amor en sí
mismo. Los afectos de los padres no son más que
mármol e inflexibles, en comparación con el amor
de Dios por sus hijos; les da la crema de su
amor, eligiendo el amor, salvando al amor. "Él se
regocijará por ti con alegría; descansará en su amor;
se regocijará por ti con cánticos". Sofonías 3:17.
Ningún padre como Dios por amor; si eres su hijo, no
puedes amar tu propia alma tan completamente
como él te ama a ti.
(5) Él es el mejor Padre, para las RIQUEZAS. Tiene
tierra suficiente para dar a todos sus hijos; tiene
riquezas inescrutables. Efesios 3: 8. Él da el maná
escondido, el árbol de la vida, ríos de alegría. Tiene
tesoros que no se pueden agotar, puertas de perlas,
placeres que no se pueden acabar. Si los padres
terrenales estuvieran dando alguna vez, no les
quedaría nada para dar; pero Dios siempre está
dando a sus hijos y, sin embargo, no tiene menos. Sus
riquezas se imparten, no se deterioran ; como el sol
que todavía brilla, y sin embargo no tiene menos luz.
No puede ser pobre quien es infinito. Por eso es el
mejor Padre; da más a sus hijos de lo que cualquier
padre o príncipe puede otorgar.
(6) Dios es el mejor Padre, porque puede
REFORMAR a sus hijos. Cuando su hijo toma malos
cursos, un padre no sabe cómo

hacerlo mejor; pero Dios sabe cómo mejorar a sus

hijos elegidos: puede cambiar sus corazones. Cuando
Pablo estaba exhalando persecución contra los
santos, Dios pronto cambió su curso y lo puso en
oración. "He aquí, él ora". Hechos 9:11. Ninguno de
los que pertenecen a la elección es tan tosco y
tosco, pero Dios puede pulirlos con su gracia y
hacerlos aptos para la herencia.
(7) Dios es el mejor Padre, porque NUNCA
MUERE. "El único que tiene la inmortalidad". 1 Tim.
6:16. Los padres terrenales mueren y sus hijos están
expuestos a muchas heridas, pero Dios vive para
siempre. "Yo soy Alfa y Omega, el principio y el
final". Apocalipsis 1: 8. La corona de Dios no tiene
sucesores.
¿En qué radica la dignidad de quienes tienen a
Dios por Padre?
(1) Tienen mayor honor que el conferido a los
príncipes de la tierra; son preciosos en la estima
de Dios. "Desde que eras preciosa a mis ojos, has
sido honorable". Isaías 43: 4. Los impíos son escoria
(Salmo 119: 119) —y paja (Salmo 1: 4); pero Dios
cuenta a sus hijos entre sus joyas. Mal 3:17. Escribe
los nombres de todos sus hijos en el libro de la vida.
"Cuyos nombres están en el libro de la vida".
Filipenses 4: 3. Entre los romanos, los nombres de
sus senadores estaban escritos en un libro. Dios
inscribe los nombres de sus hijos y no los borrará del
registro. "No borraré su nombre del libro de la vida".
Apocalipsis 3: 5. Dios no se avergonzará de sus hijos.
"Dios no se avergüenza de ser llamado su Dios".
Hebreos 11:16. Uno podría pensar que es algo por
debajo de Dios: engendrar hijos que están mezclados
con polvo y pecado; pero no se avergüenza de ser
llamado nuestro Dios. Para que veamos que no se
avergüenza de sus hijos, escribe su propio nombre
en ellos. "Escribiré sobre él el nombre de mi Dios"; es
decir, lo reconoceré abiertamente ante todos los
ángeles, como mi hijo. Escribiré mi nombre sobre él,
como el hijo lleva el nombre de su padre. Apocalipsis
3:12. ¡Qué honor y qué dignidad es esto!
(2) Dios confiere títulos honorables a sus hijos.
Los llama los excelentes de la tierra , o los magníficos,
como Junius lo traduce. Salmo 16: 3. ¡Deben ser
excelentes los que son de la sangre real del cielo! Son
los fénix espirituales del mundo, la gloria de la
creación. Dios llama a sus hijos su gloria. "Israel, mi
gloria". Isaías 46:13. Él

honra a su pueblo con el título de reyes . "Y nos ha

hecho reyes". Apocalipsis 1: 6. Todos los hijos de Dios
son reyes, aunque no tienen reinos terrenales.
Llevan un reino sobre ellos. "El reino de Dios está
dentro de ti". La gracia es un reino establecido en los
corazones de los hijos de Dios. Lucas 17:21. Son reyes
para gobernar sobre sus pecados, para atar a esos
reyes con cadenas. Salmo 149: 8. Son como reyes.
Tienen sus insignias de realeza y majestad. Tienen
su corona. En esta vida son reyes disfrazados; no se
les conoce, por eso están expuestos a la pobreza y al
reproche. "Ahora somos hijos de Dios, y aún no
parece que seamos". 1 Juan 3: 2. ¿Qué seremos
nosotros? Todo hijo de Dios tendrá su corona de
gloria y vestiduras blancas. 1 Pedro 5: 4; Apocalipsis
6: 2: Las túnicas significan dignidad, y el blanco
significa santidad.
(3) ¡ El honor de aquellos que tienen a Dios por
Padre es que todos son herederos! El hijo menor
es heredero. Los hijos de Dios son herederos de las
cosas de esta vida. Dios siendo su Padre, tienen el
mejor título sobre las cosas terrenales, tienen un
derecho santificado sobre ellas. Aunque a menudo
tienen la menor participación, tienen el mejor
derecho; y con lo que tienen tienen la bendición del
amor y el favor de Dios. Otros pueden tener más
carne de venado, pero los hijos de Dios tienen más
bendiciones. Por tanto, son herederos de las cosas de
esta vida. Son herederos del mundo eterno.
"Herederos de la salvación" (Heb 1,14); "Coherederos
con Cristo" (Romanos 8:17). Son copartícipes de
Cristo en la gloria. Entre los hombres, el hijo mayor
comúnmente se lleva todo; pero los hijos de Dios son
todos coherederos con Cristo, tienen una
coparticipación con él en sus riquezas. ¿Tiene Cristo
un lugar en las mansiones celestiales? También los
santos. "En la casa de mi Padre hay muchas
mansiones. Voy a prepararles un lugar". Juan 14: 2.
¿Tiene el amor de su Padre? Ellos también. "Para
que el amor con que me has amado esté en ellos".
Salmo 146: 8; Juan 17:26. ¿Se sienta en un trono?
También los hijos de Dios. Apocalipsis 3:21. ¡Qué
gran honor es este!
(4) Dios hace a sus hijos iguales en honor a los
ángeles. Lucas 20:36. Son iguales a los ángeles; es
más, aquellos santos que tienen a Dios por Padre,
son en cierto sentido superiores a los ángeles;
porque Jesucristo, habiendo tomado nuestra
naturaleza, la ha ennoblecido y honrado por encima
de lo angelical. Hebreos 2:16. Dios ha hecho a sus
hijos, por adopción, más cercanos a él que los
ángeles. Los ángeles son los amigos de Cristo: los
creyentes son sus miembros

—Y este honor tienen todos los santos. ¡Qué consuelo

es esto para los hijos de Dios que son aquí
despreciados y cargados de calumnias e invectivas!
"Somos hechos como la inmundicia del mundo", etc.
1 Cor 4, 13. Pero Dios honrará a sus hijos en el último
día y los coronará con bienaventuranza inmortal,
¡para envidia de sus adversarios!
¿Cómo podemos saber que Dios es nuestro Padre?
No todos pueden decir: "Padre nuestro". Los judíos
se jactaban de que Dios era su Padre. "Tenemos un
solo Padre, Dios". Juan 8:41. Cristo les dice su
verdadero pedigrí. "¡Eres de tu padre el diablo!" ver
44. Aquellos que son de espíritus satánicos, y hacen
uso de su poder para vencer el poder de la piedad,
no pueden decir: Dios es su Padre; pueden decir:
"Padre nuestro, que está en el infierno". Entonces,
¿cómo podemos saber que Dios es nuestro Padre?
(1) Al tener una disposición DE NIÑO , que se ve
en cuatro cosas.
[1] Derretirse en lágrimas por el PECADO , como
llora un niño por ofender a su padre. Cuando Cristo
miró a Pedro, y Pedro recordó su pecado al negarlo
, se puso a llorar. Clement informa de Peter: que
nunca escuchó el canto de un gallo, pero que lloró.
Es una señal de que Dios es nuestro Padre cuando se
quita el corazón de piedra , y hay un deshielo lleno
de gracia en el corazón; y se derrite en lágrimas por
el pecado. El que tiene un corazón de niño, llora por
el pecado de una manera espiritual, ya que es un
pecado por el que se lamenta, ya que es un acto de
contaminación. El pecado desflora el alma virgen;
desfigura la imagen de Dios; convierte la belleza en
deformidad; se llama la plaga del corazón . 1 Reyes
8:38. Un hijo de Dios se lamenta por la
contaminación del pecado; el pecado tiene para él
un aspecto más negro que el infierno.
El que tiene un corazón de niño, se aflige por el
pecado, ya que es un acto de enemistad hacia Dios.
El pecado se opone diametralmente a Dios. Se llama
caminar en contra de Dios. "Si confesaran su
iniquidad y que se oponían a mí". Levítico 26:40.
Hace todo lo que puede para fastidiar a Dios; si Dios
es de una mente, el pecado será de otra; el pecado no
solo destronaría a Dios, sino que golpearía su propio
ser. Si el pecado pudiera evitarlo , ¡Dios ya no sería
Dios! Un corazón de niño se aflige por esto; "¡Oh!"
dice ella, "¡para que tuviera tanta enemistad en mí,
que mi voluntad no se sometiera más a la voluntad
de mi Padre celestial!" De esto surge una fuga de

dolor.
Un corazón de niño llora por el pecado, ya que es un
acto de ingratitud. Es un abuso del amor de Dios; es
tomar las joyas de sus misericordias y usarlas para
pecar. Dios ha hecho más por sus hijos que otros; ha
plantado su gracia y les ha dado algunos indicios de
su favor; y pecar contra la bondad, tiñe el pecado en
grano y lo vuelve carmesí; como Absalón, quien tan
pronto como su Padre lo besó y lo tomó en gracia,
tramó traición contra él. Nada derrite tanto en
lágrimas un corazón infantil como los pecados de
crueldad. "¡Ojalá pecara contra la sangre de un
Salvador y los afectos de un Padre! Condeno la
ingratitud en mi hijo, pero soy culpable de ingratitud
contra mi Padre celestial". Esto abre una vena de
tristeza piadosa y hace que el corazón sangre de
nuevo. Ciertamente, evidencia que Dios es nuestro
Padre, cuando nos ha dado un corazón de niño,
llorar por el pecado como es pecado, un acto de
contaminación, enemistad e ingratitud. Un hombre
inicuo puede llorar por el amargo fruto del
pecado, pero solo un hijo de Dios puede lamentarse
por la odiosa naturaleza del pecado.
[2] Una disposición infantil es estar lleno de
SIMPATÍA. Tomamos en serio las deshonras
reflejadas en nuestro Padre celestial. Cuando vemos
su adoración adulterada, y su verdad mezclada con
el veneno del error, es como una espada en nuestros
huesos, al ver sufrir su gloria. "Vi a los transgresores
y me entristecí". Salmo 119: 158. Homero, al
describir el dolor de Agamenón cuando se vio
obligado a sacrificar a su hija Ifigenia, trae a todos
sus amigos llorando y condolendo con él; de modo
que, cuando se deshonra a Dios, nos
compadecemos, y estamos, por así decirlo, vestidos
de luto. Un niño que tiene alguna buena naturaleza,
se hiere de corazón al oír reproches a su padre; de
modo que un heredero del cielo toma una deshonra
hecha a Dios, más atroz que una deshonra hecha a sí
mismo.
[3] Una disposición infantil es AMAR a nuestro
Padre celestial. Es antinatural el que no ama a su
padre. Dios, coronado de excelencia, es el verdadero
objeto de deleite; y todo verdadero hijo de Dios dice
como Pedro: "¡Señor, tú sabes que te amo!" Pero,
¿quién no dirá que ama a Dios? Si el nuestro es un
amor verdadero y genuino a nuestro Padre celestial ,
puede ser conocido por los efectos. Entonces
tenemos un miedo santo . Está el miedo que surge
del amor a Dios, de perder las señales visibles de su
presencia. "El corazón de Elí tembló por el arca". 1
Sam 4:13. No se dice su corazon
tembló por sus dos hijos Ofni y Finees; pero su
corazón temblaba por el arca, porque el arca era la
señal especial de la presencia de Dios; y si eso fuere
tomado, la gloria se fue. El que ama a su Padre
celestial, teme que las señales de su presencia sean
quitadas, que la profanación se desate como una
inundación, que el papado avance y Dios se aleje de
su pueblo.
La presencia de Dios en sus ordenanzas es la gloria y
la fuerza de una nación. Los troyanos tenían la
imagen de Dallas, y tenían la opinión de que
mientras esa imagen se conservara entre ellos,
nunca serían conquistados; así que, mientras la
presencia de Dios esté con un pueblo, estarán a
salvo. Todo verdadero hijo de Dios teme que Dios se
vaya y que la gloria se vaya . Intentemos con esto si
tenemos una disposición infantil. ¿Amamos a Dios, y
este amor causa temor y celos? ¿Tenemos miedo de
perder la presencia de Dios, de que el Sol de Justicia
se salga de nuestro horizonte? Muchos tienen miedo
de perder algunos de sus beneficios mundanos , pero
no de perder la presencia de Dios. Si pueden tener
salud y riqueza, no les importa lo que suceda con el
arca de Dios. Un verdadero hijo de Dios no teme
tanto como a la pérdida de la presencia de su Padre.
"¡Ay de ellos cuando me aparte de ellos!" Os 9:12.
El amor a nuestro Padre celestial se ve al amar a sus
hijos. "Todo el que ama al Padre ama también a sus
hijos". 1 Juan 5: 1. Si amamos a Dios, cuanto más lo
vemos en cualquiera, más los amamos. Entonces
amamos a pesar de que son pobres , como a un niño
le encanta ver la foto de su padre, aunque colgada
en un marco pobre. Amamos a los hijos de nuestro
Padre, aunque son perseguidos . "Onesíforo no se
avergonzó de mi cadena". 2 Timoteo 1:16.
Constantino besó el agujero del ojo de Paphnusius,
porque sufrió la pérdida de su ojo por Cristo. No
aman a Dios, quienes no aman a sus hijos; no les
importa su compañía; tienen un disgusto y una
antipatía secretos contra ellos. Los hipócritas fingen
una gran reverencia hacia los santos difuntos ;
canonizan a los santos muertos , ¡pero persiguen a
los vivos ! Puedo decir de estos, como el apóstol en
Hebreos 12: 8: son "bastardos, no hijos".
Si amamos a nuestro Padre celestial, seremos
defensores de él y defenderemos su verdad. El que
ama a su padre, abogará por él cuando sea injuriado
o injuriado. No tiene corazón de niño, no ama a Dios,
que puede oír su nombre deshonrado y callar.
¿Cristo

aparece por nosotros en el cielo, y ¿tenemos miedo

de aparecer por él en la tierra? Los que no se
atreven a poseer a Dios y a la religión verdadera en
tiempos de peligro, Dios se avergonzará de ser
llamado su Dios; será un reproche para él tener hijos
que no le pertenezcan.
Un amor infantil a Dios se conoce por su grado .
Amamos a nuestro Padre que está en los cielos sobre
todas las demás cosas; por encima de la propiedad, o
las relaciones, como el petróleo corre por encima del
agua. Salmo 73:25. Un hijo de Dios que ve una
supereminencia de bondad y una constelación de
todas las bellezas en Dios, se lleva a cabo en amor
por él en la medida más elevada. Así como Dios les
da a sus hijos un amor que elige, tal como no les da a
los malvados, así sus hijos le dan a él tal amor que
no le dan a nadie más. Le dan la flor y lo mejor de su
amor; lo aman con un amor unido a la adoración;
este vino especiado lo guardan solo para que beba su
Padre. Cánticos 8: 2.
[4] Se ve una disposición infantil en HONRAR a
nuestro Padre celestial. "Un hijo honra a su padre".
Mal 1: 6.
Mostramos nuestro honor a nuestro Padre que está
en los cielos, al tener sobre nosotros un temor
reverencial de él. "Temerás a tu Dios". Levítico 25:17.
Este temor reverencial de Dios, es cuando no nos
atrevemos a hacer nada que él haya prohibido en su
Palabra. "¿Cómo puedo hacer esta gran maldad y
pecar contra Dios?" Génesis 39: 9. Es parte del honor
que un hijo le da a un padre: que teme disgustarlo.
Mostramos nuestro honor a nuestro Padre celestial,
haciendo todo lo posible para exaltarlo y hacer
brillar sus excelencias. Aunque no podemos elevarlo
más alto en el cielo, podemos elevarlo más alto en
nuestro corazón y en la estima de los demás. Cuando
hablamos bien de Dios, expongamos su renombre,
exhibamos los trofeos de su bondad; cuando le
atribuimos la gloria de todo lo que hacemos; cuando
somos los trompetistas de su alabanza — esto es
honrar a nuestro Padre que está en los cielos — y
una señal segura de un corazón de niño. "Cuyo
ofrece alabanza, me glorifica". Salmo 123.
(2) Podemos saber que Dios es nuestro Padre al
parecernos a él. El niño es la imagen de su padre.
"Cada uno se parecía a los hijos de un rey", todo hijo
de Dios se parece al rey del cielo. Jueces 8:18. En
esto, los hijos adoptivos de Dios y los hijos adoptivos
del hombre difieren. Un hombre adopta uno para su
hijo y heredero, que no se le parece en absoluto;
pero todo el que Dios adopta para su hijo es como él;
él no solo lleva la de su Padre celestial

nombre, pero su imagen. "Y se han vestido del

hombre nuevo, que se renueva a la imagen del que
lo creó". Col 3:10.
El que tiene a Dios por Padre, se le parece en
santidad, que es la gloria de la Deidad. Éxodo 15:11.
La santidad de Dios es la pureza intrínseca de su
esencia. El que tiene a Dios por Padre, participa de la
naturaleza divina ; aunque no de la divina
esencia -yet de la semejanza divina; así como el sello
pone su impresión y semejanza sobre la cera, así el
que tiene a Dios por Padre, tiene estampada la
impresión y la imagen de su santidad. "Aarón, el
santo del Señor". Salmo 106: 16. Los hombres inicuos
desean ser como Dios en el futuro en gloria, pero no
quieren ser como él aquí en gracia; le dan al mundo
que Dios es su Padre, pero no tienen nada de Dios
que se vea en ellos; son inmundos: no sólo están sin
su imagen, sino que la odian.
(3) Podemos saber que Dios es nuestro Padre al tener su
ESPÍRITU en nosotros.
[1] Al tener la INTERCESIÓN del Espíritu. Es un
espíritu de oración. "Porque sois hijos, Dios ha
enviado el Espíritu de su Hijo a vuestros corazones,
clamando Abba, Padre". Gá 4: 6. La oración es el
respiro del alma en el seno de su Padre celestial.
Ninguno de los hijos de Dios nace mudo. [El Espíritu
Santo llena su instrumento, y el Espíritu de Dios toca
los corazones de los santos como hilos de
arpa. Prosper] "He aquí, él ora". Hechos 9:11. Pero no
es toda oración la que evidencia el Espíritu de Dios
en nosotros. Los que no tienen gracia, pueden
sobresalir en dones y afectar el corazón de otros en
la oración, cuando su propio corazón no se ve
afectado; como el laúd hace un sonido dulce en los
oídos de los demás, pero en sí mismo no es sensible.
¿Cómo sabremos que nuestras oraciones están dirigidas por
el Espíritu?
Cuando no sólo son vocales, sino también mentales;
cuando no son sólo regalos, sino gemidos. Romanos
8:26. La mejor música está en concierto: la mejor
oración es cuando el corazón y la lengua se unen en
concierto.
Cuando son celosos y fervientes. "La oración eficaz y
ferviente del justo vale mucho". Santiago 5:16.
Cuando los ojos se derriten en oración y el corazón
arde. El fervor es la oración, como el fuego del
incienso, que lo hace ascender al cielo como un
dulce perfume.

Cuando la oración tiene la fe mezclada con ella. La

oración es la llave del cielo, y la fe es la mano que
la hace girar. "Lloramos, Abba, Padre". Romanos
8:15. "Lloramos", hay fervor en la oración; "Abba,
Padre", hay fe. Esas oraciones naufragan, que caen
sobre la roca de la incredulidad . Podemos saber que
Dios es nuestro Padre, al tener su Espíritu orando en
nosotros; como Cristo intercede arriba, así el
Espíritu intercede por dentro.
[2] Al tener la RENOVACIÓN del Espíritu, que no es
otra cosa que la regeneración , que se llama nacer del
Espíritu. Juan 3: 5. Esta obra regeneradora del
Espíritu es una transformación o cambio de
naturaleza. "Transfórmate con la renovación de tu
mente". Romanos 12: 2. El que ha nacido de Dios
tiene un corazón nuevo: nuevo, no por
sustancia, sino por cualidades. Las cuerdas de un
violín pueden ser las mismas, pero la melodía está
alterada. Ahora, hay dolores espirituales, mucho
que rompe el corazón por el pecado. Se llama
circuncisión del corazón . Col 2:11. En la circuncisión
hubo dolor en la carne; así que en la circuncisión
espiritual hay dolor en el corazón; hay mucho dolor
que surge de un sentimiento de culpa e ira. El
temblor del carcelero fue una punzada en el nuevo
nacimiento. Hechos 16:29. El Espíritu de Dios es un
espíritu de esclavitud, antes que Él es un espíritu de
adopción . Esta bendita obra de regeneración se
extiende por toda el alma; irradia la mente; consagra
el corazón y reforma la vida. Aunque la
regeneración es solo en parte, sin embargo está en
todas partes. 1 Tesalonicenses 5:23. La regeneración
es la firma y el grabado del Espíritu Santo en el alma,
el cristiano recién nacido está adornado con las
joyas de las gracias, que son la gloria de los ángeles.
La regeneración es la fuente de todo verdadero gozo.
En nuestro primer nacimiento, venimos llorando al
mundo, pero en nuestro nuevo nacimiento hay
motivo de regocijo; por ahora, Dios es nuestro
Padre, y somos engendrados para una esperanza
viva de gloria. 1 Pedro 1: 3. Podemos probar con esto
nuestra relación con Dios. ¿Ha pasado sobre
nuestras almas una obra regeneradora del Espíritu
de Dios? ¿Estamos hechos de otro espíritu, humilde y
celestial? Esta es una buena señal de filiación, y
podemos decir: "Padre nuestro que estás en los
cielos".
[3] Sabemos que Dios es nuestro Padre por tener la
CONDUCTA del Espíritu. Somos guiados por el
Espíritu. "Todos los que son guiados por el Espíritu
de Dios, son hijos de Dios". Romanos 8:14. El Espíritu
de Dios no sólo se aceleraba nosotros en nuestros
regeneración, pero conduce a nosotros hasta que
llegamos al final de nuestra fe. No es suficiente que
el niño tenga vida, pero debe ser guiado en cada paso
por la

padre. "Le enseñé a Ephraim a ir, tomándolos del

brazo". Os 11: 3. Así como los israelitas tenían la
nube y la columna de fuego para ir delante de ellos y
ser una guía para ellos, el Espíritu de Dios es una
guía para ir delante de nosotros y conducirnos a
toda la verdad y aconsejarnos en todas nuestras
dudas e influencia nosotros en todas nuestras
acciones. "Me guiarás con tu consejo". Salmo 73:24.
Nadie puede llamar a Dios Padre sino aquellos que
tienen la conducta del Espíritu. Prueba entonces el
espíritu que te guía. Los que son guiados por un
espíritu de envidia, lujuria y avaricia , ¡no son
guiados por el Espíritu de Dios! ¡Sería una blasfemia
para ellos llamar a Dios su Padre! Son guiados por el
espíritu de Satanás y pueden decir: "Padre nuestro,
que está en el infierno".
[4] Al tener el TESTIGO del Espíritu. "El Espíritu
mismo da testimonio a nuestro espíritu de que
somos hijos de Dios". Romanos 8:16. Este testimonio
del Espíritu, que sugiere que Dios es nuestro Padre,
no es un testimonio vocal o una voz del cielo. El
Espíritu en la Palabra da testimonio: el Espíritu en la
Palabra dice: el que odia el pecado y ama la
santidad, es un hijo de Dios y Dios es su Padre. Si
puedo encontrar tales calificaciones obradas en mi
corazón, es el Espíritu testificando con mi espíritu
que soy un hijo de Dios. Podemos llevarlo más alto.
El Espíritu de Dios da testimonio de nuestro espíritu
al hacer impresiones más que ordinarias en nuestro
corazón, y dar algunas pistas secretas y susurros de
que Dios tiene propósitos de amor para con
nosotros, lo cual es un testimonio concurrente del
Espíritu con la conciencia, de que somos herederos
de el cielo y Dios es nuestro Padre. Este testimonio se
siente mejor que se expresa ; dispersa dudas y
miedos, y silencia las tentaciones. Pero, ¿qué hará el
que no tenga este testimonio del Espíritu? Si nos
falta el testimonio del Espíritu, trabajemos para
encontrar la obra del Espíritu; si no tenemos el
Espíritu testificando , trabajemos para que él
santifique , y eso será un apoyo para nosotros.
(4) Si Dios es nuestro Padre, somos de espíritu
pacífico. "Bienaventurados los pacificadores, porque
ellos serán llamados hijos de Dios". Mateo 5: 9. Grace
infunde una disposición dulce y amistosa; limpia la
dureza del espíritu de los hombres; convierte la
fiereza de león en una dulzura de cordero. Aquellos
que tienen a Dios como su Padre, siguen tanto la paz
como la santidad. Dios Padre es llamado "Dios de
paz", Heb 13:20: Dios Hijo, el "Príncipe de paz", Isaías
9: 6: Dios Espíritu Santo, Espíritu de paz; "la unidad
del Espíritu en el vínculo de la paz". Efesios 4: 3. los

más pacífico, más parecido a Dios. Dios no es el

Padre de aquellos que son feroces y crueles, ¡como
si, con Romulus, hubieran chupado la leche de un
lobo! "Camino de paz no han conocido". Romanos
3:17. Se divierten con travesuras y tienen un espíritu
perseguidor, como Maximino, Diocleciano, Antíoco,
quien, como dice Eusebio, realizó viajes más tediosos
y corrió más peligros al vejar y perseguir a los judíos
que cualquiera de sus predecesores para obtener
victorias. Estas furias no pueden llamar a Dios su
Padre. Si lo hacen, tendrán tan poco consuelo al
decir Padre, como lo tuvo Dives en el infierno,
cuando dijo: "Padre Abraham". Lucas 16:24.
Tampoco los que hacen división. "Marca a los que
causan divisiones y evítalos". Romanos 16:17. Los
que nacen de Dios son hacedores de paz. ¿Qué
pensaremos de los que crean divisiones? ¿Dios los
engendrará? El diablo hizo la primera división en el
cielo. ¡Pueden llamar al diablo su padre! Pueden
poner el pie hendido en su escudo de armas; su
música más dulce está en discordia; se unen para
dividir. Las colas de zorro de Sansón se ataron
juntas solo para prender fuego al maíz filisteo.
Jueces 15: 4. Los papistas se unen solo para
incendiar la paz de la iglesia. El reino de Satanás
crece al hacer divisiones. Crisóstomo observa de la
iglesia de Corinto, que cuando se trajeron muchos
conversos, Satanás no conocía mejor manera de
contener la corriente de la religión que arrojar una
manzana de contienda y dividirlos en partes: una
era para Pablo, y otro para Apolo, pero pocos para
Cristo. ¿Puede Cristo soportar que su cuerpo se
rasgue? Seguramente Dios nunca engendrará a
aquellos que no son hijos de paz. De todos aquellos a
quienes Dios odia, se le nombra en honor a uno que
es un sembrador de discordia entre los hermanos.
Proverbios 6:19.
(5) Si Dios es nuestro Padre, nos encantará estar
cerca de él y conversar con él. Un niño sincero se
deleita en acercarse a su padre e ir a su presencia.
David envidió a los pájaros que construían su nido
cerca de los altares de Dios, cuando fue excluido de
la casa de su Padre. Salmo 84: 3. A los verdaderos
santos les encanta acercarse lo más posible a Dios.
En la Palabra se acercan a su santo oráculo; en la
Cena del Señor se acercan a su mesa. Un hijo de Dios
se deleita en estar en la presencia de su Padre; no
puede mantenerse lejos de Dios por mucho tiempo;
su corazón a menudo ha sido derretido y vivificado
en una ordenanza; ha gustado que el Señor es
bueno, por eso le encanta estar en la presencia de su
Padre; no puede alejarse mucho de

Dios. Los que no se preocupan por las ordenanzas

no pueden decir: "Padre nuestro que estás en los
cielos". ¿Es Dios el Padre de aquellos que no pueden
soportar estar en su presencia?
Utilice 1. Para INSTRUCCIONES. Vea la asombrosa
bondad de Dios, que se complace en entrar en la
dulce relación de un Padre para con nosotros. No
tenía necesidad de no adoptarnos. Él no necesitaba
un hijo, ¡pero nosotros necesitábamos un Padre!
Mostró poder al ser nuestro Hacedor, pero
misericordia al ser nuestro Padre. Cuando éramos
enemigos, y nuestros corazones se destacaban como
guarniciones contra Dios, él conquistó nuestra
terquedad y nos hizo sus hijos. Escribió su nombre,
puso su imagen sobre nosotros y nos otorgó un reino
de gloria. ¡Qué milagro de misericordia es este!
"¡Cuán grande es el amor que el Padre nos ha dado,
para que seamos llamados hijos de Dios! ¡Y eso es lo
que somos!" 1 Juan 3: 1. Todo niño adoptado puede
decir: "Aun así, padre, porque así le pareció bien".
Mateo 11:26.
Si Dios es un Padre, entonces infiero que todo lo que
hace a sus hijos es amor.
(1) Si les sonríe en PROSPERIDAD, es en amor.
Tienen el mundo no sólo con la de Dios
permiso -pero con su amor . Le dice a cada uno de
sus hijos, como Naamán a Giezi: "Toma dos
porciones". Entonces Dios le dice a su hijo: "Yo soy tu
Padre; toma dos porciones. Toma la salud, y llévate
mi amor con ella; toma una propiedad, y llévate mi
amor con ella. ¡Toma dos porciones!" Su amor es un
ingrediente endulzante en toda misericordia.
¿Cómo parece que Dios da a sus hijos cosas
mundanas con amor?
Porque tiene un buen título para ellos. Dios es su
padre, por eso tiene un buen título. Un hombre
malvado tiene un título civil sobre la criatura, pero
nada más; no lo tiene de la mano de un padre; es
como quien toma tela en la cortina, y no se paga.
Pero un creyente tiene un buen título sobre cada
metro de tierra que tiene, ¡porque su Padre lo ha
establecido sobre él!
Un hijo de Dios tiene las cosas del mundo en el amor,
porque le son santificadas. Lo hacen mejor y son
piedras de carga para acercarlo más a Dios. Tiene la
bendición de su Padre con ellos. Un poco que es
bendecido por Dios, es dulce. "Él bendecirá tu pan y
tu agua". Éxodo 23:25.

Esaú tenía la carne de venado, pero Jacob recibió la

bendición . Mientras los malvados tienen su comida
salteada con la ira de Dios ; los creyentes tienen sus
comodidades sazonadas con la bendición de Dios.
Salmo 78:30, 31. Fue una bendición sagrada de Dios,
que hizo que las verduras de Daniel lo nutrieran
más y lo hiciera lucir más hermoso que aquellos que
comían de la comida del rey. Dan 1:15.
Un hijo de Dios tiene las cosas del mundo en el amor,
porque todo lo que tiene es prenda de más; ¡Cada
pedazo de pan es prenda de gloria!
(2) Dios siendo Padre, si frunce el ceño, si moja la
pluma en hiel y escribe cosas amargas, si
DISCIPLINA, ¡ todo se hace con amor! Un padre
también ama a su hijo cuando lo castiga y lo
disciplina , como cuando le da su herencia. " A los
que amo, reprendo y disciplino ". Apocalipsis 3:19.
"Las aflicciones son flechas afiladas", dice uno
, "¡pero son disparadas por la mano de un Padre
amoroso!" La corrección es el gimnasio de Dios. La
corrección es la escuela de carácter de Dios. Dios
aflige a sus hijos, ¡con amor! Lo hace para humillar y
purificar . La corrección suave es tan necesaria como
el pan de cada día; es más, tan necesario como las
ordenanzas, como la Palabra y los sacramentos. ¡Hay
amor en todos! Dios golpea para salvar. "Porque el
Señor disciplina al que ama y castiga a todo el que
recibe por hijo". Hebreos 12: 6. "Dios nos disciplina
para nuestro bien, para que podamos participar de
su santidad". Hebreos 12:10
(3) Dios es Padre, si MERECE y oculta su rostro a
su hijo, está enamorado. La deserción espiritual es
triste en sí misma: es un infierno breve. Job 6: 9.
Cuando se retira la luz, cae el rocío. Sin embargo,
podemos ver un arco iris en la nube -nos puede ver
el amor de un padre en todo esto. Dios por la
presente da vida a la gracia. Quizás la gracia
permaneciera dormida. Cánticos 5: 2. Fue como
fuego en las brasas , y Dios retiró el consuelo para
vigorizarlo y ejercitarlo. La fe como una estrella, a
veces brilla más en la noche oscura de la deserción.
Jonás 2: 4. Cuando Dios esconde su rostro de su hijo,
todavía es un Padre y su corazón está hacia su hijo.
Como cuando José habló ásperamente a sus
hermanos y les hizo creer que los tomaría por
espías, su corazón estaba lleno de amor y se alegró
de ir a un lado y llorar. Así, los afectos de Dios
anhelan a sus hijos cuando parece mirarlos con
dureza. "En un poco de ira escondí mi rostro de
ti, pero con bondad eterna tendré misericordia de
ti". Isaías 54: 8. Aunque Dios tenga la apariencia de
un enemigo, ¡ aún tiene el corazón de un Padre!

Aprende de ahí el deplorable caso de los malvados.

No pueden decir: "Padre nuestro que estás en los
cielos". Pueden decir: "Juez nuestro", pero no "Padre
nuestro". Traen su pedigrí del infierno: "Eres de tu
padre, el diablo". Juan 8:44. Los inmundos y
mundanos son la vil linaje de la serpiente antigua, y
sería una blasfemia para ellos llamar a Dios su
Padre. El caso de los malvados es deplorable; si están
en la miseria, no tienen ante quien gemir. ¡Dios no
es su Padre! Él niega a todos los parientes con ellos.
"¡Nunca te conocí! Apártate de mí, tú que obra la
iniquidad". Mateo 7:23. Los malvados, que mueren
en sus pecados, no pueden esperar misericordia de
Dios como Padre. Muchos dicen: El que los hizo , los
salvará ; pero "es un pueblo sin entendimiento; por
tanto, el que los hizo , no tendrá misericordia de
ellos". Isaías 27:11. Aunque Dios era su Padre por
creación, sin embargo, como no eran sus hijos por
adopción, el que los hizo no los salvaría .
Utilice 2. Para INVITACIÓN. Que todos los que aún
son extraños a Dios, trabajen para entrar en esta
parentela celestial; nunca cesen hasta que puedan
decir: "Padre nuestro que estás en los cielos".
Pero, ¿será Dios un Padre para mí, que ha profanado
su nombre y ha sido un gran pecador?
Si ahora por fin buscas a Dios por medio de la
oración y rompes tus pecados, él tiene el afecto de
un Padre por ti y nunca te echará fuera. Cuando el
hijo pródigo se levantó y fue a ver a su padre, "su
padre tuvo compasión, y corrió, se echó sobre su
cuello y lo besó". Lucas 15:20. Aunque has sido un
hijo pródigo, y casi has gastado todo en tus
deseos, sin embargo, si das una carta de divorcio por
tus pecados y huyes a Dios mediante el
arrepentimiento, debes saber que él tiene los afectos
de un Padre; te abrazará en los brazos de su
misericordia y sellará tu perdón con un beso. ¿Y si
tus pecados han sido atroces? Tu herida no es tan
ancha como el yeso de la sangre de Cristo. El mar
cubre grandes rocas. ¡De la misma manera, el mar de
la compasión de Dios puede ahogar tus grandes
pecados! Por lo tanto, no te desanimes, ve a Dios,
decide arrojarte a su compasión paternal. Él puede
ser suplicado por ti, como lo fue por Manasés. 2
Crónicas 33:13. "No importa cuán profunda sea la
mancha de tus pecados, puedo quitarla. Puedo
dejarte tan limpio como la nieve recién caída.
Incluso si estás manchado de rojo como el carmesí,
puedo hacer

¡Tú, blanco como la lana! "Isaías 1:18

Utilice 3. Para mayor comodidad. Aquí hay
consuelo para aquellos que pueden, con buenos
motivos, llamar a Dios su Padre. ¡Hay más dulzura
en esta palabra Padre, que si tuviéramos diez mil
mundos! David pensó que era un gran asunto ser
yerno de un rey. "¿Cuál es la familia de mi padre,
para que yo sea yerno del rey?" 1 Sam 18:18. Pero,
¿qué es nacer de Dios y tenerlo por Padre?
¿Dónde radica la felicidad de tener a Dios por Padre?

Ñ Á
(1) Si Dios es nuestro Padre, nos ENSEÑARÁ. ¿Qué
padre se negará a aconsejar a su hijo? Comando
hace Dios a los padres que enseñen a sus hijos, y no
que instruir a sus hijos? Deuteronomio 4:10. "Yo soy
el Señor tu Dios, que te enseño a sacar provecho".
Isaías 48:17. "Oh Dios, me has enseñado desde mi
juventud". Salmo 71:17. Si Dios es nuestro Padre, nos
dará las enseñanzas de su Espíritu. "El hombre
natural no recibe las cosas de Dios, ni las puede
conocer". 1 Cor 2:14. El hombre natural puede tener
excelentes nociones en teología, pero Dios debe
enseñarnos a conocer los misterios del evangelio de
una manera espiritual. Un hombre puede ver las
cifras en un cuadrante, pero no puede decir cómo va
el día a menos que brille el sol; de modo que
podemos leer muchas verdades en la Biblia, pero no
podemos conocerlas de manera salvadora hasta que
Dios, por su Espíritu, resplandezca sobre nuestra
alma. Dios enseña no sólo a nuestro oído -pero
nuestro corazón! Él no sólo informa a nuestra
mente -pero inclina nuestra voluntad . Nunca
aprendemos nada, hasta que Dios nos enseña. Si es
nuestro Padre, nos enseñará cómo ordenar nuestros
asuntos con discreción (Salmo 112: 5) y cómo vivir
sabiamente. "David se portó sabiamente". 1 Sam 18:
5. Él nos enseñará qué responder cuando seamos
llevados ante los gobernadores; pondrá palabras en
nuestra boca. "Seréis llevados ante gobernadores y
reyes por mi causa; pero no os preocupéis de cómo o
qué hablaréis; porque no sois vosotros quien
habla, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en
vosotros". Mateo 10:18, 19, 20.
(2) Si Dios es nuestro Padre, tiene un gran AMOR
hacia nosotros. Si es tan antinatural para un padre
terrenal no amar a su hijo, ¿podemos pensar que
Dios puede ser defectuoso en su amor? Todos los
afectos de los padres provienen de Dios, pero no son
más que una chispa de su llama. El es el Padre de
misericordias. 2 Cor 1: 3. Engendra todas las
misericordias y afectos en la criatura; su amor a su
los niños es un amor que traspasa el conocimiento.
Efesios 3:19. Sobrepasa todas las dimensiones; es
más alto que el cielo, es más ancho que el mar.
Para que veas el amor paternal de Dios por sus hijos:
Considera, Dios hace una valoración preciosa de
ellos. "Ya que eras preciosa a mis ojos." Isaías 43: 4.
Un padre valora a su hijo por encima de sus joyas.
Sus nombres son preciosos, porque tienen el propio
nombre de Dios escrito en ellos. "Escribiré sobre él el
nombre de mi Dios". Apocalipsis 3:12. Sus oraciones
son un perfume precioso. Dios embotella sus
lágrimas . Salmo 56: 8. Considera a sus hijos como
una corona de gloria en sus manos. Isaías 62: 3. Dios
ama los lugares donde nacieron, por ellos. "De Sion
se dirá: Este y aquél nació en ella"; este y aquel
creyente nació allí. Salmo 87: 5. Ama la tierra que
pisan sus hijos; de ahí que Judea, la sede de sus hijos
y escogidos, la llama tierra deleitable. Mal 3:12. No
solo fue agradable por la situación y la
fecundidad, sino porque sus hijos, que eran su
Hephzibah , o deleite , vivían allí. Él encarga a los
grandes del mundo que no dañen a sus hijos, porque
sus personas son sagradas. "No permitió que nadie
los hiciera mal, sí, reprendió a los reyes por amor de
ellos, diciendo: ¡No toquéis a mis ungidos !" Salmo
105: 14, 15. Por ungidos se entiende los hijos del Dios
Alto, que tienen la unción del Espíritu y son
apartados para Dios.
Se deleita en su compañía . Le encanta ver su rostro
y escuchar su voz. Cánticos 2:14. No puede
abstenerse de su compañía por mucho tiempo; que
sólo dos o tres de sus hijos se reúnan y oren juntos,
seguramente estará entre ellos. "Donde dos o tres
están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio
de ellos". Mateo 18:20. Lleva a sus hijos en su seno,
como un padre que amamanta al niño de pecho.
Numb 11:12; Isaías 46: 4. Ser llevado en el seno de
Dios muestra cuán cerca están sus hijos de su
corazón. Él está lleno de solícito cuidado por ellos.
É
"Él se preocupa por ti". 1 Pedro 5: 7. Su ojo está
siempre sobre ellos, nunca están fuera de sus
pensamientos. Un padre no siempre puede cuidar de
su hijo, a veces está dormido; pero Dios es un Padre
que nunca duerme. "No se adormecerá ni dormirá".
Salmo 121: 4. No cree que nada sea demasiado
bueno para separarse de sus hijos; les da la miel de
la roca y "vino sobre lías bien refinado". Isaías 25: 6.
Les da tres joyas más valiosas que el cielo: la sangre
de su Hijo, la gracia de su Espíritu y la luz de su
rostro.

Nunca hubo un Padre tan indulgente y cariñoso. Si

tiene un amor mejor que otro, se lo concede; tienen
la crema y la quintaesencia de su amor. "Se
regocijará por ti, descansará en su amor". Sofonías
3:17. Ama a sus hijos con el mismo amor que ama a
Cristo. Juan 17:26. Es el mismo amor, por su
inmutabilidad. Dios no dejará de amar a sus hijos
adoptivos más de lo que amará a Cristo, su Hijo.

(3) Si Dios es nuestro Padre, estará lleno de

SEMPATÍA hacia sus hijos. "Como un padre se
compadece de sus hijos, así el Señor se compadece
de los que le temen". Salmo 103: 13. "¿Es Efraín mi
hijo querido? Mi afecto se aflige por él". Jer 31:20.
Dios se compadece de sus hijos en dos casos.
[1] En caso de enfermedades . Si el niño está
deformado o tiene algún moquillo corporal , el padre
lo compadece. De la misma manera, si Dios es
nuestro Padre, se compadece de nuestras
debilidades, y se compadece de ellas hasta el punto
de curarlas. "He visto sus caminos y lo sanaré". Isaías
57:18. Como tiene afectos que compadecer, también
tiene bálsamo para curar.
[2] En caso de lesiones . Cada golpe al niño va al
corazón del padre; por eso, cuando los santos sufren,
Dios se compadece. "En toda su aflicción, él fue
afligido". Isaías 63: 9. Él hizo, por así decirlo, sangrar
en sus heridas. "Saulo, Saulo, ¿por qué me
persigues?" Cuando se pisó el pie , ¡la cabeza gritó! El
alma de Dios se entristeció por los hijos de Israel.
Jueces 10:16. Como cuando se toca una cuerda de un
laúd, suenan todas las demás; por eso, cuando los
hijos de Dios son heridos, sus afectos suenan. "El que
te toca, toca la niña de sus ojos". Zacarías 2: 8.
(4) Si Dios es nuestro Padre, se dará cuenta de lo
menos bueno que ve en sus hijos. Si sólo hay un
suspiro por el pecado, él lo escucha. "Mi gemido no
te está oculto". Salmo 38: 9. Si sólo sale una lágrima
penitencial del ojo, él la ve. "He visto tus lágrimas".
Isaías 38: 5. Si hay una buena intención , se da cuenta
de ello. "Ya que era tu deseo construir un templo
para Mi nombre, has hecho bien en tener este
deseo". 1 Reyes 8:18. Castiga la maldad intencional y
corona la bondad intencional . "Has hecho bien en
tener este deseo". Se da cuenta de la menor chispa
de gracia en sus hijos. "Sara obedeció a Abraham,
llamándolo señor". 1 Pedro 3: 6. El Espíritu Santo no
menciona

La incredulidad de Sara o la risa de la promesa. Él

pone un dedo sobre la cicatriz , le guiña un ojo a su
falta y sólo se da cuenta de lo bueno que había en
ella: su obediencia a su marido. Es más, ese bien que
los santos apenas notan en sí mismos, Dios lo
observa de manera especial. "Tuve hambre y me
diste de comer; tuve sed y me diste de beber.
Entonces los justos le responderán : Señor, ¿ cuándo
te vimos hambriento y te alimentamos, o sediento y
te dimos de beber? ? " Mateo 25:35, 37. Ellos, por así
decirlo, fueron pasados por alto y negaron sus
propias obras de caridad, pero Cristo se fija en
ellos: "Tuve hambre y me diste de comer". ¡Qué
consuelo es éste! ¡Dios espía lo menos bueno en sus
hijos! Puede ver un grano de maíz escondido bajo la
paja. ¡Puede ver un poco de gracia , escondida bajo
mucha corrupción!
(5) Si Dios es nuestro Padre, aceptará todo lo que
hagamos en buena parte. Aquellos deberes que
nosotros mismos censuramos, él los coronará.
Cuando un hijo de Dios examina sus mejores
deberes, ve tanto pecado adherirse a ellos, que se
confunde. "Señor", dice, "hay más azufre que
incienso en mis oraciones". Pero para su comodidad,
si Dios es su Padre, coronará los deberes que ustedes
mismos censuran. Él ve que hay sinceridad en el
corazón de sus hijos, y este oro, aunque liviano,
tendrá granos de tolerancia. Aunque pueda haber
muchos defectos en los servicios de sus hijos, él no
desechará su ofrenda.
"El Señor sanó al pueblo". 2 Crónicas 30:20. Las
tribus de Israel, limitadas en el tiempo, carecían de
algunas purificaciones legales; sin embargo, debido
a que sus corazones estaban en lo correcto, Dios los
sanó y los perdonó. Acepta la buena intención . 2
Corintios 8:12. Un padre terrenal recibe
amablemente una carta de su hijo pequeño, aunque
tiene manchas y tiene mala ortografía. ¡Qué
borrones hay en nuestras cosas santas! Sin embargo,
nuestro Padre que está en los cielos los acepta. "¡Es
mi hijo!" Dios dice: "Lo miraré, por Cristo, con ojos
misericordiosos".
(6) Si Dios es nuestro Padre, él nos corregirá en
medida. "Te corregiré, en medida." Jer 30:11. Esto lo
hará de dos maneras. Estará en la medida — para la
clase . No nos impondrá más de lo que podamos
soportar. 1 Corintios 10:13. Conoce nuestro marco.
Salmo 103: 14. Él sabe que no somos de acero ni de
mármol, por lo tanto, tratará con suavidad, no
afligirá demasiado. Como el médico sabio, que
conoce el temperamento del cuerpo, no dará
demasiado

medicina fuerte para el cuerpo, ni un grano de más;

así que Dios, que no sólo es el gran Médico, sino que
tiene los afectos de un padre amoroso, no impondrá
cargas demasiado pesadas sobre sus hijos, para que
no desfallezca su espíritu.
Dios corregirá en medida — por duración ; no
dejará que la aflicción dure demasiado. "La vara de
los impíos no reposará sobre la suerte de los justos",
Salmo 125: 3. Puede estar allí, pero no descansar allí.
"No lucharé por siempre". Isaías 57:16. Nuestro
Padre celestial amará por siempre, pero no peleará
por siempre. Los tormentos de los condenados son
para siempre. "El humo de su tormento sube por los
siglos de los siglos". Apocalipsis 14:11. Los impíos
beberán un mar de ira, pero los hijos de Dios sólo
probarán la copa de la aflicción , y su Padre celestial
dirá: "Pase de ellos esta copa". Isaías 35:10.
(7) Si Dios es nuestro Padre, mezclará
misericordia con todas nuestras aflicciones. Si
nos da de beber ajenjo , lo mezclará con miel . En el
arca estaba guardada la vara y el maná ; así que con
la vara de nuestro Padre siempre hay algo de maná .
Los zapatos de Asher eran de hierro y bronce, pero
su pie estaba empapado en aceite . Dt 33:24, 25. La
aflicción es el calzado de bronce que aprieta. Pero
hay misericordia en la aflicción, está el pie mojado
en aceite. Cuando Dios aflige al cuerpo, da paz de
conciencia; hay misericordia en la aflicción. Una
aflicción viene para evitar caer en el pecado; hay
misericordia en una aflicción. Jacob tenía su herida
del muslo en la lucha libre -no fue la aflicción. Pero
cuando vio el rostro de Dios y recibió la bendición
del ángel, hubo misericordia en la aflicción. Génesis
32:30. En cada nube , un hijo de Dios puede ver un
arco iris de misericordia brillando. Así como el
pintor mezcla sombras oscuras y colores brillantes ,
nuestro Padre celestial mezcla lo oscuro y lo
brillante, cruces y bendiciones; ¿Y no es esto una
gran felicidad que Dios controle así su providencia y
mezcle bondad con severidad?
(8) Si Dios es nuestro Padre, el maligno no
prevalecerá contra nosotros. A Satanás se le llama
el maligno , enfáticamente. Es el gran enemigo de los
santos; y eso tanto en el sentido militar , como él
lucha contra ellos con sus tentaciones; y en un
sentido legal , ya que él es un acusador y se declara
culpable de ellos; sin embargo, de ninguna manera
prevalecerá contra los hijos de Dios. En cuanto a
disparar sus dardos de fuego, Dios herirá a Satanás
en breve bajo los pies de los santos. Romanos 16:20.
En cuanto a su acusación, Cristo es un abogado de la

santos, y responde a todas las acusaciones

formuladas contra ellos. Dios hará que todas las
tentaciones de Satanás promuevan el bien de sus
hijos:
[1] Mientras los pusieron a orar . 2 Corintios 12: 8.
La tentación es una medicina para la seguridad
carnal.
[2] Ya que son un medio para humillarlos . "Para
que no sea exaltado sobremanera, se me dio un
aguijón en la carne, el mensajero de Satanás". 2
Corintios 12: 7. El aguijón en la carne era una
aflicción; pero fue para picar la vejiga del orgullo .
[3] A medida que los afirman más en la gracia. Un
árbol sacudido por el viento está más asentado y
enraizado; de modo que el soplo de una tentación
hace que un hijo de Dios se sienta más en gracia. Así,
el maligno, Satanás, no prevalecerá contra los hijos
de Dios.
(9) Si Dios es nuestro Padre, no nos sobrevendrá
ningún mal real . "No te sobrevendrá ningún mal".
Salmo 91:10. No se dice, no hay problema ; pero no
hay maldad . Los hijos de Dios son personas
privilegiadas; tienen el privilegio de ser heridos por
cualquier cosa. "Nada te hará daño de ninguna
manera". Lucas 10:19. Se quita el dolor y la maldad
de la aflicción. La aflicción del impío tiene maldad;
lo empeora. "Los hombres se quemaron con gran
calor y blasfemaron el nombre de Dios". Apocalipsis
16: 9. Pero ningún mal sobreviene a un hijo de Dios;
es superado por la aflicción. "Para que seamos
partícipes de su santidad". Hebreos 12:10. ¿Qué daño
hace el horno al oro ? Solo lo hace más puro. ¿Qué
daño hace la aflicción a la gracia ? Solo refínalo y
purifícalo. ¡Qué gran privilegio es ser liberado,
aunque no del golpe, pero del aguijón de la aflicción!
Ningún mal tocará a un santo. Cristo ha sacado el
veneno de toda aflicción para que no pueda
dañar a un hijo de Dios. Una vez más, ningún mal
sobreviene a un hijo de Dios, porque no hay
condenación. "No hay condenación para los que
están en Cristo Jesús". Romanos 8: 1. Dios no los
condena, ni la conciencia. Cuando tanto el jurado
como el juez absuelven, el acusado no sufre ningún
mal; porque nada es realmente un mal, ¡sino lo que
condena!
(10) Si Dios es nuestro Padre, podemos ir con
alegría al trono de la gracia. Fuera un hombre de
petición a su enemigo -hay pocas esperanzas; pero
cuando un niño le pide a su padre , puede esperar
con confianza

tener éxito. La palabra "Padre" obra en Dios; toca su

mismo corazón. ¿Qué puede negar un padre a su
hijo? "Si su hijo le pide pan -Will le dará una piedra
?" Mateo 7: 9. Esto puede animarnos a acudir a Dios
por el perdón del pecado y más grados de santidad.
Oramos a un Padre de misericordia, ¡ sentado en un
trono de gracia! "Entonces, si tú, siendo malo, sabes
dar buenos dones a tus hijos, ¿ cuánto más tu Padre
celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?"
Lucas 11:13. Esto anima a la iglesia y agrega alas a la
oración. "Mira desde el cielo". Isaías 63:15. "Sin duda
eres nuestro Padre"; ver 16. ¿Para quién guarda Dios
sus misericordias sino para sus hijos? Tres cosas
pueden dar valentía en la oración:
Tenemos un Padre al que rezar.
Tenemos el Espíritu para ayudarnos a orar.
Tenemos un Abogado para presentar nuestras oraciones.
Los hijos de Dios deberían, en todos sus
problemas, correr a su Padre celestial, como el niño
enfermo en 2 Reyes 4:19: "Dijo a su padre: Mi cabeza,
mi cabeza". Así que derrama tu queja a Dios en
oración. "¡Padre, mi corazón, mi corazón! ¡Mi
corazón muerto , avívelo ! ¡Mi corazón duro
, ablandadlo en la sangre de Cristo! ¡Padre, mi
corazón, mi corazón!" ¡Seguramente Dios, que
escucha el clamor de los cuervos , oirá el clamor de
sus hijos!
(11) Si Dios es nuestro Padre, se interpondrá
entre nosotros y el peligro. Un padre evitará el
peligro de su hijo. Dios se llama a sí mismo un
escudo . Como escudo, defiende la cabeza, protege
los signos vitales y protege de los peligros de sus
hijos. "Yo estoy contigo, y ningún hombre te atacará
para hacerte daño". Hechos 18:10. Dios es un
escondite. Salmo 27: 5. Como Dios tiene un pecho que
alimentar, también tiene alas para cubrir a sus hijos.
"Él te cubrirá con sus plumas, y debajo de sus alas
estarás seguro". Salmo 91: 4. Designa a sus santos
ángeles para que sean los salvavidas de sus hijos.
Hebreos 1:14. Nunca un príncipe estuvo tan bien
protegido como un creyente.
[1] Los ángeles son una guardia numerosa . "El
monte estaba lleno de caballos de fuego alrededor de
Eliseo". 2 Reyes 6:17. "Los caballos y los carros de
fuego" eran los ángeles de Dios para defender al
profeta Eliseo.

[2] Los ángeles son una fuerte guardia. Un ángel, en

una noche, mató a ciento ochenta y cinco mil. 2
Reyes 19:35. Si un ángel matara a tantos, ¿qué podría
haber hecho un ejército de ángeles?
[3] Los ángeles son una guardia rápida ; están listos
en un instante para ayudar a los hijos de Dios. Se les
describe con alas para mostrar su rapidez: vuelan en
nuestra ayuda. "Tan pronto como comenzó a orar, se
le dio una respuesta, que he venido a decirle". Dan
9:23. Aquí hubo un movimiento rápido para que el
ángel viniera del cielo a la tierra entre el principio y
el final de la oración de Daniel.
[4] Los ángeles son un vigilante guardia; no como el
guardia de Saúl, dormido cuando su rey estaba en
peligro. 1 Sam 26:12. Los ángeles son un guardia
vigilante; vigilan a los hijos de Dios para
defenderlos. "El ángel del Señor acampa alrededor
de los que le temen". Salmo 34: 7. Hay una tutela
invisible de ángeles que rodean a los hijos de Dios.
(12) Si Dios es nuestro Padre, no nos faltará nada
que él considere bueno para nosotros. "A los que
buscan al Señor no les faltará ningún bien". Salmo
34:10. A Dios a veces le agrada mantener a sus hijos
en una situación difícil , pero es bueno para ellos. Así
como las ovejas crecen mejor en pastos cortos, Dios
ve que demasiado puede no ser bueno para su
pueblo; la abundancia puede generar exceso. [En la
prosperidad, el carácter de los hombres se
desenfrena.] Dios ve que a veces es bueno hacer
dieta a sus hijos y mantenerlos livianos, para que
puedan correr mejor la carrera celestial. Fue bueno
para Jacob que hubiera hambre en la tierra; era el
medio de llevarlo a su hijo José. De la misma
manera, los hijos de Dios a veces ven el vacío del
mundo , para que puedan familiarizarse más con la
plenitud de Cristo . Si Dios ve que es bueno para ellos
tener más del mundo, lo tendrán. No dejará que les
falte nada bueno.
(13) Si Dios es nuestro Padre, todas las promesas
de la Biblia nos pertenecen. A sus hijos se les llama
"herederos de la promesa". Hebreos 6:17. Un hombre
inicuo no puede reclamar nada en la Biblia, excepto
las maldiciones; no tiene más que ver con las
promesas, de lo que un labrador tiene que ver con
los estatutos de la ciudad. Las promesas son pan de
niños ; son los pechos del evangelio, ordeñando
consuelos; ¿y quiénes chuparán estos pechos, sino
los hijos de Dios? La promesa del perdón es para
ellos. "Perdonaré a todos

sus iniquidades, con las cuales pecaron contra mí.

Jer 33: 8. La promesa de sanidad es para ellos. Isaías
57:19. La promesa de salvación es para ellos. Jer 23:
6. Las promesas son el sostén de la fe; son la
escritura sellada de Dios; son el cordial de un
cristiano. ¡Oh, las comodidades celestiales que se
destilan de las promesas! Crisóstomo compara la
Escritura con un jardín: las promesas son los árboles
frutales que crecen en este jardín. Un hijo de Dios
puede ir a cualquier promesa en la Biblia, y consuelo
de ella! Él es un heredero de todas las promesas!
(14) Si Dios es nuestro Padre, hace vencedores a
todos sus hijos. Se conquistan a sí mismos ; [el que
se conquista a sí mismo es más fuerte que el que
conquista las murallas más sólidas]. Los santos
vencen sus propias concupiscencias ; atan a estos
príncipes con grilletes de hierro. Salmo 149: 8.
Aunque los hijos de Dios a veces se frustran y
pierden una sola batalla, pero no la victoria final.
Conquistan el mundo . El mundo muestra sus dos
pechos de lucro y placer, y muchos se sienten
abrumados por él. Pero los hijos de Dios tienen una
fe que conquista el mundo . "Esta es la victoria que
vence al mundo, incluso nuestra fe". 1 Juan 5: 4.
Conquistan a sus enemigos . ¿Cómo puede ser eso,
cuando sus enemigos a menudo les quitan la vida?
Ellos conquistan por no cumplir con ellos; ya que los
tres niños no caerían ante la imagen dorada. Dan
3:18. Preferirían arder, que inclinarse . Así fueron
conquistadores. El que obedece a los deseos ajenos,
cautivo es ; el que se niega a obedecer, es un
vencedor . Los hijos de Dios vencen a sus enemigos
con una paciencia heroica. Un cristiano paciente,
como el yunque , soporta todos los golpes de manera
invencible. Así, los mártires vencieron a sus
enemigos con paciencia.
Los hijos de Dios son más que vencedores. "Somos
más que conquistadores". Romanos 8:37. ¿Cómo son
más que conquistadores? Porque conquistan sin
pérdida, y porque son coronados después de la
muerte, lo que otros conquistadores no lo son.
(15) Si Dios es nuestro Padre, de vez en cuando
nos enviará alguna muestra de su amor. Sus hijos
viven lejos de casa y, a veces, se encuentran con el
uso grosero del mundo cruel; por tanto, para
animarlos,

les envía muestras y promesas de su amor. ¿Que son

estos? Les da una respuesta a la oración, que es una
muestra de amor. Él anima y ensancha sus
corazones en el deber, que es una muestra de amor.
Les da las primicias de su Espíritu, que son muestras
de amor. Romanos 8:23. Mientras da a los impíos las
primicias del infierno: horror de conciencia y
desesperación; por eso da a sus hijos las primicias de
su Espíritu: gozo y paz, que son anticipos de gloria.
Algunos de sus hijos, habiendo recibido de él esas
muestras de amor, han sido tan transportados, que
han muerto de alegría, ya que la copa a menudo se
rompe con la fuerza del vino que se le echa.
(16) Si Dios es nuestro Padre, nos complacerá y
nos perdonará. "Los perdonaré, como un hombre
perdona a su propio hijo que le sirve". Mal 3:17. Dios
perdona a sus hijos, importa su clemencia hacia
ellos. No los castiga como podría. "Él no nos ha
tratado después de nuestros pecados". Salmo 103: 10.
A menudo hacemos lo que amerita ira, contristamos
al Espíritu de Dios y recaemos en el pecado. Dios
pasa de largo y nos perdona. No perdonó a su Hijo
natural y, sin embargo, perdonó a sus hijos
adoptivos. Romanos 8:32. Amenazó a Efraín para
convertirlo en la paja arrastrada por el torbellino,
pero pronto se arrepintió. "Sin embargo, yo soy el
Señor tu Dios". Os 13: 4. "Yo seré tu rey"; ver 10. Aquí
Dios lo perdonó, como un padre perdona a su hijo.
Israel a menudo provocó a Dios con sus quejas, pero
fue misericordioso con ellos; a menudo respondía a
sus murmuraciones con misericordia . Así los
perdonó, como un padre perdona a su hijo.
(17) Si Dios es nuestro Padre, nos dará gloria y
renombre en el último día.
[1] Limpiará la inocencia de sus hijos. Sus hijos en
esta vida están muy mal representados. Están
cargados de invectivas. Se les llama facciosos,
sediciosos; como Elías, el perturbador de Israel ; y
Lutero, la trompeta de rebelión . Atanasio fue
acusado ante el emperador Constantino de provocar
tumultos; y los cristianos primitivos fueron acusados
de "asesinos de sus hijos, culpables de incesto".
Tértulo informó que Pablo era una persona
pestilente. Hechos 24: 5. Wycliffe fue llamado el
ídolo de los herejes y se informó que murió
borracho. Si Satanás no puede contaminarse de Dios
los niños-que se deshonrar a continuación; si no
puede golpear sus conciencias con sus dardos de
fuego , ¡pondrá una mosca muerta a sus nombres!
Pero Dios un día limpiará su inocencia; quitará su
oprobio. Como el

haz una resurrección de cuerpos , así de nombres .

"El Señor Soberano enjugará las lágrimas de todos
los rostros; quitará la deshonra de su pueblo de toda
la tierra". Isaías 25: 8. Él será el vindicador de los
santos. "Él sacará tu justicia como la luz". Salmo 37:
6.
La noche arroja su manto oscuro sobre las flores más
hermosas; pero la luz llega por la mañana y disipa
las tinieblas, y cada flor aparece en su brillo oriental.
De modo que los malvados pueden ensombrecer el
honor y la reputación de los santos mediante
informes erróneos; pero Dios disipará esta oscuridad
y hará brillar sus nombres. "Él sacará tu justicia
como la luz". Así, Dios defendió el honor de Moisés
cuando Aarón y Miriam buscaron eclipsar su fama.
"¿Por qué, pues, no temiste hablar contra mi siervo
Moisés?" Entumecimiento 12: 8. Por eso Dios un día
dirá a los malvados: "¿Por qué no temiste difamar y
insultar a mis hijos? Teniendo mi imagen sobre ellos,
¿cómo te atreviste a abusar de mi imagen?" Por fin
sus hijos saldrán de todas sus calumnias, como "una
paloma cubierta de plata, y sus plumas de oro
amarillo". Salmo 68:13.
[2] Dios hará un recital abierto y honorable de
todas sus buenas obras. Como se mencionarán
abiertamente los pecados de los impíos, para su
eterna infamia y confusión; de modo que todas las
buenas obras de los santos se mencionarán
abiertamente, "y entonces cada uno recibirá la
alabanza de Dios". 1 Cor 4: 5. Toda oración hecha con
ojos derretidos, todo buen servicio, toda obra de
caridad, será declarada abiertamente ante los
hombres y los ángeles. "Tuve hambre y me diste de
comer. Tuve sed y me diste de beber. Estaba
desnudo, y me vestiste". Mateo 25:35, 36. Así Dios
pondrá un trofeo de honor sobre todos sus hijos en
el último día. "¡Entonces los justos resplandecerán
como el sol en el reino de su Padre!" Mateo 13:43.
(18) Si Dios es nuestro Padre, nos dará una
buena herencia. "Bendito sea el Dios y Padre de
nuestro Señor Jesús, que nos ha engendrado de
nuevo para una esperanza viva , para una herencia
incorruptible e incontaminada". 1 Pedro 1: 3, 4. Un
padre puede haber perdido sus bienes y no tener
nada para dejar a su hijo excepto su bendición; pero
Dios establecerá una herencia sobre sus hijos, y una
herencia no menos que un reino. "¡Es un gran placer
para tu Padre darte el reino!" Lucas 12:32.

Este reino es más glorioso y magnífico que cualquier

reino terrenal; está decorado con perlas, piedras
preciosas y las más ricas joyas. Apocalipsis 21:19.
¿Qué son todas las rarezas del mundo, las costas de
las perlas, las islas de las especias, las rocas de
diamantes, comparadas con este glorioso reino
celestial? En este reino celestial , hay una belleza
inigualable y satisfactoria, ríos de placer, ¡y eso para
siempre! "A tu diestra están los placeres para
siempre". Salmo 16: 2. La eminencia del cielo es su
permanencia ; ya este reino entran los hijos de Dios
inmediatamente después de la muerte.
Hay una transición y un paso repentinos de la
muerte a la gloria . "Ausente del cuerpo, presente con
el Señor". 2 Cor 5: 8. Los hijos de Dios no esperarán
mucho por su herencia; es sólo un guiño, ¡y verán a
Dios! ¡Cómo debería consolar esto a los hijos de Dios
que son humildes en el mundo! Tu Padre que está en
los cielos establecerá sobre ti un reino al morir, un
reino como el que ojo no ha visto; no te dará una
corona de oro , sino gloria ; te dará túnicas blancas
forradas de inmortalidad. "¡Es un gran placer para
tu Padre darte el reino!"
(19) Si Dios es nuestro Padre, es un consuelo en
caso de pérdida de relaciones. ¿Has perdido a un
padre? Si eres creyente, no eres huérfano, tienes un
Padre celestial, un Padre que nunca muere. "El único
que tiene la inmortalidad". 1 Timoteo 6:16. Es un
consuelo en caso de su propia muerte. Dios es tu
Padre, ¡y la muerte no es más que ir a tu Padre! Bien
podría decir Pablo: "¡la muerte es tuya!" 1 Corintios
3:22. ¡La muerte es tu amiga, que te llevará a casa
con tu Padre! ¡Qué felices se sienten los niños
cuando regresan a casa! Fue el consuelo de Cristo en
la muerte que iba a su Padre. "Dejo el mundo y voy
al Padre". Juan 16:28. "Subo a mi Padre". Juan 20:17.
Si Dios es nuestro Padre, podemos con consuelo, en
el día de la muerte, entregar nuestras almas en su
mano. Así hizo Cristo. "Padre, en tus manos
encomiendo mi espíritu". Lucas 23:46.
Si un niño tiene alguna joya, en tiempos de peligro la
pondrá en las manos de su padre, donde cree que
estará más segura; para que el alma, que es nuestra
joya más rica, renuncie a la muerte en las manos de
Dios, donde estará más segura que bajo nuestra
custodia. "Padre, en tus manos encomiendo mi
espíritu". ¡Qué consuelo es que la muerte lleve al
creyente a la casa de su Padre, donde hay deleites
indecibles y llenos de gloria! Que feliz era viejo

Jacob cuando vio los carros y carros para llevarlo a

su hijo José! "El espíritu de Jacob revivió". Génesis
45:27. La muerte es un carro triunfante, para llevar a
cada hijo de Dios a la mansión de su Padre .
(20) Si Dios es nuestro Padre, no nos
desheredará. Puede que por un tiempo abandone a
sus hijos, pero no los desheredará. Los hijos de reyes
a veces han sido desheredados por la crueldad de los
usurpadores; pero ¿qué poder en la tierra puede
impedir que los herederos de la promesa reciban su
herencia? Los hombres no pueden , y Dios no cortará
a sus hijos. Los arminianos sostienen que el
apartarse de la gracia , para que un hijo de Dios sea
privado de su herencia. Pero los hijos de Dios nunca
pueden ser degradados ni desheredados, y su Padre
celestial no los rechazará para que no sean sus hijos.
Es evidente que los hijos de Dios no pueden ser
finalmente desheredados en virtud del decreto
eterno del cielo. El decreto de Dios es el pilar y la
base misma de la que depende la perseverancia de
los santos. Ese decreto ata el nudo de la adopción tan
rápido, que ni el pecado, la muerte ni el infierno
pueden romperlo. "A los que predestinó, a éstos
también llamó", etc. Romanos 8:30. La
predestinación no es otra cosa que el decreto de
Dios de un cierto número de herederos de la gloria,
sobre quienes depositará la corona del cielo; porque
a quien predestina, glorifica. ¿Qué obstaculizará el
amor electivo de Dios, o anulará su decreto?
Además del decreto de Dios, se ha comprometido a sí
mismo mediante la promesa de que los herederos
del cielo nunca serán expulsados de su herencia. Sus
promesas no son como espacios en blanco en una
lotería, sino como una escritura sellada que no se
puede revertir; son el estatuto real de los santos; y
una promesa es que su Padre celestial no los
desheredará. "Haré un pacto eterno con ellos, de que
no me apartaré de ellos; pero pondré mi temor en
sus corazones, que no se apartarán de mí". Jer 32:40.
La fidelidad de Dios , que es la perla más rica de su
corona, está comprometida en esta promesa para la
perseverancia de sus hijos. "No me apartaré de
ellos". Un hijo de Dios no puede apartarse mientras
está sostenido en estos dos brazos de Dios: su amor y
su fidelidad . Jesucristo se compromete a que todos
los hijos de Dios por adopción sean preservados en
un estado de gracia hasta que hereden la gloria. Los
paganos fingieron de Atlas: que él levantó los cielos
para que no cayeran; pero Jesucristo es ese Atlas
bendito , que sostiene a los santos de

cayendo.
¿Cómo preserva Cristo las gracias de los santos
hasta que vengan al cielo?
(1) Por la influencia del Espíritu. Lleva la gracia
en las almas de los elegidos, por la influencia y obra
de su Espíritu. Él continuamente excita y aviva la
gracia en los piadosos; él, por su Espíritu, infla las
chispas de la gracia, en una llama santa . El Espíritu
es el vicario de Cristo en la tierra, su apoderado, su
ejecutor, para asegurarse de que todo lo que ha
comprado para los santos se cumpla . Cristo ha
obtenido para ellos una herencia incorruptible, y el
Espíritu es su albacea, para que se encargue de que
la herencia se establezca sobre ellos. 1 Pedro 1: 4, 5.
(2) Continúa su obra con perseverancia en las
almas de los elegidos, por la prevalencia de su
intercesión. "Él vive para interceder por ellos".
Hebreos 7:25. Ora para que cada santo pueda resistir
en gracia hasta que llegue al cielo. ¿Pueden perecer
los hijos de tales oraciones? Si los herederos del cielo
son desheredados y no alcanzan la gloria, entonces
el decreto de Dios debe revertirse, su promesa rota y
la oración de Cristo frustrada, lo cual sería una
blasfemia imaginar.
(3) El hecho de que los hijos de Dios no pueden
ser desheredados ni despojados de su derecho a
la corona del cielo, es evidente por su unión
mística con Cristo. Los creyentes se incorporan a él;
se le unen como miembros a la cabeza, por los
nervios y ligamentos de la fe, para que no puedan
romperse. "La iglesia, que es su cuerpo". Efesios 1:22,
23. Lo que se dijo una vez del cuerpo natural de
Cristo, es igualmente cierto de su cuerpo místico. "No
se romperá ni un hueso". Como es imposible separar
la levadura y la masa una vez mezcladas y
amasadas; de modo que es imposible, cuando Cristo
y los creyentes están unidos una vez, que por el
poder de la muerte o del infierno estén separados.
Cristo y sus miembros espirituales hacen un solo
Cristo. ¿Es posible que perezca alguna parte de
Cristo? ¿Cómo puede Cristo carecer de algún
miembro de su cuerpo místico y ser perfecto? Cada
miembro es un adorno para el cuerpo y aumenta el
honor del mismo. ¿Cómo puede Cristo separarse de
cualquier miembro místico y no separarse también
de algo de su gloria?

Por todo esto, es evidente que los hijos de Dios deben

perseverar en la gracia y no pueden ser
desheredados. Si pudieran ser desheredados, la
Escritura no podría cumplirse, que nos habla de
gloriosas recompensas para los herederos de la
promesa. "Verdaderamente hay recompensa para los
justos". Salmo 58:11. Si los hijos adoptivos de Dios
cayeran finalmente de la gracia y se perdieran del
cielo, ¿ qué recompensa habría para los justos? Esto
abriría una puerta a la desesperación.
Pero la doctrina de la perseverancia final y la
certeza de la herencia celestial pueden conducir
a la seguridad carnal y al andar impío.
La naturaleza corrupta puede chupar veneno de esta
flor; pero quien ha sentido la eficacia de la gracia en
su corazón, no se atreve a abusar de esta doctrina.
Sabe que la perseverancia se logra en el uso de los
medios y camina con firmeza para que en el uso de
los medios llegue a la perseverancia. Pablo sabía que
no sería desheredado y que nada podría separarlo
del amor de Cristo; pero ¿quién más santo y
vigilante que él? "Mantengo mi cuerpo bajo
sujeción". 1 Corintios 9:27. "Presiono hacia la marca".
Filipenses 3:14. Los hijos de Dios tienen un temor
santo que los aleja de la seguridad en sí mismos y el
desenfreno; creen en la promesa , por tanto, se
regocijan en la esperanza; temen su corazón , por lo
tanto, velan y oran.
Así veis el gran consuelo que hay para todos los
herederos de la promesa. Los que tienen a Dios por
Padre son las personas más felices de la tierra; están
en tal condición que nada puede dañarlos; tienen la
bendición de su Padre, todas las cosas conspiran
para su bien; tienen un reino establecido sobre ellos
y saben que nunca podrán ser desheredados. ¡Cuán
reconfortados deben estar en todas las condiciones,
que los tiempos sean los que quieran! Su Padre que
está en los cielos gobierna sobre todo. Si surgen
problemas, los llevan antes a su Padre. Cuanto más
violentamente golpea el viento contra las velas de un
barco, antes es llevado al puerto; y cuanto más
violentamente son agredidos los hijos de Dios, más
pronto llegan a la casa de su Padre. "Por tanto,
consolaos unos a otros con estas palabras". 1
Tesalonicenses 4:18.
Utilice 4. Para exhortación. Comportémonos como hijos de
tal Padre.

(1) Dependamos de él en todos nuestros apuros y

exigencias; creamos que él cubrirá todas nuestras
necesidades. Los niños dependen de sus padres
para satisfacer sus necesidades. Si confiamos en Dios
para la salvación , ¿no confiaremos en él como medio
de vida ? Hay que tener un cuidado legal y prudente.
Pero cuidado con la desconfianza. "Considerad los
cuervos, porque no siembran ni cosechan, y Dios los
alimenta". Lucas 12:24. ¿Alimenta Dios a las aves del
cielo y no alimenta a sus hijos ? "Considerad los lirios
cómo crecen: no hilan; sin embargo, Salomón con
toda su gloria no se vistió como uno de ellos";
versículo 27. ¿Viste Dios los lirios y no vestirá a sus
corderos ? Incluso el malvado sabor de su
generosidad. "Sus ojos se destacan por la gordura".
Salmo 73: 7. ¿Alimenta Dios a sus esclavos y no
alimentará a su familia ?
Es posible que sus hijos no tengan una participación
generosa en las cosas de esta vida; pueden tener
poca comida en el barril; pueden estar hundidos y
casi secos; pero tendrán todo lo que Dios considere
bueno para ellos . "A los que buscan al Señor no les
faltará ningún bien". Salmo 34:10. Si Dios no les da lo
que quieren, les dará lo que es bueno para ellos. Si
no siempre les da lo que anhelan , les dará lo que
necesitan . Si no les da un banquete , les dará
suficiente en el camino. Que dependan de su
providencia paternal; que no se dejen llevar por
pensamientos de desconfianza, preocupaciones que
distraen o medios pecaminosos. "Pon todo tu
cuidado sobre él, porque él se preocupa por ti". 1
Pedro 5: 7.
Un padre terrenal puede sentir afecto por su hijo y
con gusto lo mantendría , pero puede que no pueda;
pero Dios nunca está perdido para proveer para sus
hijos, y ha prometido una provisión adecuada.
"Verdaderamente serás alimentado". Salmo 37: 3.
¿Dará Dios a sus hijos el cielo, y no les dará lo
suficiente para soportar sus cargas allí? ¿Les dará un
reino y les negará el pan de cada día ? Oh, pon tu
confianza en él, porque él ha dicho: "Nunca te
dejaré, ni te desampararé". Hebreos 13: 5.
(2) Si Dios es nuestro Padre, imitémoslo. El niño
no solo lleva la imagen de su padre, sino que lo imita
en su habla, gesto y comportamiento. Si Dios es
nuestro Padre, imitémoslo. "Sed seguidores de Dios,
como hijos queridos". Efesios 5: 1.
Imita a Dios al perdonar las heridas. "He borrado, como una
nube espesa,

sus transgresiones." Isaías 44:22. A medida que el sol

se dispersa no sólo nieblas finas -pero nubes gruesas,
así que Dios perdona los grandes delitos. imitarlo en
esto. 'perdonándonos unos a otros.' Ef 4:32. Cranmer
era un hombre de una espíritu perdonador: enterró
injurias y pagó bien por mal. El que tiene a Dios por
Padre , lo tendrá por modelo .
Imita a Dios en las obras de misericordia . "El Señor
libera a los prisioneros". Salmo 146: 7. Abre su mano
y satisface el deseo de todo ser viviente. Salmo 145:
16. Deja caer su dulce rocío sobre el cardo , así como
sobre la rosa . Imita a Dios en obras de misericordia;
aliviar las necesidades de los demás; sea rico en
buenas obras. "Sed misericordiosos, como también
vuestro Padre es misericordioso". Lucas 6:36. No
seas tan duro de corazón como para excluir a los
pobres de toda caridad. ¡Dives le negó a Lázaro una
migaja de pan y a Dives le negaron una gota de agua!
(3) Si Dios es nuestro Padre, sometámonos
pacientemente a su voluntad. Si él nos castiga , son
las correcciones de un Padre, no los castigos de un
juez . Esto hizo paciente al mismo Cristo. "La copa
que mi Padre me ha dado, ¿no la beberé yo?" Juan
18:11. Él ve que necesitamos aflicción. 1 Pedro 1: 6.
Lo nombra como bebida nutritiva, para purificarnos
y santificarnos. Isaías 27: 9. Por tanto, no discutas
, sino sométete. "Hemos tenido padres de nuestra
carne que nos corrigieron y les mostramos
reverencia". Hebreos 12: 9. Pueden corregir por mal
humor, pero Dios lo hace para nuestro beneficio.
Hebreos 12:10. Por tanto, di como Elí: "El Señor es:
que haga lo que le parezca bien". 1 Sam 3:18. ¿Qué
obtiene el niño luchando, pero más golpes? ¿Qué
consiguió Israel con sus murmuraciones y
rebeliones, sino una marcha más larga y tediosa,
hasta que, por fin, su cadáver cayó en el desierto?
(4) Si Dios es nuestro Padre, que nos provoque
una reverencia infantil. "Si soy padre, ¿dónde está
mi honor?" Mal 1: 6. Es parte del honor que le damos
a Dios: reverenciarlo y adorarlo; si no siempre
tenemos una confianza infantil , conservemos
siempre una reverencia infantil . ¡Cuán dispuestos
estamos a correr hacia los extremos, ya sea para
desanimarnos o para volvernos desenfrenados!
Debido a que Dios es un Padre, no piense que puede
tomar la libertad de pecar; si lo hace, puede actuar
como si no fuera un Padre y arrojar el infierno a su
conciencia. Cuando David presumió del afecto
paterno de Dios y comenzó a volverse desenfrenado
bajo la misericordia, Dios le hizo pagar muy caro por
ello, retirando el sentido de su amor; y, aunque tenía
el corazón de un

Padre -yet que tenía el aspecto de un enemigo. David

oró: "Hazme oír gozo y alegría". Salmo 51: 8. Estuvo
varios meses en deserción, y se cree que nunca
recuperó su alegría completa hasta el día de su
muerte. ¡Mantén vivo el santo temor! Con la
confianza de un niño, conserve una humilde
reverencia. El Señor es un Padre tierno, por tanto,
ama servirle; él es el Dios fuerte, por lo tanto, teman
ofenderlo.
(5) Si Dios es nuestro Padre, caminemos en
obediencia. "Como hijos obedientes". 1 Pedro 1:14.
Cuando Dios les pide que sean humildes y
abnegados, niéguense a sí mismos; separa tu pecado
del seno. Sea sobrio en su atuendo, sabroso en su
discurso, grave en su comportamiento. Obedece la
voz de tu Padre; ábrele como la flor al sol. Si espera
la bendición de su Padre, obedézcalo en todo lo que
él ordene, tanto en la primera como en la segunda
mesa. Cuando un músico hace música dulce, toca
cada cuerda del laúd. Los diez mandamientos son
como un instrumento de diez cuerdas , y debemos
tocar cada cuerda, obedecer cada mandamiento, o
no podremos hacer melodías dulces en la religión.
Obedece a tu Padre celestial, aunque manda cosas
contrarias a la carne y la sangre; cuando manda
mortificar el pecado, el pecado que ha sido más
caro, sácate el ojo derecho, para que veas mejor para
ir al cielo; cuando te ordena sufrir por el pecado.
Hechos 21:13.
Todo buen cristiano tiene un espíritu de martirio en
él y está dispuesto a sufrir por la verdad en lugar de
que la verdad deba sufrir. Lutero dijo que prefería
ser mártir que monarca . Pedro fue crucificado con
la cabeza hacia abajo, como relata Eusebio. Ignacio
llamaba a sus cadenas sus perlas espirituales y
usaba sus grilletes como un brazalete de diamantes.
Actuamos como hijos de Dios, cuando obedecemos
su voz, y no valoramos nuestras vidas, para poder
mostrarle nuestro amor. "No amaron sus vidas hasta
la muerte". Apocalipsis 12:11.
(6) Si Dios es nuestro Padre, demostremos con
nuestra mirada alegre que somos hijos de tal
Padre. Demasiado abatimiento y abatimiento
menosprecia la alegre relación en la que nos
encontramos con él. ¡Qué importa si nos
encontramos con un uso difícil en el mundo! Ahora
estamos en una tierra extraña, lejos de casa; En
breve será mejor con nosotros cuando estemos en
nuestro propio país y nuestro Padre nos tenga en sus
brazos. ¿No se regocija el heredero en la esperanza?
¿Andarán abatidos los hijos de un rey? "Por qué
eres,
siendo hijo del rey, ¿tan flaco? "2 Samuel 13: 4. ¿Es
Dios un padre cruel? ¿Son penosos sus
mandamientos? ¿No tiene tierra para dar a sus
herederos? ¿Por qué, entonces, sus hijos andan tan
tristes? privilegios como aquellos que son de la
simiente real del cielo, y tienen a Dios por Padre.
Deben regocijarse, ¡quienes están a pocas horas de
ser coronados con gloria!
(7) Si Dios es nuestro Padre, honrámoslo
andando en santidad. "Sé santo, porque yo soy
santo". 1 Pedro 1:16. Un joven príncipe, habiendo
preguntado a un filósofo cómo debería comportarse,
el filósofo dijo: "Recuerda que eres el hijo de un rey;
no hagas nada más que lo que conviene al hijo de un
rey". Así que recordemos que somos los hijos e hijas
adoptivos del Dios supremo, y no hacemos nada
indigno de tal relación. Un niño libertino es la
desgracia de su padre. "¿Es este el abrigo de su hijo?"
le dijeron a Jacob cuando lo trajeron a casa
empapado en sangre. Entonces, cuando vemos a una
persona contaminada con malicia, pasión,
borrachera, podemos decir: "¿Es esta la túnica del
hijo adoptivo de Dios? ¿Parece un heredero de la
gloria?" Es blasfemar el nombre de Dios llamarlo
Padre y, sin embargo, vivir en pecado. Los que
profesan que Dios es su Padre y viven impíamente:
calumnian y defraudan; son tan malos para Dios
como los paganos. "¿No sois para mí como hijos de
etíopes, oh hijos de Israel? Dice el Señor". Amós 9: 7.
Cuando Israel se volvió inicuo, no fueron mejores
para Dios que los etíopes, que eran incircuncisos, un
pueblo vil y mal educado . Los hígados sueltos y
escandalosos bajo el evangelio no son mejores en la
estima de Dios que los paganos; no, tendrán un lugar
más caluroso en el infierno. Oh! que todos los que
profesan que Dios es su Padre, lo honren con su vida
sin mancha.
Escipión aborrecía los abrazos de una ramera,
porque era el general de un ejército. Abstente de todo
pecado, porque eres nacido de Dios, y tienes a Dios
por Padre. "Abstenerse de toda apariencia de
maldad". 1 Tesalonicenses 5:22. Era un dicho de
Augusto, que "un emperador no sólo debe estar libre
de crímenes, sino de la sospecha de ellos". Por una
vida santa, debes glorificar a tu Padre celestial y
hacer que otros se conviertan en sus hijos. La
fragancia de la virtud es atractiva. Causino, en sus
escritos, habla de una paloma, cuyas alas,
perfumadas con ungüentos dulces, atrajo a las otras
palomas tras ella; de modo que las vidas santas de los
hijos de Dios son un dulce perfume para atraer a
otros a la religión verdadera y convertirlos en
miembros de la familia de Dios. Justino Mártir dice,
lo que lo convirtió al cristianismo fue

contemplando la vida intachable de los cristianos.

(8) Si Dios es nuestro Padre, amemos a todos los
que son sus hijos. "¡Cuán agradable es para los
hermanos vivir juntos en unidad!" Salmo 133: 1. Se
compara con el ungüento por su dulce fragancia.
"Ama la hermandad". 1 Pedro 2:17. El movimiento
del alma es el mismo hacia la imagen y la realidad.
Los santos son las imágenes andantes de Dios. Si
Dios es nuestro Padre, nos encantará ver su imagen
de santidad en los creyentes. Los compadecemos por
sus debilidades, pero los amamos por sus gracias;
premiaremos a su empresa por encima de otras.
Salmo 119: 63. Se puede sospechar con justicia que
Dios no es el Padre de los que no aman a sus hijos.
Aunque retienen la comunión de los santos en su
credo, desterran la comunión de los santos fuera de
su compañía.
(9) Si Dios es nuestro Padre, mostremos
una mentalidad celestial. Aquellos que nacen de
Dios, ponen su afecto en las cosas de arriba.
Colosenses 3: 2. ¡Oh hijos del Dios Alto! no deshonres
tu noble cuna con sórdida codicia. ¡Qué, un hijo de
Dios y un esclavo del mundo! ¡Qué, nacido del cielo y
enterrado en la tierra! Porque un cristiano, que
pretende derivar su linaje del cielo, pensando
totalmente en las cosas terrenales, es degradarse a sí
mismo; como si un rey dejara su trono para jugar
con las canicas. "¿Buscas grandes cosas para ti?" Jer
45: 5. Como si el Señor hubiera dicho: "Lo que tú,
Barak, tú que naciste de Dios, semejante a los
ángeles, y por tu oficio un levita, ¡ te rebajas y
manchas las alas plateadas de tu gracia al rociarlas
con tierra! ¿Buscas grandes cosas? No las busques ".
La tierra sofoca el fuego; así la tierra sofoca el fuego
de los buenos afectos.
(10) Si Dios es nuestro Padre, admitámoslo como
tal en los peores momentos, defendamos su causa
y defendamos sus verdades. Si llega el sufrimiento
, no niegues a Dios. Es un mal hijo que niega a su
padre. Aquellos que se avergüenzan de reconocer a
Dios en tiempos de peligro, él se avergonzará de
reconocer a sus hijos. "Cualquiera, pues, que se
avergüence de mí y de mis palabras en esta
generación adúltera, también el Hijo del Hombre se
avergonzará de él cuando venga en la gloria de su
Padre, con los santos ángeles". Marcos 8:38.

II. La segunda parte del prefacio es "¿Quién está

en el cielo"? Se dice que Dios está en el cielo, no
porque esté incluido allí como si no estuviera en
ningún otro lugar; porque "los cielos de los cielos no
pueden contenerlos". 1 Reyes 8:27. Pero el
significado es que reside principalmente en lo que el
apóstol llama "el tercer cielo", donde revela su gloria
más a los santos y ángeles. 2 Corintios 12: 2.
¿Qué podemos aprender de la presencia de Dios en el
cielo?
(1) Que debemos elevar nuestras mentes en
oración sobre la tierra. No se puede hablar con
Dios en ninguna parte, sino en el cielo. Nunca le
negó su traje a esa alma , que fue hasta el cielo para
pedirlo.
(2) Aprendemos su poder soberano. "Nuestro Dios
está en los cielos; ha hecho todo lo que quiso". Salmo
115: 3. En el cielo gobierna el universo y ordena
todos los sucesos aquí abajo para el bien de sus hijos.
Cuando los santos están en apuros y peligros, y no
ven forma de alivio, él envía desde el cielo y los
ayuda. "El enviará desde los cielos y me salvará".
Salmo 57: 3.
(3) Aprendemos su gloria y majestad. Está en el
cielo; por eso está cubierto de luz. Salmo 104: 2. Está
"vestido de honor". Salmo 104: 1: Él está muy por
encima de todos los príncipes del mundo, como el
cielo sobre la tierra.
(4) Aprendemos su omnisciencia. Todas las cosas
están desnudas y desenmascaradas a sus ojos.
Hebreos 4:13. Los hombres conspiran y conspiran
contra la iglesia; pero Dios está en el cielo y no hacen
nada más que lo que él ve. Si un hombre estuviera
en lo alto de una torre o un teatro, podría ver a todas
las personas que están debajo; Dios en el cielo, como
en una torre alta o en un teatro, ve todas las
transacciones de los hombres. Los impíos hacen
heridas en las espaldas de los justos y luego vierten
vinagre; pero Dios escribe su crueldad. "Ciertamente
he visto la aflicción de mi pueblo". Éxodo 3: 7. Dios
puede tronar desde el cielo sobre sus enemigos. "El
Señor tronó en los cielos; sí, envió sus flechas y los
dispersó; y lanzó relámpagos y los derrotó". Salmo
18:13, 14.
(5) Aprendemos a consolar a los hijos de Dios.
Cuando oran a su Padre, el camino al cielo no se
puede bloquear. Uno puede tener un padre viviendo
en el extranjero , pero el camino, tanto por mar
como por tierra, puede ser

tan bloqueado, que no hay forma de llegar a él; pero

tú, santo de Dios, cuando rezas a tu Padre, él está en
los cielos; y aunque estés tan limitado, puedes tener
acceso a él. Una prisión no puede alejarte de tu Dios;
el camino al cielo nunca podrá bloquearse.

III. A continuación hablaré del pronombre

"nuestro". Hay una apropiación del apelativo
"Padre". "Nuestro Padre." Cristo, con la palabra
"nuestro", nos enseñaría tanto: que en todas
nuestras oraciones a Dios, debemos ejercitar la fe.
Padre denota reverencia: Padre nuestro, denota fe.
En todas nuestras oraciones a Dios debemos ejercer
fe. La fe bautiza la oración y le da un nombre; se
llama "la oración de fe". Santiago 5:15. Sin fe, es
hablar, no orar. La fe es el soplo de la oración; la
oración está muerta a menos que la fe la inspire. La
fe es un requisito necesario en la oración. El aceite
del santuario estaba compuesto por varias especias
dulces, mirra pura, casia, canela. Éxodo 30:23, 24. La
fe es la principal especia o ingrediente de la oración,
que la hace subir al Señor como incienso dulce. "Que
pida con fe". Santiago 1: 6. "Todo lo que pidas en
oración, creyendo , lo recibirás". Mateo 21:22.
"Señor", dijo Cruciger, "oro, aunque con una fe débil
, pero con fe". La oración es el arma con la que
disparamos, el fervor es el fuego que lo dispara y la
fe es la bala que traspasa el trono de la gracia. La
oración es la llave del cielo, la fe es la mano que la
gira. Ore con fe: "Padre nuestro". La fe debe tomar la
oración de la mano, o no hay forma de acercarse a
Dios. La oración sin fe no tiene éxito. Si un artesano
pobre, que vive de su trabajo, ha arruinado sus
herramientas y no puede trabajar, ¿cómo existirá?
La oración es la herramienta con la que trabajamos,
que nos procura todo el bien; pero la incredulidad
echa a perder y embota nuestras oraciones, y
entonces no recibimos ninguna bendición de Dios.
Una oración sin fe es infructuosa. Como dijo José:
"No verás mi rostro, si tu hermano no está contigo"
(Gen 43: 3); de modo que la oración no puede ver el
rostro de Dios a menos que lleve consigo su fe
hermana. Lo que se dice de Israel, "No pudieron
entrar debido a su incredulidad", es tan cierto de la
oración; no puede entrar al cielo debido a la
incredulidad. Hebreos 3:19. La oración a menudo
sufre un naufragio porque se estrella contra la roca
de la incredulidad . ¡Oh, mezcla la fe con la oración!
Debemos decir: "Padre nuestro".

¿Qué implica orar con fe?

Orar con fe implica tener fe, y el acto implica el
hábito . Caminar implica un principio de vida; así
que orar con fe implica un hábito de gracia. Nadie
puede orar con fe excepto los creyentes.
¿Qué es rezar con fe?
(1) Es orar por lo que Dios ha prometido. Donde no
hay promesa, no podemos orar con fe.
(2) Es orar en el nombre meritorio de Cristo. "Todo
lo que me pidan en mi nombre, lo haré". Juan 14:13.
Orar en el nombre de Cristo es orar con confianza en
el mérito de Cristo. Cuando presentamos a Cristo a
Dios en oración; cuando llevamos al Cordero
inmolado en nuestros brazos; cuando decimos:
"Señor, somos pecadores, pero aquí está nuestra
garantía; por amor de Cristo, sé propicio", venimos a
Dios en el nombre de Cristo; y esto es orar con fe.
(3) Es fijar nuestra fe en la oración en la fidelidad de
Dios, creyendo que él escucha y ayudará. Esto es
apoderarse de Dios. Isaías 64: 7. Por la oración nos
acercamos a Dios, por la fe lo agarramos. "Clamaron
al Señor"; y este fue el clamor de fe. 2 Crónicas 13:14.
Ellos "prevalecieron, porque confiaron en el Señor
Dios de sus padres"; ver 18. Hacer súplica a Dios, y
mantener el alma en Dios, es orar con fe. Orar, y no
confiar en que Dios conceda nuestras peticiones, "es
abusar y despreciar a Dios". Al orar parecemos
honrar a Dios; al no creerle lo afrentamos. En la
oración decimos: "Padre todopoderoso y
misericordioso"; al no creer, volvemos a borrar
todos sus títulos.
¿Cómo podemos saber que realmente oramos con fe?
(1) Cuando la fe en la oración es humilde . Una
persona presuntuosa espera ser escuchada por
algún mérito inherente en sí mismo; él está tan
calificado y ha hecho un buen servicio a Dios, por lo
tanto, está seguro de que Dios lo escuchará. Véase un
ejemplo en Lucas 18:11, 12: "El fariseo se puso de pie
y oró así: Dios, te doy gracias, porque no soy como
los demás hombres, extorsionadores, injusto. Ayuno
dos veces a la semana; doy diezmos de todo que
poseo ". Esta fue una oración presuntuosa; pero un
corazón sincero manifiesta humildad en la oración
como

así como la fe. "El publicano, estando lejos, no quiso

ni siquiera alzar los ojos al cielo, sino que se golpeó
el pecho, diciendo: Dios, ten misericordia de mí,
pecador". "Dios sea misericordioso", había fe; "Para
mí, un pecador", había humildad y un sentido de
indignidad. Lucas 18:13.
(2) Podemos saber que oramos con fe, cuando,
aunque no tenemos lo que pedimos, creemos que
Dios nos lo concederá y estamos dispuestos a esperar
su tiempo libre. Un cristiano que tiene el
mandamiento de orar y una promesa, está resuelto a
seguir a Dios con la oración y no darse por vencido;
cuando Pedro llamó, y cuando la puerta no se abrió,
siguió tocando hasta que por fin se abrió. Hechos
12:16. Entonces, cuando un cristiano ora y ora y no
tiene respuesta, sigue llamando a la puerta del cielo,
sabiendo que la respuesta llegará. "Tú me
responderás." Salmo 86: 7. Aquí hay uno que ora con
fe. Cristo dice: "Ora y no desmayes". Lucas 18: 1. Un
creyente, a la palabra de Cristo, suelta la red de la
oración, y aunque no atrapa nada, la echará de
nuevo, creyendo que vendrá la misericordia. La
paciencia en la oración no es más que la fe
desarrollada.
Uso 1. Para reprender a quienes oran formalmente,
no con fe; aquellos que cuestionan si Dios escucha o
concederá. "Pides y no recibes, porque pides mal".
Santiago 4: 3. Él no dice, preguntas lo que es ilegal;
pero pides mal y, por tanto, no recibes. ¡La
incredulidad corta las alas de la oración para que no
vuele al trono de la gracia! ¡La basura de la
incredulidad detiene la corriente de la oración!
Utilice 2. Para exhortación. Pongamos la fe a
trabajar en la oración. El agricultor siembra con
esperanza; la oración es la semilla que sembramos, y
cuando la mano de la fe esparce esta semilla,
produce una cosecha fructífera de bendición. La
oración es el barco que enviamos al cielo; cuando la
fe emprende una aventura en este barco, trae a casa
grandes recompensas de misericordia. Oren con fe;
di: "Padre nuestro". Para que podamos ejercer fe en
la oración, considere:
(1) La disposición de Dios para escuchar la
oración. Si Dios prohibiera todas las direcciones a él,
pondría un freno al oficio de la oración; pero su oído
está atento a la oración. Uno de los nombres por los
que se le conoce es "¡Oh, tú que escuchas la oración!"
Salmo 65: 2. Dios está listo para escuchar y conceder
la oración, lo que debe fomentar la fe en la oración.
Algunos pueden decir que han orado, pero no han
recibido respuesta. Dios puede escuchar la oración,
aunque no

Responde inmediatamente. Le escribimos una carta

a un amigo, es posible que la haya recibido, aunque
todavía no hemos recibido respuesta. Quizás reces
por la luz del rostro de Dios; puede que te escuche ,
aunque no te muestre su rostro . Dios puede dar una
respuesta a la oración, cuando no la percibimos. El
dar un corazón para orar e inflamar los afectos en la
oración es una respuesta a la oración. "El día en que
clamé, me respondiste, y me fortaleciste con fuerza
en mi alma". Salmo 138: 3. La fuerza interior de
David fue una respuesta a la oración. Por tanto, que
la disposición de Dios para escuchar la oración,
aliente la fe en la oración.
(2) Para que podamos ejercer fe en la oración,
consideremos que no oramos solos. Cristo vuelve a
rezar nuestras oraciones. Su oración es la base por la
cual nuestra oración es escuchada. Él quita la escoria
de nuestra oración y no presenta nada a su Padre
más que oro puro. Mezcla sus dulces fragancias con
las oraciones de los santos. Apocalipsis 5: 8. Piense
en la dignidad de su persona, él es Dios; y la dulzura
de su relación, es un Hijo. ¡Oh, qué ánimo hay aquí
para orar con fe! Nuestras oraciones están en manos
de un Mediador. La oración de Cristo es poderosa y
poderosa.
(3) Oramos a Dios por nada más que lo que le
agrada, y él tiene la intención de concedernos. Si
un hijo no pide nada más que lo que su padre está
dispuesto a otorgar, lo hará acudir a él con
confianza. Cuando oramos a Dios por corazones
santos, no hay nada más agradable para él. "Esta es
la voluntad de Dios, tu santificación". 1
Tesalonicenses 4: 3. Oramos para que Dios nos dé
corazones para amarlo, y no hay nada que él desee
más que nuestro amor. ¡Cómo debería hacernos orar
con fe, cuando oramos por nada más que lo que es
agradable a Dios y que Él se deleita en otorgar!
(4) Para fomentar la fe en la oración,
consideremos las muchas dulces promesas que
Dios ha hecho a la oración. El corcho evita que la
red se hunda, por lo que las promesas son el corcho
para evitar que la fe se hunda en la oración. Dios se
ha unido a nosotros por sus promesas. La Biblia está
llena de promesas hechas a la oración. "Él será muy
misericordioso contigo a la voz de tu clamor". Isaías
30:19. "Rico es el Señor para con todos los que le
invocan". Romanos 10:12. "Me encontrarás, cuando
me busques con todo tu corazón". Jer 29:13. "Él
cumplirá el deseo de los que le temen". Salmo 145:
19. Los sirios ataron a su dios Hércules con un

cadena de oro, para que no se vaya; Dios se ha atado

a nosotros por sus promesas. ¡Cómo deberían estos
animar y animar la fe en la oración! La fe se
fortalece en la oración, succionando del pecho una
promesa.
(5) Para que podamos ejercer fe en la oración,
considere que Jesucristo ha comprado aquello
por lo que oramos. Podemos pensar que las cosas
que pedimos en oración son demasiado grandes
para que las obtengamos , pero no son demasiado
buenas para que Cristo las compre. Oramos por
perdón. Cristo lo compró con su sangre. Oramos
para que el Espíritu nos anime e inspire. El envío del
Espíritu Santo a nuestros corazones es el fruto de la
muerte de Cristo. Debe dar vida a nuestras oraciones
y hacernos orar con fe, para reflejar que las cosas
que pedimos, aunque más de las que merecemos, no
son más de lo que Cristo compró para nosotros.
(6) Para orar con fe, considere que hay tanta
bondad en Dios, que a menudo excede las
oraciones de su pueblo. ¡Les da más de lo que
piden! Ana le pidió un hijo, y Dios no solo le dio un
hijo, sino un profeta. Salomón pidió sabiduría, y Dios
no sólo le dio sabiduría, sino también riquezas y
honor. Jacob oró para que Dios le diera comida y
ropa, y aumentó su bastón de peregrino en dos
grupos. Génesis 32:10. Dios es a menudo mejor para
nosotros que nuestras oraciones, ya que cuando
Giezi pidió solo un talento, Naamán necesitaría
obligarlo a dos. 2 Reyes 5:23. Pedimos un talento y
Dios da dos. La mujer de Canaán pidió sólo una
migaja, a saber, tener la vida de su hijo; y Cristo le
dio más, la envió a casa con la vida de su alma.
(7) El gran éxito que ha tenido la oración de fe.
Como el arco de Jonatán, no ha vuelto vacío. La
palabrita padre, pronunciada con fe, ha vencido a
Dios. Líbrame, te lo ruego. Génesis 32:11. Esto se
mezcló con fe en la promesa. "Dijiste, seguramente te
haré bien"; ver 12. Esta oración tuvo poder ante Dios
y prevaleció. Os 12: 4. La oración de fe ha abierto las
puertas de la prisión, detenido el carro del sol, ha
cerrado y abierto el cielo. Santiago 5:17. La oración
de fe ha estrangulado las conspiraciones de los
enemigos en su nacimiento y ha derrotado a sus
fuerzas. La oración de Moisés contra Amalec hizo
más que la espada de Josué; ¿Y no debería esto
animar y animar la fe en la oración?
(8) Si todo esto no prevalece, considere cuán desalmado
y
¡Es un desánimo no orar con fe! El corazón duda
en secreto que Dios no oye, ni concederá. La oración
sin fe debe ser necesariamente incómoda; porque no
se hace ninguna promesa a la oración de los
incrédulos. Es triste navegar donde no hay fondeo; y
oraciones tristes donde no hay promesa sobre la que
anclar. Santiago 1: 7. Los discípulos trabajaron toda
la noche y no pescaron nada; así el incrédulo se
afana en la oración y no pesca nada; no recibe
bendiciones espirituales, perdón de pecados ni
gracia. En cuanto a las misericordias temporales que
tiene el incrédulo, no puede considerarlas como el
fruto de la oración, sino como la abundancia de la
bondad de Dios. ¡Oh, por lo tanto, esfuércense por
ejercer y poner fe en la oración!
Pero tanto pecado se adhiere a mi oración, que
me temo que no es la oración de fe, y Dios no la
escuchará.
Si lloras por esto, no te estorba sino que tu oración
sea con fe y Dios pueda escucharla. La debilidad no
invalidará las oraciones del santo. "Dije en mi prisa,
estoy cortado". Salmo 31:22. Había mucha
incredulidad en esa oración: "Dije en mi prisa:" en
hebreo, "en mi temblor", la fe de David tembló y se
desmayó; sin embargo, Dios escuchó su oración. Las
pasiones de los santos no obstaculizan sus oraciones.
Santiago 5:17. Por tanto, no te desanimes, porque
aunque el pecado se adhiera a tu santa ofrenda,
estas dos cosas te pueden consolar : orar con
fe, aunque con debilidad ; y Dios ve la sinceridad y
pasará por alto la enfermedad .
¿Cómo oraremos con fe?
Implora el Espíritu de Dios. No podemos decir
"Padre nuestro", sino por el Espíritu Santo. El
Espíritu de Dios nos ayuda, no solo a orar con
suspiros y gemidos, sino con fe. El Espíritu nos lleva
a Dios, no solo como a un Creador, sino a un Padre.
"Dios ha enviado el Espíritu de su Hijo a vuestros
corazones, clamando: Abba, Padre". Gá 4: 6.
"Llorando:" allí el Espíritu nos hace orar con fervor.
"Abba, Padre:" allí el Espíritu nos ayuda a orar con
fe. El Espíritu ayuda a la fe a girar la llave de la
oración y luego abre el cielo.

La primera petición en el Padre Nuestro

"Santificado sea tu nombre." Mateo 6: 9
Habiendo hablado de la introducción a la oración
del Señor, "Orad así, pues," y del prefacio "Padre
nuestro que estás en los cielos"; Paso, en tercer
lugar, a la oración en sí, que consta de siete
peticiones.
La primera petición es: "Santificado sea tu nombre".
En latín es, "Santificado sea tu nombre". En esta
petición, oramos para que el nombre de Dios
resplandezca gloriosamente, y para que podamos
honrarlo y santificarlo en todo el curso y el tenor de
nuestra vida. Era el canto de los ángeles: "Gloria a
Dios en las alturas"; es decir, sea glorificado y
santificado su nombre. Esta petición se pone en
primer plano, para mostrar que la santificación del
nombre de Dios es preferible a todas las cosas. Es
preferible antes que la vida . Oramos, "Santificado
sea tu nombre", antes de orar, "Danos hoy nuestro
pan de cada día". Es preferible a la salvación .
Romanos 9:23. La gloria de Dios vale más que la
salvación de las almas de todos los hombres. Como
dijo Cristo sobre el amor en Mateo 22:38: "Este es el
primero y el gran mandamiento"; por eso puedo
decir de esta petición: "Santificado sea tu nombre":
es la primera y gran petición; contiene lo más
importante de la religión verdadera, que es la gloria
de Dios.
Cuando algunas de las otras peticiones sean inútiles
y obsoletas, ya que no necesitaremos orar en el cielo:
"Danos nuestro pan de cada día", porque no habrá
hambre; ni "Perdónanos nuestras ofensas", porque
no habrá pecado; ni "No nos metas en tentación",
porque la serpiente antigua no está allí para tentar;
sin embargo, la santificación del nombre de Dios
será de gran utilidad y petición en el cielo; siempre
cantaremos aleluyas, que no son más que la
santificación del nombre de Dios. Cada Persona en la
Santísima Trinidad, Dios Padre, Hijo y Espíritu
Santo, debe tener este honor para ser santificado;
siendo su gloria igual y su majestad
co-eterna. "Santificado sea tu nombre." No basta con
admirar el nombre de Dios; podemos admirar a un
conquistador; pero cuando decimos: "Santificado sea
tu nombre", ponemos el nombre de Dios por encima
de todo nombre, y no solo lo admiramos , sino que lo
adoramos; y esto es propio de la Deidad únicamente.
Para una explicación más detallada, propondré tres
preguntas.

I. ¿Qué significa el nombre de Dios?

[1] Su esencia. "El nombre del Dios de Jacob te
defienda" (Salmo 20: 1); es decir, el Dios de Jacob te
defienda.
[2] Cualquier cosa por la que pueda ser conocido.
Como un hombre es conocido por su nombre; así
que por sus atributos de sabiduría, poder, santidad y
bondad, Dios es conocido por su nombre.
II. ¿Qué se entiende por santificar el nombre de Dios?
Para Hallow , es apartar algo del uso común, a un fin
sagrado. Así como se decía que los vasos del
santuario eran santificados, así, santificar el nombre
de Dios es apartarlo de todos los abusos y usarlo con
santidad y reverencia. En particular, santificar el
nombre de Dios es darle gran honor y veneración, y
hacer que su nombre sea sagrado. No podemos
agregar nada a su gloria esencial; pero se dice que
honramos y santificamos su nombre cuando lo
exaltamos en el mundo y lo hacemos aparecer más
grande a los ojos de los demás. Cuando un príncipe
es coronado, realmente se agrega algo a su honor;
pero cuando coronamos a Dios con nuestros triunfos
y aleluyas, nada se agrega a su gloria esencial. No
puede ser más grande de lo que es, pero podemos
hacerlo parecer más grande a los ojos de los demás.
III. ¿Cuándo se puede decir que santifiquemos y
santifiquemos el nombre de Dios?
[1] Cuando profesamos su nombre. Nuestro
encuentro en su santa asamblea es un honor hecho a
su nombre. Esto es bueno, pero no suficiente. Todos
los que llevan la librea de Dios de profesión no son
verdaderos siervos; hay algunos profesores contra
quienes Cristo profesará en el último día. "Profesaré
que nunca te conocí." Mateo 7:23. Por tanto, para ir
un poco más allá:
[2] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios cuando tenemos un gran aprecio y estima
por él, y lo ponemos en lo más alto en nuestros
pensamientos. La palabra hebrea honrar significa
estimar precioso. Concebimos a Dios en nuestras
mentes como el bien más super excelente e infinito;
vemos en él una constelación de todas las bellezas y
delicias; lo adoramos en sus gloriosos atributos ,
que son los diversos rayos por los que resplandece
su naturaleza divina; lo adoramos en sus obras , que
están atadas
en tres grandes volúmenes: creación , redención y
providencia . Santificamos y santificamos su nombre
cuando lo exaltamos más alto en nuestras almas; lo
estimamos un Dios supereminente e incomprensible.

[3] Santificamos y santificamos su nombre

cuando confiamos en él. "Hemos confiado en su
santo nombre". Salmo 33:21. No hay forma de que
podamos traer más ingresos de honor a Dios, o hacer
brillar más su corona, que confiando en él. Abraham
"era fuerte en la fe, dando gloria a Dios". Romanos
4:20. Aquí estaba santificando el nombre de Dios. La
incredulidad mancha el honor de Dios y eclipsa su
nombre. "El que no cree en Dios, le ha hecho
mentiroso" (1 Juan 5:10); De modo que la fe glorifica
y santifica su nombre. El creyente confía en sus
mejores joyas en las manos de Dios. "En tu mano
encomiendo mi espíritu". Salmo 31: 5. La fe en un
Mediador honra más y santifica más el nombre de
Dios que el martirio o los actos más sublimes de
obediencia.
[4] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios cuando nunca lo mencionamos, pero con la
mayor reverencia. Su nombre es sagrado y no se
debe pronunciar sino con veneración. Cuando la
Escritura habla de Dios, le da sus títulos de honor.
"Bendito sea el Dios Altísimo". Génesis 14:20.
"Bendito sea tu glorioso nombre, que es exaltado
sobre toda alabanza". Nehemías 9: 5. Hablar en vano
o levemente de Dios es profanar su nombre y tomar
su nombre en vano. Al darle a Dios sus venerables
títulos, colgamos sus joyas en su corona.
[5] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios cuando amamos su nombre. "Que se alegren
los que aman tu nombre". Salmo 5:11. El amor que
honra el nombre de Dios debe ser un amor especial
y discriminatorio: la crema y la flor de nuestro
amor; los que no damos a nadie más; como la esposa
honra a su esposo dándole un amor que no le da a
nadie más: un amor conyugal. Por lo tanto,
santificamos el nombre de Dios dándole el amor que
no le damos a nadie más: un amor unido a la
adoración. "Él es tu Señor, y adóralo". Salmo 45: 2.
[6] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios cuando le damos un culto santo y espiritual.
(1) Cuando le damos el mismo tipo de adoración
que él ha designado. "Seré santificado en aquellos
que se acerquen a mí:" es decir, seré santificado con
esa misma adoración que he designado. Levítico 10:
3. Es la pureza de la adoración, que Dios ama más
que la pompa . Deshonra

su nombre para traer a su adoración cualquier cosa

que no haya instituido; como si no fuera lo bastante
sabio para fijar la forma en que se le servirá. Los
hombres le prescriben y super agregan sus inventos;
que él considera como una ofrenda de fuego extraño
y como una gran provocación.
(2) Cuando le damos a Dios la misma devoción de
corazón en la adoración, que él ha designado.
"Ferviente de espíritu, sirviendo al Señor". Romanos
12:11. La palabra ferviente es una metáfora que
alude al agua que hierve y hierve; para significar
que nuestros afectos deben hervir en deberes santos.
Dar a Dios fuera de la adoración, y no la devoción
del corazón, en lugar de santificarlo y santificarlo en
una ordenanza, es abusar de él; como si uno pide
vino y le das una copa vacía. Santificamos el nombre
de Dios y lo santificamos en una ordenanza cuando
le damos los elementos esenciales de la religión y un
corazón ardiendo de celo.
[7] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios cuando santificamos su día. "Santifica el día
de reposo". Jer 17:22. Nuestro sábado cristiano, que
viene en lugar del sábado de los judíos, se llama el
día del Señor. Apocalipsis 1:10. Antiguamente se le
llamó un día de luz , en el que Cristo, el Sol de
Justicia, brilla de una manera extraordinaria. Es un
honor hecho a Dios santificar su sábado.
(1) Debemos descansar en este día de todas las obras
seculares. "No traigas carga en el día de reposo". Jer
17:24. Como cuando José hablaba con sus hermanos,
echó fuera a los egipcios; así que cuando
conversamos con Dios en este día, debemos desechar
todos los empleos terrenales. María Magdalena se
negó a ungir el cadáver de Cristo en el día de reposo.
Lucas 23:56. Antes había preparado su ungüento y
especias, pero no vino al sepulcro hasta que pasó el
día de reposo; descansó ese día de la obra civil,
incluso de la encomiable y gloriosa obra de ungir el
cuerpo muerto de Cristo.
(2) Debemos dedicarnos solemnemente a Dios en
este día; debemos pasar todo el día con Dios.
Algunos escucharán la palabra, pero dejarán toda su
religión en la iglesia; no hacen nada en casa, no
rezan ni repiten la palabra en sus casas, y así le
roban a Dios una parte de su día. Es lamentable ver
cómo se profana el día de Dios. Que nadie piense que
el nombre de Dios es santificado, mientras que su
sábado está quebrantado.

[8] Santificamos y santificamos el nombre de

Dios cuando le atribuimos el honor de todo lo que
hacemos. "Dad al Señor la gloria debida a su
nombre". Salmo 96: 8. Herodes, en lugar de santificar
el nombre de Dios, lo deshonró asumiendo esa
alabanza a sí mismo que se debía únicamente a Dios.
Hechos 12:23. Debemos quitarnos el honor a
nosotros mismos y dárselo a Dios. "Trabajé más que
todos ellos"; uno pensaría que esto tenía sabor a
orgullo: pero el apóstol se quita la corona de su
propia cabeza y la coloca sobre la cabeza de la gracia
gratuita: "Sin embargo, no yo, sino la gracia de Dios
que estaba conmigo". 1 Corintios 15:10. Si un
cristiano tiene alguna ayuda en el deber o la victoria
sobre la tentación, levanta una columna y escribe en
ella: "Hasta ahora el Señor me ha ayudado". Juan el
Bautista transfirió todo el honor de sí mismo a
Cristo; estaba contento de ser eclipsado para que
Cristo pudiera brillar más. "El que viene después de
mí, es antes que yo". Juan 1:15. No soy más que el
heraldo, la voz de quien llora; Él es el príncipe. No
soy más que una estrella menor; él es el sol. Bautizo
con agua solamente; él con el Espíritu Santo. Esto es
santificar el nombre de Dios, cuando transferimos
todo el honor de nosotros mismos a Dios. "No a
nosotros, oh Señor, no a nosotros, sino a tu nombre
da gloria". Salmo 115: 1.
[9] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios obedeciéndole. ¿Cómo puede un hijo honrar
más a su padre que con la obediencia? "Me deleito
en hacer tu voluntad, Dios mío". Salmo 40: 8. Los
sabios honraron a Cristo, no solo al doblar la rodilla
ante él, sino al presentarle oro y mirra. Mateo 2:11.
Santificamos el nombre de Dios, no solo levantando
nuestros ojos y manos al cielo e inclinando la rodilla
en oración, sino presentándolo con obediencia de
oro. Negociamos por Dios y ponemos nuestras
fuerzas en su servicio. Era un dicho del Dr. Jewel:
"Me he gastado y agotado en las labores de mi santa
vocación". "Obedecer es mejor que sacrificar". Los
querubines que representan a los ángeles se colocan
con sus alas desplegadas, para mostrar cuán listos
están para servir a Dios. Obedecer es angelical ; fingir
honrar el nombre de Dios, y sin embargo no
obedecer, no es más que un cumplido devoto .
Abraham honró a Dios con obediencia; estaba
dispuesto a sacrificar a su hijo, aunque era el hijo de
su vejez y un hijo de la promesa. "Por mí mismo he
jurado, dice el Señor, porque has hecho esto, y no
has retenido a tu hijo, tu único, que en bendición te
bendeciré". Génesis 22:16, 17.

[10] Santificamos y santificamos el nombre de

Dios cuando lo ensalzamos en nuestras
alabanzas. Se dice que Dios santifica y se dice que el
hombre santifica. Dios nos santifica dándonos
gracia; y lo santificamos con alabanza. ¿Para qué
fueron dadas nuestras lenguas sino para ser órganos
de alabanza de Dios? "Que mi boca se llene de tu
alabanza y de tu honra todo el día". Salmo 71: 8.
"Bendición y honra y gloria y poder sean para el que
se sienta en el trono, y para el Cordero para
siempre". Apocalipsis 5:13. Así, el nombre de Dios es
santificado y santificado en el cielo; los ángeles y los
santos glorificados están cantando aleluyas.
Comencemos aquí la obra del cielo. David cantó
alabanzas y doxologías de Dios de la manera más
melodiosa y, por lo tanto, fue llamado el dulce cantor
de Israel. 2 Samuel 23: 1. Alabar a Dios es santificar
su nombre; difunde su renombre; muestra los
trofeos de su excelencia; lo exalta a los ojos de los
demás. "Cualquiera que ofrezca alabanza, me
glorifica". Salmo 123. Este es uno de los actos más
elevados y puros de la verdadera religión.
En la oración actuamos como hombres; en alabanza
actuamos como ángeles! La alabanza es la música del
cielo y una obra digna de un santo. "Alégrense los
santos; estén en su boca las grandes alabanzas de
Dios". Salmo 149: 5, 6. Nadie, excepto los santos,
puede santificar de manera correcta el nombre de
Dios al alabarlo. Como no todo el mundo tiene
habilidad para tocar el violín y el órgano, no todo el
mundo puede pronunciar correctamente las
alabanzas armoniosas de Dios; solo los santos
pueden hacerlo; sólo ellos pueden hacer que su
lengua y su corazón se unan en concierto. "Alabaré al
Señor con todo mi corazón". Salmo 111: 1. "Fue
ensalzado con mi lengua". Salmo 66:17. Aquí estaba
uniéndonos en concierto. Este santificar el nombre
de Dios por medio de la alabanza es muy apropiado
para un cristiano. No conviene murmurar, lo cual
deshonra el nombre de Dios; pero conviene que los
santos sean coristas espirituales, cantando el honor
de su nombre. Se llama "prenda de alabanza". Isaías
61: 3. ¡Cuán hermosa y hermosa es esta prenda de
alabanza para que la use un santo! "La alabanza es
hermosa para los rectos". Salmo 33: 1. Especialmente
es un alto grado de santificar el nombre de Dios,
cuando podemos hablar bien de él y bendecirlo en
un estado afligido. "El Señor ha quitado; sea el
nombre del Señor bendito". Job 1:21. Muchos
bendecirán a Dios cuando les dé, pero bendecirlo
cuando les quite es honrarlo y santificar su nombre
en alto grado. Magnifiquemos así el nombre de Dios.
¿No nos ha dado mucho material para alabarlo? Él
nos ha dado gracia , una misericordia tejida y tejida
con sus afectos; y se propone coronar

gracia con gloria . Esto debería hacernos santificar

su nombre siendo trompetas para su alabanza.
[11] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios cuando simpatizamos con él; cuando
lloramos cuando su nombre sufre.
(1) Tomamos en serio su deshonra. ¡Cómo afectó a
Moisés la deshonra de Dios! Rompió las tablas de la
ley. Éxodo 32:19. Lamentamos ver adulterada la
adoración de Dios, el vino de la verdad mezclado con
el error.
(2) Nos entristecemos cuando la iglesia de Dios es
abatida, porque su nombre sufre. Nehemías se
preocupa por las miserias de Sion; su tez comienza a
cambiar y se ve triste. "¿Por qué está triste tu
rostro?" Nehemías 2: 2. ¡Qué! triste, cuando el copero
del rey , y el vino está tan cerca! Oh! pero le fue mal
con la iglesia de Dios, y la verdadera religión pareció
perder terreno, y el nombre de Dios sufrió; por
tanto, Nehemías se cansa del atrio; deja su vino y
mezcla su bebida con llanto. Tal compasión santa y
dolor cuando el nombre de Dios sufre, él estima que
honra y santifica su nombre. Ezequías se entristeció
cuando el rey de Asiria reprochó al Dios viviente.
Fue al templo y difundió la carta de blasfemia ante
el Señor. Isaías 37:17. Sin duda, regó la carta con sus
lágrimas; no parecía estar tan preocupado por el
temor de perder su propia vida y reino, como que
Dios perdiera su gloria.
[12] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios cuando damos a Dios el Hijo el mismo honor
que damos a Dios el Padre. "Para que todos honren
al Hijo como honran al Padre". Juan 5:23. Los
socinianos niegan la divinidad de Cristo, diciendo
que es un mero hombre, lo que significa hacerlo por
debajo de los ángeles. La naturaleza humana,
considerada en sí misma, está por debajo de la
angelical, y por eso reflejan deshonra sobre el Señor
de la gloria. Salmo 8: 5. Debemos darle igual honor al
Hijo que al Padre; debemos creer en la deidad de
Cristo; él es la imagen de la gloria de su Padre.
Hebreos 1: 3. Si la Deidad está en Cristo, debe ser
Dios; pero la Deidad brilla en él. "En él habita
corporalmente toda la plenitud de la Deidad"; por
tanto, él es Dios. Col 2: 9. ¿Cómo se le podrían dar a
Cristo estos títulos divinos como omnipotencia, en
Hebreos 1: 3; omnipresencia, en Mateo 28:20; el
poder de sellar perdones en Mateo 9: 6; co-igualdad
con Dios el Padre, tanto en poder como en dignidad,
en Juan 5:21, 23, si no

coronado con la Deidad? Cuando creemos en la

Deidad de Cristo y construimos nuestra esperanza de
salvación sobre la piedra angular de su mérito;
cuando veamos que ni la justicia de la ley ni la de los
ángeles pueden justificar, sino huir a la sangre de
Cristo como al altar del refugio; esto es honrar y
santificar el nombre de Dios. Dios nunca piensa que
su nombre sea santificado a menos que su Hijo sea
honrado.
[13] Santificamos el nombre de Dios defendiendo
sus verdades. Gran parte de la gloria de Dios reside
en sus verdades. Sus verdades son sus oráculos. Nos
confía sus verdades como un tesoro; no tenemos una
joya más rica para confiarle que nuestras almas, ni
él tiene una joya más grande para confiarnos que
sus verdades. Sus verdades exponen su gloria.
Cuando somos defensores celosos de sus verdades,
es un honor hecho a su nombre. Atanasio fue
llamado el baluarte de la verdad; se puso de pie en la
defensa de las verdades de Dios contra los arrianos,
y así fue un pilar en el templo de Dios. Es mejor que
tengamos la verdad sin paz, que la paz sin la verdad.
Se trata de que los hijos de Sion defiendan las
grandes doctrinas del evangelio; como la doctrina de
la Trinidad, la unión hipostática, la justificación por
la fe y la perseverancia de los santos. Se nos invita a
contender fervientemente, a luchar como en una
agonía por la fe, es decir, la doctrina de la fe. Judas 3.
Esta contienda por la verdad trae grandes ingresos
al tesoro del cielo; y santifica el nombre de Dios.
Algunos pueden competir por ceremonias, pero no
por la verdad . Deberíamos considerarlo insensato
que compita por una caja de centavos, más que por
su caja de joyas.
[14] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios haciéndole tantos prosélitos como podamos ;
cuando, mediante todos los santos recursos, el
consejo, la oración, el ejemplo, procuramos la
salvación de otros. ¡Cómo trabajó Mónica, la madre
de Agustín por su conversión! Tenía más dolores de
parto por su nuevo nacimiento que por su
nacimiento natural. Es santificar el nombre de Dios
cuando difundimos el dulce aroma de la piedad y
propagamos la religión verdadera a otros; cuando no
solo nosotros mismos honramos a Dios, sino que
somos instrumentos para hacer que otros lo honren.
Ciertamente, cuando el corazón está sazonado con
gracia, habrá un esfuerzo por sazonar a otros. La
gloria de Dios es tan cara para un santo como su
propia salvación; y para promover esta gloria, se
esfuerza por la conversión de las almas. Cada
converso es un miembro nuevo agregado a Cristo.
Entonces, santifiquemos el nombre de Dios
trabajando para

promover la piedad en los demás; especialmente

procuremos que aquellos que están cerca de
nosotros, o que están bajo nuestro techo, puedan
honrar a Dios. "En cuanto a mí y mi casa, serviremos
al Señor". Josué 24:15. Hagamos de nuestras casas
Betel, lugares donde se invoca el nombre de Dios.
"Saludad a Nymphas ya la iglesia que está en su
casa". Col 4:15. Procure el padre que sus hijos
honren a Dios, y el amo que sus siervos lo honren a
él. Lea la Palabra, deje caer la santa instrucción,
perfuma sus casas con oración. Los judíos tenían
sacrificios en sus familias, así como en el
tabernáculo. Éxodo 12: 3. Esto es santificar el
nombre de Dios cuando le hacemos prosélitos y nos
esforzamos por que todos los que están a nuestro
cargo honren y santifiquen su nombre.
[15] Santificamos el nombre de Dios cuando
preferimos el honor de su nombre antes que las
cosas más queridas.
(1) Cuando preferimos el honor del nombre de
Dios antes que nuestro propio crédito. Los santos
de la antigüedad, por el honor de Dios, han estado
dispuestos a soportar el oprobio. "Por tu bien he
soportado oprobio". Salmo 69: 7. A David no le
importaba el reproche que sufriera, solo para que el
nombre de Dios no sufriera. El profeta Elías fue
llamado burlonamente, el "profeta peludo"; y el
profeta Isaías "el portador de cargas"; y el profeta
Sofonías, "el profeta amargo"; pero estos reproches
eran como una corona sobre sus cabezas. El honor
del nombre de Dios les era más querido que su
propio honor. Moisés estimó el oprobio de Cristo
más riquezas que los tesoros de Egipto. Hebreos
11:26. Los apóstoles se alejaron regocijándose de ser
considerados dignos de sufrir vergüenza por el
nombre de Cristo. que fueron agraciados hasta el
punto de ser deshonrados por el nombre de Cristo.
Hechos 5:41. Santificamos el nombre de Dios cuando
nos contentamos con que nuestro nombre sea
eclipsado, para que su nombre brille más.
(2) Cuando preferimos el honor del nombre de
Dios antes que nuestro beneficio e interés
mundanos. "Lo hemos abandonado todo y te hemos
seguido". Mateo 19:27. Cuando estos dos, Dios y el
estado, compiten, preferimos dejar ir el estado que
el amor y el favor de Dios. Así, ese noble marqués de
Vice se separó de una hermosa hacienda, usando
estas palabras: "Que perezca su dinero con ellos, que
cuentan todo el oro y la plata del mundo por valor
de una hora de comunión con Jesucristo".

