Universidad Autónoma de San Luis Potosí.

Facultad de Psicología

Proyecto de investigación

Leonardo Torres Aguilar

Fernanda Palacios

Sustaita

Alondra Anahí Carrillo Arredondo.

Secuelas emocionales en jóvenes debido a la pandemia SARS COV-2

 Resumen:

El motivo de este documento es investigar como se presentan las secuelas

emocionales en los jóvenes debido a la pandemia del SARS COV-2 (Covid-19, Coronavirus)
y como estas afectan su salud mental, así como las causas de estas y que eventos, tanto de la
pandemia, como de las etapas de la vida en la que se encuentren estos jóvenes, hacen que
estas secuelas emocionales y los daños generados durante la pandemia, tengan sus raíces en
estos problemas y se agraven con el tiempo. Se recopilará información de distintos artículos
sobre estas problemáticas, abordando como afecta la pandemia a las personas, especialmente
a los jóvenes y que secuelas deja la pandemia, desde el confinamiento, hasta la superación de
la enfermedad y de la pandemia misma.

Se demostró que los jóvenes, pese a no ser parte de un grupo principalmente

vulnerable durante la pandemia, en cuestión de contagios o de correr riesgos por contraer la
enfermedad, estos son los que mas graves terminan siendo afectados a un nivel psicologico.
Los jóvenes debido a la pandemia, al confinamiento y a la enfermedad, han presentado un
mayor numero de secuelas emocionales y psicológicas, como ansiedad, estrés, tristeza,
depresión, miedo, culpa y apatía, así como desordenes del sueño, irritabilidad y fatiga,

Estos síntomas empeoran cuando entendemos que los jóvenes tampoco prestan mucha
atención a su salud mental y pueden tener otros problemas, tales como el abandono de sus
familiares, amigos o parejas, el desempleo, la discriminación por sus círculos cercanos y
problemas identitarios o de relacionamiento generados por el aislamiento impuesto por la
pandemia. Y si añadimos a estas situaciones el que la escuela imparte las clases en línea y
regularmente los profesores están dejando una carga mayor de tarea a la que acostumbraban a
dejar en clases presenciales. Estas son las causas más regulares para que se presenten las
secuelas emocionales y algunas se pueden notar en las conductas de las personas además de
que se tienen algunos síntomas físicos que se hacen presentes. Son muchas las formas en la
que la salud mental de los jóvenes se ven afectadas por esta pandemia.
 Introducción:

Actualmente vivimos una realidad que solo imaginamos, que creíamos poco probable
o en un futuro muy lejano; hoy vivimos una pandemia mundial ocasionada por el virus
SARS COV-2, o coloquialmente conocido como COVID-19. Este virus, esta enfermedad ha
ocasionado diferentes situaciones, ya sea en la economía, o la salud física y mental. Siendo
esta última en la que se centrará este artículo; pero primero hay que tomar en cuenta algunas
definiciones, que serán importante a lo largo de esta investigación hecha.

El término cuarentena hace referencia a la separación y restricción de movimiento de

personas que han sido expuestas a enfermedades contagiosas, o que se encuentran en riesgo
de contagio, para de esta forma reducir el riesgo de transmisión de una enfermedad.
Mientras que el aislamiento social depende, en muchos casos, de la voluntariedad de las
personas, el establecimiento de cuarentena es de estricto cumplimiento.

Y de acuerdo con la Real Academia Española, una secuela es un trastorno o lesión

que queda tras la curación de una enfermedad o un traumatismo, y que es consecuencia de
ellos. (Asale, s. f.). Visto desde la psicología las secuelas emocionales presentan
sintomatologías y malestares.

Además de enfocar la investigación a este hecho actual, se realizó una breve

investigación sobre secuelas emocionales en enfermedades respiratorias, con el fin de
comparar, si las secuelas son similares y como se dio seguimiento o tratamiento a los jóvenes
que padecen las secuelas emocionales de enfermedades respiratorias.

