Está en la página 1de 2

Ira en Irlanda | Victoria Gutiérrez | 5º | Colegio y Liceo Vaz Ferreira

Primeramente, ¿Qué es el IRA? Es un grupo paramilitar irlandés del que su


origen remonta a 1916 cuando se produjo la insurrección de los nacionalistas
irlandeses. Su finalidad es una Irlanda completamente independiente de Reino
Unido. Entre 1919 y 1921, ante el levantamiento, el país se vio sumido en la
guerra, con el IRA enfrentándose a la policía y al ejército británico. Pese a
lograr aplastar el manifiesto, la causa irlandesa fue ganando simpatías entre el
pueblo mientras el conflicto alcanzaba notoriedad en el plano internacional.

Como se puede ver, Irlanda y Gran Bretaña han mantenido unas relaciones
difíciles por siglos. Irlanda, que nunca había sido invadida por los romanos o
los anglosajones, fue dominada por Inglaterra. La dominación inglesa comienza
mucho tiempo atrás, en el siglo XVI cuando Enrique VIII impone al país su
Reforma con el objetivo de lograr controlar Irlanda. Los irlandeses nunca lo
aceptaron y reaccionaron violentamente, lo que provocó la primera rebelión
contra la monarquía. Su hija, Elizabeth I, también trató de imponerse a los
irlandeses mediante una política colonizadora. Hasta mediados del siglo XVIII,
los irlandeses no habían recuperado nada del terreno perdido, inclusive, ya
aceptaban pacíficamente la dominación inglesa, el poder de los protestantes y
las leyes anti-católicas. Los propagandistas militares franceses le ofrecieron a
Irlanda la posibilidad de libertad republicana, éstos aceptaron dicha ayuda y se
esperaba unir las religiones de Irlanda en armas contra Inglaterra. Sin
embargo, resultó en ni más ni menos que en una lucha armada entre
protestantes y católicos. «En su lugar, dos comunidades divididas y
antagónicas -cada una con su propia cultura, lengua, lealtades políticas,
creencias religiosas e historias económicas- compartían una región », escribe
James Waller. El gobierno inglés puso fin a la Rebelión de 1798, la cual se
convirtió en una fuente de odio muy explotada por agitadores y patriota. Con la
abolición del parlamento irlandés y la incorporación de Irlanda al Reino Unido
se creó un nuevo marco político, en el que continuaron los enfrentamientos
entre católicos y protestantes.

En ese contexto, a finales del siglo XIX, nace el movimiento "Home Rule"
(autogobierno), que abogaba por más autonomía y la creación de un
parlamento irlandés dentro de Reino Unido para asuntos internos; aunque no
pedían la independencia ya que los asuntos imperiales seguirían tratándose en
Westminster, Londres. No obstante, también existían nacionalistas irlandeses,
en su mayoría católicos, que reclamaban la completa separación de Reino
Unido. En el otro lado del espectro político se encontraban los unionistas,
protestantes en su mayoría, que vivían principalmente en el noreste de Irlanda;
este grupo era leal a la corona británica y temían convertirse en minoría en una
Irlanda independiente. Con el paso del tiempo, más políticos británicos
consideraban que era correcto escuchar a Irlanda, y líderes, como el ex-primer
ministro británico William Gladstone, apoyaba la creación de un "gobierno
autónomo" e intentaron, aunque sin éxito, aprobar leyes para darle más
autonomía. Paralelamente, el pronto estallido de la Primera Guerra Mundial
había hecho que las tensiones disminuyeran; tanto los unionistas como los
nacionalistas habían tomado las armas contra los alemanes.

El 21 de enero de 1919, se declaró la independencia de Irlanda, ratificando la


Proclamación de la República Irlandesa de 1916. Sin embargo, el gobierno
británico se opuso y su negativa a aceptar la declaración desencadenó ese
mismo día la Guerra de Independencia de Irlanda. De esta manera surge el
IRA, (Que son las sílabas de “Ejército Republicano Irlandés” en inglés) para su
defensa, quienes iniciaron una guerra de guerrillas. (Esta es una táctica militar
de conflictos armados consistente en hostigar al enemigo en su propio terreno
de manera irregular y mediante ataques rápidos y sorpresivos).

Como solución temporal y controversial, en 1920 se firmó el Acta de Gobierno


de Irlanda, que dividía a la isla en dos jurisdicciones, Irlanda del Sur e Irlanda
del Norte. La intención original de la ley era mantener ambas demandas
satisfechas bajo dominio británico, pero las cosas no salieron como se había
previsto.. La Guerra por la independencia terminó con el tratado anglo-irlandés;
aun así, seguía habiendo disconformidad y el sur de dividió nuevamente en
nacionalistas pro-tratado y anti-tratado, estos últimos exigían la independencia
total. Desatando en otra guerra civil. En 1937, se realizó un referéndum para
escribir una nueva constitución y eliminar todos los lazos británicos que ataban
a Irlanda. El 56,6% votó a favor, convirtiendo al sur en un país completamente
independiente y que más tarde concluyó en el Acuerdo del Viernes Santo.

También podría gustarte