(3) Cuando preferimos el honor del nombre de Dios

antes que nuestra propia vida. "Por tu bien, nos
matan todo el día". Romanos 8:36. El honor que se le
da al nombre de Dios no es traerle la pompa y gloria
externas a él como lo hacemos con los reyes, sino
que viene de otra manera, y es por los sufrimientos
de su pueblo. Cuando el mundo ve cuánto lo ama su
pueblo, que morirá a su servicio, exalta y honra su
nombre. La corona de Dios florece en las cenizas de
sus mártires. Basilio habla de una virgen, condenada
al fuego, que habiendo ofrecido su vida y su
propiedad, si se inclinaba ante el ídolo, respondió:
"¡Deja ir la vida y el dinero, da la bienvenida a
Cristo!" Cuando la gloria de Dios pesa más en la
balanza, y estamos dispuestos a sufrir la pérdida de
todos en lugar de que el nombre de Dios deba sufrir,
sí, en un alto grado, santificamos el nombre de Dios.
[16] Santificamos y santificamos el nombre de
Dios con una vida santa. "Ustedes son un
sacerdocio real, un pueblo peculiar; para que
muestren las alabanzas de aquel que los ha
llamado". 1 Pedro 2: 9. Como una vida impía
deshonra el nombre de Dios, "El nombre de Dios es
blasfemado entre los gentiles a través de ti";
Romanos 2:24, así que por nuestra vida santa y
bíblica, honramos el nombre de Dios. Una vida santa
habla más fuerte que todos los himnos y alabanzas
del mundo. Aunque la obra principal de la religión
radica en el corazón, sin embargo, cuando nuestra
luz brilla tanto que otros la contemplan, glorificamos
a Dios. Cuando nuestras vidas brillan, su nombre
brilla en nosotros. Cuando llevamos la imagen de
Cristo a nuestro alrededor en nuestro santo ejemplo,
honramos el nombre de Dios.
Uso 1. Vea la verdadera nota y el carácter de una
persona piadosa: es un santificador del nombre de
Dios. Un verdadero santo se esfuerza
ambiciosamente por promover el nombre de Dios.
La pregunta que se hace a sí mismo en todo lo que
hace es: "¿Esta acción tenderá a honrar el nombre de
Dios? ¿Exaltará a Dios?" El propósito principal de
Pablo era que Cristo fuera magnificado, que
floreciera la corona sobre su cabeza. Filipenses 1:20.
Un hombre piadoso piensa que apenas vale la pena
vivir, si no puede traer algunos ingresos de honor al
nombre de Dios.
Use 2. Puedo tomar aquí un lamento triste y hablar,
como el apóstol Pablo, llorando. Filipenses 3:18.
Considere cómo el nombre de Dios, en lugar de ser
santificado y santificado, es deshonrado. Su nombre,
que vale más que la salvación de las almas de todos
los hombres, sufre profundamente. Solemos hablar
de nuestros sufrimientos; ¡Pobre de mí! ¡Cuáles son
todos nuestros sufrimientos! El nombre de Dios
sufre
más. Su nombre es lo más querido que tiene. ¡Cómo
se paran los hombres en su nombre y honor! El
nombre de Dios es hoy deshonrado; es como el sol en
un eclipse. Teodosio se lo tomó atrozmente cuando
arrojaron tierra sobre su estatua; pero lo que es
mucho peor, se arroja deshonra sobre el glorioso
nombre de Jehová. Su nombre, en lugar de ser
santificado, es deshonrado por todo tipo; por
paganos, por turcos, por judíos, por papistas y por
protestantes.
(1) Por paganos ; que tienen conocimiento de una
divinidad a la luz de la naturaleza; sin embargo,
deshonralo y peca contra la luz de la naturaleza.
Romanos 1:19. Los egipcios adoran a un buey; los
persas adoran al sol; los griegos y romanos, Júpiter;
y los partos adoran al diablo.
(2) El nombre de Dios es deshonrado por los turcos ,
que adoran a Mahoma, su gran profeta, como uno
divinamente inspirado. Mahoma era de naturaleza
impura y malvada. Arrancó la corona de la cabeza
de Cristo al negar su Deidad.
(3) El nombre de Dios es deshonrado por los judíos ,
quienes no dan el mismo honor y adoración a Dios el
Hijo que a Dios el Padre. Esperan un Mesías por
venir. No creen en Cristo; lo blasfeman; rechazan la
justicia imputada; vilipendian el sábado cristiano.
(4) Los papistas deshonran el nombre de Dios . La
suya es una religión que deshonra a Dios. Deshonran
el nombre de Dios con su idolatría, que es adulterio
espiritual. La idolatría es adorar a un Dios falso, o al
Dios verdadero de una manera falsa. Deshonran a
Dios con su idolatría, haciendo imágenes esculpidas
y dando el mismo honor a los que se deben a Dios.
Las imágenes son maestras de mentiras. Representan
a Dios en forma corporal. Hab 2:18. Deshonran a
Dios con su idolatría en la masa; adorando la hostia
y ofreciéndola como sacrificio por el pecado. El
apóstol dice: "Con una sola ofrenda, Cristo hizo
perfectos para siempre a los santificados" (Heb
10:14); pero como si su ofrenda en la cruz fuera
imperfecta, lo ofrecen diariamente en la misa, lo que
deshonra el oficio sacerdotal de Cristo.
El papista, en lugar de santificar el nombre de Dios,
lo deshonra al encerrar las Escrituras en una lengua
desconocida. Como los filisteos, le arrancan los ojos a
la gente y luego se burlan de ellos. La Biblia es una
luz brillante, pero la cubren con una cortina; quitan
la llave del conocimiento,

y obstaculizar la gloria de Dios al obstaculizar la salvación de

los hombres. Lucas 11:52.
En lugar de santificar el nombre de Dios, lo
deshonran dando indulgencias a los hombres. Dicen
que el Papa, como sucesor de Pedro, tiene el poder
de conceder indulgencias, en virtud de las cuales los
hombres son puestos en libertad ante los ojos de
Dios. Esto es para robar una flor de la corona del
cielo. El Papa asume el poder de perdonar, que es la
prerrogativa real de Dios. "¿Quién puede perdonar
pecados sino solo Dios?" Marcos 2: 7. El Papa, con su
indulgencia, anima a los hombres a pecar. ¿Qué
necesitan los papistas para importar los pecados que
cometen, cuando tienen una licencia del Papa para
pecar?
En lugar de santificar el nombre de Dios, lo
deshonran con su invocación a los santos. Debemos
orar solo a Dios. "Reza a tu Padre"; no ore a un santo
oa la Virgen María, sino ore a su Padre celestial.
Mateo 6: 6. No podemos orar a nadie que no sea en
quien creemos. Romanos 10:14. Los santos en el cielo
ignoran nuestros agravios. "Abraham nos ignora".
Isaías 63:16.
En lugar de santificar el nombre de Dios, lo
deshonran con su lujo e inmundicia. En Roma, la
fornicación se mantiene abierta y en algunos casos
se prefiere antes que el matrimonio honorable.
[Toda la ciudad es ahora un burdel].
En lugar de santificar el nombre de Dios, lo
deshonran con sus blasfemias. Dan igual, mejor
dicho, más honor a la Virgen María que a Cristo;
atribuyen más a su leche materna que a su sangre;
la llaman Scala Coeli , la escalera del cielo; Janua
paradisi , la puerta del paraíso. En sus doxologías
dicen: "Alabado sea la Virgen María, y también a
Cristo". ¡Qué blasfemia es esta, poner a la criatura
por encima del Creador! Le dicen: "¡Oh feliz Madre
de un Hijo, que purgas nuestros crímenes!"
En lugar de santificar el nombre de Dios, lo
deshonran con sus mentiras. Su leyenda dorada es
una impostura y está llena de maravillas mentirosas.
Muestran la frente de Juan Bautista como una
reliquia en España; sin embargo, afirman que toda
su cabeza se puede ver en San Silvestre en Roma.
Muestran la sombra de Pedro en Roma. Leemos de la
sombra de Pedro en Hechos 5:15; pero es extraño
cómo los papistas pudieron atraparlo y mantenerlo
con ellos tanto tiempo.
En lugar de santificar el nombre de Dios, lo deshonran,
bautizando el pecado con

el nombre de la virtud. El incumplimiento de los

juramentos es una virtud para los papistas. Si un
hombre ha ligado su alma a Dios mediante un
juramento, violarlo es virtuoso, si puede propagar la
causa católica. Matar a quienes son de una religión
diferente no es solo venial, ¡sino una virtud entre los
católicos! La destrucción de doscientos mil
albigenses, que eran protestantes, fue elogiada como
una acción gloriosa, honrada con un triunfo en
Roma y coronada con la bendición de su santidad .
¿No es esto una gran deshonra para Dios, dorarse
sobre los crímenes más inmundos con el nombre de
virtud y piedad? En lugar de santificar el nombre de
Dios, lo deshonran con sus condenables
afirmaciones. Los papistas afirman que el Papa está
por encima de la Escritura; para que pueda
prescindir de él, y que su canon obligue más que la
Palabra de Dios. Enseñan la salvación por buenas
obras; pero si un deudor no puede pagar a su
acreedor, ¿cómo podrá merecer de sus manos?
Afirman que la Escritura no es una regla perfecta de
fe y modales; y, por lo tanto, luchan con sus
tradiciones, que sostienen que tienen la misma
autoridad. Enseñan que una fe intelectual salva.
Dicen que el acto interior de la mente no se requiere
en la adoración de Dios. La distracción de la mente
en el deber, aunque uno ora y nunca piense en Dios,
no es pecado, como dicen Angelus, Sylvester y otros
papistas. Hacen innecesario el amor habitual a Dios.
"No es necesario", dice Belarmino, "realizar ningún
acto religioso por amor a Dios". Stapleton y Cayetano
afirman que el precepto de amar a Dios con todo
nuestro corazón no es obligatorio; por el cual cortan
en pedazos los tendones y el alma de toda religión.
Por lo tanto, en lugar de honrar el nombre de Dios,
los papistas lo deshonran. Oremos de todo corazón
para que esta religión romana nunca más vuelva a
asentarse en esta nación. Dios conceda que esta
hierba venenosa del papado nunca pueda regarse
aquí; pero, siendo una planta que nuestro Padre
celestial no plantó, sea desarraigada.
(5) Los protestantes deshonran el nombre de Dios .
¡Cómo se deshonra su nombre este día en Inglaterra!
Los cristianos, en lugar de santificar el nombre de
Dios, lo predican y lo deshonran con la lengua .
Hablan irreverentemente de su nombre. El nombre
de Dios es sagrado. "Para que temas este nombre
glorioso y terrible: el Señor tu Dios ". Deuteronomio
28:58. Los nombres de los reyes no se mencionan sin
darles su marea de honor, alta y poderosa; pero los
hombres hablan irreverentemente de Dios, como si
fuera uno de ellos. Salmo 50:21. Esto es tomar el
nombre de Dios en vano. Juran por su nombre.
Muchos rara vez mencionan el nombre de Dios, pero
con juramento. ¿Cómo es deshonrado, cuando

¡Los hombres rasgan y rasgan su nombre con

juramentos e imprecaciones! "Por jurar, la tierra
está de luto". Jer 23:10. Si Dios tomara en cuenta a los
hombres por palabras vanas, ¡no se pondrán
juramentos vanos en el libro de cuentas! "¡Oh! Pero",
dice uno, "no puedo evitarlo: es una costumbre de
jurar que tengo, y no puedo evitarlo. Espero que
Dios me perdone". ¿Es la costumbre de jurar un buen
motivo? No es una excusa, sino una agravación del
pecado; como si quien hubiera sido acusado de
matar a un hombre suplicara al juez que lo
perdonara, porque tenía la costumbre de asesinar.
Eso sería una agravación de la ofensa; porque ¿no
diría el juez: "Ciertamente morirás?" Así que está
aquí.
Como los hombres deshonran a Dios con la lengua,
así también con la vida . ¿Qué es decir, "Santificado
sea tu nombre", cuando en sus vidas profanan su
nombre? Deshonran a Dios con su ateísmo,
inmundicia, perjurio, intemperancia e injusticia. Los
hombres cuelgan una bandera de desafío contra el
cielo. Como los tracios, cuando truena, disparan sus
flechas contra el cielo, así los hombres disparan sus
pecados como flechas barbudas contra el cielo. Los
pecadores se endurecen en el pecado, desprecian el
consejo, se ríen de la reprensión, se quitan el velo de
la modestia. Satanás se ha apoderado de ellos de tal
manera que, cuando pecan, se enorgullecen de su
vergüenza. Filipenses 3:19. Se jactan de cuántos
nuevos juramentos han inventado, cuántas veces
han estado borrachos, cuántos han profanado;
declaran su pecado como Sodoma. Se cometen
impiedades tan horribles que un pagano modesto se
sonrojaría. Los hombres de esta época pecan a ese
ritmo, como si no creyeran que hay un infierno, o
como si temieran que el infierno estaría lleno antes de
que pudieran llegar allí. ¿Fue el nombre de Dios tan
abiertamente deshonrado? Toda nuestra predicación
no les hará dejar sus pecados.
¿Qué velo negro cubre el rostro de la religión en este
día? "Vivimos en la escoria del tiempo", por donde
corre la cloaca común de la maldad. Los médicos lo
llaman caquexia, cuando no hay ninguna parte del
cuerpo libre de moquillo. Inglaterra tiene esa
enfermedad. "Toda la cabeza está enferma, todo el
corazón está débil". Isaías 1: 5. Así como los vapores
negros que salen de la tierra nublan y oscurecen el
sol, así los pecados de la gente de nuestra época,
como vapores infernales, arrojan una nube sobre el
glorioso nombre de Dios. ¡Ojalá nuestros ojos fueran
ríos de agua de lágrimas santas, para ver cómo el
nombre de Dios, en lugar de ser santificado, está
contaminado y profanado! ¿No podemos temer con
justicia algunos juicios severos por este motivo?
¿Puede Dios aguantar más nuestras afrentas? ¿Puede
soportar

han reprochado su nombre? ¿Permitirá un rey que

las joyas de su corona sean pisoteadas en el polvo?
¿No vemos los síntomas de la ira de Dios? ¿No vemos
que sus juicios se ciernen sobre nosotros?
¡Seguramente Dios está afilando su espada, ha
doblado su arco y está preparando sus flechas para
disparar!
El cuerpo político está en paroxismo, o en un ataque
de ardor; ¿Y no puede el Señor provocar una triste
flebotomía? Al ver que no dejaremos nuestros
pecados, él puede hacernos perder nuestra sangre.
¿No podemos temer que el arca sea removida, la
visión cese, las estrellas en la iglesia de Dios sean
removidas y sigamos el evangelio hasta la tumba?
Cuando el nombre de Dios, que debería ser
santificado, es profanado por una nación, es justo
que Dios escriba ese triste epitafio en su tumba: "La
gloria se fue". Sería bueno que sólo la parte profana
fuera culpable; pero, ¿no se puede llamar al tribunal
a muchos profesores y acusarlos de haber
deshonrado el nombre de Dios? "¿No hay contigo,
incluso contigo, pecados contra el Señor tu Dios?" 2
Crónicas 28:10. ¿Son estas las manchas de los hijos
de Dios? Deuteronomio 32: 5. Si eres diamantes, ¿no
tienes defectos? ¿No tienes tus vanidades? Si tu
discurso no es profano, ¿no es vano? ¿No tienes tus
egoísmos, tus censuras imprudentes , tus vestidos
indecentes? Si los impíos de la tierra juran , ¿no
calumnias tú a veces ? Si están ebrios de vino , ¿no
estás a veces borracho de pasión ? Si su pecado es
blasfemar , ¿no es tu pecado murmurar ? "¿No hay
contigo, incluso contigo, pecados contra el Señor?"
Los pecados de los hijos de Dios están más cerca de
su corazón que los pecados de otros. "Cuando el
Señor lo vio, los aborreció, a causa de la provocación
de sus hijos y de sus hijas". Deuteronomio 32:19. Los
pecados del impío enojan a Dios, los pecados de su
propio pueblo lo entristecen ; seguro que los
castigará. "Sólo a ti te he conocido de todas las
familias de la tierra; por tanto, te castigaré por todas
tus iniquidades". Amós 3: 2. ¡Oh, si nuestra cabeza
fuera agua, que pudiéramos hacer de este lugar un
Bochim, un lugar de llanto, que los hijos de Dios
pudieran mezclar el sonrojo con las lágrimas, que
tan poco santificaron y tan eclipsaron el nombre de
Dios! Verdaderamente su propio pueblo ha pecado lo
suficiente como para justificarlo en todas sus
acciones severas contra ellos.
Utilice 3. Para exhortación. Santifiquemos y
santifiquemos el nombre de Dios. Si pudiéramos ver
un destello de la gloria de Dios, como lo hizo Moisés
en la roca, obtendríamos adoración y alabanza.
¿Podríamos "ver a Dios cara a cara", como lo hacen
los ángeles en el cielo, podríamos contemplarlo
sentado en su trono, en el

ante su gloria haríamos como los veinticuatro

ancianos, que "adoran al que vive para siempre, y
arrojan sus coronas delante del trono, diciendo:
Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el
poder". Apocalipsis 4:11. Para que seamos
impulsados a este gran deber de santificar, adorar y
santificar el nombre de Dios, consideremos:
(1) Es el final de nuestro ser. ¿Por qué Dios nos dio
la vida, pero para que, al vivir, santifiquemos su
nombre? ¿Por qué nos dio almas, sino para
admirarlo? y lenguas, pero ¿ para alabarlo? La
excelencia de una cosa es el fin para el que fue
hecha; como de una estrella para alumbrar, y de una
planta para que fructifique. Entonces, la excelencia
de un cristiano es responder al fin de su creación,
que es santificar el nombre de Dios y vivir para ese
Dios por quien vive. El que vive, y de quien Dios no
tiene honor, se entierra vivo y se expone a la
maldición. Cristo maldijo la higuera estéril .
(2) El nombre de Dios es tan excelente que
merece ser santificado. "¡Cuán glorioso es tu
nombre en toda la tierra!" Salmo 8: 9. "Estás vestido
de honor y majestad". Salmo 104: 1. Así como el sol
tiene su brillo, lo admiremos o no, así el nombre de
Dios es ilustre y glorioso, lo santifiquemos o no. En él
están todas las perfecciones brillantes : santidad,
sabiduría y misericordia. Es "digno de ser alabado".
2 Samuel 22: 4. Dios es dignus Honore , digno de
honor, el amor y la adoración. A menudo otorgamos
títulos de honor a quienes no los merecen; pero Dios
es digno de ser alabado; su nombre merece ser
santificado; él está sobre todo el honor y la alabanza
que le dan los ángeles en el cielo.
(3) Oramos, "santificado sea tu nombre"; es
decir, que tu nombre sea honrado y engrandecido
por nosotros. Si no magnificamos su nombre,
contradecimos nuestras propias oraciones. Decir
"santificado sea tu nombre", pero no honrar el
nombre de Dios, es tomar su nombre en vano.
(4) Si los hombres no santifican el nombre de
Dios y le traen ganancias de honor, él los
honrará. "Me honraré con el faraón". Éxodo 14:17.
El faraón no santificaría el nombre de Dios; dijo:
"¿Quién es el Señor para que le obedezca?" Bueno,
dice Dios, si el faraón no me honra, yo lo honraré.
Cuando Dios lo derribó a él y a sus carros en el mar,
recibió honra sobre él. El poder y la justicia de Dios
se glorificaron en su destrucción . Hay algunos a
quienes Dios ha elevado a

gran poder y dignidad, y no honrarán su nombre; se

sirven de su poder para deshonrarlo; arrojan
oprobio sobre su nombre e injurian a sus siervos. Si
no honran a Dios, él los honrará en su ruina final.
Herodes no le dio gloria a Dios, pero Dios le dio
gloria. "El ángel del Señor lo hirió porque no dio a
Dios la gloria, y fue devorado por los gusanos".
Hechos 12:23.
(5) No será un pequeño consuelo para nosotros
cuando vayamos a morir, que hayamos
santificado y santificado el nombre de Dios. El
consuelo de Cristo un poco antes de su muerte fue:
"Te he glorificado en la tierra". Juan 17: 4. Su
humanidad redentora santificaba y glorificaba el
nombre de Dios. Nunca se trajo más honor al
nombre de Dios que esta gran empresa de Cristo.
Aquí estaba su consuelo antes de la muerte, que
había santificado el nombre de Dios y le había dado
gloria. Entonces, ¡qué cordial será para nosotros al
fin, cuando toda nuestra vida haya sido una
santificación del nombre de Dios! Lo amamos con
nuestro corazón , lo alabamos con nuestros labios , lo
honramos con nuestra vida ; hemos sido para
alabanza de su gloria. Efesios 1: 6. En la hora de la
muerte, todas tus comodidades terrenales
desaparecerán; pensar en lo rico que ha sido, o en
los placeres que ha disfrutado en la tierra, no le dará
ni un ápice de consuelo. ¿Cuál es mejor para un
patrimonio que se gasta? Pero tener conciencia
atestiguando que has santificado el nombre de Dios,
que toda tu vida lo ha estado glorificando , ¡qué
dulce paz y satisfacción dará esto!
¡Cuán feliz se alegra ese siervo que ha estado todo el
día trabajando en la viña, cuando llega la noche, que
recibirá su paga! ¡Cuán dulce será la muerte cuando
aquellos que han dedicado su vida a honrar a Dios,
reciban la recompensa! ¡Qué consuelo fue para
Ezequías, cuando estaba en su lecho de enfermo, que
pudiera suplicar a Dios: "Recuerda, Señor, cómo he
caminado delante de ti con un corazón perfecto, y he
hecho lo que es bueno ante tus ojos! Isaías 38: 3. He
santificado tu nombre, te he traído todo el honor que
pude, "he hecho lo que es bueno a tus ojos".
(6) No hay nada perdido por lo que hacemos por
Dios. Si honramos su nombre, él nos honrará. Como
Balac le dijo a Balaam: "¿No puedo yo hacerte
honrar?" Números 22:37. Entonces, si santificamos y
santificamos el nombre de Dios, ¿no puede él
promovernos para honrarnos? Él nos honrará en
nuestra vida. Él honrará nuestras personas : nos
contará entre sus
joyas. Mal 3:17. Nos hará una diadema real en su
mano. Isaías 62: 3. Él nos exaltará a los ojos de los
demás. "Serán como piedras de corona alzada, como
estandarte de gloria". Zacarías 9:17. Él nos estimará
como la crema y la flor de la creación. "Desde que
eras preciosa a mis ojos, has sido honorable". Isaías
43: 4.
Dios honrará nuestros nombres . "La memoria de
los justos es bendita". Proverbios 10: 7. ¡Cuán
famosos han sido los santos en todas las épocas, que
han santificado el nombre de Dios! ¡Cuán famoso fue
Abraham por su fe, Moisés por su mansedumbre,
David por su celo, Pablo por su amor a Cristo! Sus
nombres, como ungüento precioso, envían un dulce
perfume en la iglesia de Dios hasta el día de hoy.
Dios nos honrará en nuestra muerte . Enviará a sus
ángeles para que nos lleven con triunfo al cielo.
"Murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al
seno de Abraham". Lucas 16:22. Amasis, rey de
Egipto, tenía su carro tirado por cuatro reyes, a
quienes había conquistado en la guerra; pero, ¿qué
es esto comparado con la gloria que todo creyente
tendrá al morir? ¡Será llevado por los ángeles de
Dios!
Dios nos honrará después de la muerte. Él pondrá
gloria sobre nuestros cuerpos . Seremos como los
ángeles, no por sustancia, sino por calidad; nuestros
cuerpos serán ágiles y ágiles. Ahora son como un
peso, luego serán como un ala, moviéndose
rápidamente de un lugar a otro; estarán llenos de
claridad y brillo, como el cuerpo glorioso de Cristo.
Filipenses 3:21. Los cuerpos de los santos serán como
tela teñida en un color escarlata, hechos más
ilustres; serán tan claros y transparentes, que el
alma brillará a través de ellos, como el vino a través
de la copa. Dios pondrá gloria sobre nuestras almas.
Si el gabinete del cuerpo fuera tan ilustre, ¡de qué
brillo oriental será la joya ! Entonces será el gran día
de la coronación, cuando los santos vestirán el
manto de la inmortalidad y la corona de justicia que
no se desvanece. ¡Oh, qué gloriosa será esa
guirnalda, que está hecha de las flores del paraíso!
¿Quién entonces no santificará y glorificará su
nombre, y esparcirá su fama en el mundo, quién
pondrá tal honor inmortal sobre su pueblo, "como
ojo no vio, ni oído oyó, ni ha subido al corazón del
hombre para concebir" ?
(7) Si los hombres no santifican, sino que profanan y
deshonran a Dios

nombre, derramará sobre ellos desprecio.

Aunque sean tan grandes, y aunque estén vestidos
de púrpura y escarlata, serán aborrecidos por Dios, y
su nombre se pudrirá. Aunque el nombre de Judas
está en la Biblia y el nombre de Poncio Pilato está en
el Credo, sin embargo, sus nombres representan
infamia, como traidores a la corona del cielo. "Haré
tu tumba, porque eres vil". Nahum 1:14. Se dice de
Antíoco Epífanes, aunque era un rey, y su nombre
significa ilustre, pero Dios lo estimó vil. Para mostrar
cuán viles son los impíos en la estima de Dios, los
compara con las cosas más viles: la paja (Salmo 1: 4);
escoria (Salmo 119: 119); a la inmundicia que brota
del mar (Isaías 57:20). Así como Dios estima vilmente
a los que no santifican su nombre, así los envía al fin
a un lugar vil. Los vagabundos son enviados a la
casa de corrección; y el infierno es la casa de
corrección a la que son enviados los impíos cuando
mueren. Dejemos que todo esto prevalezca en
nosotros para santificar y santificar el nombre de
Dios.
¿Qué debemos hacer para honrar y santificar el nombre
de Dios?
(1) Obtenga un conocimiento sólido de Dios. Eche
un vistazo a sus excelencias superlativas; su
santidad, su incomprensible bondad. Los ángeles
conocen a Dios mejor que nosotros, por eso
santifican su nombre y le cantan aleluyas.
Trabajemos para saber que él es nuestro Dios. "Este
Dios es nuestro Dios". Salmo 48:14. Podemos temerle
como juez, pero no podemos honrarle como padre ,
hasta que sepamos que es nuestro Dios.
(2) Obtenga un amor sincero por Dios; un amor de
aprecio y un amor de deleite para deleitarse en él.
"Señor, sabes que te amo". Juan 21:15. Nunca podrá
honrar a su amo, quien no lo ama. La razón por la
que el nombre de Dios ya no es santificado es porque
su nombre ya no es amado.
Hasta aquí la primera petición, "Santificado sea tu
nombre". Mateo 6: 9.

La segunda petición en el Padrenuestro

"Que venga tu reino". Mateo 6:10

Un alma verdaderamente dedicada a Dios, se une de
corazón en esta petición, "venga tu reino". En estas
palabras se da a entender que Dios es un rey ,
porque quien tiene un reino, no puede ser menos
que un rey. "Dios es el Rey de toda la tierra". Salmo
47: 7. Él es un Rey en su trono . "Dios se sienta en el
trono de su santidad". Salmo 47: 8. Tiene un título
real , alto y poderoso. "Así dice el Alto y Sublime".
Isaías 57:15. Tiene las insignias de la realeza . Tiene
su espada . "Si afilo mi espada reluciente."
Deuteronomio 32:41. Tiene su cetro . "Cetro de
justicia es el cetro de tu reino". Hebreos 1: 8. Tiene su
corona real . "En su cabeza había muchas coronas".
Apocalipsis 19:12. Tiene sus insignias jura, sus
prerrogativas reales . Tiene poder para hacer leyes,
para sellar indultos, que son las flores y joyas que
pertenecen a su corona. Por tanto, el Señor es Rey.
Además, es un gran Rey . "Un gran Rey sobre todos
los dioses". Salmo 95: 3. Es grande en sí mismo; y no
como otros reyes, que se engrandecen con sus
súbditos. Que es un Rey tan grande se manifiesta por
la inmensidad de su ser. "¿No lleno yo los cielos y la
tierra? Dice el Señor". Jer 23:24. Su centro está en
todas partes; no está incluido en ninguna parte, pero
no excluido en ninguna parte. Es tan inmensamente
grande, que "el cielo de los cielos no puede
contenerlo". 1 Reyes 8:27.
Su grandeza se manifiesta por los efectos de su
poder. Él "hizo el cielo y la tierra" y puede
deshacerlos. Salmo 124: 8. Con un soplo puede
hacernos polvo; con una palabra puede desanudar al
mundo y romper su eje en pedazos. "Derrama
desprecio sobre los príncipes". Job 12:21. "Cortará el
espíritu de los príncipes". Salmo 76:12. Él es el Señor
supremo, que hace lo que quiere. Salmo 115: 3. Pesa
"los montes en balanza y los cerros en balanza".
Salmo 40:12.
Dios es un Rey glorioso. "¿Quién es este Rey de
gloria? El Señor Todopoderoso, él es el Rey de
gloria". Salmo 24:10. Tiene gloria interna . "El Señor
reina, está vestido de majestad". Salmo 93: 1. Otros
reyes tienen vestiduras reales y suntuosas que los
hacen parecer gloriosos a los espectadores, pero
toda su magnificencia es prestada. Pero Dios está
revestido de su propia majestad; su propia esencia
gloriosa es en lugar de túnicas reales, y "se ha ceñido
de fuerza". Los reyes tienen su guardia sobre ellos
para
defender su persona, porque no son capaces de
defenderse; pero Dios no necesita protección ni
ayuda de otros. "Se ha ceñido de fuerza". Su propio
poder es su salvavidas. "¿Quién en los cielos puede
ser comparado con el Señor? ¿Quién entre los hijos
de los valientes puede ser semejante al Señor?"
Salmo 89: 6. Tiene una preeminencia sobre todos los
demás reyes por su majestad. "Tiene en su vestidura
un nombre escrito, Rex Regum , REY DE REYES".
Apocalipsis 19:16. Tiene el trono más alto, la corona
más rica, los dominios más grandes y la posesión
más larga. "El Señor se sienta Rey para siempre".
Salmo 29:10. Aunque tiene muchos herederos, pero
no sucesores. Él coloca su trono donde ningún otro
rey lo hace; gobierna la voluntad y los afectos ; su
poder ata la conciencia . Los ángeles le sirven, todos
los reyes de la tierra sostienen sus coronas y
diademas por tenencia inmediata de este gran Rey.
"Por mí reinan reyes", Proverbios 8:15. A este Señor
Jehová, todos los reyes deben rendir cuentas; y de su
tribunal no hay apelación.
Utilice 1. Para instrucción
(1) Si Dios es un Rey tan grande, y se sienta como
Rey para siempre, ¡no es menosprecio que le
sirvamos! Es un honor servir a un rey. Si los ángeles
vuelan rápidamente sobre el mensaje del Rey del
cielo, entonces bien podemos considerarlo como un
favor para ser tomado en su servicio real. Dan 9:21.
Teodosio pensó que era un honor más grande ser
siervo de Dios que emperador. Es más honor servir a
Dios que tener reyes que nos sirvan. ¡Cada súbdito
de este Rey está coronado con un honor real! Él "nos
ha hecho reyes". Apocalipsis 1: 6. por tanto, como la
reina de Sabá, habiendo visto la gloria del reino de
Salomón, dijo: "Bienaventurados estos tus siervos
que están continuamente delante de ti". 1 Reyes 10:
8. Tan felices son los santos que están ante el Rey del
cielo y esperan en su trono.
(2) Si Dios es un Rey tan glorioso, coronado de
sabiduría, armado de poder, cubierto de
riquezas, nos muestra qué prudencia es tener a
este Rey como nuestro ; para decir: "¡ Mi Rey y mi
Dios!" Salmo 5: 2. Se considera una gran política
estar del lado más fuerte. Si pertenecemos al Rey del
cielo, seguramente estaremos en el lado más fuerte.
El Rey de gloria puede fácilmente destruir a sus
adversarios; puede derribar su orgullo, atentar
contra su política y refrenar su malicia. Esa piedra
cortada de la montaña sin manos, que golpeó la
imagen (Dan

2:34), fue un emblema, dice Agustín, del poder

monárquico de Cristo, conquistando y triunfando
sobre sus enemigos. Si estamos del lado de Dios,
estamos del lado más fuerte; con una palabra puede
destruir a sus enemigos. "Entonces les hablará en su
ira". Salmo 2: 5. No, con una mirada puede
destruirlos. "Mira a todo el que es orgulloso y
humíllalo". Job 40:12. A Dios no le cuesta más
confundir a los que se levantan contra él, que una
mirada, un giro de sus ojos. "En la vigilia de la
mañana, el Señor miró al ejército de los egipcios, a
través de la columna de fuego, y alborotó al ejército
de los egipcios, y quitó las ruedas de sus
carros". Éxodo 14:24. ¡Qué sabiduría es entonces
tener a este Rey como nuestro! Entonces estamos en
el lado más fuerte.
Utilice 2. Para exhortación
(1) Si Dios es un Rey tan glorioso, lleno de poder y
majestad, confiemos en él. "Los que conocen tu
nombre confiarán en ti". Salmo 9:10. Confía en él tu
alma; no puedes poner esta joya en manos más
seguras. Y confíenle los asuntos de la iglesia y el
estado él es rey. "El Señor es un hombre de guerra".
Éxodo 15: 3. Él puede desnudar su santo brazo a los
ojos de todas las naciones. Si los medios fallan,
nunca está perdido; con él no hay imposibilidades;
puede hacer vivir los huesos secos. Ezequiel 37:10.
Como Rey puede mandar, y como Dios puede crear
la salvación. "Yo creo a Jerusalén un regocijo". Isaías
65:18. Confiemos todos nuestros asuntos con este
gran Rey. ¡O Dios puede quitar montañas o puede
saltarlas ! Cánticos 2: 8.
(2) Si Dios es un Rey tan grande, tememos. "¿No
me temes? Dice el Señor: ¿no temblarás ante mi
presencia?" Jer 5:22. Ya tenemos suficiente miedo a
los hombres. El miedo hace que el peligro parezca
mayor y el pecado menos; pero temamos al Rey de
reyes, que tiene poder para arrojar en cuerpo y alma
al infierno. Lucas 12: 5. Así como una cuña expulsa a
otra, el temor de Dios expulsa todo temor carnal
básico. Tememos a ese Dios cuyo trono está sobre
todos los reyes; pueden ser poderosos, pero él es
todopoderoso . Los reyes no tienen poder, sino lo que
Dios les ha dado; su poder es limitado, el suyo es
infinito. Tememos a este Rey, cuyos ojos son "como
llama de fuego". Apocalipsis 1:14. "Los montes se
estremecen ante él, y las rocas son derribadas por
él". Nahum 1: 5, 6. Si golpea con el pie, todas las
criaturas están ahora en un batallón para luchar por
él. Oh, tiembla y teme

ante este Dios. El temor de Dios, es el guardián del

alma. Impide que el pecado entre. "¿Cómo puedo
hacer esta gran maldad y pecar contra Dios?"
Génesis 39: 9.
(3) Si Dios es un Rey tan glorioso, tiene el poder
de la vida y la muerte en su mano. Que todos los
potentados de la tierra presten atención a cómo
emplean su poder contra el Rey del cielo. Ellos
emplean su poder contra Dios, que con sus cetros
derriban su verdad, que es la perla más oriental de
su corona; que aplastan y persiguen a su pueblo, que
son la niña de sus ojos (Zac 2: 8); que pisotea sus
leyes y edictos reales que él ha establecido (Salmo 2:
3). ¿Qué es un rey sin sus leyes? Que todos los que
están investidos de poder y grandeza mundanos,
presten atención a cómo se oponen al Rey de gloria.
El Señor será demasiado duro para todos los que
vengan contra él. "¿Tienes un brazo como Dios?" Job
40: 9. ¿Medirás brazos con el Todopoderoso?
¿Peleará un niño pequeño con un arcángel?
"¿Aguantará tu corazón, o serán fuertes tus manos
en los días que trataré contigo?" Ezequiel 22:14.
Cristo pondrá por fin a todos sus enemigos bajo sus
pies. Salmo 110: 1. Toda la multitud de impíos que se
oponen a Dios, será como racimos de uvas maduras,
para ser arrojados en el lagar de la ira de Dios, para
ser pisoteados por él hasta que brote su sangre. El
Rey de gloria saldrá vencedor por fin. Los hombres
pueden establecer su estándar, pero Dios siempre
establece sus trofeos de victoria.
El Señor tiene un cetro de oro y una vara de hierro.
Salmo 2: 9. Aquellos que no se inclinen ante uno,
serán quebrantados por el otro.
(4) ¿Es Dios un rey tan grande, que tiene todo el
poder en el cielo y la tierra en su mano?
Aprendamos a sujetarnos a él. Tú que has ido en el
pecado, y con tus impiedades colgaste una bandera
de desafío contra el Rey del cielo, ven pronto, haz las
paces, sométete a Dios. "Besa al Hijo, para que no se
enoje". Salmo 2:12. Besa a Cristo con un beso de
amor y un beso de obediencia. Obedece al Rey del
cielo cuando te habla por medio de sus ministros y
embajadores. 2 Corintios 5:20. Cuando Dios te
ordena huir del pecado y abrazar la santidad,
obedécelo: obedecer es mejor que sacrificarte.
"Obedecer a Dios", dice Lutero, "es mejor que hacer
milagros". Obedece a Dios de buena gana . Isaías
1:19. Esa es la mejor obediencia, que es alegre , ya
que es la miel más dulce que cae del panal. Obedecer
a dios

rápidamente . "Entonces alcé mis ojos, y he aquí dos

mujeres, y el viento estaba en sus alas". Zacarías 5: 9.
Las alas son veloces, pero el viento en las alas denota
una gran rapidez; tal debería ser nuestra obediencia
a Dios. Obedece al Rey de la gloria.
Utilice 3. Para el consuelo. Aquí hay consuelo para
aquellos que son súbditos del Rey del cielo. Dios
pondrá todo el poder real para su apoyo y consuelo.
(1) El Rey del cielo defenderá su causa. "Defenderé
tu causa y tomaré venganza por ti". Jer 51:36.
(2) Protegerá a su pueblo. Coloca una guardia
invisible sobre ellos. "Seré para ella un muro de
fuego en derredor". Zacarías 2: 5. Un muro, eso es
defensivo; un muro de fuego, eso es ofensivo.
(3) Cuando sea por el bien de su pueblo, les
levantará liberación. "El Señor los salvó con una
gran liberación". 1 Crónicas 11:14. Dios reinando
como rey, puede salvar de cualquier manera; incluso
por medios despreciables , como el toque de
trompetas y el resplandor de las lámparas. Jueces
7:20. Puede salvar por medios contrarios ; como
cuando hizo del mar un muro para Israel, y las aguas
fueron un medio para evitar que se ahogaran. El
vientre del pez era un barco en el que Jonás navegó
a salvo hasta la orilla. A Dios nunca le faltarán
formas de salvar a su pueblo; antes que fallar, sus
mismos enemigos harán su trabajo. 2 Crónicas 20:23.
Él pone a Ammón y al monte Seir uno contra el otro.
Como Dios librará a su pueblo del peligro temporal ,
así también del peligro espiritual , como del pecado y
del infierno . "Jesús, que nos libró de la ira venidera".
1 Tesalonicenses 1: 10.
Utilice 4. Para intimidación. Si Dios es rey, pondrá
todas sus fuerzas contra los enemigos de su reino.
"Un fuego va delante de él y quema a sus enemigos
en derredor". Salmo 97: 3.
(1) Se establecerá a sí mismo en contra de sus
enemigos. Contra ellos pondrá sus atributos, su
poder y su justicia; y "¿quién conoce el poder de tu
ira?" Salmo 90: 2.
(2) Él pondrá a las criaturas contra ellos. "Las estrellas en
sus cursos

Luchó contra Sísara. "Jueces 5:20. Tertuliano observa

que cuando los persas pelearon contra los cristianos,
se levantó un viento fuerte que hizo que las flechas
persas volaran en sus propias caras. Toda criatura
tiene una pelea con un pecador; piedra del muro,
granizo y escarcha. Hab 2:11. "Destruyó sus viñas
con granizo, y sus sicomoros con escarcha." Salmo
78:47.
(3) Dios pondrá a los hombres contra sí mismos. Él
pondrá conciencia contra ellos. ¡Cuán terrible es esta
vara cuando se convierte en serpiente!
¡Melanchthon lo llama una furia infernal! Se llama
vermis conscientiae , el gusano de la conciencia.
Marcos 9:44. ¡Qué gusano sintió Spira en su
conciencia! Era un terror para sí mismo. Las peores
guerras civiles son entre un hombre y su conciencia.
(4) Dios pondrá en su contra las enfermedades del
cuerpo de los hombres. "El Señor hirió a Joram en
sus entrañas con una enfermedad incurable". 2
Crónicas 21:18. Dios puede levantar un ejército
contra un hombre de su propio cuerpo; puede
contraponer un humor del cuerpo a otro; el calor
para secar la humedad y la humedad para ahogar el
calor. El Señor no necesita ir muy lejos en busca de
instrumentos para castigar al pecador; puede hacer
que las articulaciones de un mismo cuerpo se
golpeen unas contra otras. Dan 5: 6.
(5) Dios pondrá en contra de los amigos de los
hombres . Donde solían tener miel, no tendrán más
que áloe y ajenjo. "Cuando los caminos del hombre
agradan al Señor, aun a sus enemigos hace que estén
en paz con él". Proverbios 16: 7. Cuando se opone a
Dios, convierte a sus amigos en enemigos. La esposa
del emperador Commodes, le dio veneno en vino
perfumado. Los dos hijos de Senaquerib fueron su
muerte. 2 Reyes 19:37.
(6) Dios pondrá a Satanás en su contra. "Que
Satanás esté a su diestra". Salmo 109: 6. ¿Qué hace
Satanás, a los codos del pecador? Le ayuda a idear el
pecado. Lo tienta a pecar. Lo aterroriza por el
pecado. Aquel que tiene a Satanás a su derecha ,
seguramente estará a la izquierda de Dios . Aquí está
la miseria de los que se oponen al cetro real de Dios,
que pondrá todo en el mundo contra ellos. Si hay
justicia en el cielo o fuego en el infierno, ¡los
impíos no quedarán impunes!
Utilice 5. Para animar. Si Dios es un monarca tan absoluto,
y

coronados con tanta gloria y majestad, ocupémonos

todos de su servicio y defendamos su verdad y
adoración. Atrévete a reconocer a Dios en el peor
momento. Él es Rey de reyes y puede recompensar a
todos sus siervos. Podemos ser perdedores para él,
nunca seremos perdedores para él. Estamos listos
para decir, como Amasías: "¿Qué haré por los cien
talentos?" 2 Crónicas 25: 9. Si me presento a Dios,
puedo perder mi patrimonio o mi vida. Yo digo con
el profeta, Dios puede darte mucho más que esto; Él
puede darte para el presente la paz interior y para el
futuro una corona de gloria que no se desvanece.
¿Qué reino se quiere decir cuando Cristo dice:
"Venga tu reino"?
Demostremos primero lo que NO quiere decir.
(1) No se refiere a un reino político o terrenal . De
hecho, los apóstoles deseaban el reinado temporal
de Cristo. "¿Volverás a restaurar el reino a Israel en
este momento?" Hechos 1: 6. Pero Cristo dijo que su
reino no era de este mundo. Juan 18:36. De modo
que, cuando Cristo enseñó a sus discípulos a orar:
"Venga tu reino", no se refería a ningún reino
terrenal, para que reine aquí con pompa y esplendor
exterior.
(2) No se refiere al reino providencial de Dios . "Su
reino domina sobre todo"; es decir, el reino de su
providencia. Salmo 103: 19. No oramos por este
reino cuando decimos: "Venga tu reino"; porque este
reino ya ha llegado. Dios AHORA ejerce el reino de
su providencia en el mundo. "Deja uno y prepara
otro". Salmo 75: 7. Nada se mueve en el mundo, pero
Dios tiene una mano en él; pone a trabajar todas las
ruedas; humilla a los soberbios y levanta del polvo a
los pobres para ponerlos entre los príncipes. 1 Sam
2: 8. El reino de la providencia de Dios gobierna
sobre todo; los reyes no hacen nada más que lo que
su providencia permite y ordena. Hechos 4:27, 28.
Este reino de la providencia de Dios que no oramos
debe venir, porque ya ha llegado.
Entonces, ¿a qué reino nos referimos cuando
decimos: "Venga tu reino"? Positivamente se quiere
decir un reino doble.
(1) El reino de la gracia , que Dios ejerce en la conciencia de
su
personas. Este es el reino menor de Dios. Cuando
oramos, "Venga tu reino", oramos para que el reino
de gracia se establezca en nuestros corazones y se
incremente.
(2) Oramos también para que el reino de gloria se
apresure y para que, a su debido tiempo, seamos
trasladados a él. Estos dos reinos de gracia y gloria
no difieren en naturaleza, sino sólo en grado. El
reino de la gracia no es más que el comienzo del
reino de la gloria . El reino de gracia es gloria en la
semilla; y el reino de gloria es la gracia en la flor. El
reino de la gracia es la gloria al amanecer, y el reino
de la gloria es la gracia en el meridiano completo. El
reino de la gracia es la gloria militante, y el reino de
la gloria es la gracia triunfante. Existe una conexión
tan inseparable entre estos dos reinos, la gracia y la
gloria, que no se puede pasar al uno sino al otro.
En Atenas había dos templos, un templo de la virtud
y un templo de honor ; y no se podía entrar al templo
del honor, sino a través del templo de la virtud. De la
misma manera, los reinos de la gracia y la gloria
están tan estrechamente unidos que no podemos
entrar al reino de la gloria sino a través del reino de
la gracia. Mucha gente aspira al reino de la
gloria, pero nunca busca la gracia; pero estos dos,
que Dios ha unido, no se pueden separar. El reino de
la gracia conduce al reino de la gloria.
I. Lo primero que implica esta petición, "Venga tu
reino", es que estamos en el reino de las tinieblas
. Oramos para que podamos ser sacados del reino de
las tinieblas . El estado de naturaleza es un reino de
tinieblas, donde se dice que reina el pecado .
Romanos 6:12. Se llama "el poder de las tinieblas".
Colosenses 1:13. El hombre, antes de la caída, estaba
iluminado con un conocimiento perfecto , pero esta
luz ahora ha sido eclipsada y ha caído en el reino de
las tinieblas. "Porque nos rescató del dominio de las
tinieblas y nos llevó al reino del Hijo que ama, en
quien tenemos redención, el perdón de pecados".
Colosenses 1: 13-14
¿De cuántas maneras es un hombre natural en el reino de
las tinieblas?
(1) Está bajo las tinieblas de la ignorancia . "Tener
el entendimiento oscurecido". Efesios 4:18. La
ignorancia es un velo negro que cubre la mente.
Hombres

por naturaleza puede tener una comprensión

profunda de las cosas del mundo y, sin embargo,
ignorar las cosas de Dios. Nahas el amonita haría un
pacto con Israel para sacarles el ojo derecho. 1 Sam
11: 2. Desde la caída, nuestro ojo izquierdo
permanece: una visión profunda de los asuntos
mundanos; pero nuestro ojo derecho está sacado; no
tenemos un conocimiento salvador de Dios. Algunas
cosas las conocemos por naturaleza, pero nada como
deberíamos saber. 1 Cor 8: 2. La ignorancia cierra las
cortinas alrededor del alma. 1 Cor 2:14.
(2) Un hombre natural está bajo la oscuridad de la
contaminación . Por eso las acciones pecaminosas
se llaman "obras de tinieblas". Romanos 13:12. El
orgullo y la lujuria oscurecen la gloria del alma. El
corazón de un pecador es un cónclave oscuro, que
parece más negro que el infierno.
(3) Un hombre natural está bajo las tinieblas de la
miseria ; está expuesto a la venganza divina; y la
tristeza de esta oscuridad es que los hombres no la
perciben. Son ciegos, pero creen que ven. La
oscuridad de Egipto era una oscuridad tan densa que
"se podía sentir". Éxodo 10:21. Los hombres por
naturaleza están en una densa oscuridad. Pero aquí
está la miseria: ¡la oscuridad no se puede sentir! No
creerán que están en la oscuridad, ¡hasta que hayan
pasado la recuperación!
Uso 1. ¡Vea cuál es el estado de la naturaleza! Es
un "reino de tinieblas" y es una oscuridad
fascinante. "Los hombres amaron más las tinieblas
que la luz"; como los Athlantes en Etiopía maldicen
al sol. Juan 3:19. La oscuridad del pecado lleva a
"cadenas bajo las tinieblas". Judas 6. ¿Qué consuelo
pueden recibir tales en las cosas terrenales? Los
egipcios podrían tener comida, oro, plata; pero no
pudieron consolarse con ellos mientras estaban en la
oscuridad que se podía sentir; para que el hombre
natural tenga riquezas y amigos en los que
deleitarse ; sin embargo , está en el reino de las
tinieblas, ¡y cuán muertas están todas estas
comodidades! Tú que estás en el reino de las
tinieblas, no sabes a dónde vas. Como el buey es
conducido a la ruina, pero no sabe adónde va; de
modo que el diablo te está conduciendo ante él al
infierno, ¡pero no sabes adónde vas! Si mueres en tu
estado natural, mientras estás en el reino de las
tinieblas, ¡la oscuridad de las tinieblas está
reservada para ti! "¡A quien está reservada la
oscuridad de las tinieblas para siempre!" Judas 13.
Uso 2. Oremos para que Dios nos saque de este
reino de tinieblas. El reino de gracia de Dios no
puede entrar en nuestros corazones hasta que

somos sacados del reino de las tinieblas. Colosenses

1:13. ¿Por qué no deberíamos esforzarnos por salir
de este reino de tinieblas? ¿Quién desearía quedarse
en una mazmorra oscura? Temed las cadenas de las
tinieblas. Judas 6. Estas cadenas son el poder de Dios,
que ata a los hombres como en cadenas bajo la ira
para siempre. ¡Ora para que Dios te libere del reino
de las tinieblas!
(1) Sea consciente de su estado oscuro y maldito
, ¡que no tiene una chispa de fuego para iluminarlo!
(2) ¡Ve a Cristo para iluminarte! "Cristo os
alumbrará"; no sólo te traerá tu luz , sino que te
abrirá los ojos para verla. Efesios 5:14. Eso es lo
primero que implica: "Venga tu reino"; oramos para
que podamos ser sacados del reino de las tinieblas.

II. La segunda cosa implícita es "Venga tu reino",

es que oramos contra el reino del diablo ; para
que su reino sea demolido en el mundo. Su reino se
opone al reino de Cristo; y cuando oramos: "Venga tu
reino", oramos contra el reino de Satanás. Tiene un
reino: "El príncipe de este mundo". Juan 16:11. Lo
consiguió por conquista: conquistó a la humanidad
en el paraíso. Tiene su trono. "Habitas donde está el
trono de Satanás". Apocalipsis 2:13. Su trono está
establecido en el corazón de los hombres; no se
preocupa por sus carteras, sino por sus corazones. Se
le sirve de rodillas. Efesios 2: 2. "Adoraban al
dragón", es decir, al diablo. Apocalipsis 13: 4. El
imperio de Satanás es muy grande. La mayoría de
los reinos del mundo le rinden tributo. Su reino
tiene dos cualidades o caracteres: [1] Es regnum
nequitiae, un reino de impiedad. [2] Es regnum
servitutis, un reino de esclavitud.
[1] El reino de Satanás es un reino de IMPIEDAD .
Nada más que el pecado continúa en su reino.
Asesinato y herejía, lujuria y traición, opresión y
división, son el comercio constante impulsado en sus
dominios. Se le llama "el espíritu inmundo". Lucas
11:24. ¿Qué más se propaga en su reino, sino un
misterio de iniquidad?
[2] El reino de Satanás es un reino de ESCLAVITUD
. Hace esclavos a todos sus súbditos. ¡El pecador está
cautivo bajo la cruel tiranía del diablo! Satanás es un
usurpador y un tirano; ¡Es peor tirano que cualquier
otro!
(1) Otros tiranos solo gobiernan el cuerpo, pero el reino de
Satanás gobierna

sobre el alma! Monta a algunos hombres, como hacemos

nosotros a caballo.
(2) Otros tiranos se compadecen de sus esclavos.
Aunque los hacen trabajar en las galeras, les dan de
comer y les dejan descansar sus horas. Pero Satanás
es un tirano despiadado que da a sus esclavos
veneno en lugar de comida y deseos hirientes para
alimentarse. 1 Timoteo 6: 9. Tampoco dejará
descansar a sus esclavos: los fatiga para que hagan
su trabajo. "Se cansan de cometer iniquidad". Jer 9:
5.
Cuando el diablo entró en Judas, lo envió a los sumos
sacerdotes, y de allí al huerto, y no lo dejó descansar
hasta que traicionó a Cristo y se ahorcó. Por tanto, es
el peor de los tiranos. Cuando los hombres le han
servido con todas sus fuerzas, ¡les da la bienvenida
al infierno con fuego y azufre!
Utilizar. Oremos para que el reino de Satanás,
establecido en el mundo, sea derrocado. Es triste
pensar que, aunque el reino del diablo sea tan malo
-yet que debería tener tantos para apoyarlo. Tiene
más para defender su reino que lo que Cristo tiene
para el suyo. ¡Qué gran cosecha de almas tiene
Satanás! y Dios solo algunas espigas. El Papa y el
Turco le dan el poder a Satanás. Si en la iglesia
visible de Dios, el diablo tiene tantos súbditos leales
que le sirven con sus vidas y almas, ¿cómo sus
súbditos pululan en lugares de idolatría y
paganismo, donde no hay nadie que se le oponga
, pero todos votan del lado del diablo?
Los hombres son esclavos voluntarios de Satanás;
lucharán y morirán por él; por lo tanto, no solo se le
llama "el príncipe de este mundo", sino "el dios de
este mundo" (Juan 12:31; 2 Cor 4: 4), para mostrar el
poder que tiene sobre las almas de los hombres.
Oremos para que Dios rompa el cetro del reino del
diablo; que Miguel pueda destruir al dragón; ¡Que el
reino infernal del príncipe de las tinieblas sea
derrotado! El reino de Satanás debe ser derribado
antes de que el reino de Cristo pueda florecer en su
poder y majestad. "Entonces pueden volver en sí y
escapar de la trampa del diablo, habiendo sido
capturados por él para hacer su voluntad". 2
Timoteo 2:26
Cuando oramos, "Venga tu reino", algo tiene una intención
positiva.

III. Oramos para que el reino de GRACIA pueda

establecerse en nuestros corazones.
Cuando oramos, "Venga tu reino", oramos para que
el reino de gracia entre en nuestros corazones. Este
es regnum Dei mikron , el reino menor de Dios . "El
reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia,
paz y gozo en el Espíritu Santo". Romanos 14:17. "El
reino de Dios está dentro de ti". Lucas 17:21.
¿Por qué se llama reino a la gracia?
Porque, cuando llega la gracia, se establece un
gobierno real en el alma. La gracia gobierna la
voluntad y los afectos, y somete a todo el hombre a
Cristo; la reina en el alma, balancea el cetro, domina
los deseos rebeldes y mantiene el alma en un decoro
espiritual.
¿Por qué hay tanta necesidad de orar para que
este reino de gracia entre en nuestros corazones?
(1) Porque, hasta que venga el reino de la gracia,
no tenemos derecho al pacto de la gracia. El pacto
de gracia está endulzado con amor, salpicado de
promesas; es nuestra Carta Magna, en virtud de la
cual Dios se pasa a nosotros para ser nuestro Dios.
¿Quiénes son los herederos del pacto de gracia? Solo
los que tienen el reino de la gracia en sus corazones.
"Les daré un corazón nuevo, y pondré un espíritu
nuevo dentro de ustedes". Ezequiel 36:26. Aquí el
reino de la gracia se establece en el alma; luego
sigue, "Yo seré tu Dios", 36:28. El pacto de gracia es
para una persona despiadada , como una fuente
sellada; se guarda como un paraíso con una espada
de fuego, para que el pecador no lo toque. Sin gracia,
no tienes más derecho a ella que un granjero a la
carta de la ciudad.
(2) A menos que el reino de la gracia se
establezca en nuestro corazón, nuestras ofrendas
más puras están contaminadas. Pueden ser buenos
en cuanto al asunto, pero no en cuanto a la manera ;
carecen de lo que debería mejorarlos y endulzarlos.
Según la ley, si un hombre que era inmundo por
tocar un cadáver, llevaba un trozo de carne santa en
su falda, la carne santa no podía limpiarlo , pero lo
contaminó. Hag 2:12. Hasta que el reino de la gracia
esté en nuestro corazón, las ordenanzas no nos
purifican , pero las contaminamos. Incluso la
oración

de una persona despiadada es pecado. "El Señor

aborrece el sacrificio de los impíos" Proverbios 15: 8.
¡En qué triste condición se encuentra un hombre
antes de que el reino de gracia de Dios se instale en
su corazón! Ya sea que venga o no a la ordenanza,
peca. Si no llega a la ordenanza, la desprecia; si
viene, es un contaminador. Las obras de un pecador
son opera mortua , obras muertas; y aquellas obras
que están muertas, no pueden agradar a Dios. Una
flor muerta no tiene dulzura. Hebreos 11: 6.
(3) Necesitamos orar para que venga el reino de
la gracia, porque hasta que este reino entre en
nuestros corazones, somos repugnantes a los ojos
de Dios. "Mi alma los aborreció". Zacarías 11: 8.
¡Cuán grande es la maldad de una mente corrupta!
Un corazón sin gracia parece más negro que el
infierno. El pecado transforma al hombre en diablo.
¿No os he elegido a los doce y uno de vosotros es un
demonio? Juan 6:70. La envidia es el ojo del diablo, la
hipocresía es su pie hendido. Así es antes de que
venga el reino de gracia. Tan deforme es una
persona sin gracia, que cuando ve su propia
inmundicia y lepra, lo primero que hace es
detestarse a sí mismo. "Te aborrecerás a ti mismo
ante tus propios ojos por todos tus males". Ezequiel
20:43. He leído de una mujer que siempre usaba
espejos halagadores y que, por casualidad, al ver su
rostro en un espejo de verdad, en insaniam delapsa
est, se volvió loca. Una vez que Dios les dé a los que
ahora se visten con el espejo lisonjero de la
presunción una visión de su propia inmundicia, se
aborrecerán a sí mismos. "Te aborrecerás a ti mismo
ante tus propios ojos por todos tus males".

(4) Antes de que nos llegue el reino de la gracia,

somos espiritualmente ilegítimos, de la linaje
bastardo de la serpiente antigua. "¡Ustedes son los
hijos de su padre el Diablo!" Juan 8:44. Ser ilegítimo
es la mayor infamia. "Un bastardo no entrará en la
congregación del Señor ni siquiera hasta su décima
generación". Deuteronomio 23: 2. Debía ser
mantenido fuera de las santas asambleas de Israel
como una criatura infame. Un bastardo por ley no
puede heredar. Antes de que el reino de la gracia
entre en el corazón, una persona es para Dios como
ilegítima y, por tanto, no puede entrar en el reino de
los cielos.
(5) Antes de que el reino de gracia se establezca
en el corazón de los hombres, el reino de Satanás
se establece en ellos. Se dice que están bajo "el
poder de Satanás". Hechos 26:18. Satanás ordena la
voluntad; aunque no puede

forzar la voluntad, con sus sutiles tentaciones puede

atraerla. Se dice que toma cautivos a los hombres "a
su voluntad". 2 Timoteo 2:26. La palabra griega
significa tomarlos vivos como el cazador hace con el
pájaro en la trampa. El corazón del pecador es la
mansión del diablo . "Volveré a mi casa". Mateo
12:44. El corazón del pecador es el taller de Satanás,
donde trabaja. "Satanás, el poderoso príncipe de la
potestad del aire, que ahora obra en los hijos de la
desobediencia". Efesios 2: 2. Los miembros del
cuerpo son las herramientas con las que trabaja
Satanás. Posee hombres. En la época de Cristo,
muchos tenían sus cuerpos poseídos, pero es mucho
peor poseer las almas . Uno está poseído por un
diablo impuro, otro por un diablo vengativo, otro
por un diablo de la codicia , etc. No es de extrañar
que el barco navegue a toda vela cuando sopla el
viento; no es de extrañar que los hombres naveguen
a toda vela en el pecado cuando el diablo, el príncipe
del aire, los derriba. Así, hasta que venga el reino de
la gracia , los hombres están bajo el poder de
Satanás, quien, como Draco, escribe todas sus leyes
con sangre.
(6) Hasta que venga el reino de la gracia, el
hombre está expuesto a la ira de Dios. "¿Quién
conoce el poder de tu ira?" Salmo 90:11. Si cuando
una chispa de la ira de Dios entra en la conciencia de
un hombre en esta vida es tan terrible, ¿qué será
cuando Dios despierte toda su ira? Tan
inconcebiblemente torturadora es la ira de Dios, que
los impíos llaman a las rocas y montañas para caer
sobre ellas y esconderlas de ellas. Apocalipsis 6:16.
Los tormentos infernales se comparan con un lago
de fuego. Apocalipsis 20:15. Otro fuego no es más
que fuego pintado , ¡en comparación con este! Este
lago de fuego arde para siempre. Marcos 9:44. El
aliento de Dios enciende este fuego. Isaías 30:33.
¿Dónde encontraremos baldes para apagarlo? El
tiempo no lo terminará; las lágrimas no lo apagarán.
A este lago de fuego están condenados los hombres,
hasta que el reino de gracia se establezca en ellos.
(7) Hasta que venga el reino de la gracia, los
hombres no pueden morir con comodidad. Sólo
quien toma a Cristo en los brazos de su fe puede
mirar a la muerte con alegría. Es triste tener al rey
de los terrores en el cuerpo, y no al reino de la gracia
en el alma . Es una maravilla que toda persona sin
gracia no muera loca. ¿Qué hará un
despreciador de la gracia cuando la muerte venga a
arrestarlo? El infierno sigue a la muerte. "He aquí
un caballo pálido, y su nombre que lo montaba era
muerte, y el infierno lo siguió". Apocalipsis 6: 8. Así
ves la necesidad que tenemos de orar para que
venga el reino de la gracia. Del que muere sin Cristo
puedo decir: "Ha sido bueno

para ese hombre si no hubiera nacido. "Mateo 26:24.

Pocos creen en la necesidad de tener el reino de la
gracia establecido en sus corazones, como aparece
por esto, que están contentos de vivir sin él. creen en
la necesidad del perdón, ¿quién se contenta con
estar sin él? La mayoría de la gente, si puede
comerciar y sentarse tranquilamente debajo de su
vid e higuera, está en su reino, aunque no tiene el
reino de Dios dentro de sí. . Si la vela de la
prosperidad brilla sobre sus cabezas, no les importa
si la gracia de Dios brilla en sus corazones. ¿Creen
estos hombres en la necesidad de la gracia? ¿Estaban
convencidos de lo necesario que es tener el reino de
Dios dentro de ellos? gritaría como el carcelero:
"¿Qué debo hacer para ser salvo?" Hechos 16:30.
¿Cómo podemos saber que el reino de la gracia
está establecido en nuestro corazón?
Nos interesa examinar esto, porque nuestra
salvación depende de ello, y debemos ser prudentes
en la búsqueda, porque hay algo que parece gracia,
que no lo es. "Si un hombre piensa que es algo,
cuando no es nada, se engaña a sí mismo". Gálatas 6:
3. Muchos piensan que tienen el reino de la gracia en
su corazón, y es solo una quimera, un sueño dorado.
"¡Cuántos con vana esperanza van al infierno!"
Agustín. Zeuxis pintó las uvas con tanta
vivacidad, que engañó a los pájaros vivos. Hay
muchos engaños sobre la gracia.
(1) Los hombres piensan que tienen el reino de la
gracia en sus corazones porque tienen los medios
de la gracia. Viven donde suena la trompeta de
plata del evangelio, son elevados al cielo con
ordenanzas. "Tengo un levita para mi sacerdote",
seguramente iré al cielo. Jueces 17:13. Los judíos
clamaron: "El templo del Señor, el templo del Señor
somos nosotros". Jer 7: 4. Somos aptos para
gloriarnos en esto, que los oráculos de Dios están
confiados a nosotros, que tenemos la Palabra y el
sacramento. ¡Pobre de mí! esto es una falacia; es
posible que tengamos los medios de la gracia y, sin
embargo, el reino de la gracia no se establezca en
nuestro corazón. Es posible que el reino de Dios se
acerque a nosotros, pero no a nosotros. Podemos
tener el sonido de la Palabra en nuestros oídos, pero
no su sabor en nuestro corazón. Lucas 11:20. Muchos
de los judíos, que tenían a Cristo como predicador,
no fueron mejores por eso. La ropa caliente no
calentará a un hombre muerto. Puede tener ropa de
abrigo, advertir y predicar animadamente, y sin
embargo estar espiritualmente muerto. "Los hijos
del
el reino será arrojado. Mateo 8:12.
(2) Los hombres piensan que tienen el reino de la
gracia establecido en sus corazones, porque
tienen algunas obras comunes del Espíritu.
[1] Pueden tener una gran iluminación mental ,
un conocimiento profundo y casi hablar como
ángeles caídos del cielo . Pero el apóstol supone un
caso en el que, después de que los hombres hayan
sido iluminados, pueden caer. Heb. 6: 4, 5, 6.
Pero, ¿en qué se queda corta esta iluminación?
La iluminación de los hipócritas no es poderosa ni
eficaz; no deja una impresión de santidad; es como
una física débil que no funciona. La mente está
iluminada, pero el corazón no se renueva. Un
profesor cristiano que es todo cabeza, pero no pies,
no anda en los caminos de Dios.
[2] Los hombres han tenido convicciones y
conmoción de conciencia por el pecado , han
visto la maldad de sus caminos, y ahora esperan
que venga el reino de la gracia; pero aunque las
convicciones son un paso hacia la gracia, no son
gracia. ¿No tenían Faraón y Judas convicciones?
Éxodo 10:16.
¿Qué hace que las condenas resulten abortivas? ¿En qué
fallan?
No son lo suficientemente profundos. Un pecador
nunca se vio perdido sin Cristo. La semilla que
carecía de profundidad de tierra, se secó. Mateo 13:
5. Estas convicciones son como flores arrancadas
antes de llegar a la madurez. También son
involuntarios. El pecador hace lo que puede para
sofocarlos; los ahoga en vino y alegría; trabaja para
deshacerse de ellos. Como el ciervo, cuando se le
dispara, corre y sacude la flecha, así lo hace la flecha
de la convicción; o como el prisionero lima sus
cadenas y se suelta, así se libera de sus condenas.
Sus corrupciones son más fuertes que sus
convicciones .
[3] Los hombres han sufrido algún tipo de
humillación y han derramado lágrimas por sus
pecados, y por tanto esperan que el reino de la
gracia haya llegado a sus corazones. Pero este no
es un signo infalible de gracia. Saul

lloró Acab se humilló.

¿Por qué la humillación no es una gracia? ¿En qué se queda
corto?
Las lágrimas en los impíos no brotan del amor a
Dios, sino que son forzadas por la aflicción , como el
agua que cae de la destilación es forzada por el
fuego. Génesis 4:13. Las lágrimas de los pecadores
son forzadas por los juicios ardientes de Dios. Son
lágrimas engañosas. Los hombres lloran, pero siguen
pecando; no ahogan sus pecados en sus lágrimas.
[4] Los hombres han comenzado alguna reforma
, por lo que ahora seguramente piensan que ha
llegado el reino de la gracia. Pero puede haber
engaño en esto. Un hombre puede dejar sus
juramentos y borracheras, y todavía estar
enamorado del pecado. Puede que deje su
pecado, por temor al infierno o porque le trae
vergüenza y pobreza, pero aún así su corazón lo
persigue: "Pusieron su corazón en su iniquidad"
(Oseas 4: 8); cuando la esposa de Lot salió de
Sodoma, pero su corazón todavía estaba en Sodoma.
Los hipócritas son como la serpiente que se quita la
piel, pero conserva su veneno. Mantienen el amor
por el pecado, como alguien que durante mucho
tiempo ha sido un pretendiente infructuoso para
otro, pero todavía siente un amor anhelante por ella.
Puede ser una reforma parcial. Puede dejar un
pecado y vivir en otro. Puede abstenerse de la
embriaguez y vivir en la codicia. Puede abstenerse
de jurar y vivir en el pecado de la difamación. Un
diablo puede ser expulsado y otro tan malo puede
venir en su lugar. Un hombre puede abandonar los
pecados graves , pero no se resiste a los pecados del
corazón , como los pensamientos orgullosos y
lujuriosos. Aunque embalsa el arroyo , deja la fuente
sola.
Oh, por lo tanto, si hay tantos engaños, y los
hombres pueden pensar que el reino de los cielos ha
llegado a sus corazones cuando no es así, ¡cuán
cuidadosos y críticos hubiéramos tenido que ser en
nuestra búsqueda de si realmente lo tenemos en
nuestros corazones! Si un hombre es engañado en el
título de su tierra, no es más que la pérdida de su
propiedad ; pero si se engaña acerca de su gracia, ¡es
la pérdida de su alma!
¿Cómo podemos saber positivamente que el reino de la gracia
está establecido en nosotros?
En general, al tener una metamorfosis o un cambio
en el alma, lo que se llama la "nueva creación". 2
Corintios 5:17. Las facultades no son nuevas, pero
hay una nueva naturaleza; como las cuerdas de un
laúd son las mismas, pero el

la melodía está alterada. Cuando se establece el

reino de la gracia, hay luz en la mente , orden en los
afectos , flexibilidad en la voluntad , ternura en la
conciencia . Aquellos que no pueden encontrar tal
cambio de corazón, y son los mismos que eran - tan
vanidosos, tan terrenales, tan inmundos como
siempre - no tienen señal del reino de gracia de Dios
en ellos.
Más particularmente, podemos saber que el reino
de la gracia está establecido en nuestros
corazones.
(1) Al tener VERDADEROS DESEOS DE DIOS , que
es el pábilo humeante que Cristo no apagará. Un
verdadero deseo de la gracia es la gracia: al latir este
pulso concluimos que hay vida. "Oh Señor, esté
atento tu oído a la oración de tus siervos que desean
temer tu nombre". Neh 1:11. Pero, ¿no puede un
hipócrita tener buenos deseos? "Déjame morir con la
muerte de los justos". Números 23:10. Los
verdaderos deseos de Dios, evidencian el reino de
Dios dentro del hombre.
¿Cómo se pueden conocer estos verdaderos deseos?
Un verdadero deseo de Dios es sincero . Deseamos a
Dios para sí mismo, por sus excelencias intrínsecas. El
olor del ungüento de las gracias de Cristo atrae los
deseos de las vírgenes hacia él. Cánticos 1: 3. Un
verdadero santo lo desea, no sólo por lo que
tiene -pero por lo que es ; no sólo por sus
recompensas -pero por su santidad . Ningún
hipócrita puede desear así a Dios; puede desearlo
por sus joyas, pero no por su belleza.
Un verdadero deseo de Dios es insaciable . No puede
satisfacerse sin Dios; que el mundo acumule sus
honores y riquezas, no los satisfarán. No hay flores
ni música que contenten al sediento; de modo que
nada apagará la sed del alma, ¡ sino la sangre de
Cristo! Se desmaya, su corazón se rompe por el
anhelo de Dios. Salmo 84: 2; Salmo 119: 20.
Un verdadero deseo de Dios está activo ; florece en
esfuerzo . "Con mi alma te he deseado en la noche; sí,
con mi espíritu dentro de mí te buscaré temprano".
Isaías 26: 9. Un alma que desea correctamente dice:
"Debo tener a Cristo; debo tener la gracia; tendré el
cielo, aunque lo tome por asalto". El que desea agua
arrojará el balde al pozo para sacarlo.
Un verdadero deseo de Dios es supremo . Deseamos
a Cristo, no solo más que el mundo, sino más que el
cielo. "¿A quién tengo yo en el cielo sino a ti?" Salmo
73:25. El cielo mismo no satisfaría sin Cristo. ¡Cristo
es el diamante en el anillo de gloria! Si Dios le dijera
al alma: Te pondré en el cielo, pero esconderé mi
rostro de ti, pondré una cortina entre nosotros para
que no veas mi gloria; el alma no estaría
satisfecha, pero di, como Absalón: "¡Quiero ver el
rostro del rey!" 2 Samuel 14:32.
Un verdadero deseo de Dios está aumentando .
Aumenta como el sol en el horizonte. Un poco de
Dios no satisfará, pero el alma piadosa desea aún
más. Una gota de agua no es suficiente para el
viajero sediento. Aunque un cristiano está
agradecido por el menor grado de gracia, no está
satisfecho con el mayor; todavía tiene sed de más de
Cristo y de su Espíritu. Un santo tendría más
conocimiento, más santidad, más de la presencia de
Cristo. Un vistazo a Cristo a través del enrejado de
una ordenanza es dulce; pero el alma nunca dejará
de anhelar, hasta que lo vea cara a cara. Desea que
la gracia se perfeccione en gloria . Desea sumergirse
por completo en la dulzura de Dios. Seríamos
absorbidos por Dios y siempre nos bañaríamos en
esas perfumadas aguas de placer que corren a su
diestra para siempre. Sin duda, este deseo sincero de
Dios es una señal bendita de que el reino de la gracia
ha llegado a nuestros corazones. ¡El latido de este
pulso muestra vida! "Los deseos de Dios son de Dios".
Agustín. Si el hierro se mueve hacia arriba en contra
de su naturaleza, es una señal de que alguna piedra
de carga lo ha estado dibujando. De la misma
manera, si el alma se mueve hacia Dios con deseos
sinceros , ¡ es una señal de que la piedra de carga del
Espíritu la ha estado atrayendo!
(2) Podemos saber que el reino de la gracia ha
entrado en nuestros corazones al tener la gracia
principesca de la FE. "La fe es la joya más sagrada
del corazón humano". Gema. La fe nos separa del
olivo silvestre de la naturaleza y nos injerta en
Cristo. La fe es la arteria vital del alma. "El justo
vivirá por la fe". Hebreos 10:38. La fe hace una santa
aventura por los méritos de Cristo. Como una gracia
principesca , reina en el alma cuando el reino de
Dios ha llegado a nosotros. La palabra hebrea para
fe significa nutrir ; la fe nutre el alma y es la nodriza
de todas las gracias. Pero, ¿quién no dirá que es un
creyente? Simon Magus creyó, pero estaba en la hiel
de la amargura. Hechos 8:13, 23. El hipócrita puede
vestirse

el manto de la fe, como el diablo lo hizo con Samuel.

¿Cómo, pues, sabremos que nuestra fe es sólida, que
es la fe de la operación de Dios, y que el reino de Dios
está dentro de nosotros?
La verdadera fe es obra del ministerio de la Palabra.
"La fe viene por el oír". Romanos 10:17. Pedro dejó
caer la red de su ministerio y de un solo tiro capturó
tres mil almas. Examinemos cómo se forjó nuestra
fe. ¿Nos humilló Dios en el ministerio de la Palabra?
¿Rompió el barbecho de nuestro corazón y luego
echó la semilla de la fe? Buena señal; pero, si no
saben cómo ha llegado por su fe, sospechen de
ustedes mismos; como sospechamos que los
hombres han robado bienes, cuando no saben cómo
los obtuvieron.
La verdadera fe es al principio pequeña , como un
grano de mostaza; está lleno de dudas y miedos; es
lino humeante: fuma con deseo, pero no arde con
comodidad. Es tan pequeño que un cristiano
difícilmente puede discernir si tiene fe o no.
La verdadera fe tarda en obrar, no se produce en un
momento. Cuesta muchos escrutinios del corazón,
muchas oraciones y lágrimas; hay un combate
espiritual . El alma sufre muchos dolores de
humillación antes de que nazca el hijo de la fe . A
aquellos cuya fe es de un salto, que saltan del pecado
a la confianza de que Cristo es de ellos, podemos
decir, como Isaac con respecto al venado de su hijo:
"¿Cómo es que lo habéis encontrado tan pronto?"
Génesis 27:20. ¿Cómo es que llegaste por tu fe tan
pronto? La semilla de la parábola que brotó de
repente , se secó. Marcos 4: 5, 6. [Las cosas que
crecen demasiado rápido, tienen una forma de
marchitarse repentinamente].
La verdadera fe está unida a la santidad . Como un
poco de almizcle endulza, un poco de fe purifica.
"Manteniendo el misterio de la fe en una conciencia
pura". 1 Timoteo 3: 9. Aunque la fe toca a Cristo,
obtiene de él una virtud sanadora. La justificación
de la fe hace que en un sentido espiritual que la fe
milagrosa hace- que elimina las montañas de pecado,
y les hace caer en el mar de la sangre de Cristo!
La verdadera fe confiará en Dios, incluso en tiempos
de prueba . Aunque un cristiano no tenga
provisiones, aunque la higuera no florezca,

confianza en Dios. La fe no teme al hambre. Dios nos

ha dado su promesa como su vínculo.
"Verdaderamente serás alimentado". Salmo 37: 3. La
fe pone en juego este vínculo, que Dios preferirá
obrar un milagro, antes que su promesa fracasará.
Tiene motivos para sospechar de su fe, quien dice
que confía en Dios para lo mayor, pero no se atreve
a confiar en Él para lo menor: confía en Dios para la
salvación, pero no se atreve a confiar en Él para el
pan de cada día.
La verdadera fe es prolífica . Da fruto; tiene la
belleza de Rachel y la fecundidad de Leah. La fe está
llena de buenas obras. Cree como si no hubiera
funcionado, y funciona como si no creyera. La fe es la
gracia de la esposa que se casa con Cristo, y las
buenas obras son los hijos que da a luz. Al tener tal
fe, podemos saber que el reino de Dios está dentro
de nosotros; esa gracia está ciertamente en nuestro
corazón.
(3) Podemos saber que el reino de la gracia ha
entrado en nuestros corazones al tener la gracia
del AMOR. La fe y el amor son las dos bisagras sobre
las que gira toda religión verdadera. "Los rectos te
aman". Cánticos 1: 4.
El verdadero amor de amar a Dios no es una
elección . Convierte el alma en serafines; la hace
arder en una llama de afecto; es la verdadera piedra
de toque de la sinceridad. El amor es la reina de las
gracias; manda a toda el alma. "El amor de Cristo nos
obliga". 2 Corintios 5:14. Si nuestro amor a Dios es
genuino, le dejamos la supremacía de nuestro amor;
lo colocamos en el lugar más alto de nuestra alma; le
damos lo más puro de nuestro amor. "Te daría de
beber vino especiado, mi dulce vino de granada".
Cánticos 8: 2. Si el cónyuge tuviera algo mejor, una
taza más jugosa y especiada, Cristo bebería de eso.
Le damos a la criatura la leche de nuestro amor;
¡Pero Dios se lleva la crema!
En resumen, si amamos a Dios correctamente,
amamos sus leyes . También amamos su imagen
dibujada en los santos , por el lápiz del Espíritu
Santo. También amamos su presencia en sus
ordenanzas . Sleidan dice que los protestantes en
Francia tenían una iglesia a la que llaman paraíso;
como si se pensaran en el paraíso mientras tenían la
presencia de Dios en su santuario. El alma que ama a
Dios, ama su aparición . 2 Timoteo 4: 8. Será una
aparición gloriosa a los santos, cuando su unión con
Cristo sea completa; entonces su gozo será completo.
La novia anhela el día de la boda. "El Espíritu y el
la novia dice: ¡Ven! Sí, ven, Señor Jesús ". Apocalipsis
22:17, 20. Por este amor sagrado podemos saber que
el reino de Dios está dentro de nosotros.
(4) Podemos saber que el reino de la gracia ha
llegado a nuestros corazones, si nuestros
deberes están espiritualizados. "Eres un
sacerdocio santo para ofrecer sacrificios espirituales
". 1 Pedro 2: 5 El deber de espiritualización consiste
en tres cosas:
[1] Fijación mental. Espiritualizamos el deber
cuando nuestra mente está fija en Dios. "Para que
puedas estar atento al Señor sin distracción". 1
Corintios 7:35. Aunque a veces surgen pensamientos
impertinentes en el corazón en el deber, no están
permitidos. Salmo 119: 113. Vienen como huéspedes
no deseados, que apenas son espiados pero
desalojados.
[2] Fervor de devoción. "Ferviente de espíritu,
sirviendo al Señor". Romanos 12:11. La alusión es al
agua que hierve y hierve; así los afectos hierven, los
ojos se derriten en lágrimas y el corazón fluye en
santas exclamaciones. No solo llevamos nuestra
ofrenda a Dios, sino también nuestro corazón .
[3] Rectitud de puntería. Un hombre cuyo corazón
es recto, tiene tres fines en el deber:
Primero, para que se parezca más a Dios. Moisés en
el monte tenía algo de la gloria de Dios reflejada en
él: "su rostro resplandecía".
En segundo lugar, para que tenga más comunión con
Dios. "Nuestra comunión es con el Padre". 1 Juan 1:
3.
En tercer lugar, para que le dé más gloria a Dios. 1
Pedro 4:11 "Para que Cristo sea engrandecido".
Filipenses 1:20. La sinceridad apunta a Dios en todas
las cosas. Aunque disparamos poco, apuntamos
correctamente, lo cual es una prueba segura de
gracia. Los espíritus del vino son los mejores,
también lo es la parte espiritual del deber. Un poco
de espiritualidad en el deber es mejor que todos los
adornos del templo, o una adoración pomposa
exterior que deslumbra los ojos carnales.
(5) Podemos saber que el reino de la gracia ha
entrado en nosotros, por antipatía y oposición
contra todo PECADO conocido. "Odio todo camino
falso". Salmo 119: 104. El odio está contra todo
pecado. El odio es

implacable; la ira puede reconciliarse, el odio no. Un

alma bondadosa no solo abandona el pecado (como
un hombre abandona su país para no volver nunca
más a él ), sino que odia el pecado. Así como existe
una antipatía entre el cocodrilo y el escorpión, así, si
el reino de Dios está dentro de nosotros, no solo
odiamos el pecado por el infierno, sino que lo
odiamos como el infierno, por ser contrario a la
santidad y felicidad de Dios.
(6) Podemos saber que el reino de la gracia ha
llegado a nosotros, cuando nos hemos entregado
a Dios por OBEDIENCIA. Como un siervo se entrega
a su amo, como una esposa se entrega a su
esposo, así nosotros nos entregamos a Dios por
obediencia. Esta obediencia es gratuita , ya que es la
miel más dulce que cae del panal. Esta obediencia es
uniforme . Obedecemos a Dios en una cosa, así como
en otra. "Entonces no seré yo avergonzado"; o, como
está en hebreo, no me sonrojaré "cuando tenga
respeto a todos tus mandamientos". Salmo 119: 6.
Como una brújula tiene un extremo en el centro y el
otro gira alrededor del círculo; así, el cristiano, por
la fe, se sitúa en Dios como centro, y por la
obediencia recorre el círculo de sus mandamientos.
Es una señal de que el reino de la gracia ha entrado
en el corazón, cuando reina allí por la obediencia
universal. Los hipócritas quieren que Cristo sea su
Salvador, pero le quitan la corona de la cabeza y no
lo dejarán gobernar. Pero el que tiene el reino de
Dios dentro de sí, se somete alegremente a todo
mandamiento de Dios; hará lo que Dios quiere que
haga; que va a ser lo que Dios tendrá que ser él. Pone
un papel en blanco en la mano de Dios y dice:
"Señor, escribe lo que quieras, yo obedeceré".
Bienaventurado el que puede encontrar todas estas
cosas en su alma. Él es "todo glorioso por dentro".
Salmo 45:13. Lleva un reino a su alrededor , y este
reino de gracia ciertamente traerá un reino de gloria
.
Ahora responderé algunas dudas y objeciones que
un cristiano puede hacer contra sí mismo.
Temo que el reino de la gracia aún no ha entrado en mi
corazón.
Cuando un cristiano está bajo la tentación, o la
gracia permanece dormida, no es apto para ser su
propio juez; pero debe tomar el testimonio de otros
que tienen la

espíritu de discernimiento. Pero escuchemos las

objeciones de un cristiano contra sí mismo, por qué
cree que el reino de la gracia aún no ha entrado en
su corazón.
No puedo discernir la gracia.
Un hijo de Dios puede tener el reino de la gracia en
su corazón y, sin embargo, no saberlo. La copa
estaba en el costal de Benjamín, aunque él no sabía
que estaba allí; para que tengas fe en tu corazón, la
copa esté en tu costal, aunque tú no lo sepas. El viejo
Jacob lloró por su hijo José, cuando José vivía; para
que llores por la falta de gracia, cuando la gracia esté
viva en tu corazón. La semilla puede estar en la
tierra, cuando no la vemos brotar; para que la
semilla de Dios sea sembrada en tu corazón, aunque
no la veas brotar. No creas que la gracia está
perdida, porque está oculta.
"Antes que el reino de la gracia entre en el corazón,
debe haber alguna preparación para él; el barbecho
debe ser cortado. Pero temo que el arado de la ley no
ha profundizado lo suficiente. No he sido lo
suficientemente humillado ; por lo tanto, no tienes
gracia. "
Dios no prescribe una proporción exacta de dolor y
humillación; Las Escrituras mencionan la realidad
del dolor según Dios , pero no el alcance . Algunos
son más pecadores que otros y deben sufrir un
mayor grado de humillación. Una pieza de madera
con nudos requiere que se introduzcan más cuñas.
Algunos estómagos están más enfermos que otros,
por lo que necesitan medicamentos más fuertes.
Pero, ¿sabrías cuándo has sido lo suficientemente
humillado por el pecado? Cuando esté dispuesto a
dejar ir sus pecados. El oro ha permanecido bastante
tiempo en el horno, cuando se limpia la escoria; así,
cuando el amor al pecado es purgado, el alma se
humilla lo suficiente para la aceptación divina,
aunque no para la satisfacción divina. Ahora, si te
sientes lo suficientemente humilde, ¿qué necesita
más? Si una aguja deja salir el absceso, no se
necesita la lanza . No seas más cruel contigo mismo
de lo que Dios quisiera contigo.
"Si el reino de Dios estuviera dentro de mí, sería un
reino de poder ; me capacitaría para servir a Dios
con el vigor del alma. Pero tengo un espíritu de
enfermedad sobre mí, soy débil e impotente, y no estoy
sintonizado con
toda acción santa ".
Hay una gran diferencia entre la debilidad de la
gracia y la falta de gracia. Un hombre puede tener
vida , aunque esté enfermo y débil . La gracia débil no
debe ser despreciada, sino nutrida. Cristo no
quebrará la caña cascada. No discuta desde la
debilidad de la gracia hasta la ausencia de la gracia.
(1) La gracia débil nos dará un título a Cristo, así
como una gracia fuerte. Una mano débil de fe
recibirá las ricas limosnas de los méritos de Cristo .
(2) La fe débil es capaz de crecer. La planta brota
gradualmente, primero la hoja, luego la espiga y
luego el maíz lleno en la espiga. La fe que es
más fuerte — estuvo una vez en su infancia. La
gracia es como las aguas del santuario, que se elevan
más y más. No te desanimes por tu fe débil; aunque
esté floreciendo, poco a poco llegará a madurar.
(3) La gracia más débil perseverará, así como la más
fuerte. Un niño estaba tan seguro en el arca como
Noé. Un creyente recién nacido que acaba de nacer
en el pecho de la promesa está tan seguro en Cristo
como el santo heroico más eminente.
"Pero temo que el reino de la gracia aún no ha
llegado, porque encuentro el reino del pecado tan
fuerte en mí. Si tuviera fe, purificaría mi corazón; pero
encuentro mucho orgullo, mundanalidad y pasión".
Los mejores santos tienen restos de corrupción.
"Habían su dominio tomada
de distancia y sin embargo su vida se prolonga por
un tiempo." Dan 7:12. Así que en los regenerados,
aunque se quita el dominio del pecado, la vida del
pecado se prolonga por una temporada. ¡Qué orgullo
tenían los propios discípulos de Cristo, cuando se
esforzaban por quién debía ser el más grande! La
vida del pecado no se detendrá del todo hasta la
muerte. El Señor se complace en permitir que
continúe la morada del pecado , en humillar a su
pueblo y hacer que valore más a Cristo. Debido a que
encuentran que las corrupciones se agitan, no se
desanimen en este momento ni nieguen el reino de
la gracia que ha de entrar en sus almas. Que sienta
que el pecado es una evidencia de vida espiritual;
que llores porque es fruto del amor a Dios; que
tienes un combate con el pecado, argumenta
antipatía contra él. Esos pecados que una vez usaste
como corona

en tu cabeza, ahora son como grilletes en la pierna.

¿No es todo esto del Espíritu de gracia en ti? El
pecado está en ti, como veneno en el cuerpo, del cual
estás harto, y usa todos los antídotos de las
Escrituras para expulsarlo. Si condenamos a todos
aquellos que tienen pecado en nosotros, es más, a
quienes el pecado ha prevalecido a veces,
borraríamos de la Biblia a algunos de los mejores
santos.
"Donde viene el reino de la gracia, ablanda el corazón;
pero encuentro mi corazón congelado y congelado en
dureza; apenas puedo exprimir una lágrima. ¿Crecen
flores en una roca? ¿Puede haber gracia en un
corazón tan rocoso? "
Puede haber dolor, donde no hay lágrimas. El mejor
dolor es racional . Si a su juicio, usted estima que el
pecado es el mal más terrible -usted tienen un
disgusto en contra de ella, que es una pena racional,
y como Dios aceptará. Un cristiano puede tener algo
de dureza en su corazón, pero no tener un corazón
endurecido. Un campo puede tener cizaña y lo
llamamos campo de trigo. De la misma manera, en el
mejor corazón puede haber una mezcla de
dureza; sin embargo, debido a que hay algo de
suavidad y fusión, Dios lo ve como un corazón
blando. Por lo tanto, cristiano, no discutas contra ti
mismo, si puedes encontrar una sola cosa: que la
estructura y el temperamento de tu alma sean
santos. ¿Sigues respirando por Dios, deleitándote en
él? ¿Es celestial la tez de tu alma? ¿Puedes decir,
como David, "Cuando despierto, todavía estoy
contigo"? Salmo 139: 18. Dado que los colores
establecidos en aceite, o una estatua tallada en oro
permanecen -así lo hace una persona santa; el alma
sigue apuntando hacia Dios. Si es así contigo,
asegúrate de que el reino de la gracia ha entrado en
el alma. No seas cruel con Dios, al negar cualquier
obra de su Espíritu que él ha realizado en ti.
Utilice 1. Para exhortación. Trabajen para
encontrar que este reino de gracia se establece en
sus corazones. Mientras que otros aspiran a los
reinos terrenales, esfuércense por tener el reino de
Dios dentro de ustedes. Lucas 17:21. El reino de la
gracia debe entrar en nosotros antes de que
podamos entrar en el reino de la gloria . Los motivos
de esto son:
(1) El reino de Dios en el interior es nuestra
BELLEZA espiritual. El reino de la gracia adorna a
la persona y la pone en evidencia ante los ojos de
Dios y de los ángeles. Hace que la hija del rey sea
gloriosa por dentro. Salmo 45:13. La gracia derrama
gloria y brillo sobre el alma. Como el diamante al
anillo

así es la gracia para el alma. ¡Un corazón

embellecido con gracia tiene el cuadro del Rey del
cielo colgado en él!
(2) El reino de gracia establecido en el
corazón, es nuestra DEFENSA espiritual. La gracia
se llama "la armadura de la luz". Romanos 13:12. Es
ligero para la belleza y armadura para la defensa.
Aquel que tiene el reino de la gracia dentro de sí, es
"fortalecido con todas las fuerzas según el poder
glorioso de Dios". Col 1:11. Tiene el escudo de la fe, el
yelmo de la esperanza y la coraza de la justicia. Su
armadura nunca puede ser atravesada por disparos.
Está fortalecido contra los asaltos de la tentación y
los terrores del infierno.
(3) El reino de gracia establecido en el
corazón trae PAZ con él. "El reino de Dios es
justicia y paz". Romanos 14:17. Hay una paz secreta
que procede de la santidad. La paz es la mejor
bendición de un reino. [Una paz es mejor que
incontables victorias]. El reino de gracia es un reino
de paz. La gracia es la raíz, la paz es la flor que brota
de ella. Es 'paz en una tormenta', tal paz que
ninguna aflicción mundana puede sacudir. Las
puertas del templo de Salomón estaban hechas de
olivo, talladas con flores abiertas; así en el corazón
lleno de gracia está el olivo de la paz, y las flores
abiertas del gozo. 1 Reyes 6:32.
(4) El reino de la gracia: ENRIQUECE el alma. Un
reino tiene sus riquezas. Se dice que un creyente es
rico en fe . Santiago 2: 5. ¡Cuán rico es el que tiene a
Dios por Dios, heredero de todas las promesas!
Hebreos 6:17. Un hombre puede ser rico en billetes y
bonos, pero un creyente puede decir como Pedro:
"No tengo plata ni oro (Hechos 3: 6); sin embargo,
soy rico en billetes y bonos, heredero de todas las
promesas de Dios"; y ser heredero de las promesas,
es mejor que ser heredero de la corona.
(5) Cuando llega el reino de la gracia , fija y
ESTABLECE el corazón. "Oh Dios, mi corazón está
fijo". Salmo 57: 7. Antes de que venga el reino de la
gracia, el corazón está muy desarreglado e inquieto;
como un barco sin lastre. Pero cuando llega el reino
de la gracia, fija el corazón en Dios; y cuando el
corazón está fijo, descansa quieto como en su centro.
(6) Este reino de gracia es DISTINGUIDO. Es una
prenda segura del amor de Dios. Dios puede dar
reinos con ira; pero donde sea que el
El reino de la gracia está establecido, está en amor.
No puede dar gracia con ira. La corona siempre va
con el reino ; Seamos, pues, ambiciosos de este reino
de gracia.
¿Qué debemos hacer para obtener este reino?
(1) En general, tómese la molestia. No podemos
tener el mundo sin trabajo, ¿y pensamos tener
gracia? "Si la buscas como plata." Proverbios 2: 4. Un
hombre también puede esperar una cosecha sin
sembrar, como una gracia sin trabajo. No debemos
pensar en tener gracia como Israel tuvo maná; que
no araron ni sembraron, sino que llovió del cielo
sobre ellos. No, debemos atrevernos a operar,
esforzarnos por la gracia. Nuestra salvación le costó
sangre a Cristo y nos costará sudor.
(2) Vayamos a Dios para establecer este reino de
gracia en nuestros corazones. Se le llama el "Dios
de toda gracia". 1 Pedro 5:10. Di: Señor, me falta este
reino de gracia, me falta un corazón humilde y
creyente. Enriquéceme con gracia; que venga tu
reino. Sean pretendientes importunos. Como Achsah
dijo a su padre Caleb: "Me has dado una tierra del
sur, dame también manantiales de agua"; así que,
Señor, me has dado bastante del mundo, aquí hay
una tierra del sur; pero Señor, dame las fuentes
superiores de la gracia; que venga tu reino. Josué
15:19. ¿Qué carne de venado me diste sin la
bendición? Cuando somos importunos con Dios y no
aceptamos negación, él establecerá su reino dentro
de nosotros.
(3) Manténgase cerca de la Palabra predicada. La
Palabra predicada es virga virtutis, la vara de la
fuerza de Dios; es el gran motor que usa para
establecer el reino de la gracia en el corazón. "La fe
viene por el oír". Romanos 10:17. Aunque Dios pudo
obrar la gracia inmediatamente por su Espíritu, o
por el ministerio de ángeles del cielo, sin embargo ,
elige obrar por la Palabra predicada. Este es el medio
habitual por el cual establece el reino de la gracia en
el corazón; y la razón es que le ha puesto su divina
sanción; lo ha designado como medio de la gracia
activa, y honrará su propia ordenanza. 1 Cor 1:21.
¿Qué razón se podría dar por qué las aguas de
Damasco no deberían tener como virtud soberana
para curar la lepra de Naamán, como las aguas del
Jordán, sino esto, que Dios designó y santificó las
aguas del Jordán para sanar, y no las otras?
Mantengamos la Palabra predicada, porque el poder
de Dios la acompaña.

Utilice 2. Para acción de gracias. ¿De qué estarás

agradecido si no es por un reino? La gracia es la
mejor bendición; es el resultado y el producto del
amor electivo de Dios. Al establecer su reino de
gracia, Dios ha hecho más por ustedes que si los
hubiera hecho reyes y reinas; porque has nacido de
Dios y de la sangre real del cielo. Oh! admira y
ensalza la gracia inmerecida! "Haz gloriosa la
alabanza de Dios". Salmo 66: 2. El apóstol rara vez
menciona la obra de la gracia, pero se une a la
alabanza. "Dando gracias al Padre, que nos hizo
aptos para ser partícipes de la herencia de los santos
en luz". Col 1:12. Si Dios te ha coronado con el reino
de la gracia, lo coronas con tus alabanzas.
IV. Oramos para que el reino de la gracia
aumente, para que entre más en nosotros: y esto
puede responder una pregunta.
¿Por qué oramos, "Venga tu reino", cuando el
reino de gracia ya ha entrado en el alma?
Aunque el reino de la gracia ya haya entrado en
nosotros , debemos orar: "Venga tu reino", para que
la gracia aumente y este reino florezca aún más en
nuestras almas. Hasta que lleguemos a vivir entre
los ángeles, tendremos que hacer esta oración:
"Venga tu reino". "Señor, deja que tu reino de gracia
entre con más poder en mi alma; deja que la gracia
sea aumentada y aumentada".
Pregunta: ¿Cuándo aumenta el reino de gracia en
el alma? ¿Cuándo es un reino floreciente?
1. Cuando un cristiano tiene más grados de
gracia, hay más aceite en la lámpara, su
conocimiento es claro, su amor se enciende más.
La gracia es capaz de grados y puede elevarse más
alto, como el sol en el horizonte. No es con nosotros
como lo fue con Cristo, quien recibió el Espíritu sin
medida. Juan 3:34. No podía ser más santo de lo que
era; pero nuestra gracia es capaz de más grados;
podemos tener más santidad, podemos agregar más
centímetros a nuestra estatura espiritual.
2. El reino de la gracia aumenta cuando un
cristiano tiene más fuerza de la que tenía. "El de
manos limpias será cada vez más fuerte". Job 17: 9.
"Él aumentará su fuerza". UNA

Christian tiene fuerza para resistir la tentación, para

perdonar a sus enemigos, para sufrir aflicciones. No
es fácil sufrir; un hombre debe negarse a sí mismo
antes de poder tomar la cruz. El camino al cielo es
como el camino que tuvieron Jonatán y su escudero
al subir por un lugar empinado. "Había una piedra
afilada de un lado y una piedra afilada del otro". 1
Sam 14: 4. Requiere mucha fuerza trepar por este
camino rocoso. Esa gracia que nos llevará a través de
la prosperidad , no nos llevará a través de los
sufrimientos . El barco necesita un abordaje más
fuerte para atravesar una tormenta, que una calma.
Ahora, cuando somos tan fuertes en la gracia, que
podemos soportar la aflicción sin murmurar ni
desmayar, el reino de la gracia aumenta. ¡Qué
poderosa fuerza de gracia tuvo el que le dijo al
emperador Valentiniano: "Puedes quitarme la
vida, pero no puedes quitarme mi amor por la
verdad!"
3. El reino de la gracia aumenta cuando un
cristiano tiene más conflictos con las
corrupciones espirituales ; cuando no sólo se
abstiene de males graves , sino que tiene un combate
con corrupciones internas y ocultas del corazón;
tales como el orgullo, la envidia, la hipocresía, los
pensamientos vanos, la confianza carnal, que son
iniquidad espiritual, y tanto contaminan como
perturban. "Limpiémonos de toda inmundicia de
carne y de espíritu". 2 Corintios 7: 1. Hay dos clases
de corrupciones, una de la carne y otra del espíritu .
Cuando nos lamentamos y combatimos el pecado
espiritual, que es la raíz de todos los pecados graves,
entonces el reino de la gracia aumenta y extiende
sus territorios en el alma.
4. El reino de la gracia florece cuando un
cristiano ha aprendido a vivir por FE. "Vivo por la
fe en el Hijo de Dios". Gálatas 2:20. Está el hábito de
la fe y la puesta en práctica de este hábito. Para que
un cristiano injerte su esperanza de salvación, sólo
en el acervo de la justicia de Cristo, y haga de Cristo
todo en justificación; vivir de las promesas, como
una abeja en la flor, y succionar su dulzura; confiar
en el corazón de Dios, donde no podemos rastrear su
mano; creer en su amor con el ceño fruncido;
persuadirnos a nosotros mismos, cuando tiene el
rostro de un enemigo, de que tiene el corazón de un
Padre; cuando llegamos a esto, el reino de la gracia
está floreciendo en nuestras almas.
5. Florece cuando un cristiano está lleno de santo
CELO. Entumecido 25:13. Finees estaba celoso de su
Dios. El celo es la llama del
afectos, convierte a un santo en serafín. Un cristiano
celoso se impacienta cuando se deshonra a Dios.
Apocalipsis 2: 2. Luchará con las dificultades, nadará
hacia Cristo a través de un mar de sangre. Hechos
21:13. El celo ama la verdad cuando se la desprecia y
se le opone. "Han invalidado tu ley, por eso amo tus
mandamientos". Salmo 119: 126, 127. El celo se
parece al Espíritu Santo. "Aparecieron lenguas
divididas como de fuego, que se posaron sobre cada
uno de ellos". Hechos 2: 3. Las lenguas de fuego
fueron un emblema de ese fuego de celo que el
Espíritu derramó sobre ellos.
6. El reino de la gracia aumenta cuando un
cristiano es tan diligente en su vocación
particular como devoto en su vocación general.
Es el cristiano sabio, que lleva las cosas por igual;
quien vive por la fe, que vive en un llamamiento. Por
lo tanto, es digno de mención que cuando el apóstol
había exhortado a los tesalonicenses a aumentar en
gracia, ahora agrega: "Y que ocupen sus propios
asuntos y trabajen con sus propias manos". 1
Tesalonicenses 4:10, 11. Es una señal de que la gracia
está aumentando cuando los cristianos cumplen con
alegría su llamado secular.
De hecho, estar todo el día en el monte con Dios, y
tener la mente fija en la gloria, es más dulce para el
yo del hombre, y es un cielo sobre la tierra; pero
estar familiarizado con nuestros llamamientos es
más provechoso para los demás. Pablo dice: "Estar
con Cristo es mucho mejor; sin embargo,
permanecer en la carne es más necesario para ti".
Filipenses 1:23, 24. Entonces, conversar con Dios en
oración y meditación dulce durante toda la semana,
es más para el consuelo de la propia persona del
hombre; pero ser empleado a veces en el negocio de
una profesión es más rentable para la familia a la
que pertenece. No es bueno ser como los lirios, que
no trabajan ni hilan. Muestra el aumento de la
gracia, cuando un cristiano mantiene el debido
decoro. Une piedad e industria ; cuando el celo se
manifiesta en la piedad , y la diligencia en la
vocación .
7. El reino de la gracia aumenta cuando un
cristiano se establece en la fe y el amor de la
VERDAD. El corazón por naturaleza es como un
barco sin lastre, que vacila y fluctúa. Beza escribe de
un tal Bolezius, que su religión cambió como la luna.
Las que son estrellas errantes serán estrellas fugaces
; pero cuando un alma está construida sobre la roca
de Cristo, y ningún viento de tentación puede
llevarla, el reino de la gracia florece. Uno llama a
Atanasio, un adama invencible, en respeto

de su estabilidad en la verdad. " Arraigado y

edificado en él". Colosenses 2: 7. El enraizamiento de
un árbol evidencia crecimiento.
8. El reino de la gracia aumenta en el propio
corazón de un hombre cuando trabaja para ser
instrumental para establecer este reino en otros.
Aunque es el mayor beneficio tener la gracia obrada
en nosotros mismos , es el mayor honor ser un
instrumento para obrarla en otros . "De quien vuelvo
a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea
formado en vosotros". Gal 4:19. Los que son amos de
familia deben esforzarse por ver el reino de gracia
establecido en sus siervos; Los que son padres
piadosos no deben dejar a Dios solo en
oración, hasta que vean la gracia en sus hijos. ¡Qué
consuelo ser el padre tanto natural como espiritual
de sus hijos! Augustine dice que su madre, Mónica,
sufrió más dolor y cuidado por su nuevo nacimiento
que por su nacimiento natural . Muestra el aumento
de la gracia cuando trabajamos para ver el reino de
gracia establecido en otros. Como abunda el agua en
el río, cuando se desborda y corre hacia los prados,
así la gracia aumenta en el alma cuando tiene
influencia sobre otros, y buscamos su salvación.
Pregunta: ¿Qué necesidad hay de que se
incremente el reino de gracia?
El diseño de Dios al mantener un ministerio
permanente en la iglesia es aumentar el reino de
gracia en los corazones de los hombres. "Dio dones a
los hombres"; es decir, dones ministeriales. ¿Porque?
"Para la edificación del cuerpo de Cristo". Efesios 4:
8, 12. No solo para la conversión, sino también para
la edificación; Por lo tanto, la Palabra predicada se
compara no sólo a las semillas -pero a la leche ;
porque Dios diseña nuestro crecimiento en gracia.
Necesitamos que el reino de la gracia aumente, ya
que tenemos una gran cantidad de trabajo por
hacer, y un poco de gracia difícilmente nos ayudará.
La vida de un cristiano es laboriosa: hay muchas
tentaciones que resistir, muchas promesas que
creer, muchos preceptos que obedecer, por lo que
requerirá mucha gracia. Un cristiano no solo debe
orar, sino "ser celoso y arrepentirse" (Apocalipsis
3:19); no sólo el amor, sino enfermarse de amor.
Cánticos 2: 5. ¿Qué necesidad, por tanto, de que el
reino de la gracia se agrande en su alma? A medida
que su obra aumenta sobre él, su gracia debe
aumentar.
Si el reino de la gracia no aumenta, decaerá. "Te has ido

tu primer amor ". Apocalipsis 2: 4. La gracia, por

falta de crecimiento, a veces es como una planta de
invierno, en la que toda la savia corre hasta la raíz, y
parece muerta." Fortalece lo que queda, que están
listos para morir. "Apocalipsis 3: 2. Aunque la
verdadera gracia no puede expirar , puede
marchitarse ; y un cristiano marchito pierde gran
parte de su belleza y fragancia. ¡Qué gran necesidad
tenemos de orar:" Venga tu reino ", para que este ¡El
reino de la gracia puede ser aumentado! Si la gracia
no mejora, pronto se deteriorará. Un cristiano, por
no aumentar su gracia, pierde sus fuerzas; es como
un enfermo que no puede caminar ni trabajar; sus
oraciones están enfermas y débil, es como si no
tuviera vida en él, su fe apenas puede recuperar el
aliento, y apenas puedes sentir latir el pulso de su
amor .
Tener la gracia creciente es adecuado al
cristianismo. A los cristianos se les llama árboles de
justicia. Isaías 61: 3. Los santos no solo son joyas
para un brillo resplandeciente , sino árboles para
crecer. Se les llama las luces del mundo. Filipenses
2:15. La luz sigue aumentando. Primero está el
amanecer, y por eso brilla más, hasta el meridiano
completo. Los que son las luces del mundo deben
aumentar hasta llegar al meridiano de la gloria. No
crecer es sospechoso; las cosas pintadas no crecen.
A medida que aumenta el reino de la gracia ,
aumentan las comodidades del cristiano . La
comodidad pertenece al bienestar de un cristiano;
como los alimentos dulces, es delicioso al paladar.
Salmo 94:19. Cuanta más gracia , más gozo ; cuanto
más savia en la raíz, más vino en la uva. ¿Quién
aumentó más en gracia que David? ¿Y quién más en
consuelo? "Has puesto alegría en mi corazón". Salmo
4: 7. La gracia se convierte en alegría, como la leche
en nata.
¿Cómo pueden ser consolados aquellos que se
lamentan de su falta de crecimiento y lloran porque
no pueden encontrar el reino de la gracia para
crecer?
Ver y lamentar nuestra decadencia en la gracia,
argumenta no solo la vida de la gracia, sino el
crecimiento en la gracia. Es una señal de que un
hombre se recupera y cobra fuerza, cuando siente su
debilidad. Es un paso adelante en gracia para ver
nuestras imperfecciones. Cuanto más brilla el
Espíritu en el corazón, más maldad revela. Un
cristiano piensa que es peor para él de lo que era,
mientras que su gracia no puede disminuir, pero su
luz es mayor.
Si un cristiano no aumenta en una gracia, puede hacerlo en
otra; si no en

conocimiento que puede en humildad. Si un árbol no

crece tanto en las ramas, puede crecer en la raíz: y
crecer hacia abajo en la raíz, es un buen
crecimiento.
Un cristiano puede crecer menos en afecto cuando
crece más en juicio. Como los dedos de un músico,
cuando es viejo, están rígidos y no son tan ágiles con
el laúd como antes , pero él toca con más arte y
juicio que antes. De la misma manera, es posible que
un cristiano no sienta tanto afecto por el deber como
en la primera conversión, pero es más sólido en
religión y más firme en su juicio que antes.
Un cristiano puede pensar que no aumenta en gracia
porque no aumenta en dones; mientras que puede
haber una decadencia de las partes naturales, la
memoria y otras facultades, cuando no hay una
decadencia de la gracia. Los dones pueden verse
afectados cuando se mejora la gracia . No te
desanimes, es mejor decaer en dones y
engrandecerse en gracia , que engrandecerse en
dones y desfallecer en gracia .
Un cristiano puede aumentar en gracia y no ser
sensible a ella. Como la semilla puede crecer en la
tierra, cuando no la percibimos brotar, así la gracia
puede crecer en tiempo de abandono y no ser
percibida.

V. Oramos para que el reino de GLORIA se

apresure, y que Dios, a su debido tiempo, nos
traslade a él. Bajo esto tenemos ahora que
considerar:
[1] ¿Qué es este reino de gloria?
[2] ¿Cuáles son sus propiedades?
[3] ¿En qué supera a todos los demás reinos?
[4] ¿ Cuándo venga este reino?
[5] ¿Dónde aparece la certeza de ello?
[6] ¿Por qué debemos orar por su llegada?
[1] ¿Qué es el reino de gloria? Por este reino de
gloria se quiere decir, ese estado glorioso que los
santos disfrutarán cuando reine

con Dios y los ángeles para siempre. Si un hombre se

para en la orilla del mar, no puede ver todas las
dimensiones del mar, su longitud, anchura y
profundidad; sin embargo, puede ver que es de vasta
extensión, por lo que, aunque el reino de los cielos es
de esa incomparable excelencia. , que ni la lengua
humana ni los ángeles pueden
expresar; sin embargo, podemos concebirlo como
algo glorioso en extremo, como el ojo no ha visto.
Respecto al reino de los cielos, mostraré lo que
implica y lo que importa.
Primero, el reino de los cielos implica una
bendita libertad de todo mal.
(1) Implica una libertad de las necesidades de la
naturaleza. Estamos en esta vida sujetos a muchas
necesidades; necesitamos comida para nutrirnos,
ropa para cubrirnos, armaduras para defendernos,
dormir para refrescarnos. Pero en el reino de los
cielos no habrá necesidad de estas cosas; y es mejor
no necesitarlos que tenerlos; ya que es mejor no
necesitar muletas que tenerlas. ¿Qué necesidad
habrá de alimento cuando nuestro cuerpo se vuelva
espiritual? 1 Cor 15:44. Aunque no espiritual por
sustancia, pero por cualidades. ¿Qué necesidad
habrá de ropa cuando nuestros cuerpos sean como
el cuerpo glorioso de Cristo? ¿Qué necesidad habrá
de armadura cuando no haya enemigo? ¿Qué
necesidad habrá de dormir cuando no haya noche?
Apocalipsis 22: 5. Los santos serán liberados, en el
reino celestial, de estas necesidades de la naturaleza
a las que ahora están expuestos.
(2) En el reino de los cielos, seremos liberados de
las imperfecciones de la naturaleza. Desde la
caída, nuestro conocimiento ha sufrido un eclipse.
Nuestro conocimiento natural es imperfecto; está
marcado por la ignorancia. Hay muchos nudos duros
en la naturaleza que no podemos desatar fácilmente.
El que ve más claro tiene una niebla ante sus ojos.
Sócrates dijo en su lecho de muerte que todavía
tenía muchas cosas que aprender. Nuestra
ignorancia es más que nuestro conocimiento .
Nuestro conocimiento divino es imperfecto. "Lo
sabemos, pero en parte", dijo Pablo, aunque tenía
muchas revelaciones y estaba arrebatado en el
tercer cielo. 1

Cor 13: 9. Tenemos conceptos oscuros de Dios.

"¿Puedes encontrar a Dios buscando a Dios?" Job 11:
7. Nuestras limitadas capacidades no contendrían a
Dios más de lo que un pequeño vaso de vidrio
contendría toda el agua del mar. No podemos
desentrañar el misterio de la encarnación, la
naturaleza humana asumida en la persona del Hijo
de Dios; la naturaleza humana, no Dios, pero unida a
Dios. Vemos ahora en un vaso oscuro; pero en el
reino de los cielos se quitará el velo, se quitará toda
imperfección de la naturaleza. Cuando la luz del sol
de la gloria comience a brillar en el horizonte
celestial, todas las sombras oscuras de la ignorancia
volarán, nuestra lámpara del conocimiento arderá
con fuerza, tendremos un conocimiento completo de
Dios, aunque no lo conoceremos completamente.
(3) En el reino de los cielos, seremos libres de las
fatigas de esta vida. Dios promulgó una ley en el
paraíso, "con el sudor de tu rostro comerás el pan".
Génesis 3:19. Está el trabajo de la mano en la
fabricación y el trabajo de la mente en el estudio.
"Todas las cosas están llenas de trabajo" (Eclesiastés
1: 8); pero en el reino de los cielos seremos libres de
nuestros trabajos.
No se necesita trabajo cuando un hombre ha llegado
al puerto , ya no tiene necesidad de navegar. En el
cielo no hay necesidad de trabajar, porque los santos
tendrán la gloria por la que trabajaron.
No habrá trabajo. "Descansan de sus trabajos".
Apocalipsis 14:13. Como cuando Dios terminó la obra
de la creación, descansó de sus labores; así, cuando
sus santos han terminado la obra de santificación,
descansan de los suyos. ¿Dónde debería haber
descanso, sino en el centro celestial? No es que este
dulce reposo en el reino de los cielos excluya todo
movimiento, porque los espíritus no pueden estar
ociosos; pero los santos glorificados descansarán de
todo trabajo fatigoso . Será un trabajo lleno de
facilidad, un movimiento lleno de deleite. Los santos
del cielo amarán a Dios, ¿y qué labor es esa? ¿Es
trabajo amar la belleza? Alabarán a Dios, y eso
ciertamente es delicioso. Cuando el pájaro canta, no
es tanto un trabajo como un placer.
(4) En el reino de los cielos, seremos libres de la
corrupción original, que es la raíz de todo pecado
actual. No habría pecado real si no hubiera pecado
original ; no habría agua en el arroyo, si no hubiera
agua en la fuente . Se incorpora el pecado original

en nuestra naturaleza; es como si toda la masa de

sangre estuviera corrompida. Por tanto, ofender al
Dios que ama, fatiga al cristiano de su vida. ¿Qué
daría por que le quitaran las cadenas, por
deshacerse de los pensamientos vanos? ¡Cómo se
lamentó Pablo, esa ave del paraíso, por sus pecados!
Romanos 7:24. No podemos ejercer nuestros deberes
ni nuestras gracias sin pecado. El alma más refinada
y purificada por la gracia, no está exenta de algunos
restos de corrupción; pero en el reino de los cielos la
fuente del pecado original se secará por completo.
¡Qué tiempo tan bendito será ese, nunca más
entristecer al Espíritu de Dios! En el cielo hay almas
vírgenes; su belleza no está manchada de lujuria.
Nada entra allí, lo que contamina. Apocalipsis 21:27.
(5) En el reino de los cielos, seremos libres de
todos los dolores. "No habrá más dolor".
Apocalipsis 21: 4. Nuestra vida aquí está entretejida
con problemas. Salmo 31:10. O las pérdidas afligen,
los juicios afligen, o la crueldad rompe el corazón.
También podemos separar la luz del sol, o el peso del
plomo, como los problemas de la vida del hombre.
"¿Qué es una larga vida, sino un largo tormento?"
Agustín. Pero, en el reino de los cielos, la tristeza y el
suspiro volarán. Aquí los santos se sientan junto a
los ríos llorando, pero una sonrisa en el rostro de
Cristo los hará olvidar todos sus sufrimientos.
Entonces su agua se convertirá en vino, su lamento
en canto.
(6) En el reino de los cielos, estaremos más allá
del alcance de la tentación. Satanás aún no está
completamente en prisión; como prisionero bajo
fianza, anda tentando y trabajando para
arrastrarnos al pecado. O está poniendo trampas o
disparando dardos. El diablo está ceñido para la
batalla. Colocó una serie de tentaciones para volar el
castillo de la fe de Job. Es un dolor tan grande para
un creyente ser seguido por tentaciones de pecar,
como para una virgen que su castidad sea asaltada.
¡Pero en el reino de los cielos los santos serán
liberados del dragón rojo, que fue expulsado del
paraíso y quedará para siempre encadenado! Judas
6.
(7) En el reino de los cielos, seremos liberados de
todas las preocupaciones irritantes. La palabra
griega para cuidado proviene de una palabra que
significa cortar el corazón en pedazos. El cuidado
tortura la mente, desgasta los espíritus y devora el
consuelo de la vida. Cuidar de prevenir peligros
futuros y preservar las comodidades presentes es un
espíritu maligno que nos acecha. Todo cuidado está
lleno de miedo

y el miedo está lleno de tormento. 1 Juan 4:18. Dios

lo amenaza como un juicio. "Comerán su pan con
cuidado". Ezequiel 12:19. Todo consuelo tiene su
cuidado, como toda rosa tiene sus espinas; pero en el
reino de los cielos nos sacudiremos la víbora del
cuidado . ¿Qué necesita un santo glorificado para
cuidar ansiosamente? ¿ Quién tiene todas las cosas
en sus manos? Allí está el árbol de la vida, que da
toda clase de frutos. Cuando el corazón sea liberado
del pecado, la cabeza será liberada del cuidado.
(8) En el reino de los cielos, seremos libres de
toda duda y escrúpulo. En esta vida, el mejor santo
tiene sus dudas, como la estrella más brillante tiene
su centelleo. Si no hubiera duda, no habría
incredulidad. La seguridad en sí misma no excluye
todas las dudas. "Tu bondad amorosa está ante mis
ojos". Salmo 26: 3. En otro momento, "Señor, ¿dónde
están tus anteriores misericordias?" Salmo 89:49. Un
cristiano es como un barco anclado que, aunque
seguro, a veces puede ser arrojado al agua. A veces,
un cristiano cuestiona su interés en Cristo y su
derecho a la promesa. Así como estas dudas eclipsan
el consuelo de un cristiano, también dan falso
testimonio contra el Espíritu. Pero, cuando los santos
entren en el reino de los cielos, no habrá más dudas;
el cristiano dirá entonces, como Pedro: "Ahora sé con
certeza que el Señor ha enviado a su ángel y me ha
librado". Hechos 12:11. Ahora sé que he pasado de
muerte a vida, ¡y he superado todas las rocas! ¡He
pasado el golfo, ahora estoy en los abrazos de mi
Salvador para siempre!
(9) En el reino de los cielos, seremos libres de
toda sociedad con los malvados. Aquí a veces nos
vemos obligados a estar en su compañía. "¡Ay de mí,
que habito en Mesech, que habito en las tiendas de
Cedar!" Salmo 120: 5. Cedar era el hijo de Ismael,
cuyos hijos habitaban en Arabia; eran un pueblo
bárbaro y profano. Aquí los malvados todavía están
levantando persecuciones contra los piadosos y
crucificando sus oídos con sus juramentos y
maldiciones. El lirio de Cristo está entre espinas ;
pero en el reino de los cielos no habrá más zarzas.
"El Hijo del Hombre enviará a sus ángeles, y ellos
arrancarán de su reino todo lo que causa pecado y
todo lo que hace el mal". Mateo 13:41. Como dijo
Moisés: "¡Quédense quietos y vean la salvación del
Señor! ¡Para los egipcios que han visto hoy, nunca
los volverán a ver para siempre!" Así dirá Dios:
"Estad quietos y ved la salvación de Dios; estos
vuestros enemigos, que

para vejarte y molestarte, nunca los volverás a ver

para siempre! "Éxodo 14:13. En ese día, Dios
separará lo precioso de lo vil; Cristo limpiará
completamente su era; recogerá el trigo en el
granero; y los malvados, que son la paja, serán
arrastrados al infierno.
(10) En el reino de los cielos, seremos libres de
todos los signos del disgusto de Dios. Aquí puede
estar enojado con su gente. Aunque tiene el corazón
de un padre, puede tener la apariencia de un
enemigo; y esto es triste. Como cuando se pone el sol,
cae el rocío; así que cuando la luz del rostro de Dios
se va, las lágrimas caen de los ojos de los santos.
Pero en el reino de los cielos, no habrá eclipses
espirituales, nunca aparecerá ninguna señal del
disgusto de Dios; los santos tendrán de él un aspecto
constante de amor, nunca más se quejarán: "Mi
amado se había retirado". Cánticos 5: 6.
(11) En el reino de los cielos, seremos libres de
todas las divisiones. Lo más triste del mundo es ver
divisiones entre los piadosos. Es triste que los que
tienen una sola fe no sean de un solo corazón. Efraín
envidia a Judá, y Judá irrita a Efraín. Es cuestión de
lágrimas, ver a los que están unidos a Cristo
divididos unos de otros. La lanza del soldado
atravesó el costado de Cristo, ¡ pero la división de los
santos hirió su corazón! Pero en el reino de los cielos,
nadie se difamará ni censurará. Aquellos que antes
apenas podían orar juntos, alabarán a Dios juntos.
No habrá una sola cuerda discordante en la música
de los santos.
(12) En el reino de los cielos, seremos libres de la
vanidad y la insatisfacción. Lo que Job dice de la
sabiduría, en el capítulo 28:14; "El abismo dice: No
está en mí; y el mar dice: No está conmigo"; Puedo
decir sobre la satisfacción; toda criatura dice: "No
está en mí". Tomemos las cosas más agradables y de
las que nos prometemos más contentamiento, aún,
del espíritu y la esencia de todas ellas , diremos: "He
aquí, todo era vanidad". Ecl 2:11. Dios nunca puso,
ni jamás lo hará, una virtud satisfactoria en
ninguna criatura. En la música más dulce que hace
el mundo, o falta alguna cuerda o está desafinada.
¿Quién hubiera pensado que Amán, que era tan
grande en el favor del rey, que "puso su trono por
encima de todos los príncipes" de las provincias, por
no haber doblado una rodilla, estaría descontento?
Est 3: 1. Pero en el reino de los cielos, seremos
liberados

de estas insatisfacciones. El mundo es como un

cuadro de paisaje, en el que puedes ver jardines con
árboles frutales, bellamente dibujados, pero no
puedes entrar en ellos; pero a los gozos del cielo
puedes entrar. "Entra en el gozo de tu Señor". El
alma quedará satisfecha mientras se baña en esos
ríos de placer a la diestra de Dios. "Cuando despierte,
estaré completamente satisfecho, porque los veré
cara a cara". Salmo 17:15.
(13) En el reino de los cielos, seremos libres de
los tormentos del infierno. "Jesús, que nos libra de
la ira venidera". 1 Tes. 1:10.
1. Considere la multiplicidad de esos tormentos. En
esta vida, el cuerpo suele ejercitarse pero con un
solo dolor, la piedra o el dolor de cabeza, a la vez;
pero en el infierno hay diversidad de tormentos;
Hay tinieblas para espantar, fuego para quemar, un
lago de azufre para ahogar, cadenas para atar y
gusano para roer.
2. Los tormentos del infierno se apoderarán de cada
parte del cuerpo y del alma . El ojo será torturado
con la vista de los demonios, y la lengua que ha
hecho tantos juramentos será torturada. "Envía a
Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua y
refresque mi lengua". Lucas 16:24. La memoria será
atormentada para recordar las misericordias que
han sido abusadas y las temporadas de gracia
descuidadas. La conciencia se atormentará con
autoacusaciones.
3. Los dolores del infierno no se mitigan , sin
mezcla de misericordia. En esta vida, Dios con ira
recuerda la misericordia. Hab 3: 2. Pero en el
infierno no hay alivio ni disminución de los dolores.
Como en el sacrificio de los celos, Dios no quiere que
se le agregue aceite ni incienso, así que, en el
infierno, no hay aceite de misericordia para aliviar
los sufrimientos de los condenados, ni incienso de
oración para aplacar su ira. Entumecido 5:15.
4. En los dolores del infierno no hay descanso . Los
poetas fingen de Endymion, que siempre tiene
permiso de Júpiter para dormir. ¡Qué darían los
condenados del infierno por una hora de sueño! "El
humo de su tormento se eleva por los siglos de los
siglos, y no tendrán descanso ni de día ni de noche".
Apocalipsis 14:11. Están perpetuamente en el
estante.

5. No hay caducidad en los dolores del infierno;

siempre deben permanecer ardiendo en llamas de
ira.
Pero en el reino celestial, los elegidos serán liberados
de todos los tormentos infernales. "Jesús nos libró de
la ira venidera". No se hace una prisión para los hijos
del rey. Cristo bebió esa copa amarga de la ira de
Dios, ¡para que los santos nunca la bebieran!
En segundo lugar, el reino de los cielos implica un
glorioso fruto de todo bien. Si tuviera tantas
lenguas como pelos en la cabeza, no podría
describirlo completamente. Es un lugar donde no
falta nada. Jueces 18:10. Se llama "la gloria
excelente". 2 Pedro 1:17. Bien podría medir los cielos
o drenar el océano, como se muestra la gloria de este
reino. El reino de los cielos es ante todo hipérbole. Si
el sol fuera diez mil veces más brillante de lo que es,
no podría igualar el brillo de este reino. El lápiz de
Apeles lo mancharía, la lengua de los ángeles lo
atenuaría. Solo puedo darles las sombras . No espere
verlo en todos sus colores orientales , ¡hasta que esté
montado sobre las estrellas! Pero no nos quedemos
lejos, como Moisés, para contemplar este
Canaán, sino que entre en él y pruebe la miel. Los
privilegios de este reino celestial son:
(1) Tendremos una COMUNIÓN inmediata con
Dios mismo, que es el mar inagotable de toda
felicidad. Esto los teólogos llaman "la visión
beatífica". El salmista triunfó en el disfrute que tenía
de Dios en esta vida. "¿A quién tengo yo en el cielo
sino a ti?" Salmo 73:25. Si Dios, disfrutado por la fe,
da tanto consuelo al alma, ¡cuánto más cuando es
disfrutado por la visión inmediata! Aquí vemos a
Dios oscuramente a través del cristal de las
ordenanzas; pero en el reino de los cielos lo veremos
"cara a cara". 1 Cor 13:12. Tendremos una visión
intelectual de él; lo veremos con los ojos de nuestra
mente; lo conoceremos tanto como los ángeles del
cielo. Mateo 18:10; conoceremos como somos
conocidos. 1 Cor 13:12.
Tendremos un conocimiento completo de Dios,
aunque no lo conoceremos completamente; como
una copa en el mar está llena del mar, aunque no
contiene todo el mar. Ver y disfrutar a Dios será de lo
más delicioso; en él hay rayos de majestad y afectos
de misericordia. Dios tiene todas las excelencias
concentradas en él, el bien en el que todo está bien.
Si una flor tuviera la dulzura

de todas las flores, ¡qué dulce sería esa flor! Toda la

belleza y dulzura que yace esparcida en la
criatura, se encuentra infinitamente en Dios. Verlo y
disfrutarlo, por tanto, embelesará el alma con
deleite. Veremos a Dios para amarlo y seremos
sensibles a su amor; y cuando tengamos esta dulce
comunión con él, será "todo en todos"; luz para los
ojos , maná para el gusto y música para el oído . 1
Cor 15:28.
(2) En el reino de los cielos, con estos ojos
veremos el cuerpo glorificado de JESUCRISTO. El
Salvador hace que sea una gran parte de la gloria del
cielo: ver la gloria de su naturaleza humana. "Para
que vean mi gloria". Juan 17:24. Cuando Cristo se
transfiguró sobre la tierra, se dice que "su rostro
resplandecía como el sol, y su ropa era blanca como
la luz". Mateo 17: 2. Si la gloria de su transfiguración
fue tan grande, ¡cuál será la gloria de su exaltación !
Gran parte de la gloria de Dios brilla en Cristo, en
virtud de la unión hipostática. "En él habita
corporalmente toda la plenitud de la Deidad". Col 2:
9. A través de la humanidad de Cristo, como a través
de un espejo brillante, podemos ver brillar algunos
rayos de la majestad divina. ¡Nuestras capacidades
se ampliarán en un grado maravilloso para recibir
este glorioso objeto! No solo veremos la gloria de
Dios, sino que parte de su gloria será puesta sobre
nosotros. "La gloria no solo estará
presente, sino también dentro". Bernardo. Un
mendigo puede contemplar la gloria de un rey y no
ser más feliz; pero la gloria de Cristo será nuestra:
"Seremos como él". 1 Juan 3: 2. Brillaremos por sus
rayos.
(3) En el reino de los cielos disfrutaremos de la
compañía de "una innumerable compañía de
ÁNGELES". Hebreos 12:22.
Pero, ¿no hay suficiente en Dios para llenar el alma
de deleite? ¿Puede la vista de los ángeles aumentar
su felicidad? ¿Qué necesidad hay de la luz de las
antorchas cuando brilla el sol ?
Además de la esencia divina, la vista de los ángeles
es deseable. Gran parte de la curiosa obra de Dios
brilla en los ángeles; son criaturas hermosas y
gloriosas; y así como las diversas cuerdas de un laúd
endulzan la armonía y las diversas estrellas hacen
más brillante el cielo, así la sociedad con los ángeles
hará que el deleite del cielo sea mayor; y no solo los
veremos con el ojo glorificado de nuestro
entendimiento, ¡sino que conversaremos con ellos!

