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PREGUNTAS PROBLEMÁTICAS
El amor parece ser el motor que une a Calisto y Melibea a lo largo de toda la obra “La Celestina”,
pero ¿en realidad es este el factor causal de la unión entre ambos?
HIPÓTESIS
Se intentará comprobar que el vínculo motriz que permite la relación “amorosa” entre Calisto y
Melibea no es el amor tal y como lo conocemos hoy, sino el deseo, y que el primero ocupa un lugar
irrelevante en la obra en sí, puesto que está ausente en mayor medida.
OBJETIVOS
MARCO TEÓRICO
Para trabajarla obra “La Celestina” se tomarán los aportes de Eugenia Lacarra, Rosa Vidal Doval y
Laura Mier desde una perspectiva crítica-literaria, intentado mediante estas autoras dejar al descubierto
el verdadero vínculo de relación entre los amantes de la obra a trabajar a continuación. Se abordaran
cuestiones de sexo, amor y cualquier otro tipo de factor que pudiese aparecer a lo largo de la
investigación.
a continuación, en este trabajo se optará por la teoría de que los resultados de esta relación amorosa
son al azar, puesto que no hay nada en la obra que diga que es un castigo impuesto por la ley moral de
una providencia.
La obra fue escrita en la última década del siglo XV, en un momento crítico para la evolución de la
lengua castellana. Se encuentra en la brecha divisoria entre a época medieval y la época renacentista,
por lo que algunos críticos difieren a época corresponde. Si bien está enmarcada en la edad medieval,
su estilo de composición y otros caracteres ya son propios de una nueva etapa: el renacimiento. Esta es
una de las razones por las que goza de tanto prestigio la obra.
En aquel entonces, España estaba logrando junto a los reyes católicos su unidad militar y continuaba la
lucha por la unificación religiosa mediante la conversión de moros y judíos y de ser necesario con
efectos económicos perjudiciales para presionar a las masas y para reforzar la conversión o limitar
actos inadecuados para la iglesia,en 1480 se establece la inquisición apelada por los reyes católicos
para conservar su unidad religiosa y reprimir cualquier conducta herética, como ya se dijo
anteriormente.
Po otra parte, en 1492 con la toma de Granada finaliza la Reconquista, se “descubriría” américa y
Antonio Nebrija estaba obrando la primera gramática castellana que incidiría en las reglas de fijación
en el español. Se iniciaba una época del gran imperio, intolerante, absolutista y centralista.
1.2. El autor
De Fernando de Rojas no se puede decir mucho, tuvo dos hijas con LeonorÁlvarez.Ambos nacieron en
La Puebla de Montalbán (Toledo),asi como también ambos provenían del seno una familia de judíos
conversos.
Estudió leyes en la Universidad de Salamanca, se estima que hacia 1496-97 habría obtenido el título
de Bachiller en Leyes. Además fue un escritor español o dramaturgo. Por otra parte, fue un jurista muy
valorado como tal en Toledo. Sus cercanos lo reconocían más por ello que por ser escritor.
La obra “La Celestina”, su primera edición, se estipula, entre 1497 y 1499.En primera instancia se cree
que Fernando de Rojas encontró ya plasmado la primer escena de esta obra, y fascinado por su
argumento se decidió a continuarla y darle un fin. Inicialmente contaba con 16 actos, ya en la segunda
edición en 1500 contaba con la carta “El autor a un amigo”, las coplas acrósticas, argumento general,
los argumentos de cada acto y las coplas finales. Tras varias ediciones, en 1501 añaden a la obra cinco
actos más quedando con un total de 21.
Por otro lado, también se sustenta la teoría de que él escribió esa primera parte en sus tiempos
juveniles pero debido a su trabajo como estudioso de leyes decidió ocultar su nombre ante las fuertes
críticas que pudiese recibir y posteriormente fingir su aparición y concluirla ya con una madurez
literaria notable.
Estas son sólo teorías, ya que en el mismo libro el autor explica que la autoría del mismo pudiese
pertenecerle a Juan de Mena o Rodrigo Cota. Aun así, en este trabajo se apelará a Fernando de Rojas
como autor del libro. Además cuenta en la Carta a vn amigo que la termino de escribir en quince días
de vacaciones.