Los documentos que analizamos también señalan que la población general al curarse
de la enfermedad SARS-COV 2 suele presentar varios tipos de secuelas, cuando abarcamos
en el campo de lo psicológico, vemos que estas pueden ser la ansiedad y la depresión, e
incluso algunos jóvenes desarrollan fobias, o TOCs (trastorno obsesivo compulsivo), que van
desde mantener la limpieza o seguir los lineamientos estrictamente para evitar re-contagio.

De igual manera, a lo largo del documento (investigación) se hablará más

detalladamente de todas estas cuestiones, incluyendo posibles maneras de sobrellevar las
secuelas emocionales ocasionadas por el SARS COV-2, así como cuáles son los factores de
riesgo más comunes, que pueden provocar o enmarcar la sintomatología del joven que se
encuentra afectado.

Planteamiento del problema:

Debido al brote del virus SARS-COV-2 que ocasiona la enfermedad conocida como
COVID-19, o conocida popularmente como coronavirus. A ocasionando diferentes
situaciones tales como la pandemia mundial, decesos, problemas financieros, así como
problemas físicos y psicológicos. Esta pandemia afecta a todos los miembros de la
sociedad, siendo el objeto de enfoque en esta investigación los jóvenes, ya que a pesar de
que estos no corran la misma cantidad de riesgos para ser contagiados por el Covid-19, a
diferencia de otros sectores de la población que se encuentra en mayor posibilidad de riesgo
ante esta enfermedad.

Durante el año que ha durado la pandemia ocasionada por SARS-COV-2, se han

realizado diferentes estudios sobre cómo esta enfermedad ha afectado a los jóvenes, estos
estudios van desde secuelas físicas y psicológicas.
Los jóvenes que han padecido SARS-COV-2, se han tenido que adaptar a estas
secuelas, teniendo que sobrellevarlas en una rutina diaria, incluso distinta, que hoy
vivimos con la pandemia
Con respecto a la situación actual, se trata de una situación global sin precedentes, ya
que en el mundo moderno y contemporáneo algunas situaciones no alcanzaron las mismas
escalas de espacio y tiempo que la pandemia actual ha tenido a un nivel global. Aun así, los
jóvenes han tenido que lidiar con las secuelas postraumáticas de enfermedades de similar
calibre y podemos observar en esas secuelas y actitudes las formas en las que los jóvenes
pueden encarar estas circunstancias y que tipo de ayuda es la que estos requieren para su
tratamiento psicológico después de estos eventos que afectan su vida a la hora de que se han
podido salir de estos. La diferencia a la que se presentan con el virus del SARS-COV-2 es el
alcance que esta tiene, el estigma que puede creer el contagio y el hecho de que la cuarentena
no permite el contacto con sus pares por lo que el apoyo emocional físico no es posible y se
resumiría en un apoyo desde la virtualidad. La gravedad del coronavirus depende de cómo
este es tratado y de la salud previa del individuo, por lo que sus secuelas pueden variar.
 El estado actual de la situación sigue siendo incierto, la vacunación hasta el momento
no ha alcanzado a todos los estratos de la sociedad y se prevé que los jóvenes sean de los
últimos en vacunarse, por lo que ellos se van a tener que seguir enfrentando a estas
situaciones a pesar de no ser población en riesgo, por lo que la adaptación y creación de
formas de atención a este tipo de pacientes es importante ya que es una situación que seguirá
estando presente por algún tiempo y se requiere encontrar una solución a esta, ya que el
enfrentar las secuelas de una enfermedad de este calibre e infamia es a esta edad donde
muchos factores se definen y tienen gran peso es importante para que el impacto sea lo
menos negativo posible y también sirve para resolver situaciones similares en algún futuro
con alguna situación similar.

Objetivos

Objetivo General:

 Examinar las secuelas emocionales de los jóvenes ante la enfermedad

del COVID 19 y la pandemia ocurrida por este.