(4) En el reino de los cielos, tendremos dulce

sociedad con SANTOS glorificados. Oh! ¡Qué
tiempo tan bendito será cuando los que han orado,
llorado y sufrido juntos, se regocijen juntos! Veremos
a los santos, en su lino blanco de pureza, y los
veremos como tantos reyes coronados: al
contemplar a los santos glorificados, veremos un
cielo lleno de soles. Algunos han preguntado si nos
conoceremos en el cielo. Sin duda, nuestro
conocimiento no disminuirá, ¡sino que aumentará!
El juicio de Lutero y Anselmo, y muchos otros
teólogos, es que nos conoceremos unos a otros; sí, los
santos de todas las edades, cuyos rostros nunca
vimos. Y, cuando veamos a los santos en gloria sin
sus flaquezas de orgullo y pasión, será un
espectáculo glorioso. Vemos cómo Pedro fue
transportado cuando vio solo a dos profetas en la
transfiguración; pero ¡qué espectáculo tan bendito
será cuando veamos a toda la gloriosa compañía de
profetas, mártires y santos hombres de Dios! Mateo
17: 3. ¡Cuán dulce será la música cuando todos
canten juntos en concierto en el coro celestial! Y
aunque, en esta gran asamblea de santos y ángeles,
"una estrella puede diferir de otra en gloria", ¡sin
embargo, ninguna mala hierba como la envidia
crecerá jamás en el paraíso de Dios! Habrá amor
perfecto , el cual, como echa fuera el miedo, así
también la envidia. Aunque un vaso de gloria
contenga más que otro, todos los vasos estarán llenos
.
(5) En el reino de los cielos habrá gozo
incomprensible. Cuando la unión de los santos con
Cristo se perfeccione en el cielo, su gozo será pleno.
¡Todas las aves del paraíso celestial cantan de
alegría! ¡Qué gozo cuando los santos verán
atravesado el gran abismo y sepan que han pasado
de muerte a vida! ¡Qué gozo, cuando son tan santos
como deberían ser y como Dios quiere que sean! Qué
alegría escuchar la música de los ángeles; ver el
estandarte de oro del amor de Cristo desplegado
sobre el alma; estar bebiendo esa agua de vida que
es más dulce que todo néctar y ambrosía. ¡Qué gozo,
cuando los santos vean a Cristo vestido en su carne,
sentado en gloria sobre los ángeles! Entonces
entrarán en el gozo de su Señor. Mateo 25:21.
Aquí en la tierra, la alegría entra en los santos; en el
cielo "entran en gozo". Oh santo de Dios, que ahora
cuelgas tu arpa en los sauces, y mezclas tu bebida
con el llanto, en el reino de los cielos tu agua se
convertirá en vino; tendrás tanta felicidad que tu
alma no podrá

desear más. El mar no está tan lleno de

agua, como lo está el corazón de un santo
glorificado. No puede haber más dolor en
el cielo -than hay alegría en el infierno.
(6) En el cielo HONOR y DIGNIDAD están puestos
sobre los santos. Un reino implica honor. Todos los
que vienen al cielo son reyes.
1. Tienen corona real . Apocalipsis 2:10. "Te daré
una corona de vida". Una corona es el signo del
poder real. Esta corona no está forrada de
espinas, sino adornada con joyas; ¡Es una corona
que nunca se desvanece ! 1 Pedro 5: 4.
2. Los santos en el cielo tienen sus vestiduras
reales . Cambian su cilicio por túnicas blancas. "Vi
una gran multitud, que nadie podía contar, vestida
de ropas blancas". Apocalipsis 7: 9. Las túnicas
significan su gloria, las blancas su santidad.
3. Se sientan con Cristo en el trono real .
Apocalipsis 3:21. Leemos en 1 Reyes 6:32, las puertas
del lugar santísimo estaban hechas de palmeras y
flores abiertas cubiertas de oro, un emblema de esa
victoria y esa guirnalda de gloria que los santos
llevarán en el reino. del cielo. Cuando todos los
títulos y las insignias del honor mundano yazcan en
el polvo, el honor de los santos permanecerá.
(7) En el reino de los cielos tendremos un
DESCANSO bendito. El descanso es el final del
movimiento; el cielo es el centro bendito donde el
alma se somete y descansa. En esta vida estamos
sujetos a movimientos inquietos y fluctuaciones.
"Estábamos turbados por todos lados" (2 Cor 7: 5).
Somos como un barco en el mar con las olas
batiendo a ambos lados; pero en el reino de los cielos
hay reposo. Hebreos 4: 9. ¡Qué bienvenido es el
descanso al viajero cansado! Cuando la muerte corta
en pedazos la cuerda del cuerpo, el alma, como una
paloma, vuela y descansa. Este descanso es cuando
los santos se acostarán en el regazo de Cristo, esa
colmena de dulzura, ese lecho de perfume.
(8) Los santos en el reino de los cielos tendrán
sus CUERPOS ricamente salpicados de gloria.
Estarán llenos de brillo y belleza. Como resplandeció
el rostro de Moisés, que el pueblo no pudo
contemplar la gloria (Éxodo 34:30); así los cuerpos
de los santos brillarán siete veces más que el sol,
como dice Crisóstomo; ellos deberán

tenga tal resplandor de belleza en ellos, que los

ángeles se enamoren de ellos; y no es de extrañar,
porque serán hechos como el cuerpo glorioso de
Cristo. Filipenses 3:21. Los cuerpos de los santos
glorificados no necesitan joyas, cuando brillarán
como el cuerpo de Cristo.
(9) El reino celestial es ETERNO. Es un fruto
eterno, nunca serán quitados del trono. "Reinarán
por los siglos de los siglos". Apocalipsis 22: 5. Se le
llama "el reino eterno" (2 Pedro 1:11), y un "eterno
peso de gloria". 2 Cor 4:17. Las flores del paraíso , de
las que está hecha la guirnalda de los santos, nunca
se marchitan. Si pudiera haber una cesación de la
gloria del cielo, o los santos tuvieran el menor temor
o sospecha de perder su felicidad, disminuiría y
enfriaría infinitamente su gozo. Pero su reino es
para siempre: los ríos del paraíso no se pueden
secar. "A tu diestra hay placeres para siempre".
Salmo 16: 2: El reino de los cielos fue tipificado por el
templo que fue construido con piedra, cubierto con
cedro recubierto de oro, para mostrar que el estado
fijo de gloria permanente permanece para siempre.
Bien, podemos orar: "Venga tu reino".

[2] ¿Cuáles son las PROPIEDADES del reino de los cielos?

(1) La gloria de este reino es SÓLIDA y
SUSTANCIAL. La palabra hebrea para gloria
significa un peso, para mostrar cuán sólida y pesada
es la gloria del reino celestial. La gloria del reino
mundano es aireada e imaginaria, como un cometa
llameante o un sueño. La tierra cuelga como una
pelota en el aire, sin nada que la sostenga. Job 26: 7.
La gloria del reino celestial es sustancial, tiene doce
fundamentos. Apocalipsis 21:14. Lo que Dios y los
ángeles cuentan como gloria, es la verdadera gloria.
(2) La gloria de este reino es SATISFACTORIA.
"Contigo está la fuente de la vida". Salmo 36: 9.
¿Cómo pueden no estar satisfechos, quienes están en
la fuente? "Cuando despierte, estaré satisfecho con
tu semejanza", es decir, cuando despierte en la
mañana de la resurrección, teniendo algunos de los
rayos de tu gloria brillando en mí, estaré satisfecho.
Salmo 17:15. La criatura dice, con respecto a la
satisfacción: "No está en mí". Job 28:14. Si buscamos
la felicidad en la criatura, vamos al lugar
equivocado. Solo la gloria del cielo es proporcional a
los vastos deseos de un alma inmortal. Un cristiano
bañándose en estos ríos de placeres, clama en divino
éxtasis, "¡Ya tengo suficiente!" El alma nunca está
satisfecha hasta que no tiene a Dios como su porción
y al cielo como refugio. La insatisfacción surge de
algún defecto, pero Dios es un bien infinito, y no
puede haber defecto en lo infinito.
(3) La gloria del reino de los cielos es PURA y SIN
MEZCLAS. Los arroyos del paraíso no se enturbian.
Todos son claros, todos deliciosos. Allí el oro no tiene
aleación. No hay ingrediente amargo en esa gloria,
es pura como la miel que cae del panal. Allí, la rosa
de Sharon crece sin espinas. Hay tranquilidad sin
dolor, honor sin desgracia, vida sin muerte. "Él
enjugará toda lágrima de sus ojos. No habrá más
muerte ni llanto ni llanto ni dolor, porque el antiguo
orden de las cosas ha pasado". Apocalipsis 21: 4.
(4) La gloria de este reino es constantemente
EMOCIONANTE y REFRESCANTE. Hay
plenitud, pero no exceso. Las comodidades
mundanas, aunque dulces, pero se vuelven obsoletas
con el tiempo. Un plumón agrada un rato, pero
pronto nos cansamos y debemos levantarnos.
Demasiado placer es un dolor; pero la gloria del cielo
nunca se hartó ni da náuseas; porque, como hay
todas las rarezas imaginables, así en cada momento
nuevas delicias brotan de Dios en el alma
glorificada.
(5) La gloria de este reino se distribuye a CADA
santo individual. En un reino terrenal, la corona va
solo a una, una corona solo cabe en una cabeza; pero
en ese reino de arriba, la corona es para todos.
Apocalipsis 1: 6. Todos los elegidos son reyes. Las
herencias terrenales se asientan principalmente
sobre un heredero; pero en el reino de los cielos
todos los santos son herederos. "Herederos de Dios y
coherederos con Cristo". Romanos 8:17. ¡Dios tiene
suficiente tierra para dársela a todos sus herederos!
(6) Lúcido y TRANSPARENTE. Este reino de los
cielos está adornado y salpicado de luz. 1 Timoteo
6:16. La luz es la gloria de la creación. "La luz es
dulce". Eccl. 11: 7. El infierno es una mazmorra
oscura; fuego, pero sin luz. Mateo 22:13. El reino de
los cielos es una transparencia, todo bordado con
luz, claro como el cristal. ¿Cómo puede faltar la luz,
donde Cristo, el Sol de Justicia, despliega sus rayos
dorados? "La ciudad no necesita que el sol ni la luna
brillen sobre ella, porque la gloria de Dios la
ilumina, y el Cordero es su lámpara". Apocalipsis
21:23.

(7) La gloria de este reino es adecuada y

proporcional al deseo del alma. En los frutos de las
criaturas, lo que los elogia y los pone en marcha
para nosotros es la idoneidad . La satisfacción del
matrimonio no radica en la belleza o la porción, sino
en la idoneidad de la disposición. La excelencia de
una fiesta es cuando la comida se adapta al paladar.
Un ingrediente de la gloria del cielo es que se adapta
exactamente a los deseos de los santos glorificados.
No diremos en el cielo: "¡Aquí hay un plato, no amo!"
Habrá música para el oído en los himnos de los
ángeles; y comida que se adapta al paladar
glorificado en el maná escondido del amor de Dios.
(8) La gloria de este reino será SEASONABLE. La
conveniencia de una misericordia se suma a su
belleza y dulzura, como manzanas de oro a
imágenes de plata. Después de un duro invierno en
este clima frío, ¿no es oportuno que aparezcan las
gloriosas flores primaverales y llegue el canto de las
aves del paraíso? Cuando estemos cansados y
cansados en la batalla con el pecado y Satanás, ¿no
será conveniente una corona ?

[3] El reino de los cielos sobrepasa infinitamente

a todos los reinos de la tierra.
(1) Sobresale en su ARQUITECTO. Otros reinos
tienen hombres para levantar sus estructuras, pero
Dios mismo puso la primera piedra en este reino.
Hebreos 11:10. Este reino es de la mayor antigüedad.
Dios fue el primer Rey y fundador de ella; ningún
ángel era digno de poner una piedra en este edificio.
(2) Este reino celestial sobresale en ALTITUD. Es
más alto que cualquier reino. Cuanto más alto es
cualquier cosa, más excelente es. El fuego, siendo el
elemento más sublime, es el más noble. El reino de
los cielos está asentado sobre todos los orbes
visibles. Ahi esta-
1. El cielo aireado , que es el espacio entre la tierra
y la esfera de la luna.
2. El cielo estrellado , el lugar donde están los
planetas, de mayor elevación, como Saturno, Júpiter
y Marte.
3. El cielo empíreo , que Pablo llama el tercer cielo; dónde

Cristo está, allí está situado el reino de gloria. Este

reino es tan alto que ninguna escalera de enemigos
puede alcanzarlo; tan alto que la serpiente vieja no
puede dispararle sus dardos de fuego. Si los hombres
malvados pudieran construir sus nidos entre las
estrellas, el menos creyente estaría muy por encima
de ellos.
(3) El reino de los cielos supera a todos los demás
en ESPLENDOR y RIQUEZAS. Está descrito por
piedras preciosas. Apocalipsis 21:19. ¿Cuáles son
todas las rarezas de la tierra, comparadas con este
reino: costas de perlas, rocas de diamantes, islas de
especias? ¿Cuáles son las maravillas del mundo para
él, las pirámides de Egipto o el templo de Diana?
¡Qué reino tan rico es ese, donde Dios pagará todo su
costo! Aquellos que son pobres en el mundo, tan
pronto como llegan a este reino, se hacen ricos, tan
ricos como los ángeles. Otros reinos están
enriquecidos con oro, este está enriquecido con la
Deidad.
(4) El reino de los cielos supera a todos los
demás reinos en SANTIDAD. Los reinos en la tierra
son en su mayor parte impíos; hay una llaga común
de lujo e inmundicia corriendo en ellos. Los reinos
son etapas en las que se debe actuar sobre el pecado.
"Todas las mesas están cubiertas de vómito y no hay
un solo lugar sin suciedad". (Isaías 28: 8); pero el
reino de los cielos es tan santo que no se mezclará
con corrupción alguna. "Nada impuro entrará jamás
en ella, ni quien haga lo que es vergonzoso o
engañoso". Apocalipsis 21:27. Es un suelo tan puro
que ninguna serpiente del pecado se reproducirá
allí. Allí la belleza no se tiñe de lujuria, y el honor no
se hincha de orgullo. La santidad es la joya más
brillante de la corona del cielo.
(5) El reino de los cielos supera a todos los demás
reinos en su naturaleza PACÍFICA. Es un reino de
paz. La paz es la gloria de un reino. Una paz es mejor
que innumerables victorias. La corona de un rey
está más adornada con el lirio blanco de la paz que
cuando está acosada por las rosas rojas de una
guerra sangrienta . Pero, ¿dónde encontraremos una
paz ininterrumpida en la tierra? O hay divisiones
autóctonas o invasiones extranjeras. "No hubo paz
para el que salía, ni para el que entraba". 2 Crónicas
15: 5. Pero el reino de los cielos es un reino de paz;
no hay enemigos con los que entrar en conflicto;
porque todos los enemigos de Cristo estarán debajo
de sus pies. Salmo 110: 1. Las puertas de ese reino
siempre están abiertas: "Las puertas no se cerrarán
en absoluto"; para demostrar que no hay miedo al
asalto de un enemigo. Apocalipsis 21:25. Cuando los
santos mueren, se dice que entran en
paz. Isaías 57: 2. No hay batir de tambores ni rugir
de cañones; pero la voz de los arpistas tocando, en
señal de paz. Apocalipsis 14: 2. En el cielo, "la justicia
y la paz se besan".
(6) El reino de los cielos supera a todos los
demás reinos en MAGNITUD; es de vastas
dimensiones. Aunque la puerta del reino es
estrecha y debemos pasar por la puerta estrecha de
la mortificación, una vez que estamos en ella, es
muy grande. Aunque hay una innumerable
compañía de santos y ángeles, todavía hay espacio
suficiente para todos. El reino de los cielos puede ser
llamado por el nombre de ese pozo en Génesis 26:22,
Isaac "llamó por su nombre Rehobot, y dijo: Porque
ahora el Señor nos ha hecho lugar". Ustedes que
ahora están confinados en una pequeña cabaña,
cuando entren al reino celestial, no serán limitados
por espacio. Como toda estrella tiene un gran orbe
para moverse, así será con los santos, cuando
brillarán como estrellas en el reino de los cielos.
(7) El reino de los cielos sobresale en UNIDAD.
Todos los habitantes coinciden en amor. El amor
será el perfume y la música del cielo. Así como el
amor a Dios será intenso, así también a los santos .
Como el perfecto amor echa fuera el miedo , también
echa fuera la envidia y la discordia . Aquellos
cristianos que no pudieron vivir juntos en paz en la
tierra (que era la mancha de su profesión) en el
cielo, serán todo amor; cesará el fuego de la
contienda; no habrá difamación, ni censura, ni
rastrillado en las llagas de los demás, sino que todo
estará unido con las cuerdas del corazón del amor.
Allí se ponen de acuerdo Lutero y Zwinglio. Satanás
no puede meter allí su pie hendido para hacer
divisiones. Habrá perfecta armonía y concordia, y ni
una sola cuerda discordante en la música de los
santos. ¡Valía la pena morir para estar en ese reino!
(8) Este reino excede a todos los reinos
terrenales en ALEGRÍA y PLACER, y por eso se le
llama paraíso. 2 Corintios 12: 4. Para el deleite,
todas las cosas son para causar placer; hay agua de
vida clara como el cristal; está cayendo el panal del
amor de Dios . Se llama "entrar en el gozo de nuestro
Señor". Mateo 25:23. Hay dos cosas que causan
alegría.
[1] La separación del pecado será completa, y luego
seguirá el gozo. No puede haber más tristeza en el
cielo que alegría en el infierno.

[2] Perfecta unión con Cristo. La alegría fluye de la

unión con el objeto. Cuando nuestra unión con Cristo
sea perfecta, nuestro gozo será pleno. Si el gozo de la
fe es tan grande, ¿cuál será el gozo de la vista ? 1
Pedro 1: 8. José les dio a sus hermanos provisiones
para el camino, pero los sacos llenos de maíz se
guardaron hasta que llegaron a la casa de su padre.
Dios les da a los santos una muestra de gozo aquí,
pero los sacos llenos se guardan hasta que llegan al
cielo. No sólo las partes físicas, los sentidos externos,
el ojo, el oído, el gusto, sino que el corazón de un
santo glorificado se llenará de gozo. El
entendimiento, la voluntad y los afectos son un
triángulo que nadie puede llenar excepto la
Trinidad. Debe haber una alegría infinita, donde no
se ve nada más que belleza; nada se prueba más que
el amor. "Me llenarás de gozo en tu presencia, de
placeres eternos a tu diestra". Salmo 16:11
(9) Este reino de los cielos supera a todos los
reinos terrenales en PERFECCIÓN. Otros reinos
son defectuosos, no tienen todas las provisiones
dentro de sí mismos, pero deben traficar en el
extranjero para satisfacer sus necesidades en casa,
como el rey Salomón envió a Ofir por oro. 2 Crónicas
8:18. Pero no hay defecto en el reino de los cielos;
tiene todos los productos suministrados de forma
natural. Apocalipsis 22: 2. Allí está la perla de gran
precio, la estrella de la mañana, las montañas de
especias, el lecho del amor; ¡Hay esas sagradas
rarezas, con las que Dios y los ángeles se deleitan!
(10) Este reino de los cielos supera a todos los
demás en HONOR y nobleza. No solo los iguala en
las insignias de la realeza, el trono y las túnicas
blancas , sino que los trasciende con creces. Otros
reyes son de sangre real , pero ellos en este reino
celestial son nacidos de Dios. Otros reyes conversan
con los nobles; ¡Los santos glorificados son
compañeros comunes de los ángeles! Tienen una
corona más noble ; está hecho de las flores del
paraíso y es una corona que nunca se desvanecerá. 1
Pedro 5: 4. Se sientan en un mejor trono . El rey
Salomón se sentó en un trono de marfil recubierto
de oro (1 Reyes 10:18); pero los santos en el cielo son
más avanzados, ¡se sientan con Cristo en su trono!
Apocalipsis 3:21. Juzgarán a los príncipes y a los
grandes de la tierra. 1 Cor 6: 2. Este honor tienen
todos los santos glorificados.
(11) Este reino de los cielos supera a todos los
demás en SALUD. ¡La muerte es un gusano que
siempre se alimenta de la raíz de nuestra calabaza!
Los reinos terrenales son a menudo hospitales de
enfermos; pero el

reino de los cielos es un clima sumamente saludable.

Allí no hay médicos , porque allí no hay
enfermedades. No pasa ninguna
campana de la muerte. "Tampoco pueden morir
más". Lucas 20:36. En el clima celestial, no hay
vapores nocivos que engendren enfermedades, sino
una fragancia curativa dulce y aromática que
proviene de Cristo; todos sus vestidos huelen a
mirra, áloe y casia.
(12) Este reino de los cielos es excelente en
DURACIÓN, permanece para siempre.
Supongamos que los reinos terrenales son más
gloriosos que ellos, sus cimientos de oro, sus muros
de perla, sus ventanas de zafiro; sin embargo, son
corruptibles y fugaces. "Haré cesar el reino". Oseas 1:
4. Troya y Atenas ahora yacen enterradas en sus
ruinas; el maíz ahora crece donde una vez estuvo
Troya. La mortalidad es la desgracia de todos los
reinos terrenales; pero el reino de los cielos tiene
escrita la eternidad ; es un reino eterno. 2 Pedro 1:11.
Está fundada sobre el pilar fuerte de la
omnipotencia de Dios. Los santos nunca serán
expulsados de este reino, ni serán depuestos de su
trono, como lo han sido algunos reyes , ¡sino que
reinarán por los siglos de los siglos! Apocalipsis 22:
5.
¡Cómo debería afectar todo esto a nuestro corazón!
¿Qué debería importarnos sino este reino de los
cielos, que eclipsa más a todos los reinos de la tierra
que el sol eclipsa la luz de una vela?

[4] ¿ CUÁNDO comenzará este reino de los cielos?

Esta gloria en el reino de los cielos comenzará con la
muerte, pero no se perfeccionará hasta la
resurrección.
(1) Los santos entrarán en el reino de gloria
inmediatamente después de la muerte.
Antes de que sus cuerpos sean enterrados, sus almas
serán coronadas. "Tener el deseo de partir y estar
con Cristo". Filipenses 1:23. A partir de esta
conexión, partir y estar con Cristo , vemos
claramente que hay un pasaje rápido de la muerte a
la gloria; tan pronto el alma de un creyente se
divorcia del cuerpo, ¡pero inmediatamente va a
Cristo! "Ausente del cuerpo, presente con el Señor". 2
Cor 5: 8. Sería mejor para los creyentes quedarse
aquí en la tierra, si inmediatamente después de la
muerte no estuvieran con Cristo en

gloria; porque aquí los santos están aumentando

diariamente su gracia; aquí pueden tener muchos
anticipos, dulces sabores del amor de Dios: de modo
que sería mejor quedarse aquí, si su alma durmiera
en su cuerpo, y no tuvieran una vista rápida de Dios
en la gloria.
Pero el consuelo de los creyentes es que no se
quedarán mucho tiempo fuera de su reino. Rápido
como un guiño, y verán a Dios. No solo será un
cambio bendecido para un creyente, de un desierto
a un paraíso, de una batalla sangrienta a una corona
victoriosa , sino un cambio repentino . Apenas
murió Lázaro , pero tenía un convoy de ángeles para
llevar su alma al reino de la gloria. Tú que ahora
estás lleno de enfermedades corporales, con apenas
un día sin dolor, diciendo: "¡Mi vida se ha gastado en
dolor!" (Salmo 31:10); ¡Sea un buen consuelo, podrá
ser eternamente feliz antes de darse cuenta! Antes
de que termine otra semana o mes, puedes estar en
el reino de gloria, ¡y entonces todas las lágrimas
serán enjugadas! "Te lo aseguro: ¡hoy estarás
conmigo en el paraíso!" Lucas 23:43.
(2) La gloria en el reino de los cielos se
perfeccionará completamente en la resurrección
y el día general del juicio. Entonces los cuerpos y
las almas de los creyentes se reunirán. ¡Qué alegría
habrá en el reencuentro y encuentro del alma y el
cuerpo de un santo! ¡Oh, qué bienvenida le dará el
alma al cuerpo! "Oh mi querido cuerpo, a menudo te
uniste a mí en oración, y ahora te unirás a mí en
alabanza; estabas dispuesto a sufrir conmigo, y
ahora reinarás conmigo; fuiste sembrado un cuerpo
vil , pero ahora tú somos hechos como el cuerpo
glorioso de Cristo; una vez estuvimos divorciados
por un tiempo , pero ahora estamos casados y
coronados en un reino, y nos felicitaremos
mutuamente por la felicidad de los demás ".

[5] La certeza e infalibilidad de este reino de gloria.

Que este reino bendito sea conferido a los
santos, está fuera de toda discusión.
(1) Dios lo ha prometido. "Es un gran placer para
tu Padre darte el reino". Lucas 12:32. "Os asigno un
reino". Lucas 22:29. "Lo lego como mi última
voluntad y testamento". ¿Ha prometido Dios un

reino, y ¿no cumplirá su promesa? La promesa de

Dios es mejor que cualquier vínculo. "En la
esperanza de la vida eterna que prometió Dios, que
no puede mentir". Tito 1: 2. La tierra entera pende de
la palabra del poder de Dios ; ¿Y no puede nuestra fe
depender de la palabra de su promesa?
(2) Hay un precio fijado para este reino. El cielo
no es solo un reino que Dios ha prometido, sino que
Cristo ha comprado ; se llama posesión comprada.
Efesios 1:14. Aunque este reino nos es dado
gratuitamente, Cristo lo compró por el precio de su
sangre; que es un cielo que procura sangre.
"Teniendo confianza para entrar en el Lugar
Santísimo (es decir, en el cielo) por la sangre de
Jesús". Hebreos 10:19. ¡La cruz de Cristo es la llave
del paraíso! ¡La sangre de Cristo es la llave que
abre las puertas del cielo! Si los santos no obtienen
este reino, entonces Cristo debería perder su
compra. Cristo en la cruz estaba sufriendo dolores
de parto. Isaías 53:11. Él luchó por traer la salvación
a los elegidos: si no poseyeran el reino cuando
murieran, Cristo perdería su aflicción; todos sus
dolores y agonías del alma sobre la cruz serían en
vano.
(3) Cristo ora para que los santos puedan tener
este reino establecido sobre ellos. "Padre, quiero
que los que me has dado estén conmigo donde yo
estoy, y vean mi gloria". Es decir, en el cielo. Juan
17:24. Ésta es la oración de Cristo: que los santos
estén con él en su reino y sean iluminados con
algunos de los rayos de su gloria. Ahora, si no
entraran en este reino celestial, entonces la oración
de Cristo se frustraría; pero eso no puede ser, porque
él es el favorito de Dios. "Sé que siempre me
escuchas"; y además, lo que Cristo ora, tiene poder
para dar. Juan 11:42. Observe la manera de la
oración de Cristo: "Padre, quiero"; Padre , allí ora
como hombre; "Lo haré", allí da como Dios.
(4) Los santos deben tener este reino bendito en
virtud de la ascensión de Cristo. "Subo a mi Padre
y vuestro Padre, a mi Dios y vuestro Dios". Juan
20:17. ¿Dónde está el consuelo de esto? Jesucristo
ascendió para tomar posesión del cielo para todos
los creyentes. Así como un esposo toma tierra en
otro país en nombre de su esposa, así Cristo fue a
tomar posesión del cielo en nombre de todos los
creyentes. "Voy a prepararte un lugar". Juan 14: 2. Mi
ascensión es para preparar todas las cosas contra tu
venida: voy a preparar las mansiones celestiales
para

tú.
La carne que Cristo ha llevado al cielo es una
garantía segura de que nuestra carne y nuestro
cuerpo estarán donde él está en breve. Cristo no
ascendió al cielo como una persona privada , sino
como una persona pública, para el bien de todos los
creyentes; su ascensión fue un precursor de la
ascensión de los santos al cielo.
(5) Los elegidos deben tener este reino bendito,
en relación con la obra previa del Espíritu en sus
corazones. Aquí tienen el comienzo del reino de los
cielos. La gracia es el cielo iniciado en el alma.
Además, Dios les da las primicias del Espíritu.
Romanos 8:23. Las primicias son las comodidades del
Espíritu. Estos primeros frutos bajo la ley eran una
señal cierta para los judíos de la cosecha completa
que recibirían después. Las primicias del Espíritu,
que consisten en gozo y paz, aseguran a los santos de
la plena cosecha de gloria que siempre cosecharán en
el reino de Dios. Se dice que los santos en esta vida
tienen la promesa del Espíritu en sus corazones. 2
Cor 5: 5. Así como la prenda es parte del pago, y una
garantía de que el pago completo se hará a su debido
tiempo, así el Espíritu de Dios en el corazón de los
creyentes, dándoles sus consuelos, les otorga una
prenda o un sabor de gloria, que además les asegura
ellos de la recompensa completa que tendrán en el
reino de los cielos. "Creyendo, te regocijas"; está la
prenda del cielo. 1 Pedro 1: 8. "Recibiendo el fin de tu
fe", salvación; hay el pago completo ; ver 9.
(6) Los elegidos deben tener este reino bendito
en virtud de su unión con Jesucristo; son
miembros de Cristo, por lo tanto, deben estar
donde está su cabeza. De hecho, sostienen los
arminianos, que una persona justificada puede caer
de la gracia, y así su unión con Cristo puede ser
disuelta y el reino perdido. Pero les pregunto
: ¿puede Cristo perder un miembro de su cuerpo?
Entonces no es perfecto; y si Cristo puede perder un
miembro de su cuerpo, ¿por qué no todos , por la
misma razón? Entonces será una cabeza sin un
cuerpo; pero tenga la seguridad de que la unión de
un creyente con Cristo no se puede romper, y
mientras no se le pueda impedir el reino. Juan 17:12.
Lo que se dijo del cuerpo natural de Cristo, es
igualmente cierto de su místico. "Ni un hueso de él se
romperá". Juan 19:36. Mire cómo cada hueso y cada
miembro del cuerpo natural de Cristo fue levantado
de la tumba y llevado al cielo; también lo hará cada
miembro de su mística

el cuerpo sea llevado a la gloria.

(7) Leemos de algunos que han sido trasladados
a este reino. Pablo lo vio, porque fue arrebatado al
tercer cielo. 2 Corintios 12: 2. Y el ladrón convertido
en la cruz fue trasladado a la gloria. "Hoy estarás
conmigo en el paraíso". Lucas 23:43. Por todo lo que
se ha dicho, es más evidente que los creyentes tienen
un reino glorioso reservado para ellos en el cielo, y
que irán a este reino cuando mueran. Nadie duda de
la certeza del reino celestial , pero quienes dudan de
la veracidad de las Escrituras.

[6] Debemos orar fervientemente: "Venga tu reino".

(1) Porque es un reino por el que vale la pena
orar. Supera la gloria de todos los reinos terrenales,
tiene puertas de perla. Apocalipsis 21:21. Hemos
oído hablar de un armario de perlas, pero ¿ cuándo
nos enteramos de las puertas de perlas? En ese reino
está el lecho del amor, las montañas de especias;
están los querubines, no para mantenernos
fuera, sino para darnos la bienvenida al reino. El
cielo es un reino por el que vale la pena orar; nada
falta en ese reino que pueda completar la felicidad
de los santos; porque, ¿en qué consiste la felicidad?
¿Está en conocimiento ? "Conoceremos como somos
conocidos". ¿Está en tarifa real ? Estaremos en la
"cena de las bodas del Cordero". ¿Está en ropa rica ?
Estaremos "vestidos con largas túnicas blancas".
¿Está en música exquisita ? Escucharemos el canto
del coro de ángeles. ¿Está en dominio ? Reinaremos
como reyes y juzgaremos a los ángeles. ¿Es de placer
? Entraremos en el gozo de nuestro Señor.
¡Seguramente entonces vale la pena orar por este
reino! "Venga tu reino". Si Dios nos diera una visión
del cielo por un momento, como lo hizo con Esteban,
quien vio "los cielos abiertos" (Hechos 7:56),
¡estaríamos abrumados! "Me has hecho conocer el
camino de la vida; me llenarás de gozo en tu
presencia, de placeres eternos a tu diestra". Salmo
16:11. Cuán importunadamente pondríamos esta
petición: "¡Venga tu reino!"
(2) Debemos orar por este reino de gloria,
porque Dios no se lo concederá a nadie sin
oración. "A los que buscan gloria e inmortalidad"
(Romanos 2: 7); y ¿cómo buscamos sino con la
oración? Dios ha prometido un reino, y por medio de
la oración debemos poner el lazo en juego.

¡Dios no es tan tonto como para arrojar un reino

sobre aquellos que no lo piden! Y ciertamente, si el
mismo Cristo, que había merecido la gloria, oró:
"Ahora, Padre, glorifícame contigo mismo" (Juan 17:
5), cuánto más debemos orar por la gloria excelente
que tiene este reino. concedido como una carta de la
mera gracia y el favor de Dios!
(3) Debemos orar para que venga el reino de
gloria, para que al entrar en él podamos poner fin
al pecado. A veces pienso, ¡qué tiempo tan bendito
será, nunca más tener un pensamiento pecaminoso!
aunque no debemos orar, "Venga tu reino", por
descontento, porque nos libraríamos de los
problemas y cruces de esta vida. Esto fue culpa de
Jonás; moriría de un ataque, porque Dios le quitó la
calabaza; "Señor", dice, "quítame la vida". Jonás 4: 3.
Pero debemos orar, "Venga tu reino", con un
designio santo para que se quiten las cadenas de la
corrupción y podamos ser como los ángeles, esos
espíritus vírgenes, que nunca pecan. Esto hizo que la
iglesia orara en Apocalipsis 22:20, Veni, Domine Jesús
[Ven, Señor Jesús].
(4) Porque todos los enemigos de Cristo serán
puestos debajo de sus pies. El diablo no tendrá más
poder para tentar, ni los impíos para perseguir; la
jerarquía anticristiana será derribada, y la gloria de
Sión brillará como una lámpara, y la fuerza turca
será quebrantada.
(5) Debemos orar fervientemente para que
venga el reino de gloria, para que podamos ver a
Dios "cara a cara" y tener una comunión
ininterrumpida y eterna con él en el cielo
empíreo. Moisés deseaba solo un atisbo de la gloria
de Dios. Éxodo 33:18. ¿Cómo, entonces, debemos
orar para verlo con todas sus túnicas bordadas de
gloria, cuando brille diez mil veces más que el sol en
su esplendor meridiano? Aquí, en esta vida,
deseamos a Dios antes que disfrutarlo ; ¡Cuán
fervientemente, por tanto, debemos orar: “Venga tu
reino de gloria! ” ¡ La contemplación y el gozo de Dios
será el diamante en el anillo, la quintaesencia de la
gloria! ¿Y debemos orar, "Venga tu reino"? Entonces,
¿cómo es posible que vayan al cielo si nunca oran
por él? Aunque Dios les da a algunas personas
profanas "pan de cada día" que nunca oran por
él, sin embargo, no les dará el reino de los
cielos, ¡quienes nunca oran por él! Dios puede
alimentarlos , pero nunca los coronará .

Utilice 1. Para obtener información.

(1) De todo esto, ves que nada dentro de toda la
esfera de la religión verdadera se impone en
términos irrazonables. Cuando Dios nos pide que le
sirvamos, no es una petición irrazonable; por gracia
inmerecida nos entronizará en un reino. Cuando
oímos del arrepentimiento, empapar nuestras almas
en lágrimas por el pecado; o de la
mortificación —decapitar a nuestro rey— pecado,
estamos listos para quejarnos, y pensamos que esto
es difícil e irrazonable. "Pero, ¿servimos a Dios por
nada?" ¿No es una generosidad infinita
recompensarnos con un reino glorioso? Este reino
está tan por encima de nuestros pensamientos como
más allá de nuestros desiertos . Ningún hombre
puede decir, sin agraviar a Dios, que es un amo
duro; porque aunque nos pone en el trabajo duro
, no es un maestro duro. Dios da doble paga; da
grandes beneficios en su servicio: dulce alegría y
paz; y una gran recompensa después, "¡un eterno
peso de gloria!" Dios da las flores de primavera y
una cosecha; establece sobre nosotros un reino que
excede nuestra fe. Lo que el ojo mortal no ha visto,
ni puede entrar en el corazón del hombre para
concebir. 1 Cor 2: 9. ¡Ay, qué infinita diferencia hay
entre el deber ordenado y el reino preparado! ¿Qué
es el derramamiento de una lágrima, comparado con
una corona eterna? Para que "los mandamientos de
Dios no sean graves". 1 Juan 5: 3. Nuestro servicio no
puede ser tan difícil, como un reino es dulce.
(2) Mirad, pues, la real generosidad de Dios para
con sus hijos, que les ha preparado un reino, un
reino rebosante de gloria; ¡infinitamente por
encima del modelo podemos dibujarlo en
nuestros pensamientos! El pintor que iba a dibujar
el retrato de Helena, como no podía atraer su belleza
a la vida, dibujó su rostro cubierto con un velo; por
eso, cuando hablamos del reino de los cielos,
debemos correr un velo, no podemos exponerlo en
toda su belleza y magnificencia oriental; el oro y la
perla lo ensombrecen levemente. Apocalipsis 21:21.
La gloria de este reino se siente mejor que se
expresa.
Aquellos que heredan este reino están "vestidos de
ropas blancas". Apocalipsis 7: 9. Las túnicas blancas
denotan tres cosas:
[1] Su DIGNIDAD. Los persas iban vestidos de blanco, en
señal de honor .
[2] Su PUREZA. Los magistrados entre los romanos estaban
vestidos de

blanco — para mostrar su integridad. Así la reina, la

esposa del Cordero, se viste de lino fino, puro y
blanco, que es "la justicia de los santos". Apocalipsis
19: 8.
[3] Su ALEGRÍA. El blanco es un emblema de alegría.
"Come tu pan con alegría, deja que tus vestidos sean
siempre blancos". Ecl 9: 7, 8.
Los habitantes de este reino tienen " palmas en sus
manos", en señal de VICTORIA. Apocalipsis 7: 9. Son
conquistadores del mundo: y, siendo vencedores,
ahora tienen palmas. Se sientan en el trono con
Cristo. Apocalipsis 3:21. Así los santos en gloria,
después de sus heroicas victorias, se sentarán en un
trono con Cristo. Es una generosidad real en Dios
conceder un reino tan ilustre a los santos. Es una
misericordia ser perdonado, pero ¿qué es ser
coronado? Es una misericordia ser liberados de la ira
venidera, pero ¿qué es ser investido con un reino
glorioso? "¡Mirad qué amor es éste!" Los príncipes
terrenales pueden otorgar grandes obsequios y
donaciones a sus súbditos, pero se quedan con el
reino para sí mismos. Aunque el rey Faraón adelantó
a José para que lo honrara, le quitó el anillo de su
dedo y se lo dio, él se quedaría con el reino para sí
mismo. Génesis 41:40. Pero Dios entroniza a los
santos en un reino. No cree que nada sea demasiado
bueno para sus hijos. Estamos dispuestos a pensar
mucho en una lágrima, una oración o en sacrificar
un pecado por él; ¡pero no piensa mucho en
otorgarnos un reino!
(3) Vea, por tanto, que la religión verdadera no
es una cosa ignominiosa y vergonzosa. Satanás se
esfuerza por arrojar sobre él todo el odio y reproche
que pueda; que es un frenesí devoto, una insensatez
arraigada. Hechos 28:22. "En cuanto a esta secta,
sabemos que en todas partes se habla en contra".
Pero los sabios miden las cosas por el resultado .
¿Cuál es el resultado de una vida piadosa? Termina
en un reino. ¿Consideraría un príncipe los
desprecios de unos pocos frenéticos cuando vaya a
ser coronado? Ustedes que son principiantes, ate sus
reproches como una corona sobre su cabeza;
desprecia sus censuras tanto como su alabanza : se
acerca un reino.
(4) ¡ Mira qué caminos contrarios van los
piadosos y los impíos al morir! Los piadosos van a
un reino glorioso ; los malvados van a una prisión
inmunda. El diablo es el carcelero, y están atados
con las cadenas de las tinieblas. Judas 6. Pero, ¿qué
son estas cadenas? No cadenas de hierro , pero peor;

la cadena del decreto de Dios , decretando el

tormento; y la cadena del poder de Dios , mediante la
cual los ata bajo la ira eterna. La deplorable
condición de los pecadores impenitentes es que no
van a un reino cuando mueren, sino a una terrible
prisión. ¡Oh, piensa en el horror y la desesperación
que se apoderarán de los malvados cuando se vean
sumidos en la miseria y su condición desesperada,
indefensa, interminable! Están en una prisión de
fuego y no hay posibilidad de salir. Un siervo bajo la
ley, que tenía un amo duro , cada siete años podía
salir libre; pero en el infierno no hay año de
liberación en el que los condenados sean libres: ¡el
fuego, el gusano, la prisión son eternos! Si el mundo
entero, desde la tierra hasta el cielo, estuviera lleno
de granos de arena, y una vez cada mil años viniera
un ángel y se llevara un grano, cuántos millones de
eras pasarían antes de que ese enorme montón de
arena se agotara por completo. ! Sin embargo, si
después de todo este tiempo el pecador pudiera salir
del infierno, habría algo de esperanza: pero esta
palabra "¡PARA SIEMPRE!" rompe el corazón de
desesperación!
(5) Mira lo que nos pueda enamorar de los
deberes santos; que cada deber cumplido
espiritualmente nos acerca un paso más al reino.
El fin hace que los medios sean adorables. Aquel cuyo
corazón está puesto en las riquezas, considera
placentero el comercio, porque le aporta riquezas. Si
nuestro corazón está puesto en el cielo, amaremos el
deber, porque gradualmente nos lleva al reino;
vamos al cielo por el camino del deber. Los deberes
santos aumentan la gracia; y como madura la gracia,
la gloria se apresura. Los deberes de la piedad son
fastidiosos para la carne y la sangre, ¡pero debemos
considerarlos como carros espirituales para
llevarnos rápidamente al reino celestial! Los
protestantes en Francia llaman a su iglesia paraíso; y
bien podrían hacerlo, porque las ordenanzas los
llevaron al paraíso de Dios. Así como toda flor tiene
su dulzura, también lo tendría todo deber, si la
consideráramos como un impulso más cercano al
cielo.
(6) Nos muestra la poca razón que tienen los
hijos de Dios para envidiar la prosperidad de los
malvados. "¿Quién necesita una cartera llena
cuando tiene un tesoro"? Séneca. A los impíos se les
escurre "el agua de una copa llena". Salmo 73:10.
Como si tuvieran el monopolio de la felicidad: tienen
todo lo que pueden desear; es más, tienen "más de lo
que el corazón puede desear". Salmo 73: 7. ¡Se
empapan de placer! "Toman pandero y arpa, y se
regocijan con el sonido del órgano". Job 21:12. los
los malvados son altos cuando el pueblo de Dios es
bajo en el mundo. Las cabras trepan por las
montañas de la prosperidad, ¡cuando las ovejas de
Cristo están abajo en el valle de las lágrimas! Los
impíos se visten de púrpura, mientras que los
piadosos van de cilicio.
La prosperidad de los impíos es un gran
tropiezo. Esto hizo que Asaf dijera: "Verdaderamente
he limpiado mi corazón en vano". Salmo 73:13. Pero
no hay motivo de envidia por su prosperidad, si
consideramos dos cosas. Primero, ¡esto es todo lo que
tienen! "Hijo, recuerda que tú en tu vida recibiste tus
cosas buenas:" tuviste todo tu cielo aquí. Lucas 16:25.
Lutero llama a todo el imperio turco un hueso que
Dios arroja a los perros. En segundo lugar, que Dios
ha reservado mejores cosas para sus hijos. Les ha
preparado un reino de gloria. Tendrán la visión
beatífica: escucharán a los ángeles cantar en
concierto; serán coronados con los placeres del
paraíso para siempre. ¡Oh, entonces no envidies la
floreciente prosperidad de los malvados! Pasan por
un camino agradable : ¡hasta la ejecución! Los
piadosos pasan por un camino inmundo: ¡ hasta la
coronación!
(7) ¿Se acerca un reino de gloria? ¡Mira qué
felices son todos los santos al morir! ¡Van a un
reino! Verán el rostro de Dios, que brilla diez mil
veces más que el sol en su gloria meridiana. Los
piadosos al morir serán instalados en su honor y se
les colocará la corona real sobre la cabeza. Tienen en
el reino de los cielos la quintaesencia de todas las
delicias; tienen el agua de la vida clara como el
cristal; tienen todos los perfumes aromáticos; se
alimentan del maná de los ángeles; yacen en el seno
de Cristo, ese lecho de especias. Hay una variedad
tan agradable en la felicidad del cielo, que después
de millones de años será tan fresca y deseable como
el disfrute de la primera hora.
En el reino de los cielos, los santos son coronados
con todas aquellas perfecciones de las que son
capaces. Los deseos de los santos glorificados están
infinitamente satisfechos; no hay nada ausente que
deseen disfrutar; no hay nada presente que deseen
que se elimine. Aquellos que lleguen a este reino se
opondrán a regresar a la tierra de nuevo, porque
sería una gran pérdida para ellos. No dejarían la
plenitud y la dulzura del olivo para cortejar la zarza;
las cosas que nos deleitan aquí en la tierra , las
despreciarían. ¿Qué son las bolsas de oro
, en comparación con los rayos dorados del Sol de

¿Justicia?
En el reino de los cielos hay gloria en su máxima
elevación; en ese reino hay conocimiento sin
ignorancia, santidad sin pecado, belleza sin defecto,
fuerza sin debilidad, luz sin tinieblas, riquezas sin
pobreza, comodidad sin dolor, libertad sin
restricciones, descanso sin trabajo, alegría sin dolor,
amor sin odio, abundancia sin hastío, honor sin
desgracia, salud sin enfermedad, paz sin guerra,
alegría sin cesar. ¡Oh, la felicidad de los que mueren
en el Señor! ¡Entran en este reino bendito! Y si están
tan felices cuando mueren, permítanme hacer dos
inferencias .
[1] ¡ Qué poca razón tienen los santos para temer
la muerte! ¿Alguien tiene miedo de ir a un reino
glorioso? ¿Qué hay en este mundo que debería
hacernos desear quedarnos aquí? ¿No vemos a Dios
deshonrado, y cómo podemos soportarlo? ¿No es
este mundo "un valle de lágrimas", y lloramos para
dejarlo? ¿No estamos en un desierto entre serpientes
ardientes , y tenemos miedo de alejarnos de estas
serpientes? Nuestros mejores amigos viven arriba.
Dios siempre exhibe el estandarte de su amor en el
cielo, y ¿hay algún amor como el suyo? ¿Hay
sonrisas más dulces o abrazos más suaves que los
suyos? ¿Qué noticia es tan bienvenida, como dejar el
mundo e ir a un reino? Christian, el día de tu muerte
será el día de tu boda , ¿y lo temes? ¿Un esclavo tiene
miedo de ser liberado? ¿Tiene miedo una virgen de
ser emparejada con la corona? La muerte puede
quitarnos algunas comodidades mundanas , pero da
las mejores; ¡Quita una flor y regala una joya! Se
quita un contrato de arrendamiento breve y se cede
la tierra en herencia. Si los santos poseen un reino
cuando mueren, no tienen motivo para temer a la
muerte. Un príncipe no tendría miedo de cruzar el
mar, aunque sea tempestuoso, ¡si estuviera seguro
de ser coronado tan pronto como llegue a la orilla!
[2] Si los piadosos son tan felices cuando
mueren, que van a un reino, ¿qué motivo
tenemos para lamentarnos inmoderadamente
por la muerte de amigos piadosos? ¿Lloraremos
por su avance? ¿Por qué deberíamos derramar
lágrimas inmoderadamente por aquellos a quienes
se les han enjugado todas las lágrimas de los ojos?
¿Por qué debemos ser devorados por el dolor, por
aquellos que son devorados por el gozo? ¡Se han ido
a su reino! No están perdidos, ¡sino que se han ido
un poco antes que nosotros! No
perecieron, ¡sino que fueron trasladados al cielo! Se
eliminan para su beneficio; como si uno

debería ser trasladado de una cabaña llena de humo

a un palacio. Elías fue llevado en un carro de fuego
al cielo. ¿Llorará Eliseo desmesuradamente porque
no disfruta de la compañía de Elías? ¿Llorará Jacob
cuando sepa que su hijo José avanzó y fue nombrado
gobernador principal de Egipto? No debemos
sentirnos excesivos en el dolor cuando sabemos que
nuestros amigos piadosos han avanzado a un reino.
Confieso que cuando alguno de nuestros parientes
muere en su impenitencia, hay una justa causa de
duelo, pero no cuando nuestros amigos emprenden
su vuelo hacia la gloria. Pero aunque debemos llorar
al pensar que algo de nuestra carne debe arder en el
infierno, no seamos abatidos por aquellos que están
tan avanzados en la muerte, como a un reino.
Nuestros piadosos amigos que mueren en el Señor,
están en ese estado bendito y están coronados con
tales delicias infinitas, que si pudiéramos
escucharlos hablarnos desde el cielo, dirían: "No
lloréis por nosotros, sino llorad por vosotros mismos.
! " Lucas 23:28. Estamos en nuestro reino, no lloren
por nuestro avance, "sino lloren por ustedes
mismos", que están en un mundo de tristeza y
pecado. Ustedes se lanzan sobre las olas turbulentas
, pero hemos llegado al puerto: están luchando
contra las tentaciones, mientras nosotros llevamos
una corona victoriosa: "No lloréis por nosotros, sino
llorad por vosotros mismos".
(8) Vea la sabiduría de los piadosos. Tienen el ojo
de la serpiente en la cabeza de la paloma . Son
"vírgenes prudentes". Mateo 25: 2. Su sabiduría
aparece en su elección. Eligen lo que los llevará a un
reino; eligen la gracia, y ¿qué es la gracia sino la
semilla de la gloria? Eligen a Cristo con su cruz, ¡pero
esta cruz conduce a una corona! Moisés eligió "más
bien sufrir aflicción con el pueblo de Dios". Hebreos
11:25. Fue una elección sabia y racional, porque
sabía que si sufría , ¡ reinaría ! En el día del juicio,
aquellos a quienes el mundo consideró necios,
parecerán sabios. Hicieron una elección prudente :
eligieron la santidad; ¿ Y qué es la felicidad sino la
quintaesencia de la santidad? Eligieron la aflicción
con el pueblo de Dios; pero, a través de este
purgatorio de aflicción , pasan al paraíso. Dios
proclamará la sabiduría de los santos ante los
hombres y los ángeles.
(9) Mira la locura de aquellos que, por vanos
placeres y ganancias, perderán un reino tan
glorioso ; como ese cardenal de Francia que dijo:
"Perdería su parte en el paraíso, si pudiera mantener
su cardenalicio en París". Puedo decir (como
Eclesiastés 9: 3), "La locura está en su corazón".

Lisímaco, por un trago de agua, perdió su imperio;

así que, por un trago de placer pecaminoso, ¡estos
necios perderán el cielo! Nos parecemos demasiado
a nuestro abuelo, Adam, que por una manzana
perdió el paraíso. Muchos por nimiedades, para
conseguir un dólar más en la tienda o en un
celemín, se aventurarán a perder el cielo. Será un
agravamiento del tormento del pecador, pensar
cuán tontamente fue destruido; por un destello de
gozo impuro , ¡ perdió un eterno peso de gloria! ¿No
molestaría a un rey pensar que perdería su
reino por una pluma? Tales son los que dejan ir el
cielo , por una canción. Esto hará que el diablo
insulte en el último día, pensar cómo ha engañado a
los hombres, haciéndoles perder el alma y la
felicidad por "vanidades mentirosas". Si Satanás
pudiera hacer valer su jactancia al dar toda la gloria
y los reinos del mundo, no podría contrarrestar la
pérdida del reino celestial. ¡Todas las lágrimas del
infierno no son suficientes para lamentar la pérdida
del cielo!
Utilice 2. Para reproche.
(1) Reprueba a los que no cuidan de este reino de
gloria y viven como si todo lo que decimos sobre
el cielo no fuera más que una ficción. Parece que
no les importa, porque no trabajan para que el reino
de la gracia se establezca en sus corazones. Si tienen
algunas ideas de este reino -yet es de una manera
aburrida, descuidado; sirven a Dios como si no le
sirvieran; no ponen sus fuerzas para el reino
celestial. ¡Cuán laboriosos fueron los santos de la
antigüedad por este reino! "Extendiendo las cosas
que están antes"; la palabra griega es
epekteinomenos , "estirar el cuello", una metáfora de
los corredores, que tensan cada miembro y se
estiran para agarrar el premio. Fil. 3:13. Lutero
pasaba tres horas al día en oración. Anna, la
profetisa, "no partieron del templo, sino que
sirvieron a Dios con ayunos y oraciones noche y día".
Lucas 2:37. ¡Cuán celosos y diligentes fueron los
mártires para entrar en este reino celestial! como
coronas, y abrazó las llamas con tanta alegría como
Elías lo hizo con el carro de fuego que vino a traerlo
al cielo; ¿y no creemos que este reino vale la pena
nuestro trabajo?
Los grandes dolores que los paganos sufrieron en
sus carreras olímpicas, cuando corrieron por una
corona hecha de olivo mezclado con oro, se
levantarán en juicio contra aquellos que se
esfuerzan poco o nada en buscar el reino de gloria.
La torpeza de muchos al buscar el cielo es tal que

si no creían que existía tal reino; o como si el cielo

no pudiera compensar su labor; o como si pensaran
que era indiferente si lo obtuvieron o no, lo que
equivale a decir si se salvaron o no; si fueron
coronados de gloria o encadenados como galeras en
el infierno para siempre.
(2) Reprueba a los que gastan su sudor más en
conseguir el mundo que el reino de los cielos. "Su
mente esta en cosas terrenales." Filipenses 3:19. El
mundo es la gran Diana que claman, como si
quisieran sacar la felicidad de la tierra, que Dios ha
maldecido; trabajan por el honor y las riquezas.
Como la casa de Coré, "¡Se los tragó la tierra!"
Entumecimiento 16:32. Se traga su tiempo y sus
pensamientos. Si no son paganos, son infieles. ¡Como
la serpiente, lamen el polvo! Oh, ¿qué hay en el
mundo para que debamos idolatrarlo, y que Cristo y
el cielo sean despreciados como inútiles? ¿Qué ha
hecho Cristo por ti? ¡Murió por tus pecados! ¿Qué
hará el mundo por ti? ¿Puede apaciguar una
conciencia enojada? ¿Puede procurar el favor de
Dios? ¿Puede escapar de la muerte? ¿Puede
sobornar al juez glorioso? ¿Puede comprarte un
lugar en el reino de los cielos? ¡Oh, cómo están
hechizados los hombres con las ganancias y los
honores mundanos, que por estas cosas dejarán ir el
paraíso! Fue una buena oración de Bernardo:
"Poseamos las cosas temporales de tal manera que
no perdamos las eternas".
(3) Reprueba a los que se demoran y postergan
la búsqueda de este reino hasta que sea
demasiado tarde ; como las vírgenes insensatas que
llegaron cuando la puerta estaba cerrada. La demora
trae peligro. La gente deja que se apague la lámpara
de la vida, y cuando los síntomas de la muerte estén
sobre ellos y no sepan qué más hacer, mirarán hacia
el reino de los cielos. Cristo les pide que busquen el
reino de Dios primero , y lo buscarán al final ;
pusieron el reino de los cielos en un
lecho de muerte, como si fuera tan fácil hacer las
paces con Dios como hacer su voluntad. ¡Cuántos
han perdido el reino celestial por demoras y
dilación! Plutarco informa de Arquias, el
lacedemonio, que cuando, estando entre sus copas,
uno le entregó una carta y le pidió que la leyera
inmediatamente, siendo un asunto serio, respondió:
"Mañana me ocuparé de cosas serias"; y esa noche lo
mataron. Tú, que dices que mañana cuidarás del
reino de los cielos , no lo sabes, pero puedes estar en
el infierno antes.
¡mañana! A veces la muerte llega de repente: golpea
sin avisar. Qué insensatez es posponer la búsqueda
del reino de los cielos hasta que expire el día de la
gracia; hasta que se gaste toda la vida. Como si un
hombre comenzara a correr una carrera cuando su
último aliento está en su boca.
(4) Reprime a quienes alguna vez fueron grandes
fanáticos en la religión, y parecían haber sido
tocados con un carbón del altar de Dios, pero
desde entonces se han enfriado en su devoción y
han dejado de perseguir el reino celestial. "Israel
ha desechado lo bueno". Han dejado la casa de
oración y se han ido a las casas de juego; han dejado
de perseguir el reino celestial. Oseas 8: 3.
¿De dónde es esto?
[1] Por falta de un principio sobrenatural de
gracia. Esa rama tiene que morir, que no tiene raíz
sobre la que crecer. Lo que se mueve desde un
principio de vida perdura, como el latido del pulso.
Pero lo que se mueve solo de un resorte artificial,
cuando el resorte está abajo, el movimiento cesa. La
religión del hipócrita es artificial, no vital; actúa
desde el manantial externo del aplauso o la
ganancia, y si eso cae, su movimiento hacia el cielo
cesa.
[2] De la incredulidad. "Un corazón maligno de
incredulidad, en apartarse del Dios viviente".
Hebreos 3:12. "Ellos no creyeron en Dios". Salmo
78:22. "Se volvieron"; 5:41. Los pecadores tienen
pensamientos duros de Dios: creen que pueden orar
y escuchar; sin embargo, nunca seas mejor. Mal 3:14.
Cuestionan si Dios finalmente les dará el reino; luego
se vuelven atrás y tiran los colores de Cristo;
desconfían del amor de Dios y no es de extrañar que
abandonen su servicio. ¡La incredulidad es la raíz de
la apostasía!
[3] Los hombres dejan de perseguir el reino
celestial, debido a alguna lujuria secreta
alimentada en el alma, tal vez una lujuria lasciva
o codiciosa. Demas, por amor al mundo, abandonó
la verdadera religión. Uno de los propios apóstoles
de Cristo fue atrapado con un cebo de plata . La
codicia hará que los hombres traicionen una causa
piadosa y hagan naufragar la buena conciencia. Si
hay alguna lujuria inmortal en el alma , producirá el
fruto amargo del escándalo o la apostasía.

[4] Los hombres dejan de perseguir el reino de

los cielos por timidez. Si persisten en la religión,
pueden perder sus lugares de ganancia, tal vez sus
vidas. La razón, dice Aristóteles, por la que el
camaleón se vuelve de tantos colores es por miedo
excesivo. Cuando prevalece el miedo carnal, hace
que los hombres cambien de religión tan rápido
como el camaleón cambia de color. Cuando muchos
de los judíos, que eran grandes seguidores de Cristo,
vieron las espadas y las varas, lo abandonaron. Lo
que dijo Salomón sobre el perezoso es igualmente
cierto sobre el cobarde: dice: "¡Hay un león afuera!"
Proverbios 22:13. Ve peligros ante él; seguiría
camino del reino de los cielos, ¡pero hay un león en
el camino! Esto es lamentable. "Si alguno retrocede
(en griego, si abandona, como soldado, de sus
colores), mi alma no se complacerá en él". Hebreos
10:38.
Utilice 3. Para prueba. Examinemos si iremos a este
reino cuando muramos. El cielo se llama un "reino
preparado". Mateo 25:34.
¿Cómo sabremos que este reino está preparado para
nosotros?
Si estamos preparados para el reino.
¿Cómo se puede saber eso?
1. Siendo gente celestial. Un corazón terrenal no
vale más para el cielo, que un terrón de polvo para
ser una estrella; no hay nada de Cristo ni de la gracia
en un corazón así. Fue un milagro encontrar una
perla en un montón de cenizas; y es un gran milagro
encontrar a Cristo, la perla de precio, en un corazón
terrenal. ¿Iríamos al reino de los cielos? ¿Somos
celestiales?
(1) ¿Somos celestiales en nuestras contemplaciones
? ¿Nuestros pensamientos corren sobre este reino?
¿Nos subimos a veces al monte Pisga y tenemos una
perspectiva de gloria? Los pensamientos son como
viajeros: la mayoría de los pensamientos de David
viajaron por el camino del cielo. Salmo 139: 17.
¿Están nuestras mentes celestiales? "Camina
alrededor de Sion, cuenta sus torres, marca bien sus
baluartes", Salmo 68:12, 13. ¿Caminamos hacia el
monte celestial y vemos qué gloriosa situación es?
¿Contamos las torres de ese reino? Mientras que un
cristiano fija sus pensamientos en Dios y la gloria,
hace como si pisara los límites del reino celestial y se
asomara tras el velo. Como Moisés tuvo vista de
Canaán, aunque no entró en ella, así el cielo celestial

Christian tiene vista al cielo, aunque aún no ha entrado en él.

(2) ¿Somos celestiales en nuestros afectos ?
¿Ponemos nuestros afectos en el reino de los cielos?
Colosenses 3: 2. Si somos celestiales, despreciamos
todas las cosas de abajo, en comparación con el
reino de Dios; miramos el mundo como una hermosa
prisión ; y no podemos estar muy enamorados de
nuestras cadenas, aunque están hechas de oro.
Nuestros corazones están en el cielo. Un extraño
puede estar en una tierra extranjera para cobrar
deudas, pero desea estar en su propio reino y
nación: así que estamos aquí un tiempo como en una
tierra extraña, pero nuestro deseo es principalmente
después del reino de los cielos, donde seremos para
siempre. El mundo es el lugar de la morada de un
santo , no su deleite . ¿Es así con nosotros?
¿Deseamos, como los patriarcas de antaño, un país
mejor? Hebreos 11:16. Este es el temperamento de
un verdadero santo, sus afectos están puestos en el
reino de Dios: su ancla está echada en el cielo y es
llevado allí con las velas del deseo.
(3) ¿Somos celestiales en nuestro habla ? Cristo,
después de su resurrección, habló de las cosas que
pertenecen al reino de Dios. Hechos 1: 3. ¿Están sus
lenguas vueltas al idioma del Canaán celestial?
"Entonces los que temían al Señor, hablaban a
menudo entre sí". Mal 3:16. ¿En sus visitas sazona sus
discursos con el cielo? Hay muchos que dicen que
esperan ser salvos, pero nunca los oirás hablar del
reino de los cielos. Los oirá hablar de sus mercancías
y recreaciones, o de alguna compra rica que hayan
obtenido, pero nada del reino. ¿Pueden los hombres
viajar juntos en un viaje y no hablar una palabra del
lugar al que viajan? ¿Viajan al cielo y nunca dicen
una palabra del reino al que están viajando? Aquí
muchos descubren que no pertenecen al cielo,
porque nunca escucharás una buena palabra de
ellos.
Las palabras son el espejo de la mente, muestran
lo que es el corazón.
(4) ¿Somos celestiales en nuestro comercio? ¿Está
nuestro tráfico y mercadería en el cielo?
¿Negociamos en el reino celestial por fe? Un hombre
puede vivir en un lugar y comerciar en otro; puede
vivir en Irlanda y comerciar en las Indias
Occidentales; por eso comerciamos en el reino
celestial. Aquellos que no comercian en el cielo
mientras vivan, nunca irán al cielo cuando mueran.
¿Enviamos al cielo, andanadas de suspiros y
gemidos? ¿Enviamos allí el barco de oración , que
llega a cambio de misericordia? Es nuestro

comunión con el Padre y su Hijo Jesús? 1 Juan 1: 3. Filipenses

3:20.
(5) ¿Son nuestras vidas celestiales? ¿Vivimos
como si hubiéramos visto al Señor con ojos
corporales? ¿Emulamos e imitamos a los ángeles en
santidad? ¿Trabajamos para copiar la vida de Cristo
en la nuestra? 1 Juan 2: 6. Era una costumbre entre
los macedonios, en el día del nacimiento de
Alejandro , llevar su cuadro alrededor del cuello con
perlas y diamantes engastados. ¿Llevamos la imagen
de Cristo a nuestro alrededor y nos parecemos a él
en la celestialidad de nuestras vidas? Si somos así
celestiales, iremos al reino de los cielos cuando
muramos; y verdaderamente hay una gran razón
por la que debemos ser celestiales en nuestros
pensamientos, afectos y vidas, si consideramos que
el fin principal por el que Dios nos ha dado nuestras
almas es que podamos pensar en el reino de los
cielos.
Nuestras almas son de noble extracción, son
parecidas a los ángeles. Ahora bien, ¿es lógico
imaginar que Dios nos hubiera insuflado almas tan
nobles , sólo para cuidar los objetos sensuales? ¿Se
hicieron estrellas tan brillantes solo para caer a la
tierra? ¿Fueron estas almas inmortales hechas solo
para buscar consuelos moribundos? Si este hubiera
sido el único fin de nuestra creación, comer y beber
y conversar con los objetos terrenales, nos habrían
servido peores almas: las naturalezas animales
hubieran sido suficientemente buenas para
nosotros. ¿Qué necesitan nuestras almas para ser
racionales y divinas, para hacer ese trabajo solo que
puede hacer una bestia?
Gran razón por la que debemos ser celestiales en
nuestros pensamientos, afectos y vidas, si
consideramos lo que es un reino de los cielos
bendecido. Está más allá de toda hipérbole. Los
reinos terrenales apenas merecen los nombres de
cabañas, comparados con él. Leemos de un ángel
que descendió del cielo, que puso su pie derecho
sobre el mar y su pie izquierdo sobre la tierra.
Apocalipsis 10: 2. Si hubiéramos estado una vez en el
reino celestial y hubiéramos visto la gloria
superlativa de él, ¿cómo podríamos, con santo
desprecio, hollar con un pie en la tierra y con el otro
en el mar? Hay ríos de placer, puertas de perlas,
coronas centelleantes, vestiduras blancas; ¿Y no
debería esto hacer que nuestro corazón sea celestial?
Es un reino celestial, y sólo entran en él los que son
celestiales.
Utilice 4. Para exhortar a todos en general.
(1) Si existe un reino tan glorioso, crea esta gran verdad.

Debe grabarse en nuestros corazones como con la

punta de un diamante, que hay un reino bendito en
reversión. "En verdad, hay recompensa para el
justo". Salmo 58:11. No dudemos por incredulidad.
Dudar de los principios es la siguiente forma de
negarlos . La incredulidad, como Sansón, derribaría
los pilares de la religión verdadera. Sé confirmado
en esto, hay un reino de gloria por venir; quien
niega esto, corta en dos el artículo principal del
credo, "la vida eterna".
(2) Si se acerca un reino de gloria tan bendito,
estemos atentos para que no perdamos este reino
; tengamos miedo de perder el cielo al dispararnos.
Temblor en el cuerpo, es una enfermedad; en el
alma, una gracia. Este miedo no es un miedo a la
duda o la desconfianza, que desanima el alma,
porque tal miedo asusta a la piedad, corta los
nervios del esfuerzo; pero es un temor santo, no sea
que perdamos el reino de los cielos; es miedo a la
diligencia; nos anima en el uso de los medios y nos
hace avanzar, para que no dejemos de esperar. "Noé
se movió con miedo, preparó un arca". Hebreos 11:
7. El miedo es una alarma para despertar a los
cristianos somnolientos; protege contra la seguridad
carnal; es un acicate para un corazón inactivo. Quien
teme quedarse corto en su viaje, cabalga más rápido.
Y, de hecho, esta exhortación a temer que no
perdamos este reino es sumamente necesaria si
consideramos dos cosas:
[1] Hay muchos que han dado muchos pasos en
el camino al cielo y, sin embargo, no lo han
logrado. "No estás lejos del reino de Dios"; sin
embargo, no estaba lo suficientemente cerca. Marcos
12:34.
¿Cuántos pasos puede dar un hombre en el camino
hacia el reino de Dios y, sin embargo, perderlo?
Puede estar adornado con cortesía ; puede ser moral
y recto ; puede ser prudente, justo, moderado; puede
guardar todas las leyes del país; todo lo cual es
bueno, pero no lo suficiente para llevar a un hombre
al cielo.
Puede colgar la bandera de una gloriosa profesión y,
sin embargo, no alcanzar el reino. Los escribas y
fariseos llegaron lejos; se sentaron en la silla de
Moisés, fueron expositores de la ley; rezaban, daban
limosna, eran estrictos en la observancia del sábado;
si a alguien le hubiera clavado una espina en el pie,
no se la arrancaría el día de reposo por temor a
quebrantarlo. Eran tan devotos externamente en la
adoración de Dios, que los judíos pensaron que si
pero dos en todo el mundo fueron al cielo, uno sería
un escriba y el otro un fariseo. Pero el manto de su
profesión, no estaba revestido de sinceridad; lo
hicieron todo por el aplauso de los hombres y, por lo
tanto, se perdieron el cielo. "Si tu justicia no excede
la justicia de los escribas y fariseos, nunca entrarás
en el reino de los cielos". Mateo 5:20.
Un hombre puede frecuentar las ordenanzas de la
iglesia y, sin embargo, perder el reino. Es un buen
espectáculo ver a la gente acudir como palomas a las
ventanas de la casa de Dios; bueno es estar en el
camino por donde pasa Cristo; sin embargo, no se
ofenda, si yo digo, uno puede ser un oidor de la
palabra y no alcanzar la gloria. Herodes escuchó a
Juan el Bautista con alegría, pero lo decapitó
, en lugar de decapitar su pecado. Los oyentes del
profeta Ezequiel vinieron con tanto deleite a su
predicación, como lo haría uno con una pieza de
música hermosa. "Eres para ellos como una canción
muy hermosa de alguien que tiene una voz
agradable y sabe tocar bien un instrumento; porque
oyen tus palabras, pero no las hacen". Ezequiel
33:32. ¿Qué es escuchar el deber de uno y no
cumplirlo? Es como si un médico prescribiera un
buen remedio, pero el paciente no lo tomara.
Un hombre puede tener algún problema por el
pecado y llorar por él, y sin embargo perder el
reino celestial.
¿De dónde es esto?
Las lágrimas de un pecador son forzadas por los
juicios de Dios; como el agua que sale de una
destilería es forzada por el fuego. La angustia por el
pecado es pasajera, se acaba rápidamente de nuevo.
Como algunos que van al mar están mareados , pero
cuando llegan a tierra están bien de nuevo; de modo
que los hipócritas pueden estar
enfermos de sermones, pero este problema no dura,
el ataque de enfermedad pronto pasa. Un pecador
llora, pero sigue pecando; ¡Sus pecados no se ahogan
en sus lágrimas!
Un hombre puede tener buenos deseos y, sin
embargo, perder el reino. "Déjame morir con la
muerte de los justos". Entumecido 23:10.
¿En qué se quedan cortos estos deseos?
Son lentos . Un hombre tendría el cielo, pero no se esforzará.
Como

si alguien dijera que desea agua, pero no arrojará el

balde al pozo. "El deseo del perezoso lo mata, porque
sus manos se niegan a trabajar". Proverbios 21:25. El
pecador desea misericordia pero no gracia; desea a
Cristo como Salvador, pero no como el Santo; desea a
Cristo solo como un puente para llevarlo al cielo.
¡Deseos como estos pueden encontrarse entre los
condenados!
Un hombre puede abandonar sus pecados,
juramentos, borracheras, impurezas y, sin embargo ,
quedarse destituido del reino. Puede que abandone
los pecados graves y, sin embargo, no se muestre
reacio a los pecados del corazón, como el orgullo, la
incredulidad y los primeros levantamientos de la
malicia y la lujuria. ¡Aunque embalsa el arroyo , deja
en paz la fuente! Aunque corta y poda las ramas , no
golpea la raíz de ellas. Aunque deja el pecado por
temor al infierno o porque le trae vergüenza y
pobreza , todavía ama el pecado; como si una
serpiente se quitara la piel y, sin embargo, retuviera
su veneno. "Ellos pusieron su corazón en su
iniquidad". Oseas 4: 8. No es más que un abandono
parcial del pecado; aunque deja un pecado, vive en
otro. Herodes se reformó mucho. "Hizo muchas
cosas"; pero vivió en incesto. Marcos 6:20. Algunos
dejan la borrachera y viven en la codicia; se
abstienen de jurar y viven en calumnias. No es más
que una reforma parcial, por lo que se pierden del
reino de gloria. Así ves, hay algunos que han dado
muchos pasos en el camino al cielo y, sin embargo,
se han quedado cortos. Algunos han llegado tan lejos
en la profesión, que han estado seguros de que su
estado ha sido bueno y que deberían ir al reino de
los cielos, y sin embargo, lo han perdido. "Una vez
que el dueño de la casa se haya levantado y haya
cerrado la puerta, y empieces a pararte afuera ya
llamar, diciendo: Señor, Señor, ábrenos". Lucas
13:25. ¡Cuán confiados estaban estos de la salvación!
No suplicaron, sino que llamaron, como si no
dudaran de que los dejaran entrar al cielo; sin
embargo, a estos Cristo les dice: "Nunca os conocí;
apartaos de mí todos los hacedores de iniquidad".
Por tanto, teman y tiemblen, para que nadie pierda
este reino de los cielos.
[2] Este temor es necesario, si consideramos la
pérdida que es perder el reino celestial. ¡Todas las
lágrimas del infierno no son suficientes para lamentar
la pérdida del cielo! Aquellos que pierden el reino
celestial, pierden la dulce presencia de Dios, las
vistas deslumbrantes y las sonrisas de su rostro
glorioso. ¡La presencia de Dios es el diamante en el
anillo de gloria! "En tu presencia hay plenitud de
gozo". Salmo 16:11. Si Dios es la fuente de toda dicha,
entonces, ser

separado de él, es la fuente de toda miseria.

Aquellos que pierden el reino celestial, pierden la
sociedad de los ángeles; y, ¿qué música más dulce
que escucharlos alabar a Dios en concierto? Pierden
todo su tesoro, sus túnicas blancas, sus coronas
relucientes; pierden sus esperanzas. "Cuya
esperanza será cortada". Job 8:14. Su esperanza no es
un ancla, sino una telaraña. Si la esperanza diferida
enferma el corazón, ¿qué es la esperanza
decepcionada? Proverbios 13:12. Pierden el
propósito de su ser. ¿Por qué fueron creados, sino
para ser entronizados en gloria? Ahora bien, perder
esto es perder el fin de su ser, ¡como si un ángel se
convirtiera en un gusano! Hay muchos agravios por
la pérdida de este reino celestial.
Los ojos de los impíos serán abiertos para ver su
pérdida; ahora no les importa perder el favor de
Dios, porque no conocen el valor de ello. Un hombre
que pierde un diamante rico y lo toma por una
piedra ordinaria, no se preocupa mucho por
perderlo; pero cuando se da cuenta de la joya que
perdió, se lamenta. Aquel cuyo corazón nunca se
rompería al ver sus pecados, se rompe al ver su
pérdida. Cuando la esposa de Finees oyó que el arca
se había perdido, gritó: "La gloria se ha ido". 1 Sam
4:21. Cuando el pecador vea lo que ha perdido, que
ha perdido la visión beatífica, ha perdido el reino de
los cielos; gritará con horror y desesperación: "¡La
gloria, la gloria eterna, se ha ido!"
2. Una segunda agravación de la pérdida de este
reino será que los pecadores serán reprendidos
por su propia conciencia. Este es el gusano que
nunca muere, una mente que se acusa a sí misma .
Marcos 9:44. Cuando los pecadores consideren que
estaban en buen camino hacia el reino; que tenían la
posibilidad de salvación; que aunque la puerta del
cielo era estrecha , estaba abierta; que tenían los
medios de la gracia; que el jubileo del evangelio fue
proclamado en sus oídos; que Dios llamó pero se
negaron; que Jesucristo les ofreció un yeso de su
propia sangre para sanarlos , pero ellos lo
pisotearon; que el Espíritu Santo estaba a la puerta
de su corazón, llamándoles y clamando que
recibieran a Cristo y al cielo; pero ellos rechazaron
al Espíritu y enviaron esta paloma; y que ahora, a
causa de su propia locura y necia obstinación, han
perdido el reino de los cielos; una conciencia que se
acusa a sí mismo será terrible, será como un gusano
venenoso que roe el corazón.

3. Una tercera agravación de la pérdida del cielo

será mirar a otros que han ganado el reino. "Allí
será el llanto y el crujir de dientes, cuando vean a
Abraham, a Isaac, a Jacob ya todos los profetas en el
reino de Dios, pero ustedes mismos serán
expulsados". Lucas 13:28. La felicidad de los
piadosos en el cielo será una monstruosidad para los
condenados en el infierno. Cuando los impíos vean a
aquellos a quienes odiaron y despreciaron, exaltados
a un reino y resplandeciendo con mantos de gloria, y
ellos mismos extrañen el reino, será una daga en el
corazón y les hará rechinar los dientes por envidia.
4. Una cuarta agravación es que esta pérdida del
reino de los cielos va acompañada del castigo del
sentido. El que salta por debajo de la orilla, cae al
río; los que están destituidos del cielo, caen en el río
de fuego y azufre. "¡Los impíos serán trasladados al
infierno!" Salmo 9:17. ¡Qué espantoso es eso! Si tener
una chispa de la ira de Dios sobre la conciencia es
tan torturante aquí en la tierra, ¿qué será tener
montañas de la ira de Dios arrojadas sobre el alma?
"¿Quién conoce el poder de tu ira?" Salmo 90:11. El
ángel nunca derramó su frasco, pero siguió algo de
dolor. Apocalipsis 16: 3. Cuando se derraman las
amargas copas de la ira de Dios, sigue la
condenación. Dives grita: "Estoy atormentado en
esta llama". Lucas 16:24. En el infierno no hay una
gota de piedad. No se utilizó aceite ni incienso en el
sacrificio de los celos. Entumecido 5:15. En el
infierno no hay aceite de misericordia para aliviar
los sufrimientos de los condenados, ni incienso de
oración para aplacar la ira de Dios.
5. Una quinta agravación de la pérdida de este
reino será considerar en qué términos fáciles y
razonables los hombres podrían haber tenido
este reino. Si en verdad Dios hubiera ordenado
imposibilidades, haber satisfecho la justicia divina
en sus propias personas, habría sido otro asunto.
Pero lo que Dios sí demandaba era razonable y era
para su bien, que era aceptar a Cristo como su Señor
y Esposo, y separarse de lo que los arruinaría. Éstos
eran los términos justos en los que podrían haber
disfrutado del reino celestial. Ahora, perder el cielo,
lo que podría haberse obtenido en términos tan
fáciles , será una gran agravación. Desgarrará el
corazón de un pecador con rabia y dolor pensar con
qué facilidad podría haber evitado la pérdida del
reino celestial.

6. Será una agravación de la pérdida del cielo

para los pecadores pensar cuán activos fueron en
hacer lo que les hizo perder el reino. ¡Qué
esfuerzo se tomaron para resistir al Espíritu y
sofocar la conciencia! Pecaron hasta quedarse sin
aliento. "Se cansan de cometer iniquidad". Jer 9: 5.
¡Qué dificultades atravesaron los hombres! ¡Cuánto
aguantaron por sus pecados! ¡Cuánta vergüenza y
cuánta pena! ¡Qué enfermo estaba el borracho de
sus tazas! ¡Cuán dolorido estaba el adúltero! ¡Qué
marcas de pecado llevaba consigo! ¡En qué peligros
se aventuran los hombres por sus pasiones! ¡Se
aventuran en la ira de Dios! ¡Oh, cómo agravará esto
la pérdida del cielo! ¡Cómo hará que los hombres se
maldigan a sí mismos al pensar en lo que les ha
costado perder la felicidad! ¡Cómo dolerá la
conciencia de los hombres pensar que si se hubieran
esforzado tanto por el cielo como por el
infierno, no lo hubieran perdido!
7. Será una agravación de la pérdida de este
reino, que será irreparable: el cielo, una vez
perdido, nunca podrá recuperarse. Las pérdidas
mundanas se pueden recuperar. Si un hombre
pierde su salud, puede hacer que se la repare; si es
expulsado de su reino, puede ser restaurado a él
nuevamente como lo fue el rey Nabucodonosor, "Mi
honor volvió a mí, y fui establecido en mi reino".
Dan 4:36. Pero aquellos que una vez pierden el cielo,
nunca podrán volver a él. Después de millones de
años, están tan lejos de obtener la gloria como al
principio. Así ves cuán necesaria es esta exhortación,
para que temamos que no lleguemos a este reino de
los cielos.
¿Qué haremos para que no perdamos este reino
de gloria? Presta atención a aquellas cosas que te
harán extrañar el cielo.
(1) Presta atención a la PEREZA espiritual .
Muchos cristianos están asentados sobre sus lías; son
reacios a esforzarse demasiado. Se dice de Israel:
"Despreciaron la tierra agradable". Salmo 106: 24.
Canaán era un paraíso de delicias, una especie de
cielo; sí, pero algunos de los judíos pensaron que les
costaría una gran cantidad de problemas y riesgos
conseguirlo, y preferirían prescindir de él. "Ellos
despreciaron la tierra agradable". He leído de
algunos españoles que viven donde hay una gran
cantidad de pescado, pero son tan perezosos que no
se tomarán la molestia de pescarlos , sino que
compran a sus vecinos. Tal pereza pecaminosa es en
la mayor parte, que aunque el reino de los cielos se
ofrece a ellos, sin embargo, no van a ponerse a

cualquier trabajo por ello. Tienen algunos deseos y

anhelos débiles. "¡Ojalá tuviera este reino!" Son
como un hombre que desea carne de venado, pero
no la busca. "El alma del perezoso desea y no tiene
nada". Proverbios 13: 4. Los hombres se contentarían
con tener el reino de los cielos si cayera como un
higo maduro en sus bocas, pero son reacios a luchar
por él. ¡Cuidado con la pereza espiritual! Dios nunca
hizo que el cielo fuera una colmena de drones. No
podemos tener el mundo sin trabajo, y ¿pensamos
tener el reino de los cielos? Los paganos se
levantarán en juicio contra muchos cristianos. Qué
dolores se tomaron en sus carreras olímpicas
cuando corrieron sino por una corona de olivo o
mirto entremezclada con oro; y ¿nos quedamos
quietos cuando corremos por un reino? "La pereza
arroja a un sueño profundo". Proverbios 19:15. La
pereza es el sueño del alma. Adam perdió la costilla
cuando dormía. Muchos hombres pierden el reino
de los cielos cuando están en este profundo sueño de
pereza.
(2) Presta atención a la INCREDULIDAD. La
incredulidad mantuvo a Israel fuera de Canaán.
"Vemos, pues, que no pudieron entrar a causa de su
incredulidad". Hebreos 3:19. Y mantiene a muchos
fuera del cielo. La incredulidad es un enemigo de la
salvación, es un pecado condenatorio; susurra así:
"¿Para qué sirve todo este dolor para el reino
celestial? Me sentí igualmente bien". "Y ellos
dijeron: No hay esperanza". Jer 18:12. La
incredulidad destruye la esperanza; y si se corta este
tendón, un cristiano va muy mal en religión, si es
que lo hace. La incredulidad suscita pensamientos
celosos de Dios; lo representa como un juez severo;
desanima a muchas almas y las quita del deber.
Cuidado con la incredulidad. Cree en las promesas.
"El Señor es bueno para el alma que lo busca".
Búscalo con sinceridad y te abrirá el corazón y el
cielo. Lam 3:25. [Dios no falla a los que lo desean.]
Haz lo que puedas y Dios te ayudará. Mientras
extiendes las velas de tu esfuerzo, el Espíritu de Dios
soplará sobre estas velas y te llevará rápidamente al
reino de la gloria.
(3) Si no quiere perderse el reino celestial, tenga
cuidado de imaginar que el camino es más fácil
de lo que es ; como si fuera un suspiro, o "Señor, ten
piedad". No se puede ir al cielo de un salto; no se
puede saltar del regazo de Dalila al seno de
Abraham. El pecador está "muerto en delitos".
Efesios 2: 1. ¿Es fácil para un muerto volver a la
vida? ¿Es fácil la regeneración? ¿No hay dolores en
el nuevo nacimiento? ¿No llama la Escritura al
cristianismo una guerra y una carrera ? Y tu

imagina tan fácil? El camino al reino no es fácil, pero

un error en el camino es fácil.
(4) Si no quiere perderse el reino celestial, tenga
cuidado con las demoras y la PROCRASTINACIÓN.
[La demora trae peligro.] Es un engaño habitual: "Me
ocuparé del reino de los cielos, pero todavía no;
cuando haya adquirido una propiedad y haya
envejecido, cuidaré del cielo". Pero de repente, la
muerte sorprende a los hombres y no llegan al cielo.
La demora fortalece el pecado, endurece el corazón
y le da al diablo una posesión más plena de un
hombre. Tengan cuidado de aplazar y posponer la
búsqueda del reino de los cielos hasta que sea
demasiado tarde. César, aplazando la lectura de una
carta puesta en su mano, fue asesinado en el Senado.
Considere lo corta que es su vida; es una vela que
pronto se apaga. [La vida de todos los que viven está
huyendo .] No demores un día más el negocio de la
salvación; a veces la muerte golpea y no da ninguna
advertencia.
(5) Si no quieres llegar al reino de los cielos,
presta atención al PREJUICIO. Muchos tienen
prejuicios sobre la religión, y sobre esta roca se
desploman el alma. Tienen prejuicios sobre la
persona de Cristo , sus verdades , sus seguidores , sus
caminos .
1. Tienen prejuicios en la PERSONA de Cristo. "Y
se sintieron ofendidos con él". Mateo 13:57. ¿Qué hay
en Cristo para que los hombres se ofendan de él? Él
es la "perla de gran precio". Mateo 13:46. ¿Se
ofenden los hombres con las perlas y los diamantes?
Cristo es la maravilla de la belleza. "Más justo que
los hijos de los hombres". Salmo 45: 2. ¿Hay algo en
la belleza que pueda ofender? Él es el espejo de la
misericordia. Hebreos 2:17. ¿Por qué la misericordia
debería ofender a alguien? El es un Redentor. ¿Por
qué debe ofenderse un esclavo cautivo con el que
viene con una suma de dinero para rescatarlo? El
prejuicio que los hombres tienen de Cristo proviene de
la depravación innata de sus corazones. El ojo
dolorido no puede soportar la luz del sol: la culpa no
es del sol, sino del ojo dolorido. Hay dos cosas en
Cristo contra las cuales los hombres tienen
prejuicios:
[1] Su BAJIDAD. Los judíos esperaban un monarca
para su Mesías; pero Cristo no vino con pompa y
esplendor exteriores. Su reino no era de este mundo.
Las estrellas que están asentadas en los orbes más
brillantes son las menos vistas. No se veía mucho a
Cristo, que es la brillante estrella de la mañana ; su

la divinidad estaba escondida en la linterna oscura

de su humanidad, todos los que vieron al hombre no
vieron al Mesías. Los judíos tropezaron por la bajeza
de su persona.
[2] Los hombres tienen prejuicios por la
ESTRICTUD de Cristo. Lo consideran austero y sus
leyes demasiado severas. "Rompamos sus ataduras y
echemos de nosotros sus cuerdas". Salmo 2: 3.
Aunque para un santo, las leyes de Cristo no son más
gravosas que las alas de un pájaro, sin embargo,
para los impíos sus leyes son un yugo; y no aman ser
reprimidos, por eso odian a Cristo. Aunque fingen
amarlo como a un Salvador, lo odian porque es el
Santo.
2. Están predispuestos por las VERDADES de Cristo.
[1] Abnegación. Un hombre debe negar su justicia.
Filipenses 3: 9. Él injertará la esperanza de salvación
sobre el fondo de su propia justicia.
[2] Debe negar su injusticia. La Escritura no sella
ninguna patente del pecado; nos enseña a negar toda
"impiedad y lujuria mundana". Tito 2:12. Debemos
divorciarnos de aquellos pecados que traen placeres
y ganancias.
[3] Perdón de lesiones. Marcos 11:25. Estas verdades
sobre las que los hombres tienen prejuicios;
prefieren carecer del perdón de Dios que perdonar a
otros.
3. Tienen prejuicios con los SEGUIDORES de Cristo.
[1] Su escasez. En comparación, son pocos los que
abrazan a Cristo; pero ¿por qué debería ofender
esto? Los hombres no se ofenden con las perlas y las
piedras preciosas, porque son pocas.
[2] Su pobreza. Muchos que visten la librea de Cristo
son humildes en el mundo; pero ¿por qué debería
ofender esto? Cristo tiene cosas mejores que estas
para otorgar a sus seguidores; como la santa unción,
la piedra blanca, el maná escondido y la corona de
gloria. Todos los seguidores de Cristo no son
humillados por la pobreza. Abraham era rico en oro
y plata, además de rico en fe. Aunque no muchos
nobles son llamados, algunos nobles sí lo son.
"Muchos de ellos creyeron, incluidos algunos de los
prominentes griegos
tanto las mujeres como los hombres ". Hechos 17:12.
Constantino y Teodosio eran emperadores piadosos.
De modo que este escollo se quita.
[3] Sus escándalos. Algunos seguidores de Cristo,
bajo una máscara de piedad, cometen pecado, lo que
engendra un prejuicio contra la religión; pero,
¿Cristo o su evangelio enseñan algo así? Las reglas
que él prescribe son santas. ¿Por qué se debe pensar
peor del amo, porque algunos de sus sirvientes
resultan malos?
4. Tienen prejuicios en los CAMINOS de Cristo.
Los exponen a sufrimientos. "Que tome su cruz y
sígame". Mateo 16:24. Muchos tropiezan en la cruz.
Hay, como dice Tertuliano, "cristianos de seda", que
aman su comodidad; seguirán a Cristo al monte
Tabor, para verlo transfigurado, pero no al Gólgota,
para sufrir con él. ¡Pero Ay! ¿Qué es la aflicción
comparada con la gloria que sigue? El peso de la
gloria aligera la aflicción. ¡Oh, ten cuidado con el
prejuicio, que ha sido piedra de tropiezo en el
camino de los hombres al cielo y los ha destituido
del reino!
(6) Si no quiere perderse el reino de los cielos,
preste atención a la PRESUNCIÓN. La mayoría de
los hombres presumen que todo va bien con sus
almas y toman como un principio que no se puede
discutir : irán al cielo cuando mueran. El diablo les
ha dado opio para arrojarlos a un profundo sueño de
seguridad carnal. El pecador presuntuoso es como el
leviatán, hecho "sin miedo"; vive tan mal como el
peor, pero espera ser salvo tanto como el mejor; se
bendice a sí mismo y dice que tendrá paz, aunque
sigue en pecado. Deuteronomio 29:19. Esto es lo
mismo que si un hombre bebiera veneno, pero sin
miedo, pero tendrá salud.
Pero, ¿de dónde surge esta presuntuosa esperanza?
Seguramente de una presunción de que Dios está
hecho de toda misericordia. Es cierto que Dios es
misericordioso, pero también es justo . "Mantener la
misericordia para miles, y eso de ninguna manera
aclarará a los culpables". Éxodo 34: 7. Si un rey
proclamaba que sólo aquellos que debían ser
perdonados, ¿quién entraba y se sometía, debía
alguno persistir en rebelión para reclamar el
beneficio del perdón? ¿Esperas misericordia de
quien no deponga las armas, sino que se rebela
contra el cielo? Nadie puede tocar el arca sino los
sacerdotes; nadie puede tocar esta arca de la
misericordia de Dios, sino el pueblo santo y
consagrado. La presunción es la

gran devorador de almas. Mil han perdido el cielo al

ponerse los amplios anteojos de la presunción.
(7) Si no quiere perderse el reino celestial, preste
atención a las delicias y placeres de la CARNE. Los
placeres suaves endurecen el corazón; muchas
personas no pueden soportar un pensamiento serio
, pero son para comedias y romances; juegan su
salvación. "Los hombres son capturados por placer,
como peces por el anzuelo". Cicerón. El placer es el
cebo azucarado que los hombres muerden , ¡pero
hay un anzuelo debajo! "Cantan con pandereta y
arpa. Se regocijan al son de la flauta". Job 21:12. "Qué
terrible será para ustedes que se recuestan en lechos
de marfil rodeados de lujo, comiendo carne de
tiernos corderos y terneros selectos. Cantan
canciones ociosas al son del arpa. Beben vino a
raudales, y se perfuman con fragancias exóticas ".
Amós 6: 4-6.
¡Los placeres del mundo alejan a muchos de los
placeres del paraíso! Beard habla de alguien que
tenía una habitación ricamente adornada con
hermosos cuadros, tenía la música más hermosa,
tenía las bellezas más raras, tenía todos los dulces y
golosinas para complacer sus sentidos con placer; y
juró que le gustaría vivir una semana en tal estado,
¡aunque seguro que sería condenado en el infierno
al día siguiente! Se observa que los perros de Sicilia,
mientras cazan entre las dulces flores, pierden el
olor del conejo; por eso, mientras muchos buscan los
dulces placeres del mundo, pierden el reino de los
cielos. "Es", dice Teofilacto, "una de las peores vistas:
ver a un pecador irse riendo al infierno".
(8) Si no quieres llegar al reino de los
cielos , presta atención
a la MENTALIDAD MUNDIAL. El espíritu codicioso
ahoga los santos afectos, como la tierra apaga el
fuego. El mundo impidió que el joven siguiera a
Cristo; se fue triste, lo que arrancó estas palabras de
nuestro Salvador: "¡Qué difícil es para los ricos
entrar en el Reino de Dios! Es más fácil que un
camello pase por el ojo de una aguja que un rico
entre el Reino de Dios! " Lucas 18: 24-25. "¡Las
riquezas del mundo son lazos del diablo!" Bernardo.
Las riquezas son lazos de oro. Si un hombre subiera
a una roca empinada y tuviera pesas atadas a sus
piernas, eso le dificultaría su ascenso. De la misma
manera, muchas pesas de oro nos impedirán trepar
por la escarpada roca que conduce al cielo. "Están
enredados en la tierra, el desierto los ha encerrado

en. "Éxodo 14: 3. Así se puede decir de muchos, están

enredados en asuntos terrenales, el mundo los ha
encerrado.
El mundo no es amigo de la gracia . Cuanto más
chupa el bebé , más débil es la madre. De la misma
manera, cuanto más apesta el mundo , más débil es
nuestra gracia.
"No amen al mundo ni nada en el mundo. Si alguno
ama al mundo, el amor del Padre no está en él". 1
Juan 2:15. Tenía un hombre el monopolio de todas
las riquezas del mundo; podría acumular riquezas a
las estrellas, pero su corazón no estaría lleno. La
codicia nunca se satisface. Joshua pudo detener el
curso del sol, pero no pudo detener a Acán en su
codiciosa búsqueda de la cuña de oro. Aquel cuyo
corazón está encerrado en su pecho , será excluido
del cielo. Algunos barcos que han escapado de las
rocas han naufragado en la arena. De la misma
manera, muchos que han escapado de pecados
graves , ¡han sido hundidos en las arenas doradas
del mundo!
(9) Si no quisieras llegar al reino de los cielos,
ten cuidado de no permitirte ningún PECADO.
Una piedra de molino se ahogará y más; un pecado
vivido condenará, así como más. Si reina alguno de
los pecados , te impedirá reinar en el reino de los
cielos. Especialmente manténgase alejado de los
pecados de su constitución natural; tu querido
pecado; "Me guardé de mi iniquidad", ese pecado
que mi corazón pronto me engañaría y adularía.
Salmo 18:23. Como en la colmena hay una abeja
maestra , así en el corazón hay un
pecado maestro. ¡Oh, ten cuidado con esto!
¿Cómo se puede conocer este querido pecado ?
1. Ese pecado por el cual un hombre no puede
soportar la flecha de una reprensión, es el pecado
del seno. Herodes no podía tolerar que se
entrometiera en su incesto, eso no fue un toque para
mí. Los hombres pueden contentarse con que se
declare contra otros pecados; pero si un ministro
pone su dedo sobre la llaga y toca ese pecado
especial , entonces sus ojos brillan con fuego, se
enfurecen y escupen el veneno de la malicia.
2. El pecado por el que el corazón de un hombre
corre más, y por el que se deja cautivar más
fácilmente , es la Dalila en el pecho. Un hombre
está abrumado por el desenfreno, otro por la
mundanalidad. Es algo triste para un hombre estar
tan hechizado por un pecado amado , que si le pide
que se separe

no solo la mitad del reino, sino todo el reino de los

cielos, ¡debe separarse de él para satisfacer esa
lujuria!
3. El pecado que más preocupa a un hombre y
que se le escapa en la cara en una hora de
enfermedad y angustia, es el pecado en el que se
ha permitido y es el pecado de su
complexión. Cuando los hermanos de José estaban
angustiados, recordaron su pecado al vender a su
hermano . "Somos verdaderamente culpables de
nuestro hermano", etc. Gen 42:21. Entonces, cuando
un hombre está en su lecho de enfermo, y la
conciencia dice: "Has sido culpable de tal pecado, el
pecado de calumnia o impureza", la conciencia lee al
hombre una triste conferencia y lo atemoriza más
por un pecado ; ese es el cutis-pecado.
4. El pecado del que un hombre está menos
inclinado a separarse, es el pecado querido. De
todos sus hijos, Jacob apenas pudo separarse de
Benjamín. "¿Te llevarás a Benjamín ?" Génesis 42:35.
Así dice el pecador, este y aquel pecado me ha
dejado, pero ¿ debe irse Benjamín también? ¿Debo
separarme de este delicioso pecado? ¡Eso va al
corazón!
Al igual que con un castillo que tiene varios fuertes a
su alrededor, el primero y el segundo fuertes están
cedidos, cuando se trata del castillo principal, el
gobernador preferirá luchar y morir antes que
cederlo. Así, un hombre puede permitir que muchos
de sus pecados sean demolidos; pero cuando se trata
de uno, que es como tomar un castillo, nunca cederá
ante él; seguramente ese es el pecado maestro.
Presta especial atención a este pecado; la fuerza del
pecado reside en el pecado amado , que, como un
cáncer que golpea el corazón, trae la muerte.
He leído acerca de un monarca que, perseguido por
el enemigo, tiró la corona de oro que tenía en la
cabeza para poder correr más rápido. De la misma
manera, el pecado que llevaste como corona de oro
debe ser desechado, para que puedas correr más
rápido hacia el reino de los cielos. ¡Oh, si no
quisieras perder la gloria, mortifica el pecado
amado! Ponlo, como Urías, al frente de la batalla
para ser asesinado. Por arrancado de este derecho
ocular se verá el mejor ir al cielo!
(10) Si no quieres llegar al reino de los
cielos, presta atención a la PASIÓN desmesurada.
Muchos barcos se han perdido en la tormenta; y
muchas almas se han perdido en una tormenta de
pasiones rebeldes. Cada

miembro del cuerpo está infectado con el pecado,

como cada rama del ajenjo es amarga; pero "la
lengua está llena de veneno mortal". Santiago 3: 8. A
algunos no les importa lo que digan en su pasión;
censurarán, calumniarán y desearán el mal a los
demás. ¿Cómo puede estar Cristo en el
corazón, cuando el diablo se ha apoderado de la
lengua? La pasión perturba la razón, es una locura
temporal . Jonás en una pasión vuela contra Dios.
"Hago bien en enojarme hasta la muerte". Jon 4: 9.
¡Qué! estar enojado con Dios y justificarlo? "Hago
bien en estar enojado"; el hombre no estaba bien de
su juicio. Pasión inadecuada para la oración. "Quiero
que los hombres de todas partes levanten manos
santas en oración, sin enojo ni disputas". 1 Timoteo
2: 8. El que ora con ira puede levantar sus manos en
oración, pero no levanta manos santas . El agua,
cuando está caliente, pronto hierve; por eso, cuando
el corazón se calienta de ira, pronto hierve en
discursos ardientes y apasionados. Algunos
maldicen a otros en su pasión. ¡Que aquellos a
quienes se les prende la lengua, tengan cuidado de
que ni un día en el infierno deseen una gota de agua
para enfriarlos! Oh, si no te pierdes el reino celestial
, ten cuidado de no ceder a las pasiones
desenfrenadas. Algunos dicen, "las palabras no son
más que viento"; pero son un viento que puede
llevarlos al infierno.
(11) Si no se queda corto en el reino celestial,
cuídese de complacer demasiado el apetito
sensual. "No hagáis provisión para la carne".
Romanos 13:14. La palabra griega, hacer provisión ,
significa ser abastecedores de la carne . "Cuyo dios es
su vientre". Filipenses 3:19. La garganta es un lugar
resbaladizo. Judas recibió al diablo en el bocado; ya
menudo el diablo se desliza hacia abajo en el licor. El
exceso de comida y bebida nubla la mente, sofoca los
santos afectos y provoca la lujuria. Muchos hombres
cavan su propia tumba con los dientes. El pagano
Séneca podría decir: "Soy grande y he nacido para
cosas más grandes que ser esclavo de mi cuerpo".
Nació mejor que para ser esclavo de su cuerpo.
Mimar el cuerpo y descuidar el alma es alimentar al
esclavo y matar de hambre a la esposa. Tome una
proporción de alimento que pueda reclutar a la
naturaleza, pero no la sobrepase. El exceso en las
cosas lícitas ha perdido a muchos el reino de los
cielos. Una abeja puede chupar un poco de miel de la
hoja, pero si la pone en un barril de miel, ¡se
ahogará! Chupar moderadamente de la criatura, Dios
permite; pero el exceso envuelve a los hombres en la
perdición.
(12) Si no quieres llegar al reino de los cielos, toma
presta atención a la injusticia en tus tratos. Defraudar
radica en dos cosas:
1. Mezclar productos básicos, como si alguien
debiera mezclar trigo malo con trigo bueno y
venderlo por trigo puro, que es defraudar. "Tu vino
mezclado con agua". Isaías 1:22.
2. Dando escasa medida. "Haciendo pequeño el efa".
Amós 8: 5. El efa era una medida que los judíos
usaban para vender: reducían el efa; no dieron
medida completa. Ojalá este no fuera el pecado de
muchos. "Es un comerciante, la balanza del engaño
está en su mano". Os 12: 7. ¿Pueden ser
santos los que no son justos ? "¿Los contaré puros
con la balanza inicua?" Miqueas 6:11. ¿Es sincero su
corazón ? ¿ Quién tiene pesos falsos? Muchos no
pueden alcanzar el cielo, porque de su
sobre-alcance.
(13) Si no quiere perderse el reino de los
cielos, tenga cuidado con las malas compañías.
Hay un comercio necesario con los hombres en la
compra y venta, o, como dice el apóstol, debemos
salir del mundo, pero no elijamos voluntariamente la
compañía de los malvados. 1 Cor 5:10. "Te he escrito
que no te hagas compañía". 1 Corintios 5:11. No se
incorpore a la sociedad de los malvados ni se
familiarice demasiado con ellos. Los malvados
odian a Dios. "¿Deberías amar a los que odian al
Señor?" 2 Crónicas 19: 2. Un cristiano está obligado,
en virtud de su juramento de lealtad a Dios en el
bautismo, a no tener una conversación íntima con
aquellos que son enemigos jurados de Dios. ¿Qué
compañía pueden tener las palomas de Cristo
entre las aves de rapiña? ¿Qué compañía pueden
tener las vírgenes entre rameras? La compañía de
los impíos es muy contaminante, es como ir entre los
que tienen la plaga.
"Se mezclaron con los paganos y adoptaron sus
malas costumbres". Salmo 106: 35. Si mezcla una
armadura brillante con oxidada, la armadura
brillante no iluminará a la oxidada, pero la
armadura oxidada estropeará la brillante. Al
mezclarse con los malvados, es probable que reciba
daño. Los malos antes corromperán a los buenos,
que los buenos convertirán a los malos. El faraón le
enseñó a José a jurar, pero José no le enseñó a orar
al faraón. Hay un extraño poder de atracción en las
malas compañías para corromper y envenenar las
mejores disposiciones; humedecen los buenos
afectos. Lanza una bola de fuego a la nieve y pronto
se apagará. Entre los malvados se pierde el ardor de
los afectos celosos. Al mantener una
correspondencia familiar con los malvados, ellos nos
disuadirán de la piedad estricta y nos privarán de
nuestra libertad y

Placer. "Se habla en contra de esta secta en todas partes".

Hechos 28:22.
Entonces él, que antes miraba hacia el cielo,
comienza a desanimarse y gradualmente se aleja de
la santidad. Se apodera de él una aversión por su
anterior curso de vida religiosa; piensa que fue
demasiado justo, más estricto de lo necesario. Se ha
inculcado en su corazón un secreto deleite del mal.
Empieza a gustarle el discurso tonto y difamatorio;
puede oír hablar en contra de la religión verdadera,
y guardar silencio, no, muy complacido; ama la
vanidad y se burla del pecado. Gradualmente se ha
metamorfoseado tanto y se ha hecho como la
compañía con la que conversa, que ahora empieza a
sentir repugnancia y odio por sus antiguas
costumbres sobrias. Está mal afectado por los
hombres piadosos, transformado en un Ismael
burlón, un demonio que respira; ¡y por fin se
convierte en el hijo del infierno tanto como
cualquiera de esa maldita tripulación sin gracia con
la que conversó! ¿Y cuál es el fin de todo? Una
mancha en el nombre, una polilla en la finca, un
gusano en la conciencia. ¡Oh, si no te pierdes el reino
de los cielos, ten cuidado con las malas compañías!
Las malas compañías son la perdición y el veneno de
la juventud de esta época. Aquellos que alguna vez
estuvieron sobriamente inclinados, al venir entre los
profanos, se vuelven familiares, hasta que por fin se
hacen compañía en el infierno.
(14) Si no quiere perderse el reino de los
cielos, tenga cuidado de parlamentar con la parte
carnal. La carne es traidora de senos. Cuando un
enemigo se mete dentro de los muros de un castillo,
corre un gran peligro de ser capturado. La carne es
un enemigo interior, es un mal amo. Dice: "¡Hay un
león en el camino!" Desalienta el rigor religioso; dice
como Pedro le dijo a Cristo: "Ahórrate a ti mismo";
dice como Judas, "¿Por qué todo este desperdicio?
¿Por qué tanto orar? ¿Por qué desperdicias tu fuerza
y tus fuerzas en piedad? ¿Por qué todo este
desperdicio?" La carne clama por comodidad y
placer. ¡Cuántos, consultando con la carne, han
perdido el reino de los cielos!
(15) Si no quieres llegar al cielo, presta atención
a las relaciones carnales. Nuestros amigos carnales
son a menudo barreras y obstáculos en nuestro
camino al cielo; dirán: "La piedad es precisión y
singularidad". Una esposa en el seno puede ser una
tentadora. La esposa de Job era así. "¿Aún conservas
tu integridad? ¡Maldice a Dios y muere!" Trabajo 2:
9. "¿Qué? ¿Todavía oras? ¿Qué obtienes sirviendo a
Dios? Job, ¿dónde están tus ganancias? ¿Qué puedes
demostrar que has tenido en el servicio de Dios, pero
llagas y úlceras? ¿Y aún conservas tu integridad?
Deshágase de la librea de Dios, ¡Renunciar a la
religión! " aquí
fue una tentación que le entregó su esposa. La mujer
estaba hecha de la costilla, el diablo convirtió esta
costilla en una flecha y le habría disparado a Job en el
corazón, ¡pero su fe apagó este dardo de fuego!
¡Cuidado con las relaciones carnales!
Leemos que algunos de los familiares de Cristo se
apoderaron de él y lo habrían estorbado cuando iba
a predicar. "Dijeron - ¡Está loco!" Marcos 3:21.
Nuestros parientes a veces se interponían en nuestro
camino al cielo y, a juzgar por toda la imprudencia
del celo, nos impedían ser salvos. Esas relaciones
carnales tenía Spira; por haberles consultado si
debía permanecer constante en su opinión ortodoxa,
lo persuadieron de que se retractara; y así,
abjurando de su antigua fe, cayó en el horror y el
abatimiento mental. Galeacius, marqués de Vice,
encontró en sus relaciones carnales un gran
obstáculo en su camino; ¡Y qué dificultad tuvo para
romper sus tentaciones! ¡Presta atención a una
trampa en tu seno! Es un dicho valiente de Jerónimo:
"Si mis padres me persuadieran de negar a Cristo, si
mi esposa me encantara con sus abrazos, lo
abandonaría todo y volaría a Cristo".
(16) Si no quieres llegar al reino de los cielos, ten
cuidado de no apartarte. Cuidado con la apostasía.
Pierde el premio, quien no aguanta en la carrera; el
que hace naufragar la fe, el que no puede llegar al
puerto de la gloria. Vivimos en la caída de la hoja;
los hombres caen de esa bondad que parecían tener;
algunos se convierten en error, otros en vicio;
algunos a beber y cortar en cubitos; el mismo manto
de su profesión se ha caído. Es terrible que los
hombres se desmoronen de un comienzo
esperanzador. "El apóstata", dice Tertuliano, "parece
poner a Dios y a Satanás en la balanza, y habiendo
sopesado ambos servicios, prefiere el servicio del
diablo y proclama que él es el mejor maestro; en
cuyo respecto se dice que puso a Cristo a vergüenza
abierta ". Hebreos 6: 6. Esto es triste por fin. Hebreos
10:38. Si no te pierdes la gloria, presta atención a la
apostasía. Aquellos que se apartan, deben quedar
cortos en el reino.

¿Qué SIGNIFICADOS debemos usar, que no nos quedemos

cortos en el

¿Reino de los cielos?

(1) Si no nos quedamos cortos de este
reino celestial , hagamos mucho en el ejercicio de
la AUTENEGACIÓN. "Si alguno quiere venir en pos
de mí, niéguese a sí mismo". Mateo 16:24. El que
quiera ir al cielo debe negar
la justicia propia. Debemos tener cuidado con
nuestra propia justicia. "Para que yo sea hallado en
él, no teniendo mi propia justicia". Filipenses 3: 9. La
araña teje una telaraña con sus propias entrañas. De
la misma manera, un hipócrita tejería una red de
salvación a partir de su propia justicia. Debemos
negar nuestra moralidad en el punto de la
justificación. La moralidad es un buen bastón para
caminar entre los hombres, ¡pero es una mala
escalera para subir al cielo! Debemos negar nuestras
cosas santas, en el punto de la justificación. ¡Pobre
de mí! ¡Cómo están nuestros deberes marcados con
el pecado! Pon oro en el fuego y sale la escoria. Así,
nuestros servicios más dorados se mezclan con
incredulidad. Niega la justicia propia; usa el
deber, pero confía en Cristo. La paloma de Noé usó
sus alas para volar, ¡pero confió en el arca por
seguridad! Deje que los deberes tengan su
diligencia, pero no su confianza. La abnegación es el
camino al reino. No se puede entrar al cielo sino a
través de esta puerta estrecha de la abnegación.
(2) El segundo medio para obtener el reino es
una CONSIDERACIÓN seria. La mayoría de los
hombres no llegan al cielo por falta de
consideración.
A menudo debemos considerar qué es un reino de
los cielos. Se llama reino preparado , lo que implica
algo que es raro y excelente. Mateo 25:34. Dios ha
preparado en su reino cosas tales como "ojo que no
vio ni oído oyó". 1 Cor 2: 9. El cielo está más allá de la
hipérbole. En particular, en este reino celestial hay
dos cosas: un palacio majestuoso y una fiesta real.
El palacio señorial es grande y espacioso . Sus
dimensiones son doce mil estadios, o, como sucede
en algunas copias griegas, doce veces doce mil
estadios, un número finito puesto por infinito;
ningún aritmético puede numerar estos estadios.
Apocalipsis 21:15. Aunque haya una innumerable
compañía de santos y ángeles en el cielo, hay un
espacio infinito para recibirlos. El palacio de este
reino es lúcido y transparente ; está adornado con
luz, y la luz es dulce. Infierno

es una mazmorra oscura , pero el palacio de arriba

está salpicado de luz. Col 1:12. Tales ilustres rayos de
gloria brillan de Dios, que derraman un resplandor y
esplendor sobre el cielo empíreo. Este palacio del
reino está bien situado para disfrutar del buen aire y
una perspectiva agradable. Allí está el mejor aire,
que está perfumado con la fragancia de los
ungüentos de Cristo; y una perspectiva muy
agradable de la brillante estrella de la mañana. El
palacio es rico y suntuoso . Tiene puertas de perla.
Apocalipsis 21:21. Está enriquecido con túnicas
blancas y coronas de gloria; nunca cae a la
descomposición, y sus habitantes nunca mueren.
"Reinarán por los siglos de los siglos". Apocalipsis 22:
5.
También hay una fiesta real . Se le llama "la cena de
las bodas del Cordero". Apocalipsis 19: 9. Bullinger y
Gregorio el Grande entendieron esto de la magnífica
cena preparada en el reino de los cielos. Será una
fiesta gloriosa en honor al fundador. Los santos
glorificados deleitarán sus ojos con la belleza de Dios
y sus corazones con su amor.
Una deliciosa fiesta será en el respeto de la
festividad y la alegría santa. ¡Qué gozo habrá en los
himnos y triunfos de los espíritus glorificados! Los
santos y los ángeles se mezclarán en una unión
inseparable de amor, y se abrazarán en un dulce
abrazo.
Será un banquete real, donde no hay exceso, porque
continuamente se sirve un plato nuevo.
La consideración seria de lo que es un reino de los
cielos sería un medio para acelerar nuestros
esfuerzos en la búsqueda de él. ¿Qué hace que los
hombres hagan viajes a las Indias, sino la
consideración del oro y las especias que allí se
encontrarán? Si contempláramos y contempláramos
la gloria del cielo, pronto haríamos un viaje y nunca
nos iríamos hasta que hubiéramos llegado al reino
celestial.
¡Cómo te molestará si pereces al pensar que te
quedaste corto del cielo por falta de un poco más de
dolor! El profeta Eliseo ordenó al rey de Israel que
golpeara el suelo seis veces, y él golpeó tres veces y
se detuvo. 2 Reyes 13:19. Perdió muchas victorias
por ello. De la misma manera, cuando un hombre
piensa así: "Hice algo en religión, pero no hice lo
suficiente; recé, pero fue con frialdad; no puse
carbones al incienso. Escuché la palabra, pero no
medité en Golpeé sólo tres veces, cuando debería
haber golpeado seis veces; si me hubiera esforzado
un poco más, hubiera sido feliz, ¡pero he perdido el
reino de los cielos por disparos cortos! La
consideración, cuán terrible será la idea de perder el
cielo por falta de un poco más de dolor, debería ser
un medio para estimular nuestros corazones
perezosos y hacernos más diligentes para obtener el
reino.
(3) El tercer medio para obtener este reino es
mantener la ORACIÓN diaria. "Me entrego a la
oración". Salmo 109: 4. La oración enciende los
afectos y engrasa las ruedas del esfuerzo. La oración
prevalece

con Dios, abre sus afectos y luego abre el cielo. Todos

los que han llegado al cielo, se han arrastrado allí de
rodillas. Los santos que ahora están en el cielo han
sido hombres de oración. Daniel oró tres veces al
día, Jacob luchó con Dios en oración y, como
príncipe, prevaleció. La oración debe ser ferviente,
de lo contrario es, como dice Lutero, un incensario de
oro sin fuego. Seguid a Dios con oraciones y lágrimas;
di como Jacob al ángel: "No te dejaré ir si no me
bendices". Génesis 32:26. Como dice Lutero, "La
oración conquista al Omnipotente". Elías con la
oración abrió el cielo; mediante la oración ardiente y
constante, se nos abre el cielo.
(4) Si quieres obtener el reino celestial , recibe
AMOR al cielo. El amor pone al hombre en el uso de
todos los medios para disfrutar de la cosa amada. El
que ama al mundo, ¡qué activo es! Romperá su
sueño y su paz por ello. El que ama el honor, ¡qué
peligros correrá! Nadará hacia el trono en sangre.
Jacob amaba a Raquel, ¡y qué no haría, aunque
estaba cumpliendo dos aprendizajes de siete años
para obtenerla! El amor lleva al hombre
agresivamente hacia el objeto amado. El amor como
las alas del pájaro, como las velas del barco, lleva al
cristiano a toda vela al cielo. El cielo es un lugar de
descanso y alegría, es el paraíso, ¿y no lo amarás?
¡Ama el cielo y no te lo puedes perder! El amor
atraviesa toda oposición; toma el cielo por asalto.
Aunque trabaja, nunca se cansa. Es como la vara de
mirto en la mano del viajero, que lo refresca y anima
en su viaje y evita que se canse.
(5) Si quieres obtener el reino de los
cielos, haz de la religión tu PRINCIPAL
PREOCUPACIÓN. Lo que un hombre considera
innecesario , no le importa mucho. Si alguna vez
queremos tener el cielo, debemos considerarlo como
nuestra principal preocupación; otras cosas tienen
que ver con nuestro sustento, esto concierne a
nuestra salvación. Hacemos de la religión nuestro
negocio cuando nos dedicamos por completo al
servicio de Dios. Salmo 139: 18. Contamos las
mejores horas que pasamos con Dios; le damos a
Dios la flor y nata de nuestro afecto, la flor de
nuestro tiempo y nuestras fuerzas; traficamos en el
cielo todos los días, somos comerciantes de la "perla
de gran precio". No obtendrá una herencia, a quien
no le importa su comercio; nunca llegará al cielo,
quien no haga de la religión su principal negocio.
(6) Si quieren obtener el reino de los cielos, ate
sus corazones a Dios con VOTOS sagrados.
Prometo al Señor que, por su gracia,

estarás más concentrado en el cielo que nunca. "Tus

votos están sobre mí, oh Dios". Salmo 56:12. Un voto
obliga al devoto al deber; se considera a sí mismo
como obligado por su voto a adherirse a Dios.
Cuando las abejas vuelan con un gran viento, se
lastran con pequeñas piedras para que no se las
lleve. De la misma manera, debemos fortalecernos
con votos firmes, para que no seamos alejados de
Dios con el viento violento de la tentación. Sin duda,
un cristiano puede hacer tal voto, porque el
fundamento del mismo es moralmente bueno, no
promete nada más que lo que está obligado a hacer
en virtud de su voto bautismal, es decir, caminar con
Dios más de cerca y buscar el cielo. más
vigorosamente.
(7) Si quieres obtener el reino, acepta todas las
ESTACIONES y oportunidades para el bienestar
de tu alma. "Redimiendo el tiempo". Efesios 5:16. La
oportunidad es la flor y nata del tiempo; mejorar los
tiempos de gracia vale tanto como nuestra salvación.
El marinero, tomando la temporada actual mientras
sopla el viento, llega al puerto. De la misma manera,
tomando la temporada, mientras tengamos los
medios de la gracia y el viento del Espíritu
sople, podemos llegar al reino de los cielos. No
sabemos cuánto tiempo disfrutaremos del evangelio.
Las temporadas de gracia, como la paloma de Noé,
vienen con una rama de olivo en la boca, pero
pronto toman alas y vuelan. Aunque son dulces, sin
embargo, son rápidos. Dios puede quitarnos el
candelero de oro, como lo hizo con las iglesias de
Asia. Tenemos muchos síntomas tristes, "Las canas
están aquí y allá sobre él". Oseas 7: 9. Por tanto,
echemos mano de las estaciones actuales. Los que
duermen en la siembra, mendigarán en la cosecha.
(8) Si quiere ir al reino de los cielos, debe vigilar
diariamente. "Yo digo a todos, velad". Marcos 13:37.
Muchos han perdido el cielo por falta de vigilancia.
Nuestros corazones están listos para atraernos al
pecado, y el diablo está emboscado por sus
tentaciones. Todos los días debemos poner un espía
y mantener el centinela en nuestras almas. "Me
mantendré alerta". Hab 2: 1.

1. Debemos cuidar nuestros ojos . "Hice un pacto

con mis ojos". Job 31: 1. Mucho pecado entra por el
ojo. Cuando Eva vio que el árbol era bueno para
comer y agradable a la vista , tomó. Génesis 3: 6.
Primero miró, y luego codició. El ojo, al contemplar
un objeto impuro, enciende el corazón. El diablo a
menudo se mete sigilosamente por la ventana del
ojo. Reloj

¡tus ojos!
2. Cuide su oído . Mucho veneno se transmite a
través del oído. Deje que su oído esté abierto a Dios y
cerrado al pecado.
3. Cuiden sus corazones . Observamos a personas
sospechosas. "El corazón humano es sumamente
engañoso y desesperadamente perverso". Jer 17: 9.
Cuida tu corazón:
[1] Cuando se trata de cosas santas, se deslizará
hacia la vanidad. "Cuando estoy en oración", dice
Jerome, "o estoy caminando por las galerías o
revisando cuentas".
[2] Cuiden su corazón cuando estén en compañía. El
basilisco envenena las hierbas que respira. De la
misma manera, el aliento de los malvados es
contagioso. No, vigilen sus corazones cuando estén
en buena compañía. Los que tienen algo de bueno en
ellos pueden ser algunos granos demasiado livianos
y tener mucha ligereza en el discurso; de manera
que, si no hay escoria se reduce hasta aún puede
haber demasiada espuma . El diablo es sutil y puede
meterse en la paloma tan bien como lo hizo una vez
en la serpiente . Satanás tentó a Cristo por medio de
un apóstol.
[3] Cuiden sus corazones en la prosperidad. Ahora
estás en peligro de orgullo. Cuanto más sube el agua
de los Temas, más alto se eleva el barco. Del mismo
modo, cuanto más se elevan las propiedades de los
hombres, más se enorgullecen sus corazones. En la
prosperidad, corre el peligro no sólo de olvidar a
Dios, sino de levantar el talón contra él. "Jeshurun
engordó y pateó". Deuteronomio 32:15. Es difícil
llevar una taza llena sin derramar. De la misma
manera, es difícil tener una herencia plena y
próspera sin pecar. "Las riquezas blandas han
arruinado la época con un lujo vergonzoso". Séneca.
¡Cuando Sansón se durmió en el regazo de Dalila,
tantos se han quedado tan profundamente dormidos
en el regazo de la prosperidad que nunca
despertaron hasta que despertaron en el infierno!
[4] Cuiden sus corazones después de los deberes
santos. Cuando Cristo había estado orando y
ayunando, el diablo lo tentó. Mateo 4: 3. Después de
combatir con Satanás en oración, podemos sentirnos
seguros y quitarnos nuestra armadura espiritual , ¡y
luego el diablo cae y nos hiere! Oh, si llegaran al
cielo, estén siempre sobre su torre de vigilancia,
establezcan un espía, mantengan un centinela
cercano en sus almas. ¿Quién no miraría, cuando se
trata de un reino?

(9) Si quieres llegar al reino celestial , obtén

estas tres GRACIAS , que sin duda te llevarán allí.
[1] CONOCIMIENTO Divino. No se puede ir al cielo
con los ojos vendados. En la creación , la luz fue lo
primero que se hizo. Así es en la nueva creación . El
conocimiento es la columna de fuego que va delante
de nosotros y nos ilumina hacia el reino celestial. Es
la luz la que debe llevarnos a la "herencia en luz".
Col 1:12.
[2] FE. La fe termina en la salvación. "Recibiendo el
fin de tu fe, la salvación". 1 Pedro 1: 9. El que
verdaderamente cree, está tan seguro de ir al cielo
como si ya estuviera en el cielo. Hechos 16:31. La fe
toca a Cristo; ¿Y puede faltar del cielo quien toca a
Cristo? La fe une a Cristo; ¿No estarán los miembros
donde está la cabeza? No todos tienen el mismo
grado de fe; debemos distinguir entre fe y seguridad;
sin embargo, la menor semilla y chispa de fe otorga
un título indudable al reino celestial. Estoy
justificado porque creo, no porque sé que creo.
[3] AMOR a Dios. El cielo está preparado para los
que aman a Dios. 1 Cor 2: 9. El amor es el alma de la
obediencia, la piedra de toque de la sinceridad; por
nuestro Dios amoroso, podemos saber que él nos
ama. 1 Juan 4:19. Y a los que Dios ama, los acostará
en su seno. Ambrosio, en su oración fúnebre por
Teodosio, trae a los ángeles que revolotean
alrededor de su alma que se va, y están listos para
llevarla al cielo, quienes le preguntan: "¿Cuál era esa
gracia que más había practicado en la tierra?"
Teodosio respondió: "He amado, he amado", y de
inmediato, por un convoy de ángeles, fue trasladado
a la gloria. El amor es un fuego sagrado que se
enciende en el pecho; en las llamas de las cuales el
alma devota asciende al cielo.
(10) Si queremos obtener este reino celestial,
trabajemos por la SINCERIDAD. "El que ande en
integridad, será salvo". Proverbios 28:18. El cristiano
sincero puede no alcanzar algunos grados de
gracia, pero nunca se queda corto en el reino. Dios
pasará por muchas faltas, donde el corazón está
bien. "No ha visto iniquidad en Jacob, ni ha visto
perversidad en Israel" Num 23:21. El verdadero oro
puede tener granos de aleación. "Deseas la verdad
en lo interno". Salmo 51: 6. La sinceridad es la salsa
que sazona todas nuestras acciones y las hace
sabrosas para Dios. La sinceridad es un ingrediente
de toda gracia; se llama "fe sincera" y

"amor con sinceridad". 2 Tim. 1: 5; Efesios 6:24. La

moneda no correrá, que carece del sello del rey; y la
gracia no es actual, si no está marcada con
sinceridad. Los deberes gloriosos amargados por la
hipocresía son rechazados; cuando se aceptan
grandes debilidades endulzadas con sinceridad. Si
algo en el mundo nos llevará al cielo, es la
sinceridad. La sinceridad significa sencillez de
corazón. "En cuyo espíritu no hay engaño", Salmo 32:
2. Cuanto más sencillo es el diamante, más rico.
La sinceridad es cuando servimos a Dios con nuestro
corazón; cuando no lo adoramos sólo a él , sino que
lo amamos . Caín trajo su sacrificio, pero no su
corazón . El deleite de Dios es un sacrificio llameante
sobre el altar del corazón. Un cristiano sincero,
aunque tiene un doble principio en él, carne y
espíritu, no tiene doble corazón, su corazón es para
Dios.
La sinceridad es cuando apuntamos puramente a
Dios en todo lo que hacemos. La gloria de Dios vale
más que la salvación de las almas de todos los
hombres. Aunque un cristiano sincero no cumple
con sus deberes, tiene un objetivo correcto. Así como
el girasol gira según el movimiento del sol, las
acciones de un hombre piadoso se mueven todas
hacia la gloria de Dios.
(11) Si queremos obtener el reino celestial ,
mantengamos el fervor en el deber. ¿Qué es una
forma muerta sin poder? "Porque eres tibio, y no
frío ni caliente, te vomitaré de mi boca." Apocalipsis
3:16. El fervor pone la vida en un deber. "Ferviente
de espíritu, sirviendo a Dios"; en griego es
"hirviendo". Romanos 12:11. Cristo oró "con más
fervor". Lucas 22:44. Cuando el fuego del censor de
oro estuvo listo para apagarse, Aarón debía poner
más carbones al incienso. Así mismo, orar con
devoción es poner más brasas al incienso. No es
formalidad -pero fervor , que nos llevará al cielo. El
formalista es como Efraín, una torta sin voltear,
caliente por un lado y masa cruda por el otro. En la
parte externa de la adoración a Dios, parece estar
acalorado; pero en cuanto a la parte espiritual de la
adoración a Dios, es frío. Oh! si quieres tener el reino
de los cielos, mantén el corazón y el fervor en el
deber. Elías fue llevado al cielo en un carro de fuego.
De la misma manera, si quieres ir al cielo, debes ser
llevado allí en el carro de fuego del celo. Es la
violencia la que se apodera del reino de los cielos.
(12) Si queremos llegar al reino celestial , alimentemos

los movimientos del Espíritu de Dios en nuestros

corazones. El marinero puede desplegar sus
velas, pero el barco no puede llegar al puerto sin un
fuerte viento . De la misma manera, podemos
desplegar las velas de nuestro esfuerzo, pero no
podemos llegar al puerto de la gloria sin el viento del
norte y del sur del Espíritu de Dios. Por tanto, cuánto
nos interesa dar mucha importancia a las mociones
del Espíritu: mociones para oración, mociones para
arrepentimiento. "Tan pronto como escuches el
sonido de una marcha en las copas de los árboles de
bálsamo, muévete rápido, porque eso significará que
el Señor ha salido frente a ti". 2 Samuel 5:24. Así que,
cuando escuchamos una voz dentro de nosotros, una
inspiración secreta que nos impulsa a cumplir
deberes piadosos, debemos animarnos. Mientras el
Espíritu obra en nosotros, debemos trabajar con el
Espíritu.
Muchos hombres tienen el Espíritu de Dios luchando
con ellos, él pone buenos movimientos en sus
corazones y santos propósitos; pero descuidan la
persecución de estos buenos movimientos, y el
Espíritu se entristece y, entristecido, retira su ayuda,
y habiendo desaparecido esa ayuda, no se puede
llegar al cielo. Oh! haga mucho del movimiento del
Espíritu; es tanto como vale tu salvación.
El Espíritu de Dios se compara con el fuego . Hechos
2: 3. Si tenemos cuidado de soplar la chispa, es
posible que tengamos fuego para inflamar nuestros
afectos e iluminar nuestros pies hacia el camino del
cielo. Si apagamos el Espíritu al descuidar y resistir
sus movimientos, nos aislamos de la salvación. El
Espíritu de Dios tiene poder de atracción. Cánticos 1:
4. El Espíritu bendito atrae por atracción, como
piedra de carga al hierro. En la predicación de la
Palabra, el Espíritu lleva el corazón al cielo en santos
anhelos y exclamaciones. Ahora bien, cuando el
Espíritu nos ha de arrastrar así, cuidemos de
retroceder, no sea que sea para perdición. Hebreos
10:39. Haz como Noé, quien cuando la paloma llegó
volando al arca, extendió su mano y la metió en el
arca; así que cuando la dulce paloma del Espíritu de
Dios venga volando a vuestros corazones y traiga un
impulso de gracia como una rama de olivo de paz en
su boca, lleva esta paloma al arca; tengáis el Espíritu
en vuestros corazones, y él os llevará al cielo.
¿Cómo distinguiremos los movimientos del Espíritu de un
engaño?
Los movimientos del Espíritu siempre están de
acuerdo con la Palabra. Si la Palabra es para
santidad, también lo es el Espíritu. El Espíritu no
persuade a nada más que a lo que el

La palabra dirige. De cualquier manera que corra la

marea de la Palabra, de esa manera sopla el viento
del Espíritu .
(13) Obtenemos el reino de los cielos mediante la
OBEDIENCIA uniforme y alegre. La obediencia es
el camino por el que viajamos al cielo. Muchos dicen
que aman a Dios, pero se niegan a obedecerle . ¿Ama
al príncipe, que desprecia sus órdenes?
1. La obediencia debe ser uniforme . "Entonces no
me avergonzaré" (heb. No me sonrojaré) "cuando
haya respetado todos tus mandamientos". Salmo
119: 6. Así como el sol atraviesa todos los signos del
zodíaco, nosotros debemos atravesar todos los
deberes de la piedad. Si un hombre tiene que
recorrer cien millas, y noventa y nueve, y allí se
detiene, no llega al lugar al que debe viajar. Si, con
Herodes, hacemos muchas cosas que Dios
manda, sin embargo, si morimos en el total descuido
de cualquier deber, estaremos destituidos del reino
de los cielos. Por ejemplo, si un hombre parece
tomar conciencia de los deberes de la primera mesa
y no de los deberes de la segunda; si parece ser
religioso, pero no es justo, es un transgresor y está
en peligro de perder el cielo. Como la aguja que
señala el camino que dibuja la piedra de carga , así
un corazón obediente se mueve en cualquier
dirección que dibuje la Palabra.
2. La obediencia debe ser alegre . "Me deleito en
hacer tu voluntad, oh Dios mío, sí, tu ley está dentro
de mi corazón". Salmo 40: 8. Esa es la obediencia más
dulce que es alegre, ya que es la miel más dulce que
gotea libremente del panal. Dios a veces acepta la
voluntad sin el trabajo, pero nunca el trabajo sin la
voluntad. "El viento estaba en sus alas". Zacarías 5: 9.
Las alas son veloces, pero el viento en las alas denota
una gran rapidez; y es un emblema de la rapidez y la
alegría que debe haber en la obediencia. Vamos al
cielo por el camino de la obediencia.
(14) Si queremos obtener este reino, debemos
estar mucho en la COMUNIÓN de los santos. Un
carbón de enebro calentará e inflamará a otro; así,
cuando el corazón está muerto y congelado, la
comunión de los santos ayudará a calentarlo. "Los
que temían al Señor se hablaban a menudo unos a
otros". Mal 3:16. "Los cristianos nunca deberían
reunirse", dice el Sr. Boston, "sin hablar de su
reunión en el cielo". Un cristiano puede ser de gran
ayuda mediante la oración y la conferencia con otro,
y darle una
levante hacia el cielo. El viejo Latimer se fortaleció y
consoló mucho al escuchar la confesión de fe de
Bilney. Leemos que cuando las manos de Moisés
estaban pesadas y estaba listo para dejarlas caer,
Aarón y Hur las levantaron. Éxodo 17:12. Un
cristiano que está dispuesto a desmayarse bajo la
tentación y deja caer las manos de su fe, al conversar
con otros cristianos, se fortalece y levanta las manos.
Un gran beneficio de la santa conferencia es el
consejo y el consejo. "Si un hombre", dice
Crisóstomo, "que tiene una sola cabeza para
aconsejarle, pudiera convertir esa cabeza en cien,
sería muy sabio; pero un solo cristiano tiene este
beneficio por la comunión de los santos, que son
como tales". muchas cabezas para aconsejarle qué
hacer en tal caso o exigencia ". Por medio de una
conferencia cristiana, los santos pueden decir: "¿No
ardía nuestro corazón dentro de nosotros?" La
comunión de los santos la tenemos en nuestro credo
, pero es muy poca en nuestra práctica . Los hombres
suelen viajar más rápido en compañía . De la misma
manera, viajamos más rápido al cielo en la
comunión de los santos.
(15) Si queremos alcanzar este reino de los
cielos, estemos dispuestos a llegar a los términos
de Cristo. Muchos se rebajarán y ofrecerán algo por
el reino de los cielos. Algunos evitarán el pecado
grave y vendrán a la iglesia y dirán sus oraciones; y
sin embargo, todo esto mientras no estén dispuestos
a alcanzar el precio de Dios, es decir, no resistirán el
ídolo de la justicia propia , volando solo hacia Cristo
como los cuernos del altar. Otros no sacrificarán su
pecado de pecho. Otros no le rendirán
culto espiritual a Dios , sirviéndole con celo e
intensidad de alma. Juan 4:24. Otros no perdonarán
a sus enemigos. Otros no se desprenderán de sus
ganancias carnales para Cristo. Muchos querrían el
reino de los cielos, pero no alcanzarán el precio. Si
quieres tener este reino, no regatees ni regatees con
Cristo, sino acepta sus términos. Di: "Señor, estoy
dispuesto a tener el reino de los cielos, cueste lo que
cueste; estoy dispuesto a sacarme el ojo derecho, a
separarme de todo por el reino. Aquí tienes un papel
en blanco que puse en tu mano, Señor , escribe tus
propios artículos, ¡me suscribiré a ellos! "
(16) Si queremos obtener el reino celestial ,
prestemos atención a las santas ORDENANZAS ,
por las cuales Dios lleva las almas al cielo. "A menos
que estos permanezcan en el barco, no puedes ser
salvo". Hechos 27:31. Algunas personas saltaban del
barco de las ordenanzas, y entonces Dios sabe dónde
saltan; pero si no permanece en el barco de las
ordenanzas, no puede ser salvo.

