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INSTITUTO TECNOLÓGICO SUPERIOR DE IRAPUATO Ext.

TARIMORO

“Reporte Variables económicas”

Alumno:
MARÍA FERNANDA XOLALPA VEGA
Número de control:
TS20110052

PROFESOR: Ricardo Nava Martínez


Semestre 4 unidad 2

Carrera:
INGENIERÍA EN GESTIÓN EMPRESARIAL

TARIMORO, GTO.
Introducción
En este reporte de investigación se hablará del comportamiento histórico que han
las variables macroeconómicas. Primeramente, debemos entender lo que son los
variables macroeconómicas es una variable económica que refleja el
comportamiento de un fenómeno macroeconómico.

Esto es, una variable macroeconómica como su propio nombre indica, es una
variable como cualquier otra y, por tanto, representa una características o
cualidades sobre un fenómeno. En este caso, al añadirle el adjetivo
macroeconómico queda claro que es una variable que tiene que ver con
la macroeconomía.

En ocasiones a las variables macroeconómicas, también se les conoce como


variables agregadas. El sentido de esto es que al final, dado que la
macroeconomía estudia la evolución de un conjunto de individuos, una variable
macroeconomía es la agregación de muchas variables microeconómicas.

El propósito de esta actividad es tener un estadístico historio de cómo ha


evolucionado a lo largo del tiempo las principales variables macroeconómicas. Los
aspectos que tratar son los siguientes:

 PIB
 Inflación
 Tasa de interés
 Tasa de empleo
 Costo de vida

En la finalidad de llegar a la conclusión pertinente basándonos al propósito


principal.
Comportamiento histórico de las variables de macroeconómico

 PIB
México es una economía con especial fortaleza en el sector de servicios. En el 2°
Trimestre de 2021, este sector representó el 64.07% del PIB y el 61.07% de la
fuerza laboral, seguido por el sector industrial con el 28.33% del PIB y el 25.12%
de la fuerza laboral, y el sector primario con el 3.37% del PIB y el 13.25% de la
fuerza laboral.[1] En el periodo comprendido entre los años 2010 y 2018, la
economía mexicana creció a un promedio de 2.8%, sin embargo, debido a la caída
en los precios del petróleo de 2019 y la crisis económica global ocasionada por el
COVID-19 en 2020, la economía se ha visto afectada en los últimos años. Se
prevé que la economía mexicana crezca en 2021. La estrategia de desarrollo
económico del Gobierno de México permitirá fortalecer este crecimiento, la cual
contempla el fortalecimiento del consumo por el efecto de los programas sociales
y una mayor inclusión financiera, el impulso a la inversión privada en
infraestructura y sectores estratégicos, una mayor inversión pública y el
incremento de las exportaciones como resultado de la reconfiguración de las
cadenas de valor globales.
 Inflación

México no había vivido un aumento de precios tan alto desde hace 20 años. La


Economía del país cerró en 2021 con una tasa de inflación anual en 7,36%, de
acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). El Índice
Nacional de Precios al Consumidor (INPC) tuvo un incremento de 0,36%, respecto
al mes anterior. El último dato más alto fue en el año 2000, cuando la tasa se
ubicó en 8,96%.

En medio de los esfuerzos del Estado mexicano para promover la recuperación


económica por la crisis del coronavirus, esta cifra rompe con los objetivos
establecidos por el Banco de México, que se ubica en un rango estimado de 3%.
Hasta ahora, no ha habido medida que pueda con los aumentos de precios.

México no había vivido un aumento de precios tan alto desde hace 20 años. La


Economía del país cerró en 2021 con una tasa de inflación anual en 7,36%, de
acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). El Índice
Nacional de Precios al Consumidor (INPC) tuvo un incremento de 0,36%, respecto
al mes anterior. El último dato más alto fue en el año 2000, cuando la tasa se
ubicó en 8,96%.

En medio de los esfuerzos del Estado mexicano para promover la recuperación


económica por la crisis del coronavirus, esta cifra rompe con los objetivos
establecidos por el Banco de México, que se ubica en un rango estimado de 3%.
Hasta ahora, no ha habido medida que pueda con los aumentos de precios.
 Tasa de interés

Estas tasas, además, no fluctuaron al unísono como lo suelen hacer en la


economía moderna. Así, los instrumentos financieros eran los siguientes: las
escrituras de deuda del virreinato, los préstamos eclesiásticos, el préstamo
particular, el préstamo comercial y los préstamos de las cajas de comunidad.
Sobre el primer tipo de interés tenemos información confiable para la Caja de
Santafé. Según el "Estado caudales cargados contras estas reales cajas [de
Santafé] [sic]", que relaciona la deuda que tenían las cajas matrices para 1769, la
evolución de la tasa de interés era la siguiente: los juros (bonos de deuda) del
siglo XVII tenían una tasa de interés de 5%. Durante el reinado de Felipe V (1700-
1746) y Fernando VI (1746-1759), la tasa de interés subió a 6%. Para la fecha del
"Estado" la tasa de interés era de nuevo de 5% y sufrió una reducción definitiva en
1781 a 4 por ciento.

