Está en la página 1de 134

PRIMERA IGLESIA BAUTISTA DE CÚCUTA

EN ESTO CREEMOS

------------------------------------------------------

TU PALABRA ES VERDAD
PRIMERA IGLESIA BAUTISTA DE CUCUTA

EN ESTO CREEMOS

------------------------------------------------------

Nuestro propósito:

Existimos pArA COnectA r personAs con Dios y su


fAmiliA, llevArlAs Al crecimiento - mAdurez y
entrenArlAs pArA que sirvAn A Dios en lA IglesiA y
en el mundo.

2
RESEÑA HISTORICA
PRIMERA IGLESIA BAUTISTA DE CÚCUTA

En el año 1968 y en TIBU algunos creyentes Bautista trabajaban en la


empresa de petróleo ECOPETROL, quienes fueron visitado por el pastor
Reyes Ortiz Parada, Carlos Mora y Ramiro Ospina de la Iglesia Bautista
Central de Bogotá para celebrar cultos, quedando la inquietud de
formalizar una misión Bautista, como efectiva mente se formó en la
ciudad de Cúcuta.

Para el año de 1970 , la joven Iglesia bautista de Bucaramanga con J.M.E.


(junta de misiones extranjera) nombró al misionero Jaime Styles, para
trabajar en la nueva misión bautista en Cúcuta, en ese entonces los
hermanos se reunían en la casa del hermano Carlos Urbina, a principio de
año decidieron llamar a un pastor para constituirse en Iglesia, quedando
aprobado en sesión extraordinaria convocada por el pastor Jaime Styles el
día 5 de Abril de 1970 invitar como pastor al entonces presidente de la
convención Bautista, el hermano Rafael Sereno.

El 29 de noviembre de 1970 siendo las tres y cincuenta y cinco de la tarde


la asamblea en pleno dio inicio al acto organización de de la Primera
Iglesia Bautista de Cúcuta.

Son 50 años ya haciendo presencia en la ciudad de Cúcuta. Hoy seguimos


firme con el propósito de seguir cumpliendo el mandato de nuestro Señor
Jesucristo de hacer discípulos a todas las naciones. Mateo 28:19 y 20.

3
CONTENIDO

PRESENTACIÓN

LECCIÓN 1: ACERCA DE LAS SAGRADAS ESCRITURAS

LAS SANTAS ESCRITURAS

LECCIÓN 2: A CERCA DE DIOS

DIOS Y LA SANTA TRINIDAD

EL DECRETO ETERNO DE DIOS

LECCIÓN 3: A CERCA DE LA CREACIÓN Y LA PROVIDENCIA.

LA CREACION

LA DIVINA PROVIDENCIA

LECCION 4: A CERCA DE LA CAIDA Y EL PACTO

LA CAIDA DEL HOMBRE, EL PECADO Y SU CASTIGO

EL PACTO DE DIOS

LECCION 5: A CERCA DE CRISTO

CRISTO EL MEDIADOR

4
LECCION 6: ACERCA DE LA SALVACION

EL LIBRE ALBEDRIO

EL LLAMAMIENTO EFICAZ

LA JUSTIFICACIÓN

LECCION 7: DE LA SALVACION Y LA SANTIFICACION

LA ADOPCIÓN

LA SANTIFICACIÓN

LA FE SALVADORA

EL ARREPENTIMIENTO PARA VIDA Y SALVACIÓN

LECCION 8: DE LAS OBRAS Y LA SEGURIDAD DE LA SALVACION

LAS BUENAS OBRAS

LA PERSEVERANCIA DE LOS SANTOS

LA SEGURIDAD DE LA GRACIA Y DE LA SALVACIÓN

LECCION 9: DE LA LEY Y EL SANTO – PARTE I

LA LEY DE DIOS

EL EVANGELIO Y SU ALCANCE DE SU GRACIA

LA LIBERTAD CRISTIANA Y LA LIBERTAD DE LA CONCIENCIA

5
LECCION 10: DE LA LEY Y DE LOS SANTOS – PARTE II

LA ADORACIÓN RELIGIOSA Y DEL DIA DE REPOSO

LOS JURAMENTOS LEGALES Y VOTOS

EL GOBIERNO CIVIL

LECCION 11: DE LA IGLESIA Y LOS SANTOS

EL MATRIMONIO

LA IGLESIA

LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS

LECCION 12: DE LAS ORDENANZAS

EL BAUTISMO Y LA CENA DEL SEÑOR

EL BAUTISMO

LA CENA DEL SEÑOR

LECCION 13: DE LA ETERNIDAD

EL ESTADO DEL HOMBRE DESPUÉS DE LA MUERTE Y DE LA


RESURRECCIÓN DE LOS MUERTOS

EL JUICIO FINAL

6
GUIA DE ESTUDIO

7
PRESENTACIÓN

Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas,


siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo. Efesios 2:
20.

¿Usted sabe que creemos los Bautistas? ¿Cuáles son nuestras


creencias a la luz de la Palabra que conforman todo nuestro
cuerpo doctrinal y nos diferencian del resto de los movimientos
religiosos que abundan en el mundo? ¿Podrías enumerar y
defender las doctrinas proclamadas en la Biblia frente a
cualquiera que te pidiera una explicación de las mismas?

Las Confesiones de Fe y los Credos Cristianos han abundado en la


historia de la Iglesia. ¿Qué es una “Confesión de Fe”? Una
confesión de fe es una declaración formal en la cual se expresa la
verdad en la que creemos firmemente. Muchos llamados
cristianos se incomodan cuando oyen hablar de confesión de fe y
justifican su incomodidad diciendo que “tienen la Biblia en la
mano y que no necesitan conocer nada de eso”. Sin embargo,
esta actitud es ignorante y constituye una contradicción
evidente.

Muchos cristianos dicen: “Yo creo que Cristo es Dios”, “Creo en la


Trinidad”, “Creo que la Biblia es la Palabra de Dios” “creo que
Dios es Santo”, etc. Todo esto lo que demuestra que consciente o
no, vivimos bajo la autoridad de una determinada doctrina,
confesión de fe o credo, bien sea personal o formal. Si algunos
no creen en la utilidad de escribir y publicar su confesión,
respetamos su posición, si bien diferimos

Todos “creemos” y “confesamos” un credo. El punto es si ese


credo que confesamos es correcto o es incorrecto. Permíteme

8
te hago una pregunta, ¿Crees tú lo que creemos en la Primera
Iglesia Bautista de Cúcuta?

La Confesión de Fe Bautista de Londres de 1689 que hoy


presentamos es considerada históricamente como uno de los
compendios doctrinales más ortodoxos y precisos que existen,
junto con la Confesión de Fe de Westminster. Lógicamente este
documento no pertenece, ni pretendemos dar esa impresión, a
los escritos “inspirados” por Dios mismo, honor que tan sólo le
corresponde a la Biblia, sin embargo, su valor como vamos a
reconocer en esta excelente y profunda explicación de la misma
es significativo y nada despreciable.

Charles Spurgeon, después que


suscribió esta Confesión histórica y la publicó de nuevo en el año
1855, dijo:

“Este documento antiguo es un excelente resumen de aquellas


cosas creídas entre nosotros. Lo aceptamos no como una regla
autoritativa, o como un código de fe, sino como una ayuda en la
controversia, una confirmación en la fe y un medio de edificación
en la justicia. En él, los miembros de esta iglesia tendrán un
pequeño resumen doctrinal, y por medio de las pruebas allí
contenidas, estarán preparados para dar razón de la fe que hay
en ellos”.

Aclaramos que esta no es la única confesión de fe que tenemos.


La primera confesión Bautista fue publicada cerca del año 1643
en el nombre de 7 congregaciones que se reunían en Londres.
Desde aquel entonces varias ediciones han salido, cumpliendo
con nuestro propósito básico. Hoy, en el marco de la celebración
de nuestros 50 años de fundación, como Primera Iglesia Bautista
de Cúcuta, consideramos como una necesidad poner esta
confesión de fe en sus manos y reafirmando a si lo que creemos.

9
Se hace necesario aclarar una vez más que todo lo que creemos
esta sustentado en la Palabra Santa de nuestro Dios. Esperamos
que estos 32 días de oración y estudio de lo que creemos
robustezca su fe y conocimiento de Dios, que finalmente es el
propósito. Terminados los 32 días de oración y estudio de
nuestra confesión de fe, escribiremos el último día de nuestra
celebración de nuestro aniversario NUMERO 50, un documento
por familia donde reafirmamos nuestra fe común en Cristo y su
Palabra, manifestada públicamente en nuestra confesión y lo
haremos llegar a las oficinas de nuestra Iglesia para que ésta pose
allí como testimonio de lo que creemos.

10
LECCIÓN 1: ACERCA DE LAS SAGRADAS ESCRITURAS

CAPITULO 1

LAS SANTAS ESCRITURAS

1. Las Santas Escrituras son la única toda suficiente, segura e


infalible regla del conocimiento, fe y obediencia salvadoras.1
Aunque la luz de la naturaleza y las obras de creación y de
providencia manifiestan la bondad, sabiduría, y poder de Dios, de
tal manera que los hombres quedan sin excusa, sin embargo, no
son suficientes para dar aquel conocimiento de Dios y de su
voluntad que es necesario para la salvación;2 por lo que le
agradó al Señor, en varios tiempos y de diversas maneras
revelarse a sí mismo y declarar su voluntad a su Iglesia;3 y
además para conservar y propagar mejor la verdad y para el
mayor consuelo y establecimiento de la Iglesia contra la
corrupción de la carne y la malicia de Satanás y del mundo, le
agradó dejar esa revelación por escrito, por todo lo cual las
Santas Escrituras son muy necesarias, y tanto más cuanto que
han cesado ya los modos anteriores por los cuales Dios reveló su
voluntad a su Iglesia.

(1)2Ti. 3:15-17; IS.8:20; LC 16:29,31; Ef. 2:20 (2) Ro. 1:19-21; Ro.
2:14,15; Sal. 19:1-3 (3) He. 1:1 (4) Pr. 22; 19-21; Ro. 15:4; 2P.
1:19,20.

2. Bajo el título de las Santas Escrituras la palabra de Dios escrita,


se contienen todos los libros del Antiguo y Nuevo Testamento, y
los cuales son como sigue.

11
ANTIGUO TESTAMENTO
1ero de
Génesis Eclesiastés Abdias
Reyes
2do de
Exodo Cantares Jonas
Reyes
1ero de
Levítico Isaías Miqueas
Crónicas
2.do de
Números Jeremías Nahúm
Crónicas
Deuterono Lamentacio
Esdras Habacuc
Mio nes
Josué Nehemías Ezequiel Sofonias
Jueces Ester Daniel Hageo
Rut Job Oseas Zacarías
1ero de
Salmos Joel Malaquías
Samuel
2 do de
Proverbios Amos
Samuel

NUEVO TESTAMENTO
Mateo Efesios Hebreos

Marcos Filipenses Santiago


1ra de
Lucas Colosenses
Pedro
1ra
2da de
Juan Tesalonicen
Pedro
ses
2da
Hechos Tesalonicen 1ra de Juan
ses
Romanos 1ra Timoteo 2da de Juan
1ra 2da
3ra de Juan
Corintios Timoteo
2da
Tito Judas
Corintios

Gálatas Filemón Apocalipsis

12
Todos estos fueron dados por inspiración de Dios para que sean
la regla de fe y vida. 5 52 Ti.3:16 Toda la Escritura es inspirada por
Dios y es útil para la enseñanza, para la reprensión, para la
corrección, para la instrucción en justicia.

3. Los libros comúnmente titulados Apócrifos, por no ser de


inspiración divina, no deben formar parte del canon de las Santas
Escrituras, y por lo tanto no son de autoridad para la Iglesia de
Dios, ni deben aceptarse ni usarse sino de la misma manera que
otros escritos humanos.6
6
LU 24:27,44 Y les dijo: --Estas son las palabras que os hablé,
estando aún con vosotros: que era necesario que se cumpliesen
todas estas cosas que están escritas de mí en la Ley de Moisés,
en los Profetas y en los Salmos. Rom 3:2 Mucho, en todo sentido.
Primeramente, que las palabras de Dios les han sido confiadas.

4. La autoridad de las Santas Escrituras, por la que ellas deben ser


creídas y obedecidas, no depende del testimonio de ningún
hombre o iglesia, sino enteramente del de Dios (quien en sí
mismo es la verdad), el autor de ellas; y deben ser creídas porque
son la palabra de Dios.7
7
2 Pe 1:19 También tenemos la palabra profética que es aún más
firme. Hacéis bien en estar atentos a ella, como a una antorcha
que alumbra en lugar oscuro, hasta que aclare el día y el lucero
de la mañana se levante en vuestros corazones.20 Y hay que
tener muy en cuenta, antes que nada, que ninguna profecía de la
Escritura es de interpretación privada;21 porque jamás fue traída
la profecía por voluntad humana; al contrario, los hombres
hablaron de parte de Dios siendo inspirados por el Espíritu
Santo.16 Toda la Escritura es inspirada por Dios y es útil para la
enseñanza, para la reprensión, para la corrección, para la
instrucción en justicia, 1 Te 2:13 Por esta razón, nosotros

13
también damos gracias a Dios sin cesar; porque cuando
recibisteis la palabra de Dios que oísteis de parte nuestra, la
aceptasteis, no como palabra de hombres, sino como lo que es
de veras, la palabra de Dios quien obra en vosotros los que
creéis. 1 Jn 5:9 Si recibimos el testimonio de los hombres, el
testimonio de Dios es mayor; porque éste es el testimonio de
Dios: que él ha dado testimonio acerca de su Hijo.

5 El testimonio de la Iglesia puede movernos e inducirnos a tener


para las Santas Escrituras una estimación alta y reverencial; a la
vez el carácter celestial del contenido de la Biblia, la eficacia de
su doctrina, la majestad de su estilo, la armonía de todas sus
partes, el fin que se propone alcanzar en todo el libro (que es el
de dar toda gloria a Dios), el claro descubrimiento que hace del
único modo por el cual puede alcanzar la salvación el hombre, la
multitud incomparable de otras de sus excelencias y su entera
perfección, son todos argumentos por los cuales la Biblia
demuestra abundantemente que es la palabra de Dios. Sin
embargo, nuestra persuasión y completa seguridad de que su
verdad es infalible y su autoridad divina, provienen de la obra del
Espíritu Santo, quien da testimonio a nuestro corazón con la
palabra divina y por medio de ella.8 8 Jn. 16:13,14; 1 Co. 2:10-12;
1 Jn. 2:20, 27

6. Todo el consejo de Dios tocante a todas las cosas necesarias


para su propia gloria; y para la salvación, la fe y la vida del
hombre, está expresamente expuesto o implícitamente revelado
en las Escrituras y, a esta revelación de su voluntad, nada será
añadido, ni por nuevas revelaciones del Espíritu, ni por las
tradiciones de los hombres.9

Sin embargo, confesamos que la iluminación interna del Espíritu


de Dios es necesaria para que las cosas reveladas en la palabra se

14
entiendan de una manera salvadora, 10 y que hay algunas
circunstancias tocantes al culto de Dios y al gobierno de la iglesia,
comunes a las acciones y sociedades humanas, que deben
arreglarse conforme a la luz de la naturaleza y de la prudencia
cristiana, pero guardándose siempre las reglas generales de la
palabra. 11
9
2 Ti 3:15-17, Gá 1:8,9 10 Jn 6:45, 1 Co 2:9-12, 11 1 Co 11:13,14 1
Co 14:26,40

7 Las cosas contenidas en las Escrituras, no son todas igualmente


claras ni se entienden con la misma facilidad por todos; 12 sin
embargo, las cosas que necesariamente deben saberse, creerse y
guardarse para conseguir la salvación, se proponen y se declaran
en uno u otro lugar de las Escrituras, de tal manera que no sólo
los eruditos, sino aun los que no lo son, pueden adquirir un
conocimiento suficiente de tales cosas por el debido uso de los
medios ordinarios.13
12
2p. 3:16 13 Sal 19:7; Sal 119:130

8. El Antiguo Testamento se escribió en hebreo (que era el


idioma común del pueblo de Dios antiguamente), 14 y el Nuevo
Testamento lo es en el griego (que en el tiempo en que fue
escrito era el idioma más conocido entre las naciones), porque en
aquellas lenguas fueron inspirados directamente por Dios, y
guardados puros en todos los siglos por su cuidado y providencia
especiales. Por esta razón debe apelarse finalmente a los
originales en esos idiomas en toda controversia. 15 Como estos
idiomas originales no se conocen por todo el pueblo de Dios, el
cual tiene el derecho de poseer las Escrituras y tiene gran interés
en ellas, a las que según el mandamiento debe leer 16 y
escudriñar17 en el temor de Dios, se sigue que la Biblia debe
traducirse a la lengua vulgar de toda nación a donde sea

15
llevada,18 para que morando abundantemente la palabra de Dios
en todos, puedan adorarle de una manera aceptable y para que
por la paciencia y consolación de las Escrituras tengan
esperanza. 1914Ro. 3:2 15Is. 8:20 16Hch. 15:15 17Jn. 5:39 181 Co.
14:6,9,11,12,24,28 19Co1. 3:16; Ro. 15:4

9. La regla infalible para interpretar la; Biblia, es la Biblia misma, y


por tanto, cuando hay dificultad respecto al sentido verdadero y
pleno de un pasaje cualquiera (cuyo significado no es múltiple,
sino uno solo), éste se puede buscar y establecer por otros
pasajes que hablan con más claridad del asunto. 20
20
P. 1:20,21, Hch. 15:15,16

10. El Juez Supremo por el cual deben decidirse todas las


controversias religiosas, todos los decretos de los concilios, las
opiniones de los hombres antiguos, las doctrinas de hombres y
de espíritus privados, y en cuya sentencia debemos descansar, no
es ningún otro más que el veredicto bíblico dado por el Espíritu
Santo. En tal veredicto descansa la fe.21
21
Mt. 22:29-32; Ef. 2:20; Hch. 28:23

16
LECCIÓN 2: ACERCA DE DIOS

CAPÍTULO 2

DIOS Y LA SANTA TRINIDAD

1. No hay sino un solo Dios, el único viviente y verdadero.1 Existe


por si mismo2 y es infinito en su ser y perfecciones. Su esencia no
puede ser comprendida.3 Él es espíritu purísimo, 4 invisible, sin
cuerpo, miembros o pasiones. Solo él posee inmortalidad y
habita en luz inaccesible;5 quien es mm utable,6 inmenso,7
eterno,8 incomprensible, todopoderoso,9 e infinito. Es santo,10
sabio, libre, absoluto, que hace todas las cosas según el consejo
de su propia voluntad (que es inmutable y justísima)'1 y para su
propia gloria.12 También Dios es amoroso, benigno y
misericordioso, longánimo, abundante en bondad y verdad,
perdonando toda iniquidad, transgresión y pecado, galardonador
de todos los que le buscan con diligencia,13 y sobre todo muy
justo y terrible en sus juicios,14 que odia todo pecado15 y que de
ninguna manera dará por inocente al culpable.16
1
1 CO 8:4-6 Dt 6:4 2)Jer 10:10, Is. 48:12 3) Ex 3:14 4)Jn 4:24, 5)1 Ti
1:17; Dt 4:15,16 6) Mal. 3:67) 1 R. 8:27; Jer.23:23,24, 8) Sal
90:2 9) Gn. 17:1 10)Is 6:3 11)Sal 115:3; Is 46:10 12)Pr. 16:4 Ro
11:36 13) Ex 34:6,7; He 11:6 14)Neh. 9:32,33 15 Sal. 5:5,6 16 Ex. 34:7;
Nah. 1:2,3

2. Dios posee en sí mismo y por sí mismo toda vida, 17 gloria, 18


bondad 19 y bienaventuranza,' es suficiente en todo en sí mismo
y respecto a si mismo, no teniendo necesidad de ninguna de las

17
criaturas que él ha hecho, ni derivando ninguna gloria de ellas,
sino que solamente manifiesta su propia gloria en ellas, por ellas,
hacia ellas y sobre ellas. Él es la única fuente de todo ser, de
quien, por quien y para quien son todas las cosas, 21 teniendo
sobre ellas el más soberano dominio, y, haciendo por ellas, para
ellas y sobre ellas toda su voluntad.22

Todas las cosas están abiertas y manifiestas delante de su vista;


23 su conocimiento es infinito, infalible e independiente de toda
criatura, de modo que para él no hay ninguna cosa contingente o
dudosa.24 Es santísimo en todos sus consejos, en todas sus obras
25 y en todos sus mandatos. Siendo él el creador de los hombres
y los ángeles, éstos le deben a él toda adoración, 26 servicio y
cualquier cosa que él pudiera demandar de ellos.
23
He 4:13 24Ez. 11:5; Hch 15:18, 25 Sal 145:17 26Ap. 5:12-14

3. La Divinidad se compone de tres personas: Dios Padre, Dios


Hijo (o Verbo) y Dios el Espíritu Santo. 27 Son uno en sustancia,
poder y eternidad. Cada uno es enteramente Dios, pero a la vez
Dios es uno e indivisible. 28 El Padre no es de nadie, ni es
engendrado ni procedente de nadie; el Hijo es engendrado al
eterno del Padre, 29 y el Espíritu Santo procede del Padre y del
Hijo. 30 Estas tres personas divinas, siendo un solo Dios eterno,
indivisible en su naturaleza y ser, son distinguidos en las
Escrituras por sus relaciones personales dentro de la divinidad, y
por la variedad de obras que efectúan. Su unidad triple (es decir,
la Trinidad) es la base esencial de comunión con Dios y del
consuelo que recibimos de nuestra confianza en él.
27
i Jn. 5:7; Mt. 28:19: 2Co. 13:14 28Ex. 3:14; Jn. 14:11; 1 Co.
8:6 29Jn. 1:14,18 30 Jn 15:26; Gal. 4:6

18
CAPITULO 3

EL DECRETO ETERNO DE DIOS

1. Dios desde la eternidad, por el sabio y santo consejo de su


voluntad, ordenó libre e inalterablemente todo lo que sucede.1
Sin embargo, lo hizo de tal manera, que Dios ni es autor del
pecado ni comparte con los pecadores la responsabilidad del
pecado2 ni hace violencia a la voluntad de SUS criaturas, ni quita
la libertad ni contingencia de las causas secundarias sino más
bien las establece.3 En todo esto se manifiesta la sabiduría divina
al igual que su poder y fidelidad para efectuar aquello que se ha
propuesto.4
1
Is. 46:10; Ef. 1:11; He. 6:17; Ro. 9:15,18 2Stg. 1:13; 1 Jn 1:5 3Hch.
4:27,28; Jn. 19:11 4Nm. 23:19; Ef 1:3-5

2. Aunque Dios sabe todo lo que puede suceder en toda clase de


condición o contingencia que se puede suponer, 5 sin embargo,
nada decretó porque lo preveía como porvenir o como cosa que
sucedería en circunstancias dadas.6
5
Hch. 15:18 2.6Ro. 9:11,13,16,18

3. Por el decreto de Dios y para la manifestación de su propia


gloria, algunos hombres y ángeles son predestinados (o pre-
ordenados) a vida eterna por medio del Señor Jesucristo, 7 para
la alabanza y gloria de su gracia. 8 A los demás, él ha dejado para
que sean condenados en sus pecados, para la alabanza de su
gloriosa justicia.9

Ti. 5:21; Mt. 25:34 8Ef. 1:5,6 9Ro. 9:22,23; Jud. 4

19
4. Estos hombres y ángeles así predestinados y pre ordenados,
están designados particular e inalterablemente, y su número es
tan cierto y definido que ni se puede aumentar ni disminuir. 10
10
Jn. 13:18; 2Ti.2:19

5. A aquellos que Dios ha predestinado para vida desde antes


que fuesen puestos los fundamentos del mundo, conforme a su
eterno e inmutable propósito y al consejo y beneplácito secreto
de su propia voluntad, los ha escogido en Cristo para la gloria
eterna; mas esto por su libre gracia y puro amor, 11 sin cualquiera
otra cosa en la criatura como condición o causa que le mueva a
ello.12
11
Ef. 1:4,9,11; Ro.8:30; 2TI.1:9; 1 Ts. 5:9 12Ro. 9:13,16; Ef. 2:5,12

6. Así como Dios ha designado a los elegidos para la gloria, de la


misma manera, por el propósito libre y eterno de su voluntad, ha
preordenado también 105 medios para ello.13 Por tanto, los que
son elegidos, habiendo caído en Adam, son redimidos por
Cristo,14 y en debido tiempo eficazmente llamados a la fe en
Cristo por el Espíritu Santo; son justificados, adoptados,
santificados,15 y guardados por su poder, por medio de la fe,
para salvación.16 Nadie más será redimido por Cristo,
eficazmente llamado, justificado, adoptado, santificado y salvado,
sino solamente los elegidos.17
13
1 P. 1:2; 2Ts.2:13 141 Ts. 5:9,10 15Ro. 8:30; 2Ts.2:13 16 1 P.
1:5 17Jn. 10:26; Jn. 17:9; Jn.6:64

7. La doctrina de este alto misterio de la predestinación debe


tratarse con especial prudencia y cuidado, para que los hombres,
persuadidos de su vocación eficaz, se aseguren de su elección
eterna,18 y atendiendo a la voluntad revelada en la palabra de
Dios, cedan la obediencia a ella. De esta manera esta doctrina

20
proporcionará motivos de alabanza,19 reverencia y admiración a
Dios; y también de humildad,20 diligencia y abundante consuelo
a todos los que sinceramente obedecen al evangelio.21
18
1 Ts. 1:4,5; 2P.1:10 19Ef. 1:6; Ro. 11:33 20Ro. 11:5,6,20 21Lc
10:20

21
LECCIÓN 3: ACERCA DE LA CREACIÓN Y LA PROVIDENCIA.

CAPITULO 4

LA CREACION

1. En el principio agradó a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo,1 para


la manifestación de la gloria de su poder,2 sabiduría y bondad
eternas, crear o hacer el mundo y todas las cosas que en él están,
ya sean visibles o invisibles, en el espacio de seis días y todas muy
buenas.3

1Jn. 1:2,3; He. 1:2; Job 26:13 2Ro. 1:20 3Col. 1:16; Gn. 1:31 1

2. Después que Dios hubo creado todas las demás criaturas, creó
al hombre, varón y hembra,4 con alma racional e inmortal,5 y en
toda manera posible les preparó para una vida en armonía con
él. Fueron creados a su imagen, dotados de conocimiento,
justicia y santidad verdadera,6 teniendo la ley de Dios escrita en
su corazón,7 y dotados del poder de cumplirla; sin embargo,
había la posibilidad de que la quebrantaran dejados a la libertad
de su voluntad que era mudable.8
4
Gn. 1:27 5 Gn. 2:7 6Ec. 7:29; Gn. 1:26 7Ro 2:14,15 8 Gn. 3:6

3. Además de esta ley escrita en su corazón, recibieron el


mandato de no comer del árbol de la ciencia del bien y del mal, 9
y mientras guardaron este mandamiento, fueron felices, gozando
de comunión con Dios, y teniendo dominio sobre las criaturas.10
9
Gn.2:17 3 10 Gn 1:26,28

22
CAPITULO 5

LA DIVINA PROVIDENCIA

1. Dios, el buen creador de todo, en su poder y sabiduría infinita,


sostiene, dirige, dispone y gobierna a todas las criaturas y cosas,1
desde la más grande hasta la más pequeña,2 por su sabia y santa
providencia. Dios cumple con los propósitos para los cuales él
creó estas cosas, conforme a su presciencia infalible, y al libre e
inmutable consejo de su propia voluntad, para la alabanza de la
gloria de su sabiduría, poder, justicia, bondad y misericordia.3
1
He. 1:3; Job 38:11;Is. 46:10,11;Sal. 135:6 2Mt. 10:29-31 3Ef.
1:11 4Hch. 2:23 5 Pr. 16:33
6
gn. 8:22

2. Aunque con respecto a la presciencia y decreto de Dios, causa


primera, todas las cosas sucederán inmutable e infaliblemente,4
de modo que nada ocurre por suerte o fuera de la esfera de su
providencia;5 sin embargo, por la misma providencia las ha
ordenado de tal manera, que sucederán conforme a la naturaleza
de las causas secundarias, sea necesaria, libre o
contingentemente.6

3. Dios en su providencia ordinaria hace uso de medios;7 a pesar


de esto, él es libre para obrar sin ellos,8 sobre ellos,9 y contra
ellos,10 según le plazca.