Especialmente, si quieres ir al cielo, presta atención

a la Palabra predicada . Fue por el oído, por nuestros
primeros padres escuchando a la serpiente, que
perdimos el paraíso; y es por el oído, por escuchar la
Palabra, que llegamos al cielo. "Oye, y tu alma
vivirá". Isaías 55: 3. Dios a veces, en la predicación
de la Palabra, pone el aceite santo en el oído , ¡que
ablanda y santifica el corazón! La Palabra predicada
se llama el "ministerio del Espíritu", porque el
Espíritu de Dios utiliza el motor para convertir las
almas. 2 Corintios 3: 8.
Si la Palabra predicada no obra en los hombres,
nada lo hará; no juicio, ni milagros; no, aunque uno
se levante de entre los muertos. "¡Si no escuchan a
Moisés ya los profetas, no escucharán incluso si
alguien se levanta de entre los muertos!" Lucas
16:31. Si un santo glorificado saliera del cielo,
asumiera un cuerpo y les hablara de toda la gloria
del cielo y las alegrías de los bienaventurados, y
tratara de persuadirlos para que crean; si la
predicación de la Palabra no te lleva al cielo,
tampoco lo hará su retórica, que resucitó de entre
los muertos.
En el cielo no habrá necesidad de ordenanzas, pero
mientras vivamos aquí las hay. La lámpara necesita
aceite, pero la estrella no lo necesita. Mientras los
santos tienen su lámpara de gracia encendida aquí,
necesitan que el aceite de las ordenanzas caiga
continuamente sobre ellos; ¡Pero no habrá necesidad
de este aceite cuando sean estrellas en el cielo! Si
quieres llegar al cielo, pronto oirás, porque la fe
viene por el oír. Romanos 10:14, 17. Pedro soltó la
red de su ministerio y de un solo tiro capturó tres
mil almas. Si quieres que se te abra la puerta del
cielo, espera en los postes de la puerta de la
sabiduría.
(17) Si quieres llegar al cielo, ten este reino
siempre en tus ojos. Nuestro bendito Señor miró el
gozo que se le ofreció; y Moisés tenía un "ojo puesto
en la recompensa de la recompensa". Hebreos 11:26.
Deje que el reino esté mucho en sus pensamientos.
La meditación es el medio para ayudarnos a llegar
al cielo. ¿Cómo ayuda?
Meditar en el reino de los cielos sería un medio
para prevenir el pecado. No hay espada como la
meditación, para cortar los tendones de la tentación.
Es casi imposible pecar con presunción, con
pensamientos vivos y esperanzas del cielo. Fue
cuando Moisés se perdió de vista

que Israel puso un becerro y lo adoró. De la misma

manera, cuando el reino de los cielos está fuera de la
vista, fuera de los pensamientos de los hombres,
ellos establecen sus deseos y los idolatran. La
meditación del cielo destierra el pecado; el que
piensa en el peso de la gloria, desecha el peso del
pecado.
Meditar en el reino de los cielos excitaría y
avivaría la obediencia. Debemos pensar que nunca
podremos orar lo suficiente, nunca amar lo
suficiente a Dios , ¡quien ha preparado tal reino para
nosotros! La gloria posee un estímulo
inconmensurable. Pablo tenía el cielo en sus ojos,
una vez fue atrapado allí; ¡Y cuán activo estaba para
Dios! 1 Corintios 16:10. Esto engrasa las ruedas de la
obediencia.
Meditar en el reino de los cielos nos haría luchar
por la santidad , porque nadie más que estos son
santos, son admitidos en este reino. Solo los de
limpio corazón verán a Dios. Mateo 5: 8. La santidad
es el lenguaje del cielo, es la única moneda que
pasará corriente allí. Esta consideración debe
hacernos "limpiarnos de toda inmundicia de carne y
espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de
Dios". 2 Corintios 7: 1.
(18) El último medio para obtener el
reino celestial es la PERSEVERANCIA en la
santidad. "Sé fiel hasta la muerte, y te daré la
corona de la vida". Apocalipsis 2:10. "No es el
principio, sino el final lo que gana elogios". Jerome.
"El que ha resistido hasta el fin, será salvo". Mateo
10: 2.
¿Existe la perseverancia hasta que lleguemos al
cielo? Que alguien se mantenga firme en el reino de
los cielos, es una maravilla, si se considera:
(1) Qué gran masa de pecado y corrupción se
mezcla con la gracia. La gracia tiende a ser
sofocada, como el carbón se ahoga con sus propias
cenizas. Como una chispa en el mar, es una
maravilla que la gracia no se apague. Es una
maravilla que el pecado no cubra a la gracia, como
la niñera a veces hace con el niño, que muera.
(2) La implacable malicia de Satanás. Envidia que
tengamos el reino de los cielos, cuando él mismo sea
expulsado. Le duele el corazón, ver un pedazo de
polvo y barro convertido en una estrella brillante en
gloria, y él mismo un demonio de las tinieblas.
Trabajará con todos los poderes del infierno, para

¡Echanos fuera del reino! Satanás escupe su veneno,

dispara sus dardos de fuego, levanta una tormenta
de persecución; sí, y prevalece contra algunos.
"Apareció un gran dragón rojo, y su cola arrastró la
tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó a la
tierra". Apocalipsis 12: 3, 4. Por el dragón rojo se
entiende el imperio pagano; ahora, cuando su cola
arrojó tantos a la tierra, es una maravilla que alguna
de las estrellas se mantenga fija en su orbe.
(3) Los halagos de las riquezas. El joven del
evangelio llegó muy lejos, pero tenía muchas
posesiones, y estos pesos de oro lo impidieron salir
del reino. Lucas 18:23. Jonatán prosiguió la batalla
hasta que llegó al panal de miel , y luego se detuvo. 1
Sam 14:27. Muchos andan ansiosos por el cielo hasta
que prueban la dulzura del mundo; pero cuando
llegan al panal , se detienen y no avanzan. "¡La
ganancia de dinero es la ruina del alma!" Aquellos
que han escapado de las rocas de los pecados graves,
han sido arrojados a las arenas doradas. ¡Qué
maravilla, pues, que alguien se aferre hasta que
llegue al reino!
(4) Es una maravilla que alguien se mantenga en
gracia y no se canse en su marcha hacia el cielo, si
se considera la dificultad de la obra del cristiano.
No tiene tiempo que perder. ¡O está mirando o
peleando! Es más, debe cumplir con los deberes que
a los ojos del sentido y la razón parecen
inconsistentes. Mientras cumple un deber, parece
cruzarse con otro. Debe acercarse a Dios con santa
valentía en oración, pero debe servirlo con temor.
Debe llorar por el pecado, pero regocijarse. Debe
estar contento, pero codiciar los mayores dones (1
Corintios 12:31). Debe condenar las impiedades de
los hombres y, sin embargo, reverenciar su
autoridad. ¡Qué trabajo tan difícil es este! ¡Es una
maravilla que algún santo llegue al reino celestial!
A esto debo agregar, los malos ejemplos que nos
rodean, que son tan atractivos, que podemos decir
que los demonios han venido entre nosotros en
semejanza de hombres. ¡Qué maravilla es que un
alma persevere hasta que llega al reino de los cielos!
Pero por grande que sea la maravilla, existe la
perseverancia. La perseverancia de un santo se basa
en tres pilares inmutables:
1. La perseverancia de un santo se basa en el amor
eterno de Dios . Somos inconstantes en nuestro
amor por Dios; pero no lo está en su amor por
nosotros. "¡Te he amado con amor eterno!" Jer 31: 3.
El amor de Dios por los elegidos no es

como el amor de un rey por su favorito, que cuando

está en la marea primaveral más alta, más pronto
decae; pero el amor de Dios es eterno. Puede que nos
abandone por un tiempo, pero nunca nos
desheredará . Puede convertir su amor en un ceño
fruncido , pero nunca en odio . Puede alterar su
providencia , pero nunca su decreto . Una vez que la
luz del sol del amor que elige de Dios se eleva sobre
el alma, ¡ nunca se pone finalmente!
2. La perseverancia de un santo se basa en el pacto
de gracia . Es un pacto firme e inexpugnable; como
lees en las palabras del dulce cantor de Israel. "Dios
ha hecho conmigo un pacto eterno, ordenado en
todas las cosas y seguro". 2 Samuel 23: 5. Es un dulce
pacto, que Dios será nuestro Dios. Esta es la médula
y la quintaesencia de toda bendición. El pacto de
gracia es un pacto seguro , que pondrá su temor en
nuestro corazón y nunca nos apartaremos de él. Jer
32:40. Este pacto es inviolable , no se puede romper.
De hecho, el pecado puede romper la paz del
pacto, pero no puede romper el vínculo del pacto.
3. El tercer pilar sobre el que se construye la
perseverancia es la unión mística con Cristo . Los
creyentes se incorporan a Cristo, están unidos a él
como miembros a la cabeza, por el nervio y el
ligamento de la fe, para que no puedan romperse.
Efesios 5:23. Lo que una vez se dijo del cuerpo
natural de Cristo es igualmente cierto de su cuerpo
místico. "Ningún hueso suyo se romperá". Juan 19:36.
Así como es imposible cortar la levadura y la masa
una vez mezcladas, también es imposible estar
separados cuando Cristo y los creyentes están unidos
una vez, por el poder de la muerte o del infierno.
¿Cómo puede Cristo perder algún miembro de su
cuerpo y ser perfecto? Ves sobre qué fuertes pilares
se construye la perseverancia de los santos.
¿Cómo aguanta un cristiano hasta que llega al
reino? ¿Cómo persevera?
(1) Con la ayuda del Espíritu. Dios lleva al
cristiano a la perseverancia mediante la energía y la
obra vigorosa de su Espíritu. El Espíritu mantiene la
esencia y la semilla de la gracia; sopla las chispas de
la gracia en una llama santa. "El Espíritu es el
Vicario de Cristo". Tertuliano. Él es suplente y
apoderado de Cristo; él está trabajando todos los días
en el corazón de un creyente, ejerciendo la gracia en
ejercicio y madurando en perseverancia. El Espíritu
talla y pule los vasos de misericordia y los hace aptos
para la gloria.

(2) Cristo causa perseverancia y continúa siendo

un santo hasta que llega al reino celestial , por su
intercesión. Es tanto un abogado como un fiador ;
ora para que los santos lleguen sanos y salvos al
reino. "Por tanto, puede salvarlos hasta lo último (es
decir, perfectamente), viendo que vive siempre para
interceder por ellos". Hebreos 7:25. Aquella oración
que hizo por Pedro en la tierra, la ora ahora en el
cielo por los santos, para que no falte la fe de ellos y
para que estén con él donde está. Lucas 22:32. Juan
17:24. Y seguramente si él ora para que puedan estar
con él en su reino, no pueden perecer en el camino.
La oración de Cristo es eficaz. Si las oraciones de los
santos tienen tanta fuerza y prevalencia en ellos,
como Jacob, quien tenía poder ante Dios, y como
príncipe prevaleció, y Elías por medio de la oración
abrió el cielo; si las oraciones de los santos tienen
tanto poder para Dios, ¿qué tiene la oración de
Cristo? ¿Cómo pueden abortar los hijos de tales
oraciones? ¿Cómo pueden quedarse cortos del reino
si lo tienen orando por ellos, que no es solo un
sacerdote, sino un Hijo? Además, por lo que ora ,
tiene poder para dar porque es Dios.
Pero me parece que escucho a algunos cristianos
decir, si tan sólo la perseverancia logra el reino,
temen no llegar allí; temen desmayarse en el
camino, y las piernas débiles de su gracia no los
llevarán jamás al reino de los cielos.
Si realmente se mantuviera firme en sus propias
fuerzas, podría caer. La rama se seca y muere, que
no tiene raíz sobre la que crecer. Crece sobre la raíz
de Cristo, quien diariamente enviará una influencia
vital para fortalecerlo; aunque seas imbécil y débil
en gracia, no temas no quedarte sin el cielo: porque,
(1) Dios ha hecho una promesa a los creyentes
débiles. ¿Qué es una caña cascada , sino un
emblema de una fe débil? Sin embargo, se le ha
hecho una promesa: "La caña cascada no quebrará".
Mateo 12:20. Dios ha prometido proporcionar al
cristiano débil tanta gracia como necesite, hasta que
venga al cielo. Además de los dos peniques que dejó
el buen samaritano para pagar la curación del pobre
herido, prometió su palabra por todo lo que
necesitaba además. Lucas 10:35. Entonces, Cristo no
solo da un poco de gracia en la mano, sino su vínculo
por más, que dará tanta gracia como un santo
debería necesitar hasta que venga al cielo. "El Señor
dará gracia y gloria ", es decir, una nueva provisión
de gracia, hasta que seamos perfeccionados en

gloria. Salmo 84:11.

(2) Dios se preocupa más por sus santos débiles,
quienes temen que nunca resistirán hasta que
lleguen al reino. ¿No es la madre quien más atiende
al niño débil? "Recogerá los corderos con su brazo y
los llevará en su seno". Isaías 40:11. Si piensas que
eres tan débil que nunca resistirás hasta que llegues
al cielo, serás llevado en los brazos del
Todopoderoso. Recoge los corderos en sus brazos.
Cristo, el León de la tribu de Judá, marcha delante de
su pueblo, y su poder los sostiene , para que ninguno
de ellos se desmaye o muera en su marcha hacia el
cielo.
¿Cuáles son los ANIMOS para que los cristianos
aguanten hasta que lleguen al reino de los cielos?
(1) Es un gran mérito para el cristiano retener la
verdad hasta que venga al cielo. Cuando la gracia
florece en perseverancia, y con la iglesia de Tiatira,
nuestras últimas obras son más que las primeras, es
insigne honouris , una estrella de honor. Apocalipsis
2: 1. Es cuestión de renombre ver las canas brillar
con virtudes doradas . La excelencia de una cosa
radica en su acabado . ¿Dónde está la excelencia de
un edificio? No cuando se coloca la primera piedra
, sino cuando está terminada. Así que la belleza y
excelencia de un cristiano es, cuando ha terminado
su fe, habiendo hecho su trabajo y ha aterrizado
sano y salvo en el cielo.
(2) Ustedes que han progresado en religión, no
tienen muchas millas por recorrer antes de llegar
al reino de los cielos. "Ahora nuestra salvación está
más cerca que cuando creímos". Romanos 13:11. Tú,
que tienes canas, tu árbol verde se ha convertido en
almendro; estás cerca del cielo, es sólo ir un poco
más allá y pondrás tus pies dentro de las puertas del
cielo. Oh! por tanto, anímate ahora a resistir, tu
salvación está más cerca que cuando empezaste a
creer. Nuestra diligencia debería ser mayor cuando
nuestra salvación esté más cerca. Cuando un
hombre está casi al final de la carrera, ¿se cansará y
se desmayará? ¿No pondrá todas sus fuerzas y
esforzará cada miembro para poder agarrar el
premio? Nuestra salvación está ahora más cerca; el
reino está como a la vista; ¡Cómo debemos desplegar
ahora todas nuestras fuerzas para asirnos de la
guirnalda de gloria! El doctor Taylor, al ir a su
martirio, dijo: "Yo

tengo sólo dos escalones para pasar, y estaré en la

casa de mi Padre. "Aunque el camino al cielo es
cuesta arriba, debes subir la empinada roca de la
mortificación; y aunque hay espinas en el
camino, has ido la mayor parte de ella, y están a
pocos días de la marcha del reino, ¿y no
perseverarán? Cristiano, anímese, pelee la buena
batalla de la fe, busque la santidad. En poco tiempo
se quitará la armadura y acabará todas tus fatigas
marchas, y recibirás una corona victoriosa; tu
salvación está más cerca, estás a poca distancia del
reino, por lo tanto ahora persevera, estás listo para
comenzar y tomar tu premio de gloria.
(3) La bendita promesa adjunta a la
perseverancia es un estímulo. La promesa es una
corona de vida. Apocalipsis 2:10. La muerte es un
gusano que se alimenta de las coronas de los
príncipes, pero he aquí una corona viviente y una
corona que nunca se desvanece . 1 Pedro 5: 4. "Al que
venciere y guarde mis obras hasta el fin, le daré la
estrella de la mañana". Apocalipsis 2:28. La
estrella de la mañana es más brillante que el resto.
Esta estrella de la mañana se refiere a Cristo; como si
Cristo hubiera dicho, le daré al que persevera algo
de mi belleza; Pondré sobre él algunos de mis
ilustres rayos; él tendrá el próximo grado de gloria
para mí, ya que la estrella de la mañana está junto al
sol. ¿No animará esto y nos hará aguantar?
Tendremos un reino, y lo que es mejor que un reino,
¡una brillante estrella matutina!
¿Cuáles son los MEDIOS que conducen a la
perseverancia, o qué haremos para mantenernos
firmes en el reino?
(1) Adopte la religión sobre una buena base, no
en un ajuste o humor, o fuera de diseño mundano;
pero sé deliberado, pon las cosas bien en la balanza.
"¿Para quién de ustedes, que desea construir una
torre, no se sienta primero y calcula el costo para ver
si tiene suficiente para completarla?" Lucas 14:28.
Piensen en lo que les debe costar la religión; debe
costarle la separación de sus pecados; y puede
costarles la despedida de sus vidas. Considere si un
reino no compensará sus sufrimientos. Pese bien las
cosas y luego haga su elección. "He elegido el camino
de la verdad". Salmo 119: 30. ¿Por qué muchos
apostatan y se apartan, sino porque nunca se sientan
y calculan el costo?
(2) Si nos aferramos al reino, apreciemos el

gracia de la FE. "Por la fe estás en pie". 2 Cor 1:24.

La fe, como el club de Hércules, vence a toda
oposición que se le presente. La fe es una gracia
conquistadora.
¿Cómo llega la fe a ser tan fuerte?
La fe lleva la fuerza de Cristo al alma. Filipenses
4:13. Un capitán puede darle armadura a su soldado
, pero no fuerza. La fe participa de la fuerza de
Cristo y obtiene fuerza de la promesa; así como el
niño se fortalece al chupar el pecho, así la fe se
fortalece al chupar el pecho de la promesa; por lo
tanto, la fe es una gracia que obra maravillas y
permite al cristiano perseverar.
(3) Si quisieras defender el reino, pon ante tus
ojos los EJEMPLOS de esos nobles santos heroicos
que han perseverado hasta el reino. Vivitur exelis
[La vida se vive con ejemplos]. Los ejemplos influyen
más en nosotros que los preceptos. "Mi pie ha
sostenido sus pasos". Job 23:11. Aunque el camino de
la religión tiene pedernales y espinas , mi pie ha
mantenido sus pasos; No me he desmayado en el
camino ni me he desviado. Daniel mantuvo su
religión y no dejaría de orar, aunque sabía que el
escrito estaba firmado en su contra, y una oración
podría costarle la vida. Dan 6:10. Los benditos
mártires perseveraron en el reino a través de los
sufrimientos. Un mártir, besando la hoguera, dijo:
"No perderé mi vida, sino que la cambiaré por una
mejor; en lugar de carbones tendré perlas". ¡Qué
espíritu de galantería había en estos santos!
Aprendamos la constancia de su valentía. Un
soldado, al ver a su general luchar con valentía, se
anima con su ejemplo y se le infunden nuevos
espíritus.
(4) Agreguemos ferviente ORACIÓN a Dios para
que nos capacite para sostener el reino celestial.
¡Abrázame y estaré a salvo! Salmo 119: 117. No
presumamos de nuestras propias fuerzas. Cuando
Pedro clamó a Cristo en el agua: "¡Señor, sálvame!"
luego Cristo lo tomó de la mano. Mateo 14:30.
Cuando tuvo confianza en su propia fuerza, Cristo lo
dejó caer. Oh, ruega a Dios por la gracia
perseverante. El niño está a salvo cuando está en
brazos del padre. De la misma manera, estamos a
salvo en los brazos de Cristo. Oremos para que Dios
ponga su temor en nuestros corazones, para que no
nos apartemos de él; y esa oración de Cipriano,
"Señor, perfecciona lo que has comenzado en mí,
para que no sufra un naufragio cuando esté casi

en el refugio ".
Utilice 5. Permítame presentar algunos
argumentos poderosos, persuasivos o divinos,
para que ponga todas sus fuerzas en la obtención
de este reino bendito.
(1) El gran propósito por el cual Dios nos envió al
mundo es prepararnos para este reino celestial.
"Busca primero el reino de Dios". Mateo 6:33.
Primero en el tiempo, antes que todas las cosas; y
primero en cariño
- sobre todas las cosas. Se tiene mucho cuidado para
asegurar las cosas del mundo. Mateo 6:25. Ver a la
gente trabajando por la tierra, como hormigas en un
hormiguero, haría pensar que ese era el único
propósito para el que estaban aquí. ¡Pero Ay! ¿Qué
es todo esto, comparado con el reino de los cielos?
He leído acerca de un peregrino devoto que viajaba
a Jerusalén, quien al pasar por varias ciudades,
donde vio muchos edificios señoriales, mercancías y
monumentos, decía: "No debo quedarme aquí, esto
no es Jerusalén". De la misma manera, cuando
disfrutamos de las cosas mundanas, la paz y la
abundancia, y tenemos nuestras canastas llenas,
debemos decirnos a nosotros mismos: "¡Este no es el
reino que debemos cuidar, esto no es el cielo!" Es
sabio recordar nuestro propósito. Será triste en el
lecho de muerte para un hombre descubrir que se
ha ocupado de tonterías, ha jugado con una
pluma, y ha descuidado lo principal por lo que vino
al mundo.
(2) Todos los hombres juzgarán por fin más
prudente que buscar el reino celestial. Aquellos
que ahora son más negligentes con sus almas,
desearán, cuando mueran, haberse preocupado más
por la eternidad . Cuando se despierte la conciencia y
los hombres comiencen a volver en sí mismos, ¿qué
darían por el reino de los cielos? ¡Qué feliz sería si
los hombres tuvieran la misma opinión ahora, como
lo serán al morir! ¡La muerte alterará las opiniones
de los hombres! Aquellos que menospreciaron y
menospreciaron los caminos de la religión, desearán
que su tiempo y sus pensamientos se hayan
dedicado a la excelente gloria. Al morir, los ojos de
los hombres se abrirán y verán su locura cuando sea
demasiado tarde. Todos los hombres, incluso los
peores, desearán por fin haberse preocupado por el
reino de los cielos. ¿Por qué no deberíamos hacer
ahora lo que todos desearían haber hecho cuando
vengan a morir?
(3) Este reino de los cielos merece nuestros
mayores dolores y diligencia.

1. Es GLORIOSO , más allá de la hipérbole.

Supongamos que los reinos terrenales son más
magníficos de lo que son —sus cimientos de oro, sus
paredes de perlas, sus ventanas de
diamantes—, incluso entonces, no serían
comparables al reino celestial. Si el pavimento del
cielo está salpicado de tantas luces brillantes y
estrellas gloriosas, ¿qué es el reino mismo? "Aún no
parece lo que seremos". 1 Juan 3: 2. Este reino supera
nuestra imaginación. ¡Cuán sublime y maravilloso es
ese lugar donde la bendita Deidad resplandece en su
inmensa gloria, infinitamente más allá de la
comprensión de los ángeles!
2. El reino de los cielos es un lugar de HONOR.
Hay triunfos gloriosos y coronas relucientes. En
otros reinos hay un solo rey, pero en el cielo, ¡ todos
son reyes! Apocalipsis 1: 6. Todo santo glorificado
participa de la misma gloria que Cristo. "La gloria
que me diste, yo les he dado". Juan 17:22.
3. Este reino es un lugar de ALEGRÍA. "Entra en el
gozo de tu Señor". Mateo 25:21. Tener un aspecto
continuo del hermoso rostro de Dios, ser coronado
de inmortalidad, ser tan santo como los ángeles,
beber de los ríos del placer para siempre, ¡esto
causará éxtasis de gozo! Sin duda, merece nuestros
mayores esfuerzos perseguir y asegurar este reino.
Si no nos esforzamos por el reino de los
cielos, ¿por qué reino nos esforzaremos? Era el
discurso de los espías a sus hermanos: "Hemos visto
la tierra, y es muy buena. No duden en ir y tomar
posesión de ella". Jueces 18: 9. Hemos tenido una
descripción animada de la gloria del cielo,
encontramos que el reino es muy bueno; ¿Por qué
entonces nos quedamos quietos? ¿Por qué no
ponemos nuestro mayor celo e industria por este
reino? La diligencia de otros en la búsqueda de los
reinos terrenales, avergüenza nuestra frialdad e
indiferencia al perseguir el reino de los cielos.
(4) El tiempo que tenemos para asegurarnos del
reino celestial es muy corto e incierto. "¿Qué es tu
vida? ¡Eres una niebla que aparece por un rato y
luego se desvanece!" Santiago 4:14. Tenga cuidado de
que no se escape antes de que se haya preparado
para el reino. ¡El tiempo pasa a buen ritmo! No
pasará mucho tiempo antes de que el cordón
plateado de la vida se rompa y el cuenco dorado se
rompa. Eclesiastés 12: 6. El cráneo donde se encierra
el cerebro es un cuenco que pronto se romperá.
Nuestra alma está en el cuerpo, como el pájaro en el
caparazón, que pronto se rompe y el pájaro sale
volando. La cáscara
del cuerpo pronto se rompe, ¡y el alma vuela a la
eternidad! No sabemos si viviremos otro día. Antes
de que escuchemos otra campana de sermón ,
nuestra campana de la muerte puede sonar. Nuestra
vida corre como una corriente rápida , ¡hacia el
océano de la eternidad!
Hermanos, si nuestro tiempo es tan corto y
transitorio; Si la vela de la vida se consume tan
pronto, o tal vez se apaga por una muerte
inesperada , ¡cómo debemos usar todas nuestras
fuerzas para obtener el reino de la gloria! Si el
tiempo es tan corto, ¿por qué lo desperdiciamos en
cosas triviales y descuidamos la "única cosa
necesaria", que es el reino de los cielos? Un hombre
que tiene un gran trabajo por hacer, pero un día
para hacerlo, necesita trabajar duro. Tenemos un
gran trabajo que hacer, estamos luchando por un
reino, y ¡ay! ¡No estamos seguros de un día para
trabajar! Por tanto, ¿qué necesidad tenemos de
movernos, y lo que hacemos por el cielo, para
hacerlo con todas nuestras fuerzas?
(5) Para excitar nuestra diligencia, consideremos
cuán imperdonables seremos si perdemos el
reino de los cielos. ¿Quiénes han recibido tanta
ayuda para el cielo como la nuestra? Los indios que
tienen minas de oro no tienen tantas ventajas para
la gloria como nosotros. Tienen la luz del sol, la luna
y las estrellas, y la luz de la razón, pero esto no es
suficiente para iluminarlos hasta el cielo. Hemos
tenido la luz del evangelio brillando en nuestro
horizonte; hemos sido elevados al cielo con
ordenanzas; hemos tenido la Palabra a tiempo y
fuera de tiempo. Las ordenanzas son los tubos del
santuario, que vierten el aceite de oro de la gracia en
el alma; son la escalera por la que ascendemos al
reino de los cielos. "¿Qué otra nación es tan grande
como para tener sus dioses cerca de ellos como el
Señor nuestro Dios está cerca de nosotros cuando le
oramos?" Deuteronomio 4: 7. Hemos tenido el cielo y
el infierno ante nosotros; hemos tenido consejos de
amigos, advertencias, ejemplos, los movimientos y
las inspiraciones del Espíritu Santo. ¿Cómo deberían
todos estos espuelas acelerar nuestro camino hacia
el cielo? ¿No debería ese barco navegar rápidamente
hacia el puerto que tiene la marea de las ordenanzas
y el viento del Espíritu para llevarlo? Seguramente
si, por negligencia, perdemos el reino de los cielos,
no tendremos nada que decir por nosotros mismos;
¡Estaremos tan lejos de la excusa como de la
felicidad!
(6) No puedes hacer demasiado por el reino de
los cielos. No se puede orar demasiado ni amar
demasiado a Dios. En las cosas seculares, un hombre
puede trabajar demasiado , puede matarse con el
trabajo; pero no hay miedo de

trabajando demasiado para el cielo. "En justicia no

hay necesidad de temer el exceso". Séneca. El mundo
tiende a censurar a los piadosos, como si fueran
demasiado celosos y se esforzaran demasiado en la
religión. De hecho, un hombre puede seguir
demasiado al mundo, puede apresurarse demasiado
para hacerse rico. El hombre del transbordador
puede llevar demasiados pasajeros en su bote, como
para hundirlo. Así, un hombre puede acumular
tanto oro y plata, como para hundirse en la
perdición. 1 Timoteo 6: 9. No podemos ser
demasiado serios y celosos por el reino de los cielos;
aquí no hay miedo al exceso; cuando hacemos todo
lo que podemos, nos quedamos cortos de la regla de
oro que nos ha fijado, y del modelo dorado de Cristo.
Cuando nuestra fe es más alta, como el sol en el
meridiano, todavía falta algo en nuestra fe, de modo
que toda nuestra labor por el reino es bastante
pequeña. 1 Tesalonicenses 3: 1. Cuando un cristiano
ha hecho todo lo posible, todavía tiene pecados y
necesita lamentarse.
(7) Pueden juzgar el estado de sus almas, tengan
gracia o no, por su búsqueda ferviente del reino
celestial. Grace infunde un espíritu de actividad en
una persona; no permanece dormido en el alma; no
es un hábito somnoliento , pero hace que un
cristiano, como los serafines, sea rápido y alado en
su movimiento celestial. Como el fuego, lo hace
arder de amor por Dios; y cuanto más lo ama, más
avanza hacia el cielo, donde podrá disfrutarlo
plenamente.
La esperanza es una gracia activa, se llama "una
esperanza viva". 1 Pedro 1: 3. Es como el resorte del
reloj, que pone en marcha todas las ruedas del alma.
La esperanza de una cosecha hace que el agricultor
siembre su semilla; la esperanza de la victoria hace
luchar al soldado ; y una verdadera esperanza de
gloria hace que el cristiano la persiga
vigorosamente. Aquí hay una piedra de toque
espiritual con la que probar nuestra gracia. Si
tenemos la unción del Espíritu, engrasará las ruedas
de nuestro esfuerzo y nos animará en nuestra
búsqueda del reino celestial. Tan pronto como Pablo
recibió la gracia salvadora, se dice: "He aquí, él ora".
Hechos 9:11. Los teólogos llaman a los afectos "los
pies del alma"; si estos pies no se mueven hacia el
cielo, es porque no hay vida en ellos.
(8) Tu trabajo por el cielo no está perdido. Quizás
piense que ha servido a Dios en vano; pero debes
saber que tus dolores no se pierden. La semilla es
arrojada a la tierra y muere, pero al final da una
cosecha abundante. De la misma manera, sus labores
parecen ser infructuosas, ¡pero al fin lo llevan a un
reino! ¿Quién no trabajaría duro durante una hora,
cuando, por eso?

hora de trabajo, sería rey mientras viviera? Y déjame

decirte que cuanto más trabajo hayas realizado para
el reino de los cielos, más grados de gloria tendrás.
Así como hay grados de tormento en el infierno,
también hay grados de gloria en el cielo. Mateo
23:14. Como una estrella difiere de otra en gloria, así
será un santo. 1 Cor 15:41. Aunque cada vaso de
misericordia será completa -yet uno puede sostener
más que otro. Los que han hecho más obra para
Dios, tendrán más gloria en el reino celestial. Si
escucháramos a los santos difuntos hablándonos
desde el cielo, seguramente hablarían de esta
manera: "Si dejáramos el cielo por un tiempo y
viviéramos en la tierra de nuevo, le haríamos a Dios
mil veces más servicio que nunca; lo haríamos".
oren con más vida, actúen con más celo; porque
ahora vemos, cuanto más ha sido nuestro trabajo,
mayor es nuestra recompensa en el cielo ".

(9) Mientras trabajamos por el reino, Dios nos

ayudará. "Pondré mi Espíritu dentro de ti, y haré
que andes en mis estatutos". Ezequiel 36:27. La
promesa nos anima y el Espíritu de Dios nos
capacita. Un amo le da trabajo a su siervo , pero no
puede darle fuerzas para trabajar. Pero Dios nos da
nuestro trabajo y nos da fuerza. "Da tu fuerza a tu
siervo". Salmo 86:16. Dios no solo nos da una corona
cuando terminamos de correr, ¡sino que también
nos da piernas para correr! Él da gracia habilitadora
y auxiliar. [La ley manda, la gracia ayuda]; el
Espíritu que nos ayuda en nuestro trabajo para el
cielo, lo hace fácil. Si la piedra de carga arrastra el
hierro, no es difícil que el hierro se mueva. De la
misma manera, si el Espíritu de Dios atrae el
corazón, se mueve hacia el cielo con destreza y
presteza.
(10) Cuanto más nos esforzamos por llegar al
cielo, más dulce será el cielo cuando lleguemos
allí. Cuando un agricultor ha estado trabajando duro
durante mucho tiempo , es agradable disfrutar de la
fruta de su trabajo. Así, cuando estemos en el cielo,
recordaremos nuestro antiguo celo y seriedad por el
reino, que endulzará el cielo. Se sumará al gozo del
cielo, que un cristiano medite: "Pasé un día así
examinando mi corazón. Un día así lloraba por el
pecado. Cuando otros estaban entretenidos, yo
estaba en oración. Y ahora, ¿He perdido algo por mi
devoción? ¡No! Mis lágrimas se enjugaron, y el vino
del paraíso alegraba mi corazón. Ahora disfruto de
aquel a quien ama mi alma, ¡estoy poseído de un
reino glorioso! Mi trabajo ha terminado, pero mi la
alegría permanece para siempre! "

(11) Si no se esfuerzan ahora por el reino de los

cielos, no habrá nada que pueda hacer por sus
almas después de la muerte. Ésta es la única
temporada adecuada para trabajar; y si se pierde
esta temporada, ¡se perderá el reino! "Todo lo que tu
mano encuentre para hacer, hazlo con todas tus
fuerzas, porque en la tumba, adonde vas, no hay
trabajo ni planificación, ni conocimiento ni
sabiduría". Eclesiastés 9:10. Era un dicho de Carlos V:
"He gastado mi tesoro, pero para recuperarme de
nuevo; he perdido la salud, pero puede que vuelva a
tenerlo; pero he perdido a muchos soldados
valientes , pero a ellos nunca puedo. recuperar." De
modo que otras bendiciones temporales pueden
perderse y recuperarse nuevamente; pero si el
término de la vida, en el que debían trabajar para el
cielo, se pierde una vez, ya no se puede recuperar,
¡nunca más podrán tener otra temporada para sus
almas!
(12) No hay nada más que este reino de los cielos,
del cual podemos estar seguros.
No podemos asegurarnos de la vida . Cuando la
respiración va a cabo , no sabemos si vamos a
dibujar en otra vez! ¡Cuántos se llevan de repente!
"Vaya, ni siquiera sabes lo que pasará mañana. ¿Qué
es tu vida? ¡Eres una niebla que aparece por un rato
y luego se desvanece!" Santiago 4:14.
No podemos asegurarnos de las riquezas . Es
incierto si alguna vez los conseguiremos. El mundo
es como una lotería, en la que no todos están seguros
de ganar un premio. Si hacemos obtener riquezas, no
estamos seguros de mantener a ellos! "Las riquezas
se hacen alas, ¡ vuelan!" Proverbios 23: 5. La
experiencia sella la verdad de esto. Muchos que han
tenido abundantes propiedades, por incendios o
pérdidas en el mar, han sido exprimidos como
esponjas y todas sus propiedades agotadas. Pero
incluso si los hombres mantuvieran sus propiedades
por un tiempo, ¡la muerte los despoja de todo!
Cuando el arma de la muerte se dispara, la propiedad
se va volando. "¡No trajimos nada con nosotros
cuando llegamos al mundo, y ciertamente no
podemos llevar nada con nosotros cuando
muramos!" 1 Timoteo 6: 7. "He observado algo más
en este mundo nuestro. El corredor más rápido no
siempre gana la carrera, y el guerrero más fuerte no
siempre gana la batalla. Los sabios son a menudo
pobres y los hábiles no son necesariamente ricos. Y
los que están educados no siempre llevan una vida
exitosa ". Eclesiastés 9:11. "Manda a los ricos de este
mundo que no sean arrogantes ni pongan su
esperanza en la riqueza, que es tan incierta, sino que
pongan su esperanza en Dios". 1 timoteo

6:17.
De modo que no hay nada seguro aquí abajo, pero
podemos asegurarnos del reino de los cielos. "Al que
siembra justicia, recompensa segura será".
Proverbios 11:18. El que tiene la gracia, seguro del
cielo, porque en él ha comenzado el cielo. Un
creyente tiene una evidencia del cielo. "La fe es la
evidencia de lo que no se ve". Hebreos 11: 1. Tiene
una prenda de gloria. "Quien nos ha dado la prenda
del Espíritu". 2 Cor 1:22. Un compromiso es parte de
la suma total. Tiene una esperanza segura. "Qué
esperanza tenemos como ancla". Hebreos 6:19. Este
ancla está puesta sobre la promesa de Dios. "Con la
esperanza de la vida eterna, que Dios, que no puede
mentir, ha prometido". Tito 1: 2. De modo que he
aquí un gran estímulo para esforzarnos por el cielo,
para que podamos estar seguros de este reino.
(13) El reino de los cielos no se puede obtener sin
trabajo. El camino de la tierra al cielo no es fácil. Un
barco puede llegar a tierra sin remos tanto como
nosotros al cielo sin trabajo. No podemos tener el
mundo sin trabajo, y ¿pensamos que podemos tener
el cielo sin trabajo? Si un hombre cava de
grava -mucho más por el oro . "Presiono hacia la
marca". Filipenses 3:14. La puerta del cielo no es
como la puerta de hierro que se abrió a Pedro por su
propia voluntad. Hechos 12:10. El cielo no es como
esos higos maduros que caen en la boca del
devorador. Nah 3:12. No, debe haber esfuerzos. Dos
cosas son necesarias para un cristiano, un ojo atento
y una mano trabajadora . Debemos forzar un camino
hacia el reino celestial a través de las dificultades.
Debemos ganar la guirnalda de la gloria con el
trabajo, antes de llevarla con triunfo. Dios ha
promulgado esta ley: "Que nadie coma del árbol del
paraíso, sino con el sudor de su frente". ¿Cómo,
entonces, se atreve a censurar la diligencia
cristiana? ¿Cómo se atreven a decir que te esfuerzas
más por el cielo de lo necesario? Dios dice:
"Esfuérzate como en agonía: pelea la buena batalla
de la fe"; y dicen: "Eres demasiado estricto", pero ¿a
quién vamos a creer, a un Dios santo que nos manda
luchar, o un ateo profano que dice que nos
esforzamos demasiado?
(14) Habiendo malgastado gran parte de nuestro
tiempo, teníamos que trabajar más duro por el
reino de los cielos. Aquel que ha perdido su tiempo
en la escuela, ya menudo se ha ausentado, ha tenido
que esforzarse tanto más para poder adquirir un
acervo de aprendizaje; y el que ha dormido y
holgazaneado al principio de su viaje, tenía
necesidad de cabalgar más rápido por la noche, para
que no

se quedan cortos del lugar al que viaja. Algunos

están en su juventud, otros en la flor de su edad,
otros tienen canas, flores de almendro y, sin
embargo, tal vez hayan sido muy indiferentes a sus
almas y al cielo. El tiempo que se invierte sin
provecho no es tiempo vivido, sino tiempo
perdido. "Redimiendo el tiempo". Efesios 5:16.
Aquellos que han malgastado sus horas doradas, no
sólo han sido perezosos, sino sirvientes
derrochadores. Ahora tenían la necesidad de redimir
el tiempo y seguir adelante con poder y fuerza hacia
el reino celestial. "El tiempo pasado de nuestra vida
puede bastarnos para haber hecho la voluntad de los
gentiles". 1 Pedro 4: 3. Puede ser suficiente que
nosotros, que ya hemos perdido tanto tiempo, ahora
trabajemos más duro. Los que se han deslizado como
caracoles , ahora tenían necesidad de volar como
águilas al paraíso de Dios. Si en la primera parte de
tu vida fuiste como sauces, estéril en bondad; en la
última parte, será como "un huerto de granadas, con
frutos agradables". Cánticos 4:13. Recompensa la
negligencia anterior, con diligencia futura.
(15) ¡ Qué impropio y sórdido es el
temperamento del alma perezosa! "Advierte a los
que están ociosos". 1 Tesalonicenses 5:14. "Castigaré
a los hombres asentados sobre sus lías"; (Heb.
"Cuajada sobre sus lías"). Sof 1:12. Asentarse sobre
las lías es un emblema de un alma apagada e
inactiva. El caracol, por su movimiento lento, se
contaba entre los inmundos. Levítico 11:30. "Un
hombre perezoso esconde la mano en su pecho:" es
reacio a sacarla, aunque sea para agarrar una
corona. Proverbios 19:24. [La puerta del cielo no
recibe a los aburridos de la pereza.] Brugensis. El
mismo diablo no puede ser acusado de holgazanería.
Él "camina". 1 Pedro 5: 8. Un alma ociosa representa
una cifra en el mundo, y Dios no escribe cifras en el
libro de la vida. El cielo no es una colmena para
drones. Una persona ociosa es un blanco fácil de
tentación. Cuando el pájaro se queda quieto sobre la
rama, corre peligro de que le disparen. Así, cuando
uno se queda quieto en la pereza, el diablo le dispara
con una tentación. El agua estancada se pudre. Los
paganos se levantarán en juicio contra los cristianos
somnolientos. ¡Qué molestias se hicieron en los
Juegos Olímpicos! Corrieron a no ser por una
guirnalda de flores o una rama de olivo; y nos
quedamos quietos, ¡los que corremos por un reino
glorioso! ¿Cómo puede el que nunca trabaja esperar
una recompensa? ¿Cómo puede el que nunca
pelea esperar una corona? La pereza es el sueño del
alma. Adán, cuando dormía, perdió la costilla; y
cuando una persona está en el sueño profundo de la
pereza, pierde la salvación.

(16) La actividad y la industria santas

ennoblecen al cristiano. [El trabajo está adornado
con honor.] Cicerón. Cuanto más excelente es algo,
más activo. El sol es una criatura gloriosa y siempre
está en movimiento, dando vueltas. El fuego es el
elemento más puro y el más activo, siempre es
chispeante y llameante. Los ángeles son las criaturas
más nobles, están representados por los querubines,
con alas desplegadas. Cuanto más activos para el
cielo, más ilustres y más nos parecemos a los
ángeles. El fénix vuela con una corona en la cabeza.
Así, el alma trabajadora tiene su corona, su trabajo
es su insignia de honor.
(17) Es una misericordia que exista la posibilidad
de la felicidad, y que con nuestras penas
tengamos un reino. Por nuestra caída en Adán,
perdimos el derecho al cielo. ¿Por qué no nos habría
tratado Dios como a los ángeles desaparecidos? Tan
pronto como habían pecado, fueron expulsados del
cielo para no volver nunca más. Podemos decir,
como el apóstol: "He aquí la bondad y la severidad
de Dios". Romanos 11:22. Los ángeles apóstatas
contemplan la severidad de Dios: ¡que los arroje al
infierno para siempre! Contemplamos la bondad de
Dios en que nos ha puesto en una posibilidad de
misericordia. Solo para que si nos esforzamos, un
reino esté listo para nosotros. ¿Cómo debería esto
avivar y agudizar nuestra industria, que estamos en
capacidad de salvación? y que si hacemos lo que
podemos, ¡recibiremos un eterno peso de gloria!
(18) Nuestra labor por el reino de los cielos es
ligera y pasajera. No es para durar mucho; expira
con nuestra vida. Es poco tiempo, y habremos
terminado con nuestro trabajo. Por un poco de
trabajo, ¡ tendremos un descanso eterno! ¿Quién
pensaría mucho en vadear un poco de agua, si
estuviera seguro de ser coronado tan pronto como
llegara a la orilla? Cristianos, dejen que esto los
anime, solo tienen un poco más de dolor que tomar,
algunas lágrimas más que derramar, y he aquí una
recompensa eterna de recompensa. ¿Qué son unas
lágrimas? En comparación con una corona. ¿Qué son
unos minutos de tiempo, comparados con una
eternidad de gloria?
(19) ¡ Qué lucha hay por los reinos terrenales,
que son corruptibles y están sujetos a cambios!
¡Con qué vigor y prontitud continuaron los soldados
de Aníbal su marcha sobre los Alpes y las escarpadas
rocas! Los hombres nadarán hasta una corona de
sangre. ¿Se aventurarán así para ascensos terrenales,
y no lucharemos más por un reino celestial? Esto es

"un reino inamovible" (Hb 12, 28); un reino donde

hay una belleza inigualable, un honor inmaculado,
una alegría inigualable; un reino donde no habrá
nada presente que desearíamos que fuera
eliminado, y nada ausente que pudiéramos desear
fuera disfrutado. Seguramente si hay alguna chispa
de gracia, o verdadera generosidad en nuestros
pechos, no permitiremos que otros nos superen ; no
permitiremos que se aflijan más por los honores
terrenales que nosotros por esa excelente gloria que
coronará todos nuestros deseos.
(20) ¿Qué esfuerzos se toman algunos hombres
para ir al infierno, y no nos esforzaremos más
nosotros para ir al cielo? "Se cansan de cometer
iniquidad". Jer 9: 5. Los pecadores se alquilan al
servicio del diablo. ¡Qué esfuerzos se toman algunos
hombres para satisfacer sus concupiscencias
inmundas! Desperdician sus propiedades, llevan las
marcas vergonzosas de su pecado y visitan la casa de
la ramera, aunque está al lado del infierno. "Su casa
es el camino al infierno". Proverbios 7:27.
¡Qué dolor se toman los demás para perseguir a los
piadosos! La santidad es el blanco al que disparan. El
diablo toca el cuerno y los hombres corren
rápidamente hacia el infierno, ¡como si temieran
que el infierno se llenará antes de que pudieran
llegar allí! Cuando Satanás entró en Judas, ¡cuán
activo estaba! Él fue a los sumos sacerdotes, de ellos
a la banda de soldados, y con ellos de regreso al
jardín, ¡y nunca se fue hasta que traicionó a Cristo!
¡Cuán laboriosos fueron los judíos idólatras! Tan
ferozmente estaban empeñados en su pecado, que
sacrificaban a sus hijos e hijas a sus dioses-ídolos. Jer
32:35. ¿Se toman los impíos todos estos dolores por
el infierno, y nosotros no nos esforzaremos por el
reino de los cielos? Los malvados no tienen nada que
los anime en sus pecados, tienen todas las amenazas
de Dios como una espada de fuego contra ellos. Oh,
no se diga nunca que los impíos sirven mejor al
diablo , que los recompensa sólo con fuego y azufre;
de lo que servimos a Dios, quien nos recompensa
con un reino glorioso.
(21) El trabajo que tomamos para el cielo es un
trabajo lleno de placer. Proverbios 3:17. Un
hombre suda en su recreación, se cansa de cazar,
pero hay un deleite que lo endulza. "Me deleito en la
ley de Dios según el hombre interior". (Gr. Me
complace) Romanos 7:22. No solo es delicioso el
reino de los cielos , sino que el camino también es
placentero. ¡Qué deleite tiene un alma bondadosa en
la oración! "Yo haré

ellos gozosos en mi casa de oración. "Isaías 56: 7.

Mientras un cristiano llora, el gozo cae en lágrimas;
mientras medita en Dios, tiene tal vivificación del
Espíritu, y, por así decirlo, tales transfiguraciones de
alma, ¡que se cree la mitad del cielo! "Mi alma se
saciará como de tuétano y de grosura, y mi boca te
alabará con labios alegres, cuando me acuerde de ti
en mi cama", etc. Salmo 63: 5, 6.
La obra de un cristiano para el cielo es como la obra
de un novio en la mañana del día de la boda: se pone
su vestidura y sus túnicas nupciales con las que se
casará con su novia; de modo que, en todos los
deberes de la piedad, nos estamos poniendo esas
túnicas de boda en las que nos casaremos con Cristo
en gloria. ¡Oh, qué consuelo y paz interior hay al
caminar de cerca con Dios! "La obra de justicia será
paz". Isaías 32:17. Servir a Dios es como recolectar
especias o flores, donde hay algo de trabajo, pero el
trabajo se recompensa con deleite. Trabajar para el
cielo es como cavar en una mina de oro; cavar es
trabajo, ¡pero conseguir oro es un placer! Oh,
entonces, apresurémonos por el reino de los cielos;
es un trabajo de placer . Un cristiano no renunciaría
a su gozo por la música más deliciosa; no cambiaría
su ancla de esperanza por una corona de oro . Bien
podría decir David: "En guardar tus preceptos hay
gran recompensa", no solo después de guardar tus
preceptos, sino también en guardarlos. Salmo 19:11.
Un cristiano tiene tanto las flores de primavera
como la cosecha; el deleite interior en servir a Dios
son las flores de primavera, en el reino de gloria al
fin está la cosecha plena.
(22) ¡ Cuán laboriosos han sido los santos en
épocas pasadas! Pensaron que nunca podrían hacer
lo suficiente por el cielo; nunca podrían servir a Dios
lo suficiente, amarlo lo suficiente. Agustín, "Señor,
¡te he amado muy poco!" ¿Qué esfuerzo hizo Pablo
por el reino celestial? "Extendiendo las cosas que
están antes". Filipenses 3:13. La palabra griega,
extender, significa estirar el cuello; una metáfora de
los corredores, que tensan cada miembro y se
estiran para agarrar el premio. Ana, la profetisa, "no
partió del templo, sino que sirvió a Dios con ayunos
y oraciones noche y día". Lucas 2:37. Basilio, con
mucho trabajo por el reino, agotó su fuerza corporal.
"Que vengan sobre mí cremalleras, poleas y todos los
tormentos", dijo Ignacio, "sólo para que pueda ganar
a Cristo". La industria y el coraje de los antiguos
santos, que ahora están coronados con

gloria, debe provocar nuestra diligencia, para que

por fin podamos sentarnos con ellos en el reino de
los cielos.
(23) Cuanto más nos aflijamos por el cielo, más
bienvenida será la muerte para nosotros. ¿Qué es
lo que hace que los hombres sean tan reacios a
morir? Son como un inquilino que no saldrá de la
casa hasta que el oficial lo saque. No les gusta oír
hablar de la muerte. ¿Porque? Porque su conciencia
les acusa de que se han esforzado poco o nada por el
cielo; han estado durmiendo cuando deberían haber
estado trabajando, y ahora temen que la muerte los
lleve prisioneros al infierno. Pero el que ha dedicado
su tiempo a servir a Dios, puede mirar a la muerte a
la cara con consuelo. Fue llevado por completo
alrededor del cielo; ahora será llevado al cielo; antes
comerciaba en el cielo, y ahora se irá a vivir allí.
"Deseo partir y estar con Cristo". Filipenses 1:23.
Pablo se había entregado por completo a Dios, y
ahora sabía que había una corona reservada para él,
y anhelaba tomar posesión.
Por lo tanto, les he dado veintitrés argumentos
persuasivos para que los ejerzan y pongan su
máxima diligencia para obtener el reino de los
cielos. ¡Ojalá estuvieran escritas en todos sus
corazones, como con punta de diamante! Debido a
que las demoras en estos casos son peligrosas,
permítame desearle que emprenda esta obra para el
cielo de inmediato. "Me apresuré y me retrasé para
no guardar tus mandamientos". Salmo 119: 60.
Mucha gente está convencida de la necesidad de
velar por el reino de gloria, pero dicen, como en Hag
1: 2: "No ha llegado el momento". Aplazan y
posponen hasta que se les acaba el tiempo, y así
pierden el reino de los cielos. Cuidado con esta
falacia. La demora fortalece el pecado, endurece el
corazón y le da al diablo una posesión más plena de
un hombre.
"Los asuntos del rey requerían prisa". Así, el negocio
de la salvación requiere prisa. 1 Sam 21: 8. No
pospongas una hora más. [La hora fugaz vuela con
alas volubles.] ¿Qué seguridad tienes de que vivirás
otro día? ¿Se le ha concedido algún contrato de
arrendamiento? ¿Por qué, entonces, no te levantas
inmediatamente del lecho de la pereza y expones
todas tus fuerzas y esfuerzos para poseer el reino de
la gloria? ¿No deberían hacerse primero las cosas de
mayor importancia? Establecer la propiedad de un
hombre y obtener el título de propiedad de su tierra
no se demora, sino que se hace en primer lugar.
¿Qué hay de tanta importancia como la salvación de
sus almas,

y la conquista de un reino? Por tanto, escucha hoy la

voz de Dios; ahora piensa en la eternidad; ahora
aclare su título al cielo antes de que se produzca el
decreto de muerte . ¡Qué imprudencia es poner la
carga más pesada sobre el caballo más débil! Así que
es echarse la pesada carga del arrepentimiento
sobre sí mismo: cuando está debilitado por la
enfermedad, las manos tiemblan, los labios tiemblan
y el corazón se desmaya. Sea sabio en el tiempo;
prepárate ahora para el reino. Si un hombre
comienza su viaje al cielo en medio de la tormenta
de la muerte , es mil a uno , ¡ sufre un naufragio
eterno!
Utilice 6. Para exhortar a los que tienen buena
esperanza por medio de la gracia. Ustedes que son
los herederos de este reino, permítanme exhortarlos
a seis cosas:
(1) A menudo, tome una perspectiva de este reino
celestial. Sube al monte celestial; dar una vuelta,
por así decirlo, en el cielo todos los días mediante la
santa meditación. "Camine por Sion, rodeela, cuente
sus torres, considere bien sus murallas, vea sus
ciudadelas". Salmo 48:12, 13. ¡Mira qué glorioso
reino de los cielos es! Cristiano, muestra a tu corazón
las puertas de la perla, los lechos de especias, los
racimos de uvas que crecen en el paraíso de Dios. Di:
"¡Oh alma mía, toda esta gloria es tuya! Es el buen
gusto de tu Padre darte este reino". Los
pensamientos del cielo son encantadores y
deslumbrantes. ¿Pueden los hombres del mundo
deleitarse tanto al ver sus bolsas de oro y campos de
maíz, y no se deleitarán más los herederos de la
promesa al contemplar el reino celestial? La
meditación seria del reino de gloria produciría estos
tres efectos:
1. La meditación en el reino celestial
humedecería y difamaría toda la gloria mundana.
Para quienes se encuentran en la cima de los
Alpes, las grandes ciudades de Campania parecen
pequeñas a sus ojos. De la misma manera, si
pudiéramos mirar a través del telescopio de la fe y
contemplar la gloria del cielo, ¡cuán pequeñas y
diminutas parecerían todas las demás cosas! Moisés
menospreció los honores de la corte de Faraón,
teniendo en cuenta la recompensa. Hebreos 11:26.
Cuando Pablo tuvo una visión de gloria, y Juan fue
llevado en el Espíritu, y vio a la santa Jerusalén
descender del cielo, con la gloria de Dios en
ella, ¡cómo se les apareció el mundo en un eclipse!
2. La meditación en el reino celestial promovería mucho

santidad en nosotros. El cielo es un lugar santo:

"una herencia inmaculada ". 1 Pedro 1: 4. Se describe
por vidrio transparente, para denotar su pureza.
Apocalipsis 21:21. Contemplar el cielo nos pondría
en el estudio de la santidad, porque nadie más que
los santos son admitidos en ese reino. El cielo no es
como el arca de Noé, en la que entraron animales
limpios e inmundos. Solo los de limpio corazón
verán a Dios. Mateo 5: 8.
3. La meditación en el reino celestial sería un
acicate para la diligencia. [La gloria posee un
estímulo inconmensurable.] "Entréguense siempre
plenamente a la obra del Señor, porque saben que su
labor en el Señor no es en vano". 1 Cor 15:58. Cuando
el marinero ve el puerto, navega con más fuerza con
los remos. De la misma manera, cuando tengamos la
vista y la perspectiva de la gloria, debemos estar
mucho en oración y velando; debe agregar alas al
deber y hacer que la lámpara de nuestra devoción
arda más brillante.
(2) Si tienes esperanzas en este reino, ¡siéntete
contento aunque tengas un poco del mundo! El
contentamiento es algo raro, es una joya que pocos
cristianos usan; pero si tienes una firme esperanza
en el cielo, es posible que esto haga que tu corazón
se sienta contento. ¡Aunque tengas poco en posesión,
tienes un reino en reversión! Si tuviera que hacer
una estimación del patrimonio de un hombre, ¿cómo
lo valoraría? ¿Por lo que tiene en su casa o por su
tierra? Quizás tenga poco dinero o joyas en su casa,
pero es dueño de vastas tierras, ahí radica su valor.
Un creyente sólo tiene un poco de aceite en la vasija
y comida en el barril, pero tiene el título de un reino,
¿y no puede esto satisfacerlo? Si un hombre que
vivía aquí en Inglaterra, tenía una gran propiedad
más allá de los mares, y tal vez no tuviera más
dinero en la actualidad, sino sólo para pagar su
viaje, está contento; sabe que cuando llegue a su
propiedad tendrá suficiente dinero. De la misma
manera, a ustedes que son creyentes les ha
sobrevenido un reino; aunque tienes poco en tu
bolso, si tienes suficiente para tu viaje al cielo, es
suficiente. Dios te ha dado gracia, que es la
cosecha principal, y te dará gloria, que es la
cosecha secundaria; ¿y no puede esto contentarte?
(3) Si tiene la esperanza de este reino bendito
, ore con frecuencia por su venida. Di: "Venga tu
reino". Solo los creyentes pueden orar de todo
corazón por la aceleración del reino de gloria.
No pueden orar para que venga el reino de gloria de Cristo,
quien nunca
tenían el reino de gracia establecido en sus
corazones. ¿Pueden los presos culpables rezar para
que llegue el juicio?
No pueden orar de todo corazón para que venga el
reino de gloria de Cristo, quienes son amantes del
mundo. Han encontrado el paraíso, ya están en su
reino; este es su cielo, y no desean saber nada de
otro; son de su opinión los que dijeron que si podía
mantener su cardenalicio en París, renunciaría a su
parte en el paraíso.
No pueden orar de todo corazón para que venga el
reino de gloria de Cristo, los que se oponen a su
reino de gracia, los que violan sus leyes, que son el
cetro de su reino, los que disparan contra los que
llevan el nombre de Cristo y llevan sus colores.
Seguramente estos no pueden orar para que venga el
reino de gloria de Cristo, porque entonces Cristo los
juzgará; y si dicen esta oración, son hipócritas, no
quieren decir lo que dicen.
Pero ustedes que tienen el reino de la gracia
establecido en su corazón, oren mucho para que el
reino de la gloria se apresure; di: "Venga tu reino".
Cuando llegue este reino, contemplaréis a Cristo con
todas sus túnicas bordadas de gloria,
resplandeciendo diez mil veces más que el sol en
todo su esplendor meridiano. Cuando venga el reino
de Cristo, los cuerpos de los santos que duermen en
el polvo serán levantados en honor y hechos como el
cuerpo glorioso de Cristo; entonces vuestras almas,
como diamantes, brillarán con santidad; nunca más
tendrás un pensamiento pecaminoso, serás tan santo
como los ángeles; serás tan santo como desees ser, y
tan santo como Dios quiere que seas. Entonces
estarás en un mejor estado que en la inocencia. Adán
fue creado como una criatura gloriosa , pero mutable
; una estrella brillante , pero una estrella fugaz ; pero
en el reino de los cielos hay una fijación de felicidad .
Cuando venga el reino de gloria de Cristo, te librarás
de todos tus enemigos; como dijo Moisés: "A los
egipcios que has visto hoy, nunca más los verás".
Éxodo 14:13. Así que aquellos enemigos que han
arado sobre las espaldas del pueblo de Dios y han
ablandado sus surcos, cuando Cristo venga en su
gloria, no verán más. Todos los enemigos de Cristo
serán "sometidos a sus pies". 1 Corintios 15:25. Antes
que los impíos sean destruidos, los santos los
juzgarán. "¿No sabéis que los santos juzgarán al
mundo?" 1 Cor 6: 2. A los inicuos les herirá el corazón
que aquellos a quienes antes despreciaron y
azotaron, se sienten como jueces sobre ellos y voten
con Cristo en sus procedimientos judiciales. Oh,

entonces, bien puedes orar por la aceleración del

reino de gloria, "Venga tu reino".
(4) Si tiene alguna buena esperanza de este
reino bendito , tenga un temperamento alegre y
alegre. ¿Tienes un título de reino y estás triste? "Nos
regocijamos en la esperanza de la gloria de Dios".
Romanos 5: 2. Cristianos, la trompeta está lista para
sonar, se acerca un jubileo eterno, cuando se
proclamará la libertad del pecado; se acerca el día de
tu coronación . Es sólo quitarse la ropa y poner la
cabeza sobre una almohada de polvo, ¡y serás
entronizado en un reino y revestido con las túnicas
bordadas de la gloria! ¿No requiere todo esto un
espíritu alegre? La alegría adorna la religión. Es un
temperamento del alma a quien Cristo ama. "Si me
amaras, te regocijarías". Juan 14:28. A muchos les
hace sospechar que el cielo no es tan agradable
cuando ven tristes a los que van allí. ¿Cómo se
regocija el heredero con la esperanza de la herencia?
¿Quién debería regocijarse sino el creyente, que es
heredero del reino, y un reino como el ojo no ha
visto? Cuando la carne comience a decaer, que la fe
levante la cabeza y provoque un santo júbilo y
regocijo en el alma.
(5) Que los santos anhelen estar en ese reino
bendito. Un príncipe que viaja a países extranjeros,
¿no anhela estar en su propia nación para ser
coronado? La novia desea el día de la boda. "El
Espíritu y la novia dicen:" ¡Ven! Sí, ven, Señor Jesús ".
Apocalipsis 22:17, 20. Seguramente nuestra falta de
voluntad para irnos de aquí muestra la debilidad de
nuestra fe en la creencia del reino celestial o la
fuerza de nuestras dudas sobre si tenemos interés en
Si nuestro título al cielo fuera más claro,
necesitaríamos paciencia para estar contentos de
quedarnos aquí por más tiempo.
Una vez más, nuestra falta de voluntad para irnos,
declara que amamos demasiado al mundo ya Cristo
demasiado poco. El "amor", como dice Aristóteles,
"desea la unión". Si amamos a Cristo como
deberíamos, deberíamos desear estar unidos a él en
gloria, cuando pudiéramos llenarnos de amor.
Siéntete humilde por no estar dispuesto a ir de aquí.
Trabajemos para llegar a ese divino genio del alma
que tenía Pablo: "Tener el deseo de partir y estar con
Cristo". Filipenses 1:23.
Estamos rodeados de un cuerpo de pecado; ¿No
deberíamos desear deshacernos de esta víbora?
Estamos en Mesech y en las tiendas de Cedar, en un
lugar donde vemos a Dios deshonrado. ¿No
deberíamos desear irnos? Estamos en un valle de

lágrimas. ¿No es mejor estar en un reino glorioso?

Aquí estamos combatiendo con Satanás. ¿No
deberíamos desear ser llamados fuera del campo
sangriento, donde las balas de la tentación vuelan
tan rápido, para que podamos recibir una corona
victoriosa? Oh santos, respirad por el reino celestial.
Aunque deberíamos estar dispuestos a quedarnos
para prestar servicio , deberíamos desear
ansiosamente estar siempre tomando el sol a la luz
del rostro de Dios. ¡Piensa en lo que será estar para
siempre con el Señor! ¿Hay sonrisas o abrazos más
dulces que los suyos? ¿Hay alguna cama tan suave
como el pecho de Cristo? ¿Existe tal gozo como el de
que el estandarte de oro del amor de Cristo se
muestre sobre nosotros? ¿Existe tal honor como
sentarse en el trono con Cristo? Apocalipsis 3:21.
¡Oh, entonces, anhela el reino celestial!
(6) Espera este reino de gloria. No es
incongruente ni impropio anhelar el cielo, pero
esperarlo. Anhelo porque es un reino, pero espere la
buena voluntad de su Padre. Dios podría otorgar este
reino de una vez, pero cree que es bueno que
esperemos un poco.
[1] Si tuviéramos el reino de los cielos tan pronto
como se infunda la gracia, entonces Dios perdería
gran parte de su gloria. ¿Dónde estaría nuestro
vivir por fe, que es la gracia que trae los principales
ingresos de la gloria a Dios? Romanos 5:20. ¿Dónde
estaría nuestro sufrimiento por Dios, que es una
forma de honrarlo que los ángeles en el cielo no son
capaces de hacer? ¿Dónde estaría el servicio activo
que debemos hacer por Dios? ¿Querríamos que Dios
nos diera un reino y no hiciéramos nada por él antes
de llegar allí? ¿Tendríamos descanso antes del
trabajo, una corona antes de la victoria? Esto fue
hipócrita. Pablo estaba contento con quedarse fuera
del cielo por un tiempo para poder traer a otros allí.
Filipenses 1:24.
[2] Mientras esperamos el reino, nuestra gracia
aumenta. Cada deber cumplido piadosamente
agrega una joya a nuestra corona. ¿Deseamos que
nuestras túnicas de gloria brillen más? Esperemos y
trabajemos. Cuanto más esperemos por el principal,
mayor será el interés. Mientras el agricultor espera
hasta que brote la semilla, espere la cosecha de la
gloria. Cristo dice que los hombres deben orar y no
desmayar. Lucas 18: 1. Por tanto, espere y no se
desmaye. No se canse, el reino de los cielos
enmendará la espera. "He esperado tu salvación, oh
Señor", dijo el patriarca agonizante. Génesis 49:18.
Utilice 7. Para consolar al pueblo de Dios.

(1) En todos sus sufrimientos. "El verdadero

santo", como dice Lutero, "es heredero de la cruz".
La aflicción es su porción, pero esto evita que se
desmaye, que sus sufrimientos traen un reino. "La
esperanza del reino de los cielos", dice Basil,
"debería suavizar y endulzar todos nuestros
problemas". "Si sufrimos, también reinaremos con
él". 2 Timoteo 2:12. Es una lucha corta , pero un
triunfo eterno. Este ligero sufrimiento produce un
"eterno peso de gloria". 2 Cor 4:17. Cuanto más
pesadas son las cosas preciosas, más valen, ya que
cuanto más peso tiene una corona de oro, más vale.
Si esta gloria celestial durara solo por un tiempo,
disminuiría y amargaría mucho los gozos del cielo;
pero corre paralelo a la eternidad. Dios será un mar
profundo de bienaventuranza, y los santos
glorificados se bañarán para siempre en este océano.
Un día de llevar la corona pagará abundantemente
por los sufrimientos de todos los santos; cuánto más
cuando "reinarán por los siglos de los siglos".
Apocalipsis 22: 5.
Oh, que este sea nuestro apoyo en todas las
calamidades y sufrimientos en esta vida. ¡Qué gran
diferencia hay entre los sufrimientos de un creyente
y su recompensa! "Los sufrimientos de este tiempo
presente no son dignos de ser comparados con la
gloria que será revelada en nosotros". Romanos 8:18.
Por unas lágrimas, ¡ recibiremos ríos de placer! Para
el duelo, túnicas blancas. Esto hizo reír a los
cristianos primitivos de los encarcelamientos y
arrebatar los tormentos como coronas. Aunque
ahora bebemos en una taza de ajenjo, hay azúcar en
el fondo para endulzarlo. "¡No temas, manada
pequeña, porque es un buen placer para tu Padre
darte el reino!" Lucas 12:32
(2) Consuelo en la muerte. Lo que quita a los hijos
de Dios el terror de la muerte es que están entrando
en el reino. No es de extrañar si los hombres
malvados se horrorizan y horrorizan ante la
proximidad de la muerte, porque mueren sin el
perdón. La muerte los lleva a la cárcel, donde deben
permanecer para siempre, sin fianza ni liberación;
pero ¿por qué debería asustarse alguno de los hijos
de Dios con pensamientos de muerte? ¡Qué daño
puede hacerles la muerte, sino llevarlos a un reino
glorioso! La fe da un título al cielo, pero la muerte da
posesión del cielo. Sea este un antídoto del evangelio
para expulsar el miedo a la muerte. Teman a la
muerte los que no temen el pecado; pero que no se
turben mucho los hijos de Dios ante el rostro
sombrío de ese mensajero, que los lleva al final de su
dolor y al comienzo de su gozo.

"La muerte es tuya", es parte del inventario del

creyente. 1 Corintios 3:22. ¿Tiene miedo un príncipe
de cruzar un mar angosto, que será coronado
cuando llegue a la orilla? ¡La muerte de los santos
será un acomodador para llevarlos a la presencia del
Rey de gloria! Este pensamiento pone lirios y rosas
en el rostro espantoso de la muerte, y lo hace
parecer amable. La muerte nos lleva a una corona
de gloria que nunca se desvanece. El día de la
muerte es mejor para el creyente que el día de su
nacimiento. ¡La muerte es una entrada a una
eternidad bendita! No temas a la muerte; más bien,
deja que tu corazón se reviva cuando pienses que
estas ruedas vibrantes del carro de la muerte no son
más que para llevarte a casa, a un reino eterno.
 La tercera petición en el Padrenuestro
"Hágase tu voluntad en la
tierra como en el cielo".
Mateo 6:10
Esta petición se
compone de dos partes:
la cuestión -hacer la
voluntad de Dios; la
manera —como es en el
cielo.
¿Qué se entiende por voluntad de Dios? Hay una doble
voluntad.
(1) La voluntad secreta de Dios , o "la voluntad de
su decreto". No oramos para que hagamos la
voluntad secreta de Dios. Esta voluntad secreta no
puede ser conocida, está encerrada en el propio
pecho de Dios, ¡y ni hombre ni ángel tienen llave
para abrirla!
(2) la voluntad revelada de Dios . Esta voluntad
está escrita en el libro de las Escrituras, que es una
declaración de la voluntad de Dios y revela lo que él
quiere que hagamos para nuestra salvación.
¿Para qué oramos con estas palabras, "Hágase tu voluntad"?
Oramos por dos cosas:

1. Por obediencia activa — para que podamos

hacer la voluntad de Dios activamente en lo que
él manda.
2. Por obediencia pasiva, para que podamos
someternos pacientemente a la voluntad de Dios, en
todo lo que él inflige.
Oramos para que podamos hacer la voluntad de Dios
activamente , suscribir todos sus mandamientos,
creer en Jesús, que es la gracia cardinal y llevar una
vida santa. Esta es la suma de toda religión, las dos
tablas personificadas, el hacer la voluntad de Dios.
"Que se haga tu voluntad". Debemos conocer su
voluntad antes de poder hacerlo. El conocimiento es
el ojo que debe dirigir el pie de la obediencia. En
Atenas se instaló un altar, "Al Dios desconocido".
Hechos 17:23. El conocimiento es la columna de
fuego para dar luz a la práctica; pero aunque el
conocimiento es un requisito, el conocimiento de la
voluntad de Dios no es suficiente sin hacerla. Si uno
tuviera un sistema de divinidad en su cabeza; si
tuviera "todo conocimiento", sin embargo, si faltara
la obediencia, su conocimiento sería cojo y no lo
llevaría al cielo. 1 Cor 13: 2. Conocer la voluntad de
Dios puede hacer que un hombre sea admirado, pero
hacerlo, ¡lo que lo hace bendecido! Conocer la
voluntad de Dios sin hacerla no nos coronará con la
felicidad eterna.
[1] El simple conocimiento de la voluntad de Dios es
ineficaz, no mejora el corazón. El conocimiento por
sí solo es como un sol de invierno, que no tiene calor
ni influencia; no calienta los afectos ni purifica la
conciencia. Judas era una gran luminaria, conocía la
voluntad de Dios, pero era un traidor.
[2] Saber sin hacer la voluntad de Dios empeorará el
caso. Calentará el infierno cuanto más caliente. "Ese
sirviente que conoce la voluntad de su amo y no
hace lo que su amo quiere, será golpeado con
muchos golpes". Lucas 12:47. El conocimiento de
muchos hombres es una antorcha para llevarlo al
infierno. Tú, que tienes conocimiento de la voluntad
de Dios, pero no la obedeces , ¿en qué superas al
diablo, que se transforma en ángel de luz? No es
correcto llamar a estos cristianos, que son
conocedores de la voluntad de Dios, pero no
hacedores de ella. Es impropio llamarlo comerciante
que nunca trabajó en su oficio. Precisamente así,
para llamarlo cristiano, que nunca trabajó en el
oficio de la religión verdadera. No descansemos en
conocer la voluntad de Dios. Que no se diga de
nosotros, como Plutarco habla de los griegos: "Ellos
sabían lo que era justo, pero no lo hicieron".
Pongamos manos a la obra en hacer la voluntad de
Dios. "Que se haga tu voluntad".

¿POR QUÉ es necesario hacer la voluntad de Dios?

(1) Fuera de equidad. Dios puede reclamar
justamente el derecho a nuestra obediencia. Él es
nuestro Creador y nuestro ser proviene de él; y es
justo que hagamos su voluntad, bajo cuya palabra
fuimos creados. Dios es nuestro Benefactor . Es solo
que, si nos da nuestra asignación, deberíamos darle
nuestra lealtad.
(2) El gran diseño de Dios en la Palabra es
hacernos hacedores de su voluntad.
[1] Todos los edictos y preceptos reales de Dios
son para llevarnos a ser hacedores de su
voluntad. ¿Por qué se esforzó en darnos la copia de
su ley y escribirla con su propio dedo, pero con este
fin? La Palabra de Dios no es sólo una regla de lo que
hemos de creer -pero lo que somos a la práctica .
"Hoy el Señor tu Dios te ha mandado que cumplas
estos estatutos; por tanto, los guardarás y los
cumplirás". Deuteronomio 26:16. Si les dice a sus
hijos cuál es su mente, no es solo para que ellos
conozcan su voluntad, sino que también háganla.
Dios nos da su Palabra, como un maestro le da una
copia a su erudito, para escribir después de ella; lo
da como su testamento y testamento, que debemos
ser los ejecutores para verlo cumplido.
[2] El fin de todas las promesas de Dios es
llevarnos a hacer su voluntad. Las promesas son
piedras angulares de la obediencia. "Una bendición
si obedeces"; como un padre da dinero a su hijo para
sobornarlo para que obedezca. Deuteronomio 11:27.
"Si escuchas la voz del Señor tu Dios para cumplir
todos sus mandamientos, el Señor tu Dios te pondrá
en alto sobre todas las naciones de la tierra; bendito
serás en la ciudad y en el campo". Deuteronomio 28:
1, 3. Las promesas son un estatuto real basado en la
obediencia .
[3] Las amenazas de Dios, permanezcan como el
ángel con una espada de fuego para disuadirnos
del pecado y hacernos hacedores de su voluntad.
"Una maldición si no obedeces". Deuteronomio
11:28. "Dios herirá el cuero cabelludo del que
todavía anda en sus delitos". Salmo 68:21. Estas
amenazas a menudo se apoderan de los hombres en
esta vida; se hacen ejemplos y se cuelgan en cadenas
para asustar a otros de la desobediencia.
[4] Toda la providencia de Dios debe hacernos hacedores
de su voluntad. Como el

hace uso de todas las estaciones del año para la

cosecha, por lo que todas sus diversas providencias
son para traer la cosecha de la obediencia.
[5] Se dice que nos envían aflicciones para
hacernos hacer la voluntad de Dios. "Cuando
Manasés estaba afligido, suplicó al Señor y se
humilló en gran manera". 2 Crónicas 33:12. La vara
tiene esta voz: "Sed hacedores de la voluntad de
Dios". La aflicción se llama horno. El horno derrite el
metal y luego se vierte en un molde nuevo. El horno
de Dios es para fundirnos y moldearnos en
obediencia.
[6] Las misericordias de Dios son para hacernos
hacer su voluntad. "Les ruego por la misericordia
de Dios, que presenten sus cuerpos en sacrificio
vivo". Romanos 12: 1. El cuerpo se pone por
sinécdoque para todo el hombre; si el alma no se
presentara a Dios tan bien como el cuerpo, no podría
ser un servicio razonable; por eso el apóstol dice:
"Por la misericordia de Dios os suplico que
presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo". Las
misericordias son las obligaciones más fuertes del
deber. "Los dibujé con cuerdas de hombre"; es decir,
con cordones de oro de mi misericordia. Oseas 11: 4.
En una palabra, todo lo que está escrito en la ley o el
evangelio tiende a esto, que debemos ser hacedores
de la voluntad de Dios. "Que se haga tu voluntad".
(3) Al hacer la voluntad de Dios, evidenciamos
SINCERIDAD. Como dijo Cristo en otro sentido: "Las
obras que hago, dan testimonio de mí". Juan 10:25.
No son todas nuestras palabras de oro , sino nuestras
obras, nuestro hacer
de la voluntad de Dios, que da testimonio de nuestra
sinceridad. No juzgamos la salud del cuerpo de un
hombre por su color intenso, sino por el pulso del
brazo, donde la sangre se agita principalmente. De la
misma manera, la solidez de un cristiano no debe
ser juzgada por su profesión; pero la estimación de
un cristiano debe tomarse por su obrar obediente, su
hacer la voluntad de Dios. Este es el mejor
certificado y testimonio para mostrar para el cielo.
(4) Hacer la voluntad de Dios propaga el
EVANGELIO. Es el diamante que brilla en la religión.
Otros no pueden ver esa fe que está en el
corazón, pero cuando ven que hacemos la voluntad
de Dios en la tierra, les hace tener una opinión
venerable de la religión cristiana y convertirse en
prosélitos de ella. Julián, en una de sus epístolas,
escribiendo a Arsatius, dice, "que la religión
cristiana floreció mucho, por la santidad y
obediencia de aquellos que
lo profesaba ".
(5) Al hacer la voluntad de Dios, mostramos
nuestro amor a Cristo. "El que tiene mis
mandamientos y los guarda , ése es el que me ama".
Juan 14:21. ¿Qué mayor amor a Cristo que hacer su
voluntad, aunque se cruce con la nuestra? Se
pensaría que todos aman a Cristo; pero, ¿cómo se
conocerá sino por esto? ¿Haces su voluntad en la
tierra? Es una cosa en vano que un hombre diga que
ama a Cristo, cuando menosprecia sus
mandamientos.
No hacer la voluntad de Dios en la tierra es un gran mal.
No hacer la voluntad de Dios es PECADO. Vamos en
contra de nuestras oraciones; oramos: "Hágase tu
voluntad", y sin embargo no obedecemos su
voluntad; refutamos nuestra propia oración! Vamos
en contra de nuestro voto en el bautismo; hemos
hecho voto de luchar bajo la bandera del Señor, de
obedecer su cetro, y este voto lo hemos renovado a
menudo en la Cena del Señor; si no hacemos la
voluntad de Dios en la tierra, rompemos nuestros
votos y Dios nos acusará de perjurio.
No hacer la voluntad de Dios es una tontería; porque
hay Dios vencedor. Si no le obedecemos , no podemos
resistirle . "¿Somos más fuertes que él?" 1 Corintios
10:22. "¿Tienes un brazo como Dios?" Job 40: 9.
¿Puedes medir brazos con él? ¡Oponerse a Dios es
como si un niño debiera pelear con un arcángel!
Oponerse a Dios es como si un montón de abrojos se
pusieran en batallón contra el fuego abrasador.
No hacer la voluntad de Dios es una tontería;
porque, si no lo hacemos, hacemos la voluntad del
diablo. ¿No es una locura complacer a un enemigo,
hacer su voluntad, que busca nuestra ruina? Pero,
¿alguno es tan perverso como para hacer la voluntad
del diablo? ¡Si! "Eres de tu padre el diablo, y
cumplirás los deseos de tu padre". Juan 8:44. Cuando
un hombre dice una mentira, ¿no hace la voluntad
del diablo? "Ananías, ¿por qué Satanás ha llenado tu
corazón para mentir al Espíritu Santo?" Hechos 5: 3.
No hacer la voluntad de Dios es PELIGROSO. Trae un
suicidio espiritual. Si la voluntad de Dios no es hecho
por nosotros, que tendrá su voluntad sobre nosotros!
Si no obedecemos su voluntad al mandar , la
obedeceremos al perecer . "El Señor Jesús será
revelado con sus ángeles poderosos, en fuego
llameante, tomando venganza de los que no
obedecen al evangelio". 2 Tesalonicenses 1: 7, 8. ¡O
debemos hacer su voluntad, o sufrirla !

(6) Hacer la voluntad de Dios es NUESTRO

BENEFICIO. Promueve nuestro propio interés
personal. Como si un rey ordenara a un súbdito que
cavara una mina de oro y le diera todo el oro que
había cavado. Dios nos pide que hagamos su
voluntad, por nuestro propio bien. "Y ahora, israelí,
¿qué exige el Señor tu Dios de ti, sino que temas al
Señor tu Dios, y guardes los mandamientos del
Señor, que yo te ordeno hoy, para tu bien?" Deut
10:13. Es la voluntad de Dios que nos arrepintamos ,
y esto es para nuestro bien; ¡porque el
arrepentimiento marca el comienzo de la remisión
de todos nuestros pecados! "Arrepiéntanse, para que
sean borrados sus pecados". Hechos 3:19. Es la
voluntad de Dios que creamos ; y por qué , ¡sino para
que seamos coronados con la salvación! "El que crea,
será salvo". Marcos 16:16. Lo que Dios quiere no es
tanto nuestro deber como nuestro privilegio; nos
pide que obedezcamos su voz, y es mucho para
nuestro bien. "Obedece mi voz y seré tu Dios". Jer
7:23. No solo te daré mis ángeles para que sean tu
guardia, sino que yo mismo sea tu porción; mi
espíritu será tuyo para santificarte; mi amor será
tuyo para consolarte; mi misericordia será tuya para
salvarte; "Yo seré tu Dios".
(7) Hacer la voluntad de Dios es nuestro HONOR.
Una persona piensa que es un honor que un rey le
hable para hacer algo. Los ángeles consideran que es
su mayor honor en el cielo hacer la voluntad de Dios.
[No nos agobian, sino que nos adornan.] Salviano.
¡Trabajar en hacer la voluntad de Dios es el mayor
honor del que es capaz una criatura mortal! Los
preceptos de Cristo no nos agobian, ¡ sino que nos
adornan!
(8) Hacer la voluntad de Dios en la tierra nos
hace COMO CRISTO y afines a él. Nos hace como
Cristo. ¿No es nuestra oración que seamos como
Cristo Jesucristo hizo la voluntad de su Padre? "Bajé
del cielo, no para hacer mi propia voluntad, sino la
voluntad del que me envió". Juan 6:38. Así como Dios
el Padre y Cristo tienen una sola esencia, así será
una sola. La voluntad de Cristo se fundió con la de su
Padre. "Mi comida es hacer la voluntad del que me
envió". Juan 4:34. Al hacer la voluntad de Dios en la
tierra, nos parecemos a Cristo, es más, somos
semejantes a él y somos de la sangre real del cielo.
Alejandro se llamó a sí mismo primo de los dioses;
pero ¡qué honor es ser semejante a Cristo!
"Cualquiera que haga la voluntad de mi Padre que
está en los cielos, ése es mi hermano, mi hermana y
mi madre". Mateo 12:50. ¿Se levantó el rey Salomón
de su trono para encontrarse con su madre y
colocarla en un trono junto a él? 1 Reyes 2:19. Cristo
otorgará tal honor a los que hacen la voluntad de
Dios; él

los saludará como a sus parientes, y los sentará en

un trono glorioso en el anfiteatro del cielo.
(9) Hacer la voluntad de Dios en la tierra trae PAZ en vida
y muerte.
[1] Hacer la voluntad de Dios trae paz a la vida . " Al
guardar tus preceptos, hay una gran recompensa",
no solo por guardarlos , sino por guardarlos. Salmo
19:11. Cuando caminamos de cerca con Dios en
obediencia, se deja entrar un gozo secreto en el
alma, ¡y con qué rapidez y alegría se mueven las
ruedas del alma cuando están aceitadas con el aceite
de la alegría!
[2] Hacer la voluntad de Dios trae paz en la muerte .
Cuando Ezequías pensó que estaba a punto de morir,
¿qué le dio consuelo? Que había hecho la voluntad
de Dios. "Acuérdate, oh Señor, te ruego, cómo he
caminado delante de ti en verdad, y he hecho lo que
es bueno a tus ojos". Isaías 38: 3. Si algo nos facilita
la almohada al morir, será que nos hemos esforzado
por hacer la voluntad de Dios en la tierra. ¿Alguna
vez escuchaste algún grito en su lecho de muerte de
que habían hecho demasiado la voluntad de Dios?
¡No! ¿No ha sido que no han hecho más su voluntad,
que se han quedado tan cortos en su obediencia?
¡Hacer la voluntad de Dios será tanto tu consuelo
como tu corona!
(10) Si no hacemos la voluntad de Dios, seremos
considerados como despreciadores de su
voluntad. Deje que Dios diga lo que
quiera; sin embargo, los hombres seguirán pecando,
que es condenar a Dios. "¿Por qué el impío desprecia
a Dios?" Salmo 10:13. Despreciar a Dios es peor que
rebelarse. Las tribus de Israel se rebelaron contra
Roboam, porque les hizo más pesado el yugo. 1
Reyes 12:16. Pero menospreciar a Dios es peor: es
menospreciarlo; es burlarse de él y afligirlo en su
cara. ¡Tal afrenta lo hará sacar su espada en
venganza!
¿De qué MANERA debemos hacer la voluntad de
Dios para que podamos ser aceptados?
La manera de hacer la voluntad de Dios es lo
principal. Los escolásticos dicen bien, "la forma de
una cosa es tan necesaria como la cosa misma". Si un
hombre construye una casa y al propietario no le
gusta , si no es de su opinión, todos sus gastos se
pierden. De la misma manera, si no hacemos la
voluntad de Dios en

de la manera correcta, no se acepta. No solo

debemos hacer lo que él designe, sino también lo que
él designe. Aquí reside la verdadera
sangre vital de la religión salvadora. Por lo tanto, es
una gran pregunta: "¿De qué manera debemos hacer
la voluntad de Dios para que podamos ser
aceptados?"
(1) Hacemos la voluntad de Dios de manera
aceptable, cuando hacemos deberes
ESPIRITUALMENTE. "Adoramos a Dios en el
espíritu". Filipenses 3: 3. Servir a Dios
espiritualmente es cumplir con los deberes desde un
principio interno. Los fariseos eran muy exactos
sobre la parte externa de la adoración a Dios. ¡Cuán
celosos fueron en la observación externa del sábado,
e incluso acusaron a Cristo de violarlo! Pero todo
esto era solo obediencia externa: no había nada de
espiritualidad en ello. Hacemos la voluntad de Dios
aceptablemente cuando le servimos desde un
principio renovado de gracia. Un cangrejo puede dar
fruto, así como un buen manzano , pero no es tan
buen fruto como el otro, porque no proviene de una
raíz tan dulce. De la misma manera, una persona no
regenerada puede hacer tanta obediencia externa
como un hijo de Dios; puede orar tanto, oír
tanto, pero su obediencia es dura y amarga, ¡porque
no proviene de la dulce y agradable raíz de la gracia!
El principio interno de la obediencia es la fe; por eso
se llama "la obediencia de la fe". Romanos 16:26.
Pero, ¿por qué este hilo plateado de fe debe atravesar
toda la obra de obediencia? Porque la fe mira a
Cristo en todo deber , toca el borde de su manto; ya
través de Cristo se aceptan tanto la persona como la
ofrenda. Efesios 1: 6.
(2) Hacemos la voluntad de Dios de manera
aceptable, cuando PREFERIMOS su voluntad
antes que todas las demás. Si Dios quiere una cosa
y el hombre quiere lo contrario, no debemos
obedecer la voluntad del hombre, sino la de Dios. "Si
es justo escucharos más que a Dios, juzgáis vosotros
". Hechos 4:19. Dios dice: "No harás una imagen
tallada". El rey Nabucodonosor erigió una imagen de
oro para ser adorada; pero los tres hijos hebreos , o
más bien campeones , resolvieron que la voluntad de
Dios prevalecería y que le obedecerían, ¡aunque con
la pérdida de sus vidas! "Sea sabido para ti, oh rey,
que no serviremos a tus dioses, ni adoraremos la
estatua de oro que has erigido." Dan 3:18.
(3) Hacemos la voluntad de Dios de manera
aceptable, cuando la hacemos como se hace en el
cielo, es decir, como lo hacen los ÁNGELES. Para
hacer la voluntad de Dios como los ángeles

"marca nuestra semejanza con ellos, no nuestra

igualdad con ellos", Brugensis. Denota tanto que
debemos asemejarnos a ellos y hacer de ellos
nuestro modelo. Aunque no podemos igualar a los
ángeles en hacer la voluntad de Dios, debemos
imitarlos ; un niño no puede escribir tan bien como
el original, pero lo copia e imita.
[1] Hacemos la voluntad de Dios como los
ángeles en el cielo, cuando la hacemos
REGULARMENTE , sin vacilar; cuando vamos de
acuerdo con las instituciones divinas, no con los
decretos de los concilios o las tradiciones de los
hombres. Los ángeles no hacen nada más que lo que
se les ordena; no son para meras ceremonias
formales . Así como hay leyes en la tierra que
obligan, así la Escritura es la ley de Dios, que
debemos observar exactamente. Así como el reloj
está fijado por el reloj de sol , nuestra obediencia es
correcta cuando pasa por el reloj de sol de la
Palabra. Si la obediencia no tiene la Palabra por
regla, no está haciendo la voluntad de Dios, sino la
nuestra; es adoración a la voluntad.
El Señor quiere que Moisés haga el tabernáculo
según el modelo . Éxodo 25:40. Si Moisés hubiera
omitido algo o le hubiera agregado algo, habría sido
muy provocador para Dios. Para mezclar algo de
nuestra propia invención en el culto de Dios, es ir
fuera , sí, contraria al patrón. Su adoración es la niña
de sus ojos, aquello de lo que es más tierno; y no hay
nada contra lo que haya mostrado más su disgusto
que corromper su adoración . ¡Cuán severamente
castigó a Nadab y Abiú por ofrecer fuego extraño, es
decir, un fuego que Dios no ha sancionado! Levítico
10: 2. Todo lo que no está divinamente designado,
está ofreciendo fuego extraño. Hay en muchos, un
extraño picor después de la superstición. Aman una
religión chillona y están más por la pompa de la
adoración que por la pureza de la adoración; que no
puede agradar a Dios. Como si Dios no fuera lo
suficientemente sabio para establecer la forma en
que se le servirá, el hombre será tan valiente como
para prescribirle. Empujar las invenciones humanas
en cosas sagradas es hacer nuestra voluntad, no la
de Dios; y dirá: "¿Quién ha pedido esto de tu mano?"
Isaías 1:12. Hacemos la voluntad de Dios como se
hace en el cielo cuando la hacemos con regularidad,
cuando reverenciamos sus instituciones y el modo
de adoración, que tienen el sello de la autoridad
divina sobre ellos.
[2] Hacemos la voluntad de Dios como la hacen
los ángeles en el cielo, cuando la hacemos
COMPLETAMENTE , sin cortar nada , cuando
hacemos toda la voluntad de Dios. Los ángeles en el
cielo hacen todo lo que Dios manda; no dejan nada
de su

se deshará. "Ustedes sus ángeles, que guardan sus

mandamientos". Salmo 103: 20. Si Dios envía un
ángel a la virgen María, él va a la misión de Dios; si
les da a sus ángeles el encargo de ministrar por los
santos, ellos obedecen. Hebreos 1:14. No puede
soportar la obediencia angelical, dejar sin cumplir ni
un ápice de la voluntad de Dios. Es hacer la voluntad
de Dios como los ángeles cuando hacemos toda su
voluntad. Este fue el encargo de Dios a Israel.
"Acuérdate y cumple todos mis mandamientos".
Num 15:40, Se dice de David: "He encontrado a
David, un hombre conforme a mi corazón, que
cumplirá toda mi voluntad". (Gr. Todas mis
voluntades.) Hechos 13:22. Cada comando tiene la
misma autoridad; y si hacemos la voluntad de Dios
con rectitud, la hacemos de manera uniforme;
obedecemos cada parte y rama de su voluntad; nos
unimos a la primera y segunda mesa. Seguramente
le debemos a Dios nuestro Padre, lo que los papistas
dicen que le deben a su iglesia falsa, obediencia
ilimitada. Debemos inclinarnos a cada orden, ya que
la aguja se mueve en cualquier dirección que la
arrastre la piedra de carga.
Muchos hacen la voluntad de Dios a medias, escogen
y eligen en religión: en algunas cosas cumplen con la
voluntad de Dios, pero no en otras. Son como un
caballo cojo, que pone algunas de sus patas en el
suelo, pero las favorece. El que toca un laúd debe
tocar todas las cuerdas o estropea toda la música.
Los mandamientos de Dios pueden compararse a un
laúd de diez cuerdas ; debemos obedecer su
voluntad en cada orden, golpear cada cuerda, o no
podremos hacer una buena melodía en la piedad. El
tejón tiene un pie más corto que el
otro, por lo que los hipócritas son más bajos en
algunas tareas que en otras. Algunos orarán, pero no
darán limosna. Algunos escuchan la palabra, pero no
perdonan a sus enemigos. Otros reciben la
Santa Cena, pero no restituyen. ¿Cómo pueden ser
santos, que no son justos? Los hipócritas profesan
ser bellos, pero cuando se trata de sacrificar a Isaac ,
crucificar el pecado amado o separarse de parte de
su estado para Cristo, hacen una pausa y dicen,
como Naamán: "En esto, que el Señor perdone a tu
siervo". 2 Reyes 5:18. Esto está lejos de hacer la
voluntad de Dios como lo hacen los ángeles. Dios no
acepta a los que hacen su voluntad a medias. Si su
sirviente hiciera parte de su trabajo que usted
le ordena, pero no todo, ¿cómo le gustaría?
Pero, ¿quién puede hacer toda la voluntad de Dios?
Aunque no podemos obedecer la voluntad de Dios
todo legalmente , es posible que evangélicamente ;
cual es:

(1) Cuando lamentamos que no podemos hacer

mejor la voluntad de Dios; cuando fallamos,
lloramos. Romanos 7:24.
(2) Cuando es el deseo de nuestra alma hacer toda la
voluntad de Dios, "Oh, si mis caminos fuesen
dirigidos a guardar tus preceptos". Salmo 119: 5. Lo
que a un hijo de Dios le falta en fuerza, lo compensa
con el deseo, [en los grandes asuntos basta con
haber tenido la voluntad].
(3) Cuando nos esforzamos en la medida de lo
posible, hacer toda la voluntad de Dios. Cuando un
padre le pide a su hijo que levante un objeto pesado
—y el niño no puede hacerlo— pero lo intenta y hace
todo lo posible, el padre lo acepta como si lo hubiera
hecho. De la misma manera, esforzarnos por hacer
nuestro mejor esfuerzo, es hacer la voluntad de Dios
evangélicamente. Aunque no sea de nuestra
satisfacción, es para la aceptación de Dios.
[3] Hacemos la voluntad de Dios como la hacen
los ángeles en el cielo, cuando la hacemos
SINCERAMENTE y sin pretensiones. Hacer la
voluntad de Dios con sinceridad se basa en dos cosas,
primero, hacer la voluntad de Dios por puro respeto
a su mandato. El sacrificio de Isaac por parte de
Abraham fue contrario a la carne y la sangre.
Sacrificar al hijo de su amor, al hijo de la promesa, y
por ninguna otra mano que la del padre, era un
servicio duro; pero, debido a que Dios lo ordenó, y
por puro respeto al mandamiento, Abraham
obedeció. Esto es hacer la voluntad de Dios
correctamente, cuando, aunque no sentimos gozo o
consuelo en el deber, sin embargo, porque Dios
manda que obedezcamos. No consuelo, pero la orden
es la base del deber. Así, los ángeles hacen la
voluntad de Dios en el cielo. Su mandato es el peso
que pone en marcha las ruedas de su obediencia. En
segundo lugar, hacer la voluntad de Dios con
sinceridad es hacerlo con un ojo puro para su gloria.
Los fariseos hicieron la voluntad de Dios dando
limosna; pero lo que era una mosca muerta en el
ungüento, era que no tenían como objetivo su
gloria, sino la vanagloria; tocaron una trompeta. Jehú
hizo la voluntad de Dios al destruir a los
adoradores de Baal, y Dios lo elogió por ello; pero
debido a que su objetivo era más establecerse en el
reino que en la gloria de Dios, Dios lo consideró nada
mejor que un asesinato, y dijo que vengaría la sangre
de Jezreel sobre la casa de Jehú. Oseas 1: 4. Miremos
nuestros fines en obediencia; aunque disparemos
poco, apuntemos correctamente. Podemos hacer la
voluntad de Dios, pero no con un corazón perfecto.
"Amasías hizo lo recto ante los ojos del Señor, pero
no con un corazón perfecto". 2 Crónicas 25: 2. La
acción fue correcta para el caso, pero su objetivo no
era correcto; y la acción que carece de buena
puntería, carece de buen resultado. Él

hace la voluntad de Dios con rectitud que la hace con

rectitud, cuyo fin es honrar a Dios y levantar su
nombre en el mundo. Un alma bondadosa hace de
Dios su centro. Como Joab, cuando tomó a Rabá,
envió por el rey David para que pudiera tener la
gloria de la victoria, así cuando un alma
misericordiosa ha cumplido con cualquier deber,
desea que la gloria de todos sea dada a Dios. 2 Sam
12:27, 28. "Para que Dios sea glorificado en todas las
cosas". 1 Pedro 4:11. Es hacer la voluntad de Dios
como los ángeles, cuando no solo adelantamos su
gloria, sino que diseñamos su gloria. Se dice que los
ángeles arrojan sus coronas ante el trono.
Apocalipsis 4:10. Las coronas son signos del mayor
honor, pero los ángeles las ponen a los pies del Señor
para mostrar que atribuyen la gloria de todo lo que
le hacen.
[4] Hacemos la voluntad de Dios como la hacen
los ángeles en el cielo, cuando la hacemos DE
VOLUNTAD y sin quejarnos. A los ángeles les
encanta ser empleados en el servicio de Dios. Es su
cielo servir a Dios. De buena gana descienden del
cielo a la tierra cuando traen mensajes de Dios y
buenas nuevas a la iglesia. Siendo el cielo un lugar
de mucha alegría, los ángeles no lo dejarían ni un
minuto si no fuera porque se deleitan tan
infinitamente en hacer la voluntad de Dios. Nos
parecemos a los ángeles cuando hacemos la
voluntad de Dios voluntariamente. "Y tú, Salomón,
hijo mío, sirve al Señor con voluntad". 1 Crónicas 28:
9. El pueblo de Dios se llama pueblo dispuesto; dan a
Dios una ofrenda voluntaria; aunque no pueden
servirle perfectamente, le sirven de buena gana.
Salmo 110: 3.
Un hipócrita puede hacer algunas cosas correctas
, pero no se deleita en el deber; lo hace más por
miedo al infierno que por amor a Dios. Cuando hace
la voluntad de Dios, es contra su propia voluntad.
Caín trajo su sacrificio, pero a regañadientes; su
culto era más una tarea que una ofrenda, más una
penitencia que un sacrificio; hizo la voluntad de Dios,
pero contra su propia voluntad. Debemos dejarnos
llevar por las alas del deleite en cada deber. Israel
debía tocar las trompetas cuando ofrecían
holocaustos. Números 10:10. Esto fue para mostrar
su gozo y alegría al servir a Dios. Debemos leer y
escuchar la Palabra con deleite. "Fueron
encontradas tus palabras, y las comí, y tu palabra
fue para mí el gozo y el regocijo de mi corazón". Jer
15:16. Un alma piadosa va a la Palabra como a una
fiesta, o como uno iría con deleite a escuchar música.
Sleidan informa que los protestantes de Francia
tenían una iglesia a la que llamaron paraíso, porque,
cuando estaban en la casa de Dios,

se pensaban en el paraíso. Los santos acuden como

palomas a las ventanas de la casa de Dios. "¿Quiénes
son estos que vuelan como palomas a sus ventanas?"
Isaías 60: 8. No es que una persona verdaderamente
regenerada tenga siempre el mismo temperamento
alegre de obediencia; a veces puede encontrar una
indisposición y cansancio del alma, pero su
cansancio es su carga; está cansado de su cansancio;
reza, llora, utiliza todos los medios para recuperar la
presteza y la libertad en el servicio de Dios que
estaba acostumbrado a tener. Hacer la voluntad de
Dios de manera aceptable es hacerlo de buena gana.
El deleite en el deber es mejor que el deber en sí. El
músico no es elogiado por tocar mucho, pero bien;
no se trata de cuánto hacemos, sino de cuánto
amamos. "¡Oh, cuánto amo yo tu ley!" Salmo 119: 97.
El amor es como almizcle entre el lino, que lo
perfuma; perfuma la obediencia y la hace subir al
cielo como un dulce incienso. Es hacer la voluntad
de Dios como lo hacen los ángeles en el cielo. Son
embelesados de alegría mientras alaban a Dios; se
dice que tienen arpas en la mano, para indicar su
alegría en el servicio de Dios. Apocalipsis 15: 2.
[5] Hacemos la voluntad de Dios como los
ángeles en el cielo cuando la hacemos
FERVENTEMENTE y sin descuido. "Ferviente de
espíritu, sirviendo al Señor"; una metáfora tomada
del agua cuando hierve y hierve. De la misma
manera, nuestros afectos deben hervir en celo y
fervor. Romanos 12:11. Los ángeles sirven a Dios con
tal fervor e intensidad que se les llama serafines , de
una palabra hebrea que significa arder , para
mostrar que todos están en llamas; arden de amor y
celo al hacer la voluntad de Dios. Salmo 104: 4. La
gracia convierte a un santo en serafín. Aarón debe
poner carbones encendidos al incienso. Levítico
16:12. El incienso era un tipo de oración, que
quemaba carbones de celo, para mostrar que el
fuego del celo debe ser puesto en el incienso de la
oración. La formalidad mata de hambre al deber.
¿Es como los ángeles: servir a Dios con torpeza y
frialdad? El deber sin fervor es como un sacrificio
sin fuego. Deberíamos ascender al cielo en un carro
ardiente de devoción.
[6] Hacemos la voluntad de Dios como los ángeles
en el cielo cuando le damos lo MEJOR en cada
servicio. "De todos tus dones, ofrecerás lo mejor de
ellos". Entumecido 18:29. "En el lugar santo harás
que se derrame el vino fuerte al Señor como
libación". Entumecimiento 28: 7. Es posible que los
judíos no ofrezcan al Señor vino débil o
mezclado, sino vino fuerte, para dar a entender que
debemos ofrecer a Dios lo mejor, el más fuerte de
nuestros afectos. Si el cónyuge tuviera una taza más
jugosa y especiada, Cristo
debería beber de eso. "Te haré beber vino especiado
del jugo de mi granada". Cánticos 8: 2. Así, los
ángeles del cielo hacen la voluntad de Dios; le sirven
de la mejor manera; le dan sus seráficas alabanzas
de alta cuerda. Así, el que ama a Dios, le da la flor y
nata de su obediencia. Dios exigió la grasa de todo el
sacrificio como su merecido. Lev 3:16. A los
hipócritas no les importa qué servicios le brindan a
Dios; piensan en disuadirlo con cualquier cosa; no
ponen ningún costo en sus deberes. "Caín trajo del
fruto de la tierra". Génesis 4: 3. El Espíritu Santo notó
que la ofrenda de Abel era costosa. Él "trajo de las
primicias de su rebaño y de la grosura de ellas".
Génesis 4: 4. Cuando habla de la ofrenda de Caín,
solo dice: "Trajo del fruto de la tierra". Hacemos bien
la voluntad de Dios cuando le ofrecemos cosas
gordas, le dedicamos lo mejor. Domiciano no quería
que su imagen fuera tallada en madera o hierro, sino
en oro. Dios tendrá lo mejor que tenemos: servicios
de oro .
[7] Hacemos la voluntad de Dios como los
ángeles en el cielo cuando la hacemos LISTA y
rápidamente. Los ángeles no discuten ni razonan el
caso, pero tan pronto como reciben su encargo y
comisión de Dios, inmediatamente obedecen. Para
mostrar cuán preparados están para ejecutar la
voluntad de Dios, los querubines, que representan a
los ángeles, se describen con alas. Por tanto,
debemos hacer la voluntad de Dios como ángeles.
Tan pronto como Dios hable la Palabra, debemos
tener la ambición de obedecer. ¡Pobre de mí!
¡Cuánto tiempo pasa a veces antes de que podamos
obtener el permiso de nuestro corazón para ir a un
deber! Cristo fue más fácilmente a la cruz que
nosotros al trono de la gracia. ¡Cuántas disputas y
excusas tenemos! ¿Es esto para hacer la voluntad de
Dios como la hacen los ángeles en el cielo? Oh,
sacudámonos de este atraso al deber, como Pablo se
sacudió la víbora.
"He aquí dos mujeres, y el viento estaba en sus alas".
Zacarías 5: 9. Las alas son veloces, pero el viento en
las alas es gran rapidez; tal disposición debe estar en
nuestra obediencia. Tan pronto como Cristo le
ordenó a Pedro que soltara su red, él la soltó, y ya
sabes el éxito que tuvo. Lucas 5: 4. Fue profetizado
de los que fueron llevados a casa a Cristo: "Tan
pronto como me oigan, me obedecerán". Salmo
18:44.
[8] Hacemos la voluntad de Dios como los
ángeles en el cielo cuando la hacemos
CONSTANTEMENTE. Los ángeles nunca se cansan
de hacer la voluntad de Dios; le sirven día y noche.
Apocalipsis 7:15. Por eso debemos imitarlos.
"Bienaventurado el que hace justicia en todo
tiempo". Salmo 106: 3. Constancia

coronas de obediencia. [La justicia no consiste en

comenzar sino en completar la obra.] Cipriano.
Nuestra obediencia debe ser como el fuego del altar,
que se mantuvo encendido continuamente . Lev 6:13.
Los hipócritas pronto abandonan la voluntad de
Dios. Son como el crisólito, que es de un color dorado
por la mañana, muy brillante a la vista , pero hacia
la tarde se vuelve opaco y pierde su esplendor.
Debemos seguir haciendo la voluntad de Dios,
debido a la gran pérdida que nos sobrevendrá si no
la hacemos. Habrá una pérdida de honor. "Que nadie
tome tu corona"; lo que implica que si la iglesia de
Filadelfia dejara de obedecer, perdería su corona, es
decir, su honor y reputación. Apocalipsis 3: 2: La
apostasía crea infamia. Judas vino de un apóstol
para ser un traidor, lo cual fue una deshonra. Si
renunciamos a nuestra obediencia, es una pérdida
de todo lo que ya se ha hecho; como si se trabajara
en plata y luego se recogieran todas las puntadas.
Todas las oraciones de un hombre se pierden, todos
los sábados que ha guardado se pierden; Desentraña
todas sus buenas obras. "No se mencionará toda su
justicia que ha hecho". Ezequiel 18:24. Deshace todo
lo que ha hecho; como si uno hiciera un hermoso
dibujo con el lápiz, y luego viniera con su esponja y
lo borrara de nuevo. Pérdida del alma y felicidad.
"Estábamos en un buen camino hacia el cielo, pero
dejamos de hacer la voluntad de Dios, perdimos la
excelente gloria y estamos hundidos más en la
condenación". "Mejor hubiera sido no haber
conocido el camino de la justicia que, después de
haberlo conocido, apartarse del santo
mandamiento". 2 Pedro 2:21. Por tanto, sigamos
haciendo la voluntad de Dios. La constancia pone la
corona sobre la cabeza de la obediencia.
Utilice 1. Para instrucción.
(1) Vea de ahí nuestra impotencia. No tenemos
ningún poder innato para hacer la voluntad de Dios.
¿Qué necesidad hay de orar, "Hágase tu voluntad", si
tenemos el poder de nosotros mismos para hacerlo?
Me asombra que los libre albedríos recen esta
petición.
(2) Si vamos a hacer la voluntad de Dios en la tierra
como la hacen los ángeles en el cielo, observe la
locura de aquellos que siguen un patrón equivocado.
Hacen lo que hacen la mayoría de sus vecinos: si
hablan en vano en sábado, si de vez en cuando
hacen un juramento, es costumbre de sus vecinos
hacerlo; pero debemos hacer la voluntad de Dios,
como los ángeles en el cielo. Debemos hacer de los
ángeles nuestros modelos y no nuestros vecinos. Si
nuestros vecinos hacen la voluntad del diablo, ¿ lo
haremos nosotros también? Si nuestros vecinos van
al infierno, ¿ deberíamos ir allí también en busca de
compañía?
(3) Vea aquí lo que puede hacernos anhelar estar en
el cielo, donde haremos la voluntad de Dios
perfectamente, como hacen los ángeles. ¡Pobre de
mí! ¡Cuán defectuosos somos en nuestra obediencia
aquí! ¡Cuán lejos nos quedamos cortos! No podemos
escribir una línea de santidad sin borrar. Nuestras
cosas santas están manchadas como la luna, que,
cuando brilla más, tiene una mancha oscura; pero
en el cielo haremos la voluntad de Dios
perfectamente, como los ángeles en la gloria.
Utilice 2. Para reproche.
(1) Reprueba a los que no hacen la voluntad de Dios.
Tienen un conocimiento de la voluntad de Dios,
pero aunque la conocen, no la hacen. Saben lo que
Dios quiere que eviten. Saben que no deben jurar.
"No jures en absoluto." Mateo 5:34. "Por jurar la
tierra está de luto". Jer 23:10. Sin embargo, aunque
rezan "santificado sea tu nombre", lo profanan
lanzando juramentos, como balas contra el cielo.
Saben que deben abstenerse de la fornicación y la
inmundicia; sin embargo, no pueden sino morder el
anzuelo del diablo, si él lo ceba con carne. Judas 7.
Saben lo que Dios quiere que practiquen, pero
"Dejan sin hacer las cosas que deberían haber
hecho". Saben que es la voluntad de Dios que sean
verdaderos en sus promesas, justos en sus tratos,
buenos en sus relaciones; pero no lo hacen. Saben
que deben leer las Escrituras, consultar los oráculos
de Dios, pero la Biblia, como una armadura oxidada,
está colgada y rara vez se usa; se ven más suaves en
una baraja de cartas que en una Biblia. Saben que
sus casas deben ser viveros de piedad, pero no
tienen piedad en ellas; no perfuman sus casas con
oración. ¡Qué hipócritas son los que se arrodillan en
la iglesia y alzan los ojos al cielo y dicen: "Hágase tu
voluntad", y sin embargo no tienen ningún interés
en hacer la voluntad de Dios! ¿Qué es esto, sino
colgar una bandera de desafío contra el cielo? La
rebelión es como pecado de brujería.
(2) Reprueba a los que no hacen la voluntad de Dios
de una manera correcta y aceptable. No hacen
completamente la voluntad de Dios. Le obedecerán
en algunas cosas, pero no en otras; como si un siervo
hiciera parte de tu trabajo, le ordenas , pero no todo.
Jehú destruyó la idolatría de Baal, pero dejó los
becerros de oro de Jeroboam en pie. 2 Reyes 10:28,
29. Algunos observarán los deberes de la segunda
mesa, pero no la primera. Otros hacen una alta
profesión, como si

sus lenguas habían sido tocadas con un carbón del

altar de Dios, pero viven ociosos; de quien el apóstol
se queja así: "Oímos que hay algunos que andan
entre vosotros desordenadamente, sin trabajar en
absoluto". 2 Tesalonicenses 3:11. Vivir por fe y vivir
por vocación debe ir de la mano. Es malo no hacer
toda la voluntad de Dios.
No hacen la voluntad de Dios con ardor ni con
alegría. No ponen brasas al incienso; traen su
sacrificio, pero no su corazón. Esto está lejos de
hacer la voluntad de Dios como los ángeles. ¿Cómo
puede Dios agradarle el servicio sin corazón? ¿Cómo
puede él ocuparse de nuestros deberes si nosotros
mismos no los hacemos?
Utilice 3. Para examen.
Examinemos todas nuestras acciones, si están de
acuerdo con la voluntad de Dios. La voluntad de Dios
es la regla y el estándar: es el reloj solar mediante el
cual debemos regular todas nuestras acciones. No es
un buen obrero que no trabaja según las reglas. De
la misma manera, no puede ser cristiano quien no
va de acuerdo con la regla de la voluntad de Dios.
Examinemos nuestras acciones para ver si cuadran y
están de acuerdo con la voluntad de Dios. ¿Son
nuestros discursos de acuerdo con su voluntad? ¿Son
nuestras palabras sabrosas, sazonadas con gracia?
¿Está nuestra ropa de acuerdo con la voluntad de
Dios? "De la misma manera quiero que las mujeres
se vistan con ropa modesta", no lascivas y chillonas.
1 Timoteo 2: 9. ¿Está nuestra dieta de acuerdo con la
voluntad de Dios? ¿Sostenemos la brida de oro de la
templanza, y solo tomamos lo que pueda satisfacer a
la naturaleza antes que hartarse? Demasiado aceite
ahoga la lámpara. ¿Está todo nuestro
comportamiento de acuerdo con la voluntad de
Dios? ¿Somos modelos de prudencia y piedad?
¿Brillamos como luces brillantes en el mundo
oscuro? Oramos: "Hágase tu voluntad como en el
cielo". ¿Somos como nuestro patrón? ¿Harían esto
los ángeles si estuvieran en la tierra? ¿Jesucristo
haría esto? Es ser como Cristo, cuando vivimos
nuestra oración y nuestras acciones son la
contraparte de la voluntad de Dios.
Utilice 4. Para exhortación.
Seamos hacedores de la voluntad de Dios, "Hágase tu
voluntad". Es nuestra sabiduría hacer la voluntad
de Dios. "Guarda y cumple estos estatutos, porque
esta es tu sabiduría". Deuteronomio 4: 6. Además, es
nuestra seguridad . ¿No ha acompañado siempre la
miseria al hacer nuestra propia voluntad y la
felicidad al hacer la voluntad de Dios?

(1) La miseria siempre ha acompañado al hacer

nuestra propia voluntad. Nuestros primeros
padres dejaron la voluntad de Dios para cumplir la
suya propia, comiendo del fruto prohibido; ¿Y qué
salió de eso? ¡La manzana tenía un corazón amargo!
Compraron una maldición para ellos y para toda su
posteridad. El rey Saúl dejó la voluntad de Dios para
hacer la suya propia; perdonó a Agog ya lo mejor de
las ovejas, y ¿cuál fue el resultado, sino la pérdida de
su reino?
(2) La felicidad siempre ha acompañado al hacer
la voluntad de Dios. José obedeció la voluntad de
Dios al rechazar el abrazo de su amante; ¿y no era
éste su preferencia? Dios lo levantó para ser el
segundo hombre en el reino. Daniel hizo la voluntad
de Dios en contra del decreto del rey; dobló su
rodilla en oración a Dios, y ¿no hizo Dios que toda
Persia se arrodillara ante Daniel?
(3) La manera de tener nuestra voluntad es hacer
la voluntad de Dios. ¿Tendríamos una bendición en
nuestra propiedad? Hagamos la voluntad de Dios.
"Experimentarás todas estas bendiciones si obedeces
al Señor tu Dios: serás bendecido en tus ciudades y
en el campo. Serás bendecido con muchos niños y
campos productivos. Serás bendecido con vacas y
rebaños fértiles. Serás bendecido con cestas llenas
de fruta, y con cuencos de amasar llenos de pan.
Serás bendecido dondequiera que vayas, tanto al
entrar como al salir. El Señor vencerá a tus enemigos
cuando te ataquen. El Señor bendecirá todo lo que
hagas y llenará de trigo tus graneros. El Señor tu
Dios te bendecirá en la tierra que te da. Si obedeces
los mandamientos del Señor tu Dios y andas en sus
caminos, el Señor te establecerá como su pueblo
santo como él solemnemente prometió hacer ".
Deuteronomio 28: 2-9. Esta es la forma de tener una
buena cosecha. ¿Tendríamos una bendición en
nuestras almas? Hagamos la voluntad de Dios.
"Obedece mi voz y seré tu Dios". Jer 7:23. "Me
concederé sobre ti, como porción eterna; mi gracia
será tuya para santificarte, mi misericordia será tuya
para salvarte". Ves que no pierdes nada al hacer la
voluntad de Dios; es la forma de tener tu propia
voluntad. Deje que Dios tenga su voluntad al ser
obedecido, y usted tendrá su voluntad al ser salvo.
¿Cómo haremos bien la voluntad de Dios?
(1) Obtenga conocimientos sólidos. Debemos
conocer su voluntad antes de poder hacerla ; el
conocimiento es el ojo para dirigir el pie de la
obediencia. Los papistas hacen
la ignorancia, la madre de la devoción ; pero Cristo
hace de la ignorancia la madre del error . "Estás en
un error, no conociendo las Escrituras". Mateo 22:29.
Debemos conocer la voluntad de Dios antes de poder
hacerla correctamente. El afecto sin conocimiento es
como un caballo lleno de corazón, pero sus ojos
están apagados.
(2) Si queremos hacer la voluntad de Dios
correctamente, trabajemos por la abnegación. A
menos que neguemos nuestra propia voluntad,
nunca haremos la voluntad de Dios. Su voluntad y la
nuestra son como el viento y la marea cuando son
contrarias. Él quiere una cosa, nosotros queremos
otra; nos llama a ser crucificados al mundo, por
naturaleza amamos al mundo; nos llama a perdonar
a nuestros enemigos, por naturaleza llevamos
malicia en nuestros corazones. Su voluntad y la
nuestra son contrarias, y hasta que podamos cruzar
nuestra propia voluntad, nunca cumpliremos su
voluntad.
(3) Consigamos corazones humildes. El orgullo es
la fuente de la desobediencia. "¿Quién es el Señor
para que yo escuche su voz?" Éxodo 5: 2. Un hombre
orgulloso piensa que es inferior a él, rebajarse a la
voluntad de Dios. Se humilde. El cristiano humilde
dice: "Señor, ¿qué quieres que haga?" Pone, por así
decirlo, un papel en blanco en la mano de Dios; y le
pide que escriba lo que quiera, y lo suscribirá.
(4) Pida gracia y fuerza a Dios para hacer su
voluntad. "Enséñame a hacer tu voluntad"; como si
David hubiera dicho: Señor, no necesito que me
enseñen a hacer mi propia voluntad, puedo hacerlo
lo suficientemente rápido , pero enséñame a hacer tu
voluntad. Salmo 143: 10. Y lo que puede añadir alas a
la oración, es buena palabra de Dios, "Y pondré mi
Espíritu en vosotros, y causar que andéis en mis
estatutos." Ezequiel 36:27. Si la piedra de carga
arrastra el hierro, no es difícil que el hierro se
mueva. De la misma manera, si el Espíritu de Dios lo
habilita, no será difícil, sino más bien agradable
hacer la voluntad de Dios.

II. Oramos para que tengamos la gracia de

someternos pacientemente a la voluntad de Dios,
en todo lo que él inflige. El texto ha de entenderse
así de sufrir la voluntad de Dios, a partir de hacer
él. Así, los intérpretes más juiciosos entienden el
texto. Un cristiano, cuando se encuentra bajo una
providencia desastrosa, debe recostarse
tranquilamente a los pies de Dios y decir: "Hágase tu
voluntad".

Lo que este paciente sumisión a la voluntad de Dios es no

?
Hay algo que parece paciencia que no lo es: como
cuando un hombre soporta algo porque no puede
evitarlo; él toma la aflicción como su destino y
destino , por lo tanto soporta en silencio lo que no
puede evitar; esto es más necesidad que paciencia .
¿Qué acompaña las sumisiones de los pacientes a la
voluntad de Dios?
(1) Un cristiano puede ser profundamente sensible
a la aflicción y, sin embargo, someterse
pacientemente a la voluntad de Dios. No debemos
ser estoicos, insensibles y despreocupados por los
tratos de Dios; como los hijos de Deucalion, quienes,
como dicen los poetas, fueron engendrados de una
piedra. Cristo era sensato cuando sudaba grandes
gotas de sangre, pero había sumisión a la voluntad
de Dios. "Sin embargo, no como yo quiero , sino
como tú." Mateo 26:39. Se nos pide que nos
humillemos bajo la mano de Dios, lo cual no
podemos hacer a menos que seamos conscientes de
ello. 1 Pedro 5: 6.
(2) Un cristiano puede llorar bajo una aflicción y, sin
embargo, someterse pacientemente a la voluntad de
Dios. Dios permite las lágrimas. Es pecado estar "sin
afecto natural". Romanos 1:31. La gracia ablanda el
corazón; [la pena que se contiene, ahoga el corazón];
el llanto da rienda suelta al dolor; [El dolor se
derrama en lágrimas.] José lloró por su padre
muerto; Job, cuando tuvo muchas malas noticias que
le trajeron de inmediato, se rasgó el manto, como
expresión de dolor, pero no se rasgó el pelo con ira.
El dolor mundano, sin embargo, no debe ser
inmoderado; una vena puede sangrar demasiado; el
agua sube demasiado cuando desborda las orillas.

(3) Un cristiano puede quejarse de su aflicción y, sin

embargo, ser sumiso a la voluntad de Dios. "Clamo al
Señor; suplico la misericordia del Señor. Derramo
mis quejas ante él y le cuento todos mis problemas".
Salmo 142: 1, 2. Podemos, cuando estamos bajo
opresión, decirle a Dios cómo está con nosotros y
desear que escriba nuestras injurias. ¿No se quejará
el niño a su padre cuando sea agraviado? La santa
queja puede estar de acuerdo con la paciente
sumisión a la voluntad de Dios; pero aunque
podamos quejarnos con Dios, no debemos quejarnos
de Dios.
¿Qué es incompatible con la paciente sumisión a la
voluntad de Dios?
(1) DISCONTENTO con los tratos de Dios en la
providencia. El descontento tiene una mezcla de
tristeza y rabia en ella, y tanto estas necesidades
deben levantar una tormenta de la pasión en el
alma. Cuando Dios ha tocado la niña de nuestros
ojos y nos ha herido en el hecho de que amamos, nos
sentimos malhumorados y malhumorados, y él no
nos ve bien. Somos como un pájaro petulante que se
enoja y se golpea contra la jaula. Génesis 4: 6.
(2) MURMURAR no es consistente con la sumisión
a la voluntad de Dios. Murmurar es el colmo de la
impaciencia, es una especie de motín del alma
contra Dios. "La gente empezó a murmurar contra
Dios". Entumecimiento 21: 5. Cuando una nube de
dolor se acumula en el alma, y no solo cae en
lágrimas, sino que de ella salen granizos,
murmurando palabras contra Dios, esto está lejos de
la sumisión paciente a su voluntad. Cuando el agua
está caliente, la espuma hierve; cuando el corazón se
arde de ira contra Dios, entonces hierve la
murmuración.
[1] La murmuración surge del orgullo . Los
hombres piensan que han merecido algo mejor de la
mano de Dios; y, cuando empiezan a hincharse,
¡escupen veneno!
[2] La murmuración surge de la desconfianza . Los
hombres no creen que Dios pueda hacer un cordial
con el veneno, que no puede sacar el bien de todos
sus problemas, por eso murmuran. "Ellos no
creyeron en su palabra, pero murmuraron". Salmo
106: 24, 25. Los hombres murmuran contra la
providencia de Dios porque desconfían de sus
promesas . Dios tiene mucho trabajo para cargar con
este pecado. Entumecido 14:27. Está lejos de
someterse a la voluntad de Dios.

(3) El DESCUENTO no puede estar de acuerdo

con la silenciosa sumisión a la voluntad de Dios.
Como cuando un hombre dice, estoy tan rodeado de
problemas que no sé cómo salir; la cabeza y el
corazón están tan ocupados que no soy apto para
orar. Cuando se enredan las cuerdas de un laúd, el
laúd no puede hacer buena música. De la misma
manera, cuando el espíritu de un cristiano está
perplejo y perturbado, no puede hacer melodías en
su corazón para el Señor. Estar en estado de
confusión mental es como cuando un ejército es
derrotado, uno corre de un lado a otro y otro de otro
, y todo está en desorden. Así mismo, cuando un
cristiano tiene prisa, sus pensamientos van de arriba
abajo distraídos, como si estuviera deshecho, lo que
no puede consistir en una paciente sumisión a la
voluntad de Dios.
(4) LA AUTOJUSTIFICACIÓN no puede estar de
acuerdo con la sumisión a la voluntad de Dios;
cuando, en lugar de ser humillado por la mano de
Dios, una persona se justifica a sí misma. Un
pecador orgulloso está en su propia defensa y está
listo para acusar a Dios de injusticia, que es como si
tuviéramos que cargar al sol con tinieblas. Esto está
lejos de la sumisión a la voluntad de Dios. Dios
golpeó la calabaza de Jonás, y él se mantuvo firme
en su propia reivindicación. "¡Hago bien en
enojarme hasta la muerte!" Jonás 4: 9. ¡Qué! para
estar enojado con Dios y para justificar esto! "¡Hago
bien en estar enojado!" Era extraño que viniera de
un profeta, y estaba lejos de la oración que Cristo
nos enseñó: "Hágase tu voluntad".
¿Qué es la sumisión paciente a la voluntad de Dios?
Es un marco de gracia del alma, por el cual un
cristiano se contenta con estar a la disposición de
Dios y acepta su sabiduría. "Es la voluntad del Señor,
que haga lo que crea mejor". 1 Sam 3:18. "Hágase la
voluntad del Señor". Hechos 21:14. Para poder
ilustrar aún más esto, les mostraré dónde reside esta
sumisión a la voluntad de Dios. Se basa
principalmente en tres cosas:
(1) Paciente sumisión a la voluntad de Dios,
radica en reconocer la mano de Dios; viendo a
Dios en la aflicción. "La aflicción no brota de la
tierra, y la angustia no brota de la tierra". Trabajo 5:
6. La aflicción no llega por casualidad. Job miró a
Dios en todo lo que le sucedió. "El Señor me dio todo
lo que tenía, y el Señor me lo ha quitado. ¡ Alabado
sea el nombre del Señor!" Job 1:21. No se queja de los
caldeos ni de la influencia de los planetas. Job mira
más allá de las segundas causas, ve a Dios en la
aflicción. "El Señor se lo ha quitado". Ahí

No puede haber sumisión a la voluntad de Dios,

hasta que haya un reconocimiento de la mano de
Dios en la aflicción.
(2) Paciente sumisión a la voluntad de Dios,
radica en justificar a Dios. "Dios mío, lloro, pero no
oyes", me haces oídos sordos en mi aflicción. Salmo
22: 2. "Pero tú eres santo"; ver 3. Dios es santo y
justo, no solo cuando castiga a los impíos, sino
cuando aflige a los justos. Aunque pone ajenjo en
nuestra copa, sin embargo lo vindicamos y
proclamamos su justicia. Cuando Mauricius, el
emperador, vio a su hijo muerto ante sus ojos,
exclamó: "Justo eres tú, oh Señor, en todos tus
caminos". Justificamos a Dios y confesamos que nos
castiga menos de lo que merecemos. "Ahora estamos
siendo castigados por nuestra maldad y nuestra gran
culpa. Pero en realidad hemos sido castigados
mucho menos de lo que merecemos". Esdras 9:13.
(3) Paciente sumisión a la voluntad de Dios,
consiste en aceptar el castigo. "Y luego aceptan el
castigo de su iniquidad". Levítico 26:41. Aceptar el
castigo es recibir todo lo que Dios hace en buena
parte. El que acepta el castigo dice: "Buena es la vara
del Señor"; besa la vara, sí, bendice a Dios porque
usaría una severidad tan misericordiosa y preferiría
afligirlo que perderlo.
La sumisión paciente a la voluntad de Dios en la
aflicción muestra mucha sabiduría y piedad. La
habilidad de un piloto se percibe más en una
tormenta, así que la gracia de un cristiano en la
tormenta de la aflicción. La sumisión a la voluntad
de Dios es un requisito fundamental para nosotros
mientras vivimos en este mundo. En el cielo no
habrá más necesidad de paciencia que de la luz de
las estrellas cuando brilla el sol. En el cielo habrá
todo gozo, ¿y entonces qué necesidad de paciencia?
No se requiere paciencia para llevar una corona de
oro; pero mientras vivimos aquí en un valle de
lágrimas, la sumisión paciente a la voluntad de Dios
es muy necesaria. "Tienes necesidad de paciencia".
Hebreos 10:36.
El Señor a veces nos impone grandes aflicciones. "
Tus flechas han dado hondo, y tus golpes me están
aplastando". Salmo 38: 2. Dios a veces derrite a su
pueblo en un horno. A veces nos impone muchas
aflicciones. "Él multiplica mis heridas". Job 9:17. Dios
dispara muchas clases de flechas.

