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Unidad III

Semana 12

CURSO: DERECHO DE LAS OBLIGACIONES


IV CICLO
Docente:
DRA. JESSICA PILAR HERMOZA CALERO

Escuela Profesional
Derecho
Contenido temático:

- La Transacción
- Mutuo Disenso
“ Más vale un arreglo
que un buen pleito”
Transacción

“La transacción es un acto jurídico bilateral por el cual


las partes, haciéndose concesiones reciprocas,
extinguen obligaciones litigiosas o dudosas”.

Por ejemplo: En un juicio Juan reclama a Pedro $500


dólares como indemnización por un daño, que este
niega. Finalmente acepta como pago, por todo
concepto, la suma de $400 dólares.
Transacción

• Negociación entre las partes. Las dos ceden


• Se negocia la finalización con concesiones
reciprocas.

Ejemplo: Lucas debe S/10,000 soles a Pedro el


primero le ofrece pagarle S/8,000 soles en efectivo.
Después de una negociación. Pedro acepta. La
Obligación concluye.
DEFINICIÓN
Mediante la transacción se crea una nueva base de acción
judicial; pero esto no significa extinción de la obligación
preexistente y que una nueva venga a ocupar su lugar. Por lo
tanto, la transacción no persigue – salvo que las partes lo hayan
estipulado expresamente – una sustitución de deuda
(novación), sino que permite la coexistencia de la obligación
jurídica preexistente, regulándola de nuevo tan sólo en sus
aspectos particulares.
Transacción sobre asuntos no controvertidos No tiene por
qué circunscribirse a los asuntos dudosos o litigiosos; pudiendo,
por lo tanto, referirse a derechos ajenos a los controvertidos. Dr.
Edgardo Quispe Villanueva
No es que sea indispensable declarar en forma La transacción debe
expresa esa renuncia, sino que resulte de
manera indubitable la voluntad de las partes contener una renuncia
sobre aquello que es materia de la transacción.

La transacción debe hacerse por escrito,


Formalidad bajo sanción de nulidad, o por petición al
Juez que conoce el litigio.

Solo los derechos patrimoniales son


susceptibles de transacción. Los derechos
extrapatrimoniales son inalienables y, por Derechos que pueden ser
tanto, no pueden ser objeto de objeto de transacción
enajenación; ellos están fuera del
comercio de los hombres.
¿ Puede ser materia de transacción la responsabilidad
civil?

Sí se puede transigir sobre la responsabilidad civil


proveniente de hecho delictuoso. Del delito surgen dos
acciones: una de interés público y que es de índole penal;
y la otra, de interés privado, que es de índole civil. No
existe objeción para que las partes evalúen el daño
acarreado a la víctima y establezcan la mejor forma de
resarcirlo. Lo que no podrán hacer ningún caso es
negociar ni menos transar sobre la responsabilidad penal.
Transacción sobre obligaciones nulas o anulables

Es la obligación dudosa o litigiosa que adolece de nulidad la


que invalida la Transacción, porque en tal caso no se estaría
extinguiendo la obligación simplemente anulable, la
transacción, con conocimiento del vicio por las partes que
transigen, equivale a su confirmación.
Sin embargo, si la cuestión dudosa o litigiosa es acerca de la
nulidad o anulabilidad de determinado acto jurídico y las
partes así lo manifiestan expresamente al tiempo de transigir,
se permite que ella sea válida. De no adoptarse este criterio,
sería imposible transigir respecto a actos jurídicos cuya
nulidad o validez se discute.
Indivisibilidad de la transacción

La transacción resuelve un asunto dudoso o


litigioso. Mediante concesiones reciprocas. La
nulidad de alguna de sus estipulaciones,
salvo pacto en contrario, debe acarrear la de
los demás.
No subsistirán las garantías prestadas por
terceros en la obligación dudosa o litigiosa
que se transigió. Solo se restablecerán las
garantías otorgadas por las partes, sin
perjuicio de los derechos de terceros.
Nada impide que las partes se sirvan de la
suerte para decidir cuestiones. En ese
¿Puede la suerte supuesto, tal acto producirá los efectos de
dirimir? una transacción y se someterá a las
normas contenidas en el titulo dedicado a
ella.

