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Estudiante:
Luis Nolberto Tobón Duarte
Docente:
José Luis Infante Jimenez
Febrero de 2023
¿Cuáles son las actuaciones (acciones) realizadas por la autoridad municipal que no
atienden al deber y los fines del servidor público?
En el desarrollo de las funciones como servidores públicos las personas deben tener
claro que se rigen por unos principios y que el propósito general de la ejecución de un
contrato independiente de su modalidad y población objetivo a atender, es la de satisfacer
una necesidad de la comunidad, garantizar el goce de sus derechos. Bien lo establece la
Ley 80 de 1993, Estatuto General de la Contratación de la Administración Pública en su
artículo 26 Principio de Responsabilidad “Los servidores públicos están obligados a buscar
el cumplimiento de los fines de la contratación, a vigilar la correcta ejecución del objeto
contratado y a proteger los derechos de la entidad, del contratista y de los terceros que
puedan verse afectados por la ejecución del contrato. (…)” (Función Pública, 1993) para el
caso de estudio objeto de análisis, esta responsabilidad recaía sobre la Secretaria de
Educación Municipal, quien adicional a sus obligaciones propias establecidas legalmente,
tenía una herramienta adicional para hacerle seguimiento a la ejecución del contrato a
través de la interventoría.
Es importante recordar que los servidores públicos deben cumplir con diligencia,
eficiencia e imparcialidad el servicio que le sea encomendado y abstenerse de cualquier
acto u omisión que cause la suspensión o perturbación injustificada de un servicio esencial,
o que implique abuso indebido del cargo o función (Función Pública, 2002).
Claramente estas dos actuaciones por acción u omisión, van en contravía del deber y
fines del servidor público, lo cual no solo conlleva a someterse a un proceso disciplinario
sino que se puso en riesgo la vida de 1.500 niños, niñas y adolescentes beneficiarios del
programa, vale la pena destacar que esta población se encontraba en una situación de
vulnerabilidad y que requería una atención oportuna por parte del Estado, pero que en su
lugar recibió un trato que puede considerarse como revictimizante.
Es triste aceptar que en los últimos años en nuestro país los programas destinados a
la alimentación escolar (PAE) están siendo objeto de actos rampantes de corrupción, y el
actuar de los entes control es poco lo que está logrando en revertir esa penosa situación.
CONCLUSIONES
Con el paso de los años es cada vez más frecuente conocer de casos de problemas
en la contratación estatal en la epata de ejecución, por tal razón es aquí en donde las
entidades territoriales deben enfocar sus esfuerzos en lograr mejorar sus procesos de
supervisión pero no solo basta con identificar aquellas posibles actuaciones irregulares sea
por parte del contratista o de la misma entidad, pues es necesario que en el momento
oportuno se tomen las acciones correctivas.
El caso concreto que nos atañe es posible identificar que el no cumplimiento de las
obligaciones de la Secretaria de Educación como supervisora y de la interventoría del
contrato se derivan de la omisión de sus funciones y obligaciones legales; ambos debieron
realizar una revisión periódica de la ejecución del contrato con lo cual de manera oportuna
podrían haber identificado aquellas situaciones irregulares que se presentaban y a partir de
alli tomar las medidas correctivas a través de un informe técnico, acciones como declarar la
caducidad del contrato pudieron contemplarse como plan de choque ante el incumplimiento
contractual.