(1) A veces Dios sufre de POBREZA. A la viuda no

le quedaba nada , salvo una olla de aceite. 2 Reyes 4:
2. La pobreza es una gran aflicción. Tener una finca
reducida casi a nada, es difícil de carne y hueso. "El
Todopoderoso me ha hecho la vida muy amarga. Me
fui lleno, pero el Señor me ha traído a casa vacío".
Rut 1:20, 21.
Esto expone al desprecio. Cuando el hijo pródigo era
pobre, su hermano se avergonzaba de poseerlo.
"Este tu hijo"; no dijo, este mi hermano, sino este su
hijo; desdeñó llamarlo hermano. Lucas 15:30.
Cuando el ciervo recibe un disparo y sangra, el resto
de la manada lo aleja, de modo que cuando Dios le
dispara la flecha de la pobreza a uno, los demás
están listos para alejarlo. Cuando Terence se hizo
pobre, su amigo Scipio lo rechazó. Los poetas
escriben que las hijas de Júpiter no tenían
pretendientes, porque carecían de dote.
(2) Dios a veces aflige con REPROACH. Aquellos
que tienen la luz de la gracia brillando en ellos
pueden ser eclipsados en su nombre. Se reprochó a
los cristianos primitivos, como si fueran culpables de
incesto. Lutero fue llamado trompetista de rebelión.
David llama al reproche desgarrador. Salmo 69:20.
Dios a menudo permite que sus amados santos se
ejerciten en esto. Se puede echar tierra sobre una
perla, y se pueden borrar los nombres que están
escritos en el libro de la vida. La piedad protege del
infierno, pero no de la calumnia.
(3) Dios a veces aflige con la MUERTE de seres
amados. "Hijo de hombre, voy a llevarte tu tesoro
más querido. De repente ella morirá". Ezequiel 24:16.
Esto es como separar una extremidad del cuerpo.
Quita al niño santo: La vida de Jacob estaba ligada a
Benjamín. Génesis 44:30. Lo que es peor que la
pérdida de hijos es cuando se continúan como
cruces vivientes; donde los padres esperaban miel,
había ajenjo. ¿Qué mayor prueba para un padre
piadoso que un hijo que niega al Dios de su padre?
Un corrosivo aplicado al cuerpo puede funcionar
bien, pero un niño malo es un corrosivo para el
corazón. Un hijo tan inmundo tenía David, quien
conspiró traición, y no solo le habría quitado la
corona a su padre, sino también su vida.
(4) Dios a veces aflige con INFIRMIDAD de
cuerpo. La enfermedad quita la comodidad de la
vida. A veces Dios permite que la enfermedad
continúe por mucho tiempo. Algunas enfermedades
son crónicas, persisten y cuelgan del cuerpo.

durante muchos años. El Señor se complace en

ejercitar a muchos de Sus seres preciosos con
aflicción crónica.
Dios prueba a su pueblo con diversas
aflicciones, de modo que necesitan someterse
pacientemente a su voluntad. El que le dispara
muchas balas, necesita armadura. Así mismo,
cuando nos asaltan diversas aflicciones, necesitamos
paciencia como armadura de prueba.
Utilice 1. Para reproche. Reprueba a los que aún no
han aprendido esta parte de la oración del Señor:
"Hágase tu voluntad"; sólo lo han dicho , pero no lo
han aprendido . Si las cosas no están de acuerdo con
su mente, si el viento de la Providencia cruza la
marea de su voluntad, están descontentos y
refunfuñando. ¿Dónde está ahora la sumisión de la
voluntad a Dios? Estar disgustado con Dios si las
cosas no nos agradan, ¿es estar a los pies de Dios y
estar de acuerdo con su voluntad? Es un muy mal
genio de espíritu, y Dios puede castigarnos con
justicia dejándonos hacer nuestra voluntad. Rachel
gritó: "Dame hijos, o me muero". Génesis 30: 1. Dios
le permitió tener un hijo, pero le costó la vida.
Génesis 35:18. Israel no estaba contento con el
maná, pero tenían que tener codornices, y Dios los
castigó dejándolos hacer su voluntad. "Salió un
viento del Señor y trajo codornices; y mientras la
carne aún estaba entre sus dientes, la ira del Señor
se encendió contra ellos, y el Señor hirió al pueblo
con una plaga muy grande". Numb 11:31, 33. Es
mejor que se hayan quedado sin codornices que con
una salsa tan agria. Muchos han deseado
importunamente la vida de un niño y no han podido
llevar su voluntad a la de Dios para que se contenten
con separarse de ella; y el Señor los ha castigado
dejándoles hacer su voluntad; porque el niño ha
vivido y ha sido una carga para ellos. Al ver que sus
voluntades se cruzaron con Dios, su hijo los cruzará.
Utilice 2. Para exhortación. Seamos exhortados,
sean cuales sean los problemas con los que Dios nos
ejercita, a que renunciemos a Él y digamos: "Hágase
tu voluntad". ¿Qué es lo más adecuado: que Dios
lleve su voluntad a la nuestra, o que nosotros
llevemos nuestra voluntad a la suya? Di como Elí:
"Es del Señor
que haga lo que crea mejor ", y como David:" He
aquí, aquí estoy; que me haga lo que bien le parezca.
"1 Sam 3:18. 2 Samuel 15:26. Era el dicho de
Harpulas," Eso me agrada , lo que agrada al rey; "así
deberíamos decir," lo que agrada — Dios nos agrada.
"" Que tu voluntad sea

hecho. ”Algunos aún no han aprendido este arte de

la sumisión a Dios; y verdaderamente el que carece
de paciencia en la aflicción es como un soldado en la
batalla que carece de armadura.
¿Cuándo no nos sometemos a la voluntad de Dios en la
aflicción como deberíamos?
(1) Cuando tenemos pensamientos difíciles de él, y
nuestro corazón comienza a hincharse contra él.
(2) Cuando estamos tan turbados por nuestra
aflicción actual que no somos aptos para el deber.
Podemos lamentarnos como palomas, pero no orar
ni alabar a Dios. Estamos tan desconcertados que no
estamos en condiciones de escuchar ningún buen
consejo. "No escucharon a Moisés, por la angustia
del espíritu". Éxodo 6: 9. Israel estaba tan afligido
bajo sus cargas, que no les importó lo que dijo
Moisés, aunque vino con un mensaje de Dios para
ellos; "No escucharon a Moisés, por la angustia del
espíritu".
(3) No nos sometemos como deberíamos a la
voluntad de Dios cuando trabajamos para liberarnos
de la aflicción por medios indirectos. Muchos, para
librarse de los problemas, caen en el pecado. Cuando
Dios los ha atado con las cuerdas de la aflicción, ¡ van
al diablo para desatar sus ataduras! Mejor es
permanecer en la aflicción, que pecar nosotros
mismos para salir de ella. Aprendamos a rebajarnos
a la voluntad de Dios en toda providencia aflictiva.
Pero, ¿cómo nos esforzaremos, en todos los casos de
providencia, para aceptar pacientemente la voluntad
de Dios y decir: "Hágase tu voluntad"?
Los MEDIOS para una resignación silenciosa a la
voluntad de Dios en la aflicción son:
[1] Consideración juiciosa. "En el día de la
adversidad, considera ". Eclesiastés 7:14. Cuando algo
nos agobia, o corre en contra de nuestros deseos, si
nos sentáramos y consideráramos, y sopesamos las
cosas en la balanza del juicio, aquélla mucho
nuestras mentes y somete nuestra voluntad a Dios.
La consideración sería como el arpa de David, para
seducir al espíritu maligno de la perversidad y el
descontento.
Pero, ¿qué debemos considerar?
Lo que debería hacernos someternos a Dios en la
aflicción y decir: "Hágase tu voluntad", es:
(1) Considere que el estado de vida actual está
sujeto a aflicciones, como la vida de un marinero
está sujeta a tormentas. [Nadie escapa llevando la
suerte que todos sufren.] "El hombre nace para la
angustia con tanta seguridad como las chispas
vuelan hacia arriba"; es heredero evidente de ella. El
hombre viene al mundo con un grito y sale con un
gemido. Trabajo 5: 7. El mundo es un lugar donde
crece mucho ajenjo. "Me ha llenado de amargura
(hebreo de amarguras); me ha embriagado con
ajenjo". Lam 3:15. Los problemas surgen como
chispas de un horno. Las aflicciones son algunas de
las espinas que produce la tierra después de la
maldición. Bien podemos pensar en detener el carro
del sol cuando está en su rápido movimiento, como
detener los problemas. La consideración de una vida
expuesta a problemas y sufrimientos, debe hacernos
decir con paciencia: "Hágase tu voluntad". ¿Se
enojará un marinero por encontrarse con una
tormenta en el mar?
(2) Considere que Dios tiene una mano especial
en la disposición de todos los sucesos. Job miró a
Dios en su aflicción. "El Señor ha quitado"; cap 1:21.
No se quejó de los sabeos ni de las influencias de los
planetas; miró más allá de todas las segundas
causas; vio a Dios en la aflicción, y eso lo hizo
someterse alegremente; él dijo: "Bendito sea el
nombre del Señor". Cristo miró más allá de Judas y
Pilato hacia el consejo determinado de Dios al
entregarlo para ser crucificado, que le hizo decir:
"Padre, no sea como yo quiero , sino como tú ".
Hechos 4:27, 28, Mateo 26:39. Es en vano reñir con
instrumentos. ¡Los impíos no son más que una vara
en la mano de Dios! "Oh Asiria, la vara de mi ira".
Isaías 10: 5. Quien trae aflicción, ¡ Dios la envía! La
consideración de esto debería hacernos decir:
"Hágase tu voluntad"; porque lo que Dios hace, él ve
una razón. Leemos de una rueda dentro de una
rueda. Ezequiel 1:16. La rueda exterior, que hace
girar todo, es la providencia; la rueda dentro de esta
rueda es el decreto de Dios; esto creído, sacudiría el
corazón en silencio. ¿Nos amotinaremos por lo que
hace Dios? También podemos pelear con las obras de
la creación que con las obras de la providencia.
(3) Considere que hay una NECESIDAD para la
aflicción. "Si es necesario, estás en apuros". 1 Pedro
1: 6. Es necesario que algunas cosas se mantengan
en salmuera . Las aflicciones son necesarias por
varias razones.

[1] Para mantenernos humildes. A menudo, no

hay otra manera de tener el corazón abatido, sino
siendo abatido. Cuando Manasés "estaba en
aflicción, se humilló grandemente". 2 Crónicas 33:12.
Las correcciones son corrosivos para devorar la
orgullosa carne. "Recordando mi miseria, el ajenjo y
la hiel, mi alma se humilla en mí". Lam 3:19, 20.
[2] Es necesario que haya aflicción; porque si
Dios no nos trajo a veces a la aflicción, ¿cómo
podría verse su poder al sacarnos? Si Israel no
hubiera estado en el horno de Egipto, Dios habría
perdido su gloria en su liberación.
[3] Si no hubiera aflicción, muchas partes de la
Escritura no podrían cumplirse. Dios ha
prometido ayudarnos a soportar la aflicción. Salmo
37:24, 39. ¿Cómo podríamos experimentar que nos
apoyara en los problemas, si no lo encontramos a
veces? Dios ha prometido darnos gozo en la
aflicción. Juan 16:20. ¿Cómo podríamos saborear
esta miel de gozo, si no estuviéramos a veces
afligidos? Una vez más, ha prometido enjugarnos las
lágrimas de los ojos. Isaías 25: 8. ¿Cómo podría
enjugar nuestras lágrimas en el cielo, si nunca
derramamos ninguna? De modo que, en varios
aspectos, es absolutamente necesario que nos
encontremos con la aflicción; ¿Y no nos
someteremos calladamente y diremos: "Señor, veo
que hay una necesidad para ello?" "¡Que se haga tu
voluntad!"
(4) Considere que nos hemos traído nuestras
angustias; hemos puesto una vara en la mano de
Dios para castigarnos. Cristiano, Dios pone tu cruz
aflictiva sobre ti, pero es tu propia creación. Si el
campo de un hombre está lleno de cizaña, es lo que
en él sembró. Si recoges una cosecha amarga de
aflicción, es lo que tú mismo has sembrado. Las
cuerdas que te aprietan son de tu propia torsión. Si
los niños comen frutas verdes , pueden culparse a sí
mismos si están enfermos; y si comemos la fruta
prohibida, no es de extrañar que sintamos que se
queja. El pecado es el caballo de Troya que nos
impone multitud de aflicciones. "Tu propia
conducta y acciones te han provocado esto. Este es tu
castigo. ¡Qué amargo es! ¡Cómo traspasa el corazón!"
Jeremías 4:18. Si por el pecado nos atrasamos con
Dios, no es de extrañar que él ponga la aflicción
como un sargento sobre nuestras espaldas para
arrestarnos. Esto debería hacernos someternos
pacientemente a Dios en la aflicción y decir: "Hágase
tu voluntad".

No tenemos motivo para quejarnos de Dios; no es

más que lo que nuestros pecados han merecido.
"¿No te has procurado esto?" Jer 2:17. La cruz
aflictiva, aunque sea puesta por Dios, es obra
nuestra. Diga, entonces, como Miqueas (cap. 7: 9):
"La ira del Señor soportaré, porque he pecado contra
él". "Todo lo que el hombre siembre, también
segará". Gálatas 6: 7.
(5) Considere que Dios está a punto de probarnos
y PROBARNOS. "Porque tú, oh Dios, nos probaste;
nos refinaste como a la plata. Nos metiste en la
cárcel y pusiste cargas sobre nuestras espaldas".
Salmo 66:10, 11. Si no hubiera aflicción, ¿cómo
podría Dios tener la oportunidad de probar a los
hombres? Los hipócritas pueden servir en un barco
de recreo : pueden servir a Dios en prosperidad;
pero cuando podemos mantenernos cerca de él en
tiempos de peligro, cuando podemos confiar en él en
la oscuridad, y amarlo cuando no tenemos una
sonrisa, y decir: "Hágase tu voluntad", esa es la
prueba de la sinceridad. Dios solo nos está
probando; y que duele hay en eso? ¿Qué es el oro
peor por haber sido probado?
(6) Considera que en todas nuestras aflicciones,
Dios tiene misericordia para con nosotros. Como
no hubo noche tan oscura, pero Israel tenía una
columna de fuego para alumbrar, así no hay
condición tan nublada, pero podemos ver lo que da
luz de consuelo. David podía cantar de misericordia
y juicio . Salmo 101: 1. Debería hacernos someternos
alegremente a la voluntad de Dios, para considerar
que en cada aflictivo camino de la providencia,
podemos ver sus huellas de bondad.
Hay bondad en la aflicción, cuando Dios parece más cruel.
[1] Hay bondad en la aflicción, porque hay amor
en ella. La vara de Dios y su amor pueden estar
juntos. "El Señor al que ama, castiga". Hebreos 12: 6.
Como cuando Abraham alzó su mano para sacrificar,
Isaac lo amaba. De la misma manera, cuando Dios
aflige a su pueblo y parece sacrificar sus
comodidades externas, los ama. El labrador ama su
vid cuando la corta y la hace sangrar; ¿Y no nos
someteremos a Dios? ¿Pelearemos con lo que tiene
bondad, lo que viene en amor? El cirujano ata al
paciente y lo lanza , pero ningún sabio se peleará
con él, porque es para curarlo.
[2] Hay bondad en la aflicción, en que Dios nos
trata como a sus hijos. "Si soportas el castigo, Dios
te trata como a

hijos. "Heb 12: 7. Dios tiene un Hijo sin pecado, ¡pero

ningún hijo sin azote! La aflicción es una insignia de
adopción. Tertuliano dice:" La aflicción es el sello de
Dios por el cual nos marca como suyos. "Cuando
Munster, ese hombre santo, enfermo, sus amigos le
preguntaron cómo estaba? Señaló sus llagas y dijo:
"¡Estas son las joyas con las que Dios engalana a sus
hijos!" ¿No diremos entonces: "Señor, hay bondad en
la cruz? , nos tratas como a tus hijos. La vara de la
disciplina nos preparará para la herencia. Que se
haga tu voluntad ".
[3] Con bondad, Dios en todas nuestras
aflicciones, nos ha dejado una promesa. De modo
que en la providencia más nublada, la promesa
aparece como el arco iris en la nube. Entonces
tenemos la promesa de Dios de estar con nosotros.
"Estaré con él en problemas". Salmo 91:15. No puede
estar mal con ese hombre con quien está Dios; Estaré
con él para sostener , santificar y endulzar toda
aflicción. Prefiero estar en la cárcel y tener la
presencia de Dios, que estar en un palacio sin ella.
Tenemos la promesa de que no nos impondrá más
de lo que nos permitirá soportar. 1 Corintios 10:13.
No nos probará más allá de nuestras fuerzas; o
aligerará el yugo , o fortalecerá nuestra fe. ¿No
debería esto hacernos someter nuestra voluntad a la
suya, cuando las aflicciones tienen tanta bondad en
ellas? En todas nuestras pruebas nos ha dejado
promesas, que son como maná en el desierto.
[4] Es una gran bondad que todos los problemas
que nos sobrevengan sean para nuestro
beneficio. "Dios nos disciplina para nuestro
beneficio". Hebreos 12:10.
¿Qué provecho hay en la aflicción?
Las aflicciones son disciplinarias, nos enseñan. Son
la escuela de la cruz . Muchos salmos tienen la
inscripción, Maschil, un salmo que da instrucciones.
De la misma manera, la aflicción tiene la inscripción
Maschil, una aflicción que da instrucción. " Presta
atención a la vara y al que la ordenó". Miqueas 6: 9.
Lutero dice que nunca pudo entender correctamente
algunos de los salmos hasta que estuvo afligido.
Gedeón "tomó del desierto espinos y cardos, y con
ellos enseñó a los hombres de Sucot". Jueces 8:16.
Dios nos enseña por los espinos y abrojos de la
aflicción.

1. La aflicción nos muestra más de nuestro

propio corazón. El agua en un vaso se ve clara; pero
ponlo al fuego, y la escoria hierve. De la misma
manera, cuando Dios nos prende fuego, hierve una
corrupción que no habíamos discernido antes. Las
aflicciones agudas son para el alma como la lluvia
para las casas; no sabemos que hay agujeros en el
techo hasta que llega la ducha , pero luego lo vemos
caer aquí y allá. De la misma manera, no sabemos
qué deseos inmortal hay en el alma, hasta que venga
la tormenta de la aflicción; luego encontramos la
incredulidad, la impaciencia, el miedo carnal que se
desploma en muchos lugares. La aflicción es un
colirio sagrado , aclara nuestra vista. La vara da
sabiduría.
La aflicción trae a la memoria esos pecados que
habíamos enterrado en la tumba del olvido. Los
hermanos de José, durante veinte años, no se
turbaron en absoluto por su pecado al vender a su
hermano; pero cuando llegaron a Egipto y
empezaron a estar en apuros, su pecado les llegó a la
memoria y su corazón los golpeó. "Se dijeron el uno
al otro, ¡somos realmente culpables con respecto a
nuestro hermano!" Génesis 42:21. Cuando un
hombre está angustiado, su pecado vuelve a su
mente; la conciencia hace un ensayo-sermón de
todos los males que han pasado en su vida; Su
pérdida de tiempo precioso, su desprecio de la
Palabra, vienen a la memoria, y sale con Pedro y
llora amargamente. Así, la vara da sabiduría,
muestra la maldad oculta del corazón y recuerda los
pecados pasados.
2. La aflicción aviva el espíritu de oración. [los
justos son afligidos para que en su aflicción puedan
orar.] Jonás dormía en el barco, pero oraba en el
vientre de la ballena. Quizás en un momento de
salud y prosperidad oramos de manera fría y formal,
no ponemos brasas al incienso; a nosotros apenas
nos importaban nuestras propias oraciones, y ¿cómo
debería Dios atenderlas? Dios envía una u otra
aflicción para incitarnos a apoderarnos de él. Cuando
Jacob temió por su vida por su hermano, luchó con
Dios, lloró en oración y no lo dejó hasta que lo
bendijo. Os 12: 4. Es con muchos de los hijos de Dios
como con los que antes tenían la enfermedad del
sudor en esta tierra, era una enfermedad del sueño,
si dormían morían; por eso, para mantenerlos
despiertos, fueron heridos con ramas de romero. De
la misma manera, el Señor usa la aflicción como una
rama de romero para evitar que durmamos y para
despertar el espíritu de oración. "Ellos derramaron
una oración, cuando tu castigo fue sobre ellos"; ahora
su oración traspasó

los cielos. pág. 26:16. En tiempos de problemas

oramos con sentimiento, y nunca oramos con tanto
fervor como cuando oramos con sentimiento; ¿Y no
es esto para nuestro beneficio?
3. La aflicción es un medio para purgar nuestros
pecados. "En esto, pues, será purificada la iniquidad
de Jacob". Isaías 27: 9. La aflicción es el purgante de
Dios para expulsar el humor nocivo, cura la
pestilencia del orgullo, la fiebre de la lujuria; ¿Y no
es esto para nuestro beneficio? La aflicción es el
archivo de Dios, para limpiar nuestro óxido. La
aflicción es el azote de Dios : para trillar nuestras
cáscaras. El agua de la aflicción no es para
ahogarnos , sino para lavar nuestras manchas.
4. Estar bajo la vara negra es provechoso, ya que
de este modo nos volvemos más serios y somos
más cuidadosos en aclarar nuestras evidencias para
el cielo. En tiempos de prosperidad, cuando la roca
derramaba ríos de aceite, fuimos descuidados a la
hora de obtener, al menos limpiar, nuestro derecho
a la gloria. Job 29: 6. Pero cuando llega una hora de
angustia, comenzamos a buscar nuestras evidencias
espirituales y vemos cómo están las cosas entre Dios
y nuestras almas; ¿Y no nos conviene ver nuestro
interés en Cristo más claro que nunca?
5. La aflicción es un medio para destetarnos del
mundo. El mundo a menudo demuestra no solo una
telaraña, sino un huevo de cockatrice. Corromper las
cosas del mundo, son grandes encantamientos. Nos
estorban en nuestro paso al cielo. Si un reloj se da
vuelta, se detiene; así, cuando el corazón está
demasiado comprometido con el mundo, se detiene
para las cosas celestiales. La aflicción suena como un
retiro para apartarnos de la búsqueda inmoderada
de las cosas terrenales. Cuando dos cosas se
congelan juntas, la única forma de separarlas es
mediante el fuego; así que, cuando el corazón y el
mundo están congelados juntos, Dios no tiene mejor
manera de separarlos que con el fuego de la
aflicción.
6. La aflicción es un medio para purificarnos. Nos
ayuda a alcanzar mayores grados de santidad. "Dios
nos disciplina para nuestro bien, para que podamos
participar de su santidad". Hebreos 12:10. Los vasos
de la misericordia son más brillantes para fregar. Así
como derramas agua sobre tu lino cuando lo quieres
blanquear , así Dios derrama sobre nosotros las
aguas de la aflicción para blanquear nuestras almas.
Las aflicciones son en sí mismas amargas, pero
producen los dulces frutos de la justicia. Hebreos
12:11. Esto debería hacernos someternos a Dios y
decir: "Hágase tu voluntad".
[5] Hay bondad en la aflicción, en la que no hay condición

tan mal pero podría ser peor. Cuando anochece,

puede que sea más oscuro. Dios no hace que nuestra
cruz sea tan pesada como podría, no despierta toda
su ira. Salmo 78:38. Él no pone tantos clavos en
nuestro yugo, tanto ajenjo en nuestra copa, como
podría hacerlo . ¿Dios castiga tu cuerpo? Podría
torturar tu conciencia. ¿Te interrumpe? Él podría
interrumpirte. El Señor podría hacer nuestras
cadenas más pesadas. ¿Es una fiebre ardiente?
¡Podría haber sido el lago en llamas! ¿Dios usa el
cuchillo de podar para cortarte? ¡Podría traer su
hacha para derribarte! "Las aguas llegaban hasta los
tobillos". ¿Suben las aguas de la aflicción hasta los
tobillos? Dios podría hacerlos subir más alto; ¡No,
podría ahogarte en las aguas! ¡Dios usa la vara
cuando podría usar el escorpión !
[6] Hay bondad en la aflicción, en el sentido de
que tu caso no es tan malo como el de los demás,
que siempre están en el potro y pasan sus años
suspirando. Salmo 31:10. ¿Tiene una enfermedad
leve? Otros lloran por el dolor intenso del cáncer.
¿Soportas la ira de los hombres? Otros cargan con la
ira de Dios. Tienes una sola prueba; otros tienen
varios de ellos mezclados. Dios te dispara una sola
flecha, lanza una lluvia de flechas a los demás. ¿No
hay bondad en todo esto? Tenemos la tendencia a
decir, "¡nunca nadie ha sufrido como nosotros!" ¿No
fue peor con Lázaro, que estaba tan lleno de llagas
que los perros se compadecieron de él y le lamieron
las llagas? ¡No, no fue peor con Cristo, que vivió
pobre y murió maldito! ¿No puede esto llevarnos a
decir: "Hágase tu voluntad"? Es con bondad que Dios
no nos trata tan severamente como a los demás.
[7] Hay bondad en la aflicción, en que, si
pertenecemos a Dios, es todo el infierno que
tendremos. Algunos tienen dos infiernos. Sufren
ahora en su cuerpo y conciencia, que es un infierno;
y sufrirán eternamente en otro infierno por venir,
¡en un fuego inextinguible! Judas tuvo dos
infiernos, pero un hijo de Dios solo tiene uno. Lázaro
tuvo todo su infierno aquí en la tierra; estaba lleno
de llagas, pero tenía un convoy de ángeles para
llevarlo al cielo cuando muriera. Entonces di: "¡Mira!
Si esto es lo peor que tendré, si esto es todo mi
infierno, estaré de acuerdo con paciencia. Que se
haga tu voluntad".
[8] Hay bondad en el hecho de que Dios da apoyo
misericordioso en la aflicción. Si golpea con una
mano, apoya con la otra. "Debajo están los brazos
eternos". Deuteronomio 33:27. No hay la menor
prueba, pero si Dios nos abandona y no nos ayuda
con su gracia,

se hundiría debajo de él. Peter se asustó al oír la voz

de una doncella. Mateo 26:69. ¡Oh, por tanto, qué
misericordia es que Cristo nos fortalezca y, por así
decirlo, cargue con nosotros la parte más pesada de
la cruz! Uno dijo: "No tengo gozos deslumbrantes en
mi enfermedad, pero bendigo a Dios porque tengo
dulces apoyos". ¿No debería esto causar sumisión a
la voluntad de Dios, y hacernos decir: "He aquí, si
eres tan amable de llevarnos en la aflicción, que no
desmayemos? Ponnos en el lagar que quieras. Que se
haga tu voluntad. "?
[9] Hay bondad en la aflicción porque es
preventiva. Dios, por Su golpe aflictivo , evitaría
algún pecado. El "aguijón en la carne" de Pablo fue
para evitar que se enorgulleciera. 2 Corintios 12: 7.
La aflicción a veces se envía para castigar el pecado,
en otras ocasiones para prevenir el pecado. La
prosperidad expone a mucho mal. Es difícil llevar
una copa llena sin derramar, y un estado lleno sin
pecar. El pueblo de Dios no sabe cuánto está en
deuda con sus aflicciones. Podrían haber caído en
algún pecado escandaloso , si Dios no hubiera puesto
un seto de espinas en su camino para detenerlos.
¡Qué bondad es esta! Dios nos deja caer en
sufrimientos - ¡para evitar caer en trampas
pecaminosas! Entonces di: "Señor, haz lo que bien te
parezca, que se haga tu voluntad".
Dios por la aflicción, evitaría la condenación. Somos
corregidos en el mundo, "para que no seamos
condenados con el mundo". 1 Corintios 11:32. Un
hombre, al caer en abrojos, se salva de caer al río.
¡De la misma manera, Dios nos deja caer en las
zarzas de la aflicción , para que no seamos ahogados
en la perdición! Es un gran favor cuando se inflige un
castigo menor , para evitar un castigo mayor. ¿No es
misericordia en el juez, cuando impone una pena
leve al preso y le salva la vida? Así es, cuando Dios
impone sobre nosotros una leve tribulación y nos
salva de la ira venidera. Como dijo Pilato: "Lo
castigaré y lo dejaré ir". Así, Dios castiga a sus hijos y
los deja ir, los libera del tormento eterno. ¿Cuál es la
gota de dolor que prueban los piadosos, comparada
con ese mar de ira que los impíos beberán por toda
la eternidad? Oh! ¡Qué bondad hay aquí! ¿No
debería hacernos decir: "Hágase tu voluntad"?
[10] Hay bondad en que Dios mezcla su
providencia. Con ira, recuerda la misericordia. Hab
3: 2. No todo hiel pura , sino algo de miel mezclada
con ella. Los zapatos de Asher eran de hierro y
bronce, pero su pie estaba empapado en aceite. Deut
33:24, 25. La aflicción es el calzado de bronce, pero
Dios hace que

pie para ser mojado en aceite. Así como el pintor

mezcla con sus sombras oscuras, colores brillantes,
el Dios sabio mezcla los colores, cruces y bendiciones
oscuros y brillantes. El cuerpo está afligido, pero
dentro hay paz de conciencia. José fue vendido para
Egipto y encarcelado; estaba el lado oscuro de la
nube. Job perdió todo lo que tenía, su piel estaba
cubierta de llagas y úlceras; aquí hubo una triste
providencia. Pero Dios dio un testimonio desde el
cielo de la integridad de Job, y luego duplicó su
estado. "El Señor le dio a Job el doble"; aquí estaba la
bondad de Dios para con Job. Job 42:10. Dios revisa
sus obras de providencia, y ¿no nos someteremos y
diremos: "Señor, si eres tan amable, mezclando
tantos colores brillantes con mi condición oscura ,
que se haga Tu voluntad"?
[11] Hay bondad en la aflicción en que Dios
modera su golpe. "Te corregiré en medida." Jer
30:11. Dios va a detener su áspero viento. Isaías 27: 8.
El médico que comprende la crisis y el
temperamento del paciente no administrará una
medicina demasiado fuerte para el cuerpo. De la
misma manera, Dios conoce nuestro marco, no nos
afligirá demasiado; no estirará demasiado las
cuerdas del violín, para que no se rompan. Y, ¿no
hay bondad en todo esto? ¿No debería esto hacer
que nuestros corazones se sometan? "Señor, si eres
tan amable y correcto en la medida, que se haga Tu
voluntad".
[12] Hay bondad en la aflicción porque Dios a
menudo la endulza con el consuelo divino. "Él nos
consuela en todos nuestros problemas". 2 Cor 1: 4.
Después de una poción amarga , le da un terrón de
azúcar.
(1) Dios consuela en la aflicción, en parte por su
Palabra . "Este es mi consuelo en mi aflicción,
porque tu palabra me ha vivificado". Salmo 119: 50.
Las promesas de la Palabra son una tienda de
cordiales .
(2) Dios consuela en la aflicción, por su Espíritu .
David tenía sus canciones de peregrinaje y Pablo sus
canciones de prisión. Salmo 119: 54; Hechos 16:25.
Así, Dios confita nuestro ajenjo con azúcar y nos
hace recoger uvas de los espinos. Algunos de los
santos tienen un gozo tan arrebatador en la
aflicción, que prefieren soportar sus
sufrimientos, que carecer de sus comodidades. ¡Oh,
cuánta bondad hay en la cruz! En el vientre de este
león, hay un panal. ¿No debería hacernos
someternos alegremente a la voluntad de Dios,
cuando él cubre el yugo con consuelo y nos da miel
al final de la vara?

[13] Hay bondad en la aflicción en que Dios la

reduce y la acorta; no dejará que permanezca
demasiado tiempo. "No contenderé para siempre,
ni estaré siempre enojado, porque entonces el
espíritu del hombre se desmayaría ante mí". Isaías
57:16. Dios le dará a su pueblo un mandato de paz y
proclamará un año de jubileo; los malvados pueden
arar las espaldas de los santos, pero Dios los liberará
de las cuerdas de los malvados. Salmo 129: 3, 4. El
orfebre no permitirá que su oro permanezca en el
horno más que hasta que esté purificado. Los
impíos deben beber un mar de ira, pero los
piadosos sólo tienen una copa de aflicción , y Dios
dirá: "Pase esta copa". Isaías 51:17. La aflicción
puede compararse con la escarcha, que se romperá y
aparecerán flores primaverales . "El dolor y el
suspiro huirán ". Isaías 35:10. La aflicción tiene un
aguijón, pero con ella un ala : el dolor se va volando.
Esta inundación de tierra se secará. Si hay tanta
bondad en la cruz, y Dios hará que cesen los
problemas, di entonces: "Hágase tu voluntad".
[14] Hay bondad en la aflicción, en el sentido de
que es un medio para hacernos felices. "
Bienaventurado el hombre a quien Dios corrige". Job
5:17. A los de carne y hueso les parece extraño que la
aflicción nos haga felices. Cuando Moisés vio la
zarza ardiendo y no consumida, dijo: "Me desviaré y
veré este extraño espectáculo". Éxodo 3: 3. Así que
aquí hay una visión extraña : un hombre afligido y,
sin embargo, feliz. El mundo considera felices a los
que pueden escapar de la aflicción, pero feliz es el
hombre a quien Dios corrige.
¿Cómo contribuyen las aflicciones a nuestra felicidad?
Las aflicciones nos hacen felices, ya que son un
medio para acercarnos a Dios. La piedra de carga de
la prosperidad no nos acerca tanto a Dios como los
lazos de la aflicción . Cuando el hijo pródigo se sintió
abrumado por la necesidad, dijo: "¡Me levantaré e
iré a mi padre!" Lucas 15:18. Como el diluvio llevó a
la paloma al arca, las inundaciones de dolor nos
hacen apresurarnos hacia Cristo, nuestra arca.
Las aflicciones nos hacen felices, ya que son guías
seguras hacia la gloria. La tormenta empuja el barco
hacia el puerto. Bendita tormenta, que lleva el alma
al puerto celestial. ¿No es mejor pasar por una
aflicción momentánea a la gloria eterna, que por un
placer momentáneo a la miseria eterna? No es que
las aflicciones merezcan gloria, pero nos preparan
para ello. Ninguna cruz mereció jamás , sino la que
Cristo soportó. Piensa, oh cristiano, que
la aflicción conduce a! conduce al paraíso, donde
siempre corren ríos de placer. ¿No debería esto
hacernos someternos alegremente a la voluntad de
Dios, y decir: "Señor, si hay tanta bondad en la
aflicción, si todo lo que haces es hacernos felices,
hágase tu voluntad?" "Por tanto, no desmayamos.
Aunque por fuera nos estemos consumiendo, por
dentro nos renovamos de día en día. Porque
nuestras ligeras y momentáneas angustias nos
alcanzan una gloria eterna que las supera a todas.
Así que no fijamos nuestros ojos en lo que se ve, pero
en lo que no se ve. Porque lo que se ve es temporal,
pero lo que no se ve es eterno ". 2 Corintios 4: 16-18
(7) Considere que la conducta ordinaria de Dios
es mantener a su pueblo en una bebida amarga y
ejercitarlo con grandes pruebas. La aflicción es el
camino trillado por el que se han ido todos los
santos. Todas las piedras vivas del edificio espiritual
han sido talladas y pulidas. El lirio de Cristo ha
crecido entre las espinas. "Todos los que quieran
vivir piadosamente en Cristo Jesús, sufrirán
persecución". 2 Timoteo 3:12. Es demasiado para un
cristiano tener dos cielos : es más de lo que tuvo
Cristo. Siempre ha sido la suerte de los santos
enfrentarse a duras pruebas. Era de los profetas :
"Tomad, hermanos míos, a los profetas por ejemplo
de sufrimiento". Santiago 5:10. Era de los
apóstoles, porque Pedro fue crucificado con la
cabeza hacia abajo, Jacobo fue decapitado por
Herodes, Juan fue desterrado a la isla de Patmos, el
apóstol Tomás fue atravesado con una lanza, Matías
(quien fue elegido apóstol en la habitación de Judas)
fue apedreado, y Lucas, el evangelista, fue colgado
de un olivo. Aquellos santos, de quienes el mundo no
era digno, pasaron bajo la vara. Hebreos 11:38. El
reino de Cristo es el reino de la cruz. Aquellos a
quienes Dios quiere salvar del infierno , no los
salva de la cruz. La consideración de esto debería
aquietar nuestras mentes en la aflicción y hacernos
decir: "Hágase tu voluntad". ¿Creemos que Dios
alterará su curso de providencia para nosotros? ¿Por
qué deberíamos buscar la exención de problemas,
más que otros? ¿Por qué deberíamos pensar en pisar
solo rosas y violetas, cuando los profetas y apóstoles
han marchado a través de las zarzas hacia el cielo?
(8) Considera que lo que Dios ya ha hecho por ti ,
cristiano, debería darte por satisfecho con sufrir
cualquier cosa de su mano y decir: "Hágase tu
voluntad".
[1] Te ha adoptado como su hijo. David pensó que no era
pequeño

honor de ser yerno del rey . 1 Sam 18:18. ¡Qué honor

es derivar tu pedigrí del cielo, nacer de Dios! ¿Por
qué, pues, te turbas y murmuras ante cada pequeña
cruz? Como dijo Jonadab a Amnón: "¿Por qué eres
tú, hijo del rey, tan miserable cada mañana?" 2
Samuel 13: 4. ¿Por qué estás tú, hijo o hija del rey del
cielo, preocupado por estas cosas insignificantes?
¡Qué! hijo del rey y miserable! Deja que aquiete tu
espíritu y lleve tu voluntad a la de Dios, que te ha
dignificado con honor, te ha hecho su hijo y
heredero, ¡y te impondrá un reino!
[2] Dios te ha dado a Cristo. ¡Cristo es un depósito
de todos los tesoros celestiales! ¡Él es la perla de gran
precio para enriquecerte! ¡Él es un árbol de vida
para vivificarte! Él es la quintaesencia de todas las
bendiciones. Entonces, ¿por qué estás descontento
con tus cruces mundanas? No pueden ser tan
amargos como Cristo es dulce. ¿No es Cristo tu
amigo? Él nunca puede ser pobre, quien tiene una
mina de oro; ni será pobre el que tiene las
inescrutables riquezas de Cristo. Entonces di: "Señor,
hágase tu voluntad; aunque tengo mi
cruz, sin embargo , tengo a Cristo con ella. La cruz
puede hacerme llorar, pero Cristo enjuga todas las
lágrimas". Apocalipsis 7:17.
[3] Dios te ha dado gracia. La gracia es el rico
bordado y la hechura del Espíritu Santo; es la
sagrada unción. 1 Juan 2:27. Las gracias son un
collar de perlas para adornar, y lechos de especias
que dan una dulce fragancia a Dios. La gracia es una
bendición distintiva; Cristo le dio a Judas su
bolsa, pero no su Espíritu. ¿No puede esto aquietar el
corazón en la aflicción y hacer que diga: "¡Hágase tu
voluntad! Señor, me has dado esa joya que solo
otorgas a los elegidos; la gracia es el sello de tu amor,
es a la vez alimento y cordial, es prenda de gloria ".
(9) Considere que cuando Dios quiere la mayor
misericordia para cualquiera de su pueblo, los
humilla en la aflicción. Parece ir bastante en contra
del sentido y la razón, porque cuando intenta
elevarnos más alto, nos trae más bajo. Como la mano
de Moisés, antes de obrar milagros, estaba leprosa; y
el vientre de Sara, antes de dar a luz al hijo de la
promesa, era estéril. Dios nos humilla antes de
elevarnos, como el agua está en su reflujo más bajo
antes de que haya una marea primaveral.
Esto es cierto en un sentido temporal . Cuando Dios llevaría
a Israel a

Canaán, una tierra que fluye leche y miel, primero

los condujo a través de un mar y un desierto .
Cuando tenía la intención de hacer avanzar a José
para que fuera el segundo hombre del reino, lo
arrojó primero a la cárcel y el hierro entró en su
alma. Salmo 105: 18. Por lo general, deja que sea más
oscuro, antes de que aparezca la estrella matutina de
la liberación.
Es cierto en un sentido espiritual . Cuando Dios
tiene la intención de elevar un alma a la comodidad
espiritual, primero la abandona. Isaías 12: 1. Así
como el pintor coloca primero su color oscuro y
luego su color dorado sobre él, así Dios coloca
primero el alma en la oscuridad del abandono, y
luego su color dorado de alegría y consuelo. ¿No
debería esto hacernos someternos alegremente y
decir: "Hágase tu voluntad"? Quizás ahora Dios me
aflige, está a punto de resucitarme, quiere una
misericordia más grande para mí de la que yo soy
consciente.
(10) Considere la excelencia de este estado de
ánimo: recostarse a los pies de Dios y decir:
"Hágase tu voluntad".
Un alma que se funde en la voluntad de Dios,
muestra variedad de gracia. Así como el ungüento
santo estaba compuesto de varias especias
aromáticas, mirra, canela y casia, así este dulce
temperamento del alma, la sumisión a la voluntad de
Dios en la aflicción, contiene una mezcla de varias
gracias. Éxodo 30:23. En particular, se compone de
tres gracias, fe, amor, humildad.
[1] Fe. La fe cree que Dios hace todo por
misericordia, que la aflicción es para mortificar
algún pecado o ejercer alguna gracia. La fe cree que
Dios corrige con amor y fidelidad. Salmo 119: 75. La
creencia en esto, provoca la sumisión de la voluntad
a Dios.
[2] Amor. El amor no piensa en el mal. 1 Cor 13: 5.
Se necesita todo lo que Dios hace, en el mejor
sentido; tiene buenos pensamientos de Dios, lo que
provoca sumisión. "Que el Dios justo me hiera", dice
el amor, "será una bondad; sí, será un aceite
excelente, que no me romperá la cabeza".
[3] Humildad. El alma humilde mira sus pecados y
cuánto ha provocado a Dios. No dice que sus
aflicciones sean grandes, pero sus pecados son
grandes. Se acuesta a los pies de Dios y dice: "La
indignación del Señor soportaré, porque he pecado
contra él". Miqueas 7: 9.

Así, un corazón sumiso está lleno de gracia; se

compone de varias gracias. Dios se complace en ver
tantas gracias dulcemente ejercitadas a la vez; él
dice de un cristiano como David de la espada de
Goliat: "¡No hay nadie como este! Dámela". 1 Sam 21:
9.
Aquel que se somete a la voluntad de Dios y dice:
"Hágase tu voluntad", muestra no sólo variedad de
gracia, sino fuerza de gracia. Argumenta mucha
fuerza en el cuerpo, para poder soportar el clima
duro , pero no ser alterado por él. De la misma
manera, soportar pruebas difíciles , sin desmayarse
ni inquietarse, muestra más que la fuerza de la
gracia ordinaria. Usted que puede decir que ha
sometido su voluntad a la voluntad de Dios, que la
voluntad de Dios y la suya están de acuerdo, como la
copia y el original, permítame asegurarle que ha
superado a muchos cristianos que quizás brillan en
una esfera de conocimiento más alta que tú. Estar
contento de estar a la disposición de Dios, de ser
todo lo que Dios quiere de nosotros, muestra un
alma noble y heroica.
Se dice del águila que no es como otros pájaros, que
cuando tienen hambre, claman por comida, pero
nunca se le oye hacer ruido, aunque carece de
alimento, debido a la nobleza y grandeza de su
espíritu; está por encima de otras aves y tiene un
espíritu adecuado a su naturaleza. Precisamente así,
es una prueba de gran magnitud de espíritu, que
cualquiera que sea la providencia cruzada que le
sobreviene a un cristiano, él no llora ni se queja
como los demás, sino que guarda silencio y se
acuesta en silencio a los pies de Dios. Hay mucha
fuerza de gracia en tal alma, no, ¡la altura de la
gracia! Cuando la gracia corona , no es tanto decir:
"Señor, hágase tu voluntad"; pero cuando la gracia
está en conflicto , y se encuentra con cruces y
pruebas, entonces decir: "Hágase tu voluntad", es
algo verdaderamente glorioso y prepara para la
guirnalda de honor.
(11) Considere que las personas suelen ser
mejores en la adversidad que en la prosperidad;
por tanto, inclínese ante la voluntad de Dios. Una
condición próspera no siempre es tan segura. Es
cierto que agrada más a la carne, pero no siempre es
lo mejor. En un estado próspero hay más carga.
Muchos miran el resplandor y el resplandor de la
prosperidad, pero no las cargas de la prosperidad.
[1] Existe la carga de CARE. Por eso Dios llama a
las riquezas "preocupaciones". Lucas 8:14. Una rosa
tiene sus espinas, también las tienen las riquezas.
Consideramos felices a los que florecen en sus sedas
y oro, pero no vemos los problemas y
preocupaciones que los acompañan. Un zapato
puede tener un cordón plateado , pero pellizca el

pie. Más de un hombre que va a su jornada laboral

vive una vida más feliz que el que tiene millones. El
cuidado inquietante es el espíritu maligno que
acecha al rico. Cuando sus cofres están llenos de oro,
su corazón está lleno de preocupación por cómo
aumentarlos o cómo asegurar lo que ha obtenido. A
veces está muy preocupado en cuanto a a quién
dejarlo. Una propiedad grande, como una prenda
larga que se arrastra, a menudo es más problemática
que útil.
[2] En una propiedad próspera está la carga de la
CUENTA. Los que están en lugares altos, tienen una
cuenta mucho mayor para dar a Dios que los demás.
"A quien mucho se le da, mucho se le exigirá". Lucas
12:48. Cuantos más talentos de oro se les confían ,
más tienen que responder. Cuanto más sus ingresos,
más sus cuentas. Dios dirá: "Te di una gran
propiedad, ¿qué has hecho con ella? ¿Cómo la has
empleado para mi gloria?" He leído de Felipe, rey de
España, que cuando estaba a punto de morir, dijo:
"¡Oh, si nunca hubiera sido rey! ¡Oh, si hubiera
vivido una vida privada y solitaria! Aquí está todo el
fruto de mi reino, ¡ha hecho mis cuentas más
pesadas! " Entonces, ¿no puede esto aquietar
nuestros corazones en una condición abatida y
adversa, y hacernos decir: "Señor, hágase tu
voluntad! Como me has dado una porción menor de
las cosas mundanas , así tengo una carga menor de
cuidado y una menor carga de cuentas ".
[3] Una condición próspera tiene más PELIGRO.
Los que están en la cima de la cima del honor,
corren más peligro de caer. Están sujetos a muchas
tentaciones. Su mesa es a menudo una trampa.
Millones se ahogan en las dulces aguas del placer.
Una gran vela vuelca el barco: ¡cuántos, por tener
velas demasiado grandes de prosperidad, han
perdido el alma! Debe ser una cabeza fuerte, que
pueda soportar un vino embriagador. Asimismo, ha
de tener mucha sabiduría y gracia, que sepa
soportar sabiamente una condición elevada. Es
difícil llevar una copa llena sin derramar, ¡ y un
estado lleno sin pecar!
Augur temía que si estaba lleno, negaría a Dios: "¡No
me des pobreza ni riquezas! Dame lo justo para
satisfacer mis necesidades. Porque si me hago rico,
puedo negarte y decir: ¿Quién es el Señor?"
Proverbios 30: 9. La prosperidad engendra orgullo.
Los hijos de Coré estaban en un estado más alto que
el resto de los levitas: estaban ocupados en el
tabernáculo acerca de las cosas más santas de todas.
Tenían el primer lote; pero así como fueron elevados
sobre otros levitas en honor, así en orgullo.
Entumecimiento 4: 4; Jos. 21:10; Entumecimiento 16:
3.

Cuando la marea sube más en el río, el barco sube

más; por eso, cuando la marea de una finca sube, el
corazón de muchos hombres se eleva con orgullo. La
prosperidad engendra seguridad carnal. Sansón se
durmió en el regazo de Dalila, al igual que los
hombres en el regazo de la tranquilidad y la
abundancia. Las arenas doradas del mundo son
arenas movedizas. "¡Qué difícil es para los ricos
entrar en el Reino de Dios! ¡Es más fácil para un
camello pasar por el ojo de una aguja que para un
rico entrar en el Reino de Dios!" Lucas 18: 24-25. La
consideración de esto debería hacernos someternos
a Dios en la adversidad y decir: "Hágase tu
voluntad". Dios ve lo que es mejor para nosotros. Si
tenemos menos patrimonio, corremos menos
peligro; si carecemos de los honores de los demás ,
carecemos de sus tentaciones.
(12) Considere que el haber fundido nuestra
voluntad en la de Dios es una buena señal de que
la presente aflicción está santificada. La aflicción
se santifica cuando alcanza el fin para el que fue
enviada. El fin por el que Dios envía aflicción es para
calmar el espíritu, para someter la voluntad y
someterla a la voluntad de Dios. Cuando se hace
esto, la aflicción ha alcanzado el fin por el cual vino;
está santificado, y no pasará mucho tiempo antes de
que sea quitado. Cuando la llaga se cura, se quita la
tirita de yeso.
(13) Considere cuán INCREÍBLE es de un
cristiano: ser perverso y poco sumiso, y no
someter su voluntad a la voluntad de Dios.
[1] Ser de un espíritu perverso y no sumiso, que
no puede entregar su voluntad a Dios, está por
debajo del ESPÍRITU de un cristiano. El espíritu de
un cristiano es como una paloma, manso y sosegado,
dispuesto a estar a disposición de Dios. "No es mi
voluntad, pero que se haga la tuya". Lucas 22:42. Un
espíritu cristiano no es irritable, sino humilde; no
anhelando, sino contento. Vea la imagen de un
espíritu cristiano en Pablo. "Sé cómo ser humillado y
cómo abundar". Filipenses 4:12. Él podría ser más
alto o más bajo, como Dios vio bien; podía navegar
con cualquier viento providencial, ya fuera un
vendaval próspero o bullicioso; su voluntad se
fundió con la voluntad de Dios. Para ser de una
insumisa perversa trama es como el ave que, ya que
está encerrada y no puede volar en los abiertos
de aire golpes contra la jaula.
[2] Un marco perverso y no sumiso, que no
puede someterse a la voluntad de Dios, es
indigno de la PROFESIÓN de un cristiano. Él

profesa vivir por fe, pero se queja de su condición.

La fe no vive solo de pan; se alimenta de promesas,
hace presente la gloria futura; ve todo en Dios.
Cuando la higuera no florece, la fe puede regocijarse
en el Dios de su salvación. Hab 3:17, 18. Estar
turbado en nuestro estado actual, por ser humilde y
pobre, muestra una fe débil. Seguramente esa es una
fe débil, o ninguna fe, la cual debe tener muletas
para sostenerla. Oh, siéntete avergonzado de
llamarte creyente, si no puedes confiar en Dios y
aceptar su voluntad, en la deficiencia de las
comodidades externas.
[3] Ser de un espíritu perverso y no sumiso, que
no puede entregar su voluntad a Dios, es indigno
de las altas DIGNIDADES que Dios ha puesto
sobre un cristiano. Es un rico heredero; es exaltado
sobre todas las criaturas que Dios alguna vez hizo,
excepto los ángeles; sí, en cierto sentido, como su
naturaleza está unida en unión a la naturaleza
divina, está por encima de los ángeles. Oh! entonces,
¡cómo está él por debajo de su dignidad —por falta
de algunas comodidades terrenales— para ser
perverso y listo para pelear con la Deidad! ¿No es
indigno del hijo de un rey, porque no se puede
arrancar un ejemplo de flores : para estar
descontento y se rebela contra su padre real? Un
cristiano está desposado con Jesucristo. ¡Qué! estar
casado con Cristo, ¡pero torpe y no sumiso! ¿No
tienes bastante en él? como Elcana le dijo a Ana:
"¿No soy yo mejor que diez hijos?" 1 Sam 1: 8. ¿No es
Cristo mejor que mil comodidades mundanas? ¡Es
un menosprecio para Cristo, que su esposa sea
perversa, cuando está emparejada con la corona del
cielo!
[4] Ser de un espíritu perverso y no sumiso es
inadecuado para las ORACIONES de un cristiano.
Ora: "Hágase tu voluntad". Es la voluntad de
Dios —que si se encontrara con tales problemas, ya
sean enfermedades, pérdida de patrimonio, cruces
en los niños— que Dios lo haya decretado y
ordenado; ¿Por qué entonces no hay sumisión? ¿Por
qué estamos descontentos con aquello por lo que
oramos? A menudo nos olvidamos de nuestras
oraciones, es más, las contradecimos cuando
rezamos "Hágase tu voluntad". Ahora bien, si la falta
de sumisión a Dios es tan indigna de un cristiano,
¿no deberíamos esforzarnos por llevar nuestra
voluntad a la de Dios y decir: "Señor, no me dejes
menospreciar la religión, no me dejes hacer nada
indigno de un cristiano?"
(14) Considere que la perversidad o la falta de
sumisión a Dios es muy PECADO.
[1] La disputa o la falta de sumisión a la
voluntad de Dios, es pecaminosa en su
NATURALEZA. Murmurar cuando Dios se cruza con
nuestra voluntad, muestra mucha impiedad. El
apóstol Judas habla de los impíos; y para que
sepamos mejor quiénes son, les pone una marca:
"Estos son murmuradores "; versículo 15, 16. Algunos
piensan que no son tan impíos como otros, porque
no juran ni se emborrachan, pero pueden ser impíos
al murmurar. No sólo hay impíos borrachos -pero
impíos murmuradores . No, este es el colmo de la
impiedad, es la rebelión. Ser murmurador y rebelde
es, en la cuenta de Dios, todo uno. "Esta es el agua de
Meriba, porque los hijos de Israel riñeron contra el
Señor". Números 20:13. ¿Cómo lucharon con Dios?
Murmuraron de su providencia; ver 3. ¡Qué! ¿Serás
rebelde contra Dios? Es una vergüenza para un
siervo luchar con su amo, pero ¿qué es para una
criatura luchar con su Hacedor ?
[2] Pelear con la providencia de Dios y no
someterse a su voluntad, es pecaminoso en la
primavera y la CAUSA; surge del orgullo. Fue la
tentación de Satanás, "seréis como dioses". Génesis 3:
5. Una persona orgullosa se convierte en un dios,
desdeña que su voluntad se cruce; él se cree mejor
que los demás, por lo tanto, encuentra faltas en la
sabiduría de Dios, que no está por encima de los
demás.
[3] La disputa o la falta de sumisión a la
voluntad de Dios, es pecaminosa en los
ASISTENTES de ella. Se une a las elevaciones
pecaminosas del corazón. Surgen pensamientos
malvados. Pensamos en Dios con dureza, como si
nos hubiera hecho mal, o como si hubiéramos
merecido algo mejor en sus manos. Empiezan a
surgir pasiones; el corazón se inquieta secretamente
contra Dios. Jonás estaba enfadado en su voluntad y
la pasión comenzó a hervir en él. "Él estaba muy
enojado." Jonás 4: 1. El espíritu de Jonás, así como el
mar, era tempestuoso. La falta de sumisión de la
voluntad se une a la ingratitud. Porque en algo
estamos afligidos: olvidamos todas las misericordias
que tenemos. Tratamos con Dios como lo hizo la
viuda de Sarepta con el profeta; el profeta Elías
había sido un medio para mantenerla con vida
durante el hambre, pero tan pronto como su hijo
murió, ella se peleó con el profeta: "Oh hombre de
Dios, ¿has venido a matar a mi hijo?" 1 Reyes 17:18.
Entonces, podemos estar contentos de recibir
bendiciones de la mano de Dios; pero tan pronto
como en lo más mínimo se nos cruza en nuestra
voluntad, nos volvemos sensibles y estamos listos en
una pasión para volar contra él.
[4] La perversidad y la falta de sumisión a la voluntad de
Dios, es malo en

los efectos. No sirve para el deber . Es malo navegar

en una tormenta y es malo orar cuando el corazón
está tormentoso e inquieto; es bueno que tales
oraciones no naufraguen. Insumisión de espíritu, a
veces inadecuada para el uso de la razón . Jonás
estaba descontento porque no tenía su voluntad;
Dios secó la calabaza, y su corazón se encolerizó
contra él; y en medio de su pasión, no habló mejor
que tonterías y blasfemias. "¡Hago bien en enojarme
hasta la muerte!" Jonás 4: 9. ¡Seguro que no sabía
bien lo que decía! ¡Qué! estar enojado con Dios y
morir de ira. ¡Habla como si hubiera perdido el uso
de la razón! Por tanto, la falta de sumisión de la
voluntad es pecaminosa en su naturaleza, causas,
acompañantes y efectos. ¿No debería este martirizar
nuestras voluntades y llevarlas a Dios en todo,
haciéndonos decir: "Hágase tu voluntad?"
(15) Considere que la falta de sumisión a la
voluntad de Dios, es muy IMPRUDENTE. No
obtenemos nada con ello, no nos alivia nuestra
carga, sino que la hace más pesada. Cuanto más
lucha el niño con los padres , más lo golpean; por
eso, cuando luchamos con Dios y no nos sometemos
a su voluntad, no recibimos más que más golpes. En
lugar de que se aflojen las cuerdas de la aflicción,
hacemos que Dios las ate con más fuerza. Entonces
sometámonos y digamos: "Señor, hágase tu
voluntad". ¿Por qué debo alargar mi propia angustia
con impaciencia y hacer más pesada mi cruz? ¿Qué
obtuvo Israel con su perversidad? Estaban a once
días de camino de Canaán, y murmuraron, ¡y Dios
los condujo a una marcha de cuarenta años más en
el desierto!
(16) Considere que el no someterse a la voluntad
de Dios en la aflicción, expone al hombre a
muchas TENTACIONES. Donde el corazón se irrita
contra Dios por el descontento, hay una buena pesca
para Satanás en esas aguas turbulentas. Por lo
general, pone a las personas descontentas en medios
indirectos. La esposa de Job se inquietó (estaba tan
lejos de la santa sumisión) y tentó a su esposo a
maldecir a Dios. "Maldice a Dios y muere". Trabajo 2:
9. ¿Cuál es la razón por la que algunos se han
entregado al diablo, pero por envidia y descontento,
porque no han tenido su voluntad? Otros, que están
bajo la tentación de la pobreza y no tienen la
voluntad de vivir a un ritmo tan alto como los
demás, se han impuesto con violencia. ¡Oh, las
tentaciones a las que están expuestos los hombres de
espíritu descontento! "Aquí", dice Satanás, "¡es una
buena pesca para mí!"

(17) ¡ Considere cuán lejos está la falta de

sumisión de espíritu del temperamento del alma
que Dios requiere en la aflicción! Quiere que con
paciencia poseamos nuestras almas. Lucas 21:19, La
palabra griega para paciencia significa soportar una
carga sin desmayarse ni inquietarse. Pero, ¿es la
perversidad en la aflicción y la disputa con la
voluntad de Dios la paciencia cristiana? Dios quiere
que nos regocijemos en la aflicción. Hermanos míos,
considérenlo puro gozo cuando se enfrenten a
pruebas de todo tipo; es decir, contar con alegría, ser
como pájaros que cantan en invierno. Santiago 1: 2.
"Habiendo recibido la Palabra en mucha tribulación,
con gozo". 1 Tesalonicenses 1: 6. Paul podía saltar en
sus grilletes y cantar en el cepo. Hechos 16:25. ¡Qué
lejos está un alma descontenta de este marco! Está
lejos de regocijarse en la aflicción, quien no ha
aprendido a someterse a Dios en la aflicción.
(18) Considere lo que es, que marca la diferencia
entre un hombre piadoso y un impío en aflicción.
El hombre piadoso se somete a la voluntad de
Dios, el impío no se someterá. El impío se inquieta
y se enoja, y es como un toro salvaje en una red. En
la aflicción blasfema contra Dios. "Los hombres se
quemaron con gran calor y blasfemaron el nombre
de Dios". Apocalipsis 16: 9. Pon una piedra en el
fuego y te volará a la cara. Así, corazones de piedra
vuelan en el rostro de Dios. Cuanto más se frota una
sustancia podrida, más se inquieta y se desgarra.
Cuando Dios aflige al pecador, se desgarra de ira.
Pero un hombre piadoso es dulcemente sumiso a su
voluntad. Su lenguaje es: "¿No beberé la copa que mi
Padre me ha dado?" Las especias cuando se
magullan, emiten un olor fragante dulce; por eso,
cuando Dios hiere a sus santos, envían el dulce
perfume de la paciencia. Servulus, un hombre santo,
padeció durante mucho tiempo la parálisis, pero su
discurso ordinario era "¡ Alabado sea Dios!" Oh,
digamos: "Hágase tu voluntad"; soportemos con
paciencia lo que Dios inflige con justicia, o ¿cómo
mostramos nuestra gracia? ¿Qué diferencia hay
entre nosotros y los malvados en aflicción?
(19) Considere que no someterse a la
voluntad providencial de Dios , es muy
ESTIMULANTE para él. ¿Podemos enojar más a
Dios que peleando con él? A los reyes no les gusta
que se opongan sus voluntades, aunque pueden ser
injustos. ¿Qué tan mal se lo toma Dios cuando
estaremos disputando contra su justa voluntad? ¡Es
un pecado que no puede soportar! "¿Cuánto tiempo
debo soportar esta comunidad malvada que sigue
quejándose de Mí?" Entumecido 14:27. ¿No puede
Dios decir con justicia: "¿Hasta cuándo soportaré
este

persona malvada, que, cuando algo se cae de la cruz,

murmura contra mí? "" ¡Tan cierto como yo vivo,
todos ustedes morirán aquí en este desierto! ¡Porque
te quejaste de mí! "Ver 28-29. Ya ves lo que provoca a
Dios un espíritu pendenciero descontento; puede
costar a los hombres sus vidas, no, sus almas. Dios
envió serpientes ardientes entre el pueblo para
murmurar. 1 Cor 10 : 10. ¡Puede enviar algo peor
que serpientes ardientes, puede enviar fuego al
infierno!
(20) Considere cuánto Dios lleva de nuestra
mano, y ¿no estaremos contentos con llevar algo
de su mano ? Cansaría la paciencia de los ángeles, ¡
tener paciencia con nosotros por un día! "El Señor es
paciente contigo". 2 Pedro 3: 9. ¡Cuán a menudo
ofendemos en nuestros ojos con miradas impuras
envidiosas, y en nuestra lengua con censuras
imprudentes , pero Dios pasa por alto muchas
injurias y nos soporta! Si el Señor nos castiga cada
vez que ofendemos, sacará su espada todos los días.
¿Llevará tanto a nuestras manos, y nosotros
podemos soportar nada en sus manos? ¿Será
paciente con nosotros y nosotros impacientes con él?
¿Será manso y nosotros murmuramos? ¿Soportará él
nuestros pecados y no soportaremos nosotros sus
golpes ? Oh, digamos: "Hágase tu voluntad. Señor, tú
has sido el que más ha sufrido , has llevado más de
mí que yo de ti".
(21) Considere que someter nuestra voluntad a
Dios en la aflicción desilusiona a Satanás de su
esperanza y arruina por completo su plan. El fin
del diablo en todas nuestras aflicciones es hacernos
pecar. La razón por la que Satanás golpeó a Job en su
cuerpo y en su estado, fue para dejarlo perplejo y
ponerlo en una pasión; esperaba que Job se hubiera
sentido descontento y, en un ataque de ira, no solo
hubiera maldecido su cumpleaños, sino que hubiera
maldecido a su Dios. Pero Job, acostado a los pies de
Dios y bendiciéndolo en la aflicción, desilusionó a
Satanás de su esperanza y arruinó su plan. Si Job
hubiera murmurado, habría complacido a Satanás;
si hubiera caído en calor y las chispas de su ira
hubieran volado , el diablo se habría calentado con
el fuego de la pasión de Job; pero Job se sometió en
silencio y bendijo a Dios. Así, el plan de Satanás se
vio frustrado y falló en su plan. El diablo nos ha
engañado a menudo; la mejor manera de engañarlo
es sometiéndose silenciosamente a Dios en todas las
cosas, diciendo: "Hágase tu voluntad".
(22) Considere que para los piadosos, la
naturaleza de la aflicción ha cambiado por
completo. Para el impío, la aflicción es maldición, la
vara se convierte en

serpiente; la aflicción para él no es más que un signo

del disgusto de Dios, el comienzo del dolor. Pero la
naturaleza de la aflicción cambia bastante para un
creyente; ¡Es por la química divina convertida en
bendición! Es como un veneno corregido, que se
convierte en medicina; es una muestra de amor, una
insignia de adopción, una preparación para la gloria.
¿No debería esto hacernos decir: "Hágase tu
voluntad"? El veneno de la aflicción se ha ido; no es
dañino, sino curativo. Esto ha hecho que los santos
no solo sean pacientes en la
aflicción, sino que también envíen gratitud. Cuando
las campanas se han arrojado al fuego, luego hacen
un sonido más dulce. Así, los piadosos, después de
haber sido arrojados al fuego de la aflicción,
proclaman la alabanza de Dios. "Es bueno para mí
haber sido afligido". Salmo 119: 71. "Bendito sea el
nombre del Señor". Job 1:21.
(23) Considere cuántas cosas buenas recibimos
de Dios, y ¿no estaremos contentos de recibir
algunas cosas malas? "¿Recibiremos el bien de la
mano de Dios, y no recibiremos el mal?" Job 2:10.
Esto puede hacernos decir: "Hágase tu voluntad".
¿Cuántas bendiciones hemos recibido de la mano de
la generosidad de Dios? Hemos sido maravillados
con misericordia. ¡Qué misericordia hemos tenido
para salvar, prevenir y entregar! El panal de la
misericordia ha caído continuamente sobre
nosotros. Su misericordia es nueva cada mañana."
Lam 3:23. La misericordia llega tan constantemente
como la marea; es más, cuántas mareas de
misericordia vemos en un día. Nunca nos
alimentamos, ¡ pero la misericordia nos corta cada
bocado! Nunca bebemos, ¡ sino en la copa de oro de
la misericordia! Nunca salimos al
extranjero, ¡pero la misericordia pone una guardia
de ángeles a nuestro alrededor! Nunca nos
acostamos en la cama, ¡pero la misericordia cierra
las cortinas de protección a nuestro alrededor!
¿Recibiremos tantas cosas buenas de la mano de
Dios, y no recibiremos el mal? Nuestras
misericordias superan con creces nuestras
aflicciones; por una aflicción tenemos mil
misericordias. Entonces, sometámonos a Dios y
digamos: "Hágase tu voluntad". El mar de la
misericordia de Dios, debe tragarse unas gotas de
aflicción.
(24) Considere que la conformidad de nuestra
voluntad con Dios en la aflicción, honra mucho el
evangelio. Un profesor no sumiso reprocha a la
religión, como si no pudiera someter a un espíritu
rebelde. Es una medicina débil, que no puede
eliminar los malos humores; y seguramente es un
evangelio débil, si no puede dominar nuestro
descontento y martirizar nuestra voluntad. La falta
de sumisión es un reproche al evangelio, pero una
alegría

la resignación de nuestra voluntad a Dios, coloca

una corona de honor sobre la cabeza de la religión;
muestra el poder del evangelio, que puede
encandilar las pasiones y fundir la voluntad en la
voluntad de Dios; por lo tanto, en las Escrituras, la
paciencia sumisa se introduce como una gracia
adornada. "Aquí está la paciencia de los santos".
Apocalipsis 14:12.
(25) Considere el ejemplo de nuestro Señor
Jesús: ¡cuán sumiso y complaciente fue él a su
Padre! El que nos enseñó esta oración, "Hágase tu
voluntad", la había aprendido él mismo. La voluntad
de Cristo estaba perfectamente sintonizada con la
voluntad de su Padre; era la voluntad de su Padre
que muriera por nuestros pecados, y "soportó la
cruz". Hebreos 12: 2. Fue una muerte dolorosa,
vergonzosa y maldita; sufrió los mismos dolores del
infierno de manera equivalente, pero se sometió
voluntariamente. "No abrió su boca"; abrió el
costado cuando le salió la sangre , pero no abrió la
boca para lamentarse; su voluntad se resolvió en la
voluntad de su Padre. Isaías 53: 7. "La copa que mi
Padre me ha dado , ¿ no la beberé yo?" Juan 18:11.
Ahora, cuanto más nuestra voluntad está sujeta a la
voluntad de Dios en la aflicción, más nos acercamos
a nuestro modelo de Cristo. ¿No es nuestra oración
que seamos como Cristo? Con santa sumisión lo
imitamos; su voluntad se fundió con la voluntad de
su Padre.
(26) Considere que someter nuestra voluntad a
Dios es la manera de tener nuestra propia
voluntad. Todo el mundo estaría feliz de tener su
voluntad. La manera de tener nuestra voluntad es
resignarla a Dios. Dios trata con nosotros como lo
hacemos con los niños perversos, mientras nosotros
nos preocupamos y peleamos, no nos dará nada.
Pero cuando somos sumisos y decimos: "Hágase tu
voluntad", nos muestra misericordia. La forma de
tener nuestra voluntad es someternos a la suya.
David llevó su voluntad a la de Dios. "Aquí estoy, que
me haga lo que mejor le parezca". 2 Samuel 15:26.
Después de que renunció a su testamento, tuvo su
testamento. Dios lo llevó de regreso al arca y lo
colocó nuevamente en su trono. 2 Samuel 19.
Muchos padres que han tenido un hijo querido
enfermo, cuando pudieron hacer su voluntad para
deshacerse de él, han recuperado a su hijo. Nada se
pierde al referir nuestra voluntad a Dios; el Señor lo
toma con bondad de nosotros, y es la única manera
de tener nuestra voluntad.
(27) Considere que podemos entregar nuestras
almas a Dios con mayor alegría cuando
muramos, cuando hayamos rendido nuestra
voluntad a Dios mientras vivimos. Nuestro bendito
Salvador siempre había sometido su voluntad a Dios.
Hubo una sola voluntad entre Dios el Padre y Cristo.

Cristo, en su vida, habiendo entregado su voluntad a

su Padre, al morir le entregó alegremente su alma.
"Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu".
Lucas 23:46. Tú que entregas tu voluntad a Dios, que
a la hora de la muerte le legues cómodamente tu
alma .
[2] El segundo medio para llevar nuestra
voluntad a Dios en la aflicción es estudiar su
VOLUNTAD.
(1) La voluntad de Dios es SOBERANA. Tiene el
derecho supremo y el dominio sobre sus criaturas:
disponer de ellas como le plazca. Un hombre puede
hacer con los suyos lo que desee. "¿No me es lícito
hacer lo que quiero con lo mío?" Mateo 20:15. Un
hombre puede cortar su propia madera como
quiera. La soberanía de Dios puede causar sumisión;
puede hacer con nosotros lo que le parezca bueno.
No es responsable ante ninguna criatura por lo que
hace. "No da cuenta de ninguno de sus asuntos". Job
33:13. ¿Quién pedirá cuentas a Dios? ¿Quién es más
alto que el más alto? Eclesiastés 5: 8. ¿Qué hombre o
ángel se atreve a convocar a Dios a su bar? "No da
cuenta de ninguno de sus asuntos". Dios tendrá en
cuenta nuestra conducta hacia él, pero no dará
cuenta de su conducta hacia nosotros. Él tiene una
jurisdicción absoluta sobre nosotros, como
soberano, para hacer con nosotros lo que le plazca.
Esto puede silenciar todos los descontentos y
encantar todas las pasiones rebeldes. No estamos a
disputa con Dios, pero a someterse a Dios.
(2) La voluntad de Dios es SABIA. Él sabe lo que
conduce al bien de su pueblo, por lo tanto, sométase.
"El Señor es un Dios de juicio", es decir, puede juzgar
lo que es mejor para nosotros; por tanto, descansa
en su sabiduría y acepta su voluntad. Isaías 30:18.
Descansamos en la sabiduría de un médico; estamos
contentos de seguir su consejo, porque él sabe lo que
es más propicio para nuestra salud. Si el piloto es
hábil, el pasajero dice: "Déjelo en paz; él sabe mejor
cómo gobernar el barco". ¿No descansaremos en la
sabiduría de Dios? Si estudiáramos cuán sabiamente
dirige todos los sucesos, y cuán a menudo nos lleva
al cielo con un viento en contra, calmaría mucho
nuestros espíritus y nos haría decir: "Hágase tu
voluntad". La voluntad de Dios está guiada por la
sabiduría. Si alguna vez nos dejara tener nuestra
voluntad, ¡nos desharíamos nosotros mismos! ¿Nos
dejó tallar nosotros mismos? Elegiríamos la peor
pieza. Lot eligió Sodoma porque estaba bien
regada, pero Dios

llovió fuego sobre él. Génesis 13:10; Génesis 19:24.

(3) La voluntad de Dios es JUSTA. "¿No hará bien el
juez de toda la tierra?" Génesis 18:25. La voluntad de
Dios es la regla y la medida de la justicia. La
voluntad de los hombres es corrupta, por lo tanto no
apta para dictar leyes; pero la voluntad de Dios es
santa e infalible, que puede causar sumisión. Salmo
97: 2. Dios puede molestarnos , pero no puede
hacernos daño. Puede ser severo con nosotros, pero
nunca injusto. Por lo tanto, debemos zarpar y decir:
"Hágase tu voluntad".
(4) La voluntad de Dios es BUENA y GRACIA.
Promueve nuestro interés: si es su voluntad
afligirnos, nos hará decir al fin: "Nos hizo bien que
fuéramos afligidos". Su mayal solo trillará nuestras
cáscaras. Lo que está en contra de nuestra voluntad,
no será contra nuestro beneficio. Estudiemos la
buena voluntad de Dios y diremos: "Hágase tu
voluntad".
(5) La voluntad de Dios es IRRESISTIBLE.
Podemos oponernos a él, pero no podemos
obstaculizarlo. El levantamiento de nuestra voluntad
contra Dios no puede detener la ejecución de su
voluntad. "¿Quién se ha resistido a su voluntad?"
Romanos 9:19. ¿Quién puede detener al sol en sus
movimientos? ¿Quién puede obstaculizar el
progreso de la voluntad de Dios? Por tanto, es en
vano pelear con Dios. ¡Su voluntad se cumplirá! No
hay forma de vencerlo, sino acostándose a sus pies.
[3] Otro medio para someterse a Dios en la
aflicción es tener un corazón misericordioso.
Todas las reglas y ayudas del mundo servirán de
poco , hasta que se infunda la gracia. Hasta que Dios
ponga un nuevo sesgo de gracia en el alma, que
incline la voluntad, nunca se somete a él. La gracia
renueva la voluntad, y debe renovarse antes de ser
sometida . La gracia enseña la abnegación y nunca
podremos someter nuestra voluntad hasta que la
neguemos.
[4] Un cuarto medio para someterse a Dios en la
aflicción, es trabajar para que se aclare nuestro
interés del pacto , saber que Dios es nuestro Dios.
"Este Dios es nuestro Dios". Salmo 48:14. Aquel cuya
fe florece en seguridad, que puede decir que Dios es
suyo, dirá: "Hágase tu voluntad". Un hombre inicuo
puede decir: "Dios ha puesto sobre mí esta aflicción,
¡y no puedo evitarlo!" Pero un creyente dice: "Mi
Dios lo ha hecho , y yo me someteré". El que puede
llamar a Dios suyo, sabe que Dios lo ama como ama
a Cristo y proyecta su salvación; por tanto, junto con
Pablo, se complacerá en los reproches. 2 Corintios
12:10. En toda providencia adversa, cede a

Dios, como la cera a la impresión del sello.

[5] Otro medio para someterse a Dios en la
aflicción es adquirir un espíritu humilde. Un
hombre orgulloso nunca se rebajará a Dios;
preferirá romperse que doblarse; pero cuando el
corazón es humilde, la voluntad es dócil. ¡Qué gran
diferencia había entre el faraón y Elí! Faraón clamó:
"¿Quién es el Señor para que yo escuche su voz?"
Éxodo 5: 2. Pero Elí dijo: "Es el Señor, que haga lo
que le parezca bien". 1 Sam 3:18. ¡Vea la diferencia
entre un corazón que está lleno de orgullo y el que
está lastrado con humildad! Faraón dijo: "¿Quién es
el Señor?" Elí: "Es el Señor". Un alma humilde tiene
un profundo sentido del pecado, ve cómo ha
provocado a Dios, se pregunta que no está en el
infierno; por lo tanto, todo lo que Dios inflige, él sabe
que es menos de lo que merecen sus iniquidades, lo
que le hace decir: "Señor, hágase tu voluntad". Oh,
ponte en una postura humilde. La voluntad nunca es
flexible, hasta que el corazón es humilde.
[6] Otro medio para someterse a Dios en la
aflicción es aflojar el corazón de las cosas de
abajo. Sea crucificado al mundo. Los niños son muy
perversos cuando les quitas sus juguetes. Cuando
amamos las cosas del mundo y Dios nos las quita,
nos volvemos perversos y no sumisos a su voluntad.
Jonás se alegró mucho por la calabaza; pero cuando
Dios lo golpeó, se volvió perverso, y porque Dios
había matado su calabaza. Él dijo: "¡Mátame
también!" Jonás 4: 8. El que ama al mundo, nunca
podrá rezar esta oración de corazón: "Hágase tu
voluntad"; su corazón hierve de ira contra Dios; y
cuando el mundo se va, su paciencia también se
acaba. Obtenga afectos mortificados por estas cosas
sublunares.
[7] Otro medio para someterse a Dios en la
aflicción es lograr una buena persuasión de que
su pecado ha sido perdonado. "Señor, golpea
donde quieras", dijo Lutero, "porque mis pecados
son perdonados". El perdón del pecado es una
bendición suprema. ¿Dios ha perdonado mi pecado?
¡Entonces soportaré cualquier cosa! ¡No murmuraré,
sino admiraré! No me quejaré de la carga de la
aflicción, sino que bendeciré a Dios por quitar la
carga del pecado. El alma perdonada dice de todo
corazón esta oración: "Hágase tu voluntad". Señor,
usa tu cuchillo de podar, ¡ siempre y cuando no
vengas con tu hacha ensangrentada a cortarme
hasta el infierno!
[8] Otra forma de sumisión a Dios en la aflicción, es a
mira más en el lado claro de la nube. Es decir, no
miremos tanto el dolor de la aflicción como el bien
de la aflicción. Es malo dedicarse a los inteligentes,
como es malo para los ojos doloridos mirar
demasiado el fuego; pero debemos mirar el bien de
la aflicción. Sansón no solo miró el cadáver del león,
sino también el panal que contenía . "Se desvió para
ver el cadáver del león, y he aquí, ¡había miel en el
cadáver!" Jueces 14: 8. La aflicción es el león
espantoso , ¡pero mira qué miel contiene! Nos
humilla, purifica, nos llena de los consuelos de
Dios: ¡hay miel en el vientre del león! Si pudiéramos
contemplar el beneficio de la aflicción, la terquedad
se convertiría en sumisión, y diríamos: "Hágase tu
voluntad".
[9] Otro medio para someterse a Dios en la
aflicción es orar a Dios para que calme nuestros
espíritus y conquiste nuestra voluntad. No es fácil
someterse a Dios en la aflicción. Habrá
levantamientos del corazón; Por tanto, oremos para
que lo que Dios inflige con justicia, lo podamos
soportar con paciencia. La oración es el mejor
encanto contra la impaciencia. Le hace al corazón lo
que Cristo le hizo al mar cuando estaba tempestuoso;
reprendió al viento, y hubo una gran calma.
Entonces, cuando las pasiones están en auge y la
voluntad es propensa a amotinarse contra Dios, la
oración calma el alma con gracia. La oración refresca
el alma, cuando arde en pasión.
[10] Otro medio para someterse a Dios en la
aflicción es interpretar bien los tratos de Dios y
tomar todo lo que hace en el mejor sentido.
Somos propensos a malinterpretar los tratos de Dios
y darles una mala interpretación, como lo hizo
Israel. "¿Por qué has traído a la asamblea del Señor a
este desierto para que nosotros y nuestro ganado
muramos aquí?" Entumecimiento 20: 4. Cuando Dios
nos ha traído aflicción, decimos: "¡Es porque nos
odia y tiene la intención de destruirnos!" Y esos
pensamientos duros de Dios causan mal humor y
terquedad. Oh, hagamos una interpretación justa y
honesta de la providencia. ¿Dios nos aflige? Diga:
"Tal vez sea porque quiere que tengamos
misericordia en esto. Tal vez sea porque nos probará
si lo amaremos en las aflicciones. Tal vez sea porque
está a punto de mortificar algún pecado, o ejercer
alguna gracia. Tal vez golpea el cuerpo, para salvar
el alma ". Si pudiéramos darle un significado tan
bueno a los tratos de Dios, diríamos: "Hágase tu
voluntad".
[11] El último medio, si te sometes a Dios en la
aflicción, es

creer que la situación actual es lo mejor para

usted. No somos jueces competentes. Imaginamos
que es mejor tener tranquilidad y abundancia, y
hacer que la roca derrame ríos de aceite; pero Dios
ve la aflicción como lo mejor. Él ve nuestras almas
prosperar mejor con la comida escasa. La caída de la
hoja, es el manantial de nuestra gracia. ¿Podríamos
creer que esa condición es la mejor que Dios nos
trajo —la disputa pronto llegaría a su fin— y nos
sentaríamos satisfechos con lo que él hace y
diríamos: "¡Hágase tu voluntad!"

La cuarta petición del Padre Nuestro

"Danos hoy nuestro pan de cada día." Mateo 6:11

En esta petición hay dos cosas observables: el orden

y el asunto .
I. El ORDEN de la oración. Primero, oramos,
"Santificado sea tu nombre, venga tu reino, que se
haga tu voluntad", antes de orar, "Danos hoy nuestro
pan de cada día". La gloria de Dios debe abrumar a
todos ante ella; debe preferirse antes que nuestras
preocupaciones más queridas. Cristo prefirió la
gloria de su Padre antes que la suya propia, ya que
era hombre. "Honro a mi Padre, no busco mi propia
gloria". Juan 8:49, 50. La gloria de Dios es lo que le es
más querido; es la niña de sus ojos; todas sus
riquezas se encuentran aquí. Como dijo Miqueas:
"¿Qué más tengo yo?" (Jueces 18:24), así que puedo
decir de la gloria de Dios, ¿qué más tiene? Su gloria
es la perla más oriental de su corona, de la que no se
separará. "Mi gloria no se la daré a otro". Isaías 42: 8.
La gloria de Dios es más valiosa que el cielo, más
valiosa que la salvación de las almas de todos los
hombres. Es mejor que los reinos sean demolidos,
mejores hombres y ángeles sean aniquilados, ¡que
Dios no pierda parte alguna de su gloria!
Debemos preferir la gloria de Dios antes que
nuestras preocupaciones más cercanas. Pero antes
de preferir la gloria de Dios a nuestras
preocupaciones privadas , debemos nacer de nuevo.
El hombre natural busca su propio interés personal
antes que la gloria de Dios. Él es "de la tierra,
terrenal". Juan 3:31. Que tenga paz y comercio, que
el

La roca derrama ríos de aceite, y deja que la gloria

de Dios vaya por donde quiera, a él no le importa. Un
gusano no puede volar y cantar como una alondra.
De la misma manera, un hombre natural, cuyo
corazón se arrastra sobre la tierra, no puede
admirar a Dios ni hacer avanzar su gloria, como lo
hace un hombre elevado por la gracia.
Utilizar. De prueba. ¿Preferimos la gloria de Dios antes que
nuestras preocupaciones privadas?
(1) Debemos preferir la gloria de Dios antes que
nuestra propia REPUTACIÓN. La reputación es una
joya muy valorada; como un ungüento precioso,
arroja un olor fragante. Pero la gloria de Dios debe
ser más cara que el crédito o el aplauso. Debemos
estar dispuestos a que nuestra reputación sea
pisoteada, para que la gloria de Dios sea elevada. Los
apóstoles se regocijaron "porque fueron contados
dignos de sufrir vergüenza por su nombre"; que
fueron agraciados, hasta el punto de ser
deshonrados por Cristo. Hechos 5:41.
(2) Debemos preferir la gloria de Dios antes que
nuestras RELACIONES. Las relaciones son caras,
son de nuestra propia carne y huesos; pero la gloria
de Dios debe ser más cara. "Si alguno viene a mí y no
odia a su padre ni a su madre, no puede ser mi
discípulo". Lucas 14:26. Aquí el odio hacia los
propios parientes es devoción hacia Dios. "Si mis
amigos", dice Jerónimo, "me persuadieran de negar a
Cristo, si mi esposa me colgara del cuello, pisotearía
a todos y huiría a Cristo".
(3) Debemos preferir la gloria de Dios antes que
ESTATE. El oro no es más que polvo brillante . La
gloria de Dios debe pesar más. Si se trata de esto, no
puedo mantener mi lugar de ganancia, pero la gloria
de Dios será eclipsada, debo sufrir en mi estado
antes que la gloria de Dios. Hebreos 10:34.
(4) Debemos preferir la gloria de Dios antes que
nuestra VIDA. "No amaron sus vidas hasta la
muerte". Apocalipsis 12: 2. Ignacio llamó a sus
cadenas sus joyas espirituales ; los usó como una
cadena de perlas. Gordius, el mártir, dijo: "Es para
mi pérdida si me eliminas algo de mis sufrimientos".
Esto argumenta que la gracia crece y se eleva en un
alto grado. ¿Quién, sino un alma inflamada de amor
por Dios, puede poner a Dios en lo más alto del trono
y preferirlo por encima de todas las preocupaciones
privadas?
II. EL ASUNTO de la petición. "Danos hoy nuestro
pan de cada día." La suma de esta petición es que
Dios nos dé tal competencia en

las cosas exteriores, como él ve más excelentes para

nosotros. Se parece mucho a la oración de Augur:
"Aliméntame con el alimento necesario"; dame lo
suficiente hasta que llegue al cielo, y es suficiente.
Proverbios 30: 8.
Déjame explicarte las palabras.
[1] " Danos hoy nuestro pan de cada día". Las cosas
buenas de esta vida son los dones de Dios; es el
donante de todas nuestras bendiciones. "Danos." No
es la fe única -pero comida es don de Dios; no sólo la
gracia diaria proviene de Dios, sino el " pan de cada
día ". Todo lo bueno viene de Dios. "Toda buena
dádiva es de lo alto y desciende del Padre de las
luces". Santiago 1:17. La sabiduría es un don de Dios.
"Su Dios le instruye a discreción". Isaías 28:26. Las
riquezas son un don de Dios. "Te daré riquezas". 2
Crónicas 1:12. La paz es un don de Dios. "Él hace la
paz en tus fronteras". Salmo 147: 14. La salud , que es
la flor y nata de la vida, es un don de Dios. "Yo te
devolveré la salud". Jer 30:17. La lluvia es un regalo
de Dios. "El que hace llover sobre la tierra". Job 5:10.
Todo viene de Dios; Él hace que el grano crezca y las
hierbas florezcan.
(1) Ver nuestra propia pobreza e indigencia.
Todos vivimos de limosnas y regalos gratuitos
: "Danos hoy nuestro pan de cada día". Todo lo que
tenemos es de la mano de la generosidad real de
Dios; no tenemos nada más que lo que nos da de su
almacén. No podemos tener un poco de pan sino de
Dios. El diablo persuadió a nuestros primeros padres
de que, al desobedecer a Dios, deberían "ser como
dioses"; pero ahora podemos ver cuán buenos dioses
somos, que no tenemos un poco de pan para
ponernos en la boca a menos que Dios nos lo dé.
Génesis 3: 5. Esa es una consideración de humildad.
(2) ¿Es todo un regalo? Entonces debemos buscar
toda misericordia de Dios mediante la oración.
"Danos este día." El árbol de la misericordia no
dejará caer su fruto a menos que sea sacudido por la
mano de la oración. Todo lo que tenemos, si no viene
en el camino de la oración, no viene en el camino del
amor; se da, como codornices de Israel, con ira. Si
todo es un regalo , no lo merecemos, no somos aptos
para esta limosna. ¿Y debemos acudir a Dios por
toda misericordia? Cuán malvados son los que, en
lugar de acudir a Dios por comida cuando quieren,
van al diablo y hacen un pacto con él; y si les ayuda
a ganarse la vida, ¡le darán sus almas! Mejor morir
de hambre que ir al diablo en busca de provisiones

(3) Si todo es un regalo, entonces no es una deuda

, y no podemos decirle a Dios como ese acreedor que
dijo: "Págame lo que me debes". Mateo 18:28. ¿Quién
puede convertir a Dios en deudor, o hacer cualquier
acto que sea complaciente y meritorio? Todo lo que
recibimos de Dios es un regalo; no podemos darle
nada más que lo que él nos ha dado. "Todas las cosas
proceden de ti, y de tu propia mano te las hemos
dado". 1 Crónicas 29:14. David y su pueblo
ofrecieron oro y plata para la construcción de la casa
de Dios, pero no ofrecieron nada más que lo que
Dios les había dado. "De los tuyos te hemos dado." Si
amamos a Dios, es él quien nos ha dado un corazón
para amarlo; si lo alabamos, nos da el órgano de la
lengua y lo afina; si damos limosna a otros, él nos ha
dado limosna primero a nosotros , para que
podamos decir: "Te ofrecemos, oh Señor, lo tuyo".
¿Es todo don, cuán absurda, entonces, es la doctrina
de la salvación por mérito? Ese fue un discurso
orgulloso del fraile, que dijo: "Dame, Señor, la vida
eterna, que me debes". No podemos merecer un
poco de pan y mucho menos una corona de gloria. Si
todo es un regalo, entonces el mérito explota y
queda fuera de las puertas.
(4) Si todo es un regalo, entonces fíjate en la
bondad de Dios. No hay nada en nosotros que
pueda merecer o corresponder a la bondad de Dios;
sin embargo, tal es la dulzura de su naturaleza, que
nos da abundante provisión y nos alimenta con lo
mejor del trigo. Píndaro dice que era una opinión de
la gente de Rodas que Júpiter hizo llover oro sobre la
ciudad. Dios ha hecho llover sobre nosotros
misericordias de oro; él está en la mano que da.
Observe tres cosas en su ofrenda:
[1] Nunca se cansa de dar. Los manantiales de su
misericordia están siempre corriendo. No solo
impartió bendiciones en épocas pasadas, sino que
también nos da dones; como el sol no sólo enriquece
al mundo con su luz matutina, sino que mantiene la
luz para el meridiano. El panal de la bondad de Dios
sigue cayendo.
[2] Se deleita en dar. "Se deleita en la
misericordia". Miq 7:18. Como la madre se deleita en
darle el pecho al niño, Dios ama que tengamos el
pecho de la misericordia en la boca.
[3] Dios da a sus enemigos. ¿Quién enviará
provisiones a sus enemigos? Los hombres extienden
redes para sus enemigos, Dios extiende una mesa . El
rocío cae sobre el cardo, así como sobre la rosa; el
rocío de la generosidad de Dios

cae sobre lo peor. Dios pone pan en las bocas que se

le abren. ¡Oh, la generosidad real de Dios! "La
bondad de Dios permanece para siempre". Salmo 52:

É
1. Él pone joyas sobre los pecadores porcinos y los
alimenta todos los días.
(5) Si todo es un regalo, ¡mira la odiosa
ingratitud de los hombres que pecan contra su
dador! Dios los alimenta y ellos luchan contra él; les
da pan y ellos le dan afrenta . ¡Qué vil es esto! ¿No
deberíamos llorar vergüenza por aquel que tenía un
amigo que siempre lo alimentaba con dinero y, sin
embargo, debía traicionarlo y herirlo? Así, los
pecadores tratan ingratamente a Dios; no sólo
olvidan sus misericordias, sino que abusan de ellas.
"Cuando los hube saciado, cometieron adulterio". Jer
5: 7. ¡Oh, qué horrible es pecar contra un Dios
generoso , morder la mano que nos alimenta!
¡Cuántos lanzan un dardo de las misericordias de
Dios y le disparan! Les da ingenio y con ello sirven al
diablo; les da fuerza y la desperdician entre
rameras; les da de comer pan y le levantan el talón.
"Jeshurun engordó y pateó". Deuteronomio 32:15.
Son como Absalón, quien, tan pronto como su padre
David lo besó, planeó traición contra él. 2 Samuel
15:10. Son como la mula que patea a la madre
después de haberle dado leche. Aquellos que pecan
contra su dador y abusan de los favores reales de
Dios, las misericordias de Dios vendrán como
testigos contra ellos. ¿Qué más suave que el aceite?
Pero si se calienta, ¿qué más quemaduras? ¿Qué más
dulce que la misericordia? Pero si se abusa de él,
¿qué más terrible? ¡Se convierte en furia!
(6) Si Dios nos da todo, dejemos que su dar nos
anime a la acción de gracias. Él es el fundador y
donante de todas nuestras bendiciones y debería
tener todos nuestros reconocimientos. "Al lugar de
donde vienen los ríos, allí vuelven otra vez".
Eclesiastés 1: 7. Todos nuestros dones provienen de
Dios, ya él deben regresar todas nuestras alabanzas.
Somos propensos a quemar incienso a nuestra
propia red, a atribuir todo lo que tenemos a nuestras
propias segundas causas. Hab 1:16.
[1] Nuestra propia habilidad e industria. Dios es
el dador; da pan de cada día. Salmo 136: 25; da
riquezas. "Es él quien te da el poder para hacer
riquezas". Deuteronomio 8:18. O,
[2] A menudo atribuimos la alabanza a causas
secundarias y nos olvidamos de Dios. Si los amigos
han otorgado una herencia, los miramos y
admiramos

ellos, pero no Dios, que es el gran dador. Es como si

uno debiera estar agradecido con el sirviente y
nunca prestar atención al amo de la familia que
proporciona todo. Oh, si Dios nos da todo, nuestra
vista, nuestra comida, nuestra ropa, sacrifiquemos a
él la principal alabanza; no sea Dios un perdedor
con sus misericordias. La alabanza es la parte más
ilustre del culto a Dios. Nuestras necesidades pueden
enviarnos a la oración, la naturaleza puede hacernos
mendigar el pan de cada día; pero muestra un
corazón lleno de sinceridad y gracia, para rendir
alabanzas a Dios. En la petición actuamos como
hombres, en la alabanza actuamos como ángeles.
¿Dios siembra semillas de misericordia? Que el
agradecimiento sea la cosecha que produzcamos.
Somos llamados los templos de Dios, y ¿dónde
deberían sonar las alabanzas de Dios, sino en sus
templos? 1 Cor. 3:16; "Mientras yo viva, alabaré al
Señor, cantaré alabanzas a mi Dios mientras exista".
Salmo 146: 2. Dios nos da pan de cada día, démosle
alabanza diaria. El agradecimiento a nuestro
donante es la mejor política; no hay nada perdido
por ello. Estar agradecido por una misericordia es la
forma de tener más. A los músicos les encanta tocar
sus trompetas donde hay el mejor eco, y a Dios le
encanta otorgar sus misericordias donde hay el
mejor eco de alabanza.
Ofrecer los becerros de nuestros labios no es
suficiente, pero debemos mostrar nuestro
agradecimiento mejorando los dones que Dios nos
da, y por así decirlo, poniéndolos en uso. Dios nos da
una propiedad y honramos al Señor con nuestra
sustancia. Proverbios 3: 9. Él nos da el bastón de pan,
y ponemos la fuerza que recibimos con él en su
servicio; esto es estar agradecido; y para que seamos
agradecidos, seamos humildes. El orgullo detiene la
corriente de gratitud. Un hombre orgulloso nunca
estará agradecido; considera que todo lo que tiene
puede ser de su propia obtención o merecimiento.
Veamos que todo lo que tenemos es un regalo de
Dios, y cuán indignos somos de recibir el menor
favor; y esto nos convertirá en mucho en doxología y
gratitud; seremos trompetas de plata que tocan la
alabanza de Dios.
[1] Por lo tanto, argumentamos de la palabra
"Dar", que las cosas buenas de esta vida son los
dones de Dios. Es el fundador y donante de todas las
cosas buenas. También aprendemos que es lícito
orar por cosas temporales. Podemos orar por el pan
de cada día . "Aliméntame con la comida que
necesito". Proverbios 30: 8. Podemos orar por la
salud . "Señor, sáname, porque mis huesos están
afligidos". Salmo 6: 2. Como estas son cosas buenas
en sí mismas , también nos son útiles; son tan
necesarios para preservar la comodidad de la vida,
como el aceite es necesario

para evitar que la lámpara se apague. Solo déjame insertar

dos cosas:
(1) Hay una gran diferencia entre orar por cosas
temporales y cosas espirituales. Al orar por las
cosas espirituales debemos ser absolutos. Cuando
oramos por el perdón del pecado y el favor de Dios y
las gracias santificadoras del Espíritu, que son
indispensablemente necesarias para la salvación, no
debemos aceptar la negación; pero cuando oramos
por cosas temporales, nuestras oraciones deben ser
limitadas; debemos orar condicionalmente, en la
medida en que Dios los considere buenos para
nosotros. A veces ve motivos para negarnos las cosas
temporales , cuando serían trampas y apartarían
nuestro corazón de él; por tanto, debemos orar por
estas cosas sometiéndonos a la voluntad de Dios. El
pecado de Israel era que fueran perentorios y
absolutos en su deseo de cosas temporales; Las
provisiones de Dios no les agradaron, debían tener
manjares. "¿Quién nos dará carne para comer?"
Entumecido 11:18. Dios les ha dado maná, los
alimentó con un milagro del cielo, pero sus
paladares lascivos ansiaban más: deben tener
codornices. Dios les permitió tener su deseo, pero
tenían salsa agria con sus codornices. "Mientras aún
tenían la comida en la boca, la ira de Dios vino sobre
ellos y los mató". Salmo 78:31. Rachel era inoportuna
en sus deseos de tener un hijo. "Dame hijos, o me
muero"; Dios le permitió tener un hijo, pero era un
Benoni , un hijo de mi dolor; le costó la vida dar a
luz. Génesis 30: 1; Génesis 35:18. Debemos orar por
las cosas externas con sumisión a la voluntad de
Dios, de lo contrario vendrán con ira.
(2) Cuando oramos por cosas que pertenecen a
esta vida, debemos desear cosas temporales para
fines espirituales; debemos desear que estas
cosas sean una ayuda en nuestro viaje al cielo. Si
oramos por la salud , debe ser para que podamos
mejorar este talento de la salud para la gloria de
Dios, y podamos estar más capacitados para su
servicio. Si oramos por una competencia de estado,
debe ser por un fin santo, para que seamos alejados
de las tentaciones a las que generalmente se expone
la pobreza, y para que podamos estar en una mejor
capacidad para sembrar las semillas de oro de la
caridad y aliviar los que están en necesidad. Se debe
orar por cosas temporales para fines espirituales.
Ana oró por un hijo, pero fue con este fin, para que
su hijo pudiera ser devoto de Dios. "Oh Señor, si te
acuerdas de mí y le das un hijo a tu sierva, yo se lo
daré al Señor todos los días de su vida". 1 Sam 1:11.
Muchos oran por cosas externas solo para gratificar
su

apetitos sensuales, como los cuervos claman por

comida. Salmo 147: 9. Orar por cosas externas solo
para satisfacer a la naturaleza es llorar más como
cuervos que como cristianos. Debemos tener un fin
más elevado en nuestras oraciones, debemos
apuntar al cielo, mientras oramos por la tierra.
¿Debemos orar por cosas temporales con fines
espirituales, para que seamos más aptos para servir
a Dios? Entonces, ¡cuán malvados son los que piden
misericordias temporales para estar más
capacitados para pecar contra Dios! "¡Pides que
puedas consumirlo en tus deseos!" Santiago 4: 3. Un
hombre está enfermo y ora por la salud para estar
entre sus copas y sus rameras. Otro reza por una
propiedad; no sólo se llenaría el estómago
, sino también sus graneros; y sería rico si pudiera
levantar su nombre, o que, teniendo más poder en
su mano, ahora pudiera vengarse más plenamente
de sus enemigos. Es impiedad unida a la insolencia,
orar a Dios para que nos dé cosas temporales, para
que podamos estar mejor capacitados para servir al
diablo.
Si vamos a orar por cosas temporales , ¿cuánto más
por cosas espirituales ? Si vamos a orar por pan,
¿cuánto más por el pan de vida? Si por aceite,
¿cuánto más por aceite de alegría? Si queremos
saciar nuestra hambre, mucho más debemos orar
para que nuestra alma se salve. ¡Pobre de mí! ¿Qué
pasaría si Dios escuchara nuestras oraciones y nos
concediera estas cosas temporales y nada
más? ¿Cómo seríamos mejores? ¿Qué es tener
comida y carecer de gracia ? ¿Qué es tener la espalda
vestida y el alma desnuda? Tener una tierra rica y
carecer de los manantiales vivos de la sangre de
Cristo, ¿qué consuelo podría ser eso? ¡Oh, por tanto,
seamos fervorosos por las misericordias
espirituales! Señor, no solo aliméntame, ¡sino
santifícame ! Dame más bien un corazón lleno de
gracia
- que una casa llena de oro . Si vamos a orar por el
pan de cada día, las cosas de esta vida, mucho más
debemos orar por las cosas de la vida venidera.
Algunos pueden decir que ya tenemos una
propiedad, y ¿qué necesidad tenemos de orar,
"Danos el pan de cada día"?
Suponiendo que tengamos una propiedad en
abundancia , sin embargo, debemos hacer la
petición: "Danos el pan de cada día"; y eso por doble
cuenta.
(1) Para que tengamos una bendición sobre nuestra
comida y todo lo que disfrutamos. "Bendeciré su
provisión". Salmo 132: 15. "El hombre no vivirá solo
de pan

—Pero por toda Palabra que sale de la boca de Dios.

"Mateo 4: 4. ¿Qué es eso sino una palabra de
bendición? Aunque el pan está en nuestra mano,
pero la bendición está en la mano de Dios, y debe ser
traída ¡Que salga de su mano con oración! Bien, por
lo tanto, que los ricos oren: "Danos nuestro pan", que
sea sazonado con una bendición. Si Dios retiene una
bendición, nada de lo que tenemos nos haría bien;
nuestras ropas no calentarnos, nuestra comida no
nos nutriría ". Él les dio su pedido, pero envió
flaqueza en su alma;" es decir, se consumían y su
comida no los nutría. Salmo 106: 15. bendición, lo
que comemos se volverá en mal efecto, y apresurará
la muerte. Si Dios no bendice nuestras riquezas, nos
harán más daño que bien. "Las riquezas guardadas
para sus dueños para su daño". Ecl 5:13. que, si
tenemos abundantes propiedades, sin embargo ,
teníamos necesidad de orar: "Danos nuestro pan",
tengamos una bendición de lo que tenemos.
(2) Aunque tenemos propiedades, sin embargo ,
teníamos necesidad de orar para que por la presente
pudiéramos involucrar a Dios para que nos continúe
recibiendo estos consuelos. ¡Cuántas bajas pueden
caer! ¡Cuántos han tenido grano en su granero, y de
repente se ha encendido un fuego que lo ha
consumido todo! ¡Cuántos han sufrido pérdidas en el
mar y las grandes propiedades han desaparecido!
"Salí lleno, y el Señor me ha traído a casa
nuevamente vacío". Rut 1:21. Por lo tanto, aunque
tenemos propiedades, sin embargo, teníamos
necesidad de orar: "Danos"; Señor, danos una
continuación de estas comodidades, para que no
puedan, antes de darnos cuenta, tomar alas y volar
de nosotros. Hasta aquí la primera palabra de la
petición, Dar.
[2] En segundo lugar, "Danos".
¿Por qué rezamos en plural, "Danos"? ¿Por qué no se dice,
dame?
Demostrar que debemos tener un espíritu público en
la oración. No solo debemos orar por
nosotros mismos, sino también por los demás. Tanto
la ley de Dios como la ley del amor nos unen a esto,
debemos amar a nuestro prójimo como a nosotros
mismos; por tanto, debemos orar por ellos y por
nosotros mismos. Todo buen cristiano tiene un
sentimiento de compañerismo por las necesidades y
miserias de los demás, y ora que Dios les extienda su
generosidad; especialmente ora por los santos.
"Orando siempre por todos los santos". Efesios 6:18.
Estos son hijos de la familia.
Uso 1. ¿Debemos tener un espíritu público en la oración?
Reprende estrecho

hombres enérgicos que se mueven solo dentro de su

propia esfera; que se miran a sí mismos y no les
importa el caso de los demás; que dejan a otros fuera
de sus oraciones. Si tienen pan de cada día, no les
importa que otros mueran de hambre; si están
vestidos, no les importa que otros anden desnudos.
Cristo nos enseñó a orar por los demás, a decir:
"Danos"; pero la gente egoísta está encerrada en sí
misma, como el caracol en la concha, y nunca
pronuncia una palabra en oración por los demás.
Estos no tienen conmiseración ni lástima.
Uso 2. Oremos por los demás y por nosotros mismos.
[Un hombre piadoso beneficia a los demás tanto
como a sí mismo.] Las arañas trabajan solo para sí
mismas, pero las abejas para el bien de los demás.
Cuanto más excelente es algo, más funciona para el
bien de los demás. Los manantiales refrescan a otros
con sus corrientes de cristal; el sol ilumina a los
demás con sus rayos dorados. Asimismo, cuanto más
un cristiano se ennoblece con la gracia, más asedia
el cielo con sus oraciones por los demás. Si somos
miembros del cuerpo de Cristo, no podemos dejar de
sentir simpatía por los demás en sus necesidades; y
esta simpatía nos llevaría a orar por ellos. David
tenía un espíritu público en la oración. "Haz bien, oh
Señor, a los buenos". Salmo 125: 4. Aunque comienza
el Salmo con una oración por sí mismo, "Ten piedad
de mí, oh Dios", sin embargo, termina el Salmo con
una oración por los demás. "Haz bien con tu
beneplácito a Sion". Salmo 51: 1, 18.
Uso 3. Es un asunto de consuelo para los piadosos,
que son bajos en el mundo, que tengan las oraciones
del pueblo de Dios para ellos; que oran no sólo por el
aumento de su fe, sino por su alimento, para que
Dios les dé "pan de cada día". Es probable que sea
rico, que tiene varias acciones en marcha. De la
misma manera, es probable que prosperen quienes
tienen las oraciones de los santos a su favor en
varias partes del mundo.
[3] La tercera palabra de la petición es "Este día".
Oramos que no nos den pan durante un mes o un
año, sino un día. "Danos este día."
¿No es lícito reservar para el futuro? ¿No dice el
apóstol que el que no mantiene a su familia "es peor
que un infiel"? 1 Timoteo 5: 8.
Es cierto que es lícito poner para la posteridad; pero
nuestro Salvador nos ha enseñado a orar: "Danos
hoy nuestro pan", por dos razones:

(1) Que no debemos preocuparnos ansiosamente

por el futuro. Deberíamos atormentarnos a nosotros
mismos por cómo acumular grandes propiedades; si
tenemos suficiente para abastecer por el momento,
debería ser suficiente. "Danos este día." "No te
preocupes por mañana." Mateo 6:34. Dios alimentó a
Israel con maná en el desierto, y los alimentó de la
mano a la boca. A veces se gastaba todo su maná; y si
alguien les hubiera preguntado dónde desayunarían
a la mañana siguiente, hubieran dicho: "Nuestro
cuidado es solo por el día: Dios hará llover el maná
que necesitemos. Si tenemos pan hoy, no
desconfiemos de la providencia de Dios". para el
futuro."
(2) Nuestro Salvador hará que oremos, "Danos pan
hoy", para enseñarnos a vivir cada día como si fuera
el último. No debemos orar: Danos pan mañana,
porque no sabemos si viviremos hasta mañana; sino,
"Señor, danos este día"; puede que sea el último día
que vivamos, y entonces no necesitaremos más.
Si oramos por pan solo por un día, entonces ustedes
que tienen grandes propiedades tienen motivos para
estar agradecidos. Tienes más de lo que oras; rezas
solo por pan para un día, y Dios te ha dado lo
suficiente para toda tu vida. ¡Qué generoso Dios
sirves! Dos cosas deberían agradecer a los hombres
ricos. (1) Dios les da más de lo que merecen. (2) Les
da más de lo que oran.
[4] La cuarta cosa en la petición es, "Nuestro pan".
¿Por qué se llama "nuestro pan", cuando no es
nuestro, sino de Dios?
(1) Debemos entenderlo en un sentido calificado; es
nuestro pan, obtenido por industria honesta. Hay
dos tipos de pan que no pueden llamarse
propiamente nuestro pan: el pan de la ociosidad y el
pan de la violencia .
El pan de la ociosidad . "No come el pan de las
ociosidades". Proverbios 31:27, El holgazán vive a
costa de los demás. "Sus manos se niegan a trabajar".
Proverbios 21:25. No debemos ser como los
zánganos, que comen la miel que otras abejas han
traído a la colmena. Si comemos el pan de la
ociosidad, no es nuestro propio pan. "Hay algunos
que caminan desordenadamente, sin trabajar en
absoluto; a los que les mandamos que trabajen y se
coman los suyos

pan ". 2 Tes. 3:11, 12. El apóstol da esta pista, que los
que viven ociosos no comen su propio pan.
El pan de la violencia . No podemos llamar a eso
"nuestro pan" que se quita a otros; lo que se obtiene
con sigilo o fraude, o cualquier forma de extorsión,
no es "nuestro pan", pertenece a otro. El que es ave
de rapiña, que quita el pan a la viuda y al huérfano,
come el pan que no es suyo, y no puede pedir una
bendición sobre él. ¿Puede orar a Dios para que
bendiga lo que ha obtenido injustamente?
(2) Se le llama nuestro pan en virtud de nuestro
título. El pan tiene un título doble. [1] Un título
espiritual. En y por Cristo tenemos derecho a la
criatura, y podemos llamarla "nuestro pan". Como
somos creyentes, tenemos el mejor título sobre las
cosas terrenales. "Todas las cosas son tuyas"; con que
titulo "eres de Cristo". 1 Cor 3:23. [2] Un título civil,
que la ley nos confiere. Negar a los hombres el
derecho civil a sus posesiones y hacer que todo sea
común abre la puerta a la anarquía y la confusión.
Vea el privilegio de los creyentes. Tienen derecho
tanto espiritual como civil a lo que poseen. Aquellos
que pueden decir "Padre nuestro" pueden decir
"nuestro pan". Hombres inicuos que tienen un
derecho legal a lo que poseen, pero no un derecho de
pacto ; lo tienen por providencia , no por promesa ;
con el permiso de Dios , no con su amor . A los ojos
de Dios, los impíos no son mejores que los
usurpadores; todo lo que tienen, su dinero y sus
tierras, es como un paño que no se paga en la casa
del pañero; pero el dulce privilegio de los creyentes
es que pueden decir "nuestro pan". Cristo es de
ellos, todo es de ellos. ¡Oh, qué dulce es cada pedazo
de pan mojado en la sangre de Cristo! ¡Qué bien
disfruta esa comida, que es una promesa de más! La
comida en el barril es una prenda de la comida de
nuestros ángeles en el paraíso. Es un privilegio de los
santos tener derecho a la tierra y al cielo.
[5] La quinta y última cosa en esta petición es, la
cosa por la que oramos, "pan de cada día".
¿Qué se entiende por pan?
El pan aquí, por una sinécdoque, [el particular para
toda la clase], se pone para todas las bendiciones
temporales de esta vida, comida, combustible, ropa,
etc.

[Todo lo que sirva para nuestro bienestar.] Agustín.

Todo lo que pueda servir para la necesidad o el
placer sobrio.
Aprenda a estar contento con la concesión que Dios
le da. Si tenemos las necesidades de la vida,
descansemos satisfechos. Oramos por pan, "Danos
nuestro pan de cada día"; no rezamos por lo
superfluo, ni por codornices o venado, sino por pan
que pueda sustentar la vida. Aunque no tenemos
tanto como los demás, una cosecha tan abundante,
una propiedad tan rica , sin embargo, si tenemos la
vara de pan para evitar que caigamos, estemos
contentos. "Si tenemos comida y ropa, estaremos
contentos con eso". 1 Timoteo 6: 8. La mayoría de la
gente tiene errores en este documento. Aunque oran
para que Dios les dé pan, todo lo que él considere
conveniente para ellos, sin embargo, no se contentan
con su mesada, sino que codician codiciosamente
más, y con las hijas de la sanguijuela de caballo,
claman: "Da, da". " Proverbios 30:15. Este es un vicio
injertado naturalmente en nosotros.
Muchos rezan la primera oración de Agur, "No me
des pobreza", pero pocos rezan su última oración,
"No me des riquezas". Proverbios 30: 8. No se
contentan con el "pan de cada día", sino que tienen
el cáncer de la codicia; todavía anhelan más. "El que
agranda como el infierno su deseo, y es como la
muerte, y no puede ser satisfecho". Hab 2: 5. Hay,
dice Agur, cuatro cosas que nunca se satisfacen: el
sepulcro, el vientre estéril, el desierto sediento, el
fuego ardiente. Y puedo agregar una quinta cosa: el
corazón de un hombre codicioso. Proverbios 30:15.
Los que no se contentan con el pan de cada día
, pero tienen sed insaciable de más, traspasarán el
cerco del mandato de Dios; y para obtener riquezas
no se pegará a ningún pecado. Por eso la codicia se
llama vicio radical. "La raíz de todos los males". 1
Timoteo 6:10. [Oh, hambre maldita de oro, ¿a qué no
conduces los corazones de los hombres?] La palabra
griega para codicia, significa un deseo desordenado
de obtener. La codicia no consiste solo en obtener
riquezas injustamente, sino en amarlas
desmesuradamente, que es una llave que abre la
puerta a todo pecado. Causa:
(1) La codicia causa robo . El corazón codicioso de
Acán le hizo robar la cuña de oro, que partió su alma
de Dios. Josué 7:21.
(2) La codicia causa traición . ¿Qué hizo que Judas
traicionara a Cristo? ¡Fueron las treinta piezas de
plata! Mateo 26:15.

(3) La codicia causa asesinato . Fue el amor

desmedido por la viña lo que hizo que Acab
conspirara la muerte de Nabot. 1 Reyes 21:13.
(4) Es la raíz del perjurio . Los hombres serán
codiciosos; y sigue, rompedores de tregua. 2 Timoteo
3:23. El amor a la plata hará que los hombres hagan
un juramento falso y rompan un juramento justo.
(5) La codicia es la fuente de la apostasía . "Demas
me ha abandonado, habiendo amado este mundo
presente". 2 Timoteo 4:10. No solo abandonó la
compañía de Pablo, sino también su doctrina.
Posteriormente, Demas se convirtió en sacerdote en
un templo de ídolos, según Doroteo.
(6) La codicia convertirá a los hombres en idólatras
. "Codicia que es idolatría". Col 3: 5. Aunque el
codicioso no adorará imágenes esculpidas en la
iglesia , sí adorará la imagen tallada en su moneda.
(7) La codicia hace que los hombres se entreguen al
diablo. El Papa Silvestre II vendió su alma al diablo
por un Papa. Las personas codiciosas olvidan la
oración: "Danos el pan de cada día". No se contentan
con lo que puede satisfacer a la naturaleza, pero son
insaciables en su deseo. ¡Oigamos este cáncer de la
codicia! Mantengan sus vidas libres del amor al
dinero y estén contentos con lo que tienen. "Heb 13:
5.
Utilizar. Para que estemos contentos con el "pan de
cada día", lo que Dios en su providencia nos hace, y
no codiciamos ni murmuramos, tomemos las
siguientes consideraciones:
(1) Dios puede bendecir un poco. "Él bendecirá tu
pan y tu agua ". Éxodo 23:25. Una bendición pone
dulzura en el más mínimo bocado de pan, es como el
azúcar en el vino. "Bendeciré su provisión". Salmo
132: 15. Daniel y los tres niños hebreos comían una
dieta de verduras y agua y, sin embargo, se veían
más hermosos que los que comían de la comida del
rey. Dan 1:12, 15. ¿De dónde era esto? Dios infundió
una bendición más que ordinaria en las verduras y
el agua. Su bendición fue mejor que el venado del
rey. Un trozo de pan con el amor de Dios es la
comida de los ángeles.
(2) Dios, quien nos da nuestra asignación, sabe
qué cantidad de cosas externas es la más
adecuada para nosotros. Una provisión más
pequeña puede ser más adecuada para
algunos; el pan puede ser mejor que las golosinas.
Todo el mundo no puede soportar una condición
elevada, como tampoco un cerebro débil puede
soportar un vino pesado. ¿Alguien tiene una mayor
proporción de cosas mundanas? Dios ve que puede
manejar mejor tal condición; puede ordenar sus
asuntos con discreción, lo que quizás otro no pueda.
Como tiene una gran propiedad, también tiene un
gran corazón para hacer el bien, lo que quizás otro
no tenga. Esto debería hacernos contentar con una
factura más corta. La sabiduría de Dios es lo que
debemos aceptar; ve lo que es mejor para todos. Lo
que es bueno para uno, puede ser malo para otro.
(3) Al contentarse con el pan de cada día, aunque
menos que otros, se ve mucha gracia. Todas las
gracias hacen su parte en un alma contenta. Así
como el ungüento sagrado estaba compuesto de
varias especias, mirra, canela y casia, el
contentamiento tiene en sí una mezcla de varias
gracias. Éxodo 30:23. Hay fe . Un cristiano cree que
Dios hace todo lo mejor. Existe el amor , que no
piensa mal, pero toma todo lo que Dios hace en
buena parte. Hay paciencia , sometiéndose
alegremente a lo que Dios ordena sabiamente. Dios
se complace en ver tantas gracias a la vez
dulcemente ejercitadas, como tantas estrellas
brillantes que brillan en una constelación.
(4) Contentarse con el pan de cada día, aunque
con moderación, nos protege de muchas
tentaciones en las que cae la gente descontenta.
Cuando el diablo ve a una persona descontenta con
el pan de cada día, dice: "¡Aquí tengo una buena
pesca!" Satanás a menudo tienta a los descontentos a
murmurar ya utilizar medios ilegales, engañar y
defraudar; y quien aumenta una hacienda por
medios indirectos, llena su almohada de espinas, de
modo que su cabeza estará muy incómoda cuando
llegue a morir. Si quieres liberarte de las tentaciones
a las que lo expone el descontento, siéntete contento
con las cosas que tienes: da gracias a Dios por el "pan
de cada día".
(5) ¡ Qué cosa tan rara y admirable es
contentarse con el "pan de cada día", aunque sea
tosco, y aunque haya poco de él! Aunque un
cristiano solo tiene un poco de comida en el
barril, sin embargo , tiene lo que le da satisfacción.
Lo que no tiene en el armario, lo tiene en la
promesa. Ese trozo de pan que tiene, es con el amor
de Dios, y esa salsa le da un sabor dulce. El poco de
aceite en la vasija es una prenda de los manjares que
tendrá en el reino de Dios, y esto lo alegra. ¡Qué cosa
tan rara y maravillosa es esta! No es de extrañar
estar

contentos en el cielo, cuando estamos en la fuente y

tenemos todo lo que podemos desear; pero estar
contentos cuando Dios nos mantiene a poco y
apenas tenemos "pan de cada día", es una maravilla.
Cuando la gracia corona , no es de extrañar estar
contento; pero cuando la gracia entra en conflicto
con las dificultades, estar contento es algo glorioso y
merece la guirnalda de alabanza.
(6) Para contentarnos con el "pan de cada día",
aunque Dios nos limita en nuestra asignación,
piense seriamente en el peligro que hay en una
condición elevada y próspera. Algunos no se
contentan con el "pan de cada día", sino que desean
que sus graneros se llenen y amontonen la plata
como polvo; que les resulta una trampa. "Los que
quieren hacerse ricos caen en una trampa". 1
Timoteo 6: 9. El orgullo, la ociosidad y la
lujuria son tres gusanos que generalmente se
reproducen en la prosperidad. La prosperidad a
menudo ensordece el oído contra Dios. "Te hablé en
tu prosperidad, pero dijiste: No escucharé". Jer 22:21.
Los placeres suaves endurecen el corazón. En el
cuerpo, cuanto más grasa, menos vitalidad. Del
mismo modo, la abundancia más exterior
, a menudo, menos piedad. La prosperidad tiene su
miel y también su aguijón; como la luna llena,
enloquece a muchos. Los pastos de la prosperidad
son ociosidad y exceso. El cuidado ansioso es el
espíritu maligno que acecha al rico y no lo deja
descansar. Cuando sus cofres están llenos de dinero,
su corazón está lleno de cuidado, ya sea cómo
administrar o cómo aumentar , o cómo asegurar lo
que ha obtenido. El sol es agradable, pero a veces
quema.
¿No debería contentarnos con la ración que Dios
da, si tenemos pan de cada día , aunque no manjares
? ¡Piense en el peligro de la prosperidad! ¡La
extensión de una mesa llena puede ser la extensión
de una trampa! Muchos han sido hundidos en el
infierno con pesos de oro. El barquero recoge a todos
los pasajeros, para aumentar su tarifa y, a veces,
para hundir su barco. "La gente que quiere
enriquecerse cae en la tentación y la trampa y en
muchos deseos necios y dañinos que hunden a los
hombres en la ruina y la destrucción". 1 Timoteo 6:
9. Las arenas doradas del mundo son arenas
movedizas, que deberían hacernos tomar nuestro
pan de cada día, aunque sea basto, con satisfacción.
¿Qué pasa si tenemos menos prosperidad? Tenemos
menos trampas. Así como carecemos de las ricas
provisiones del mundo , carecemos de sus
tentaciones.
(7) Si Dios nos mantiene con una dieta libre , si
nos da menos cosas temporales , lo ha
compensado con cosas espirituales. Nos ha dado la
Perla de gran precio y la santa unción del Espíritu.
La perla de
gran precio, el Señor Jesús, es la quintaesencia de
todas las cosas buenas. Darnos a Cristo es más que si
Dios nos hubiera dado todo el mundo. Puede hacer
más mundos, pero no tiene más Cristos que otorgar.
¡Cristo es una mina de oro tan grande que los
ángeles no pueden cavar hasta el fondo! ¡Sus
riquezas son inescrutables! Efesios 3: 8. De Cristo
podemos tener justificación, adopción y
glorificación. "El mar de la misericordia de Dios al
darnos a Cristo", dice Lutero, "¡debería absorber
todas nuestras necesidades!"
Dios nos ha ungido con las gracias, la santa unción
de su Espíritu. La gracia es una semilla de Dios, una
flor de la eternidad. ¡Las gracias son impresiones de
la naturaleza divina, estrellas para iluminarnos,
especias para perfumarnos, diamantes para
enriquecernos! Y si Dios ha adornado al hombre
oculto del corazón con estas joyas sagradas, bien
puede hacernos contentos, aunque tengamos un
boleto corto y ese también burdo. Dios le ha dado a
su pueblo cosas mejores que el maíz y el vino; ha
dado a los que no puede dar con ira, y que no
pueden soportar la reprobación, y pueden decir
como David: "Me han caído cuerdas en lugares
agradables; sí, tengo una buena herencia". Salmo 16:
6. Didimus era un hombre ciego , pero muy santo;
Anthony le preguntó si no estaba preocupado por la
falta de ojos y él le respondió que sí; Anthony
respondió: "¿Por qué estás preocupado? Te falta lo
que tienen las moscas y los pájaros , pero tienes lo
que tienen los ángeles". Por eso les digo a los
cristianos, si Dios no les ha dado la bolsa, les ha dado
su Espíritu. Si te falta lo que tienen los ricos, Dios te
ha dado lo que tienen los ángeles, ¿y no estás
contento?
(8) Si tienes pan de cada día suficiente para que
la naturaleza sea suficiente, contentate. Considere
que no tiene abundancia, lo que hace
nosotros contenido. No es una jaula elegante que
hará cantar al pájaro. Tener solo las necesidades de
la vida puede traer contentamiento, cuando tener
más puede hacer que uno sea menos contento. Un
bastón puede ayudar al viajero, pero un manojo de
bastones será una carga para él. Una gran propiedad
puede ser como un largo vestido, más pesado que
útil. Muchos que tienen grandes ingresos e ingresos,
no tienen tanto consuelo y satisfacción en sus vidas,
como algunos que se someten a trabajos forzados.
"Mantengan sus vidas libres del amor al dinero y
estén contentos con lo que tienen, porque Dios ha
dicho:" Nunca los dejaré; nunca te desampararé ".
Hebreos 13: 5

(9) Si tiene menos pan diario, tendrá menos

cuenta para dar. Las riquezas y los honores de este
mundo, hacen un gran espectáculo, y con sus
relucientes ojos deslumbran a los hombres. Pero no
consideran la gran cuenta que deben dar a Dios. "¡Da
cuenta de tu mayordomía!" Lucas 16: 2. ¿Qué bien
has hecho con tu patrimonio? ¿Ha cambiado usted,
como buen administrador, sus talentos de oro por la
gloria de Dios? ¿Has honrado al Señor con tus
bienes? Cuanto mayores sean los ingresos, mayores
serán las cuentas. Que nos tranquilice y contente que
si tenemos poco pan de cada día , nuestra cuenta
será menor.
(10) Usted, que tiene una pequeña competencia
en las cosas externas, puede contentarse con
considerar cuánto buscará más adelante. Dios
guarda el mejor vino para el final . ¿Y si ahora tienes
una pequeña miseria y te alimentan de la mano a la
boca? Buscas una recompensa eterna, túnicas
blancas, coronas centelleantes, ríos de placer. Un
hijo está contento a pesar de que su padre le da un
poco de dinero, pero de vez en cuando, siempre que
espera que su padre finalmente liquide todas sus
riquezas sobre él. De la misma manera, si Dios te da
poco en este momento, sin embargo, buscas esa
gloria que ojo no ha visto. El mundo no es más que
una gran posada. Si Dios le da lo suficiente para
pagar sus gastos en su posada, puede estar contento,
tendrá suficiente cuando llegue a su propio país.
¿Cómo podemos estar contentos, aunque Dios nos
acortó en estos aspectos externos? aunque tengamos
poco pan de cada día, y tosco?
(1) Date cuenta de que algunos han sido mucho
más bajos que tú, que han sido mejores que tú.
Jacob , un santo patriarca, cruzó el Jordán con su
cayado y vivió en malas condiciones durante mucho
tiempo; tenía las nubes por dosel y una piedra por
almohada. Moisés , que podría haber sido rico, como
dicen algunos historiadores, que la hija del faraón lo
adoptó como su hijo, porque el rey Faraón no tenía
heredero, por lo que era probable que Moisés
hubiera llegado a la corona, pero dejando los
honores de la corte, en ¡En qué condición miserable
y pobre vivía cuando fue a Jethro, su
suegro! Musculus , famoso por sus conocimientos y
piedad, se vio sometido a grandes apuros, incluso
para cavar en una zanja de la ciudad, y apenas tenía
el pan de cada día, ¡y sin embargo estaba contento!
¡No, Cristo , que era el heredero de todos, se hizo
pobre por nosotros! 2 Corintios 8: 9. Dejemos que
todos estos ejemplos nos llenen de satisfacción.

(2) Trabajemos para que se aclare el interés

entre Dios y nuestras almas. Aquel que puede
decir: "Dios mío", tiene lo suficiente para calmar su
corazón en la condición más baja. ¿Qué le puede
faltar a quien tiene El-Shaddai, el Dios todo
suficiente para su porción? Aunque fallan las fuentes
inferiores , él tiene las fuentes superiores . Aunque la
factura se acorta, sin embargo, el interés en Dios es
un pilar de apoyo para nosotros, y podemos, con
David, animarnos en el Señor nuestro Dios.

La quinta petición en el Padre Nuestro

"Perdónanos nuestras deudas, como nosotros

perdonamos a nuestros deudores". Mateo 6:12
Antes de hablar estrictamente con las palabras, notaré:
[1] Que en esta oración hay una sola petición
para el cuerpo, "Danos nuestro pan de cada día",
pero dos peticiones para el alma : "Perdónanos
nuestras ofensas, no nos metas en tentación, mas
líbranos del mal". Observa, por tanto, que debemos
ser más cuidadosos con nuestra alma que con
nuestro cuerpo, más cuidadosos con la gracia que
con el pan de cada día; y más deseosos de salvar
nuestras almas que de alimentar nuestros cuerpos.
En la ley, el peso del santuario era dos veces mayor
que el peso común, para tipificar que las cosas
espirituales deben tener mucho más peso para
nosotros que las terrenales. La excelencia del alma
puede desafiar nuestro principal interés por ella.
(1) El alma es una sustancia inmaterial; es una
chispa celestial, encendida por el aliento de Dios. Es
la parte más refinada y espiritual del hombre; es de
naturaleza angelical; tiene una leve semejanza con
Dios. El cuerpo es la parte más humilde, es sólo el
armario, aunque curiosamente labrado, pero el alma
es la joya; es parecido a los ángeles; es capaz de estar
en comunión con Dios en la gloria.
(2) El alma es inmortal; nunca caduca. Puede actuar
sin el cuerpo. Aunque el cuerpo se disuelva en polvo,
el alma vive. Lucas 12: 4. La esencia del alma es
eterna; tiene un principio pero no un final.
Seguramente, entonces, si el alma es tan ennoblecida
y digna, se debe tener más cuidado con ella que con
el cuerpo. Por lo tanto, hacemos una sola petición
para el cuerpo, pero dos peticiones para el alma.
Uso 1. Son reprobados los que cuidan más su cuerpo
que su alma. El cuerpo no es más que la parte brutal
; sin embargo, se preocupan más por vestir sus
cuerpos que sus almas. Se visten con las mejores
ropas, se visten con los más ricos atuendos; pero no
importa cuán desnudas o desnudas estén sus almas.
No obtienen las joyas de la gracia para adornar el
hombre interior. (2) Acerca de alimentar sus
cuerpos que sus almas. Son abastecedores de la
carne, se encargan de la carne, tienen la mejor
dieta, pero dejan que sus almas mueran de hambre;
como si uno debiera alimentar a su perro, pero dejar
que su hijo se muera de hambre. El cuerpo debe
sentarse en la silla del estado, pero el alma, esa cosa
principesca,

¡Se convierte en lacayo para hacer los mandados del diablo!

