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Perú: la reforma educativa durante el gobierno militar de Juan Velasco Alvarado

(1968-1975)

Cinco meses después de tomar el poder, Juan Velasco Alvarado inició su reforma educativa, con la
promulgación de la Ley Orgánica de la Universidad Peruana no. 17437, en febrero de 1969, que
continuó, tres años después, con la publicación de la Ley General de Educación núm. 19326, en marzo
de 1972: dos cuerpos legislativos que buscaron modificar las bases de la educación peruana y que se
sumaron a los numerosos intentos, durante la historia nacional, para encaminar su desarrollo. Pero, qué
proponían esas leyes y, sobre todo, ¿mejoraron la educación nacional? (¿lo habrían logrado de aplicarse
cabalmente?).

 Ensayos educativos

La historia de la educación en el Perú está llena de ensayos y de intentos fugaces, infructuosos y a veces
contradictorios (Barrantes, 1989, pág. 113) debido a que dicha historia es un reflejo y parte de la del
país.

Es así que, solo en el siglo XX, se promulgaron cinco leyes orgánicas de educación (en los años 1901,
1920, 1941, 1972 y 1982) y se tuvieron varias reformas, contrarreformas y hasta antirreformas
universitarias (solo en materia de reformas se pueden mencionar, por ejemplo, las de 1901, 1919, 1928,
1931, 1946, 1960, 1969, 1983). Luis Alberto Sánchez (1969), tres veces rector de la Universidad San
Marcos, afirmaba que “ya estamos habituados a que cada ‘revolución’ traiga en su equipaje una nueva
Constitución, una nueva ley de responsabilidades, una nueva legislación tributaria (siempre en ascenso)
y un nuevo estatuto universitario” (pág. 256).

El gobierno militar de Juan Velasco Alvarado (1968-1975) no fue la excepción y promulgó una ley
universitaria y una ley orgánica de la educación. En el primer caso, se trata del Decreto Ley no. 17437 o
Ley Orgánica de la Universidad Peruana, emitida el 18 de febrero de 1969, que inicia con 13 breves
considerandos que resumen la esencia de la norma y posee 5 títulos: disposiciones generales, sobre el
sistema de la universidad peruana, acerca de las universidades, del régimen económico y disposiciones
transitorias.

 La universidad en los tiempos de militares

Raúl-Estuardo Cornejo (1994), investigador, la considera como una “ley absolutamente vertical,
complexiva, impuesta como una directiva militar y –bajo la fachada de modernizante– calco en mucho
de las universidades norteamericanas” (pág. 44).

Por su parte, Sánchez (1969) cuestionaba que si hay algo contrapuesto institucionalmente es la vida
universitaria con la castrense: “La una descansa en el debate, la otra en la consigna […]. De esta
discrepancia entre la razón y el acto […] surgen varias de las dificultades que sufrimos” (pág. 231). En ese
sentido argumentaba que era una ley contradictoria y en muchos aspectos inconsistente, aunque dada
en un momento favorable y propicio (pág. 255). Empero, criticaba el poco o nulo debate que se realizó
para su elaboración:

Por elemental respeto a la Nación, a su juventud, a la Universidad, a sus autoridades y profesores, se ha


debido formular consultas y promover debates internos (…), pero de ninguna manera puede aceptarse
el sistema de clandestinaje y anonimato total cuando se trata de cuestiones como la que nos ocupa
(pág. 256).

 Por lo cual afirmó que el decreto tenía un tono autocrático, dictatorial, monocrático y antidemocrático.
[1] Sobre su contenido, encontró inaceptable la parte “doctrinaria” del decreto, así como los fines que
se establecían para la universidad.
Al respecto, el artículo tercero de la ley establece seis fines. Entre ellos, “contribuir al logro de una
sociedad justa, promoviendo la transformación de sus estructuras”, “preparar los recursos humanos
altamente calificados que el país y el cambio social requieren”, “colaborar en el establecimiento de las
condiciones óptimas de independencia y progreso para el enfrentamiento de los problemas derivados
de la integración regional y continental”.