7Hch. 27:31,44; Is. 55:10,11 8 Os. 1:7 9Ro. 4:19-21 10Dn. 3:27

4. El poder todopoderoso, la sabiduría inescrutable y la bondad


infinita de Dios se manifiestan en su providencia de tal manera
que su propósito soberano se extiende aun hasta la primera

23
caída y a todos los otros pecados de los ángeles y de los
hombres,11 y esto no sólo por un mero permiso, sino que él
sabía y poderosamente limita, ordena y gobierna,12 en varias
formas, las acciones pecaminosas de tal manera que éstas llevan
a cabo sus designios santos,13 pero de tal modo, que lo
pecaminoso procede sólo de la criatura, y no de Dios, quien es
justísimo y santísimo, y por eso, no es, ni puede ser el autor o
aprobador del pecado.14
11
Ro. 11:32-34; 25.24:1; 1 Cr. 21:1 122 R. 19:28; Sal. 76:10 130n.
50:20; Is. 10:6,7,12 14Sa1. 50:21; 1 Jn. 2:16

5. El todo sabio, justo y benigno Dios, a menudo deja por algún


tiempo a sus hijos en las tentaciones multiformes y en la
corrupción de sus propios corazones, a fin de corregirles de sus
pecados anteriores o para descubrirles la fuerza oculta de la
corrupción, para humillarlos, y para infundir en ellos el
sentimiento de una dependencia más íntima y constante de él
para su apoyo, y para hacerles más vigilantes contra todas las
ocasiones futuras del pecado, y para otros muchos fines santos y
justos.15
15
2 Cr. 32:25,26,31; 2 Co. 12:7-9 16 Ro. 8:28

6. Su santo y justo propósito es obrado de tal forma que todo lo


que ocurre a sus elegidos es según su designio, para su gloria y
para el bien de ellos.16

6. En cuanto a aquellos hombres malvados impíos a quienes Dios


como juez justo ha cegado y endurecido a causa de sus pecados
anteriores,17 no sólo les retira su gracia por la cual podrían
haber alumbrado sus entendimientos y ejercitado sus
corazónes,18 sino también algunas veces les retira los dones que
ya tenían,19 y los deja expuestos a objetos que son causa de

24
pecado debido a la corrupción humana,20 y a la vez les entrega a
sus propias concupiscencias, a las tentaciones del mundo y al
poder de Satanas,21 de donde sucede que se endurecen bajo los
mismos medios que Dios emplea para ablandar a los demás.22
17
Ro. 1:24-26,28; Ro. 11:7,8 18Dt. 29:4 19 Mt. 13:12 20 Dt 2:30; 2 R.
8:12,13 2 Ts. 2:10-12 22 Ex 8:15,32; Is.6:9,10; 1 P.2:7,8

7. Así como la providencia de Dios alcanza, en general a todas las


criaturas, así también de un modo especial cuida a su Iglesia y
dispone todas las cosas para el bien de ella. 23
23
1 Ti. 4:10; Am. 9:8,9; Is 43:3-5

25
LECCION 4: ACERCA DE LA CAIDA Y EL PACTO

CAPITULO 6

LA CAIDA DEL HOMBRE, EL PECADO Y SU CASTIGO

1. El hombre, según vino de la mano de Dios, su creador, era


perfecto y limpio. La ley justa que Dios le dio hablaba de vida
condicionada a su obediencia y amenazaba con muerte la
desobediencia.1 La obediencia de Adán fue muy corta. Satanás
usó la sutil serpiente para traer a Eva al pecado y entonces ella
sedujo a Adán, quien sin ninguna fuerza de afuera, libremente
violó la ley bajo la cual habían sido creados y también el
mandamiento de Dios de no comer del fruto prohibido.2 Plugo a
Dios, conforme a su sabio y santo propósito, permitir este
pecado proponiéndose ordenarlo para su propia gloria.
1
Gn. 2:16,17 2Gn. 3:12,13;2 Co. 11:3

2. Por este pecado, nuestros primeros padres cayeron de su


justicia original y perdieron la comunión con Dios. El pecado de
ellos nos envolvió a todos y a través de este pecado la muerte
pasó a todos.3 Todos los hombres vinieron a ser muertos en
pecado,4 y totalmente corrompidos en todas las facultades y
partes del alma y del cuerpo.5
3
Ro. 3:23 4Ro. 5:12-21 5Tit 1:15; Gn. 6:5; Jer. 17:9; Ro. 3:1~19

3. Siendo ellos la raíz de la raza humana, y por la ordenanza de


Dios estando Adán en el lugar de toda la humanidad, la culpa de
este pecado fue imputada a su posteridad, y la naturaleza
corrompida se transmitió a aquella que desciende de ellos según

26
la generación ordinaria.6 Todos los hombres, siendo concebidos
en pecado,7 y por naturaleza hijos sujetos a la ira de Dios,8
siervos del pecado y sujetos a la muerte,9 son dados a
inexplicables miserias espirituales, temporales y eternas, a no ser
que el Señor Jesucristo los libere.10
6
Ro. 5:12-19; 1 Co. 15:21,22,45,49 7Sal. 51:5; Job 14:4 8Ef.
2:3 9Ro. 6:20; 5:12
10
He.2:14,15;1 Ti. 1:10

4. De esta corrupción original, por la cual carecemos de


disposición y aptitud para todo bien y estamos opuestos a este
bien, así como enteramente inclinados a todo mal,11 dimanan
todas nuestras transgresiones actuales.12

11Ro. 8:7; Col. 1:2112Stg. 1:14; Mt. 15:19

5. Esta corrupción de naturaleza dura toda esta vida aun en


aquellos que son regenerados;13 y, aun cuando sea perdonada y
amortiguada por medio de la fe en Cristo, sin embargo, ella, y
todos los efectos de ella son verdadera y propiamente pecado.14
13
Ro. 7:18,23; Ec. 7:20; 1Jn. 1:8 14Ro. 7:23-25;Gá. 5:17

27
CAPITULO 7

EL PACTO DE DIOS

1. La distancia que media entre Dios y la criatura es tan


grande, que aun cuando las criaturas racionales le deben
obediencia como a su creador, sin embargo, ellas no podrán
nunca llegar a vida espiritual, si no es por alguna
condescendencia voluntaria de parte de Dios, habiéndole placido
a éste expresarla por medio de un pacto.1

1Lc. 17:10; Job 35:7,8

2
Gn. 2:17; Gá. 3:10 3Ro. 8:3; Mr. 16:15, 16; Jn. 3:16 4 Ez. 36:26,
27; Jn. 6:44, 45; Sal. 110:3

3. El pacto de Dios es revelado en el evangelio; en primer lugar a


Adán en la promesa de salvación a través de la simiente de la
mujer,5 y luego, paso a paso hasta la entera revelación de
salvación en el Nuevo Testamento.6 La salvación de los elegidos
esta basada en un pacto de redención que fue trazado en la
eternidad entre Dios Padre e Hijo,7 y es únicamente a través de
la gracia dada en este pacto que todos los descendientes del
Adán caído, quienes han sido salvados, han obtenido vida e
inmortalidad bendita, pues los términos de bendición que
aplicaban a Adán en su estado de inocencia no son aplicables a
su posteridad para hacerles aceptables ante Dios.8
5
Gn. 3:15 6He. 1:1 7 2Ti. 1:9; Tit. 1:2 8He. 11:6,13; Ro. 4:1, 2, etc.;
Hch. 4:12; Jn.8:56

28
LECCION 5: ACERCA DE CRISTO

CAPITULO 8

CRISTO EL MEDIADOR

1. Agradó a Dios en su propósito eterno, escoger y ordenar al


Señor Jesucristo, su unigénito Hijo, de acuerdo al pacto en el cual
habían entrado, para que fuese el mediador entre Dios y el
hombre,1 como tal, él es pro feta,2 sacerdote3 yrey,4 el salvador
y cabeza de su Iglesia,5el heredero de todas las cosas,6 y juez
mundo;7 desde la eternidad le de todo el dio Dios un pueblo para
que fuese su simiente y para que a su debido tiempo lo
redimiera, llamara, justificara, santificara y glorificara.8;
1
Is.4Z-1; 1 P. 1:19,20; 2Hch. 3:22 3He. 5:5,6 4 Sal 2:6; 5Ef.
1:22,23 6Hc. 1:2 7Hch. 17:31 8Is. 53:10 Jn. 17:6; Ro. 8:30

2. El Hijo de Dios, la segunda persona de la Santa Trinidad, siendo


verdadero y eterno Dios, la brillantez de la gloria de su Padre,
igual y de una sustancia con Él, quien hizo el mundo y mantiene y
gobierna todas las cosas que ha hecho, habiendo llegado la
plenitud del tiempo, tomó sobre si la naturaleza del hombre con
todas sus propiedades esenciales y con sus debilidades
comunes,9 más sin pecado.10 Fue concebido por el Espíritu
Santo en el vientre de la Virgen María, una mujer perteneciente a
la tribu de Judá. El Espíritu Santo vino sobre ella y el poder de
Dios la cubrió. Y así, según las Escrituras, fue hecho él de una
mujer, descendiente de Abraham y David.11 Así que, dos
naturalezas perfectas y distintas, se unieron inseparablemente
en una persona, pero sin conversión, composición o confusión
alguna. Esta persona es verdadero Dios y verdadero hombre, un
Cristo, el único mediador entre Dios y el hombre.12

29
9Jn. 1:14; Gá. 4:4 10RO. 8:3; He. 2:14,16,17; He. 4:15 11Mt.
1:22,23; Lc. 1:27,31,35 12Ro. 9:5; lTi.2:5

3. El Señor Jesús, en su naturaleza humana unida así a la divina,


en la persona del Hijo, fue ungido y santificado con el Espíritu
Santo sobre toda medida,13 y posee todos los tesoros de la
sabiduría y del conocimiento,14 pues agradó al Padre que en él
habitase toda plenitud,15 a fin de que siendo santo, inocente,
inmaculado,16 lleno de gracia y de verdad,17 fuese del todo apto
para desempeñar los oficios de mediador y fiador.18 Cristo no
tomó por sí mismo estos oficios, sino que fue llamado para ello
por su Padre,19 quien puso en él todo juicio y poder, y le
autorizó para que desempeñara tales oficios.20
13
Sal. 45:7; Hch. 10:38; Jn 3:34 14Co1. 2:3 15Col 1:19 16He.
7:26 17Jn. 1:14 18He. 7:22 19He. 5:5 20 Jn. 5:22,27; Mt. 28:18; Hch.
2:36

4. El Señor Jesús, con la mejor voluntad tomó para si estos


oficios,21 y para desempeñarlos, se puso bajo la ley,22 la que
cumplió perfectamente. También sufrió el castigo que nos tocaba
a nosotros y que debíamos haber sufrido,23 pues él llevó
nuestros pecados y fue acusado en nuestro lugar.24 Padeció
dolores en su alma más allá de nuestro entendimiento y los más
grandes sufrimientos en su cuerpo:25 fue crucificado y murió, y
permaneció bajo el poder de la muerte, aun cuando no vio
corrupción.26 Al tercer día se levantó de entre los muertos27 con
el mismo cuerpo que tenía cuando sufrió,28 con el cual también
ascendió al cielo29 donde se sentó a la diestra del Padre. Allí
intercede por su pueblo,30 y cuando sea el fin del mundo,
volverá para juzgar a los hombres y a los ángeles.31

21Sal. 40:7,8; He. 10:5-10; Jn. 5:18 22Gá. 4:4; Mt. 3:15 23 Gá 3:13;
Is. 53:6; 1 P. 3:18 24 2 Co. 5:21 25Mt. 26:37, 38; Lc 22:44; Mt.

30
27:46 26Hch. 13:37 271 Co. 15:3, 4 28Jn. 20:25, 27 29Mr.16:19; Hch.
1:9-11 30 Ro 8:34; He. 9:24 31Hch. 10:42; Ro. 14:9, 10; Hch. 1:11; 2
P. 2:4

5. El Señor Jesucristo, por su perfecta obediencia y por el


sacrificio de sí mismo que ofreció una sola vez por el Espíritu
eterno de Dios, ha satisfecho plenamente a la justicia de Dios.32
Él ha efectuado la reconciliación y ha comprado una herencia
eterna en el reino de los cielos para todos aquellos dados a él por
el Padre.33
32
He. 9:14; Re. 10:14; Ro. 3:25,26 33 Jn. 17:2; He.9:15

6. Aun cuando el precio de la redención no fue actualmente


pagado, sino hasta la encarnación, sin embargo, la virtud, la
eficacia y los beneficios de ella, se comunicaban a los escogidos
en todas las épocas transcurridas desde el principio, en las
promesas, tipos y sacrificios, y por medio de estas cosas, por las
cuales Cristo fue revelado y designado como la simiente que
quebrantaría la cabeza de la serpiente,34 y como el cordero
inmolado desde la fundación del mundo;35 siendo él, el mismo
ayer, hoy y por siempre.36
34
1 Co. 10:4; He. 4:2; 1 P. 1:10,11 35Ap. 13:8 36He. 13:8

7. Cristo en su oficio de mediador, obra; conforme a sus dos


naturalezas, haciendo por cada una de éstas lo que es propio de
cada una de ellas; mas por razón de la unidad de la persona, lo
que es propio de una naturaleza, se le atribuye algunas veces en
la Escritura a la persona denominada por la otra naturaleza.37
37
Jn.3:13 Hch. 20:28 38 Jn 6:37; Jn. 10:15,16; Jo. 17:9; Ro.
5:10 39Jn. 17:6; Ef. 1:9; 1 Jo. 5:20 40Ro. 8:9,14 41 Sa1. 110:1; 1 Co.
15:25,26 42Jn 3:8; Ef. 1:8

31
8. A todos aquellos para quienes Cristo ha obtenido eterna
redención, cierta y eficazmente les aplica y comunica la misma,
haciendo intercesión por ellos,38 uniéndoles a él por su Espíritu,
revelándoles en la palabra y por medio de ella el misterio de la
salvación, persuadiéndoles eficazmente a creer y a obedecer,39
gobernando el corazón de ellos por su palabra y Espíritu,40 y
venciendo a todos sus enemigos por su gran poder y sabiduría,41
y de la manera y por los caminos que están más en conformidad
con su maravillosa e inescrutable dispensación. Todas estas cosas
son hechas en su libre y soberana gracia e incondicionalmente,
ya que nada de mérito es previsto por él en sus elegidos.42
eterno de Dios, ha satisfecho plenamente a la justicia de Dios.32
Él ha efectuado la reconciliación y ha comprado un herencia
eterna en el reino de los cielos para todos aquellos dados a él por
el Padre.33
32
He. 9:14; He. 10:14; Ro. 3:25,26 33Jn. 17:2; He.9:15

6. Aun cuando el precio de la redención no fue actualmente


pagado, sino hasta la encarnación, sin embargo, la virtud, la
eficacia y los beneficios de ella, se comunicaban a los escogidos
en todas las épocas transcurridas desde el principio, en las
promesas, tipos y sacrificios, y por medio de estas cosas, por las
cuales Cristo fue revelado y designado como la simiente que
quebrantaría la cabeza de la serpiente,34 y como el cordero
inmolado desde la fundación del mundo;35 siendo él, el mismo
ayer, hoy y por siempre.36
34
1Co. 10:4; He. 4:2; 1 P. 1:10,1135Ap. 13:8 36He. 13:8

7. Cristo en su oficio de mediador, obra 37 Jn. 3:13; conforme a


sus dos naturalezas, haciendo Hch. 20:28 por cada una de éstas
lo que es propio de cada una de ellas; mas por razón de la unidad
de la persona, lo que es propio de una naturaleza, se le atribuye

32
algunas veces en la Escritura a la persona denominada por la otra
naturaleza.37

8. A todos aquellos para quienes Cristo ha obtenido eterna


redención, cierta y eficazmente les aplica y comunica la misma,
haciendo intercesión por ellos,38 uniéndoles a él por su Espíritu,
revelándoles en la palabra y por medio de ella el misterio de la
salvación, persuadiéndoles eficazmente a creer y a obedecer,39
gobernando el corazón de ellos por su palabra y Espíritu,40 y
venciendo a todos sus enemigos por su gran poder y sabiduría,41
y de la manera y por los caminos que están más en conformidad
con su maravillosa e inescrutable dispensación. Todas estas cosas
son hechas en su libre y soberana gracia e incondicionalmente,
ya que nada de mérito es previsto por él en sus elegidos.42
38
Jn. 6:37; Jn. 10:15,16; Jn. 17:9; Ro. 5:10 39Jn. 17:6; Ef. 1:9; 1 Jn.
5:20 40Ro. 8:9,14 41Sal. 110:1; 1 Co. 15:25,26 42 Jn. 3:8; Ef. 1:8

9 Cristo, y Solo Cristo puede ser mediador entre Dios y los


hombres. Él es el profeta, sacerdote y rey de la Iglesia de Dios. Su
oficio de mediador no puede ser transferido a ningún Otro.

10. El triple oficio de Cristo es necesario para nosotros. Por


nuestra ignorancia estamos en necesidad de su oficio
profético;44 por nuestra separación de Dios y la imperfección de
nuestros servicios, aun cuando sean lo mejor, necesitamos su
oficio sacerdotal para reconciliarnos con Dios y hacernos
aceptables a él;45 y debido a que nosotros hemos dado la
espalda a Dios y estamos completamente incapacitados para
volver a él y también porque necesitamos ser rescatados y
asegurados de nuestros adversarios espirituales, necesitamos su
oficio como rey para convencer, controlar, atraer, sostener, librar
y preservarnos hasta que finalmente entremos en su reino
celestial.46

33
44Jn.1:18 ~ 1:21; Gá. 5:17 461n. 16:8; Sal. 110:3; L£. 1:74

LECCION 6: ACERCA DE LA SALVACION.

CAPITULO 9

EL LIBRE ALBEDRIO

1Mt. 17:12; 1. Dios ha dotado la voluntad del Stg. 1:14; hombre


de una y un Dt.30:19 libertad natural, poder para actuar a base
de decisión propia, que no es forzada ni obligada a hacer bien o
mal, por ninguna necesidad de la naturaleza.12Ec. 7:29 36n. 3:6
4Ro. 5:6; 8:7

2. El hombre en su estado de inocencia, tenía libertad y poder


para querer y hacer lo que era bueno y agradable a Dios,2 pero
era mutable y podía caer de dicho estado.3 3. El hombre, por su
caída a un estado de pecado, perdió completamente toda
capacidad para querer algún bien espiritual que acompañe a la
salvación.4 Así es que como hombre natural que está
enteramente opuesto a ese bien y muerto en el pecado5 no
puede por su propia fuerza convertirse a sí mismo o prepararse
para ello.6

5Ef.2:1,5 Tit. 3:3-5; Jn. 6:44

4. Cuando Dios convierte a un pecador y le pone en el estado de


gracia, le libra de su estado de servidumbre natural bajo el
pecado,7 y por su gracia solamente lo capacita para querer y
obrar libremente lo que es bueno en lo espiritual;8 sin embargo,
por razón de la corrupción que aún queda, el converso no quiere

34
ni perfecta ni únicamente lo que es bueno, sino también lo que
es malo.9

7Col. 1:13; Jn. 8:36 8FiI. 2:13 9Ro. 7:15,18,19,21,23 10Ef. 4:13

5. El libre albedrío del hombre será perfecto e inmutablemente


libre para querer tan sólo lo que es bueno, únicamente en el
estado de la gloria.10

35
CAPITULO 10

EL LLAMAMIENTO EFICAZ

1. A aquellos a quienes Dios ha predestinado para vida, le agrada


en su tiempo señalado y aceptado, llamar eficazmente1 por su
palabra y Espíritu, sacándolos del estado de pecado y muerte en
que se hallaban por naturaleza para darles vida y salvación por
Jesucristo.2 Esto lo hace iluminando espiritualmente su
entendimiento, a fin de que comprendan las cosas de Dios;3
quitándoles el corazón de piedra y dándoles uno de carne,4
renovando sus voluntades y por su poder soberano
determinándoles a hacer aquello que es bueno, y llevándoles
eficazmente a Jesucristo;5 de tal manera que ellos vienen con
absoluta libertad, habiendo recibido por la gracia de Dios la
voluntad de hacerlo. 6
1
Ro. 8:30; 11:7; Ef. 1:10,11; 2Ts.2:13,14 2Ef. 2:16 3Hch. 26:18; Ef.
1:17,18 4Ez.36:26 5Dt. 30: Ez. 36:27; Ef. 1:19 6Sal. 110:3; Cnt. 1:4

2. Este llamamiento eficaz depende de la libre y especial gracia


de Dios y de ninguna manera de alguna cosa prevista en el
hombre, 7 el cual es en esto enteramente pasivo, hasta que
siendo vivificado y renovado por el Espíritu Santo, 8 adquiere la
capacidad de responder a este llamamiento y de recibir la gracia
ofrecida y trasmitida en él. Esto sucede por el mismo poder que
obró la resurrección de Cristo de los muertos.9
7
2 Ti 1:9; Ef 2:8 81 Co. 2:14; Ef. 2:5; Jn. 5:25 9 Ef.1:19,20

36
3. Los niños elegidos 10 que mueren en la infancia, son
regenerados y salvados en Cristo por medio del Espíritu,11 quien
obra cuándo, dónde y cómo quiere.12 Lo mismo sucederá con
todas las personas elegidas que sean incapaces de ser llamadas
externamente por el ministerio de la palabra.
10
Elegidos no aparece en la versión original.11Jn 3:3,5,6 12Jn. 3:8

4. Otras personas no elegidas, aun cuando sean llamadas por el


ministerio de la palabra y tengan algunas de las operaciones 1 in.
2:24,25 comunes del Espíritu, 13 como no son efectivamente
traídos por el Padre, no pueden ni quieren venir verdaderamente
a Cristo, y por lo mismo no pueden ser salvas; 14 mucho menos
pueden los que no reciben la religión cristiana, salvarse de alguna
otra manera, aun cuando sean diligentes en ajustar sus vidas a la
luz de la naturaleza y a la ley de la religión que profesan.15
13
Mt. 22:14; Mt.13:20, 21; He. 6:4, 5 14 Jn 6:44, 45, 65; 15 Hch.
4:12; Jo. 4:22; 17:3

37
CAPITULO 11

LA JUSTIFICACIÓN

¡A quienes Dios llama eficazmente, también justifica


gratuitamente,1 no infundiendo justicia en ellos sino
perdonándoles sus pecados, y contando y aceptando sus
personas como justas;2 no por nada obrado en ellos o hecho por
ellos, sino solamente por causa de Cristo;3 no imputándoles la fe
misma, ni la acción de creer, ni ninguna otra obediencia
evangélica como justicia; sino imputándoles la obediencia activa
de Cristo a toda la ley y su obediencia pasiva en su muerte para la
completa y única justicia de ellos por la fe, la cual tienen no de sí
mismos; es don de Dios.4
1.
Ro. 3:24; 8:30 2. Ro. 4:5-8; Ef. 1:7 3. 1 Co.1:30,31; Ro. 5:17-19 4.
Fil. 3:9; Ef. 2:7,8; 2 Co. 5:19-21; Tit. 3:5,7; Ro. 3:22-28; Jer. 23:6;
Hch. 13:38,39

2. La fe que así recibe a Cristo y descansa en Él y en su justicia es


el único instrumento de la justificación; 1 sin embargo, no está
sola en la persona justificada, sino que siempre va acompañada
por todas las demás virtudes salvadoras, y no es una fe muerta
sino que obra por el amor.2

1. Ro. 1:17; 3:27-31; Fil. 3:9; Gá. 3:5 2. Gá. 5:6; Stg. 2:17,22,26

3. Cristo, por su obediencia y muerte, saldó totalmente la deuda


de todos aquellos que son justificados; y por el sacrificio de sí
mismo en la sangre de su cruz, sufriendo en el lugar de ellos el
castigo que merecían, hizo una satisfacción adecuada, real y
completa a la justicia de Dios en favor de ellos;1 sin embargo, por
cuanto Cristo fue dado por el Padre para ellos,2 y su obediencia y

38
satisfacción fueron aceptadas en lugar de las de ellos,3 y ambas
gratuitamente y no por nada en ellos, su justificación es
solamente de pura gracia,4 a fin de que tanto la precisa justicia
como la rica gracia de Dios fueran glorificadas en la justificación
de los pecadores.5

1. Ro. 5:8-10,19; 1 Ti. 2:5,6; He. 10:10, 14; Is. 53:4-6, l~12 2. Ro.
8:32 3. 2 Co. 5:21; Mt. 3:17; Ef. 5:2 4. Ro. 3:24; Ef 1:7 5. Ro. 3:26;
Ef 2:7

4. Desde la eternidad, Dios decretó justificar a todos los


elegidos;1 y en el cumplimiento del tiempo, Cristo murió por los
pecados de ellos, y resucitó para su justificación;2 sin embargo,
no son justificados personalmente hasta que, a su debido tiempo,
Cristo les es realmente aplicado por el Espíritu Santo.3

1. 1 P. 1:2,19,20; Gá. 3:8; Ro. 8:30 2. Ro. 4:25; Gá. 4:4; 1 Ti. 2:6 3.
Col. 1:21,22; Tit. 3:4-7; Gá. 2:16; Ef 2:1-3

5. Dios continúa perdonando los pecados de aquellos que son


justificados,' y aunque ellos nunca pueden caer del estado de
justificación,2 sin embargo pueden, por sus pecados, caer en el
desagrado paternal de Dios; y, en esa condición, no suelen tener
la luz de su rostro restaurada sobre ellos, hasta que se humillen,
confiesen sus pecados, pidan perdón y renueven su fe y
arrepentimiento.3

1. Mt 6:12; 1 Jn. 1:7-2:2; Jn. 13:3-11 2. Lc. 22:32; Jn. 10:28; He.
10:14 3. Sal. 32:5; 51:7-12; Mt. 26:75; lc. 1:20

6. La justificación de los creyentes bajo el Antiguo Testamento


fue, en todos estos sentidos, una la misma que la justificación de
los creyentes bajo el Nuevo Testamento.'