Uso 2. Tengamos más cuidado con nuestras almas. Si
le va bien al alma, le irá bien al cuerpo. Si el alma es
compasiva, el cuerpo será glorioso, porque
resplandecerá como el cuerpo de Cristo. Por lo tanto,
es prudente mirar principalmente al alma, porque al
salvar el alma aseguramos la felicidad del cuerpo. Y
no podemos mostrar nuestro cuidado por nuestras
almas más que mejorando todas las estaciones para
su bien; como leer, rezar, escuchar y meditar. Oh,
mira lo principal; ¡Que el alma sea atendida
principalmente! La pérdida del alma sería fatal. Se
pueden recuperar otras pérdidas. Si uno pierde su
salud, puede recuperarla nuevamente; si pierde su
propiedad, puede recuperarla; pero si pierde su
alma, la pérdida es irreparable. El comerciante que
arriesga todo lo que tiene en un barco, si se pierde,
está bastante arruinado.
[2] Tan pronto como Cristo dijo: "Danos el pan de
cada día", añade, "y perdónanos". Él une la
petición del perdón de los pecados inmediatamente
a la otra del pan de cada día, para mostrarnos que
aunque tenemos el pan de cada día , sin embargo,
todo es nada sin el perdón. Si nuestros pecados no
son perdonados, podemos tener poco consuelo en
nuestra comida. Como un hombre condenado se
consuela poco con la comida, lo llevas a la cárcel; así
que, aunque tengamos pan de cada día , no nos
servirá de nada a menos que el pecado sea
perdonado. Si tuviéramos maná, que se llama
alimento de ángeles, aunque la roca derramara ríos
de aceite, todo es nada a menos que el pecado sea
quitado. Cuando Cristo dijo: "Danos nuestro pan de
cada día", añadió al poco tiempo, y "perdona
nuestras ofensas". El pan de cada día puede
satisfacer el apetito, pero el perdón de los pecados
satisface la conciencia.
Uso 1. Condena la insensatez de la mayoría de las
personas que, si tienen el pan de cada día, las cosas
deliciosas de esta vida, no busquen más; no se
preocupan por el perdón del pecado. Si tienen lo que
los alimenta , no buscan lo que debe coronarlos .
¡Pobre de mí! puedes tener el pan de cada día y, sin
embargo, perecer. El rico en el evangelio tenía pan
de cada día, es más, tenía manjares, se iba
'suntuosamente todos los días, "pero" en el infierno
alzó los ojos "(Lucas 16:19, 23).
Uso 2. Oremos para que Dios no nos dé nuestra
porción en esta vida, que no nos desanime con el
pan de cada día , sino que nos dé

perdón. Esta es la salsa que haría que nuestro pan

fuera más dulce. No te conformes con lo que es
común a las criaturas brutas, el perro o la rata:
satisfacer tu hambre; pero, además del pan de cada
día, obtén el perdón del pecado. Una gota de la
sangre de Cristo, o un grano de misericordia que
perdona, es infinitamente más valioso que todas las
delicias bajo el sol. El pan de cada día puede
hacernos vivir cómodamente, pero el perdón de los
pecados nos hará morir cómodamente. Llego ahora
a las palabras de la petición, "Perdónanos nuestras
deudas", etc.
Aquí hay un término que se le da al pecado, es una
deuda; la confesión de la deuda, "nuestras deudas";
una oración, "perdónanos"; y una condición en la
que deseamos el perdón, "como nosotros
perdonamos a nuestros deudores".
1. Lo primero es el término que se le da al
pecado: es una deuda. Lo que aquí se llama deuda
se llama pecado. "Perdónanos nuestros pecados".
Lucas 11: 4. Entonces, el pecado es una deuda y todo
pecador es un deudor. El pecado se compara con
una deuda de diez mil talentos. Mateo 18:24.
¿Por qué se llama deuda al pecado?
Porque se le parece perfectamente. (1) Una deuda
surge por falta de pago de dinero o por no pagar lo
que se debe. Le debemos a Dios obediencia exacta, y
si no pagamos lo debido, estamos endeudados. (2) En
caso de impago, el deudor va a prisión; así que, por
nuestro pecado, nos volvemos culpables y estamos
expuestos a la maldición de Dios. Aunque le concede
al pecador un indulto por un tiempo , permanece
atado a la muerte eterna si la deuda no es
perdonada.
¿En qué sentido es el pecado la peor deuda?
(1) Porque no tenemos nada que pagar. Si
pudiéramos pagar la deuda, ¿qué necesidad de orar,
"perdónanos"? No podemos decir, como él en el
evangelio: "Ten paciencia conmigo y te lo pagaré
todo"; no podemos pagar ni capital ni intereses.
Adam nos dejó a todos en bancarrota. En su
inocencia, Adán tenía un acervo de justicia original
para comenzar el mundo, podía darle a Dios una
obediencia personal y perfecta; pero, por su pecado,
estaba completamente quebrantado y mendigaba
toda su posteridad. No tenemos nada que pagar;
todos nuestros deberes están mezclados con el
pecado, por lo que no podemos pagarle a Dios con
una moneda corriente.

(2) El pecado es la peor deuda, porque está

contra una majestad infinita. Una ofensa contra la
persona de un rey, es el crimen de alta traición,
aumenta y agrava el crimen. El pecado agrava a Dios
y, por tanto, es una ofensa infinita. Los escolásticos
dicen, "todo pecado golpea la Deidad". El pecador no
sólo destronaría a Dios, sino que también lo
desglosaría, lo que hace que la deuda sea infinita.
(3) El pecado es la peor deuda, porque no es una
sola, sino una deuda multiplicada. Perdónanos
"nuestras deudas"; tenemos deuda sobre deuda.
"Innumerables males me han rodeado". Salmo 40:12.
Bien podemos contar todas las gotas del mar como
todas nuestras deudas espirituales; no podemos
imaginar cuánto debemos. Un hombre puede
conocer sus otras deudas, pero no puede enumerar
sus deudas espirituales. Todo pensamiento vano es
pecado. "El pensamiento de locura es pecado".
Proverbios 24: 9. ¡Y qué enjambres de pensamientos
vanos tenemos! El primer surgimiento de la
corrupción, aunque nunca se convierte en un acto
externo, es un pecado; luego, "¿quién puede
entender sus errores?" No sabemos cuánto le
debemos a Dios.
(4) El pecado es la peor deuda; porque es una
deuda imperdonable en dos aspectos:
[1] No se puede negar la deuda. Otras deudas que los
hombres pueden negar. Si el dinero no se paga ante
testigos, o si el acreedor pierde la fianza, el deudor
puede decir que no le debe nada; pero no se puede
negar la deuda del pecado. Si decimos que no
tenemos pecado, Dios puede probar la deuda.
"Pondré tus pecados en orden ante tus ojos". Salmo
50:21. Dios escribe nuestras deudas en su libro de
memorias, y su libro y el libro de la conciencia
coinciden exactamente: para que la deuda no pueda
ser negada.
[2] No se puede cancelar la deuda. Otras deudas
pueden transferirse. Podemos conseguir amigos
para pagarlos , pero ni el hombre ni el ángel pueden
pagar esta deuda por nosotros. Si todos los ángeles
del cielo hicieran una bolsa, no podrían pagar una
de nuestras deudas. En otras deudas, los hombres
pueden obtener protección, de modo que nadie
pueda tocar sus personas o demandarlas por ello;
pero, ¿quién nos protegerá de la justicia de Dios? "No
hay quien pueda librarte de tu mano". Trabajo 10: 7.
De hecho, el Papa pretende que su perdón será la
protección de los hombres, y la justicia de Dios no
los demandará: pero eso es una falsificación y no se
puede reclamar en el tribunal de Dios.

Otras deudas, si el deudor muere en prisión, no se

pueden recuperar: la muerte lo libera de la deuda;
pero si morimos en deuda con Dios, él sabe cómo
recuperarlo. Mientras tengamos almas de las que
aferrarnos, Dios no perderá su deuda. No la muerte
del deudor, sino la muerte del fiador, paga la deuda
del pecador. En otras deudas, los hombres pueden
huir de su acreedor, salir de su país y dirigirse al
extranjero, y el acreedor no puede encontrarlos;
pero no podemos huir de Dios. Sabe dónde
encontrar a todos sus deudores. "¿A dónde huiré de
tu presencia? Si tomare las alas de la mañana y
habito en los confines del mar, aun allí me asirá tu
diestra". Salmo 139: 7, 9, 10.
(5) El pecado es la peor deuda, porque lleva a los
hombres, en caso de impago, a una prisión peor
que cualquier otra en la tierra, incluso a una
prisión de fuego ; y el pecador es puesto en peores
cadenas, cadenas de tinieblas, donde está atado bajo
la ira para siempre.
¿En qué tenemos el carácter de morosos?
(1) A un deudor incobrable no le encanta que le
pidan cuentas. Vendrá el día en que Dios pedirá
cuentas a sus deudores. "Así que, cada uno dará
cuenta de sí mismo a Dios". Romanos 14:12. Pero
gastamos el tiempo y no nos encanta oír hablar del
día del juicio; no nos gusta que los ministros nos
recuerden nuestras deudas o hablen del día del
juicio final. ¡Qué palabra tan confusa será para un
pecador seguro de sí mismo , "da cuenta de tu
mayordomía"!
(2) Un deudor incobrable no está dispuesto a
confesar su deuda, la pospondrá o la reducirá. De
la misma manera, estamos más dispuestos a excusar
el pecado que a confesarlo. Cuán difícilmente fue
llevado Saulo a la confesión. "He obedecido la voz
del Señor, pero el pueblo tomó del botín". 1 Sam
15:20, 21. Prefiere excusar su pecado que confesarlo .
(3) Un mal deudor puede odiar a su acreedor. Los
deudores desean la muerte de sus acreedores. Así,
los hombres malvados naturalmente odian a Dios,
porque piensan que es un juez justo y los pedirán
cuentas. Se les llama odiadores de Dios. Un deudor
no ama ver a su acreedor.
Uso 1. Se reprende a quienes son reacios a endeudarse, pero
no hacen

reconocimiento del pecado, que es la mayor deuda;

no usan ningún medio para salir de ella, sino que
corren más en deuda con Dios. Pensaríamos que
sería extraño que se emitieran órdenes judiciales o
órdenes judiciales en contra de un hombre, o que se
concediera un juicio para apoderarse de su cuerpo y
propiedad, y sin embargo, él era totalmente
indiferente y despreocupado. Dios tiene una orden
judicial contra un pecador, es más, muchas órdenes
judiciales, por jurar, embriagarse,
quebrantar el sábado, y sin embargo, el pecador
come y bebe, y está tranquilo, ¡como si no tuviera
deudas! ¡Qué opio ha dado Satanás a los hombres!
Utilice 2. Si el pecado es una deuda, seamos
humillados. "La deuda", dice Ambrose, "es grave".
Los hombres endeudados están llenos de vergüenza,
se esconden y no les importa que los vean. Un
deudor siempre tiene miedo de ser arrestado. Un
perro ladra y su corazón late con fuerza. Oh!
sonrojémonos y temblemos, que estamos tan
profundamente en deuda con Dios. Un romano
agonizante, el emperador Augusto envió a comprar
su almohada, porque, dijo él, espero que tenga
alguna virtud para hacerme dormir, en la que un
hombre tan endeudado podría descansar. Nosotros
que tenemos tantas deudas espirituales sobre
nosotros, ¿cómo podemos descansar hasta que
tengamos alguna esperanza de que se salven?
II. Lo segundo en esta petición es la confesión.
Confesemos nuestra deuda. Reconozcamos que
estamos atrasados con Dios y merecemos que él nos
haga cumplir la ley y nos arroje a la prisión del
infierno. Por la confesión damos gloria a Dios. "Hijo
mío, da gloria al Dios de Israel y hazle confesión".
Josué 7:19. Si confesamos la deuda, Dios la
perdonará. "Si confesamos nuestros pecados, él es
solo para perdonar". 1 Juan 1: 9. Confiesa la deuda y
Dios la borrará del libro. "Dije: Confesaré mis
transgresiones al Señor, y tú perdonaste la iniquidad
de mi pecado". Salmo 32: 5.
No confesemos meramente, sino trabajemos para
que nuestras deudas espirituales sean pagadas por
Cristo el Fiador. Di: "Señor, ten paciencia conmigo, y
Cristo te lo pagará todo. Él ha puesto un precio
infinito". El pacto de obras no admitiría garantía;
exigía obediencia personal: pero este privilegio lo
tenemos por el evangelio. Si no tenemos nada que
pagar, Dios aceptará una fianza. Cree en la sangre de
Cristo y la deuda está pagada.
Luego tenemos que considerar en estas palabras la
petición, "Perdónanos nuestros pecados", y la
condición, "Porque también nosotros perdonamos a
todos los que nos deben". El perdonar a los demás no
es una causa de que Dios nos perdone , pero es una

condición sin la cual no nos perdonará.

III. Ahora consideraremos la petición:
"Perdónanos nuestros pecados". Esta es una
petición bendita. El ignorante diría: "¿Quién nos
mostrará algo bueno?" (Salmo 4: 6) que significa una
buena compra; pero el Salvador nos enseña a orar
por aquello que es más noble y nos ayudará más,
que es el perdón del pecado. El perdón de los
pecados es una bendición primordial, es una de las
primeras misericordias que Dios otorga. "Entonces
los rociaré con agua limpia"; es decir, perdón.
Ezequiel 36:25. Cuando Dios perdona, no hay nada a
lo que se aferre para hacer por el alma; él adoptará,
santificará, coronará.
¿Qué es el perdón de los pecados?
Es Dios pasando por el pecado, borrando la partitura
y dándonos una descarga. Miqueas 7:18.
[1] La naturaleza del perdón aparecerá más
claramente al abrir algunas frases bíblicas; y
estableciendo algunas proposiciones.
(1) Perdonar el pecado es que Dios quite la
iniquidad. "¿Por qué no quitas mi iniquidad?" Job
7:21. Hebreo, despegue. Es una metáfora tomada de
un hombre que lleva una pesada carga que está a
punto de hundirlo, y otro viene y se la
quita; de modo que cuando la pesada carga del
pecado está sobre nosotros, Dios, al perdonar, la
quita de la conciencia. y lo pone sobre Cristo. "Él
cargó sobre él la iniquidad de todos nosotros". Isaías
53: 6.
(2) Perdonar el pecado, es que Dios lo cubra. "Tú
has cubierto todos sus pecados". Salmo 85: 2. Esto
fue tipificado por el propiciatorio que cubría el arca,
para mostrar la cobertura del pecado de Dios a
través de Cristo. Dios no cubre el pecado en el
sentido antinomiano —por lo que él no lo ve— pero
lo cubre de tal manera que no lo imputará.
(3) Perdonar el pecado es que Dios lo borre. "Yo
soy el que borro tus rebeliones". Isaías 43:25. La
palabra hebrea, borrar, alude a un acreedor que,
cuando su deudor le ha pagado, borra la deuda y le
da la absolución. Así, cuando Dios perdona el
pecado, borra la deuda, dibuja las líneas rojas de la
sangre de Cristo sobre ella, y así cruza el

libro de deuda.
(4) Perdonar el pecado es que Dios esparza
nuestros pecados como una nube. "He borrado
como una densa nube tus rebeliones". Isaías 44:22. El
pecado es la nube, una nube que se interpone, que
se dispersa, para que brote la luz de su rostro.
(5) Perdonar el pecado es que Dios arroje
nuestros pecados a las profundidades del mar , lo
que implica enterrarlos fuera de la vista, para que
no se levanten en juicio contra nosotros. "Echarás
todos sus pecados a las profundidades del mar".
Miqueas 7:19. Dios los arrojará, no como corcho que
vuelve a subir , sino como plomo que se hunde hasta
el fondo.
[2] La naturaleza del perdón aparecerá más
adelante al establecer algunas proposiciones al
respecto.
(1) Todo pecado merece la muerte y, por tanto,
necesita el perdón. Los papistas distinguen entre
pecados mortales y pecados veniales . Algunos se
infiltran desprevenidos en la mente, como
pensamientos vanos, movimientos repentinos de ira
y venganza, que Belarmino dice, son por naturaleza
veniales. Es cierto que los pecados más grandes son
en un sentido veniales, es decir, Dios puede
perdonarlos; pero el menor pecado no es venial en
su propia naturaleza , sino que merece condenación.
Leemos acerca de los deseos de la carne y las obras
de la carne. Romanos 13:14; Gálatas 5:19. Los deseos
de la carne son pecaminosos, así como las obras de
la carne. Lo que es una transgresión de la ley merece
condenación; pero los primeros indicios de
corrupción son una violación de la ley real y, por lo
tanto, merecen condenación. Romanos 7: 7,
Proverbios 24: 9. Para que el menor pecado sea
mortal y necesite perdón.
(2) Es solo Dios, quien perdona el pecado.
Perdonar el pecado es una de las prerrogativas
reales; una de las flores de la corona de Dios.
"¿Quién puede perdonar los pecados, sino sólo
Dios?" Marcos 2: 7. Es más apropiado que Dios
perdone el pecado; sólo el acreedor puede remitir la
deuda. El pecado es una ofensa infinita, y ningún
poder finito puede descargar una ofensa infinita.
Nadie puede quitar el pecado, a menos que sea
capaz de infundir gracia; porque, como dice Santo
Tomás de Aquino, con el perdón siempre hay
infusión de gracia; pero nadie puede infundir gracia,
por lo tanto nadie puede perdonar el pecado. Solo él
puede perdonar el pecado, quien puede perdonar el
castigo, pero es prerrogativa de Dios solamente
perdonar el pecado.

Pero un cristiano tiene la obligación de perdonar a

su hermano. "Perdonándonos unos a otros". Col.
3:13.
En todos los pecados de segunda mesa , hay dos
cosas distintas; desobediencia a Dios y agravio al
hombre. Lo que el hombre debe perdonar es el mal
que se le hizo a sí mismo, pero el mal que se le hizo a
Dios no puede perdonarlo. El hombre puede remitir
una ofensa contra sí mismo, pero no una
transgresión contra Dios.
La Escritura habla de un poder encomendado a los
ministros para perdonar el pecado: "A quienes
ustedes remitan, les son remitidos". Juan 20:23.
Los ministros no pueden perdonar los pecados con
autoridad y eficazmente -pero solamente declarativa
. Tienen un oficio especial y autoridad para aplicar
las promesas de perdón a los corazones
quebrantados. Cuando un ministro ve a alguien
humillado por el pecado, pero temeroso de que Dios
no lo haya perdonado y está listo para ser absorbido
por el dolor, para aliviar la conciencia de este
hombre, puede, en el nombre de Cristo, declararle
que es perdonado. No perdona el pecado por su
propia autoridad, sino como un heraldo, en el
nombre de Cristo, pronuncia el perdón de un
hombre. Como en la ley, Dios limpió al leproso y el
sacerdote lo declaró limpio; así Dios, por su
prerrogativa, perdona el pecado y el ministro
pronuncia el perdón al pecador arrepentido. El
poder para perdonar el pecado con autoridad en su
propio nombre, nunca fue otorgado a ningún mortal.
Un rey puede perdonar la vida de un hombre, pero
no puede perdonar su pecado. Los perdones de los
papas son insignificantes, como espacios en blanco
en una lotería, que no sirven para nada más que
para ser rasgados.
(3) El perdón de los pecados es puramente un
acto de la gracia gratuita de Dios. Hay algunos
actos de Dios que declaran su poder , como hacer y
gobernar el mundo; otros que declaran su justicia ,
como castigar a los culpables; otros que declaran su
gracia gratuita, como perdonadores de los
pecadores. "Yo soy el que borro tus transgresiones
por mi causa". Isaías 43:25. Perdona como cuando un
acreedor perdona libremente a un deudor. "Obtuve
misericordia". 1 Timoteo 1:16. Estaba todo salpicado
de misericordia. Cuando Dios perdona un pecado, no
paga una deuda, sino que da un legado. El perdón
nace de los afectos de la misericordia de Dios; no hay
nada que podamos hacer, que pueda merecerlo; ni
nuestras oraciones, ni nuestras lágrimas, ni nuestras
buenas obras pueden comprar el perdón. Cuando
Simón el Mago hubiera comprado el don del Espíritu
Santo con dinero, "Que tu dinero"

dijo Pedro, "muere contigo". Hechos 8:20. Entonces,

si los hombres creen que pueden comprar el perdón
del pecado con sus deberes y limosnas, que su
dinero perezca con ellos. El perdón es un acto de la
gracia gratuita de Dios, en el que despliega la
bandera del amor. Esto levantará trofeos de la gloria
de Dios y causará el triunfo de los santos en el cielo,
que cuando no había dignidad en ellos, cuando
yacían en su sangre, Dios se apiadó de ellos y
extendió el cetro de oro del amor al perdonar. ¡El
perdón es un hilo dorado tejido con los afectos de
la gracia inmerecida!
(4) El perdón es por la sangre de Cristo. La gracia
gratuita es la causa que se mueve hacia adentro. La
sangre de Cristo es la causa externa de merecer el
perdón. "En quien tenemos redención por su
sangre". Efesios 1: 7. Todos los perdones están
sellados con la sangre de Cristo. La culpa del pecado
era infinita, y nada más que esa sangre que tenía un
valor infinito podía procurar el perdón.
Pero si Cristo puso su sangre como precio de nuestro
perdón, ¿cómo podemos decir que Dios perdona el
pecado gratuitamente? Si es por compra, ¿cómo es
por gracia?
Fue la gracia gratuita de Dios la que descubrió un
camino de redención a través de un Mediador. Es
más, el amor de Dios apareció más en dejar que
Cristo muriera por nosotros, que si nos hubiera
perdonado sin exigir ninguna satisfacción. Fue la
gracia gratuita la que movió a Dios a aceptar el
precio pagado por nuestros pecados. Que Dios acepte
una fianza; que uno pecara y otro sufriera era gracia
gratuita. De modo que el perdón de los pecados,
aunque adquirido con la sangre de Cristo, es por
gracia gratuita.
(5) En el perdón de los pecados, Dios remite la
culpa y el castigo. En la remisión de la culpa, el
castigo también se remite. La culpa es una
obligación de castigar, clama justicia. Dios, al
perdonar, complace al pecador en cuanto al castigo.
Parece decirle: "Aunque hayas caído en las manos de
mi justicia y mereces morir, te quitaré el castigo;
todo lo que se te impute, será liberado". Cuando Dios
perdona a un alma, no lo tomará en cuenta de una
manera puramente vengativa; detiene la ejecución
de la justicia.
(6) En virtud de este perdón, Dios no recordará
más el pecado. "No me acordaré más de sus pecados
e iniquidades".

Hebreos 8:12. Pasará un acto de olvido, no

reprenderá con anteriores descorteses. Cuando
tengas miedo de que Dios vuelva a recordar tus
pecados después del perdón, mira este acto de
indemnización: "No me acordaré más de sus
iniquidades". Por tanto, se dice que Dios "borra
nuestro pecado". Un hombre no pide una deuda
cuando la ha tachado del libro. Cuando Dios perdona
a un hombre, cesa su anterior disgusto. "Mi ira se ha
calmado". Os 14: 4.
Pero, ¿está Dios enojado con sus perdonados?
Aunque un hijo de Dios, después del perdón, pueda
incurrir en su desagrado paternal, su ira judicial se
disipa. A pesar de que puede sentar en la
barra de -yet le ha quitado la maldición . La
corrección puede caer sobre los santos, pero no la
destrucción . "No le quitaré mi bondad ". Salmo
89:33.
(7) El pecado no es perdonado hasta que se
arrepienta. Por eso se juntan: "Arrepentimiento y
remisión". Lucas 24:47. [Concede arrepentimiento,
Señor, y luego perdón.] Fulgencio. En
ARREPENTIMIENTO hay tres ingredientes
principales, todos los cuales deben ser antes del
perdón. Son contrición, confesión y conversión.
CONTRICIÓN o quebrantamiento del corazón. "Serán
como palomas de los valles, todos en duelo, cada uno
por su iniquidad". Ezequiel 7:16. Esta contrición o
desgarro del corazón, se expresa a veces golpeando
en el pecho; Lucas 18:13; a veces arrancando el
cabello; Esdras 9: 3; ya veces regando el sofá; Salmo
6: 6.
Pero toda humillación no es contrición; algunos sólo
han fingido pesar por el pecado, y por eso han
perdido el perdón; como se humilló a sí mismo Acab,
cuyas vestiduras se rasgaron, pero no su corazón .
¿Qué es ese remordimiento y dolor que precede al
perdón de los pecados?
Es un dolor santo; es un duelo por el pecado, como
es pecado, y como deshonra a Dios y contamina el
alma. Aunque no hubo sufrimientos posteriores, el
verdadero arrepentido se lamentaría por el pecado.
"Mi pecado está siempre delante de mí". Salmo 51: 3.
Esta contrición precede a la remisión. "Me arrepentí;
me golpeé el muslo. ¿Es Efraín mi hijo querido? Mis
afectos están turbados por él. Seguramente tendré
misericordia de él". Jer 31:19, 20.
Efraín se afligió por pecar, y los afectos de Dios se
afligieron por Efraín. La mujer en el evangelio se
paró a los pies de Jesús llorando, y siguió un perdón.
"Por tanto, digo, sus muchos pecados le son
perdonados". Lucas 7:47. El sello se pone sobre la
cera cuando se derrite; Dios sella su perdón sobre
corazones derretidos.
El segundo ingrediente del arrepentimiento es la
CONFESIÓN. "Contra ti, solo contra ti, he pecado".
Salmo 51: 4. Esta no es una confesión auricular ; que
los papistas hacen un sacramento, y afirman que sin
la confesión de todos los pecados a los oídos del
sacerdote, nadie puede recibir el perdón. La
Escritura ignora esto, ni leemos que ningún Concilio
general, hasta que el Concilio de Letrán, que fue
como mil doscientos años después de Cristo, decretó
la confesión auricular.
Pero, ¿no dice la Escritura: "Confiesa tus pecados
unos a otros"? Santiago 5:16. Esto es absurdamente
presentado para la confesión auricular; porque,
según este razonamiento, el sacerdote debe confesar
al pueblo, así como el pueblo al sacerdote. El sentido
de ese verso es que en caso de escándalos públicos o
agravios privados, se debe confesar a otros; pero
principalmente, la confesión debe hacerse a Dios,
que es la parte ofendida. "Contra ti, solo contra ti, he
pecado".
La confesión da rienda suelta al dolor; debe ser libre
sin coacción, sincero sin reservas, cordial sin
hipocresía; el corazón debe acompañarlo. Esto abre
paso al perdón. "Dije que confesaría mis
transgresiones, y tú perdonaste". Salmo 32: 5.
Cuando el publicano y el ladrón confesaron,
obtuvieron perdón. El publicano se golpeó el pecho
con contrición y dijo: "Dios, ten piedad de mí,
pecador", hubo confesión; se fue justificado, hubo
perdón. El ladrón dijo: "En verdad sufrimos con
justicia", hubo confesión; y Cristo lo absolvió antes
de morir: "Hoy estarás conmigo en el paraíso". Lucas
23:43. Estas palabras de Cristo pueden haber
ocasionado el dicho de Agustín: "¡La confesión cierra
la boca del infierno y abre las puertas del paraíso!"
El tercer ingrediente del arrepentimiento es la
CONVERSIÓN, o apartarse del pecado . "Hemos
pecado"; hubo confesión. "Quitaron a los dioses
extraños"; hubo conversión. Jueces 10:15, 16. Debe
ser un cambio universal del pecado. "Echa de ti
todas tus transgresiones". Ezek

18:31. Sería reacio a que Dios perdonara solo

algunos de sus pecados. ¿Quieres que lo perdone
todo y no lo abandones todo? El que esconde a un
rebelde, es un traidor a la corona; el que vive en un
pecado conocido, es un hipócrita traidor.
No solo debe haber un alejamiento del
pecado, sino también un regreso a Dios . Por eso se
llama "Arrepentimiento para con Dios". Hechos
20:21. El corazón apunta hacia Dios como la aguja
del polo norte. El hijo pródigo no solo dejó a sus
rameras, sino que se levantó y fue con su padre.
Lucas 15:18. Este arrepentimiento es la forma más
fácil de perdonar. "Deje el impío su camino, y
vuélvase al Señor, el cual será amplio en perdonar".
Isaías 55: 7. Un rey no perdonará a un rebelde
mientras continúe en abierta hostilidad. Así, el
arrepentimiento precede a la remisión de los
pecados. Aquellos que nunca se arrepintieron, no
tienen motivos para esperar que sus pecados sean
perdonados.
No es que el arrepentimiento merezca el perdón de
los pecados. Hacer el arrepentimiento para
satisfacer la justicia de Dios es papista. Con el
arrepentimiento agradamos a Dios, pero no lo
satisfacemos . "La sangre de Cristo debe lavar
nuestras lágrimas". El arrepentimiento es una
condición, no una causa. Dios no perdonará por el
arrepentimiento, ni aún sin él. Sella sus perdones en
corazones que se derriten . El arrepentimiento hace
que valoremos más el perdón. El que llora con los
huesos rotos, más apreciará la misericordia de que
se le vuelvan a asentar; así, cuando no hay nada en
el alma sino nubes de dolor, y Dios trae perdón, que
está poniendo un arco iris en la nube para decirle al
alma que el diluvio de la ira de Dios no se
desbordará, ¡Oh! ¡Qué alegría hay al ver este
arcoíris! El alma arde de amor a Dios.
(8) Los pecados más grandes están dentro del
alcance del perdón. Los pecados de primera
magnitud, como el incesto, la sodomía, el adulterio,
el robo, el asesinato, son perdonables. Pablo era un
blasfemo, y por eso pecó contra la primera mesa;
perseguidor, y así pecó contra la segunda mesa; y sin
embargo obtuvo misericordia. 1 Timoteo 1:13.
Zaqueo, era un extorsionador; María Magdalena era
una mujer impura, de la cual fueron arrojados siete
demonios; Manasés, que hacía correr de sangre las
calles, tenía perdón. Algunos de los judíos que
participaron en la crucificación de Cristo fueron
perdonados. Dios borra no solo la nube, sino la nube
espesa ; enormidades así como enfermedades . Isaías
44:22. El rey, en la parábola, perdonó a su deudor
que le debía diez mil talentos. Mateo 28:27. Un
talento pesaba tres mil siclos, diez

mil talentos contenían casi doce toneladas de oro.

Este fue un emblema del perdón de los grandes
pecados de Dios.
"Aunque tus pecados sean como escarlata, serán
blancos como la nieve". Isaías 1:18. El escarlata, en
griego, se llama dos veces sumergido, y el arte del
hombre no puede lavar el tinte nuevamente. Aunque
tus pecados son de un tinte escarlata, la misericordia
de Dios puede lavarlos, como el mar cubre tanto
grandes rocas como pequeñas arenas . Esto lo
menciono para que los pecadores no se desesperen.
Dios le cuenta como una gloria perdonar los grandes
pecados, en los que la misericordia y el amor
triunfan. "La gracia de nuestro Señor fue
sobremanera abundante", fue exuberante, se
desbordó, como el río Nilo. 1 Timoteo 1:14. No
debemos medir a Dios por nosotros mismos. Su
misericordia supera a nuestros pecados tanto como
el cielo a la tierra. Isaías 55: 9. Si los grandes pecados
no pueden ser perdonados, no se les debe predicar a
los grandes pecadores; pero el evangelio debe ser
predicado a todos. Si no podían ser perdonados,
sería una deshonra para la sangre de Cristo; como si
la herida fuera más ancha que el yeso.
Dios primero ha hecho a los grandes pecadores "
vasos rotos "; ha roto sus corazones por el pecado, y
luego los ha hecho " vasos de oro "; los ha llenado
con el aceite de oro de la misericordia indulgente.
Esto puede animar a los grandes pecadores a entrar
y arrepentirse. El pecado contra el Espíritu Santo es
imperdonable, pero no porque haya suficiente
misericordia en Dios para perdonarlo, sino porque
quien lo ha cometido no tendrá perdón. Desprecia a
Dios, desprecia su misericordia, derrama el cordial
de la sangre de Cristo y la pisotea; le quita la
salvación.
Pero cuando un pobre pecador se mira a sí mismo y
ve su culpa, y luego mira la justicia y la santidad de
Dios, cae confundido; pero aquí está lo que puede
ser como un corcho de la red, para evitar que se
desespere: si deja sus pecados y viene a Cristo, la
misericordia puede sellar su perdón.
(9) Cuando Dios perdona a un pecador, perdona
todos los pecados. "Perdonaré todas sus
iniquidades". Jer 33: 8. "Habiéndoles perdonado
todas las ofensas". Col 2:13. El propiciatorio, que era
una especie de perdón, cubría toda el arca, para
mostrar que Dios cubre todas nuestras
transgresiones. No deja un solo pecado en la cuenta;
no toma su pluma y por ochenta pecados escribe
cincuenta, pero borra todo pecado. "El que perdona
todas tus iniquidades". Salmo 103: 3. Cuando digo,
Dios perdona todos los pecados, lo entiendo

de los pecados pasados , porque los pecados

venideros no son perdonados hasta que se
arrepientan. De hecho, Dios ha decretado
perdonarlos; y cuando perdona un pecado, con el
tiempo perdonará todos; pero los pecados futuros no
son realmente perdonados hasta que se arrepienten.
Es absurdo pensar que el pecado debe ser
perdonado antes de cometerlo.
Si todos los pecados pasados y venideros son
perdonados a la vez, entonces, ¿qué necesidad hay
de orar por el perdón del pecado? Es una cosa vana
orar por el perdón de lo que ya está perdonado. La
opinión de que los pecados venideros y pasados son
perdonados, quita y anula la intercesión de Cristo. Es
un abogado para interceder por los pecados diarios.
1 Juan 2: 1. Pero si el pecado es perdonado antes de
cometerlo, ¿qué necesidad hay de su intercesión
diaria? ¿Qué necesidad tengo de un abogado, si el
pecado es perdonado antes de cometerlo? De modo
que, aunque Dios perdona todos los pecados pasados
de un creyente, los pecados venideros no son
perdonados hasta que el arrepentimiento sea
renovado.
(10) La fe precede necesariamente al perdón.
Debe haber fe de nuestra parte, antes de que Dios
perdone. "De él dan testimonio todos los profetas,
que por su nombre todo aquel que crea en él recibirá
remisión de los pecados". Hechos 10:43. De modo que
la fe es un antecedente necesario del perdón. Hay
dos actos de fe, aceptar a Cristo y confiar en Cristo;
aceptar sus términos, confiar en sus méritos; y el que
no hace ninguna de estas cosas, no puede tener
perdón. El que no acepta a Cristo, no puede tener su
persona; el que no confía en él, no puede
beneficiarse de su sangre. De modo que, sin fe, no
hay remisión del pecado.
(11) Aunque la justificación y la santificación no
son lo mismo, Dios nunca perdona a un pecador
sin santificarlo. La justificación y la santificación no
son lo mismo. La justificación está fuera de nosotros,
la santificación está dentro de nosotros. Uno es
imputado por justicia, el otro es impartido por
justicia. La justificación es de una vez por todas, la
santificación es gradual. Una persona es santificada
más que otra, pero una no puede ser más justificada
que otra. Uno tiene más gracia que otro, pero no está
más justificado que otro. El asunto de nuestra
justificación es perfecto, es decir, la justicia de Cristo;
pero nuestra santificación es imperfecta, están las
manchas de los hijos de Dios. Deuteronomio 32: 5.
Nuestras gracias se mezclan, nuestros deberes están
profanados.

Por tanto, la justificación y la santificación no son

lo mismo . Sin embargo, a pesar de todo, nunca se
separan . Dios nunca perdona ni justifica a un
pecador, pero también lo santifica. "Fuiste
santificado, fuiste justificado". 1 Corintios 6:11. "Este
es el que vino por agua y sangre, Jesucristo". 1 Juan
5: 6. Cristo viene al alma por sangre , lo que denota
remisión; y por agua , que denota santificación. Que
nadie diga que ha sido perdonado si no ha sido
santificado. Esto insto a los antinomianos, que
hablan de que su pecado ha sido perdonado y de que
tienen parte en Cristo, ¡y sin embargo permanecen
inconversos y viven en los pecados más graves! El
perdón y la curación van de la mano. "Yo creo el
fruto de los labios, la paz". Isaías 57:19. La paz es el
fruto del perdón, y luego sigue: "Yo lo sanaré". Donde
Dios perdona, purifica. "Pondré Mi Espíritu dentro
de ti y haré que sigas Mis estatutos y observes
cuidadosamente Mis ordenanzas". Ezequiel 36:27.
Como en la inauguración de los reyes, con la corona ,
está el aceite para ungir . Así, cuando Dios corona a
un hombre con el perdón, le da el aceite de la unción
de la gracia para santificarlo. "Le daré una piedra
blanca, y en la piedra un nombre nuevo".
Apocalipsis 2:17. Una "piedra blanca", que es la
absolución; y un "nombre nuevo" en la piedra, que
es santificación.
Si Dios perdonara a un hombre y no lo santificara,
sería un reproche para él. Amaría y se complacería
con los hombres en sus pecados, lo cual es
diametralmente contrario a su naturaleza santa.
Si Dios perdona y no santifica, no podría recibir
nuestra gloria. El pueblo de Dios está formado para
mostrar su alabanza; pero si él nos perdona y no nos
santifica, ¿cómo podríamos mostrar su alabanza?
Isaías 43:21. ¿Cómo podríamos glorificarlo? ¿Qué
gloria puede recibir Dios de un corazón orgulloso,
ignorante y profano?
Si Dios perdonara y no santificara, entraría en el
cielo aquello que contamina; pero nada entrará en lo
que contamina. Apocalipsis 21:27. Entonces Dios
establecería la herencia sobre los hombres antes de
que fueran aptos para ella. "Lo que nos ha hecho
aptos para ser partícipes de la herencia". Col 1:12.
¿Cómo es eso sino por la unción divina? Para que a
quien Dios perdona, él transforme. Que nadie diga
que sus pecados están perdonados si no encuentra
una obra inherente de santidad en su corazón.
(12) Donde Dios perdona el pecado, imputa justicia. Esta
La justicia de Cristo imputada es el cumplimiento de
la ley de Dios y satisface plenamente las infracciones
de ella. Esta justicia procura el favor de Dios. Dios no
puede dejar de amarnos cuando nos ve con el manto
de su Hijo, que nos cubre y adorna. Con este manto
impecable de Cristo, eclipsamos a los ángeles. La
suya no es más que la justicia de las criaturas , esta
es la justicia de Dios mismo "para que nosotros
seamos hechos justicia de Dios en él". 2 Corintios
5:21. ¿Qué gran bendición es entonces el perdón? A
la remisión de los pecados se une la imputación de
justicia.
(13) Aquellos cuyos pecados son perdonados no
deben dejar de orar pidiendo perdón.
"Perdónanos nuestras ofensas". Los creyentes que
son perdonados deben ser continuos pretendientes
al perdón. Cuando Natán le dijo a David: "El Señor
ha quitado tu pecado", David compuso un salmo
penitencial para el perdón de su pecado. 2 Samuel
12:13. El pecado, después del perdón, se rebela.
Como el cabello de Sansón, aunque se corte, volverá
a crecer. Pecamos a diario y debemos pedir perdón
diario, así como pan de cada día. Además, el perdón
de un cristiano no es tan seguro, pero puede desear
tener una evidencia más clara de ello.
(14) No se pronuncia una absolución total de
todo pecado hasta el día del juicio. El día del juicio
se llama tiempo de refrigerio, cuando el pecado será
completamente borrado. Hechos 3:19. Ahora Dios
borra el pecado de verdad, pero entonces se hará de
una manera más pública . Dios pronunciará
abiertamente la absolución de los santos ante
hombres y ángeles. Su felicidad no se completará
hasta el día del juicio, porque su perdón será
pronunciado solemnemente, y habrá triunfos de la
multitud celestial. En ese día será verdad que Dios
no ve pecado en sus hijos; serán tan puros como los
ángeles; entonces la iglesia se presentará sin
arrugas. Efesios 5:27. Ella estará tan libre de mancha
como de culpa, Satanás no la acusará más. Cristo
mostrará el libro de la deuda, cruzado en su sangre.
Por tanto, la iglesia ora por la venida de Cristo al
juicio. La novia dice: "¡Ven, Señor Jesús!"
Utilice 1. Para obtener información.
(1) De esta palabra, "Perdona", aprendemos que
si la deuda del pecado no se salda de otra manera
que siendo perdonados, no podemos satisfacerla.
Entre otras opiniones condenables de la iglesia de
Roma, una es: el poder del hombre para satisfacer a
Dios por su pecado. El Concilio de Trento sostiene

que Dios está satisfecho de que suframos la pena

impuesta por la censura de los sacerdotes; y de
nuevo, que tenemos obras propias mediante las
cuales podemos satisfacer los agravios que le hemos
hecho a Dios. Por estas opiniones juzgamos cuál es la
religión papista. Tienen la intención de pagar la
deuda que tienen con Dios por sí mismos , pagarla en
parte, y no buscan que se les perdone todo. Pero,
¿por qué Cristo nos enseñó a orar, "Perdónanos
nuestros pecados", si podemos satisfacer a Dios por
nosotros mismos por el mal que le hemos hecho?
Esta falsa doctrina le roba a Dios su gloria, a Cristo
su mérito, ¡y el alma de salvación! ¡Pobre de mí! ¿No
está la cerradura cortada donde estaba la fuerza?
¿No son todas nuestras mejores obras voladas por el
pecado, y nuestras obras pecaminosas pueden
satisfacer el pecado? Esta doctrina convierte a los
hombres en sus propios salvadores, lo que es
absurdo de sostener, porque ¿puede la obediencia de
una criatura finita satisfacer una ofensa infinita? El
pecado perdonado implica claramente que no
podemos satisfacerlo.
(2) De esta palabra "nosotros", "Perdónanos",
aprendemos que el perdón debe buscarse
principalmente para nosotros mismos ; porque
aunque debemos orar por el perdón de otros,
"Oremos los unos por los otros", en primer lugar,
debemos pedir perdón por nosotros mismos.
Santiago 5:16. ¡Qué! ¿Nos hará bien el perdón de
otro? Todos deben esforzarse por tener su propio
nombre en el indulto. Un hijo no puede ser
perdonado por el perdón de su padre ; debe tener un
perdón para sí mismo. En este sentido el egoísmo es
lícito, cada uno debe ser para sí mismo y obtener el
perdón de sus propios pecados. "Perdónanos ".
(3) De esta palabra "nuestros", "nuestros
pecados", aprendemos cuán justo es Dios al
castigarnos. El texto dice "nuestros pecados"; no
somos castigados por los pecados de otros hombres,
sino por los nuestros. "Nadie tiene nada propio,
excepto su pecado". Agustín. No hay nada que
podamos llamar tan propiamente nuestro como
pecado. Nuestro pan de cada día lo recibimos de
Dios; nuestros pecados diarios los tenemos de
nosotros mismos. El pecado es nuestro propio acto,
una red de nuestro propio tejido. ¡Cuán justo, pues,
es Dios al castigarnos! Sembramos la semilla y Dios
nos hace cosechar lo que sembramos. "Doy a cada
uno según el fruto de sus obras". Jer 17:10. Cuando
somos castigados, saboreamos el fruto de nuestro
propio injerto.
(4) De esta palabra "pecados", vea de ahí la
multitud de pecados de los que somos culpables.
No oramos, perdónanos nuestro pecado , como si
fuera una sola deuda, sino pecados , en plural. Tan
vasto es el catálogo de nuestros pecados que David
clama: "¿Quién puede entender sus errores?" Salmo
19:12. Nuestros pecados son como las gotas del mar,
como los átomos del sol: superan
toda aritmética. Las deudas que tenemos con Dios no
podemos contar más de lo que podemos satisfacer la
justicia de Dios; lo cual, como debería humillarnos al
considerar cuán llenas de manchas negras están
nuestras almas , así debería ponernos a buscar el
perdón de nuestros pecados.
Utilice 2. Para exhortación.
Trabajemos por el perdón de los pecados, que es una
rama principal de la carta o pacto de gracia. "Seré
misericordioso con su injusticia, y nunca más me
acordaré de sus pecados y de sus iniquidades".
Hebreos 8:12. Es misericordia alimentarnos , pero es
rica misericordia perdonarnos. Las cosas terrenales
no son signos del amor de Dios ; él puede dar el
venado, pero no la bendición ; pero cuando sella el
perdón , da su amor y el cielo con él. "Pusiste una
corona de oro puro en su cabeza". Salmo 21: 3. Una
corona de oro era una misericordia; pero si miras el
Salmo 103 encontrarás una misericordia mayor: "El
que perdona todas las iniquidades resplandecientes,
el que te corona de bondad amorosa"; ver 3, 4. Ser
coronado con perdón y bondad amorosa es una
misericordia mucho mayor que tener una corona de
oro puro en la cabeza. Fue una misericordia cuando
Cristo curó al paralítico; pero cuando Cristo le dijo:
"Tus pecados te son perdonados", fue más que sanar
su parálisis. Marcos 2: 5. El perdón de los pecados es
lo principal que se debe buscar; y seguramente, si
una vez la conciencia es tocada por un sentimiento
de pecado, no hay nada de lo que un hombre tenga
más sed que el perdón. "Mi pecado está siempre
delante de mí". Salmo 51: 3. Esto hizo que David
estuviera tan ansioso por el perdón. "Ten piedad de
mí, oh Dios; borra mis rebeliones". Salmo 51: 1. Si
alguien viniera a David y le preguntara: "¿Dónde
está tu dolor? ¿Qué te angustia? ¿Es el temor de la
vergüenza que vendrá sobre ti? ¿tu casa?" Él habría
dicho: "No, es sólo mi pecado lo que me duele. Mi
pecado está siempre delante de mí". Si esto fuera
eliminado por el perdón, aunque la espada recorrió
un circuito en mi familia, estaría bastante contento.
Cuando la flecha de la culpa se clava en la conciencia,
nada es tan deseable como que el perdón la
arranque.

Por tanto, buscad el perdón de los pecados. Puede

hacer un cambio para vivir sin él; pero ¿cómo vas a
morir sin él? ¿No tendrá la muerte un aguijón para
un pecador no perdonado? ¿Cómo piensas llegar al
cielo sin perdón? Como en algunos festivales, no se
admiten a menos que

traer un boleto. De la misma manera, a menos que

tenga este boleto para mostrar, "Perdón de los
pecados", no se puede ser admitido en el lugar santo
del cielo. ¿Dios coronará alguna vez a los que no
perdonará ? Oh, ambiciona la gracia perdonadora.
Cuando Dios le hizo a Abraham grandes y grandes
promesas, Abraham respondió: "Señor, ¿qué me
darás, ya que no tengo hijos?" Génesis 15: 2.
Entonces, cuando Dios te haya dado riquezas, y todo
tu corazón pueda desear, dile: Señor, ¿qué es todo
esto, ya que me falta el perdón? Que mi perdón sea
sellado con la sangre de Cristo. Un preso en la cárcel
está enfermo, a pesar de su dieta valiente, su gran
asistencia, su cama blanda para acostarse, porque al
ser acusado, todos los días busca su acusación y
tiene miedo de la pena de muerte. En tal caso y
peor, es el que nada en los placeres del mundo, pero
sus pecados no son perdonados. Una conciencia
culpable lo acusa y teme ser procesado y condenado
en el tribunal de Dios . No des, pues, sueño a tus ojos,
ni sueño a tus párpados, hasta que hayas obtenido
alguna esperanza bien fundada de que tus pecados
han sido borrados. Antes de presionar con la
exhortación a buscar el perdón de los pecados,
propondré una pregunta.
Si el perdón del pecado es tan absolutamente
necesario, ¿cuál es la razón por la que tan pocos
en el mundo lo buscan? Si carecen de salud, acuden
al médico; pero si carecen del perdón de sus
pecados, parece que no se preocupan y no lo buscan.
¿Por qué es esto?
Los hombres no buscan el perdón de los pecados por
falta de consideración . No miran su estado
espiritual, ni revisan sus cuentas para ver cómo se
encuentran los asuntos entre Dios y sus almas. "Mi
pueblo no considera"; no consideran que están en
deuda con Dios con una deuda de diez mil talentos, y
que Dios, dentro de poco, les pedirá cuentas. "Así
que, entonces, cada uno de nosotros dará cuenta de
sí mismo a Dios". Isaías 1: 3; Romanos 14:12. Pero la
gente rehuye los pensamientos serios: "Mi pueblo no
considera". Por eso no buscan el perdón.
Los hombres no buscan el perdón de los pecados por
falta de convicción . Pocos están convencidos de lo
mortal que es el pecado maligno : que es la
destilación de todo mal, que trae todas las plagas al
cuerpo y maldiciones al alma. A menos que los
pecados de un hombre sean perdonados, no existe la
criatura más vil con vida: la rata,

serpiente o sapo, ¡que está en peor condición que el

pecador! Porque cuando mueren, van a la tierra;
pero él, muriendo sin perdón, va a los tormentos del
infierno para siempre. Los hombres no están
convencidos de esto, pero juegan con la víbora del
pecado.
Los hombres no buscan sinceramente el perdón,
porque buscan otras cosas . Buscan el mundo con
inmoderación. Cuando Saúl estaba buscando los
asnos, no pensó en un reino. El mundo es una
trampa de oro. "Las riquezas del mundo son lazos
del diablo", Bernard. La cuña de oro impide que
muchos busquen el perdón. Los ministros claman al
pueblo: "Sellen su perdón"; pero si llamas a un
hombre que está en un molino, el ruido del molino
ahoga la voz, que no puede oír. De la misma manera,
cuando el molino de un oficio está en marcha, hace
tanto ruido que la gente no puede oír al ministro
cuando alza su voz como una trompeta y les grita
que velen por el sellado de su perdón. Aquel que
pasa todo su tiempo en el mundo y no le importa el
perdón, finalmente se acusará a sí mismo de locura.
Usted juzgaría muy imprudente a ese prisionero que
debería pasar todo su tiempo con el cocinero para
preparar la cena y no debería importarle obtener un
perdón.
Los hombres no buscan el perdón de los pecados
mediante una atrevida presunción de
misericordia . Ellos conciben a Dios como hecho de
misericordia; y que los complacerá, aunque se
esfuercen poco o nada en pedir su perdón. Es cierto
que Dios es misericordioso, pero también es justo, no
se equivocará con su justicia al mostrar
misericordia. Lea la proclamación: "El Señor, el
Señor Dios, misericordioso y misericordioso, y que
de ninguna manera librará al culpable". Éxodo 34: 6,
7. Los que siguen pecando, y son tan perezosos o
obstinados que no buscan el perdón, aunque haya
todo un océano de misericordia en el Señor, ni una
gota caerá de su parte. Él "de ninguna manera
absolverá al culpable".
Los hombres no buscan sinceramente el perdón, con
la esperanza de la impunidad . Se adulan a sí
mismos en el pecado, y debido a que han sido
perdonados por tanto tiempo, por lo tanto, piensan
que Dios nunca tiene la intención de contar con
ellos. "Él ha dicho en su corazón: Dios se ha olvidado;
oculta Su rostro y nunca lo verá". Salmo 10:11.
Piensan que Dios es ciego o olvidadizo. Pero que los
pecadores sepan que la paciencia larga no es
perdón. Dios soportó a Sodoma durante mucho
tiempo, pero al final hizo llover fuego y azufre sobre

ellos. El aplazamiento del juicio no absuelve al

preso. Cuanto más tiempo esté soportando Dios el
golpe, más pesado será al final, si los pecadores no se
arrepienten.
Los hombres no buscan sinceramente el perdón, por
error . Piensan que obtener un perdón es fácil, es
solo arrepentirse en la última hora, un suspiro o un
"Señor, ten piedad", y el perdón caerá en sus bocas.
¿Pero es tan fácil arrepentirse y tener perdón? Dime,
oh pecador, ¿es fácil la regeneración? ¿No hay
dolores en el nuevo nacimiento? ¿Es fácil la
mortificación del pecado? ¿No es nada para sacarse
el ojo derecho? ¿Es fácil saltar del regazo de Dalila al
seno de Abraham? ¡Esta es la red con la que el diablo
arrastra a millones al infierno!
Los hombres no buscan el perdón, por
desesperación . Oh, dice el alma abatida, es una
cosa vana para mí esperar perdón; mis pecados son
tantos y atroces que seguramente Dios no me
perdonará. "Y ellos dijeron: No hay esperanza". Jer
38:12. Mis pecados son enormes montañas, ¿y
alguna vez pueden ser arrojados al mar? La
desesperación corta los nervios del esfuerzo. ¿Quién
usará medios que desesperan del éxito? El diablo
muestra a algunos hombres sus pecados con el
pequeño extremo del telescopio, y parecen poco o
nada en absoluto; pero él muestra a otros sus
pecados con el gran extremo del telescopio, y los
asustan hasta la desesperación. Este es un pecado
que condena el alma . La desesperación de Judas fue
peor que su traición. La desesperación derrama el
cordial de la sangre de Cristo. La voz de la
desesperación es: "La sangre de Cristo no puede
perdonarme". Así veis de dónde es que los hombres
no buscan más fervientemente el perdón de los
pecados.
Habiendo respondido a esta pregunta, ahora vendré
a presionar la exhortación sobre cada uno de
nosotros, a buscar fervorosamente el perdón de
nuestros pecados.
(1) Nuestra propia vida consiste en obtener el
perdón. Se llama la "justificación de la vida".
Romanos 5:18. Ahora bien, si nuestra vida está en
nuestro perdón, y estamos muertos y condenados
sin él, ¿no nos concierne sobre todas las cosas
trabajar por el perdón de los pecados? "Porque no es
cosa vana para ti, porque es tu vida". Deuteronomio
32:47. Si un hombre está condenado a muerte,
pondrá a trabajar su ingenio y hará uso de todos sus
amigos para conseguir que el rey le conceda el
perdón, porque su vida depende de ello. De la misma
manera, nosotros a causa del pecado estamos bajo
una sentencia de condenación. Hay un amigo en la
corte que podemos utilizar para procurar nuestro
perdón, a saber, el Señor Jesús. Cuán sinceros,
entonces, debemos estar con él para que sea nuestro
Abogado ante el Padre por nosotros,

presentaría el mérito de su sangre al Padre, como

precio de nuestro perdón.
(2) Hay algo en el pecado que debería hacernos
desear el perdón. El pecado es lo único que inquieta
al alma. Es una carga, carga la creación, carga la
conciencia. Romanos 8:22; Salmo 38: 4. Un hombre
inicuo no es sensible al pecado, está muerto en
pecado; y si pones un peso de mil libras sobre un
muerto, él no lo siente. Pero para una conciencia
despierta, el pecado es una carga. Cuando un
hombre pesa seriamente en sí mismo la gloria y la
pureza de esa Majestad que el pecado ha ofendido, la
preciosidad de esa alma que el pecado ha
contaminado, la pérdida de esa felicidad que el
pecado ha puesto en peligro, la grandeza de ese
tormento que el pecado ha merecido, para ¡Ponga
todo esto junto, seguramente debe hacer que el
pecado sea una carga! ¿Y no deberíamos esforzarnos
para que se elimine esta carga perdonando la
misericordia?
El pecado es una deuda, "Perdónanos nuestras
deudas". Mateo 6:12. Cada deuda que tenemos, Dios
la ha escrito en su libro. "He aquí, está escrito
delante de mí", y un día se abrirá el libro de la deuda
de Dios . "Los libros fueron abiertos". Isaías 65: 6;
Apocalipsis 20:12. ¿Y no debería esto hacernos
buscar el perdón? El pecado es una deuda tal que
debemos permanecer eternamente en la prisión del
infierno porque, si no se paga, ¿no deberíamos ser
fervorosos con Dios para tachar el libro de deudas
con la sangre de su Hijo? No hay manera de mirar a
Dios a la cara con consuelo, sino pagando o
perdonando nuestras deudas.
(3) Nada más que el perdón puede aliviar una
conciencia atribulada. Hay una gran diferencia
entre complacer la fantasía y aliviar la conciencia.
Las cosas mundanas pueden complacer la
imaginación, pero no aliviar la conciencia. Nada más
que el perdón puede aliviar un alma atribulada. Es
extraño qué cambios harán los hombres para aliviar
su dolor de conciencia, y cuántas medicinas falsas
usarán antes de tomar el camino correcto para
curarse. Cuando la conciencia esté turbada,
intentarán si la compañía alegre les ayuda. Quizás
puedan beber para quitarse los problemas de
conciencia; tal vez puedan jugar a las cartas; tal vez
multitud de negocios consumirán tanto su tiempo,
que no tendrán tiempo para escuchar los clamores y
acusaciones de conciencia; pero ¡qué vanos son
todos estos intentos! Aún así, la herida sangra por
dentro, su corazón tiembla, su conciencia ruge y no
pueden tener paz. ¿Por qué es? La razón

es decir, no van a la misericordia de Dios, y la sangre

de Cristo, para el perdón de sus pecados; y por eso
no tienen facilidad.
Supongamos que un hombre tiene una espina en el
pie que le causa dolor; que lo unja o lo envuelva y lo
caliente; pero hasta que le arrancan la espina , le
duele y se hincha, y no se siente cómodo. De la
misma manera, cuando la espina del pecado está en
la conciencia de un hombre, no hay alivio hasta que
se la saca. Cuando Dios quita la iniquidad, se arranca
la espina. ¡Cómo se calmó finamente el corazón de
David cuando el profeta Natán le dijo: "El Señor ha
quitado tu pecado!" 2 Samuel 12:13. ¡Cómo
deberíamos, pues, trabajar por el perdón! Hasta
entonces no podemos tener tranquilidad mental.
Nada más que el perdón, sellado con la sangre del
Redentor, puede aliviar un espíritu herido.
(4) El perdón de los pecados es factible y se
puede obtener. La imposibilidad destruye el
esfuerzo; pero, "Hay esperanza en Israel acerca de
esto". Esdras 10: 2. Los demonios son esperanza
pasada; una sentencia de muerte sobre ellos, que es
irrevocable; pero hay esperanza para nosotros de
obtener el perdón. "Hay perdón contigo". Salmo 130:
4. Si el perdón de los pecados no fuera posible, no se
debe orar por él; pero se ha rezado por él. "Te ruego,
oh Señor, que quites la iniquidad de tu siervo". 2
Samuel 24:10. Y Cristo nos invita a orar por ello
"Perdónanos nuestras ofensas". Eso es posible lo que
Dios ha prometido, pero Dios ha prometido perdón
tras el arrepentimiento. "Deje el impío su camino y
vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia y
del Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar".
Isaías 55: 7. Hebreo: "Multiplicará el perdón". Eso es
posible, lo que otros han obtenido; pero otros han
llegado al perdón, por lo tanto, se puede obtener.
Salmo 32: 5. "Has echado todos mis pecados a tus
espaldas". Isaías 38:17.
(5) El perdón de los pecados es una elección y
una bendición eminente. Vale la pena obtener el
libro cancelado y Dios apaciguado, lo que puede
estimular nuestro empeño en conseguirlo. Que es
una rara bendición trascendente, aparece mediante
tres demostraciones:
Primero, si consideramos cómo se compra esta
bendición, es decir, por el Señor Jesús. Hay tres
cosas en referencia a Cristo que establecen la
elección y la preciosidad del perdón:

[1] Ningún poder creado en el cielo o la tierra

podría expiar un pecado, o procurar un
perdón, sino sólo Jesucristo. "Él es el sacrificio
expiatorio por nuestros pecados". 1 Juan 2: 2. Ningún
mérito de criatura puede comprar el perdón del
pecado. Pablo tenía tanto de qué jactarse como
cualquier hombre: su nobleza, su erudición, su
justicia legal; pero renuncia a todo en el punto de la
justificación, y los pone bajo los pies de Cristo para
que los pisoteen. Ningún ángel, con toda su santidad,
podría poner precio por el perdón de un pecado. "Si
alguno peca contra el Señor, ¿quién rogará por él?" 1
Sam 2:25. ¿Qué ángel se atrevió a ser tan valiente
como para abrir su boca a Dios por un pecador
delincuente? Solo Jesucristo, que es Dios-hombre,
pudo lidiar con la justicia de Dios y comprar el
perdón.
[2] El mismo Cristo no pudo obtener el perdón
sin morir. Todo perdón es el precio de la sangre de
Cristo. La vida de Cristo fue una regla de santidad y
un modelo de obediencia. Cumplió toda justicia.
Mateo 3:15. Ciertamente, su obediencia activa fue de
gran valor y mérito; pero lo que eleva el valor del
perdón es que su obediencia activa no nos habría
procurado un perdón completo sin el
derramamiento de su sangre. Por tanto, nuestra
justificación se atribuye a su sangre. "Ser justificado
por su sangre". Romanos 5: 9. Cristo desangró
nuestro perdón. Se le atribuye mucho a su
intercesión, pero su intercesión no habría
prevalecido ante Dios para el perdón de un pecado,
si no hubiera derramado su sangre. Es digno de
notar que cuando a Juan se le describe a Cristo como
un intercesor de su iglesia, se lo representa en la
semejanza de un Cordero inmolado , para mostrar
que Cristo debe morir y ser inmolado antes de que
pueda ser un intercesor. Apocalipsis 5: 6.
[3] Cristo, al morir, no nos había comprado el
perdón si no hubiera tenido una muerte maldita.
Soportó la maldición. Gálatas 3:13. Todas las agonías
que Cristo soportó en su alma, todos los tormentos
en su cuerpo, no podían comprar un
perdón, a menos que él hubiera sido convertido en
una maldición por nosotros. Debe ser maldecido
antes de que podamos ser bendecidos con un
perdón.
En segundo lugar, el perdón de los pecados es una
bendición escogida, si consideramos los gloriosos
atributos que Dios pone en él. Presenta un poder
infinito. Cuando Moisés suplicaba a Dios por el
perdón del pecado de Israel, dijo así: "Sea grande el
poder de mi Señor". Entumecimiento 14:17. Para
Dios, perdonar el pecado es una obra de tan gran
poder como para hacer el cielo y

tierra, no, ¡ una obra mayor! Cuando hizo el mundo,

no encontró oposición; pero cuando perdona,
Satanás se opone y el corazón se opone. Un pecador
está desesperado y desprecia, sí, desafía el
perdón, hasta que Dios, por su gran poder, lo
convence de su pecado y peligro, y lo hace dispuesto
a aceptar el perdón. Dios, al perdonar los pecados,
manifiesta infinita misericordia. "Perdón, te ruego,
la iniquidad de este pueblo, conforme a la grandeza
de tu misericordia". Entumecimiento 14:19. Es
misericordia tener un indulto; y si hay misericordia
en perdonar a un pecador, ¡qué misericordia hay en
perdonarlo ! Esta es la crema de la misericordia .
¡Que Dios aguante tantas ofensas, borre tantas
deudas, es gracia infinita!
En tercer lugar, el perdón de los pecados es una
bendición escogida, ya que sienta las bases para
otras misericordias . Es una misericordia principal.
Da paso a cosas buenas temporales. Aporta salud .
Cuando Cristo le dijo al paralítico: "Tus pecados te
son perdonados", dio paso a una curación corporal.
"Levántate, toma tu cama y camina". Mateo 9: 6. El
perdón de su pecado dio paso a la curación de su
parálisis. Trae prosperidad . Jer 33: 8, 9. Da paso a las
cosas buenas espirituales. El perdón de los pecados
nunca viene solo, sino que tiene otras bendiciones
espirituales que lo acompañan. A los que Dios
perdona, los santifica, adopta y corona. Es una
misericordia voluminosa, atrae el eslabón plateado
de la gracia y el eslabón dorado de la gloria tras él.
Dios sella el perdón del pecador con un beso. ¿Y no
deberíamos, sobre todo, buscar una bendición tan
grande como el perdón? "Bienaventurado aquel
cuyas transgresiones son perdonadas, cuyos pecados
están cubiertos. ¡Bienaventurado el hombre cuyo
pecado el Señor no cuenta contra él!" Salmo 32: 1-2
(6) Lo que puede hacernos buscar el perdón de
nuestros pecados es la inclinación de Dios al
perdón. "Eres un Dios dispuesto a perdonar".
Nehemías 9:17. En hebreo es, "Un Dios de perdones".
Somos propensos a albergar ideas erróneas sobre
Dios, que es inexorable y no perdonará. "¡Te sabía
que eres un hombre duro!" Mateo 25:24. Pero Dios es
un Dios que perdona los pecados. "El Señor,
misericordioso y clemente, perdona la iniquidad, la
transgresión y el pecado". Éxodo 34: 6, 7. Aquí está mi
nombre, dice Dios, si supieran cómo soy llamado, les
digo mi nombre: "El Señor, el Señor Dios,
misericordioso, que perdona la iniquidad". Un pirata
o rebelde, que sabe que hay una proclamación en su
contra, nunca entrará; pero, si escucha que el
príncipe está lleno de clemencia y hay una
proclamación de perdón si

se somete, será un gran incentivo para él dejar las

armas y volverse leal a su príncipe. Véase la
proclamación de Dios a los pecadores arrepentidos,
en Jeremías 3:12: "Ve y proclama estas palabras, y di:
Vuélvete, Israel rebelde, dice el Señor, y no haré que
mi ira caiga sobre ti, porque soy misericordioso. " La
misericordia de Dios es una tierna misericordia. La
palabra hebrea para misericordia significa afecto .
La misericordia de Dios está llena de simpatía, es de
una naturaleza sumamente dulce e indulgente. "Tú,
Señor, eres bueno y estás dispuesto a perdonar".
Salmo 86: 1. La abeja no da miel con más naturalidad
de lo que Dios muestra misericordia.
Pero, ¿no parece que Dios se deleita en actos
punitivos o actos severos? "Me reiré de tu
calamidad". Proverbios 1:26.
¿A quién le dice Dios esto? Vea el versículo 24, 25.
"Ya que me rechazaste cuando llamé y nadie me hizo
caso cuando extendí mi mano, ya que ignoraste
todos mis consejos y no aceptaste mi reprensión".
Dios se deleita en la destrucción de los que
desprecian su instrucción; pero un humilde
penitente que rompe el pecado y pide perdón, se
deleita en él. "Se deleita en la misericordia". Miq
7:18.
"Pero aunque Dios está tan lleno de misericordia y
dispuesto a perdonar, sin embargo, su misericordia
no llega a todos; perdona sólo a los elegidos, y yo
cuestiono mi elección".
Ningún hombre puede decir que no ha sido elegido.
Dios no le ha revelado a ningún hombre en
particular, que es un réprobo, con la única
excepción de él, que ha pecado contra el Espíritu
Santo; del cual estás lo suficientemente lejos , que
lloras por el pecado y buscas el perdón.
El pensamiento de que no somos elegidos, y que no
hay perdón para nosotros, viene de Satanás, y es la
flecha envenenada que dispara. Él es el acusador:
nos acusa ante Dios de que somos grandes
pecadores; y nos acusa a Dios como si fuera un
tirano, que vela para destruir a sus criaturas. Son
sugerencias diabólicas; di: "Ponte detrás de mí,
Satanás".
Es pecado que alguien sostenga que no ha sido
elegido. Le apartaría del uso de medios, de la
oración y del arrepentimiento; lo endurecería y lo
desesperaría. Por lo tanto, no fisgonees en los
secretos del cielo.

Recuerda lo que les sucedió a los hombres de Bet-

semes, por mirar dentro del arca. 1 Sam 6:19. Sepa
que no debemos seguir la voluntad secreta de Dios,
sino su voluntad revelada . Echemos un vistazo a la
voluntad revelada de Dios, y allí encontraremos lo
suficiente para alimentar la esperanza y animarnos
a ir a Dios para el perdón de nuestros pecados. Él ha
dicho en su Palabra que es "rico en misericordia" y
que no se deleita en la destrucción de un pecador.
Efesios 2: 4; Ezequiel 18:32. Jura por su esencia.
"Vivo yo, dice el Señor Dios, que no me complazco en
la muerte de los impíos". Ezequiel 33:11. Por lo tanto,
espera mucho y pospone el juicio de vez en cuando
para ver si los pecadores se arrepienten y buscan su
perdón. Por lo tanto, dejemos que las tiernas
misericordias y las preciosas promesas de Dios nos
animen a buscarlo para el perdón de nuestros
pecados.
(7) No buscar sinceramente el perdón, es una
miseria indescriptible para quienes necesitan
perdón. Debe estar enfermo con ese malhechor, que
no tiene perdón.
El pecador no perdonado, que vive y muere así,
sufre la mayor pérdida y privación . ¿Existe alguna
felicidad como el disfrute de Dios en la gloria? Este
es el gozo de los ángeles, la corona de los santos
glorificados , pero el pecador no perdonado no verá
el rostro sonriente de Dios; verá a Dios como un
enemigo, no como un amigo; tendrá una visión
aterradora de Dios, no la visión beatífica; verá la
vara negra de la venganza, no el propiciatorio del
perdón. Los pecados no perdonados, son como el
ángel con una espada de fuego, que detuvo el paso al
paraíso. Detienen el camino hacia el paraíso
celestial. ¡Cuán triste es la condición de esa alma,
desterrada del lugar de la dicha, donde el Rey de la
Gloria mantiene su corte!
El pecador no perdonado no tiene nada que ver con
ninguna promesa . Las promesas son los pechos que
contienen la leche sincera de la Palabra, que llenan el
alma de preciosa dulzura. Son la carta real, pero ¿qué
tiene que hacer un extraño para entrometerse en la
carta? Fue la paloma que arrancó la rama de olivo;
es sólo el creyente quien arranca el árbol de la
promesa. Hasta que se cumpla la condición de la
promesa, ningún hombre puede tener derecho al
consuelo de ella; ¡Y qué triste es no tener una
promesa que mostrar al cielo!
Un pecador no perdonado está continuamente en
peligro de sufrir el clamor de una conciencia
acusadora . Una conciencia acusadora es un
pequeño infierno. Nosotros

Tiembla al oír rugir a un león: ¡qué terribles son los

rugidos de la conciencia! Judas se ahorcó para
calmar su conciencia. La conciencia de un pecador
en la actualidad está dormida o cauterizada ; pero
cuando Dios lo despierte, ya sea por la aflicción o
por la muerte, ¡cómo se atemorizará el pecador no
perdonado! Cuando a un hombre se le pongan todos
sus pecados ante sus ojos, y se le saquen los colores
de sangre, y el gusano de la conciencia comience a
roer, ¡oh, qué temblor de corazón tendrá el pecador!
Todas las maldiciones de Dios están en plena
vigencia contra un pecador no perdonado. Sus
mismas bendiciones están malditas. "Maldeciré tus
bendiciones". Mal 2: 2. Su mesa es una trampa; come
y bebe una maldición. ¿Qué consuelo podía tener
Dionisio en su fiesta, cuando imaginaba ver una
espada desnuda colgando de un hilo sobre su
cabeza? Basta estropear el banquete de un pecador,
que una maldición como una espada desnuda,
cuelgue sobre su cabeza. César se maravilló al ver a
uno de sus soldados que estaba endeudado tan
alegre. ¡Es asombroso que un hombre no perdonado
pueda ser feliz, que es heredero de todas las
maldiciones de Dios! Él no ve estas maldiciones, pero
es más ciego que el asno de Balaam, que vio la
espada desenvainada del ángel.
El pecador no perdonado se encuentra en un caso
terrible al morir . Lutero profesaba que había tres
cosas en las que no se atrevía a pensar sin Cristo: sus
pecados, la muerte y el día del juicio. La muerte de
un alma sin Cristo es el "rey de los terrores". Como el
profeta Ahías le dijo a la esposa de Jeroboam: "Soy
enviado a ti con noticias pesadas" (1 Reyes 14: 6). Así,
la muerte es enviada al alma no perdonada con
noticias pesadas. La muerte es el carcelero de Dios
para arrestarlo. La muerte es un prólogo de la
condenación. Quita todas las comodidades
terrenales, quita los bocados azucarados; no más
beber vino en cuencos, no más alegría ni música. "La
música de arpistas y músicos, flautistas y
trompetistas, nunca más se escuchará en ti".
Apocalipsis 18:22. El pecador nunca más gustará los
placeres deliciosos, por toda la eternidad; su miel se
convertirá en "hiel de áspides". Job 20:14.
A la muerte, se pondrá fin a todos los indultos. Ahora
Dios perdona al pecador, le evita tal ataque de
enfermedad; le da un respiro muchos años. El
pecador debería haber muerto por tal
borrachera, pero Dios le concedió un indulto; alargó
el hilo de plata de la paciencia hasta un milagro;
pero cuando el pecador muere sin arrepentimiento y
sin perdón, el arrendamiento de

La paciencia de Dios se ha agotado, y debe

presentarse en persona ante el Dios justo para
recibir su sentencia; después de lo cual, no habrá
quien lo rescate, ni se enterará más de un indulto.
(6) ¡ El pecador que muere sin ser perdonado,
debe ir a la condenación! Esta es la segunda
muerte, una muerte eterna. El alma no perdonada
debe soportar para siempre la ira de un Dios
vengador del pecado . Mientras Dios sea Dios,
mientras la copa de su ira caerá sobre el alma
condenada. Esta es una condición indefensa. Hay un
tiempo en el que no se ayuda al pecador; Se le ofrece
Cristo y la salvación , pero él los desprecia, no
recibirá ayuda; y pronto llegará un momento en que
no podrá ser ayudado; clama por misericordia, "¡Oh!
¡Un perdón, un perdón! ¡Pero es demasiado tarde, la
fecha de la misericordia ha expirado!" Oh! ¡Qué
triste, entonces, es vivir y morir sin perdón! Puede
colocar una lápida sobre ese hombre y escribir este
epitafio en ella: "¡Hubiera sido bueno para ese
hombre si nunca hubiera nacido!" Ahora bien, si la
miseria de un estado no perdonado es tan
inexpresable, ¡cómo deberíamos esforzarnos por el
perdón, para que no seamos sumergidos en un
laberinto de fuego y azufre tan terrible por toda la
eternidad!
(7) Los que no son perdonados deben llevar una
vida incómoda. "Tu vida estará en duda ante ti, y
temerás día y noche". Deuteronomio 28:66. Por lo
tanto, el pecador no perdonado debe tener
palpitaciones y temblores en el corazón. "El miedo
tiene tormento". 1 Juan 4:18. La palabra griega para
tormento, kolasis, se usa a veces para el infierno; el
miedo tiene un infierno. Un hombre endeudado
teme, a cada paso que da, que lo arresten. De la
misma manera, el pecador no perdonado teme, ¿qué
pasaría si esta noche de muerte, la muerte que es el
sargento de Dios, lo arrestara? "¿Por qué no
perdonas mi transgresión? Porque ahora dormiré en
el polvo"; como si Job hubiera dicho: "Señor, pronto
moriré, dormiré en el polvo; ¿y qué haré si mis
pecados no son perdonados?" Job 7:21. ¿Qué
consuelo puede recibir un alma no perdonada en
algo? Seguramente, no más de lo que un prisionero
puede comer o escuchar música, quien carece de su
perdón. Por tanto, por todos estos poderosos
motivos, trabajemos por el perdón de los pecados.
Pero estoy desanimado de acudir a Dios en busca de
perdón, porque soy indigno de perdón; ¿Qué soy yo
para que Dios me muestre tal favor?
Dios perdona, no porque seamos dignos, sino porque es
misericordioso .
"El Señor, el Señor Dios, misericordioso y
misericordioso". Éxodo 34: 6. Él perdona por su
misericordia; los actos de perdón son actos de gracia
. ¿Qué mérito había en Pablo antes de la conversión?
Él era un blasfemo, y por eso pecó contra la primera
tabla de la ley; él era un perseguidor, y por eso pecó
contra la segunda tabla de la ley; pero la gracia
inmerecida selló su perdón. "Obtuve misericordia";
Estaba todo enamorado de la misericordia. 1
Timoteo 1:13. ¿Qué mérito tenía la mujer de
Samaria? Ella era ignorante. Juan 4:22. Ella era
inmoral; ver 18. Ella era malhumorada y grosera, no
le daría a Cristo ni siquiera un vaso de agua fría; ver
9. "Tú eres judía y yo soy una mujer samaritana.
¿Cómo puedes pedirme de beber?" ¿Qué mérito
había aquí? Sin embargo, Cristo pasó por alto todo y
perdonó su ingratitud; y aunque ella le negó el agua
del pozo, él le dio el agua de la vida. Libre gracia no
encontrar nosotros digna, pero hace dignos! Por
tanto, a pesar de su indignidad, busquen a Dios para
que sus pecados sean perdonados.
"Pero he sido un gran pecador, y seguramente Dios no me
perdonará"
David lo presenta como un argumento de perdón.
"Perdona mi iniquidad, porque es grande ". Salmo
25:11. Cuando Dios perdona los grandes pecados,
hace una obra como él mismo. Cuanto mayor es la
desesperación de la herida, más manifiesta la virtud
de la sangre de Cristo al curarla. María Magdalena,
de la cual fueron arrojados siete demonios, fue una
gran pecadora, ¡sin embargo , obtuvo su perdón!
Cuando algunos de los judíos, que participaron en la
crucificación de Cristo, se arrepintieron, ¡la misma
sangre que derramaron selló su perdón! Considere
los pecados, ya sea por su número como las arenas
del mar, o por su peso como las rocas del mar, ¡pero
hay suficiente misericordia en Dios para
perdonarlos! "Aunque tus pecados sean como
escarlata, serán blancos como la nieve". Isaías 1:18.
El escarlata significa sumergido dos veces , que
ningún arte del hombre puede sacar , ¡pero Dios
puede lavar este tinte escarlata! No hay pecado
exento del perdón, sino el pecado que desprecia el
perdón, el pecado contra el Espíritu Santo. Mateo
12:31. Por lo tanto, oh pecador, no deseches el ancla
de tu esperanza, sino ve a Dios en busca de perdón.
El vasto océano tiene límites , ¡pero la misericordia
perdonadora de Dios no tiene límites! Puede
perdonar tanto los grandes pecados como los
pequeños; como el mar puede cubrir grandes rocas y
pequeñas arenas. Nada impide el perdón, ¡pero el
pecador no lo pide!
Que un gran pecador no debe desesperar del perdón,
podemos aprender de

esta Escritura: "Yo, yo soy el que borro tus

rebeliones". Si observa las palabras anteriores, se
preguntará cómo aparece este versículo. "Me has
cargado con tus pecados y me has cansado con tus
ofensas"; y luego sigue: "Yo, yo mismo, soy el que
borro tus transgresiones". Isaías 43:24, 25. Uno
habría pensado que debería haber sido así: "Me has
cargado con tus pecados y me has cansado con tus
ofensas; yo, yo soy el que castigaré tus iniquidades";
pero Dios viene en un tono suave y amoroso: "Me
has cargado con tus pecados y me has fatigado con
tus ofensas; yo soy el que borro tus iniquidades".
Para que la grandeza de nuestros pecados no nos
desanime de acudir a Dios en busca de perdón.
Aunque hayas cometido actos de impiedad, Dios
puede venir con un acto de perdón y decir: "Yo, aun
yo, soy el que borro tus transgresiones". Dios cuenta
como su gloria mostrar la gracia gratuita en sus
colores más brillantes. "Donde abundó el pecado,
sobreabundó la gracia". Romanos 5:20. Cuando el
pecado se vuelve sumamente pecaminoso, la gracia
gratuita se vuelve sumamente gloriosa. ¡El amor
perdonador de Dios puede vencer al pecador y
triunfar sobre el pecado! Considera, alma casi
desesperada, que no hay tanto pecado en el
hombre, como hay misericordia en Dios. El pecado
del hombre en comparación con la misericordia de
Dios es como una chispa en el océano; ¿Y quién
dudaría de que se pudiera apagar una chispa en un
océano?
"Pero he recaído en los mismos pecados, y ¿cómo
puedo tener el rostro para venir a Dios para el
perdón de esos pecados en los que he caído más de
una vez?"
Abraham se equivocó dos veces; Lot cometió incesto
dos veces; Pedro pecó tres veces por temor carnal;
pero se arrepintieron y tuvieron la absolución.
Hay una doble recaída:
(1) Hay una recaída deliberada , cuando, después
de que un hombre se ha comprometido
solemnemente con Dios, cae en alianza con el
pecado y vuelve a él. "Amo a los extraños, y tras ellos
a I go" (Jeremías 2:25); y
(2) Hay una recaída por enfermedad , cuando la
inclinación y resolución del corazón de un hombre
está en contra del pecado, pero, a través de la
violencia de la tentación y el retiro de la gracia de
Dios, es arrastrado río abajo en contra de su

será. Ahora bien, aunque las recaídas deliberadas y

continuas son desesperadas y tienden a consumir la
conciencia y a llevar a los hombres al precipicio de
la condenación, sin embargo, si están por debilidad y
lloramos por ellos, podemos obtener el perdón. Un
hombre piadoso no marcha tras el pecado como su
general, sino que es llevado cautivo por él; y el Señor
se apiadará del cautivo. Cristo nos manda perdonar
a un hermano transgresor setenta veces siete. Mateo
18:22. Si se ordena nosotros hacemos, cuánto más
que perdonar a un pecador recurrente en caso de
que se arrepienta. "Vuélvete, oh rebelde Israel,
porque misericordioso soy yo, dice el Señor". Jer
3:12. No es caer una o dos veces en el fango que se
ahoga, sino quedarse allí. De la misma manera, no es
recaer una sola vez en el pecado, sino mentir en el
pecado impenitentemente lo que condena.
"¡Pero Dios requiere tanta pena y humillación antes
de la remisión, que me temo que nunca llegaré a
eso!"
No requiere más humillación de la que un alma
puede necesitar para la misericordia. Muchos
cristianos piensan que, debido a que no ha llenado la
botella de Dios con tantas lágrimas como otros, no se
siente lo suficientemente humillado como para
recibir el perdón. Pero los tratos de Dios son
diversos; no todos tienen los mismos dolores en el
nuevo nacimiento. Algunos se ganan con amor; el
sentido de la misericordia de Dios abusado hace que
broten lágrimas ingeniosas. Otros son más rudos y
endurecidos, y Dios los trata con más rudeza. Esa
alma es lo suficientemente humilde como para
recibir un perdón que le lleva a un sentido cabal del
pecado, y ve la necesidad de un Salvador y lo ama
como al más hermoso de diez mil. Por tanto, no te
desanimes, porque si tu corazón es herido por el
pecado y se aparta de él, tu pecado será borrado. Tan
pronto como Efraín lloró, los afectos de Dios estaban
funcionando. "Mis afectos están turbados por él;
ciertamente tendré misericordia de él". Jer 31:20.
Habiendo respondido a estas objeciones, permítame
suplicarle, sobre todas las cosas: ¡trabaje por el
perdón de los pecados! Piensen ustedes mismos en la
gran misericordia que es: es una de las joyas más
ricas en el gabinete de la nueva alianza.
"Bienaventurado aquel cuya transgresión es
perdonada". Salmo 32: 1: En hebreo es "bendiciones".
¡Y piense en la miseria sin igual de aquellos cuyos
pecados no son perdonados! Aquellos que no tenían
la sangre del cordero pascual rociada sobre los
postes de sus puertas, fueron destruidos por el ángel.
Éxodo 12. De la misma manera, aquellos a quienes
no se les rocía la sangre de Cristo para lavar la culpa
del pecado, caerán en el golfo de la perdición. Si

Decides buscar el perdón, ¡no te demores!

Muchos dicen que obtendrán su perdón, pero
posponen las cosas y lo postergan tanto que ya es
demasiado tarde. Cuando se extienden las sombras
del atardecer y se acerca la noche de la muerte,
comienzan a buscar su perdón. Esta ha sido la ruina
de millones. Tienen el propósito de cuidar de sus
almas, pero esperan tanto tiempo hasta que se agota
el contrato de misericordia. ¡Oh, por lo tanto,
apresúrate a obtener el perdón! Piense en la
incertidumbre de la vida . ¿Qué seguridad tienes de
que vivirás otro día? [La hora fugaz vuela con alas
volubles.] Nuestra vida es una vela, que pronto se
apaga; se compone de unos minutos de vuelo . ¡Oh
polvo y cenizas! ¡Puedes temer a cada hora ser
arrojado a tu tumba! ¿Y si la muerte llega a
arrestarte antes de que se selle tu perdón?
Plutarch informa de un tal Archias, que estaba entre
sus copas cuando le entregaron una carta y se le
pidió que la leyera, ya que se trataba de un asunto
serio, y dijo: " Mañana me importarán las cosas
serias ". ¡Pero esa noche fue asesinado! Tú que dices:
"Mañana me arrepentiré, obtendré mi perdón",
puede que de repente te maten; por eso hoy,
mientras se llama hoy, velad por el perdón de los
pecados. Después de un tiempo, todas las fuentes de
misericordia se detendrán, ¡no habrá ni una gota de
la sangre de Cristo! ¡No hay perdones después de la
muerte!
Uso 3. Trabajemos para tener la evidencia de que
nuestros pecados son perdonados. Un hombre puede
recibir el perdón de sus pecados y no saberlo; puede
tener un perdón en la corte del cielo cuando no lo
tiene en la corte de conciencia . El pecado de David
fue perdonado tan pronto como se arrepintió. Dios
envió al profeta Natán para decírselo. 2 Samuel
12:13. Pero David no sintió el consuelo de ello de
inmediato, como aparece en el Salmo penitencial
compuesto después. "Hazme oír gozo"; y "No me
eches de tu presencia". Salmo 51: 8, 11. Una cosa es
ser perdonado ; y otro para sentirlo . La prueba del
indulto puede no aparecer por un tiempo, y esta
puede ser:
(1) De la debilidad de la fe . El perdón de los
pecados es una bendición tan extraña e infinita, que
un cristiano difícilmente puede persuadirse a sí
mismo de que Dios le extenderá tal favor. Como se
dice de los apóstoles cuando Cristo se les apareció
por primera vez, "No lo creyeron a causa del gozo y
el asombro" (Lucas 24:41), de modo que el alma
puede estar tan afligida por

admiración, que la maravilla del perdón tambalea su fe.

(2) Un hombre puede ser perdonado y no saberlo
por la fuerza de la tentación . Satanás acusa a los
piadosos de pecado y les dice que Dios no los ama;
¿Y estos pecadores deberían pensar en el perdón?
Los creyentes son comparados con cañas cascada; y
tentaciones a los vientos. Mateo 12:20; capítulo 7:25.
Ahora, una caña se agita fácilmente con el viento.
Las tentaciones sacuden a los piadosos; y aunque
son perdonados, no lo saben. Job, en una tentación,
pensó que Dios era su enemigo, y sin embargo,
estaba en una condición perdonada. Job 16: 9.
"¿Por qué Dios a veces oculta la evidencia del perdón?"
(1) Aunque perdona, puede retener el sentido de
ello por un tiempo, porque nos humillaría en
contrición. Quiere que veamos lo malvado y amargo
que es ofenderlo. Por lo tanto, debemos permanecer
más tiempo en las lágrimas saladas del
arrepentimiento antes de tener el sentido del perdón.
Pasó mucho tiempo antes de que los huesos rotos de
David fueran curados y su perdón sellado, para que
su corazón pudiera ser más contrito; y este fue un
sacrificio en el que Dios se deleitó.
(2) Aunque Dios ha perdonado el pecado, puede
negar su manifestación por un tiempo, para
hacernos apreciar el perdón y endulzarlo cuando
llegue. La dificultad de obtener una misericordia
aumenta su valor. Cuando llevamos mucho tiempo
tirando de la oración por el perdón del pecado, y
Dios todavía nos niega, pero finalmente, después de
muchos suspiros y lágrimas, llega, lo estimamos más
y es más dulce. [Cuanto más larga sea la demora,
más dulce será el regocijo.] Cuanto más tiempo dure
la misericordia en el nacimiento, más bienvenida
será la liberación.
Sin embargo, no nos contentemos sin la evidencia y
el sentido del perdón. Aquel que es perdonado y no
lo sabe, es como quien tiene una rica herencia
legada , pero no lo sabe. Nuestro consuelo consiste
en el conocimiento del perdón. "Hazme oír alegría".
Salmo 51: 8. Hay un jubileo en el alma cuando
podemos leer nuestro perdón. Al testimonio de
conciencia, Dios añade el testimonio de su Espíritu; y
en la boca de estos dos testigos se confirma nuestro
gozo. ¡Oh, trabaja por la evidencia del perdón!
"¿Cómo sabremos que nuestros pecados son perdonados?"
No debemos ser nuestros propios jueces en este caso.
"El que confía en su propio corazón es un necio".
Proverbios 28:26. "Engañoso es el corazón". Jer 17: 9.
Es una locura confiar en un engañador. El Señor solo
por su Palabra debe juzgar si somos perdonados o
no. Como según la ley, ningún leproso podía juzgarse
limpio a sí mismo , pero el sacerdote debía
declararlo limpio (Lv 13:37). De la misma manera, no
debemos juzgarnos a nosotros mismos como limpios
de la culpa del pecado, hasta que seamos como la
Palabra de Dios declara limpios.
"¿Cómo sabremos por la Palabra que nuestros pecados
son perdonados?"
(1) El pecador perdonado es un gran llorón. El
pecador perdonado es un gran llorón. El sentido del
amor de Dios derrite su corazón. "¡Que la gracia
gratuita siempre me mire - que pecados tan carmesí
como el mío sean lavados con la sangre de Cristo
- hace que mi corazón se derrita y mis ojos se llenen
de lágrimas!" Nunca nadie leyó su perdón con los
ojos secos. "Ella estaba a sus pies llorando". Lucas
7:38. Las lágrimas de María eran más preciosas para
Cristo que su ungüento; sus ojos, que antes brillaban
de lujuria, ahora se convirtieron en una fuente y
lavaron los pies de Cristo con sus lágrimas. Ella era
una verdadera penitente y tenía su perdón. "Por
tanto, digo, sus muchos pecados le son perdonados";
ver 47. Perdón de los pecados, ablandará el corazón
más duro, y hará sangrar el corazón de piedra. ¿Es
así con nosotros? ¿Nos hemos derrumbado en
lágrimas por el pecado? Dios sella sus perdones
sobre corazones derretidos .
(2) Podemos saber que nuestros pecados son
perdonados al tener la gracia de la fe. "De él dan
testimonio todos los profetas, que todo aquel que
crea en él recibirá remisión de los pecados". Hechos
10:43. En la fe salvadora hay dos
cosas: la renunciación y la reclinación:
[1] Renuncia. Un hombre renuncia a toda opinión
sobre sí mismo; y está bastante alejado de sí mismo.
Filipenses 3: 9. Ve que todos sus deberes no son más
que juncos rotos; aunque podía llorar un mar de
lágrimas; aunque tenía toda la gracia de los hombres
y los ángeles, no podía comprar su perdón.
[2] Recumbency. El alma se aferra a Cristo como
Adonías lo hizo con los cuernos del altar. 1 Reyes
1:51. La fe se lanza al torrente de la sangre de Cristo y
dice: "¡Si perezco, perezco!" Si tenemos el menor
grano de

esta fe preciosa, tenemos algo que mostrar para el

perdón. Esta fe es aceptable a Dios ; le agrada más
que ofrecer diez mil ríos de aceite, que hacer
milagros, que el martirio o los más altos actos de
obediencia. Esta fe nos es provechosa ; es nuestro
mejor certificado para mostrar el perdón. Tan
pronto como la fe extiende su mano para recibir a
Cristo, Cristo pone su mano en nuestro perdón.
(3) El alma perdonada es un admirador de Dios.
"¿Quién es un Dios como tú, que perdona la
iniquidad?" Miqueas 7:18. "¡Oh, que Dios me mirara
siempre! Yo era un pecador, y nada más que un
pecador, ¡pero obtuve misericordia! ¡Quién es un
Dios como tú! ¡La misericordia ha sido despreciada,
y sin embargo esa misericordia me salva! ¡Cristo ha
sido crucificado por mí, ¡pero su cruz me corona!
Dios ha desplegado las insignias de la gracia gratuita,
ha puesto su misericordia por encima de mi pecado,
no, a pesar de él. Esto causa admiración. ¡Quién es
un Dios como tú! "
Un hombre que cruza un puente estrecho en la
noche, y a la mañana siguiente ve el peligro en el
que estaba, cuán milagrosamente escapó, se llena de
admiración. De la misma manera, cuando Dios le
muestra a un hombre cuán cerca estaba de caer en
el infierno, cómo pasó ese abismo y todos sus
pecados fueron perdonados, se asombra y clama:
"¿Quién es un Dios como tú, que perdona mi
iniquidad? ¡Que Dios me perdone y pase por alto a
los demás, que me lleven y que otros dejen, llena mi
alma de asombro y asombro!
(4) Dondequiera que Dios perdona el pecado, lo
somete. "Tendrá compasión de nosotros, subyugará
nuestras iniquidades". Miq 7:19. Donde las personas
de los hombres están justificadas, sus
concupiscencias se mortifican. Hay en el pecado un
poder que manda y que condena . El poder de
condenación del pecado se quita, cuando se quita su
poder de mando . Sabemos que nuestros pecados son
perdonados cuando son sometidos. Si un malhechor
está en la cárcel, ¿cómo sabrá que su príncipe lo ha
perdonado? Si viene el carcelero, le quita las
cadenas y los grilletes y lo deja salir de la cárcel;
entonces sabe que está perdonado. De la misma
manera, sabemos que Dios nos ha perdonado,
cuando las cadenas del pecado se rompen y
andamos libres en los caminos de Dios. "Caminaré
en libertad"; esta es una bendita señal de que somos
perdonados. Salmo 119: 45. Los que son lavados de
culpa en la sangre de Cristo, son hechos reyes para
Dios. Apocalipsis 1: 6. Como reyes, gobiernan sus
pecados.

(5) Aquel cuyos pecados son perdonados, está

lleno de amor por Dios. El corazón de María
Magdalena estaba lleno de amor. "Sus muchos
pecados le son perdonados, porque amó mucho".
Lucas 7:47. Su amor no fue la causa de su
remisión, sino un signo de ella. Un alma perdonada
es un monumento de misericordia, y cree que nunca
podrá amar a Dios lo suficiente. Desearía tener un
carbón del altar de Dios para inflamar su corazón de
amor, desearía poder tomar prestadas las alas de los
querubines para poder volar más rápido en
obediencia; el alma perdonada está enferma de
amor. Aquel cuyo corazón es como el mármol,
encerrado en la impenitencia, que no se derrite en el
amor, da evidencia de que su perdón aún está
abierto.
(6) Donde el pecado es perdonado, la naturaleza
se purifica. "Sanaré sus descarríos, los amaré". Os
14: 4. Todo hombre, por naturaleza, es culpable y
está enfermo . Cuando Dios remite la culpa, cura la
enfermedad. "El que perdona todas tus iniquidades,
que sana todas tus dolencias". Salmo 103: 3. En esto,
el perdón de Dios va más allá del perdón del rey; el
rey puede perdonar a un malhechor, pero no puede
cambiar su corazón, que puede ser todavía un
corazón ladrón; pero cuando Dios perdona, cambia
el corazón. "También te daré un corazón nuevo".
Ezequiel 36:26. Un alma perdonada está adornada y
embellecida con santidad. "Este es el que vino con
agua y sangre". 1 Juan 5: 6. Cuando Cristo viene con
sangre para justificar, viene con agua para limpiar.
"He hecho pasar tu iniquidad de ti, y te vestiré con
mudas de ropa". Zacarías 3: 4. Haré pasar de ti tu
iniquidad ; hay gracia que perdona; y te vestiré con
una muda de ropa: hay gracia santificante. Que
nadie diga que tiene perdón el que no tiene gracia .
Muchos nos dicen que esperan ser perdonados,
quienes nunca fueron santificados. Creen en Cristo;
pero ¿qué fe es? Una fe que jura, una fe que se
prostituye; ¡La fe de los demonios es tan buena!
(7) Los que están en el número del pueblo de Dios
tienen perdón de pecados. "Consola a mi pueblo,
clama a ella, que su iniquidad sea perdonada". Isaías
40: 1, 2.
¿Cómo sabremos que somos el pueblo elegido de Dios?
Por tres personajes.
El pueblo de Dios es un pueblo HUMILDE . La ropa que todo
Cristo

la gente usa, es humildad. "Vístete de humildad". 1

Pedro 5: 5. Una vista de la gloria de Dios humilla.
Elías se envolvió el rostro en un manto cuando pasó
la gloria de Dios. "Ahora mis ojos te ven, por eso me
aborrezco". Job 13: 5, 6. Las estrellas se desvanecen
cuando aparece el sol . Ver el pecado humilla. En el
espejo de la Palabra los piadosos ven sus manchas, y
son manchas de humillación. "He aquí", dice el alma,
"¡No puedo llamar a nada mío sino a mis pecados y
necesidades!" Un pecador humilde está en mejores
condiciones que un ángel orgulloso.
El pueblo de Dios es un pueblo DISPUESTO . "Un
pueblo de buena voluntad"; el amor los constriñe;
sirven a Dios libremente y por elección propia.
Salmo 110: 3. No se aferran a ningún servicio;
correrán por el mar y el desierto; seguirán al
Cordero adondequiera que vaya.
El pueblo de Dios es un pueblo CELESTIAL . "No son
del mundo". Juan 17:16. El pueblo de Dios tiene un
movimiento celestial del alma, contrario a los
hombres del mundo. Usan al mundo como su
sirviente, pero no siguen al mundo como su amo .
"Nuestra ciudadanía está en el cielo". Filipenses 3:20.
Los que tienen estos tres caracteres del pueblo de
Dios, tienen un buen certificado que demuestre que
están perdonados. El perdón de los pecados les
pertenece. "Consolad a mi pueblo", diles que su
iniquidad ha sido perdonada.
(8) Somos perdonados si, después de muchas
tormentas, tenemos una dulce calma y paz
interior. "Estando justificados, tenemos paz".
Romanos 5: 1. Después de muchas lágrimas amargas
y desgarradoras, la mente ha estado más sosegada y
ha seguido una dulce serenidad o música tranquila;
que trae la noticia de que Dios está apaciguado.
Antes de que la conciencia lo acusara, ahora susurra
en secreto consuelos, lo cual es una bendita
evidencia de que los pecados de un hombre son
perdonados. Si los alguaciles no molestan y arrestan
al deudor, es una señal de que su deuda está
perdonada. De la misma manera, si la conciencia no
irrita ni acusa —pero con fundamento susurra
consuelo— es señal de que la deuda está saldada y el
pecado perdonado.
(9) El pecado se perdona cuando tenemos
corazones sinceros. "Bienaventurado aquel cuyas
transgresiones son perdonadas, cuyos pecados están
cubiertos. Bienaventurado el hombre cuyo pecado el
Señor no cuenta contra él y en cuyo espíritu no hay
engaño ". Salmo 32: 1-2.
¿Qué es ser sincero?

El que es sincero, tiene sencillez de corazón. No tiene

connivencia, no tiene doble corazón; su corazón está
bien con Dios. Un hombre puede hacer una acción
correcta , pero no con un corazón recto. "Amasías
hizo lo recto ante los ojos del Señor, pero no con un
corazón perfecto". 2 Crónicas 25: 2. Tener el corazón
recto con Dios es servirle desde un principio correcto
, que es el amor; por una regla correcta: la Palabra; a
un fin recto: la gloria de Dios.
El que tiene un corazón sincero , no se atreve a
permitirse el menor pecado; evita los pecados
secretos . El hombre no se atreve a esconder ningún
pecado, como Raquel hizo con los ídolos de su padre,
debajo de ella. Génesis 31:34. Sabe que Dios lo ve,
que es más que si los hombres y los ángeles lo
vieran. Evita los pecados acosadores . "Yo también
fui recto ante él, y me guardé de mi iniquidad".
Salmo 18:23. Como en la colmena hay una
abeja maestra, así en el corazón hay un
pecado maestro. ¡Un corazón sincero toma el cuchillo
sacrificador de la mortificación y lo atraviesa por su
amado pecado!
El que tiene un corazón sincero , desea conocer toda
la mente y la voluntad de Dios. Un corazón enfermo
tiene miedo a la luz, no está dispuesto a conocer su
deber. Un alma sincera dice (como Job 34:32):
"Enséñame lo que no veo". "Señor, muéstrame cuál
es mi deber, y en qué ofendo; no dejes que peque
por falta de luz; enséñame lo que no sé".
El que tiene un corazón sincero , es uniforme en
religión. El hombre tiene el mismo ojo para todos los
mandamientos de Dios. Hace conciencia de los
deberes privados; adora a Dios tanto en su armario
como en el templo. Cuando Jacob estaba solo, luchó
con el ángel. Gen 32:23, 24. Así que un cristiano,
cuando está solo, lucha con Dios en oración, y no lo
deja ir hasta que lo ha bendecido. Realiza deberes
difíciles, en los que reside el corazón y el espíritu de
religión, y que cruzan carne y sangre; él se
humilla mucho y se examina a sí mismo. Prefiere
usar el espejo de la Palabra para mirar en su propio
corazón, que los amplios anteojos de censura para
espiar las faltas de los demás.
El que tiene un corazón sincero , es fiel a los
intereses de Dios. Le duele que le vaya mal a la
iglesia. Nehemías, aunque era el copero del rey, y el
vino estaba tan cerca, se entristeció cuando la gloria
de Sión fue eclipsada. Nehemías 2: 3. Como el árbol
del que he leído, si se corta alguna de las hojas, el
resto se encoge y cuelga durante un tiempo. De la
misma manera, cuando la iglesia de Dios
sufre, un alma sincera se siente tocada en su propia
persona. Se regocija al ver que la causa de Dios se
arraiga, al ver triunfar la verdad, la piedad alzar su
cabeza y las flores de la corona de Cristo florecer.
Este es un corazón sincero , es leal y fiel a los
intereses de Dios.
El que tiene un corazón sincero , es justo en sus
tratos. Como es recto en sus palabras, así es en sus
pesos. Hace conciencia de la segunda tabla de la ley,
así como de la primera tabla; está a favor de la
equidad tanto como de la piedad . "Procura que nadie
vaya más allá y defraude a su hermano en cualquier
asunto". 1 Tes 4: 6. Una persona sincera piensa que
más vale robar que defraudar; su regla es hacer a los
demás lo que él quiere que le hagan a él. Mateo 7:12.
El que tiene un corazón sincero , es fiel en sus
promesas; su palabra vale tanto como su vínculo. Si
ha hecho una promesa, aunque sea para su daño, y
se afianza en su beneficio, no volverá. El hipócrita
juega rápido y suelto, huye de su palabra; no hay
más atarlo con juramentos y promesas, de lo que
Sansón podría estar atado con toques verdes. Jueces
16: 7. Un alma sincera dice como Jefté: "He abierto
mi boca al Señor, y no puedo volver". Jueces 11:35.
El que tiene un corazón sincero , es fiel en su
amistad; es lo que parece; su corazón va con su
lengua, como una esfera bien hecha va con el sol. No
puede adular y odiar, elogiar y censurar. La
falsificación del amor es hipocresía. Es demasiado
habitual traicionar con un beso. Joab tomó a Abner
por la barba para besarlo y lo golpeó en la quinta
costilla y murió. 2 Samuel 20: 9, 10. Muchos engañan
con palabras dulces. Los médicos juzgan la salud del
cuerpo con la lengua; si se ve bien, el cuerpo está
sano; pero no podemos juzgar la amistad con la
lengua. Las palabras pueden estar llenas de miel,
cuando el corazón tiene la hiel de la malicia. Su
corazón no es fiel a Dios, quien es traicionero con su
amigo. Así ves lo sincero que es un corazón; y que
tener un corazón así es una señal de que el pecado
ha sido perdonado. "Bienaventurado el hombre cuyo
pecado el Señor no cuenta contra él y en cuyo
espíritu no hay engaño ". Salmo 32: 2. ¡Qué bendición
es no tener imputación de pecado! Si nuestros
pecados no son imputados, es como si no tuviéramos
pecado; los pecados remitidos son como si no se
hubieran cometido . Esta bendición pertenece a un
alma sincera. Dios no le imputa iniquidad al alma
sincera.

(10) Aquel cuyos pecados son perdonados está

dispuesto a perdonar a los que le han ofendido.
"Perdonándonos unos a otros, como Dios os perdonó
a vosotros por Cristo". Efesios 4:32. Un hipócrita
leerá, irá a la iglesia, dará limosna, construirá
hospitales, pero no puede perdonar los errores;
Prefiere carecer del perdón de Dios que perdonar a
sus enemigos. Un alma perdonada argumenta así:
"¿Ha sido Dios tan bueno conmigo al perdonarme
mis pecados, y no lo imitaré en esto? ¿Me ha
perdonado las libras , y yo no perdonaré peniques ?"
Se nota de Cranmer, que era de un espíritu
perdonador y haría actos de amor con todos los que
lo habían herido. El cristiano es como el sol, que,
habiendo sacado de la tierra vapores negros, los
devuelve en dulces lluvias.
Con esta piedra de toque, podemos probar si
nuestros pecados son perdonados. No necesitamos
subir al cielo para ver si nuestros pecados son
perdonados, sino solo mirar dentro de nuestro
corazón. ¿Somos de espíritus perdonadores?
¿Podemos enterrar las heridas, pagar bien por mal?
Esta sería una buena señal de que Dios nos perdona.
Si podemos encontrar todas estas cosas obradas en
nuestras almas, son señales felices de que nuestros
pecados han sido perdonados, y son buenas cartas
testimoniales para mostrar al cielo.
Utilice 4. Para el consuelo. Abriré una caja de
cordiales y les mostraré algunos de los gloriosos
privilegios de una condición perdonada. Este es un
favor peculiar, es un manantial cerrado y abierto
para nadie más que para los elegidos. Los malvados
pueden tener misericordia indulgente , pero solo una
persona elegida tiene misericordia indulgente . El
perdón de los pecados abre paso a un gozo sólido.
"Consolad, consolad a pueblo mío, dice vuestro Dios.
Habla cómodamente a Jerusalén"; o, como en
hebreo, "habla a su corazón". Isaías 40: 1, 2. ¿Qué
alegraría su corazón? "Clama a ella para que su
iniquidad sea perdonada". Si algo podía consolarla,
el Señor sabía que era esto. Cuando Cristo animó al
paralítico, dijo: "Hijo, ten ánimo, tus pecados te son
perdonados". Mateo 9: 2. Fue un mayor consuelo
tener sus pecados perdonados que curar su parálisis.
Esto hizo que David se vistiera con sus mejores ropas
y se ungiera a sí mismo 2 Samuel 12:20. Su hijo
acababa de morir, y Dios le había dicho que "la
espada no se apartará jamás de tu casa"; sin
embargo, ahora se arregla, se pone sus mejores
ropas y se unge; porque fue esto Había escuchado
buenas noticias, Dios le envió el perdón por medio
del profeta Natán. "El Señor ha quitado tu pecado". 2
Samuel 12:13. Esto no pudo mas

aviva su corazón y, en señal de gozo, se ungió a sí

mismo. Sin duda, el perdonado tiene en el alma una
melodía tan divina que lo llena de infinito deleite.
Cuando Cristo le dijo a María Magdalena: "Tus
pecados te son perdonados", pronto añadió, "vete en
paz". Lucas 7:50. Más particularmente:
(1) Dios mira a un alma perdonada como si
nunca hubiera pecado. Así como cancelar una
fianza anula la fianza y lo hace como si el dinero
nunca se hubiera debido, así también perdonar el
pecado hace que no sea así. Cuando se remite el
pecado, es como si no se hubiera cometido. De modo
que, como Raquel lloró porque sus hijos no lo
estaban , así un hijo de Dios puede regocijarse
porque sus pecados no lo son. Jer 50:20. Dios lo mira
como si nunca lo hubiera ofendido. Aunque el
pecado permanece en él después del perdón, Dios no
lo ve como un pecador, sino como un hombre justo.
(2) Dios habiendo perdonado el pecado, pasará
por un acto de olvido. "Perdonaré su iniquidad y no
me acordaré más de su pecado". Jer 31:34. Cuando
un acreedor ha tachado el libro, no vuelve a
reclamar la deuda. Dios no contará con el pecador
de manera judicial. Cuando nuestros pecados son
puestos sobre la cabeza de Cristo, nuestro chivo
expiatorio, son llevados a una tierra de olvido.
(3) El alma perdonada está protegida para
siempre de la ira de Dios. ¡Qué terrible es la ira de
Dios! "¿Quién conoce el poder de tu ira?" Salmo
90:11. Si una chispa de la ira de Dios que se enciende
sobre la conciencia de un hombre la llena de horror,
¿qué es estar siempre quemado en esa zona tórrida,
tumbarse sobre lechos de llamas? Ahora, de esta ira
vengativa de Dios, toda alma perdonada es liberada.
Aunque pruebe la amarga copa de la aflicción,
nunca beberá del mar de la ira de Dios. "Habiendo
sido justificados por su sangre, seremos salvos de la
ira por él". Romanos 5: 9.
La sangre de Cristo apaga las llamas del infierno.
(4) El pecado perdonado, la conciencia no tiene
más autoridad para acusar. La conciencia ruge
contra el pecador no perdonado, pero no puede
aterrorizar ni acusar al perdonado. Dios ha liberado
al pecador, y si el acreedor libera al deudor, ¿qué
derecho tiene el sargento de arrestarlo? La verdad es
que, si Dios absuelve, la conciencia, si se informa
correctamente, absuelve. Si una vez Dios dice: "Tus
pecados te son perdonados", la conciencia dice: "Ve
en paz". Si el cielo está despejado y no soplan
tormentas, el mar está

calma; así, si todo está claro arriba, y Dios brilla con

misericordia perdonadora sobre el alma, la
conciencia está tranquila y serena.
(5) Nada de lo que le suceda al alma perdonada
le hará daño. "No te sobrevendrá mal alguno"; es
decir, ningún mal destructivo. Salmo 91:10. Todo lo
que le duele al impío . Las cosas buenas son para su
dolor. Sus mismas bendiciones se convierten en
maldición. "Maldeciré tus bendiciones". Mal 2: 2. Las
riquezas y la prosperidad le hacen daño. No son
favores, sino trampas. "Lazos de oro". "Las riquezas
guardadas para sus dueños para su daño".
Eclesiastés 5:13. Como el banquete de Amán, que
marcó el comienzo de su funeral. Las ordenanzas
hacen daño al pecador; son un "olor a muerte". 2 Cor
2:16. Los propios cordiales matan. Las mejores cosas
lastiman a los malvados.
Pero las peores cosas que le suceden al alma
perdonada no le harán daño. El aguijón, el veneno,
la maldición se han ido. Su alma no está más herida
de lo que David hirió a Saúl cuando cortó el regazo
de su manto.
(6) Para un alma perdonada, todo tiene una
comisión para hacerle bien. Las aflicciones le
hacen bien; como la pobreza, el oprobio y la
persecución. "Pensaste mal contra mí, pero Dios lo
hizo para bien". Génesis 50:20. Así como los
elementos, aunque de cualidades contrarias, están
tan templados que obran para el bien del
universo, así las providencias más cruzadas obran
para el bien de un alma perdonada. La corrección
como un corrosivo devora el pecado; cura la
hinchazón del orgullo, la fiebre de la lujuria y el
cáncer de la avaricia. Es un fuego refinador para
purificar la gracia y hacerla brillar como el oro. Toda
providencia cruzada, para un alma perdonada, es
como la tormenta de Pablo, que, aunque rompió el
barco, sin embargo, Pablo fue llevado a la orilla
sobre los pedazos rotos. Hechos 27.
(7) Un alma perdonada no sólo está exenta de
ira, sino que está investida de dignidad ; ya que
José no solo fue liberado de la prisión, sino que
avanzó para ser el segundo hombre en el reino.
(8) Un alma perdonada se convierte en la
favorita del cielo. Un rey puede perdonar a un
traidor, pero no lo convertirá en miembro de su
consejo privado; pero a los que Dios perdona, recibe
a favor. Puedo decirle como el ángel a la virgen
María: "Has hallado gracia ante Dios". Lucas 1:30.
Por lo tanto, se dice que los perdonados están
coronados de bondad amorosa.

Salmo 103: 3, 4. Aquellos a quienes Dios

perdona, él los corona . Aquellos a quienes Dios
absuelve, los casa consigo mismo. "Soy
misericordioso y no guardaré la ira para siempre";
Jer 3:12; hay perdon; y en el verso catorce, "Estoy
casado contigo"; y el que está a la altura de la corona
del cielo, es tan rico como los ángeles, tan rico como
el cielo puede hacerlo.
(9) Perdonado el pecado, podemos acercarnos a
Dios con humilde denuedo en oración. La culpa
nos hace temer ir a Dios. Adán, habiendo pecado,
"tuvo miedo y se escondió". Génesis 3:10. La culpa
corta las alas de la oración, llena el rostro de rubor;
pero el perdón engendra confianza. Podemos
considerar a Dios como un Padre de misericordia,
sosteniendo un cetro de oro. El que tiene su perdón,
puede mirar a su príncipe con consuelo.
(10) El perdón de los pecados hace que nuestros
servicios sean aceptables. Dios toma todo lo que
hacemos en buena parte. Una persona culpable no
hace nada que agrada a Dios. Incluso sus oraciones
se "convierten en pecado". Pero cuando el pecado es
perdonado, Dios acepta su ofrenda. Leemos de Josué
de pie ante el ángel del Señor: "Josué estaba vestido
con ropas inmundas", es decir, era culpable de
diversos pecados; ahora, dice el Señor, "Quita las
vestiduras inmundas; yo hice pasar de ti tu
iniquidad"; y luego se puso de pie y ministró ante el
Señor, y sus servicios fueron aceptados. Zacarías 3:
3, 4.
(11) El perdón de los pecados es la salsa que
endulza todas las comodidades de esta vida. Así
como la culpa amarga nuestras comodidades y pone
ajenjo en nuestra copa, así el perdón endulza todo y
es como el azúcar para el vino. Salud y perdón,
herencia y perdón, disfruten bien. El perdón del
pecado da un título santificado y un sabor delicioso a
todo consuelo. Como Naamán le dijo a Giezi: "Toma
dos talentos", así dice Dios al alma perdonada:
"Toma dos talentos; toma el venado y lleva contigo
una bendición; toma el aceite en la vasija y lleva mi
amor con él. Toma dos talentos ". 2 Reyes 5:23. Se
puede observar que Cristo une estos dos: "Danos
nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas",
como si Cristo nos enseñara que hay poco consuelo
en el pan de cada día, a menos que el pecado sea
perdonado. El perdón del pecado, perfuma y gotas
de dulzura en cada goce terrenal.
(12) Si el pecado es perdonado, Dios nunca nos
reprenderá por pecados anteriores. Cuando el hijo
pródigo llegó a casa con su padre, el padre lo recibió
en sus amorosos abrazos, y nunca mencionó su
anterior ingratitud, o gastar su propiedad entre
rameras. De la misma manera, Dios no nos
reprenderá por pecados anteriores ; es más, nos
amará por completo; seremos sus joyas, y él nos
pondrá en su seno. Después de que Cristo resucitó, se
apareció por primera vez a María Magdalena, una
penitente perdonada. Marcos 16: 9. Tan lejos estaba
de reprenderla, que le trajo las primeras noticias de
su resurrección.
(13) El pecado perdonado es un pilar de apoyo en
la pérdida de amigos. Dios se ha llevado a tu hijo, a
tu marido; pero también ha quitado tus pecados. Él
les ha dado más de lo que les ha quitado; te ha
quitado una flor y te ha dado una joya . Él les ha
dado a Cristo y el Espíritu, y la prenda de gloria. Te
ha dado más de lo que te ha quitado.
(14) Donde Dios perdona los pecados, otorga
justicia. Con la remisión de los pecados, va la
imputación de justicia. "Me ha cubierto con el manto
de justicia". Isaías 61:10. Si un cristiano puede tener
algún consuelo en su justicia inherente , que está tan
manchada y mezclada con el pecado, ¡oh, qué
consuelo puede recibir en la justicia de Cristo, que es
una justicia mejor que la de Adán! La justicia de
Adán fue mutable; pero supongamos que hubiera
sido inmutable, no era más que la justicia de un
hombre; pero lo que se imputa es la justicia del que
es Dios. "Para que seamos hechos justicia de Dios en
él". 2 Corintios 5:21. ¡Oh, bendito privilegio, ser
reputado ante los ojos de Dios, tan justo como Cristo,
habiendo puesto su manto bordado sobre el alma!
Este es el consuelo de todo aquel que es perdonado,
tiene una justicia perfecta; y ahora Dios dice de él:
"Todo eres hermoso, mi amor; no hay mancha en ti".
Cánticos 4: 7.
(15) Un alma perdonada no debe temer a la
muerte. Él puede mirar la muerte con gozo, ¡quién
puede mirar el perdón con fe! Para un alma
perdonada, la muerte ha perdido su aguijón. La
muerte, para un pecador perdonado, es como
arrestar a un hombre después de pagar la deuda;
puede detener, ¡pero Cristo mostrará el libro de la
deuda tachado con su sangre! Un alma perdonada
puede triunfar sobre la muerte: "¡Oh muerte!
¿Dónde está tu aguijón? ¡Oh tumba! ¿Dónde está tu
victoria?" El perdonado no tiene por qué temer a la
muerte; no es para él una destrucción, ¡sino una
liberación! La muerte es un día de jubileo o
liberación: lo libera de todos sus pecados. La muerte
llega a un alma perdonada como el ángel a Pedro, y

le quitó las cadenas y lo sacó de la cárcel. La muerte

golpea su cuerpo y las cadenas del pecado se caen.
La muerte da descanso al alma perdonada, la libera
de todos sus trabajos. Apocalipsis 14:13. "Feliz es el
paso del trabajo al descanso", Bernard. Así como la
muerte enjugará nuestras lágrimas , también
limpiará nuestro sudor . Le hará una buena acción a
un cristiano perdonado, por lo tanto, forma parte del
inventario en 1 Cor. 3:22; hasta la muerte es tuya.
La muerte es como la carreta que fue enviada por el
viejo Jacob, que venía traqueteando con sus
ruedas, pero era para llevar a Jacob hasta su hijo
José. De la misma manera, las ruedas del carro de la
muerte pueden traquetear y hacer ruido, pero deben
llevar al creyente a Cristo. Mientras un creyente está
aquí, está ausente del Señor. 2 Cor 5: 6. Vive lejos de
la corte y no puede ver a quien ama su alma; pero la
muerte le da la vista del Rey de Gloria, ¡en cuya
presencia hay plenitud de gozo! Para un alma
perdonada, la muerte es un pasaje al reino celestial;
lo lleva al lugar de la dicha, donde escuchará los
triunfos y los himnos de alabanza cantados en el
coro de los ángeles.
Ninguna causa tiene un alma perdonada que tema la
muerte; ¿Qué necesita temer para que su cuerpo sea
enterrado en la tierra? ¿Quién tiene sus pecados
enterrados en las heridas de Cristo? ¿Qué daño
puede hacerle la muerte? ¡No es más que su
barquero para llevarlo a la tierra prometida! El día
de la muerte de un alma perdonada es su día de
ascensión al cielo, su día de coronación, cuando será
coronado con esas delicias del paraíso que son
inefables y llenas de gloria. Estos son los ricos
consuelos que pertenecen al pecador perdonado.
Bien podría David proclamarlo bienaventurado.
"Bienaventurado aquel cuya transgresión es
perdonada"; en hebreo está en plural, bendiciones.
Salmo 32: 1. Aquí hay una pluralidad de bendiciones.
El perdón del pecado es como el primer eslabón de
una cadena que atrae a todos los eslabones
posteriores; extrae estos quince privilegios después
de él; corona de gracia y gloria . ¿Quién, entonces, no
trabajaría para que sus pecados fueran perdonados?
"Bienaventurado aquel cuya transgresión es
perdonada, cuyo pecado está cubierto".
Utilice 5. Ahora siga los DEBERES de aquellos a
quienes se les perdonan los pecados.
(1) Sea mucho en alabanza y doxología por el
amor perdonador de Dios. "Bendice, alma mía, al
Señor, que perdona todas tus iniquidades". ¿Te ha
coronado Dios con misericordia indulgente? Pon la
corona de tu alabanza sobre

la cabeza de la gracia inmerecida! El perdón del

pecado es una misericordia soberana, una joya que
se cuelga solo de los elegidos, que exige
aclamaciones de alabanza. Das gracias por el "pan de
cada día", ¿y no querrás mucho más el perdón? Das
gracias por la liberación de la enfermedad, ¿y no lo
harás por la liberación del infierno? Dios ha hecho
más por usted al perdonar su pecado, ¡que si le
hubiera dado un reino! Para que puedas estar más
agradecido, pon la condición no perdonada ante tus
ojos. ¡Qué triste es la falta de perdón! Todas las
maldiciones de la ley están en plena vigencia contra
tal persona. Cuando el pecador no perdonado muere, ¡
cae a la tumba y al infierno al mismo tiempo! ¡Debe
vivir entre los condenados! ¿No te hará sentir
agradecido de que esta no sea tu condición, sino de
que estás "liberado de la ira venidera"?
(2) Dejen que el amor perdonador de Dios por
ustedes encienda sus corazones con el amor a
Dios. Que Dios perdone gratuitamente sin ningún
mérito tuyo; perdonar tantas ofensas; para
perdonarte y pasar por alto a los demás; para
sacarte de las ruinas de la humanidad, de un terrón
de polvo y pecado, y convertirte en una joya
resplandeciente de gloria celestial , ¿ no te hará
amar mucho a Dios? Si de tres prisioneros que
merecen morir, el rey perdona a uno y deja los otros
dos a la severidad de la ley, ¿no amará el perdonado
al príncipe que ha sido tan misericordioso con él?
¡Cómo deberían sus corazones ser amados por el
amor de Dios! Los escolásticos distinguen un amor
doble, el amor gratuitus , el amor por la generosidad,
es decir, el amor de Dios para con nosotros al
perdonar; y amor debitus , un amor al deber, es
decir, nuestro amor a Dios a modo de retorno.
Debemos mostrar nuestro amor admirando a Dios,
consolándonos dulcemente en él y uniéndonos a él
en un pacto perpetuo.
(3) Deje que el sentido del amor de Dios al
perdonarlo lo haga más cauteloso y temeroso del
pecado en el futuro. "Hay perdón contigo, para que
seas temido". Salmo 130: 4. Oh, tema ofender al Dios
que tanto te ha perdonado. Si un amigo nos ha hecho
un favor, no lo molestaremos ni abusaremos de su
amor. Después de que Natán le dijo a David: "El
Señor ha quitado tu pecado", ¡cuán tierna fue su
conciencia! Cuando los hombres cometen pecados
graves después del perdón, Dios cambia su
comportamiento hacia ellos, convierte su sonrisa en
un ceño fruncido; yacen, como Jonás, en el "vientre
del infierno"; La ira de Dios cae en su conciencia
como una gota de plomo hirviendo

en el ojo; las promesas son como una fuente sellada,

ni una gota de consuelo proviene de ellas. Oh
cristianos, ¿no recuerdan cuánto costó antes de
obtener su perdón? ¿Cuánto tiempo pasó antes de
que se establecieran sus "huesos rotos"? ¿Y volverás
a aventurarte a pecar? Puede estar en tal condición
que puede cuestionar si pertenece a Dios o no.
Aunque Dios no te maldiga , puede darte una
probada del infierno en esta vida.
(4) Si Dios te ha dado buenas esperanzas de que
eres perdonado, camina con alegría. "Nos
regocijamos en Dios, por nuestro Señor Jesucristo,
por quien ahora hemos recibido la expiación".
Romanos 5:11. ¿Quién debería regocijarse sino el
que tiene su perdón? Dios se regocija cuando nos
muestra misericordia; ¿Y no deberíamos
regocijarnos cuando recibimos misericordia? En los
momentos más tristes, un alma perdonada puede
regocijarse. Las aflicciones tienen la misión de
hacerle bien; cada viento cruzado de la providencia
lo llevará más cerca del puerto de la gloria.
Cristiano, Dios te ha quitado las cadenas de la
prisión, te ha vestido con el manto de la justicia y te
ha coronado con bondad amorosa, y, sin embargo,
¿estás triste? "Nos regocijamos en la esperanza de la
gloria de Dios". Romanos 5: 2. ¿Se regocijarán los
malvados, que sólo tienen un breve respiro del
infierno, y no los que tienen sellado el perdón total?
(5) ¿Dios te ha perdonado? Haz todo el servicio
que puedas para Dios. "Siempre abundando en la
obra del Señor". 1 Cor 15:58. Deje que su cabeza
estudie para Dios; dejen que sus manos trabajen por
él; sea tu lengua el órgano de su alabanza. Cuando
Pablo obtuvo su perdón y pudo decir: "Obtuve
misericordia", fue como aceite para las ruedas, lo
hizo moverse más rápido en obediencia. 1 Timoteo
1:16. "Trabajé más abundantemente que todos ellos".
1 Corintios 15:10. El alma perdonada piensa que
nunca podrá amar a Dios lo suficiente ni servirle lo
suficiente.
Utilice 6. Algunas REGLAS o instrucciones, cómo
podemos obtener el perdón de los pecados.
(1) Debemos prestar atención a los errores sobre
el perdón del pecado ; como el error de que
nuestros pecados son perdonados cuando no lo son.
¿De dónde viene este error? De dos terrenos.
[1] Muchos piensan que sus pecados son
perdonados, simplemente porque Dios es

misericordioso. La misericordia de Dios muestra que

los pecados del hombre son perdonables. Pero hay
una gran diferencia entre los pecados perdonables y
los perdonados . Sus pecados pueden ser
perdonados, pero no perdonados. Aunque Dios sea
misericordioso, ¿para quién es la misericordia de
Dios? No para el presunto pecador, sino para el
pecador arrepentido . Los que continúan pecando, no
pueden reclamarlo. La misericordia de Dios es como
el arca, que sólo los sacerdotes pueden tocar; nadie,
excepto los que son sacerdotes espirituales,
sacrificando sus pecados, puede tocar el arca de la
misericordia de Dios.
[2] Muchos piensan que sus pecados son
perdonados, simplemente porque Cristo murió por
los pecados. Que Cristo murió por la remisión de los
pecados es verdad; pero que todos tengan remisión
es falso, porque entonces Judas sería perdonado. La
remisión de los pecados se limita a los creyentes.
"Por él todos los que creen son justificados"; pero no
todos creen; algunos menosprecian y pisotean la
sangre de Cristo. Hechos 13:39; Hebreos 10:29. A
pesar de la muerte de Cristo, no todos son
perdonados. Preste atención a este peligroso error.
¿Quién buscará el perdón, que crea que ya lo tiene?
Otro error es que es fácil obtener el perdón; es solo
un suspiro, o "Señor, ten piedad". Pero, ¿cuánto ha
costado el perdón a quienes lo han obtenido?
¡Cuánto tiempo pasó antes de que se curaran los
huesos rotos de David! Felices somos si tenemos
sellado el perdón de los pecados, aunque en la
última hora; pero ¿por qué los hombres creen que el
perdón de los pecados es tan fácil de obtener?
Asumen que sus pecados son pequeños, por lo tanto
veniales. El diablo sostiene el extremo pequeño del
telescopio ante sus ojos. Pero no hay pecado
pequeño contra la Deidad. ¿Por qué se le castiga con
la muerte, quien recorta la moneda del rey o
desfigura su estatua, sino porque es un abuso
ofrecido a la persona del rey?
Los pequeños pecados , cuando se multiplican, se
vuelven grandes, como una pequeña suma cuando
se multiplica, llega a millones. ¿Qué es menos que un
grano de arena, pero cuando la arena se multiplica,
qué más pesado? Tus pecados no cuestan poco.
Míralos en el espejo de los sufrimientos de Cristo,
quien veló su gloria, perdió su gozo y derramó su
alma como ofrenda por el menor pecado. Los
pecados pequeños, de los que no se arrepienta, lo
condenarán, así como los más grandes. No sólo caen
al mar grandes ríos , sino pequeños arroyos; no sólo
los pecados mayores llevan a los hombres al
infierno, sino los pecados menores; por tanto, no
creáis que el perdón es fácil, porque el pecado es
pequeño. Cuidado con los errores.

(2) El segundo medio para el perdón de los

pecados es verse culpables. Venid a Dios como
hombres condenados. "Se pusieron cuerdas en la
cabeza y vinieron al rey de Israel". 1 Reyes 20:32.
Acudamos a Dios con profunda humildad. No digas:
"Señor, mi corazón es bueno y mi vida intachable".
Dios odia esto. Acuéstate en el polvo, cúbrete de
cilicio y di como el centurión: "¡Señor, no soy digno
de que entres bajo mi techo! ¡No merezco la más
mínima sonrisa del cielo!" Mateo 8: 8. Este es el
camino del perdón.
(3) El tercer medio para el perdón es la sincera
confesión del pecado. "Dije: Confesaré mis
transgresiones, y tú perdonaste la iniquidad de mi
pecado". Salmo 32: 5. ¿Querríamos que Dios cubriera
nuestros pecados? Debemos descubrirlos . "El que
encubre sus pecados no prospera, pero el que los
confiesa y renuncia a ellos, halla misericordia".
Proverbios 28:13. "Si confesamos nuestros pecados,
él solo nos perdonará nuestros pecados". 1 Juan 1: 9.
Uno habría pensado que debería haber sido así: "Si
confesamos nuestros pecados, él tiene misericordia
de perdonarlos". Más aún, pero él es simplemente
perdonarlos. ¿Por qué solo? Porque se ha
comprometido con la promesa de perdonar a los
humildes confesores del pecado. Cuando nos
acusamos a nosotros mismos, Dios nos absuelve .
Tendemos a ocultar nuestros pecados, lo cual es una
locura tan grande como esconder su enfermedad al
médico; pero cuando abrimos nuestros pecados a
Dios al confesarnos , él nos abre su misericordia al
perdonar .
(4) Otro medio de perdón es el arrepentimiento
sano. El arrepentimiento y la remisión de los pecados
se combinan. Lucas 24:47. Hay una promesa de una
fuente abierta para lavar la culpa del pecado.
Zacarías 13: 1. Pero mira lo que precede: "Mirarán a
mí, a quien traspasaron, y llorarán por él". Zacarías
12:10. "Lávate, hazte limpio"; es decir, lavarse en las
aguas del arrepentimiento; y luego sigue una
promesa de perdón: "Aunque tus pecados sean como
escarlata, serán blancos como la nieve". Isaías 1:16,
18. Es fácil convertir el blanco en escarlata, pero no
tan fácil convertir el escarlata en blanco; sin
embargo, tras el arrepentimiento, Dios ha prometido
convertir al escarlata en pecador de una blancura
como la leche .
Sin embargo, no piense que el arrepentimiento
merece perdón, pero lo prepara. Ponemos nuestro
sello en la cera cuando se derrite. De la misma
manera, Dios sella sus perdones en corazones que se
derriten .

