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1.

Existen 3 posturas en relación a cómo se debe afrontar la arquitectura y, a su vez, la


enseñanza de ésta. Las dos primeras, principales derivan a una “solución” la cual es refutada
mediante la tercera postura. La disputa consistía en encuentros y oposiciones entre la
exigencia estilística del arquitecto y el arte práctico del ingeniero. Los primeros, buscaban
disimular la estructura tras la ornamentación estilística, que diera al edificio su belleza como
único indicativo visible de la personalidad; Los segundos, por otro lado, buscaban la
decoración estilística de la estructura, mediante pilares, arcos y vigas. Sin embargo, ambos
buscaban soluciones nuevas a través del pasado.
La crisis del eclecticismo comienza cuando se presenta la segunda postura, el Racionalismo,
dirigido por Viollet le Duc, por el cual la técnica constructiva se perfecciona. En este caso, el
edificio no debe solicitar el juicio de ningún espectador, sino que tiene que ser totalmente
funcional. Esta idealización vanguardista se intensifica entre los años 1851 y 1889, cuando se
presentan los edificios para las exposiciones universales, en los cuales se puede notar un gran
progreso en la construcción, incorporando nuevos materiales, como el hierro, el vidrio y la
cerámica, combinados entre sí. El hierro en no responde a los conceptos estéticos tradicionales.
El racionalismo habla sobre “los elementos primordiales” presentados por el Eclecticismo son
“residuos de una tradición anticuada”, y que éste sólo demuestra temor al progreso y a lo
moderno.
Ejemplos de este modelo racionalista son la Galería de Máquinas (1889), que prioriza las
estructuras formadas por los ingenieros y no hace énfasis en los detalles decorativos; o la Torre
Eiffel, construida en el mismo año, que causa efectos de disgusto al principio, pero después de
nuevo estilo.
Luego de esta disputa, en 1872, se pone en escena el profesor de la teoría de la arquitectura,
Gaudet, que tiene una postura liberalista. Él propone que definitivamente los primeros estudios
deben ser clásicos. Pero no se refiere a estilos clásicos como tradicionales, sino que los define
como todo aquello que es reconocido y admirado universalmente, sin restricción de tiempo,
lugar o escuela. Lo clásico sería todo lo que queda victorioso en la lucha de las artes. En este
caso no nombra ni el neoclasicismo ni el romanticismo. Gaudet plantea que la independencia
del arte no consiste en cambiar bruscamente de estilo, sino que es un proceso de evolución, el
cual tiene distintos resultados, algunos exitosos y otros no tanto. Hoy en día conocemos todos
los estilos y los podemos emplear con libertad. Esta última postura es la más razonable de las
tres, ya que busca salvar el núcleo vital de la arquitectura.

2. La primera postura, dirigida por Garnier, es el Eclecticismo, el cual lo considera como una
idea contemporánea en la cual se combinan los estilos neoclásicos con el romántico, los
cuales agradan a la burguesía y generan una sensación de prestigio. Varía según el país y
el período. Busca interpretar los estilos pasados y elaborarlos libremente, creando nuevas
combinaciones y variantes entre ellos. Tiene la tendencia de “enmascarar”, alzando
fachadas con formas nuevas de incluir los distintos estilos del pasado. Esta combinación de
estilos tuvo su punto culminante en el año 1846.
Presenta “elementos primordiales” que debe enseñar la escuela, como la disposición, la
composición, el razonamiento y la armonía de las formas. Por último, enfatiza en que los
arquitectos se distinguen de los ingenieros porque son libres de elegir las diferentes formas, y
dependen del sentimiento y lo que quieren representar. Aclara que el Eclecticismo ya no es
incertidumbre ni vanguardia, sino que tiene el propósito de crear todos proyectos diferentes sin
limitarse a una forma específica.
Como conclusión, gana la orientación tradicional de los estudios, pero se conservan
algunas enseñanzas sistemáticas propuestas por los racionalistas. Se acuerda que la
escuela de arquitectura no puede tener preferencias sobre ningún estilo.

3. EJEMPLOS DE OBRAS ECLÉCTICAS (Puntos 3 y 4 de la ejercitacion)


La torre Eiffel diseñada por los ingenieros Maurice Koechlin y Émile Nouguier y construida
por el ingeniero francés Alexandre Gustave Eiffel. En parís

La torre de 300 metros construida por Eiffel. El perfil de la torre se calcula de modo que pueda
resistir la acción del viento, y Eiffel se propone que las formas establecidas por los cálculos
confieran a los tirantes un perfil agradable. En 1887 comienza la construcción de la torre Eiffel.

La construcción mide 324 metros de alto, y se utilizó 300 toneladas de hierro teniendo un peso
de valor cantidad en la estructura.
El proyecto Edificio de fundición de J. Bogardius (1885) propone un esqueleto metálico
permitiendo una mínima ocupación en la planta de la estructura. Una máxima utilización de
espacios interiores. Propone una polifuncionalidad y una mayor luminosidad. Cuánta con una
estructura de sistemas verticales y una construcción en hierro. Destacamos el hierro como
material novedoso para el siglo XIX por la revolución industrial.

W. Le baron jenney. Primero y segundo Leiter bullding 1879-1889

Se encuentra en la esquina noreste de South State Street y East Ida B. Wells Drive en Chicago,
la ciudad más poblada del estado de Illinois. fue diseñado por el arquitecto William Le Baron
Jenney, quien implementó el marco esquelético de acero para hacer el diseño a prueba de
fuego. La estructura es de ocho pisos y ocupa toda la cuadra de State Street entre Ida B. Wells
Drive y Van Buren Street. Las pilastras están rematadas por sencillos capiteles y una cornisa sin
adornos corona toda la estructura. Las fachadas de Ida B. Wells y Van Buren tienen tres tramos
de ancho con medidas de 120 m por 44 m. Dentro de cada tramo hay cuatro ventanas en cada
piso alineadas verticalmente. El edificio se enfrenta a un granito rosa. Cada piso contiene
4.600
m² de espacio con techos de de 4,9 metros de altura y se podría dividir para albergar a varios
inquilinos.

El Palacio de cristal. Por Ricardo Velázquez Bosco

El Palacio de Cristal da forma a un edificio un orden de arquitectura enteramente nuevo, que


produce los más maravillosos y admirables efectos con medios de inalcanzable habilidad
técnica. El éxito del Palacio de Cristal es muy grande. Con una increíble estructura de hierro
con laminas de vidrio. Sigue la idea de Eclecticismo y toma materiales de la industria.

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