Objetivos específicos:

 Investigar maneras de tratar las secuelas emocionales ocasionadas por el virus

SARS-COV-2
 Buscar similitudes entre las actitudes y secuelas después de padecer
la enfermedad del SARS-COV-2 y otras enfermedades similares.
 Encontrar actitudes y secuelas emocionales similares entre los jóvenes
que padecieron dicha enfermedad.
 Destacar la importancia del tratamiento de estas secuelas emocionales.
 Comparar las reacciones y actitudes de estas secuelas entre distintos jóvenes
 Justificación:

El presente trabajo de investigación se realiza con el fin de conocer cómo se vieron

afectados psicológicamente los jóvenes que padecieron covid-19 (SARS-COV-2) o conocido
comúnmente como coronavirus, la investigación se realizará a través de investigación
documentada, para evitar re-exponer a los jóvenes y a los investigadores.

La investigación de igual manera se hará con el fin de conocer cómo es la

actuación de los jóvenes frente a esta enfermedad y comparar cuáles fueron las actuaciones
de los jóvenes y los especialistas de la salud, tanto mental como física, ante enfermedades
graves respiratorias.

Al obtener estos resultados se espera conocer de manera más específica como se

vieron afectados estos jóvenes y cuáles son las secuelas emocionales, así como su manera de
sobrellevarlas durante la pandemia mundial ocasionada por el SARS-COV-2, para que de
esta manera los psicólogos tengan mayor conocimiento de las afectaciones emocionales de
los jóvenes y se creen maneras de intervención psicológica que sean más adecuadas a las
secuelas emocionales y afectaciones en la vida diaria de los jóvenes que padecieron covid-19
(SARS-COV-2).

Limitaciones:

La primera limitaciones a la que nos enfrentamos es a la no aplicación de encuestas

presenciales a causa de la actual pandemia que se ha presentado en todo el mundo, por lo
cual ha sido necesario recurrir a otras herramientas, como programas en línea, que como se
ha mencionado anteriormente esto será lo que facilite la recopilación de la información para
la investigación, puesto que la tecnología ha sido de gran ayuda en este tiempo, en donde la
mayoría de las situaciones se realizaban de manera presencialmente. De igual manera se tuvo
que basar la investigación en artículos obtenidos de internet y algunos datos que se
mencionan en las noticias y los reportes de la situación ocasionada por el SARS COV-2. A
pesar de que se considera que los jóvenes son los que menos posibilidad de contraer esta
enfermedad, se han presentado casos, que se llegan a mencionar, pero regularmente no
profundizan en dar información acerca de estas situaciones si no que se dan datos y
sugerencias en general.

Debido las noticias y las cifras proporcionadas se llegan a generar ciertas situaciones
de ansiedad, ya sea por el tiempo en el que ha estado encerrado sin poder realizar sus
actividades cotidianas, o por el miedo de contagiarse, o contagiar a sus seres queridos lo que
puede llegar a generar cierto rechazo a contestar las encuestas relacionadas al SARS COv-2,
ya que es un tema del cual se habla particularmente en estos tiempos y puede llegar a ser
tedioso.
 Marco teórico:

Se recopilaron datos sobre distintas partes que forman parte del fenómeno actual
de la pandemia del SARS COV-2, así como los efectos que esta tiene en las personas en
secuelas emocionales y que partes de esta pueden afectar de manera directa o indirecta.
También vemos cómo es que otros fenómenos similares (como la pandemia de la AH1N1)
también afectó a las personas que vivieron este evento.

La pandemia tuvo su primer impulso en diciembre de 2019 en la provincia de

Wuhan, China, extendiéndose de manera rápida afectando a miles de personas en la ciudad,
en china y finalmente en el mundo. Esta pandemia ha desafiado en muchos sentidos a la
salud pública y sus organizaciones, lo que dificulto mucho el tratamiento de esta en sus
inicios.

