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TEMA 31.

El proceso especial de menores

Ideas generales sobre el proceso de menores


El proceso de menores esta regulado en la LO 5/2000 de 12 de enero de responsabilidad penal de los
menores. Se ha modificado en el año 2000, 2002 y 2006.
Se trata de un proceso para exigir responsabilidad penal a mayores de 14 años y menores de 18 por
la comisión de hechos tipificados como delitos.
Si es menor de 14, se aplican las normas de protección de menores previstas en el Código Civil.
En este proceso rige un principio básico: la salvaguarda y defensa del superior interés del menor.
En la exposición de motivos se establece que la naturaleza de este procedimiento es formalmente
penal pero materialmente sancionadora – educativa. Se persigue la reeducación y reinserción de los
infractores.
La competencia para el conocimiento, fallo y ejecución de las medidas (medida, no pena) la tiene el
Juez de Menores (o Juez Central de Menores en los delitos del art 571 a 580 LECrim).
Aquí la instrucción corre a cargo del Ministerio Fiscal. Sus funciones son:
1. Dirigir la instrucción
2. Velar por los derechos e intereses del menor
3. Velar por todas las garantías del procedimiento
4. Ejercitar la acción penal, instando en la fase de audiencia la imposición de las medidas*
5. En su caso, ejercitar la acción civil en favor del perjudicado
6. Actuar en defensa de la legalidad
En estos procedimientos de menores, tiene un papel relevante el equipo técnico, que está formado
por profesionales (psicólogos, trabajadores sociales, etc)
Aquí también tiene amplia vigencia el principio de oportunidad reglada, es decir, no se incoará el
procedimiento y se podrá terminar anticipadamente el mismo si el MF así lo propone.
Hay una especial protección a las victimas en estos procesos: no se permite el ejercicio de la acción
popular pero sí la acusación particular.
La determinación de la responsabilidad civil se tramita en pieza separada sin que los
pronunciamientos sobre la misma tengan efecto de cosa juzgada.
*En este proceso el juicio se llama audiencia, y la pena se denomina medida

Instrucción y medidas cautelares


La instrucción es competencia del MF y se regula en los arts 15 a 27 de la LO 5/2000.
Procedimiento:
1. Llega la noticia criminis con indicación de un menor y el MF admite a trámite o no la
denuncia o atestado según si los hechos son considerados como delito o no.
2. Custodiará las piezas, documentos o efectos que le hayan sido remitidos.
3. Practicará las diligencias que estime permitentes para averiguar el hecho delictivo
Si el menor es responsable de su comisión, el MF podrá acordar desistir de la incoación del
expediente si en virtud del principio de oportunidad así lo considera. Si lo incoa, dará cuenta al juez
de menores y lo notificará al menor y a sus representantes legales para que puedan designar a un
letrado que defienda sus intereses. También lo notificará al perjudicado y este se podrá constituir en
parte y personarse en la pieza de responsabilidad civil.
A partir de aquí, se generan a favor del menor investigado los derechos que aparecen en el art 22 de
la ley (no declarar, no confesarse culpable, etc)
El expediente podrá ser declarado total o parcialmente secreto.
El MF puede acordar cualquier diligencia de investigación siempre que no sea restrictiva de derechos
fundamentales (porque si lo fuera, debe pedir autorización al juez), y estas diligencias deben estar
orientadas a la comprobación del hecho delictivo y a la participación del menor
El fiscal acordará practica de diligencia que propongan los perjudicados siempre que lo considere
pertinente. En otro caso, quienes la han propuesto y hayan visto desestimada su proposición de
prueba, pueden pedirla al juez.
El juez de menores es el órgano competente para ordenar mediante auto la práctica de diligencias
que limiten derechos fundamentales.
El equipo técnico debe emitir un informe sobre la situación psicológica, educativa y familiar del
menor o cualquier otra circunstancia relevante a efectos de imposición de la medida; la conveniencia
de una actividad conciliadora entre el menor y la victima; o no continuar con la tramitación del
expediente en interés del menor.
El MF puede desistir de la continuación del expediente en base al principio de oportunidad reglada.
El MF ordenará la conclusión del expediente una vez que haya acabado la instrucción. En este caso,
se notificará la conclusión a las partes y remitirá el expediente al juzgado de menores.
A continuación, el MF remitirá escrito de alegaciones donde deberá optar el fiscal por pedir el
sobreseimiento al juez o solicitar la imposición de medidas en un escrito que es similar en estructura
al escrito de calificaciones provisionales. También en este escrito se propondrá la prueba para el acto
de la audiencia.
Medidas cautelares: hay una serie de especialidades sobre la detención del menor en el art 17 LO
5/2000, que deberá hacerse con especial cuidado en base al interés del menor para proteger su
identidad.
Las medidas cautelares que cabe acordar son:
1. Internamiento por un plazo máximo de 6 meses prorrogables por otros 3.
2. Libertad vigilada
3. Prohibición de aproximarse o comunicarse con la victima o sus familiares
4. Convivencia con otra persona o familia. Aquí se le integra para intentar reeducarle.