Cornejo (1994) resalta que se trata de un texto legal de corte nuevo en la legislación universitaria
peruana. Entre otras novedades, creaba al Sistema Nacional de la Universidad Peruana, la estructura
departamentalista, el currículum flexible y la orientación empresarial de la Universidad (…). La
autonomía es también analizada a través de las potestades normativa, académica, económica y
administrativa que se le otorga (pág. 44). Agrega que la ley:

Significó un cambio sustancial en la estructura universitaria tradicional. Desajustó su organización


clásica, hirió seriamente las organizaciones estudiantiles de corte político y pretendió cambiar la
mentalidad profesoral hacia una organización moderna, cierto, pero de patrones extranjerizantes muy
ostensibles al servicio del capitalismo y las transnacionales. En un país, además, de evidente retraso
académico, con un profesorado de formación mediana y un alumnado todavía más deficiente, esta ley
estaba llamada al fracaso. Así fue. A ella dispararon además los dirigentes estudiantiles altamente
politizados, que no permitieron siquiera rescatar algo de lo positivo que podría tener esta ley (pág. 45).

 Años después, por disposición de la Ley General de Educación de 1972, que también involucró a la
universidad peruana, se deroga este decreto universitario y se formula el Estatuto General de la
Universidad, que rigió hasta 1984, cuando se promulgó la siguiente Ley Universitaria, durante el
gobierno de Fernando Belaunde Terry, que modificó, nuevamente, la estructura de la universidad
peruana.

A nivel general, por entonces, la universidad se adecuaba a la masificación estudiantil (que se


incrementó por la explosión demográfica, la inmigración del campo a la ciudad, la expansión de la
enseñanza primaria y secundaria y el crecimiento de las clases medias) y, con ello, el crecimiento de
alumnos y docentes, sin la preparación adecuada, lo que impactó en la calidad académica.[2] Además de
su escaso presupuesto, la crisis social, política y económica del país repercutió en la educación y motivó
que se crearan, en años posteriores, universidades privadas en Lima y otras ciudades. 

Juan Velasco Alvarado (1910-1977) gobernó al Perú de 1968 a 1975.

La reforma frágil

El segundo momento de la reforma educativa de Velasco fue con la promulgación de la Ley General de
Educación núm. 19326, el 21 de marzo de 1972, la cual tuvo una intensa preparación.  

Aurora Marrou (2005), catedrática universitaria, explica que se nombró una comisión presidida por
Emilio Barrantes que analizó el sistema educativo, como un reflejo de la sociedad, y buscó mostrar los
grandes problemas que presentaba la educación nacional, así como explicar el fracaso de los gobiernos
anteriores “que trataron el problema educativo como un hecho aislado de la realidad” (pág. 145).

Precisamente, Emilio Barrantes, educador y presidente de la comisión encargada de dicha reforma,


refiere que se consideraron tres requisitos para su aplicación: entrenamiento de profesores,
reestructuración del Ministerio y financiación adecuada (1989, pág. 113).

Por su parte, Kenneth Delgado (1992), pedagogo, afirma que, por primera vez en la historia, se propuso
un cambio en el sistema educativo, en la medida que era indispensable también un cambio de la
sociedad en su conjunto: “Cualquiera puede comprobar que no hubo ninguna reforma educativa de
verdad hasta 1972” (pág. 52). Esa reforma fue, además, la primera que abordó el problema educativo
como una cuestión política y económico-social, que debía comprometer la participación organizada
mediante los núcleos educativos comunales, agrega. Fue la única “que se preocupó de la educación más
allá de las aulas y los centros educativos, fue la única que buscó la articulación del sistema educativo
formal con la educación informal” (ibíd.), adiciona.

Marrou (2005) reflexiona que uno de sus propósitos fue la formación de un nuevo hombre y establecer
una igualdad en las oportunidades de vida para todos los peruanos, para lo cual se impulsó una agresiva
política de democratización de la Educación. Por ello, en el Plan Nacional Educativo 1971-1975 algunos
lineamientos son: llegar a todos los peruanos, brindar efectiva igualdad de oportunidades, erradicación
total del analfabetismo, escolaridad básica, efectiva y diversificada para toda la población (pág. 146).

La ley empieza explicando la “situación del país y la política educacional” y el “sentido de la nueva
educación”, para luego desarrollar once secciones (entre otras, sobre el “sistema de la educación
peruana”, la “tecnología educativa”, el “magisterio”, los “recursos económicos y financieros”, la
“participación de la comunidad en la educación”). Luego, establece que la acción de la educación se
orienta “hacia el surgimiento de un nuevo hombre plenamente participante en una sociedad libre, justa,
solidaria y desarrollada por el trabajo creador y comunitario de todos sus miembros e imbuido en
valores nacionalistas”.

