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Rafael Sanzio es un pintor, arquitecto y poeta del Alto Renacimiento que, desde muy joven, ganó el

reconocimiento de la sociedad italiana gracias al talento desbordado que lo caracterizó. Su


temprana muerte reforzó el mito alrededor de su figura, pero ya para entonces su legado artístico
había dejado escuela. ¿Qué sabemos de la vida del pintor? ¿Qué hizo Rafael Sanzio? ¿Cuáles
fueron sus aportaciones? ¿Cuáles fueron sus obras más importantes?

Biografía de Rafael Sanzio


Rafael Sanzio nació en el año 1483 en Urbino, probablemente el día 28 de marzo. Su padre fue el
poeta y también pintor, Giovanni Santi, quien trabajó al servicio de la familia Montefeltro, y quien
probablemente le dio sus primeras luces en materia de pintura. Su madre fue Maggia de Battista di
Nicola Ciarla, quien falleció en 1491, cuando Rafael era apenas un niño.

Al enviudar, Giovanni Santi se casó con una mujer llamada Bernardina, de cuya unión nació
Elisabetha, medio-hermana del pintor. Pero Giovanni Santi moriría también muy pronto, cuando el
joven tenía 11 años de edad.

Gracias a las buenas relaciones sociales de su padre y al manifiesto talento del joven, Rafael no
demoró en encontrar el apoyo que necesitaba. A sus 14 años ya se había hecho merecedor de
colaborar en el taller de Pietro di Cristoforo Vanucci, llamado Perugino, quien lo formó como pintor
hasta hacer de él su principal ayudante

Hacia el ascenso de su fama


. Hacia 1499, con solo 16 años, Rafael comenzaba a recibir sus primeros encargos independientes
en ciudades como Urbino, Perugia, Città di Castello y Siena. Al comienzo de esta independencia
artística, las obras de Rafael solían ser pinturas de pequeño formato para la devoción privada,
como madonnas, por ejemplo. Con su fama, su nombre fue derivando de Santi, como su padre, a
Sanzio, una simple corrupción fonética.

Uno de los primeros encargos sería el retablo para la iglesia San Agustín de Città. El pintor
rápidamente ganaba el respeto de mecenas y colegas artistas. En la ciudad de Siena, de hecho,
colaboró para el artista Pinturicchio, que en 1503 requirió su ayuda para decorar la librería
Piccolomino de la Catedral de Siena.

La obra que lo catapultaría a la fama fue Los desposorios de la Virgen, elaborada en el año 1504,
donde Rafael acrisola la influencia de su maestro Perugino. Sin embargo, a finales de ese mismo
año, en 1504, Rafael viajó a una ciudad que marcaría un antes y un después en su pintura:
Florencia.

Florencia, camino al perfeccionamiento pictórico


Florencia estaba en plena efervescencia artística, y contaba con figuras tan prominentes como
Leonardo da Vinci y Miguel Ángel Buonarroti. La obra de estos maestros dejaría una influencia
imborrable en Rafael, quien años más tarde acabaría rivalizando con el propio Buonarroti.

Tras varios trabajos de envergadura, el gran momento de la vida artística de Rafael llegaría en
1508, cuando el papa Julio II, pariente de los Montefeltro, sus antiguos protectores, lo hizo llamar.
Julio II deseaba que se incorporarse al equipo de pintores que trabajaban en la decoración de las
stanzas del Vaticano, en Roma.

Roma y la consagración artística de Rafael


Bajo encargo del primado de Roma, Rafael pintó su más célebre fresco: La escuela de Atenas,
apenas uno de los que decorarían las estancias del Vaticano. Rafael brilló de tal forma que pronto
desplazó a los demás artistas del proyecto.

A la muerte del papa Julio II, subió al pontificado León X, pariente de los Montefeltro, sus antiguos
protectores. Bajo su mecenazgo, Rafael concluyó la Stanza di Heliodoro y la Stanza dell incendio di
Borgo. Además de esto, el papa le encargó también el diseño de unos tapices para la Capilla
Sixtina.

Con lo aprendido en Florencia y con su presencia en Roma, Rafael estaba en su mayor auge y
producía obras de gran formato, especialmente cuadros de altar (destinados a la devoción pública
y a la liturgia) y retratos para los grandes mecenas de su tiempo.

Hacia 1514, murió el arquitecto del nuevo San Pedro en Roma, Donato d'Angelo Bramante, así que
el pontífice delegó la supervisión del proyecto a Rafael. Abrumado por el exceso de trabajo
arquitectónico, el pintor tuvo que apoyarse más que nunca en sus ayudantes del taller,
especialmente en Giulio Romano, para poderse acabar con todos los encargos que tenía.

Leyenda y muerte

Hacia el año 1520 Rafael ya era un artista más que consagrado. Su influencia en la sociedad era de
tal peso que algunos le atribuían cualidades divinas, no solo artísticas, sino sensuales. Soltero y con
una moral sexual bastante laxa, Rafael era conocido por entregarse a noches interminables de
placer carnal.

Su última incursión en una casa de citas acabó con un estado febril que lo dejó en cama por dos
semanas, hasta que falleció un Viernes Santo de 1520, supuestamente, el mismo día de su
nacimiento. Aunque no se sabe a ciencia cierta de qué murió, todo apunta a que contrajo una
enfermedad venérea, probablemente sífilis.

Para entonces, el maestro trabajaba en su gran obra La transfiguración, que quedó inacabada. Fue
terminada por uno de sus discípulos.