1. Gá. 3:9; Ro. 4:22-24

39
LECCION 7: DE LA SALVACION Y LA SANTIFICACION

CAPITULO 12

LA ADOPCIÓN

1. A todos aquellos que son justificados,' Dios se dignó,2en su


único Hijo Jesucristo y por amor de éste,3 hacerles partícipes de
la gracia de la adopción, por la cual son incluidos en el número de
los hijos de Dios y gozan de sus libertades y privilegios, tienen su
nombre escrito sobre ellos,4 reciben el espíritu de adopción,
tienen acceso al trono de la gracia con confianza, se les capacita
para clamar: "Abba, Padre,"' se les compadece, protege, provee y
corrige como por un Padre, pero nunca se les desecha, sino que
son sellados para el día de la redención, 6 y heredan las promesas
como herederos de la salvación eterna.7

1. Gá. 3:24-26 2. 1 Jn. 3:1-3 3. Ef. 1:5; Gá 4:4,5; Ro. 8:17,29 4. Ro.
8:17; Jn. 1:12; 2 Co. 6:18; Ap. 3:12 5. Ro. 8:15; Ef. 3:12; Ro. 5:2;
Gá. 4:6; Ef. 2:18 6. Sal. 103:13; Pr. 14:26; Mt. 6:30,32; 1 P. 5:7;
He. 12:6; Is. 54:8,9; Lm. 3:31; Ef. 4:30 7. Ro. 8:17; He. 1:14; 9:15

40
CAPITULO 13

LA SANTIFICACIÓN

1. Aquellos que son unidos a Cristo, llamados eficazmente y


regenerados, teniendo un nuevo corazón y un nuevo espíritu,
creados en ellos en virtud de la muerte y la resurrección de
Cristo,' son aún más santificados de un modo real y personal,2
mediante la misma virtud,3 por su Palabra y Espíritu que moran
en ellos;4 el dominio del cuerpo entero del pecado es destruido,
y las diversas concupiscencias del mismo son debilitadas y
mortificadas más y más, y ellos son más y más vivificados y
fortalecidos en todas las virtudes salvadoras, para la práctica de
toda verdadera santidad,5 sin la cual nadie verá al Señor.6

1. Jn. 3:3-8; 1 Jn. 2:29; 3:9,10; Ro. 1:7; 2 Co. 1:1; Ef. 1:1; Fil. 1:1;
Col. 3:12; Hch. 20:32; 26:18; Ro. 15:16; 1 Co. 1:2; 6:11; Ro. 6:1-11
2. 1 Ts. 5:23; Ro. 6:19,22 3. 1 Co. 6:11; Hch. 20:32; Fil. 3:10; Ro.
6:5,6 4. Jn. 17:17; Ef. 5:26; 3:1~19; Ro. 8:13 5. Ro. 6:14; Gá. 5:24;
Ro. 8:13; Col. 1:11; Ef. 3:1&19;2Co. 7:1; Ro. 6:13; Ef. 4:22-25; Gá.
5:17 6. Re. 12:14

2. Esta santificación se efectúa en todo el hombre, aunque es


incompleta en esta vida; todavía quedan algunos remanentes de
corrupción en todas partes,' de donde surge una continua e
irreconciliable guerra:2 la carne lucha contra el Espíritu, y el
Espíritu contra la carne.3

1. 1 Ts. 5:23; 1 Jn. 1:8,10; Ro. 7:18,23; Fil. 3:12 2. 1 Co. 9:24-271
Ti. 1:18; 6:12; 2 Ti. 4:7 3. Gá. 5:17; 1 P. 2:11

3. En dicha guerra, aunque la corrupción que aún queda


prevalezca mucho por algún tiempo,' la parte regenerada triunfa

41
a través de la continua provisión de fuerzas por parte del Espíritu
santificador de Cristo;2 y así los santos crecen en la gracia,
perfeccionando la santidad en el temor de Dios, prosiguiendo
una vida celestial, en obediencia evangélica a todos los mandatos
que Cristo, como Cabeza y Rey, les ha prescrito en su Palabra.3

1. Ro. 7:23 2. Ro. 6:14; 1 Jn. 5:4; Ef. 4:15,16 3. 2 P. 3:18; 2 Co. 7:1;
3:18; Mt. 28:20

42
CAPITULO 14

LA FE SALVADORA

1. La gracia de la fe, por la cual se capacita a los elegidos para


creer para la salvación de sus almas, es la obra del Espíritu de
Cristo en sus corazones, y se realiza por el ministerio de la
Palabra; 1 y por la administración del bautismo y la Cena del
Señor, la oración y otros medios designados por Dios, esa fe
aumenta y se fortalece.2

1. Jn. 6:37, 44; Hch. 11:21,24; 13:48; 14:27; 15:9; 2 Co. 4:13; Ef.
2:8; Fil. 1:29; 2 Ts. 2:13; 1 P. 1:2 2. Ro. 10:14,17; Lc. 17:5; Hch.
20:32; Ro. 4:11; 1 P. 2:2

2. Por esta fe, el cristiano cree que es verdadero todo lo revelado


en la Palabra por la autoridad de Dios mismo, y también percibe
en ella una excelencia superior a todos los demás escritos y todas
las cosas en el mundo, pues muestra la gloria de Dios en sus
atributos, la excelencia de Cristo en su naturaleza y oficios, y el
poder y la plenitud del Espíritu Santo en sus obras y operaciones;
y de esta forma, el cristiano es capacitado para confiar su alma a
la verdad así creída;' y también actúa de manera diferente según
sea el contenido de cada pasaje en particular: produciendo
obediencia a los mandatos,2 temblando ante las arnenazas,3 y
abrazando las promesas de Dios para esta vida y para la
venidera;4 pero las principales acciones de la fe salvadora tienen
que ver directamente con Cristo: aceptarle, recibirle y descansar
sólo en Él para la justificación, santificación y vida eterna, en
virtud del pacto de gracia.5

43
1. Hch. 24:14; 1 Ts. 2:13; Sal. 19:7-10; 119:72 2. Jn. 15:14; Ro.
16:26 3. Is. 66:2 4. 1 Ti. 4:8; He. 11:13 5. Jn. 1:12; Hch. 15:11;
16:31; Gá. 2:20

3. Esta fe, aunque sea diferente en grados y pueda ser débil o


fuerte es, sin embargo, aun en su grado mínimo, diferente en su
clase y naturaleza (como lo es toda otra gracia salvadora) de la fe
y la gracia común de aquellos creyentes que sólo lo son por un
tiempo;2 y consecuentemente, aunque muchas veces sea
atacada y debilitada, resulta, sin embargo, victoriosa,3 creciendo
en muchos hasta obtener la completa seguridad 4 a través de
Cristo, quien es tanto el autor como el consumador de nuestra
fe.5

1. Mt. 6:30; 8:10,26; 14:31; 16:8; Mt. 17:20; He. 5:13,14; Ro.
4:19,20 2. Stg. 2:14; 2 P. 1:1; 1 Jn. 5:4 3. Lc. 22:31,32; Ef. 6:16; 1
Jn. 5:4,5 4. Sal. 119:114; He. 6:11,12; 10:22,23 5. He. 12:2

44
CAPITULO 15

EL ARREPENTIMIENTO PARA VIDA Y SALVACIÓN

1 A aquellos de los elegidos que se convierten en la madurez,


habiendo vivido por algún tiempo en el estado natural,' y
habiendo servido en el mismo a diversas concupiscencias y
placeres, Dios, al llamarlos eficazmente, les da arrepentimiento
para vida.2

1. Tit. 3:2-5 2. 2 Cr. 33:10-20; Hch. 9:1-19; 16:29,30

2. Si bien no hay nadie que haga el bien y no peque,' y los


mejores hombres, mediante el poder y el engaño de la
corrupción que habita en ellos, junto con el predominio de la
tentación, pueden caer en grandes pecados y provocaciones,2
Dios, en el pacto de gracia, ha provisto misericordiosamente que
los creyentes que pequen y caigan de esta manera sean
renovados mediante el arrepentimiento para salvación.3

1. Sal. 130:3; 143:2; Pr.20:9; Ec. 7:20 2. 2 S.11: l-27; Lc. 22:54-62
3. Jer. 32:40; Lc. 22:31,32; 1 Jn. 1:9

3. Este arrepentimiento para salvación es una gracia


evangélica1 por la cual una persona a quien el Espíritu hace
consciente de las múltiples maldades de su pecado,2 mediante la
fe en Cristo3 se humilla por él con una tristeza que es según Dios,
abominación de él y aborrecimiento de sí mismo, orando por el
perdón y las fuerzas que proceden de la gracia,4 con el propósito
y empeño, mediante la provisión del Espíritu, de andar delante
de Dios para agradarle en todo.5

1. Hch.5:31; ll:18;2Ti.2:25 2. Sal. 51:1-6; 130:1-3; Lc. 15:17-20;


Hch. 2:37,38 3. Sal. 130:4; Mt. 27:3-5; Mr. 1:15 4. Ez. 16:60-63;

45
36:31,32; Zc. 12:10; Mt. 21:19; Hch. 15:19; 20:21; 26:20; 2 Co.
7:10,11; 1 Ts. 1:9 5. Pr. 28:13; Ez. 36:25; 18:30,31; Sal.
119:59,104,128; Mt. 3:8; Lc. 3:8; Hch. 26:20; 1 Ts. 1:9

4. Puesto que el arrepentimiento ha de continuar a lo largo de


toda nuestra vida, debido al cuerpo de muerte y sus
inclinaciones,' es por tanto el deber de cada hombre arrepentirse
específicamente de los pecados concretos que conozca.2

1. Ez. 16:60; Mt. 5:4; 1 Jn. 1:9 2. Lc. 19:8; 1 Ti. 1:13,15

5. Tal es la provisión que Dios ha hecho a través de Cristo en el


pacto de gracia para la preservación de los creyentes para
salvación que, si bien no hay pecado tan pequeño que no
merezca la condenación,' no hay, sin embargo, pecado tan
grande que acarree condenación a aquellos que se arrepienten,
lo cual hace necesaria la predicación constante del
arrepentimiento.2

1. Sal. 130:3; 143:2; Ro. 6:23 2. Is. 1:16-18; 55:7; Hch. 2:36-38

46
LECCION 8: DE LAS OBRAS Y LA SEGURIDAD DE LA SALVACION.

CAPITULO 16

LAS BUENAS OBRAS

1. Las buenas obras son solamente aquellas que Dios ha


ordenado en su santa Palabra' y no las que, sin la autoridad de
ésta, han inventado los hombres por un fervor ciego o con
cualquier pretexto de buenas intenciones. 2

1. Mi. 6:8; Ro. 12:2; He. 13:21; Col. 2:3; 2 Ti. 3:16,17 2. Mt. 15:9
con Is. 29:13; 1 P. 1:18; Ro. 10:2; Jn. 16:2; 1 5. 15:21-23; 1 Co.
7:23; Gá. 5:1; Col. 2:8,1&23

2. Estas buenas obras, hechas en obediencia a los mandamientos


de Dios, son los frutos y evidencias de una fe verdadera y viva;' y
por ellas los creyentes manifiestan su gratitud,2 fortalecen su
seguridad,3 edifican a sus hermanos,4 adornan la profesión del
evangelio,5 tapan la boca de los adversarios,6 y glorifican a Dios,
cuya hechura son, creados en Cristo Jesús para ello,7 para que
teniendo por fruto la santificación, tengan como fin la vida
eterna. 8

1. Stg. 2:18,22; Gá. 5:6; 1 Ti. 1:5 2. Sal. 116:12-14; 1 P. 2:9,12; Lc.
7:36-50 con Mt. 26:1-11 3. 1 Jn. 2:3,5; 3:18,19; 2 P. 1:5-11 4. 2
Co. 9:2; Mt. 5:16 5. Mt. 5:16; Tit. 2:5,9-12; 1 Ti. 6:1; 1 P. 2:12 6.
lP. 2:12,15; Tit. 2:5; 1 Ti. 6:1 7. Ef. 2:10; Fil. 1:11; 1 Ti. 6:1; 1 P.
2:12; Mt. 5:16 8. Ro. 6:22; Mt. 7:13,14,21-23

3. La capacidad que tienen los creyentes para hacer buenas obras


no es de ellos mismos en ninguna manera, sino completamente

47
del Espíritu de Cristo. Y para que ellos puedan tener esta
capacidad, además de las virtudes que ya han recibido, se
necesita una influencia efectiva del mismo Espíritu Santo para
obrar en ellos tanto el querer como el hacer por su buena
voluntad;' sin embargo, no deben volverse negligentes por ello,
como si no estuviesen obligados a cumplir deber alguno aparte
de un impulso especial del Espíritu, sino que deben ser diligentes
en avivar la gracia de Dios que está en ellos.2

1. Ez. 36:26,27; In. 15:4-6; 2 Co. 3:5; Fil. 2:12,13; Ef. 2:10 2. Ro.
8:14; Jn. 3:8; Fil. 2:l2, 13; 2P. 1:10; He. 6:l2;2Ti. l:6;Jud.20,21

4. Quienes alcancen el mayor grado de obediencia posible en


esta vida quedan tan lejos de llegar a un grado supererogatorio, y
de hacer más de lo que Dios requiere, que les falta mucho de lo
que por deber están obligados a hacer.' 1

1 R. 8:46; 2Cr. 6:36; Sal. 130:3; 143:2; Pr. 20:9; Ec. 7:20; Ro.
3:9,23; 7:14 Ss.; Gá. 5:17; 1 Jn. 1:6-10; Lc. 17:10

5. Nosotros no podemos, por nuestras mejores obras, merecer el


perdón del pecado o la vida eterna de la mano de Dios, a causa
de la gran desproporción que existe entre nuestras obras y la
gloria que ha de venir,' y por la distancia infinita que hay entre
nosotros y Dios, a quien no podemos beneficiar por dichas obras,
ni satisfacer la deuda de nuestros pecados anteriores; pero
cuando hemos hecho todo lo que podemos, no hemos sino
cumplido con nuestro deber y somos siervos inútiles;2 y tanto en
cuanto son buenas proceden de su Espíritu;3 y en cuanto son
hechas por nosotros, son impuras y están mezcladas con tanta
debilidad e imperfección que no pueden soportar la severidad
del castigo de Dios.4

48
1. Ro. 8:18 .2. Job 22:3; 35:7, Lc. 17:10; Ro. 4:3; 11:3 3. Gá.
5:22,23 4. 1 R. 8:46; 2 Cr. 6:36; Sal. 130:3; 143:2; Pr. 20:9; Ec.
7:20; Ro. 3:9,23; 7:l4ss.; Gá. 5:17; 1 Jn. 1:6-10

6. No obstante, por ser aceptadas las personas de los creyentes


por medio de Cristo, sus buenas obras también son aceptadas en
Él;' no como si fueran en esta vida enteramente irreprochables e
irreprensibles a los ojos de Dios;2 sino que a Él, mirándolas en su
Hijo, le place aceptar y recompensar aquello que es sincero aun
cuando esté acompañado de muchas debilidades e
imperfecciones.3

1. Ex. 28:38; Ef. 1:6,7; 1 P. 2:5 2. 1 R. 8:46; 2 Cr. 6:36; Sal. 130:3;
143:2; Pr. 20:9; Ec. 7:20; Ro. 3:9,23; 7;l4ss.; Gá. 5:17; 1 Jn. 1:6-10
3. He. 6:10; Mt. 25:21,23

7. Las obras hechas por hombres no regenerados, aunque en sí


mismas sean cosas que Dios ordena, y de utilidad tanto para ellos
como para otros,1sin embargo, por no proceder de un corazón
purificado por la fe 2 y no ser hechas de una manera correcta de
acuerdo con la Palabra,3 ni para un fin correcto (la gloria de
Dios4), son, por tanto, pecaminosas, y no pueden agradar a Dios
ni hacer a un hombre digno de recibir gracia por parte de Dios.5
Y a pesar de esto, el hecho de que descuiden las buenas obras es
más pecaminoso y desagradable a Dios.6

1. 1 R. 21:27-29; 2 R. 10:30,31; Ro. 2:14; Fil. 1:15-18 2. Ga. 4:5


con He. 11:~6; 1 Ti. 1:5; Ro. 14:23; Gá. 5:6 3. 1 Co. 13:3; Is. 1:12 4.
Mt. 6:2,5,6; 1 Co. 10:31 5. Ro. 9:16; Tit. 1:15; 3:5 6. 1 R. 21:27-29;
2 R. 10:30,31; Sal. 14:4; 36:3

49
CAPITULO 17

LA PERSEVERANCIA DE LOS SANTOS

1. Aquellos a quienes Dios ha aceptado en el Amado, y ha


llamado eficazmente y santificado por su Espíritu, y a quienes ha
dado la preciosa fe de sus elegidos, no pueden caer ni total ni
definitivamente del estado de gracia, sino que ciertamente
perseverarán en él hasta el fin, y serán salvos por toda la
eternidad, puesto que los dones y el llamamiento de Dios son
irrevocables, por lo que Él continúa engendrando y nutriendo en
ellos la fe, el arrepentimiento, el amor, el gozo, la esperanza y
todas las virtudes del Espíritu para inmortalidad;' y aunque surjan
y les azoten muchas tormentas e inundaciones, nunca podrán,
sin embargo, arrancarles del fundamento y la roca a que por la fe
están aferrados; a pesar de que, por medio de la incredulidad y
las tentaciones de Satanás, la visión perceptible de la luz y el
amor de Dios puede nublárseles y oscurecérseles por un
tiempo,2 Él, sin embargo, es aún el mismo, y ellos serán
guardados, sin duda alguna, por el poder de Dios para salvación,
en la que gozarán de su posesión adquirida, al estar ellos
esculpidos en las palmas de sus manos y sus nombres escritos en
el libro de la vida desde toda la eternidad.3

1. in. 10:28,29; Fil. 1:6; 2 Ti. 2:19; 2 P.1:5-10; 1 Jn. 2:19 2. Sal.
89:31,32; 1 Co. 11:32; 2 Ti. 4:7 3. Sal. 102:27; Mal. 3:6; Ef. 1:14; 1
P. 1:5; Ap. 13:8

2. Esta perseverancia de los santos depende no de su propio libre


albedrío,' sino de la inmutabilidad del decreto de elección,2 que
fluye del amor libre e inmutable de Dios el Padre, sobre la base
de la eficacia de los méritos y la intercesión de Jesucristo y la

50
unión con Él,~ del juramento de Dios,4 de la morada de su
Espíritu, de la simiente de Dios que está en los santos,5 y de la
naturaleza del pacto de gracia,6 de todo lo cual surgen también
la certeza y la infalibilidad de la perseverancia.

1. Fil. 2:12,13; Ro. 9:16; Jn. 6:37,44 2. Mt. 24:22,24,31; Ro. 8:30;
9:11,16; 11:2,29; Ef. 1:5-11 3. Ef. 1:4; Ro. 5:9,10; 8:31-34; 2 Co.
5:14; Ro. 8:35-38; 1 Co. 1:8,9; Jn. 14:19; 10:28,29 4. He. 6:1-20 5.
1 Jn. 2:19,20,27; 3:9; 5:4,18; Ef. 1:13; 4:30; 2 Co. 1:22; 5:5; Ef.
1:14 6. Jer. 31:33,34; 32:40; He. 10:11-18; 13:20,21

3. Y aunque los santos (mediante la tentación de Satanás y del


mundo, el predominio de la corrupción que queda en ellos y el
descuido de los medios para su preservación) caigan en pecados
graves y por algún tiempo permanezcan en ellos' (por lo que
incurren en el desagrado de Dios y entristecen a su Espíritu
Santo,2 se les dallan sus virtudes y consuelos,3 se les endurece el
corazón y se les hiere la conciencia,4 lastiman y escandalizan a
otros 5 y se acarrean juicios temporales 6), sin embargo,
renovarán su arrepentimiento y serán preservados hasta el fin
mediante la fe en Cristo Jesús.7

1. Mt. 26:70,72,74 2. Sal. 38:1-8; Is. 64:5-9; Ef. 4:30; 1 Ts. 5:14 3.
Sal. 5l:l~12 4. Sal. 32:3,4; 73:21,22 5. 2 S.12:14; 1 Co. 8:9-13; Ro.
14:13-18; 1 Ti. 6:1,2; Tit. 2:5 6. 2 5. l2:14ss.; Gn. l9:30-38; 1 Co.
11:27-32 7. Lc. 22:32,61,62; 1 Co. 11:32; 1 Jn. 3:9; 5:18

51
CAPITULO 18

LA SEGURIDAD DE LA GRACIA Y DE LA SALVACIÓN

1. Aunque los creyentes que lo son por un tiempo y otras


personas no regeneradas vanamente se engañen a sí mismos con
esperanzas falsas y presunciones carnales de hallarse en el favor
de Dios y en estado de salvación (pero la esperanza de ellos
perecerá'), sin embargo, los que creen verdaderamente en el
Señor Jesús y le aman con sinceridad, esforzándose por andar
con toda buena conciencia delante de Él, pueden en esta vida
estar absolutamente seguros de hallarse en el estado de gracia, y
pueden regocijarse en la esperanza de la gloria de Dios; y tal
esperanza nunca les avergonzarí.2

1. Jer. 17:9; Mt. 7:21-23; Lc. 18:10-14; Jn. 8:41; Ef. 5:6,7;
Gá. 6:3,7-9 2. Ro. 5:2,5; 8:16; 1 Jn. 2:3; 3:14,18,19,24; 5:13; 2 P.
1:10

2. Esta certeza no es una mera persuasión conjetural y probable,


fundada en una esperanza falible, sino que es una seguridad
infalible de fe1 basada en la sangre y la justicia de Cristo
reveladas en el evangelio;2 y también en la evidencia interna de
aquellas virtudes del Espíritu a las cuales se les hacen promesas,3
y en el testimonio del Espíritu de adopción testificando con
nuestro espíritu que somos hijos de Dios;4 y, como fruto suyo,
mantiene el corazón humilde y santo.5

1. Ro. 5:2,5; He. 6:11,19,20; 1 Jn. 3:2,14; 4:16; 5:13,19,20 2. He.


6:17,18; 7:22; 10:14,19 3. Mt. 3:7-10; Mr. 1:15; 2 P. 1:4-11; 1 Jn.
2:3; 3:14,18,19,24; 5:13 4. Ro. 8:15,16; 1 Co. 2:12; Gá. 4:6,7 5. 1
Jn. 3:1-3

3. Esta seguridad infalible no pertenece a la esencia de la fe hasta


tal punto que un verdadero creyente no pueda esperar mucho

52
tiempo y luchar con muchas dificultades antes de ser partícipe de
tal seguridad;' sin embargo, siendo capacitado por el Espíritu
para conocer las cosas que le son dadas gratuitamente por Dios,
puede alcanzarla,2 sin una revelación extraordinaria, por el uso
adecuado de los medios; y por eso es el deber de cada uno ser
diligente para hacer firme su llamamiento y elección; para que
así su corazón se ensanche en la paz y en el gozo en el Espíritu
Santo, en amor y gratitud a Dios, y en fuerza y alegría en los
deberes de la obediencia, que son los frutos propios de esta
seguridad: así está de lejos esta seguridad de inducir a los
hombres a la disolución.3

1. Hch. 16:30-34; 1 Jn. 5:13 2. Ro. 8:l5, 16; l Co. 2:12; Gá.4:4-6
con 3:2; l Jn.4:13; Ef.3:17-19; He. 6:11,12; 2 P. 1:5-11 3. 2 P 1:10;
Sal. 119:32; Ro. 15:13; Neh. 8:10; 1 Jn. 4:19,16; Ro.6:1,2,11-13;
14:17; Tit. 2:11-14; Ef. 5:18

4. La seguridad de la salvación de los verdaderos creyentes


puede ser, de diversas maneras, zarandeada, disminuida e
interrumpida; como por la negligencia en conservarla,' por caer
en algún pecado especial que hiera la conciencia y contriste al
Espíritu,2 por alguna tentación repentina o vehemente,3 por
retirarles Dios la luz de su rostro, permitiendo, aun a los que le
temen, que caminen en tinieblas, y no tengan luz;4 sin embargo,
nunca quedan destituidos de la simiente de Dios, y de la vida de
fe, de aquel amor de Cristo y de los hermanos, de aquella
sinceridad de corazón y conciencia del deber, por los cuales,
mediante la operación del Espíritu, esta seguridad puede ser
revivida con el tiempo; y por los cuales, mientras tanto, los
verdaderos creyentes son preservados de caer en total
desesperación.5

53
1. He. 6: ll, 12; 2P. 1:5-11 2. Sal. 51:8,12,14; Ef. 4:30 3. Sal.
30:7; 31:22; 77:7,8; 116:11 4. Is. 50:10 5. 1 Jn. 3:9; Lc.
22:32; Ro. 8:15,16; Gá. 4:5; Sal. 42:5,11

54
LECCION 9: DE LA LEY Y EL SANTO – PARTE I

CAPITULO 19

LA LEY DE DIOS

1. Dios dio a Adán una ley de obediencia universal escrita en su


corazón,' y un precepto en particular de no comer del fruto del
árbol del conocimiento del bien y del mal; 2 por lo cual le obligó a
él y a toda su posteridad a una obediencia personal completa,
exacta y perpetua; prometió la vida por su cumplimiento de la
ley, y amenazó con la muerte su infracción; y le dotó también del
poder y la capacidad para guardarla.3

1. Gn. 1:27; Ec. 7:29; Ro. 2:12a, 14,15 2. Gn. 2:16,17 3 Gn.
2:16,17; Ro. 10:5; Gá. 3:10,12

2. La misma ley que primeramente file escrita en el corazón del


hombre continuó siendo una regla perfecta de justicia después
de la Calda;' y file dada por Dios en el monte Sinaí,2 en diez
mandamientos, y escrita en dos tablas; los cuatro primeros
mandamientos contienen nuestros deberes para con Dios, y los
otros seis, nuestros deberes para con los hombres.3

1. Para el Cuarto Mandamiento, Gn. 2:3; Ex. 16; Gn. 7:4; 8:10,12;
para el Quinto Mandamiento, Gn. 37:10; para el Sexto
Mandamiento, Gn. 4:3-15; para el Séptimo Mandamiento, On.

12:17; para el Octavo Mandamiento, On. 31:30; 44:8; para el


Noveno Mandamiento, Gn. 27:12; para el Décimo Mandamiento,
Gn. 6:2; 13:10,11 2. Ro. 2:12a, 14,15 3. Ex. 32:15,16; 34:4,28; Dt.
10:4

55
3. Además de esta ley, comúnmente llamada ley moral, agradó a
Dios dar al pueblo de Israel leyes ceremoniales que contenían
varias ordenanzas típicas; en parte de adoración, prefigurando a
Cristo, sus virtudes, acciones, sufrimientos y beneficios;' y en
parte proponiendo diversas instrucciones sobre los deberes
morales.2 Todas aquellas leyes ceremoniales, habiendo sido
prescritas solamente hasta el tiempo de reformar las cosas, han
sido abrogadas y quitadas por Jesucristo, el verdadero Mesías y
único legislador, quien file investido con poder por parte del
Padre para ese fin.3

1. He. 10:1; Col. 2:16,17 2. 1 Co. 5:7; 2 Co. 6:17; Jud. 23 3. Col.
2:14,16,17; Ef. 2:14-16

4. Dios también les dio a los israelitas diversas leyes civiles, que
expiraron juntamente con el Estado de aquel pueblo, no
obligando ahora a ningún otro en virtud de aquella institución;'
solamente sus principios de equidad son utilizables en la
actualidad.2

1. Lc. 21:20-24; Hch. 6:13,14; He. 9:18,19 con 8:7,13; 9:10; 10:1
2. 1 Co. 5:1; 9:8-10

5. La ley moral obliga para siempre a todos, tanto a los


justificados como a los demás, a que se la obedezca;' y esto no
sólo en consideración a su contenido, sino también con respecto
a la autoridad de Dios, el Creador, quien la dio.2 Tampoco Cristo,
en el evangelio, en ninguna manera cancela esta obligación sino
que la refuerza considerablemente.3

1. Mt. 19:16-22; Ro. 2:14,15; 3:19,20; 6:14; 7:6; 8:3; 1 Ti. 1:8-11;
Ro. 13:8-10; 1 Co. 7:19 con Gá. 5:6; 6:15; Ef. 4:25-6:4; Stg.
2:11,12 2. Stg. 2:10,11 3. Mt. 5:17-19; Ro. 3:31; 1 Co. 9:21; Stg.
2:8

56
6. Aunque los verdaderos creyentes no están bajo la ley como
pacto de obras para ser por ella justificados o condenados, sin
embargo ésta es de gran utilidad tanto para ellos como para
otros, en que como regla de vida les informa de la voluntad de
Dios y de sus deberes, les dirige y obliga a andar en conformidad
con ella,2 les revela también la pecaminosa contaminación de sus
naturalezas, corazones y vidas; de tal manera que, al examinarse
a la luz de ella, puedan llegar a una convicción más profunda de
su pecado, a sentir humillación por él y odio contra él; junto con
una visión más clara de la necesidad que tienen de Cristo, y de la
perfección de su obediencia.3 También la ley moral es útil para
los regenerados a fin de restringir su corrupción, en cuanto que
prohíbe el pecado; y sus amenazas sirven para mostrar lo que
aun sus pecados merecen, y qué aflicciones pueden esperar por
ellos en esta vida, aun cuando estén libres de la maldición y el
puro rigor de la ley.4 Asimismo sus promesas manifiestan a los
regenerados que Dios aprueba la obediencia y cuáles son las
bendiciones que pueden esperar por el cumplimiento de la
misma,5 aunque no como si la ley se lo debiera como pacto de
obras;6de manera que si alguien hace lo bueno y se abstiene de
hacer lo malo porque la ley le manda lo uno y le prohíbe lo otro,
no por ello se demuestra que esté bajo la ley y no bajo la gracia.7

7. Los usos de la ley ya mencionados tampoco son contrarios a la


gracia del evangelio, sino que concuerdan armoniosamente con
él; pues el Espíritu de Cristo subyuga y capa- 29 cita la voluntad
del hombre para que haga libre y alegremente lo que requiere la

57
voluntad de Dios, revelada en la ley.1 1. Gá. 3:21; Jer. 31:33; Ez.
36:27; Ro. 8:4; Tit. 2:14.

