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CONCEPTO.
El art. 197 de la LCT dispone: “Se entiende por jornada de trabajo todo el tiempo
durante el cual el trabajador esté a disposición del empleador en tanto no pueda
disponer de su actividad en beneficio propio. Integrarán la jornada de trabajo los
períodos de inactividad a que obliguen la prestación contratada, con exclusión de
los que se produzcan por decisión unilateral del trabajador…”.
Por ende, se entiende como jornada únicamente el espacio de tiempo en que el
trabajador se coloca a disposición del empleador, bajo su organización y dirección,
independientemente si el empleador le asigna tareas o no. El trabajador no puede
utilizar este período de tiempo para su propio beneficio, por ejemplo no podría
realizar trámites personales. En este punto existe una estrecha relación entre el
concepto de jornada y el concepto de remuneración, por cuanto se remunera el
tiempo que el trabajador se encuentra a disposición del empleador
La distribución de las horas de trabajo será facultad privativa del empleador y la
diagramación de los horarios, sea por el sistema de turnos fijos o bajo el sistema
rotativo del trabajo por equipos no estará sujeta a la previa autorización
administrativa, pero aquél deberá hacerlos conocer mediante anuncios colocados
en lugares visibles del establecimiento para conocimiento público de los
trabajadores.
Cabe destacar que, entre el cese de una jornada y el comienzo de la otra deberá
mediar una pausa no inferior a doce horas. Esta disposición establece lo que
denominamos descanso diario
Por otro lado, el lapso computado como trabajado abarca el tiempo efectivo y
aquel durante el cual el trabajador pone su fuerza de trabajo a disposición del
empleador de acuerdo con la organización del trabajo en la empresa aunque no
preste efectivamente servicios, cualquiera sea el motivo. Por ejemplo: el trabajador
es operario de una maquina en una fábrica, pero durante las tareas de
mantenimiento que deben realizarle a la misma, no la puede utilizar para cumplir
con su prestación de servicio.
Según el art. 103 de la LCT el salario es debido aunque el trabajador no preste
servicios por la mera circunstancia de haber puesto su fuerza de trabajo a
disposición del empleador.
Se considera computable como tiempo de trabajo:
a) El tiempo de prestación de servicios.
b) El tiempo durante el cual el trabajador esté a disposición del patrono, en
que permanece inactivo dentro de la jornada si la inactividad es extraña a
su voluntad, a su negligencia o a causas legítimas de suspensión de
contrato (arts. 78, 218 a 223 y 208, LCT).
c) Las pausas dentro de la jornada, en principio no se consideraran tiempo
trabajado, salvo que el descanso responda a una necesidad de la función y
el trabajador no pueda disponer de su tiempo en provecho propio, por
ejemplo, según la naturaleza del trabajo, debiendo permanecer el
trabajador en el lugar donde realiza su labor.
JORNADA MÁXIMA.
El art. 198 de la LCT dispone: “La reducción de la jornada máxima legal solamente
procederá cuando lo establezcan las disposiciones nacionales reglamentarias de
la materia, estipulación particular de los contratos individuales o Convenios
Colectivos de Trabajo. Estos últimos podrán establecer métodos de cálculo de la
jornada máxima en base a promedio, de acuerdo con las características de la
actividad”.
Dicho ello, es importante destacar que se deberá respetar las pausas que
determina la LCT, por lo cual entre la finalización de una jornada de trabajo y el
inicio de otra debe existir una pausa (es decir, un descanso del trabajador) de por
lo menos 12 horas.
El artículo 199 de la LCT establece que: “El límite de duración del trabajo admitirá
las excepciones que las leyes consagren en razón de la índole de la actividad, del
carácter del empleo del trabajador y de las circunstancias permanentes o
temporarias que hagan admisibles las mismas, en las condiciones que fije la
reglamentación”.
