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Tu historia

Luciana. Muchas personas con las que te has cruzado durante tu vida te han preguntado por
qué tus padres te pusieron ese nombre, dado que es poco común. Normalmente te encoges de
hombros y sonríes, evitando responder. Este nombre no te lo pusieron tus padres, sino que lo
elegiste tú al entrar en la organización de los Bakeneko. De hecho es un nombre totalmente
inventado, seguramente ni siquiera sea un nombre “oficial” dentro del reino.

Tu nombre original es Ari. Tú eres la hermana de Froi y Lope, que esta noche están en la capital
y probablemente estarán buscándote. Ellos son humanos, tú, eres una bakeneko. Vuestra
madre, que murió cuando tú eras muy joven también lo era, pero tu padre no, por eso es
posible que tus hermanos sean humanos normales mientras que tú has heredado el gen. Tu
historia es complicada, pues aunque actualmente formas parte de la organización de los
Bakeneko, amas y echas de menos a tu familia. De hecho, cuando de vez en cuando operas en
la capital, dejas a tus hermanos unas flores en sus balcones.

Das por hecho que Lope entenderá que son tuyas, si bien sabes que Froi es más escéptico y
quizá tenga alguna duda.

Cuando eras pequeña ya sabías que había algo diferente en ti. Eras la que más corría, la que
más saltaba, la que escalaba más alto. Sin embargo durante el comienzo de la adolescencia tus
habilidades se empezaron a separar drásticamente de tus hermanos y del resto de
compañeros de juegos del barrio. En aquella época el mito sobre los bakeneko no estaba tan
instaurado ni en boca de tanta gente como ahora, pero sí existía. Cuando tenías 12 años, la hija
de una curandera te acusó de ser un monstruo, de no ser un ser humano sino de ser un gato
que había robado la identidad de Ari. Aquella acusación parecía ridícula y al principio así fue
considerada por todos. Sin embargo, aquella niña, seguramente azuzada por los prejuicios de
su madre, hacía fehaciente la diferencia que había entre tú y el resto siempre que tenía
ocasión. Te lanzaba piedras con un tirachinas que tú cogías al vuelo, a pesar de ir a gran
velocidad. Te empujaba cuando estabas a grandes alturas y tú siempre caías de pie (ni siquiera
se preocupó de que su teoría fuese incierta y tú te dañases). Así una y otra vez. Poco a poco, la
evidencia se hizo presente y las palabras de la chica condicionaron el pensamiento del resto. Si
bien tus hermanos te adoraban como siempre, el resto de tu entorno cambió su actitud hacia a
ti. Además, se cuidaban lo suficiente como para no tener un mal gesto hacia tu persona
delante de ninguno de ellos. Fue entonces cuando empezó el calvario. Dos años más tarde,
cuando cumpliste los 14, decidiste que no podías soportarlo más y huiste.

Unos meses más tarde los Bakeneko te encontraron y te reclutaron y a día de hoy trabajas con
ellos y para ellos.

Eres consciente de todo lo que se dice de los Bakeneko. También eres consciente de que no
son falsos los rumores que dicen que la organización ha matado a algunas personas. Sin
embargo, y a pesar de que ello vaya en contra de tus principios, estás convencida de que, en el
fondo, estáis en guerra. Simplemente estáis atacando antes, antes de que todo se vaya al
garete y Lord Gerardo destrone al rey, instaurando un reino de terror. Esa es la realidad que
nadie conoce, exceptuando tu organización y a Lorus, vuestro contacto en los Caballeros del
Alba. Lord Gerardo, ministro del rey, pretende en el fondo arrebatarle el trono al regente y
cambiar el orden de las cosas. Los Bakeneko no suelen meterse en política ni en cambios de
reyes. Normalmente se centran en luchar contra las injusticias e intentar cambiar el mundo
por otras vías, trabajando con la gente normal en lugar de con los gobernantes y los políticos.
Sin embargo en esta ocasión toca intervenir, pues un jaque al rey por parte de Lord Gerardo
podría producir un derramamiento de sangre muy serio.

Esta noche estás en la capital para cumplir con una misión, la de colaborar con otros Bakeneko
en obtener todas las llaves de la Cámara de los Sabios para conseguir la piedra filosofal roja,
capaz de transformar los metales innobles en oro. Se sospecha que en la misma se almacena
una pequeña piedra filosofal de esta tipología. Si Lord Gerardo la consiguiera, tendría acceso a
una buena cantidad de oro.

