SAN JUAN BAUTISTA DE LA SALLE

Camino a ser adultos

La edad adulta se inicia alrededor de los 25 años. Se caracteriza porque las personas se abocan
al cumplimiento de sus metas y toman decisiones importantes para su vida profesional, laboral y
familiar.

Características de una persona adulta

Se dice que una persona ha llegado a la adultez cuando sus
actos están basados en tres aspectos: autonomía, para
pensar, decidir y actuar por sí misma; libertad, para escoger lo
que va a hacer con su vida; y responsabilidad, para asumir Autonomía
Libertad
Responsabilidad
las consecuencias de sus decisiones. Para llegar a la adultez
con metas definidas y claridad en las acciones que se
realizarán, es necesario haber identificado las fortalezas, los
defectos y las limitaciones que se tienen.
La libertad personal y la presión del grupo
Como seres sociales, las personas necesitamos convivir en grupo para desarrollar habilidades de
comunicación, cooperación, negociación y respeto a las normas.
La influencia del grupo es positiva cuando ayuda a consolidar la identidad y la autoestima, y
respeta la libertad de sus miembros.
Es negativa, en cambio, cuando perjudica la autonomía y la integridad de la persona. A estas
influencias positivas o negativas se las denomina presión de grupo.
La presión de grupo se ejerce para que el individuo se comporte según piensan o desean los
demás. Esto puede llegar a atentar contra la libertad personal.
Estrategias para enfrentar la presión de grupo
• Desarrollar la libertad de expresión para manifestar lo que sentimos, pensamos y deseamos.
• Fortalecer nuestras habilidades para comunicarnos de manera directa, franca y abierta con
personas de diferentes grupos.
• Aceptar las limitaciones personales, asumiendo que solo podemos superarnos cuando nos
fijamos metas y luchamos por ellas.
• Reconocer que todos tenemos derechos por los que debemos luchar.
• Aceptar que todos tenemos el derecho de ser jueces de nuestras propias acciones,
pensamientos y emociones.
• Ejercer nuestro derecho a decir “no” y a no gustarle a todo el mundo, así como a cambiar de
parecer si lo creemos conveniente y saludable.

Las creencias
Las creencias son ideas asumidas como verdades que nos permiten actuar y manejarnos en el
mundo.
Características:
• Son pensamientos que están fuertemente arraigados en la mente de cada persona y que son
causa de nuestro comportamiento.
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• Están relacionadas estrechamente con la realidad. Creencias como la existencia de Dios o de
entidades sobrenaturales condicionan nuestra manera de apreciar el mundo.
• Se instalan en nuestra mente como producto de la herencia cultural, la tradición y las
circunstancias.
• Se desarrollan en múltiples ámbitos de la vida: hay creencias religiosas, científicas, filosóficas,
políticas, etc.
Las creencias religiosas
Toda religión reconoce a un fundador, quien establece las creencias básicas, denominadas
doctrina, así como los rituales que permiten a los practicantes comunicarse con Dios.
Las religiones poseen, además, una serie de textos que consideran de inspiración divina, como la
Biblia, el Corán o la Torá, así como otros escritos que favorecen el desarrollo espiritual de sus
seguidores, como el catecismo o las encíclicas.
Las creencias políticas
Las creencias políticas están relacionadas con los estilos de organización social. Se estructuran
en doctrinas, que forman un conjunto de principios que revisten autoridad. Las creencias políticas
impulsan a trabajar en la solución de los problemas públicos.
Es fundamental, el desarrollo de una conciencia política responsable
La resolución de conflictos
En los conflictos pueden estar involucrados dos individuos, grupos o Estados, a los que se
denomina “partes”. Un conflicto se origina cuando las partes perciben que buscan objetivos
incompatibles, que las recompensas que reciben son escasas o que una interfiere en el logro de
las metas de la otra.
El pensamiento crítico y las creencias
El pensamiento crítico es la capacidad de razonar correctamente por uno mismo, de manera que
podamos encontrar respuestas y soluciones confiables a los problemas que se nos presentan.
El pensamiento crítico se basa en lo siguiente:
• El uso de evidencia empírica
• El pensamiento lógico, que nos permite razonar adecuadamente, analizar, argumentar,
justificar o probar razonamientos. Se caracteriza por ser preciso y exacto; es analítico y racional.
• El escepticismo, que es el cuestionamiento constante de las propias creencias y conclusiones.
Además, examina permanentemente la evidencia, los argumentos y las razones de nuestras
creencias. Si estas coinciden con la realidad objetiva, podemos concluir que representan un
conocimiento confiable, de lo contrario, que no son válidas.
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