Directores y gerentes
La Dra. Amanda Caubet sostiene que el trabajo por turnos rotativos sólo debería
ser autorizado en las empresas de actividades necesariamente continuas, pues su
realización afecta los ritmos bilógicos y perjudica la vida familiar, cuestiones
fundamentales para la consideración respetuosa de la condición de persona
humana del trabajador.
Accidentes o urgencias
Excepciones permanentes.
Excepciones Temporarias
Trabajo nocturno.
Tanto el art. 2 de la ley 11.544 como el art. 200 de la LCT determinan que la
jornada de trabajo íntegramente nocturna no podrá exceder de 7 horas,
entendiendo por tal la jornada que se cumple entre las 21:00 hs. De un día y las
06:00 hs. del siguiente. La segunda norma agrega que cuando se alteren horas
diurnas con nocturnas se reducirá proporcionalmente la jornada en ocho minutos
por cada nocturna trabajada o se pagarán los ocho minutos de exceso como
tiempo suplementario.
El trabajo nocturno merece una especial consideración pues altera el ritmo
biológico y atenta el orden natural, común y normal del tiempo del descanso físico,
si es que se tiene en cuenta que el reposo en horas de la noche es el que repara
eficientemente las energías consumidas durante el día.
La ley 11.544 restringe el trabajo nocturno desde tres puntos de vista:
1) en cuanto al tiempo de duración,
2) en cuanto a las actividades que se pueden desarrollar, y
3) con respecto a la exclusión de determinadas personas en razón del sexo o
la edad.
Trabajo insalubre.
Para una parte mayoritaria de la doctrina son horas extraordinarias sólo las que
superan la jornada legal, o a la de convención colectiva.
El art. 201 de la LCT y el art. 5° de la ley 11.544 dispone que el empleador deberá
abonar al trabajador que prestare servicios en horas suplementarias (o
extraordinarias), medie o no autorización del organismo administrativo
competente, un recargo del 50% calculado sobre el salario habitual, si se tratare
de días comunes, y del 100% en días sábados después de las 13 horas, domingos
y feriados.
El decreto 484/2000 determina que en ningún caso el número de horas
suplementarias autorizadas podrá ser superior a 30 en un mes y 200 al año por
cada una de las personas ocupadas en una determinada industria. Debe
respetarse la pausa no inferior a 12 horas entre jornada y jornada, tal como lo
establece el art. 197 de la LCT, y los descansos semanales.
El tope diario prevalece sobre el semanal y por ello, sin en el día se excede la
jornada autorizada legalmente (de 8 o 9 horas si la distribución es desigual), el
tiempo en exceso se cuenta como extraordinario, no pudiendo superar las 3 horas
por día (art. 13 dto.16115/33). Por ejemplo, si un día se trabaja 11 horas y el otro 5
horas.
El artículo 203 de la LCT dispone que el trabajador no estará obligado a prestar
servicios en horas suplementarias, salvo caso de peligro o accidente ocurrido o
inminente de fuerza mayor, o por exigencias excepcionales de la economía
nacional o de la empresa, juzgando su comportamiento en base al criterio de
colaboración en el logro de los fines de la misma.
Las horas extraordinarias se prueban por cualquier medio (testigos, tarjetas reloj,
etc.) y deben ser valoradas como cualquier hecho, es decir, el juez debe tener la
convicción de que el pedido es verosímil.
DESCANSO SEMANAL.
El artículo 14 bis de la CN, dispone, entre otras cosas, que el trabajador gozará de
vacaciones pagadas.
Las vacaciones constituyen un periodo de descanso anual remunerado que debe
gozar el trabajador y al que tiene derecho prestando un mínimo de servicios y que
se calcula en función de su antigüedad. Su fin es higiénico, es decir que se otorga
con el objeto de descansar física y mentalmente. Su regulación legal surge de la
ley de contrato de trabajo, de leyes especiales y de los convenios colectivos de
trabajo.
OTRAS LICENCIAS.