Universidad Antonio Nariño

Historia del procedimiento de reorganización empresarial

Semestre VII

Ensayo de reorganización empresarial

Presentado a:

Angie Caro

Presentado por:

Juan Esteban Collazos

Jorge Alberto Ruiz Osorio

Lucía Vargas Villamil

Neiva-huila

24 de marzo de 2023
Historia del proceso de reorganización empresarial

La Historia Del Proceso De Reorganización Empresarial es una práctica que ha

estado presente en el mundo empresarial desde hace muchos años. Durante la
década de 1980, en los Estados Unidos, la reorganización empresarial se convirtió
en un proceso común debido a la creciente competencia y a la necesidad de las
empresas de ser más eficientes y rentables.

El proceso de reorganización empresarial implica cambios significativos en la

estructura organizativa y operativa de una empresa con el objetivo de mejorar su
rendimiento financiero. Esto puede incluir cambios en los procesos productivos,
reducción del personal, fusiones y adquisiciones, entre otros.

A finales del siglo XX, este proceso se extendió por todo el mundo como resultado
de la globalización económica y las crisis financieras que afectaron a muchas
empresas. En algunos países como Argentina o México, la reorganización
empresarial fue utilizada para enfrentar las crisis económicas y evitar el cierre
masivo de empresas.

En general, este proceso ha sido criticado por sus efectos negativos sobre los
trabajadores despedidos y por su impacto en las comunidades locales donde
operan estas empresas.

Es un proceso que implica la reestructuración de las operaciones, las obligaciones

financieras y la estructura de propiedad de una empresa. A lo largo de los años, el
concepto de reorganización empresarial ha evolucionado y su importancia
continúa creciendo. En este ensayo, profundizaremos en la historia de la
reorganización empresarial, explorando cómo se ha desarrollado a lo largo del
tiempo. Nos centraremos en tres líneas principales que han dado forma al
proceso; las fusiones y adquisiciones de principios del siglo XX, el establecimiento
de leyes de quiebra en la década de 1930 y la reestructuración y reducción de
personal de las décadas de 1980 y 1990.

En la década de 1990, el enfoque de la reorganización empresarial se desplazó

hacia la mejora de la eficiencia y la productividad a través de la implementación de
tecnologías y procesos innovadores. Las empresas también comenzaron a
centrarse en la satisfacción de los clientes y en la mejora de la calidad de los
productos y servicios.

En la actualidad, la reorganización empresarial se enfoca en la adaptación a los

cambios en el entorno empresarial, incluyendo los avances tecnológicos, la
globalización y la creciente competencia. Las empresas están adoptando modelos
de negocio más flexibles y ágiles, y están invirtiendo en la formación y el
desarrollo de los empleados para asegurar que estén preparados para los
desafíos del futuro.
La reorganización empresarial es un proceso de cambio que puede ser muy útil
para las empresas que buscan mejorar su eficiencia y rentabilidad. A través de
este proceso, las empresas pueden reorganizar sus estructuras, procesos y
recursos para adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado y las nuevas
oportunidades de crecimiento.
En un mundo cada vez más competitivo, las empresas necesitan estar siempre al
tanto de los cambios en el mercado y en la industria en la que operan. La
reorganización empresarial puede ser una herramienta muy valiosa para lograr
ese objetivo, ya que permite a las empresas ajustar su estructura y procesos para
adaptarse mejor a las demandas del mercado.

La reorganización empresarial puede tomar muchas formas diferentes. Por

ejemplo, puede implicar la fusión de dos o más en una sola, la división de una
empresa en varias unidades más pequeñas, la reducción de costos a través de la
eliminación de funciones o departamentos necesarios, o la adopción de nuevas
tecnologías y procesos de trabajo para mejorar la eficiencia y la productividad.
Una de las principales ventajas de la reorganización empresarial es que puede
ayudar a las empresas a reducir costos y mejorar su rentabilidad. Al reorganizar su
estructura y procesos, las empresas pueden eliminar funciones y departamentos
que no son esenciales para su negocio, lo que les permite reducir sus gastos
operativos y aumentar sus márgenes de beneficio.

Este proceso se prevé para las sociedades que tengan dificultades en cumplir sus
obligaciones o estén a punto de cesar pagos a sus proveedores.
Para Ximena Castrillón, abogada senior en asuntos corporativos de Araújo-Ibarra,
la finalidad de esta figura es conservar la empresa como unidad de explotación. Es
decir, buscar de manera estructurada formas para continuar con las acciones
económicas de la organización.