58
CAPITULO 20

EL EVANGELIO Y SU ALCANCE DE SU GRACIA

1. Habiendo sido quebrantado el pacto de obras por el pecado y


habiéndose vuelto inútil para dar vida, agradó a Dios dar la
promesa de Cristo, la simiente de la mujer, como el medio para
llamar a los elegidos, y engendrar en ellos la fe y el
arrepentimiento. En esta promesa, el evangelio, en cuanto a su
sustancia, fue revelado, y es en ella eficaz para la conversión y
salvación de los pecadores.

1. Gn. 3:15 con Ef.2:12; Gá. 4:4; He. 11:13; Lc. 2:25,38; 23:51; Ro.
4:13-16; Gá. 3:15-22

2. Esta promesa de Cristo, y la salvación por medio de Él, es


revelada solamente por la Palabra de Dios.' Tampoco las obras de
la creación o la providencia, con la luz de la naturaleza, revelan a
Cristo, o la gracia que es por medio 'le El, ni siquiera en forma
general u oscura; 2 mucho menos hacen que los hombres
destituidos de la revelación de Él por la promesa, o evangelio,
sean capacitados así para alcanzar la fe salvadora o el
arrepentimiento.

1. Hch. 4:12 Ro. 10:13-15 2. Sal. 19; Ro. 1:18-23 3. Ro. 2:12a; Mt.
28:18-20; Lc. 24:46,47 con Hch. 17:29,30; Ro. 3:9-20

3. La revelación del evangelio a los pecadores (hecha en diversos


tiempos y distintas partes, con la adición de promesas y
preceptos para la obediencia requerida en aquél, en cuanto a las
naciones y personas a quienes es concedido), es meramente por
la voluntad soberana y el beneplácito de Dios;' no
apropiándosela en virtud de promesa alguna referida al buen Liso

59
de las capacidades naturales de los hombres, ni en virtud de la
Itiz común recibida aparte de él, lo cual nadie hizo jamás ni
puede hacer.

2 Por tanto, en todas las épocas, la predicación del evangelio ha


sido concedida a personas y naciones, en cuanto a su extensión
o restricción, con gran variedad, según el consejo de la voluntad
de Dios.

1. Mt. 11:20 2. Ro. 3:10-12; 8:7,8

4. Aunque el evangelio es el único medio externo para revelar a


Cristo y la gracia salvadora, y es, como tal, completamente
suficiente para este fin,' sin embargo, para que los hombres que
están muertos en sus delitos puedan nacer de nuevo, ser
vivificados o regenerados, es además necesaria una obra eficaz e
invencible del Espíritu Santo en toda el alma, con el fin de
producir en ellos una nueva vida espiritual; sin ésta, ningún otro
medio puede efectuar su conversión a Dios.2

1. Ro. 1:16,17 2. Jp. 6:44; 1 Co. 1 '2.2-24... 2:14; 2 Co. 4:4,6

60
CAPITULO 21

LA LIBERTAD CRISTIANA Y LA LIBERTAD DE LA CONCIENCIA

1. La libertad que Cristo ha comprado para los creyentes bajo el


evangelio consiste en su libertad de la culpa del pecado, de la ira
condenatoria de Dios y de la severidad y maldición de la ley,' y en
ser librados de este presente siglo malo, de la servidumbre de
Satanás y del dominio del pecado,2 del mal de las aflicciones, del
temor y aguijón de la muerte, de la victoria del sepulcro y de la
condenación eterna,3y también consiste en su libre acceso a
Dios, y en rendirle obediencia a Él, no por temor servil, sino con
un amor filial y una mente dispuesta.4 Todo esto era
sustancialmente común también a los creyentes bajo la ley;5
pero bajo el Nuevo Testamento la libertad de los cristianos se
ensancha mucho más porque están libres del yugo de la ley
ceremonial a que estaba sujeta la Iglesia judaica, y tienen ahora
mayor confianza para acercarse al trono de gracia, y experiencias
más plenas del libre Espíritu de Dios que aquellas de las que
participaron generalmente los creyentes bajo la ley.6

1. Jn 3:36; Ro. 8:33; Gá. 3:13 2. Gá. 1:4; Ef. 2:1-3; Col. 1:13; Hch.
26:18; Ro 6:14-18; 8:3 3. Ro. 8:28; 1 Co. 15:54-57; 1 Ts. 1:10; He.
2:14,15 4. Ef. 2:18; 3:12; Ro. 8:15; 1 Jn. 4:18 5. in. 8:32; Sal. 19:7-
91 19:14,24,45,47,48,72,97; Ro. 4:5-11; Gá. 3:9; He. 11:27,33,34
6. in. 1:17; He. 1:1,2a..7:19,22;8:6;9:23; l1:40;Gá.2:llss.;4:l-3;Col.
2:16,17; He. 10:19.21; Jn. 7:38,39

2. Sólo Dios es el Señor de la conciencia,' y la ha hecho libre de


las doctrinas y los mandamientos de los hombres que sean en
alguna manera contrarios a su Palabra o que no estén contenidos
en ésta.2 Así que, creer tales doctrinas u obedecer tales

61
mandamientos por causa de la conciencia es traicionar la
verdadera libertad de conciencia,3 y el requerir una fe implícita y
una obediencia ciega y absoluta es destruir la libertad de
conciencia y también la razón.4

1. Stg. 4:12; Ro. 14:4; Gá.5: l 2. Hch. 4:19; 5:29; 1 Co. 7 23; Mt.
15:9 3. Col. 2:20,22,23; Gá. l:10; 2:3-5; 5.1 4. Ro. 10:17; 14:23;
Hch. 17:11; in. 4:22; 1 Co. 3:5; 2 Co. 1:24

3. Aquellos que bajo el pretexto de la libertad cristiana practican


cualquier pecado o abrigan cualquier concupiscencia, al pervertir
así el propósito principal de la gracia del evangelio para su propia
destrucción,' destruyen completamente, por tanto, el propósito
de la libertad cristiana, que consiste en que, siendo librados de
las manos de todos nuestros enemigos, sirvamos al Señor sin
temor, en santidad y justicia delante de Él, todos los días de
nuestra vida.2

1. Ro. 6:1,2 2. Lc 1.74,75; Ro. 14:9 Gá. 5:13; 2 P. 2 18,21

62
LECCION 10: DE LA LEY Y DE LOS SANTOS – PARTE II

CAPITULO 22

LA ADORACIÓN RELIGIOSA Y DEL DIA DE REPOSO

1 La luz de la natura1eza muestra que hay un Dios, que tiene


señorío y soberanía sobre todo; es justo, bueno y hace bien a
todos; y que, por tanto, debe ser temido, amado, alabado,
invocado, creído, y servido con toda el allá, con todo el corazón y
con todas las fuerzas.' Pero el modo aceptable de adorar al
verdadero Dios está instituido por él mismo, y está de tal manera
limitado por su propia voluntad revelada que no se debe adorar a
Dios' conforme a las imaginaciones e invenciones de los hombres
o a las sugerencias de Satanás, ni bajo ninguna representación
visible o en ningún otro modo no prescrito en las Santas
Escrituras.2

1. Jer. 10:7; Mr. 12:33 2. Gn. 4:1-5; Ex. 20:46; Mt. 15:3,8,9; 2 R.
16:10-18; Lv. 10:1-3; Dt 17.3, 4.2, 12.29-32; Jos. 1:7; 23:&8; Mt
15:13; Col. 2:2~23; 2 Ti. 3:15-17

2. La adoración religiosa ha de tributarse a Dios Padre, Hijo y


Espíritu Santo, ya Él solamente;' no a los ángeles, ni a los santos,
ni a ninguna otra criatura;2 y desde la Caída, no sin un mediador;
ni por la mediación de ningún otro, sino solamente de Cristo.3 1.
ML 4:9,10; Jn. 5:23; 2 Co. 13:14 2. Ro. 1:25; Col. 2:18; Ap. 19:10
3. Jn. 14:6; Ef. 2:18; Col. 3:17; 1 Ti. 2:5

63
3. Siendo la oración, con acción de gracias, una parte de la
adoración natural, la exige Dios de todos los hombres.' Pero para
que pueda ser aceptada, debe hacerse en el nombre del Hijo,2
con la ayuda del Espíritu, conforme a su voluntad,4 con
entendimiento, reverencia, humildad, fervor, fe, amor y
perseverancia;5 y cuando se hace con otros, en una lengua
conocida.6

1. Sal. 95:1-7; 100:1-5 2. Jn. 14:13,14 3. Ro. 8:26 4. l Jn.5:14 5. Sal.


47:7; Ec. 5:4,2; He. 12:28; Gn. 18:27; Stg. 5:16; 1:6,7; Mr. 11:24;
Mt. 6:12,14,15; Col. 4:2; Ef. 6:18 6. 1 Co. 14:13-19,27,28

4. La oración ha de hacerse por cosas lícitas, y a favor de toda


clase de personas vivas, o que vivirán más adelante;' pero no a
favor de los muertos ni de aquellos de quienes se pueda saber
que han cometido el pecado de muerte.2

1. Jn. 5:14; 1 Ti. 2:1,2; Jn. 17:20 2. 2 S.12:21-23; Lc. 16:25,26; Ap.
14:13; 1 Jn. 5:16

5. La lectura de las Escrituras,' la predicación y la audición de la


Palabra de Dios,2 la instrucción y la amonestación los unos a los
otros por medio de salmos, himnos y cantos espirituales, el
cantar con gracia en el corazón al Señor,3 como también la
administración del bautismo4 y la Cena del Señor:5 todas estas
cosas son arte de la adoración religiosa a Dios que ha de
realizarse en obediencia a con entendimiento, fe, reverencia y
temor piadoso; además, la humillación solemne,6 con ayunos, y
las acciones de gracia en ocasiones especiales, han de usarse de
una manera santa y piadosa.7

64
1. Hch. 15:21; 1 Ti. 4:13; Ap. 1:3 2. 2Ti.4:2; Lc.8:18 3. Col. 3:16; Ef.
5:19 4. Mt. 28:19,20 5. lCo.ll:26 6. Est 4:16; JI. 2:12; Mt. 9:15;
Hch. 13:2,3; 1 Co. 7:5 7. Ex. 15:1-19; Sal. 107

6. Ahora, bajo el evangelio, ni la oración ni ninguna otra parte de


la adoración religiosa están limitadas a un lugar, ni son más
aceptables por el lugar en que se realizan, o hacia el cual se
dirigen;' sino que Dios ha de ser adorado en todas partes en
espíritu y en verdad;2 tanto en cada familia en particular'
diariamente,4 como cada uno en secreto por sí solo;5 así como
de una manera más solemne en las reuniones públicas,6 las
cuales no han de descuidarse ni abandonarse voluntariamente o
por negligencia, cuando Dios por su Palabra o providencia nos
llama a ellas.7

1. Jn. 4:21 2 Mal. 1:11; 1 Ti. 2:8; Jn. 4:23,24 3. Di. 6:6,7; Job 1:5; 1
P. 3:7 4. Mt.6:11 5. Mt. 6:6 6. Sal. 84:1,2,10; Mt. 18:20; 1 Co.
3:16; 14:25; Ef. 2:21,22 7. Hch. 2:42; He. 10:25

7. Así como es la ley de la naturaleza que, en general, una


proporción de Tiempo, por designio de Dios se dedique a la
adoración de Dios, así en su Palabra, por un mandamiento
positivo, moral y perpetuo que obliga a todos los hombres en
todas las épocas, Dios ha señalado particularmente un día de
cada siete como día de reposo, para que sea guardado santo
para Él;1 el cual desde el principio del mundo hasta la
resurrección de Cristo fue el último día de la semana y desde la
resurrección de Cristo fue cambiado al primer día de la semana,
que es llamado el Día del Señor y debe ser perpetuado hasta el
fin del mundo como el día de reposo cristiano, siendo abolida la
observancia del último día de la semana.2

65
1. Gn. 2:3; Ex. 20:8-11; Mr. 2:27,28; Ap. 1:10 2. Jn. 20:1; Hcb. 2:1;
20:7; 1 Co. 16:1; Ap. 1:10; Col. 2:16,17

8. El día de reposo se guarda santo para el Señor cuando los


hombres, después de la debida preparación de su corazón y
arreglados de antemano todos sus asuntos cotidianos, no
solamente observan un santo descanso durante todo el día de
sus propias labores, palabras y pensamientos' acerca de sus
ocupaciones y diversiones seculares; sino que también se
dedican todo el tiempo al ejercicio público y privado de la
adoración de Dios, y a los deberes de necesidad y de
misericordia.2

1. Ex. 20:8-11; Neh. 13:15-22; Is. 58:13,14; Ap. 1:10 2. Mt. 12:1-
13; Mr. 2:27,28

66
CAPITULO 23

LOS JURAMENTOS LEGALES Y VOTOS

1. Un juramento licito es una parte de la adoración religiosa por


el cual el jurador, teniendo en vista la verdad, la justicia y el
juicio, solemnemente pone a Dios como testigo de lo que jura,1 y
para que le juzgue conforme a la verdad o la falsedad de sus
palabras.2

l Ex 20:7; Dt. 10:20; Jer. 4:2 22 Cr. 6:22,23

2. Sólo en el nombre de Dios deben jurar los hombres, y este


nombre ha de usarse con todo temor santo y con reverencia. Por
lo tanto, jurar vana o temerariamente en ese nombre glorioso y
terrible, o definitivamente jurar por cualquiera otra cosa, es
pecaminoso y debe aborrecerse.3 Sin embargo, en asuntos de
peso y de importancia, cuando la verdad requiere una
confirmación y para poner fin a la contienda, un juramento está
justificado por la palabra de Dios; 4 por eso, cuando una
autoridad legítima exija un juramento legal para tales asuntos,
este juramento debe hacerse.5

3Mt. 5:34,37; Slg.5:12 4He. 6:16; 2Cor.1:23 5Neh. 13:25

3. Todo aquel que hace un juramento de acuerdo a la palabra de


Dios debe considerar seriamente la gravedad de un acto tan
solemne, y por lo tanto no afirmar nada que no sepa sea verdad,
porque por medio de juramentos falsos y vacíos el Señor es
provocado y por razón de ello la tierra es traída a mise rias.6

6 Lv. 19:12; Jer. 23:10

67
4. Un juramento debe hacerse en el sentido claro y común de las
palabras, sin equivocación o reservas mentales.7

7Sal. 24:4 Sal 76:11; Gn. 28:20-22

5. Los votos han de ser hechos a Dios solamente y no a una


criatura. Una vez hechos han de ser llevados a cabo
escrupulosamente y fielmente.8 Pero votos monásticos de vida
soltera perpetua, 9 pobrezas profesada10 y obediencia regular
que pertenecen a la iglesia de Roma, en lugar de representar
santidad superior son meramente supersticiones y trampas
pecaminosas en las cuales ningún cristiano debería enredarse.11

9 1Co. 7:2,9 10 Ef. 4:28 11 Mt. 19:11

68
CAPITULO 24

EL GOBIERNO CIVIL

1. Dios, el supremo Señor y Rey de todo el mundo, ha instituido a


los magistrados civiles para estar sujetos a él, gobernando al
pueblo para la gloria de Dios y el bien público; y con este fin les
ha armado con el poder de la espada, para la defensa y aliento
de los que hacen lo bueno, y para el castigo de los malhechores.

1. 1Ro. 13:14; 1 P. 2:13,14

2. Es lícito para los cristianos aceptar y desempeñar el cargo de


magistrado cuando sean llamados para ello; en el desempeño de
su cargo deben mantener especialmente la justicia y la paz,2
según las leyes sanas de cada reino y estado; así con este fin,
bajo el Nuevo Testamento, pueden legalmente ahora hacer la
guerra en ocasiones justas y necesarias.3

2. 2S. 23:3; Sal. 82:3,4 3. Lc 3:14

3. Como los gobernantes civiles son puestos por Dios con los
propósitos ya mencionados, los cristianos están sujetos a ellos en
los requisitos legales, y esto por causa del Señor y de la
conciencia y no meramente para evitar castigo.4 Debemos
ofrecer suplicaciones y oraciones a favor de los reyes y de los que
están en autoridad, para que bajo su gobierno podamos vivir
quieta y reposadamente en santidad y honestidad.5

4Ro. 13:57; 3. 1 P.2:17 5 1 Ti. 2:1,2

69
LECCION 11: DE LA IGLESIA Y LOS SANTOS

CAPITULO 25

EL MATRIMONIO

1. El matrimonio ha de ser entre un hombre y una mujer; no es


licito para ningún hombre tener más de una esposa, ni para
ninguna mujer tener más de un marido.'

1. Gn. 2:24 con Mt 19:5,6; 1 Ti. 3:2; Tit. 1:6

2. El matrimonio file instituido para la mutua ayuda de esposo y


esposa;' para multiplicar el género humano por medio de una
descendencia legítima:' y para evitar la impureza.3

1. Gn. 2:18; Pr. 2:17; Mal. 2:14 2. Gn. 1:28; Sal. 127:3-5; 128:3,4
3. 1 Co. 7:2,9

3. Pueden casi lícitamente toda clase de personas capaces de dar


su consentimiento en su sano juicio;' sin embargo, es deber de
los cristianos casarse en el Señor. Y, por tanto, los que profesan la
verdadera fe no deben casarse con incrédulos o idólatras; ni
deben los que son piadosos unirse en yugo desigual, casándose
con los que sean malvados en sus vidas o que sostengan herejías
condenables.2

1. 1 Co. 7:39; 2 Co. 6:14; He. 13:4; 1 Ti. 4:3 2. 1 Co. 7:39; 2 Co.
6:14

70
4. El matrimonio no debe contraerse dentro de los grados de
consanguinidad o afinidad prohibidos en la Palabra, ni pueden
tales matrimonios incestuosos legalizarse jamás por ninguna ley
humana, ni por el consentimiento de las partes, de tal manera
que esas personas puedan vivir juntas como marido y mujer.1

1. Lv. 18:6-18: Am 2:7; Mr. 6:18; 1 Co. 5:1

71
CAPITULO 26

LA IGLESIA

1. La Iglesia católica o universal, 1 que (con respecto a la obra


interna del Espíritu y la verdad de la gracia) puede llamarse
invisible, se compone del número completo de los elegidos que
han sido, son o serán reunidos en uno bajo Cristo, su cabeza; y es
la esposa, el cuerpo, la plenitud de Aquel que llena todo en
todos.2

1. Mt. 16:18; 1 Co. 12:28; Ef. 1:22; 4:11-15; 5:23-25,27,29,32; Col.


1:18,24; He. 12:23 2. Ef. l: 22; A: 11-15; 5:23-25, 27, 29,32; Col.
1:18,24; Ap. 21:9-14

2. Todas las personas en todo el mundo que profesan la fe del


evangelio y obediencia a Dios por Cristo conforme al mismo, que
no destruyan su propia profesión mediante errores
fundamentales o conductas impías, son y pueden ser llamados
santos visibles;1 y de tales personas todas las congregaciones
locales deben estar compuestas.2

1. 1 Co. 1:2; Ro. 1:7,8; Hch. 11:26; ML 16:18; 28:15-20; 1 Co. 5:1-
9 2. Mt. 18:15-20; Hch. 2:3742; 4:4; Ro. 1:7; 1 Co. 5:1-9

3. Las iglesias más puras bajo el cielo están sujetas a la impureza


y al error, 1 y algunas han degenerado tanto que han llegado a
ser no iglesias de Cristo sino sinagogas de Satanás.2 Sin embargo,
Cristo siempre va tenido y siempre tendrá un reino en este
mundo, hasta el fin del mismo, compuesto de aquellos que creen
en Él y profesan su nombre.3

1. iCo. 1:11; 5:1; 6:6; 1l: 17-19; 3Jn.9, l0; Ap.2y 3 2. Ap. 2:5 con
1:20; 1 Ti. 3:14,15; Ap. 18:2 3. Mt. 16:18; 24:14; 28:20; Mr.
4:3~32; Sal. 72:1~l8; 102:28; Is. 9:6,7; Ap. 12:17; 20:7-9

72
4. La Cabeza de la Iglesia es el Señor Jesucristo, en quien, por el
designio del Padre, todo el poder requerido para el llamamiento,
el establecimiento, el orden o el gobierno de la Iglesia, está
suprema y soberanamente investido.1

No puede el papa de Roma ser cabeza de ella en ningún sentido,


sino que él es aquel Anticristo, aquel hombre de pecado e hijo de
perdición, que se ensalza en la Iglesia contra Cristo y contra todo
lo que se llama Dios, a quien el Señor destruirá con el resplandor
de su venida.2

1. Col. 1:18; Ef. 4:11-16; l:2~23; 5:23-32; 1 Co. 12:27,28; Jn. 17:1-
3; Mt. 28:18-20; Hch. 5:31; Ja. l0:1~16 2. 2 Ts. 2:2-9

5. En el ejercicio de este poder que le ha sido confiado, el Señor


Jesús, a través del ministerio de su Palabra y por su Espíritu,
llama a si mismo del mundo a aquellos que le han sido dados por
su Padre' para que anden delante de El en todos los caminos de
la obediencia que Él les prescribe en su Palabra.2 A los así
llamados, Él les ordena andar juntos en congregaciones
concretas, o iglesias, para su edificación mutua y la debida
observancia del culto público, que Él requiere de ellos en el
mundo.3

1. Jn. 10:16,23; 12:32; 17:2; Hch. 5:31,32 2. Mt. 28:20 3. Mt.


18:15-20; Hch. 14:21-23; Tit. 1:5; 1 Ti. 1:3; 3:1~16; 5:17-22

6. Los miembros de estas iglesias son santos por su llamamiento,


y en una forma visible manifiestan y evidencian (por su profesión
de fe y su conducta> su obediencia al llamamiento de Cristo;' y
voluntariamente acuerdan andar juntos, conforme al designio de
Cristo, dándose a sí mismos al Señor y mutuamente, por la

73
voluntad de Dios, profesando sujeción a los preceptos del
evangelio.2

1. Mt. 28:18-20; Hch. 14:22,23; Ro. 1:7; 1 Co. 1:2 con los vv. 13-
17; 1 Ts. 1:1 con los vv. 2- 10; Hch. 2:37-42; 4:4; 5:13,14 2. Hch.
2:41,42; 5:13,14; 2 Co. 9:13

7. A cada una de estas iglesias así reunidas, el Señor, conforme a


su mente declarada en su Palabra, ha dado todo el poder y
autoridad en cualquier sentido necesarios para realizar ese
ordenen la adoración y en la disciplina que Él ha instituido para
que lo guarden; juntamente con mandatos y reglas para el
ejercicio propio y correcto y la ejecución del mencionado poder.1

1. Mt. 18:17-20; 1 Co. 5:4,5,13; 2 Co. 2:6-8

8. Una iglesia local, reunida y completamente organizada de


acuerdo a la mente de Cristo, está compuesta por oficiales y
miembros; y los oficiales designados por Cristo para ser escogidos
y apartados por la iglesia (así llamada y reunida), para la
particular administración de las ordenanzas y el ejercicio del
poder o el deber, que Él les confía o a los que los llama, para que
continúen hasta el fin del mundo, son los obispos o ancianos, y
los diáconos.'

1. Fil. 1:1; 1 Ti. 3:1-13; Hch. 20:17,28; TiL 1:5-7; 1 P. 5:2

9. La manera designada por Cristo para el llamamiento de


cualquier persona que ha sido cualificada y dotada por el Espíritu
Santo' para el oficio de obispo o anciano en una iglesia, es que
sea escogido para el mismo por común sufragio de la iglesia
misma,2 y solemnemente apartado mediante ayuno y oración
con la imposición de manos de los ancianos de la iglesia, si es que
hay algunos constituidos anteriormente en ella;3 y para un

74
diácono, que sea escogido por el mismo sufragio y apartado
mediante oración y la misma imposición de manos.4

1. Ef. 4:11; 1 Ti. 3:1-13 2. Hch. 6:1-7; 14:23 con ML 18:17-20; 1


Co. 5:1-13 3. 1 Ti. 4:14; 5:22 4. Hch. 6:1-7

10. Siendo la obra de los pastores atender constantemente al


servicio de Cristo, en sus iglesias, en el ministerio de la Palabra y
la oración velando por sus almas, como aquellos que han de dar
cuenta a Él es la responsabilidad de las iglesias a las que ellos
ministran darles no solamente todo el respeto debido, sino
compartir también con ellos todas sus cosas buenas, según sus
posibilidades,2 de manera que tengan una provisión adecuada,
sin que tengan que enredarse en actividades seculares,3 y
puedan también practicar la hospitalidad hacia los demás.4 Esto
lo requiere la ley de la naturaleza y el mandato expreso de
nuestro Señor Jesús, quien ha ordenado que los que predican el
evangelio vivan del evangelio.5

1. Hch. 6:4; 1 Ti. 3:2; 5:17; He. 13:17 2. 1 Ti. 5:17,18; 1 Co. 9:14;
Gá. 6:6,7 3. 2 Ti. 2:4 4. 1 Ti. 3:2 5. 1 Co. 9:6-14; 1 Ti. 5:18

11. Aunque sea la responsabilidad de los obispos o pastores de


las iglesias, según su oficio, estar constantemente dedicados a la
predicación de la Palabra, sin embargo la obra de predicar la
Palabra no está tan particularmente limitada a ellos, sino que
otros también dotados y cualificados por el Espíritu Santo para
ello y aprobados y llamados por la iglesia, pueden y deben
desempeñarla.'

1. Hch. 8:5; 11:19-21; 1 P. 4:10,11

12.Todos los creyentes están obligados a unirse a iglesias locales


cuando y donde tengan la oportunidad de hacerlo. Asimismo
todos aquellos que son admitidos a los privilegios de una iglesia

75
también están sujetos a la disciplina y el gobierno de la misma
iglesia, conforme a la norma de Cristo.'

1. 1 Ts. 5:14; 2 Ts. 3:6,14,15; 1 Co. 5:9-13; He. 13:17

13. Ningún miembro de iglesia, sobre la base de alguna ofensa


recibida, habiendo cumplido el deber requerido de él hacia la
persona que le ha ofendido, debe perturbar el orden de la iglesia,
o ausentarse de las reuniones de la iglesia o de la administración
de ninguna de las ordenanzas sobre la base de tal ofensa de
cualquier otro miembro, sino que debe esperar en Cristo
mientras prosigan las actuaciones de la iglesia.'