Estructuralmente, establece que el sistema educativo posee tres niveles: inicial, básica y superior; y sus
modalidades (variantes de los niveles) son: regular, laboral, especial, extensión educativa, entre otras,
que la norma explica en diversos títulos y capítulos.

Eduardo Palomino Thompson (1993) resalta que la ley le dio mayor participación a la comunidad en la
educación. La planificación educativa llegó a su punto más alto, así como la necesaria vinculación entre
Educación, desarrollo y trabajo (pág. 66). En tanto, Barrantes precisa que se reemplazó la “pre-escolar”
por la educación inicial; las ramas “primaria” y “secundaria” fueron sustituidas por el nivel de educación
básica, gratuita y obligatoria. Por otra parte, la educación común y la educación técnica se confunden en
este nivel, incorporando el trabajo a la educación, de acuerdo con un nuevo currículum (1989, pág. 100).

En diciembre de 1971, Fidel Castro llegó a Lima y se reunió con Juan Velasco Alvarado.
Otras disposiciones fueron en la modalidad regular: añadir la educación básica laboral, para
adolescentes y adultos impedidos de asistir a los cursos de la educación básica regular; la calificación
profesional extraordinaria; la educación especial; la educación para las áreas rurales y la extensión
educativa; así como los núcleos educativos comunales y crear la Junta Permanente de Coordinación
Educativa (Barrantes, pág. 101).

La reforma fue un esfuerzo singular, una obra original, inspirada en la realidad del Perú y adaptada a la
de otros países latinoamericanos, adiciona Barrantes. El Perú aportó nuevos elementos a la educación
por lo que suscitó la admiración de otros países, empero, lamenta el autor, “durante dos gobiernos
sucesivos, o sea durante diez años, esta Reforma fue, en gran parte, destruida” (pág. 113). Adiciona que
se la atacó desde diversos ángulos y por diversos motivos, ninguno de ellos referentes a su calidad, la
importancia que tenía para el Perú y los efectos que podían esperarse de su aplicación, “sino por
sectarismo político, resentimiento partidario o por la condición humana” (ibíd.).

Palomino (1993), por su parte, sostiene que un aspecto objetado fue el diagnóstico ideologizado y
totalmente negativo de toda la educación peruana anterior que tuvo el informe general de la reforma
(pág. 66). Afirma que diversos aspectos que eran positivos devinieron en negativos, por mal manejo o
radicalización. “Su fracaso se debe a que fue muy mesiánica, muy utópica, inmensamente vertical […].
Por otra parte, la economía no la ayudó sino en los primeros tiempos. Se hundió por sus propias fallas”
(pág. 75). La segunda parte del Gobierno de las Fuerzas Armadas desmontó esa reforma (pág. 87).

Delgado (1992) agrega que algunos la juzgaron de peligrosa y satanizaron la palabra “concientización”
en la ley, por lo que los gobiernos de Morales Bermúdez (1975-1980) y Belaunde Terry (1980-1985)
terminaron por destruirla. Manifiesta que la contrarreforma contenida en la Ley 23384 de 1982 no es
más que una “revancha educativa” de la peor especie, plagada de contradicciones e inexactitudes
cuando no de carencias insalvables (pág. 52).

Esa ley, como se indicó, también involucró a la universidad peruana por lo que “fue un cuerpo legal
integral referido a toda la educación del país. Definitivamente el mejor y más avanzado intento de
reforma”, sostiene Cornejo (1994, pág. 45).

En el fondo la parte universitaria de la norma constituye una Ley de Bases, acaso la más coherente,
técnica y progresista del Perú de las últimas décadas y producida por la Comisión de Reforma de la
Educación creada en el gobierno de Velasco Alvarado. Obviamente no es perfecta pero cuando menos la
Universidad tuvo la oportunidad de debatirla como proyecto (ibíd.).

