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NOMBRE DEL CURSO: HERMENÉUTICA

DOCENTE: ORLANDO ARROYAVE VALENCIA


ALUMNO: DANIEL EDUARDO CALDERON MARTINEZ – 000458552
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA: Trad. Pedro Aragón Rincón, “Mas allá de la interpretación”
Gianni Vattimo, Barcelona: España.

MAS ALLÁ DE LA INTERPRETACIÓN – GIANNI VATTIMO

Más allá de la interpretación es un texto del autor italiano Vattimo en el cual


subraya a la hermenéutica, como esa mirada global que mejor presenta la razón y
la explicación de esta época y que, por tanto, se convierte en una teoría de la
historicidad de la comprensión del ser. La única forma de hablar del ser es su
relato nihilista de decadencia y debilitamiento. Además, subraya Vattimo que la
vocación nihilista de la hermenéutica, logra eliminar el equivoco metafísico que la
amenaza.

Vattimo hace un contraste de la hermenéutica frente a ciertos campos, iniciando


por la ciencia. El autor subraya que la hermenéutica siempre ha privilegiado las
ciencias del espíritu en detrimento de las naturales. Estas consideraciones pueden
llevar a una reevaluación de las ciencias naturales como lugares de verdad. La
vocación nihilista de la hermenéutica, se manifiesta precisamente al considerar los
últimos resultados de las ciencias naturales. En consecuencia, el olvido de la
vocación nihilista está íntimamente ligado a la actitud anticientífica de la
hermenéutica. La ciencia, y con ella la tecnología, configuran un mundo "devuelto
a un sistema general de causas y efectos, a una imagen que el sujeto científico
tiende a tener totalmente a su disposición y un mundo reducido a una imagen.

Vattimo se detiene en tres propuestas éticas dentro del pensamiento


hermenéutico. La primera es la ética de la comunicación. En el fundamento de
esta teoría se encuentra la consideración del horizonte lingüístico como
trascendental y la necesidad de definir una situación de total transparencia
comunicativa; ambos elementos, sin embargo, parecen ajenos a la hermenéutica:
el primero por su trascendencia, el segundo porque la hermenéutica enfatiza
precisamente la imposibilidad de la transparencia comunicativa. La ética de la
comunicación no parece, por tanto, genuinamente hermenéutica. La segunda
teoría es el resultado de una lectura ética de las posiciones de Rorty, quien
sostiene que lo que mantiene viva la comunicación es la diferencia de paradigmas
entre los interlocutores: para que la comunicación continúe es necesario que los
interlocutores tengan algo que ofrecer. nuevos horizontes y visiones. La tercera
propuesta, de Gadamer tiene dos conceptos clave: la continuidad y el diálogo. “La
tarea moral para él – escribe Vattimo – es lograr algo así como la ética hegeliana,
la inserción de las experiencias individuales de cada uno en una continuidad de
existencia individual, que no se sustenta sino sobre la base de la pertenencia a
una comunidad histórica. Entre el individuo y la comunidad hay una mediación
interpretativa que nunca termina.

La relación de la hermenéutica con la religión parece, a primera vista, marcada por


una paradoja. Por tanto, para captar la conexión entre la ontología nihilista y el
cristianismo hay que detenerse en el concepto de kénosis: un Dios se humilla, se
hace hombre, se encarna y se deja crucificar; esta es una narración posible de la
historia del debilitamiento del ser. El nihilismo, por tanto, guarda su relación con la
kénosis, y esta relación resulta del hecho de que la pluralidad de interpretaciones
mencionadas en la hermenéutica se comprende mejor dentro del destino de la
kénosis. La hermenéutica es esencial al cristianismo.

La última zona de aplicación que trata es la estética. Entre la religiosa, y ésta hay
un lazo que no debe romperse, tanto que "el sentido de la experiencia estética,
una vez que se quiere captar en su especificidad, remite a un ámbito que no se
puede delimitar". excepto en referencia a la experiencia religiosa y al mito. El arte
es un lugar privilegiado de la verdad: pero tal posición sólo puede conducir a
resultados genéricos y filosóficamente inofensivos. Es decir, debe quedar claro,
que en el nihilismo: el arte y la religión son, ambos momentos que cuentan la
historia del debilitamiento de las estructuras fuertes del ser. ¿Qué será de la
estética cuando tome conciencia de su destino nihilista? Ante las transformaciones
de la producción artística, no se limitará a invocar un perdido sentido de la belleza,
sino que prestará más atención a los aspectos ontológicos y significados del arte
de masas, que para una consideración estética tradicionalista parece una mera
degeneración de la belleza. El factor discriminador en el juicio estético, el criterio
de belleza, lo decidirá la mayor o menor fidelidad al hilo conductor del nihilismo.

Concluye Vattimo con dos apéndices en los cuales especifica, en primer lugar, la
concepción de verdad, desde la metáfora de la biblioteca de Babel, como una
vocación del ser a la reducción, que sirve de criterio a las interpretaciones, y en
segundo lugar, el carácter especifico de la racionalidad hermenéutica la cual se
legitima únicamente ofreciendo una historia, de ese proceso del que deriva, en
términos nihilistas, esto es, interpretativos, narrativos, no descriptivos, que será
válida hasta que otra interpretación logre desmentirla.

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