1. Mt. 18:15-17; Ef. 4:2,3; Col. 3:12-15; 1 Jn. 2:7-11,18,19; Ef.


4:2,3; Mt 28:20

14. Puesto que cada iglesia, y todos sus miembros, están


obligados a orar continuamente por el bien y la prosperidad de
todas las iglesias de Cristo en todos los lugares, y en todas las
ocasiones ayudar a cada una dentro de los límites de sus áreas y
vocaciones, en el ejercicio de sus dones y virtudes,1 así las
iglesias, cuando estén establecidas por la providencia de Dios de
manera que puedan gozar de la oportunidad y el beneficio de
ello,2 deben tener comunión entre sí, para su paz, crecimiento
en amor y edificación mutua.3

1. Jn. 13:34,35; 17:11,21-23; Ef. 4:11-16; 6:18; Sal. 122:6; Ro.


16:1-3; 3Jn. 8-10 con 2Jn. 511; Ro. 15:26; 2Co. 8: l-4, l6-24; 9:12-
15; Col. 2:1 con 1:3, 4, 7 y 4:7, 12 2. Gá 1:2,22; Col. 4:16; Ap. 1:4;
Ro. 16:1,2; 3 Jn. 8-10 3. 1 Ja. 4:1-3 con 2 y 3 Juan; Ro. 16:1-3; 2
Co. 9:12-15; Jos. 22

15. En casos de dificultades o diferencias respecto a la doctrina o


el gobierno de la iglesia, en que bien las iglesias en general o bien
una sola iglesia están concernidas en su paz, unión y edificación;

76
o uno o vanos miembros de una iglesia son dañados por
procedimientos disciplinarios que no sean de acuerdo a la verdad
y al orden, es conforme a la mente de Cristo que muchas iglesias
que tengan comunión entre sí, se reúnan a través de sus
representantes para considerar y dar su consejo sobre los
asuntos en disputa, para informar a todas las iglesias
concernidas.'

Sin embargo, a los representantes congregados no se les entrega


ningún poder eclesiástico propiamente dicho ni jurisdicción sobre
las iglesias mismas para ejercer disciplina sobre cualquiera de
ellas o sus miembros, o para imponer sus decisiones sobre ellas o
sus oficiales.2

1. Gá 2:2; Pr. 3:5-7; 12:15; 13:10 2. 1 Co. 7:25,36,40; 2 Co. 1:24; 1


Jn. 4:1

77
CAPITULO 27

LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS

1. Todos los santos que están unidos a Jesucristo,' su cabeza, por


su Espíritu y por la fe2 (aunque no por ello vengan a ser una
persona con El3), participan en sus virtudes, padecimientos,
muerte, resurrección y gloria;' y, estando unidos unos a otros en
amor, participan mutuamente de sus dones y virtudes,5 y están
obligados al cumplimiento de tales deberes, públicos y privados,
de manera ordenada, que conduzcan a su mutuo bien, tanto en
el hombre interior como en el exterior.6

1. Ef. 1:4; Jn. 17:2, 6; 2Co.5:21; Ro. 6:8; 8:17; 8:2; 1 Co. 6:17; 2P.
1:4 2. Ef. 3:16,17; Gá. 2:20; 2 Co. 3:17,18 3. 1 Co. 8:6; Col.
1:18,19; 1 Ti. 6:15,16; Is. 42:8; Sal. 45:7; He. 1:8,9 4. 1 Jn. 1:3; Jn.
1:16; 15:1-6; Ef. 2:4-6; Ro. 4:25; 6:1-6; Fil. 3:10; Col. 3:3,4 5. Jn.
13:34,35; 14:15; Ef. 4:15; 1 P. 4:10; Ro. 14:7,8; 1 Co. 3:21-23;
12:7,25-27 6. Ro. 1:12; 12:10-13; 1 Ts. 5:11,14; 1 P. 3:8; 1 Jn.
3:17,18; Gá. 6:10

2. Los santos, por su profesión, están obligados a mantener entre


sí un compañerismo y comunión santos en la adoración a Dios y
en el cumplimiento de los otros servicios espirituales que tiendan
a su edificación mutua,' así como a socorrerse los unos a los
otros en las cosas externas según sus posibilidades y
necesidades.2 Según la norma del evangelio, aunque esta
comunión deba ejercerse especialmente en las relaciones en que
se encuentren, ya sea en las familias o en las iglesias,3 no
obstante, debe extenderse, según Dios dé la oportunidad, a toda
la familia de la fe, es decir, a todos los que en todas partes

78
invocan el nombre del Señor Jesús.4 Sin embargo, su comunión
mutua como santos no quita ni infringe el derecho o la propiedad
que cada hombre tiene sobre sus bienes y posesiones.5

1. He. 10:24,25; 3:12,13 2. Hch. 11:29,30; 2 Co. 8,9; Gá. 2; Ro. 15


3. 1 Ti. 5:8,16; Ef. 6:4; 1 Co. 12:27

79
LECCION 12: DE LAS ORDENANZAS

CAPITULO 28

EL BAUTISMO Y LA CENA DEL SEÑOR

1. El bautismo y la Cena del Señor son ordenanzas que han sido


positiva y soberanamente instituidas por el Señor Jesús, el único
legislador,' para que continúen en su Iglesia hasta el fin del
mundo.2

1. Mt 28:19,20; 1 Co. 11:24,25 2. Mt. 28:18-20; Ro. 6:3,4; 1 Co.


1:13-17; G~ 3:27; Ef. 4:5; Col. 2:12; 1 P. 3:21; 1 Co. 11:26; Lc.
22:14-20

2. Estas santas instituciones han de ser administradas solamente


por aquellos que estén cualificados y llamados para ello, según la
comisión de Cristo.'

1. Mt 24:45-51; Lc. 12:41-44; 1 Co. 4:1; Tit 1:5-7

80
CAPITULO 29

EL BAUTISMO

1 El bautismo es una ordenanza del Nuevo Testamento instituida


por Jesucristo, con el fin de ser para la persona bautizada una
señal de su comunión con Él en su muerte y resurrección, de
estar injertado en Él,' de la remisión de pecados2 y de su entrega
a Dios por medio de Jesucristo para vivir y andar en novedad de
vida.3

1. Ro. 6:3-5; Col. 2:12; Gá. 3:27 2. Mr. 1:4; Hch. 22:16 3. Ro.6:4

2. Los que realmente profesan arrepentimiento para con Dios y


fe en nuestro Señor Jesucristo y obediencia a Él son los únicos
sujetos adecuados de esta ordenanza.'

1. Mt 3:1-12; Mr. l:4-6; Lc. 3:3-6; Mt. 28:19,20; Mr. 16:15,16; Jn.
4:1,2; 1 Co. 1:13-17; Hch. 2:37-41; 8:12,13,36-38; 9:18; 10:47,48;
11:16; 15:9; 16:14,15,31-34; 18:8; 19:3-5;22:16;Ro.6:3,4;Gá.3:27;
Col. 2:12; 1 P. 3:21; Jer. 31:31-34; Fil. 3:3; Jn. 1:12,13; Mt. 21:43

3. El elemento exterior que debe usarse en esta ordenanza es el


agua, en la cual ha de ser bautizada1 la persona en el nombre del
Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.2

1. Mt. 3:11; Hch. 8:36,38; 22:16 2. ML 28:18-20

4. La inmersión de la persona en el agua es necesaria para la


correcta administración de esta ordenanza.'

1. 2R. 5:14; Sal. 69:2; Is. 21:4;Mr. 1:5,8-9;Jn.3:23;Hch.8:38;Ro.6:4;


Col. 2:12; Mr. 7:3,4; 10:38,39;Lc. 12:50; 1 Co. 10:1,2; Mt.
3:11;Hch. 1:5,8; 2:1-4,17

81
CAPITULO 30

LA CENA DEL SEÑOR

1. La Cena del Señor Jesús fue instituida por Él la misma noche en


que fue entregado,' para que se observara en sus iglesias2 hasta
el fin del mundo,3 para el recuerdo perpetuo y para la
manifestación del sacrificio de sí mismo en su muerte,4 para
confirmación de la fe de los creyentes en todos los beneficios de
la misma,5 para su alimentación espiritual y crecimiento en Él,6
para un mayor compromiso en todas las obligaciones que le
deben a Él,7 y para ser un vínculo y una prenda de su comunión
con Él y entre ellos mutuamente."

1. 1 Co. 11:23-26; Mt. 26:20-26; Mr. 14:17-22; Lc. 22:19-23 2.


Hch. 2:41,42; 20:7; 1 Co. 11:17-22,33,34 3. Mr. 14:24,25; Lc.
22:17-22; 1 Co. 11:24-26 4. 1 Co. 11:24-26; Mt. 26:27,28; Lc.
22:19,20 5. Ro.4:11 6. Jn. 6:29,35,47-58 7. 1 Co. 11:25 8. 1 Co.
10:16,17

2. En esta ordenanza Cristo no es ofrecido a su Padre, ni se hace


en absoluto ningún verdadero sacrificio para la remisión del
pecado ni de los vivos ni de los muertos; sino que solamente es
un memorial de aquel único ofrecimiento de sí mismo y por sí
mismo en la cruz, una sola vez para siempre,' y una ofrenda
espiritual de toda la alabanza posible a Dios por el mismo.2 Así
que el sacrificio papal de la misa, como ellos la llaman, es
sumamente abominable e injurioso para con el sacrificio mismo
de Cristo, la única propiciación por todos los pecados de los
elegidos.

1. Jn. 19:30; He. 9:25-28; 10:10-14; Lc. 22:19; 1 Co. 11:24,25 2.


Mt. 26:26,27,30 con He. 13:10-16

82
3. El Señor Jesús, en esta ordenanza, ha designado a sus
ministros para que oren y bendigan los elementos del pan y del
vino, y que los aparten así del uso común para el uso sagrado;
que tomen y partan el pan, y tomen la copa y (participando
también ellos mismos) den ambos a los participantes.'

1. 1 Co. 11:23-26; Mt. 26:26-28; Mr. 14:24,25; Lc. 22:19-22

4. El negar la copa al pueblo,1 el adorar los elementos, el


elevarlos o llevarlos de un lugar a otro para adorarlos y el
guardarlos para cualquier pretendido uso religioso,2 es contrario
a la naturaleza de esta ordenanza y a la institución de Cristo.3

1. Mt. 26:27; Mr. 14:23; 1 Co. 11:25-28 2. Ex. 20:4,5 3. Mt. 15:9

5. Los elementos externos de esta ordenanza, debidamente


separados para el uso ordenado por Cristo, tienen tal relación
con Él crucificado que en un sentido verdadero, aunque en
términos figurativos, se llaman a veces por el nombre de las
cosas que representan, a saber: el cuerpo y la sangre de Cristo;'
no obstante, en sustancia y en naturaleza, esos elementos siguen
siendo verdadera y solamente pan y vino, como eran antes.2

1. 1 Co. 11:27; Mt. 26:26-28 2. 1 Co. 11 :2~28; Mt. 26:29

6. Esa doctrina que sostiene un cambio de sustancia del pan y del


vino en la sustancia del cuerpo y la sangre de Cristo (llamada
comúnmente transustanciación), por la consagración de un
sacerdote, o de algún otro modo, es repugnante no sólo a la
Escritura' sino también al sentido común y a la razón; echa abajo
la naturaleza de la ordenanza; y ha sido y es la causa de
muchísimas supersticiones y, además, de crasas idolatrías.

83
1. Mt. 26:26-29; Lc. 24:3643,50,51; Jn. 1:14; 20:2&29; Hch. 1:9-
11; 3:21; lCo. 1l: 2~26; lc. 12: l; Ap. 1:20; Gn. 17:l0, 11; Ez.37: ll;
Gn. 41:26,27

7. Los que reciben dignamente esta ordenanza,' participando


externamente de los elementos visibles, también participan
interiormente, por la fe, de una manera real y verdadera, aunque
no carnal ni corporal, sino alimentándose espiritualmente de
Cristo crucificado y recibiendo todos los beneficios de su
muerte.2 El cuerpo y la sangre de Cristo no están entonces ni
camal ni corporal sino espiritualmente presentes en aquella
ordenanza a la fe de los creyentes, tanto como los elementos
mismos lo están para sus sentidos corporales.3

1. 1 Co. 11:28 2. Jn. 6:29,35,47-58 3. 1 Co. 10:16

8. Todos los ignorantes e impíos, no siendo aptos para gozar de la


comunión con Cristo, son por tanto indignos de la mesa del Señor
y, mientras permanezcan como tales, no pueden, sin pecar
grandemente contra Él, participar de estos sagrados misterioso
ser admitidos a ellos;' además, quienquiera que los reciba
indignamente es culpable del cuerpo y la sangre del Señor, pues
come y bebe juicio para sí.2

1. Mt. 7:6; Ef. 4:17-24; 5:3-9; Ex. 20:7,16; 1 Co. 5:9-13; 2 Jn. 10;
Hch. 2:41,42; 20:7; 1 Co. 11:17-22,33,34 2. 1 Co. 11 :20-22,27-34

84
LECCION 13: DE LA ETERNIDAD

CAPITULO 31

EL ESTADO DEL HOMBRE DESPUÉS DE LA MUERTE Y DE LA


RESURRECCIÓN DE LOS MUERTOS

1. Los cuerpos de los hombres vuelven al polvo después de la


muerte y ven la corrupción,' pero sus almas (que ni mueren ni
duermen), teniendo una subsistencia inmortal, vuelven
inmediatamente a Dios que las dio.2 Las almas de los justos,
siendo entonces hechas perfectas en santidad, son recibidas en
el Paraíso donde están con Cristo, y contemplan la faz de Dios en
luz y gloria, esperando la plena redención de sus cuerpos. Las
almas de los malvados son arrojadas al infierno, donde
permanecen atormentadas y envueltas en densas tinieblas,
reservadas para el juicio del gran día. Fuera de estos dos lugares
para las almas separadas de sus cuerpos, la Escritura no reconoce
ningún otro.

1. Ga. 2:17; 3:19; Hch. 13:36; Ro. 5:12-21; 1 Co. 15:22 2. Gn. 2:7;
Stg. 2:26; Mt. 10:28; Ec. 12:7 3. Sal. 23:6; 1 R. 8:2749; Is. 63:15;
66:1; Lc. 23:43; Hch. 1:9-11; 3:21; 2 Co. 5:6-8; 12:24; Ef. 4:10; Fil.
1:21-23; He. 1:3; 4:14,15; 6:20; 8:1; 9:24; 12:23; Ap. 6:9-11;
14:13; 20:4-6 4. Lc. 16:22-26; Hch. 1:25; 1 P. 3:19; 2 P. 2:9

2. Los santos que se encuentren vivos en el último día no


dormirán, sino que serán transformados,' y todos los muertos
serán resucitados2 con sus mismos cuerpos, y no con otros, 3

85
aunque con diferentes cualidades, 4 y éstos serán unidos otra vez
a sus almas para siempre.5

1. 1 Co. 15:50-53; 2 Co. 5:14; 1 Ts. 4:17 2. Dn. 12:2; Jn. 5:28,29;
Hch. 24:15 3. Job 19:26,27; Ja. 5:28,29; 1 Co. 15:35-38,42-44 4. 1
Co. 15:4244,52-54 5. Dn. 12:2; Mt. 25:46

3. Los cuerpos de los injustos, por el poder de Cristo, serán


resucitados para deshonra;' los cuerpos de los justos, por su
Espíritu, 2 para honra, 3y serán hechos entonces semejantes al
cuerpo glorioso de Cristo.4

1. Dn. 12:2; Jn. 5:28,29

86
CAPITULO 32

EL JUICIO FINAL

1. Dios ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con


justicia por Jesucristo, a quien todo poder y juicio ha sido dado
por el Padre.' En aquel día, no sólo los ángeles apóstatas serán
juzgados,2 sino que también todas las personas que han vivido
sobre la tierra comparecerán delante del tribunal de Cristo" para
dar cuenta de sus pensamientos, palabras y acciones, y para
recibir conforme a lo que hayan hecho mientras estaban en el
cuerpo, sea bueno o malo.4

1. Hch. 17:31; Jn. 5:22,27 2. 1 Co. 6:3; Jud. 6 3. Mt. 16:27;


25:3146; Hch. 17:30,31; Ro. 2:6-16; 2 Ts. 1:5-10; 2 P. 3:1-13; Ap.
20:11-15 4. 2 Co. 5:10; 1 Co. 4:5; Mt. 12:36

2. El propósito de Dios al establecer este día es la manifestación


de la gloria de su misericordia en la salvación eterna de los
elegidos, y la de su justicia en la condenación eterna de los
réprobos, que son malvados y desobedientes;' pues entonces
entrarán los justos a la vida eterna y recibirán la plenitud de gozo
y gloria con recompensas eternas en la presencia del Señor; pero
los malvados, que no conocen a Dios ni obedecen al evangelio de
Jesucristo, serán arrojados al tormento eterno y castigados con
eterna perdición, lejos de la presencia del Señor y de la gloria de
su poder.2

1. Ro. 9:22,23 2. Mt 18:8; 25:41,46; 2 Ts. 1:9; He. 6:2; Jud. 6; Ap.
14:10,11; Lc. 3:17; Mr. 9:43,48; Mt. 3:12; 5:26; 13:41,42; 24:51;
25:30

87
3. Así como Cristo quiere que estemos ciertamente persuadidos
de que habrá un día de juicio, tanto para disuadir a todos los
hombres de pecar,' como para el mayor consuelo de los piadosos
en su adversidad;2 así también quiere que ese día sea
desconocido para los hombres, para que se desprendan de toda
seguridad camal y estén siempre velando porque no saben a qué
hora vendrá el Señor;3 y estén siempre preparados para decir:
Ven, Señor Jesús; ven pronto.4 Amén.

1. 2Co.5:10,11 2. 2Ts. 1:5-7 3. Mr. 13:35-37; Lc. 12:35-40 4. Ap.


22:20

88
GUIA DE ESTUDIO

Esta Guía de estudio es para ser utilizada con el folleto:


Confesión de fe de Londres de 1689. Por favor conteste las
preguntas de las lecciones valiéndose de la información que
aparece en el folleto. Antes de empezar con las preguntas,
tiene que leer toda la sección en el folleto correspondiente a
la lección que está estudiando.
Estas preguntas encontradas aquí en este estudio tienen el propósito
de darle una comprensión básica del contenido de la Confesión
de fe de Londres de 1689. Estas preguntas son necesarias, pues
conforman la parte básica del estudio de los 32 días de oración.

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 1: DE LAS SAGRADAS ESCRITURAS

1 ¿En qué tres áreas sirven las Escrituras como la única


regla suficiente e infalible?
2 Enumere las tres maneras como se manifiestan la
bondad, la sabiduría y el poder de Dios.
3 ¿Cuántos libros hay en el canon del Antiguo
Testamento de las Escrituras?
4 ¿Cuántos libros hay en el canon del Nuevo Testamento
de las Escrituras?
5 ¿Quién es el verdadero Autor de la Biblia?
6 ¿Por qué no deben ser parte del canon de las
Escrituras los libros llamados apócrifos*
7 ¿Cuál es la base para creer y recibir las Escrituras
como autoritativa?
8 Enumere ocho razones por que se puede confiar en la
Biblia como la Palabra de Dios.
9 Enumere cuatro áreas en que todo el plan de Dios es
revelado.
10 ¿Qué nuevas revelaciones del Espíritu o tradiciones de
los hombres pueden ser agregadas a las Escrituras?
89
11 ¿Cuál es el rol del Espíritu Santo con respecto a la
comprensión de las Escrituras?
12 Un tema es claro como el agua en las Escrituras, ¿cuál
es?
13 Enumere los dos idiomas originales en que fueron
escritas las Escrituras.
14 Hay una regla infalible que debe guiar la
interpretación bíblica, ¿cuál es?
15 Cuando la Palabra de Dios contradice a escritos históricos
de grandes hombres y concilios eclesiásticos, ¿qué
escritos deben prevalecer?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 2: DE DIOS Y LA SANTA TRINIDAD.

1. Enumere por lo menos diez atributos de Dios


2. ¿De qué deriva Dios su gloria?
3. ¿Cómo subsiste Dios en su ser divino?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO3: DE EL DECRETO DE DIOS.


1. ¿Cuándo y qué decretó Dios que sucederá?
2. Los decretos de Dios, ¿están basados en eventos que él
ha previsto?
3. ¿Con qué propósito están pre ordenados para la vida
eterna algunos hombres y ángeles mientras a otros se los
deja seguir en sus pecados?
4. ¿Cuál es el número y estado de los que han sido
predestinados?
5. Dé el motivo divino de los decretos de Dios.
6. ¿Quiénes son los elegidos de Dios?
7. ¿Qué valor tiene la doctrina de la elección?

90
PREGUNTAS PARA ESTUDIO 4: DE LA CREACIÓN
1. De acuerdo a las Escrituras, ¿cuántos días se tardó el Señor
para crear el mundo?
2. Describa la creación del hombre en su estado original.
3. ¿Qué cosa le fue prohibida al hombre?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 5: DE LA PROVIDENCIA DIVINA

1. ¿Hasta qué punto se involucra Dios en los asuntos del


mundo que él creó?
2. Explique la relación entre las causas primarias y las
secundarias.
3. La soberanía de Dios, ¿está restringida por las leyes de
la naturaleza?
4. ¿Es Dios soberano sobre el pecado?
5. ¿Por qué permite Dios el pecado en el santo?
6. ¿Cómo endurece Dios el corazón del individuo?
7. ¿Qué consuelo puede derivar el cristiano de la doctrina
de la providencia divina?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 6: DE LA CAÍDA DEL HOMBRE, EL


PE- CADO Y SU CASTIGO
1. ¿Cómo cayó el hombre de su estado de inocencia?
2. ¿Qué le sucedió a toda la posteridad de Adán cuando
éste transgredió la ley de Dios?
3. ¿Qué evidencia existe para demostrar que Adán actuó
como un representante federal de todos los hombres
de manera que su transgresión se convierte en la
transgresión de todos?
4. ¿Cómo se comparan las personas según su naturaleza?
5. La salvación, ¿quita la inclinación a pecar?

91
PREGUNTAS PARA ESTUDIO 7: DEL PACTO DE DIOS

1. ¿Puede hacer algo el hombre para ganarse o merecer


la salvación y el favor de Dios?
2. ¿Cuáles son los términos del pacto de gracia?
3. ¿Cómo se revela el pacto de gracia?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 8: DE CRISTO EL MEDIADOR

1. Enumere siete roles asociados con el Señor Jesucristo.


2. Jesús, ¿es Dios? ¿Cómo es Jesús único?
3. ¿Qué oficio cumplió voluntariamente Jesús para bien de
los elegidos?
4. Enumere tres logros de Cristo después de su obediencia
perfecta y su sacrificio en el Calvario.
5. ¿Cómo son salvos los creyentes en la era del Antiguo
Testamento y en la del Nuevo Testamento?
6. ¿Alguna vez se confundieron y entremezclaron la
naturaleza divina y la humana de Cristo?
7. Enumere siete obras de gracia que Cristo hace por los
electos.
8. ¿Puede María o cualquier otro “santo” ser considerado
como mediador adecuado entre Dios y el hombre?
9. Dé tres razones por las cuales los hombres necesitan a
Jesús.

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 9: DEL LIBRE ALBEDRÍO

1. Por favor describa la voluntad del hombre.


2. ¿Fue la voluntad de Adán confirmada en justicia cuando
fue creado?
3. ¿Qué habilidad perdió el hombre en su caída en Adán?
4. Explique lo que significa tener un albedrío “liberado”.
5. ¿Cuándo será la voluntad del hombre hecha perfectamente
libre?
92
PREGUNTAS PARA ESTUDIO: DE EL LLAMAMIENTO EFICAZ

1. ¿Cuáles son los cuatro factores específicos asociados con


el llamamiento divino a la salvación?
2. ¿Son las almas llamadas eficazmente para ser salvas
en base a una fe prevista?
3. ¿Es el alma activa o pasiva en el acto de salvación?
4. ¿Son salvos los niños que mueren en la primera infancia?
5. ¿Van al cielo los infantes?
6. ¿Son salvos los paganos o los que nunca han oído el
evangelio?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 11: DE LA JUSTIFICACIÓN

1. Explique lo que Dios hace y no hace por los pecadores


en el acto de la justificación.
2. ¿Cuál es el instrumento que usa Dios para justificar el
alma?
3. ¿Para quiénes murió Cristo?
4. ¿Es ser elegido lo que salva?
5. Una vez que la persona ha entrado en un estado de
justificación, ¿es posible dejar ese estado?
6. ¿Son los creyentes de la era del Antiguo Testamento y de la
del Nuevo Testamento justificados de la misma manera?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO12: DE LA ADOPCIÓN


1. ¿Qué ha prometido hacer Dios por los suyos que han
sido justificados?
2. ¿Es un error apelar a los sentimientos religiosos de la
gente cuando se presenta el evangelio o las doctrinas de
gracia?
3. ¿Cuál es su reacción a la doctrina bíblica de adopción?
4. El creyente puede exclamar “Abba, Padre” (una
expresión cariñosa). Cuente cómo le hace sentir esto

93
PREGUNTAS PARA ESTUDIO13: DE LA SANTIFICACIÓN

1. Por favor explique qué es lo que sucede durante el proceso


de santificación.
2. Describa la guerra espiritual que arde en el alma del santo.
3. ¿Hay esperanza para la santificación del creyente en su
lucha para obtener la santidad?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO14: DE LA FE SALVADORA

1. ¿Cómo es impartida la fe al alma?


2. ¿Cómo crece la fe?
3. Mencione ocho expresiones de una fe vital.
4. Explique la diferencia entre los diversos tipos de fe.

PREGUNTAS PARA ESTUDIO15: DE EL ARREPENTIMIENTO PARA


VIDA Y SALVACIÓN.

1. ¿Puede ser salva la persona que ha pecado seriamente y


vivido mucho tiempo en el pecado?
2. ¿Qué ha provisto Dios en el pacto de gracia?
3. Enumere los varios componentes de la gracia evangélica.
4. ¿Cuánto dura el arrepentimiento?
5. ¿Hay pecado demasiado grande para la gracia de Dios?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 16: DE LAS BUENAS OBRAS

1. ¿En qué consiste una buenaobra a los ojos de Dios?


2. Mencione siete manifestaciones de lasbuenas obras.
3. ¿Cuál es la relación entre responsabilidad humana y
capacitación divina?
4. ¿Pueden los cristianos juntar tantas buenas obras como
para distribuirlas a otros en la economía divina?

94
5. ¿Por qué el hombre nunca puedeganarse los méritos de
Cristo para salvación?
6. ¿De qué manera y sobre qué base son aceptables a Dios
las buenas obras de los escogidos?
7. Dé tres razones por las cuales las obras de los no
regenerados no son aceptables a Dios.

PREGUNTAS PARA ESTUDIO17: DE LA PERSEVERANCIA DE LOS


SAN- TOS

1. Presente cuatro argumentos a favor de la certeza de la


“perseverancia de los santos”, que enseña que segura y
definitivamente serán salvos.
2. ¿Cuál es la base o raíz de la seguridad del creyente? ¿Tiene
algo que ver con su libre albedrío?
3. Mencione ocho resultados trágicos de cuando el santo
peca.

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 18: DE LA SEGURIDAD DE GRACIA Y


SALVACIÓN

1. Explique la diferencia entre una salvación verdadera y


una falsa.
2. Liste tres fundamentos de la fe que dan seguridad de
salvación.
3. Cuando el Espíritu Santo revela seguridad a un verdadero
creyente, ¿qué responsabilidad tiene éste con respecto a
su salvación?
4. ¿De qué maneras puede ser zarandeada la seguridad de
salvación del creyente?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO19: DE LA LEY DE DIOS

1. ¿Qué acuerdo hizo Dios con Adán y su posteridad?