Carlos Rojas Galarza (1992), catedrático peruano, advierte que la diversidad de leyes sobre educación
que se dictaron durante la República duró muy poco, ya sea por su inaplicabilidad o por los intereses de
las facciones que asumieron el poder del Estado (pág. 45) y que casi siempre fueron pocos o nulos sus
efectos (pág. 47). En tanto, para Augusto Salazar Bondy (1965), filósofo y educador, en el Perú no se ha
tenido nunca paciencia de reformar, debido a que la improvisación y el apresuramiento no han
permitido madurar pausadamente las transformaciones (pág. 22).
Imagen 3. Entre otras medidas, Velasco realizó la reforma agraria en el Perú.
www.jornaldearequipa.com

Notas:

[1] Al promulgarse dicha ley, Luis Alberto Sánchez, militante del Partido Aprista Peruano (PAP), ejercía su
tercer rectorado en la Universidad de San Marcos, que debió cumplir hasta 1971, pero que fue
interrumpido por razones políticas, tanto por la presión del gobierno velasquista, como de un grupo de
estudiantes sanmarquinos.

[2] En 1960 las universidades del Perú contaban con un total de 25 mil alumnos. Para 1968, se pasaban
los 100 mil estudiantes.Fuente: Pacarina del Sur - http://pacarinadelsur.com/home/amautas-y-
horizontes/1836-peru-la-reforma-educativa-durante-el-gobierno-militar-de-juan-velasco-alvarado-1968-
1975 - Prohibida su reproducción sin citar el origen.
Currículo educativo en el mundo
En muchos países hay diversos modelos de CV educativos en los distintos niveles de educación, en
algunas partes del mundo está regido por sus sistemas educativos, otros son más modernos, pero
siempre están en constante cambio para mejorar la formación de los futuros profesionales.

Por ejemplo, en Venezuela, el currículo educativo se ve regido por el Sistema Educativo Bolivariano y
toma el nombre de Currículo Nacional Bolivariano (CNB); este proyecto es de gran envergadura porque
dicta las bases principales para la formación de los niños, jóvenes y adultos de nuestro país. Por otro
lado, en España-Galicia en el año 2014 se realizó un decreto el cual estableció el programa educativo
para los niveles de primaria que sigue vigente hasta hoy y que se mantiene en constante evolución,
puesto que esta nación posee uno de los sistemas educativos más modernos y aplaudidos en el argot
internacional.

El sistema educacional de Singapur: calidad y variedad


Singapur, actual número uno del mundo en los rankings de ciencias y matemáticas.

¿Dónde está el secreto?

Hasta 1965, año en que Singapur se convirtió en república independiente, su población vivía en su
mayoría como simples pescadores, y la tasa de analfabetismo era altísima. Sólo 40 años más tarde, son el
país top en la mayoría de los exámenes de medición educacional y sus estudiantes hablan inglés como si
se tratara del primer idioma del país, se niveló el sueldo de los profesores al de abogados e ingenieros y su
sistema está basado actualmente en la meritocracia: desde primer grado los niños son clasificados en un
ranking por desempeño académico, lo que va creando una necesidad de superación. ¿He acá el secreto?

La importancia del currículum

A pesar de recibir críticas por la verdadera "obsesión" que Singapur tiene por la educación, lo cierto es
que su currículum no es para nada rígido, y se ha intentado compensar un estilo exigente con una malla
curricular flexible, que permita potenciar las habilidades de los alumnos más allá de los ramos científico y
matemáticos.

Un alumno promedio en Singapur comienza su jornada escolar a las 7:20 de la mañana, concluyendo
entre las 13 y 14 horas. Este dato, lejos de ser anecdótico, refleja que el tema no es la cantidad de horas,
sino la calidad con la que se está enseñando. Con respecto a los ramos, los estudiantes tienen seis
asignaturas obligatorias: 

- Idioma Inglés
- Lengua materna (pueden elegir entre chino, malayo y tamil, entre otros)
- Matemáticas
- Humanidades combinadas
- Ciencia
- Electivo

El ramo de Historia está incluido dentro de Humanidades combinadas, y entre los electivos que pueden
elegir los estudiantes se encuentran:

- Arte
- Diseño y tecnología
- Música
- Aplicaciones Informáticas
- Administración
- Habilidades de Negocios
- Alimentación y nutrición
- Estudios Religiosos (Confucionismo, Estudios Budistas, Religión Islámica, Estudios Bíblicos, Estudios
Sikh, entre otros)
- Economía
- Informática
- Teatro y Drama

Tomar uno de estos ramos es obligatorio y son evaluados al igual que el resto de las materias. ¿El
objetivo? Preparar al alumno para la universidad y encontrar lo antes posible "su talento".

¿Cuántas horas por ramo?