Además, la reorganización empresarial también puede ayudar a las empresas a

mejorar su eficiencia y productividad. Al adoptar nuevas tecnologías pueden y
procesos de trabajo, las empresas optimizar sus operaciones y reducir el tiempo y
el costo de producción. También pueden mejorar la calidad de sus productos y
servicios, lo que puede ayudarlos a ganar una ventaja competitiva en el mercado.
Sin embargo, la reorganización empresarial también puede ser un proceso difícil y
doloroso para los empleados de la empresa. Puede haber despidos y
reubicaciones, lo que puede afectar negativamente la moral de los empleados y la
cultura de la empresa. Es importante que las empresas sean transparentes y
abiertas con sus empleados durante el proceso de reorganización, y que
proporcionen apoyo y recursos para ayudar a los empleados a adaptarse a los
cambios.
En conclusión, la reorganización empresarial puede ser una herramienta muy
valiosa para las empresas que buscan mejorar su eficiencia y rentabilidad. Al
reorganizar su estructura y procesos, las empresas pueden reducir costos, mejorar
la eficiencia y productividad, y adaptarse mejor a las cambiantes condiciones del
mercado. Sin embargo, también es importante que las empresas sean cuidadosas
y sensibles durante el proceso de reorganización, para minimizar el impacto
negativo en los empleados y la cultura de la empresa.
El proceso de reorganización empresarial puede variar dependiendo de las
necesidades y objetivos específicos de la empresa, pero generalmente implica los
siguientes pasos:

1.Evaluación de la situación actual: El primer paso en el proceso de

reorganización empresarial es realizar una evaluación completa de la situación
actual de la empresa, incluyendo sus fortalezas y debilidades, su posición en el
mercado y los problemas que enfrenta. Esta evaluación puede incluir la revisión de
los informes financieros y operativos de la empresa, así como entrevistas con
empleados clave.
2.Establecimiento de objetivos: Una vez que se ha evaluado la situación actual de
la empresa, el siguiente paso es establecer objetivos claros y específicos para la
reorganización. Estos objetivos deben ser realistas y estar alineados con la visión
y misión de la empresa.
3.Identificación de áreas para la reorganización: Con los objetivos establecidos, el
siguiente paso es identificar las áreas específicas de la empresa que requieren
reorganización. Estos pueden incluir la estructura organizativa, los procesos y
procedimientos operativos, la estrategia de marketing y ventas, el modelo de
negocio o la línea de productos.
4.Desarrollo de un plan de acción: Una vez que se han identificado las áreas para
la reorganización, el siguiente paso es desarrollar un plan de acción detallado para
implementar los cambios necesarios. Este plan debe incluir un calendario de
implementación, responsabilidades y recursos necesarios.
5.Comunicación con empleados y otras partes interesadas: Es importante
involucrar a los empleados y otras partes interesadas en el proceso de
reorganización empresarial desde el principio, comunicando claramente los
objetivos y el plan de acción. Esto puede ayudar a reducir la incertidumbre y la
resistencia al cambio.
6.Implementación del plan: La implementación del plan de acción puede ser un
proceso gradual o inmediato, dependiendo de las necesidades de la empresa. Es
importante realizar un seguimiento y evaluación continua para asegurarse de que
se están logrando los objetivos y hacer los ajustes según sea necesario.
7.Evaluación posterior: Una vez que se ha completado la implementación del plan,
es importante realizar una evaluación posterior para medir su éxito y hacer ajustes
adicionales si es necesario.

El proceso de reorganización en primer lugar lo encontramos en la ley 1116 del 27

de diciembre 2006 El propósito es preservar empresas viables, normalizar las
relaciones comerciales y crediticias para su reestructuración operacional,
administrativa y de activos o pasivos.

De esta manera, los acreedores no reconocidos por el deudor deben objetar el

inventario para que sea reconocida la obligación a su favor, pues de lo contrario,
pierden el derecho a reclamar, debido que el proceso de insolvencia es el único
escenario en que pueden hacer valer sus créditos.

En conclusión

Un proceso de reorganización puede verse incursas obligaciones de distintos

acreedores, los cuales pueden ser laborales, fiscales, civiles comerciales e,
incluso, proveedores.

Lo cual es muy normal que se presenten dudas sobre el cobro de las acreencias
laborales de los trabajadores de empresas que entran en el proceso de
reorganización empresarial o incluso, liquidación judicial regulados bajo la ley 1116
de 2006.

Bibliografías:

https://actualicese.com/reorganizacion-empresarial-y-pago-de-creditos-
laborales-sabes-como-se-realizan/#:~:text=Procesos%20de
%20reorganizaci%C3%B3n%20empresarial,-En%20primer
%20lugar&text=Su%20prop%C3%B3sito%20es%20preservar
%20empresas,y%20de%20activos%20o%20pasivos.

https://www.sic.gov.co/Procesos-de-reorganizacion.

https://www.larepublica.co/especiales/proteccion-patrimonial/pasos-a-
seguir-para-realizar-una-reorganizacion-empresarial-2720258.