Entre los muchos problemas que nos suscita La Celestina se halla la imposibilidad de encerrarla en
una categoría: diálogo o novela. En la actualidad, críticos la han clasificado como una obra hibrida. Por
un lado la cantidad incesante de actos (¡veintiún actos!), que la categoriza por su extensión como una
novela, y por otro lado, los diálogos que desconciertan en toda la obra. Es estas razones que presentan
problemas a la hora de clasificarla ¿Por qué hacerlo? Definir es limitar. No se puede saber con
exactitud, lo que está claro es que es una de las mejores obras literarias españolas.
Fernando de Rojas construye una obra no para ser representada sino leída ante cierto número de
público. Precisamente en el prólogo dice que no se la represente, sino que debe ser leída ante el
público que en ese entonces por lo general era analfabeta.
2. Argumento de La Celestina
Otro de los criados de Calisto (Pármeno) le advierte a su amo sobre las artimañas de la vieja pero no es
escuchado. Celestina convence al criado fiel para unirse a ellos ofreciéndole una prostituta (Areúsa) y
este accede.
Estos criados codiciosos, al igual que Celestina, reclaman a la anciana su parte y esta se niega. Entre
ambos la matan e intentan huir sin suerte pues son colgados.
Los amantes se siguen entregando a la pasión a escondidas de sus padres, durante la noche a pesar de
las muertes, ya que Calisto, desalmado y sin pena, consigue otros y ante tan desconsideración las
prostitutas deciden vengarse y traman una emboscada para los nuevos criados de Calisto. En un
sobresalto este resbala de la torre y cae. Muere y al poco tiempo Melibea confiesa ante sus padres y se
suicida.
En esta pequeña cita se puede deducir una cosa, el amor en la obra puede percibirse de muchas
maneras, como negocio, como enfermedad, locura, ocio, etc. pero en ningún momento se puede
apreciar el amor carente de codicia o un amor proveedor de paz. Es un tipo de amor voraz, carnal y no
va más allá de eso. El amor como una enfermedad y obsesión.
Al decir esto debe pensarse al indagar sobre los sentimientos que agobian a Melibea, en primera
instancia, ante el atrevimiento de Calisto se siente enfurecida, iracunda.
Así, Eugenia Lacarracita a Fothergill-Payne quien asegura que Melibea padece de dos sentimientos
principales: la ira y el amor engendrados por la codicia del placer. Esto mismo puede verse en el
primer diálogo entre estos jóvenes:
Hasta este momento puede verse que Melibea actúa pacíficamente e incluso hace dudar al lector del
desprecio que hace posteriormente a Calisto.
“Cal: -¡Oh bienaventuradas orejas mías, que indignamente tan gran palabra habéis oído!
Mel:- Más desventuradas de que me acabes de oír. Porque la paga será tan fiera cual merece tu loco
atrevimiento. Y el intento de tus palabras ha sido como de ingenio de tal hombre como tú, haber de
salir para se perder la virtud de tal mujer como yo. ¡Vete de ahí torpe! Que no puede mi paciencia
tolerar que haya subido en corazón conmigo el ilícito amor comunicar su deleite”.
Podemos notar que la ira de Melibea es quizás un escaparate para ocultar su verdadero sentimiento, tal
vez desea a Calisto y eso la lleva a actuar de manera iracunda e irracional. Lacarra, nos aporta lo
siguiente:
“Quien, por el contrario, se guía por sus sentimientos, cae en el exceso de cólera, y es censurado por
tener causas o fines incorrectos, por proceder contra personas no idóneas, o actuar con más ímpetu
del necesario o en el tiempo y lugar inoportunos o durante más tiempo del indicado. Estas sí se
consideran personas coléricas, y se caracterizan por ser extremadamente impacientes e irascibles y
por actuar presas de sus emociones. Por estas razones no se les alaba, sino que se les condena con
mayor o menor rigor”.
