El regalo de la Salvación

Mensajes Cristianos.. Texto Bíblico: Hechos 4:12 “Y en ningún

otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a
los hombres, en que podamos ser salvos.”
Introducción

Todo comienza con el ministerio de Juan el Bautista al predicar el

arrepentimiento que Juan el Bautista predicaba en su ministerio
(Mateo 3:1-2).
Él predicaba con tanta urgencia para que las personas se
arrepintieran de sus pecados. De la misma manera más tarde,
Jesús envió a sus doce discípulos para que dieran las buenas
nuevas y que predicaran del arrepentimiento (Lucas 24:47).
El mensaje Jesús sobre el arrepentimiento para salvación es el
mismo que proclamamos los creyentes que no han perdido el centro
del mensaje del evangelio (Hebreos 9:22). El propósito de
Jesucristo al venir a la tierra fue que las personas se arrepintieran
de sus pecados para que nadie perezca (2 Pedro 3:9).
La realidad es que en muchas iglesias en la actualidad se han
dejado influenciar mucho por las corrientes del mundo y la
disolución del verdadero evangelio de Jesucristo (Marcos 16:15).
Le han restado importancia al pecado, y por consecuencia al
arrepentimiento para ser salvos por gracia. Escrito está que, si
alguno pervierte el evangelio de Cristo o predica de otro evangelio
diferente, sea anatema (Gálatas 1:6-9).
El mundo de hoy predica un evangelio de salvación diferente
Un evangelio donde el centro está sólo en el “amor” para ganar
simpatizantes. Y no está enfocado en el pecado y en el
arrepentimiento. Por lo tanto, los creyentes viven una doble. Una
vida acomodando sus deseos carnales a los mandatos de Dios.
No hay una verdadera urgencia como la tenía Juan el Bautista para
que las almas no se perdieran (en el infierno) más tuvieran vida
eterna.

Mensajes Cristianos.. Texto Bíblico: Hechos 4:12 “Y en ningún

otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a
los hombres, en que podamos ser salvos.”
Introducción
Todo comienza con el ministerio de Juan el Bautista al predicar el
arrepentimiento que Juan el Bautista predicaba en su ministerio
(Mateo 3:1-2).
Él predicaba con tanta urgencia para que las personas se
arrepintieran de sus pecados. De la misma manera más tarde,
Jesús envió a sus doce discípulos para que dieran las buenas
nuevas y que predicaran del arrepentimiento (Lucas 24:47).
El mensaje Jesús sobre el arrepentimiento para salvación es el
mismo que proclamamos los creyentes que no han perdido el centro
del mensaje del evangelio (Hebreos 9:22). El propósito de
Jesucristo al venir a la tierra fue que las personas se arrepintieran
de sus pecados para que nadie perezca (2 Pedro 3:9).
La realidad es que en muchas iglesias en la actualidad se han
dejado influenciar mucho por las corrientes del mundo y la
disolución del verdadero evangelio de Jesucristo (Marcos 16:15).
Le han restado importancia al pecado, y por consecuencia al
arrepentimiento para ser salvos por gracia. Escrito está que, si
alguno pervierte el evangelio de Cristo o predica de otro evangelio
diferente, sea anatema (Gálatas 1:6-9).
El mundo de hoy predica un evangelio de salvación diferente
Un evangelio donde el centro está sólo en el “amor” para ganar
simpatizantes. Y no está enfocado en el pecado y en el
arrepentimiento. Por lo tanto, los creyentes viven una doble. Una
vida acomodando sus deseos carnales a los mandatos de Dios.
No hay una verdadera urgencia como la tenía Juan el Bautista para
que las almas no se perdieran (en el infierno) más tuvieran vida
eterna.
Por la misericordia de Dios, nos ha dado un hermoso regalo a cada
persona que cree en Él, se arrepiente de sus pecados y lo recibe en
su corazón, y éste es el regalo de la Salvación (Salmos 13:5) para
convertirnos en Hijos de Dios con la esperanza que moraremos en
la eternidad con Él en el cielo.
¿Qué ofrece la salvación?
El plan eterno de Dios es que compartiremos el destino de Cristo
(Romanos 8:33, Romanos 8:29, Mateo 22:14, 1 Tesalonicenses
5:24).
 Somos reconciliados por Dios y con Dios (2 Corintios 5:18).
 Redimidos (comprados con su sangre que derramó en la cruz)
(Romanos 3:24).
 La condenación fue quitada (Juan 3:18).
 Vivimos bajo la gracia (Romanos 3:24-26).
  Nos hizo la herencia de Dios (Efesios 1:18)
Y podemos enumerar muchas más promesas de parte de Dios para
los que creen en su Hijo Jesucristo. Ahora pensamos ¿qué tiene
más valor en este mundo? Las baratijas que ofrece Satanás a
cambio del fuego eterno, o todas las promesas eternas en la
presencia de Dios donde habrá gozo y alegría (Isaías 51:11).
El arrepentimiento para la salvación
Con el arrepentimiento Dios nos da la salvación por gracia. Por
la Fe en el corazón del cristiano, se produce un nuevo nacimiento.
Somos justificados y adoptados como Hijos de Dios y somos
llamados para la santificación.
La salvación es el regalo más valioso que toda criatura puede
recibir. Si así lo decide, y la persona que decide recibirlo por fe en
Jesucristo, es la mejor decisión que tomará para toda su eternidad.
Y esto está en un fundamento seguro el cual es Jesucristo (1
Corintios 3:11) porque somos escogidos para ser trasladados al
reino de Dios (Colosenses 1:13 a 2:15). Y nada ni nadie nos
arrebatará de la mano de nuestro Padre celestial porque
escuchamos Su voz, nos conoce y le seguimos (Juan 10:27-30).
El regalo de la Salvación nos hizo verdaderamente libres (Juan
8:31-32).