Características y estilo de Rafael Sanzio

Rafael

Rafael Sanzio: El triunfo de Galatea, 1511, fresco, 297 cm × 225 cm, Villa Farnesina, Roma.

Entre las características más importantes del pintor Rafael se pueden reconocer las siguientes:

Interés por los temas de la cultura clásica y los referentes intelectuales.

Estilo clásico que respeta el equilibrio, la proporción y la simetría.

Equilibrio y decoro en la composición.

Claridad compositiva.

Preocupación espacial.

Aprovechamiento de la perspectiva lineal y uso del espacio arquitectónico.

Iluminación diáfana.

Coloración vibrante.

Sutileza del trazo.

Acabados finos.

Posturas elegantes en los personajes.

Dinamismo compositivo en sus obras de madurez.

Introducción de rasgos psicológicos en los personajes retratados.


Influencias y aportaciones de Rafael Sanzio
Cuando hablamos de "influencias" en plural nos referimos al influjo o impacto que recibió el pintor
Rafael de sus maestros o colegas que, de alguna manera, alimentaron su trazo artístico. En este
apartado veremos cuáles fueron sus principales influencias pero también cuáles fueron las
aportaciones de Rafael que impactaron en las generaciones siguientes.

rafael influencias

Izquierda: Leonardo : Mona Lisa, óleo sobre tabla, 77 x 53 cm, 1503-1506, Museo del Louvre, París.

Centro: Taller de Leonardo: Mona Lisa, 1503-1519, óleo sobre tabla, 76,3 × 57 cm, Museo del
Prado, Madrid.

Derecha: Rafael: Retrato de Maddalena Doni o Maddalena Strozzi, 1506, óleo sobre tabla, 65 ×
45,8 cm, Palacio Pitti, Florencia.

Influencias

Rafael Sanzio recibió la influencia de prominentes artistas del Renacimiento. El primero de ellos
sería su maestro, Perugino, cuya influencia es reconocible en su trabajo previo a la etapa
florentina. Para las composiciones de escenas aprendió el sistema de perspectiva de su maestro.
Para los retratos, tomó el modelo de los ojos almendrados y la boca carnosa y diminuta.

Una vez en Florencia, el artista conoce al maestro Fray Bartolomeo. Con este perfecciona la técnica
de coloración, mientras que Fray Bartolomeo perfecciona su manejo de la perspectiva de la mano
de Rafael.

influencias

Fray Bartolomeo: La adoración del Niño, 1499, temple sobre madera, 89 x 89 cm, Galería Borghese,
Roma.

Rafael aprendería de Leonardo los elementos compositivos en el plano. Podemos ver la influencia
que ejerció en su obra retratística comparando la Mona Lisa con el Retrato de Maddalena Don.
Asimismo, el influjo leonardesco es visible en las diferentes madonnas que Rafael realizó después
de haber conocido la obra del maestro, como La bella jardinera, de 1507.

Rafael también estudió la obra del escultor, pintor y arquitecto Miguel Ángel Buonarroti, de quien
aprovecharía el sentido del dinamismo de las figuras y la monumentalidad. Este último aspecto se
hizo presente de manera paulatina a lo largo de su vida y obra.
rafael

Miguel Ángel Buonarroti: La Sagrada Familia con san Juan Bautista (Tondo Doni), 1506, 120 cm ×
120 cm, Galería Uffizi, Florencia.

Aportaciones y legado

En su período romano, Rafael comenzó a experimentar diferentes maneras de concebir sus


pinturas, particularmente los retratos. En efecto, introduce la representación de los estados de
ánimo y la psicología del personajes en retratos de personalidades tan significativas en la época
como el retrato del papa Julio II.

Además de llevar el arte del retrato a un nuevo nivel, Rafael acrisoló a la perfección el canon
artístico del Renacimiento. Así como Miguel Ángel legó a la humanidad la Capilla Sixtina, Rafael
logró lo propio con el trabajo que desempeñó en las stanzas del Vaticano. Tal fue la excelencia de
los frescos que decoran aquellas habitaciones, que pasaron a conocerse como las Estancias de
Rafael.

Así como Rafael fue influenciado por lo grandes maestros de su tiempo, dejó una impronta en las
generaciones venideras. En efecto, su genio fue de tal orden que con Rafael se clausura el Alto
Renacimiento.

influencia

Johann Friedrich Overbeck: Italia y Germania (Sulamith y Maria), 1811-1828, Neue Pinakothek, de
Múnich.

Tras su temprana muerte, el arte siguió los derroteros del manierismo representado por genios
como Miguel Ángel. Sin embargo, para los detractores de esta corriente artística, Rafael es la
referencia fundamental del clasicismo renacentista.

Por ello, algunas generaciones después, el genio del maestro Rafael Sanzio fue imitado y citado
abundantemente entre los siglos XVII y XIX. De hecho, entre finales del siglo XVIII y principios del
XIX, un grupo del romanticismo alemán autodenominado "Purismo nazareno" o "nazarenos",
volvió sobre la estética rafaelista, especialmente en su primera etapa.

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9 obras que muestran el genio incomparable de Miguel Ángel.

Obras de Rafael Sanzio

Para ilustrar los elementos que hemos descrito, presentamos aquí una lista con algunas de las
obras más emblemáticas del pintor, ordenadas cronológicamente, desde su período temprano,
pasando por el período florentino y el romano. Esta lista completa las referencias que ya hemos
citado, como La Escuela de Atenas, La bella jardinera, El triunfo de Galatea, el Retrato de Madalena
Doni o Madalena Strozzi y el Autorretrato del pintor.

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