(5) El siguiente medio de perdón es la fe en la

sangre de Cristo. Es solo la sangre de Cristo, que
lava el pecado. Apocalipsis 1: 5. Pero esta sangre no
lavará el pecado, a menos que sea aplicada por fe. El
apóstol habla de la aspersión de la sangre de Cristo.
1 Pedro 1: 2. Muchos no son perdonados, aunque la
sangre de Cristo sea derramada, porque no es
rociada; ahora es la fe la que rocía el alma con la
sangre de Cristo para remisión de los pecados. Como
Tomás puso sus manos en los costados de Cristo,
así la fe pone sus manos en las llagas de Cristo, toma
de la sangre y la rocía sobre la conciencia para el
lavado de la culpa. Juan 20:27. Por eso en las
Escrituras se dice que obtenemos el perdón por la fe.
"Por él todos los que creen son justificados". Hechos
13:39. "Tus pecados te son perdonados". Lucas 7:48.
¿De dónde fue esto? "Tu fe te ha salvado". 7:50.
Trabajemos por la fe. Cristo es una expiación para
quitar el pecado; ¿pero cómo? "Por la fe en su
sangre". Romanos 3:25.
(6) El último medio es pedir mucho perdón.
"Quita toda iniquidad". Os 14: 2. "El publicano se
golpeó el pecho, diciendo: Dios, ten misericordia de
mí, pecador". Lucas 18:13. Y el texto dice que se fue
justificado. Muchos rezan por salud, riquezas, niños;
pero Cristo nos ha enseñado a orar: "Perdónanos
nuestros pecados". Sed fervientes pretendientes del
perdón; considera qué es la culpa del pecado; ata a
uno a la ira de Dios. ¡Es mejor que tu casa esté
llena de demonios que tu alma con culpa! El que está
en prisión de iniquidad, debe estar en hiel de
amargura. Hechos 8:23. Un alma culpable lleva la
marca de Caín, que fue un temblor en el corazón y
un temblor en su carne. La culpa hace temer al
pecador , ¡no sea que cada problema con el que se
encuentre lo detenga y lo lleve a juicio! Si la culpa es
tan lúgubre, y genera tal convulsión que cabe en la
conciencia, ¡cuán fervientes debemos ser en oración
para que Dios la elimine, y tan fervientes como para
resolver no aceptar la negación! Pida perdón a Dios
con todas sus fuerzas, como un hombre suplicaría a
un juez por su vida. Cae de rodillas y diga: "¡Señor,
escucha una palabra!" Dios puede decir: "¿Qué
puedes decir de ti mismo para que no mueras?"
"Señor, poco puedo decir , pero pongo mi Fianza,
Cristo responderá por mí; Oh, mira esa sangre que
habla mejor que la de Abel; Cristo es mi sacerdote,
su sangre es mi sacrificio, su naturaleza divina es mi
altar! "
Como Rahab iba a mostrar el hilo escarlata en la ventana,
que cuando Josué
lo vio, tal vez no la destruyera , así que muéstrale al
Señor el hilo escarlata de la sangre de Cristo, porque
esa es la manera de tener misericordia. Jos. 2:18, 21;
6:22, 23. Dios puede decir: "¿Por qué debería
perdonarte? Nunca me has servido". "Pero, Señor,
perdóname, porque lo has prometido; ¡insto a tu
pacto!" Cuando un hombre está a punto de morir por
ley, pide su libro. Solo así, diga: "Señor, permíteme
tener el beneficio de mi libro, tu Palabra dice:" Deje
el impío su camino y nuestro Dios lo perdonará en
abundancia ". Isaías 55: 7. Señor, he abandonado mis
pecados, déjame, pues, misericordia; ¡invoco el
beneficio del libro! " "Pero, ¿por el bien de quién
debo perdonar? No puedes merecerlo". "Señor, por
amor de tu propio nombre; tú has dicho, borrarás el
pecado, por amor de tu propio nombre. Isaías 43:25.
No eclipsará tu corona; tu misericordia brillará, y
todos tus otros atributos cabalgarán en triunfo, si me
perdonas! "
Por lo tanto, suplica a Dios en oración y resuelve no
rendirte hasta que tu perdón esté sellado. Dios no
puede negar la importunidad; se deleita en la
misericordia. Así como la madre, dice Crisóstomo, se
deleita en que le ordeñen los pechos , así Dios se
deleita en ordeñar el pecho de misericordia para el
pecador. Estos medios que se utilicen procurarán
esta gran bendición, el perdón de los pecados.
IV. La última parte de esta petición es la
CONDICIÓN. "Como nosotros perdonamos a los que
nos ofenden". Esta palabra, AS , no es una nota de
igualdad, sino de similitud; no es que igualamos a
Dios en el perdón, sino que debemos imitarlo en el
perdón. El gran deber de perdonar a los demás, es
contrario a la carne y la sangre. Los hombres
olvidan las bondades, pero recuerdan las heridas .
Pero es un deber indispensable perdonar; no
estamos obligados a confiar en un enemigo; pero
estamos obligados a perdonarlo . Somos
naturalmente propensos a la venganza. "La
venganza", dice Homer, "es dulce como echar miel".
Los filósofos paganos sostenían que la venganza era
legal. Pero aprendemos mejores cosas de los
oráculos de las Escrituras. "Cuando estés orando,
perdona". Marcos 11:25. "Soporten los unos a los
otros y perdonen cualquier resentimiento que
puedan tener unos contra otros. Perdónense como el
Señor los perdonó". Col. 3:13.

¿Cómo podemos perdonar a otros, cuando solo Dios

puede perdonar el pecado?
En cada incumplimiento de la segunda tabla, hay dos
cosas: una ofensa contra Dios y una ofensa contra el
hombre. En la medida en que es una ofensa contra
Dios, solo él puede perdonar; pero en cuanto sea una
ofensa contra el hombre, podemos perdonar.
¿Cuándo perdonamos a los demás?
Cuando luchamos contra todos los pensamientos de
venganza; cuando no haremos daño a nuestros
enemigos , sino que les deseamos lo mejor, nos
lamentamos por sus calamidades, oramos por ellos,
buscamos la reconciliación con ellos y nos
mostramos listos en todas las ocasiones para
aliviarlos. Esto es perdonar el evangelio.
Pero he sido muy maltratado y maltratado, y
soportarlo será una mancha para mi reputación.
(1) Pasar por alto una injuria sin venganza, no
eclipsa nuestro honor. La Escritura dice de un
hombre: "Es su gloria pasar por alto la transgresión".
Proverbios 19:11. Es más un honor enterrar una
herida que vengarla . La ira y la venganza denotan
debilidad; un noble espíritu heroico pasa por alto
una pequeña falta.
(2) Supongamos que el crédito de un hombre se
deteriora con aquellos cuya censura no debe ser
considerada; considere la locura de desafiar a otro a
un duelo . Es de poca sabiduría para un hombre
redimir su crédito perdiendo la vida y correr al
infierno para ser considerado valiente.
Pero el mal que me ha hecho es grande.
Pero no perdonarlo es un mal mayor. Al herirte, él
ha ofendido al hombre, pero al no perdonarlo,
ofendes a Dios.
Pero si perdono el vil daño, ocasionaré más.
Si las lesiones más te perdono, cuanto más se cumple
con - es sólo aumentará su gracia más. A menudo,
perdonar aumentará el peso de tu gloria. Si alguien
dice: "Me esfuerzo por sobresalir en otras
gracias, pero en cuanto a esto

perdonando, no puedo hacerlo. ”Las gracias están

entrelazadas y encadenadas; cuando hay una, hay
todo. El que no puede perdonar, su gracia es falsa, su
fe es falsa, su devoción es hipocresía.
Pero supongamos que otro me ha agraviado en mi
propiedad, ¿no puedo ir a la justicia por mi deuda?
Sí, si no, ¿de qué sirven los tribunales de justicia?
Dios ha puesto jueces para decidir los casos en la ley
y para dar a todos sus derechos. Es con ir a la ley,
como es con ir a la guerra; cuando se invaden los
justos derechos de una nación, es lícito ir a la guerra.
De la misma manera, cuando la propiedad de un
hombre es invadida por otro, puede acudir a la ley
para recuperarla. Pero la ley debe usarse en último
lugar; cuando no prevalezcan los ruegos o arbitrajes,
los tribunales deben decidirlo. Sin embargo, esto no
es una venganza, no es tanto herir a otro como
enmendarse a uno mismo; que puede ser, y sin
embargo, podemos vivir en la caridad.
Uso 1. Aquí hay un acta de acusación contra los que
estudian la venganza, y no puede tolerar la menor
descortesía. Quieren que Dios los perdone , pero no
perdonarán a los demás. Orarán, irán a la iglesia,
darán limosna, pero, como dijo Cristo, "una cosa te
falta". Marcos 10:21. Les falta un espíritu
perdonador, prefieren carecer del perdón de
Dios, que perdonar a su hermano. ¡Qué triste es que,
por cada pequeña palabra incorrecta o vergonzosa
, los hombres dejen hervir la malicia en sus
corazones! ¿Habría tantos duelos, arrestos y
asesinatos, si los hombres tuvieran el arte de
perdonar?
La venganza es el pecado propio del diablo; no es un
borracho ni un adúltero, pero esta serpiente vieja
está llena del veneno de la malicia. ¿Qué les diremos
a los que hacen profesión de religión, pero en lugar
de perdonar, persiguen malévolamente a los demás?
Fue profetizado, "el lobo morará con el cordero".
Isaías 11: 6. Pero, ¿qué diremos cuando los que
profesan ser corderos se convierten en lobos? Abren
la boca de los profanos contra la religión que dirán
que estos están tan llenos de amargura como
cualquier otro. Oh, ¿adónde han huido el amor y la
misericordia? Si viene el hijo del hombre , ¿
encontrará caridad en la tierra? Temo poco. ¿Cómo
pueden aquellos que alimentan la ira y la malicia en
sus corazones, y no perdonan, orar: "Perdónanos
como nosotros perdonamos a los demás"? ¡O deben
omitir esta petición, como dice Crisóstomo que
algunos hicieron en su tiempo, o oran contra sí
mismos!
Uso 2. Persuadémonos todos, si alguna vez
esperamos la salvación, de pasar por alto las
pequeñas injurias y descortesías, y esforzarnos por
ser de espíritu perdonador. "Soporten los unos a los
otros y perdonen cualquier resentimiento que
puedan tener unos contra otros. Perdónense como el
Señor los perdonó". Col. 3:13.
(1) En esto nos parecemos a Dios. Está dispuesto a
perdonar. Salmo 86: 5. Se hace amigo de sus
enemigos; abre las manos para aliviar a los que
contra él abren la boca. El orgullo de Adán era
parecerse a Dios en omnisciencia; pero es lícito
parecerse a Dios perdonando enemigos; esta es una
disposición divina ; ¿Y qué es la piedad, sino
la semejanza a Dios?
(2) Perdonar es una de las más altas evidencias
de gracia. Cuando la gracia entra en el corazón,
convierte al hombre, como Caleb, en otro espíritu.
Entumecimiento 14:24. Hace una gran metamorfosis,
endulza el corazón y lo llena de amor y sinceridad.
Como un vástago injertado en un tronco, participa
de la naturaleza y la savia del árbol, y da el mismo
fruto, así el que una vez fue de una disposición
amarga y malhumorada, dado a la venganza, cuando
se injerta en Cristo, participa de la savia de el olivo
celestial, y da frutos dulces y generosos; está lleno de
amor para con sus enemigos y paga bien por mal.
Así como el sol extrae muchos vapores espesos y
nocivos de la tierra y los devuelve en dulces lluvias,
un corazón lleno de gracia devuelve la crueldad de
los demás con las dulces influencias del amor y la
misericordia. "Me pagan con mal por el bien que
hago. Sin embargo, cuando estaban enfermos, me
apené por ellos. Incluso ayuné y oré por ellos".
Salmo 35:12, 13. Este es un buen certificado para
mostrar al cielo.
(3) El ejemplo bendito de nuestro Señor Jesús
enseña esto. Tenía un espíritu perdonador; sus
enemigos lo injuriaron , pero él se compadeció de
ellos; sus palabras fueron más amargas que la hiel y
el vinagre que le dieron, pero sus palabras fueron
más suaves que el aceite. Le escupieron, lo
traspasaron con la lanza y los clavos, pero él oró por
ellos: "Padre, perdónalos". Lloró por sus enemigos,
derramó lágrimas por los que derramaron su sangre
. Nunca hubo tal patrón de asombrosa bondad.
Cristo nos pide que aprendamos de él. Mateo 11:29.
No nos pide que aprendamos de él para hacer
milagros, pero quiere que aprendamos de él para
perdonar a nuestros enemigos. Si no imitamos la
vida de Cristo, no podemos ser salvos por su muerte .
(4) El peligro de un espíritu implacable e implacable.
Obstaculiza el

eficacia de las ordenanzas; es como una obstrucción

en el cuerpo que le impide prosperar. Un espíritu
vengativo envenena nuestro sacrificio; nuestras
oraciones se convierten en pecado. ¿Recibirá Dios la
oración mezclada con este extraño fuego? Nuestra
llegada a la Santa Cena es pecado, si no venimos por
caridad, de modo que las ordenanzas se convierten
en pecado. Sería triste que toda la comida que
comemos se convirtiera en veneno; pero la malicia
envenena la copa sacramental, los hombres comen y
beben su propia condenación. Judas vino a la Pascua
con malicia, y después del bocado, Satanás entró en
él. Juan 13:27.
(5) Dios ha atado su misericordia a la condición
de que si no perdonamos, él tampoco nos
perdonará. "Si no perdonáis a los hombres sus
ofensas, tampoco vuestro Padre perdonará vuestras
ofensas". Mateo 6:15. Un hombre puede ir al infierno
por no perdonar, que por no creer . ¿Cómo pueden
esperar misericordia de Dios, cuyos afectos están
encerrados y son despiadados con sus hermanos
transgresores? "Tendrá juicio sin
misericordia, quien no ha tenido misericordia".
Santiago 2:13. "No puedo perdonar", dijo uno,
"aunque me vaya al infierno".
(6) Los ejemplos de los santos que han sido de
espíritus perdonadores. José perdonó a sus
hermanos, aunque lo metieron en un hoyo y lo
vendieron. "No temas, yo te alimentaré a ti ya tus
pequeños". Génesis 50:21. Stephen oró por sus
perseguidores. Moisés tenía un espíritu perdonador.
¡Cuántas ofensas y afrentas soportó! El pueblo de
Israel lo trató mal; que murmuraron contra él en las
aguas de Marah- pero oraron por ellos. Éxodo 15:25.
"Clamó al Señor, y el Señor le mostró un árbol que,
cuando lo arrojó a las aguas, las aguas se
dulcificaron". Cuando les faltó agua, lo reprendieron.
"¿Por qué nos has sacado de Egipto para matarnos
de sed?" Éxodo 17: 3. Como si hubieran dicho: "Si
morimos, pondremos nuestra muerte a tu cargo".
Esto fue suficiente para que Moisés pidiera fuego del
cielo sobre ellos; pero él pasa por alto esta herida y,
para demostrar que los perdonaba, se hizo
intercesor por ellos, y sacó agua de la roca para ellos;
ver 4, 5, 6.
El profeta Eliseo hizo un banquete a sus enemigos:
preparó una mesa para aquellos que hubieran
preparado su tumba. 2 Reyes 6:23. Cranmer era
famoso por perdonar heridas. Cuando Lutero había
injuriado a Calvino, Calvino dijo: "Aunque me llame
diablo mil veces, sin embargo , lo amaré y lo honraré
como a un siervo precioso de Cristo". Cuando uno
que había abusado y

Un cristiano agraviado le preguntó qué maravillas

había obrado su Maestro Cristo, y dijo: "Él ha obrado
esta maravilla, que aunque me has lastimado tanto,
puedo perdonarte y orar por ti".
(7) Perdonar y pagar bien por mal es la mejor
manera de conquistar y derretir el corazón de un
enemigo. Cuando Saúl persiguió a David con malicia
y lo cazó como perdiz por los montes, David no le
haría daño cuando estuviera en su poder. La bondad
de David derritió el corazón de Saúl. "Saúl alzó la
voz y lloró, y dijo: Eres mejor hombre que yo,
porque me has pagado bien por mal". 1 Sam 24:16,
17. Tal perdón es amontonar carbones que derriten
el corazón del enemigo. Romanos 12:20. Es la
victoria más noble vencer a un enemigo sin dar un
golpe, vencerlo con amor. Cuando a Filipo de
Macedonia le dijeron que un tal Nicanor lo criticó
abiertamente, en lugar de darle muerte, le envió un
rico presente, que venció al hombre e hizo que su
corazón se aplastara, que subió y bajó para
retractarse de lo que había dicho. había dicho contra
el rey, y exaltó mucho la misericordia del rey.
(8) Perdonar a los demás es la forma de obtener
el perdón de Dios y es una señal de ese perdón.
[1] Es la forma de tener perdón. "Si perdonas a los
hombres sus ofensas, tu Padre celestial también te
perdonará a ti". Mateo 6:14. Pero uno pensaría que
otras cosas conseguirían el perdón de Dios antes que
nuestro perdonar a los demás. No, seguramente
nada como esto para procurar el perdón; porque
todos los demás actos religiosos pueden tener
levadura en ellos. Dios prohibió la levadura en el
sacrificio. Éxodo 34:25. Se puede dar limosna, y
puede haber en ella la levadura de la vanagloria. Los
fariseos tocaban la trompeta, cuando daban limosna,
para ganar aplausos. Mateo 6: 2. Uno puede dar su
cuerpo para que lo queme; sin embargo, puede
haber la levadura de falso celo en esto; pero
perdonar a otros que nos han ofendido no puede
tener levadura, ningún objetivo siniestro. Es un
deber totalmente espiritual, y se cumple puramente
por amor a Dios; por eso Dios anexa el perdón a esto,
más que a las obras de caridad más elevadas y
renombradas que se claman en el mundo.
[2] Es una señal de que Dios nos perdona. No es
una causa de que Dios nos perdone , sino una señal .
No necesitamos subir al cielo para ver si nuestros
pecados son perdonados. Miremos en nuestros
corazones y veamos si

puede perdonar a los demás. Si podemos, no

tenemos por qué dudar, pero Dios nos ha
perdonado. Nuestro amor por los demás es el reflejo
del amor de Dios por nosotros. Oh, por tanto, con
todos estos argumentos, dejemos que seamos
persuadidos de perdonar a otros. Cristianos,
¡cuántas ofensas ha pasado Dios en nosotros!
Nuestros pecados son innumerables y atroces. ¿Está
Dios dispuesto a perdonarnos tantas ofensas y
nosotros no podemos perdonar algunas? Ningún
hombre puede hacernos tanto mal en toda nuestra
vida, ¡como nosotros le hacemos a Dios en un día!
Pero, ¿CÓMO debemos perdonar? Como Dios nos perdona.
(1) Dios perdona SINCERAMENTE. Dios no solo
hace una demostración de perdón, sino que
realmente perdona, pasa nuestros pecados al olvido.
Jer 31:34. Así que no solo debemos decir que
perdonamos, sino que debemos hacerlo con el
corazón. "Así es como mi Padre celestial los tratará a
cada uno de ustedes, a menos que perdonen a su
hermano de corazón ". Mateo 18:35.
(2) Dios perdona COMPLETAMENTE. Él perdona
todos nuestros pecados. "El que perdona todas tus
iniquidades". Salmo 103: 3. Los hipócritas pasan por
alto algunas ofensas, pero retienen otras.
¿Querríamos que Dios nos tratara de tal manera que
remitiera solo algunas transgresiones y nos llamara
a rendir cuentas del resto?
(3) Dios perdona A MENUDO. Dios multiplica el
perdón. Isaías 55: 7. Pedro hace la pregunta: "Señor,
¿cuántas veces perdonaré a mi hermano cuando
peca contra mí? ¿Hasta siete veces?" Jesús
respondió: "Les digo que no siete veces, sino
setenta y siete veces". Mateo 18:21, 22. Si él dice: "Me
arrepiento", debes decir "Yo remito".
Pero este es uno de los actos religiosos más elevados; la
carne y la sangre no pueden hacerlo.
¿CÓMO lo alcanzaré?
(1) Consideremos cuántos males y ofensas hemos
cometido contra Dios. ¿Qué volumen puede
contener nuestra errata? Nuestros pecados son más
que las chispas en un horno.
(2) Si queremos perdonar, veamos la mano de
Dios en todo lo que los hombres hagan o digan
contra nosotros. Si miramos más alto que los
instrumentos , nuestros corazones se calmarían y no
meditaríamos la venganza. Simei reprochó a David y
maldijo; pero David miró más alto. "Déjalo solo,

y maldiga, porque Jehová le ha mandado. "2 Samuel

16:11. ¿Qué hizo que Cristo, cuando fue injuriado, no
volviera a insultar? Miró más allá de Judas y Pilato,
vio a su Padre poniendo la copa amarga en su mano
. Así como debemos ver la mano de Dios en todas las
afrentas e incivilidades que recibimos de los
hombres , debemos creer que Dios nos hará bien por
todos, si le pertenecemos. "Puede ser que el Señor
me recompense bien, por sus maldiciones. este día ".
2 Samuel 16:12. El que me hiere, aumentará mi
recompensa; el que recorta mi nombre para
aligerarlo, hará que mi corona pese más. Bien podría
orar Esteban por sus enemigos:" Señor, pon no este
pecado a su cargo. "Hechos 7:60. Él sabía que sólo
aumentaban su gloria en el cielo; ¡cada piedra que
sus enemigos le lanzaban añadía una perla a su
corona!
(3) Haga acopio de fe. "Si tu hermano peca contra
ti siete veces al día, y siete veces al día se vuelve a ti
y te dice: 'Me arrepiento', le perdonarás". Lucas 17: 3,
4. Los apóstoles dijeron al Señor: "Aumenta nuestra
fe", como si hubieran dicho: "No podemos hacer esto
sin mucha fe; Señor, aumenta nuestra fe". Cree que
Dios te ha perdonado , ¡y tú perdonarás a los demás!
Solo la fe puede arrojar polvo sobre las heridas y
enterrarlas en la tumba del olvido.
(4) Piense en cómo a menudo ha hecho daño a
otros ; ¿Y no será justo con Dios que la misma
medida que mides a los demás, se te vuelva a medir?
¿No has hecho daño a otros, si no en sus bienes, pero
en su nombre? Si no ha dado falso testimonio contra
ellos, quizás haya hablado falsamente de ellos; cuya
consideración puede hacer que los cristianos
entierren en silencio las heridas.
(5) Obtenga corazones humildes. Un hombre
orgulloso piensa que es una vergüenza perdonar
una herida. ¿Qué causa tantas peleas y asesinatos,
sino el orgullo? "Vístete de humildad". 1 Pedro 5: 5.
El que es abatido ante sus propios ojos, no se turbará
mucho, aunque otros lo rebajen; él sabe que vendrá
un día en que habrá una resurrección de nombres,
así como de cuerpos, y Dios lo vengará de sus
adversarios. "¿Y no vengará Dios a sus escogidos?"
Lucas 18: 7. El alma humilde deja todos sus agravios
a Dios para que los retribuya. "La venganza es
mía; yo pagaré, dice el Señor". Romanos 12:19.
Utilice 3. Para mayor comodidad. A los que perdonan, Dios
los perdonará. Usted tiene un
buen argumento para suplicarle perdón a Dios. "He
aquí, estoy dispuesto a perdonar al que me hace
daño. ¿No me perdonará Dios, que ha recibido el
perdón en Cristo mi fianza?"

La sexta petición del Padre Nuestro

"No nos metas en tentación, mas líbranos del
mal". Mateo 6:13
Esta petición consta de dos partes:
Primero, "No nos metas en tentación".
En segundo lugar, "pero líbranos del mal".
I. "No nos dejes caer en tentación". ¿Conduce Dios
a la tentación? Dios no tienta a ningún hombre a
pecar. "Nadie diga cuando es tentado: Yo soy tentado
por Dios; porque Dios no puede ser tentado por el
mal, ni tampoco tienta a ningún hombre". Santiago
1:13. Él permite el pecado, pero no lo promueve . El
que anima a la santidad no puede ser modelo de
pecado. Dios no tienta a aquello por lo que siente
antipatía. ¿Qué rey tentará a sus súbditos a violar las
leyes que él mismo ha establecido?
Pero, ¿no se dice que Dios tentó a Abraham? Génesis
22: 1. Tentador no había más que probar . Se trató la
fe de Abraham, como orfebre trata oro en el fuego;
pero hay una gran diferencia entre probar la
gracia de su pueblo y estimular su corrupción. Dios
prueba su gracia, pero no excita su corrupción. El
pecado del hombre no puede ser justamente
engendrado por Dios. Dios no tienta a ningún
hombre a pecar.
Entonces, ¿cuál es el significado de "No nos dejes caer en la
tentación"?
El significado es que Dios no permitiría que seamos
vencidos por la tentación; para que no seamos
entregados al poder de la tentación y seamos
arrastrados al pecado.
¿De dónde vienen las tentaciones?
(1) Las tentaciones vienen de adentro, de nosotros
mismos. El corazon es

el criador de todos los males. Nuestros propios

corazones son los más grandes tentadores. Todo el
mundo es un Satanás para sí mismo. "Todo hombre
es tentado cuando es arrastrado por su propia
lujuria". El corazón es un cebo perfecto para la
tentación. Santiago 1:14.
(a) Las tentaciones vienen de afuera, de Satanás.
Se le llama el Tentador. Mateo 4: 3. Nos tiende una
emboscada para hacernos daño. El diablo está
preparado para la batalla: trama un plan de
tentación para volar el fuerte de nuestra gracia. Aún
no está completamente en la cárcel, pero es como un
preso bajo fianza. El mundo es su diócesis, donde
seguramente será tentador, hagamos lo que
hagamos : leer, orar o meditar. Lo encontramos
dentro, pero no sabemos cómo llegó allí; estamos
seguros de su compañía, aunque no sabemos cómo
la obtuvimos. "Toda la vida de un santo", dice
Agustín, "es tentación". Elías, que podía cerrar el
cielo con la oración, no podía apartar la tentación de
su corazón. Este es un gran abuso para un hijo de
Dios; como es un problema para una virgen que su
castidad sea atacada diariamente. Cuanto más
seamos tentados al mal, más se nos obstaculiza el
bien. Estamos en gran peligro con el "Príncipe del
aire"; y necesitamos orar con frecuencia: "No nos
metas en tentación". Para que podamos ver el
peligro que corremos a causa de las tentaciones de
Satanás:
[1] Considere la malicia de Satanás al tentar. Esta
serpiente infernal está inflada con el veneno de la
malicia. Satanás envidia la felicidad del hombre. Ver
un terrón de polvo tan cerca de Dios; y él mismo, una
vez un ángel glorioso, expulsado del paraíso celestial
, lo hace perseguir a la humanidad con odio
inveterado. "El diablo ha descendido a vosotros con
gran ira". Apocalipsis 12:12. Si hay algo en lo que este
espíritu infernal puede deleitarse es en arruinar las
almas y llevarlas a la misma condenación que él.
Esta malicia de Satanás al tentar debe ser grande si
consideramos tres cosas:
(1) Que Satanás, aunque lleno de tormento,
tiente a otros. Uno pensaría que apenas pensaría en
su propia miseria; y, sin embargo, es tal su rabia y
malicia que, mientras Dios lo castiga, ¡tienta a otros!
(2) Su malicia es grande, porque tentará donde
sabe que no puede prevalecer; pondrá su aguijón,
aunque no hará daño. Tentó a Cristo. "Si eres el Hijo
de Dios". Mateo 4: 3. Sabía lo suficientemente bien
que Cristo era Dios además de hombre, pero tentaría

él. Tal era su malicia contra él que le ofendía,

aunque sabía que debía ser conquistado por él.
Tenta a los elegidos a blasfemar; sabe que no puede
vencerlos; y, sin embargo, tal es su malicia, que
aunque no pueda asaltar la guarnición de sus
corazones , disparará su artillería contra ellos.
(3) Su malicia es grande, porque aunque el saber
que sus hombres tentan a pecar aumentará su
propio tormento en el infierno, no lo dejará atrás.
Cada tentación hace que su cadena sea más pesada y
su fuego más caliente, ¡ y sin embargo tentará! Por lo
tanto, siendo un espíritu vengativo tan malicioso,
necesitamos orar para que Dios no permita que
prevalezca en su tentación. "No nos dejes caer en la
tentación".
[2] Considere la DILIGENCIA de Satanás al
tentar. "¡Cuidado! Cuidado con los ataques del
Diablo, tu gran enemigo. ¡ Merodea como un león
rugiente, buscando una víctima para devorar!" 1
Pedro 5: 8. No descuida el tiempo; el que quiere que
nos ocupemos, siempre está ocupado. Este león del
infierno, siempre está persiguiendo a su presa,
recorre el mar y la tierra para hacer un prosélito. Él
anda alrededor, como un espía; observa dónde
puede arrojar la bola de fuego de la tentación. Es un
espíritu inquieto; si lo rechazamos, no desistirá, sino
que volverá con una nueva tentación. Como
Marcelo, un capitán romano del que habla Aníbal,
ya sea que conquistó o fue conquistado, nunca
estuvo tranquilo. Más particularmente, la diligencia
de Satanás en tentar se ve en esto:
(1) Si obtiene la menor ventaja de la tentación, la
persigue al máximo. Si su tentación de pecar
comienza a tomar, la sigue de cerca y presiona al
acto del pecado. Cuando tentó a Judas para que
traicionara a Cristo, y lo encontró inclinado, y
comenzando a morder el anzuelo de treinta
monedas de plata, se apresuró a seguir tarareando y
nunca lo abandonó hasta haber traicionado a su
Señor y Maestro. Cuando tentó a Spira para que
renunciara a su religión, y lo vio comenzar a ceder,
siguió de cerca la tentación y nunca la dejó hasta
que le hizo abjurar de su fe en Cristo.
(2) La diligencia de Satanás en tentar se ve en la
variedad de tentaciones que usa. No se limita a un
tipo de tentación; tiene más parcelas que una. Si
encuentra que una tentación no prevalece, utilizará
otra. Si no puede tentar a la lujuria, lo hará
tentar al orgullo. Si no prevalece la tentación de la
codicia, se sentirá tentado a la extravagancia. Si no
puede asustar a los hombres hasta la desesperación,
verá si no puede atraerlos a la presunción. Si no
puede hacerlos profanos, verá si no puede
convertirlos en formalistas. Si no puede hacerlos
malvados, los tentará a equivocarse. Los tentará a
dejar las ordenanzas; fingirá revelaciones. El error
es tan maldito como el vicio. Vice pistolas, venenos
de error. De modo que la diligencia de Satanás en
tentar es grande: él convertirá cada piedra; tiene
varias herramientas para trabajar; si una tentación
no funciona, se servirá de otra. ¿No habíamos
necesitado entonces orar: "No nos metas en
tentación"?
[3] Considere el PODER de Satanás al tentar. Se le
llama "el príncipe de este mundo" (Juan 14:30), y el
"hombre fuerte, completamente armado" (Lucas
11:21), y el "gran dragón rojo", que con su cola arrojó
la tercera parte. de las estrellas. Apocalipsis 12: 3, 4.
Está lleno de poder, siendo un ángel. Aunque ha
perdido su santidad, pero no su fuerza. Su poder
para tentar se ve de varias maneras:
(1) Como espíritu, puede transportarse a la
IMAGINACIÓN y envenenarla con malos
pensamientos. Así como el Espíritu Santo lanza
buenos movimientos, el diablo hace lo malo. Él puso
en el corazón de Judas traicionar a Cristo. Juan 13: 2.
(2) Aunque Satanás no puede obligar a la
VOLUNTAD, puede presentar objetos agradables
a los sentidos, que tienen gran fuerza en ellos.
Puso una "cuña de oro" ante Acán, y así lo atrajo con
ese cebo dorado.
(3) Puede excitar y avivar la corrupción interior,
y obrar cierta inclinación en el corazón para
abrazar la tentación. Así avivó la corrupción en el
corazón de David y lo provocó a contar al pueblo. 1
Crónicas 21: 1. Puede soplar una chispa de lujuria en
una llama.
(4) Al ser un espíritu, puede transmitir sus
tentaciones a nuestra MENTE, de modo que no
podamos discernir fácilmente si provienen de él o
de nosotros mismos. Un pájaro puede incubar el
huevo de otro, pensando que es el suyo. De la misma
manera, a menudo incubamos los huevos del diablo,
pensando que provienen de nuestros propios
corazones. Cuando Pedro disuadió a Cristo de

sufrimiento, pensó que venía del amor que sentía

por su Maestro, sin pensar que Satanás tenía algo
que ver con eso. Mateo 16:22. Ahora bien, si el diablo
tiene tal poder para inculcar sus tentaciones, que
apenas sabemos si son suyas o nuestras, corremos
un gran peligro y tenemos que orar para no caer en
la tentación. Aquí, algunos están deseosos de mover
la pregunta: ¿Cómo percibiremos cuando un
movimiento proviene de nuestros propios
corazones, y cuando de Satanás?
"Es difícil", dice Bernard, "distinguir entre la
mordedura de la serpiente y la enfermedad de la
mente "; entre las sugerencias que vienen de Satanás
y las que surgen de nuestros propios corazones. Pero
concibo que existe esta triple diferencia:
Primero, los movimientos hacia el mal que
provienen de nuestros propios corazones surgen
más pausadamente y gradualmente. El pecado se
inventa durante mucho tiempo en los pensamientos,
antes de que se dé el consentimiento; pero
generalmente sabemos que un movimiento proviene
de Satanás por su rapidez. La tentación se compara
con un dardo , porque se dispara de repente. Efesios
6:16. El hecho de que David enumerara al pueblo fue
un movimiento que el diablo inyectó de repente.
En segundo lugar, los movimientos hacia el mal que
provienen de nuestros propios corazones no son tan
terribles. Pocos se asustan al ver a sus propios hijos;
pero las mociones que vienen de Satanás son más
espantosas y espantosas, como mociones para la
blasfemia y el suicidio. De ahí que las tentaciones se
comparen a dardos de fuego, porque, como destellos
de fuego, espantan y atemorizan el alma. Efesios
6:16.
En tercer lugar, cuando se lanzan a la mente malos
pensamientos, cuando los detestamos y nos
mostramos reacios a ellos; cuando luchamos contra
ellos y huimos de ellos, como lo hizo Moisés con la
serpiente, muestra que no son el nacimiento natural
de nuestro propio corazón, ¡pero la mano de Joab
está en esto! 2 Samuel 14:19. Satanás ha inyectado
estos movimientos impuros.
(5) El poder de Satanás para tentar aparece por
la larga EXPERIENCIA que ha adquirido en el
arte. Ha sido un tentador durante tanto tiempo
como un diablo. ¿Quiénes son más aptos para la
acción que los hombres de experiencia? ¿Quién está
más en forma para gobernar un barco que un piloto
viejo y experimentado? Satanás ha ganado mucha
experiencia por ser tan versado en el comercio de

tentador. Al tener tal experiencia, él sabe cuáles son

las tentaciones que han frustrado a otros y es más
probable que prevalezcan; como el cazador tiende
las trampas que han atrapado a otras aves. Satanás
tiene tal poder para tentar, aumenta nuestro peligro,
y teníamos necesidad de orar: "No nos metas en
tentación.
[4] Considere la SUTILIDAD de Satanás al tentar.
La palabra griega tentar significa engañar . Satanás,
al tentar, usa muchos complots sutiles para engañar.
Leemos de las "profundidades de Satanás" (Ap 2, 24),
de sus "artimañas y estratagemas" (2 Co 2, 11), de sus
"lazos y dardos". Se le llama león por su crueldad y
serpiente vieja por su sutileza. Tiene varios tipos de
sutileza para tentar.
1ª sutileza. Observa el temperamento natural y la
constitución de los hombres. No conoce el corazón
de los hombres, pero puede sentir su pulso, conocer
su temperamento y puede aplicarse en
consecuencia. Como el agricultor sabe qué semilla es
apropiada para sembrar en tal suelo, Satanás, al
descubrir el temperamento de un hombre, sabe qué
tentaciones es apropiado sembrar en su corazón. De
la misma manera que corre la marea de la
constitución de un hombre, sopla el viento de la
tentación . Satanás tienta al ambicioso con una
corona, al lujurioso con belleza, al codicioso con una
cuña de oro. Proporciona comida sabrosa, como la
que ama el pecador.
2da sutileza. Él elige la estación más apta para
tentar. Como un pescador astuto lanza su cebo
cuando el pez pica mejor, así el diablo sabe cuál es el
mejor momento cuando es más probable que
prevalezca la tentación. Hay varias temporadas en
las que tenta.
1ª temporada. Él nos tienta en nuestra primera
iniciación y entrada a la religión verdadera, cuando
de nuevo hemos entregado nuestros nombres a
Cristo. Nunca molestará a sus vasallos; pero cuando
hayamos roto su prisión en la conversión, nos
perseguirá con violentas tentaciones. Cuando Israel
salió un poco de Egipto, el faraón los persiguió. Tan
pronto como nació Cristo, Herodes envió a
destruirlo, así que cuando el hijo de la gracia nace, el
diablo trabaja para estrangularlo con la tentación.
Cuando comienzan a aparecer los primeros brotes y
las flores de la gracia, el diablo corta los tiernos
brotes con los agudos estallidos de la tentación. En la
primera conversión, la gracia es tan débil y la
tentación tan fuerte, que uno se pregunta cómo el
joven convertido

escapa con su vida. Satanás tiene rencor contra la nueva

criatura.
2da temporada. El diablo tienta cuando nos
encuentra ociosos . No sembramos semillas en
barbecho; pero Satanás siembra la mayor parte de
su semilla en una persona que está en barbecho.
Cuando el cazador ve que un pájaro se queda quieto
y se posa sobre el árbol, lo dispara. De la misma
manera, cuando Satanás nos observa sentados y
quietos, nos dispara sus dardos ardientes de
tentación. "Mientras los hombres dormían, su
enemigo sembró cizaña"; así, mientras los hombres
duermen en la pereza, Satanás siembra su cizaña.
Mateo 13:25. Cuando David caminaba ociosamente
sobre la azotea, el diablo le puso un objeto tentador
y prevaleció. 2 Samuel 11: 2, 3.
3ª temporada. Cuando una persona se ve reducida a
necesidades externas y apuros, el diablo la tienta.
Cuando Cristo ha ayunado cuarenta días y tiene
hambre, el diablo viene y lo tienta con la gloria del
mundo. Mateo 4: 8. Cuando las provisiones escasean,
Satanás comienza a tentar. "¿Qué, te morirás de
hambre en lugar de robar? ¡Extiende tu mano y
arranca el fruto prohibido!" ¿Con qué frecuencia
prevalece esta tentación? ¿Cuántos vemos que, en
lugar de vivir por fe, viven de acuerdo con sus
turnos y robarán la carne de venado, aunque
pierdan la bendición?
4ta temporada. Satanás tienta después de una
ordenanza . Cuando hemos estado escuchando la
Palabra, o en oración o sacramento, Satanás lanza el
garfio de la tentación. Cuando Cristo había estado
ayunando y orando, vino el tentador. Mateo 4: 2, 3.
¿Por qué Satanás elige el tiempo después de una
ordenanza para tentar? ¡Deberíamos pensar que es
el momento más desventajoso, cuando el alma se
eleva a un marco celestial!
(1) La malicia pone a Satanás sobre ella. Las
ordenanzas, que causan fervor en un santo, causan
furor en Satanás. Sabe que en cada deber tenemos
un plan contra él; en cada oración levantamos un
pleito en el cielo contra él; en la Cena del Señor,
juramos luchar bajo el estandarte de Cristo contra él;
por tanto, se enfurece más, y pone sus trampas y
dispara sus dardos contra nosotros.
(2) Satanás tienta después de una ordenanza,
porque cree que nos encontrará más seguros.
Después de haber estado en la adoración solemne de
Dios, podemos

volverse negligente y dejar de lado el rigor anterior;

como un soldado que, después de la batalla, se quita
la armadura. Satanás vigila su tiempo. Él hace lo que
hizo David con los amalecitas, quienes, cuando
tomaron el botín y estuvieron seguros, y comieron,
bebieron y bailaron, David cayó sobre ellos y los
golpeó. 1 Sam 30:17. Cuando nos volvemos
negligentes después de una ordenanza y nos
entregamos demasiado a los placeres carnales,
Satanás cae sobre nosotros por la tentación y, a
menudo, nos frustra. Después de una comida
completa, los hombres tienden a adormecerse; así
que, después de haber tenido una comida completa
en una ordenanza, podemos dormirnos y sentirnos
seguros, y entonces Satanás dispara su flecha de
tentación y nos golpea entre las articulaciones de
nuestra armadura.
5ta temporada. Satanás tienta después de algunos
descubrimientos del amor de Dios . El pirata
atacará el barco ricamente cargado. Así, cuando un
alma ha sido cargada de comodidades espirituales, el
diablo le dispara para despojarlo de todo. Envidia un
alma que ha sido festejada con gozo espiritual. La
túnica multicolor de José hizo que sus hermanos lo
envidiaran y conspiraran contra él. Después de que
David recibió la buena noticia del perdón de su
pecado, que lo llenó de consuelo, Satanás lo tentó a
un nuevo pecado al contar al pueblo; y así todo su
consuelo se filtró y se derramó.
6ta temporada. Satanás tienta cuando nos ve más
débiles . Rompe el seto donde está más bajo; como
los hijos de Jacob se encontraron con los siquemitas
cuando estaban cojos, y no pudieron oponer
resistencia. Génesis 34:25. En dos ocasiones, Satanás
viene sobre nosotros en nuestra debilidad:
(1) Cuando estamos solos ; como se acercó a Eva
cuando su marido estaba fuera, y ella era menos
capaz de resistir su tentación. Tiene la política de
administrar su veneno en privado, cuando nadie
está cerca para revelar la traición. Es como un
pretendiente astuto que corteja a la hija cuando los
padres no están en casa. Cuando estamos solos, el
diablo viene cortejando con una tentación, ¡y espera
que enciendan la cerilla!
(2) Cuando se acerca la hora de la muerte . Como
los cuervos picotean a las pobres ovejas, cuando
están enfermas y débiles, y apenas pueden ayudarse
, así, cuando un santo está débil en su lecho de
muerte, el diablo lo picotea con una tentación. Se
reserva sus asaltos más furiosos para el último. El
pueblo de Israel nunca fue agredido tan ferozmente
como cuando iba a tomar posesión de la tierra
prometida; entonces todos los reyes de Canaán
unieron sus fuerzas
contra ellos; así que, cuando los santos abandonan el
mundo y van a poner el pie en la Canaán celestial,
Satanás los ataca mediante la tentación; les dice que
son hipócritas y que todas sus evidencias son falsas.
Como un cobarde, golpea a los santos cuando están
abatidos; cuando la muerte golpea el cuerpo, golpea
el alma.
3ª sutileza. Satanás, al tentar, ceba su anzuelo con la
religión . Puede tentar a pecar bajo la apariencia de
piedad. A veces es el diablo blanco y se transforma
en ángel de luz. Celso escribió un libro lleno de
errores y lo tituló "El Libro de la Verdad". Entonces
Satanás puede escribir el título de religión sobre su
peor tentación. Viene a Cristo con la Escritura en su
boca, "Escrito está", etc. De modo que viene a
muchos y los tienta a pecar, con el pretexto de la
religión. Tienta al mal para que de él salga bien;
tienta a los hombres a acciones tan injustificables,
para que sean puestos en la capacidad de honrar
más a Dios. Los tienta a aceptar la preferencia contra
la conciencia para que puedan estar en condiciones
de hacer más bien. Pidió a Herodes que matara a
Juan el Bautista, para evitar que violara su
juramento. Tenta a muchos a oprimirlos y
extorsionarlos, diciéndoles que están obligados a
mantener a sus familias. Él tienta a muchos a
deshacerse de sí mismos, para que no vivan más
para pecar contra Dios. Así envuelve sus píldoras
venenosas en azúcar. ¿Quién sospecharía de él
cuando llega como ministro y cita las Escrituras? "Y
no es de extrañar, porque el mismo Satanás se
disfraza de ángel de luz. No es de extrañar, entonces,
que sus siervos se hagan pasar por siervos de
justicia". 2 Corintios 11: 14-15
4ta sutileza. Satanás tienta a pecar gradualmente .
La serpiente vieja se enrolla gradualmente. Primero
tienta a menos pecados, a fin de traer mayores. Una
pequeña infracción puede ocasionar un gran
crimen; como un pequeño pinchazo de alfiler puede
ocasionar una gangrena mortal. Satanás primero
tentó a David con una mirada impura para mirar a
Betsabé, y esa mirada impura ocasionó adulterio y
asesinato. Primero tienta a entrar en compañía de
los malvados, luego a retorcerse en un lazo de
amistad, y así, gradualmente, caer en la misma
condenación con ellos. Es una gran sutileza de
Satanás tentar primero a cometer menos pecados,
porque éstos endurecen el corazón y preparan a los
hombres para cometer pecados más horrendos y
tremendos.
5ta sutileza. La política de Satanás es entregarnos las
tentaciones por aquellos

de quien menos sospechamos.

(1) Por amigos cercanos. Nos tienta con los que
están cerca en sangre. Le entregó una tentación a
Job por parte de su esposa. "¿Aún conservas tu
integridad?" Trabajo 2: 9. Como si hubiera dicho: Job,
ves cómo, a pesar de toda tu piedad, Dios te trata, su
mano se ha extendido contra ti; qué, y todavía rezar
y llorar! ¡Desecha toda religión, vuélvete ateo!
"¡Maldice a Dios y muere!" De modo que Satanás se
valió de la esposa de Job para hacer su obra. La
mujer estaba hecha de la costilla, y Satanás hizo un
arco con esta costilla para disparar la flecha de su
tentación. [Apunta al corazón a través de la costilla.]
El diablo a menudo se para detrás de la cortina, no
se le verá en el negocio, pero pone a otros a hacer su
trabajo. Como un hombre usa a un sargento para
arrestar a otro, Satanás usa un apoderado para
tentar; como se metió en una serpiente, para poder
entrar en una relación cercana.
(2) A veces tienta a amigos religiosos. Él se mantiene
oculto, para que no se vea su pie hendido. ¿Quién
hubiera pensado haber encontrado al diablo en
Pedro? Cuando quiso disuadir a Cristo de sufrir,
diciendo: "Maestro, perdónate a ti mismo", Cristo vio
a Satanás en la tentación. "¡Apártate de mí Satanás!"
Cuando nuestros amigos religiosos quisieran
disuadirnos de cumplir con nuestro deber, Satanás
es un espíritu mentiroso en sus bocas, y con ellos nos
induciría al mal.
6ta sutileza. Satanás tienta a algunas personas más
que a otras. Algunos son como yesca húmeda, que no
aceptarán tan pronto el fuego de la tentación como
otros. Satanás tienta a la mayoría donde cree que sus
políticas prevalecerán más fácilmente. Algunos son
más aptos para recibir la impresión de tentaciones,
como la cera blanda es más apta para tomar el sello
del sello. El apóstol habla de "vasos preparados para
destrucción", de modo que hay vasos preparados
para la tentación. Romanos 9:22. Algunos, como la
esponja, absorben las tentaciones de Satanás. Hay
cinco clases de personas sobre las que Satanás se
preocupa más por sus tentaciones.
(1) Gente ignorante . El diablo puede llevarlos a
cualquier trampa. Puede llevar a un ciego a
cualquier parte. Dios hizo una ley para que los
judíos no pusieran piedra de tropiezo en el camino
de los ciegos. Levítico 19:14. Satanás sabe que es fácil
poner una tentación en el camino de los ciegos, ante
la cual tropezarán en el infierno. Cuando los sirios
fueron heridos de ceguera, el profeta Eliseo pudo
llevarlos a donde quisiera. 2 Reyes 6:20. los

El ave ciega pronto es disparada por el cazador.

Satanás, el dios de este mundo, ciega a los hombres y
luego les dispara. Un hombre ignorante no puede
ver las trampas del diablo. Satanás le dice que tal
cosa no es pecado, o que es pequeño, y que le irá
bastante bien; es sólo arrepentirse.
(2) Satanás tienta a los incrédulos . Aquel que, con
Diágoras, duda de una Deidad, o con los fotinianos,
niega el infierno, ¡en qué pecado no puede ser
arrastrado! Es como el metal que Satanás puede
moldear en cualquier molde; puede teñirlo de
cualquier color. Un incrédulo no se apegará a
ningún pecado, ya sea lujo, perjurio o injusticia.
Pablo no temía tanto a nadie como a los que no
creían. "Para que yo sea librado de los que no creen
en Judea". Romanos 15:31.
(3) Satanás tienta a los orgullosos : sobre ellos tiene
más poder. Nadie corre mayor peligro de caer en la
tentación que el que se enorgullece de su propia
vanidad. Cuando el corazón de David se
enorgulleció, el diablo lo incitó a contar al pueblo. 2
Samuel 24: 2. [Las torres altas se estrellan con una
caída más pesada; y un rayo cae sobre las cimas de
las montañas.] Horacio. Satanás usó el orgullo de
Amán para ser su vergüenza.
(4) Gente melancólica . La melancolía es un humor
negro , asentado principalmente en el cerebro. Viste
la mente de sable y perturba la razón. Satanás
trabaja mucho sobre este humor. Hay tres cosas en
la melancolía que dan ventaja al saludo del diablo:
[1] Melancolía inadaptada para el deber, arranca las
ruedas del carro; desanima a un hombre. Las
cuerdas de laúd que estén mojadas no sonarán. De la
misma manera, cuando el espíritu está triste y
melancólico, un cristiano está desafinado para las
acciones espirituales.
[2] La melancolía a menudo se pone del lado de
Satanás contra Dios. El diablo le dice a tal persona
que Dios no lo ama, que no hay misericordia para él;
y el alma melancólica tiende a pensar así y pone su
mano en las mentiras del diablo.
[3] La melancolía engendra descontento, y el
descontento es la causa de muchos pecados, como la
falta de agradecimiento, la impaciencia y, a menudo,
termina en auto-asesinato. ¡Juzgue, entonces, qué
ventaja tiene Satanás contra una persona
melancólica, y cuán fácilmente puede prevalecer
con él por su tentación! ¡Una persona melancólica
tienta al diablo para tentarlo!

(5) Personas ociosas . El diablo encontrará trabajo

para los ociosos. Jerónimo le dio a su amigo este
consejo: "Que esté siempre bien empleado, para que
cuando llegue el tentador, lo encuentre trabajando
en la viña". Si las manos no funcionan bien, la
cabeza estará tramando el mal. Micrófono 2: 1.
Séptima sutileza. Satanás da un pequeño respiro y
parece dejar de tentar por un momento, para que
pueda seguir adelante con más ventaja; como Israel
hizo como si fuera golpeado delante de los hombres
de Al, y huyó; pero era un complot para sacarlos de
sus ciudades cercadas y atraparlos con una
emboscada. Josué 8:15. El diablo a veces levanta el
sitio y finge una huida para obtener mejor la
victoria. Se va por un tiempo, para volver cuando ve
una mejor temporada. "Cuando el espíritu inmundo
sale de un hombre, anda por lugares secos,
buscando descanso; y al no encontrarlo, dice:
Volveré a mi casa de donde salí". Lucas 11:24.
Satanás, al fingir una fuga y dejar de tentar por un
tiempo, genera seguridad en las personas; piensan
que están a salvo y se convierten en vencedores
cuando, pero de repente, Satanás cae sobre ellos y
los hiere. Como quien va a dar un salto, corre un
poco hacia atrás, para que pueda dar el salto más
grande , así Satanás parece retirarse y retroceder un
poco, para que pueda seguir adelante con una
tentación con más furia y éxito. Por lo tanto,
debemos estar siempre alerta y tener nuestra
armadura espiritual.
Octava sutileza. La serpiente antigua o aparta a los
hombres del uso de los medios o los hace abortar en
su uso.
(1) Trabaja para sacar a los hombres de sus deberes,
de orar y oír, para desanimarlos; y, para ello, tiene
dos artificios:
Los desalienta del deber sugiriéndoles su
indignidad; que no son dignos de acercarse a Dios, ni
tienen ningún signo de su amor y favor. Son
pecadores y Dios es santo; ¿cómo se atreven a
presumir de llevar su ofrenda impura a Dios? Que
nos consideremos indignos, es bueno y argumenta
humildad; pero pensar que no debemos acercarnos
a Dios por ser indignos, es una conclusión hecha por
el diablo. Dios dice: "Ven, aunque indigno". Por esta
tentación, el diablo quita a muchos de venir a la
mesa del Señor. "Oh", dice él, "esta es una ordenanza
solemne, y requiere mucha santidad. ¿Cómo te
atreves a venir tan indignamente? Comerás y
beberás indignamente". Por lo tanto, como Saúl
mantuvo la

la gente de comer miel — entonces el diablo con esta

tentación, asusta a muchos de esta ordenanza, que
es más dulce que la miel y el panal de miel.
Satanás se esfuerza por desalentar el deber
objetando la falta de éxito. Cuando los hombres han
esperado en Dios en el uso de las ordenanzas, y no
encuentran el consuelo que desean, Satanás los
desanima y los pone en la determinación de
rechazar toda religión; comienzan a decir como un
rey malvado: "¿Debo esperar más en el Señor?" 2
Reyes 6:33. Cuando Saúl vio que Dios no le respondía
con sueños y visiones, Satanás lo tentó a dejar su
adoración y buscar a la bruja de Endor. 1 Samuel 28:
6. No llega ninguna respuesta a la oración; por tanto,
dice Satanás, deja de orar; ¿Quién sembrará la
semilla donde no brote? Así, el diablo, con su lógica
sutil, disputaría un alma pobre por obligación. Pero
si ve que no puede prevalecer de esta manera, para
apartar a los hombres del uso de los medios,
entonces trabaja:
(2) Hacerlos abortar en el uso de los medios. Con
este artificio prevalece sobre multitud de profesores.
El diablo está, como lo hizo a la diestra de Josué,
para resistir a los hombres. Zacarías 3: 1. Si no puede
impedirles que cumplan con su deber, seguramente
se lo impedirá de dos maneras:
Causando distracción en el servicio de Dios; y esto lo
hace proponiendo objetos de vanidad, o susurrando
a los oídos de los hombres que apenas pueden saber
lo que hacen.
Él obstaculiza, poniendo a los hombres en el desempeño de
sus deberes de manera incorrecta.
[1] De una manera totalmente formal, para que no
tengan éxito. Satanás sabe que los deberes que se
hacen superficialmente, son como dejarlos sin hacer.
Esa oración que no traspasa el corazón, jamás
traspasará el cielo.
[2] Los obliga a realizar deberes para fines
equivocados. [El fin gobierna la acción]; que hará
que se vean asquint, y tienen por extremos en deber.
"No seréis como los hipócritas, porque a ellos les
encanta orar parados en las esquinas de las calles,
para ser vistos por los hombres". Mateo 6: 5. La
oración es buena, pero orar para ser visto por los
hombres era una mosca muerta en la caja del
ungüento. El aceite de la vanagloria alimenta la
lámpara; los propósitos siniestros corrompen y
destruyen nuestras cosas santas. Aquí está la política
de Satanás, ya sea para prevenir el deber o para
pervertirlo ; ya sea para apartar a los hombres del
uso de los medios, o hacerlos abortar en

el uso de ellos.
Novena sutileza. Satanás puede colorear el pecado
con el nombre y la pretensión de virtud. Alcibíades
colgó una cortina bellamente bordada sobre un
horrible cuadro de sátiros. De la misma manera,
Satanás puede poner el velo de la virtud sobre el
cuadro inmundo del pecado. Puede engañar a los
hombres con mercancías falsas; puede hacerles
creer que la presunción es fe, que la pasión
intemperante es celo, la venganza es prudencia, la
codicia es frugalidad y la prodigalidad es buena
hospitalidad. "Ven, mira mi celo por el Señor", dice
Jehú. Satanás lo persuadió de que era un fuego del
cielo, cuando no era más que el fuego de su propia
ambición. Este es un arte sutil de Satanás, engañar
mediante la tentación y desanimar a los hombres
con el niño muerto, en lugar del niño vivo; hacer
creer a los hombres que es una gracia, que es un
pecado; como si se escribiera agua de bálsamo en un
vaso de veneno. Si Satanás tiene todos estos sutiles
artificios para tentar, ¿no corremos un gran peligro
ante este príncipe del aire? ¿No hemos tenido que
orar con frecuencia: "Señor, no permitas que seamos
llevados a la tentación"? Como la serpiente engañó a
Eva con su sutileza, no nos dejemos engañar por sus
trampas y complots infernales. 2 Corintios 11: 3.
Tiene una destreza en los inventos sutiles. Duele más
como un zorro que como un león . Sus trampas son
peores que sus dardos . "Para que Satanás no nos
engañe. Porque conocemos muy bien sus malvados
planes". 2 Corintios 2:11
Décima sutileza. Trabaja para atraparnos con las
cosas lícitas. Son más los dañados por las cosas lícitas
que las ilícitas, ya que más se matan con el vino que
con el veneno. Los pecados graves nos atemorizan
, pero cuántos atraen y dañan al usar
desmesuradamente las cosas lícitas. La recreación es
lícita, comer y beber son lícitos, pero muchos
ofenden por exceso y su mesa es una trampa. Las
relaciones son lícitas, pero ¡ cuán a menudo Satanás
tienta a amar demasiado! ¡Cuán a menudo se pone a
la esposa y al hijo en el lugar de Dios! El exceso hace
que las cosas lícitas se vuelvan pecaminosas.
11a sutileza. Él hace que los deberes de nuestro
llamamiento general y particular se obstaculicen y
se empujen unos a otros. Nuestro llamado general es
servir a Dios, nuestro llamado particular es
ocuparnos de nuestros empleos en el mundo. Es
sabio ser regular en ambos, cuando el llamado en
particular no consume el tiempo para el servicio de
Dios, ni el servicio de Dios obstaculiza la diligencia
en un llamamiento. El arte del diablo es hacer que
los cristianos sean defectuosos en uno de estos dos.
Algunos pasan todo su tiempo escuchando y leyendo
la Palabra, y bajo un

pretensión de vivir por fe, no vivir en vocación.

Otros Satanás se quita de los deberes de la religión;
Con el pretexto de que deben mantener a sus
familias, los hace tan cuidadosos con sus cuerpos
que descuidan por completo sus almas. La sutileza
de la serpiente antigua es hacer que los hombres
sean negligentes en los deberes de la primera mesa o
de la segunda.
12a sutileza. Él tergiversa la verdadera santidad
para hacer que otros la desprecien. Pinta el rostro de
la religión lleno de cicatrices y de imperfecciones,
para crear en la mente de los hombres prejuicios
contra ella. Representa la religión como la cosa más
melancólica, y que quien la abraza debe desterrar
todo gozo, aunque el apóstol habla de "gozo de
creer". Romanos 15:13. Satanás sugiere que la
religión expone a los hombres al peligro: les muestra
la cruz, pero les oculta la corona ; trabaja para poner
toda la deshonra que pueda sobre la santidad, para
tentarlos a renunciar a ella. Abusa del buen cristiano
y le da un nombre equivocado. El verdadero celo
hombre al que llama exaltado y facciosos; al hombre
paciente que soporta las heridas sin venganza, lo
representa como un cobarde; el hombre humilde
como abatido; el hombre celestial al que llama necio.
Presenta las cosas que se ven, como más importantes
que las que no se ven; y así tergiversa la religión
ante el mundo. Así como Juan Huss, ese santo
hombre, fue pintado con diablos rojos , Satanás
pinta la santidad con un rostro tan deformado y
deformado como puede, para que pueda, por esta
tentación, apartar a los hombres de la piedad sólida
y hacerlos más bien despreciados que abrázalo. La
mano de Joab está en esto. Satanás está tentando a la
gente al ateísmo, a desechar toda religión.
13a sutileza. Satanás aparta a los hombres del amor
a la verdad para abrazar el error. "Que deberían
creer una mentira". 2 Tes. 2:11. Él es llamado en la
Escritura no sólo es un impuro espíritu, pero una
mentira espíritu. Como espíritu inmundo, trabaja
para contaminar el alma con lujuria, y como espíritu
de mentira, trabaja para corromper la mente con el
error. Todo esto es peligroso, porque muchos errores
se parecen tanto a la verdad, ya que el dorado
representa el verdadero oro. Satanás así seduce a las
almas. Aunque la Escritura culpa a los herejes por
ser promotores de error -yet que cobra a Satanás con
ser el principal artífice de la misma. Difunden el
error, pero el diablo es un espíritu de mentira en sus
bocas. La gran tentación de Satanás es hacer que los
hombres crean imposturas peligrosas, que son
verdades gloriosas. Así se transforma en ángel de luz.
Cuál es el

¿Qué significado tiene Satanás sembrando cizaña en

la parábola pero sembrando error en lugar de
verdad? Mateo 13:25. ¿Con qué rapidez había
abordado el diablo la falsa doctrina en los tiempos
de los apóstoles? Que era necesario estar
circuncidado, que la adoración de ángeles era lícita y
que Cristo no había venido en carne. Hechos 15: 1;
Col 2:18; 1 Juan 4: 3. El diablo tienta arrastrando a
los hombres al error, porque sabe cuán mortal es la
trampa y el gran daño que hará.
(1) El error es de naturaleza difusa; se compara con
la levadura porque penetra, y con la gangrena
porque se propaga. Mateo 16:11; 2 Timoteo 2:17. Un
error se esparce en más, como un círculo en el agua
que se multiplica en más círculos; un error rara vez
ocurre solo. El error se transmite de una persona a
otra. Es como la peste, que infecta a su alrededor.
¡Satanás al infectar a una persona con error, infecta
a más! El error de Pelagio se extendió
repentinamente a Palestina, África e Italia. Al
principio, el error arriano no fue más que una
chispa, pero al final prendió fuego a casi todo el
mundo.
(2) El diablo tiende la trampa del error, porque trae
divisiones a la iglesia; y estos traen oprobio y
escándalo sobre los caminos de Dios. El diablo baila
en discordia. La división destruye la paz, que fue el
legado de Cristo; y amor, que es el vínculo de la
perfección. No sólo se ha rasgado la túnica de Cristo,
sino también su cuerpo, por las divisiones que ha
causado el error. En las iglesias y familias donde el
error se infiltra, ¡qué animosidades y facciones crea!
Pone al padre contra el hijo y al hijo contra el padre.
¡Qué matanzas y derramamiento de sangre han sido
ocasionados por errores en la iglesia!
(3) La política del diablo al generar errores es
obstaculizar la reforma. Nunca fue amigo de la
reforma. En los tiempos primitivos, después de los
días de los apóstoles, la serpiente arrojaba de su
boca agua como un diluvio tras la mujer, que era un
diluvio de herejías, para obstaculizar el progreso del
evangelio. Apocalipsis 12:15.
(4) Satanás tienta al error, porque el error devora la
piedad. Los gnósticos no sólo estaban corrompidos
en sus juicios, sino también en su moral; estaban
sueltos en sus vidas. "Hombres impíos, que
convierten la gracia de nuestro Dios en lascivia".
Judas 4. Los Familistas luego se convirtieron en
Ranters, y

se entregaron a los vicios y las inmoralidades; y esto

lo hicieron mientras se jactaban del Espíritu y de la
perfección.
(5) El propósito del diablo al seducir por el error es
que él sabe que es pernicioso para las almas. El error
maldice tanto como el vicio; veneno mata tan bien
como una pistola. "Quién en secreto introducirá
herejías condenables". 2 Pedro 2: 1. Si Satanás es tan
sutil al tender lazos del error para engañar, si no
tuviéramos necesidad de orar para que Dios no
permita que seamos llevados a la tentación; que nos
haría sabios para mantenernos fuera de la trampa
del error; ¿O, si hemos caído en él, que él nos
capacitaría para salir del lazo mediante el
arrepentimiento?
14a sutileza. Satanás embruja y atrapa a los
hombres, poniéndoles cebos agradables; como las
riquezas, los placeres y los honores del mundo.
"Todas estas cosas te daré". Mateo 4: 9. ¿A cuántos
tienta con esta manzana dorada? El orgullo, la
ociosidad, el lujo son los tres gusanos que se
engendran con la prosperidad. "Los que quieren
enriquecerse caen en tentación y lazo". 1 Timoteo 6:
9. Satanás mata con estos dardos plateados. ¡Satanás
mata con estos dardos plateados ! ¡Cuántos están
atrapados por sus deliciosos placeres! Los placeres
del mundo son el gran motor por el cual Satanás
golpea las almas de los hombres. Su política es
hacerles cosquillas hasta la muerte, ¡ condenarlos
con delicias! La carne se complacería con gusto, y
Satanás prevalece con esta tentación; los ahoga en
las dulces aguas del placer. Los que tienen
abundancia del mundo, caminan en medio de lazos
de oro. Teníamos que vigilar nuestros corazones en
la prosperidad y orar para que no seamos llevados a
la tentación. Tenemos tanta necesidad de tener
cuidado de no estar en peligro por la prosperidad,
como un hombre tiene que tener cuidado en un
banquete donde hay algunos platos de comida
envenenada.
15a sutileza. Satanás al tentar aboga por la
necesidad . Sabe que la necesidad, en algunos casos,
puede parecer paliar y excusar un pecado. Puede
parecer que hace un bien menos malo, para evitar
un mal mayor, ya que Lot ofreció exponer a sus hijas
a los sodomitas, y estaba dispuesto a que fueran
contaminadas, para poder preservar a los ángeles
extraños que habían entrado en su casa. Génesis 19:
8. Sin duda Satanás participó en esta tentación e hizo
que Lot creyera que la necesidad de la acción
excusaría el pecado. El comerciante defiende la
necesidad de una ganancia ilegal, o no puede vivir;
otro alega la necesidad de venganza, o su crédito se
vería afectado. Así Satanás tienta a los hombres a
pecar con el argumento de la necesidad. Él citará
Escritura para probar que en algunos casos
extraordinarios puede ser necesario hacer lo que en
otras ocasiones no es justificable. ¿No comió David,
en caso de necesidad, "el pan de la proposición, que
no le era lícito , sino sólo los sacerdotes"? Mateo 12:
4. No leemos que se le culpó; Entonces dice Satanás:
¿Por qué no puedes, en casos extraordinarios,
transgredir un poco y tomar el fruto prohibido?
¡Cuidado con esta tentación! El pie hendido de
Satanás está en él. Nada puede garantizar algo que,
en sí mismo, sea pecaminoso . La necesidad no
justificará la impiedad .
16a sutileza. Satanás lleva a los hombres a la
presunción. La presunción es una confianza sin
fundamento suficiente. Se compone de dos
ingredientes: audacia y seguridad. Esta tentación es
común. Hay una doble presunción:
(1) Cuando los hombres presumen que son mejores
de lo que son; que tienen gracia cuando no la tienen.
No aceptarán oro por confianza, pero aceptarán la
gracia por confianza. Las vírgenes insensatas
supusieron que tenían aceite en sus vasijas, cuando
no lo tenían. Aquí esa regla de Epicarmo es buena,
"Desconfía de un corazón engañoso".
(2) Cuando los hombres presumen de la
misericordia de Dios. Aunque no son tan santos
como deberían ser , presumen que Dios será
misericordioso con ellos. Miran la misericordia de
Dios con los amplios espectáculos de presunción.
Satanás alivia a los hombres en sus pecados; les
predica: "Toda esperanza, no miedo"; y los engaña
con sueños dorados. "Cuántos con vana esperanza,
bajan al infierno". Agustín. La presunción es la
red de Satanás con la que arrastra a millones al
infierno.
Por esta tentación a menudo atrae a los piadosos al
pecado. Presumen de sus privilegios o gracias, y así
se aventuran en ocasiones de pecar. Josafat se unió
en una alianza de amistad con el rey Acab,
presumiendo que su gracia sería un antídoto lo
suficientemente fuerte contra la infección. 2
Crónicas 18: 3. Satanás tentó a Pedro para que
presumiera de sus propias fuerzas; y cuando llegó el
momento de la prueba, fue frustrado y se fue
avergonzado. Por tanto, teníamos necesidad de orar
para que no seamos inducidos a esta tentación; y di
con David: "Guarda a tu siervo de pecados
presuntuosos". Salmo 19:13.

17a sutileza. Satanás lleva a cabo sus malvados

planes contra nosotros bajo los más altos pretextos
de amistad. Pone plata en su cebo y moja sus
pastillas envenenadas en azúcar, como algunos
cortesanos que hacen las mayores pretensiones de
amor, donde tienen el odio más mortal. Satanás se
quita la piel de león y viene con piel de oveja; finge
bondad y amistad, y suplica lo que podría ser para
nuestro bien. Así vino a Cristo : "Ordena que estas
piedras se conviertan en pan". Mateo 4: 3. Como si
hubiera dicho: "Veo que tienes hambre, y no hay
mesa preparada para ti en el desierto; por eso,
compadeciéndome de tu condición, deseo que comas
algo; convierte las piedras en pan para que tu
hambre se estar satisfecho." ¡Pero Cristo espió la
tentación y con la espada del Espíritu hirió a la
serpiente antigua!
Así Satanás vino a Eva y la tentó bajo la noción de
una amiga. "Come", dijo, "del fruto prohibido,
porque el Señor sabe que el día que de él comieres,
serás como dioses". Como si hubiera dicho: "Solo te
persuadiré de que te ponga en una mejor condición
de la que estás ahora; come de este árbol y te hará
omnisciente, serás como dioses". ¡Qué demonio tan
engañoso había aquí! Pero fue una tentación sutil.
¡Se tragó con avidez el anzuelo y se arruinó a sí
misma y a toda su posteridad! Tememos sus halagos
falaces.
18a sutileza. Satanás tienta a los hombres a pecar
persuadiéndolos de que sigan su consejo. Son como
los que padecen alguna enfermedad repugnante y
prefieren morir antes que decírselo al médico. Sería
prudente, en caso de dolorosa tentación, abrir la
mente a algún cristiano experimentado, cuyo
consejo podría ser un antídoto contra ella. Hay
peligro en ocultarlo, como en ocultar un moquillo
que puede resultar mortal. ¡Cómo habíamos
necesitado renovar la petición: "No nos metas en
tentación!"
19a sutileza. Satanás utiliza herramientas
adecuadas para llevar a cabo su obra, es decir,
utiliza a las personas que pueden ser los medios más
probables para promover sus designios. Traza la
trama de una tentación, corta el trabajo y emplea a
otros para terminarlo.
(1) Se vale de los que están en lugares dignos ,
hombres de renombre. Él sabe, si puede
conseguirlos de su lado, que pueden atraer a otros a
trampas. Cuando los príncipes y los jefes de las
tribus se unieron a Coré,

actualmente atrajo a una multitud a la conspiración.

Entumecimiento 16: 2, 10.
(2) Lleva a cabo sus designios por hombres de
ingenio y habilidades , que, si fuera posible,
engañarían a los mismos elegidos. Debe tener una
gran astucia que persuade a un hombre a no amar
su comida; pero el diablo puede valerse de espíritus
heréticos para persuadir a los hombres de que no
aman las ordenanzas de Dios, en las que profesan
haber hallado consuelo. Muchos de los que alguna
vez parecieron ser estrictos frecuentadores de la
casa de Dios son persuadidos, por los astutos
instrumentos de Satanás, de dejarla y seguir la luz
dentro de ellos . Una gran sutileza del diablo es hacer
uso de hombres tan astutos y sutiles como sea
posible para llevar a cabo sus tentadores designios.
(3) Utiliza las malas compañías para ser
instrumentos de tentación, especialmente para
atraer a los jóvenes al pecado. Primero los
persuaden para que se unan a ellos, luego para
formar un lazo de amistad, luego para beber con
ellos y, gradualmente, corromperlos. Estos son los
señuelos del diablo para tentar a otros.
Vigésima sutileza. Satanás ataca a alguna gracia ,
más que a otras. Apunta a algunas personas más que
a otras; o en alguna gracia más que en otras; y si
puede prevalecer en esto, sabe que será una ventaja
para él. Si me preguntan qué gracia es la que más
ataca Satanás, le respondo que es la gracia de la fe .
Él traza la trama de su tentación de volar el fuerte de
nuestra fe. ¿Por qué Cristo oró más por la fe de Pedro
que por cualquier otra gracia? Lucas 22:32. Porque
vio que su fe estaba en mayor peligro; el diablo
estaba golpeando esta gracia. Satanás, al tentar a
Eva, se esforzó por debilitar su fe. "Sí, ¿ha dicho
Dios: No comerás de todo árbol del huerto?" Génesis
3: 1. El diablo la persuadiría de que Dios no había
dicho la verdad; y cuando una vez la hizo desconfiar,
ella tomó del árbol. Es "el escudo de la fe". Efesios
6:16. Satanás, al tentar, golpea más nuestro escudo,
ataca nuestra fe. Aunque la verdadera fe no se puede
perder por completo, puede sufrir un gran eclipse.
Aunque el diablo no puede quitar la vida de la fe por
la tentación , puede impedir su crecimiento . No
puede destruir la gracia, pero puede debilitarla .
¿Por qué Satanás, al tentar, ataca principalmente nuestra fe?
"No pelees ni con pequeños ni con grandes, sino solo con el
rey". 1 Reyes
22:31. La fe es el rey de las gracias; es una gracia real
y principesca, y realiza los actos más majestuosos y
nobles; por tanto, Satanás lucha principalmente con
esta gracia. Les mostraré la política del diablo al
atacar más la fe.
(1) La fe es la gracia que más daña a Satanás; hace
la mayor resistencia contra él. "¡Ten cuidado!
Cuidado con los ataques del Diablo, tu gran enemigo.
¡Merodea como un león rugiente, buscando una
víctima para devorar! Resístale, manteniéndose
firme en la fe ". 1 Pedro 5: 8-9. Ninguna gracia hiere
más la cabeza de la serpiente que la fe. Es tanto un
escudo como una espada, defensiva y ofensiva. Es un
escudo para proteger la cabeza y defender los signos
vitales. El escudo de la fe evita que los dardos
ardientes de la tentación nos traspasen. La fe es una
espada que hiere al dragón rojo.
¿Cómo es que la fe llega a ser tan fuerte que puede
resistir a Satanás y ponerlo en fuga?
Porque trae la fuerza de Cristo al alma. La fuerza de
Sansón radica en su cabello, el nuestro está en
Cristo. Si un niño es agredido, corre y pide ayuda a
su padre. Así, cuando la fe es asaltada, corre y llama
a Cristo, y en su fuerza vence. "En toda situación,
toma el escudo de la fe, y con él podrás apagar las
flechas de fuego del maligno". Efesios 6:16
La fe se proporciona a sí misma con una reserva de
promesas. Las promesas son las armas de la fe con
las que luchar. Como David, con cinco piedras en su
honda, hirió a Goliat, así la fe pone las promesas,
como piedras, en su honda. 1 Sam 17:40. "Nunca te
dejaré ni te abandonaré." Hebreos 13: 5. "La caña
cascada no quebrará". Mateo 12:20. "¿Quién no
permitirá que seas tentado más de lo que puedas?" 1
Corintios 10:13. "El Dios de paz aplastará en breve a
Satanás bajo tus pies". Romanos 16:20. "Nadie puede
arrebatarlos de la mano de mi Padre". Juan 10:29.
Aquí hay cinco promesas, como cinco piedras,
puestas en la honda de la fe, y con ellas un creyente
puede herir al dragón rojo. Siendo la fe una gracia
para resistir y herir a Satanás, él ve la oportunidad
de golpear nuestro escudo, aunque no puede
romperlo.

(2) Satanás golpea más nuestra fe, y la debilitaría y

destruiría, porque tiene una gran influencia sobre
todas las demás gracias y las establece.

trabajar. Como un rico pañero, que da un stock de

lana a los pobres y los pone a hilar, así la fe da un
stock a todas las demás gracias y las pone a trabajar.
Hace que el amor funcione. "Fe que obra por el
amor". Gálatas 5: 6. Una vez que el alma cree en el
amor de Dios, su amor se enciende hacia Dios. Los
mártires creyentes ardían más en amor que en
fuego. La fe pone en práctica el arrepentimiento .
Cuando el alma cree que se puede tener
misericordia, hace llorar a los ojos. "¡Oh," dice el
alma, "si alguna vez yo ofendiera a un Dios tan
bondadoso!" Lágrimas de arrepentimiento caen del
ojo de la fe. "El padre del niño gritó con lágrimas:
Señor, creo". Marcos 9:24. Si el diablo no puede
destruir nuestra fe, pero si puede perturbarla, si
puede obstaculizar y detener sus acciones, sabe que
todas las demás gracias serán cojas e inactivas. Si se
detiene el resorte de un reloj, el movimiento de las
ruedas se verá obstaculizado. De la misma manera, si
la fe se ve obstaculizada, todas las demás gracias se
detendrán .
21a sutileza. Satanás fomenta las doctrinas que
agradan a la carne. Sabe que a la carne le encanta
ser gratificada, que clama por comodidad y libertad,
y que no soportará ningún yugo a menos que esté
forrada y ablandada. Por lo tanto, estará seguro de
poner el cebo de la tentación, para complacer y
complacer a la carne. La Palabra dice: "¡Esfuérzate
como en agonía por entrar en la gloria; crucifica la
carne; toma el reino de los cielos con santa
violencia!" Satanás, para enervar y debilitar estas
Escrituras, adula la carne; le dice al hombre que no
necesita tal rigor; ni tanto celo y violencia; un ritmo
más suave servirá; seguro que hay un camino más
fácil al cielo; no es necesario quebrantar el corazón
por el pecado. Hágase una confesión con un
sacerdote, cuente algunos rosarios o recite un Ave
María, y eso le proporcionará un perdón y le
permitirá ingresar al paraíso. O toma otra forma de
trabajar: si ve a los hombres sobresaltarse por el
papado, despierta el antinomianismo halagador y
dice: "¿Cuál es la necesidad de todo este costo? ¿Cuál
es la necesidad de las lágrimas de arrepentimiento?
Éstas son legales. ¿Necesitas ser tan estricto en tu
obediencia? Cristo ha hecho todo por ti; debes hacer
uso de tu libertad cristiana ". Esta tentación aleja a
muchos; los aleja del rigor de la vida. El que vende
más barato tendrá más clientes, el diablo sabe que es
una doctrina barata y fácil que agrada a la carne, y
por eso tiene más clientes.
22a sutileza. Satanás tiene sus tentaciones en
referencia a deberes santos. Su política es
obstaculizar el deber, o desanimarlo, o poner a los
hombres

demasiado en el deber.
(1) Para obstaculizar el deber , como (1 Tes. 2:18),
"Habríamos venido una y otra vez, pero Satanás se
lo impidió". Se habrían cumplido muchos deberes
religiosos, pero Satanás se lo impidió. La mano de
Joab está en esto. Hay tres deberes de los que el
diablo es enemigo, y se esfuerza por mantenernos
alejados.
La meditación . Permitirá que los hombres
profesen, oren y escuchen de manera formal, lo cual
no le hace ningún daño ni a ellos ningún bien. Pero
se opone a la meditación, como un medio para
componer el corazón y hacerlo serio. Él puede
soportar tu pequeño tiro, si no pones esta bala de
meditación. No le importa cuánto escuches, sino
cuánto meditas. La meditación es rumiar, hacer
digerir la Palabra y volverse alimento; es el bramido
de los afectos. El diablo es enemigo de esto. Cuando
Cristo está solo en el desierto, entregándose a la
contemplación divina, el diablo viene y lo tienta,
para estorbarlo. Emprenderá negocios mundanos,
algo u otro para mantener a los hombres alejados de
la santa meditación.
Mortificación . Esto es tan necesario como el cielo.
"Mortificad vuestros miembros que están sobre la
tierra, inmundicia, afecto desmesurado". Col 3: 5.
Satanás permitirá que los hombres se enojen con el
pecado, intercambien el pecado o restrinjan el
pecado, que lo mantiene prisionero, que no puede
escapar; pero cuando se trata de quitar la vida del
pecado, ¡él trabaja para detener la orden judicial y
obstaculizar la ejecución! Cuando se mortifica el
pecado, se crucifica a Satanás.
Autoexamen . "Examinaos a vosotros mismos"; es
una metáfora del metal que se perfora, para ver si
hay oro dentro. 2 Cor 13: 5. El autoexamen es una
inquisición espiritual establecida en el alma. El
hombre debe buscar el pecado en su corazón, como
se buscaría en una casa a un traidor; o como Israel
buscaba levadura para quemarlo. Satanás, si es
posible, con sus tentaciones evitará que los hombres
cumplan con este deber. Les dice que su estado es
bueno, y ¿qué necesidad tienen de examinarse?
Aunque los hombres no aceptarán su dinero en
fideicomiso, Satanás los persuade de queconfíen
ensu gracia . Persuadió a las vírgenes insensatas de
que tenían aceite en sus lámparas. Tiene otra
política, que es mostrar a los hombres las faltas de
los demás para evitar que busquen las suyas
propias. Él

les permitirá anteojos ver lo que está mal en los

demás, pero un microscopio para contemplar sus
propios rostros y ver lo que está mal en ellos
mismos.
(2) Su política es desalentar el deber. Cuando
alguien ha estado desempeñando deberes santos,
Satanás le dice que se ha comportado como un
hipócrita; que ha servido a Dios por dinero; que ha
tenido finales siniestros; que sus deberes han estado
llenos de distracción y orgullo; que ha ofrecido a
ciegos y cojos, entonces, ¿cómo puede esperar una
recompensa de Dios? Le dice a un cristiano que ha
aumentado su pecado mediante la oración y se
esfuerza por hacerlo menospreciar sus
deberes, por lo que no sabe si debe orar o no.
(3) Si este complot no funciona, se esfuerza por
poner a un cristiano demasiado en el deber. Si no
puede evitarlo, lo llevará demasiado lejos. La
humillación o el duelo por el pecado es un
deber, pero Satanás lo llevará demasiado lejos; él
dirá: "¡No estás lo suficientemente humillado!" De
hecho, nunca cree que un hombre sea lo
suficientemente humilde hasta que se desespera.
Haría que un cristiano se sumergiera tan
profundamente en las aguas del arrepentimiento ,
que llegaría más allá de su profundidad y se
ahogaría en el abismo de la desesperación .
Viene así al alma: "Tus pecados han sido grandes, y
tus dolores deben ser proporcionales a tus pecados.
Pero, ¿es así? ¿Puedes decir que has sido un doliente
tan grande como lo has sido un pecador? Los años
no impulsan otro oficio que el pecado, ¿y es
suficiente una gota de dolor para un mar de pecado?
¡No! ¡Tu alma debe ser más humillada y permanecer
sumergida por más tiempo en las aguas del
arrepentimiento! " ¡Querría que un cristiano llorara
a sí mismo, ciego y de un humor desesperado, para
tirar el ancla de la esperanza!
Ahora, para que nadie se turbe con esta tentación,
permítanme decirles que esto es una mera falacia de
Satanás; porque el dolor proporcional al pecado no
es alcanzable en esta vida, ni Dios lo espera. Es
suficiente para ti, cristiano, si tienes un
dolor del evangelio; si te entristeces hasta el punto
de ver el pecado odioso y a Cristo precioso; si te
afliges para romper la iniquidad; si tu
remordimiento termina en divorcio. Esto es para ser
lo suficientemente humilde. El oro ha permanecido
bastante tiempo en el fuego cuando se purga la
escoria. De la misma manera, un cristiano ha
permanecido bastante tiempo en la humillación
cuando el amor al pecado es purgado. Esto es para
ser lo suficientemente humillado para la aceptación
divina. Dios, por el amor de Cristo, aceptará

de este dolor por el pecado; por tanto, no dejes que

las tentaciones de Satanás te lleven a la
desesperación.
¡Ves cuán sutil es un enemigo para obstaculizar el
deber, o desanimar en el deber, o poner a los
hombres demasiado en el deber, para que pueda
atropellarlos sobre la roca de la desesperación! ¿No
habíamos necesitado, entonces, a los que tienen un
enemigo tan sutil, orar: "Señor, no nos metas en
tentación"? Como la serpiente engañó a Eva, no nos
dejemos engañar por este infernal engañador.
23a sutileza. Satanás tienta a pecar, con la
esperanza de salir de él con un arrepentimiento
rápido. Es fácil para el pájaro volar hacia la
trampa, pero no es tan fácil salir de ella. ¿Es tan fácil
arrepentirse? ¿No hay dolores en el nuevo
nacimiento? ¿Es fácil saltar del regazo de Dalila al
seno de Abraham? ¡Cuántos ha halagado Satanás al
infierno con la política de que, si pecan, se recobren
mediante el arrepentimiento! ¡Pobre de mí! ¿Está el
arrepentimiento en nuestro poder? Una cerradura
se puede cerrar fácilmente , pero no se puede abrir
sin una llave. De la misma manera, podemos
apartarnos de Dios, pero no podemos abrirnos a él
mediante el arrepentimiento, hasta que el que tiene
la llave de David en la mano, abra nuestro corazón.
24 sutileza. Satanás nos obliga a hacer lo bueno,
fuera de tiempo.
Lamentar el pecado es un deber; los sacrificios de
Dios son un corazón quebrantado. Pero hay un
momento en el que puede que no sea tan oportuno.
Salmo 51:17. Después de una liberación eminente,
que requiere regocijo, que el espíritu se tiñe de un
color triste y se sienta a llorar, no es oportuno. Hubo
un momento especial en la fiesta de los
tabernáculos, cuando Dios llamó a su pueblo a la
alegría. "Por siete días celebrarás fiesta solemne al
Señor tu Dios; ciertamente te regocijarás".
Deuteronomio 16:15. Ahora bien, si en este momento
los israelitas hubieran colgado sus arpas en los
sauces y hubieran estado desconsolados, habría sido
muy poco estacional, como el duelo en una boda.
Cuando Dios, por su providencia, nos llama a la
acción de gracias, nos sentamos inclinados y, con
Raquel, nos negamos a ser consolados, es muy malo
y huele a ingratitud. Es la tentación de Satanás; ¡La
mano de Joab está en esto!
Alegrarse es un deber. "La alabanza es hermosa para
los rectos". Salmo 33: 1. Pero cuando Dios, por sus
juicios, nos llama a llorar, el gozo y la alegría son
inoportuno. "En aquel día el Señor llamó al llanto, y
contempló gozo y alegría". Isaías 22:12, 13. Los
eruditos escritores piensan que esto fue en la época
del rey Acaz, cuando aparecieron las señales de la
ira de Dios, como una estrella resplandeciente. Darse
a la alegría en ese momento, era muy fuera de
temporada.
Leer la Palabra es un deber, pero Satanás a veces
impone a los hombres cuando no es oportuno.
Leerlo en casa cuando se predica la Palabra de Dios
o se administra la Santa Cena no es razonable, sí,
pecaminoso; como dijo Husai: "El consejo no es
bueno en este momento". 2 Samuel 17: 7. Había un
tiempo establecido para la Pascua, cuando los judíos
debían llevar su ofrenda al Señor. Entumecimiento
9: 2. Si la gente hubiera estado leyendo la ley en casa
en el tiempo de la Pascua, no hubiera sido a tiempo,
y Dios la habría castigado por desprecio. Es la sutil
tentación del diablo, ya sea para alejarnos del deber,
o para ponernos sobre él cuando es menos en la
temporada. Los deberes de la religión, si no están en
el momento oportuno y se hacen a tiempo, son
peligrosos. La nieve y el granizo son buenos para la
tierra cuando llegan en su estación; pero en la
cosecha, cuando el maíz está maduro, una tormenta
de granizo haría daño.
25 sutileza. Satanás persuade a los hombres a
demorar el arrepentimiento y volverse a Dios. Dice
(como Hag 1: 2): "No ha llegado el momento". Ahora
la juventud está en ciernes; o estás en la flor de tu
edad, es demasiado pronto para arrepentirte: "No ha
llegado el momento". Esta tentación es la red del
diablo con la que arrastra a millones al infierno; es
una tentación peligrosa. "El pecado es un dulce
veneno", Bernard. Cuanto más tiempo permanezca
el veneno en el cuerpo, más letal es. Así, con la
demora del arrepentimiento , el pecado se fortalece y
el corazón se endurece. Cuanto más tiempo se
congele, más difícil será romperlo. De la misma
manera, cuanto más tiempo se congele un hombre
en la impenitencia, más difícil será que le rompan el
corazón. Cuando el pecado se ha asentado en el
corazón, no se puede ahuyentar fácilmente. Además,
el peligro de retrasar el arrepentimiento aparece en
esto, que la vida es peligrosa y puede expirar
repentinamente. ¿Qué seguridad tienes de que
vivirás otro día? La vida se compone de unos
minutos de vuelo; es una vela que pronto se apaga.
"¿Qué es tu vida? Es incluso un vapor". Santiago 4:14.
El cuerpo es como un recipiente, lleno de un poco de
aliento; la enfermedad lo toca, la muerte lo saca.
¡Cuán peligroso, por tanto, es posponer las cosas y
dejar de volverse a Dios mediante el
arrepentimiento! Muchos ahora en el infierno se
propusieron arrepentirse, ¡pero la muerte los
sorprendió!

26 sutileza. Satanás, al tentar, asalta y debilita la paz

de los santos. Si no puede destruir su gracia ,
perturbará su paz . Envidia al cristiano; y si no
puede apartarlo de un cielo en el más allá, lo
guardará de un cielo sobre la tierra. No hay nada, al
lado de la santidad, que un cristiano valora más que
la paz y la tranquilidad mental. Es la crema de la
vida, un racimo de uvas por cierto. Ahora, la gran
política de Satanás es sacudir la paz del cristiano;
que, si va al cielo, irá allí con espantos y muchas
lágrimas. Arroja sus bolas de fuego de tentación para
prender fuego a la paz de los santos. De tanta
preocupación es la paz espiritual, que no es de
extrañar que Satanás, con sus intrincadas sutilezas,
nos robe esa joya. La paz espiritual es una muestra
del favor de Dios. Así como José tuvo un testimonio
especial de la bondad de su padre con la túnica de
muchos colores , así los santos tienen una muestra
especial de la buena voluntad de Dios para con ellos,
cuando les da la túnica de la paz interior de
muchos colores . No es de extrañar, entonces, si
Satanás se enfurece tanto contra la paz de los santos
y les quita este cómodo manto. El diablo perturba las
aguas de la paz de los santos porque con ello espera
sacarles más provecho.
(1) Al confundir sus espíritus, les quita las ruedas de
sus carros; los incapacita para el servicio de Dios; y
pone el cuerpo y la mente de mal genio, como un
instrumento desafinado. La tristeza de espíritu
prevalece, un cristiano no puede pensar en nada
más que en sus problemas; su mente está llena de
dudas, temores, conjeturas , de modo que es como
una persona distraída y apenas es él mismo; o
descuida los deberes de la religión, o su mente se
aparta de ellos mientras los cumple. Hay un deber
especialmente para el que la melancolía y la tristeza
de espíritu no se ajustan, y es el agradecimiento. El
agradecimiento es un tributo a Dios. "Alégrense los
santos, estén en su boca las alabanzas de Dios".
Salmo 149: 5, 6. Pero cuando Satanás ha perturbado
el espíritu de un cristiano y ha llenado su mente de
pensamientos negros y casi desesperados, ¿cómo
puede estar agradecido? Satanás se regocija al ver
cómo su plan tiene éxito. Al inquietar a los hijos de
Dios, los vuelve ingratos.
(2) Al perturbar la paz de los santos, Satanás pone
una piedra de tropiezo en el camino de los demás.
Con esto tiene ocasión de hacer que los caminos de
Dios sean desagradables a los que miran al cielo. Él
pone ante los nuevos principiantes: los
pensamientos desconcertantes, las lágrimas, los
gemidos de los heridos en

espíritu, para asustarlos de toda seriedad en la

religión. Se opondrá a los nuevos principiantes: "¿No
ves cómo estas almas tristes se torturan con
pensamientos melancólicos , y cambiarás las
comodidades y placeres de esta vida para sentarte
siempre en la casa del duelo? ¿Adoptarás esa
religión que te hace ¿un terror para ustedes mismos
y una carga para los demás? ¿Pueden estar
enamorados de una religión que está lista para
asustarlos? " Así el diablo, al perturbar la paz de los
santos, desanimaría a otros que están mirando hacia
el cielo; los apartaba de la oración y de escuchar
todos los sermones que despertaban el alma , por
temor a que cayeran en este humor negro de
melancolía y terminaran sus días en la
desesperación.
(3) Por esta sutil política de Satanás, al perturbar la
paz de los santos y hacerles creer que Dios no los
ama, a veces prevalece hasta el punto de hacerlos
comenzar a tener pensamientos duros de Dios. A
través de los negros anteojos de la melancolía , los
tratos de Dios parecen tristes y espantosos. Satanás
tienta a los piadosos a tener pensamientos extraños
sobre Dios; pensar que ha desechado toda
compasión y se ha olvidado de la gracia y sacar
conclusiones tristes. Salmo 78: 7, 8, 9. "Él quebrará
todos mis huesos como un león; tú me acabarás día y
noche". Isaías 38:13. El diablo, por la melancolía,
provoca un triste eclipse en el alma, de modo que
empieza a pensar que Dios ha cerrado los
manantiales de la misericordia y que no hay
esperanza. Entonces Satanás se beneficia aún más de
un espíritu turbado. A veces lo atribuye a deseos
pecaminosos y execraciones contra sí mismo; como
Job, que en mal humor maldijo el día de su
nacimiento. Trabajo 3: 3. Aunque no maldijo a su
Dios , maldijo el día de su nacimiento.
Así ves las ventajas que obtiene el diablo al provocar
tormentas y perturbar la paz de los santos. Si el
diablo es capaz de deleitarse es de ver las inquietudes
de los santos . Sus gemidos son su música. Para él es
un deporte verlos torturarse sobre el potro de la
melancolía y casi ahogarse en lágrimas. Cuando los
piadosos tienen conjeturas injustas de Dios,
cuestionan su amor, niegan la obra de la gracia y
caen en el deseo de no haber nacido nunca , Satanás
está listo para aplaudir y gritar por una victoria.
¿Con qué artes y métodos perturba Satanás, al
tentar, la paz de los santos?

Con astucia transmite malos pensamientos y hace

creer al cristiano que provienen de su propio
corazón. La copa fue encontrada en el costal de
Benjamín, pero era de José quien había puesto allí.
De la misma manera, un hijo de Dios a menudo
encuentra pensamientos ateos y blasfemos en su
mente, pero Satanás los ha puesto allí. Como algunos
ponen a sus hijos a la puerta de otro, Satanás pone
sus tentaciones a nuestra puerta y las engendra
sobre nosotros. Luego nos preocupamos por ellos y
los cuidamos como si fueran nuestros.
Satanás perturba la paz de los santos al sacar sus
pecados con los colores negros para asustarlos y
prepararlos para abandonar el espíritu. Se le llama
acusador de los hermanos; no sólo porque los acusa
ante Dios, sino porque los acusa a sí mismos. Les
dice que son culpables de ciertos pecados y que son
hipócritas; mientras que los pecados de un creyente
solo muestran que su gracia no es perfecta, pero no
que no tiene gracia. Cuando Satanás venga con esta
tentación, muéstrele la Escritura: "La sangre de
Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado". 1 Juan
1: 7.
27 sutileza. Satanás, con argumentos plausibles,
tienta a los hombres a suicidarse , a deshacerse de
ellos mismos. Esta tentación no solo cruza la
corriente de las Escrituras, sino que es aborrecible
para la naturaleza ser el propio verdugo . Sin
embargo, tales son los astutos artificios de Satanás,
que persuade a muchos para que impongan manos
violentas sobre sí mismos, como atestiguan los
obituarios. Él tienta a algunos a hacer esto por
miedo a la conciencia, diciéndoles: "Todo el infierno
que tendrán está en su conciencia, y la muerte les
dará alivio presente". Él tienta a otros a deshacerse
de sí mismos para que no vivan más para pecar
contra Dios. A otros los tienta a deshacerse de ellos
mismos, para que puedan llegar pronto a la
felicidad. Él les dice que el mejor de los santos desea
el cielo y que cuanto antes esté allí, mejor.
Agustín habla de Cleombroto, quien al escuchar a
Platón leer una conferencia sobre la inmortalidad
del alma y las alegrías del otro mundo, se arrojó por
un precipicio escarpado y se suicidó. Este es el
complot de Satanás; pero no debemos romper la
prisión imponiendo manos violentas sobre
nosotros mismos, sino esperar hasta que Dios envíe
y abra la puerta. Recemos "No nos dejes caer en la
tentación". Aún así, tenga presente la Escritura: "No
matarás". Éxodo 20:13. Si no podemos matar a
otro, ¡mucho menos a nosotros mismos! Y presta
atención a

descontento, que a menudo abre la puerta al auto-asesinato.

Por eso te he mostrado veintisiete sutilezas de
Satanás al tentar, para que puedas conocerlas mejor
y evitarlas. Hay una historia de un judío que habría
envenenado a Lutero, pero un amigo le envió a
Lutero la foto del judío, advirtiéndole que prestara
atención a ese hombre cuando lo viera; por ese
medio, Lutero reconoció al asesino y se escapó de
sus manos. Les he contado los sutiles artificios de
Satanás para tentar; Te he mostrado la foto del que
te mataría. ¡Prevenido, te ruego que prestes atención
al asesino!
De la sutileza de Satanás al tentar, permítanme
sacar tres inferencias.
(1) Nos puede sorprender cómo se salvan
algunos. ¡Qué asombroso que Satanás, este
Abaddon, o ángel del abismo (Apocalipsis 9:11), este
Apolión, este devorador de almas, no engañe a toda
la humanidad! ¡Qué maravilla que se conserven
algunos, que no prevalezcan ni las trampas ocultas
de Satanás ni sus dardos de fuego! ¡Qué maravilla
que ni la cabeza de la serpiente ni la garra del león
los destruyan! Seguramente será motivo de
admiración para los santos, cuando vengan al cielo,
pensar cuán asombroso es, que a pesar de toda la
fuerza y el fraude, el poder y la política del infierno,
deben llegar sanos y salvos al puerto celestial. Esto
se debe a la conducta segura de Cristo, el Capitán de
nuestra salvación. ¡Michael es demasiado duro para
el dragón!
(2) ¿Es Satanás sutil? Vea la necesidad que
tenemos de orar a Dios pidiendo sabiduría para
discernir las trampas de Satanás y fuerza para
resistirlas. No podemos resistirnos a la tentación
por nosotros mismos; si pudiéramos, la oración sería
innecesaria: "No nos metas en tentación". No
pensemos que nosotros, en nosotros mismos,
podemos ser demasiado astutos para el diablo, o
escapar de sus artimañas y dardos. Si David y Pedro,
que fueron pilares en el templo de Dios, cayeron en
la tentación-how tardaría en dichas cañas débiles
como somos, ser soplado hacia abajo -si Dios nos
dejaría! Siga el consejo de Cristo: "Velad y orad para
no caer en tentación". Mateo 26:41.
(3) Vea cómo terminan todas las sutilezas de
Satanás al tentar, para que pueda ser un
acusador. Él traza la trama, incita a los hombres a
pecar, y luego
trae la acusación; como si uno pudiera emborrachar
a otro y luego quejarse de él al magistrado por estar
borracho. El diablo es primero un tentador y luego
un informador. Primero es un mentiroso y luego un
asesino.
Habiendo mostrado las sutilezas de Satanás al
tentar, responderé dos preguntas:
¿Por qué permite Dios que su pueblo sea
golpeado por las tentaciones de Satanás?
Lo hace con muchos fines santos y sabios.
(1) Deja que se sientan tentados a probarlos. La
palabra hebrea significa tanto tentar como probar.
La tentación es una piedra de toque para probar lo
que hay en el corazón. El diablo tienta para
engañar, pero Dios permite que seamos tentados
para probarnos. [El que no es tentado, no es
probado.] Agustín.
Por esto Dios prueba nuestra sinceridad . La
sinceridad de Job fue probada por la tentación; el
diablo le dijo a Dios que Job era un hipócrita y le
servía solo porque Dios lo había bendecido. Pero,
dijo, "¡Toca todo lo que tiene (es decir, déjame
tentarlo) y te maldecirá en tu cara!" Job 1:11. Bueno,
Dios permitió que el diablo lo tocara por tentación y,
sin embargo, Job permaneció santo, adoró a Dios y
bendijo a Dios; verso 20, 21. Aquí se demostró la
sinceridad de Job; tuvo tentaciones ardientes , pero
salió del fuego como un cristiano dorado . La
tentación es una piedra de toque de la sinceridad.
Por tentación. Dios prueba nuestro amor . La esposa
de Tigranes nunca mostró su castidad y amor a su
esposo, como cuando fue tentada por Ciro, pero no
se rindió. De la misma manera, nuestro amor por
Dios se ve cuando podemos mirar una tentación a la
cara y darle la espalda. Aunque el diablo venga
sutilmente como una serpiente y ofrezca una
manzana de oro , el que ama a Dios no tocará el
fruto prohibido. Cuando el diablo ofreció a Cristo
todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, tal fue
el amor de Cristo por su Padre, que aborreció la
tentación. El verdadero amor no será sobornado.
Cuando los dardos del diablo son más ardientes, ¡ el
amor de un santo por Dios es más ferviente! "Si me
amas, guardarás mis mandamientos". Juan 14:15
Dios pone a prueba nuestro valor mediante la tentación .
"Efraín es una paloma tonta sin

corazón. "Oseas 7:11. Por tanto, se puede decir de

muchos, no tienen corazón ; no tienen corazón para
resistir una tentación . Tan pronto como Satanás
viene con sus solicitudes, pero ceden. Son como un
cobarde, quien tan pronto como el ladrón se acerca,
entrega su bolsa. Es un cristiano valiente, que
blandía la espada del Espíritu contra Satanás, y
preferiría morir antes que ceder. Nunca se vio más la
valentía de los romanos que cuando fueron asaltados
por los cartagineses. Así, el espíritu heroico de un
santo nunca se ve más que en un campo de batalla,
cuando se pelea con el dragón rojo, y por el poder de
la fe hace huir al diablo. [La fuerza de la fe puede ser
sacudido, no destruido.] Tertuliano. Una razón por la
cual Dios permite que su pueblo sea tentado es que
su metal puede ser probado: su sinceridad, amor y
magnanimidad. Cuando se prueba la gracia, se honra
el evangelio.
(2) Dios permite que sus hijos sean tentados para
que no se sientan orgullosos. El orgullo se infiltró
una vez en los ángeles y en los apóstoles, cuando
discutían cuál de ellos sería el mayor; y en Pedro,
cuando dijo: "Aunque todos te desamparen , yo no lo
haré", como si hubiera tenido más gracia que todos
los apóstoles. El orgullo mantiene baja la gracia, que
no puede prosperar. A medida que la cabeza se
hincha, las otras partes del cuerpo se consumen. De
la misma manera, a medida que el orgullo
crece, la gracia se desvanece. Dios resiste el orgullo;
y, para mantener humildes a sus hijos, les permite a
veces caer en la tentación. "Para evitar que me
envanezca, se me dio una espina en la carne, un
mensajero de Satanás para atormentarme y evitar
que me enorgullezca". 2 Corintios 12: 7. Cuando
Pablo fue enaltecido por revelaciones, estaba en
peligro de ser enaltecido; luego vino el mensajero de
Satanás para abofetearlo: esa fue una dolorosa
tentación para humillarlo. La espina clavada en la
carne iba a hacer estallar la burbuja del orgullo.
Mejor es la tentación que me humilla , que el deber
que me enorgullece. En lugar de que un cristiano
deba estar orgulloso, Dios lo deja caer en las manos
del diablo por un tiempo , para que pueda curarse de
su creciente orgullo.
(3) Dios permite que su pueblo sea tentado para
que esté más capacitado para consolar a otros que
se encuentran en la misma angustia y hablar una
palabra a su debido tiempo a los que están cansados.
Pablo fue entrenado en la escuela de esgrima de la
tentación y pudo familiarizar a otros con las
artimañas y estratagemas de Satanás, 2 Cor. 2:11. Un
hombre que ha pasado por un lugar donde hay
arenas movedizas, es el más apto para guiar a otros a
través de ese peligroso

camino. De la misma manera, el que ha sido

golpeado por Satanás y ha sentido las garras del león
rugiente, es el hombre más apto para lidiar con uno
que es tentado.
(4) Dios permite que sus hijos sean tentados,
para hacerlos anhelar más el cielo, donde estarán
sin bala y libres del silbido de la serpiente
antigua. Satanás aún no está completamente en la
cárcel, pero como un prisionero que está bajo fianza,
irrita y molesta a los santos. ¡Él pone sus trampas y
lanza sus bolas de fuego! ¡Pero esto solo hace que los
hijos de Dios anhelen irse de aquí, y oren para que
tengan alas de paloma, para volar y descansar! Dios
permitió que Israel se enfadara con los egipcios,
para que anhelaran más estar en Canaán. El cielo es
el lugar de descanso, ¡no vuelan allí balas de
tentación! El águila que se eleva en el aire y se posa
sobre las copas de los árboles altos no se molesta con
el aguijón de las serpientes debajo. De la misma
manera, cuando los creyentes hayan subido al cielo
de arriba, ¡no serán picados con la serpiente
antigua! El diablo es expulsado del paraíso celestial.
El cielo se compara con una montaña sumamente
alta. Apocalipsis 21:10. Es tan alto que los dardos de
fuego de Satanás no pueden alcanzarlo. "Allí no hay
miedo a los enemigos, no hay trampas de los
demonios". Bernardo.
Las tentaciones aquí son hacer que los santos
anhelen hasta que la muerte suene como un retiro, y
los llame fuera del campo donde las balas de la
tentación vuelan con tanta fuerza, ¡que puedan
recibir una corona victoriosa!
¿Qué rocas de apoyo hay, o qué consuelo hay para
las almas tentadas?
(1) Que no es solo nuestro caso , sino que ha sido
el caso de los santos más eminentes de Dios. "No
os ha llevado ninguna tentación que no sea común al
hombre", sí, a los hombres más santos. 1 Corintios
10:13. Los corderos de Cristo, que han tenido la
marca de la elección sobre ellos, han sido puestos por
el mundo. Elías , que podía cerrar el cielo con la
oración, no podía cerrar su corazón a la tentación. 1
Reyes 19: 4. Job fue tentado a maldecir a Dios, Pedro
a negar a Cristo; y casi nunca un santo ha llegado al
cielo, ¡pero se ha encontrado con un león por el
camino! [Nadie escapa a la suerte que sufren todos
los santos.] No, Jesucristo mismo, aunque libre de
pecado, no estuvo libre de tentación. Leemos de su
bautismo; luego fue "llevado al desierto, para ser
tentado por el diablo". Mateo 4: 1. Tan pronto como
Cristo salió de

el agua del bautismo, ¡pero estaba en el fuego de la

tentación! Y si el diablo se posara sobre Cristo, ¡no es
de extrañar que lo hiciera a nosotros! No hubo
pecado en Cristo, no hubo pólvora para el fuego del
diablo. Para él, la tentación era como un guijarro en
un vaso de cristal, que se desliza; o como una chispa
de fuego en una columna de mármol, que no se
pegará, ¡y sin embargo, Satanás se atrevió a tentarlo!
Es un consuelo que quienes han sido nuestros
mejores hayan luchado con las tentaciones.
(2) Otra piedra de apoyo que puede consolar al
alma tentada es que las tentaciones (donde son
cargas ) evidencian la gracia. Satanás no tienta a
los hijos de Dios porque tengan pecado en ellos, sino
porque tienen gracia en ellos. Si no tuvieran gracia,
no los molestaría, porque donde él guarda posesión,
todo está en paz. Lucas 11:21. Sus tentaciones son
robar a los santos su gracia. Un ladrón no asaltará
una casa vacía , sino solo donde crea que hay un
tesoro. Un pirata no atacará un barco vacío , sino
solo uno que esté lleno de especias y joyas. De la
misma forma, el diablo ataca a la mayoría del pueblo
de Dios, porque cree que tienen un rico tesoro de
gracia en sus corazones y se lo robaría. ¿Por qué se
arrojan tantos garrotes a un árbol, sino porque tiene
mucha fruta? El diablo te lanza sus tentaciones,
porque ve que tienes mucho fruto de la gracia
creciendo sobre ti. Aunque ser tentado es un
problema, sin embargo, pensar por qué es tentado es
un consuelo .
(3) Otra piedra de apoyo o consuelo es que
Jesucristo está cerca y está a nuestro lado en
todas nuestras tentaciones. Aquí tome nota de dos
cosas:
[1] La SIMPATÍA de Cristo en nuestras tentaciones.
"No tenemos un sumo sacerdote que no pueda ser
tocado por el sentimiento de nuestras debilidades".
Hebreos 4:15. Jesucristo se compadece de nosotros;
es tan sensible a nuestras tentaciones como si él
mismo estuviera bajo ellas y las sintiera en su propia
alma. Como en la música, cuando se toca una cuerda,
todo el resto de sonido, de modo que nos sufrimos
sonido afectos de Cristo; no podemos ser tentados,
pero él es tocado. Si vieras a un lobo preocupar a tu
hijo, ¿no sentirías lástima por él? No puedes sentir
lástima por tu hijo, como Cristo compadece a sus
tentados. Tenía un sentimiento de compañerismo
cuando estuvo en la tierra, pero mucho más ahora
que está en la gloria.
Pero, ¿cómo puede ser compatible con la gloria de Cristo
ahora en el cielo, tener un

sentimiento de compañerismo con nuestros sufrimientos?

Este sentimiento de compañerismo en Cristo no
surge de una enfermedad o pasión, sino de la unión
mística entre él y sus miembros. "El que te toca, toca
la niña de sus ojos". Zacarías 2: 8. Cada lesión hecha
a un santo - toma como hecho a él en el cielo. Cada
tentación lo golpea y se conmueve al sentirlas.
[2] SOPORTE de Cristo en la tentación. El buen
samaritano primero tuvo compasión del
hombre herido , hubo simpatía. Luego vertió vino y
aceite; hubo apoyo (Lucas 10:34). De la misma
manera, cuando somos heridos por el dragón rojo,
Cristo primero es tocado con compasión y luego
vierte vino y aceite. "En cuanto él mismo ha sufrido
la tentación, puede sostener a los que son tentados".
Hebreos 2:18. La palabra griega para apoyo significa
correr rápidamente en ayuda. Tan feroz es
Satanás, tan frágil es el hombre, que Cristo corre
rápidamente en su ayuda. Cuando Pedro estaba listo
para hundirse, y dijo: "¡Señor, sálvame!" ¡Cristo
inmediatamente extendió su mano y lo agarró! Así
también, cuando un alma pobre es tentada y clama
al cielo pidiendo ayuda: "¡Señor, sálvame!" Cristo
entra con sus fuerzas auxiliares.
Nuestro Señor Jesús sabe lo que es ser tentado, por
eso está dispuesto a apoyar a los que son tentados.
Se ha observado que las madres sienten más lástima
por otras mujeres en sus embarazos que por
aquellas que son estériles. De la misma manera, el
Señor Jesús, que ha estado sufriendo dolores de
parto por tentaciones y sufrimientos, está más
dispuesto a compadecerse y apoyar a los que son
tentados.
Con respecto al apoyo de Cristo a los tentados,
considere dos cosas: su capacidad para apoyar y su
agilidad para apoyar. "Él es capaz de apoyar a los
que son tentados". Hebreos 2:18. Se le llama Miguel ,
que significa "que es como Dios". Apocalipsis 12: 7.
Aunque el alma tentada es débil, sin embargo , lucha
con un buen Capitán, ¡el León de la tribu de Judá!
Cuando un alma tentada lucha, Cristo viene al
campo como su apoyo. Nuestro Michael será
demasiado duro para el dragón. Cuando el diablo
asedia una tentación, Cristo puede apagarla cuando
le plazca; puede atravesar los cuarteles del enemigo
y derrotar a Satanás de tal manera que nunca más
podrá reunir sus fuerzas. Jesucristo está del lado del
santo, ¡y quién desearía una mejor defensa que la
omnipotencia!
Así como Cristo puede sostener a los tentados ,
ciertamente los apoyará. Su poder lo capacita, su
amor lo inclina, su fidelidad lo compromete , a
apoyar a su pueblo tentado. Es un gran consuelo
para el alma que está en tentación, tener un
Salvador que la apoye. Dios apoyó a Israel en el
desierto, cuando estaban entre serpientes ardientes.
La roca que envía agua, el maná , la columna de
nube, la serpiente de bronce, ¿ qué eran estos sino
tipos de Dios que apoyaba a las pobres almas en el
desierto de la tentación, picado por el diablo, esa
serpiente de fuego? Cuando se le preguntó a
Alejandro cómo podía dormir tan seguro, cuando
sus enemigos estaban a su alrededor, dijo: "Antípatro
está despierto, que siempre está alerta". Entonces,
cuando nuestro enemigo tentador está cerca de
nosotros, Jesucristo está despierto, quien es un muro
de fuego a nuestro alrededor.
Hay mucho apoyo para los tentados en los nombres
dados a Cristo. Así como los nombres de Satanás
pueden aterrorizar, los nombres de Cristo pueden
apoyar. El diablo se llama Apollyon , el devorador.
Apocalipsis 9:11. A Cristo se le llama Salvador . Al
diablo se le llama el "hombre fuerte". Mateo 12:29. A
Cristo se le llama El Gibbor, el Dios poderoso . Isaías
9: 6. Al diablo se le llama acusador . Apocalipsis
12:10. A Cristo se le llama Abogado . 1 Juan 2: 1. Al
diablo se le llama tentador . Mateo 4: 3. A Cristo se le
llama el Consolador . Lucas 2:25. Al diablo se le llama
príncipe de las tinieblas . A Cristo se le llama el Sol de
Justicia . Al diablo se le llama la serpiente vieja . A
Cristo se le llama la Serpiente de Bronce que sana.
Juan 3:14. Así, los mismos nombres de Cristo tienen
algún apoyo en ellos para las almas tentadas.
¿Cómo y de qué manera apoya Cristo a los que
son tentados?
1. Él los apoya enviando su Espíritu, cuya obra es
traer a su mente esas promesas , que son
fortalecedoras. "Él te recordará todas las cosas".
Juan 14:26. El Espíritu nos da promesas, como tantas
armas para luchar contra la serpiente antigua. "El
Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo tus
pies". Romanos 16:20. "Dios no permitirá que seas
tentado más de lo que puedas". 1 Corintios 10:13. "La
simiente de la mujer herirá la cabeza de la
serpiente". Génesis 3:15. A menudo estamos en
tiempos de tentación, como un hombre al que atacan
su casa y no puede encontrar sus armas, su espada y
su fusil; en cuyo caso Cristo envía su Espíritu y nos
trae a la memoria cosas que nos ayudan en nuestro
combate. El Espíritu de Cristo hace por los tentados,

lo que Aarón y Hur hicieron por Moisés, cuando

pusieron una piedra debajo de él y levantaron sus
manos, y entonces Israel prevaleció. El Espíritu pone
las promesas en manos de la fe, y luego el cristiano
vence al diablo, ese Amalek espiritual. La promesa es
para el alma, como el ancla del barco, que lo
mantiene firme en una tormenta.
2. Cristo apoya a los que son tentados
"intercediendo por ellos". Cuando el diablo está
tentando , Cristo está orando . La oración que Cristo
hizo por Pedro cuando fue tentado se extiende a
todos sus santos. "Padre", dice Cristo, "¡es mi hijo el
que es tentado! ¡Padre, ten piedad de él!" Lucas
22:32. Cuando un pobre alma yace sangrando por las
heridas que le ha hecho el diablo, Cristo presenta sus
heridas a su Padre y, en virtud de ellas, pide
misericordia. ¡Cuán poderosa debe ser su oración! Es
el favorito del cielo. Juan 11:42. Es Sumo Sacerdote e
Hijo. Si Dios pudo olvidar que Cristo era un
sacerdote , no puede olvidar que es un Hijo . Además,
Cristo no reza por nada más que lo que está de
acuerdo con la voluntad de su Padre. Si el hijo de un
rey sólo solicita lo que su padre tiene la intención de
conceder, su demanda no será denegada.
3. Cristo sostiene a su pueblo quitando al
tentador. Cuando las ovejas comienzan a rezagarse,
el pastor coloca al perro sobre ellas para traerlas de
regreso al redil, y luego llama al perro. Así, Dios
quita al tentador. Él "con la tentación abrirá un
camino de escape"; él hará una salida. 1 Corintios
10:13. Él reprenderá al tentador. "¡El Señor te
reprenda, oh Satanás!" Zacarías 3: 2. No es un apoyo
pequeño que Cristo apoye a los tentados. La madre
sostiene más al niño cuando está enfermo; ella se
sienta junto a su cama y le trae cordiales. De la
misma manera, cuando un alma es más agredida,
será más asistida por Jesús.
"Pero he tratado con crueldad a Cristo y he pecado
contra su amor. ¡Seguramente él no me apoyará! ¡Me
dejará morir en la batalla!"
Cristo es un Sumo Sacerdote misericordioso y te
apoyará a pesar de tus fallas. José fue un tipo de
Cristo; sus hermanos lo vendieron y el "hierro entró
en su alma"; sin embargo, después, cuando sus
hermanos estuvieron listos para morir de
hambre, se olvidó de sus heridas y los sostuvo con
dinero y grano. "Yo soy", dijo, "José, tu hermano".
Entonces Cristo dirá a un alma tentada: "Conozco tus
crueldades, cómo

has desconfiado de mi amor, contristado mi espíritu; pero yo

soy José , soy Jesús
- por eso te apoyaré cuando seas tentado. "
(4) Otra piedra de apoyo es que el hombre más
santo puede ser más tentado. Un barco rico puede
ser atacado violentamente por piratas. De la misma
manera, el que es rico en fe puede tener al diablo
sobre él con sus pedazos. Job, un santo eminente, fue
atacado ferozmente. Satanás golpeó su cuerpo para
tentarlo a cuestionar la providencia de Dios o pelear
con ella. Pablo fue un vaso elegido , pero ¡ cómo fue
este vaso golpeado por la tentación! 2 Corintios 12: 7.
¿No se dice: "El que es engendrado de Dios, que el
maligno no le toque"? 1 Juan 5:18.
No significa que el diablo no lo tiente , pero no lo
toca, es decir, con un toque mortal . "Hay un pecado
de muerte". 1 Juan 5:16. Ahora bien, Satanás con
todas sus tentaciones no convierte a un hijo de Dios
en pecado "pecado de muerte". Por eso no lo toca.
(5) Otra piedra de apoyo es que Satanás no puede
ir más lejos en tentar de lo que Dios le da
permiso. El poder del tentador es limitado. Toda
una legión de demonios no podía tocar a un solo
cerdo, hasta que Cristo les dio permiso. Satanás
habría zarandeado a Pedro hasta que él tamizó toda
su gracia, pero Cristo no se lo permitió. "He orado
por ti", etc. Cristo ata al diablo con una cadena.
Apocalipsis 20: 1. Si el poder de Satanás fuera de
acuerdo con su malicia, ni un alma se salvaría; pero
es un enemigo encadenado . Es un consuelo que
Satanás no pueda ir más allá del permiso de Dios. Si
un enemigo no podía tocar a un niño más allá de lo
que el padre había designado, no le haría ningún
daño al niño.
(6) Otra piedra de apoyo, es que no es tener una
tentación lo que hace culpable, sino dar su
consentimiento . No podemos impedir una
tentación. Si aborrecemos la tentación, es nuestra
carga, y no nuestro pecado . Leemos en la antigua ley
que si uno obligaba a una virgen y ella gritaba, se la
consideraba inocente. De la misma manera, si
Satanás por tentación comete una violación sobre un
cristiano, y él clama y no consiente, el Señor lo
cargará a cuenta del diablo. No es poner el cebo lo
que daña al pez, si el pez no muerde .
(7) Otra piedra de apoyo es que el hecho de que
seamos tentados no es señal de que Dios nos odie.
Un hijo de Dios a menudo piensa que Dios no lo ama
porque deja que el diablo lo persiga. Ésta es una
conclusión errónea. ¿No fue el mismo Cristo tentado
y, sin embargo, por una voz del cielo proclamó: "Este
es mi Hijo amado "? Mateo 3:17. La tentación de
Satanás, y el amor de Dios, pueden permanecer
juntos. El orfebre ama su oro en el fuego. Dios ama a
un santo, aunque le disparen con dardos de fuego.
(8) Otra piedra de apoyo es que la tentación de
Cristo fue para nuestro consuelo. Jesucristo debe
ser considerado como una persona pública, como
nuestro jefe y representante; y lo que hizo, lo hizo
por nosotros. Su oración fue por nosotros, su
sufrimiento fue por nosotros; y cuando fue tentado ,
y venció la tentación, venció por nosotros. La
conquista de Satanás por parte de Cristo fue para
mostrar que el pueblo elegido finalmente será
vencedor de Satanás. Cuando Cristo venció la
tentación de Satanás, no fue solo para darnos un
ejemplo de valentía, sino una seguridad de nuestra
conquista. Ya hemos vencido a Satanás en la cabeza
de nuestro pacto, y al fin lo venceremos
perfectamente.
(9) Otra piedra de apoyo es que la tentación de
los santos no superará su fuerza. El arpista no
estirará demasiado las cuerdas de su arpa, para que
no se rompan. "Fiel es Dios, que no permitirá que
seas tentado más de lo que puedas". 1 Corintios
10:13. Proporcionará nuestra fuerza al golpe. "Mi
gracia es suficiente para ti." 2 Corintios 12: 9. La
antorcha de la fe se mantendrá encendida, aunque
soplen todos los vientos de la tentación.
(10) Otra piedra de apoyo es que estas
tentaciones producirán mucho bien. Estimulan el
espíritu de oración en los santos. Rezan más y mejor.
La tentación es lo que excita la oración. Quizás antes,
los santos acudían a Dios como fríos pretendientes
en la oración: oraban como si no oraran. La
tentación es una medicina para la seguridad. Cuando
Pablo tenía un mensajero de Satanás para
abofetearlo, él era más ferviente en oración. "Por
esto rogué al Señor tres veces". 2 Corintios 12: 8. La
espina en su carne era un acicate en sus costados
para animarlo en la oración. El venado cuando se le
dispara con el dardo, corre más rápido hacia el agua.
De la misma manera, un alma que es disparada con
los dardos ardientes de la tentación, corre más
rápido hacia el trono de la gracia; y es sincero con
Dios, ya sea para quitar al tentador, o para apoyarlo
cuando

es tentado.
Dios hace que la tentación de pecar sea un medio
para prevenir el pecado. Cuanto más tentado es un
cristiano, más lucha contra la tentación. Cuanto más
agredida a una mujer casta, más aborrece el intento.
Cuanto más fuerte era la tentación de José, más
fuerte era su oposición. Cuanto más intenta el
enemigo asaltar un castillo, más repelido y
contraataca.
Las tentaciones de un hombre piadoso provocan el
aumento de la gracia. "Un cristiano tentado", dice
Lutero, "vale mil". Crece más en gracia. A medida
que los fuelles aumentan la llama, la tentación
aumenta la llama de la gracia.
Mediante estas tentaciones, Dios abre paso al
consuelo . Después de que Cristo fue tentado, los
ángeles vinieron y le ministraron. Mateo 4: 2.
Cuando Abraham estuvo en guerra, Melquisedec le
llevó pan y vino para revivir su espíritu. Génesis
14:18. Entonces, después de que los santos han
estado en guerra con Satanás, Dios envía su Espíritu
para consolarlos. Lutero dijo que las tentaciones
eran los abrazos de Cristo , porque entonces él se
manifiesta muy dulcemente al alma.
Para que pueda consolar más a los tentados,
permítanme hablar de dos casos particulares.
"¡Tengo horribles tentaciones de blasfemar!" dicen algunos.
¿No tentó el diablo a Cristo de esta manera: "Todas
estas cosas te daré, si postrado me adoras"? Mateo 4:
9. ¡Qué mayor blasfemia se puede imaginar que la de
que el Dios del cielo y de la tierra adore al diablo! Sin
embargo, Cristo fue tentado a esto. Si cuando se
inyectan pensamientos blasfemos, tiembla ante ellos
y suda frío , no son suyos, Satanás responderá por
ellos. Que sufra el que trama la traición.
"Pero mi caso es aún peor", dicen otros; "¡He sido
tentado a cometer tales pecados y he cedido! ¡El
tentador me ha vencido!"

Concedo que, mediante la retirada de la gracia de

Dios y la fuerza de la tentación, un hijo de Dios
puede ser vencido. David fue vencido por la
tentación en el caso de Betsabé y en la enumeración
del pueblo. Hay un principio de gracia en el corazón
fiel a Cristo; pero a veces puede ser vencido por la
corrupción, y luego el cristiano cede. Es triste así
ceder ante el tentador. Pero, sin embargo, que
ningún hijo de Dios se desanime del todo y diga que
no hay esperanza. Déjame verter un poco de
bálsamo de Galaad en esta alma herida.
(1) Aunque un cristiano pueda caer por la
tentación, la simiente de Dios está en él. "Su
simiente permanece en él". 1 Juan 3: 9. [La gracia
puede ser sacudida, pero no destruida]. Agustín. Un
hombre puede resultar herido por una caída, pero
hay vida en él. Un cristiano frustrado por Satanás
puede ser como el hombre que va a Jericó, que cayó
en manos de los ladrones y quedó "herido y medio
muerto"; pero todavía hay un principio vital de
gracia; su semilla permanece en él. Lucas 10:30.
(2) Aunque un hijo de Dios pueda ser vencido en
una escaramuza, pero no en la guerra . Como un
ejército puede ser derrotado en una
escaramuza, pero vencer al fin. Aunque Satanás
pueda frustrar a un hijo de Dios en una escaramuza
por una tentación, el creyente vencerá al fin. Un
santo puede ser frustrado, pero no conquistado .
Puede perder terreno y no perder la victoria .
(3) Dios no juzga a sus hijos por una sola
acción, sino por el marco del corazón. Como no
juzga a un impío por una buena acción, tampoco
Dios juzga a un santo por una mala acción. Una
persona santa puede ser vencida por una tentación;
pero Dios no lo mide por eso. ¿Quién mide la leche
cuando hierve y hierve? Dios no toma la medida de
un santo cuando el diablo lo ha hervido en una
pasión, pero lo juzga por el pulso y el temperamento
de su corazón. El cristiano temería a Dios; y cuando
falla, llora. Dios mira hacia dónde se encuentra el
sesgo de su corazón; si eso se opone al pecado, Dios
perdonará.
(4) Dios hará que la caída de un santo por
tentación se convierta en una ventaja espiritual.
Puede dejar caer a una persona regenerada por la
tentación, para hacerla más vigilante. Quizás caminó
libremente y fue atraído al pecado; pero en el futuro
se volverá más cuidadoso y cauteloso al caminar. El
cristiano frustrado es un cristiano vigilante . Él

¡Tendrá cuidado de no meterse más en la cadena del

león ! Será tímido y temeroso de las ocasiones del
pecado. No saldrá al extranjero sin su armadura
espiritual, y se ceñirá su armadura con la oración.
Cuando una bestia salvaje pasa por encima del seto y
daña el maíz, el granjero fortalecerá su cerca. De la
misma manera, cuando el diablo traspase la cerca
por la tentación y frustra a un cristiano, él se
asegurará de reparar su cerca y estará más alerta
contra la tentación después.
Dios a veces permite que sus hijos sean frustrados
por la tentación, para que puedan ver su
dependencia continua de Dios y puedan acudir a él
en busca de fuerzas. No solo necesitamos la gracia
habitual para resistir la tentación, sino también la
gracia auxiliar; ya que el bote no solo necesita los
remos, sino también el viento, para llevarlo contra
una fuerte marea. Dios permite que sus hijos caigan
a veces en la tentación, para que, al ver su propia
debilidad, descansen más en Cristo y en la gracia
gratuita. Cánticos 8: 5.
Al permitir que sus hijos sean frustrados por una
tentación, Dios los coloca más en gracia. Obtienen
fuerza por sus caídas. Los poetas fingen que Anteo el
gigante, luchando con Hércules, cobra fuerza por
cada caída al suelo. Así, un santo, cuando se ve
frustrado en su lucha con Satanás, obtiene más
fuerza espiritual. Pedro nunca tuvo tanta fuerza de
fe como después de ser frustrado en el salón del
sumo sacerdote. ¡Cómo se enardeció de celo y se
armó de valor! El que antes se hacía el cobarde ante
una doncella, ahora se atreve a confesar
abiertamente a Cristo ante los gobernantes y los
concilios. Hechos 2:14. A medida que la sacudida del
árbol lo estabiliza más, Dios permite que sus hijos
sean sacudidos por el viento de la tentación, para
que luego estén más asentados en la gracia. Por
tanto, los cristianos a quienes Dios ha permitido que
sean frustrados por la tentación, no echen el ancla ni
cedan a pensamientos desesperados.
¿No puede hacer que los cristianos se descuiden si
caen en la tentación o no, si Dios puede hacer que la
tentación sea ventajosa para ellos?
Debemos distinguir entre ser frustrados por
debilidad y frustrados por obstinación . Si un soldado
pelea, pero es frustrado por falta de fuerza, el
general del ejército se compadecerá de él y vendará
sus heridas; pero si es frustrado deliberadamente y
se hace el traidor, no debe esperar ningún favor. De
la misma manera, si un cristiano pelea con
Satanás, pero se frustra por falta de fuerza, ya que

estaba con Pedro, Dios se compadecerá de él y le

hará bien al ser frustrado. Pero si él es frustrado
deliberadamente, y se ejecuta en la tentación, como
lo fue con Judas, Dios le mostrará ningún favor, pero
se ejecutará la ley marcial sobre él!
Los usos permanecen.
Uso 1. ¡Vea en qué PELIGRO continuo estamos!
Satanás es un estratega exquisito, ¡tiende una
emboscada para atrapar! Él es el tentador, ¡es su
deleite hacer pecar a los santos! Es sutil al tentar,
tiene métodos y herramientas para engañar.
(1) Él trae a un santo al pecado, haciéndole
confiar en sus gracias. Le hace creer que tiene tal
reserva de gracia que lo protegerá contra todas las
tentaciones. Así engañó a Pedro, le hizo confiar en su
gracia. Peter pensó que tenía tal cable de fe y
abordajes tan fuertes, que aunque los vientos de la
tentación soplaban con tanta fuerza, podía capear la
tormenta. "Aunque todos te desamparen , yo no lo
haré"; como si tuviera más gracia que todos los
apóstoles. Así fue llevado a la tentación y cayó en la
batalla. Los hombres pueden convertir su gracia en
un ídolo. Pero su gracia no es suficiente sin
auxiliares. El bote no solo necesita
remos, sino también una ráfaga de viento para
llevarlo contra la marea. De la misma manera, no
solo necesitamos nuestra gracia, sino también el
vendaval del Espíritu para llevarnos contra una
fuerte tentación.
(2) Satanás tienta a pecar con los cebos y los
encantos del mundo. "La ganancia de dinero es la
ruina del alma". Uno de los propios apóstoles de
Cristo fue atrapado con un cebo de plata . Aquellos a
quienes el diablo no puede corromper con el vicio,
los corrompe con dinero. "Todas estas cosas te daré",
fue su última tentación. Mateo 4: 9. Acán fue
engañado por una cuña de oro. Sylvester II vendió
su alma al diablo por un papa.
(3) Satanás tienta a pecar, bajo una máscara y
muestra de bien; sus tentaciones parecen ser
movimientos de gracia.
[1] Tenta a los hombres a cumplir los deberes de
la religión. Tal vez le parezca extraño que Satanás
tiente al deber; pero es asi. Tenta a los hombres al
deber, con fines egoístas o siniestros. Así tentó a los
fariseos a orar y dar limosna, para que los hombres
los vieran. Mateo 6: 5. La oración es un deber, pero
orar por vanagloria convierte la oración en pecado.
Tienta al deber cuando no es la temporada. "Mi
ofrenda y mi pan para mis sacrificios me ofreceréis a
su debido tiempo". Entumecimiento 28: 2. Satanás
tienta al deber cuando está fuera de tiempo; tenta a
leer la Palabra en casa, cuando deberíamos estar
escuchando la Palabra. Tenta a un deber, para que
pueda

obstaculizar a otro. Tienta a algunos al deber, para

que sea un manto para el pecado. Él los tienta a que
sean frecuentes en el deber, para que puedan pecar
y ser menos sospechoso. Tentó a los fariseos a hacer
largas oraciones para que, bajo este pretexto,
pudieran devorar las casas de las viudas. Mateo
23:14. ¿Quién sospecharía de él de pesos falsos , que
tan a menudo tiene una Biblia en la mano?
[2] Él tienta a los hombres a pecar como muestra
de amor a Cristo. Puede pensar que esto es
extraño, pero hay algo de verdad en ello. Muchos
corazones buenos pueden pensar que lo que hacen
es por amor a Cristo, y mientras tanto pueden estar
bajo tentación. Cuando Cristo le dijo a Pedro que
debía sufrir en Jerusalén, Pedro lo tomó y lo
reprendió. "¡Que esté lejos de ti, Señor!" como si
hubiera dicho: "Señor, no has merecido una muerte
tan vergonzosa, ¡y esta no será tuya!" Mateo 16:22.
Pedro hizo esto, según pensaba, por amor a
Cristo, pero estaba bajo tentación. ¿Qué habría sido
de nosotros si Cristo hubiera escuchado a Pedro y no
hubiera sufrido? Así que cuando Cristo lavó los pies
de sus discípulos, Pedro fue tan amable que dijo:
"¡No me lavarás los pies jamás!" Juan 13: 8. Esto lo
hizo, según pensaba, por amor y respeto a Cristo.
Pensaba que Cristo era demasiado bueno para
lavarle los pies y, por tanto, lo habría desanimado
, pero era una tentación; el diablo puso a Pedro
sobre esta pecaminosa modestia; golpeó la salvación
de Pedro, de tal manera que Cristo dijo: "Si no te
lavo, no tienes parte conmigo". Entonces, cuando los
samaritanos no quisieron recibir a Cristo, los
discípulos Santiago y Juan dijeron: "Señor, ¿quieres
que mandemos que descienda fuego del cielo y los
consuma?" Lucas 9:54. Hicieron esto, como
pensaban, por amor a Cristo; deseaban que el fuego
consumiera a sus enemigos, pero estaban bajo
tentación; no era celo, sino el fuego salvaje de su
propia pasión.
(4) Satanás tienta al pecado al que el corazón de
un hombre es naturalmente más inclinado. No
tentará a un hombre civilizado a cometer un pecado
grave, que es aborrecible a la luz de la naturaleza.
Satanás nunca pone un plato delante de los hombres
que no aman. Tentará a un hombre civilizado a
enorgullecerse y a confiar en su propia justicia, y a
convertir su cortesía en un salvador. Mientras la
araña tejía una red con sus propias entrañas, el
hombre civil tejía una red de salvación con su propia
justicia.
Vean, entonces, el peligro que corremos , ¡cuando
Satanás está continuamente emboscado con sus
tentaciones!