El préstamo eclesiástico se mantuvo a lo largo del siglo XVIII en 5% aunque se


alteró en algunos años. En 1756, por ejemplo, la Audiencia de Quito disminuyó la
tasa de 5 a 3%. Según Colmenares (1997b) esta reducción afectó diversos
territorios que pertenecían al Nuevo Reino, como Popayán. Esto contrasta con la
experiencia de Nueva España, donde a fines del siglo se redujo a 4.5% (Wobeser,
1998); Perú, donde se bajó en algunos años a 3% (Quiroz, 1994) y en la
península, donde la tasa se mantuvo en 3% antes de la emisión de los vales
reales (Romano, 2004). Sobre los créditos de las cajas de comunidad es poco lo
que sabemos puesto que los trabajos existentes no han desarrollado un estudio
sistemático del comportamiento económico de los pueblos de indios más allá de
las descripciones tradicionales. Si nos entregamos a la información disponible, la
tasa de interés de las cajas de comunidad también se mantuvo en 5 por ciento.

Los préstamos de particulares y de los comerciantes, en cambio, sufrieron


modificaciones importantes. La Real Audiencia era la encargada de asignar la tasa
techo para ambos tipos de crédito. Sin embargo, es claro que la tasa máxima era
una variable exógena, y factores como el tiempo de retorno y el riesgo no
afectaban de manera directa el precio del capital sino la oferta de fondos
prestables. Aun cuando Redd y Bekar (2003) ofrecen una interesante explicación
de la evolución de las tasas de interés desde la teoría neoclásica,
infortunadamente ignoramos las discusiones y razones que llevaron a esta
institución a reducir las tasas de interés. De hecho, en el texto clásico de Ots
(1950) no hay información sobre este tipo de funciones de la Real Audiencia. Se
requieren trabajos que analicen la perspectiva que tenían las autoridades
neogranadinas sobre la usura.

 Tasa de empleo

La falta de empleo ha sido, por muchos años, el problema social más grave de
México. La carencia de empleo es una de las expresiones más agudas de la
pobreza. Este fenómeno de escasez de empleo, aunado a las diferencias
salariales de México con Estados Unidos explica, en gran medida, el fenómeno
migratorio de mano de obra mexicana a ese país. La oleada migratoria, aunque no
puede considerarse un fenómeno nuevo, ha adquirido mayores proporciones y
algunas características diferentes a las de las anteriores (véase CONAPO, 2005).
La Población Económicamente Activa (PEA) en México representa cerca de 60%
de la población de 14 años y más, y si bien ha disminuido su tasa de crecimiento
medio anual de 3.5 a 1.9% del periodo 1982-1993 al 1994-2010, ésta sigue siendo
alta en comparación con el ritmo de crecimiento del empleo remunerado. En 2004,
la PEA ascendía a 42 millones. El número de empleos requeridos para cubrir las
necesidades del incremento anual de la oferta laboral era de poco más de un
millón cien mil (Censos Nacionales de Población y Vivienda, Instituto Nacional de
Estadística, Geografía e Informática, México).

La economía mexicana no ha sido capaz de generar el número total de empleos


formales requeridos en ninguno de los últimos quince años, para no hablar de la
llamada "década perdida", de los años ochenta. Por ello, podemos inferir que, sin
lugar a dudas, hay un déficit acumulado de empleo, difícil, sin embargo, de
precisar.

En la década actual la economía mexicana ha estado lejos de generar entre uno y


1.2 millones de empleos, que exige el aumento anual de la PEA. Ni siquiera el
creciente flujo migratorio de mexicanos a Estados Unidos ha evitado que la tasa
de desocupación bruta aumentara entre 2000 y 2010. Y aunque entre 2004 e
inicios de 2008 el empleo creció de manera importante como resultado del
incremento del Producto Interno Bruto (PIB) real, sigue siendo insuficiente para
cubrir rezagos, los cuáles se acentuaron con la reciente crisis económica. Al
mismo tiempo, se presenta una nueva característica: el empleo formal se parece
cada vez más al informal. La evidencia señala que no solamente ha crecido el
desempleo, sino que ha crecido la población ocupada sin prestaciones sociales,
así como los empleos informales.