En el décimo acto, Melibea se percata de su “amor” por Calisto, pero es perturbador. Ella misma habla
y pide que su voto de castidad no sea quebrantado por la llaga del deseo que ahora siente por aquel a
quien rechazo. Reclama no haberse dado cuenta antes de su congojoso y ardiente amor. Así, la palabra
amor siempre estará procedida por deseo, llagas, etc. que nos revelan ante el tipo de amor que nos
encontramos.
Así, la autora llega a la conclusión de que Melibea es una mujer iracunda, cegada por su deseo de
placer. Desde este punto de vista se la caracteriza como“una mujer libidinosa que claudica
rápidamentea los avances amorosos del caballero y que está dispuesta a todo para satisfacer su
placer, incluso sacrificando a sus propios padres y a sí misma”.
Nos queda constado por el momento que ese tipo de amor que expresa la joven es dañino, obsesivo y
dispuesto a cometer cualquier acto con tal de satisfacer su deseo lujurioso.
Como se puede percibir, toda la obra está enmarcada en un ambiente violento. Es uno de sus
principales rasgos. Dice Doval “la violencia está en el centro de la experiencia erótica de los amantes”
y que las muertes violentas de la obra son producto de la relación amorosa entre estos individuos.
Desde este plano podemos definir al amor de parejas para contrastar con los hechos de la obra, es
decir, el amor qué debería causar y qué no en alguien enamorado y cómo éste debería actuar.
Amor:
1. “Sentimiento de vivo afecto e inclinación hacia una persona o cosa a la que se le desea todo lo
bueno”.
2. “Sentimiento de intensa atracción emocional y sexual hacia una persona con la que se desea
compartir una vida en común”.
Estas son dos acepciones muy comunes de escuchar, es lo que nos suele salir naturalmente sin ningún
tipo de esfuerzo rebuscado. Pero en esta definición no se logra visualizar la relación de Calisto y
Melibea. En la primera acepción nos encontramos con el deseo del bienestar de la persona amada, esto
se ve muy poco o casi nada en la obra ya que a ambos sólo les interesa el coito.
En la segunda vemos que se acerca un poco más al vínculo que los une, pero prestando más atención
no es así, porque como sabemos aunque Calisto y Melibea no tenían impedimento para unirse en
matrimonio, no les interesaba. Es más, Melibea rechaza absolutamente la idea de matrimonio como
veremos a continuación en el acto décimo sexto de la obra.
“Pleberio: - …Demos nuestra hacienda a dulce sucesor, acompañemos a nuestra única hija con
marido cual nuestro estado requiere, porque vamos descansados y sin dolor deste mundo.
Mel:- … No piensen en estas vanidades ni en estos casamientos: que más vale ser buena amiga que
mala casada…No quiero marido, no quiero ensucia los nudos del matrimonioni las maritales pisadas
de ajeno hombre repisar…” Pág. 156
Así, ella ante las querencias de sus padres sobre un futuro matrimonio, reniega de esa condición y
argumenta que prefiere ser buena amiga antes que mal casada. En ningún momento piensa a Calisto en
plan de matrimonio aunque este fuera posible.
Dice Doval“Los amantes no fallan porque malinterpreten el código del amor cortés sino porque el
propio amor cortés no es más que una farsa social que sirve para encubrir la lujuria de los nobles al
mismo tiempo que actúa como seña de identidad de este grupo privilegiado”
Como dice la autora, su amor no es más que una ficción, además de no presentar las características del
amor cortes. Su “querer” gira en torno al deseo, al placer y gozo carnal. Resumiendo, es un amor
destructor y violento causante de la muerte de los mismos amantes.
El personaje de Calisto llega a romper con lo tradicional del amor, podría decirse que hace una
parodia del amor cortes, ya que al “enamorarse” su actitud es todo lo contrario a lo que debería ser,
llegando a ser considerado por la crítica como anticortés. Antes de enamorarse de Melibea, su
actitud era honorable y apreciado por todos.
Sem: -“Porque sin los bienes de fuera, de los cuales la fortuna es señora, a ninguno acaece en esta
vida ser bienaventurado. Y más, a constelación de todos eres amados”.
