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UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS

Centro de Extensión Universitaria y Proyección Social - CEUPS


FACULTAD DE PSICOLOGÍA

GUÍA DEL PARTICIPANTE

HábIL
TALLER DE HABILIDADES SOCIALES PARA LA
INSERCIÓN LABORAL
SESIÓN 4

Como hemos señalado a lo largo de esta guía, el desarrollo de las habilidades


transversales favorece nuestro desempeño dentro y fuera de las organizaciones,
aumentando las posibilidades de expresar con eficacia todo nuestro potencial y
capacidades, permitiéndonos alcanzar nuestros objetivos personales y profesionales.

Dentro de las habilidades transversales que ya hemos trabajado, hemos puesto especial
énfasis en la gestión de nuestras emociones, indicando que el conocimiento, expresión y
comprensión de lo que sentimos, es fundamental para poder desarrollar otras habilidades
como el trabajo en equipo, la comunicación efectiva, etc.

Pero en este camino, hemos visto también cómo algunas emociones suelen gobernar
nuestro accionar, incluso perjudicando nuestro propio desarrollo profesional y personal.
Emociones como el miedo o la vergüenza, pueden ser fuente de frustración y desánimo,
limitando nuestra capacidad de respuesta ante los problemas.

Esta sesión orienta nuestro aprendizaje hacia el desarrollo de diferentes alternativas para
resolver los miedos que nos aquejan, tomando como punto de partida nuestra capacidad
para reconocer lo que sentimos, construiremos estrategias para afrontar y superar
nuestros temores, con seguridad y eficacia.

Debemos recalcar que el desarrollo de nuestra capacidad para gestionar emociones como
el miedo, depende de la decisión y actitud con que enfrentemos dichos sentimientos.
Siendo nuestra primera recomendación, prepararse y perseverar. Ya que “nadie logró
encontrar una gran solución en su primer intento y mucho menos resolver un miedo, sin
haberlo experimentado muchas veces antes de dar un paso hacia adelante”.

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RESOLVER EL MIEDO

Los niños le tienen miedo a los monstruos imaginarios, la oscuridad y los ruidos
extraños… Los adultos también tenemos miedo, a veces a la soledad, otras veces del
compromiso, a los riesgos de emprender una nueva vida o negocio…

Los temores y los miedos son algo normal en la vida de toda persona, pero a algunos
esos miedos nos impiden progresar en la vida y necesitamos aprender a enfrentar
nuestros temores.

A medida que crecemos y maduramos muchos de los miedos que antes teníamos se van
superando, sin embargo muchas personas cargan con la sensación de peligro e
inseguridad por demasiado tiempo y algunas veces por toda la vida.

El miedo es una emoción que en determinado momento puede ser de utilidad, porque
pone en alerta todos los sentidos; esto nos ayuda a tomar precauciones. Pero también
puede paralizarnos e impedir nuestra evolución y crecimiento en la vida. A veces lo más
sencillo es intentar escapar de cuanto nos asusta, pero evitando esas cosas sólo
conseguimos reforzar los temores con la idea de que los miedos pueden más que
nosotros mismos. Todas hemos experimentado miedo alguna vez a algo o a alguien,
algunas veces miedo a cosas reales y a otras veces miedo de cosas que sólo estaban en
nuestra imaginación, pero que pueden ser destructivos e interferir en nuestra vida normal.

No importa qué tipo de miedo enfrentemos, cuando esta reacción interfiere con nuestros
progresos en la vida se vuelve necesario tratar de reconocer las raíces de nuestros
temores, conversar con nosotros mismos, y con la mayor sinceridad posible,
respondernos a las preguntas de a qué tenemos temor y el porqué. Igualmente debemos
plantearnos por qué no somos capaces de enfrentarnos a los miedos que sentimos. Una
vez que tengamos claras las respuestas, será más fácil enfrentarlos con calma y
serenidad.

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GUÍA DE PASOS

A continuación podrás encontrar una guía de pasos para poder resolver el miedo de forma
efectiva:

1. Determina si te sientes asustado.


2. Piensa en lo que te produce miedo.
3. Dilucida si el miedo es real.
4. Toma las medidas para reducir el miedo.

RECUERDA
 Piensa en las distintas posibilidades y elige la más probable.
 ¿El objeto de tu temor es, en realidad, una amenaza? Puede que tengas que
comprobarlo con otra persona o que necesites más información.
 Explora si deberías hablar con alguien, alejarte de lo que te produce miedo, o
aproximarte gradualmente a la situación temida.