En el art 29 se prevén otras medidas en caso de exención de la responsabilidad. Requisitos para


adoptar estas medidas:
1. Forum delicti comissi (indicios racionales de comisión del delito).
2. Periculum in mora (que exista riesgo de eludir u obstruir la acción de la justicia o de atentar
contra bienes jurídicos de las victimas)
Para adoptar estas medidas cautelares es necesario que el fiscal o la acusación particular lo soliciten
al Juez de Menores, que es el único competente para adoptar las mismas.
El Juez de Menores oirá al letrado del menor, al equipo técnico y a la entidad pública de protección o
reforma de menores, y resolverá lo oportuno atendiendo siempre al interés superior del menor.
Por último, el tiempo de cumplimiento de la medida cautelar se abonará cuando se imponga
definitivamente la medida en la sentencia.

La llamada fase de audiencia; sentencia


Finalizada la instrucción por el fiscal y remitido el escrito de alegaciones del MF con el expediente al
Juez de Menores, se abre la llamada fase de audiencia, que está regulada en los arts 31 a 37 de la LO
5/2000.
Se dará traslado del escrito de alegaciones del fiscal al resto de las partes, incluido el letrado del
menor, para que presenten su escrito de alegaciones con propuesta de prueba.
Es posible que se produzca conformidad y que el Juez de Menores, si se produje esta conformidad
con los requisitos legales, dicte sentencia, sin más trámite.
Si no hay conformidad, el juez deberá optar por alguna de las siguientes decisiones:
1. Celebración de la audiencia
2. Sobreseimiento, para lo que dictará auto
3. Archivo por sobreseimiento de las actuaciones a solicitud del fiscal
4. Remitir las actuaciones al juez competente (en el caso de que no fuera él)
5. Practicar las pruebas o diligencias de investigación propuestas en su día por las partes y que
fueron denegadas por el MF.
Si se celebra la audiencia, el juez decidirá qué pruebas admite que se practiquen y cuáles no, y el LAJ
señalará día y hora para el comienzo de la audiencia.
Hay unas reglas para celebrar la audiencia en el caso de menores:
1. El juez puede acordar excepcionalmente que el menor abandone la sala
2. Puede acordar la ausencia de publicidad y el derecho del menor a la confidencialidad
3. Se va a dar la posibilidad de conformarse nuevamente al menor en el nuevo acto de la vista,
al inicio de la misma. Pero si no se conforma y la audiencia continua, abriéndose el turno de
intervenciones.
A continuación, se practican las pruebas, y es obligatorio oír al equipo técnico. Después de oírlo, las
partes harán sus conclusiones y se le concederá el derecho a la última palabra al menor.

Sentencia:
Se dicta in voce al finalizar la audiencia y se documentará posteriormente por escrito. Tiene la misma
estructura que cualquier sentencia, pero debe ser redactada en lenguaje claro y que resulte
comprensible para el menor.
No podrá imponer una medida que suponga una mayor restricción de derechos o de tiempo
superior a lo solicitado por el fiscal o por la acusación particular.
También puede decretarse la suspensión de la ejecución del fallo siempre que se cumplan los
requisitos legales.
Recursos
Contra las resoluciones que dicte el MF no cabe recurso en vía jurisdiccional.
Contra las providencias y autos, salvo unas excepciones, cabe recurso de reforma.
Contra los autos que pongan fin al proceso, modifiquen las medidas impuestas, adopten medidas
cautelares o suspendan la ejecución, cabe directamente recurso de apelación ante la Audiencia
Provincial o ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, en su caso, por los trámites del
procedimiento abreviado.
Contra la sentencia dictada por el Juez de Menores o el Juez Central de Menores, cabe recurso de
apelación ante la Audiencia Provincial o ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, en su caso.
Contra la sentencia dictada en apelación por la AP o la Sala de lo Penal de la AN cabe recurso de
casación para la unificación de doctrina ante la Sala Segunda del TS.

Ejecución de las medidas


No podrá ejecutarse ninguna medida contra un menor hasta que sea firme la sentencia del Juez de
Menores que la imponga
La competencia judicial para el control de la ejecución de las medidas está atribuida al Juez de
Menores o Juez Central de Menores que haya dictado la sentencia.
Al juez competente le corresponde adoptar las decisiones necesarias para proceder a la ejecución
efectiva de las medidas y resolver mediante auto las incidencias que se produzcan durante su
transcurso.
La competencia administrativa para la ejecución material de las medidas corresponde a las
Comunidades Autónomas y a las ciudades de Ceuta y Melilla.
El desarrollo de la ejecución se acomodará a las reglas generales que establecen los arts 46 y ss y en
caso de medidas privativas de libertad, a los arts 54 y ss.

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