¡Vea la incapacidad del hombre de sí mismo para

resistir una tentación! Si pudiera resistir la tentación
por sí mismo, la oración sería innecesaria: "No nos
metas en tentación". Ningún hombre tiene poder por
sí mismo para resistir la tentación, no más de lo que
Dios le da fuerza. "Oh Señor, yo sé que el camino del
hombre no es en sí mismo". Jer 10:23. Si Pedro ,
quien tenía la verdadera gracia, y Adán , quien tenía
la gracia perfecta , no pudieron resistir la tentación,
mucho menos nadie puede resistir el poder de la
naturaleza. Esto refuta la doctrina del libre albedrío.
¿Qué libertad de voluntad tiene el hombre, cuando
no puede resistir la más mínima tentación?
Aquí hay motivo de humillación , que hay en
nosotros tal aptitud y propensión a ceder a la
tentación. Estamos tan dispuestos a tragar una
tentación, como los peces a tragar el anzuelo. Si el
diablo tienta al orgullo, la lujuria, la envidia, la
venganza, ¡cuán ansiosamente corremos hacia las
trampas de Satanás! Como una mujer que tiene un
pretendiente y no necesita mucho cortejo, pero da su
consentimiento de buena gana , Satanás viene
cortejando por la tentación, y pronto cedemos. El
diablo enciende el fuego y nosotros somos como
yesca seca, que se prende fuego a la primera chispa.
Llama por la tentación, y es triste pensar cuán
pronto le abrimos la puerta, ¡que es como si se le
abriera la puerta a un ladrón!
Vea, por tanto, que la vida de un cristiano no es una
vida fácil. ¡Es una guerra! Tiene un Goliat en el
campo con el que encontrarse, uno que está armado
con poder y sutileza, ¡y tiene sus astucias y dardos!
Un cristiano debe estar vigilando y luchando
continuamente. ¡Satanás diseña nuestra destrucción!
"Buscando a quien devorar ". 1 Pedro 5: 8. Por tanto,
siempre necesitábamos tener nuestras armas en la
mano. ¡Qué pocos piensan que su vida es una
guerra! Aunque tienen un enemigo en el campo,
siempre colocando trampas o disparando dardos , no
son centinelas ni preparan su artillería espiritual; se
ponen sus joyas, pero no sus armaduras . "Toman
pandero y arpa, y se regocijan con el sonido del
órgano", como si estuvieran más en un festival que
en una batalla. Job 21:12. Muchos están dormidos en
la pereza, cuando deberían estar luchando contra
Satanás, ¡y no es de extrañar que el diablo les
dispare cuando los encuentra dormidos!
Uso 2. Son reprendidos los que oran: "No nos
metas en tentación" y, sin embargo, caen por sí
mismos en la tentación. Tales son los que van a
obras de teatro y teatros, y cazan en busca de carne
extraña. Algunos van a un ritmo más lento al
infierno, pero los que caen en la tentación van

galopando al infierno! Tenemos muchos de estos en

esta época de libertinaje que, como si pensaran que
no pueden pecar lo suficientemente rápido , ¡tientan
al diablo para que los tiente!
Uso 3. Trabajemos para que no seamos vencidos
por la tentación. ¿Qué medios deben utilizarse
para que las tentaciones de Satanás no prevalezcan
contra nosotros?
(1) Evite la soledad. No es prudente, al luchar con
un enemigo, darle la ventaja del terreno. Le damos a
Satanás la ventaja de la tierra, cuando estamos solos.
Eve fue frustrada por la ausencia de su esposo. Una
virgen no está tan pronto en compañía. "Dos son
mejor que uno." Eclesiastés 4: 9. Entra en la
comunión de los santos, que es un buen remedio
contra la tentación.
(2) Si no quiere dejarse vencer por la
tentación, tenga cuidado con el predominio de la
melancolía , que es un humor negro asentado
principalmente en el cerebro. La melancolía perturba
la razón y la expone a la tentación. Se llama
melancolía, el baño del diablo ; se baña con deleite
en tal persona. La melancolía viste la mente de
marta; la llena de aprensiones tan lúgubres que a
menudo terminan en auto-asesinato.
(3) Si no quieres ser vencido por la
tentación, estudia la sobriedad. "Sed sobrios , y
velad; porque vuestro adversario el diablo, como
león rugiente, anda alrededor buscando a quien
devorar". 1 Pedro 5: 8. La sobriedad consiste en el uso
moderado de las cosas terrenales. Un deseo
inmoderado de estas cosas a menudo lleva a los
hombres a la trampa del diablo. "Los que quieren
hacerse ricos caen en una trampa". 1 Timoteo 6: 9. El
que ama desmesuradamente las riquezas, las
comprará injustamente. Acab nadaría hasta el
viñedo de Nabot en sangre. El que está ebrio del
amor del mundo, nunca está libre de tentación.
Derribará su alma para edificar una propiedad. [Oh
maldita hambre de oro, ¿a qué no llevas el corazón
de los hombres?] Virgilio. Sean sobrios, tengan
cuidado de embriagarse con el amor del mundo, no
sea que caigan en la tentación.
(4) Si no quiere ser vencido por la tentación, esté
siempre en guardia, esté atento a las artimañas y
sutilezas de Satanás. "Sed sobrios y velad , porque
vuestro adversario el diablo, como un rugido

león anda alrededor buscando a quien devorar ". 1

Pedro 5: 8. Un cristiano debe vigilar y proteger; debe
ver dónde trabaja Satanás para abrir una brecha,
ver qué gracia ataca más, o qué pecado comete más
tienta a. "yo digo todo-Watch!" Marcos 13:37 Ver
todos los sentidos, el ojo, el oído, el tacto;.. porque
Satanás puede colarse por estas Oh, cuán necesario
es el reloj espiritual Shall! Satanás estar vigilante y
que produce somnolencia? ¿se mira a devorar a
nosotros y no deberá observar que para salvar a
nosotros mismos? veamos lo que el pecado nuestro
corazón lo más naturalmente se inclina a-y reloj en
contra de ella.
(5) Si no quiere ser vencido por la
tentación, tenga cuidado con la ociosidad. Satanás
siembra la mayor parte de su semilla en barbecho .
Jerónimo le aconsejó a su amigo estar siempre
ocupado, que si venía el diablo, lo encontraría
trabajando en la viña. La ociosidad tienta al diablo a
tentarnos. El pájaro que se queda quieto recibe un
disparo. El que carece de empleo, nunca carece de
tentación. Cuando un hombre no tiene nada que
hacer, Satanás traerá molienda al molino y
encontrará trabajo suficiente.
(6) Si no quiere ser vencido por la tentación, dé a
conocer su caso a algún amigo piadoso. Esconder
una serpiente en el pecho no es la manera de estar
seguro; Cuando la serpiente antigua se haya metido
en tu seno por tentación, no la escondas allí
siguiendo su consejo. Si una chispa ha entrado en la
paja, no es prudente ocultarla, puede incendiar la
casa. No ocultes la tentación. Guardar secretos es
para amigos familiares; no sea tan buen amigo de
Satanás como para guardar sus secretos. Revele sus
tentaciones, que es la forma de procurar las
oraciones y los consejos de los demás; que todos
vean que no eres fiel al partido de Satanás, porque
cuentas todos sus complots y revelas sus traiciones.
Además, contarle su caso a algún cristiano
experimentado aliviará el alma y la tentación no
inflamará tanto.
(7) Si no quiere ser vencido por la tentación, use
la Palabra. A esto el apóstol lo llama la "espada del
Espíritu", un arma adecuada con la que luchar
contra el tentador. Efesios 6:17. Esta "espada del
Espíritu" es una espada de dos filos : hiere la lujuria
carnal y hiere a Satanás. El que transita por un
camino donde se roba, seguramente cabalgará con
su espada; estamos viajando al cielo, y en este
camino hay un ladrón que siempre nos acosa en
cada lugar adonde vamos. Se encuentra con nosotros
en la iglesia, ¡ no se pierde un sermón! Allí nos
estará tentando; a veces para

somnolencia; cuando alguien duerme en el sermón,

el diablo lo mece. A veces tienta distrayendo la
mente al oír. A veces tienta cuestionando la verdad
de lo que se escucha. En la tienda tienta a usar la
connivencia y el engaño. "La balanza del engaño
está en su mano". Os 12: 7. Así nos encontramos con
el tentador en todas partes; por lo tanto, estando este
ladrón en el camino, tuvimos que cabalgar con una
espada; debemos tener la "espada del Espíritu" con
nosotros.
Debemos tener habilidad para usar esta espada y
tener un corazón para sacarla, y hará huir al diablo.
Así, cuando Satanás tentó a nuestro bendito Salvador
a desconfiar y blasfemar, usó un arma de las
Escrituras: "¡Escrito está!" ¡Tres veces hirió a la vieja
serpiente con esta espada! Cristo, con su poder y
autoridad, podría haber reprendido al príncipe del
aire, como lo hizo con los vientos; pero le tapó la
boca al diablo con la Escritura: "Escrito está". No son
nuestros votos y resoluciones los que lo harán, no es
el agua bendita o los encantos de los papistas los que
alejarán al diablo. Llevemos la Palabra de Dios
contra él; este es un argumento al que no puede
responder.
Era un dicho de Lutero: "He tenido grandes
problemas mentales; pero tan pronto como me
aferré a cualquier lugar de la Escritura y me quedé
en él como en mi ancla principal, mis tentaciones se
desvanecieron inmediatamente". No hay tentación,
pero tenemos Escrituras adecuadas para
responderla. Si Satanás tienta a la inmoralidad,
respóndele: "Escrito está, a los fornicarios y
adúlteros los juzgará Dios". Si siente la tentación del
miedo carnal, diga: "Está escrito: No temas a los que
matan el cuerpo, y después de eso, no tienen más
que hacer". No hay mejor manera de refutar la
tentación que las Escrituras; las flechas que
disparamos contra Satanás deben sacarse de este
carcaj. Muchas personas carecen de esta espada del
Espíritu, no tienen Biblia; otros rara vez lo utilizan
, pero dejan que se oxide; rara vez lo miran; por lo
tanto, no es de extrañar que sean vencidos por las
tentaciones. El que es experto en la Palabra es como
quien tiene un yeso listo para colocar sobre la herida
tan pronto como se hace, y así se evita el peligro. O
estudia la Escritura, y serás demasiado duro para el
diablo; no puede oponerse a esto.
(8) Si no queremos ser vencidos por la tentación,
cuidemos nuestros propios corazones para que
no nos atraigan al pecado. El apóstol dice: "El
hombre es tentado cuando es atraído y seducido por
su propia concupiscencia". Santiago 1:14. [Todo el
mundo es un Satanás para sí mismo.] Bernard.

Todo hombre tiene un tentador en su propio seno.

Un traidor dentro del castillo es peligroso. El corazón
puede traer tentación, aunque Satanás no la parte en
el mundo; si Satanás estuviera muerto y enterrado,
el corazón podría llevarnos al mal. Así como la base
de todas las enfermedades está en los humores del
cuerpo, la semilla de todo pecado está en la
concupiscencia original. ¡Miren sus corazones!
(9) Si no quiere ser vencido por la
tentación, huya de las "ocasiones del pecado". Las
ocasiones de pecado tienen una gran fuerza para
despertar la lujuria interior. El que quiera
mantenerse libre de infección, no se acercará a una
casa infectada. Solo así, si quiere estar sobrio, evite
la compañía de los borrachos. Cuando José fue
seducido por su amante, evitó la ocasión; el texto
dice: "Se negó a estar con ella". Génesis 39:10. Si no
quiere ser atrapado por el papado, no escuche la
misa. El nazareo, a quien se le prohibió el vino , no
podía comer uvas , lo que podría ocasionar
intemperancia. ¡No te acerques a los límites de la
tentación! Supongamos que alguien tuviera un
cuerpo hecho de pólvora, no se acercaría a la más
mínima chispa de fuego, no fuera a ser explotado.
Muchos oran: "No nos dejes caer en la tentación" y,
sin embargo, caen en la tentación.
(10) Si no quiere ser vencido por la tentación, use
la fe. "Sobre todo, tomando el escudo de la fe".
Efesios 6:19. La fe protege de los dardos de fuego de
Satanás para que no nos lastimen. "A los que
resistan, firmes en la fe". 1 Pedro 5: 9. Los marineros
en una tormenta huyen a su ancla; huye a tu ancla
de la fe. La fe trae a Cristo con ellos al campo, y
entonces el diablo no puede hacernos daño. El
polluelo está a salvo de las aves de rapiña, bajo las
alas de la gallina; y estamos seguros del tentador,
bajo las alas del Señor Jesús. Aunque otras gracias
son útiles para resistir los impulsos de Satanás, la fe
es la gracia conquistadora. Se apodera de los
méritos, el valor y la virtud de Cristo, por lo que el
cristiano se vuelve demasiado duro para el diablo.
Así como las estrellas se desvanecen cuando aparece
el sol , Satanás desaparece cuando aparece la fe.
(11) Si no quieres ser vencido por la tentación,
ora mucho. Como caminar en lugares infecciosos,
llevar consigo antídotos: la oración es el mejor
antídoto contra la tentación. Cuando el apóstol hubo
exhortado a "vestirse con toda la armadura de Dios",
agrega, "orando con toda oración". Efesios 6:11, 18.
Sin oración, todas las demás armas servirán de poco.

bueno. Cristo prescribe este remedio: "Velad y orad,

no sea que entréis en tentación". Marcos 14:38. Un
cristiano obtiene fuerzas del cielo mediante la
oración. Clamemos a Dios por ayuda contra el
tentador, como Sansón clamó al cielo pidiendo
ayuda. "Señor Soberano, acuérdate de mí otra vez.
Oh Dios, por favor fortaléceme una vez más para
que pueda pagar a los filisteos por la pérdida de mis
ojos". Jueces 16:28. "Y el templo se derrumbó sobre
los líderes filisteos y todo el pueblo"; ver 30.
La oración es flagelo Diaboli -it látigos y atormenta al
diablo. El apóstol nos invita a "orar sin cesar". 1
Tesalonicenses 5:17. Lutero le aconsejó a una dama
que, cuando llegara la tentación, se arrodillara en
oración. La oración mitiga la fuerza de la tentación.
La oración es el mejor hechizo que podemos usar
contra el diablo. La tentación puede herir nuestro
calcañar, pero con la oración herimos la cabeza de la
serpiente. Cuando Pablo tuvo un mensajero de
Satanás para abofetearlo; ¿Qué remedio usó? Se
dedicó a la oración. "Por esto rogué al Señor tres
veces, que se apartara de mí". 2 Corintios 12: 8.
Cuando Satanás ataca con furia, oremos con fervor.
(12) Si no quiere ser vencido por la tentación, sea
humilde ante sus propios ojos. Son los que están
más cerca de caer, los que presumen de sus propias
fuerzas. Cuando los hombres crecen en
la admiración de sí mismos, Dios los deja caer para
pinchar su burbuja de orgullo. ¡Oh, sé humilde! Es
probable que aguanten mejor en la tentación los que
tienen más gracia, y Dios da más gracia a los
humildes. Santiago 4: 6. ¡Cuidado con el orgullo! Un
absceso no es más peligroso en el cuerpo que el
orgullo en el alma. Las palomas, dice Plinio, se
enorgullecen de sus plumas y de volar alto, hasta
que por fin vuelan tan alto que se convierten en
presa del halcón. Del mismo modo, cuando los
hombres vuelan alto en orgullo y confianza en sí
mismos, se convierten en presa del tentador.
(13) Si no quiere ser frustrado por la tentación,
no entre en disputa con Satanás. Cuando Eva
comenzó a discutir el caso con la serpiente, la
serpiente era demasiado dura para ella. El diablo,
según su lógica, la disputó fuera del paraíso. Satanás
puede picar el pecado, hacerlo pequeño, adornarlo y
hacerlo parecer una virtud. Es demasiado sutil para
que podamos ganar una discusión con él. No
discutas , ¡pero lucha! Si entras en un parlamento
con él, le das la mitad de la victoria.
(14) Si no queremos ser vencidos por Satanás, debemos
ponernos

Fortaleza cristiana. Debemos esperar un enemigo

que esté disparando dardos o poniendo trampas; por
tanto, estemos armados de valor. "Actúa con valentía
, y que el Señor esté con los que hacen el bien". 2
Crónicas 19:11. El cobarde nunca ganó una victoria.
Para animarnos en nuestro combate con Satanás,
pensemos,
[1] Tenemos un buen Capitán que marcha antes que
nosotros. Cristo es llamado el Capitán de nuestra
salvación. Hebreos 2:10.
[2] Tenemos una buena armadura. La gracia es una
armadura hecha por Dios. Efesios 6:11.
[3] Satanás ya está derrotado. Cristo le ha dado su
herida de muerte en la cruz. Col 2:15.
[4] Satanás es un enemigo encadenado, ¡su poder es
limitado! no puede forzar la voluntad. Eva se quejó
de que la serpiente la engañó , no la restringió.
Génesis 3:13. Satanás tiene astucia para persuadir,
no poder para obligar.
[5] Enemigo maldito, y la maldición de Dios lo
destruirá. Por tanto, vístete de santa valentía y
magnanimidad. No temas a Satanás. Mayor es el que
está en ti, que el que está contra ti.
(15) Si no queremos ser vencidos por la
tentación, pidamos la ayuda de otros. Si una casa
se incendia, ¿no pediría ayuda? Satanás tienta para
robarte el alma; familiariza a algunos amigos con tu
caso y ruega por sus consejos y oraciones. ¿Quién
sabe si Satanás puede ser expulsado por las
oraciones conjuntas de otros? En caso de tentación,
¡cuán útil es la comunión de los santos!
(16) Si no queremos ser vencidos por la
tentación, utilicemos todos los estímulos que
podamos. Si Satanás es un león rugiente, Cristo es el
león de la tribu de Judá. Si Satanás tienta, Cristo ora.
Si Satanás es una serpiente para aguzar, Cristo es
una serpiente de bronce para sanar. Si el conflicto es
duro, mire a la corona. Santiago 1:12. Mientras
luchamos, Cristo nos apoyará. Cuando vencemos, él
nos coronará. ¿Qué hace que el soldado soporte una
pelea sangrienta, sino la esperanza de una
recompensa de oro? Piense que pronto Dios nos
llamará fuera del campo donde las balas de la
tentación vuelan tan rápido, y pondrá una guirnalda
de gloria sobre nuestra cabeza.

¡Cómo se alterará entonces el caso! En lugar de

luchar, ¡cantando! En lugar de un casco, ¡una
diadema! En lugar de una espada, ¡una palmera de la
victoria! En lugar de armadura, ¡túnicas blancas ! En
lugar de las escaramuzas de Satanás, ¡ los besos y
abrazos de un Salvador! Estas recompensas eternas
deben evitar que cedamos a la tentación. ¡Quién,
para satisfacer una lujuria, perdería una corona!
Uso 4. Que los que son tentados sean prudentes en
hacer buen uso de sus tentaciones. Como debemos
trabajar para mejorar nuestras aflicciones , para
mejorar nuestras tentaciones . Deberíamos sacar
algo bueno de la tentación, como Sansón sacó miel
del león.
¿De qué sirve la tentación? ¿Puede haber algo bueno
en ser atacado por un enemigo? ¿Puede ser bueno
que nos disparen dardos de fuego?
¡Si! Dios puede hacer que su pueblo se beneficie
mucho con sus tentaciones. De esta manera, un
cristiano ve esa corrupción en su corazón, que
nunca antes había visto. El agua en un vaso parece
pura, pero si lo prendes al fuego, la espuma hierve.
De la misma manera, en la tentación, un cristiano ve
hervir la escoria del pecado, que él pensó que no
había estado en su corazón. De esta manera, un
cristiano ve más las artimañas de Satanás y está más
capacitado para resistirlas. Paul había estado en la
escuela de la tentación de la esgrima y se volvió
experto en descubrir las estratagemas de Satanás.
"No ignoramos sus dispositivos". 2 Corintios 2:11. De
este modo, el cristiano se vuelve más humilde. Dios
preferiría dejar que sus hijos cayeran en las manos
del diablo, que estar orgullosos. La tentación quita
las plumas del orgullo. "Para evitar que me
envanezca, se me dio una espina en la carne, un
mensajero de Satanás para atormentarme y evitar
que me enorgullezca". 2 Corintios 12: 7. ¡Mejor es esa
tentación que humilla, que ese deber que nos
enorgullece! Por lo tanto, un cristiano puede obtener
mucho bien por la tentación, lo que hizo que Lutero
dijera tres cosas para ser un buen cristiano: la
oración, la meditación y la tentación.
Uso 5. Algunos han sido objeto de fuertes
tentaciones y azotes de Satanás, pero Dios los ha
apoyado y les ha dado fuerza para vencer al
tentador.
(1) Que estén muy agradecidos con Dios. "Gracias
a Dios, que nos da la victoria". 1 Cor 15:57. Sea
mucho en alabanza. ¿Por qué fuimos nos
mantuvimos más de otros- de caer en el pecado?
¿Fue porque la tentación no fue así?

fuerte para nosotros? No, Satanás dispara sus dardos

con toda su fuerza. ¿Fue porque somos tan fuertes
en nosotros mismos? No, una caña tan rota nunca
podría haber vencido las tentaciones de Satanás.
¡Sepan que fue la gracia inmerecida la que hizo
retroceder al tentador y nos trajo trofeos de victoria!
¡Sé agradecido con Dios! Si hubieras sido vencido
por la tentación, podrías haber puesto puntos negros
en la faz de la religión y haber dado ocasión a los
enemigos de Dios para blasfemar. 2 Samuel 12:14. Si
hubieras sido vencido, podrías haber estado
enfermo de un "espíritu herido" y gritar, con David,
"huesos rotos". Después de que David cedió a la
tentación, pasó tres cuartos de año con horror
mental; y algunos piensan que nunca recuperó toda
su alegría hasta el día de su muerte. ¡Oh, por tanto,
qué motivo tienen para pararse sobre el monte
Gerizim bendiciendo a Dios, que, en un campo de
batalla, han vencido a Satanás y han sido más que
vencedores! Diga como el salmista: "¡Bendito sea el
Señor, que no dejó que sus dientes nos destrozaran!"
Salmo 124: 6. ¡Bendito sea Dios, que no nos ha dado
por presa a Satanás, ese león rugiente!
(2) Ustedes que han sido tentados y salieron
victoriosos, sean llenos de simpatía . Lástima de
las almas tentadas; muestra tu piedad en tu
compasión. ¿Ves los dardos de Satanás clavados en
sus costados? Haz lo que puedas para sacarlos.
Comuníqueles sus experiencias; dígales cómo
rompió la trampa del diablo, y su Salvador fue su
libertador. El apóstol habla de restaurar a otros "con
espíritu de mansedumbre". Gálatas 6: 1. La palabra
griega para restaurar alude a los cirujanos, que
colocan huesos que no estaban articulados. De la
misma manera, cuando veamos a los que son
tentados, y Satanás, por así decirlo, ha descoyuntado
sus huesos, esfuércense por volver a colocarlos con
todo amor, mansedumbre y compasión. Una palabra
dicha a tiempo puede aliviar un alma que se
desmaya en la tentación; y puedes, como el buen
samaritano, echar aceite y vino en la herida. Lucas
10:34.
(3) Tú que has conquistado a Satanás, no estés
seguro carnalmente. No pienses que nunca más te
turbarás con el tentador. No es como los sirios, de
quienes se dice: "Las bandas de Siria no entraron
más en la tierra de Israel" 2 Reyes 6:23. Satanás es un
enemigo inquieto; si lo has rechazado, comenzará de
nuevo.
Cuando Satanás fue vencido por Cristo, se fue , pero
solo por un tiempo, como si tuviera la intención de
volver. Lucas 4:13. Cuando tenemos lo mejor de

Satanás, somos propensos a estar seguros, a dejar a

un lado nuestra armadura y dejar nuestra guardia;
que, cuando lo percibe, viene sobre nosotros con
una nueva tentación y nos hiere. Él trata con
nosotros como lo hizo David con los amalecitas,
quienes, cuando tomaron el botín y estuvieron
seguros, "estaban comiendo, bebiendo y bailando
con alegría por la gran cantidad de botín que habían
tomado". (1 Sam 30:16); luego "David y sus hombres
se precipitaron entre ellos y los mataron". Verso 17.
Por lo tanto, después de haber vencido al tentador,
debemos actuar como los marineros en
calma: arreglar nuestro abordaje, sin saber qué tan
pronto vendrá otra tormenta. Satanás puede
retirarse por un tiempo, para luego volverse más
ferozmente; puede irse un rato y traer consigo otros
siete espíritus. Lucas 11:26.
Por lo tanto, no estés carnalmente seguro, sino
párate sobre tu atalaya. Descanse con su armadura
puesta; siempre espere una pelea. Vigila todos los
días si vendrá el tentador. Ponte en una postura
guerrera. Cuando Satanás es expulsado del campo,
no se le saca del corazón a golpes; vendrá de nuevo.
Tenía pocas esperanzas de prevalecer contra Cristo.
Cristo le dio tres heridas mortales y lo hizo
retroceder; sin embargo, partió "sólo por una
temporada". Si el diablo no puede conquistarnos ,
sabe que puede molestarnos . Si no puede destruir a
nosotros, que seguramente molestar a nosotros. Si el
tentador no llega tan pronto como esperamos,
poniéndonos a la defensiva, tendremos la ventaja de
estar siempre preparados. "Ponte toda la armadura
de Dios para que puedas mantenerte firme contra
todas las estrategias y trucos del diablo". Efesios 6:11.
Para concluir todo: hagamos a menudo esta oración:
"No nos dejes caer en la tentación". Si Satanás nos
corteja con una tentación, no demos consentimiento.
En caso de que un cristiano haya cedido a la
tentación por debilidad, y no por un plan, no "eche
el ancla"; pero ten cuidado con la desesperación, que
es peor que la caída misma.
Cristiano, sumerge tu alma en las aguas del
arrepentimiento, y Dios será apaciguado. El
arrepentimiento le da al alma un vómito. Cristo amó a
Pedro después de haberlo negado, y le envió las
primeras noticias de su resurrección : "Ve y dile a los
discípulos ya Pedro ". Es un error pensar que un acto
de pecado puede destruir el hábito de la gracia. Es
un error para la misericordia de Dios y para el
consuelo del cristiano: llegar a la desesperada
conclusión de que después de una

ha caído por la tentación, su patrimonio es

irrecuperable. Por tanto, cristiano, si has caído con
Pedro, arrepiéntete con Pedro, y Dios estará listo
para sellar tu perdón.

II. La segunda rama de la sexta petición es:

"Líbranos del mal". Hay más en esta petición de lo
que se expresa. Lo que se expresa es: que seamos
guardados del mal. Lo que se pretende además
es que podamos progresar en la piedad. "Negando la
impiedad y las concupiscencias mundanas"; se libra
del mal; "debemos vivir con sobriedad, rectitud y
santidad"; hay progreso en la piedad. Tito 2:12.
[1] En general, cuando oramos, "Líbranos del
mal", oramos para ser librados del mal del
PECADO. No es que oremos para ser liberados
inmediatamente de la presencia y la morada del
pecado, porque eso no puede ser en esta vida, no
podemos sacudirnos esta víbora. Pero oramos para
que Dios nos libere cada vez más del poder y la
práctica, de los escandalosos actos de pecado que
arrojan una triste reflexión sobre el evangelio. El
pecado es el mal mortal contra el que oramos. ¿Con
qué lápiz podré dibujar el rostro deformado del
pecado? El diablo bautizaría al pecado con el
nombre de virtud. Es fácil colocar colores claros en
una cara negra. Me esforzaré por mostrarles lo vil
que es el pecado, y que hay una gran razón por la
que debemos orar: "Líbranos del mal".
El pecado, como dice el apóstol, es sumamente
pecaminoso . Romanos 7:13. El pecado es la
destilación misma del mal; se llama la "cosa
maldita". Josué 7:13. Que el pecado es el mal más
execrable, se manifiesta de varias formas:
(1) Mira el pecado en su origen .
(2) Considere el pecado en su naturaleza .
(3) Considere el pecado en el juicio y la opinión de los
piadosos .
(4) Mira el pecado en comparación .
(5) Considere el pecado en la forma de su curación .

(6) Considere el pecado en sus terribles efectos .

Cuando hayas visto todo esto, comprenderás cuán
espantoso es el pecado y qué gran razón tenemos
para orar: "Líbranos del mal".
(1) Considere el pecado en su ORIGEN. Obtiene su
pedigrí del infierno. Es del diablo. Juan 8:44. Llama
al diablo "padre". El pecado es el veneno que la
serpiente vieja ha escupido en nuestra naturaleza
virgen.
(2) Mira el pecado en su NATURALEZA , y es malo.
Vea con qué lo compara la Escritura. Tiene mala
fama. Se compara con el vómito de los perros (2
Pedro 2:22); a un paño menstrual (Isaías 30:22); que,
como dice Jerónimo, era lo más inmundo según la
ley; se compara con la plaga (1 Reyes 8:38); ya una
gangrena (2 Tim. 2:17). A las personas con estas
enfermedades, nos opondríamos a comer y beber.
El pecado es malo en su naturaleza, porque es
transgresión contra Dios. Es una violación de su ley
real. "El pecado es infracción de la ley". 1 Juan 3: 4.
Es alta traición contra el cielo. ¿Qué mayor daño se
le puede ofrecer a un príncipe que pisotear sus
edictos reales? "Echan tu ley a sus espaldas".
Nehemías 9:26. El pecado es una afrenta a Dios, ya
que es caminar en contra de él. Levítico 26:40. La
palabra hebrea para pecado significa rebelión. Vuela
en el rostro de Dios. "Extendió su mano contra Dios".
Job 15:25. No debemos levantar un pensamiento
contra Dios, mucho menos levantar una mano contra
él; pero el pecador hace ambas cosas. El pecado es
matar a Dios. El pecado no solo destronaría a
Dios, ¡sino que lo desanimaría! Si el pecado pudiera
evitarlo, ¡Dios ya no sería Dios!
El pecado es un acto de gran INGRATITUD hacia
Dios. Él alimenta al pecador, le protege de muchos
males; y, sin embargo, no sólo olvida sus
misericordias, sino que abusa de ellas. "Fui yo quien
le dio todo lo que tiene: el grano, el vino, el aceite de
oliva. ¡Incluso el oro y la plata que usó para adorar
al dios Baal fueron regalos míos!" Oseas 2: 8. Dios
puede decir: te di el ingenio, la salud, las riquezas
que empleaste contra mí. Un pecador hace una
flecha con las misericordias de Dios y le dispara. "¿Es
esta tu bondad para con tu amigo?" 2 Samuel 16:17.
¿Le dio Dios la vida al pecado? ¿Te dio un
salario para servir al diablo? ¡Oh, qué cosa tan
ingrata es el pecado! La ingratitud pierde piedad,
como el comerciante pierde sus bienes al no

pagando aduana.
El pecado es una tontería. "Necio, esta noche se te
pedirá el alma". Lucas 12:20. ¿No es una tontería
preferir una concupiscencia breve antes que una
herencia eterna? Un pecador prefiere los placeres
del pecado por un tiempo, antes que los placeres que
están a la diestra de Dios para siempre. ¿No es una
locura complacer a un enemigo? El pecado complace
a Satanás. Los pecados de los hombres dan un festín
al diablo. ¿No es una locura que un hombre sea
culpable de su propia destrucción, que se envenene
a sí mismo? Un pecador tiene algo que ver con su
propia muerte. "Esperan su propia sangre".
Proverbios 1:18. Ninguna criatura se suicidó
voluntariamente, excepto el hombre.
El pecado es una cosa CONTAMINANTE. No es sólo
una deserción, sino una contaminación; es como
herrumbre al oro, como mancha a la belleza. Se
llama "inmundicia de carne y espíritu". 2 Corintios 7:
1. Hace que el alma se enrojezca de culpa y
ennegrezca de inmundicia. Esta inmundicia del
pecado es interior. Una mancha en la cara puede
limpiarse fácilmente , pero tener el hígado y los
pulmones manchados es mucho peor. El pecado se
ha metido en la conciencia. Tito 1:15. Contamina
todas las facultades: la mente, la memoria, los
afectos, como si toda la masa de sangre se
corrompiera. El pecado contamina nuestras cosas
santas. Si el leproso bajo la ley hubiera tocado el
altar, el altar no lo limpiaría , pero contaminaría el
altar, que es un emblema de la lepra del pecado que
mancha nuestras cosas santas.
El pecado es una cosa DEBATIBLE. Nos degrada
nuestro honor. "En su propiedad se levantará un
vil". Dan 11:21. Así se habló de Antíoco Epífanes, que
era rey y cuyo nombre significa ilustre; pero el
pecado lo hizo vil. El pecado borra el nombre de un
hombre. Nada convierte tanto la gloria de un
hombre en vergüenza como el pecado. Hace a un
hombre como una bestia. Salmo 49:20. Es peor ser
como una bestia que ser una bestia; No es una
vergüenza ser una bestia, pero es una vergüenza
para un hombre ser como una bestia. La lujuria
vuelve brutal al hombre y la ira lo vuelve diabólico.
El pecado es una cosa ESCLAVADORA. Un pecador
es un esclavo cuando peca más libremente. [Pesado
es el yugo de la esclavitud] Cicerón. El pecado
convierte a los hombres en siervos del diablo.
Satanás les ordena pecar y ellos lo hacen. Le ordenó
a Judas que traicionara a Cristo, y lo hizo; le pidió a
Ananías que dijera una mentira, y lo hizo. Hechos 5:
3. Cuando un hombre comete pecado, es el lacayo del
diablo y cumple su misión. Aquellos que sirven a
Satanás tienen un amo tan malo, que tendrán miedo
de
recibir su salario.
El pecado es una cosa OFENSIVA. "Todos juntos se
han ensuciado"; en hebreo, se han vuelto hediondas .
Salmo 14: 3. El pecado es muy ofensivo para Dios. Si
el que adora en la casa de Dios vive en el pecado de
la inmundicia, aunque esté perfumado con todas las
especias aromáticas de Arabia, sus oraciones son
desagradables. "Su incienso me es abominación"
(Isaías 1:13); por lo tanto, "al soberbio conoce de
lejos". Salmo 138: 6. No se acercará al pecador del
muladar, que tiene un hedor tan desagradable que
sale de él.
El pecado es algo DOLOROSO. A los hombres les
cuesta mucho trabajo y dolores realizar sus
malvados designios. "Se cansan de cometer
iniquidad". Jer 9: 5. "El pecado es su propio castigo".
¡Cómo se cansan en la monotonía del pecado!
Crisóstomo dice que la virtud es más fácil que el vicio
. Es más fácil ser sobrio que intemperante; es más
fácil servir a Dios que seguir el pecado. Un hombre
malvado suda en el arado del diablo, ¡ y se esfuerza
mucho por condenarse a sí mismo!
El pecado es una cosa MOLESTANTE. Todo lo que
contamina, perturba. El pecado rompe la paz del
alma. "No hay paz para los malvados". Isaías 57:21.
Cuando un hombre peca con presunción, llena su
almohada de espinas, y su cabeza estará muy
incómoda cuando llegue a morir. El pecado causa un
temblor en el corazón. Cuando Spira pecó, tuvo un
infierno en su conciencia; estaba tan horrorizado
que confesó que envidiaba a Caín y Judas. Carlos IX,
que fue culpable de una masacre en París, fue luego
un terror para sí mismo; se asustaba con cada ruido
y no podía soportar que lo despertaran sin música.
El pecado rompe la paz del alma. Caín, al matar a
Abel, apuñaló a medio mundo de un golpe, pero no
pudo matar al gusano de su propia conciencia. Así
ves qué pecado maligno es en su naturaleza, y qué
necesidad tenemos de orar: "Líbranos del mal".
(3) Considere el pecado en el juicio y la opinión
de los piadosos , y parecerá ser el mal más
prodigioso.
Es un mal tan grande que los piadosos prefieren
hacer cualquier cosa que pecar. Moisés eligió "más
bien sufrir con el pueblo de Dios que disfrutar de los
placeres del pecado". Hebreos 11:24. Los cristianos
primitivos prefirieron ser devorados por leones por
fuera que por lujurias por dentro. Ireneo fue llevado
a un lugar donde

una cruz estaba a un lado y un ídolo al otro, y él tuvo

que elegir entre inclinarse ante el ídolo o sufrir en la
cruz, y eligió lo último. El sabio preferirá tener
rasgaduras en su abrigo que en su carne; y los
piadosos prefieren soportar los sufrimientos
externos que un desgarro en su conciencia. Tan
grande es el mal del pecado, que el piadoso no
pecará para obtener la mayor ganancia; no pecarán
aunque compren una propiedad con ella ; no ,
aunque estaban seguros de promover la gloria de
Dios con ella.
Los piadosos testifican que el pecado es un gran mal,
en el sentido de que no desean morir por ningún
motivo más que esto, para poder librarse del pecado.
Desean despojarse de la ropa de la carne, para ser
desvestidos del pecado. Su mayor dolor es el estar
preocupados por habitantes tales como el orgullo, la
lujuria y la envidia. Fue un cruel tormento de
Mezentius que ató a un hombre muerto a un
hombre vivo. Así, un hijo de Dios tiene la corrupción
unida a la gracia: un hombre muerto atado a un
hombre vivo. Tan odioso es el pecado, que un
creyente desea morir sin más razón que esta: que la
muerte lo libere del pecado. El pecado trajo la
muerte al mundo, y la muerte sacará el pecado del
mundo.
(4) Juzga el pecado en comparación , y parecerá
ser el mal más mortal. Compare lo que quiera con
él: aflicciones, muerte o infierno, y aún así el pecado
es peor.
Primero, el pecado es peor que la aflicción. Hay
más mal en la caída del pecado -than en un mar de
aflicción .
[1] El pecado es la causa de la aflicción, y la causa
es más que el efecto. El pecado trae todas las cosas
dañinas: tiene la muerte y el infierno en su seno. Se
pudre el nombre, consume la propiedad y
desperdicia el cuerpo. Como los poetas fingieron que
la caja de Pandora, cuando se abrió, llenó el mundo
de enfermedades, así cuando Adán rompió la caja de
la justicia original, causó todos los males del mundo.
El pecado es el mal que prende fuego al mundo. El
pecado expulsó a los ángeles del cielo ya Adán del
paraíso. Provoca motines, divisiones y masacres. La
espada de la justicia de Dios reposa tranquilamente
en la vaina, hasta que el pecado la saca y la afila. De
modo que el pecado es peor que la aflicción, siendo
su causa; y la causa es más que el efecto.

[2] Dios es el autor de la aflicción. " Cuando llega

el desastre a una ciudad, ¿no lo ha causado el
Señor?" Amós 3: 6. Dios tiene mano en la
aflicción, pero no en el pecado. Él es la causa de cada
acción, en la medida en que sea natural, pero no
como pecaminosa . El que hace un instrumento de
hierro, no es la causa de la herrumbre y el chancro
que lo corrompe. De la misma manera, Dios hizo el
instrumento de nuestras almas, pero no la
herrumbre y el chancro del pecado que las
corrompe. [Dios no es el autor del pecado.] Agustín.
Dios no puede actuar más mal de lo que el sol puede
oscurecer. En este sentido, el pecado es peor que la
aflicción. Dios tiene mano en la aflicción, pero niega
tener algo que ver con el pecado.
[3] La aflicción llega sólo al cuerpo y lo hace
miserable, pero el pecado hace miserable el alma.
El alma es la parte más noble. Es un diamante
engastado en un anillo de arcilla. Es excelente en su
esencia, una sustancia espiritual e inmortal. Es
excelente en el precio pagado por él, redimido con la
sangre de Dios. Hechos 20:28. Vale más que un
mundo. El mundo es más tosco, el alma de un hilado
más fino. En el mundo vemos el dedo de Dios, en el
alma la imagen de Dios. Tener el alma preciosa en
peligro es mucho peor que tener el cuerpo en peligro.
El pecado daña el alma. Proverbios 8:36. Arroja la
joya del alma por la borda.
La aflicción es superficial , puede quitarle la
vida, pero el pecado quita el alma. Lucas 12:20. La
pérdida del alma es una pérdida incomparable,
nunca podrá recuperarse. "Dios", dice Crisóstomo,
"te ha dado dos ojos, si pierdes uno, tienes otro; pero
tienes un alma, y si la pierdes, nunca podrá
repararse". Por tanto, el pecado es peor que la
aflicción; el uno solo puede llegar al cuerpo, el otro
arruina el alma. Entonces, ¿no hay una gran razón
para que a menudo debamos hacer esta petición:
"Líbranos del mal"?
[4] Las aflicciones son buenas para nosotros. "Es
bueno para mí haber sido afligido". Salmo 119: 71.
Muchos pueden bendecir a Dios por la aflicción. La
aflicción humilla. "Recuerdo mi aflicción y mi alma
se humilla dentro de mí". Lamentaciones
3: 19-20. Las aflicciones se comparan a las espinas;
estas espinas son para pinchar la burbuja del
orgullo. Oseas 2: 6. La aflicción es la escuela del
arrepentimiento. "Me has castigado, y fui castigado;
me arrepentí". Jer 31:18, 19. El fuego que se pone
debajo de la destilería hace que el agua gotee de las
rosas. Así, el fuego de la aflicción hace que el agua de
el arrepentimiento cae de los ojos.
La aflicción nos acerca a Dios. La piedra de carga de
la misericordia no nos acerca tanto a Dios como las
cuerdas de la aflicción . Cuando el hijo pródigo se
sintió abrumado por la necesidad, dijo: "Me
levantaré e iré a mi Padre". Lucas 15:18. Las
aflicciones se preparan para la gloria. "Ligera
tribulación nos produce un eterno peso de gloria". 2
Cor 4:17. El pintor pone su oro sobre colores oscuros.
Así, Dios pone primero los colores oscuros de la
aflicción y luego el color dorado de la gloria. Así la
aflicción es para nuestro bien; pero el pecado no es
para nuestro bien; nos oculta cosas buenas. "Tus
pecados te han impedido el bien". Jer 5:25. El pecado
detiene la corriente de la misericordia de Dios;
precipita a los hombres a la ruina eterna. La
aflicción de Manasés lo llevó a la humillación; pero
el de Judas lo llevó a la desesperación.
[5] Un hombre puede estar afligido, y su
conciencia está tranquila. Los pies de Pablo
estaban en el cepo, pero tenía el testimonio de su
conciencia. 2 Cor 1:12. La cabeza puede doler, pero
el corazón puede estar bien; el hombre exterior
puede estar afligido, pero el alma puede vivir
tranquilamente. Salmo 25:13. El granizo puede
golpear las baldosas de la casa, cuando hay música
dentro. En medio del dolor exterior , puede haber
paz interior. Así, en la aflicción, la conciencia puede
estar tranquila; pero cuando un hombre comete un
pecado presuntuoso y escandaloso, la conciencia se
turba. Al profanar la pureza de conciencia,
perdemos la paz de conciencia. Cuando Spira pecó y
abjuró de la fe, fue un terror para sí mismo; tenía un
infierno dentro. Tiberio, el emperador, sintió tal
dolor en la conciencia que le dijo al Senado que
sufría la muerte a diario.
[6] En la aflicción podemos tener el amor de Dios.
Las aflicciones son muestras de amor. "Yo reprendo
y disciplino a los que amo". Apocalipsis 3:19. Las
aflicciones son flechas afiladas , pero disparadas por
la mano de un Padre amoroso. Si un hombre
arrojara una bolsa de dinero a otro, y esto lo
lastimara un poco, no se ofendería, sino que lo
tomaría como un fruto del amor; por eso, cuando
Dios nos hiere con aflicción, es para enriquecernos
con las gracias doradas de su Espíritu, ¡y todo es
amor! Pero cuando cometemos pecado, Dios retira
su amor; es el sol encapotado con una nube; no
aparece nada más que ira y disgusto. Cuando David
pecó en el asunto de Urías, "lo que David había
hecho desagradó al Señor". 2 Samuel 11:27.

[7] Hay muchos estímulos para sufrir aflicción.

Dios mismo sufre con nosotros. "En toda su aflicción,
él fue afligido". Isaías 63: 9. Dios nos fortalecerá en
nuestros sufrimientos. "Él es su fuerza en el tiempo
de angustia". Salmo 37:39. O Dios aligera nuestra
carga o fortalece nuestra fe . Él compensará y
recompensará nuestros sufrimientos. "Todo el que
haya abandonado casas o tierras por causa de mi
nombre, recibirá el ciento por uno y heredará la
vida eterna". Mateo 19:29. Aquí hay estímulos para
sufrir aflicción, pero no hay estímulo para pecar.
Dios ha blandido una espada llameante de amenazas
para disuadirnos del pecado. "Ciertamente Dios
aplastará la cabeza de sus enemigos, las coronas
peludas de aquellos que continúan en sus pecados".
Salmo 68:21. A -rollo que volaba de maldiciones
entra en la casa de un pecador. Zacarías 5: 4. Si un
hombre peca, corre su riesgo. "Embriagaré de sangre
mis flechas". Deuteronomio 32:42. Dios hará que los
hombres se cansen de sus pecados, o los cansará de
sus vidas. Por tanto, el pecado es peor que la
aflicción. Hay ánimos para sufrir aflicción, pero no
para pecar.
[8] Cuando una persona está afligida, sufre solo;
pero al pecar abiertamente, daña a otros. Les
hace daño a los inconversos . El pecado de un
hombre puede poner una piedra en el camino de
otro, en la que puede tropezar y caer en el infierno.
¡Oh, la maldad del pecado escandaloso! Algunos se
desaniman, otros se endurecen. Tu pecado puede ser
la causa de la condena de otra persona . Los
sacerdotes que iban mal, hicieron que otros
tropezaran. Mal 2: 7, 8. A los convertidos les duele .
Por un pecado manifiestamente escandaloso, ofende
a los creyentes débiles y, por lo tanto, peca contra
Cristo. 1 Corintios 8:12. Por tanto, el pecado es peor
que la aflicción, porque hace daño a otros.
[9] En la aflicción los santos pueden regocijarse.
"Recibiste la Palabra en mucha aflicción, con gozo". 1
Tesalonicenses 1: 6. "Aceptaste con alegría la
confiscación de tus bienes". Hebreos 10:34.
Aristóteles habla de un pájaro que vive entre espinas
y, sin embargo, canta dulcemente. De la misma
manera, un hijo de Dios puede regocijarse en las
aflicciones. Paul tenía sus canciones de prisión. "Nos
gloriamos en las tribulaciones". Romanos 5: 3. La
palabra griega significa una exuberancia de alegría,
una alegría con jactancia y triunfo. Dios a menudo
derrama esos consuelos divinos, que hacen que los
santos se regocijen en las aflicciones, de modo que
prefieran tener sus aflicciones que estar sin sus
comodidades. Dios confita su ajenjo con azúcar.
Romanos 5: 5. Has visto la luz del sol cuando llueve:
el

los santos han tenido el resplandor del rostro de

Dios, cuando las aflicciones han llovido y caído sobre
ellos. Así podemos regocijarnos en la aflicción, pero
no podemos regocijarnos en el pecado. "No te
alegres, oh Israel, de gozo como los demás pueblos,
porque te has prostituido de tu Dios". Os 9: 1. El
pecado es motivo de vergüenza y dolor, no de
alegría. David, habiendo pecado al contar al pueblo,
su "corazón lo golpeó". 2 Samuel 24:10. Así como
pincharse una vena deja salir la sangre, así, cuando
el pecado ha pinchado la conciencia, deja escapar el
gozo.
[10] La aflicción magnifica a una persona. "¿Qué
es el hombre, para que lo engrandeces y lo visites
todas las mañanas?" Job 7:17, 18. Es decir, visítalo
con aflicción.
¿Cómo nos magnifican las aflicciones?
(1) Como son signos de filiación. "Si soportas la
disciplina, Dios te trata como a hijos". Hebreos 12: 7.
Cada huella de la vara es una insignia de honor.
(2) A medida que los sufrimientos de los piadosos
han aumentado su fama y renombre en el mundo. El
celo y la constancia de los mártires en sus
sufrimientos han eternizado su nombre. ¡Oh, cuán
eminente fue Job por su paciencia! "Habéis oído
hablar de la paciencia de Job". Santiago 5: 2: Job, el
que sufría, era más famoso que Alejandro el
conquistador. Así las aflicciones engrandecen a la
persona; pero el pecado no lo magnifica, sino que lo
vilipendia. Cuando los hijos de Elí pecaron y
profanaron su sacerdocio, convirtieron su gloria en
vergüenza; el texto dice que "se hicieron viles". 1
Sam 3:13. El pecado arroja una mancha indeleble
sobre el nombre de un hombre. "El hombre que
comete adulterio es un completo necio, porque
destruye su propia alma. Las heridas y la desgracia
constante son su suerte. Su vergüenza nunca será
borrada". Proverbios 6:32, 33.
[11] Un hombre que sufre aflicción puede honrar
la religión. La cadena de hierro de Pablo hizo que el
evangelio llevara una cadena de oro. El sufrimiento
acredita y propaga el evangelio; pero el cometer
pecado trae deshonra y escándalo sobre los caminos
de Dios. Cipriano dice, cuando en los tiempos
primitivos una virgen, que se comprometió a la
religión, profanó su castidad, la vergüenza y el dolor
llenaron el rostro de toda la congregación. Cuando
unos pocos cometen pecados escandalosos, traen
reproche a muchos; como tres o cuatro chelines de
bronce en una suma de dinero hacen sospechar al
resto.

[12] Cuando las aflicciones de un hombre son

bien recibidas, cuando sufre por Cristo, recibe las
oraciones del pueblo de Dios. No es un pequeño
privilegio tener una reserva de oración; los santos
que sufren tienen una gran participación en las
oraciones de los demás. "Pedro estaba en la cárcel,
pero la iglesia hacía oración sin cesar a Dios por él".
Hechos 12: 5. ¡Qué mayor felicidad que tener las
promesas de Dios y las oraciones de los santos! Pero
cuando un hombre peca de manera presuntuosa y
escandalosa, tiene las lágrimas amargas de los
santos y las justas censuras; es una carga para todos
los que lo conocen, como dice David en otro caso:
"Los que me vieron afuera, huyeron de mí". Salmo
31: 2. Así que el pueblo de Dios huye de un pecador
escandaloso; es como una persona infectada, ¡todos
lo rehuyen y lo evitan!
[13] La aflicción puede dañar a un hombre sólo
mientras está vivo, pero el pecado lo lastima
cuando está muerto. Como las virtudes y la limosna
de un hombre pueden hacer bien cuando está
muerto, así sus pecados pueden causarle daño
cuando está muerto. Cuando una araña muere, su
veneno puede doler. De la misma manera, el veneno
de un mal ejemplo puede hacer mucho daño cuando
un hombre está en su tumba. La aflicción a lo sumo
puede durar la vida de un hombre, pero el pecado
vive y duele cuando se va. Por tanto, el pecado es
mucho peor que la aflicción.
En segundo lugar. El pecado es peor que la
muerte. Aristóteles llama a la muerte el terrible de
los terribles , y Job la llama "el rey de los terrores",
pero el pecado es más mortal que la muerte misma.
Job 18:14. 1. La muerte, aunque dolorosa, no dolería
sino por el pecado; es el pecado el que amarga la
muerte y la hace arder. "El aguijón de la muerte es el
pecado". 1 Corintios 15:26. Si no fuera por el pecado,
aunque la muerte pudiera matar , no podría
maldecirnos . El pecado envenena la flecha de la
muerte, de modo que es peor que la muerte, porque
pone un aguijón en la muerte. 2. La muerte no hace
más que separar el cuerpo y el alma; pero el pecado,
sin arrepentimiento, separa entre Dios y el alma.
"Me has quitado mis dioses, ¿y qué más tengo?"
Jueces 18:24. La muerte nos quita la vida, pero el
pecado nos quita a nuestro Dios. Solo para que sea
peor que la muerte.
En tercer lugar. El pecado es peor que el infierno.
En el infierno están el gusano y el fuego, pero el
pecado es peor.
1. El infierno es obra de Dios, pero el pecado no es
obra suya; es un monstruo creado por el diablo.

2. Los tormentos del infierno son una carga solo

para el pecador, pero el pecado es una carga para
Dios. En los tormentos del infierno hay algo que es
bueno: está la ejecución de la justicia de Dios, hay
justicia en el infierno. Pero el pecado es lo más
injusto; despojaría a Dios de su gloria, a Cristo de su
compra y al alma de su felicidad. Entonces, el pecado
es peor que el infierno.
(5) Considere el pecado, en la forma de su
curación. Cuesta mucho eliminarlo; la culpa del
pecado no podría ser quitada sino por la sangre de
Cristo; el que era Dios tenía que morir y ser hecho
maldición por nosotros antes de que el pecado
pudiera ser remitido.
¡Cuán horrible es el pecado, que ningún ángel o
arcángel, ni todos los poderes del cielo, puedan
obtener su perdón, sino solo la sangre de Dios! Si un
hombre comete una ofensa y no se puede obtener el
perdón, a menos que el hijo del rey sea procesado y
sufra la muerte por él, todos pensarían que es una
cosa horrible la causa de esto. Tal es el caso aquí, el
Hijo de Dios debe morir para satisfacer la justicia de
Dios por nuestros pecados. ¡Oh, las agonías y
sufrimientos de Cristo! En su cuerpo -su cabeza
coronada de espinas, con el rostro escupido su
costado traspasado por la lanza, con las manos y los
pies clavados. Todo su cuerpo como una sola herida.
Sufrió en su alma . "Mi alma está muy triste, hasta la
muerte". Mateo 26:38. Bebió una copa amarga,
mezclada con maldiciones, que lo hicieron, aunque
santificado por el Espíritu, sostenido por la Deidad y
consolado por ángeles, sudar gotas de sangre y gritar
en la cruz: "Dios mío, ¿por qué has abandonado?
¡yo!" Todo esto fue para acabar con nuestro pecado.
Mira el pecado en la sangre de Cristo, ¡ y parecerá de
un color carmesí!
(6) Considere el pecado en sus tristes efectos, y
parecerá el mal más espantoso. "La paga del
pecado es muerte", es decir, "la muerte segunda".
Romanos 6:23. Apocalipsis 21: 8. El pecado tiene
vergüenza por su compañero y la muerte por su
salario. Un hombre inicuo sabe qué es el pecado en
el placer de hacerlo, pero no sabe qué es el pecado
en el castigo. El pecado es un escorpión que pica,
arrastra el infierno a sus talones. Este tormento
infernal consta de dos partes:
Poena damni, el castigo de la pérdida . " Apártate de
mí " (Mateo 7:23). Absalón se molestó mucho en no
ver el rostro del rey. Pero perder las sonrisas de Dios,
ser desterrado de su presencia, en cuya

La presencia es plenitud de gozo, ¡qué triste y

terrible! Esa palabra, "Vete", dijo Crisóstomo, es peor
que el fuego. Sin duda, el pecado debe ser el mayor
mal, que nos separa del mayor bien.
Poena sentidos , el castigo de los sentidos . "Apartaos
de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el
diablo y sus ángeles " (Mateo 25:41). Los pecadores
podrían suplicar: "Señor, si debemos apartarnos de
ti, déjanos recibir tu bendición". "¡No! Márchate, tú
que estás maldito". "Si debemos apartarnos de ti, que
sea en algún lugar de tranquilidad y descanso". "¡No!
¡Sal al fuego!" "Si tenemos que ir al fuego, que sea
por un tiempo, que el fuego se apague rápidamente".
"¡No! ¡Ve al fuego eterno!" "Si es así, que debemos
estar ahí, estemos en buena compañía". "¡No! ¡Ve con
el diablo y sus ángeles!"
¡Oh, qué mal es el pecado! Todos los tormentos de
esta vida no son más que un deporte, comparados
con los tormentos del infierno. ¡Qué es una fiebre
ardiente, comparada con el ardor en el infierno! Se
llama "la ira del Dios Todopoderoso". Apocalipsis
19:15. El Dios Todopoderoso inflige el castigo, por lo
tanto, será pesado. Un niño no puede golpear con
mucha fuerza, pero si un gigante golpea, mata de un
golpe. ¡Tener al Dios todopoderoso en el golpe será
intolerable! ¡El infierno es el epítome de la miseria! El
cuerpo y el alma que pecaron juntos, sufrirán juntos;
y esos tormentos no tendrán plazo para ellos. Ellos
"buscarán la muerte, y no la hallarán". Apocalipsis 9:
6. "El humo de su tormento sube por los siglos de los
siglos". Apocalipsis 14:11. Aquí los malvados
pensaban en una oración larga, un sábado largo;
pero, ¿cuánto tiempo será estar tendido sobre lechos
de llamas para siempre? Esa palabra, "¡para
siempre!" rompe el corazón!
Seguramente, entonces, el pecado es el mal más
mortífero y execrable. Míralo en su original, en su
naturaleza, en el juicio y estimación de los sabios;
considérelo comparativamente: es peor que la
aflicción, la muerte y el infierno; Míralo como una
cura, y en el efecto lúgubre, trae la condenación
eterna. ¿No hay, entonces, una gran razón por la que
debemos hacer esta oración, "Líbranos del mal"?
Utilice 1. Para INSTRUCCIONES.
(1) ¿Es el pecado un mal tan mortal y pernicioso,
el mal de los males? Vea de qué debemos orar
más para ser liberados , y que está en

En referencia al pecado, nuestro Salvador nos ha

enseñado a orar: "Líbranos del mal". Los hipócritas
rezan más contra los males temporales que contra
los espirituales. El faraón oró más para que se le
quitara la plaga del granizo y el trueno, que su
corazón endurecido. Éxodo 9:28. Los israelitas
oraron, "quítanos las serpientes", más que para que
se les quite el pecado. Entumecimiento 21: 7. La
oración del hipócrita es carnal: ora más para ser
curado de su cojera que de su incredulidad; más que
Dios quitaría su dolor que quitaría su pecado. Pero
nuestra oración debería ser: "Líbranos del mal". Las
oraciones espirituales son las mejores. ¿Tienes un
cuerpo enfermo? Ore más para que se elimine la
enfermedad de su alma que de su cuerpo. "Sana mi
alma, porque he pecado". Salmo 41: 4. La plaga del
corazón es peor que un cáncer de mama. ¿Tienes un
hijo cojo? Ore más para que se elimine su impiedad
que su cojera. Las oraciones espirituales agradan
más a Dios y son como música en sus oídos. Cristo
nos ha enseñado aquí a orar contra el pecado:
"Líbranos del mal".
(2) Si el pecado es un mal tan grande, admire la
maravillosa paciencia de Dios, que soporta a los
pecadores. El pecado es una infracción de la ley real
de Dios, golpea su gloria; que Dios pueda soportar a
los pecadores que lo provocan , muestra una
paciencia asombrosa. Bien puede ser llamado "el
Dios de la paciencia". Romanos 15: 5. Cansaría la
paciencia de los ángeles: soportar algún día los
pecados de los hombres; ¡pero qué soporta Dios!
¡Cuántas afrentas y ofensas soporta! Ve todas las
intrigas y horribles impiedades cometidas en una
nación. "Han cometido maldad en Israel, y han
cometido adulterio; yo también lo sé, y soy testigo,
dice el Señor". Jer 29:23. Dios podía matar a los
hombres en sus pecados; pero él los soporta y les da
tregua. Me parece que veo la justicia de Dios con una
espada de fuego en su mano, lista para dar el golpe;
y la paciencia interviene por el pecador y dice:
Señor, perdónalo un poco más. Me parece que oigo
al ángel decirle a Dios, como el rey de Israel al
profeta: "¿Los heriré? ¿Los heriré?" 2 Reyes 6:21.
Señor, aquí está un pecador así: ¿lo golpearé? ¿Le
quitaré la cabeza a semejante borracho, blasfemo,
quebrantador del sábado? Y la paciencia de Dios
dice, como labrador de la viña: "Déjalo este año".
Lucas 13: 8. ¡Oh, la infinita paciencia de Dios, que
soportara tanto tiempo a los pecadores! "Cuando un
hombre encuentra a su enemigo, ¿lo deja escapar
ileso?" 1 Sam 24:19. Dios encuentra a sus
enemigos; sin embargo , los deja ir, actualmente no
se vengó de ellos. Cada pecado tiene una voz a la que
llorar

Dios por venganza; como clamó el pecado de

Sodoma. Génesis 18:20. Dios perdona a los hombres;
pero que los pecadores no presuman de su
paciencia. La paciencia prolongada no es perdón ; La
paciencia de Dios abusada, deja a los hombres más
imperdonables.
(3) Si el pecado es un mal tan grande, no hay
pecado pequeño. No hay poca traición: todo pecado
golpea la corona y la dignidad de Dios; y en este
sentido se puede decir: ¿No son "infinitas vuestras
iniquidades"? Job 22: 5. El menor pecado, como
dicen los escolásticos, es objetivo infinito, porque se
comete contra una Majestad infinita. Nada puede
acabar con el pecado sino aquello que tiene infinito
en él; pues aunque los sufrimientos de Cristo, en
cuanto hombre, no eran infinitas -yet la naturaleza
divina derramado un valor infinito y el mérito en
sus sufrimientos. Ningún pecado es pequeño y no
hay un infierno pequeño para el pecado. Así como
no debemos pensar poco en las misericordias de
Dios, porque son más de lo que podemos merecer,
tampoco debemos pensar en nuestros pecados como
poco, porque son más de lo que podemos responder.
El pecado que estimamos más leve, sin la sangre de
Cristo, será lo suficientemente pesado como para
hundirnos en la perdición.
(4) Si el pecado es un mal tan grande, vea de
dónde vienen todos los problemas personales o
nacionales. Vienen de la maldad del pecado. El
pecado crece mucho, lo que hace que las divisiones
se amplíen. El pecado es el Acán que nos aflige; es el
huevo de la víbora, del cual sale una serpiente
voladora ardiente. Es como Faetón, que, como fingen
los poetas, conduciendo el carro del sol, prendió
fuego al mundo. El pecado tiene una influencia
maligna , nos pone en apuros. Todos nuestros males
provienen del mal del pecado. Las cuerdas que nos
aprietan son de nuestra propia torsión. [El castigo
sigue a la maldad como enhebrar la aguja.] El
pecado levanta todas las tormentas en la conciencia.
La espada de la justicia de Dios permanece quieta,
hasta que el pecado la saca de la vaina y hace que
Dios la afile contra una nación.
(5) Si el pecado es un mal tan grande, ¡qué poca
razón tiene alguien para estar enamorado de él!
Algunos están tan enamorados de él que se deleitan
con él. El diablo puede cocinar y vestir el pecado de
tal manera que agrada el paladar del pecador.
"Aunque la maldad sea dulce en su boca". Job 20:12.
El pecado es tan delicioso para los impíos como la
comida para el paladar. Es una fiesta en la que los
hombres alimentan sus deseos; pero hay pocas
razones para estar enamorado de él. "Aunque la
maldad sea dulce en su boca, es hiel de áspides
dentro de él". Job 20:12, 14. Amar el pecado es
abrazar al enemigo. El pecado pone un gusano en
la conciencia, un aguijón en la muerte, un fuego
en el infierno. Es como esas langostas en Apocalipsis
9: 7:

"En sus cabezas tenían como coronas como el oro y

tenían cabello como cabello de mujer, y sus dientes
eran como dientes de leones, y tenían colas como
escorpiones, y tenían aguijones en sus colas".
Después del cabello de la mujer, ¡ viene el aguijón
del escorpión!
(6) Si el pecado es un mal tan grande, ¿qué
diremos de aquellos que lo desprecian, como si
no hubiera peligro en él ? como si Dios no hablara
en serio cuando amenaza con castigar el pecado; ¿O
como si los ministros se trataran de una obra
innecesaria, cuando predican contra ella? Algunas
personas no hacen nada por quebrantar un
mandamiento; no hacen nada por decir una
mentira, por engañar o calumniar; nada de vivir en
el pecado de la inmoralidad. Si sopesas el pecado en
la balanza de los juicios de algunos hombres, es muy
ligero; pero ¿quiénes son los que menosprecian el
pecado? Salomón los ha descrito. "Los necios se
burlan del pecado". Proverbios 14: 9. [El necio cae
rápidamente en los vicios.] Isidoro. ¡Quién sino los
necios se burlarían de lo que contrista al Espíritu de
Dios! ¿Quién sino los necios pondría una víbora en
su seno? ¡Quién sino los necios se reirían de su
propia calamidad y se divertirían mientras se
envenenan!
(7) Si el pecado es un mal tan grande, infiero que
no se puede obtener ningún bien con él. No
podemos recoger uvas de esta espina. Si el pecado es
un mal mortal, no podemos sacar provecho de él;
ningún hombre podría prosperar en este oficio. Los
ateos decían: "Es vano servir a Dios, ¿y de qué
sirve?" Mal 3:14. Pero podemos decir con más
verdad, ¿de qué sirve el pecado? "¿Qué beneficio
obtuvo en ese momento de las cosas de las que ahora
se avergüenza? ¡Esas cosas resultan en la muerte!"
Romanos 6:21. ¿Dónde están tus ganancias? ¿Qué
has obtenido con el pecado? ¡Tiene vergüenza por su
compañero y muerte por su salario! ¿Qué beneficio
obtuvo Acán de su cuña de oro? Esa cuña partió su
alma de Dios. ¿Qué provecho tuvo Acab, de la viña
que obtuvo injustamente? Los perros lamieron su
sangre. 1 Reyes 21:19. ¿Qué provecho sacó Judas de
su traición? Por treinta piezas vendió a su Salvador y
compró su propia condenación. Toda la ganancia
que los hombres obtienen con sus pecados, pueden
poner en su ojo; es más, deben ponerlo allí y volver a
llorar.
(8) Si el pecado es un mal tan grande, mira la
locura de quienes se aventuran en él, por el
placer que tienen en él. "Que se complació en la
injusticia". 2 Tes. 2:12. En cuanto al placer del
pecado, es
sino una agradable fantasía; un sueño dorado. Y
además, es un placer mixto , tiene amargura
entremezclada. "He, dice la ramera, perfumado mi
cama con mirra, áloe y canela". Proverbios 7:17. Para
un dulce, aquí hay dos amargos; la canela es
dulce, pero la mirra y el áloe son amargos; el placer
de la ramera se mezcla. Están esos miedos internos y
esos latigazos de conciencia que amargan el placer.
Si hay algún placer en el pecado, es sólo para el
cuerpo, la parte brutal; el alma no se satisface en
absoluto con ello. "Alma, relájate"; podría haber
dicho con más propiedad: "Cuerpo, relájate"; el alma
no puede alimentarse de objetos sensuales. Lucas
12:19.
En resumen, el placer del que los hombres hablan en
el pecado es su enfermedad. Algunos disfrutan de
comer tiza o carbones, que provienen de
enfermedades. Así, cuando los hombres hablan del
placer de comer el fruto prohibido, es por la
enfermedad y dolencia de su alma. Ellos "ponen lo
amargo por lo dulce". Isaías 5:20. ¡Oh, qué insensatez
es, por una copa de placer, beber un mar de ira! ¡El
pecado será amargo al final! "¡No mires el vino
cuando es rojo, cuando da su color en la copa; al
final muerde como una serpiente!" Proverbios 23:31,
32. El pecado resultará como el sroll de Ezequiel,
dulce en la boca, ¡pero amargo en el vientre!
Pregúntale a Caín ahora, ¡cómo le gusta su asesinato!
Pregúntale a Acán si le gusta su cuña de oro. ¡Oh,
recuerda el dicho de Agustín: "El placer es
momentáneo, la tortura eterna!" El placer del pecado
desaparece pronto , ¡pero el aguijón permanece!
(9) Si el pecado es un mal tan grande, ¡qué
sabiduría tiene apartarse de él! "Apartarse del mal
es entendimiento". Job 28:28. Pecar es hacer locura;
por tanto, apartarse del pecado es actuar con
sabiduría. Salomón dice: "En la transgresión del
malvado, hay lazo". Proverbios 29: 6. ¿No es
prudente evitar una trampa? El pecado es un
engañador, engañó a nuestros primeros padres. ¡En
lugar de ser como dioses, se convirtieron en bestias
que perecen! Salmo 49:20. El pecado ha engañado a
todos los que se han entrometido en él; ¿Y no es
prudente evitar a un tramposo así? El pecado tiene
muchos agradables placeres y cuenta cómo
complacerá todos los sentidos con placer; "pero", dice
un alma bondadosa, "el amor de Cristo es más dulce;
la paz de conciencia es más dulce; ¿qué son los
placeres del pecado, comparados con los placeres del
paraíso? Bien pueden los santos ser llamados
vírgenes prudentes , porque espían los engaños que
están en pecado, y eviten los lazos. El temor del
Señor, eso es sabiduría; y apartarse del mal es

comprensión."
(10) Si el pecado es un mal tan grande, ¡cuán
justificables y encomiables son todos esos medios
que se utilizan para mantener a los hombres
alejados del pecado! ¡Cuán justificables son las
amonestaciones y reprensiones de un ministro!
"Repréndelos duramente" (Tito 1:13); cortante una
metáfora de un cirujano que palpa una herida y
corta la carne orgullosa para que el paciente esté
sano. De la misma manera, el ministro de Dios viene
con una reprensión cortante , pero es para evitar el
pecado y salvar el alma. Considéralos como tus
mejores amigos, quienes te evitarían pecar contra
Dios. Si un hombre se iba a envenenar o ahogar, ¿no
sería él su amigo, quién impediría que insinuara
hacerlo? Todas las reprensiones de un ministro son
sólo para evitar que pecaras y para evitar que te
mates; todo está enamorado. "Conociendo el terror
del Señor, persuadimos a los hombres". 2 Corintios
5:11. Es la pasión de la mayoría estar enojado con
aquellos que quieren rescatarlos del pecado. "Odias
al que reprende en el tribunal y desprecias al que
dice la verdad". Amós 5:10. ¿Quién está enojado con
el médico por recetar una poción amarga, ya que es
para purgar la enfermedad mortal? Es misericordia
para las almas de los hombres hablarles de sus
pecados. Y seguramente esos son sacerdotes del
diablo, que ven a los hombres seguir pecando y listos
para caer al infierno, y nunca hacer retroceder a
ellos con una reprensión; es más, tal vez incluso los
adule en sus pecados. Dios nunca hizo a los
ministros para que fueran falsos espejos, para hacer
que las caras malas se vieran hermosas; los tales se
hacen culpables de los pecados de otros hombres.
(11) Si el pecado es un mal tan grande, el mal de
los males, ¡mira qué mala elección hacen quienes
eligen el pecado para evitar la aflicción! Es como
si para evitar que el abrigo se rasgue, uno debería
permitir que se rasgue su carne. Fue una acusación
falsa la que presentó Eliú contra Job: "Esta iniquidad
has elegido antes que la aflicción". Job 36:21. Ésta es
una mala elección. La aflicción tiene una promesa
, pero el pecado no tiene ninguna promesa. 2 Samuel
22:28. La aflicción es para nuestro bien, pero el
pecado no es para nuestro bien; nos traería el
infierno y la condenación. Spira eligió la iniquidad
en lugar de la aflicción, pero le costó caro; por fin se
arrepintió de su elección. ¡El que peca para evitar el
sufrimiento, es como quien corre al foso de un león
para evitar la picadura de un mosquito!
(12) Si el pecado es un mal tan grande, el
cristiano debe tener gran cuidado en esta vida
para evitarlo. "Líbranos del mal." Algunos lo hacen

todo su cuidado para no meterse en problemas;

prefieren mantener su piel íntegra que su conciencia
pura. Pero nuestro cuidado debe ser principalmente
para evitar el pecado. ¡Cuán cuidadosos tenemos de
evitar un plato como el que los médicos nos dicen
que nos hace daño: traerá la piedra o la gota!
Debemos tener mucho más cuidado de no comer el
fruto prohibido, que traerá la venganza divina.
"Mantente puro". 1 Timoteo 5:22. Siempre ha sido el
estudio de los santos mantenerse alejado del pecado.
"¿Cómo puedo hacer esta gran maldad y pecar
contra Dios?" Génesis 39: 9. "Guarda a tu siervo de
los pecados presuntuosos". Salmo 19:13. Era un
dicho de Anselmo: "Si el pecado estuviera de un lado
y el infierno del otro, preferiría saltar al infierno que
pecar voluntariamente contra mi Dios". ¡Oh, qué
misericordia es estar guardado del pecado!
Consideramos que es una gran misericordia estar
protegidos de la plaga y el fuego; pero ¿qué hay que
guardar del pecado?
(13) ¿Es el pecado un mal tan grande? Debería
hacernos añorar el cielo, donde seremos
perfectamente libres del pecado, no sólo de sus
actos externos , sino de la morada del pecado. En
el cielo no necesitaremos hacer esta oración:
"Líbranos del mal". ¡Qué tiempo tan bendito será,
cuando nunca más tengamos un pensamiento vano!
Entonces la esposa de Cristo estará sin mancha ni
arruga. Efesios 5:27. Ahora hay un muerto atado al
vivo; no podemos cumplir con ningún deber santo
, pero mezclamos el pecado con él; no podemos
rezar sin vagar; no podemos creer sin dudar. Pero
entonces nuestras almas vírgenes no serán capaces
de la menor tintura de pecado, pero todos seremos
como los ángeles de Dios.
En el cielo no tendremos la tentación de pecar. ¡La
serpiente vieja es arrojada del paraíso, y sus dardos
ardientes nunca se acercarán para tocarnos!
Utilice 2. Para EXHORTACIÓN.
Primero que nada en general. Si el pecado es un mal
tan grande y terrible, como aman sus almas, presten
atención al pecado. Si prueba la fruta prohibida, le
costará caro, le costará lágrimas amargas, ¡puede
costarle mentir en el infierno! ¡Huid, pues, del
pecado!
(1) Ten cuidado con los pecados de OMISIÓN.
Mateo 23:23. Es tan peligroso no hacer las cosas
ordenadas como las prohibidas. Algunos piensan
que no es muy importante omitir la lectura de las
Escrituras. La Biblia miente como

armadura oxidada, que nunca usan. Piensan que no

es muy importante omitir la oración en familia o en
el armario; pasan varios meses y Dios nunca los
escucha. No tienen nada santificado para ellos; se
alimentan de una maldición; "porque toda criatura
es santificada por la oración". 1 Timoteo 4: 4, 5. El
pájaro nunca toma una gota pero su ojo está
levantado hacia el cielo; esto puede avergonzar a
muchos. Oh, ten cuidado de vivir en el descuido de
cualquier deber conocido. Era la oración de un
hombre santo en su lecho de muerte: "Señor,
perdona mis pecados de omisión".
(2) Presta atención a los pecados SECRETOS.
Algunos son más modestos que pecar abiertamente
en un balcón; pero llevarán sus pecados bajo un
dosel, pecarán en secreto. Raquel no dejaba que se
vieran los ídolos de su padre, pero "se sentó sobre
ellos". Génesis 31:34. Muchos serán borrachos e
inmundos, si lo hacen sin que nadie los vea; son
como quien cierra sus escaparates , pero sigue su
oficio dentro de las puertas. Si el pecado es un mal
tan grande, permíteme advertirte hoy que no peques
en secreto; Sepa que nunca podrá pecar en privado,
pero que los dos testigos, Dios y la conciencia, están
siempre presentes.
(3) Presta atención a tu pecado MEJOR , aquello a
lo que tu naturaleza y constitución se inclinan más.
Como en la colmena hay una abeja maestra , así en
el corazón hay un pecado maestro. "Me guardé de mi
iniquidad". Salmo 18:23. Hay algún pecado que es un
favorito especial, el pecado querido que yace en el
seno, y esto hechiza y aleja el corazón. ¡Cuidado con
esto!
[1] El pecado que más alimenta un hombre, y al
que están subordinados todos los demás pecados
, es el pecado más atendido y esperado. El pecado
favorito de los fariseos era la vanagloria, todo lo que
hicieron fue alimentar el pecado del orgullo. Cuando
daban limosna, tocaban una trompeta para que
otros los admiraran. Mateo 6: 2. Si un extraño
hubiera preguntado por qué sonaba esta trompeta.
La respuesta fue, los fariseos van a dar limosna a los
pobres. Su lámpara de caridad se llenó con aceite de
vanagloria . Mateo 23: 5. Todas sus obras las hacían
para que los hombres las vieran. El orgullo era el
pecado de su pecho. A menudo, la codicia es el
pecado favorito; todos los demás pecados se cometen
para mantener esto. ¿Por qué los hombres se
equivocan, oprimen, defraudan, aceptan
sobornos, sino para defender la codicia?

[2] El pecado que el hombre odia ser

reprendido es el pecado amado. Herodes no pudo
soportar que se hablara en contra de su incesto; si
Juan el Bautista se entromete en ese pecado, le
costará la cabeza.
[3] El pecado que tiene más poder sobre el
hombre, y que más fácilmente lo lleva cautivo, es
el amado del alma. Hay algunos pecados que un
hombre puede rechazar y rechazar mejor; pero hay
un pecado que no puede negar, pero que es vencido
por él: este es el pecado del seno. El joven del
evangelio tenía un pecado que lo acosó y que no
pudo resistir, y ese era el amor al mundo; su plata le
era más querida que su Salvador. Es una cosa triste
que un hombre esté tan hechizado por la
lujuria, ¡que se separe del reino de los cielos para
gratificarlo!
[4] El pecado que los hombres defienden con
argumentos es el pecado favorito. Abogar por el
pecado es ser el abogado del diablo. Si el pecado es la
codicia y lo reivindicamos; si es una ira precipitada,
y la justificamos diciendo (como Jonás 4: 9), "Hago
bien en enojarme", este es el pecado que nos asedia.
[5] El pecado que más aflige al hombre, y que se
le escapa en la cara en una hora de enfermedad y
angustia, es el pecado amado. Cuando los
hermanos de José se afligieron, recordó su pecado al
vender a su hermano. Génesis 45: 3. Entonces,
cuando un hombre está en su lecho de enfermo, la
conciencia dice: "¿No recuerdas cómo has vivido en
tal pecado, aunque te han advertido con frecuencia
, pero no lo dejarías?" La conciencia lee una
conferencia secreta sobre el pecado querido.
[6] El pecado del que un hombre no está
dispuesto a separarse es el pecado querido. Jacob,
de todos sus hijos, casi nunca pudo separarse de
Benjamín. "José no es, ni Simeón, y tú te llevarás a
Benjamín ". Génesis 13:36. Así dice el pecador: "Me
he separado de este y aquel pecado; pero ¿debe irse
Benjamín? ¿Debo separarme de este delicioso
pecado? ¡Que traspasa mi corazón!" Es Dalila, el
pecado amado. Oh, si el pecado es un mal tan mortal,
no te atrevas a complacer ningún pecado del pecho,
que es el más peligroso de todos; y, como un cáncer
que golpea el corazón, que es mortal. Un pecado
querido en el que se vive, abre una brecha para que
Satanás entre.
(4) Presta atención a los pecados que
acompañan a tus vocaciones particulares. Una
vocación que debes tener. Adán en el paraíso labró
suelo. Dios nunca selló las garantías para la
ociosidad. Pero toda vocación tiene su trampa; como
algunos pecan al vivir sin vocación, así otros pecan
en una vocación. Recuerde cuán mortal es un
pecado maligno. Evite los pecados a los que está
expuesto en su oficio. Preste atención a todo fraude y
colusión en sus tratos. "Haz por los demás lo que te
gustaría que hicieran por ti". Mateo 7:12.
Ten cuidado con la lengua pecadora al vender. La
Escritura dice de alguien que va al cielo: "Habla la
verdad en su corazón". Salmo 15: 2. Es costumbre de
muchos decir que la mercancía les cuesta más y, sin
embargo, toman menos. Esto es poco loable.
Cuidado con un equilibrio engañoso. "La balanza del
engaño está en su mano". Os 12: 7. Los hombres al
hacer que sus pesos sean más ligeros, hacen que sus
cuentas sean más pesadas.
Tenga cuidado con las mercancías mezcladas y
degradantes. "Vendemos la basura del trigo". Amós
8: 6. Escogen los mejores granos de trigo y venden
los peores al mismo precio que lo hicieron mejor.
Mezclar un bien ordinario con lo fino y venderlo
todo por muy bien no es mejor que un engaño. Isaías
1:22.
Tenga cuidado de no estirar demasiado la conciencia
o de tomar más de lo que vale por un bien. "Si le
hacen una venta a su vecino o una compra a él, no se
engañen entre sí". Levítico 25:14. Se permite una
ganancia legítima ; sin embargo, uno no puede
beneficiarse tanto de sí mismo como para dañar a
otro. Sea el lema del comerciante: "Una conciencia
libre de ofensa hacia Dios y hacia los hombres".
Hechos 24:16. Tiene un trato difícil, que compra el
mundo con la pérdida de su alma.
(5) El pecado es un mal tan mortal, preste
atención a la APARIENCIA del pecado. Abstente no
solo del mal, sino de la apariencia del mal. Si no es
absolutamente un pecado, pero si parece pecado,
evítelo. El que es leal a su príncipe, no solo se
abstiene de tener su mano en la traición, sino que
también prestará atención a lo que tiene una
apariencia de traición. La amante de José lo tentó, y
él huyó y no quiso estar con ella. Génesis 39:12. Una
apariencia de bien es muy poco; y una apariencia de
maldad es demasiado.
La aparición del mal suele ser motivo de maldad. Dalliance
en un

apariencia del mal, a menudo ocasiona maldad.

Tocar la fruta prohibida ocasiona la degustación. El
baile ha sido a menudo motivo de impureza.
La apariencia del mal puede dañar a otro. "Cuando
pecas contra los hermanos y hieres su conciencia
débil, pecas contra Cristo". 1 Corintios 8:12. Pecar
contra un miembro de Cristo es pecar contra el
mismo Cristo.
¿Qué MEDIOS usaremos para evitar actos de pecado?
(1) Si quieres ser preservado de pecados reales y
escandalosos, trabajo para MORTIFICAR el
pecado original. Si no quieres que las ramas broten
y florezcan, ¡golpea de raíz! Sé que el pecado original
no puede ser quitado en esta vida, pero esfuérzate
por dominarlo . ¿Por qué los hombres cometen
pecados reales , sino porque no mortifican los
pecados del corazón? Reprime los primeros brotes de
orgullo, lujuria y pasión. ¡El pecado original no
mortal, resultará una raíz de amargura tal que
traerá la raíz maldita del pecado escandaloso !
(2) Si quieres evitar cometer pecados reales,
piensa en lo odioso que es el PECADO. Además de
lo que has escuchado, recuerda que el pecado es la
cosa maldita. Josué 7:13. Es la cosa abominable que
Dios odia. "Oh, no hagas esta cosa abominable que
odio." Jer 44: 4. El pecado es el excremento del
diablo; se llama inmundicia. Santiago 1:21. Si se
juntaran todos los males del mundo y se filtrara su
esencia, no podrían hacer algo tan inmundo como el
pecado. Tan odioso es un pecador que Dios aborrece
verlo. "Mi alma los aborreció". Zacarías 11: 8. El que
se contamina con avaricia, ¿qué es sino una
serpiente que lame el polvo? El que se contamina
con deseos de inmundicia, ¿qué es sino un cerdo con
cabeza de hombre? El que se contamina de orgullo,
¿qué es sino una burbuja que el diablo ha hecho
estallar? El que se contamina con la embriaguez,
¿qué es sino una bestia asombrosa? Considerar cuán
odioso y vil es el pecado, sería un medio para evitar
que pequemos.
(3) Si quieres ser protegido de los pecados reales,
planta el TEMOR de Dios en tu corazón. "Mediante
el temor del Señor, el hombre evita el mal".
Proverbios 16: 6. El temor de Dios es un freno para el
pecado y un acicate para

santidad. El temor de Dios pone un temor santo en el

corazón y lo une a un comportamiento piadoso.
Cuando la emperatriz Eudoxia amenazó con
desterrar a Crisóstomo, "Dile", dijo, "No temo más
que al pecado". El temor de Dios está como portero a
la puerta del alma y evita que el pecado entre. Todo
pecado se comete por falta del temor de Dios.
Sepulcro abierto es su garganta; con su lengua
engañan. Veneno de víboras hay debajo de sus
labios. Llena está su boca de maldición y amargura.
Sus pies son prestos para derramar sangre; ruina y
miseria hay en sus caminos, y en la senda de paz que
no han conocido. ¡ No hay temor de Dios ante sus
ojos! " Romanos 3: 13-18. El temor santo se erige
como centinela y siempre está vigilando la seguridad
carnal, el orgullo y el desenfreno. El temor de Dios es
el salvavidas del cristiano para defenderlo de los
dardos ardientes de la tentación. La forma de estar
seguro es siempre temer a Dios.
(4) Si queremos evitar los pecados reales,
tengamos cuidado de evitar todas las entradas y
OCASIONES del pecado. No te encuentres con
malas compañías. El que no se contagie de la peste,
no debe entrar en una casa infectada. Cuida tus
sentidos, que pueden ser las entradas al pecado.
Mantenga los dos portales, el ojo y el oído .
Especialmente cuide sus ojos. Mucho pecado entra
por el ojo; el ojo es a menudo una entrada al pecado;
el pecado echa fuego a los ojos; el primer pecado del
mundo comenzó en el ojo. "Cuando la mujer vio que
el fruto del árbol era bueno para comer y agradable
a la vista , y también deseable para adquirir
sabiduría, tomó un poco y lo comió". Génesis 3: 6.
Mirar engendró lujuria . La intemperancia comienza
en el ojo. Mirar el vino cuando es tinto y da su color
en copa provoca un exceso de bebida. Proverbios
23:31. La codicia comienza en los ojos. "Cuando vi
entre los despojos una hermosa vestidura babilónica
y una cuña de oro, los codicié y los tomé". Josué 7:21.
El fuego de la lujuria comienza a encenderse en los
ojos. David, caminando sobre el techo de su casa, vio
a una mujer que se lavaba, y ella era, dice el texto,
"hermosa a la vista ", y envió mensajeros, la tomó y
se contaminó con ella. 2 Samuel 11: 2. ¡Por tanto,
cuidado con tus ojos! Job hizo un pacto con sus ojos.
Job 31: 1. Si el ojo se inflama una vez, será difícil
mantenerse firme contra el pecado. Si el enemigo se
apodera de las obras exteriores, existe un gran
peligro de que se apodere de todo el castillo.
(5) Si quieres evitar cometer un pecado grave, estudia
TEMPLANZA. 1 Pedro 5: 8. "Sé sobrio". Controle el
apetito desmesurado, porque el pecado
frecuentemente hace su entrada de esta manera. Al
gratificar el apetito sensible, el alma, que es
semejante a los ángeles, queda esclavizada a la parte
brutal. Muchos beben hasta la somnolencia, si no la
embriaguez. No negar el apetito sensible, hace que la
conciencia de los hombres se llene de culpa y el
mundo de escándalo. Si quiere evitar que corra
hacia el pecado, refrena la carne. Porque ¿para qué
ha dado Dios razón y conciencia , sino para ser una
brida para controlar los deseos desordenados?
(6) Si se le guarda de los pecados reales, esté
continuamente en su VIGILANCIA espiritual.
Cuida tus PENSAMIENTOS. "¿Hasta cuándo tus
vanos pensamientos permanecerán dentro de ti?"
Jer 4:14. El pecado comienza en los pensamientos.
Primero, los hombres alimentan pensamientos
vengativos, luego se mojan las manos en sangre. Pon
un espía sobre tus pensamientos.
Cuida tus PASIONES de ira y pasiones de lujuria.
El corazón está listo para ser destruido por sus
propias pasiones, como un barco que sus velas
volcan. La pasión se transporta más allá de los
límites de la razón. La ira es una locura temporal .
Moisés en una pasión "habló sin avisar con sus
labios". Salmo 106: 33. Los discípulos en una pasión,
querían invocar fuego del cielo. Un hombre
apasionado es como un barco en una tormenta que
no tiene piloto ni velas que lo ayuden , pero que está
expuesto a las olas y las rocas.
Cuida tus TENTACIONES. Satanás continuamente
nos tiende una emboscada y vela para llevarnos al
pecado. El diablo está ceñido para la batalla. Él
siempre está pescando por nuestras almas. O está
poniendo trampas o disparando dardos. Por tanto,
teníamos que vigilarle, para que no seamos
engañados al pecado. La mayor parte de los pecados
se cometen por falta de vigilancia. "¡Cuidado!
Cuidado con los ataques del Diablo, tu gran enemigo.
¡Merodea como un león rugiente, buscando una
víctima para devorar!" 1 Pedro 5: 8
(7) Si quieres ser guardado de la maldad del
pecado, conoce bien las ESCRITURAS. "Tu palabra
he guardado en mi corazón, para no pecar contra ti".
Salmo 119: 11. ¡La Palabra es una espada de dos filos
para cortar las concupiscencias de los hombres!
Cuando las nieblas y los vapores del pecado
comiencen a levantarse, deje que la luz de las
Escrituras brille en el alma y las disipa. "Deja el

La Palabra de Cristo habite en abundancia en

vosotros ". Col 3:16. Alfonso, rey de Aragón, leyó la
Biblia catorce veces. La Palabra muestra la maldita
maldad del pecado; nos da preceptos, que son tantos
remedios y antídotos contra ¡Cuando Cristo tuvo la
tentación de pecar, rechazó al tentador y lo hirió tres
veces con la espada del Espíritu! "Está escrito!" ¿Por
qué los hombres viven en el pecado, sino porque o
no leen la Palabra? o no lo crees?
(8) Si quieres ser preservado del pecado craso y
presuntuoso, enciende tu corazón con AMOR a
Dios. El amor tiene una gran fuerza; es "fuerte como
la muerte"; rompe la liga entre el corazón y el
pecado. Dos cosas en Dios causan amor.
[1] Su gloriosa BELLEZA. Moisés deseaba
vislumbrarlo. "Señor, muéstrame tu gloria".
[2] Su asombroso AMOR. ¡Qué maravilla de amor
fue dar a su Hijo de su seno, y poner tal joya en
empeño para nuestra redención! Las glorias de la
belleza de Dios y la magnitud de su amor, como dos
piedras de carga, atraen nuestro amor hacia Dios; y
si lo amamos, no pecaremos contra él. El que ama a
su amigo, no le desagradará de ninguna manera. He
leído de cuatro hombres reunidos, que
se preguntaban unos a otros qué era lo que les
impedía pecar. El primero dijo, "el miedo al
infierno". El segundo dijo, "las alegrías del cielo". El
tercero dijo, "la odiosidad del pecado". El cuarto
decía, "lo que me mantiene alejado del pecado es el
amor a Dios. ¿Pecaré contra un Dios tan amoroso?
¿Abusaré de Su amor?" El amor a Dios es el mejor
freno para evitar el pecado. "Si me amas, guardarás
mis mandamientos". Juan 14:15
(9) Si quieres ser guardado de la maldad del
pecado, sé diligente en una VOCACIÓN. Adán en el
paraíso debe hasta el suelo. Los que viven ociosos, se
exponen al pecado. Si no tenemos trabajo que hacer,
Satanás encontrará trabajo suficiente para nosotros;
siembra la mayor parte de su semilla en barbecho .
Una mujer que estaba muy tentada a pecar, se
acercó al pastor y le preguntó qué debía hacer para
resistir la tentación. Él respondió: Trabaja siempre
bien, para que cuando venga Satanás te encuentre
ocupado en tu vocación y no tenga tiempo para
escuchar su tentación.

(10) Si quieres ser protegido del pecado, fija el

ojo de tu mente en la "belleza de la SANTIDAD".
La santidad consiste en la conformidad con Dios. Es
el destello de la naturaleza divina, un rayo de Dios
que brilla en el alma. ¡Cuán hermosa es la esposa de
Cristo cuando está engalanada y adornada con las
joyas de la santidad! ¿Qué hace que los serafines
sean ángeles de luz, sino su santidad? Piensen en lo
espléndido y glorioso que es la santidad , y les
causará asco y odio al pecado, que es tan contrario a
ella. La contemplación de la belleza nos hará
rebelarnos ante la deformidad.
(11) Si quieres evitar la maldad del pecado,
medita con frecuencia en la MUERTE. Piense en lo
inevitable de la muerte. Hebreos 9:27. "Se designó a
los hombres que mueran una vez." No estamos tan
seguros de acostarnos esta noche en nuestra cama
como para acostarnos en nuestra tumba. Piense en
la incertidumbre del momento. Mantenemos nuestra
vida a voluntad de nuestro arrendador; ¡Cuán
pronto Dios nos saque de esta casa de barro! La
muerte a menudo llega cuando menos la buscamos.
El diluvio, como observan algunos eruditos
escritores, llegó en el mes de abril, en la primavera;
cuando los árboles estaban floreciendo, y los pájaros
cantaban, y los hombres menos lo buscaban. De la
misma manera, a menudo en la primavera de la
juventud, cuando el cuerpo está más sano y los
espíritus más vivaces y vigorosos, y menos se piensa
en ello, entonces llega la muerte. Si pensáramos a
menudo y en serio en la muerte, el pecado sería una
herida de muerte. [Nada impide tanto el pecado
como el pensamiento frecuente de la muerte.]
Agustín. No hay antídoto más fuerte contra el pecado
que el pensamiento: "¡Ahora estoy pecando, y
mañana puede estar muriendo! ¿Qué pasaría si la
muerte me encontrara haciendo la obra del diablo? ¿
No me enviaría a él para recibir mi salario?"
¿Pensaría el adúltero: "Ahora estoy en el acto de
pecar, pero cuán pronto llegará la muerte, y
entonces yo, que he ardido en la lujuria, debo arder
en el infierno"? Le provocaría un escalofrío en el
alma y le haría temer la inmoralidad.
(12) Si quiere evitar cometer pecados graves y
escandalosos, tenga cuidado con un corazón
COVETO. La codicia es una borrachera seca. El que
tiene sed insaciable del mundo, no se apegará al
pecado; traicionará a Cristo y una buena causa por el
dinero. "El amor al dinero es la raíz de todos los
males". 1 Timoteo 6:10. De esta raíz viene el robo . El
codicioso corazón de Acán le hizo robar la cuña de
oro. Josué 7:21. La codicia llena las cárceles. De la
raíz de la codicia viene el asesinato . ¿Por qué Ahab
apedreó

¿Nabot hasta la muerte, sino para poseer su viña? 1

Reyes 21:13. La codicia ha hecho que muchos naden
hacia la corona: en sangre. De esta amarga raíz de la
codicia procede el fraude . Es la mano codiciosa, que
sostiene pesos falsos. De esta raíz de la codicia
proviene la inmoralidad . Leíste sobre el alquiler de
una puta. Deuteronomio 23:18. ¡Por dinero vendería
tanto su conciencia como su castidad! ¡Oh, si
quisieras ser guardado de la maldad del pecado, ten
cuidado con la codicia, que es la entrada a tantos
pecados!
(13) Oremos mucho a Dios para que no nos
sumerjamos en el pecado. "Guarda a tu siervo de
los pecados presuntuosos". Salmo 19:13. No tenemos
ningún poder inherente para protegernos del mal.
Cristo nos enseñó a orar: "Líbranos del mal". Si
tenemos poder en nosotros mismos para evitar el
pecado, ¿por qué orar a Dios por poder? ¡Pobre de
mí! si David y Pedro, que eran la gracia fuerte,
cayeron por falta de un nuevo vendaval del Espíritu
que los sostenga , mucho más estarán en peligro de
caer, quienes solo tienen el poder del libre albedrío
para sostenerlos.
Por lo tanto, pidamos a Dios que nos dé fuerzas para
evitar que pequemos. Recemos la oración de David:
"¡Sostenme y estaré a salvo!" Salmo 119: 117.
"Mantén mis pasos en tus sendas, para que no
resbalen mis pasos". Salmo 17: 5. "Señor, guárdame
de deshonrarte; guárdame de los pecados
contaminantes de la época, para que no sea peor
para los tiempos, ni los tiempos peores para mí".
"Guarda a tu siervo de los pecados presuntuosos".
"¡Señor, cualquier cosa que sufra, guárdame del
pecado!" El niño está a salvo en los brazos del padre;
y solo estamos a salvo de caer en el pecado, mientras
estamos en los brazos de Cristo y de la gracia
gratuita. "Yo les doy vida eterna, y nunca perecerán;
¡nadie puede arrebatarlos de mi mano!" Juan 10:28
En segundo lugar, esta exhortación se aplica a los
hijos de Dios. ¡Ustedes que son profesores y portan
los colores de Cristo, les suplico, sobre todos los
demás, que presten atención al pecado! Cuidado con
cualquier acción escandalosa e impropia del
evangelio. Habéis oído cuán sumamente maligno es
el pecado. ¡No te acerques al fruto prohibido!
"¡Aunque Israel sea una prostituta, que Judá evite tal
culpa!" Os 4:15. Así que, aunque los hombres inicuos
pecan, no permita que la esposa de Cristo contamine
los pechos de su virginidad. El pecado no le conviene
a nadie, pero menos le conviene a los profesores. El
estiércol es feo en la calle ; pero verlo en el templo es
mucho más ofensivo. La lepra en el pie está enferma,
pero ver una llaga leprosa en la cara es mucho peor.
Ver el pecado estallar

en los que tienen rostro religioso, es más abominable.

Los pecados de los malvados no son tanto de
asombro. "Los impíos harán lo malo ". Dan 12:10. No
es de extrañar ver a un sapo escupir veneno. No fue
tan sorprendente ver a Caín o Acab pecar; pero ver el
incesto de Lot, o ver las manos de David manchadas
de sangre, fue realmente asombroso. Cuando el sol se
eclipsa, todos se ponen de pie y lo miran. Así, cuando
un niño de la luz es eclipsado por un pecado
escandaloso, todos se quedan de pie y contemplan
ese eclipse.
Los pecados del pueblo de Dios , en cierto sentido,
lo provocan más que los pecados de los malvados.
Leemos sobre las provocaciones de sus hijos e hijas.
Deuteronomio 32:19. Los pecados del impío enojan a
Dios, pero los pecados de su pueblo lo entristecen .
Los pecados del pueblo de Dios tienen un aspecto
más maligno y son de un tinte más negro que otros.
Hay agravamientos en los pecados de su pueblo, que
no se encuentran en los pecados de los no
regenerados, en ocho detalles:
(1) Los piadosos tienen un principio interno de
gracia, que puede restringirlos del pecado.
Cuando los impíos pecan, no tienen ningún principio
que los refrena; tienen viento y marea para llevarlos,
no tienen nada que los aleje del pecado. Pero un hijo
de Dios tiene un principio de gracia para poner freno
al pecado; tiene los impulsos del Espíritu de Dios que
lo disuaden del mal. Para él, por tanto, cometer
pecado es mucho peor que para otros. Es pecar más
desesperadamente; ¡Es como si una mujer fuera a
matar a su propio bebé en su vientre! Cristiano,
cuando pecas con presunción, ¡haces lo que en ti
miente para matar al bebé de la gracia en tu alma!
(2) Los pecados del pueblo de Dios son mayores
que los de otros, porque pecan contra más
misericordia. La misericordia de Dios es como un
peso puesto en una balanza para hacer que el
pecado pese más. Dios le ha dado a Cristo a un
creyente; lo cortó de la cepa silvestre de la
naturaleza y lo injertó en el verdadero olivo; y para
él, abusar de toda esta misericordia es superar a los
malvados, y pecar con mayor agravación, porque es
pecar contra un amor mayor. ¡Cómo se realzó y
acentuó el pecado de Pedro, al haber hecho Cristo
más por él que por otros! Había derramado sobre él
un poco del aceite sagrado; lo había incluido en el
número de los apóstoles; lo había llevado al monte
de la transfiguración y le había mostrado la gloria
del cielo en una visión. Que Pedro negara a Cristo
después de toda esta misericordia fue atroz, y
¡No podría ser perdonado sino por un milagro de amor!
(3) Los pecados de los piadosos tienen esta
agravación en ellos: que pecan contra una
iluminación más clara que los malvados. "Son de
los que se rebelan contra la luz". Job 24:13. La luz se
toma en sentido figurado por conocimiento. No se
puede negar, pero los malvados pecan a sabiendas;
pero los piadosos tienen una luz más allá de ellos,
una luz tan divina y penetrante , que ningún
hipócrita puede alcanzar. Tienen mejores ojos que
los demás para ver el pecado; y para que se
entrometan en el pecado y abrazen este muladar, es
necesario que provoquen a Dios y hagan que la furia
se eleve en su rostro. ¡Oh, pues, ustedes que son el
pueblo de Dios, huyan del pecado! ¡Tus pecados son
más intensos y tienen peores agravamientos que los
pecados de los no regenerados!
(4) Los pecados de los piadosos son peores que
los de los no regenerados; porque, cuando pecan,
es contra las grandes experiencias. Han sentido la
amargura del pecado en los dolores del nuevo
nacimiento , y luego Dios ha hablado de paz, y han
tenido un gusto experimental de cuán dulce es el
Señor; y sin embargo, después de estas experiencias,
que tocan el fruto prohibido y se aventuran en un
pecado presuntuoso, aumenta y agrava su culpa, y es
como poner un peso más en la balanza para hacer
que su pecado pese más. Los malvados nunca han
probado la dulzura de una vida celestial; nunca han
sabido lo que es tener una sonrisa de Dios; nunca
han probado nada más dulce que el maíz y el vino;
por tanto, no es de extrañar si pecan. Pero para un
hijo de Dios que ha recibido tales muestras de amor
del cielo, y experiencias señaladas de Dios, para
satisfacer una lujuria, ¡qué horrible es esto! Fue una
agravación del pecado de Salomón, que su corazón
se apartó del Señor, que se le había aparecido dos
veces. 1 Reyes 11: 9.
(5) Los pecados de los piadosos son mayores que
los de otros, porque pecan contra su filiación.
Cuando los impíos pecan, pecan contra el mandato;
pero cuando los piadosos pecan, pecan contra un
privilegio; abusan de su filiación. Los piadosos son
adoptados en la familia del cielo, tienen un nuevo
nombre. ¿Es algo ligero, dijo David, ser yerno de un
rey? Entonces, ser llamados hijos de Dios, ser
herederos de las promesas, no es un honor menor. El
que tales se encuentren en una ofensa manifiesta es
pecar contra su adopción. De este modo se vuelven
viles, como si el hijo de un rey fuera

cayendo en el fango, o yaciendo entre cerdos.

(6) Los pecados de los piadosos son peores que
los de otros, porque se cometen en contra de más
votos y compromisos. Han entregado sus nombres
a Dios; se han comprometido solemnemente con
Dios por juramento. "He jurado que guardaré tus
justos juicios". Salmo 119: 106. En la Cena del Señor,
han renovado este voto sagrado; y, después de esto,
caer en un pecado presuntuoso, es una falta de voto,
una especie de perjurio, que tiñe el pecado de un
color carmesí.
(7) Los pecados de los piadosos son peores que
los de otros, porque traen mayor reproche a la
religión. Porque es de esperarse de los impíos que
pecan, como los cerdos se revolcan en el cieno; pero
cuando las ovejas lo hacen, cuando los piadosos
pecan, redunda en deshonra del evangelio. "Con este
hecho has dado gran ocasión a los enemigos del
Señor para blasfemar". 2 Samuel 12:14. La mirada de
todos está sobre una mancha de lino blanco; para los
piadosos pecar, es como una mancha en lino blanco,
es más tomado en cuenta y refleja mayor deshonra
sobre los caminos de Dios. Cuando el sol se eclipsa,
todos se paran y lo miran; así, cuando un niño de luz
es eclipsado por un pecado escandaloso, todos se
paran y lo miran. ¡Cómo sufre el evangelio por los
abortos involuntarios de los piadosos! Su sangre
nunca podrá lavar la mancha que traen a la religión.
(8) Los pecados de los piadosos son peores,
porque animan y endurecen a los impíos en el
pecado. Si los malvados ven a los piadosos sueltos y
mundanos en sus vidas, piensan que ellos también
pueden hacerlo. Los impíos hacen de los piadosos su
modelo, no imitando sus virtudes, sino sus vicios; y
¿no es terrible ser el medio para condenar a otros?
Estas son las agravaciones de los pecados de los
piadosos. Tú, por tanto, sobre todos los demás, ten
cuidado con el pecado presuntuoso. Tus pecados
hieren la conciencia, debilitan la gracia y provocan a
Dios más que los pecados de los demás, y Dios
seguramente te castigará. Quien escapa, no lo harás.
"Sólo a ti te he conocido de todas las familias de la
tierra; por tanto, te castigaré por todas tus
iniquidades". Amós 3: 2. Si Dios no te condena, puede
que te envíe al infierno en esta vida; él puede causar
tales agonías y temblores de corazón, que serán un
terror para ustedes mismos. Puede que se acerquen
a la desesperación y estén listos para verse a sí
mismos como náufragos. Cuando David

se había manchado de adulterio y asesinato, se

quejaba de sus huesos rotos. Salmo 51: 8. Esta
metáfora expone el dolor y la agonía de su alma;
yacía en dolorosa deserción durante tres cuartos de
año, y se cree que nunca recuperó su alegría plena
hasta el día de su muerte. Oh, pues, ustedes que
pertenecen a Dios y están inscritos en su familia,
tengan cuidado de manchar su profesión con pecado
escandaloso; lo pagará caro. Piense en los huesos
rotos. Aunque Dios no te borra de su libro , puede
que te eche de su presencia llena de gracia. Salmo
É
51: 2: Él puede mantenerte en una larga deserción.
Pueden sentir tales latigazos en su conciencia, que
pueden rugir y pensar que están medio en el
infierno.
[2] También oramos en un sentido especial :
"Líbranos del mal". Oramos para ser liberados del
mal bajo una triple noción.
1. De la maldad de nuestro corazón , que se llama corazón
malo. Hebreos 3:12.
2. De la maldad de Satanás , quien es llamado el "maligno".
Mateo 13:19.
3. De la maldad del mundo , que se llama un "mundo malo".
Gálatas 1: 4.
(1) En la petición, "Líbranos del mal", oramos
para ser librados del mal de nuestro CORAZÓN,
para que no nos induzca al pecado. El corazón es
la fuente envenenada, de donde fluyen todos los
pecados actuales. "Porque de adentro, del corazón de
una persona, salen los malos pensamientos, la
inmoralidad sexual, el hurto, el asesinato, el
adulterio, la codicia, la maldad, el engaño, el afán de
placeres lujuriosos, la envidia, la calumnia, el
orgullo y la necedad". Marcos 7: 21-22. La causa de
todo mal reside en el propio seno del hombre ; todo
pecado comienza en el corazón. La lujuria se concibe
primero en el corazón y luego se introduce en el
mundo como partera. ¿De dónde viene la ira
precipitada? El corazón enciende la lengua. El
corazón es un taller o un asilo donde todo pecado es
inventado y machacado. ¡Cuán necesaria, por tanto,
es esta oración, líbranos de la maldad de nuestro
corazón! El corazón es el mayor seductor, por eso el
apóstol Santiago dice: "Cada uno es tentado cuando,
por su propio mal deseo, es arrastrado y seducido".
Santiago 1:14. El diablo no podría hacernos daño si
nuestro propio corazón no diera su consentimiento.
Todo lo que puede hacer es poner el anzuelo, ¡pero
es culpa nuestra tragarnos!
Oremos para ser liberados de las concupiscencias y los
engaños de nuestro propio corazón.

"Líbranos del mal." Lutero temía a su corazón más

que al papa o al cardenal; y era la oración de
Agustín: "¡Señor, líbrame de mí mismo!" Fue un
buen consejo que le dio a su amigo: "¡Cuídate!"
Cuidado con el traidor del pecho, la carne. El
corazón de un hombre es el caballo de Troya, del
cual surge todo un ejército de deseos.
(2) En esta petición, "Líbranos del mal", oramos
para ser librados del mal de SATANÁS. Él es "el
maligno". Mateo 13:19. ¿En qué sentido es Satanás
el maligno?
Fue el primer inventor del mal. Planeó la primera traición.
Juan 8:44.
Su inclinación es solo al mal. Efesios 6:12.
Su práctica constante es hacer el mal. 1 Pedro 5: 8.
Él tiene algo que ver con todos los males y males que
suceden en el mundo.
Impide el bien. "Me mostró al sumo sacerdote Josué
que estaba de pie ante el ángel del Señor, y Satanás
estaba a su diestra para resistirlo". Zacarías 3: 1.
Provoca al mal. Lo puso en el corazón de Ananías
para mentir. "¿Por qué Satanás ha llenado tu
corazón para mentir al Espíritu Santo?" Hechos 5: 3.
El diablo sopla el fuego de la lujuria y la contienda.
Cuando los hombres son orgullosos, la serpiente
antigua los envenena y los hincha. Así que él es el
maligno y bien podemos orar: "Señor, líbranos del
maligno". La palabra Satanás en hebreo significa un
oponente o adversario .
Es un adversario inquieto , nunca duerme. Los
espíritus no necesitan dormir. Siempre está activo y
no descansa. Él "camina". 1 Pedro 5: 8. ¿Y cómo
camina? No como peregrino, sino como espía.
Observa de cerca dónde puede colocar sus piezas de
batería y realizar sus asaltos con mayor ventaja
contra nosotros. Satanás es un inventor sutil; no hay
lugar que nos pueda proteger de sus asaltos e
incursiones. Mientras oramos, escuchamos y
meditamos, él está en nuestra compañía.
Satanás es un poderoso adversario, está armado con poder.
Se le llama el

"hombre fuerte." Lucas 11:21. Toma cautivos a los

hombres a su gusto. "Que son llevados cautivos por
él a su voluntad". 2 Timoteo 2:26. Esto alude a un
pájaro que es capturado vivo en la trampa. La obra
del diablo consiste en inclinarse por las almas de los
hombres; pone cebos adecuados. Atrae al hombre
ambicioso con honor. Atrae al codicioso con las
riquezas; ceba su anzuelo con plata. Atrae, atrae al
hombre lujurioso con belleza; tienta a los hombres
al regazo de Dalila, para apartarlos del seno de
Abraham. El diablo se gloría en la condenación de
las almas. ¡Cuán necesaria es entonces esta oración:
"Líbranos del mal!" ¡Señor, guárdanos del maligno!
Aunque Satanás nos pida que pequemos, no
permitas que demos consentimiento; aunque pueda
asaltar el castillo de nuestros corazones, no
entreguemos las llaves del castillo a nuestro enemigo
mortal. "¡Cuidado! Cuidado con los ataques del
Diablo, tu gran enemigo. ¡Merodea como un león
rugiente, buscando una víctima para devorar!" 1
Pedro 5: 8
(3) En esta petición, "Líbranos del mal", oramos
para ser librados del mal del MUNDO. Se le llama
un mundo malo, pero no porque el mundo, como
Dios lo hizo, es bueno, pero a través de nuestra
corrupción, se vuelve malo, y teníamos necesidad de
orar, líbranos de un mundo malo. "Él murió por
nuestros pecados, tal como Dios nuestro Padre
planeó, para rescatarnos de este mundo malo en el
que vivimos". Gálatas 1: 4.
¿En qué sentido es un mundo maligno?
(1) Es un mundo DEFINANTE. Es como vivir en un
aire infeccioso, se requiere un alto grado de gracia
para mantenernos "sin mancha del mundo".
Santiago 1:27. Es tan difícil vivir en el mundo y no
contaminarse, como estar mucho tiempo al sol y no
broncearse.
Las opiniones del mundo son contaminantes; como
que un poco de religión servirá al turno; que, como
una hoja de oro, debe extenderse pero fina; que la
moralidad corre paralela a la gracia; que ser celoso
es ser justo sobre mucho; que es mejor mantener la
piel entera que la conciencia pura; que la carne es
más gratificante que mortificada. Estas opiniones del
mundo son contaminantes.
Los ejemplos del mundo son contaminantes. Los
ejemplos tienen una gran fuerza para atraernos al
mal. [Un príncipe grande en poder es más grande
con su ejemplo.] Los príncipes son espejos con los
que nos vestimos; si hacen mal,

tendemos a imitarlos. Los grandes hombres son

copias que ponemos ante nosotros, y por lo general
escribimos más como la copia, cuando está borrada .
Tenemos una gran inclinación a seguir los ejemplos
del mundo; por tanto, Dios ha hecho una
advertencia en su contra. "No seguirás a la multitud
para hacer el mal". Éxodo 23: 2. ¡Cuán fácilmente nos
apresuramos a pecar, cuando tenemos la marea de
la corrupción natural y el viento del ejemplo para
llevarnos! Lot fue la maravilla del mundo; la tez de
su alma se mantuvo pura en el aire contagioso de
Sodoma. El río del Perú, en América del Sur, después
de desembocar en el mar principal, se mantiene
fresco y no se mezcla con las aguas saladas; al que
podría compararse a Lot, cuya piedad se mantenía
fresca en el agua salada de Sodoma. Los malos
ejemplos son contagiosos. "Se mezclaron con los
paganos y adoptaron sus malas costumbres". Salmo
106: 35. ¿No habíamos necesitado entonces orar:
Señor, líbranos de este mundo malo? Vivir en el
mundo es como tratar de mantenerse impecable
mientras se viaja por un camino sucio.
(2) Es un mundo malvado, ya que es un mundo
ENSNARING. El mundo está lleno de trampas. La
compañía es una trampa, la recreación es una
trampa, las riquezas son lazos de oro. [Las riquezas
son incitaciones al pecado.] El apóstol habla de los
deseos de la carne, y los deseos de los ojos y la
vanagloria de la vida. "1 Juan 2:16. Los deseos de la
carne son belleza; los deseos de los ojos. es dinero; el
orgullo de la vida es el honor; estas son la trinidad
del hombre natural. [En el mundo, el esplendor de la
riqueza, la grandeza de la alta reputación y los
encantos del placer nos alejan del amor de Dios.]
El mundo es un enemigo halagador; a quien besa
traiciona; es un cabestro de seda. Los placeres del
mundo, como el opio, arrojan a los hombres al sueño
de la seguridad carnal. Lisímaco vendió su corona
por un vaso de agua; por eso, muchos se
separan del cielo, por el mundo. El rey de Armenia
fue enviado prisionero de la reina Cleopatra con
grilletes de oro. Demasiados están esclavizados con
las cadenas de oro del mundo. El mundo hechizó a
Demas. 2 Timoteo 4:10. Uno de los propios apóstoles
de Cristo fue atrapado con un cebo de plata. Es difícil
beber el vino de la prosperidad y no marearse. El
mundo, a través de nuestra corrupción innata, es
malvado, ya que es una trampa. "Los que quieren
enriquecerse caen en tentación y lazo". 1 Timoteo 6:
9. Si un ángel viviera aquí, no habría peligro de que
el mundo lo atrapara, porque no tiene un principio
interior para recibir la tentación; pero tenemos un
principio corrupto que se adapta a la tentación, y eso
nos pone siempre en peligro.

(3) Es un mundo malvado ya que es un mundo

DESALENTADOR. Arroja desprecio y reproche sobre
los que viven virtuosamente. "¿Qué, serás más santo
que otros, más sabio que tus antepasados?" El
mundo trata con los profesores de religión, como lo
hizo Sanbalat con los judíos cuando estaban
construyendo. "Él ridiculizó a los judíos. ¿Qué están
haciendo esos judíos débiles? ¿Restaurarán su
muro? ¿Podrán revivir las piedras de esos montones
de escombros, quemados como están?" Nehemías
4: 1-2. De modo que el mundo inicuo arroja chispas
de reproche al piadoso. "¿Qué, construirás para el
cielo? ¿Cuál es la necesidad de todo este costo? ¿De
qué sirve servir al Todopoderoso?" Así, el mundo
arrancaría las ruedas de nuestro carro cuando nos
dirigimos hacia el cielo. A esto se le llama burlas
crueles. Hebreos 11:36. Se requiere una gran medida
de santidad para resistir los desalientos del mundo,
bailar entre serpientes, reírnos de los reproches y
atarlos como una corona sobre nuestra cabeza.
(4) Es un mundo malvado ya que es un mundo
MUERTE. Embota y amortigua el afecto por los
objetos celestiales. Refresca los movimientos
sagrados, como la humedad en una mina de plata,
que apaga la luz. Las cosas terrenales ahogan la
semilla de la Palabra. Un hombre enredado en el
mundo está tan absorto en preocupaciones
seculares, que no puede importarle más las cosas de
arriba, ¡de lo que un elefante puede volar en el aire!
E incluso los que tienen gracia en sí mismos, cuando
sus afectos están manchados de tierra , se
encuentran muy indispuestos a la meditación y la
oración; es como nadar con una piedra pesada
alrededor del cuello.
(5) Es un mundo malvado, ya que es un mundo
MALIGNO. Odia al pueblo de Dios. "Porque no eres
del mundo, por eso el mundo te odia". Juan 15:19. El
odio, como dice Aristóteles, está en contra de todo el
género. El odio de Amán estaba contra la semilla de
todos los judíos. Cuando puedes encontrar un
leopardo sin manchas, entonces puedes esperar
encontrar un mundo perverso sin odio. La marca a
la que se dispara es la piedad. "Me atacan por
perseguir el bien". Salmo 38:20. El mundo pretende
odiar a los piadosos por otra cosa, pero la base de la
disputa es la santidad. El odio del mundo es
implacable; la ira puede reconciliarse, el odio no.
También puedes reconciliar el cielo y el
infierno, como las dos semillas . Si el mundo odió a
Cristo, no es de extrañar que nos odie a nosotros. "El
mundo me odió antes de odiarte a ti". Juan 15:18.
¿Por qué debería alguien odiar a Cristo? Esta bendita
Paloma no tenía hiel,

esta Rosa de Sarón envió el perfume más dulce; pero

muestra la bajeza del mundo, que es un mundo que
odia a Cristo y odia a los santos . ¿No habíamos
necesitado orar, líbranos de este mundo malvado?
(6) Es un mundo malvado, ya que es un mundo
ENGAÑOSO. Hay engaño en el trato. "La balanza del
engaño está en su mano". Os 12: 7. La palabra
hebrea rimmah significa tanto engañar como
oprimir. El que se atreve a usar el engaño no
perdonará para oprimir.
Hay un engaño en la amistad . "¿Pero un hombre
fiel que puede encontrar?" Proverbios 20: 6. Algunos
usan demasiado el cortejo en la amistad; son como
trompetas que hacen un gran ruido, pero por dentro
son huecas. Algunos pueden halagar y odiar; tanto
elogiar como censurar. Tienen miel en la lengua y
hiel en el corazón. El amor fingido es peor que el
odio.
En la riqueza hay engaño . "El engaño de las
riquezas". Mateo 13:22. El mundo nos hace creer que
satisfará nuestros deseos, ¡pero solo los aumenta !
Nos hace creer que se quedará con nosotros y toma
alas. Proverbios 23: 5.
(7) Es un mundo malvado, ya que es un mundo
VEXING. Está lleno de problemas. "En este mundo
tendrás problemas." Juan 16:33. El mundo es como
una colmena; cuando, habiendo probado un poco de
miel, nos han picado mil abejas. Basil opinaba que
antes del otoño la rosa crecía sin pinchazos; pero
ahora cada dulce flor de nuestra vida tiene sus
espinas. Hay muchas cosas que causan
problemas: pérdida de amigos, demandas judiciales,
cruces patrimoniales. Las relaciones no están
exentas de problemas; algunos están preocupados
porque no tienen hijos, otros porque tienen hijos. ¡El
mundo es una vanidad fastidiosa! Si un hombre es
pobre, los ricos lo desprecian; si es rico, los pobres lo
envidian. Si no encontramos un mundo que nos
atrape , lo encontraremos como un mundo afligido ;
tiene más para destetarnos que para tentarnos.
El mundo es un mar , donde nos vemos arrojados
por las olas del dolor y, a menudo, en peligro de
naufragio. El mundo es un desierto , lleno de
serpientes ardientes. ¡Qué tormentas de persecución
se levantan contra los justos! 2 Timoteo 3:12. Los
malvados son cardos, donde las ovejas de Cristo
pierden parte de su vellón de oro. Micrófono 7: 4.
Entonces si no hubiéramos necesitado orar: "¡Señor,
líbranos de ser heridos por este mundo malvado!"
¿Por qué deberíamos ser

prohibido amar al mundo? Aunque se nos ordena

amar a nuestros enemigos, este es un enemigo que
no debemos amar. "No améis al mundo". 1 Juan 2:15.
[3] Debe observarse, sin embargo, que
abstenerse o tolerar los actos externos del pecado
no es suficiente para darnos derecho a la
salvación. Cuando oramos, "Líbranos del mal", que
está implicado más en ella -es que progresamos en la
santidad. Estar divorciado del pecado no es
suficiente, a menos que estemos desposados con la
virtud ; por tanto, en la Escritura estos dos están
unidos. "Apártate del mal y haz el bien". Salmo 34:14;
Romanos 12: 9. "Deja de hacer el mal, aprende a
hacer el bien". Isaías 1:16, 17. "Limpiémonos de toda
inmundicia de carne y de espíritu, perfeccionando la
santidad". 2 Corintios 7: 1. Dejar el pecado no es
suficiente, a menos que abracemos la justicia. [La
marca de la justicia es más bien hacer el bien que no
hacer el mal.] Como está en el cuerpo, no es
suficiente que la enfermedad se detenga, sino que
debe crecer en salud. De la misma manera, en el
alma, no es suficiente que los actos de pecado sean
perdonados, lo cual está deteniendo una
enfermedad, sino que debe ser saludable y crecer en
santidad.
Utilizar. Son reprobados los que se esfuerzan
únicamente por suprimir los actos externos del
pecado, pero no avanzan hacia la santidad; dejan de
hacer el mal, pero no aprenden a hacerlo bien. Su
religión se basa solo en aspectos negativos; se
enorgullecen de esto: de que no están sometidos a
ningún vicio abierto, nadie puede acusarlos de
ningún feo aborto. "Dios, te doy gracias porque no
soy como los demás hombres: extorsionadores,
injustos, adúlteros". Lucas 18:11. Esto no es
suficiente, debes avanzar un paso más en la piedad
sólida. No basta con que un campo no se siembre
con cizaña o cicuta, sino que debe sembrarse con
buena semilla. Considere dos cosas:
(1) Si no eres culpable de pecados graves, es el mejor
certificado que tienes que mostrar, Dios no te tiene
en cuenta. Aunque una pieza de bronce no es tan
mala como la arcilla, pero al no ser tan buena como
el oro, no pasará por una moneda corriente. De la
misma manera, aunque no eres groseramente
profano, pero no siendo del metal adecuado, sin el
sello de la santidad, nunca pasarás corriente en el
cielo.
(2) Un hombre puede abstenerse de hacer el
mal, pero puede ir al infierno por no hacer el bien.
"Todo árbol que no dé buenos frutos será cortado y

arrojados al fuego. "Mateo 3:10. ¿Por qué fueron

excluidas las vírgenes insensatas? No habían hecho
daño, no habían roto sus lámparas: sí, pero su culpa
era que no había bondad en ellas, no tenían aceite
En sus lámparas, por tanto, no nos contentemos con
estar libres de los pecados más graves , sino
lanzémonos más lejos en la santidad, limpiémonos
de toda contaminación, perfeccionando la santidad.
[4] "Líbranos del mal", puede ser del mal
TEMPORAL. Oramos para que Dios sea prevenir
temporales males o entregar a nosotros fuera de
ellos.
(1) Oramos para que Dios prevenga los males
temporales; que él será nuestra pantalla, para
interponerse entre nosotros y el peligro. "Sálvame de
los que me persiguen". Salmo 7: 1. Podemos orar
legítimamente contra las conspiraciones de los
malvados, para que resulten fallidos, para que,
aunque tengan un mal plan sobre nosotros, no
tengan su deseo sobre nosotros. "Guárdame de los
lazos que me han tendido". Salmo 141: 9.
(2) Oramos para que Dios va a entregar sacarnos de
los males temporales; que quitará de nosotros sus
juicios, ya sea de hambre, de espada o de pestilencia.
"Aparta tu golpe de mí". Salmo 39:10. Sin embargo,
oremos para ser liberados de los males temporales,
solo en la medida en que Dios lo considere bueno
para nosotros. Podemos orar para ser liberados
absolutamente de la maldad del pecado , pero
debemos orar para ser liberados de los males
temporales condicionalmente, en la medida en que
Dios lo considere conveniente y pueda estar con su
gloria.
Utilizar. En todos los problemas que nos acechan,
busquemos a Dios en busca de alivio y apoyo. "¿No
debería este pueblo buscar a su Dios?" Isaías 8:19.
Los papistas, entonces, tienen la culpa de quienes
llaman a la puerta equivocada. Cuando tienen algún
problema, oran a los santos para que los liberen.
Cuando están en peligro de naufragio, rezan a San
Nicolás. ¡Cuando están enfermos, rezan a Santa
Petronila! cuando están de parto, rezan a Santa
Margarita. Cuán ilegal es invocar a los santos en
oración, lo probaré de una Escritura: "¿Cómo, pues,
invocarán a aquel en quien no han creído?"
Romanos 10:14. No podemos orar a nadie más que a
aquellos en quienes creemos; pero no debemos creer
en ningún santo, por lo tanto, no podemos rezarle.
Los papistas, en el Salterio de su Señora, han
dirigido sus oraciones por la liberación de la Virgen
María.
- " Líbrame, Oh Señora. Oh Bendita Señora, en tus
manos está puesta nuestra salvación". Pero
"Abraham nos ignora". Isaías 63:16. Los santos y la
virgen María nos ignoran.
Orar a los santos es idolatría avanzada a blasfemia.
Nuestro Salvador nos ha enseñado en todas nuestras
angustias, a orar a Dios por una cura. "Líbranos del
mal." Solo él sabe cuáles son nuestros problemas y
puede ayudarnos en caso de problemas. El único que
cargó con la carga puede quitársela. David fue a
Dios: "Sácame de mis angustias". Salmo 25:17. Dios
con una palabra puede sanar. "Envió su palabra y los
sanó". Salmo 107: 20. Sacó a los tres niños hebreos
del horno de fuego, a José de la cárcel, a Daniel del
foso de los leones; lo que demuestra que él es Dios,
porque nadie puede librar como él. "No hay otro
Dios que pueda librar después de esta clase". Dan
3:29. Entonces, en todos nuestros apuros y
exigencias, miremos a Dios y digamos: "Líbranos del
mal".