La pandemia que se vive en la actualidad es un evento histórico que no se había visto

en varios años recientes. nos abre la puerta a oportunidades a cambios inminentes e
imparables, esto es una actitud normal que se da después de estos fenómenos históricos,
varios expertos creen que esta puede ayudarnos a reorganizar la sociedad de una manera más
saludable, pero, por otra parte, esta pandemia afecta de manera más fuerte la salud mental de
las personas, aumentando los niveles de estrés en estas debido a las experiencias vividas
durante el confinamiento. El estrés es una problemática pública muy importante y se puede
presentar en cualquier individuo. El estrés siempre aumenta después de las pandemias,
incluyendo otros trastornos, como la ansiedad, la depresión, el estrés postraumático y el
aumento en violencia doméstica. El riesgo a la exposición de estas situaciones aumenta la
tensión e incertidumbre de las personas aumentado el estrés a largo plazo

En esta crisis que se ha desatado por la pandemia, el estrés postraumático ha

aumentado de manera impresionante y se espera que prosiga después de esta pandemia,
como uno de los costes del confinamiento. Este tipo de reacción no solo surge por
inconvenientes que arrastran ya hace tiempo, sino inconvenientes que despiertan ahora, a lo
largo del aislamiento. Haciendo que debamos generar mayor resistencia y soportar estos
eventos difíciles, en especial en los jóvenes en el ámbito psicológico. El estrés postraumático
en sí es como si el evento no se quedará atrás y sintiéramos que lo tuviéramos que encarar
constantemente, lo que ocasiona a nuestra mente el querer huir de este trauma. Los jóvenes
en la actualidad poseen ya marcas de crisis anteriores como la crisis financiera y sanitaria del
2008, relacionada con la pandemia de la AH1N1 que generaron retos nuevos en los ámbitos
de la enseñanza, la visión gremial y la salud psicológica. Esto es lo que han hecho creer
algunos expertos que esta generación se trataría de una generación perdida. Aun así,
debemos tomar en cuenta, que, aunque este tema parezca nuevo, muchas generaciones
anteriores han sufrido de otras pérdidas de similar calibre por lo que no podemos estar
seguros de estas acusaciones.

Se estima que, en materia educativa, gremial y de salud psicológica, hay o habrá

secuelas bastante serias y males más severos para chicos y adolescentes, pues además los
adultos se ven dañados, empero en el tamaño en que éstos han culminado de terminar tanto
su formación educativa como su madurez emocional, los males tienen la posibilidad de ser
menos severos para ellos.

Como uno de nuestros temas de interés es como la pandemia afecta a los jóvenes de
maneras distintas, estos suelen presentar más síntomas de ansiedad, depresión y trastornos
somáticos, pierden interés o placer al realizar actividades y estos se sienten decaídos,
deprimidos y sin esperanzas. La tensión, el nerviosismo y la angustia también aumenta
haciendo que las personas no puedan controlar sus preocupaciones, está siendo aún mayor a
como era antes de la pandemia. Sin embargo, son los más jóvenes los que presentan mayor
ansiedad, depresión y síntomas somáticos, mientras que los mayores se muestran en mayor
control de sus emociones.

Aumentado los efectos de esta pandemia vemos cómo es que la mayoría de los
jóvenes sienten un grave aumento en su soledad y que les falta compañía. Lo peor es cuando
esta soledad se siente incrementada por discriminación por seres queridos, amigos,
colaboradores o vecinos por los mismos efectos de la pandemia o por haber contagiado la
enfermedad. Aunque una forma en la que se controlan estos efectos es cuando estos jóvenes
hablan sobre sus problemas y se sienten apoyados por sus círculos sociales.

La pandemia afecta a los jóvenes de maneras distintas, estos suelen presentar más
síntomas de ansiedad, depresión y trastornos somáticos, pierden interés o placer al realizar
actividades y estos se sienten decaídos, deprimidos y sin esperanzas. La tensión, el
nerviosismo y la angustia

1. Adolescente en la cama con problemas de sueño por efectos psicológicos del covid-19

2. Desmotivación, aburrimiento, pérdida de interés en actividades que antes disfrutaba.

3. Cambios de humor, depresión, irritabilidad, enfado/ira.

4. Conflictos frecuentes con amigos y familiares.

5. Crisis de angustia o ansiedad.

6. Incertidumbre, desesperanza y baja confianza.

7. Alejamiento de relaciones personales (poco interés en contactar con amigos por chat
u otros medios).

8. Cambio de patrones alimentarios y de sueño.

9. Problemas de memoria, razonamiento o concentración.

10. Despreocupación por la apariencia y la higiene básica.

11. Aumento de comportamientos de riesgo (consumo de drogas o alcohol, adicción

a videojuegos, etc.).