La transacción judicial se ejecuta como


sentencia por lo que son de aplicación
en ese caso las normas del código
procesal civil peruano de 1993 sobre la
materia, la transacción extrajudicial se
ejecuta en cambio, en la vía ejecutiva.
La finalidad de la transacción
es evitar o ponerle fin a este
tipo de obligaciones
“dudosas” o “litigiosas”
Requisitos de la transacción
a) Asunto dudoso o litigioso
En realidad, la definición de un asunto dudoso es sencilla. Un asunto
resulta dudoso cuando es susceptible de más de una interpretación
que lleve a soluciones jurídicas distintas y por lo cual podría
suscitarse una controversia judicial o extrajudicial. Por tanto, el que un
asunto sea dudoso no es obstáculo para que sea litigioso, ya que
puede revestir ambas características. Basta, en consecuencia, que el
asunto sea dudoso, sin que sea necesariamente litigioso. De
mantenerse la duda, no es difícil que devengue en un asunto litigioso.
En efecto, puesto que la transacción puede recaer sobre derechos y
obligaciones meramente dudosos, no hace falta que haya pleito
pendiente, sino que se dé el elemento de incertidumbre en la relación
jurídica entre las partes. Entonces las partes, si así libremente lo
desean, pueden prevenir el eventual litigio por medio de la
transacción. (Osterling Parodi y Castillo Freyre, 2008, p. 781)
Requisitos de la transacción
• Para la existencia del litigio es necesario que al menos la
demanda se haya interpuesto y que haya sido contestada, es
decir, que la litis se encuentre trabada. En el caso de la
transacción esto no es necesario. Puede existir un pleito
pendiente, o tan sólo una demanda interpuesta, o inclusive que
ningún paso se haya dado por las partes para iniciar proceso
alguno, pero si el asunto pudiera ser materia de proceso (y no
meramente dudoso), ya encaja dentro del concepto de asunto
litigioso, como complemento a los asuntos meramente dudosos.
De esa forma no queda ningún aspecto que produzca
incertidumbre o malestar a las partes que les imposibilite transigir.
(Osterling Parodi y Castillo Freyre, 2008, p. 783).
• En otras palabras, un asunto litigioso será aquel que aun no sido
llevado a sede judicial o arbitral pero que potencialmente pueda
ser materia de proceso. Aquí la transacción evitaría que este
asunto litigioso llegue a oídos del juez o árbitro.
Requisitos de la transacción

b) Concesiones recíprocas
La valoración de las concesiones es realizada por las
propias partes. Por otro lado, la ley no exige que las
concesiones mutuas sean de igual valor; la exigencia en una
transacción es que haya concesiones recíprocas, no siendo
relevante el que una de las partes transija (o ceda) más o
menos que la otra. Basta que cada una lo haga voluntaria y
espontáneamente, con la finalidad de dar por terminado el
conflicto y evitar el litigio que podría promoverse o terminar
el ya iniciado. En ese sentido, la transacción no
necesariamente va a recaer en un punto medio, equidistante
de las posiciones de origen de las partes. (Osterling Parodi y
Castillo Freyre, 2008, p. 784)
Requisitos de la transacción
En estricto y en definitiva, lo importante no es que ella
recaiga en un punto medio, sino que ella recaiga en un
punto intermedio acordado por las partes. Lo relevante,
entonces, es que se ceda en algo con respecto al otro, no
importando que aquello que se cede sea de la misma
magnitud que lo que cedió la parte contraria. (Ídem)

En otras palabras, las concesiones recíprocas implican


que las partes deban ceder en sus pretensiones originales
por lo que en ningún caso verán satisfechos sus intereses
al 100%. Siendo irrelevante que una ceda más o menos
que la otra en tanto y en cuanto ambas hayan estado de
acuerdo en lo cedido aun así lo cedido por una no sea
equivalente a lo cedido por la otra.
Efectos de una transacción total o parcial, celebrada con
unos de los deudores solidarios
• A fin de poder desarrollar con claridad este punto,
previamente debemos repasar algunas ideas generales
sobre el alcance y tratamiento de las obligaciones
solidarias en nuestro ordenamiento jurídico.