Los informes a los que has tenido acceso indican que aparentemente la piedra filosofal se
desgasta, es por eso que el rey la almacena en la Cámara, pues en caso de necesidad porque se
agoten las arcas reales, podría recurrirse a la misma para transformar cualquier metal en oro.

Localiza al menos a otro Bakeneko durante la partida para poder colaborar.

No obstante tampoco podrás olvidarte de tu familia. No quieres que ninguno de tus hermanos
te encuentre esta noche, pues no son las circunstancias adecuadas. Sin embargo tampoco
puedes dejar de echarles un vistazo de vez en cuando, pues no quieres que nada les pase. Si
elegiste cambiar de nombre fue, precisamente, para protegerles, ya que sabías que entrar en
una organización así podría, a la larga, afectarles de alguna manera. Hoy las cosas están peor
que nunca en lo que respecta a la opinión pública y a los Bakeneko, por lo que ves necesario
seguir con tu tapadera, si bien al mismo tiempo les protegerás.

Acerca de los bakeneko: qué eres

La leyenda dice muchas cosas, pero solo algunas (aunque no pocas) son verdad o verdad a
medias. En origen los bakeneko no erais un gato, si bien es cierto que vuestra raza es especial
dentro de la especie humana. Vuestros cuerpos son más ligeros y mucho más ágiles, pudiendo
escalar o saltar desde alturas que un humano normal no puede imaginar. Ésto ha hecho que
durante mucho tiempo la gente que ha coincidido con vosotros os compare con gatos, hasta
que la ficción se adueñó de vuestra historia para tomarse licencias.

Sin embargo aún hay algo más dentro de la leyenda que refleja algo de verdad. Los bakenekos
sí que tienen algo de místico y es que, cuando una persona muere (no necesariamente a sus
manos), si están junto a la persona en el momento de su muerte, son capaces de, simplemente
poniendo la mano en su pecho, absorber toda su memoria y conocimientos. En la jerga
bakeneko a ésto se le llama “ganar una cola”, y un sujeto adulto normal puede ser capaz de
absorber hasta 5 memorias si está sano. Pocos son los que consiguen 7. Por lo tanto sí que es
cierto que cuando un bakeneko gana una “cola” se hace más poderoso y, en cierta manera,
podría hacerse con la identidad de una persona (al menos si no se topa con conocidos suyos) si
bien nunca puede adquirir su apariencia física.

Verás que como bakeneko tienes la habilidad de obtener más colas o habilidad de
robamemorias. Ésta estará limitada en base a tus poderes y experiencia (mira los detalles en la
tarjeta pertinente).
Sois muchos los que pertenecéis a la organización, que por cierto su nombre original es Vigías
del Horizonte, si bien a día de hoy y debido a los rumores también aceptáis Bakeneko como
nombre válido para la misma. Debido a vuestro gran número, muchos no os conocéis por lo
que cuando dos personas que creen ser de la organización se encuentran, usan una frase
secreta:

El primero dice “Vigila bien el horizonte ...”

A lo que el segundo debe contestar “ y defiende a los pueblos de cualquier … peligro que veas
venir”

De este modo los que pertenecéis a la organización sois capaces de presentaros y os permite
confirmar que ambos sois Bakenekos.

Personalidad

Eres amable pero de personalidad reservada. Desconfías de primeras, por lo que mantendrás
las conversaciones que necesites para investigar, pero no te fiarás de nadie (salvo de tus
propios hermanos).

Lo que le dirás al resto

De cara a los demás indicarás que eres una dama de honor (acompañante de la reina en la
corte) y que temes que los Bakeneko estén detrás de la reina. Dirás, como si lo dijeses con
plena confianza, que la reina te ha enviado para averiguar todo lo posible y que te ha
obsequiado con un pequeño puñal para acabar con cualquiera de esos monstruos.

Cuando cuentes esto tienes que echarle un poco de teatro. La tapaderarelativa a tu “misión
enviada por la misma reina” no tienes por qué usarla con todos los personajes, valora con
quién te puede salir más rentable. Obviamente si identificas a un Bakeneko, explícale que es
solamente tu tapadera.

Habilidades e inventario

Tu personaje puede usar armas de cualquier tipo.

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