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Cómo se practican las praxias faciales

En las dificultades del habla suelen estar implicadas estas praxias, una ejecución
pobre el alguna de ellas puede provocar problemas en la articulación de los
fonemas, entorpeciendo la comunicación verbal. Así, algunos ejercicios, utilizados
frecuentemente en logopedia, para practicar estas praxias son los siguientes:
Ejercicios para las praxias linguales:
o Meter y sacar la lengua con la boca abierta.
o Realizar movimientos con la lengua de arriba abajo.
o Con la boca entreabierta, mover la lengua de izquierda a derecha tocando la
comisura de los labios.
o Con la punta de la lengua, empujamos las mejillas hacia fuera.
o Realizar movimientos con la lengua de abajo a arriba, por detrás de los
incisivos, tanto inferior como superior.
o Lamer el labio con la punta de la legua. El ejercicio debe hacerse tanto con
el labio inferior como el superior.
o Abrir la boca ampliamente y lamer los labios superiores e inferiores con un
amplio movimiento en círculo.
o  Con la boca entreabierta, dejar la lengua ancha y relajada. Después,
estrecha y tensa.
Ejercicios para practicar las praxias labiales:
o Podemos colocar los labios como si fuéramos a dar un beso y en posición
de sonrisa, con los labios juntos, alternando ambas posiciones.
o Alternamos dos movimientos, esconder los labios apretándolos hacia dentro
y sacarlos hacia afuera en posición de reposo.
o Lamer de forma alterna el labio inferior y superior.
o Morder el labio superior con los dientes inferiores y después el labio inferior
con los dientes superiores.
o Realizar la posición labial de las vocales de forma alterna.
o Hacer vibrar los labios.
Ejercicios para practicar las praxias del velo del paladar:

o Toser de forma intencionada.


o Realizar gárgaras sin agua en la garganta.
o Realizar respiraciones profundas. Aspirar el aire por la boca y expulsarlo por
la nariz.
o Al contrario, inspirar el aire por la nariz de forma profunda. Alternar
aspiraciones nasales y vocales fuertes.
o Realizar bostezos de forma intencionada.
o Emitir el fonema “a”.
Ejercicios para practicar las praxias mandibulares:
o Abrir y cerrar la boca alternando movimientos lentos y rápidos.
o Abrir la boca lentamente y cerrarla rápido.
o Abrir la boca rápidamente y cerrarla lentamente.
o Realizar movimientos masticatorios intencionados.
o Mover la mandíbula inferior de un lado a otro.
Actividades para las praxias linguales
Además de los ejercicios mostrados en el apartado anterior, podemos
plantear juegos y actividades más lúdicas para estimular estar praxias,
ligadas al habla. Estas actividades pueden realizarse con niños y niñas que
presenten dificultades de articulación de los fonemas, pero también con niños y
niñas pequeñas que estén empezando a hablar aunque no presenten problemas.
Algunos ejemplos son:
o Cantar: La canción es un momento de juego que ofrece grandes
oportunidades de aprendizaje. Es importante, para que sea beneficioso, que
el niño cante en voz alta. Se le puede animar a hacerlo si se canta con él.
o Articulación lingual: Podemos darle vida a la lengua, presentándola como
la protagonista de una historia. Nuestro personaje realizará diferentes
movimientos, como bailar muy rápido, salir y entrar de su casita, saltar
dentro de casa, etc.
o Onomatopeyas: A través de onomatopeyas practicaremos la articulación
de fonemas simples, como por ejemplo reproducir un bostezo,  imitar un
fantasma, una oveja, etc.
o Jugar con globos: Los globos permiten practicar tanto praxias del velo del
paladar, como praxias labiales e incluso linguales. Podemos proponer
hinchar globos para después jugar con ellos, realizar carreras de globos
moviéndolos a través del soplo.
o Jugar a hacer pompas: con las pompas practicaremos praxias del velo del
paladar y praxias labiales, además es una actividad que les encantan a los
niños y niñas.
o Imagen en el espejo: una forma lúdica de practicar las diferentes praxias
es sentarnos con el niño o niña delante de un espejo y sin decirle nada, ir
haciendo diferentes praxias y que deba imitaros, después podemos animar
a que sea él o ella el que tome la iniciativa. Para que sea aún más divertido,
podemos ser imaginativos y que los gestos sean graciosos, así
aumentaremos la motivación del niño o niña.
o También, existen juegos de mesa que ponen en práctica diferentes praxias
faciales.
o Método logo- bit. Este método presenta diferentes bits con distintas praxias
que el niño ha de imitar. Si lo hacemos por turnos, podemos desarrollar esta
actividad como si de un juego se tratara en el que se apilan las tarjetas
boca-abajo y uno saca la tarjeta que toque y el otro debe imitar el
movimiento

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