• En ese sentido, debemos partir de la premisa de que las


obligaciones solidarias no se presumen, sino por el
contrario, se encuentran establecidas de forma
expresa en la ley, y en su defecto, las partes deben
establecerlo también de forma expresa en el título de la
obligación (en el contrato y/o acto jurídico), lo cual se
desprende con claridad del artículo 1183 del CC.
Ahora bien, de forma acertada Rubino refiere que las
obligaciones solidarias pertenecen a la especie más amplia de
las denominadas obligaciones subjetivamente complejas. Ello,
debido a que se caracterizan por la concurrencia plural de los
sujetos de la relación obligacional, tanto por el lado activo como
por el lado pasivo, en que cualquiera de los acreedores podría
exigir la íntegra satisfacción del crédito al deudor, o viceversa,
cualquiera de los deudores podría liberarse ejecutando el
íntegro del débito.
En ese mismo orden de ideas, Orlandini precisa que Donde se
tiene una obligación solidaria es necesario que para la
pluralidad de deudores o acreedores dicha obligación surja del
mismo hecho generatriz, o al menos, de hechos coaligados con
nexos tales que hagan que ellos puedan ser considerados
como un complejo unitario frente al efecto que de él deriva”.
Un ejemplo de lo indicado por el citado autor, se puede
encontrar en el caso de la responsabilidad civil extracontractual,
en que varios sujetos, con sus respectivas conductas han
propiciado la materialización de un daño indemnizable;
generando así un caso de solidaridad pasiva, como el caso que
motivó las casaciones materia de análisis. Ver artículo 1983 del
Código Civil:
Si varios son responsables del daño, responderán
solidariamente. Empero, aquel que pagó la totalidad de la
indemnización puede repetir contra los otros, correspondiendo
al juez fijar la proporción según la gravedad de la falta de cada
uno de los participantes. Cuando no sea posible discriminar el
grado de responsabilidad de cada uno, la reparación se hará
por partes iguales.
Mutuo disenso
DEFINICIÓN
Es un medio extintivo obligacional que proviene de un
consentimiento prestado de manera opuesta o contraria al
primigenio. Se trata, entonces, de un contrato cuyo
contenido es justamente lo inverso a la constitución del
vinculo obligatorio, con el cual se elimina, en virtud de la
voluntad unánime de ambas partes, el acuerdo anterior. De
esta forma las partes, que como requisito deben tener la
libre disposición de sus bienes, convienen en dejar sin
efecto un contrato previo.

El mutuo disenso solo resulta de aplicación a


Ámbito de aplicación los actos bilaterales o a los plurilaterales.
Naturaleza jurídica
De la Puente y Lavalle, comentando la naturaleza del
“distracto” (nombre técnico para el contrato cuyo objeto es
resolver una relación jurídica patrimonial – cualquiera sea su
fuente – existente entre las partes), explica que empleala
expresión “resolver” debido a que considera que el distracto
tiene por finalidad dejar sin efecto la relación jurídica por
una causal sobreviniente al nacimiento de dicha relación. Lo
importante de anotar esta definición es que dicha causal es
la voluntad de las partes de extinguir la relación, pudiendo
aplicarse a las relaciones contractuales o no contractuales.
Siendo el distracto un contrato, evidentemente el mutuo
disenso por ser una especie de aquel, también lo es.
Formalidad
Ni el Código derogado Código civil peruano de 1936, le
señalan a la figura una forma definitiva, o una forma
solemne para su perfeccionamiento, ni para su validez, por
lo cual no estaría en principio, sujeto a formalidad alguna.

No obstante lo cual, la opinión que predomina en la


doctrina indica que cuando la ley exige solemnidad para el
contrato que se quiere extinguir, la misma formalidad debe
seguirse para su resolución, extinción o mutuo disenso. De
esta manera si por ejemplo, el contrato hubiera sido inscrito
en los registros públicos, será necesario que su extinción se
inscriba ahí, principalmente a fin de que sea conocida por
todos.
La excepción, es el propio acuerdo de las partes en Carácter
convenir libremente retrotraer sus efectos para que
opere ex nunc, siempre y cuando no se perjudique a
irretroactivo
terceros. De lo contrario, el mutuo disenso obra solo
para el futuro.

Esta destinada a recalcar la protección al


La ineficacia del mutuo disenso tercero que adquirió derechos de una de
cuando perjudica el derecho de las partes con anterioridad al mutuo
tercero. disenso, consagra una vez mas la
doctrina de los derechos adquiridos, los
mismos que no pueden verse afectados
por decisiones privadas.
GRACIAS

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