“En el auto V, el tradicional motivo de la “prenda” de amor, en este caso el cordón de Melibea, es
transformado lujuriosamente por Calisto en un fetiche, en un símbolo de la futura relación sexual y
no es interpretado como uno de los pasos de la “recuesta”.
Luego de que es consumado el acto sexual, Calisto se presenta más enfermo de amor que nunca,
con un monólogo interminable donde se lo aprecia enfermizo, casi envuelto por la locura.
Cal: -“… ¿Pero qué digo? ¿Con quién hablo? ¿Estoy en mi seso? ¿Qué es esto, Calisto?
¿Soñabas, duermes o velas? ¿Estás d de pie o acostado? Cata que estás en tu cámara. ¿No ves que
el ofendedor no está presente? ¿Con quién lo has? Torna en ti…”
Además, tras el nuevo encuentro de esta pareja, se percibe ya sin duda alguna las intenciones de
Calisto:
Cal: -“¡Oh mi señora y mi bien todo! ¿Cuál mujer podría haber nacida quedesprivase tu gran
merecimiento!? …”, y un poquito más adelante: “Señora, el que quiere comerel ave, quita primero
las plumas”.
La autora llega a la conclusión de que el amor de Calisto es enfermizo, que este finge demás su
padecer para poder acudir a los labores de Celestina sin ser reprochado en su accionar.
“La enfermedad de amor es utilizada como débil salvaguarda del honor de la pareja protagonista
por todos los personajes. Pero también, es la tradición que garantiza lainmunidad ante este
proceso de amores, porque convierte cualquier apetito sexual en necesidad imperante”.
Pleb: -“Oh amor, amor, que no pensé que tenías fuerza ni poder de matar a tus sujetos”.
En ese momento, cuando Rojas compone la Celestina, el amor cortés estaba en decadencia, en
términos modernos estaba pasando de moda. El autor toma esta temática y la satirizay logra ser muy
realista, es decir “Celestina parodia la novela sentimental para demostrarque no es posible seguir
las convenciones del amor cortés en el mundo de la ficción realista —y mucho menos en la realidad
— ya que este comportamiento lleva al fracaso y la muerte”.
Y por lo que los lectores pudieron observar, las muertes son trágicas y violentas. Calisto que
resbala, Melibea se suicida, reclamado no haber descubierto antes ese gozo para disfrutarlo más.
Y es que no sólo son sus muertes las dignas de atención. Celestina, que es asesinada por Pármeno y
Sempronio por avariciosa y traidora. Y estos dos jóvenes nombras son colgados de manera muy
cruda.
“Es más, la identificación entre amor y muerte está presente de forma explícita en Celestina.
Melibea, quien se ve a sí misma como una heroína literaria rebelde e inconformista, es en realidad
una homicida que causa la muerte de su amante y la suya propia”.
Y fue también su deseo, su pasión engañosa y tormentosa la que causó las muertes de los demás
personajes. En este punto ya podemos decir que el amor tal y como lo concebimos actualmente no
está presente en la obra. La relación de Pármeno y Areúsa, Sempronio y Elicia, finalmente Calisto y
Melibea es puro morbo y deseo. Las relaciones que mantuvieron estos personajes a lo largo de la
obra fue enfermiza y déspota.Ellos mismos van labrando su trágico final en la obra.
Indudablemente, habrá otros enfoques, otras perspectivas que quedarán en tela de juicio, así como
este trabajo. Pero se debe destacar la genialidad artística de La Celestina, de, al igual que Cervantes,
retoma una temática ya casi olvidada y la satiriza, dándole toques de humor, haciéndola subversiva
y dinámica. Además, juega con temas que hasta hoy día son significativos y debatidos, como la
muerte, la codicia, el sexo, la prostitución, la pobreza, el amor, etc. Esto hace que la obra infunda
en los lectores un gran sabor de boca al leer sus líneas.
Bibliografía:
• María Eugenia Lacarra “La ira de Melibea a la luz de la filosofía moral y del discurso
médico” Universidad del País Vasco. S/F