En efecto, en la primera década del siglo XXI, además del incremento de los
niveles de desempleo, creció significativamente la informalidad en la economía y
los ocupados sin protección social. Se observa, asimismo, un amplio vacío para
generar puestos de trabajo en sectores industriales. En suma, según cifras
oficiales actualmente hay cerca de 1.5 millones de desocupados más que en
2000. Además, en este mismo periodo la tasa de presión general (porcentaje que
representa la población desocupada más la ocupada que busca trabajo, respecto
a la población económicamente activa) creció en al menos 2 veces en 22 de las 32
entidades de la República.

 Costo de vida

El costo de vida es una medida que se basa en la cantidad de dinero que


requieres para cubrir tus gastos diarios como vivienda, atención médica y
alimentación. Esta medición es importante porque es la que te permitirá tener una
idea promedio sobre el costo de vivir en una ciudad o estado en particular.

El costo de vida puede ser tan específico como lo es una ciudad o más general
como lo es vivir en un estado o país. Por estas razones es que el resultado puede
variar, dependiendo del lugar en el que lo realices. Por ejemplo, el costo de vida
en una ciudad en la que residas puede ser más elevada al promedio que registre
el costo de vida del estado en el que vives.

En Estados Unidos, aunque los cálculos del costo de vida varían según la fuente,
en general, la más ampliamente aceptada es el índice de precios al consumidor
(CPI), una métrica publicada por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) que
calcula la variación de los precios de los bienes y servicios de consumo.

El costo de vida se calcula tomando el precio de una parte de los bienes y


servicios que todos necesitan, como alimentos y vivienda. Junto con eso, tus
ingresos y presupuesto determinan la cantidad de estos bienes y servicios que
puedes pagar. Por ejemplo, un cartón de huevos podría costar un dólar más en la
ciudad vecina, pero el pago también podría ser más alto, lo que atenúa el mayor
costo de los productos.

En internet existen diversas calculadoras de costo de vida que, con su base de


datos, analizan cuánto te costaría vivir en un lugar en específico en Estados
Unidos.
Si piensas mudarte de ciudad, determinar el costo de vida es primordial para que
tengas conocimiento sobre cómo esto afectará tu bolsillo. Por ejemplo, el precio
promedio de un galón de leche en Raleigh, Carolina del Norte, es de $3.31
dólares, mismo producto que en Fort Lauderdale, Florida, costaría $4.04. Esto se
refuerza en el alquiler, ya que en esta ciudad de Florida el precio del alquiler es un
50% más alto en comparación con Raleigh. Si te ofrecieran un trabajo en
cualquiera de las dos ciudades, con un salario similar, te rendirá más en la ciudad
de Carolina del Norte.

El BLS realiza encuestas anuales de consumidores en todo el país para identificar


lo que gastan los residentes en ocho grupos principales de categorías de
consumidores:

• Comida y bebidas
• Alojamiento
• Vestimenta
• Transporte
• Atención médica
• Recreación
• Educación y comunicación
• Otros bienes y servicios

Conclusión

Una variable macroeconómica se utiliza para analizar una parte del entorno
económico. Así, si queremos saber cómo está evolucionando la interacción
económica de bienes de un país con el exterior, podríamos analizar la balanza
comercial.
La idea fundamental de una variable macroeconómica es reflejar, normalmente de
forma numérica, parte de la realidad económica agregada. Su estudio es
fundamental para saber en qué parte del ciclo económico estamos o para
entender qué políticas económicas podrían ser más efectivas.
Lo más importante de analizar la realidad económica a través de datos o variables
que pretenden expresar un fenómeno económico es conocer sus características y
metodología. Ocurre, sobre todo en variables macroeconómicas, que los datos
son estimaciones. Es decir, cuando se calcula el PIB de un país es complicado
que la medida sea exacta. Sin embargo, existen técnicas que permiten estimarlas
con mayor exactitud.
Adicionalmente, también es importante tener en cuenta en qué momentos
debemos utilizar las variables en bruto, en neto, real, nominal. Conocer si la
variable es un proceso estacionario o es un proceso no estacionario. Son solo
algunos ejemplos que nos ayudará a entender mejor la evolución de la variable y a
evitar posibles errores en el análisis.

Referencias bibliográficas

 Martin Feldstein (2002) “The Role for Discretionary Fiscal Policy in a Low
Interest Rate Environment” Working paper 9203, National Bureau of
Economic Research.
 Takatoshi Ito y Frederic S. Mishkin (2004) “Two Decades of Japanese
Monetary Policy and the Deflation Problem” Working paper 10878, National
Bureau of Economic Research.
 José Francisco López, 15 de diciembre, 2019
Variable macroeconómica. Economipedia.com
 Larraín F. y J. Sachs (2013), Macroeconomía en la economía global, 3°
edición, Pearson, México DF.
 Mankiw G. (2012), Principios de Economía, Cengage Learning, 6° edición,
México DF.

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