12. Pensamientos sobre la muerte o el suicidio.

13. Estrés postraumático en caso de pérdida de alguna persona significativa.

El COVID 19 causa muchos diferentes tipos de secuelas emocionales psicológicas

que se presentan de distintas maneras, y estas varían según su edad, sexo, nivel educativo,
estructura familiar, incluso condición física, mental y resiliencia. El aislamiento físico
también es un factor desencadenante que tenían predisposición a enfermedades psíquicas
como: depresión, ansiedad y manifestaciones obsesivas.
 El aislamiento también afecta estas secuelas emocionales que se generan por la
pandemia teniendo un costo grande en la salud mental. Varios efectos negativos se dan por
esta, tales como depresión, estrés, apatía, irritabilidad, insomnio y agotamiento emocional.
Los jóvenes también tienden a tener mayores niveles de estrés, irritabilidad, humor bajo y
sentimientos de miedo, tristeza y culpa. Algo preocupante, debido a que muchos jóvenes no
cuidan su salud mental y presentan problemas como desempleo, problemas de salud y
psicológicos previos, todo esto empeora con la pandemia y la enfermedad.

Los documentos que analizamos también señalan que la población general al curarse
de la enfermedad SARS-COV 2 suele presentar varios tipos de secuelas, cuando abarcamos
en el campo de lo psicológico, vemos que estas pueden ser la ansiedad y la depresión. Con
ansiedad empiezan a sentir una gran inquietud y temor con respecto a su situación, temen a
quien pudiera contagiar a alguien cercano y generan algo de temor a sitios muy concurridos o
gente que no toma las precauciones necesarias, estas personas no quieren volver a enfermarse
por los riesgos que se corren en estas situaciones. Por su parte también pueden sentirse
deprimidos por esta situación se sienten tristes y que perdieron el tiempo con estos, se sienten
mal por no haberse cuidado mejor y se sienten abatidos por los efectos físicos de esta
enfermedad.

Si la sintomatología ansiosa somática es muy común en estos casos, que pueden

generar cuadros depresivos y desórdenes de ansiedad, cerca de un 24% de los evaluados por
DE HABER, R. D. I. P. (2021). Presentan una ansiedad severa y estos suelen ser
mayormente de un sector socioeconómico bajo. Aunque la mayoría de estos (el 28.30%) solo
presenta una ansiedad mínima, presentando fiebre, falta de aire y poca actividad física, más
generada por la ansiedad que por la misma enfermedad. Este mismo estudio de DE HABER,
R. D. I. P. (2021). Presentan sintomatología depresiva compatible con una depresión clínica,
aunque esta suele ser más moderada en la mayoría de los afectados, pero suele ser más
severa, otra vez relacionado con su nivel socioeconómico auto percibido como bajo.

Las secuelas emocionales que se han presentado durante este tiempo de pandemia han
significado un gran reto para los psicólogos ya que la manera en la que se debe tratar han
cambiado ya que este proceso no se puede realizar presencialmente dificultando así la
interacción entre paciente y terapeuta, además que debemos de comentar el que algunas
personas no consideran que los psicólogos o la psicología en sí, sean de ayuda para afrontar
distintas situación por lo cual le restan importancia a esta rama de la salud.
 Tales secuelas causadas por esta pandemia dependerán de distintos factores como
puede ser el cómo este estructurada su familia, su edad, las creencias que tenga, el nivel
educativo en el que se encuentra o hasta el cual estudio, del sexo, entre otros factores, esto
lo menciona la doctora Gabriela Gómora la cual es la jefa de sede y psicoterapeuta del
Programa Espacio de Orientación y Atención Psicológica (Espora) en el Instituto de
Fisiología celular de la UNAM.

