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Secuelas emocionales en jóvenes debido al COVID 19

Torres Aguilar Leonardo

Palabras clave: Covid-19, enfermedad, secuelas emocionales, estrés postraumático,


ansiedad.
Resumen:
El motivo de este documento es investigar cómo se presentan las secuelas emocionales
en los jóvenes debido a la pandemia del COVID 19 (Covid-19, Coronavirus) y como estas
afectan su salud mental, así como las causas de estas y que eventos, tanto de la
pandemia, como de las etapas de la vida en la que se encuentren estos jóvenes, hacen
que estas secuelas emocionales y los daños generados durante la pandemia, tengan sus
raíces en estos problemas y se agraven con el tiempo. Se recopilará información de
distintos artículos sobre estas problemáticas, abordando como afecta la pandemia a las
personas, especialmente a los jóvenes y que secuelas deja la pandemia, desde el
confinamiento, hasta la superación de la enfermedad y de la pandemia mismo.

Introducción:

El COVID 19 es una enfermedad respiratoria muy infecciosa causada por un


virus respiratorio agudo que genera síntomas similares a la gripe que ha ocasionado
varios cambios, ya sea en la economía, o la salud física y mental. Siendo esta última
en la que se centrará este artículo; El término cuarentena hace referencia a la
separación y restricción de movimiento de personas que han sido expuestas a
enfermedades contagiosas, o que se encuentran en riesgo de contagio, para de esta
forma reducir el riesgo de transmisión de una enfermedad. Mientras que el aislamiento
social depende, en muchos casos, de la voluntariedad de las personas, el
establecimiento de cuarentena es de estricto cumplimiento.

Los documentos que se analizaron también señalan que la población general al


curarse de la enfermedad COVID 19 suele presentar varios tipos de secuelas, cuando
abarcamos en el campo de lo psicológico, vemos que estas pueden ser la ansiedad y
la depresión, e incluso algunos jóvenes desarrollan fobias, o TOC (trastorno obsesivo
compulsivo), que van desde mantener la limpieza o seguir los lineamientos
estrictamente para evitar re-contagio.

De igual manera, a lo largo del documento se hablará más detalladamente de


todas estas cuestiones, incluyendo posibles maneras de sobrellevar las secuelas
emocionales ocasionadas por el COVID 19, así como cuáles son los factores de
riesgo más comunes, que pueden provocar o enmarcar la sintomatología del joven
que se encuentra afectado.
Desarrollo:

Se recopilaron datos sobre distintas partes que forman parte del fenómeno actual de la
pandemia del COVID 19, así como los efectos que esta tiene en las personas en secuelas
emocionales y que partes de esta pueden afectar de manera directa o indirecta.
También vemos cómo es que otros fenómenos similares (como la pandemia de la AH1N1)
también afectó a las personas que vivieron este evento. La pandemia tuvo su primer
impulso en diciembre de 2019 en la provincia de Wuhan, China, extendiéndose de
manera rápida afectando a miles de personas en la ciudad, en china y finalmente en el
mundo. Esta pandemia ha desafiado en muchos sentidos a la salud pública y sus
organizaciones, lo que dificulto mucho el tratamiento de esta en sus inicios.
En esta crisis que se desato por la pandemia, el estrés postraumático aumento de manera
impresionante, como uno de los costes del confinamiento. Este tipo de reacción no solo
surge por inconvenientes que arrastran ya hace tiempo, sino inconvenientes que
despiertan ahora, a lo largo del aislamiento. Haciendo que debamos generar mayor
resistencia y soportar estos eventos difíciles, en especial en los jóvenes en el ámbito
psicológico. El estrés postraumático en sí es como si el evento no se quedará atrás y
sintiéramos que lo tuviéramos que encarar constantemente, lo que ocasiona a nuestra
mente el querer huir de este trauma. La juventud ya poseía ya marcas de crisis anteriores
como la crisis financiera y sanitaria del 2008, relacionada con la pandemia de la AH1N1
que generaron retos nuevos en los ámbitos de la enseñanza, la visión gremial y la salud
psicológica (Reyes, J. 2020). Esto es lo que han hecho creer algunos expertos que esta
generación se trataría de una generación perdida. Aun así, debemos tomar en cuenta,
que, aunque este tema parezca nuevo, muchas generaciones anteriores han sufrido de
otras pérdidas de similar calibre por lo que no podemos estar seguros de estas
acusaciones.
Se estima que, en materia educativa, gremial y de salud psicológica, hay o habrá
secuelas bastante serias y males más severos para chicos y adolescentes, pues además
los adultos se ven dañados, empero en el tamaño en que éstos han culminado de
terminar tanto su formación educativa como su madurez emocional, los males tienen la
posibilidad de ser menos severos para ellos.
Como temas de interés es como la pandemia afectó a los jóvenes de maneras distintas,
estos solían presentar más síntomas de ansiedad, depresión y trastornos somáticos,
pierden interés o placer al realizar actividades y estos se sienten decaídos, deprimidos y
sin esperanzas. La tensión, el nerviosismo y la angustia también aumentaron haciendo
que las personas no puedan controlar sus preocupaciones, está siendo aún mayor a
como era antes de la pandemia. Sin embargo, son los más jóvenes los que presentaron
mayor ansiedad, depresión y síntomas somáticos, mientras que los mayores se muestran
en mayor control de sus emociones.
Aumentado los efectos de esta pandemia vimos cómo es que la mayoría de los jóvenes
sintieron un grave aumento en su soledad y que les faltaba compañía. Lo peor es cuando
esta soledad incrementaba por discriminación por seres queridos, amigos, colaboradores
o vecinos por los mismos efectos de la pandemia o por haber contagiado la enfermedad.
Aunque una forma en la que se controlaron estos efectos es cuando estos jóvenes
hablaron sobre sus problemas y se sentían apoyados por sus círculos sociales. La
pandemia afectó a los jóvenes de maneras distintas, estos suelen presentar más
síntomas de ansiedad, depresión y trastornos somáticos, pierden interés o placer al
realizar actividades y estos se sienten decaídos, deprimidos y sin esperanzas. La tensión,
el nerviosismo y la angustia fueron síntomas frecuentes en los adolescentes afectados
con Covid-19, a continuación, se mostrará un listado de los efectos psicológicos de las
secuelas por covid-19.
1. Adolescente en la cama con problemas de sueño por efectos psicológicos
del covid-19
2. Desmotivación, aburrimiento, pérdida de interés en actividades que antes
disfrutaba.
3. Cambios de humor, depresión, irritabilidad, enfado/ira.
4. Conflictos frecuentes con amigos y familiares.
5. Crisis de angustia o ansiedad.
6. Incertidumbre, desesperanza y baja confianza.
7. Alejamiento de relaciones personales (poco interés en contactar con amigos
por chat u otros medios).
8. Cambio de patrones alimentarios y de sueño.
9. Problemas de memoria, razonamiento o concentración.
10. Despreocupación por la apariencia y la higiene básica.
11. Aumento de comportamientos de riesgo (consumo de drogas o alcohol,
adicción a videojuegos, etc.).
12. Pensamientos sobre la muerte o el suicidio.
13. Estrés postraumático en caso de pérdida de alguna persona significativa.
El COVID 19 causó muchos diferentes tipos de secuelas emocionales psicológicas que
se presentan de distintas maneras, y estas varían según su edad, sexo, nivel educativo,
estructura familiar, incluso condición física, mental y resiliencia. El aislamiento físico
también es un factor desencadenante que tenían predisposición a enfermedades
psíquicas como: depresión, ansiedad y manifestaciones obsesivas.
El aislamiento también afectó estas secuelas emocionales que se generaron por la
pandemia teniendo un costo grande en la salud mental. Varios efectos negativos se
dieron por esta, tales como depresión, estrés, apatía, irritabilidad, insomnio y agotamiento
emocional. Los jóvenes también tendieron a tener mayores niveles de estrés, irritabilidad,