Cada materia que se imparte en Singapur, de las seis tomadas como base, tiene igual número de horas:
seis semanales, como mínimo. Eso quiere decir que se asegura que el alumno aprenda tres veces a la
semana idiomas (12 horas semanales en total), matemáticas, humanidades, ciencia y el electivo que más
le interese. ¿Y educación física? Se realiza durante la tarde, pero enfocado en deportes que el alumno
seleccione.

Críticos y defensores del sistema

Aunque no se detectan críticas respecto a la organización de las materias y el número de horas, el sistema


sí ha sido objetado por ser demasiado "rígido y elitista", afirmando que hay poco énfasis en el
pensamiento creativo, a diferencia de lo que ocurre en otras sociedades, como las de los Estados Unidos. 
Los defensores del sistema argumentan que si es flexible y hacen mención a los primeros lugares que el
país ostenta en la mayoría de las competiciones internacionales de ciencia y las matemáticas, donde suele
ser evaluado con honores.

En respuesta a tales preocupaciones el Ministerio de Educación ha introducido recientemente, un mayor


énfasis en el pensamiento creativo y crítico, buscando un aprendizaje de "habilidades para la vida" en
lugar de sólo sobresalir en los exámenes. Sin embargo, muchos niños continúan siendo presionados por
sus padres y maestros para tener un buen ranking. Ya no sirve  solo  pasar de curso.

Finalmente, los partidarios del sistema afirman que la amplia malla curricular ha permitido a los
estudiantes, con diferentes habilidades y estilos de aprendizaje, desarrollar y mantener un interés en sus
estudios. Esta capacidad del sistema puede que sea un elemento clave detrás del éxito de Singapur en la
educación y de llevar las tasas de abandono escolar a niveles bajísimos.

Nuevos currículos de primaria en España y en Singapur: una comparación reveladora

Los capítulos previos a la exposición de los contenidos curriculares me parecen modélicos en su


exposición de en qué consiste enseñar y aprender matemáticas.
Empezando por el aspecto organizativo, la reforma ha arrancado el año 2013 en primer curso de
primaria, y se irá extendiendo al resto de los cursos de la etapa de forma progresiva. De hecho, hasta
ahora sólo han publicado la parte correspondiente a los dos primeros cursos. Nosotros, en cambio,
empezamos el curso próximo en 1º, 3º y 5º. Si un vistazo al currículo no fuera ya suficiente para
comprobar que aquí nada ha cambiado, la medida de implantarlo directamente en 5º sería en sí misma
prueba suficiente. Pasando ya a un análisis de fondo, quizá lo más relevante del nuevo currículo de
Singapur es la inclusión de las “experiencias de aprendizaje” como uno de los
ejes vertebradores del currículo. Ahora están al mismo nivel que los contenidos. Me parece una idea
muy interesante, porque es una forma muy potente de transmitir a los maestros qué tipo de actividades
se recomiendan para tratar los diferentes contenidos. 

CÓMO APRENDEN LOS ESTUDIANTES EN FINLANDIA

En este trabajo analizaremos brevemente algunos de los factores que hacen que el sistema educativo de
Finlandia se haya convertido en uno de los más exitosos. Conoceremos sus características y estructura, el
papel del alumno y el profesor en el aula, y analizaremos alguno de los resultados que se han obtenido
en los Informes PISA. Se llevará a cabo una comparación con otros sistemas educativos, en especial el de
España, y se expondrán los aspectos claves que tiene el sistema educativo finlandés en su conjunto.

EL CURRÍCULO DEL SISTEMA EDUCATIVO FINLANDÉS:

El nuevo currículo nacional para la Educación Básica de Finlandia fue introducido para los cursos de 1º a
6º en todos los colegios el 1 de agosto de 2016. Para los siguientes grados se fue introduciendo de
manera progresiva adaptándose en 7º en el 2017, en 8º en el 2018 y por último en 9º que se procederá
en el 2019. Este currículo nacional sirve de base para informar de las asignaturas que se deben cursar, y
cada escuela lo adapta de acuerdo a sus particularidades. El currículo nacional está compuesto
principalmente por los objetivos y los contenidos descritos para diferentes materias que están
conectadas con la descripción de las políticas sobre los valores subyacentes, la concepción del
aprendizaje y la cultura escolar. El objetivo del plan de estudios es permitir una reforma de la cultura
escolar y la pedagogía escolar que mejorará la calidad del proceso de aprendizaje y los resultados del
aprendizaje. (Dirección Nacional 15 Finlandesa de Educación, 2014). Los siguientes ítems mencionados
son los objetivos o pilares básicos que han de cumplirse en cada escuela: -Objetivo: asegurar los
conocimientos y habilidades necesarios, así como fomentar el aprendizaje. -Temas renovadores. -
Competencias transversales como parte de cada asignatura. -Cambiar la forma en que las escuelas
operan. -Al menos un módulo de aprendizaje multidisciplinario al año. -Diversidad en la evaluación del
alumno. Dentro del currículo de todo centro educativo, se debe de tener en cuenta cuatro aspectos que
marca el currículo nacional que son obligatorios y deben ser abordados. Estos cuatro aspectos clave son:
-Crecimiento y desarrollo. -Salud en la vida diaria. -Recursos y habilidades en la vida diaria. -Salud,
sociedad y cultura. La Dirección Nacional Finlandesa de Educación del 2014 muestra que el currículo
nacional aún se basa en las materias especificadas en la Ley de Educación Básica para todos los grados.
Las materias estudiadas en Educación Básica son: -Lengua materna y literatura. -Segundo idioma
nacional. -Idiomas extranjeros. -Matemáticas. -Estudios ambientales. 16 -Biología. -Geografía. -Física. -
Química. -Educación para la salud. -Religión. -Ética. -Historia. -Ciencias Sociales. -Música. -Artes visuales.
-Artesanía. -Educación Física. -Economía doméstica. -Asesoramiento de orientación. En el Anexo 2 se
podrá ver el recuadro de todas las asignaturas y al curso que pertenecen. También el currículo general de
Finlandia de 2014 tiene en cuenta una serie de materias transversales que se integran en cada materia y
son las siguientes: -Aprender a aprender. -Competencia cultural, interacción y autoexpresión. -
Cuidándose uno mismo y manejando la vida diaria. -Multiculturalidad. -Competencia TIC. -Competencia
en la vida laboral y el espíritu empresarial. -Participación y construcción de un futuro sostenible.

EL MÉTODO DE TRABAJO EN LAS AULAS:

El método de trabajo en las aulas de Educación Básica ha ido evolucionando con los años, hasta
convertirse en un sistema donde el alumnado es partícipe y sujeto principal en todas las escuelas. Como
dijo Benjamín Franklin, “Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo”, en esto es
en lo que se basa la escuela finlandesa al hacer partícipes a los niños en todo momento. Gracias al
avance de las tecnologías, hoy en día las clases cuentan con diversos materiales que aportan al niño una
serie de conocimientos y habilidades para su desarrollo íntegro. Pero, ¿cómo es la manera de enseñar
que se produce en el colegio? El rol del maestro en este país es muy diferente al que conocemos en
España. No se basa en la transmisión de conocimientos por parte del profesor a sus alumnos, sino que el
objetivo es trabajar en equipo y que el maestro actúe de guía acompañando a los niños en la labor de
ejercer un razonamiento crítico. Existen muchos valores que definen el modelo educativo finlandés que
son claves para su éxito y desarrollo, como una atención individualizada, participación, colaboración, y
sobre todo autonomía por parte de todo el equipo del centro educativo. Estos son los aspectos claves
que están presentes día a día en las escuelas. En cuanto a la organización de las clases, los docentes
recalcan la importancia de que el niño sienta que la escuela es "como su casa". Es importante que tanto
los pasillos como las propias aulas estén decorados con 18 colores cálidos y con trabajos hechos por ellos
mismos, esto ayudará a los alumnos a que se sientan más relajados y en una zona de confort. Debe
existir una libertad tanto en el movimiento que sería la parte más general como en la indumentaria. No
existen restricciones y el profesor no es quien da órdenes rígidas, se debe de formar una relación
estrecha entre maestro-alumno que permita sostener esa base de confort. El número de alumnos por
clase no debe sobrepasar los 25 para afianzarse en la idea de trato individualizado y poder responder a
todas las necesidades que presente cada niño. Por ello es tan importante que los colegios no superen en
número de alumnos los 500 para dar pie a una atmósfera de proximidad en el centro. No existen los
aprendizajes forzados, todo lo contrario, se ha de motivar y estimular al niño en todo momento. Todo
esto despertará en él una serie de aptitudes que le permitan aprender mediante la investigación, el
juego y sobre todo con la ayuda de guía del profesor. Todas las clases cuentan con recursos digitales
como pizarra digital utilizada frecuentemente, las paredes del aula deben de estar cubiertas de
estanterías de libros para que se haga uso de ellos de manera voluntaria. En el primer curso de
Educación Básica a la edad de 7 años, los niños comienzan a aprender a leer y por ello, es importante
que las mesas de la clase estén organizadas de forma grupal. No existen pupitres individualizados sino
una o varias mesas conjuntas rodeadas de sillas para que los niños se organicen en grupos de apoyo y
puedan ayudarse y aprender mutuamente. Con respecto a los horarios escolares, pueden variar
dependiendo de cada escuela, pero han de cumplir que las sesiones deben limitarse a 45 minutos y en el
paso de unas a otras debe de haber un descanso de 15 minutos donde los niños podrán salir al patio que
les servirá de desconexión. Alrededor de las 11:30 de la mañana se produce la hora del almuerzo que
está financiado por el Estado, y así se garantiza una comida al día a cada individuo. El tema de los
deberes o tareas es un asunto muy comentado de la Educación en Finlandia. La tarea que se suele
mandar puede ocupar un tiempo de 20-30 minutos como máximo y como dijo Majasaari (2016) en el
documental ¿Por qué es tan bueno el Sistema Educativo de Finlandia?: "El término tarea me parece
obsoleto (…) los niños tienen muchas otras cosas que hacer después de clase. Estar juntos, estar con su
familia, haciendo deportes, tocando música, leyendo". Los niños deben de pasar más tiempo jugando y a
través de ese juego o de las acciones que lleven a cabo podrán aprender otra serie de cosas. Los niños
deben aprender en un clima flexible y cargado de libertad de movimientos, para que así se desarrollen
íntegramente y alcancen al máximo su potencial en competencias, habilidades, destrezas... Deben de
investigar y aprender de sus errores, dejarles hacer para que modifiquen aquellas cosas que han
resultado erróneas y sobre todo utilicen sus propios medios en la resolución de los problemas.