Las emociones que más se han presentado durante este tiempo de contingencia, han
sido la frustración, desesperación, miedo, angustia, tristeza, estrés, incertidumbre e incluso
confusión por no conocer más a detalle los de la tal enfermedad al comienzo de esta, y la
mejor manera de confrontar la situación si es que en algún momento se llega a tener algún
familiar con esta enfermedad. Pero no hay que olvidar que la salud física va de la mano con
la salud mental es por eso que también se debe cuidar la manera de alimentación puesto que
en ocasiones el encierro o aislamiento en el que se debe estar en esta situación puede llegar a
generar ansiedad en las personas y esto puede provocar que encuentre una escapatoria en la
comida, por otro lado también está la manera en la que realizamos ejercicio sin salir de casa
puesto que es un factor importante para tener una buena condición física.

Análisis de resultados:

De acuerdo con los anteriores artículos se logró observar que los jóvenes son más
propensos a contagiarse de SARS COV-2, dejándoles secuelas emocionales, tales como
depresión, ansiedad o desarrollando misofobia (miedo a los gérmenes), aunque en algunos
casos se demostró que las secuelas emocionales pueden no aparecer o su aparición es tardía e
incluso acompañada con más de una secuela. Entre los factores que amenazan la salud
mental de la población en general destacan: fatiga por compasión, angustia moral, estrés
postraumático a los que se une el nivel de exigencia al que se han visto expuestos muchos
sanitarios al tener que asumir roles que nunca habían desempeñado.

Algo que también cabe rescatar y resaltar es que son los jóvenes (de 18 a 30 años) los
que presentan mayores síntomas somáticos, así como ansiedad y depresión, a diferencia de
los mayores, que parecen controlar sus emociones de mejores maneras. Esto es de principal
interés para nuestro caso ya que, a pesar de que los jóvenes no son los que corren más riesgo
a diferencia de otros grupos, si son los que se ven más afectados a un nivel psicológico.

Entre los posibles factores de riesgo a tener secuelas emocionales más profundas, se
encontró que encontrarse en situación de desempleo, presentar problemas de salud mental o
psicológicos previos, tener enfermedades pulmonares o cardiovasculares previas, presentar
un diagnóstico o síntomas de COVID-19 o familiares diagnosticados, todo esto empeora la
salud mental de individuo.

La depresión y la ansiedad son secuelas usuales en estos casos, caracterizados por

sentimientos de temor y tristeza que siguen después de superar esta enfermedad, vemos
incluso que hay una correlación entre su estado anímico y su nivel socioeconómico, siendo
los que se perciben como “nivel bajo” los más afectados por estas secuelas. Sin embargo, la
mayoría de estas personas afectadas por estas secuelas, suelen tenerlas de maneras más leves
y moderadas, y siendo más graves, otra vez, debido a su estatus socioeconómico. Aun así, son
problemáticas de las que debemos estar conscientes de estas secuelas puesto que también
afectan a la hora de la reinserción de las personas en su vida cotidiana en la pandemia y cómo
pueden afrontar esta realidad que ahora viven.

El estrés también es una de las secuelas más frecuentes con respecto a la pandemia ya
que es provocado por distintos factores y se muestra de distintas maneras, puesto que además
de que se puede notar en el estado de ánimo que se tiene también lo podemos identificar en
las maneras que se tienen al realizar distintas actividades y sobre todo se demuestran
físicamente como por ejemplo en los dolores de cabeza, en la falta de energía etc.… y todo
esto puede ser provocado no solo por el aislamiento que se debe de tener para no contagiarse,
sino que también afecta al sujeto de manera económica lo que puede ser un factor detonante
de este. lo cual puede afectar emocionalmente a las personas que dependen prácticamente de
su trabajo puesto que esta situación puede ocasionar además del estrés, depresión, frustración
entre otros.