95
2. El acuerdo que Dios hizo con Adán, ¿sigue en vigencia
para los hombres?
3. Además de la ley moral, ¿qué le agradó a Dios dar a Israel?
4. Las leyes ceremoniales y judiciales de la Ley Mosaica
5. ¿siguen en vigencia para los creyentes en la actualidad?
6. ¿Cuál es el propósito y uso de la ley moral dentro de la
iglesia?
7. ¿Están los verdaderos creyentes bajo la ley moral como
un pacto basado en las obras?
8. ¿Son las estipulaciones de la ley moral incompatibles con
la gracia del Evangelio?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO20: DE EL EVANGELIO Y SU


INFLUENCIA
1. ¿Qué hizo Dios cuando el pacto de las obras fue violado
por el pecado incapacitándolo para dar vida?
2. ¿Puede el hombre lograr un conocimiento de la salvación
por medio de las obras de la creación o los actos de pro-
videncia divina?
3. ¿Pueden sumarse las buenas obras del hombre con las
promesas del evangelio a fin de formar una base para la
salvación del alma?
4. ¿Qué obra del Espíritu Santo en el alma de la persona es
primordial para su salvación?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 21: DE LA LIBERTAD CRISTIANA Y


LIBERTAD DE CONCIENCIA.

1. Mencione cuales son las diez libertades que tiene el


cristiano.
2. ¿Cómo es liberada la conciencia?
3. ¿Cómo puede esclavizarse la conciencia?
4. ¿Cómo puede violarse la conciencia y pervertirse el
evangelio?
96
PREGUNTAS PARA ESTUDIO 22: LA ADORACIÓN RELIGIOSA Y EL
DÍA DEL SEÑOR

1. ¿Qué revela acerca de Dios la luz de la naturaleza?


2. ¿Cuáles son las responsabilidades del hombre hacia Dios?
3. ¿Quién es el único que ha de ser adorado?
4. Describa la manera de orar que es aceptable a Dios.
5. Aunque se permite mucha libertad en la oración, ¿qué
dos prohibiciones divinas han sido impuestas sobre esta
actividad espiritual?
6. Mencione varios actos asociados con la adoración
religiosa a Dios.
7. ¿Dónde debe ser adorado Dios?
8. Describa el significado del “día de reposo cristiano”.
9. ¿Cómo puede santificarse el día de reposo cristiano?

PREGUNTAS PARA STUDIO 23: DE LEGALES Y VOTOS

1. ¿Qué es un juramento legal?


2. ¿Es incorrecto invocar el nombre de Dios al hacer un
juramento?
3. Describa la actitud correcta del que hace un juramento
religioso.
4. ¿Cuáles son los tres factores que deben caracterizar un
juramento?
5. Dé ejemplos de juramentos que no debe hacer el

cristiano. PREGUNTAS PARA ESTUDIO 24: DE EL GOBIERNO

CIVIL

1. ¿Ha establecido Dios gobiernos civiles y, de ser así, qué


rol les ha asignado?
2. ¿Deben los cristianos involucrarse directamente en las
cuestiones políticas de la nación?

97
3. Enumere dos responsabilidades cristianas hacia
los gobernantes civiles.

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 25: DE EL MATRIMONIO

1. ¿Qué límites ha impuesto Dios sobre la institución del


matrimonio?
2. Mencione tres razones por las cuales Dios instituyó el
matrimonio.
3. ¿Con quién no puede casarse el cristiano?
4. ¿QuédiceDios acerca de lasrelaciones

incestuosas? PREGUNTAS PARA ESTUDIO 26: DE LA

IGLESIA

1. Describa la “iglesiainvisible”.
2. ¿Aquiénes se lespuededenominarsantos“visibles”?
3. Laverdaderaiglesia,¿puedellegar a serapóstata?
4. ¿Por qué el Papa de la Iglesia Católica Romana es
considerado por muchoscomounaexpresióndelanticristo?
5. ¿Esimportantesermiembrode una asamblealocal?
6. ¿Qué obligación mutua tienen los miembros de la iglesia?
7. Enumere dos funciones que caracterizan la asamblea local.
8. ¿Cuáles son los dos oficios de liderazgo de la iglesia, y
cómo se les establece en posiciones de autoridad?
9. Describa la manera como los líderes de la iglesia deben
ser apartados para el liderazgo espiritual.
10. ¿Cuáles son los deberes del pastor hacia su congregación?
11. ¿Cuáles son los deberes de la congregación hacia su pastor?
12. ¿Quiénes pueden predicar la Palabra?
13. El hacerse miembro de una congregación local, ¿es
opcional?
14. ¿Es correcto que una persona se desligue de la asamblea
98
local debido a una ofensa personal?

99
15. ¿Deben las iglesias locales buscar compañerismo unas con
las otras?
16. Cuando las iglesias locales de la misma fe y práctica
conversan con las otras, ¿cuál es la naturaleza de su
compañerismo?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 27: DE LA COMUNIÓN DE LOS


SANTOS.
1. En términos generales, ¿tienen los creyentes alguna
obligación hacia otros creyentes?
2. Específicamente, ¿cuáles son algunas de las obligaciones
mutuas de los creyentes?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 28: DE EL BAUTISMO Y LA CENA


DEL SEÑOR
1. ¿Cuáles son las dos ordenanzas establecidas por Cristo?
2. ¿Quiénes deben administrar las santas ordenanzas?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 29: DE EL BAUTISMO

1. ¿Qué significa el bautismo?


2. ¿Quiénes deben participar de las ordenanzas bíblicas?
3. ¿Cuáles son las palabras correctas para decir en el
bautismo cristiano?
4. Identifique el modo correcto de bautizar según esta
Confesión de fe.

100
PREGUNTAS PARA ESTUDIO 30: LA CENA DEL SEÑOR

1. Enumere cinco razones por las que Cristo instituyó la


Cena del Señor.
2. ¿Es Cristo sacrificado cada vez que se observa la Cena del
Señor?
3. ¿Por quiénes y a quiénes debe ser administrada la Cena
del Señor?
4. ¿Debe negársele uno o ambos elementos al pueblo de Dios?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 31: EL ESTADO DEL HOMBRE


DESPUÉS DE LA MUERTE Y LA RESURRECCIÓN DE LOS
MUERTOS
1. ¿Adónde va el alma de los justos después de la muerte?
2. ¿A dónde va el alma de los impíos después de la muerte?
3. ¿Puede el cristiano tener la esperanza de una resurrección
corporal de los muertos?
4. En la resurrección de los muertos, ¿qué les sucede a los
cuerpos de los justos y de los injustos?

PREGUNTAS PARA ESTUDIO 32: DEL JUICIO FINAL

1. Describa lo que sucederá en el juicio final.


2. Después del juicio final, ¿qué le sucederá a los justos y a
los malvados?
3. Contraste la actitud de los justos con la de los injustos
con respecto al juicio final.

101
APENDICE
…Para alabanza de su Gloria. Efesios 1:14
CONTENIDO

COROS
Castillo fuerte Grande y poderoso Nombre, sobre todo
Dios poderoso Hay libertad Poderoso
El amor de Cristo Jesucristo basta Por encima del sol
El Dios que adoramos Mas Dios muestra su Quien dices que soy
En esto conocemos amor Todo lo pago
Eres el camino Más grande lo que Un siervo para tu gloria
Es nuestro Dios imagino Venid glorificad a Dios
Exaltado, sobre todo Me postro
Glorioso eres Jesús Mi esperanza está en
Gracia sublime es Jesús
Gracias Dios Nada es imposible

HIMNOS

A Dios demos gloria


Adoradle Da lo mejor al maestro Inmensa y sin igual
Al cristo vivo sirvo Danos un bello hogar piedad
Alcance salvación Día en día Jesús es mi rey soberano
Anhelo trabajar por el Dilo a cristo Todas las promesas
señor Dulce comunión Las pisadas del maestro
Años mi alma en vanidad El me sostendrá Lejos de mi padre Dios
Buscad primero El que habita al abrigo Lluvias de gracia
Cantaré la bella historia En la cruz Los que esperan
Canten del amor de En los negocios del rey Majestad
Cristo Estad por cristo firmes Maravillo es
Celebremos su gloria Firmes y adelante Me glorío en Jesucristo
Como podré estar triste Fuente de la vida eterna Me guía El
Comprado por sangre Grande amor sublime Mi vida di por ti
Con gran gozo eterno No tengo temor
Cristo es mi dulce Grande es tu fidelidad Noble sostén
salvador Grande gozo hay en mi Oh amor de Dios
Cristo fiel te quiere ser alma Oh bondad tan infinita
Cual pendón hermoso Habladme más de cristo Oh cuan dulce es confiar
Cuán grande es El Halle un buen amigo Oh que amigo nos es
Cuando combatido He decidido seguir a cristo
Cristo
Oh yo quiero andar Santo santo grande Vengo Jesús a ti
Cristo eterno Victoria en Cristo
Para andar con Jesús Santo santo santo Vida abundante
Paz cuan dulce paz Señor quien entrara Vivo por cristo
Pon tus ojos en Cristo Señor tú me llamas Yo sé a quién he creído
Porque Él vive Sublime gracia Yo te sirvo
Que mi vida entera este Tal como soy
Quieres ser salvo Te exaltare mi Dios mi
Roca de la eternidad rey
Usa mi vida
COROS

CASTILLO FUERTE Puente:


Castillo fuerte es nuestro Dios Escudo siempre fiel
y en la prueba y tempestad Es firme Todas las cosas vienen de ti y por ti Oh
Su poder armado está el enemigo cruel más él gran yo soy Todo es tuyo Y para ti, oh Señor Oh
caerá ante Jesús el Rey gran yo soy
Coro: Te exaltaremos por siempre y siempre oh Dios
Confía en Dios, oh corazón Él es fuerte para Ooh, ooh por siempre y siempre oh Dios Ooh,
salvar Confía en Dios la roca es Él tu refugio es ooh
castillo fuerte

En mis fuerzas yo no confiaré o en vano lucharé


pues mi confianza está en Aquel que reina con
poder por mi pelea el Soberano Dios por siempre
la victoria Suya es EL AMOR DE CRISTO
Profundo es el amor de Cristo Más
que el infierno y la maldad. Dejó su trono y su
DIOS PODEROSO gloria para traernos hacia Él.
¿Quién sino el Señor las estrellas creó Y Más ancho es el amor de Cristo que el foso que
su luz limitó?. ¿Quién sino el Señor Sol y Luna nos separó. me alcanzó en mis tinieblas sólo en Él
hay salvación.
formó movimiento les dio? ¿Quién sino el Señor
Hace la lluvia venir Más profundo que el mar, Más
Truenos rugir? Tus obras grandes son. allá del cielo está.
Tu amor me bastará.
Coro:
Dios poderoso Tú gobiernas la creación con tu Más fuerte es el amor de Cristo que mi enemigo
palabra, Señor Te exaltaremos. más feroz. me sostiene en la tormenta, la aguas no
Dios poderoso de ti canta la creación Llenas todo me cubrirán. Me guiará el amor de Cristo en el
tú, Señor Te exaltaremos Por siempre y siempre, más hondo valle aquí. me pastoreará por siempre
oh Dios Ooh, ooh Y me guarda junto a Él
Más profundo que el mar, Más
¿Quién sino el Señor Ha soñado en el plan Para
allá del cielo está.
al hombre salvar? ¿Quién sino el Señor Limpiará Tu amor me bastará.
al picador Con su sangre y amor?
¿Quién sino el Señor Puede dar vida y salvar Por Más fuerte que la tempestad, Venció
una cruz? tus planes grandes son el pecado y la maldad. Tu amor me
bastará.
Más dulce es el amor de Cristo, Mientras En esto conocemos el amor Que
más cerca estoy del fin. Disfrutaré su amor por él dio su vida por nosotros, por nosotros. Sublime
siempre, ante su trono estaré. Me llenará el amor gracia que nos alcanzó Él dio su vida
de Cristo, al su rostro contemplar. yo le amaré por por nosotros, por nosotros Oh-oh,
siempre, uh-uh-uh-uh-uh
////su alabanza cantaré //// Oh-oh, uh-uh-uh-uh-uh
Más profundo que el mar, Más
allá del cielo está. Fiel amor No deja ir mi corazón Y
Tu amor me bastará. mis pecados ya olvidó
Más fuerte que la tempestad, Venció ¿Quién me puede separar?
el pecado y la maldad. Tu amor me Fuerte amor, como montes a mi alrededor
bastará. Rodeándome, seguro estoy ¿Quién me puede
conmover?

EL DIOS QUE ADORAMOS Mi nombre cargó hasta el madero Y me amó,


El Dios que hizo los cielos y la tierra con el poder hasta el final
de su palabra y reina con autoridad
El Dios que aún los vientos le obedecen una Puente:
palabra es suficiente para los muertos levantar
De tal manera amó Dios al mundo Que envió a su
Nadie es como él hijo a morir en una cruz Y a
Oh, gran yo soy todo aquel que crea en su nombre la vida eterna le
dará, no morirá.
Coro:
Tú eres el Dios que adoramos Todopoderoso
y soberano
Grande en misericordia y poder para salvar Tú
eres el Dios que adoramos Quien
derrotó la muerte y el pecado, Glorioso redentor y ERES EL CAMINO
rey, te adoramos. Muerto en pecado y maldad, Sin
Te adoramos a ti Dios sin esperanza
Oh, Señor Viviendo en rebelión
La luz de tu evangelio me alcanzó y hacia tu cruz
El Dios que descendió desde su trono para llevar me dirigió Y allí pude ver.
sobre sus hombros, nuestra culpa y transgresión.
Jesús, exaltado sobre todo Coro:
Nombre sobre todo nombre Que tú eres el camino, tú eres la verdad, en ti esta
Solo en él hay salvación la vida oh Cristo. En ti solo hay salvación, en ti no
Puente: hay condenación, y tú eres mi vida mi Cristo.

A él sea la gloria y el poder Vivo en tu gracia y verdad a la luz de tu palabra


Todo es de él y para él A asombrado de tu amor. La cruz de tu evangelio
él sea la gloria y el poder Todo es anunciaré y con mi vida te serviré, para que
de él y para él puedan ver

Puente:
EN ESTO CONOCEMOS //Muerte que vida me dio,
Grande amor no existe nada bajo el sol que se Sangre que me perdonó//
compare a ti, Señor ¿Quién te puede comprender?
Amor que bajó desde el cielo Mi //Gracia que me libertó,
alma, él vino a salvar Amor que me reconcilió//

Coro:
ES NUESTRO DIOS Que toda tumba y todo rey
Tu amor inundó mi corazón Creo en tu palabra, oh
Dios Espero en ti, renuévame Con tu
Espíritu, Jesús

Y vengo ante tus pies vengo ante tus pies Rendido


te adoraré

Tu presencia en mí, guía mi andar, tu palabra es la


verdad, restauración y redención encontré en ti,
Señor

Y vengo ante tus pies vengo ante tus pies Rendido


te adoraré

Todo lo diste tú por mí tu vida entregaste al morir


cuán grande amor él derramó, Es nuestro Dios

Sobre la muerte él venció digno de honor y


adoración Siervo y Rey el Salvador es nuestro
Dios

Y vengo ante tus pies vengo ante tus pies Rendido


te adoraré

Y vengo ante tus pies vengo ante tus pies Rendido


te adoraré

Todo lo diste tú por mí tu vida entregaste al morir


cuán grande amor él derramó Es nuestro
Dios

Sobre la muerte él venció digno de honor y


adoración Siervo y Rey El Salvador es nuestro
Dios

EXALTADO, SOBRE
TODO
Dejaste el trono celestial la cruz mostro tu corazón
Tu sacrificio incomprensible es Por nuestras
culpas y maldad Clavado fuiste en esa cruz tu gran
amor incomparable es

Coro:
Tu Nombre es más alto, tu Nombre es más fuerte
Que toda tumba y todo rey Exaltado eres
Dios

Nos diste vida eternal, nos has traído libertad Eres


Rey y nuestro Salvador tu eres Rey y nuestro
Salvador

Coro:

Tu Nombre es más alto tu Nombre es más fuerte


Exaltado eres Dios. Cristo Mesías el único gloria, el rey de majestad, ¡oh!
Salvador Y digno de la adoración
Exaltado eres Dios.

Puente:

//Te alabaré, te alabaré Te alabaré por siempre.


Exaltaré, exaltaré El nombre de Jesús.//

GLORIOSO ERES JESUS


El resplandor del Padre desde la eternidad Por
tu Palabra todo hecho fue las cosas que creaste
revelan tu obrar y todo Tú lo hiciste para que
podamos ver.

Coro:
Glorioso eres, Jesús el mayor deleite, Tú Poder
inigualable tu amor no tiene fin no hay sacrificio
igual viniste a tu vida dar Día y noche
nos unimos al canto celestial Glorioso Jesús
El polvo de la tierra viniste a respirar
Y con el quebrantado a habitar tú fuiste
rechazado te hiciste
maldición Serás mi gozo
por la eternidad La eternidad

Puente:

Estás sentado en Gloria a la diestra de Dios La


muerte Tú venciste y nos salvaste Y
aunque no puedo verte un día regresarás Y
todo enmendarás, al Tú venir Y
todo enmendarás, al Tú venir

GRACIA SUBLIME ES
¿Quién rompe el poder de el pecado? Su amor es
fuerte y poderoso el rey de gloria, el rey de
majestad.
Conmueve el mundo con su estruendo y nos
asombra con maravillas el rey de gloria, el rey de
majestad
Coro:
Gracia sublime es Perfecto es tu amor Tomaste
mi

lugar
Cargaste tú mi cruz, tu vida diste ahí y ahora
libre

soy
Jesús te adoro por lo que hiciste en mí.
Pusiste en orden todo el caos Nos
adoptaste como tus hijos El rey de
El que gobierna con su justicia y resplandece con Te daré mi amor y todo lo que soy has tu obra en
su belleza el rey de gloria, el rey de majestad. mí, mi vida te la doy te daré mi amor y todo lo que
Puente: soy Has tu obra en mí.

///Digno es el Cordero de Dios Te doy mi ser, en mi vida tu eres rey te amare y


Digno es el rey que la muerte venció//// cada día cantare

HAY LIBERTAD
GRACIAS DIOS
Las cadenas de la muerte me quitó para mí ya no
Hoy venimos llenos de júbilo y de gratitud
hay condenación hay libertad, libertad. Siendo
proclamamos tu fidelidad y tu salvación
esclavo del pecado me libró En la cruz
compró mi redención Y libertad, libertad
Hoy cantamos de tu gran bondad e infinito amor
Nos has dado plena libertad con tu redención
Coro:
Grande eres tú y grande son tus obras queremos
Rompió mis cadenas, me dio vida nueva y al
celebrar.
fondo del mar echó mi maldad Lavó mis pecados,
y me ha perdonado Sólo en el nombre
Coro:
de Jesús hay libertad
Y darte las gracias, gracias Dios por
lo que has hecho y por lo que harás te damos las Yo proclamo al que en la cruz por mí murió y
gracias, gracias Dios te exaltamos, tú eres digno cambió mi duro corazón por libertad, libertad
¡Oh gracias Dios!
El poder de su evangelio me salvó y no me
Hoy cantamos de tu gran bondad e infinito amor avergüenzo del Señor mI libertad, libertad
Nos has dado plena libertad con tu redención
Puente:
Grande eres tú y grande son tus obras queremos
celebrar. Al que el Hijo, hace libre, es libre en verdad al que
el Hijo, hace libre, es libre en verdad Hay
Puente: libertad
Tú has sido bueno y tu verdad será Por las
generaciones
Tu misericordia y tu fidelidad JESUCRISTO BASTA
Nunca terminarán Nuestros corazones Insaciables son Hasta que
conocen a su Salvador. Tal y cómo somos nos
amó. Hoy nos acercamos sin temor.
GRANDE Y PODEROSO Coro:
No hay mejor lugar mi Cristo Donde
Él es el agua que al beber Nunca
yo puedo habitar
más tendremos sed
En tu presencia mi Dios
Jesucristo basta Jesucristo basta.
Me rindo es donde quiero estar
Mi castigo recibió y su herencia me entrego
Te doy mi ser, en mi vida tu eres rey Te amare y
cada día cantare Jesucristo basta Jesucristo basta Ohh.

Coro: Fuimos alcanzados, por su gran amor con brazos


//Grande y poderoso vencedor Dios abiertos recibe hoy. Tal y cómo somos nos amó
del universo redentor hoy nos acercamos sin temor.
Tu eres Dios, mi salvador Ahora hay un futuro y esperanza fiel
Cristo Señor// En su amor confiamos hay descanso en él
Puente:
MAS DIOS MUESTRA SU AMOR blanco como nieve te amo, mi Señor Me
Sin esperanza me encontraba yo muerto y perdido amaste, Tu enemigo tu gracia mi corazón ganó por
en mi transgresión hijo de ira, enemigo de Dios. siempre. te amo, mi Señor, Y al contemplar Tu
Mi corazón tu gloria rechazó Endurecido
misericordia quebrantado soy.
por mi rebelión
Esclavo del pecado era mi condición
Coro: MI ESPERANZA ESTA EN JESUS
Mas Dios muestra su amor para mí en que envió a Mi esperanza está en Jesús Solo
su hijo a morir en la cruz, su sangre limpió mi en su sangre y rectitud Solo en su
maldad nombre mí confianza yo pondré
Mas Dios muestra su amor para mí en que envió a Al no poder su rostro ver Descansaré
su hijo a morir en la cruz, la ira de Dios propició en su gracia fiel Y en la tormenta
tomando mi lugar, tomando mi lugar. mi ancla firme es esta en Él
En las tinieblas ciego anduve yo en mi oscuridad, Coro:
rumbo a la destrucción lejos de Cristo, separado
de Dios. En Cristo la roca fuerte, firme estaré de pie
Todo lo demás arena es
Puente:
Gloria, oh, gloria, oh, gloria, oh.. Cuando el regrese en majestad hallado en Él yo
Gloria, oh, Gloria, oh, Gloria, oh voy a estar vestido de su rectitud me encontrará

MAS GRANDE DE LO QUE IMAGINO Puente:


Cada día tu nombre bendeciré Y
moraré en tu gloria y esplendor. En tus maravillas En Jesucristo firme estoy la Roca de mi salvación
meditaré de tu gran poder proclamaré, de tu la Roca de mi salvación.
salvación diré Y de tus bondades
Todo lo demás arena es
Coro: Todo lo demás arena es.
Porque eres más grande de lo que imagino y más
hermoso, Dios, de lo que he pensado Oh, tú
eres grande y digno de alabar

Las generaciones te cantarán NADA ES IMPOSIBLE


Tu misericordia alabarán Mares rugen y se calman
Cantaremos juntos del salvador que vino y del Al sonido de tu voz
pecado nos libró. Tú llenas nuestras vidas por Se estremece toda la tierra Tu
siempre te alabaremos. jamás te moverás
Nada es imposible para ti
ME POSTRO Quieto estaré y sabré que tú eres
Tu inmensa belleza y majestad cubren todo el
Coro:
firmamento Santo eres, Señor
Dios, fuerte y poderoso
Exaltado sobre todo los cielos no encierran Tu Con nosotros, por nosotros estás, Dios, cuando
presencia Santo eres, Señor y mientras contemplo todo falla
Tu gloria. Quebrantado soy. Mi esperanza, mi esperanza está en ti
Coro:
Caen los reinos de este mundo tu reino permanecerá
Y me postro a Tus pies Yo me postro a Tus pies Enemigos se levantan
Yo me postro a Tus pies Pues La batalla es del Señor
eres mi Dios
Nada es imposible para ti
Me salvaste siendo pecador tu sangre me hizo Quieto estaré y sabré que tú eres
Dios, fuerte y poderoso Sin principio, ni final
Con nosotros, por nosotros estás Dios, cuando Esperanza sin igual
todo falla El perdido encontró,
Mi esperanza, mi esperanza está en ti. En Jesús la salvación
Puente:
NOMBRE, SOBRE TODO
Alfa, Omega El que era, es y quien vendrá quien ////Que tu nombre sea exaltado, Sea exaltado, sea
vive y reina Y el cielo adora sin cesar exaltado////
Tu Nombre y Gloria es la canción que rodea el
trono hoy Se escucha...
POR ENCIMA DEL SOL
Coro: Por encima del sol hay una vista real De
Santo, Santo, Todopoderoso allí la vida se puede ver Como es en verdad Una
Digno es Él de adoración visión celestial
Al Cordero que crucificado fue sea la gloria su De todo lo terrenal Toda la historia se ve a la luz
Nombre de la eternidad
// sobre todo es //
Coro:
Sus ojos como fuego Quiero fijar mis ojos mucho más allá de lo que
Y su rostro brilla como el sol Su puedo ver Miles de páginas me sirven de ventana
voz es poderosa para andar por fe Mi Dios está su
Ruge como las olas del mar Y al mirarte cae todo trono y lo gobierna todo puedo yo confiar pues
ser
soberano es él Pueden subir las aguas, firme
Ante tu gran majestad
Y cantan. está mi alma cuando puedo ver. Por encima del sol
Oh, oh, oh, oh
Con tu sangre has comprado Gente
de toda lengua y nación toda rodilla a ti se doblará Por encima del sol Se puede ver redención Todo
toda lengua te confesará Señor. Has vencido la lo viejo cambiando por Una nueva creación la
muerte y la maldad Y en victoria reinarás más profunda aflicción Luego se vuelve una
Por siempre nueva canción cuando yo puedo un destello ver de
la gloria de Dios
Santo, Santo, Todopoderoso
Digno es Él de adoración Puente:
Al Cordero que crucificado fue sea la gloria su //Puedo pasar por el fuego, que soplen los vientos
Nombre se agiten los mares, pues no hay sufrimiento que
// sobre todo es // no de buen fruto de vida a su tiempo mientras yo
// Nombre sobre todo es // espero//
Mis ojos están, por encima del sol
Oh, oh, oh.
PODEROS
Su O alcanzó
amor me
QUIEN DICES QUE SOY
En la cruz por mi murió
¿Quién soy yo para que el gran Rey me acepte
Mi pecado el llevó
así? Me encontró en mi perdición, su amor por mí,
Con poder resucitó
oh, su amor por mí.
Sigue siendo siempre fiel
Mi refugio y mi sostén Coro:
Jesucristo es
Que me dio la libertad la verdad Libre soy en Él, libre en verdad Soy hijo de Dios
Sí lo soy
Coro:
Poderoso ,poderoso Me libraste, me salvaste Está Libre soy Él me rescató, su gracia en mí Aun
escrito que has vencido Cristo tú, ere siendo yo pecador Él murió por mí Él murió por
Señor mí
Coro: descender. A servir al pecador Gracia sin igual,
Libre soy en Él, libre en verdad Soy hijo de Dios Cristo demostró dio su vida en mi favor
Sí lo soy En tu casa Dios, sitio hay para mí Soy
hijo de Dios Sí lo soy Coro:
Puente: Pon en mí la misma mente que hubo en Cristo,
//Escogido, perdonado Yo soy quien dices que hazme un siervo para tu gloria Tomaré
mi cruz te seguiré Jesús Hazme un siervo para tu
soy
gloria.
Vas conmigo, a mi lado
Yo soy quien dices que soy// Soberano e Inmortal, coronado en majestad
lavando mis pies Inocente de maldad, más cargo
mi iniquidad tomando así mi lugar. Herido fue por
TODO LO PAGO mi transgresión y en silencio padeció por mi
Puedo oír la voz de Cristo que me llama hacia él, rebelión sangre derramó. Por su muerte vivo yo
todo cuando necesito lo encuentro solo en él.
Buen Pastor, refugio eterno Mi Puente:
todo en todo es él De la
vida él es la fuente Mi esperanza Oh, oh, oh, oh Oh, oh, oh, oh
en él pondré
Siendo yo Su enemigo, de mí tuvo compasión
rechazaba yo su gracia, y él abrió mi corazón. VENID GLORIFICAD A DIOS
Nada bueno en mí yo encuentro mi virtud viene de Venid, glorificad a Dios El Padre del Señor
él En Cristo Él nos derramó Su eterna bendición
Y cuando en él yo esté completo para siempre
cantaré para siempre cantaré Sin manchas, puros en su luz Nos destinó a ser Sus
hijos adoptados Por la sangre de Jesús
Coro:
Cantaré, cantaré el Cordero digno es Salvador Coro:
pagó mi deuda Se lo debo todo a el Te daremos la Gloria Por tu gracia, bondad y amor
Cantaré, cantaré Siempre yo le alabaré, Él mis Te daremos la gloria
manchas ha lavado Suyo siempre yo seré suyo ¡Eres el salvador!
siempre yo seré
Jesucristo es mi deleite grande gozo tengo en él Venid, glorificad a Dios Que en Cristo gracia da
nada más me satisface, Cristo mi tesoro es Cristo Lavadas nuestras culpas son tenemos redención
mi tesoro es En Él Dios ya nos reveló Su eterna voluntad que
Cantaré, cantaré el Cordero digno es El Salvador sea Cristo el Señor Su plan se cumplirá
pagó mi deuda Se lo debo todo a él Coro:
Cantaré, cantaré Siempre yo le alabaré Él mis Te daremos la Gloria Por tu gracia, bondad y amor
manchas ha lavado Suyo siempre yo seré Suyo Te daremos la gloria
siempre yo seré ¡Eres el salvador!