LA EVALUACIÓN:

Este tema es uno de los más polémicos, ya que mucha gente habla sobre cómo Finlandia puede alcanzar
resultados tan exitosos en los Informes PISA sin que tenga una evaluación repleta de exámenes, donde
continuamente se midan los conocimientos de los niños a través de ponderaciones. La evaluación tiene
el objetivo de servir de guía y fomentar el estudio, para poder desarrollar la capacidad de autoevaluación
del alumno y promover el sentido de autoconfianza. Por ello se lleva a cabo una evaluación continua
donde no hace falta hacer un examen y calificarlo con notas sino ver las habilidades y destrezas que
desarrolla el niño en sus acciones de la vida cotidiana dentro de la escuela. Hasta los nueve años los
alumnos no son evaluados con notas. En esta forma de evaluación no se emplean cifras, y es a la edad de
los 13 años donde se les pondera. Con esta medida lo que se pretende y de hecho, visto los resultados se
cumple, es que los niños no sientan una presión por ser juzgados por sus resultados. Pueden seguir el
proceso de aprendizaje a su ritmo. Según Naumanen (2016) afirma que: "Lo importante es que los
alumnos tengan la sensación de que son buenos en algún campo". Con ello reforzamos esa idea de
confianza en sí mismos y espíritu motivador. La evaluación que se realiza en Finlandia es una evaluación
continua y final. Con este método lo que se pretende es guiar y acompañar a los alumnos en la
adquisición de aprendizaje en su día a día. A final de cada año escolar los alumnos reciben un informe
individualizado. Según Pérez (2017): "Finlandia no ha sido el único país en denunciar el modelo actual. El
Reino Unido, a través de la Confederación de la Industria Británica, ha destacado la importancia de
promover en las jóvenes habilidades para el siglo XXI, como la comunicación, en lugar de educar a los
niños a través de "fábricas de exámenes". Con la realización de exámenes en los que se califique a los
alumnos solo se conseguirá ponerles una etiqueta, en cuanto lo bueno o lo mal estudiante que es. Esta
forma de evaluar que tiene el sistema educativo de Finlandia para los niños de Educación Básica es un
objetivo a cumplir en muchos países como España o Inglaterra para reforzar la autoconfianza de los
jóvenes.

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