humor bajo y sentimientos de miedo, tristeza y culpa. Algo preocupante, debido a que
muchos jóvenes no cuidan su salud mental y presentan problemas como desempleo,
problemas de salud y psicológicos previos, todo esto empeora con la pandemia y la
enfermedad.
Los documentos también señalan que la población general al curarse de la enfermedad
COVID 19 suele presentar varios tipos de secuelas, cuando abarcamos en el campo de
lo psicológico, vemos que estas pueden ser la ansiedad y la depresión. Con ansiedad
empiezan a sentir una gran inquietud y temor con respecto a su situación, temen a quien
pudiera contagiar a alguien cercano y generan algo de temor a sitios muy concurridos o
gente que no toma las precauciones necesarias, estas personas no quieren volver a
enfermarse por los riesgos que se corren en estas situaciones. Por su parte también
pueden sentirse deprimidos por esta situación se sienten tristes y que perdieron el tiempo
con estos, se sienten mal por no haberse cuidado mejor y se sienten abatidos por los
efectos físicos de esta enfermedad.
La sintomatología ansiosa somática es y fue muy común en estos casos, que pueden
generar cuadros depresivos y desórdenes de ansiedad, cerca de un 24% de los
evaluados por DE HABER, R. D. I. P. (2021). Presentaron una ansiedad severa y estos
suelen ser mayormente de un sector socioeconómico bajo. Aunque la mayoría de estos
(el 28.30%) solo presentaron una ansiedad mínima, presentando fiebre, falta de aire y
poca actividad física, más generada por la ansiedad que por la misma enfermedad. Este
mismo estudio de DE HABER, R. D. I. P. (2021). Presentan sintomatología depresiva
compatible con una depresión clínica, aunque esta suele ser más moderada en la
mayoría de los afectados, pero suele ser más severa, otra vez relacionado con su nivel
socioeconómico auto percibido como bajo.
Las emociones que más se presentaron, fueron la frustración, desesperación, miedo,
angustia, tristeza, estrés, incertidumbre e incluso confusión por no conocer más a detalle
los de la tal enfermedad al comienzo de esta, y la mejor manera de confrontar la situación
si es que en algún momento se llega a tener algún familiar con esta enfermedad. Pero no
hay que olvidar que la salud física va de la mano con la salud mental es por eso que
también se debe cuidar la manera de alimentación puesto que en ocasiones el encierro
o aislamiento en el que se debe estar en esta situación puede llegar a generar ansiedad
en las personas y esto puede provocar que encuentre una escapatoria en la comida, por
otro lado también está la manera en la que realizamos ejercicio sin salir de casa puesto
que es un factor importante para tener una buena condición física.
Conclusión:
Las secuelas emocionales que dejo la pandemia y la enfermedad en las personas debido
al COVID19, deben ser estudiadas e investigadas, ya que los efectos que esta pandemia,
recién acabada siguen haciendo estragos en la actualidad. Aunque las medidas de
prevención han bajado y los contagios hayan disminuido, es importante recordar que los
daños que esta situación dejo, en especial en la juventud son importantes y moldearan
la historia de esta generación de aquí en adelante. Como psicólogos, es nuestro deber
estudiar estos efectos en la juventud, ya que al no haber sido podido ser tratados de
manera adecuada en su momento, los efectos de esta situación global que tiene sobre
su comportamiento, mente y emociones, son de vital importancia de ser estudiados y
tratados para poder trabajar sobre los efectos psicológicos y emocionales que esta
situación tan compleja les allá dejado.
Aunque las alertas en la actualidad sean bajas, es nuestro deber entender estas secuelas
para poder trabajarlas y estudiarlas, el tema es reciente y aun hay mucho trabajo por
realizar e investigar, por lo que ignorar estas cuestiones porque ya paso son un gran
riesgo para la salud mental de la población general. Los jóvenes particularmente se
encuentran en una situación muy particular, debido a que su desarrollo hacia la vida
adulta y sus procesos educativos se vieron modificados por estos, generando distintas
secuelas como ya las mencionadas, que afectaron en su vida personal, educativa, social
y laboral.
El atender y entender estas secuelas es un trabajo que apenas hemos empezado y
revisando los documentos ya elaborados se nos da una oportunidad de cada vez más
entender esta situación y como poder trabajar sobre estas dificultades de manera
adecuada.
Referencias:
• Reyes, J. (2020). Covid-19, la segunda gran crisis mundial para jóvenes de 15 a
24 años. Secuelas postraumáticas COVID [Covid-19, la segunda gran crisis
mundial para jóvenes de 15 a 24 años. Secuelas postraumáticas COVID
• ]. https://cadenaser.com/ser/2020/08/22/sociedad/1598099740_988884.html
• El estrés postraumático en la crisis por la pandemia del coronavirus [El estrés
postraumático en la crisis por la pandemia del coronavirus]. Terapéutica En Alza:
• DE HABER, R. D. I. P. (2021). Secuelas psicológicas en personas que tuvieron
Covid-19 [Universidad de Buenos Aires].
http://www.psi.uba.ar/opsa/informes/secuelas_psicologicas_en_personas_q_tuvi
eron_covid_19.pdf
• Broche-Pérez, Y., Fernández-Castillo, E., & Reyes Luzardo, D. A. (2021).
Consecuencias psicológicas de la cuarentena y el aislamiento social durante la
pandemia de COVID-19. Revista Cubana de Salud Pública, 46, e2488.

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