Puente:
Venid, glorificad a Dios Creyentes del Señor El
Cantaré Cantaré
sello de su Espíritu Por fe tenemos hoy. Él
Todo lo pago, quien por mí murió, y mis manchas garantiza nuestra fe Hasta el día final Nos
él lavó, ///Con sangre carmesí/// uniremos a alabar A nuestro trino Dios.

Coro:
Te daremos la Gloria Por tu gracia, bondad y amor
UN SIERVO PARA TU GLORIA Te daremos la gloria
Siendo en forma de Dios, Rey de toda la creación, ¡Eres el salvador!
de siervo se vistió. Hasta lo sumo se humilló,
sufrió la muerte en sumisión, horrenda muerte en
una cruz Inmenso amor, le hizo
Te daremos la Gloria Por tu gracia, bondad y
amor Te daremos la gloria HIMNOS
¡Eres el salvador!

A DIOS DEMOS GLORIA


A Dios demos gloria pues grande es el su amor es
inmenso y a su hijo nos dio
Quien fue a la cruz do sufrió muerte cruel y así de
los cielos las puertas abrió.

Coro:
Dad loor al Señor, oiga el mundo su voz.
Dad loor al Señor, nos gozamos en Dios.
Vengamos al Padre y a su Hijo Jesús, y démosle
gloria por su gran poder. Amén.

Por darnos la vida su sangre vertió; Jesús al


creyente es promesa de Dios; El vil pecador que
de veras creyó en ese momento perdón recibió.

Dios es el Maestro, potente Hacedor, Y grande es


el gozo que Cristo nos da; Mas nuestro asombro
será aún mayor Al ver a Jesús que en su gloria
vendrá

ADORADLE
Dad al Padre toda gloria, dad al Hijo todo honor, y
al Espíritu divino, alabanzas de loor.

Coro:
Adoradle, adoradle, adorad al Salvador; tributadle
toda gloria, pueblo suyo por su grande amor.

¡Adoradle, oh Iglesia! por Jesús tu Redentor,


rescatada por su gracia, libre por su grande amor.

Entonadle un canto nuevo, huestes libres del


Señor; tierra,

cielos, mar y luna, gloria dan al trino Dios.

Yo te adoro, yo te adoro, yo te adoro, buen Jesús.


yo te adoro reverente, ¡Oh, Cordero Santo de mi
Dios!

AL CRISTO VIVO SIRVO


Al Cristo vivo sirvo y él en el mundo está;
Aunque otros lo negaren yo sé que él vive ya. Su
mano tierna veo, su voz consuelo da, Y cuando yo Anhelo cada día trabajar, Y esclavos del pecado
le llamo, muy cerca está. libertar, Conducirlos a Jesús, nuestro guía, nuestra
luz, En la viña del Señor.
Coro:
El vive, él vive, hoy vive el Salvador; Conmigo Anhelo ser obrero de valor, Confiando en el poder
está y me guardará mi amante Redentor. El vive, del Salvador; El que quiera trabajar, hallará
él vive, imparte salvación. Sé que él viviendo está también lugar En la viña del Señor.
porque vive en mi corazón.

En todo el mundo entero contemplo yo su amor, Y AÑOS MI ALMA EN VANIDAD


al sentirme triste consuélame el Señor; Seguro VIVIO
estoy que Cristo mi vida guiando está, Y que otra Años mi alma en vanidad vivió, Ignorando a quien
vez al mundo regresará por mí sufrió, Oh que en el Calvario sucumbió, El
Regocijaos, cristianos, hoy himnos entonad; Salvador.
Eternas aleluyas a Cristo el Rey cantad. La única Coro:
esperanza es del mundo pecador, No hay otro tan Mi alma allí divina gracia halló; Dios allí perdón
amante como el Señor. y paz me dio;
Del pecado allí me libertó el Salvador

ALCANCE SALVACION Por la Biblia miro que pequé, Y su ley divina


De paz inundada mi senda ya esté, O cúbrala un quebranté; Mi alma entonces contempló con fe Al
mar de aflicción, Mi suerte cualquiera que sea, Salvador.
diré: Alcancé, alcancé salvación.
En la cruz su amor Dios demostró y de gracia al
Coro: hombre revistió, cuando por nosotros se entregó el
Alcancé salvación. Alcancé, alcancé salvación. Salvador

Toda mi alma a cristo ya entregué, hoy le quiere y


sirvo como a rey, por los siglos siempre cantaré al
Ya venga la prueba o me tiente Satán, No
Salvador.
amenguan mi fe ni mi amor; Pues Cristo
comprende mis luchas, mi afán Y su sangre vertió
en mi favor.
BUSCAD PRIMERO
Buscad primero el reino de Dios Y su perfecta
Feliz yo me siento al saber que Jesús, Me libró de
justicia, y lo demás añadido será. Aleluya, aleluya.
yugo opresor; Quitó mi pecado, y lo clavó en la
cruz: Gloria demos al buen Salvador.
No sólo de pan el hombre vivirá, Sino de toda
palabra que sale de la boca de Dios. Aleluya,
La fe tornaráse en gran realidad Al irse la niebla
aleluya.
veloz; Desciende Jesús con su gran majestad,
¡Aleluya! Estoy bien con mi Dios.
Pedid, pedid y se os dará; Buscad y hallaréis
Llamad, llamad y la puerta se abrirá. Aleluya,
aleluya.
ANHELO TRABAJAR POR EL
SEÑOR
Anhelo trabajar por el Señor, Confiando en su
palabra y en su amor, Quiero yo cantar y orar, Y CANTARE LA BELLA HISTORIA
ocupado siempre estar En la viña del Señor. cantaré la bella historia, que Jesús murió por mí;
cómo allá en el Calvario dio su sangre carmesí.
Coro:
Trabajar y orar, en la viña, en la viña del Señor; Coro:
Mi anhelo es orar, y ocupado siempre estar, en la
viña del Señor.
Cantaré la bella historia de Jesús, mi Salvador; y COMO PODRE ESTAR TRISTE
con santos en la gloria a Jesús ¿Cómo podré estar triste? ¿Cómo entre sombras
daré loor. ir? ¿Cómo sentirme solo Y en el dolor
vivir? Si Cristo es mi consuelo Mi amigo siempre
Cristo vino a rescatarme; vil, perdido me fiel //Si aún la aves tienen Seguro asilo en Él//
encontró; con su mano fiel y tierna al
redil Él me llevó. Coro:
Mis heridas y Dolores el Señor Jesús sanó; del Feliz cantando alegre, yo vivo siempre aquí si Él
pecado y los temores su poder me libertó. cuida de las aves cuidará también de mí.

Nunca te desalientes oigo al señor decir y en su


palabra fiado hago al dolor huir
CANTEN DEL AMOR DE
CRISTO A Cristo paso a paso, yo sigo sin cesar y todas sus
Canten del amor de Cristo, ensalzad al Redentor, bondades me da sin limitar y todas sus bondades
Tributadle, santos todos, grande gloria y loor. por siempre me ha de dar.

Coro:
Cuando estemos en gloria, COMPRADO POR SANGRE DE
En presencia de nuestro Redentor, A una voz la CRISTO
historia. Diremos del gran Vencedor. Comprado por sangre de Cristo, Con gozo al cielo
yo voy; Librado por gracia infinita,
La victoria es segura, a las huestes del Señor; Ya sé que su hijo yo soy.
¡Oh, pelead con la mirada puesta en nuestro
Protector! Coro:
Lo sé, lo sé, Comprado por sangre yo soy;
El pendón alzad, cristianos, de la cruz, y caminad; Lo sé, lo sé, Con Cristo al cielo yo voy.
De victoria en victoria, siempre firmes avanzad.
Soy libre de pena y culpa, Su gozo él me hace
Adelante en la lucha, ¡oh soldados de la fe! sentir; El llena de gracia mi alma; Con él es tan
Nuestro el triunfo, ¡oh, escucha los clamores, dulce vivir.
¡Viva el Rey!
En Cristo yo siempre medito, Y nunca le puedo
olvidar; Callar sus favores no quiero, A Cristo le
CELEBREMOS SU GLORIA voy a cantar.
Celebremos su gloria con gran gozo, Alabemos su
grandeza; Dios eterno es todopoderoso; Nuestro Yo sé que veré la hermosura Del Rey que me vino
escudo y fortaleza. a salvar. Ahora me guarda y me guía, Y siempre
me quiere ayudar
Coro:
¡Celebremos y adoremos, ¡Alabemos y cantemos
Muy gozosos, oh hermanos, ¡Al Señor, a nuestro CON GRAN GOZO Y PLACER
Dios! Con gran gozo y placer nos volvemos hoy a ver;
Nuestras manos otra vez estrechamos. Se contenta
Celebremos su gloria indecible, Elevemos nuestro el corazón ensanchándose de amor: Todos a una
canto; Adoremos con corazón sensible Al Señor voz a Dios gracias damos.
tres veces santo.
Coro:
Celebremos su gloria jubilosos, Cristo reina,
¡Bienvenidos! ¡Bienvenidos!
soberano; Por su gracia nos guía victoriosos Con
su poderosa mano. Los hermanos hoy aquí nos gozamos en decir:
¡Bienvenidos! ¡Bienvenidos!
Al volvernos a reunir, ¡Bienvenidos!
Dios a todos ayudó, ni un momento nos dejó, Y Señor,
otra vez nos reunió, ¡bienvenidos! Como Guiador, como Guiador.
El Señor su amor nos dio, su poder nos amparó,
Del peligro nos guardó, ¡bienvenidos!

Dios nos guarde en este amor, para que, de


corazón, Consagrados al Señor, le alabemos:
En la eterna reunión do no habrá separación, Ni
tristeza ni aflicción: ¡bienvenidos!

CRISTO ES MI DULCE
SALVADOR
Cristo es mi dulce Salvador, mi bien, mi paz, mi
luz; Mostró me su infinito amor muriendo en dura
cruz. Cuando estoy triste encuentro en él
Consolador y amigo fiel; Consolador, amigo fiel
es Jesús.
Cristo es mi dulce Salvador, su sangre me
compró; Con sus heridas y dolor, perfecta paz me
dio. Dicha inmortal allá tendré, Con Cristo
siempre reinaré. Dicha inmortal allá tendré, con
Jesús.

Cristo es mi dulce Salvador, mi eterno Redentor,


¡Oh!, nunca yo podré pagar la deuda de su amor.
Le seguiré fiel en la luz,
No temeré llevar mi cruz;
No temeré llevar mi cruz por Jesús.

Cristo es mi dulce Salvador, por él salvado soy;


La roca de la eternidad, en quien seguro estoy;
Gloria inmortal allá tendré, Con Cristo siempre
reinaré, Gloria inmortal allá tendré con Jesús.

CRISTO FIEL TE QUIERO


SER
Cristo, fiel te quiero ser, Dame el poder, dame el
poder; Yo contigo quiero andar,
Sin vacilar, sin vacilar.

Coro:
En tus pasos quiero seguir, Cerca de ti, cerca de ti,
y si encuentro pruebas aquí, Dame confianza en ti.

Con Jesús yo quiero hablar, Sólo con él, sólo con


él; Paz y gozo yo tendré,
Al serle fiel, al serle fiel.

Dame ardiente corazón,


Lleno de amor, lleno de amor; Y tu Espíritu,
Cada día quiero cumplir Tu voluntad, tu
voluntad; Y servirte a ti, Señor, en humildad, en
humildad

CUAL PENDON HERMOSO


Cual pendón hermoso despleguemos hoy La
bandera de la cruz, la verdad del evangelio de
perdón Del soldado de Jesús

Coro:
Adelante, adelante, en pos de nuestro Salvador.
Nos da gozo y fe nuestro Rey, adelante con valor.

Prediquemos siempre lo que dice Dios De la


sangre de Jesús, cómo limpia del pecado al
mortal Y le da su plenitud.

En el mundo proclamemos con fervor Esta


historia de la cruz; bendigamos sin cesar al
Redentor, Quien nos trajo paz y luz.

En el cielo nuestro cántico será Alabanzas a


Jesús; nuestro corazón allí rebosará De amor y
gratitud.

CUAN GRANDE ES EL
Señor mi Dios al contemplar los cielos el
firmamento y las estrellas mil al oír tu voz en los
potentes truenos Y ver brillar el sol en su señor
Coro:
Mi corazón entona la canción
Cuán grande es, cuán grande es el. Mi corazón
entona la canción, Cuan grande es el, cuán
grande es el.

Al recorrer los montes y los valles y ver las


bellas flores al pasar, al escuchar el canto de las
aves, y el murmurar del claro manantial.
Cuando recuerdo del amor divino que desde el
cielo al salvador envió aquel Jesús que por
salvarme vino y en una cruz sufrió por mí, murió.
Cuando el señor me llame a su presencia al dulce
hogar al cielo de esplendor Le adorare
cantando la grandeza de su poder y su infinito
amor.
CUANDO COMBATIDO POR LA Danos un bello hogar: Donde el padre es fuerte y
ADVERSIDAD fiel; Donde no haya el sabor a hiel, donde en su
Cuando combatido por la adversidad Creas ya ambiente haya sólo miel.
perdida tu felicidad, Mira lo que el cielo para ti ¡Danos un bello hogar!
guardó, Cuenta las riquezas que el Señor te dio. ¡Danos un bello hogar!

Coro: Danos un bello hogar: donde la madre con


¡Bendiciones, cuántas tienes ya! Bendiciones, devoción, Sepa mostrarnos tu compasión. Donde
Dios te manda más; Bendiciones, te sorprenderás tú habites con santa unción.
Cuando veas lo que Dios por ti hará. ¡Danos un bello hogar!
¡Danos un bello hogar!
¿Andas agobiado por algún pesar? ¿Duro te
parece esa cruz llevar? Cuenta las promesas del Danos un bello hogar: Donde los hijos podrán
Señor Jesús, Y de las tinieblas nacerá la luz. saber Cómo Jesús los quiere ver a su amparo y así
vencer.
Cuando de otros veas la prosperidad Y tus pies te ¡Danos un bello hogar!
lleven tras de su maldad, Cuenta las riquezas que ¡Danos un bello hogar!
tendrás por fe,
Donde el polvo es oro que hollará tu pie.
DIA EN DIA
Oh mi Dios, yo encuentro cada día Tu poder en
DA LO, MEJOR AL MAESTRO todo sinsabor;
Da lo mejor al Maestro; tu juventud, tu vigor; Dale Por la fe en tu sabiduría Libre soy de pena y temor.
el ardor de tu alma, lucha del bien en favor Cristo Tu bondad, Señor, es infinita,
nos dio el ejemplo, en todo él fue lo mejor; Séle Tú me das aquello que es mejor; Por tu amor
devoto ferviente, dale de ti lo mejor. alíviense mis quejas Y hallo paz en el dolor.

Coro: Cerca está tu brazo cada día Y por él recibo tu


Da lo mejor al Maestro; tu juventud, tu vigor; Dale favor,
el ardor de tu alma, de la verdad lucha en pro. ¡Oh Señor, mi alma en ti confía, Eres tú mi gran
Consolador! Protección prometes a tus hijos
Da lo mejor al Maestro; dale de tu alma el honor; Porque son tesoro para ti; Hallo en ti constante
Que sea él en tu vida el Santo Confortador. Dale y regocijo, Sé que tú velas por mí.
te será dado el Hijo amado de Dios; Sírvele día
por día; dale de ti lo mejor. Tu poder me ayuda cada día A vencer en la
tribulación;
Da lo mejor al Maestro; nada supera su amor; Se Tengo fe, pues tu promesa es mía; Gozaré de tu
dio por ti a sí mismo dejando gloria y honor. No consolación. Si el afán y la aflicción me llegan,
murmuró al dar su vida pues él sufrió con valor; Estará tu mano junto a mí y después, en la postrera
Amale más cada día; dale de ti lo mejor. siega, Moraré ya junto a ti. Amén.

DILO A CRISTO
DANOS UN BELLO HOGAR Cuando estés cansado y abatido, Dilo a Cristo,
Danos un bello hogar: Donde la Biblia se pueda dúo a Cristo; Si te sientes débil, confundido, Dilo
ver; Donde tu amor bienestar nos dé; Donde en ti a Cristo el Señor. Dilo a Cristo, dilo a Cristo,
todos tengan fe. ¡Danos un bello hogar!
¡Danos un bello hogar!
Coro:
Él es tu amigo más fiel;
No hay otro amigo como Cristo Dilo tan sólo a
él.
Cuando estés de tentación cercado, Mira a Cristo, Vida eterna tengo en Él. Él me sostendrá. Hasta
mira a Cristo; Cuando rugen huestes de pecado, que le pueda ver ¡Él regresará!
Mira a Cristo el Señor. Mira a Cristo, mira a
Cristo,

Si se apartan otros de la senda, Sigue a Cristo, EL QUE HABITA AL ABRIGO DE


sigue a Cristo; Si acrecienta en torno la contienda, DIOS
Sigue a Cristo el Señor. Sigue a Cristo, sigue a El que habita al abrigo de Dios Morará bajo
Cristo, sombras de amor; Sobre él no vendrá ningún mal
Y en sus alas feliz vivirá
Cuando llegue la final jornada, Fía en Cristo, fía
en Cristo; Te dará en el cielo franca entrada, Fía Coro:
en Cristo el Señor. Fía en Cristo, fía en Cristo, Oh, yo quiero habitar al abrigo de Dios; Sólo allí
encontraré paz y profundo amor. Mi delicia es con
él comunión disfrutar Y por siempre su nombre
DULCE COMUNION alabar
¡Dulce comunión la que gozo ya En los brazos de
mi Salvador! ¡Qué gran bendición en su paz me El que habita al abrigo de Dios Ciertamente muy
da! ¡Oh! yo siento en mí su tierno amor. feliz será; Ángeles guardarán su salud
Coro: Y sus pies nunca resbalarán.
Libre, salvo, del pecado y del temor, Libre,
salvo, en los brazos de mi Salvador. El que habita al abrigo de Dios Para siempre
seguro estará; Caerán mil y diez mil por doquier,
¡Cuán dulce es vivir, cuan dulce es gozar En los
Mas a él no vendrá mortandad.
brazos de mi Salvador! Allí quiero ir y con él
morar, Siendo objeto de su tierno amor.
EN LA CRUZ
No hay que temer, ni que desconfiar, En los
Herido, triste, a Jesús, mostrele mi dolor; Perdido,
brazos de mi Salvador. Por su gran poder él me
errante, vi su luz, bendíjome en su amor.
guardará De los lazos del engañador.
Coro:
En la cruz, en la cruz, do primero vi la luz, Y las
EL ME SOSTENDRA
manchas de mi alma yo lavé; Fue allí por fe do vi
Si mi fe ha de caer, Él me sostendrá En la
a Jesús, Y siempre feliz con él seré.
tentación yo sé
Él me sostendrá. No podría estar en pie en la
Sobre una cruz mi buen Jesús su sangre derramó
oscuridad;
Por este pobre pecador, a quien así salvó.
Pues mi amor muy frágil es,
Él me sostendrá. Venció a la muerte con poder y el Padre le exaltó;
Confiar en él es mi placer. Morir no temo yo.
Coro
Él me sostendrá Él me sostendrá, pues me ama el Aunque él se fue conmigo está el gran
Salvador Él me sostendrá. Consolador; Por él entrada tengo ya al reino del
Señor.
Él se goza en quien salvó, Él me sostendrá. Ante
Él precioso soy Vivir en Cristo me da paz; con él habitaré; Ya
Él me sostendrá. Sus promesas fieles son, mi alma suyo soy, y de hoy en más a nadie temeré
guardará
Alto precio Él pagó Él me sostendrá.

El sufrió por mi murió, Él me sostendrá. La


justicia el cumplió Él me sostendrá.
EN LOS NEGOCIOS DEL REY Muévase potente la iglesia de Dios, De los ya
Soy peregrino aquí, mi hogar lejano está En la gloriosos vamos hoy en pos: Somos sólo un
mansión de luz, eterna paz y amor; Embajador yo cuerpo, y uno es el Señor, Una la esperanza, y uno
soy del reino celestial En los negocios de mi Rey. nuestro amor.

Coro: Tronos y coronas pueden perecer; de Jesús la


Este mensaje fiel oíd, mensaje de su paz y amor; iglesia siempre habrá de ser; Nada en contra suya
"Reconciliaos ya," dice el Señor y Rey, prevalecerá, Porque la promesa nunca faltará.
¡Reconciliaos hoy con Dios!
Pueblos, vuestras voces a la nuestra unid, Y el
Y del pecado vil, arrepentidos ya, han de reinar cantar de triunfo todos repetid: Prez, honor y
con él los que obedientes son; Es el mensaje fiel gloria dad a Cristo el Rey: Y por las edades cante
que debo proclamar, en los negocios de mi Rey. así su grey.

Mi hogar más bello es que el valle de Sharon,


Gozo y eterna paz habrá por siempre en él, y allí FUENTE DE LA VIDA ETERNA
Jesús dará eterna habitación, Es el mensaje de mi Fuente de la vida eterna y de toda bendición;
Rey. Ensalzar tu gracia tierna, debe cada corazón. Tu
piedad inagotable, abundante en perdonar, Único
ESTAD POR CRISTO FIRMES Ser adorable, gloria a ti debemos dar.
¡Estad por Cristo firmes! soldados dé la cruz;
Alzad hoy la bandera en nombre de Jesús. Es De los cánticos celestes te quisiéramos cantar;
vuestra la victoria con él por capitán, Por él serán Entonados por las huestes, que lograste rescatar.
vencidas las huestes de Satán. Almas que a buscar viniste, porque les tuviste
amor, De ellas te compadeciste, con ternísimo
¡Estad por Cristo firmes! hoy llama a la lid; Con favor.
él, pues, a la lucha, ¡soldados todos, id! Probad
que sois valientes luchando contra el mal; Si es Toma nuestros corazones, llénalos de tu verdad;
fuerte el enemigo, Jesús es sin igual. De tu Espíritu los dones, y de toda santidad.
Guíanos en obediencia, humildad, amor y fe; Nos
¡Estad por Cristo firmes! las fuerzas son de él. El ampare tu clemencia; Salvador, propicio sé.
brazo de los hombres por débil no es fiel. Vestíos
la armadura, velad en oración. Deberes y peligros
demandan más tesón. GRANDE AMOR SUBLIME
ETERNO
¡Estad por Cristo firmes! bien poco durarán La Grande amor, sublime, eterno, Más profundo es
lucha y la batalla; victoria viene ya. A todo el que que la mar; Y más alto que los cielos, Insondable
venciere corona se dará; Y con el Rey de gloria, es y sin par.
por siempre vivirá
Coro:
El me abrirá la puerta y así entrar podré.
FIRMES Y ADELANTE Redención él ha comprado y perdón me da por fe.
Firmes y adelante, huestes de la fe, Sin temor
alguno, que Jesús nos ve. Jefe soberano, Cristo al Grande amor, sublime, eterno, En la cruenta cruz
frente va, Y la regia enseña tremolando está: murió mi bendito Jesucristo; Mi castigo así llevó.

Coro: Grande amor, sublime, eterno, Soy indigno


Firmes y adelante, huestes de la fe, Sin temor pecador, más el Hijo incomparable dio su vida en
alguno, que Jesús nos ve. mi favor
Quiero escuchar la historia fiel De mi Jesús, mi
GRANDE ES TU FIDELIDAD Salvador; Quiero vivir tan sólo por él,
Oh Dios eterno, tu misericordia Ni una sombra de ¡Habladme más de Cristo!
duda tendrá; Tu compasión y bondad nunca fallan
Y por los siglos el mismo serás. Cuando me asalté la tentación Y que sus redes
tienda a mí pie, Quiero tener en él protección,
Coro: ¡Habladme más de Cristo!
¡Oh, tu fidelidad! ¡Oh, tu fidelidad! Cada Cuando en la lucha falte la fe Y el alma sienta
momento la veo en mí. Nada me falta, pues todo desfallecer, Quiero saber que ayuda tendré,
provees, ¡Grande, ¡Señor, es tu fidelidad! ¡Habladme más de Cristo!

La noche oscura, el sol y la luna, Las estaciones


del año también, Unen su canto cual fieles
criaturas, Porque eres bueno, por siempre eres fiel. HALLE UN BUEN AMIGO
Hallé un buen amigo, mi amado Salvador; Contaré
Tú me perdonas, me impartes el gozo, Tierno me lo que él ha hecho para mí: Hallándome perdido e
guías por sendas de paz; Eres mi fuerza, mi fe, mi indigno pecador, Me salvó y hoy me guarda para
reposo, Y por los siglos mi Padre serás. sí. me salva del pecado, me guarda de Satán;
Promete estar conmigo hasta el fin. El consuela en
la tristeza, me quita todo afán.
GRANDE GOZO HAY EN MI ALMA ¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí!
Grande gozo hay en mi alma hoy, Pues Jesús
conmigo está; Jesús jamás me falta, jamás me dejará; Es mi
Y su paz, que ya gozando estoy, Por siempre fuerte y poderoso protector.
durará. Del mal yo me separo y de la vanidad, Para
consagrar mi vida al Señor.
Coro: Si el mundo me persigue, si sufro tentación,
Grande gozo, ¡cuán hermoso! Paso todo el tiempo Confiando en Cristo puedo resistir. La victoria me
bien feliz; Porque tengo en Cristo grata y dulce es segura y elevo mi canción:
paz, Grande gozo siento en mí. ¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí!

Hay un canto en mi alma hoy; Melodías a mi Rey; Yo sé que Jesucristo muy pronto volverá, Y entre
en su amor feliz y libre soy, Y salvo por la fe. tanto me prepara un hogar.
En la casa de mi Padre, mansión de luz y paz, Do
Paz divina hay en mi alma hoy, Porque Cristo me el creyente fiel con él ha de morar. Y cuando esté
salvó; en la gloria, ningún pesar tendré: Contemplaré su
Las cadenas rotas ya están; Jesús me libertó. rostro siempre allí. Con los santos redimidos
gozoso cantaré:
Gratitud hay en mi alma hoy, Y alabanzas a Jesús; ¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí!
por su gracia a la gloria voy, Gozándome en la
luz.
HE DECIDIDO SEGUIR A
CRISTO
HABLADME MAS DE CRISTO He decidido seguir a Cristo, He decidido seguir a
Quiero que habléis de aquel gran amor Que en el Cristo, He decidido seguir a Cristo; No vuelvo
Calvario Dios nos mostró, quiero que habléis del atrás, no vuelvo atrás
buen Salvador,
¡Habladme más de Cristo! El Rey de gloria me ha transformado, El Rey de
gloria me ha transformado,
Coro: El Rey de gloria me ha transformado; No vuelvo
atrás, no vuelvo atrás.
La vida vieja ya he dejado, La vida vieja ya he Coro:
dejado, La vida vieja ya he dejado;
No vuelvo atrás, no vuelvo atrás.