De igual manera el distanciamiento físico entre las personas que se tienen afecto
podría ser un factor detonante de los problemas emocionales o hasta de las crisis que se
presenten conforme se pasa más tiempo distanciados. Entre los principales problemas que se
presenta que, por el distanciamiento, los adolescentes y los jóvenes tienen problemas en el
desarrollo de su identidad, del fortalecimiento de su autoestima y otros problemas como el
aumento de otras problemáticas como abuso de tecnología, dificultad para regular el sueño y
conflictos familiares. Tal confinamiento representa un reto muy grande para la sociedad
puesto que además de que la mayoría de esta se encuentra en confinamiento puede ser que
para las personas que tienen que trabajar es un reto aún más grande puesto que se tienen
que cuidar de no contagiarse y no contagiar a los demás, además que dependiendo en cual
sea el trabajo se presentan dificultades al momento de generar dinero, puesto que un ejemplo
muy claro son las personas que trabajan con un puesto independiente ya que las calles no se
encuentran tan pobladas como antes y eso resulta en una baja de ganancias.

El estrés postraumático que es una condición más común de lo que creemos también
se presenta como uno de los efectos que se quedan después de la pandemia actual. Se cree un
efecto común en soldados con experiencias militares, pero puede afectar a cualquiera, niños,
mujeres, víctimas de violencia sexual, comunidades en constante violencia, sobrevivientes de
desastres naturales o de accidentes fatales y víctimas de violencia policiaca. El diagnóstico
requiere de una presencia específica de síntomas en respuesta al evento traumático;
alteración en la percepción, intrusión y de pensamientos, reacciones negativas a cambios de
cognición y de temperamento. La psicoterapia es la mejor forma para darle tratamiento a
niños y adultos.

Realmente esta pandemia no solo afecta a las personas que llegan a padecerla, sino
que a todos aunque de una manera distinta y a unas personas les afecta más que a otras y a
pesar de que no se conoce totalmente la situación del mundo y podemos decir que esta
situación ha afectado a todos de manera psicológica a todos aunque a algunos se les presenta
por medio de crisis y emociones fuertes algunos muestran resistencia a creer en esta
enfermedad y rebeldía ante las opiniones de las demás y el cómo hay que cuidarse.
 Conclusión:

Desde el momento en el que se dio a conocer la enfermedad SARS COV-2 al mundo,

también se han dado a conocer las maneras en las cuales nos podemos proteger de él pero
esta situación tiene pros y contras ya que la manera más efectiva tanto para no contagiarse
como para evitar que el virus se propague a más personas es el confinamiento en el hogar lo
cual significa solo salir de la casa para lo necesario y que la mayoría de los comercios que no
sean de consumo primario estaría cerrados hasta nuevo aviso, lo cual limita los lugares a los
cuales las personas pueden acudir para distraerse lo que se puede considerar era una buena
opción para evitar que las personas desobedezcan las medidas de prevención.

Y si añadimos a estas situaciones el que la escuela imparte las clases en línea y

regularmente los profesores están dejando una carga mayor de tarea a la que acostumbraban a
dejar en clases presenciales. Estas son las causas más regulares para que se presenten las
secuelas emocionales y algunas se pueden notar en las conductas de las personas además de
que se tienen algunos síntomas físicos que se hacen presentes.

También es importante recalcar que los jóvenes son propensos a contagiarse y a

contagiar a sus familiares ya que son los que más están en las calles, entonces podemos
decir que pueden llegar a presentar síntomas de enfermedad, si hablamos de manera física.
Pero si hablamos del nivel emocional existen otros aspectos en los cuales ha influido la
pandemia como son el conjunto de emociones que se han generado a raíz de la presencia de
esta enfermedad, puesto que a causa de esta los jóvenes han tenido que cambiar
drásticamente la rutina diaria que llevaban puesto que dejaron de tener clases presenciales e
incluso por la situación económica muchas personas se quedaron sin trabajo, también si se
padece alguna enfermedad se puede tener miedo puesto que dicen que les afecta más a las
personas que padecen alguna enfermedad severa.

Dentro del conjunto de sentimientos y emociones que más se presentan están el

miedo, la desesperación, la frustración, el estrés, la depresión, la ansiedad y la tristeza, estos
se pueden presentar en distintas situaciones y el tiempo en el que estén presentes depende
mucho tanto de la situación social como la situación emocional en la que se encuentre la
persona y la manera en la que actuará también.
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