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RESOLVER LA VERGÜENZA

La vergüenza aunque a todas luces parezca una emoción que solo tiene un lado negativo,
es en realidad un mecanismo que nos ayuda a adaptarnos a situaciones diferentes o
inesperadas. Llevándonos a conocernos y conocer nuestras fortalezas y limitaciones, para
poder sobrellevar situaciones, que de otra manera serían motivo de frustración y temor.

En algún momento de nuestras vidas, hemos sentido el impulso de querer hacer algo pero
finalmente no lo hemos realizado; es bastante común además, que debajo de esta
inacción este la vergüenza como factor predominante y cuyas causas suelen recaer en el
temor a equivocarnos y el miedo al qué dirán.

Recordemos que en el ámbito laboral se valora por sobre otras habilidades, la iniciativa, la
capacidad de adaptarse a situaciones cambiantes y el encontrase abierto a nuevas
oportunidades; siendo estas características habilidades que solo podemos desarrollar al
resolver la vergüenza y los temores en los que esta se soporta.

Por ello, es importante reconocer las causas de esta emoción, ya que al conocer los
motivos podremos elaborar una estrategia que nos permita superarla, actuando con
energía y decisión.

GUÍA DE PASOS

A continuación podrás encontrar una guía de pasos para poder resolver la vergüenza de
forma efectiva:

1. Determina si sientes vergüenza.


2. Piensa en lo que ha sucedido para que te sientas avergonzado.
3. Piensa en lo que podrías hacer para sentir menos vergüenza y ponlo en práctica.

RECUERDA
 Explora las causas, minimízala; ignórala; distrae a los otros; emplea el sentido del
humor; tranquilízate.
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RESPONDER AL FRACASO

La constancia y la perseverancia son fundamentales para alcanzar nuestras metas, pero


estas habilidades dependen de cuan tolerantes somos ante nuestros fracasos. Ser
capaces de sobreponernos ante una decepción o fracaso, nos abre la puerta hacia la
creatividad, la satisfacción y el desarrollo personal; siendo esta habilidad, el principal
catalizador de otras capacidades como la innovación, impulsándonos a actuar con
empeño y mayor dedicación, lo que finalmente se traducirá en el cumplimiento de
nuestros sueños y objetivos.

Sin embargo, ¿cuántas veces en nuestra vida hemos dejado de hacer cosas por miedo a
fallar?

Sabemos que afrontar que hemos fracasado, después de haber invertido mucho esfuerzo
y dedicación no es fácil. Por ello, es importante explorar la situación con tranquilidad para
encontrar oportunidades de mejora y gestar soluciones adecuadas que nos lleven al éxito.
Si por el contario, ante un intento fallido dejamos que la frustración y la impotencia nos
gobiernen, será aún más difícil retomar las tareas, pudiendo incluso dejar de lado
nuestros sueños, metas u oportunidades de mejora personal o profesional.

En Silicon Valley, localidad norteamericana que aloja a las más grandes corporaciones de
tecnología en el mundo, y en las que se forjaron empresas como Intel, Microsoft y Apple;
se ha desarrollado una cultura de emprendimiento que se soporta en la tolerancia al
fracaso.

Uno de los principios rectores de grandes personajes como Steve Jobs y empresas como
Apple, se encuentra sustentado en una muy pequeña pero significativa frase: “Fracasa
rápido. fracasa a menudo”.

Recordemos que el fracaso es solo una parte del proceso, considerémoslo como un
trampolín a algún futuro éxito y no como una derrota, especialmente si podemos aprender
de nuestros errores. Muchas veces los fracasos alumbran el camino que debemos tomar,
añadiendo experiencia para controlar las fallas en el siguiente intento. El fracaso es un
fracaso completo, solo si dejamos de intentar cumplir con nuestros sueños; recuerda
“Fracasa rápido. fracasa a menudo”.

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GUÍA DE PASOS

A continuación podrás encontrar una guía de pasos para responder al fracaso de forma
efectiva:

1. Decide si has fracasado en algo.


2. Piensa por qué has fracasado.
3. Piensa en lo que podrías hacer para evitar otro nuevo fracaso.
4. Decide si quieres intentarlo otra vez.
5. Inténtalo nuevamente poniendo en prác-tica las nuevas ideas.

RECUERDA
 El fracaso puede ser en el ámbito personal, académico o laboral.
 Podría ser debido a una determinada habilidad, o la falta de motivación-
 Revisa las razones personales y las circunstancias.
 Evalúa lo que está bajo tu control para poder modificarlo: si se trata de un
pro-blema relacionado con una habilidad practícala; si es de motivación,
esfuérzate más; si
 es por las circunstancias, piensa en la forma
 de modificarlas.

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