INMENSA Y SIN IGUAL


PIEDAD
Inmensa y sin igual piedad Jesús murió por mí; y
por mi culpa vil sufrió la
muerte en la cruz.

Coro:
Acuérdate, Señor Jesús; acuérdate de mí; y
por tu muerte y tu pasión, ¡Oh, ten piedad de mí!
Por la maldad que hice yo, murió el Redentor: Oh,
qué divina compasión
Qué infinito amor

Y tuvo que esconderse el sol en negra confusión,


al ver morir al Salvador por nuestra
redención.

Amado Cristo No podré jamás pagar tu amor; más


lo que tengo doy a Ti, tu siervo soy, Señor.

JESUS ES MI REY
SOBERANO
Jesús es mi Rey soberano; Mi gozo es cantar su
loor; Es Rey, y me ve cual hermano; Es Rey y me
imparte su amor. Dejando su trono de gloria, Me
vino a sacar de la escoria,
Y yo soy feliz, y yo soy feliz por él.

Jesús es mi amigo anhelado,


Y en sombras o en luz siempre va Paciente y
humilde a mi lado, Y ayuda y consuelo me da. Por
eso constante lo sigo, Porque él es mi Rey y mi
amigo, Y yo soy feliz, y yo soy feliz por él.

Señor, ¿qué pudiera yo darte Por tanta bondad


para mí?
¿Me basta servirte y amarte?
¿Es todo entregarme yo a ti? Entonces acepta mi
vida, Que a ti sólo queda rendida, Pues yo soy
feliz, pues yo soy feliz por ti.

TODAS LAS PROMESAS


Todas las promesas del Señor Jesús, Son apoyo
poderoso de mi fe; Mientras viva aquí cercado de
su luz, Siempre en sus promesas confiaré
Grandes, fieles,
Las promesas que el Señor Jesús ha dado,
Grandes, fieles,
En ellas para siempre confiaré.

Todas sus promesas para el hombre fiel, El Señor


en sus bondades cumplirá, Y confiado sé que,
para siempre en él, Paz eterna mi alma gozará.

Todas las promesas del Señor serán, Gozo y


fuerza en nuestra vida terrenal; Ellas en la dura
lid nos sostendrán, y triunfar podremos sobre el
mal.

LAS PISADAS DEL MAESTRO


Quiero seguir el andar del Maestro, Quiero ir en
pos de mi Rey y Señor; Y modelando por él mi
carácter, Canto con gozo a mi Redentor.

Coro:
¡Qué hermoso es seguir el andar del Maestro!
Siempre en la luz, cerca de Jesús
¡Qué hermoso es seguir el andar del Maestro, En
su santa luz!

Ando más cerca de él, pues me guía Cuando el


maligno me quiere tentar; Siempre confiando en
Cristo, mi fuerte, Debo con gozo su nombre
ensalzar.

Sigo sus pasos de tierno cariño, Misericordia,


amor y lealtad: Viéndolo a él por el don de la
gracia, Voy al descanso, gloriosa ciudad.

Quiero seguir el andar del Maestro, Siempre


hacia arriba con él quiero andar. Viendo a mi
Rey en gloriosa hermosura: Con él en gloria
podré descansar.

LEJOS DE MI PADRE DIOS


Lejos de mi Padre Dios por Jesús fui hallado; por
su gracia y por su amor fui por Él salvado.

Es Jesús el Señor, mi esperanza eterna. Él


me amó y me salvo en su gracia tierna.

Es Jesús, mi Salvador, pongo mi confianza; toda


mi necesidad suple su abundancia.

Cerca de mi buen Pastor vivo cada día; toda


gracia en su Señor halla el alma mía.
LLUVIAS DE GRACIA Majestad, la Gloria celebrad
Dios nos ha dado promesa: lluvias de gracia Del salvador, Cristo Jesús, Rey y Señor
enviaré; Dones que os den fortaleza; gran
bendición os daré.

Coro: MARAVILLOSO ES
Lluvias de gracia, lluvias pedimos, Señor. Qué grandiosa es la puesta del sol Admirable cual
Mándanos lluvias copiosas, lluvias del amanecer,
Consolador. Pero es más grandioso y conmovedor El amor que
me tiene el Señor.
Cristo nos dio la promesa del santo Consolador,
Dándonos paz y pureza, para su gloria y honor. Coro:
Maravilloso es, maravilloso es Cuando pienso que
Muestra, Señor, al creyente todo tu amor y poder; Dios me ama a mí. Maravilloso es, maravilloso es
Tú eres de gracia la fuente, llena de paz nuestro Cuando pienso que Dios me ama a mí.
ser.
Maravilla de un sol que se oculta; Maravilla
Obra en tus siervos piadosos celo, virtud y valor, aurora que vi.
Dándonos dones preciosos, dones del Consolador. Maravilla que en mi alma resulta hoy cuando
pienso que Dios me ama a mí
LOS QUE ESPERAN EN
JEHOVA Qué grandioso el verano copioso; Los cielos, la
Los que esperan en Jehová Nuevas fuerzas luna y el sol, Pero es más grandioso y conmovedor
poseerán; Caminando sin descansar, Nunca se El amor que me tiene el Señor.
fatigarán.

Coro: ME GLORIO EN JESUCRISTO


Cual las águilas alzarán, con el poder de Cristo el Me glorío en Jesucristo quien con Su sangre me
Rey; Fuertes alas para volar, los que esperan en compró fue mía la culpa que lo traspasó Y
Jehová. lo colgó en aquella cruz me glorío en Jesucristo
Cual las águilas alzarán, con el poder de Cristo el quien el poder del mal venció Mi
Rey; Fuertes alas para volar, esperanza ante el Santo Juez El Hijo
Los que esperan en Jehová. mi justicia es el Hijo mi justicia es

En los brazos de mi Jesús, Hay lugar de consuelo Me glorío en Jesucristo su amor me dio, mi vida
y luz; Él nos brinda su gozo y paz En el sitio de es Él no tengo otro adonde acudir Me
solaz.
satisface sólo Él me glorío en Jesucristo Mi
torre fuerte, Redentor si el enemigo es fuerte
MAJESTAD
contra mí mis pies por gracia sostendrá mis pies
Majestad, te adoro majestad
por gracia sostendrá
Doy a Cristo toda gloria, alabanza y honor.
Majestad, por siempre ensalzad,
Al salvador, digno señor, el vencedor. Me glorío en Jesucristo me carga en alas de águila
corona mi alma de bondades Su triunfo
Coro: siempre he de cantar Me glorío en
Alabad y exaltad el nombre de Cristo Magnificad Jesucristo me espera en gloria eternal cuando me
y glorificad a Cristo el Rey llame al paraíso estar Su rostro siempre a
contemplar Su rostro siempre a contemplar
¡Majestad, divina majestad!
Dios eterno es Jesucristo el Señor;
¡Majestad! De su poder cantad;
Él es creador, Sustentador, Gobernador.
ME GUIA EL No tengo temor, no tengo temor. Jesús me ha
Me guía él, con cuánto amor, Me guía siempre mi prometido: Siempre contigo estoy.
Señor; En todo tiempo puedo ver Con cuánto
amor me guía él. Fuertes enemigos siempre cerca están; cristo está
más cerca; guárdame del mal. Ten valor, –
Coro: me dice–, soy tu ayudador. No te dejaré nunca;
Me guía él, me guía él, con cuánto amor me guía siempre contigo estoy.
él; No abrigo dudas ni temor, Pues me conduce el
buen Pastor. El que guarda mi alma nunca dormirá. Si mi pie
resbala, Él me sostendrá. En mi vida diaria Él es
En el abismo del dolor o donde intenso brilla el mi guardador.
sol, En dulce paz o en lucha cruel, Con gran ¡Oh qué fiel su palabra! Siempre contigo estoy.
bondad me guía él.

La mano quiero yo tomar De Cristo; nunca NOBLE SOSTEN


vacilar, Cumpliendo con fidelidad Noble sostén de la esperanza mía Fuente bendita
Su sabia y santa voluntad. de vida eterna Tan solo el alma Que en
sus fuerzas fía Tiene paz,
Y la carrera al terminar, el alba eterna al tiene paz
vislumbrar, no habrá ni dudas ni temor, Pues me
Coro:
guiará mi buen Pastor.
Mi sostén, es Jesús nunca en la lucha desmayar
podré mi sostén es Jesús, el Señor Nunca en la
lucha desmayar podré
MI VIDA DI POR TI
Mi vida di por ti, mi sangre derramé, La muerte Yo soy muy débil pero en Ti soy fuerte nunca en
yo sufrí, por gracia te salvé; Por ti la muerte yo la lucha desmayar podré si Tú estás conmigo ni a
sufrí, ¿Qué has dado tú por mí? Por ti la muerte yo la misma muerte
sufrí, ¿Qué has dado tú por mí? Temeré, temeré

Mi celestial mansión, mi trono de esplendor, Dejé Dura es la lucha difícil la tarea Más
por rescatar al mundo pecador; sí, todo yo dejé tu dotas con tu gran poder, mi Espíritu renueva
por ti, ¿Qué dejas tú por mí? sí, todo yo dejé por Con la idea nueva de vencer, de vencer
ti, ¿Qué dejas tú por mí? Alelu, aleluya. Nunca en la lucha desmayar podré
Alelu, aleluya. Nunca en la lucha desmayar Podré
Reproches, aflicción, y angustia yo sufrí, La copa
amarga fue que yo por ti bebí;
Insultos yo por ti sufrí, ¿Qué sufres tú por mí? OH AMOR DE DIOS
Insultos yo por ti sufrí, ¿Qué sufres tú por mí? Oh, amor de Dios su inmensidad el hombre no
podría contar ni comprender
De mi celeste hogar te traigo el rico don; Del La gran verdad que Dios al hombre pudo a amar
Padre, Dios de amor, la plena salvación; mi don
de amor te traigo a ti, ¿Qué ofreces tú por mí? Mi Cuando el pecar entró al hogar de Adán y Eva en
don de amor te traigo a ti, ¿Qué ofreces tú por mí? Edén, Dios les sacó, más prometió Un
salvador también

Coro:
NO TENGO TEMOR
Cristo está conmigo, qué consolación; su Oh, amor de Dios brotando está Inmensurable
presencia quita todo mi temor. Tengo eternal por las edades durará Inagotable
la promesa de mi Salvador: No te dejaré nunca; raudal
siempre contigo estoy.

Coro:
Si fuera tinta todo el mar y todo el cielo un gran OH QUE AMIGO NOS ES
papel y cada hombre un escritor Y CRISTO
cada hoja un pincel nunca podrían describir El ¡Oh qué amigo nos es Cristo! El llevó nuestro
gran amor de Dios que al hombre pudo redimir de dolor, y nos manda que llevemos Todo a Dios en
su pecado atroz oración. ¿Vive el hombre desprovisto De paz,
gozo y santo amor? Esto es porque no llevamos
Y cuando el tiempo pasará con cada reino
Todo a Dios en oración.
mundanal y cada reino caerá Con
cada trama y plan carnal el gran amor del
¿Vives débil y cargado De cuidados y temor? A
Redentor por siempre durará
Jesús, refugio eterno, Dile todo en oración.
La gran canción de salvación Su pueblo cantará
¿Te desprecian tus amigos? Cuéntaselo en
oración; en sus brazos de amor tierno Paz tendrá
OH BONDAD TAN INFINITA tu corazón.
Oh bondad tan infinita
hacia el mundo pecador: Jesucristo es nuestro amigo, De esto prueba nos
Dios en Cristo revelando su eterno y santo amor! mostró, Pues sufrió el cruel castigo que el culpable
mereció. El castigo de su pueblo En su muerte él
Coro: sufrió; Cristo es un amigo eterno;
Es Jesús para mí, la esperanza de salud; Sólo ¡Sólo en él confío yo!
en Él hallaré la divina plenitud.
Como el vasto firmamento, como el insondable
mar, es la gracia salvadora que OH YO QUIERO ANDAR CON
Jesús al alma da. CRISTO
¡Oh! yo quiero andar con Cristo, quiero oír su
Aunque fueren tus pecados rojos como el carmesí,
en la sangre del Calvario hay limpieza tierna voz, meditar en su palabra y cumplir su
voluntad. Consagrar a él mi vida, mis dolores y
para ti.
afán; Y algún día con mi Cristo, gozaré la
claridad.

OH CUAN DULCE ES FIAR EN CRISTO Coro:


Oh, cuan dulce es fiar en Cristo, Y entregarse todo
¡Oh, sí, yo quiero andar con Cristo! ¡Oh, sí, yo
a él; ¡Esperar en sus promesas, Y en sus sendas
serle fiel! quiero vivir con Cristo! ¡Oh, sí, yo quiero servir a
Cristo! Quiero serle un testigo fiel.
Coro:
Jesucristo, Jesucristo, ya tu amor probaste en mí; ¡Oh! yo quiero andar con Cristo, él es mi ejemplo
Jesucristo, Jesucristo, Siempre quiero fiar en ti. fiel;
Es muy dulce fiar en Cristo, Y cumplir su En la Biblia yo lo leo, y yo sé que es la verdad.
voluntad, no dudando su palabra, Que es la luz y Cristo era santo en todo, el Cordero de la cruz, Y
la verdad yo anhelo ser cristiano, seguidor de mi Jesús

Siempre es grato fiar en Cristo, Cuando busca el ¡Oh! yo quiero andar con Cristo, de mi senda él es
corazón, los tesoros celestiales De la paz y del la luz, dejaré el perverso mundo para ir al
perdón. Salvador. Este mundo nada ofrece, Cristo ofrece
salvación; Y es mi única esperanza vida eterna
Siempre en ti confiar yo quiero Mi precioso hallar con Dios.
Salvador; en la vida y en la muerte Protección me
dé tu amor
PARA ANDAR CON JESUS
Para andar con Jesús no hay senda mejor Que
guardar sus mandatos de amor; Obedientes a él
siempre habremos de ser, Y tendremos de Cristo
el poder.
Coro:
Obedecer, y confiar en Jesús,
Es la regla marcada para andar en la luz. De muerte ávida eterna Te llama el Salvador fiel.
En ti no domine el pecado; Hay siempre victoria
Cuando vamos así, ¡cómo brilla la luz En la senda en él
al andar con Jesús! Su promesa de estar con los
suyos es fiel, Si obedecen y esperan en él. Jamás faltará su promesa; Él dijo: Contigo estoy.
Al mundo perdido ve pronto Y anuncia la
Quien siguiere a Jesús ni una sombra verá, Si salvación hoy.
confiado su vida le da;
Ni terrores ni afán, ni ansiedad ni dolor, Pues lo
cuida su amante Señor.
Más sus dones de amor nunca habréis de alcanzar, PORQUE EL VIVE
Si rendidos no vais a su altar, Pues su paz y su Dios nos envió a su Hijo, Cristo; Él es salud, paz y
amor sólo son para aquel Que a sus leyes divinas perdón. Vivió y murió por mi pecado; Vacía está
es fiel. la tumba porque él triunfó.

Coro:
PAZ CUAN DULCE PAZ Porque él vive triunfaré mañana, Porque él vive ya
En el seno de mi alma una dulce quietud Se no hay temor; Porque yo sé que el futuro es suyo,
difunde inundando mi ser, Una calma infinita que La vida vale más y más sólo por él.
sólo podrán Los amados de Dios comprender.
Grato es tener a un tierno niño; Tocar su piel gozo
Coro: nos da; Pero es mejor la dulce calma, que Cristo el
¡Paz!, ¡paz!, ¡cuán dulce paz! Es aquella que el Rey nos puede dar, pues vivo está.
Padre me da; Yo le ruego que inunde por siempre
mi ser, En sus ondas de amor celestial. Yo sé que un día el río cruzaré; Con el dolor
batallaré., y al ver la vida triunfando invicta, Veré
Qué tesoro yo tengo en la paz que me dio, Y en el gloriosas luces y veré al Rey.
fondo del alma ha de estar tan segura que nadie
quitarla podrá Mientras miro los años pasar.
QUE MI VIDA ENTERA ESTE
Sin cesar yo medito en aquella ciudad Do al Autor Que mi vida entera esté consagrada a ti, Señor;
de la paz he de ver, Y en que el himno más dulce Que a mis manos pueda guiar el impulso de tu
que habré de cantar De su paz nada más ha de ser. amor.

Alma triste que en rudo conflicto te ves, Sola y Coro:


débil tu senda al seguir, haz de Cristo tu amigo, Toma, ¡oh Dios!, mi voluntad, Y hazla tuya nada
pues fiel siempre es, más; Toma, sí, mi corazón, Y tu trono en él
¡Y su paz tú podrás recibir! tendrás.

Que mis pies tan sólo en pos de lo santo puedan ir;


PON TUS OJOS EN CRISTO Y que, a ti, Señor, mi voz se complazca en
¡Oh alma cansada y turbada! bendecir.
¿Sin luz en tu senda andarás? Al Salvador mira y
vive; Del mundo la luz es su faz. Que mis labios al hablar hablen sólo de tu amor;
Que mis bienes ocultar no los pueda a ti, Señor.
Coro:
Pon tus ojos en Cristo, Que mi tiempo todo esté consagrado a tu loor; Y
Tan lleno de gracia y amor, Y lo terrenal sin valor mi mente y su poder sean usados en tu honor.
será A la luz del glorioso Señor.
QUIERES SER SALVO SANTO SANTO SANTO
¿Quieres ser salvo de toda maldad? Tan sólo hay Santo, Santo, Santo Señor omnipotente Siempre
poder en mi Jesús. ¿Quieres vivir y gozar el labio mío loores te dará Santo, Santo,
santidad? Tan sólo hay poder en Jesús. Santo te adoro reverente. Dios en tres personas
bendita Trinidad
Coro:
Santo, Santo, Santo en numeroso coro Santos
Hay poder, sí, sin igual poder, En Jesús quien
escogidos te adoran sin cesar
murió; Hay poder, sí, sin igual poder, En la sangre
De alegría llenos y sus coronas de oro. Rinden
que él vertió. ante el trono y el cristalino mar

¿Quieres ser libre de orgullo y pasión? Tan sólo Santo, santo, santo la inmensa muchedumbre, de
hay poder en mi Jesús. ¿Quieres vencer toda cruel ángeles que cumplen tu santa voluntad, ante ti se
tentación? Tan sólo hay poder en Jesús postra bañada de tu lumbre, ante ti que has sido
que eres y serás. Santo, santo, santo por más que
¿Quieres servir a tu Rey y Señor? Tan sólo hay estés velado, e imposible sea tu gloria contemplar,
poder en mi Jesús. Ven, y ser salvo podrás en su santo tu eres solo y nada hay a tu lado, en poder
amor, Tan sólo hay poder en Jesús perfecto pureza y caridad.

ROCA DE LA ETERNDAD Santo, Santo, Santo, la gloria de tu nombre vemos


Roca de la eternidad, fuiste abierta tú por mí, Sé en tus obras, en cielo tierra y mar, Santo, santo,
mi escondedero fiel, paz encuentro sólo en ti: santo te adora todo hombre
Dios en tres personas, bendita trinidad.
Rico, limpio manantial, en el cual lavado fui.

Aunque sea siempre fiel, aunque llore sin cesar,


del pecado no podré
Justificación lograr; Sólo en ti teniendo fe. Sobre SEÑOR QUIEN ENTRARA
el mal podré triunfar. Señor, ¿quién entrará en tu santuario para adorar?
Señor, ¿quién entrará en tu santuario para adorar?
Mientras haya de vivir, Y al instante de expirar;
El de manos limpias y un corazón puro, Y sin
cuando vaya a responder
vanidades, que sepa amar;
En tu augusto tribunal, sé mi escondedero fiel,
El de manos limpias y un corazón puro, Y sin
Roca de la eternidad.
vanidades, que sepa amar.

Señor, yo quiero entrar en tu santuario para


SANTO SANTO GRANDE ETERNO adorar. Señor, yo quiero entrar en tu santuario
DIOS para adorar.
¡Santo, santo, grande, eterno Dios! Con alegría Dame manos limpias y un corazón puro, y sin
hoy te alabamos, Rey de reyes, grande Capitán, vanidades, enséñame a amar; Dame manos limpias
Todopoderoso Guerrero. Honor y gloria, luz y y un corazón puro, y sin vanidades, enséñame a
dominio, Tributaremos todos a ti. amar.
Coro:
¡Santo, santo, eres tú, Señor! ¡Dios de las batallas,
glorioso! SEÑOR TU ME LLAMAS
Alabadle cielos, tierra y mar, Toda su Iglesia, sus Señor, tú me llamas por mi nombre desde lejos;
mensajeros; Alabanzas, cantos de loor, hoy unidos Por mi nombre cada día tú me llamas. Señor, tú
elevaremos. Juez majestuoso y reverendo, Fuego y me ofreces una vida santa y limpia; Una vida sin
vida eres, Señor. pecado, sin maldad
Rey de siglos, solo eterno Dios, Veraz y justo, Coro:
incomprensible; Inmortal, Autor de todo bien, eres
Señor, nada tengo para darte;
tú el Anciano de Días. Y para siempre Solamente te ofrezco mi vida para que la uses tú.
entonaremos El canto eterno de redención Señor, hazme hoy un siervo útil
Que anuncie el mensaje, el mensaje de la cruz bendeciré,

Señor, tú me llamas por mi nombre desde lejos,


Por mi nombre cada día tú me llamas. Señor, yo
acudo a tu llamado a cada instante, Pues mi gozo
es servirte más y más.

Señor, tú me llamas por mi nombre desde lejos;


Por mi nombre cada día tú me llamas

SUBLIME GRACIA
Sublime gracia del señor, que a un infeliz salvó,
fui ciego más hoy veo hoy perdido y el me halló
Su gracia me enseñó a temer, mi duda ahuyentó,
oh cuan precioso fue a mi ser cuando él me
transformó

En los peligros o aflicción que yo he tenido aquí,


su gracia siempre me libró u me guará feliz

Y cuando en Sion por siglos mil, brillando esté


cual soy, yo cantaré por siempre allí, su amor que
me salvó.

TAL COMO SOY


Tal como soy de pecador,
Sin más confianza que tu amor, Ya
que me llamas vengo a Ti:
Cordero de Dios, heme aquí.

Tal como soy, buscando paz,


En mi aflicción y mal tenaz
Conflicto grande siento en mí:
Cordero de Dios, heme aquí.

Tal como soy me acogerás;


Perdón y alivio me darás;
Pues tu promesa ya creí:
Cordero de Dios, heme aquí.

Tal como soy, tu compasión


Quitado a toda oposición; Ya
pertenezco todo a Ti:
Cordero de Dios, heme aquí.

TE EXALTARE MI DIOS MI
REY
Te exaltaré, mi Dios, mi Rey, Y bendeciré tu
nombre Eternamente y para siempre. Cada día te
Y alabaré tu nombre Eternamente y para
siempre. Grande es Jehová,
Y digno de suprema alabanza; Y su grandeza es
inescrutable. Cada día te bendeciré.

USA MI VIDA
Muchos que viven en tu derredor, Tristes,
hambrientos están;
Tú, por tu vida, les puedes llevar Gozo, luz y
bienestar.

Coro:
Usa mi vida, usa mi vida Para tu gloria, oh Jesús;
Todos los días y hoy quiero ser, Testigo tuyo,
Señor, por doquier.

Di a los tristes que Dios es amor; Él quiere darles


perdón, a los que vienen a Cristo Jesús Buscando
paz, salvación.

Toda tu vida hoy rinde al Señor; Cada momento


sé fiel, otros que vean en ti su amor Pronto se
rindan a él.

VENGO JESUS A TI
De mi tristeza y esclavitud. vengo Jesús, Vengo
Jesús. A tu alegría y tu Virtud,
Vengo Jesús a Ti. De mi pobreza y enfermedad,
A tu salud y rica bondad;
A tu presencia, de mi maldad, Vengo
Jesús a Ti.

De mi flaqueza y falta de luz, vengo Jesús,


Vengo Jesús. al eminente bien de tu cruz Vengo
Jesús a Ti. del sufrimiento que es terrenal, a Ti
mi médico celestial; Para ser libre de todo mal,
Vengo Jesús a Ti.

De mi soberbia y ansiedad, vengo Jesús, Vengo


Jesús, para morar en tu voluntad, Vengo
Jesús a Ti. de mi tristeza a tu gran amor, a lo
del cielo consolador; para
por siempre darte loor, Vengo Jesús a
Ti.

De ese terror que la tumba da, vengo Jesús,


Vengo Jesús a la brillante luz de tu hogar,
Vengo Jesús a Ti. de la indecible profundidad, a
tu redil de tranquilidad. a ver tu faz por la
eternidad, vengo, Jesús a Ti.
VICTORIA EN CRISTO En la cruz murió mi Jesús; Con su muerte vida me
Oí bendita historia, de Jesús quien, de su gloria, dio; Por su gracia me transformó, Y la vida
Al Calvario decidió venir para salvarme a mí. Su abundante me concedió.
sangre derramada se aplicó feliz a mi alma, Me
dio victoria sin igual cuando me arrepentí. La mujer que fue y tocó El vestido del Señor; Por
su fe salud recibió y la vida abundante Jesús le
Coro: dio.
Ya tengo la victoria, pues Cristo me salva.
Buscóme y compróme con su divino amor. En la cruz pidió el malhechor De su alma la
Me imparte de su gloria, su paz inunda mi alma; salvación; Vida eterna pudo alcanzar, Pues la vida
Victoria me concedió cuando por mí murió. abundante Jesús le dio

Oí que, en amor tierno, él sanó a los enfermos; a


los cojos los mandó correr, al ciego lo hizo ver. VIVO POR CRISTO
Entonces suplicante le pedí al Cristo amante, le Vivo por Cristo, confiando en su amor, Vida me
diera a mi alma la salud y fe para vencer. imparte, poder y valor; Grande es el gozo que
Oí que allá en la gloria, hay mansiones de victoria, tengo por él, es de mi senda, Jesús, guía fiel.
Que su santa mano preparó para los que él salvó.
Espero unir mi canto al del grupo sacrosanto, que Coro:
victorioso rendirá tributo al Redentor. ¡Oh Salvador bendito!, me doy tan sólo a ti,
Porque tú en el Calvario te diste allí por mí; No
tengo más, Maestro, yo fiel te serviré; A ti me
VIDA ABUNDANTE doy, pues tuyo soy, de mi alma, eterno Rey.
Vida abundante Jesús ofrece, Vida triunfante de
día en día; Vivo por Cristo; murió él por mí. Siempre servirle
Él es la fuente de vida eterna que brota siempre en mi alma anheló; Porque me ha dado tal prueba de
mi corazón amor, Yo hoy me rindo por siempre al Señor.

Vivo sirviendo, siguiendo al Señor; Quiero imitar


a mi buen Salvador. Busco a las almas
habiéndoles de él, Y es mi deseo ser constante y
fiel.

amanecer,
YO SE A QUIEN HE CREIDO
No sé por qué la gracia del Señor, a mí un día me
alcanzó, ni sé porque obró la salvación En un
indigno como yo.
Coro:
Más yo sé a quién he creído, y es poderoso para
guardarme,
seguro hasta el día en que venga El por mí.

No sé por qué la gracia del Señor, en mí Él quiso


demostrar, ni sé por qué cuando era pecador, por
mí su vida vino a dar.

No sé cómo es que su Espíritu, convence al


hombre de su error, ni como obra en el corazón
creando fe en el Señor.

No sé cuándo el Señor regresará, de noche o al


ni sé si por la muerte he de pasar, o vivo subiré
con Él

YO TE SIRVO
Yo te sirvo porque te amo; Tú me has dado vida
a mí. No era nada y me buscaste; Tú me has dado
vida a mí. Vidas hechas pedazos, te llevaron al
Calvario tan cruel; Tu amor será mi anhelo, Tú
me has dado vida a mí.

También podría gustarte